Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
Que la duda metódica es radical y universal no quiere decir que tire cócteles
molotov, sino más bien que Descartes duda de todo aquello de lo que sea
posible dudar sin excepción y sin ningún tipo de cortapisas. «Aquello de lo que
sea posible dudar» es una expresión lo suficientemente general para recoger
todo aquello de lo que Descartes duda. Descartes va a por lo más difícil, de
modo que comienza por dudar del testimonio de los sentidos, puesto que
algunas veces le engañan, es posible dudar de ellos.
Por otra parte, Descartes duda de que esté despierto o soñando, por un lado,
nada garantiza que ahora mismo estemos despiertos, salvo la vivencia de las
sensaciones perceptivas, sin embargo esta viveza también la tenemos con las
pesadillas, por otro lado, los sentidos han sido descartados por ser dudosos.
Por tanto, es posible dudar sobre si estamos durmiendo o despiertos.
Por si esto fuera poco, Descartes lleva su duda al nivel más radical de todos los
niveles radicales, llegando a dudar de la matemática, la cual no depende de
cómo es el mundo. Así, Descartes propone la hipótesis del genio maligno, un
dios malicioso que siempre nos ha estado engañando, por lo que podríamos
haber llegado a creer barbaridades tales como que 2 + 2 = 4. Si este dios
existiera podríamos estar equivocados hasta en algo así.