Sei sulla pagina 1di 2

En el presente ensayo he vinculado de manera general, las fases de la

planeación estratégica con el plan de vida propia, ese que permitirá alcanzar
nuestros objetivos.

En el que el único conductor somos nosotros mismos, y para llegar al destino


deseado, debemos trazar la ruta correcta, ¿Cómo? Planeándola
estratégicamente, porque puede que en el camino nos encontremos otros
competidores, varios obstáculos o circunstancias ajenas que pueden interferir
en nuestras metas, desviándonos del camino correcto, y esto nos podría llevar
desafortunadamente a la frustración. Es por ello que si llevamos a cabo
correctamente cada fase de la planeación estratégica, llegaremos al camino
que deseamos lograr en la vida, siendo competitivos, tomando decisiones
correctas, en el momento y tiempo adecuado; para alcanzar nuestros sueños,
mismos que dan sentido a la propia existencia.

Tener un plan de vida es fundamental porque denota el liderazgo interno y la


voluntad de hacer que las cosas sucedan. El inicio de la vida profesional
implica una serie de acontecimientos trascendentes: nuevas responsabilidades,
viajes, cambio de residencia, la independencia económica de los padres, etc.

Suceden tantas cosas importantes que es necesario invertir tiempo en planear


la vida. Después de todo, si lo hacemos para tomar unas simples vacaciones,
¿por qué no lo haríamos para planear toda una vida?

Comenzare con una de las fases principales y sobre todo más importantes,
debemos preguntarnos ¿Cuál es mi misión en la vida? Es decir cuál es el
propósito fundamental de nuestra existencia. Debemos considerar que estos
aspectos sean alcanzables y realistas.

La visión juega otro papel muy importante, en el mundo de cada persona, esta
se define como el camino al cual se dirige la persona a largo plazo y sirve de
rumbo y aliciente para orientar las decisiones estratégicas de crecimiento junto
a las de competitividad. Esto a nivel personal nos ilustra, hacia donde
pretendemos caminar con el paso del tiempo, para que esto nos ayude a tomar
decisiones que forjen la visión que tenemos. De igual forma creo que en esta
parte es en donde fallamos comúnmente, visualizamos la vida sin tomar en
cuenta ciertos factores que nos pueden ayudar o perjudicar.

En este caso tenemos que analizar nuestros factores externos (cualidades,


actitudes), y factores internos (conocimientos, valores, etc.) ¿Para qué
analizarnos interna y externamente? Para identificar aquellos aspectos que
debemos dejar de hacer, mejorar ó desarrollar. Así identificaremos
nuestras FORTALEZAS, DEBILIDADES, OPORTUNIDADES y AMENAZAS
que giran en torno a nuestro plan de vida.

Con todos estos elementos podríamos ver qué ventajas competitivas


tenemos respecto a nuestros rivales, por ejemplo a nivel profesional, ¿Qué
ventajas tanto internas como externas, tengo yo a diferencia de mis
competidores, que me hace más fuerte a lado de ellos? O en el caso contrario
¿Qué tienen ellos, que yo no tengo? Y así poder trabajar en aquellos aspectos
por desarrollar, incluso superar.

Así que antes de seguir conduciendo por la vida, hay que planear
estratégicamente nuestra ruta de vida, para prevenir esos tropiezos que nos
llegan a lastimar, aunque a veces es bueno equivocarnos, para aprender,
evitarlo de nuevo, y sobre todo para crecer. Deseo que todos conduzcan
responsablemente, para llegar a la meta.

Potrebbero piacerti anche