Sei sulla pagina 1di 4

La Política en la Edad Media.

La condición de siervo como una forma disfrazada de esclavitud. Algo que marcó el
inicio de la edad media, fue el hecho de ya no tener como idea fundamental la esclavitud. Esta
figura antes legitimada por las ciudades Estado, fue sustituida por la del siervo del señor feudal y
fue la base de las sociedades feudales de la edad media. Si bien, la figura de la esclavitud en esta
época ya era condenable, la servidumbre de los campesinos no distaba en muchas cosas de la
antigua esclavitud. Aún existía una subordinación obligatoria y casi forzosa entre el ahora
llamado siervo y su amo; y era sobre el primero que recaía sobre el imperio de la ley del feudo.
Dado que, el señor feudal era el que establecía las condiciones de servidumbre, casi a manera de
imposición. Pues, mediante los llamados contratos de vasallaje, el siervo que no poseía tierras y
que le eran necesarias para sobrevivir, ponía al servicio de un señor feudal, su apoyo político, su
trabajo, sus cosechas, sus hijos e incluso su vida o apoyo militar; a cambio de una porción de la
tierra y la protección que ofrecía su señor, conforme su conveniencia. Si bien, la diferencia
fundamental con la esclavitud era que el señor no podía vender a su siervo, en los demás
aspectos, esta era similar a ella. El siervo no tenía la libertad de decidir si apoyaba o no las
decisiones (o política) de su señor, debía servirle en lo que le requiriera. Pues sino lo hacía, este
incumplía con la parte de su contrato y corría el riesgo de sufrir el castigo que su señor dictara, o
quedarse sin la protección y la tierra que le proporcionaba su señor para sobrevivir.

La organización medieval estaba construida sobre vínculos personales de autoridad y


subordinación, dirección y seguidores. En esta relación podemos ver un esbozo de lo que ahora
sería la potestad del Estado, pues, eran los señores quienes tenían el poder en forma legal y
legítima en su feudo, pero este dependía de la sumisión y apoyo total de sus siervos a él como
persona, y no a un ente generalizado o abstracto como el Estado. Sin siervos el señor feudal no
tenía quien trabajara sus tierras, le pagara tributo, le proporcionara fuerza militar que lo apoyara.
De allí, que existieran las guerras entre casas o feudos por tomar el poder, los señores, que
eran la autoridad en la demarcación territorial de su feudo, necesitaban del apoyo de sus siervos
quienes por contrato y por vinculo personal se subordinaban a este poder. Incluso podían llegar a
identificarse con su señor, y no con el feudo o territorio, como hoy en día lo hacemos. Debían,
como buenos seguidores, confiar o seguir la dirección de sus amos, pues eran estos quienes
tomaban las decisiones políticas de su feudo, y afectaban o cobraban vigencia únicamente en esa
demarcación territorial.

Las funciones del Estado moderno, estaban repartidas entre diversos portadores
(poliarquía). En la edad media existió un fenómeno político mediante el cual, toda función del
Estado (creación de leyes, administración del territorio, política, etc) estaba a manos de diversos
portadores; no existía un ente único que ejerciera esas funciones; se podría decir que existía una
especie de poliarquía. No era una poliarquía bajo el concepto del gobierno de muchos mediante
representación delegada por el pueblo o la democracia que conocemos hoy en día. Sino que, las
funciones del Estado, las ejercía cada señor feudal, rey o incluso la iglesia en su propio territorio.
No existía representatividad delegada a las autoridades; sencillamente existían varios entes o
señores de tierras que hacían de su feudo un pequeño “Estado”, el cual administraban, creaban y
hacían prevalecer sus propias leyes, su poder e influencia. De tal cuenta, cada feudo hacia las
funciones de un mini Estado, cada quien por su cuenta, si bien, bajo la legalidad de ese tiempo,
que le otorgaba los títulos entregados por el rey al señor feudal, y bajo las normas exigidas por
este primero; pero no existía en sí, un solo ente que tomara las atribuciones del Estado en todo el
territorio. No existía representatividad de los siervos, pues ellos no elegían a sus señores en un
sentido democrático, al delegarles a ellos el poder. Sino, que lo hacían por la mera necesidad de
tierras y protección para poder subsistir.
En conclusión, a pesar de que en la edad media se propago la idea de que la esclavitud era
algo inhumano ante los ojos de Dios y de los hombres, esta únicamente perdió en esta época su
nombre, pues fue retomada en su forma funcional por otra figura llamada servidumbre. También,
en esta época los vínculos personales existentes entre autoridad y subordinación, fueron un
esbozo de lo que hoy conocemos como la potestad del Estado otorgada por el pueblo a los
gobernantes. Y existió una poliarquía, no en el sentido del gobierno ejercido por muchos, como
lo entendemos hoy en día, sino que existía una diversidad de autoridades que ejercían las
funciones de Estado, cada uno en su feudo.
La Política en la Edad Media.

Lic. Estuardo Alejandro Talavera Ventura


Marzo 2018.

Universidad de San Carlos de Guatemala.


Escuela de Estudios de Postgrado
Facultad de Ciencias Jurídicas y Sociales
Historias de las Ideas Políticas. Sección “C”
M.Cs. Jorge L. Zamora Prado.
De la Cueva, M. (s.f). La Idea del Estado. México: Fondo de Cultura Económica,

Universidad Nacional Autónoma de México.

Potrebbero piacerti anche