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Mario M.

Montessori
Conferencias de 1946

Traducciones realizadas por maestras de inglés


del Colegio Montessori de Cancún, a solicitud de
Gabriela Ortega, sin fines de lucro.
MARIO M. MONTESSORI SEPTIEMBRE 10, 1946
LECCIÓN 1

Educación no debería ser instrucción, debe ser una ayuda para el despliegue de la
vida.

Pareciera que la educación es un fracaso, existen dificultades con los niños tanto
en sus hogares como escuelas. Esto es porque hay algo incorrecto en las
condiciones de vida que llevan.

El objetivo de la educación es crear una persona adulta que pueda adaptarse a las
condiciones del mundo: está mal si el objetivo final es crear un individuo que sea
económicamente autosuficiente. En cambio, la sociedad debería ver que el
individuo en crecimiento tiene ciertas experiencias. El problema ocurre cuando no
brindamos estas experiencias. El individuo debe tener ciertas cosas que
respondan a la experiencia.

Tenemos al individuo que tiene que obtener este conocimiento inteligente: por otro
lado, el individuo que se guía por las leyes de la naturaleza que lo impulsa a otra
forma de vida.

La naturaleza nunca decretó que uno debe quedarse quieto a fin de desarrollar la
personalidad: sentarse estudiando, más o menos pasivamente, haciendo lo que a
uno se le pide cuando a uno se le pide. Esto es más bien como trabajo forzado.
Un individuo que sea sano no puede aceptar esto. Así que a estas personas
pasivas se les da gimnasia y entrenamiento intensivo –de esa forma sus cuerpos
aún funcionan.

Así es la vida de los jóvenes. ¿Te asombra que se rebelen contra la escuela? La
intención de la naturaleza nunca fue que la gente esté condenada a esta forma de
vida. ¿Dónde queda la democracia para nuestros niños? ¿Acaso no condenamos
a nuestros niños a dormir, comer, etc., siguiendo nuestros deseos? Las
condiciones que existen están equivocadas: los niños no disfrutan de su
instrucción. La vida escolar está completamente desconectada.

Hasta a los seis años de edad se enseñaba que los niños no necesitaban ser
educados; no necesitaban aprender gramática o matemáticas. Los niños no iban a
la escuela. Eran entonces un fastidio en el exterior, así que se empezaron a abrir
los jardines de niños y las guarderías. De los 7-11 años están en la escuela
básica: a partir de los 12 en adelante en la escuela avanzada. Cada escuela es
algo aparte. El maestro de escuela primaria está en un nivel, el maestro de
escuela secundaria ¡está más alto! Existen castas y ¡es difícil pasar de una a la
otra! ¡Cada uno tiene el orgullo de su propio grupo! Se quejan que los niños no
están bien preparados en la temprana escuela: pero no hacen nada para
remediarlo. O quizá tengan una conferencia y se propongan muchas resoluciones
¡pero nada sucede!
En cada escuela los maestros apelan a las conciencias de los niños. Explica la
materia y luego les hacen preguntas para ver si han entendido. Los niños
desarrollan el arte de hacer lo menos posible: ¡ellos estudian la psicología del
maestro! Existe una batalla de ingenio entre los niños y el maestro. ¿Se
preocupan acerca de la vida de cada niño o es más bien que se les paga para
enseñarles tanto? ¿Es su trabajo enseñar y si los niños fracasan en aprender
perderán sus empleos? Tanto en su casa como en la escuela a los niños se les
urge a aprender y a no acarrear fracaso a la escuela.

El resultado no es una educación real: hay viveza e hipocresía. En cambio, la


instrucción debería ser alimento para la mente del hombre.

Antes de que uno pueda acercarse a la psique del niño uno debe saber algo de su
personalidad. Uno no debe echar la culpa a cada etapa. La atención debe ser
dirigida hacia la evolución de esta vida en desarrollo. Uno debe basar el trabajo en
la vida entera. En cambio, es como si las personas de la universidad pensaran
sólo con la cabeza, la escuela secundaria se ocupara únicamente del cuerpo y ¡la
primaria de las extremidades!

Las consecuencias de un incidente ocurrido en sus vidas a los dos o tres años, es
resentido a los 23. Si queremos buenos ciudadanos no podemos empezar con la
educación de adultos. Él tendrá la mentalidad de un esclavo si ha sido tratado
como tal desde los cero a los 25 años. Sus defensas han sido erigidas: la suya es
una actitud de defensa, desconfianza etc, combinadas con un magro
conocimiento.

Si queremos basar nuestro trabajo en la vida es mejor que empecemos desde el


nacimiento. Al nacer no existe conciencia, ninguna razón por cual uno pueda
dirigirse por sí mismo. Debemos estudiar esta inconsciencia con el fin de saber
qué es la vida. Esta inconsciencia dirige nuestras vidas.

La vida del hombre no está desconectada de la totalidad de la vida, de las otras


formas de vida. Ahí la ley es que las vidas son dirigidas sin nuestro conocimiento.
Existen fuerzas de las cuales poco somos conscientes de que tienen una gran
influencia en las vidas de los individuos. Por ejemplo una planta. ¿Tiene ésta una
mente o sentimiento? No, no tiene nada. Sin embargo mira cómo actúa –planta
una semilla, ésta brota, voltea la semilla de cabeza, al siguiente día la pequeña
raíz se ha dado la vuelta para abajo y un retoño vivo crece hacia arriba. Cada uno
parece reconocer su lugar. La raíz crece hacia el suelo, los retoños a los lados se
forman –entonces los vientos pueden venir, pero la planta está segura. Las raíces
se extienden cubriendo tanto suelo como sea posible. Crecen hacia los nutrientes
yendo al rededor de cualquier piedra que las obstruya.

El retoño produce hojas y estas absorben CO2 del aire; sólo pueden hacerlo a la
luz del sol. Las hojas crecen por todo alrededor de tal manera que están en la luz
máxima. Así que su comportamiento usual es de posicionarse en todos los lados
del árbol, pero si el árbol está plantado contra una pared, las hojas que están de
lado de la pared permanecerán en oscuridad y se volverán inútiles, se enroscan
en posiciones no naturales con el fin de alcanzar el sol. ¿No es esto muy
inteligente? La planta no tiene una mente para dirigir el crecimiento; sin embargo,
el resultado es inteligente. Pareciera existir una inteligencia, que es a la que
llamaré la inteligencia inconsciente: la que dirige la planta.

Miren a las mariposas, ¿las llamarían altruistas e inteligentes? Su comida se


especializa en el néctar de flores, a las que son guiadas por el color o el aroma.
Las mariposas parecen deleitarse en la vida, tomando sólo lo mejor. Parecieran
inútiles y egoístas. No. Por el contrario; cuando el momento llega, ellas van a una
planta definida y ponen sus huevos debajo de una de las hojas, pues hay pájaros
que podrían comerse esos huevos, pero estos están escondidos y protegidos
tanto del sol como de la lluvia. Se toman el cuidado de que los huevos estén bien
protegidos. ¡Qué nobleza e inteligencia! ¿Quién les dice que pongan sus huevos
justo en esa planta? ¿En dónde está la mente? No existe conciencia en la
mariposa. Pero hay una directriz, un plan psíquico y patrones en cada tipo de vida.
Esta inconsciencia gobierna la vida entera de cada animal que existe.

Cada tipo de vida tiene una tarea. Si no existieran plantas, todos moriríamos, no
podríamos ni comer ni respirar. En India los cuervos sólo tienen que ver algo sucio
y ellos bajan a comerlo, así sean animales muertos o entrañas. Parecieran
encontrar deleite en ello. ¿Dónde estaría el mundo sin ellos? Todo quedaría
descomponiéndose sin estos carroñeros que limpian el medio ambiente.

Existe una atracción psíquica hacia el trabajo al que están impulsados a realizar.
Sus cuerpos están construidos con el fin de hacer ese trabajo. No están
conscientes de ello. Pero esta inconsciencia dirige la vida entera de toda especie,
de todo tipo de vida.

Tampoco nosotros podemos escapar de esta fuerza. ¿Pero, se considera esta en


la educación? En la naturaleza hay muchos tipos de animales, cada uno con
planes psíquicos, casi funcionan como máquinas. En unos, todo es parte de su
herencia; en otros, no es así debido a alguna experiencia que el individuo pasa, es
entonces que se adaptan al medio ambiente en el que se ellos mismos
encuentran.

En una ocasión tomé unos polluelos recién salidos del cascarón y los llevé lejos de
su madre gallina y entonces traté de alimentarlos: no tomaban nada. Entonces los
regresé con la gallina que hizo ruidos peculiares y se dispuso a la acción de
comer, ¡los pollitos inmediatamente empezaron a comer y continuaron aún lejos
de la gallina! La madre supo cómo educarlos: ellos respondieron a la llamada
psíquica de su propia especie.

Estos animales que tienen instintos hereditarios no necesitan educación. ¿Porque


entonces, algunos tienen que ser educados? Ocurre cuando tiene que haber una
adaptación a los cambios en el medio ambiente, no todas las condiciones del
medio ambiente son las mismas. Si estos animales no fueran de alguna manera
“elásticos” o “plásticos” para lograr esta adaptación, morirían si sus condiciones
cambiaran. Las condiciones de la vida cambian y cada uno debe adaptarse a las
condiciones que prevalecen durante poco tiempo de vida. Tú construyes la actitud
de vida que se adapte a las condiciones existentes. Si los mismos polluelos fuera
a la jungla nunca regresarían: pero las aves de la jungla no mueren. Nunca
podrías educar a un ave adulta a la vida en la jungla, sólo los jóvenes polluelos
pueden adaptarse a ella. Ellos responden a la llamada de su clase para que
puedan defenderse por sí mismos. Los jóvenes adquieren una actitud de vida que
los adapta a su medio ambiente. Esto se logra a través de la educación.

Dos veces me he topado con aves salvajes y sus polluelos en la jungla. Un milano
apareció. La gallina hizo un sonido especial, los polluelos inmediatamente fueron
a tomar refugio, permaneciendo tan quietos que uno no podía verlos. En
cautiverio, después de ver a un perro la gallina hizo el mismo sonido pero los
polluelos debajo de una cornisa no se quedaron inmóviles. Ellos sabían que
estaban a salvo.

Durante la etapa en que son polluelos obtienen el tipo de mente que se quedará
con ellos por el resto de sus vidas. No pueden cambiar esta actitud más adelante.

Mientras estuve en India, conviví con vegetarianos. Esto afectaba a mi digestión


puesto que estaba acostumbrado a comer carne. Invité a dos de ellos a una
comida con carne. Les causó náuseas verme comer carne, para ellos era criminal.
Cada uno de nosotros pensaba que el otro tenía una actitud ridícula hacia la vida.
Esas actitudes las hbíamos adquirido en nuestra niñez: no eran ni debido a fuerza
de voluntad o a herencia. Cada niño construye una actitud de vida que no pueden
cambiar. En nuestras escuelas, niños hindúes, musulmanes y cristianos
trabajaban juntos: todo era paz. Pero considera a los adultos cuando están en sus
propios grupos. El gusto del niño es construir el tipo de ser humano que esté
adaptado a su propio tipo de vida.

Es difícil convertir a los adultos: uno debe tomar a los niños. Uno va a la
universidad para aprender un idioma, pero el acento extranjero de uno siempre
puede ser detectado. Cada niño que nace no tiene lenguaje: pero aprende uno
perfectamente. El construye su lenguaje, gusto y religión. Ese es el secreto de la
importancia del niño y por lo tanto, él debe ser considerado. Desde el punto de
vista de la naturaleza es importante como un ser humano vive y trabaja con el fin
de hacer un hombre de un niño. Él no es simplemente una máquina de repetición
que aprende algo de alguien. Es un ser humano que viene a la escuela. Es
nuestro orgullo el que nos lleva a creer que nosotros formamos a los niños. ¿De
verdad nosotros les enseñamos a caminar, a hablar, a reconocer su comida, a
distinguir y orientarse a sí mismos?

Si quieres educar o dar algo especial al niño, estúdialo, estudia sus necesidades y
logros. Entonces le podrás enseñar lo que sea.
La naturaleza, a través de la famosa mente inconsciente, le dice que tiene que
aprender a hablar o caminar. ¡Nosotros no podemos hacerlo crecer una pulgada o
lograr que pueda producir un diente! ¡Nosotros que somos tan inteligentes! Pero él
puede crecer, puede producir un diente. Adquiere su lenguaje tan perfectamente.
Que fuerza de voluntad, paciencia, razón, ¡inteligencia! Pero, él no tiene ninguna
de estas. Es la mente inconsciente trabajando. El niño no tiene una mente
consciente y sin embargo logra lo que para nosotros es imposible. De la nada el
adquiere todo: construye sus músculos y así controla sus movimientos.

A los 3 meses el niño estira su cuello y brazos con el fin de levantarse. Él es tan
débil, no tiene músculos, pero quiere moverse, llora para que se ayude a
levantarse. No puede sostener su cabeza erguida, se le cae, pero continúa
intentándolo. A los 4 meses ya puede mantenerla erguida.

Es la mente inconsciente trabajando. ¿Supones acaso que la mente inconsciente


repentinamente lo abandona al tiempo en que podemos empezar a ayudarlo? ¿Se
detendrá porque tú dices: "no debes subir las escaleras o no te pares en la silla?"
El niño tiene que moverse. ¿De qué otra manera podrá coordinar sus
movimientos? ¿De quién es la culpa que no pueda encontrar nada que necesite
en el ambiente? Para resguardarlo le das un corral de juego. Se le aprisiona tan
pronto como puede moverse.

Tú dices que el niño debe dormir, no debe correr el riesgo de salir lastimado.
Actúas como un juez. Pero Dios le dice que vaya en otra dirección; entonces tú en
el nombre de Dios lo castigas. Que base para la moralidad…

Si va a convertirse en un hombre él debe actuar. Los movimientos que están


dentro del diseño psíquico de las especies apelarán a él. A pesar de todos los
peros alrededor de él, ¡caminará en dos pies! La naturaleza lo llama a ser un
hombre. Las acciones de la raza humana apelan a él.

El niño está construyendo su razón y su actitud hacia la vida. El hará lo que la


naturaleza le diga. Alguien dice "yo te vestiré" pero él quiere adquirir esos
movimientos. El llora si su madre insiste en hacerlo y entonces ella piensa que es
un desagradecido. Sólo supongamos que tú estás hambriento y encuentras una
encantadora cena puesta delante de ti. Entonces alguien dice: "debes estar
cansado, deja que mamá te ayude a comerla, tu puedes sentarte y observar". El
niño debe actuar por sí mismo: se rebela si no puede hacerlo, entonces se le debe
enseñar a obedecer. Pero él no puede obedecer: el crece o muere. El crece con tu
consentimiento o sin él. Pero esto puede llevar a una de esas actitudes de vida
que se ven en los niños "difíciles" del mundo.

En España e Italia las madres del campo trabajan en sus cocinas cantando y tal
vez horneando pan. El niño está en el piso y también quiere hacer pan. Ella le da
un pedazo de masa y él trabaja como ella lo hace.
En tal ambiente, ellos pueden organizar sus movimientos alrededor de algo que es
útil y servicial. Las condiciones son tales que los niños no se convierten en
problemas.

La sociedad debe cuidar al niño. El niño tiene que pelear por cada pequeña
adquisición que hace. Tiene que crecer en sus movimientos y en su mente. Tú le
das campanas, frijoles, ladrillos, ellos juegan con estos. Es por medio de la
imaginación que ellos disfrutan las pequeñas experiencias que tienen. No es
realidad. Toda clase de historias se tejen alrededor de estos juguetes. Sus mentes
dan vueltas en fantasías y sus movimientos se centran alrededor de los juguetes.
Consecuentemente, a los seis años sus mentes no se concentran más en la
realidad y sus movimientos son quebrados e incoherentes. El resultado es una
personalidad distorsionada que no es causada por la maldad innata del hombre,
más bien por las condiciones en la cual se encuentran así mismos.

Toda la vida está encomendada a la sensibilidad: las hojas son sensibles a la luz,
las raíces a la gravedad. Por medio de estas sensibilidades se llevan a cabo sus
vidas y trabajo. Todas las acciones están salvaguardadas por esas sensibilidades.
Uno lee un libro únicamente si está interesado. Uno no haría nada si no siente esa
atracción. La sensibilidad es el secreto del crecimiento- el crecimiento espiritual,
intelectual y físico están dirigidos por la sensibilidad espontánea. Lo que sea que
tengamos, es resultado de alguna sensibilidad. El crecimiento es guiado por la
sensibilidad. La naturaleza ha puesto en el niño un instinto por crecer. En ciertos
periodos ellos quieren hacer ciertas cosas. Esta sensibilidad dura hasta que esa
facultad especial ha sido adquirida. Conseguir que el niño de siete u ocho se vista
así mismo es constantemente un problema - no es así a los tres o cuatro. Deben
de tener un objetivo externo alrededor del cual coordinar sus movimientos. Esta
sensibilidad por moverse es uno de los dos períodos sensibles durante el tiempo
en el que perfeccionan su coordinación muscular. A través del movimiento ellos
pueden entender cosas, por ejemplo 2+2=4. Puedo decirles este hecho, tú
entiendes con tu inteligencia: pero el pequeño niño de dos años debe tener cosas
que entienda. Nosotros podemos decir que el resaque triangular es de la misma
forma que el encuadre: el niño tal vez no sea capaz de poner de nuevo el resaque
en el encuadre hasta que lo haya tocado con sus manos una y otra vez.

El pequeño niño entiende a través del movimiento más bien que por el ojo. El
entonces construye su inteligencia así también como sus movimientos. Así un niño
que puede moverse alrededor de su ambiente es más inteligente que uno que esté
quieto. El intelecto sólo se desarrollará a través del movimiento. Él entenderá más
y lo amará. Uno no puede dar conocimiento sólo hablando. El movimiento y las
experiencias adquiridas en el proceso son las que forman a la persona.

Por lo tanto, no se maravillen de que los niños quieran moverse ya que son
simples acciones como desempolvar, barrer, lavar, las que el niño ansía hacer con
el fin de hacerse inteligente. En cambio, desde el nacimiento nosotros
condenamos y restringimos sus acciones. Para obtener normalidad debemos
dejarlo pasar a través de ejercicios que comprometen su inteligencia y
movimientos; estos ejercicios deben tener un objetivo definido y ser parte de la
vida del ambiente en el cual se encuentra.

Los ejercicios que se hacen en Europa no son aquellos que les interesan a los
niños de India. Debemos darles algo de su propio medio ambiente. El interés es el
punto principal de todos estos ejercicios, por eso se llaman “de vida práctica”.

Para mostrarle al niño como hacer estos ejercicios tu propia inteligencia debe
involucrarse, es decir, debes ser capaz de hacer el ejercicio tú mismo.

Traducción cortesía de Ethel Valdés


MARIO M. MONTESSORI
LECCIÓN 3

Cuando la Doctora Montessori habla acerca del entorno para niños de tres a seis
años, ella no se está refiriendo al ambiente usual de la escuela. El ambiente,
como ella lo entiende debe ofrecer al niño la posibilidad de desarrollo de acuerdo a
las leyes de la naturaleza. Para que esto no sea enfocado así por un adulto en
caso de niños escolares. Cuando sea posible las escuelas especiales deben
construirse para niños con la idea de hacer posible que ellos tengan actividad.
Hemos visto que entidades privadas han construido así muchas escuelas.
En estas escuelas, todo: sillas, mesas, etc., debe ir en proporción de los niños.
También deben de ser una respuesta a las necesidades del movimiento de los
niños. Nuestras sillas no solamente son más pequeñas que las que los adultos,
sus proporciones son diferentes por que los niños son diferentes a los adultos, no
solamente son proporcionalmente menores. Estas sillas tienen patas muy cortas y
altos respaldos. Los asientos son así debido al movimiento constante de los niños.
Tenemos bancas diseñadas para los niños de uno a un año y medio para que se
sienten hasta que tengan ellos cierta confianza en sus movimientos, ya que a esta
edad no se pueden sentar fácilmente. Observen a los niños menores que quieren
sentarse digamos en una piedra. Ellos van cerca de la piedra le dan la espalda
hasta que ya no la pueden ver. Cuando ellos ya no pueden ver la piedra entonces
ya no confían en sí mismos para sentarse allí, ellos lo están enfocando
equivocadamente por lo tanto no se pueden sentar. Esto se vuelve una acción
repetitiva hasta que por fin desisten y se sientan en el suelo. Para que los niños
chicos se puedan sentar fácilmente tienen que tener una guía visual que les
ayude, cuando no la pueden ver su deseo se convierte en algo negativo. Por lo
tanto les damos bancas pequeñas para que puedan verlas de cualquier lado y se
puedan sentar. A los niños también les gusta sentare en lugares que sean
atractivos, cerca de las flores o incluso en una piedra, así que todo el mobiliario,
mesas y sillas son ligeras para transportarse fácilmente.
El ambiente tiene que ser lo más atractivo posible para invitarlos a la actividad. El
mobiliario es de color claro de tal forma que cualquier polvo o basura se pueda
notar y le dé al niño una excusa para empezar a limpiarlo. Si todo estuviera hecho
como se hace generalmente y se ocultan las fallas entonces el niño no tendrá
ningún estímulo para empezar a trabajar.
Así que cualquier error es una invitación al niño para que haga cualquier cosa
dentro del ambiente.
El propósito de la naturaleza es guiar a los niños a convertirse en seres humanos
por lo tanto todas las actividades que él ve desarrollar por un adulto en un
ambiente son atractivas para él. Un niño indio por ejemplo, no estará interesado
en esos ejercicios de la vida practica que han sido diseñados para niños europeos
porque él no lo ve desarrollarse a su alrededor. Él está interesado en otras cosas
que son comunes para su propia gente.
Tenemos que diseñar series diferentes de ejercicios de vida práctica para
diferentes comunidades. Una de nuestras camareras se marchó porque no pudo
entender como sacudir el polvo de nuestro mobiliario. Se le enseño como hacerlo
muchas veces pero al final su madre dijo que no comprendía el tema de sacudir el
polvo y le preocupaba mucho eso. La razón de que el sacudir era nuevo para ella.
Ella tuvo que trabajar mucho con ella misma para tratar de entender nuestra
manera de ser. Los niños no están interesados en hacer nada de lo cual ellos no
estén acostumbrados a ver realizarse en su propio país, en cambio si se les da de
una forma apropiada lo podrán hacer con interés. La tendencia del niño es
absorber su propio ambiente.
El ambiente debe permitir a los niños ser independiente. Los niños están
acostumbrados a ser detenidos cada vez que quieren hacer algo y están
acostumbrados a obedecer instrucciones de los otros. Esto no corresponde a la
psicología de los niños a esa edad. Ellos requieren ayuda no se les dirá lo que
tienen que hacer, debemos sustituir la voz del adulto por una guía de perfección,
por lo tanto tenemos lo que conocemos como “control del error” si el niño ve su
error, entonces lo podrá corregir el mismo.
Los Motivos de actividad se dividen en dos tipos.
1. Cultural
2. Aquellos de la vida diaria
Ejemplo: el niño debe estar limpio pero muchas veces se rehúsa a que lo laven.
Podemos pensar que a los niños les gusta estar sucios pero no es así. Si le
damos al niño la oportunidad de lavarse el mismo le encantará hacerlo. Lo que
comúnmente ocurre es esto: un niño está haciendo algo de su interés y de repente
un adulto lo interrumpe para decirle que se lave. Él se revela y se niega lo que
hace que se lave de manera forzada. Hay una diferencia entre el interés con la
psicología entre el niño y el adulto.
El niño necesita lavarse a sí mismo pero no sabe cómo y tiene que aprender. El
adulto tiene que tener paciencia para enseñarle cómo hacerlo. Debe permitir al
niño que alcance la perfección a través de la repetición de la actividad en lugar de
repetírselo verbalmente. Los niños de todo el mundo se ven beneficiados cuando
hemos tratado de lograr la perfección a través del Guía. Esto es el control del
error.
Los motivos para la actividad que le damos al niño tienen que ser algo útil por
ejemplo, la acción debe estar completa, no se logra de inmediato pero tiene que
hacerse a través de la repetición. Debe haber un interés espiritual. La acción debe
estar completa cuando los niños ven a los adultos haciendo esta acción. A los
niños no les interesa que les enseñen un paso a la vez, lo que les interesa es la
vida y no el ejercicio. Al principio ellos están interesados en la vida de la casa,
tratan de ser activos en las acciones que ver alrededor de ellos en sus casas. Se
volverán eficientes si no se les está dando instrucciones y ordenes constantes.
En nuestras escuelas las ventanas son muy bajas para que los niños puedan ver a
través de ellas. Las escuelas tradicionales tratan de enfocar la atención hacia El
Guía, las ventanas son altas. Hay muy pocas cosas de interés, pues las imágenes
de la vida están fuera del alcance de los niños.
Nosotros ponemos todo al alcance de los niños, los cuadros están a su nivel
visual. En un ambiente Montessori todo es lo más atractivo posible. Tenemos
muchas flores y plantas diferentes, o un acuario con peces etc. Tenemos insectos.
Dejamos a los niños que estudien tantas formas de vida tan diferentes como sea
posible.
Otro aspecto de nuestras escuelas es que tenemos muy pocas puertas. Cuando
un niño de tres años ya ha obtenido independencia se puede mover entre una
clase y otra y generalmente no hay paredes en medio de las clases, solo algunas
pantallas. Los niños pueden circular libremente e interesarse en lo que otros niños
están haciendo. Uno de los grandes motivos de la actividad es ver a niños
mayores haciendo cosas. Ellos desean imitarlos.
Este ambiente comunal nos permite descubrir muchas cosas que nunca habíamos
pensado y que no se ven en otras partes, por ejemplo un niño de cuatro años está
muy interesado en la geografía. Ciertos intereses corresponden a ciertas edades.
Algunas cosas son más sencillas para los niños de tres y cuatro años que para
niños de ocho y nueve años. Nosotros ponemos a niños de tres, cuatro, cinco e
incluso seis años de edad en la misma clase. Esto es posible porque no existe una
clase de maestro en general. Los niños se conectan en el crecimiento, cada niño
trabaja en la cosa que le interesa. Hay una gran variedad de actividades. El
material le permite a cada niño trabajar en cosas que especialmente le interesan.
Una vez más, los niños que han venido a la escuela tarde y pasan su periodo
sensible, ven a los niños menores haciendo cosas y en lugar de ayudarlos a ellos
mismos ellos aprenden como explicar.
El ambiente debe siempre incluir animales y un jardín.
Recientemente hicimos una recolección botánica y de zoología con los niños en
una escuela. Resulto muy natural porque los niños estaban interesados en las
formas de las hojas, etc. Y empezaron a recolectar plantas que les mostraran
estas diferencias. Uno de los prejuicios más comunes es el miedo a los animales,
el miedo a las serpientes y lagartijas. El miedo de los adultos se transmite a los
niños, pero si ponemos a los niños en contacto con los animales les enseñamos
un entendimiento científico de ellos, los niños pierden el miedo y no serán crueles.
Consiguen observar el ambiente exterior y todo lo que existe en el mundo exterior
para ellos. En la India tenemos escuelas en el campo, estas tienen muchos
animales pequeños. Atrapamos lagartijas, serpientes, etc. Los niños pierden el
temor hacia los animales y los animales hacia los niños. Las lagartijas se acercan
cuando los niños silban en este caso logramos un interés de diferentes temas
como zoología, botánica, y ternura que no se hubiera podido lograr de otra
manera. Los niños absorben el ambiente pero solo en el ambiente donde
experimentan. Sus intereses están creados por tus intereses, sus gustos por tus
gustos y sus miedos por tus miedos. Esto no es hereditario. Si los papás italianos
emigran hacia América y mantienen la misma psicología adquirirán los mismos
patrones que sus padres han utilizado de acuerdo al ambiente donde vivan. Si
esto no se realiza así no pueden ser felices y se sentirán fuera de lugar. Los niños
toman todo del ambiente, la religión, las costumbres, los miedos. Ellos toman la
guía de la vida, a partir de lo que está alrededor de ellos.
Los niños están interesados temporalmente y distintivamente hacia las diferentes
hojas, así que vamos a buscarlas fuera. Tenemos plantas con diferentes tipos de
hojas y construimos un jardín botánico. Así que si hay algún interés que quieres
generar en tu ambiente, pon todas las alternativas posibles. Que no te de temor
hacerlo, porque esto entrara en la vida de los niños.
El trabajo del maestro en relación con el ambiente
1. Si deseas ayudar al desarrollo de los niños tienes que enseñarles la técnica
exacta de hacer las cosas. Esto no es siempre fácil cuando estas
empezando con una nueva clase, pero solamente los primeros días es
difícil. Los niños perciben las acciones generales, el desempeño exterior y
no se fijan en los detalles. Algo que es nuevo no siempre les da una
completa impresión o un aprendizaje real. Para poder ayudarlos tenemos
que enseñarles los detalles exactos. El maestro tiene que reducir su ritmo
hacia el ritmo del niño, esto es difícil para el adulto porque tenemos que
repetir la acción muchas veces, por ejemplo caminar, lo hacemos perfecto
sin estar pensando en ello.
Ejemplo servir agua
Los niños ven esto, pero no se dan cuenta de todas las pequeñas acciones que
son necesarias para que no se derrame el agua sobre ellos.
Les enseñamos la técnica exacta de servir agua de una jarra a otra. Les
enseñamos el movimiento exacto paso por paso para que observen la diferencia
entre el éxito y el fracaso. El éxito les da una gran satisfacción.
1. Levanta la jarra con las dos manos
2. Levántala al nivel de la otra jarra
3. inclínala despacio
4. vierte el agua dentro de la jarra, no se deberá salpicar nada
2. el maestro tiene que mantener todo en orden dentro de su salón por si el
niño tiene el deseo espontaneo de realizar cierta actividad, todo deberá
estar preparado y pueda encontrar los materiales. Si tiene dificultad en
encontrar el material su deseo puede desaparecer. Debe ser capaz de
encontrar las cosas por sí mismo así que todo debe estar debidamente
preparado en el mismo lugar.
3. Las cosas deben ser atractivas para que él desee utilizarlas. Para ejercicios
de Vida Práctica es necesario tener una canasta para cada ejercicio
conteniendo todo el material para que sea visible al niño. Tenemos
diferentes delantales y protectores para cada material. Tenemos anaqueles
con diferentes trapitos, plumeros, etc. Todas estas cosas con la foto de
cada objeto y la manera de colgarse o guardarse, así que en los primeros
días aprenderán fácilmente a utilizarlos y guardarlos en su lugar.
4. El mobiliario debe ser bonito. Es absolutamente necesario que todo sea
bonito. Es de una importancia educacional a esta edad. Todo debe estar
guardado en un lugar específico y en perfectas condiciones, después de los
siete años esto ya no es tan esencial. La mente del profesor debe estar
enfocada en mantener el ambiente tan ordenado y limpio como sea posible
y los materiales en perfecto estado. La belleza llama la atención de los
niños, si las cosas no son bonitas los niños las rechazaran en lugar de
sentirse atraídos. El orden es una invitación a que lo niños mantengan todo
en su lugar, limpio, ordenado y listo para ser usado por los demás
compañeros.
5. Las cosas deben estar puestas en el ambiente hasta que su uso sea
explicado. Si un niño no sabe cómo utilizar el objeto lo va a utilizar en forma
equivocada. Si un niño nuevo llega a la clase y comienza a utilizar el
material, los amigos le indicaran si lo está usando de forma correcta o
incorrecta. Si el profesor abre una nueva escuela con todo el material nuevo
expuesto, los niños harán mal uso de él y el profesor estará desilusionado.
6. No esperes que el niño obedezca tus instrucciones de inmediato, el
crecimiento no es instantáneo. Los niños no pueden hacer las cosas la
primera vez que se les muestra aun cuando las hayan entendido así que no
esperes que él haga lo mismo que tú, si lo hace espontáneamente, bien, de
lo contrario aléjate y vuelve intentarlo días después.
7. No tengas muchas cosas en el ambiente. Si hay demasiadas cosas por
realizarse se vuelve más desorden que orden y se pierde el interés. No nos
damos cuenta de esto al principio. En nuestras primeras escuelas en Roma
las personas traían regalos para los niños, pero los niños abandonaron los
juguetes. Por esa razón nos dimos cuenta que los niños trabajan más de lo
que juegan. Poco a poco eliminamos cosas que no se utilizaron y
encontramos algunos límites dentro del ambiente que podemos ofrecerles.
8. Si ponemos más de una canasta con el mismo material puede crear
desorden y es malo para el carácter.
Es un hecho que todo lo que constituye nuestra personalidad, excepto algunas
cosas hereditarias, es construido por el niño. El carácter es una construcción de
los niños. Al principio tú tienes diferentes tipos de niños, que se diferencian de
acuerdo a las experiencias que tiene cada uno. Los niños pobres tienen menos
problemas en ajustarse a su ambiente. Hemos visto esto en todas las naciones
donde hemos trabajado. Los niños ricos son más difíciles para despertar su
interés, toma mucho tiempo para la mayoría de ellos normalizarse debido a que
los niños pobres aprovechan todas las oportunidades que la escuela les ofrece.
Esto es porque los niños ricos no tienen siempre experiencias propias así que
tienen pocas oportunidades para desarrollar su carácter. Los niños pobres tienen
más libertad y por lo tanto están más interesados y la creación de su carácter se
realiza de forma espontánea en ellos. Para tener una actividad espontanea
tenemos que tener motivos para ella. La actividad espontanea no llega el primer
día de escuela. Después de uno o dos meses cuando los niños ya se encuentran
acostumbrados a su ambiente y empiezan a planear sus propias vidas. Esta es
uno de las grandes ayudas que ofrece el ambiente hacia los niños, la posibilidad
de construir una mente ordenada. Crecen a través de sus actividades. Cuando
ellos llegan a la escuela traen dentro de ellos un orden de actividad, un plan para
todo el día. Esto es una ayuda para la instrucción y el orden de su mente que
quedara permanente por el resto de su vida. Muy pocas personas tienen una
mente ordenada en estos días, esas personas son las que sobresalen.
Estos niños son ayudados en desarrollar actividades las cuales pueden ser
espontáneamente realizadas en lugar de actividades por medio de una orden.

Traducción cortesía de María Luisa Llerandi


MARÍA MONTESSORI SEPTIEMBRE 5, 1946
LECCIÓN 5

Existe mucha gente que nos dice “¿Por qué estás en contra de los cajones de
arena?” “¿Por qué no usan plastilina o arcilla en tus escuelas?” “¿Acaso estás en
contra de la imaginación?” No estamos en contra de ninguna de estas cosas, más
bien tomamos precauciones con la arena. Los bancos de arena no son evidentes
en nuestras escuelas. Los bancos de arena están ahí pero los niños no los usan
mucho. Existe un riesgo al jugar con arena seca, pues tiene partículas muy
pequeñas que pueden inaladas al igual que el polvo. Pero en Inglaterra
usualmente la arena es húmeda, así que me imagino que el único riesgo será
pescar un resfriado.
No prohibimos que los niños jueguen con arcilla o plastilina. Usamos ambos en
nuestro trabajo; mas adelante podrán verlo cuando estudiemos Geografía,
Química y Física.
Yo quiero saber ¿por qué los niños quieren usar constantemente la arcilla, arena
etc.? Es por dos razones, pueden estar activos con estos materiales y
proporcionan una oportunidad para ejercitar su imaginación mientras están
activos.
La actividad es una parte básica del desarrollo de los niños.
La imaginación es la base para la construcción de la mente.
La imaginación es la esencia de la inteligencia humana. Si el hombre no tuviera
imaginación seria como cualquier animal. Todo ha sido creado por medio de la
imaginación. Alguien tuvo que pensar y crear todo lo humanamente hecho en el
mundo para después construirlo. Todo, no importa que tan pequeño sea, ha sido
imaginado por el hombre. No podríamos entender la descripción de una persona o
un lugar si no tuviéramos imaginación.
Estamos en contra del uso que algunas personas le dan a la imaginación.
Si observamos a un niño haciendo cosas con arena o plastilina veremos que tiene
éxito con los pocos medios que encuentra.
Les dan arena, viejas cajas de cerillos y cerillos ya quemados; con ella pueden
hacer pequeñas sillas, mesas etc. Los niños realmente lo disfrutan. Nosotros no
queremos quitarles nada, porque ellos encuentren gozo y alivio cuando manejan
estos materiales.
Recuerdo una vez que hicimos una excursión larga al campo. El caballo que
llevaba las provisiones se quedo atrás. Todo estaba bien por un tiempo, pero no
fue así más adelante. Por la tarde todo estaba empeorando, no había nada para
comer o beber, solo había arena, piedras y cigarros. Masticamos pedazos de
tabaco, dejamos de sentir hambre. Chupamos piedras de rio y dejamos de tener
sed. De la misma manera podemos ofrecer arena, lodo y cajas de cerillos a los
niños; ellos serán felices, podrán hacer algo en vez de no hacer nada. Les han
dado alegría; así que los dejamos con aren, lodo y cajas de cerillos. Son materia
prima barata que podemos proveer fácilmente dando al niño el poder y ellos
estarán felices. Es evidente a la vista de todos.
Pero el problema es mucho más profundo. La civilización ha olvidado al niño. El
niño es un constructor. El busca su alimento ¿Pero, qué ayuda verdadera le ha
dado la sociedad o civilización? ¿Además de proveerlo con arena y cerillos?
Nada. Pero ahora en día se dice que se les ha dado la libertad. ¿Acaso no eran
libres los hombres de las cavernas? Ellos podían ir a cualquier lugar en el bosque
o llanuras. Ellos tenían animales, raíces y frutos que comer, tanto como ellos
quisieran. ¿Por qué el hombre no se quedo en esa etapa? Me imagino que no era
una muy cómoda. Había inseguridad y pobreza. Si les fallaba la fuerza; fallaba su
vida. Si descubrían cualquier cosa que hiciera la vida más fácil, era atesorado y
compartido con otros. Cualquier cosa inventada que se veía que fuera buena era
transmitida a los demás. Esa es la esencia de la civilización. Los adultos disfrutan
de estos avances, luchan por ellos para no regresar a la etapa de la recolección
de los alimentos.
Los niños siguen en el desierto, tienen que adentrarse en su medio ambiente para
buscar con qué construir su personalidad, para construir su personalidad de
hombre o mujer. La civilización ha olvidado al niño, ha avanzado en otras aéreas.
Ellos eran la gente fuerte y débil; había una conciencia ciega que hacía posible
que unas personas disfrutaran de la vida mientras otros sufrían. Aquellos que
disfrutaban la vida lo tomaron como un derecho dado por la gracia de Dios. Estos
conceptos prevalecieron hasta que unas grandes almas vieron la luz. Ellos se
dieron cuenta que todos los hombres y mujeres tenían el derecho a vivir; que
todos eran iguales ante Dios. Cristo fue el primero en luchar contra la esclavitud.
El materialismo se apodero de las almas de la gente, no querían alterar las
condiciones que existían. Pero el hombre tiene el potencial de la bondad; es
posible despertarlos a esta situación. Los derechos del hombre han ido en avance
poco a poco.
Después, las mujeres lucharon por sus derechos. Hasta para ellas tener derechos
parecía tonto. Ellas se ganaron sus derechos, la civilización les abrió una puerta.
Después los obreros y los pobres obtuvieron sus derechos. Antes de la Revolución
Francesa, se pensó que era ridículo que un rebelde tuviera derechos ante el Rey y
la Nobleza. Los derechos se ganaban en Francia, Europa y el mundo.
Pero aun había gente que tenía que trabajar durante horas sin parar y podían ser
despedidos en cualquier momento. La sociedad sacó a la luz a los obreros y les
hizo ver que ellos eran la base, la base de la civilización. Sus necesidades
estaban incluidas en sus Derechos Humanos. La sociedad abrió sus brazos a los
obreros. Los obreros hacían objetos como mesas, casas, cuchillos, etc. Ellos
hacían todo lo necesario para la vida diaria. Contribuían así a la civilización, así
que tenían derechos. ¡Tantos derechos que nadie más tenía!
Pero… ¿los niños? La civilización se ha olvidado de ellos. Existe la necesidad de
otra revolución a favor de los niños. Tal vez esta sea la última revolución de todas.
La diferencia entre los niños y los obreros es que los niños no se pueden poner
en huelga. El niño tiene que construir al hombre, en su vida diaria, si se pone en
huelga se muere. El debe crecer y perecer. Su trabajo debe continuar. Su alegría y
felicidad lo traicionan, y su bondad también. La vida pasa entre la alegría; la
satisfacción de sus necesidades les da alegría y el crecimiento de un niño se da a
través de la satisfacción de sus necesidades. Tiene que organizarse a sí mismo a
través de alguna actividad. Dale arena, lodo y una caja de cerillos y el estará feliz.
Está en la edad de la imaginación. Él hace la casa, y puede ver lo todo: la gente
ve su felicidad y se sienten satisfechos. El misterio de los obreros era evidente;
cualquiera podía ver que tenían frio y hambre. El niño puede ser feliz a menos que
las condiciones de su medio ambiente sean muy malas, entonces el niño se
revela, pero su rebeldía solo puede ser vista como que es un mal agradecido.
Recuerdo a una mujer muy caritativa; ella les daba comida a los hambrientos; pero
un día la escuche decir a un hombre viejo: “¿Qué no te di sopa la semana
pasada? ¿Por qué regresas tan pronto? Eres un hombre mal agradecido, intentas
engañarme.” De la misma manera llamamos a los niños. Solo cuando la
compasión haya sido organizada se convertirá en parte de la civilización. En
tiempos pasados la caridad era impuesta; ahora los sindicatos defienden los
derechos de los obreros. Durante las pasadas peregrinaciones alguna persona
bondadosa arropaba a los pobres y le daba cuidados cuando caían enfermos. Eso
era compasión. Se vuelve parte de la civilización cuando existen hospitales en
donde todos tienen los mismos derechos a ser curados.
Para los niños hay arena, lodo y cajas de cerillos. Existen escuelas, edificios en
donde los niños son recogidos, grandes cuarteles con el sargento mayor, un
maestro que da órdenes.
Recuerda que los niños no pueden defenderse así mismos. No pueden
organizarse en sindicatos, como los rebeldes en Paris, derrocar a sus opresores
con violencia. Ellos no tienen odio, excepto para ellos mismos. Se someten y
sufren pero la venganza cae en la sociedad. El hombre que fue oprimido de niño,
se siente menos de lo que es. Su inteligencia y visión se apaga. Si no somos así,
¿no deberíamos ser como granos de arena listos para ser movidos por cualquier
viento que sople? ¿De qué otra manera podremos explicar el fascismo? Nadie
pensó, que iban a ser cargados por una ola de sentimiento. No había ninguna
visión independiente, resistencia o carácter. Esa es la venganza que el niño
siente hacia la sociedad. ¿Continuara así para la civilización, olvidando que el niño
se destruye a sí mismo?
Es por ello que estamos en contra de la arena, lodo y cerillos. Una nueva
civilización debe ser construida para los niños. El mundo los ha olvidado. Si no
creamos un mundo para ellos, no podrán construir el alma de un hombre recto.
Los niños se convertirán en seres humanos sin consciencia que no pueden
distinguir entre el bien y el mal. ¿Que más a ha obtenido la civilización Cristiana
además de guerra? Cristo dijo: “Si te dan una cachetada, pon la otra mejilla”, Pero
aun en el nombre de Dios, vamos a la guerra. Así es el hombre de hoy en día. Las
posibilidades del hombre han sido ignoradas. La civilización sólo considera a los
adultos, y olvida a los niños. Hasta las religiones han olvidado a los niños. Al
imponer la práctica de religiones, se imaginan que están formando gente Cristiana,
pero solo están oprimiendo. Al crear posibilidades humanas el niño se convierte en
hombre y no en una bestia.
Es por eso que estamos en contra de la arena, lodo y cerillos. No es que
queramos quitárselos, pero es que es la arena, lodo y cerillos los que evitan que la
civilización reconozca los derechos de los niños.
Los niños deben adquirir derechos como humanos. No hay nada que de más
miedo que el derecho de crecer. Ellos están cumpliendo con un derecho que ha
sido puesto por Dios. El derecho de construir un hombre es más grande que tener
un hogar o alimento.
La arena, lodo y cerillos están bien, pero no son alimento para la mente de un
hombre en desarrollo. Es un alimento pobre de la civilización de hoy, construir un
alma a su grandeza. La presencia de la arena, lodo y cerillos son un impedimento
para la realización de los derechos de los niños. Debemos hacer que el mundo
vea que el niño tiene derechos tan grandes como los de cualquier otro grupo de
gente. Los obreros hacen la mesa, los niños crean un hombre o una mujer.
Debemos ofrecerles un nuevo mundo en el que ellos puedan construirse a sí
mismos, no solo como un pasatiempo o alivio.
Nuestro objetivo es trabajar para que el niño pueda desarrollarse en la civilización
de hoy.
Es un impedimento para el desarrollo si con arena, lodo y cerillos mantenemos a
los niños felices. Debes declararte en contra de la arena, lodo y cerillos como
alimento para la inteligencia. Si ofreces algo mejor los niños dejaran de jugar con
arena, lodo y cerillos, comenzaran a construirse así mismos sobre líneas lógicas,
que solo son encontradas en la naturaleza.
Puedes tener arena, lodo y cerillos en tus escuelas, pero no como el único
instrumento con el cual los niños deben crecer.
Ese es un aspecto; existe otro, que no es tan dramático. Pero ¡qué pérdida de
tiempo! Si preguntas “¿Con que haces arte?” ellos te dirán “les damos a los niños
pinturas, papel de colores, lápices etc. y les damos la oportunidad de expresarse
libremente”. Los niños han encontrado la normalización a través de dicha
actividad. Esta da calma a los niños. Ellos te dicen que los resultados son
expresados por los niños a través del arte. Si a un niño le das un papel y lápiz
podrá hacer alguna especie de monstro difícil de reconocer. Se dice que es una
forma genuina y natural de expresión de un niño y debe ser fomentada. Después
te dirán que la mayoría de estos niños a los 12 años, que estaban tan
entusiasmados, ya no estrían interesados. Muy pocos continúan con su trabajo de
arte.
Esta urgencia por el arte se encuentra en cada niño y hombre. En la naturaleza del
hombre se encuentra este poder de querer crear algo, pero al cumplir 12 años
ellos ya no estarán “atrapados por ello”, por sus esfuerzos infantiles es que
comienzan a discriminar. El temperamento del artista ya no puede ser cultivado,
más bien es perdido.
Existe un incentivo a la actividad. Debemos dar les algo real, es una
urgencia a la expresión artística. Dales algo que hacer, así podrás desarrollar la
imaginación y el sentido artístico.
No debemos abusar de estos dones al abandonar a los niños o al arrastrarlos. Los
niños pueden estar contentos pero eso no es suficiente. Puede satisfacer
momentáneamente su necesidad de estar activos, utilizan material que está a la
mano, pero no hay nada más. Lo habrás ayudado a engañarse así mismo, pues
por sí solo no llegara a la expresión artística.

Existe un punto que debemos tener en cuenta; el trayecto natural del desarrollo
no es directo. La naturaleza prepara los instrumentos primero, la inteligencia
después. Hay una preparación individual antes de que la síntesis de la inteligencia
humana sea creada. Es entonces cuando podrá usar el instrumento que ha sido
preparado.
El bebé está totalmente inconsciente del lenguaje, pero del inconsciente viene la
realización del secreto de su misión humana, observa los labios del orador,
escucha y más adelante sus músculos pueden producir sonidos. A los seis meses
puede pronunciar silabas individuales. Durante horas estará reproduciendo estos
sonidos. Recuerdo una niña de 10 meses de la India. Cuando entró a la habitación
comenzó a charlar. Ella entendió que los adultos estaban haciendo sonidos unos a
otros. Ella hizo lo mismo.
Más tarde el mecanismo del lenguaje es guiado por la pequeña inteligencia que
tienen al darse cuenta que cada objeto tiene un nombre. El entusiasmo e interés
de esta pequeña mente tiene el mecanismo ya preparado. Puede expresarse de
mejor manera, la coordinación es necesaria.
Hay una preparación indirecta de todos los instrumentos. Entonces la inteligencia
puede trabajar a través de ellos.
La arena, lodo y cerillos no ayudan al desarrollo. Ayudemos al niño a desarrollar
su inteligencia; así podremos ver realmente la expresión de la mente del niño,
entonces habrá arte verdadero. Puedo tener visiones de hermosas fotografías que
me gustaría reproducir, pero al tomar un pincel no lo logro. Tengo las ganas pero
el instrumento no ha sido preparado. Les damos pinturas etc., pero no podemos
ponernos en el camino de la creación de su propia visión. El niño que puede
discriminar fácilmente no podrá pensar que sus propios dibujos son tan
maravillosos, su entusiasmo va dirigido al logro en vez de a la pintura misma.
No debemos copiar a los bebés cuando balbucean, no lo imites. Es como si
conocieras a una persona coja o jorobada y actuaras como ellos en su presencia.
Debes admirar su trabajo cuando se encuentre satisfecho por su logro, pero dale
la posibilidad de poder expresarse mejor; ofrécele los medios para que pueda
expresar lo que quiere o necesita expresar.
La mente humana está basada en la imaginación, sin ella no tendríamos lenguaje,
nada, ¿pero por qué relegar su mente a cosas tan triviales? La imaginación ha
sido usada para crear la civilización, todo el lenguaje, todas las cosas
humanamente hechas.
La imaginación fue dada para la creación, no solo como pasatiempo.
Dales arena, lodo y cajas de cerillos si quieres que hagan una maqueta de una
casa, pero primero prepara los instrumentos para que logren plasmar lo que su
imaginación les da. No lo permitas que su imaginación solo sirva como el jugo del
tabaco, cuando tuvimos hambre. Si eres bueno te contaré una historia. Él estará
calmado. Queremos animar y fomentar la imaginación, no la limites al disminuir tu
responsabilidad dejando al niño subdesarrollado.

Traducción cortesía de Viviana Pimentel.


MARIO M. MONTESSORI
LECCIÓN 6
Hay un aspecto en el desarrollo del niño, que normalmente no es tomado en
consideración por los educadores. Recuerdo que una vez fuimos a una guardería
infantil italiana. La maestra de la guardería se consideraba especialmente buena
en su trabajo. Ella era muy vital y entretenida. El Guía dio una lección a los niños,
que estaba destinada a ser la primera lección de una flor…creo. Con el fin de
atraer la atención de los niños (tenían 3 – 3 1/2 años de edad) que estaban en el
medio de la habitación. El Guía llamó a los niños, los niños con una voz llena de
emoción y sonriéndoles a ellos. Luego levantó una flor: "Niños, esto es una flor,
ven, se trata de una flor azul." Ella comenzó una larga conversación acerca de la
flor azul, y cómo el cielo era azul, y el cielo estaba lleno de estrellas, etc. Los niños
estaban interesados en un primer momento y luego se convirtió en aburrido. El
Guía se sintió frustrada cuando ya no podía mantener la atención de los niños, ya
que estaba haciendo un esfuerzo especial para impresionarnos, ya que había
dicho que no había vida en nuestro método que debería ser más entretenido así
que cuando no logro interesar a los niños en esta lección ella dijo "Estos niños son
demasiado pequeños, ellos no entienden estas cosas."
Esta es la idea general. Cuando los niños no están interesados piensan que no
pueden entender, incluso cuando hablamos de cosas tan sencillas como una flor
azul; creemos que hay que atraer su atención y hacer que esta coloración azul
sea interesante. Éste era el método habitual de procedimiento en las escuelas
italianas en ese momento.
Hay otra cara de la vida que no se toma en consideración. Este es el desarrollo
subconsciente del niño. La Dra. Montessori habla del contraste entre las
condiciones del niño antes de que entre en el mundo y las que encuentra cuando
nace. El feto está completamente aislado del mundo exterior y todos sus
estímulos, de repente se pasa de la nada a absolutamente todo. Todos sus
sentidos son despertados por el terrible dolor de nacimiento. Entra en un mundo
donde el color, la forma, los sonidos de luz, lo asaltan. Estaba sumergido en el
agua por lo que no podía sentir el calor o el frío, y ahora es sensible a la
temperatura - esto debe ser una experiencia terrible para un alma que apenas se
abre a la vida.
La Dra. Montessori ha descrito la forma en que un niño tiene una sensibilidad muy
pronunciada y de cómo lo puede llevar a la construcción de una inteligencia, a
través de sus experiencias. Debe catalogar todo lo que hay en su entorno a través
de sus sentidos. Algún tipo de orden penetra poco a poco su subconsciente y lo
lleva a la conciencia del mundo.
En los primeros meses de vida de un niño parece que estudia el medio ambiente.
Mira fijamente a los objetos, mira fijamente a las caras nuevas. Por nueve meses
puede distinguir su entorno tan bien que puede entender una imagen más o
menos tejida de flores y los niños en un cojín, tan bien que besa a los niños (en su
país todo el mundo besa a los niños) y huele las flores.
Es posible darse cuenta, a partir de estos y de otros síntomas, la intensa actividad
de su psique que forma un orden en su mente mediante la adopción de las
impresiones del ambiente, y construye una inteligencia. Debido a esto, el niño
puede hablar cuando venga a la escuela a la edad de tres años. Debido a esto se
da cuenta de que la flor es de color azul. Cuando el maestro le da una larga y
complicada tesis con el fin de explicarle que la flor es de color azul, su actitud
aburrida expresa "El mundo me ha estado enseñando durante tres años, sé estas
cosas y por lo tanto, no estoy interesado en que me digan que la flor es azul.
Ustedes creen que no soy inteligente”.
Esta es la tragedia del niño. Nosotros no lo entendemos o no le damos crédito por
la inteligencia que posee. El niño necesita una guía para ayudarle a aclarar sus
ideas. Esta masa caótica de estímulos que lo asalta, es por eso que necesita una
guía para ayudarle a atravesar este caos. Los niños están interesados en el
material sensorial que la Dra. Montessori les da, ya que representa una
abstracción que les ayuda a clasificar mejor para encontrar su mejor forma, a
través de la masa de impresiones que obtiene del medio ambiente.
El sentido muscular no se toma en consideración. Los niños necesitan actividad.
Esta es otra razón por la que el material corresponde con las necesidades de los
niños. Las cosas estáticas no sirven de nada, el movimiento es necesario para la
vida psíquica. Los niños sólo pueden aprender si pueden ser activos.
Este material no fue dado a los niños primero con la idea de llevar al niño a una
clasificación de los sentidos; que era la forma en que lo utilizaron, en varias
ocasiones, lo que hizo que la Dra. Montessori entendiera por qué lo utilizaron. Se
presentaba la actividad y ésta contenía un control de error. El control de error
elimina la corrección del adulto y da el interés al niño pues es él mismo quien
conduce la experiencia repetidas veces hasta lograr la perfección. Por ejemplo los
cilindros. Hay diez cilindros de diferentes volúmenes que encajan exactamente en
diez agujeros en un bloque de madera. Si el niño comete un error, durante el
montaje de los cilindros en los agujeros, se encuentra con un cilindro grande y un
pequeño agujero. Puede ver que hay algo mal.
Esto le lleva a observar con más atención el tamaño, se enfoca a las pequeñas
diferencias que hay entre los cilindros. Puede corregirse a sí mismo, ya que, si se
comete un error, siempre habrá uno o más cilindros sobrantes que no quepan.
Este control de error lleva al niño a observar y descubrir. Elimina la necesidad de
la interferencia adulto.
Este material también aísla cualidades. Si en una pieza de material hacemos
todas las cualidades por igual, excepto uno, ese destacara. Esta es la "Escalera
Café": todo es igual aquí excepto el espesor. En esta "Torre Rosa" los cubos son
iguales excepto en el tamaño, difieren en las tres dimensiones. Estos cilindros de
sonido sólo se diferencian en el sonido. Estas tabletas de color únicamente en el
color. En todo este material que se ve aquí una cualidad está siendo aislada y la
atención de los niños se centró o enfocó en esa cualidad; todo el material es
atractivo.
- Contiene el Control de Error
- Se le da al niño la posibilidad de ser activo
- Se aísla una cualidad particular
- Se limita en cantidad
A menudo nos acusan de limitar al niño, de ser dictatorial, pero si estás perdido en
un desierto y sigues un camino estrecho este te llevará a alguna parte. Este
material se ha determinado experimentalmente. Las cosas que el niño utiliza de
forma espontánea se mantuvieron y las cosas que no utilizó fueron descartadas.
Cada pieza de material da la abstracción de una experiencia que el niño ya ha
tenido en el medio ambiente. Le damos límites debido a que estos límites lo
llevarán a la comprensión. Si le diéramos el mundo entero, el gran número de
objetos lo confundiría.
La presentación del material se realiza siempre durante los períodos sensibles, es
decir, cuando se está adquiriendo y organizando alguna facultad. El niño repite los
ejercicios muchas veces, porque a través de la experiencia de su inteligencia y la
experiencia repetida, corrige estas facultades en su personalidad. Por ejemplo, si
le han dicho un hecho muy interesante es posible que se olvide de él, pero si ha
aprendido a andar en bicicleta a los 10 años y no lo hace de nuevo hasta que tiene
25 años, no se le habrá olvidado, sólo puede tomar la bicicleta y andar en ella. Por
algún proceso de coordinación de la habilidad se ha convertido en algo
determinado en su personalidad. Decimos que los niños "encarnaron" en lugar de
aprender estas cosas.
La delicadeza o refinamiento de la percepción es la que da inteligencia. Los
sentidos refinados son los que conducen a un mayor trabajo en cada profesión. El
refinamiento de la percepción conduce a una gran inteligencia en cualquier campo,
por ejemplo, los catadores de vino: un catador de vinos conoce de uvas, tiene un
gran refinamiento de la percepción para que pueda distinguir entre unos y otros,
también sabe los años en que fue embotellado cualquier vino en particular.
Hay un hecho curioso que se ha observado bastante, un sentido puede ser
desarrollado como un músculo. Con el ejercicio, los músculos se hacen más
grandes y son capaces de tener una mejor coordinación. Los sentidos también
pueden ser desarrollados, hemos visto este hecho con niños medio sordos. Los
doctores comienzan realizando un fuerte ruido y disminuyen gradualmente el
ruido, esto lleva al niño a realizar repetidos esfuerzos voluntariamente, se hace un
llamado a su conciencia. Se realiza en un período en que sus órganos se
encuentran todavía en el proceso de formación, es probable llevar al niño a un
estado en el que pueda ser capaz de oír la palabra hablada. Después de los seis
años de edad ya no es posible hacer esto porque el niño ya no está en un período
sensible; al igual que con los dientes, ningún esfuerzo de voluntad hará que
crezcan antes del tiempo, por ejemplo, los Pieles Rojas eran reconocidos por ser
magníficos seguidores de rastros, pues podían ver los signos que el hombre
blanco no podía percibir. Podían descifrar el peso de un animal con tan solo ver la
forma en que la hierba se doblaba. Tenían un gran refinamiento de la percepción
que no podríamos poseer. Si no podían ver ningún signo entonces los Pieles
Rojas encontraban la pista poniendo sus manos y rodillas en el suelo olfateando
como perros. Estas características especiales se pensaban que eran hereditarias,
pero esto no paso, porque los Pieles Rojas, al vivir en la civilización europea
perdieron estas facultades. Ellos habían desarrollado estas facultades antes
porque comenzaron desde niños pequeños, eran cazadores y su vida dependía
de la capacidad de rastrear animales. Estaban interesados y, por lo tanto,
desarrollaron sus sentidos a un tono más alto de eficiencia. Todos los seres
humanos deben ser capaces de desarrollar sus sentidos a este campo. Los
sentidos son raramente desarrollados, porque la vida que llevamos nos ha llevado
a descuidarlos. Hemos llegado a ser demasiado artificiales y contamos con
herramientas demasiado artificiales también. En los viejos tiempos un médico
tenía que ser capaz de decir la temperatura a través del tacto, si su sentido no
estaba bien desarrollado no podía llegar a ser médico. Hoy en día se utiliza un
termómetro. Ahora solo necesitamos el mínimo desarrollo de nuestros sentidos
para seguir viviendo.
Hace poco tiempo atrás era un signo de nobleza no hacer nada. Si usted era
obeso se suponía que era próspero y era una señal de que usted no tenía que
trabajar. Las mujeres obesas especialmente, se consideraban que eran muy
hermosas. La obesidad era un signo de respeto en los hombres y las mujeres.
Había dos tipos: la obesidad, respetable, y los militares gallardos: sólo el segundo
fue considerado como una excepción, no habían desarrollado sus posibilidades.
Hoy en día admiramos a los Indios Pieles Rojas porque habían desarrollado
finamente sentidos, mientras que los nuestros se mostraban deficientes. Es por la
fineza de la percepción que los niños construyen su inteligencia. Este material les
permite afinar sus sentidos si se administra durante sus períodos sensibles.
Todos los niños saben que hay casas, árboles, colores y flores, no son ciegos. No
necesitamos enseñar estas cosas, pero hay ciertas cualidades, por ejemplo, el
tamaño, lo que todos los objetos tienen y es esa característica lo que los hace
diferentes. Es difícil hacer una dimensión abstracta, pero no lo será si aislamos las
características en cada material:

Barras Rojas: 2 de las primeras barras hacen una segunda


3 de las primeras barras hacen una tercera
4 de las primeras barras hacen una cuarta
Y así hasta llegar a diez barras. –Hay un progreso lineal.
Escalera Café: Los prismas son iguales en longitud con un cuadrado al final - que
difieren en espesor-
Un lado del cuadrado primero – ½ del ancho del cuadrado del segundo
En altura 2 de 1 = 2
4 de 1 = 3
Y así hasta llegar a diez. El progreso aquí es geométrico- de acuerdo al cuadrado
de los números.
Torre Rosa: Aquí los cubos difieren en todas sus 3 dimensiones:
1er cubo = 8 del 2º cubo
Por lo tanto:
Barras Rojas 1, 2, 3, 4, 5, 6, 7, 8, 9, 10
Escalera Café 12, 22, 32, 42, 52, 62, 72, 82, 92, 102
Torre Rosa 13, 23, 33, 43, 53, 63, 73, 83, 93, 103

Sería imposible darle a un niño una idea de estas dimensiones en palabras.


Llevamos a los niños a observar esto a través de la actividad repetida con el
material. Estas diferencias se incrustan en sus mentes. Más tarde le damos
nombres a estas cualidades y comienzan a notar las diferencias de las
dimensiones en el medio ambiente.

Traducción cortesía de Diana Leal


MARIO MONTESSORI SEPTIEMBRE 21, 1942
LECCIÓN 7
La inteligencia es uno de los atributos, entre otros, que el niño pequeño organiza
durante su primer año de vida. La inteligencia es organizada a través de sus
experiencias con el ambiente. Mediante estas experiencias el niño forma un
atributo, casi como un instinto, el cual lo guiará a ser hombre en circunstancias
especiales de su vida. Las experiencias son obtenidas de dos medios: inteligencia
de movimiento e impresiones sensoriales. Estas impresiones sensoriales tienen
movimientos que tienen un efecto en el subconsciente del niño y este
subconsciente despierta una personalidad por la cual, entonces, se dirige la
conciencia del individuo.
Si un niño nace entre los esquimales, el encuentra su tierra, su clima y sus
costumbres deleitables. Puede ser que él viaje a algún otro lado, pero estaría muy
contento de regresar a su propio país. Aunque nos gusten las novedades de
nuevos lugares, llegan a ser extraños, diferentes. El subconsciente dirige la vida
consciente de cada individuo. La persona adquiere su forma definitiva, como si
fuera por un medio especial, una sensibilidad. Esta sensibilidad que se queda para
siempre cuando el ser humano la ha obtenido. Mediante esta sensibilidad el niño
busca sus experiencias. No son los sentidos o movimientos los que forman la
subconsciencia, es la adquisición emocional que surge de las experiencias que
han sido obtenidas a través del movimiento sensorial experimentado.
Estos sentidos son los medios por los cuales la inteligencia se construye. La
inteligencia del niño se desarrolla por medio de esta sensibilidad, ansiosa de
experimentar.
La psique viene por medio del contacto que se tiene con el ambiente que se
percibe a través de los sentidos y los movimientos.
Nosotros también nos involucramos en el ambiente de forma esencialmente
diferente. Hemos perdido la sensibilidad, por lo tanto nuestro contacto con el
medio ambiente no nos sirve para la construcción de conocimientos que formen
nuestra vida o nuestra persona. Nuestros sentidos y movimientos sólo nos
capacitan para recibir impresiones.
Si ayudamos a la organización y construcción de la consciencia del niño, le
estamos ayudando en su vida y desarrollo. No necesitamos ayudarlo a descubrir
todas las cosas en el mundo que le rodea. Necesitamos ayudarlo a clasificar estas
diferentes impresiones en algo que tenga sentido de manera clara. Esto se puede
lograr de diferentes formas.
Primero se aísla. La cualidad que se desea enfatizar debe ser aislada. El reflector
en la oscuridad de un teatro enfoca o resalta únicamente cierto punto, aislándolo
de todos los demás. Por medio de este acercamiento psicológico el niño es
ayudado. Ciertos asuntos son comunes en todos los seres humanos. La claridad
obtenida mediante la separación de la calidad es común en todo ser humano por
ejemplo, el auto es observado por un humano, ese ser humano ve, escucha,
huele; todas estas impresiones tocan la consciencia. Pero si uno aísla una de
ellas, llegará de manera más clara para el intelecto, especialmente si se trata de
algo nuevo. Si se está aprendiendo un nuevo idioma, te darás cuenta de que si
esa persona habla lentamente con sonidos separados será más fácil de entender
que cuando habla con una velocidad normal. Haciendo esto último, es como si,
escuchando hablar el idioma rápidamente, el cerebro no alcanza a cachar las
palabras: pero, si el discurso es lento, el significado de las palabras queda claro.
Cuando la velocidad aumenta, aunque se comprenda el significado individual de
las palabras, el contexto no se entiende.
Es por esto que debe existir un método científico de observación.
Nos permite considerar los sentidos dentro de sí mismos. Se nos ha enseñado
que tenemos cinco sentidos, pero muchos son los sentidos compuestos. Es por
eso que creo que hay más de una forma de reacción a las emociones recibidas a
través de un órgano. El ojo recibe impresiones de forma, tamaño y color. Estas
clases de impresiones son recibidas cada una, si el niño es ayudado, debe ser
aislado.
Hay 3 clases de impresiones para el sentido del oído, ruidos, música y la voz
humana. Estas tres clases deben ser aisladas en algún tipo de aparato (ya sea
algún mecanismo o instrumento) el cual le permita al niño clarificarlos e
identificarlos durante este período de “construcción de impresiones”. La piel
también recibe diferentes impresiones: el sentido del tacto se extiende a lo largo
de todo el cuerpo. De hecho, hay ciertas partes que son más sensibles que otras:
los labios, las yemas de los dedos y la parte central de la frente. ¿Por qué es tan
sensible, o más perceptible, en estos lugares? Hay personas que en la obscuridad
pueden sentir la pared a través de la sensibilidad de su frente, antes de pegar
contra la pared.
Esta es una defensa necesaria de una forma de vida primitiva. Algunas personas
poseen esta sensibilidad. La sensibilidad en las yemas de los dedos en
esencialmente importante para los niños.
Otras impresiones también son recibidas a través de la piel. Si un objeto es
colocado sobre una mano abierta, no es la superficie de la mano solamente la que
recibe la impresión, la presión del peso del objeto se siente también, si es muy
fuerte empieza incluso a causar molestia o hasta dolor. La inteligencia recibe la
impresión. Esta sensación de presión ha sido aislada por los psicólogos y la han
llamado sentido barométrico (baros- freck-weight)
Otro sentido que nos permite medir la temperatura de un objeto en relación con la
temperatura del nuestro cuerpo es el llamado “sentido térmico”
Siguiendo el método preciso damos al niño la posibilidad de aislar estas diferentes
impresiones, así él es capaz de mirar y buscar en el ambiente con su inteligencia.
Le has provisto de una llave para sus observaciones. El niño no es más una
víctima de impresiones recibidas del ambiente desordenadamente, una persona
que recibe impresiones en el sub-consciente desde donde rara vez se alcanza la
superficie del consciente. Su inteligencia permanece limitada, potencial pero no
activa.
Con la llave, su inteligencia puede desarrollar el potencial que lo empodera.
Cuando das un paseo, ves toda suerte de cosas. Recibes una impresión general,
sea de placer, flores, el amanecer, o el canto de los pájaros. ¿Cuántos de ustedes
reciben más que estas impresiones? ¿Quién ve a detalle la forma de las flores y
hojas u otros muchos detalles significativos? ¿Sólo puedes ver con tus ojos o con
tu inteligencia también?
A menos que tengas la llave, sólo tienes impresiones sensoriales generales.
Mediante esta ayuda inteligente a los sentidos, tienen una llave para explorar el
ambiente y así entender todo lo que le rodea, todo el entorno.
La Dr. Montessori proporciona una llave para el “mundo sensorial” por medio del
desarrollo de la inteligencia.
Otro medio de exploración es el sentido muscular. Es común que no le prestemos
atención, pero sin él no podríamos vivir. Cada movimiento es registrado en nuestra
mente subconsciente. No alcanza el pensamiento consciente. No sabes qué
músculos has usado, pero tienes una memoria subconsciente de movimientos. Es
por eso que puedes caminar o correr. No tienes que pensar cuánto doblarás las
rodillas. Puedo alcanzar un bote guardado en una repisa superior, sin mirarlo. Lo
puedo hacer con los ojos cerrados. Sé qué tan lejos estirar mi brazo para
alcanzarlo.
Sin este sistema muscular no podría hacer nada, es la memoria muscular la que
regula cada día de nuestra vida. En la niñez organiza la mente y la ayuda al
desarrollo. Es más afectivo para la formación mental del niño, más aun que los
sentidos de la vista u oído, en su momento particular. Es por eso que los niños
siempre están en movimiento y tocándolo todo.
Hay otro sentido compuesto. Cuando tomamos una botella con la mano, recibo
una sensación o impresión del sistema muscular, que me dice que tan gruesa es
la botella. Por el sentido del tacto como se siente la superficie de esta. El sentido
muscular me indica que tan grande es e incluso la forma que tiene. Estos
movimientos son los que me señalan la forma de la botella. Mi sentido térmico me
indica la temperatura de esta, que tan caliente o fría está. Por medio de todos
estos sentidos tengo una idea clara de la botella (información del objeto en
cuestión). La habilidad que me indica la forma y figura, consistencia y temperatura
se llama “estereonóstico” (estéreo- forma y gnóstico- conocimiento); que no es un
sentido, sino una asociación de diversos modos de sensibilidad elemental que
provienen de la sensibilidad superficial y de la sensibilidad profunda.
Hay dos sentidos más que parecieran no tener nada que ver con el desarrollo de
la inteligencia, pero son tremendamente importantes para la función armónica de
nuestro entorno: los sentidos del gusto y del olfato. La naturaleza es sumamente
generosa con los seres humanos, si fueras incapaz de sentir hambre, nunca
comerías. ¿Para qué usamos estos sentidos del gusto y olfato? Nos permite
anticipar algo bueno. Entonces lo obtienes y te percatas cuan placentero es. Es
una invitación continua a disfrutar la vida, que te han provisto de todo medio
posible para disfrutarla.
Dulce, agrio, salado y amargo, todo lo demás es una contribución de nuestra nariz
(olfato). No puedes degustar algo si tienes un resfriado. Si cubres o tapas tu nariz
simplemente no funciona el sentido del gusto.
Cada ser tiene un plan físico, el cual es guiado por la nariz (olfato. El guía el
mundo. El olfato nos conduce al mundo.
América, podríamos decir, que fue descubierta por este sentido del olfato: el
hombre buscaba una ruta más rápida para llegar a la India y sus especias; y no es
un asunto que solo concierne a los humanos, el mundo entero funciona mediante
el olfato. Mientras un humano descarta una pieza de carne en estado de
putrefacción, un cuervo la comería gustoso. La carne por sí sola no es indeseable,
solo es indeseable para nosotros su olor, asegurándonos de proteger nuestra
salud y bienestar; sin embargo, para el cuervo es placentera. Hay un plan físico en
cada diferente ser vivo que le indica certidumbre de lo que es bueno o malo para
ellos. ¡En mi niñez de mi cuenta que cualquier cosa que era demasiado amarga
para comerla, era considerada con verdadero placer por un burro! Cada ser vivo
mediante su alimentación tiene una función en el mundo. La alimentación es
guiada por el sentido del olfato. Los psicólogos dicen que los sentidos del gusto y
olfato son sentidos vegetativos y no son importantes para el desarrollo de la
inteligencia. Pero para el niño, son sumamente importantes, ¡de verdadera
relevancia!
Tengo unos amigos italianos que radican en Nueva York. Ahora se han vuelto a un
estilo de vida acomodado. Pero venimos del mismo pequeño pueblo de Italia.
Cuando era niño, en edad escolar, ellos siempre me cocinaban un latillo de pasta,
con aceite de oliva y ajo. Cuando nos encontramos en los Estados Unidos de
Norte América, después de un período de cinco años sin vernos, me hicieron una
espléndida invitación a un restaurante. Al principio, nos sentíamos un poco
apenados o ajenos, pero gradualmente alcanzamos el niel de camaradería que
teníamos de niños. Volvimos juntos a casa, cuando pasamos por el pasillo con
aroma a ajo sofrito en aceite, eso realmente tocó nuestros corazones. Era el
subconsciente que modificó nuestra actitud de la vida y el momento. El niño
construye esta actitud a la vida, y sí, ésta lo guía el resto de la misma.
Habiendo entendido esta ligera explicación de la importancia de los sentidos
entenderán su particular importancia durante el período formativo de la vida de
una persona adulta.
Nosotros no trabajamos para que el niño pueda descubrir los estímulos en el
ambiente. El ya los conoce. Estos atraparán su consciencia desde el principio.
Necesitamos proporcionarle una llave al recién llegado; quizá piense que
realmente la necesita. Pero lo cierto del caso es que uno solamente tiene
experiencias con algo que ya conoce. Puedes experimentar con el interés si ya
has alcanzado cierto punto. Cuando tu subconsciente es saturado de interés, pero
el consciente no está directamente enfocado de tal modo que alcance el interés.
Supongamos que hablo en tibetano. No entenderían nada, pero escucharían el
sonido. No tendría sentido para ustedes, pero su consciente estaría en alerta. Es
el conocimiento del lenguaje lo que lo hace significativo o con sentido a su
consciente. Es la experiencia que ya tienen lo que le da dicho sentido.
A través de las experiencias de los primeros años de vida el subconsciente está
impregnado de impresiones. Si después es posible que sean captados por el
consciente, los resultados serán maravillosos. Así como los jeroglíficos
encontrados en el desierto no significan nada para ti porque no tienes el
conocimiento del lenguaje, por mucho que los mires y los mires, no te dirán nada.
Las experiencias previas que has tenido, aún cuando no hayan sido acompañadas
por la consciencia, te dan un almacén de conocimientos. Entonces, es necesario
tener la llave para abrirlo y obtener ese conocimiento previo. Todos los niños han
visto diferentes tipos de hojas, pero cuando tú les das la clasificación, realmente
las notan. Es por esto que es importante aislar los conocimientos. Si les muestro
una hoja ovalada, notarán todas las hojas ovaladas que encuentren en su
ambiente. Después de mostrarles una hoja dentada, será imposible dar un paseo
sin que los niños noten todos los tipos y pequeñas variaciones de hojas que hay,
seguramente se detendrán para observarlas. El niño ha visto todas estas hojas
muchas veces antes pero no había notado los detalles. Le hemos dado la llave
que abre la consciencia.
El bebé recién nacido no ha recibido ninguna de estas impresiones, es inútil darle
el método de clasificación y observación. Se les da a los niños más grandes como
una llave para que abran su medio ambiente. El medio ambiente se enriquece
para los niños. Se hacen más inteligentes a través de él, no están sólo durmiendo.
Notan todo tipo de cosas que no habían visto antes. Se hacen exploradores
conscientes en lugar de víctimas del ambiente. Mientras más impresiones reciban,
más posibilidades de orden y clasificación tendrán para cimentar su inteligencia.
Serán ayudados por una metodología que estructurará su inteligencia. Estarán
siguiendo las leyes de la naturaleza.
Hay una técnica psicológica de observación. Si estás atento, reconocerás que hay
una forma de atraer la atención de la gente –y es casi siempre el plan psicológico
de los seres humanos; por ejemplo: pon un par de gemelos frente a un burro, al
máximo, moverá las orejas, será indiferente ante el momento. Pero, si pones a los
gemelos frente a una persona, se sentirá atraído, llamarás su atención. Por lo
tanto, otra cosa que llama la atención son los contrastes.
Las identidades son importantes: las cosas son iguales o diferentes. Las
diferencias son medidas que marcan los niveles de semejanza, lo menos
semejante es un contraste. Los contrastes son los que más llaman la atención. Si
tengo el más grande y el más pequeño de una serie, las diferencias serán fáciles
de ver entre los demás de la serie. Mientras más son parecidas las cosas, mayor
será la dificultar de encontrar la diferencia entre uno y otro.
Las partes más atractivas son las identidades y los contrastes. Para obtener un
refinamiento de la observación debe haber una guía que permita al individuo ser
capaz de discriminar las diferencias, grandes o pequeñas. Mientras menos
diferencias haya para distinguir, la percepción y la atención serán mayores.
La inteligencia se forma por experiencias dadas a través de los sentidos. Alcanzas
el refinamiento de la percepción a través de la experiencia. Después de un mes o
dos, noté que tonto había sido. Ahora puedo notar que los gemelos son
completamente diferentes. Esto nos pasa a los europeos cuando vemos a los
chinos. Sus ojos nos parecen iguales, todos se ven iguales, pero si continuamos
teniendo experiencias con diferentes chinos, podremos reconocer las diferencias
entre ellos.

Traducción cortesía de Keren Buenrostro


MARIO M. MONTESSORI SEPTIEMBRE 24, 1946
LECCIÓN 8

En nuestra última conferencia, he ilustrado algunos de los medios por los cuales
podemos ayudar a los niños a adquirir impresiones claras del medio ambiente.
Hablé del método psicológico de observación. Las identidades humanas son más
visibles y sorprendentemente diferentes, es decir, los gemelos atraen la atención.
Los contrastes también llaman la atención. Así que empezamos con los que son
extremos, a continuación, una vez que la atención, la concentración y el interés
han sido despertados por la experiencia, podemos, a través de gradaciones, llegar
a un refinamiento de observación y un refinamiento de la inteligencia.
Esta gradación permite a la persona apreciar pequeñas diferencias. Si se mide la
gradación, comparando si las distancias entre cada objeto son iguales o difieren,
la observación se convierte metódica, científica, clara y constructiva para la mente
y la claridad de la percepción es mayor.
Otro factor importante es el aislamiento del sentido. Hemos hablado del
aislamiento de la calidad; aislamiento del sentido es un factor diferente. Si se aísla
un sentido, parece ser mayor en su poder de percepción. La posibilidad de la
percepción es más profunda. Es la concentración de la conciencia en ese sentido.
El consciente recibe continuamente impresiones a través de todas las puertas del
sentido. Si mientras está escuchando a alguien hablar de repente ve algo
interesante su atención se dispersa. El oído oye pero la conciencia no puede
recibir las impresiones. En un concierto se bajan las luces, a las personas se les
pide estar en silencio y nadie puede entrar en la sala para no perturbar la atención.
Usted encontrará que si cierra los ojos puede ser capaz de escuchar el sonido de
una voz indistinta con mayor facilidad.
Tomemos nota de todos estos hechos con el fin de ayudar a los niños a que
reciban impresiones claras. Si falla un sentido, los otros parecen afinarse. La
educación de los ciegos se lleva a cabo a través del uso de la estereognosia –el
conocimiento a través del tacto. Tenemos grandes potencialidades que nos ha
dado la naturaleza y que no están completamente desarrolladas, pero se
desarrollan lo suficiente para vivir y comprender el mundo que los rodea. Si uno
carece de algún sentido, el interés del individuo se centra en algunos de los
sentidos restantes, y a través de ellos el individuo puede alcanzar casi el mismo
grado de percepción: a veces hasta puede superarlo.
Un amigo mío sordo y yo caminamos sobre las colinas que estaban por encima de
nuestra casa que todavía estaba incompleta. Los carpinteros estaban todavía en
el trabajo. Llevábamos unos prismáticos potentes para poder mirar hacia abajo,
hacia la casa. Mi amigo veía a través de ellos, pero al hacerlo se molesto mucho al
ver a los carpinteros y me dijo que los carpinteros habían ofendido a su madre. El
sabía lo que decían, porque a esa distancia podía leer los labios de los carpinteros
y así ¡comprender la conversación!
Así que estamos de acuerdo en que el aislamiento de los sentidos es una gran
ayuda para la claridad de la percepción de las impresiones.
Si queremos dar ayuda a los niños hay que darles algo que ellos no puedan
conseguir por sí mismos. La teoría del color, de las tres dimensiones o la
relatividad de calor, por ejemplo, no se podrían explicar en palabras. Pero se
puede dar a esas experiencias a través de las cuales, la mente subconsciente va a
impregnarse con estos hechos. Ellos llegarán a conocer de manera consciente, es
decir, que van a apreciar las diferencias, por medio de sus propias experiencias.
Ellos pueden aprender por sí mismos algo que no pudimos transmitir con palabras.
Le damos una abstracción por el uso del material. Llamamos al aparato de una
abstracción materializada. Pasaré a la ayuda práctica que podemos dar. A través
de los ojos se reciben las impresiones de color, tamaño y forma:
Cilindros: dan una impresión de la forma. Los cuerpos pueden ser diferentes en 3
dimensiones. Si hay dos iguales en una serie de objetos las dimensiones que no
son iguales en todos ellos se destacan. Se encuentra aislada.
Los conjuntos de cilindros difieren en: 1 dimensión; 2 dimensiones; 3 dimensiones.
Un conjunto puede diferir en 3 dimensiones, pero la diferencia no está en armonía.
O, si las diferencias son tales que aumentan entre sí: es una diferencia armoniosa.
Sería muy difícil hacer que los niños comprendan si hablo con ellos sobre esto que
les platico a ustedes. Los niños no estarían interesados en tal explicación. Pero a
los 2 ½ años están ansiosos de experiencias motoras, están incluso demasiado
ansiosos a los 1 ½ ó 2 años.
Tienes que introducir las gradaciones. Reconocer identidades es fácil y atractivo.
La identidad se muestra por la correspondencia entre el tamaño de las cavidades
y los cilindros que encajan en ellas. Se puede reconocer la identidad de los dos
extremos más fácilmente. Las identidades entre contrastes son las más fáciles de
percibir. Si tienes que percibir identidades entre los objetos que son casi iguales
se requiere de un gran refinamiento del ojo. Hay diferencia similar entre la primera
y segunda como entre la segunda y la tercera. El diámetro de los cilindros es de 1
cm.; 1 ½ cm.; 2 cm. por lo que la unidad de la medida de la gradación es ½ cm.
Es una gradación organizada. Se trata de una gradación metódica, medida
ordenada.
Si tiene tres conjuntos de objetos que difieren en 1, 2 o 3 dimensiones se
encuentra que los que varían en 3 dimensiones tienen mayores diferencias y, por
tanto, las diferencias son más fáciles de percibir. Por lo que lógicamente debe
presentar primero el conjunto donde los cilindros están variando en tres
dimensiones. Sin embargo, ¡no lo hacen por motivos psicológicos!, si le damos a
un niño el conjunto variando en 3 dimensiones veremos que él puede poner un
cilindro en la cavidad equivocada y será incapaz de sacarlo de nuevo.
Esta dificultad de manipulación conduce a inclinar el prisma al revés o al golpearlo,
etc., para retirar el cilindro. A través de esta actividad se perderá el interés
constructivo; por esta razón debemos de dar al niño en primer lugar el conjunto
donde la diferencia es de 2 dimensiones. La altura es la misma en todas partes,
por lo que la pequeña perilla siempre es fácil de sostener, incluso si están fuera de
lugar los cilindros, por lo tanto, puede corregirse a sí mismo.
La atención se lleva a cabo a través de las diferencias. El movimiento da la
atención al ejercicio: con los instrumentos exactos en la mente del niño, él se ve
obligado a atender. Aunque el control de error está en el aparato de la mente del
niño, se lleva a cabo por el material. Si se realiza de forma incorrecta hay un
cilindro que quedará sin una cavidad adecuada y entonces el niño se ve obligado
a preguntarse por qué se quedó un cilindro afuera ¿por qué? A pesar de que no
razona exactamente como el adulto, se da cuenta inconscientemente a través de
sus acciones. Así que por consecuencia, su inteligencia, así como su ojo,
comienza a percibir lo que está sucediendo.
El Guía no puede dar ninguna explicación.
El guía saca todos los cilindros del bloque donde las diferencias están en dos
dimensiones. Quita de la mesa todo lo demás antes de presentar cualquier pieza
del material. Esto conduce al orden y centra la atención en lo que se está
haciendo.
Saca los cilindros uno por uno. Usa los 2 primeros dedos y el pulgar. Cambia la
posición en la que estaban y mézclalos por completo. Comienza su sustitución.
Toma el más grande. Busca el segundo más grande. Compara los tamaños, toma
el que esté más a la vista.
El niño muy probablemente querrá ayudar - pero no, debe permitir que el guía
termine, pues esto aumentará el interés. Luego, cuando lo empiece a realizar, es
importante corregir la posición de los dedos si no toma el cilindro de manera
correcta.
A continuación, dejar que el niño repita el ejercicio, veinte o treinta veces, he
escuchado que, en algunos casos, lo repiten 200 veces. Puede ser este día, la
siguiente semana, el siguiente mes. Tan sólo tiene 2 años de edad. ¡Se puede dar
todo el tiempo!
Se repite la observación y se repite la realización exacta de los cilindros. La
diferencia se absorbe en su subconsciente.
Una vez que ha adquirido la capacidad de observación y la discriminación se
puede permitir que él tome los otros conjuntos. Puede ser cualquiera de los
conjuntos. Que lo haga en el mismo día, es muy probable que tenga interés en
otra lección, pues él habrá visto a otros niños usando ese material. En cualquier
caso, sólo tendrá que darle el bloque, él sabe cómo llevar a cabo el proceso de las
perillas y el procedimiento de sacar, la mezcla y la sustitución.
No importa en qué orden los tenga. A continuación, dar dos juegos, después tres.
Este material se utiliza como una prueba psicológica para los adultos para afirmar
las diferencias individuales. Algunos se presentan nerviosos, otros metódicos
cuando se le pregunta cómo van a hacerlo. Algunos reemplazan el cilindro más
grande y a continuación los más pequeños, otros trabajan sin orden ni estructura.
Sin embargo, para los niños no es una prueba de inteligencia.
Objetivo directo - la discriminación visual de tamaño
Objetivo indirecto - Preparación para la escritura, la utilización de un lápiz.
El control de error - En el material en sí (si pudiesen cometer un error el bloque se
los indica)
Edad - 2 ½ - 3 ½ años. No es que el niño no pueda hacerlo a los 5 o 6 años de
edad. Es un hecho que tiene un valor constructivo que se pierde más tarde.
Torre Rosa, Escalera Café, Barras Rojas.
El objetivo de estos materiales es el mismo: ayudar a la discriminación visual de
tamaño y dimensión.
Los juegos de materiales son de color - hecho de manera diferente y atractiva pero
las diferencias entre ellos son la parte importante.
Barras Rojas – difieren en 1 dimensión
Escalera café - difieren en 2 dimensiones
Torre Rosa - difieren en 3 dimensiones
No importa qué pieza del material se presente primero: pero hay un detalle de
exactitud que debe ser exigida a los niños.
Si los niños pueden discriminar entre las diferencias en los cilindros, diferencias de
½ cm. Las diferencias de 10 cm de las barras deben ser muy visibles. No se tiene
que retrasar la presentación de las Barras Rojas hasta que haya terminado todos
los cilindros. Él lo puede recibir de forma espontánea después de haber visto
cómo las utilizan otros niños, pero el guía debe insistir en que ningún niño se lleve
el material desde el tapete del compañero que lo acaba de utilizar a su tapete; el
material siempre debe ser acomodado por el niño que lo utiliza y después, puede
ser tomado de la repisa por el siguiente niño.
Los niños después de que se normalizan, se vuelven obedientes y aceptan lo que
le dice el adulto. Si los niños no tuviesen esta tendencia natural a aceptar lo que
se les propone, no serían capaces de crecer. Ellos lo aceptan, ellos los llaman
Barras Rojas sólo porque nosotros así lo hacemos, ¡porque en realidad, el material
podría ser llamado de otra forma! Si no aceptan lo que dice, son rebeldes, y es
porque están en guerra con la humanidad adulta.
Por eso decimos que no se dé este material hasta que se normalicen con los
ejercicios de la vida práctica. La normalización debe ser lo primero: los ejercicios,
de la vida práctica tienen el objetivo de llevar la mente de nuevo a la normalidad.
Barras Rojas
Dáselas a los niños. Que haga uso de ellas en el suelo –la mesa es demasiado
pequeña. Colócalas en una alfombra de color contrastante, no trates que sea una
armonización artística entre los colores: las barras deben destacarse. Mezcla
todas las varas.
Alguien hace unos 30 años demostró que las barras se presentan con una mano
en cada extremo. Pero no lo hagas. Ten cuidado de cómo manejas este material
ya que te darás cuenta de que los niños, simplemente porque te admiran, imitarán
cualquiera de tus movimientos. Es un signo de admiración. Comenzar con
cualquiera de las dos barras más larga o más corta. Con los niños deficientes o
muy débiles toma solamente 3 o 4 de las barras que contrasten en gran manera,
los dos extremos y dos intermedios. Cuando los hayan dominado, aumenta los
números.
Es más difícil para los niños manipular el material si se toma la barra más corta
primero y al final tomar la más larga. Se pone en un lado. Se elige la siguiente más
larga, se coloca al lado de la primera. Ver por ende que las barras están al mismo
nivel, de ese modo sus diferencias se destacan claramente. Ver que dos barras
realmente se encuentran cara a cara. Pasar sus dedos a lo largo de la última
presionándolos juntos. Tomar la siguiente barra más larga, etc., cada vez que se
lleve a cabo este movimiento de correr los dedos desde la parte superior a la parte
inferior de la barra se obtiene una impresión muscular de la longitud de cada
barra. Este sentido muscular es muy importante en los niños. Si comete un error
no se hace nada al respecto porque seguramente él será capaz de ver la
diferencia.
Si el niño está distraído, se puede llamar su atención sobre el error a través de su
sentido motor. Deja que toque alrededor de los extremos de las barras; el error se
muestra de este modo.
El material proporciona una oportunidad para el movimiento, acompañado por la
observación inteligente.
Escalera Café - mezclar los prismas
La exactitud en la colocación de los prismas es necesaria para mayor claridad y
por otra razón que explicaré más adelante. Recoger el prisma mayor con una
mano, luego tomar el siguiente -colocar al costado del otro, haciendo hincapié en
el hecho de que los prismas deben ser puestos al mismo nivel, prestar atención al
movimiento enfatizando; tu interés, la seriedad y la atención es la que le hace
darse cuenta de que es importante. La diferencia entre los prismas es en dos
dimensiones - de modo que a través de su mano recibe la impresión del grosor del
material.
Objetivo directo - la discriminación visual de dimensión.
Objetivo indirecto - la educación muscular de agarre. Preparación de la mente
matemática.
Puede haber prismas que el niño no puede agarrar con una mano, pero hay que
mostrar cómo hacerlo con una sola mano; aunque puede utilizar dos.
El control de error = La falta de armonía en el conjunto de los prismas.
Si se comete un error, ¿qué es lo que se puede hacer? Si él ha entendido lo que
tiene que hacer esto significa que no ha visto la diferencia. A menudo, los niños
cometen errores entre los dos prismas más grandes. El contraste entre los 2 más
grandes, por ejemplo, 4:1 y 100:81. Deja que lo intente de nuevo, con la
experiencia del movimiento refinado, la percepción va siendo adquirida.
No les digas que están equivocados, sólo les hace sentir menos en sus
capacidades. Con los niños atentos se puede subir las escaleras con los dedos.
Los pasos siempre se van agrupando.
Torre Rosa
¿Ves este pequeño cubo? - obsérvalo porque es una gran tentación para los
niños y con mucha frecuencia lo hacen desaparecer.
Toma el gran cubo con una mano. La diferencia entre los cubos está en tres
dimensiones. Cuando se toma el cubo siguiente enfatizar un punto de exactitud en
la colocación de los cubos: de lo contrario los niños no repiten el ejercicio con la
frecuencia que debería.
Sujetar el cubo desde arriba - mantener el codo lejos del cuerpo y colocar el cubo
exactamente en el centro del cubo anterior. Colocar no ajustar. El niño puede
cometer un error. ¡No se espera que se conviertan perfectos en un día!
Al colocar los cubos de manera exacta, te das cuenta de que la mano comienza a
temblar, sobre todo al colocar los más pequeños. Hay poco peso para guiarlo. Es
sólo su voluntad y su control muscular lo que le ayuda.
Objetivo directo - la discriminación visual
Objetivo indirecto - Educación de los músculos involuntarios. Preparación de la
mano y la mente matemática.
Edad - 2 ½ - 3 años.
Control de error – El ojo del niño que ve armonía en la construcción.
Después de que el niño ha construido la torre, usualmente la vuelve a deshacer y
empieza de nuevo.
Preparación Indirecta - ¿A qué nos referimos exactamente con este término?
Hablé de esto en otra ocasión cuando dije que el órgano de la inteligencia y la
inteligencia misma se preparan por la naturaleza y el crecimiento, para el siguiente
paso. Este crecimiento se hace por medios indirectos.
En cada acción hay un motivo de interés. A través de ello el órgano se prepara
para algo en el futuro. Es el interés consciente del momento que prepara la
inteligencia y el órgano para el desarrollo futuro, aunque el individuo no se da
cuenta de ello.
Supongamos que el niño de 1½ años quiere llevar un recipiente de agua de una
habitación a otra. Su interés inmediato (llevarlo a cabo algo muy difícil) es lo que le
permite al niño adquirir coordinación en sus músculos, que es lo que se necesita
para este movimiento. Esta misma coordinación será usada para otros
movimientos que la inteligencia puede demandarle en una edad más adelante.
El interés consciente de querer llevar el recipiente prepara el órgano que la
inteligencia le demandara más adelante. Esta preparación indirecta toma ventaja
del interés en esta temprana edad que lo prepara para la coordinación. Estos
ejercicios de preparación serán un trabajo tedioso si se hacen de forma consciente
por la necesidad de cumplir el desarrollo de intereses necesarios. Sostener la
perilla de los cilindros con los primeros dos dedos y el pulgar es la preparación
para la escritura, en coordinación con la mano. A una edad más avanzada, la
inteligencia del niño le demandará que escriba; esta necesidad se verá
obstaculizada si la mano no está preparada. La falta de preparación será una
obstrucción a la inteligencia, entonces el interés por la expresión intelectual se
repele y muere. La naturaleza prepara la inteligencia y los órganos que llevarán a
cabo sus movimientos desde el subconsciente.
La Mente Matemática es la mente que está especialmente interesada en las
matemáticas. En lugar de encontrar las matemáticas tontas y absurdas las
encuentra interesante y absorbentes. Es un hecho que la mayoría de los niños en
nuestras escuelas Montessori pueden alcanzar una plenitud de entusiasmo al
hacer matemáticas. Es la preparación de sus mentes que les permite conducir
este placer. En la escuela normal se encuentra que el 99% de los estudiantes
eligen temas literarios si se les da una elección entre esos y las matemáticas.
Así que se dice que la persona tiene una mente literaria cuando en realidad la
base de cualquier mente humana es la de una mente matemática.
El subconsciente entra en esto, porque puede llegar a interesarse en cualquier
cosa que usted ya sabe subconscientemente: no pueden interesarse en algo que
es absolutamente nuevo para usted. Si has tenido una experiencia anterior y luego
se te da una guía para hacer una realización consciente de lo que ya está en el
subconsciente, podrás comprender de lo que se te habla. Es muy difícil dar una
explicación de algo que nunca ha sido visto u oído antes. Las palabras y los
objetos asociados con ellos están ausentes del subconsciente. En la vida diaria no
hablamos de matemáticas –faltan experiencias matemáticas. Para adquirir una
mente matemática debe de haber experiencias exactas. La observación de las
relaciones exactas debe de ser almacenada en el subconsciente. Entonces
cuando el consciente es atraído a estas cosas se despierta un interés.
Las barras rojas oscilan entre 10 cm. y 1 metro: están en progresión lineal.
La progresión de la escalera café es: 4 prismas del primero al segundo, es decir 22
En la Torre Rosa: 8 cubos del primero al segundo, es decir 23
Esto no se le dice a los niños, pero lo experimentan con el movimiento de la vista y
el sentido muscular. El subconsciente almacena estas diferencias en las
observaciones. Después ellos escucharan:
1 gramo de agua de 4ºC = 1 cm3 de agua
1 litro de agua a 4ºC = 1 dm3 de agua
1 litro de agua a 4ºC = 1000 gramos
Los niños han visto el cubo en estas medidas. Solo es necesario llamar al
consciente a los hechos que ya posee.
El secreto de la inteligencia es que no puedes dárselo directo al consciente. Debes
primero dárselo al subconsciente.
Si el subconsciente ha adquirido experiencia, la inteligencia la aceptara más
adelante. Si el motor del automóvil (suponiendo que haya sido recién inventado)
fuera explicado, la gente estaría inmediatamente lista para entender porque
funciona, aunque la explicación es nueva, todo el mundo sabe lo que es un
cilindro, un pistón y lo que una chispa y explosión significa, así como el
movimiento de rotación. Pero si uno fuera a explicar los mismos hechos a la gente
de la selva que no tenían experiencia previa de cualquiera de estas cosas, se
sentirían obligados a memorizar los hechos que les decimos, pero lo más probable
es que no mostrarían interés e incluso serian incapaces de recordarlos.
Lo consciente puede ser impuesto pero el subconsciente se reúsa a que esto
suceda, el consciente solo retiene lo que es incrustado en el subconsciente. Si a
través del consciente, tratas de imponer al subconsciente, lo más probable es que
se levante una barrera mental y esto sucede sin importar qué tan lógico o
elocuente seas y subsecuentemente no puedas ayudar. El subconsciente dice:
“No se me va a imponer”
Hay una fuerza vital en cada ser humano que siempre nos lleva a dar un mayor
esfuerzo para la realización de las potencialidades individuales. Nuestra tendencia
es llevarlas a cabo. La alegría y el interés llegan cuando podemos lograr las
potencialidades que están dentro de nosotros. Si no tuviéramos este deseo de
realizarlas nos volveríamos estáticos. Cuando el impulso vital se ve bloqueado te
revelas y te aburres. Toma el caso de un hombre cuyo trabajo es apretar nudos. A
él le parece aburrido porque se limitan sus potencialidades; luchará por reducir su
trabajo y deseará más dinero, a la altura de sus aspiraciones y felicidad. Si, por
algún medio, de repente viene a tomar consciencia de la existencia de un
instrumento que hiciera el trabajo más fácil, trabajaría día y noche para obtenerlo y
perfeccionarlo pues tal vez esto pudiera hacerlo más rico.
Los niños trabajan en algo difícil. Lógicamente, si pensamos en este hecho, nos
podría dar lástima todo el esfuerzo de tales personitas. Trabajan todo el tiempo y
no les dan dinero. Pero para el niño esto está bien, es parte de su vida. Si el niño
no tiene la posibilidad de realizar estas potencialidades a través del trabajo, es un
obstáculo a la vida si se lo evitamos, es un hecho que produciremos un ser tímido,
sumiso, animal en vez de un ser humano con una gran fuerza.

Traducción cortesía de María Elena Nodal.


MARÍA MONTESSORI SEPTIEMBRE 25, 1946
LECCIÓN 9

Vimos que con los ejercicios de vida práctica ayudamos al no a construir un orden
mental que dirija sus acciones y le dé una visión de lo que hará. Es un orden
mental que le permite dirigir al niño hacia la perfección del control de sus
movimientos. En estas experiencias le damos al niño la posibilidad de organizar
su mente por medio de la observación. A través de objetos que hemos visto en
partes, le ayudamos a organizar la construcción de su mente científicamente. La
observación se hace muy clara e interesante si seguimos un método psicológico
de presentación, por ejemplo, aislando los grados de factores, etc. Es
especialmente importante hacerlo durante los primeros años de vida del niño.
Como les dije ayer, existe una urgencia natural para desarrollar las potenciales
que hay. Pero si la ayuda es dada en medio de una confusión de modas de
construcción, entonces no habrá orden, no habrá conciencia.
Por lo tanto, debemos ofrecer la ayuda correcta los períodos constructivos. Si la
damos después, no habrá ese interés intenso. La misma experiencia no llegará de
manera luminosa, no será constructiva ni interesante.
Hemos visto la técnica especial que debemos seguir. Debemos separar los
sentidos, el de la vista, el del tacto, etc.
Hoy debemos considerar las impresiones de color. Les damos a los niños la teoría
del color: uno tiene que darse cuenta de lo que el color en realidad no existe:
muchos colores pueden ser vistos, pero en la obscuridad desaparecen. No
obstante cuando se apagan las luces se puede percibir la forma y la consistencia
de un objeto. El color es parte de la luz: es la parte de la luz que no es absorbida
por el objeto. En los carretes de colores debemos representar científicamente los
maravillosos grados de pureza del color. Empezamos por los colores primarios, si
mezclas otro color con rojo, pierde su pureza, o no se aprecia su esencia tan
claramente. Pierde la base y esto está determinado científicamente.
Las cajas de colores.
Hay 11 colores diferentes en el espectro pero en su examen algunos pueden ser
eliminados puesto que son mezclas de unos con otros. Hasta ahora se ha decidido
que hay tres distintos colores. En las teorías del color modernas los científicos han
observado y han dado sus razones acerca del hecho de de que son invisibles.
Unos hablan de la dimensión de las ondas de luz más que del color. Cuando
hablamos del color no es porque no seamos modernos ni científicos sino que
debemos darles a los niños una llave para que ellos aprecien sensorialmente con
sus ojos: les proporcionamos una guía de observación más que satisfacer su
poder de razonamiento.
Primera caja
Contiene los tres colores primarios: rojo, azul y amarillo. Podríamos decir “Estos
son los tres colores” y dejar que los niños los miren. Pero esta no es la percepción
sensorial que atrae al niño, pues debemos acompañarlo con el movimiento.
Debemos darle la posibilidad de una cierta cantidad de actividad que requiera de
un esfuerzo, un esfuerzo de atención, un esfuerzo de inteligencia. Así que
empezamos por darle estos tres pares de colores, por ejemplo dos tabletas de
cada color.
Para darle la oportunidad de la actividad y estimular su inteligencia ponemos las
tabletas de colores en un tapete de color neutro.
Tome una de las tabletas sin nombrarla. “Encuentra una que sea del mismo color
que esta”. El niño tomará la otra tableta. Pídele al niño que la tome del marco de
madera y las ponga en pareja.
Toma otra tableta, pregunta al niño si puede encontrar la que es igual. Pídele que
ponga este nuevo par en línea debajo del anterior pero de manera que los dos
colores estén separados.
Vuelve a mezclarlos. Ahora dile al niño: “Veamos si puedes hacerlo tú solo”. Este
es el primer ejercicio, los clores son los de mayor contraste existente en la
naturaleza, sin embargo, son muy fáciles de reconocer y por eso las tabletas con
fáciles de aparear: estamos apareando entre contrastes.
Edad: 2 ½ a 3 ½ años
Segunda caja
Colores intermedios: rojo, malva, azul, verde, amarillo y naranja. Hay más colores,
sin embargo, es más interesante mezclaros y sortearlos en parejas. Para tener
más claridad es importante que los colores sean claros y en el tono correcto, no
debemos elegir al azar.
Tercera caja
Ahora aumentaremos los colores que se mezclan en diferentes proporciones entre
el amarillo, rojo y azul, por ejemplo café, gris, rosa. Agreguemos el blanco que
sirve para hacer combinaciones de todos los colores y negro que es la negación
de todos ellos. Hay 11 pares. Para encontrar los pares debemos poner atención.
Es necesario estar atentos y observar las impresiones que nuestros ojos reciben
una y otra vez mientras miramos los colores hasta que permanecen en la
memoria. Es como golpear varias veces la cabeza de un clavo con el martillo.
Con las repetidas experiencias a través de los meses, estos colores se imprimen
en la mente del niño y se organizan de manera científicamente comprobada a
través del método de observación. Entonces estarán listos para tener acceso a
más tonalidades de color que demostrarán si sus ojos son capaces de percibir de
una manera más fina y aguda.
Cuarta caja
Hay nueve juegos de colores, con siete tonalidades en cada uno de ellos. Toma
primero las tonalidades del azul. La práctica es la única forma en la que podemos
ayudar a los niños: a través de esta, poco a poco, viendo y viendo. Toma la tableta
más obscura o la más clara del juego y pídele al niño que encuentre el color más
parecido a ese.
La gradación en el tono de los colores debe ser igual en las diferentes tabletas del
mismo color.
Mezcla y trabaja de la misma forma cada uno de los nueve juegos de colores de
manera separada hasta que pueda distinguir todos y cada uno de ellos, toda la
caja.
Toma dos juegos de colores y ponlos a la misma distancia uno del otro. Toma
cualquier color de uno de los juegos y ponlo abajo, recuerda el color y encuentra la
tableta similar entre las del juego. El niño desarrollará el sentido del color a tal
grado que lo recordará como si fuera una palabra.
Hay muchos juegos que se pueden hacer y son de gran interés para los niños. Si
sigues creando interés y lo sigues, encontrarás que irá en aumento, es una forma
de ver la construcción y el desarrollo de la inteligencia. Mira las flores que hay en
el jardín, enséñale al niño una tableta de colores y pídele que encuentre una flor
del mismo tono. El niño tiene un material que le permite medir y comparar a través
de la observación de su ambiente: “Mira, este tono es igual al de este objeto”
Control del error Está en el ojo del niño. Podemos guiarlos poco a poco para que
puedan apreciar las diferencias. Si el trabajo es constante y continuo se verán los
resultados.

Sonidos
Hay tres tipos de sonidos: los que salen de la voz humana, los sonidos musicales
y los ruidos. Tienes que tener claridad en tus experiencias si las impresiones no
están construidas o no han sido presentadas. La experiencia le dice a la
inteligencia lo que está pasando en el mundo.
Cilindros de sonidos
Hay dos juegos de cilindros, los azules y los rojos. Toma uno de los cilindros que
más contraste del juego azul. Pídele al niño que agite solamente un cilindro a la
vez y que encuentre el par entre los cilindros rojos. Es necesario que utilice la
misma mano para agitarlos con la misma fuerza que el primero.
Toma todos los cilindros, uno a uno y ve emparejándolos. Al final, cuando tengas
todos, ve graduándolo del más ruidoso al menos ruidoso. Escucha otra vez para
probar la graduación. Si el Guía ordena un juego, el niño puede ordenar el otro
mientras va comparándolo, esto servirá como control del error.
Campanas
Los dos juegos son idénticos, hay una octava en cada uno de ellos. Demuestra a
los niños como golpear una campana con la baqueta y detener la vibración con el
silenciador. El juego de campanas blancas tiene el nombre de las notas, son el
juego de control. Las campanas negras no tienen nombres. Toca una campana
negra y encuentra su pareja.
1. Toma tres pares
2. Agrega uno a uno los pares hasta completar el juego
3. Gradúa el conjunto de campanas

Traducción cortesía de Tita Llerandi


MARIO M. MONTESSORI SEPTIEMBRE 27, 1946
LECCIÓN 10

Juegos sensoriales
A los niños les gustan estos juegos. A través de acciones repetidas se llega a una
coordinación de movimientos, recordemos que el auto control de movimientos
lleva a una coordinación de la inteligencia. Para pegarle a una pelota, no sólo se
necesita la habilidad para ver la pelota, sino que es necesaria una coordinación
de movimientos para que esto sea posible. En la realidad de la inteligencia, no es
suficiente querer entender, uno debe tener la posibilidad del entendimiento. Esta
posibilidad es igual a aquella del movimiento, se obtiene a través del ejercicio
continuo. Si el ejercicio es analizado, la posibilidad de una buena coordinación
será mayor. El entrenamiento para el boxeo consiste en una variedad de
ejercicios, como saltar, pegarle a pelotas, etc. Parece que no tienen nada que ver
con el boxeo. Pero esos ejercicios guían hacia la perfección en cada una de sus
partes. Más adelante la coordinación vendrá por sí sola, llegará desde dentro.
La coordinación de la inteligencia llega naturalmente. En los niños como en la
mayoría de los animales hay un período de juego en el primer plano de desarrollo,
que sirve para coordinar movimientos y para desarrollar la inteligencia. Los gatitos
juegan con pelotas, ellos juegan guiados por su plan de vida. A través de este
juego organizan su inteligencia. Si yo aplaudo, todos saben que puedo hacerlo sin
ver mis manos. Pero si no tienes experiencia en esto no habrás desarrollado el
entendimiento de lo que se necesita para que suceda. Por lo tanto, existe la parte
del análisis sensorial que se materializa en diferentes ejercicios con materiales y
tenemos por otra parte los juegos.
El juego de escuchar
Pide al niño que cierre sus ojos o se coloque un antifaz; entonces, realiza una
serie de acciones. Esto fascina a los niños de 3 ½ a 4 años de edad, pídeles que
reconstruyan la acción a partir de lo que hayan escuchado. Diferentes juegos se
pueden realizar con todos los sentidos. Multiplica estos juegos. Agudizan la
atención de los sentidos y ayudan en el desarrollo de la inteligencia.
Sentidos del olfato y gusto
Existen dos juegos de ejercicios, uno para el gusto y otro para el olfato.
Para el olfato hay tres juegos de botellas o jarras colocadas en cajas de madera,
para el gusto sólo hay un juego.
Gusto. Cuatro jarras pequeñas contienen sabores amargo, dulce, ácido, salado.
Olfato. El juego A se compone de botellas con líquidos. El juego B son frascos
con sólidos divididos en: 1. Esencias – atractivas
2. Olores – desagradables
3. Productos de cocina
No pongas olores desagradables muy violentos.
Más allá del material, crea un ambiente exterior para los niños, como un jardín y
ambientes interiores donde coloques saquitos que contengan plantas y hierbas de
olor disecadas, propias de la temporada.
Ejercicios. Pares de contrastes, toma un par de olores agradables, uno de
desagradables. Las botellas o las cajas deben ser opacas para que no se vea su
contenido. Pon un pequeño círculo de color debajo de cada par. Este es el control.
Pide al niño que huela una botella, después que huela las otras dos, una a la vez
para descubrir cuál tiene el mismo olor que la primera. Pide al niño que lo haga
primero con sus ojos abiertos y después invítalo a hacerlo con los ojos cerrados,
pero asegúrate de que no esté atemorizado. Gradualmente aumenta el número de
frascos. Finalmente mezcla todos los de los tres grupos y permite que haga el
ejercicio completo.
Gusto. Con un gotero pon una gota en la lengua.
1. Pon una gota en diferentes partes de la lengua para experimentar en dónde
se registra con más fuerza el sabor.
2. Tapa la nariz para inhibir la respiración, prueba soluciones como extracto
de cebolla, hazles notar que no podrán saborearlas hasta que su nariz no
registre el olor.
Tacto
El sentido térmico 1. Juego de botellas de aluminio

2. Juego de materiales
El niño se enjuaga sus manos en agua a temperatura ambiente.
1. Las botellas de aluminio se llenan con agua a diferente temperatura, con
una diferencia de 10 grados entre una y otra: 0 – 10 – 20 – 30 – 37 – 50 –
60 – 70. Se ponen alineadas en una caja que las ayude a mantener la
temperatura. El par de botellas con agua a 37 grados está pintada de rosa.
Aparea las botellas con temperatura similar, comenzando con dos y hasta
que esté todo el juego. Gradúenlas. Existe la necesidad de regresar a tocar
la botella que tiene la temperatura de la sangre para que las manos vuelvan
a su estado de sensibilidad normal.
2. Juego de materiales: fieltro, piedra, vidrio, lija, piel, corcho. Cada uno da la
impresión de tener diferente temperatura, también se pueden emparejar. El
control del error está al mirar el objeto.
Sentido bárico. Sentido del peso.
Tres juegos de tablillas de madera blanca, café y negra. Cada juego contiene un
peso diferente con una diferencia de diez gramos. El ejercicio se realiza primero
con los ojos abiertos, después con los ojos cerrados. Coloque las tablillas en las
yemas de los dedos del niño, de ser posible sobre uno o dos dedos (mayor peso a
la vez)
Para notar la diferencia de peso, la mano se deberá mover hacia arriba y abajo
para que exista balance y se pueda sentir el peso de cada tablilla; conforme
avance en el ejercicio, se podrá hacer sin mover las manos para buscar el
balance.
1. Toma dos grupos de contraste y ponlos en las manos del niño, una blanca y
una negra. Las tablillas que son iguales se pondrán juntas. Realiza todo el
ejercicio con los ojos abiertos. Luego, con los ojos cerrados.
2. Toma dos juegos contrastantes, por ejemplo blanco y café
3. Toma otros dos juegos contrastantes, por ejemplo el negro y el café
4. Pon dos juegos de tablillas frente al niño, él las sorteará y buscará las que
son iguales.
5. Por último, realiza el ejercicio con todas las tablillas.
Sentido del tacto.
Sentir la superficie de papel, cada una con sensación diferente.
1. Papel lija y papel encerado
2. Franjas alternadas de papel rugoso y papel liso
3. Cinco franjas con diferente degradado de rugosidad
4. Cinco francas con diferente degradado de alisado
Para comenzar, el niño preparará las yemas de sus dedos lavando sus manos y
dando masaje mientras se secan.
Después, se muestra al niño como tocar con suavidad sin hacer presión
- Se realiza una vez, con mayor suavidad

- Se realiza otra vez, con los ojos cerrados

- Se invita al niño a realizar el ejercicio con mayor delicadeza


- Cuando se trabajan las tablillas con líneas degradadas, se empezará de
izquierda a derecha de arriba hacia abajo, por cada línea. Existe un
control muscular, que hace que la mano se mueva delicadamente de
arriba hacia abajo.
El objetivo directo es educar el sentido del tacto
El objetivo indirecto es la preparación para la escritura
Apropiado para niños de 2 ½ a 3 años

Traducción cortesía de Tita Llerandi


Lección 13

A través de la discriminación visual hemos estudiado la dimensión y el color. Ahora debemos


considerar la forma y la figura.

Presentamos las formas a los niños a través de las figuras geométricas. Hemos sido muy
criticados en esta cuestión por dos razones: 1) Se dice que la geometría es un tema muy
aburrido e inútil, que solo pone a prueba a los niños a quienes no les agrada. 2) Se dice que hay
tantas figuras hermosas en el mundo que deberíamos mostrar, en lugar de las que presentamos.
Existen otras críticas que caen en una u otra de estas dos categorías.

Ahora me gustaría señalar dos hechos:

1) El hombre está dotado de una mente matemática. Algunas personas dicen que no es cierto.
Bueno, basta mirar a tu alrededor, a todas las cosas que ha hecho el hombre, para darte
cuenta que este hecho es verdad. Las matemáticas son una conquista, una creación del
hombre. Si ves algo peculiar en el tipo de algún animal, dices que es algo característico de la
especie. Una característica de los peces es que viven en el agua, de los gusanos de seda
que hacen seda, es su naturaleza; de la misma manera, la naturaleza del hombre es hacer
matemáticas. Si algo es la naturaleza de cualquier tipo de vida, significa que es atraído por
ello y lo necesita para la vida, si no, no estaría ahí. Las creaciones del hombre son creaciones
matemáticas. Sin embargo, muy pocas personas dicen que les gusta la geometría u otros
tipos de matemáticas. Esto parece un hecho contradictorio. La geometría se enseñaba en
todas las escuelas secundarias pero ahora ya no es común.

El hombre tiene el tipo de mente abstracta y apila lo que ve, eso lo hace un ser diferente a los
demás (entre otras cosas).

Todas las formas son geométricas. En la vida, estamos rodeados por formas geométricas, no
solo en las creaciones del hombre. Mira al cielo y veras media esfera; mira los árboles, son
cilíndricos. Adonde miremos vemos formas compuestas hechas de líneas rectas, curvas y
ángulos. Mira las hojas que acabo de recoger. Son composiciones geométricas: esta es una
elipse, este (diente de león) tiene muchos ángulos. Todo el trabajo esta hecho de formas
geométricas. No es que el hombre haya creado algo nuevo, pero si ha hecho una abstracción de
lo que ve. No existe el color por si mismo. El rojo por sí solo no existe. El color rojo es una
abstracción del hombre. El mundo del hombre esta hecho de abstracciones, el camino del la
mente del hombre es extraer las cualidades de lo que el ve en la creación.

El hombre no hubiera creado nada sin las matemáticas o sin la geometría. No hubiera construido
si no hubiese sido capaz de hacer la extracción y luego apilarla. Todo lo que hace: muebles,
casas, etc. Muestran ciertas cualidades que han sido extraídas y apiladas para una nueva
construcción. El hombre tenia que ver ejemplos a su alrededor, sin ellos no hubiera podido crear
nada. Cuando el hombre se vio atrapado en la lluvia, se protegía bajo un árbol. Lo protegió un
tiempo, como una sombrilla. Entonces tuvo la idea de poderse llevar parte del árbol con él. Se
pude ver a hombres en ciertas partes del mundo, cargando una larga hoja de palmera, les da
cierta protección, pero hay huecos en donde la lluvia traspasa. El hombre pensó en llenar estos
huegos gradualmente, así se desarrollo la idea de una sombrilla.

Existen países en donde llueve y nieva mucho. El hombre al principio buscaba refugio tras los
arbustos. Después en donde no había arbustos pensó en hacer refugios con palos, para hacer
una pared contra el viento. Después pensó en rellenar los huecos con lodo y así hizo una pared.
Si esta pared no estaba derecha, se volaba con facilidad, así que aprendió hacer paredes
perpendiculares. Aprendió hacer paredes y un techo sobre ellas. Si el techo no estaba hecho
correctamente, colapsaba. Es así como los principios de la arquitectura evolucionaron
gradualmente. Los principios de la arquitectura evolucionaron del medio ambiente y de la
experiencia del hombre en el medio ambiente, por ejemplo las varas de bambú eran usadas para
detener los techos. Más tarde cuando el hombre aprendió a usar las piedras para detener el
techo. Se quedó con la idea de la forma del bambú, he hizo columnas con la piedra, redondas
como el bambú y curvas en las mismas crestas. De la misma manera su habilidad de construir lo
situó en el medioambiente. En el norte donde hay mucho hielo y nieve los techos son
puntiagudos como un abeto para que la nieve se resbale y caiga, así no los aplastará con su
peso. Los árboles dieron el ejemplo y el hombre siguió los mismos principios. En las regiones
calurosas las casas están construidas con techos planos.

La geometría es la abstracción de las formas que el hombre ve a su alrededor. Mira a tu


alrededor, verás formas geométricas a donde vayas. Donde sea que las manos del hombre
hayan pasado, han resultado figuras geométricas. Si los niños pequeños realmente encuentran
figuras geométricas tan fatigantes, tendrían que mantener sus ojos cerrados para poder
bloquearlas. No es la geometría lo que los fatiga, más bien es la forma en la que se la
mostramos. ¿Por qué debería de ser excluida de las escuelas, si podemos enseñarla de la forma
correcta? Tratamos de darles a los niños una orientación para la vida, y así como el mundo esta
hecho de formas geométricas, debemos darles una guía en esto también. Todas las formas son
geométricas. Debemos extraer formas geométricas y dárselas a los niños. Al hacerlo, les damos
una llave intelectual para la exploración del medio ambiente. Si le das oportunidad al niño de
hablar, si no piensas que el hablar va a agobiar su cerebro, si das la atracción del lenguaje,
también puedes darle una guía para que encuentre su camino en este laberinto de formas
geométricas y abstracciones matemáticas, ¡son el mundo del hombre!

No es la geometría en el sentido que lo entendemos en las escuelas ordinarias. El niño adquiere


conocimiento, el maneja círculos, triángulos, etc. El los toca, no le damos largas definiciones. Le
damos la experiencia y a través de ella el niño forma una mente geométrica. Su mente forma una
geometría compleja. Su subconsciente esta lleno de distinciones entre las figuras. Cada figura
tiene cierta cualidad la cual el niño adquiere subconscientemente. Nos referimos a la adquisición
subconsciente cuando se sabe algo por experiencia, sin darse cuenta de los hechos, para poder
expresar el conocimiento en palabras. Los niños desarrollar un sentido geométrico. Más tarde
aprenden que el mundo es el sentido que da razón a lo que de otra manera seria solo sonidos,
pero en realidad las palabras son abstracciones de ideas ya experimentadas. Si alguien hace un
ruido no te interesa por que subconscientemente no tiene ningún significado para ti.
Si el niño no tiene ninguna experiencia, no tiene acumulación de distinciones, así que más
adelante en su exploración la maestra habla de estas abstracciones geométricas, la maestra
tiene una adquisición pero el niño no, entonces ¿cómo podrá obtener las abstracciones de la
nada? Se dice que el niño esta interesado en las abstracciones. Esto es por que estás tratando
de forzar tus abstracciones en el niño, estás tratando de forzar las abstracciones de siglos en su
mente con palabras que no le hacen sentido por que no has dado experiencias, no ha sido
habilitado para hacer su propias abstracciones. El niño no ha podido desarrollar un sentido
geométrico, así que no significa nada para él. Si tienes un cuarto lleno de colores y apagas la luz,
no podré ver nada. Puedes describir las cosas del cuarto, puedes decirme que hay esto o
aquello, pero si realmente quieres que sepa lo que hay dentro, debes encender la luz. De la
misma manera, si dibujas un triangulo en el pizarrón y explicas que estas líneas no existen, que
es la forma que existe, los ojos del niño solo pueden ver las líneas y su mente deambula y es
entonces que se forma el hábito de estar distraído. La geometría es tan difícil por que la mente es
un desierto. Es como estar en la cima de una montaña en la obscuridad, esperando al amanecer
para poder ver el panorama. Tú sabes que el panorama está ahí y estás impaciente por verlo,
pero si estás esperando que con la llegada de la luz puedas juntar materiales para hacer árboles
artificiales, hojas y muchas montañas, desearías que la luz jamás llegara.

Dale al niño la experiencia primero y abstracciones después. Ayuda al niño a darse cuenta de
todas las cosas que pueden ser abstractas. Este material no está interesado en impartir
geometría, más bien en preparar una mente geométrica. Lo que está en la mira es el reconocer
las diferentes formas, una distinción visual de las formas.

Podemos proceder de la misma manera en la que lo hicimos para el resto de las discriminaciones
habituales.

1.-El aislamiento de ciertas cantidades.

2.- Emparejando entre contrastes.

3.- Gradaciones.

Material

Un gabinete con seis cajones. Cada cajón contiene ciertas figuras.

1. Cajón con seis triángulos –un triángulo de ángulo-recto, un triángulo de ángulo-obtuso, un


triangulo isósceles, un triángulo de ángulo-agudo, un triángulo escaleno y un triángulo
equilátero.

2. Cajón con seis rectángulos. 5cm x 10cm. 6cm x 10cm. 7cm x 10cm. 8cm x 10cm. 9cm x
10cm. 10cm x 10cm.
3. Cajón con contiene un rombo y paralelogramos.

4. Cajón con contiene seis círculos con estos diámetros, 5, 6, 7, 8, 9 y 10 cm.

5. Cajón con seis polígonos. (Figuras con más de cuatro lados) pentágono -5 lados, hexágono
-6 lados, heptágono -7 lados, octágono -8 lados, nonágono -9 lados, decágono -10 lados.

6. Cajón con la forma de una flor, un ovalo, un triángulo esférico, una elipse, un trapecio y un
trapecio de ángulo - recto.

Ejercicio:

Da las tres figuras más comunes, el cuadrado, el círculo y el triángulo equilátero en la charola de
demostración. Los otros tres espacios en la charola son de madera. La base de la charola es del
mismo color que las figuras, de modo que, cuando una figura es levantada, una figura similar
queda abajo. Saca cada recuadro y ponlo sobre el cuadro de madera. Esto es hacer
emparejamiento entre contrastes. El ejercicio es reconocer esos que se parecen y que encajan
en sus lugares dentro del marco. Cuando damos figuras irregulares como triángulos los niños
tienen cierta cantidad de dificultad al ponerlos en los lugares donde embonan. A menudo pueden
reconocer cual es cual sin tener que empotrarlos en su lugar y dirección correcta. Si le decimos al
niño que pase los dedos alrededor de las orillas de la figura y después alrededor de la cuenca,
esto es más fácil para él. Le mostramos al niño la técnica exacta de tocar bien alrededor de la
figura. La figura la mantiene en la mano izquierda y es tocada con los dos primeros dedos de la
mano derecha. El reconocimiento es más fácil y es una forma indirecta de preparación para la
escritura, por que los contornos están cerrados en la escritura y el niño adquiere el control de su
mano.

Sucesión del ejercicio:

Figuras contrastantes.

1.- Aumenta el número de figuras contrastantes (en el primer marco)

2.- Trabaja sin el marco de demostración.

3.- Gradualmente da mas figuras diferentes.

4.- Da gradaciones de figuras, todos los círculos, todos los triángulos, etc.

5.- Mezcla todas las figuras y deja que el niño las regrese todas al lugar que corresponde.
En este material todas las figuras deben estar inscritas en el mismo círculo. Todas han sido
inscritas en un circulo de 10cm. de diámetro. Si una de ellas cabe en las diferentes figuras dentro
del mismo círculo uno puede hacer comparaciones. Podemos ver como un decágono casi cabe
en el círculo mientras el pentágono deja largos espacios. El niño no esta hecho para hacer esto,
la experiencia se lo dice. Cuando el niño toca alrededor de las figuras, el va a necesitar pequeños
movimientos para ir alrededor del decágono y más largos para ir alrededor del pentágono.
Mientras más pequeños los lados de la figura más cerca estarán en el área del círculo.

No le decimos al niño la diferencia entre el triángulo de ángulo-recto y un triángulo de ángulo-


agudo, un triángulo obtuso en ángulo-recto, etc. Pero él puede sentir estas diferencias al tocar las
figuras.

El niño obtiene la experiencia a través del movimiento de las diferentes figuras. Estas diferencias
han sido encarnadas en el niño y permanecerán en él. La experiencia a través del movimiento
tiene impresión, no una explicación que se queda momentáneamente en su memoria. Si un niño
se cae pronto lo olvida, pero si se rompe la pierna al caer, entonces jamás lo olvidará. Las
impresiones deben ser repetidas una y otra vez, así el conocimiento inconsciente es adquirido.
Más tarde, cuando llega la conciencia no hay nada más emocionante que tener el conocimiento
inconsciente revelado. El interés es el motivo que nos lleva a través del proceso y hace todo
emocionante. Si manejamos a través de un desierto es interesante pero si tenemos que caminar
pesadamente cada paso es aburrido y terrible. El interés solo puede ser despertado por lo que ya
se conoce en el subconsciente.

Tarjetas:

Damos tarjetas con las figuras geométricas impresas. Esto es una abstracción. El niño busca el
recuadro que corresponde a la figura de las tarjetas. Pone la figura de madera exactamente
encima y después toca alrededor de la figura de nuevo.

1. Damos las tarjetas con las figuras en un solo color.

2. Damos las tarjetas con la figura delineada en trazo grueso. Es otra dificultad el reconocer la
misma cosa cuando es presentada de otra manera. Esta es una abstracción y conduce a la
repetición del ejercicio y a las correcciones dentro de la memoria.

3. Damos las tarjetas con la figura delineada en trazo delgado y nuevamente el ejercicio es
repetido.

Juegos:

1. Ponemos los tres diferentes juegos de tarjetas en tres diferentes mesas. Barajeamos un
juego de tarjetas y damos unas cuantas a cada niño.
Los niños ven quien puede traer más rápido las tarjetas similares y los recuadros
correspondientes a las tarjetas dadas. Ellos rellenan los recuadros.

2. Dispersamos los diferentes recuadros. Mostramos a cada niño una tarjeta y le pedimos que
traigan el recuadro que corresponde a cada tarjeta. No se lleva la tarjeta, debe recordar la
figura.

De esta forma prolongamos la experiencia con las formas geométricas. El niño no sabe sus
nombres o sus definiciones, pero las ha visto y tocado. Todo este conocimiento es acumulado
dentro de él. Más adelante cuando le demos los nombres, será como alumbrar la obscuridad de
una cámara del tesoro. El niño lo ve y su entusiasmo es más grande.

Traducción cortesía de Viviana Pimentel.


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 5, 1946
LECCIÓN 15
Las lecciones son la forma en la que generalmente el maestro explica a los niños
alguna asignación o material, para iniciarlos en el estudio, que se relacionará con
situaciones que ya le son familiares al niño. En las escuelas tradicionales las
lecciones eran muy importantes. El maestro daba su lección, mientras más
impresionante era el maestro, mejor era la lección, los maestros eran adustos y sí,
impresionaban a los niños. La mayoría basaba su enseñanza en un libro de texto,
probablemente el mismo libro utilizado año tras año en todas las escuelas. Cada
capítulo era una lección, que se repetía para ser estudiada. A veces, el maestro
daba alguna explicación extra si los niños no comprendían nada. En Geografía o
en Historia los niños eran considerados tontos si no recordaban los detalles. Los
maestros de estos niños tenían un trabajo menos difícil de aquellos que
enseñaban a párvulo, quienes, de hecho, no eran reconocidos como maestros.
Nosotros damos dos tipos de lecciones, una antes de que los niños aprendan a
leer y otra cuando los niños ya saben leer. Nosotros tomamos en cuenta muchos
factores psicológicos: la psicología de los niños en cada uno de los períodos de
desarrollo y la psicología referente a la eficiencia de las lecciones para cada niño a
cada edad.
Contrario a lo que generalmente se piensa, al niño pequeño no le gustan las
explicaciones largas. Sus preguntas son concisas: ¿Qué es esto? Notemos que a
los tres años muy rara vez preguntan ¿Para qué? Si esto sucede, entonces recibe
una explicación larga y su reacción es perder interés. Recuerdo una conversación
entre un padre y su hijo pequeño de cuatro años.
Estaban haciendo un trabajo de botánica: los dos estaban muy interesados. El
pequeño preguntó por qué las hojas eran verdes. El padre se sorprendió por la
pregunta y se sintió complacido de poder responder, entonces dio una larga
explicación sobre la clorofila y la acción del son en la formación del color. Estaba
tan ensimismado en su explicación que no se dio cuenta que el niño me dijo,
murmurando “Oh, ¿para qué le pregunté sobre las hojas?, me tenía que decir que
las hojas son verdes, porque son verdes”. El niño esperaba que le confirmaran un
hecho que él daba por sentado y verdadero. El niño, a esa edad, necesita que lo
ayude a saber qué es qué en su mundo. Su experiencia con el lenguaje es a
través de lo que el adulto les dice. “Este es un mantel”. ¿Por qué no lo llamamos
“techo”? y la respuesta podría ser “porque va sobre la mesa”. Es una simple
pregunta del ambiente donde viven y la lógica que siguen. Los niños tienen que
aceptar esto que ustedes le dicen. La tarea del subconsciente es, a través de la
naturaleza, hacer que el niño acepte y se quede satisfecho con los nombres que
va aprendiendo.
Un nombre es justo una palabra que se diferencia de otra palabra. Botón o piano,
¿cuál es la diferencia? Si no conoces la diferencia entre sus significados, ¿la vida
puede parecerte incómoda?
En una ocasión encontramos a un empleado hindú que no había comprendido lo
que se le había pedido, ¡nosotros esperábamos con la esperanza de que nos
trajera algo parecido a lo que necesitamos! Si los niños tuvieran una mente crítica,
por supuesto que no aceptarían las palabras que les decimos. Afortunadamente,
la naturaleza siempre nos da algo como ayuda en la vida de cada ser humano: en
este caso es la peculiaridad de la psicología humana específica de cada edad, lo
que hace que acepte los hechos que le damos de una manera indiscutida.
El niño pequeño usa frases cortas, sin embargo pensamos que necesita frases
complicadas y largas que lo entretengan. Hace muchos años, in Italia, los niños de
preescolar estaban a cargo de religiosas, que no eran consideradas maestras,
sino que hacían un trabajo de caridad. Las religiosas debían mantener
entretenidos a los niños, entonces les contaban historias mientras los pequeños se
sentaban a escucharlas. Como ellas estaban interesadas en el cuidado de los
niños, estudiaron la pedagogía de los niños, en esos días, la psicología -y la
opinión pública- ponían gran énfasis en la disciplina y la formación del carácter así
que ellas eran severas si los niños se quedaban dormidos o se ponían a jugar en
lugar de escuchar: los niños eran considerados traviesos. Así que, para fortalecer
el carácter se decía que era necesario ser disciplinados: “Con disciplina podremos
obtener buenos ciudadanos”. “Este niño es muy fuerte, debemos doblegar su
voluntad”. Se pensaba que se podía construir la voluntad, rompiéndola.
“Haciéndolos obedientes aprenderán a controlarse”. Los niños debían
permanecer sentados, escuchando historias, cantando canciones, recitando
oraciones y poemas. Puedo recordar la mesa en la que me sentaba y los golpes
que recibí en mis nudillos: eso quedó fuertemente impreso en mi mente. Lo
recuerdo todavía hasta ahora.
Todo era doloroso porque tenía que enfocar mi atención en alguien más.
Teníamos que seguir la mente de alguien más, alguien que nos hablaba. Si tu
mente y tu inteligencia ya están formadas y hay un interés psicológico, esto
funciona, está bien; de lo contrario, el esfuerzo requerido es enorme. La memoria
es sólo una parte de la mente. Es como cuando llevamos comida cargándola
sobre los hombros. Cando comemos por placer, cargamos una gran cantidad de
comida, pero no es tan cómodo llevar la comida cargándola en un paquete. Si la
personalidad y la inteligencia no crecen y asimilan el conocimiento, si no hay
interés o entendimiento, la memoria acepta todo como una carga que desechará
fácilmente. De un año a otro el niño olvida lo que haya estudiado. Los niños
pueden haber pasado los exámenes cavando sus mentes con toda esa
información; pero, después de las vacaciones, olvidarán todo.
Es importante recordar la psicología del niño de 3 a 3 años y medio. Desean
esclarecer juicios y en apariencia contradicen su sed de palabras. No hay
contradicción alguna pues lo que desean es adquirir nuevas palabras, eso es parte
de la gran lista de intereses. Si sus mentes los guían a través del interés y están
activos en sus experiencias, toman las palabras fácilmente, las asimilan. Si tienen
que permanecer pasivos, cierran sus mentes.
El otro día, la Dra. Montessori les habló del niño que tenía las bases del lenguaje
ya formadas en su mente. Eso no significa que ya tenga todas las palabras del
idioma, sino que tiene ya un esquema, tiene la sintaxis, la gramática. A los dos
años y medio tienen un vocabulario de entre 250 y 300 palabras. Un niño de entre
5 y 6 años tiene un vocabulario de entre 5,000 y 6,000 palabras. Esto varía de
acuerdo con el ambiente. Los experimentos que registran estos datos fueron
hechos con niños que no han asistido a la escuela. La mente ha obtenido por sí
misma, sin ninguna guía 5,000 palabras o más. Palabras que para ellos no son
nada, pueden ser ideas con significados evidentes. Durante este período hay una
construcción de la mente: es sólo entonces, después de que la mente ha sido
construida, que el Guía toma la atención del niño ya con palabras. Si la educación
comenzó a los seis años fue porque el niño pequeño ha sido considerado in-
educable, pues es incapaz de seguir a un maestro. Si por un momento pensamos
y nos damos cuenta de la importancia de este hecho, del significado que tiene
este período en cuando a que es cuando el niño construye su inteligencia, y
pensamos que después de los seis años podrá seguir a alguien. No estamos
hablando solo de la formación del lenguaje y de la comprensión del lenguaje, sino
que él está construyendo su inteligencia para llegar a un nivel adulto, así que él ve
lo que hace el adulto. Pero, regresando al lenguaje: si es un hecho que el niño
adquiere espontáneamente 5,000 palabras, entonces durante estos cuatro años
hay una tendencia por parte del niño para adquirir nuevas palabras. Si le ofreces
las palabras en una línea de construcción psicológica, entonces podrá absorberlas
naturalmente, y encontrará el trabajo placentero y lleno de felicidad.
Definitivamente es un hecho: si le das a un niño pequeño una palabra, se sentirá
orgulloso. Nunca nos imaginamos que eso pudiera pasar, todos nos sorprendimos
y no podíamos comprender esto al inicio. Entonces nos dimos cuenta de su
significado. Estábamos enseñando a niños más grandes, entre 8 y 9 años.
Estábamos enseñando botánicas y para ayudarlos a memorizar les dimos un
material visual muy claro. Les mostramos la fotografía de una planta, después, en
otra tarjeta, la misma planta pero coloreando sólo las raíces: “Esta es la raíz”, en
seguida otra carta en donde estaba coloreado solo el tronco: “Este es el tronco”, y
así sucesivamente con cada parte de la planta.
El niño mayor tenía la carga con el nombre para colocarlo en la tarjeta correcta,
esta actividad les ayudaba a recordar. En nuestras escuelas los niños pueden
moverse libremente de un lugar a otro, así que se mezclan libremente y comparten
su trabajo. Un niño de tres años llegó a mirar la lección con un niño más grande: él
escuchó. Al día siguiente llegó ante el maestro con una de las tarjetas y le dijo:
“Estas son las raíces”. Días después un pequeño de tres años le preguntó si
también él podría trabajar con esas tarjetas. Ese material pasó del ambiente de los
niños de 6-12 al ambiente de los niños más pequeños. Ellos salieron al jardín
buscando plantas, era imposible pasar cerca de esos niños sin que quisieran
mostrarte lo que habían aprendido y descubierto. El material que habían tomado
del ambiente de Taller había sido la guía de su exploración de su ambiente. Una
madre vino a la escuela preguntando: “¿Por qué los niños eran tan destructivos
desde que entraron a esta escuela?” ¡Desde hacía una semana se habían
dedicado a destruir el jardín, desenterrando plantas para ver cómo eran las raíces!
El niño explicó que no entendía que habiendo tantos tipos de plantas sólo podía
encontrar cuatro tipos de raíces, por eso estaba investigando para estar seguro.
Materias que podían ser consideradas difíciles para los niños más grandes, como
recordar el nombre de las figuras o de las hojas, o los tipos de raíces o troncos,
eran algo muy fácil para los más pequeños. Ellos se devoraban el material con
hambre; por lo tanto, todo ese trabajo fue realizado por los niños más pequeños.
Cuando un profesor de Biología vio lo que estábamos dándoles, pensó que les
estábamos imponiendo ese trabajo tan difícil a niños tan pequeños, de 3 años, que
eso era criminal. Se podría decir que estaban cometiendo un suicidio pues eran
ellos mismos los que elegían hacer ese trabajo.
Finalmente comprendimos que el interés fue un hecho natural: no era el trabajo de
una persona con visión. Vimos que todo pasó, luego tuvimos que observar para
poder comprender por qué ocurría. A partir de ese punto llegamos a una
explicación y a un método. Todos tuvieron la oportunidad de ver lo que sucedió,
pero nadie le puso atención. Ese suceso tocó una parte de la Dra. Montessori y la
hizo darse cuenta del significado de ese aspecto de la psicología del niño, que
siempre había estado ahí, pero nunca había sido interpretada correctamente. Es
tan fuerte que alguien, tarde o temprano, tenía que darse cuenta. Todavía
recuerdo cuando le dimos esas palabras a los niños de 3 años y medio, había un
niño de cuatro años que vino con su hermana de dos años y medio para
despedirse. Ella se iba a Suiza. Yo estaba mostrándoles a los niños más grandes
la nomenclatura de las hojas. La niña grande le mostró a su hermanita una de las
tarjetas y con dificultad leyó y pronunció mal el nombre; nadie la corrigió. Seis
meses después estábamos todos de regreso una vez más en la escuela y las
niñas regresaron. La niña pequeña vino hacia mí con aquella tarjeta y me dijo el
nombre de la hoja. No recordaba el incidente hasta que uno de los niños del
grupo, uno de los más grandes me hizo notar el detalle del progreso.
Esta es la parte de la psicología de la mente infantil. Si no alcanzas a
comprenderla, la sufrirás en lugar de observarla con interés.
Existen dos tipos de ayudas que podemos proporcionar:
1. Dar los términos correctos con sus cualidades precisas –largo, corto, alto,
bajo-
Los niños necesitan ayuda para utilizar correctamente las palabras. Como el niño
pequeño que utilizaba la palabra “bumba” para todo líquido: agua, leche, o su
baño. Eso pasa con frecuencia entre los niños más grandes, particularmente
cuando crecen en un ambiente culturalmente pobre, ellos usarán el adjetivo
“grande” para calificar “alto”, “gordo”, “largo”. Entonces, debemos darles las
cualidades correctas para cada palabra. El sustantivo que les resulta interesante a
los niños a esta edad, debe estar correctamente ligado al adjetivo o experiencia,
de lo contrario, no significará nada. Las lecciones deben darse siguiendo este
protocolo: el inicio se da con la primera presentación de la Torre Rosa, por
ejemplo. El estudio consiste en la experiencia que el niño tiene. No podemos decir
qué tanto tiempo tomará, cuando terminen entonces sabrán cuánto tiempo toma,
pero antes no puedo decirles cuánto tiempo le deberán dedicar. El niño terminará
su trabajo cuando ya no muestre interés en el ejercicio: para entonces ya habrá
adquirido experiencia y habrá hecho suyo el conocimiento. Entonces, el guía
podrá tomar el material y dirá: “Este es grande”. “Este es pequeño”. Estos son
adjetivos calificativos pero si el niño no ha experimentado físicamente la
característica, no podrá comprender y discriminar pues no estará interesado. La
preparación debe ser dada antes de la explicación. Cuando has vivido la
experiencia puedes expresar lo que has experimentado, existe entonces una cierta
madurez. Para el niño, la parte más importante es la experiencia que tiene, a
través de la cual adquirirá el conocimiento. Entonces ese conocimiento podrá ser
expresado con palabras. Dándoles las palabras, les damos la oportunidad de
clarificar ese conocimiento y expresarlo.
Para ser capaces de repetir las palabras no necesitamos conocimiento, solo
habilidad para repetir. Esto si sólo nos importa expresar palabras, en este caso,
también un fonógrafo podría ser considerado inteligente.
La inteligencia es un complemento que se expresa con palabras.
Aprender “de memoria” suele ser muy cansado y, sin embargo, la gente reduce el
trabajo del niño a lo mínimo, lo que es comparado a una hambruna mental, pero si
lo permitimos, la naturaleza lo puede alimentar infinitamente, el niño puede
aprenderlo todo. Entre los 3 y los 6 años puede aprender mientras los adultos
están hablando, aunque sea difícil de creer, así es. Aún cuando vienen a observar
a los niños, para algunas personas esto resulta imposible, dicen “Lo veo pero no lo
creo”.
Hay una gran diferencia entre los tipos de lecciones que les damos en nuestras
escuelas y aquellas que imparten en las escuelas tradicionales. Por ejemplo, una
lección la lección del reloj, podrían decir a los niños que se usa para medir el
tiempo, que tiene dos manecillas, etc. Se dan todas las posibles explicaciones. En
cambio, nosotros le decimos “Esto es un reloj”. Todo lo demás él lo puede
observar. Es como cuando me presentan a alguien que no conozco, pueden
decirme todo acerca de cómo es, cómo está vestido, qué hace, etc. Cuando lo
único importante en ese momento es saber su nombre y el resto lo descubriré
conociéndolo.
Uno ayuda dando el término exacto de la experiencia o del objeto: “esto es un
reloj”. Después asegurarse de que ha entendido o que haya escuchado la palabra
varias veces como para retenerla en su memoria. Entonces jugamos un juego
llamado “La lección de los tres tiempos”. Se juega así:
Quiero enseñarte el nombre de las partes. Las nuevas palabras son las que más
aman los niños. Las otras palabras son correcciones de palabras que ya conocen
–como corto, largo, delgado. Conocer nuevas palabras es como saborear un vino
nuevo. Introducir los nuevos términos es fácil para los guías y para los niños. Si
toda novedad fuera una dificultad, ¡habríamos muerto al momento del nacimiento!
La naturaleza siempre nos da ayudas para crecer –hay una sensibilidad especial
para las palabras –pero solo hasta los seis años. Después de los seis años son
algo más. El pico de esta sensibilidad es a los tres años y medio. Los niños tienen
que ver flores. No podemos evitar que los niños vean las flores, pero la flor
correcta puede que no llegue, de cualquier manera, los detalles pueden ser
aislados. En nuestras nomenclaturas, el color rojo atrae a los ojos –entonces doy
el nombre, le presento el nombre y lo conecta con la parte coloreada en rojo.
¿Quién utiliza la palabra “corola”, “pistilo”, “filamento” o “estigma” en la vida diaria?
¡Al niño le gustan estas palabras! Se las dirán a su madre, ¡quien ni se imagina las
palabras que le estamos enseñando a su hijo! Recibe un sentimiento de
motivación porque ¡conoce algo que ni su mamá sabe!

Lección
1. Esta es la corola. Enfatiza: corola.
Este es el cáliz. Enfatiza: cáliz.
Corola, Cáliz. Enfatiza las palabras
Habla con ellos como si te dirigieras a un amigo.
2. Mezcla las cartas, como si fuera un juego.
Ahora, dame el cáliz
Dame la corola
Cáliz, corola
3. Introduce las palabras pistilo y estigma
4. Muestra la tarjeta: “¿Qué es esto?”
La conexión está hecha continuamente entre el nombre y el objeto. Para terminar
la lección de los tres tiempos:
1. Dime el nombre
2. Dame el cáliz o dame la corola
3. Sabes ¿qué es esto?
Si el niño te da una respuesta equivocada puede ser que no tenga interés o que sí
esté interesado pero haya cometido un error. Si no está interesado es inútil seguir
adelante, su mente no está lista para retener la información.
Aprenden un gran número de palabras hablando entre ellos, muchas veces el
Guía no tiene que enseñarles todas las palabras a los niños. El Guía debe
observarlos a todos para saber a qué punto ha llegado cada uno, entonces ofrece
ayuda cuando es necesario.
Todo el material sensorial que hemos visto es usado para dar estas lecciones:
colores, formas geométricas, etc. Entonces les enseñamos los comparativos y los
superlativos.
1. Toma tres cubos grandes y uno pequeño
Toma el tercero en grandeza y compáralo con el más pequeño
“Este es grande”
Toma el segundo en grandeza
“Este es más grande”
Toma el más grande
“Este es el más grande de todos”
Grande, más grande, el más grande
2. Dame el más grande –Dame el grande, etc.
3. ¿Cuál es este?
Nombres geométricos
Estos son introducidos con tarjetas.
Primero las figuras primarias: triangulo, rectángulo, círculo
Después las variaciones de cada figura
Antes de dar todos los tipos de triángulos las tarjetas deben ser mostradas con los
nombres de los ángulos. Todos los juegos de cartas se ponen en sobres
separados con el nombre en la figura frontal. Todos los sobres se ponen en un
cajón sobre la repisa a la altura de los niños. Una repisa para Botánica, otra para
Zoología, otra para Geometría, etc.
Hay otros sobres con los nombres de las partes del pez, de los insectos, nombres
de varios peces, de varios insectos, etc. Todos estarán clasificados en sobres
seleccionados como explicamos antes.
Términos geográficos
Isla, lago, istmo, estrecho, etc. Se darán primero con los modelos de tierra y agua,
después con tarjetas que representan el modelo.

Traducción cortesía de Tita Llerandi


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 10, 1946
LECCIÓN 16

Uno de los ejercicios más importantes en Montessori y uno de los menos


comprendidos es “La lección del silencio”.
La lección del silencio es un ejercicio, en silencio. El guía, por lo general, se pone
de pie en una de las esquinas del ambiente, o detrás de una columna, o en un
lugar en donde no sea visto fácilmente. Los niños están en silencio por algunos
momentos y entonces el guía empieza a llamarlos por sus nombres, muy
suavemente, casi como un susurro, uno por uno. Cuando el niño escucha su
nombre, se levanta y va hacia el lugar en donde está el guía sin hacer ruido. Esta
lección tiene un atractivo misterioso para los niños pequeños. Es extraño porque
generalmente los niños son considerados gente ruidosa, lo último que uno puede
imaginar es que estuviesen tan interesados en un ejercicio de este ámbito. Como
quiera que sea, este ejercicio es tan atractivo para ellos que da resultados
extraordinarios, por lo que se ha convertido en uno de los ejercicios básicos para
la construcción de la psique al inicio de la vida del niño.
La lección del silencio no siempre resulta exitosa. Existen varios motivos para que
sea así. En muchas ocasiones se da muy pronto, antes de que los niños tengan
cierto auto control, es imposible para ellos mantenerse en silencio. Nuevamente,
cuando la lección viene antes de la experiencia, cuando los niños no han dado su
“autorización” para que se realice el ejercicio, no tendrá éxito. En otras ocasiones,
el guía que tiene 30 o 40 niños piensa que es mucho tiempo de espera el que los
niños deben resistir hasta escuchar su nombre. Llama a unos cuantos y se
detiene. Los niños que no han sido llamados, se desaniman y la próxima vez que
realice el ejercicio, no estarán interesados.
¿Cuántos de nosotros sabemos qué es el silencio? ¿Qué significa? El perfecto
silencio produce una tremenda impresión. Generalmente, se dice que el silencio
es permanecer callados, pero silencio es también la ausencia de movimiento. Si
alguien se mueve, produce ruido, el rechinido de una silla, el tintinar de un vaso,
un lápiz que cae, el papel que cruje, los pies que rozan el suelo. Para obtener el
silencio, nadie debe moverse, hasta deben respirar suavemente. Si cuarenta niños
respiran suavemente, aún eso será audible. El silencio es la perfecta inhibición de
todo movimiento. Para obtenerlo, debemos ser conscientes de todas las partes de
nuestro cuerpo. Debemos dirigir nuestra atención a nuestra inmovilidad. Si nos
sentimos incómodos, tendremos necesidad de movernos, entonces, invitamos a
los niños a ponerse en una posición cómoda. ¿Han notado que cuando estaos en
un concierto, apenas la orquesta empieza a sonar, la gente tose o aclara sus
gargantas y se acomoda en la butaca? Es automática la forma en la que la gente
se pone cómoda para permanecer después en silencio y escuchar así por un largo
rato. Si jugamos a “congelados” primero tenemos que estar en una posición
cómoda para durar mucho tiempo así.
Entonces, si queremos lograr un silencio perfecto, debemos ser conscientes de
todo el cuerpo, pues la mente debe inhibir todas las partes del cuerpo, por regla
natural, estamos conscientes de una cosa a la vez. Antes de comprender el juego
del silencio debemos hacer que los niños tomen consciencia del control de
movimiento. Hacemos esto como control del error y como un punto de interés ya
que tenemos que tener silencio para poder comenzar no sólo este ejercicio sino
cualquier otro. Es evidente que no podemos pedir a los niños que estén en silencio
hasta que no logren controlar sus movimientos. El cuerpo es un conjunto de
músculos, todo un grupo, si no sabes controlar uno, no podrás controlar los
demás, todo tu cuerpo. Debo controlar mis manos, pero entonces ¡mis pies
comienzan a moverse!
Es por esta razón que no podemos dar la lección del silencio los primeros días de
clases. Los niños no habrán adquirido todavía el control de sus movimientos, por
lo tanto, no les interesará la lección del silencio. Ellos, al no poder controlar sus
movimientos, se descorazonarán y al sentirse desanimados van a odiar la lección.
Les daremos la lección del silencio cuando ya estén normalizados.
Antes de comenzar la lección, como siempre, debemos pedir el consentimiento de
los niños. Silencio es algo como paz. Todos tenemos que tener voluntad. Si 21
naciones desean la paz y una desea hacer la guerra entonces tenemos guerra.
Podremos tener silencio únicamente si todos deseamos colaborar, todos, cada
uno de nosotros. Debemos preguntar a los niños si ellos desean colaborar y recibir
la lección, si alguno de ellos no lo desea, entonces se le pide que salga y espere
en algún otro lugar, no como castigo, sino para que los demás puedan hacer el
ejercicio con concentración sin que los interrumpa.
El inicio de la lección del silencio es difícil, después de un poco, comenzará a ser
atractiva para los niños y toda su vida se verá influenciada por esta lección.
Probablemente algún niño quiera escribir la palabra “silencio” en un cartel y
ponerlo en algún lugar. Si el guía escribe silencio, entonces ellos podrán leer y
comenzarán a hacer silencio, poco a poco el silencio se hará más presente entre
los niños que leen la palabra y se contagiará entre los que no la han leído.
Podemos sentir el silencio, el subconsciente lo escucha. Cuando todos los
movimientos se han detenido, estar ahí es ¡extraordinario! Uno tras otro, los niños
permanecen en silencio dentro el ambiente.
Al inicio, más allá de pedirles a los niños su consentimiento, los debemos dejar
elegir la postura más cómoda posible, porque si ellos no se sienten cómodos, esa
incomodidad les hará moverse. Después de tener su consentimiento, hay algunos
segundos de ajuste. Después comenzará el silencio, poco a poco. Después del
silencio debes esperar uno o dos minutos y susurrar sus nombres. Debe ser un
susurro, muy suave, pues el tono normal de tu voz rompería abruptamente el
silencio. Debes permitir que el silencio permee el ambiente, y que la mente y el
espíritu de los niños escuche su llamado.
El silencio tiene una fascinación especial porque es como un microscopio. Cuando
dejamos la pausa y comenzamos la actividad, mientras estamos esperando
escuchar la voz que nos llame, nuestros oídos están tensos, atentos a cualquier
sonido, escuchamos hasta lo que no podemos escuchar comúnmente, comienzan
a ser perceptivos.
Algo curioso pasa a veces. Los niños que están muy interesados en el silencio
comienzan a dibujar cortinas y a pintar tanta obscuridad en su mente como es
posible. Comenzarás a escuchar diferentes sonidos, tal vez el zumbido de una
mosca entre las cortinas bajo un rayo de luz, el agua de la fuente, o el croar de
una rana a lo lejos. Todos los pequeños sonidos, que generalmente son
sepultados por la actividad y la inconsciencia de las personas que están ocupadas
con su trabajo, vienen a la vida. Esta es la atracción del ejercicio en sí.
Parece que hay algo extraño que hace que los niños se llenen de paz, de
serenidad, un gozo profundo viene a sus rostros, podría decirse que tienen una
mirada religiosa. Cuando se levantan de sus lugares y atender el llamado del guía,
se verá esta expresión, a veces más profunda. Recuerdo que una vez estaba
visitando una escuela por primera vez. Esta lección del silencio estaba en curso y
me paré detrás del guía. Miré a los niños. Ellos estaban sentados en varias
posiciones, algunos con sus ojos cerrados. Estaban profundamente concentrados
y fuera de este mundo. Se levantaban suavemente cuando escuchaban su
nombre y llegaban sin hacer ningún ruido. La paz parecía reinar en el espíritu de
esos niños. Recuerdo una mano pequeñita que me tomó de la mano. Nunca nos
habíamos visto antes y estábamos ahí, mano en la mano. Después de un rato,
este pequeño me dijo “Soy bueno”. Fue una afirmación, un descubrimiento, no
estaba preguntándome.
Muchas veces me pregunté cómo era la concentración en los niños pequeños, me
preguntaba a cerca de esta serenidad y el efecto que causa en sus vidas. Este
ejercicio parece tener un efecto espiritual en el niño, se vuelven más dóciles,
menos violentos, más buenos. Su concentración aumenta en sus prácticas. Es
extraordinario lo que se puede hacer con los niños en el segundo año de su
estancia en Casa de los Niños. Este ejercicio que está programado para que
controlen su cuerpo, les da desarrollo espiritual. Me he hecho muchas preguntas
sobre este fenómeno. ¿Por qué los niños encuentran gusto en el ejercicio?
Cuando estamos entre gente menos intelectual, con menor nivel cultural, como los
granjeros o pastores de mi país, encontramos que en las noches, cuando cae la
obscuridad y surge el silencio, les nace hablar de temas de filosofía, de Dios, de
religión. El silencio y la obscuridad parecen llamar a una parte del ser humano que
gusta de la espiritualidad. En particular, la gente humilde tiene riqueza espiritual.
He conocido pastores italianos y españoles y entre ellos he tenido pláticas
espirituales profundas, hasta que fui a los Estados Unidos de Norte América y
entonces, un día fui a visitar el Gran Cañón y, cuando bajó el sol, vi la figura de un
Piel Roja. Me acerqué y lo llamé, aunque no hablaba su lengua; fue como hablarle
a una gran estatua, el estaba inmóvil. Miraba al atardecer, hacia donde se ponía el
sol, con una mirada en su cara que no puedo describir, simplemente puedo decir
que era majestuoso. Tuve que permanecer en silencio. No podía hablarle o
tocarlo, no podía distraerlo. Cuando desapareció el sol, se giró hacia mí y me miró,
era como si tuviera el infinito en su cara, tal era su serenidad. El dijo “Manit”, -que
así decía Dios en su lengua. Le pregunté qué hacía ahí solo y me respondía:
“Estaba buscando a Dios, sólo puedes ver a Dios en esta obscuridad”. De la
misma forma, en India, conocí a una persona, una vez que fui a un templo famoso,
en lo alto del templo había una caverna y en la caverna vivía un Santón. Para
llegar a esa caverna teníamos que pasar por un camino muy angosto a lo largo de
un precipicio. Entramos a la caverna y de ahí había otro túnel que a su vez
conectaba con otra caverna. Un hombre estaba sentado, absolutamente inmóvil
frente a un hueco, como ventana, que se abría en lo alto del risco. Fue ahí en
donde volví a ver esa imagen de iluminación. Esperamos hasta que nos notara,
pero uno de mis compañeros se acercó y lo llamó. ¡Deberían de haber visto el
esfuerzo que hizo este hombre para regresar a este mundo! La primera palabra
que dijo fue “Shiva”, -que es el nombre de Dios en su lengua. Entonces pensé
que en todas las religiones se pueden dar estos encuentros con Dios en el
silencio, en los templos, en las iglesias, es ahí en donde se puede dar esta
contemplación, esta concentración. En nuestras iglesias católicas la luz,
generalmente es muy tenue y todos tratan de moverse silenciosa y lentamente.
Las ventanas tienen vidrios de colores que hace que la luz sea aún más tenue. Es
en la obscuridad que el alma se eleva. Es siempre esto: obscuridad, y silencio.
He tratado de razonar esto desde el punto de vista psicológico para entenderlo. En
la paz de los templos los rostros se transforman. Los pastores italianos llevan a
sus hijos al templo. Las madres toman a los niños pequeños y ellos absorben la
espiritualidad que ahí encuentran. Recuerdo a una madre que decía sus oraciones
y su hija estaba a un lado, con el rostro iluminado. Estaban de rodillas con sus
manos juntas, cuando la niña le preguntó a su madre si estaba rezando, la madre
no pudo responder. La oración no puede ser formulada cuando es profunda. Es un
sentimiento que viene de dentro y se construye en la infancia, para cualquier
religión que sea, viene en ese primer período de vida. Esos instantes se enraízan
en nuestro inconsciente, se construyen poco a poco a través de las impresiones
que reciben los niños del mundo que los rodea. No podemos razonar sobre esto,
no es entendible con el intelecto. Cuando alguien tiene problemas, la consolación
llega por medio de la meditación, de la oración, cualquiera que sea la religión.
¿Qué es la oración, la meditación, si no una concentración en el silencio, ese
llamado de nuestras raíces espirituales del subconsciente?
Cuando estuvimos en la India, vivíamos en una montaña. Algunas veces, en la
noche, trepábamos a la punta de un risco y nos sentábamos en la paz del silencio.
Fue ahí donde nació la Lección del Silencio. Fue cuando, sentado ahí, escuche tal
cantidad de sonidos, después desaparecieron, la paz llegó como una luz, una luz
intensa. No había obscuridad, solo paz. Olvidé todo lo que pasaba, todos los
problemas, solo una inmensa expansión del espíritu. Un hombre en apuros me
preguntó en alguna ocasión, cómo podía encontrar la calma. Le conté de mi
experiencia en la obscuridad y el silencio, pero resultó que el hombre tenía miedo
de la obscuridad y que cualquier pequeño ruido le hacía saltar y sentir temor.
Estamos unidos a la tierra por medio de nuestros sentidos. Existe una diferencia
entre quienes son guiados por lo espiritual y quien está guiado por lo material;
estos últimos están atados a la tierra por el miedo; el silencio y la oscuridad
representan un hechizo peligroso; para los otros, el hechizo es la liberación.
Cuando hicimos el ejercicio, este hombre tenía temor hasta del sonido de las
chispas de la antorcha, cuando le hice notar de dónde venía el sonido y notó poco
a poco que eran insectos caminando en las hojas, las chispas de la antorcha,
gradualmente sus miedos se fueron calmando. Le dije “sólo quédate tranquilo y
escucha sin moverte”. Recuerdo que nos quedamos por largo tiempo, entonces
me dijo: “maestro, vamos a casa, está lloviendo y hace frío”. Yo no había notado
que estaba lloviendo. Cuando nuestros ojos dejan de ver, nuestros oídos dejan de
escuchar, hasta el más leve sonido, cuando podemos arrojar los sentidos que atan
nuestra alma a la tierra, uno a uno, entonces nuestro espíritu es libre y sentimos
con mayor claridad. Hay una claridad de comunicación con algo que está más allá
de nosotros.
Cando nos liberamos de la Tierra, cuando nuestros sentidos son liberados, los
miedos se van y llega la paz y nuestro espíritu se eleva. Poco a poco llegamos a
entendimientos de los problemas y los misterios propios de nuestra humanidad.
Comenzamos a ver nuestra humanidad como un grupo de pobres seres
preocupados por cosas que no tienen importancia. Este es lo que creo que pasa
con los niños durante el juego del silencio. Dan un salto de los sentidos
intelectuales y desarrollan los “sentidos espirituales”.
Si existe espiritualidad, está precisamente en el niño. Si existe un alma, reside en
el niño. Los niños son lo más cercano a los orígenes de la divinidad, que
desaparece año tras año en el contacto con experiencias ordinariamente
mundanas. La lección del silencio les da a los niños la oportunidad de desarrollar
este sentido, de desatar los sentidos y expandirlos en la obscuridad y el silencio.
La voz que llama desde dentro, llamándolo por su nombre especial, y el niño
responde con la voz de lo invisible. Esta es la formación que se atribuye al alma.
Le da atributos que son desarrollados en la niñez, para crecer y fortalecerse. Es
por esto que la lección el silencio es importante.
Es muy tonto de nuestra parte si pensamos que el niño se va a cansar porque
debe esperar a escuchar su nombre. Si he pasado mucho tiempo profundamente
concentrado por una voz que no llega, pasa el tiempo y no soy nombrado,
entonces es cuando pierde importancia. Un manto comienza a ponerse entre mí y
cualquier cosa que haya estado esperando. Por eso, no importa cuánto tiempo
dure el ejercicio, nunca olvides llamar a ningún niño. Si alguno de ellos no
responde al llamado de su nombre, continúa con otros y regresa más tarde a
nombrarlo a él, después de un rato, volverá a escuchar. No eches a perder el
ejercicio. Recuerda que cualquier cosa que hagas es importante en la
construcción de la personalidad, es la posibilidad de interactuar con el espíritu y
esto es algo importante. Ver con el alma y no con los ojos. El alma de un niño está
en la búsqueda del subconsciente, si hay un Dios, ese Dios está en el
subconsciente. No puede ser explicado con palabras, y, aun cuando nos
acercamos a Él con las palabras de nuestras oraciones –que muchas veces son
mecánicas, las decimos sin comprender qué es lo que estamos diciendo; aún en
ese momento nos sentimos en conexión espiritual. Por eso es necesario ayudar al
niño con el silencio. Los católicos rezan en latín, los pastores italianos, rezando en
latín, palabras incomprensibles, pero son profundamente religiosos. Alrededor del
mundo, las mismas palabras son rezadas por infinidad de personas. En las
grandes ciudades, el sentido religioso se va perdiendo; sin embargo, cuando
rezamos lo hacemos con palabras que tienen un sentido para nosotros, pero
muchas veces lo hacemos como un deber, rezamos superficialmente. Confiamos
en la fuerza de las palabras cuando estamos con los niños, les pedimos que
aprendan ciertas oraciones de memoria. ¡Los castigamos si no saben la lección!
Tratamos la religión como si fuera una materia de estudio y nos acercamos a ella
como si fuera un requisito casi detestable.
La religión no puede darse como aprendizaje intelectual, sino como un sentido
interno. El sentimiento está dentro de cada ser humano; se puede desarrollar o
subyugar y destruirse. La Lección del Silencio es una de las maneras para llamar
a la vida a estos sentidos. Esto es, por supuesto, solo una impresión. Un día lo
comprenderemos mejor y sabremos lo que la Lección del Silencio representa para
los niños.

Traducción cortesía de Tita Llerandi.


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 14, 1946
LECCIÓN 19

Letras de Lija y Alfabeto Móvil

Me gustaría continuar el discurso de la actitud que deberíamos tener los adultos


hacia los niños cuando están interesados en el lenguaje.

Hay que recordar que si bien es la inteligencia la que hace que el cuerpo crezca,
el cuerpo también sigue a la inteligencia. Nuestro esfuerzo como educadores,
debe estar principalmente dirigido a ayudar en este desarrollo de la inteligencia.
Como dice la doctora Montessori, no es el ejercicio de caminar lo que le interesa al
niño. Es la mente, la inteligencia, lo que guía al niño a caminar. Le habla al niño
para que cruce el campo, que mire al burro mientras se alimenta, no es el
movimiento sino el interés de ver al burro lo que mueve al niño a saltar. Cuando el
niño va al camino y salta una cerca alta es el interés lo que lo atrae, el ejercicio
viene como consecuencia del interés.

En cada expresión natural, es la inteligencia la que guía y como consecuencia hay


un proceso de perfeccionamiento del cuerpo. Es a través del jalón de la mente
hacia el cuerpo que el niño adquiere el ejercicio de caminar. En estas expresiones
es esto lo que debemos considerar. Debemos cultivar la inteligencia, levantando y
creando un interés inteligente y entonces proporcionarle al cuerpo lo que necesita
para satisfacer este interés de la inteligencia. Puede llevar directo al resultado o
bien, podemos llegar de manera indirecta.

Uno de los grandes errores que he visto en las escuelas en algunos países en los
que el lenguaje no es fonético, es la preocupación de los maestros en la escritura
y la lectura. Están preocupados por la parte mecánica de la enseñanza para que
los niños aprendan a leer y escribir y no toman en consideración el interés
inteligente de los niños. Por lo tanto, el trabajo se vuelve difícil y artificial. Se
vuelve un trabajo penoso y aburrido. Muchos de los maestros se quejan de que los
niños no están interesados, pero ¿quién lo estaría? A menos de que se genere un
interés, todo será trabajo pesado.

Una falsa interpretación de la libertad de acción es otro error muy común. Los
maestros me dicen: “Le he enseñado las letras, no estaba interesado, de todos
modos, he logrado enseñárselas”. Este es un error muy común; pero
seguramente todo lo nuevo es de alguna manera difícil de enseñar. La tarea de la
maestra en este caso es invitar al niño una y otra vez hasta lograr generar interés.
Cuando este interés está creado, la libertad y la repetición de la actividad seguirán
y se hará lo que se necesite hacer. Es el alma del niño es la que lo guía. En un
principio somos nosotros los que hemos abierto un nuevo camino para el niño. La
tarea del maestro es invitar al niño, motivarlo y hacer que el trabajo, el material, el
ambiente, sea atractivo. Cuando esto ha sido realizado, el trabajo del maestro ha
terminado. Después de todo, de qué nos sirve ser maestros si no podemos
despertar ese interés en el niño. Me recuerda a los polluelos y a la madre gallina
que los estimulaba para que comenzaran a comer.

Así que los próximos días, prueben una y otra vez hasta que los niños estén
interesados. No les den ordenes o instrucciones o los obliguen, solamente hagan
que la actividad sea atractiva.

Las Letras de Lija

El objetivo directo de estas letras no es enseñar a los niños a escribir o leer. El


objetivo directo es despertar el interés de la inteligencia, guiarlos a entender estas
letras aisladamente, el sonido y darle al niño una forma definitiva, una impresión
visual del sonido. El niño puede explorar el lenguaje que ya posee. No vayan tras
la ilusión de que van a enseñarle el lenguaje. Él ya posee el lenguaje. A través de
las letras le damos al niño la visión de que todas las palabras están compuestas
por sonidos y que cada sonido puede ser representado y ese sonido se repite en
muchas palabras. Entonces el niño puede buscar en su propia mente hasta
encontrar en dónde se halla ese sonido. Es un proceso puramente intelectual.
Mientras que la preocupación de la maestra generalmente tiende a la parte
mecánica, la parte mecánica se encarga de la encarnación de la impresión de la
forma de las letras. Podemos jugar con uno o más niños. Pídeles que toquen las
letras y piensen en palabras donde se use ese sonido. El estímulo de trabajar
juntos los guiará a la examinación más detallada y aumentará interés en los
sonidos.

Después de algunos días de este trabajo, los niños parecerán inmersos en la


meditación. He visto a niños mirar con su entrecejo fruncido seriamente perdidos
en su pensamiento y murmurándose a sí mismos el sonido de lo que tocan. Me
acerco al niño y escucho el murmullo “m m m” ó “a a a”, está estudiando y
analizando, está encarnando los sonidos. Este proceso de examinación
introspectiva sería muy difícil e inútil si el niño no hubiese tenido la posibilidad de
visualizar y manipular los sonidos que han descubierto en esas palabras. Pero
como esto no es suficiente, les daremos otro hermoso material.

El Alfabeto Móvil

Las letras están cortadas en pedazos de cartón grueso: rojas las letras de las
consonantes y azules las letras de las vocales.

Existe un gran error que podría matar el interés. Algunos maestros, con la idea de
ayudar al niño se preocupan por darles sólo palabras fáciles, fonéticas. Esto no es
bueno pues limita la actividad del niño a trabajar sólo con aquellas palabras. Es
importante motivarlo en el análisis general, sin restringirlo de nombres de ciertos
objetos que pudieran parecer difíciles. Si le mostramos al niño un objeto que tenga
el sonido inicial y dos sonidos más, y le pronunciamos el sonido inicial, el niño
seguirá buscando las otras dos letras, hasta formar la palabra del objeto que ve.
Forma la palabra. Parece ser una buena ayuda, pero el niño se acostumbra a
hacer palabras pequeñas, lo atamos a palabras cortas. Si eso sucede, el propósito
del ejercicio desmerece. No queremos que el niño solo represente unas pocas
palabras fáciles, queremos que analice todas las palabras que ya posee. Que
desarrolle la inteligencia, el propósito no es la representación de grupos de
palabras o de objetos, sino que desarrolle la inteligencia.

Además, existe otro error también muy común: creer que debes presentar todas
las Letras de Lija a cada niño antes de presentarles el Alfabeto Móvil. Este es un
error de visión y déjenme decirles que hablo de mi propia experiencia con niños
que están aprendiendo inglés, porque la gente con mucha frecuencia me dice que
todo lo que digo es muy fácil cuando se enseña en italiano pero no cuando se
habla inglés. Es diferente. Déjenme aclarar esto que les digo por experiencia
propia cuando enseñaba inglés. Les daré un ejemplo. Estaba en un salón de
clases en la India cuando un maestro se acercó a mí, charlamos sobre mi salud y
me dijo que necesitaba un tónico. Un niño que estaba cerca escuchó la palabra
tónico. Analizó los sonidos <t – o – n – i – c – o >. ¿Qué es O? preguntó al
maestro y le pidió que le mostrara O; porque esa era la única letra que no conocía.
El interés de formar la palabra hace que el niño pregunte por el símbolo del
sonido. Si tenemos éxito en provocar esta examinación introspectiva el niño
vendrá a nosotros para preguntarnos sin tener que saber cómo se hace esa letra.

Para motivar a los niños a que continúen tocando las letras y puedan ser capaces
de trazarlas jugamos varios juegos, por ejemplo, pongamos las letras en una
mesa, peguntemos a los niños cuántas de esas letras conocen, pídanles que
tomen algunas de las que ya conocen “vamos a ver si de verdad las conocen…
tóquenlas, digan el sonido y encuentren nuevas palabras con esos sonidos”.
Seguramente repetirán mientras tocan varias veces, eso les da la memoria
muscular de la forma. El mecanismo de la reproducción de la letra va de la mano
con la parte intelectual.

Hay además otra cosa que podría parecer un tanto extraña: la escritura vendrá de
forma natural antes que la lectura. Es raro pensar en la escritura y la lectura como
opuestos del mismo proceso, son las dos caras de una moneda. Pero hay una
gran diferencia entre ellos. Ahora bien, debemos dar toda esta a los niños cuando
tienen cuatro años, porque es el período intelectual perfecto para esta edad. En el
caso de los niños de 5 años o 5 años y medio, o incluso 6, el proceso intelectual
no es el mismo, entonces la lectura vendrá antes que la escritura, pues el niño ya
no está interesado en escribir las letras, el período sensible habrá desaparecido,
esta ayuda le permitirá leer rápidamente. La escritura la harán cuando les demos
las letras de modo que puedan explorar su propio lenguaje en el período sensible
del movimiento, entonces la escritura vendrá antes.
Para escribir se necesita trazar el símbolo, algo que ya poseen mentalmente. Leer
es recibir el sentido de una forma misteriosa del símbolo que en algún lugar del
ser se ha establecido. Cuando escribo comienzo con el conocimiento de la
palabra. Al leer no tengo nada sino los signos de los que debo extraer un
significado. Los símbolos y los sonidos son los mismos en ambos casos pero el
proceso mental es muy diferente. (¡De cierta forma, un golpe es siempre un golpe,
ya sea que lo des o que lo recibas!)

Esto requiere una madurez de la mente para que sea capaz de alcanzar el sentido
a partir de la visión de símbolo. La mente tiene diferentes atributos en las
diferentes etapas de la vida. En una etapa analiza, en otra etapa sintetiza, ambos
son atributos muy dominantes.

Hay un momento en que las habilidades para leer y escribir son totalmente
independientes una de la otra. La gente viene a visitar nuestras escuelas, ven a
niños sacando palabras del Alfabeto Móvil y les preguntan: ¿qué escribiste? Y el
niño mira el tapete, pero no puede leer. Entonces el visitante pregunta: ¿Para qué
hacerles escribir palabras que no pueden leer? Pero, la realidad es que ellos no
están escribiendo. Ellos están meramente dando oportunidad de trasladar a
símbolos los sonidos que están en sus mentes. En esta etapa es casi imposible
que los niños lleguen a la palabra a través del símbolo. En una de mis visitas a un
ambiente, un niño jaló suavemente mi pantalón para atraer mi atención: “¿me
podría decir si escribí la palabra ‘caballo’? Entonces miré su trabajo y apunté la
palabra. “Gracias, pensé que la había escrito pero no estaba seguro”. Parecía
como si tuviera en su memoria un plan de las palabras que iba a escribir, pero no
podía leer lo que estaba escribiendo.

Este trabajo con el Alfabeto Móvil es un proceso separado entre leer y escribir. Es
un análisis y una representación visual de los sonidos.

Si se trabaja con un idioma que no es fonético las palabras, a menos que se esté
llevando un proceso de pronunciación ortográfica muy precisa, las palabras
estarán tal vez un poco equivocadas. Pero, les repito, no estamos enseñando
ortografía. Simplemente estamos permitiendo la oportunidad para que se realice
un ejercicio intelectual. Cuando se llega a la lectura, tenemos otros materiales que
ayudarán a la escritura con la ortografía correcta. Si tratas de dar todas las
dificultades ortográficas a un pequeño de cuatro años, cerrará su mente. Es como
si me invitan a cruzar nadando de Dover a Calais cuando apenas estoy
aprendiendo a nadar, diré “no gracias, cruza tú, yo no lo intentaré siquiera”. Pero si
me invitan a llegar a la otra orilla de un pequeño lago, estaré motivado a intentarlo.

En una ocasión, tuve una gran discusión con un inspector en Holanda. Estaba
trabajando esto con los niños, cuando llegó y me dijo que, como italiano
enseñando a escribir alemán a los pequeños, no tenía ni idea de las dificultades y
por eso estaban cometiendo tantos errores. Entonces le pregunté a qué edad se
suponía que tenían que escribir correctamente según sus parámetros y él
respondió que a los doce años. Entonces le sugerí que regresara para cuando
estos pequeños de cuatro años tuvieran doce, para ver que ya eran capaces de
escribir correctamente.

Así que no los obliguen a que lean las palabras que van formando con el Alfabeto
Móvil. Hagamos posible que la mente realice de manera independiente estos
ejercicios, no importa que no sepan todas las Letras de Lija.

Usualmente, los procesos mentales y psíquicos se dan paralelamente; sin


embargo, la mente tiene que ir al mismo paso que la mano, que todavía no está
del todo preparada a pesar de que la inteligencia comienza a concientizar que
tiene una mano, si se ve obligada a usarla, empezará a cometer errores y si es
muy pronto para este proceso, la mente se escabullirá y evadirá el proceso.

En este momento el niño debe reconocer el símbolo y tomarlo con sus pequeños
dedos. La inteligencia no se preocupa de que la mano no pueda trazar los
símbolos. Paralelamente se realizarán ejercicios que ayuden a la mano a
desarrollar la destreza para trazar las letras. Es extraordinario ver que en un
determinado momento adquieren la visión de la palabra por completo. Primero
analizan el sonido, uno por uno y terminan por comprender la palabra, toman
primero una por una y luego logran comprender todas las letras de los sonidos que
forman la palabra.

Recuerdo que un día di un paseo con un niño pequeño y su padre. El padre era
chapado a la antigua, un tipo adusto. Estábamos discutiendo problemas de la
guerra, negocios, etc., el niño estaba recogiendo semillas del piso. El padre lo vio
y se giró para decirle en tono severo: “no recojas suciedad del suelo, para o te doy
una nalgada”. En lugar de desobedecer o responder algo irónicamente, dijo:
“gracias padre, s-u-e-l-o… s-u-e-l-o… s-u-e-l-o… n-a-l-g-a-d-a… n-a-l-g-a-d-a… n-
a-l-g-a-d-a”.

Agradeció por haber recibido nuevas palabras, estaba analizando los sonidos de
esas dos palabras. Los niños, a esa edad, tienen la habilidad de realizar un
análisis introspectivo del lenguaje. Esta es una de los grandes preparativos para la
escritura.

La escritura viene de la examinación de algo que tienes en mente. Un poder


intelectual que encuentra la expresión a través de un movimiento muscular. Pero
para poder lograrlo, es necesario preparar la inteligencia. El proceso comienza a
los seis meses y transcurre hasta los cuatro años, cuatro años y medio. Puedes
ver los efectos de la madurez de la mente. Si quieres ayudar, darás al niño
pequeño la preparación, comenzarás escribiendo palabras mientras él te ve,
palabras en las paredes, en las pizarras. En una ocasión visité una escuela donde
la maestra se lamentaba porque la escritura no llegaba así como yo lo había
prometido. Yo me percaté de que ya había varios niños listos para la escritura. Así
que fui a la pizarra y escribí mi nombre. No estoy seguro de lo que pesó la
maestra en ese momento pero un niño vino y me dijo “yo también puedo escribir el
mío”. Otros dos niños vinieron y todos los demás comenzaron a escribir. La
maestra me preguntó cómo había hecho. Pero mi respuesta fue: ellos solos lo
hicieron, yo solo di un pequeño ejemplo y ellos hicieron lo que ya sabían hacer.

Si les has dado todos los ejercicios para que perfeccionen la coordinación de sus
manos, ellos empezarán a escribir perfectamente las letras. No empezarán a
escribir sílabas o letras aisladas, sino que comenzarán a escribir palabras
completas y hasta oraciones completas. Una vez, un niño escribió “hoy es un día
bonito”. No había escrito con buena ortografía, pero los sonidos eran correctos. Él
podía escribir, podía escribir una frase y era la primera vez que tomaba un lápiz.
Recuerdo que en otra ocasión fuimos a dar un paseo por la playa y los niños
empezaron a trazar palabras y frases en la arena con pequeños palitos de
madera. Había entusiasmo, gozo, regocijo; nadie podía detenerlos. Algunos niños
se acercaron a sus maestros y les preguntaron si también ellos podían escribir. El
darse cuenta de que pueden escribir, les da a los niños una alegría de espíritu que
no se puede comparar con nada. Esto pasa en Italia, en Francia, aquí, en todas
partes en donde se siga el proceso correctamente.

Como pueden ver, es un proceso que sigue un ciclo natural, cuando el niño ha
desarrollado la motricidad fina, toma consciencia de su mano y es capaz de
sostener un lápiz. Lo que sigue, la forma en la que ha memorizado muscularmente
con el trabajo de las Letras de Lija, la habilidad de análisis de sonidos que adquirió
con el Alfabeto Móvil, todo esto ha fortalecido su inteligencia, ha analizado
sonidos, ha compuesto palabras a través de ese análisis y ha observado las letras
que simbolizan esos sonidos. Cada elemento ha sido trabajado separadamente,
de una forma cuidadosa. En cualquier momento, una chispa dará “la explosión de
la escritura”.

Cuando a los niños se les enseña a escribir cuando ya son más grandes, odian
escribir, tienen mal trazo y no sienten atracción por tocar las Letras de Lija, ese
período sensible ha desaparecido, se convierte en un problema patológico,
escribirá las letras invertidas, en fin. Tenemos métodos para ayudar a estos niños,
los veremos más adelante.

Algunas veces, los niños sufren por la forma en la que los adultos les hablaron
cuando eran pequeños. Hay niños que comienzan a hablar muy tarde, otros que
son tímidos y se paralizan cuando tienen que hablar frente a extraños. Esto puede
deberse a que existe un período en la vida psicológica de cada niño en el que
están motivados a platicar: hablan de cosas que no tienen sentido para el adulto.

Otro proceso extraño es la forma en la que se concentran para desarrollar y


superar estas dificultades. Quieren ser el centro de interés, estos defectos pueden
verse sobre todo cuando llega un recién nacido. Se puede comprender que
resienta la llegada de alguien nuevo que va a tomar la atención de los adultos.
Entonces el niño mayor tratará de atraer esa atención y, usará las palabras. A esta
edad los niños son capaces de hablar y hablar y contar las fantasías más
inverosímiles con tal de atraer la atención, nosotros les decimos mentiras: pero es
muy diferente de cuando los adultos deliberadamente mienten. Ellos, los niños
pequeños, están tratando de tener nuevamente la atención. No debemos de
preocuparnos por las consecuencias de estas “mentiras” en el plano moral de la
familia o en el carácter del niño. Si el niño es tomado en cuenta y regañado, se
sentirá motivado a intentar algo más. En una ocasión conocí a una niña pequeña
que había alcanzado esta etapa. Ella comenzó a actuar de esta forma para atraer
la atención, pero no lo consiguió, entonces la siguiente etapa fue que comenzó a
hablar sola, hablaba para ella misma y lo hizo durante 3 o 4 meses y luego paró
de hacerlo.

Los niños no pueden hablar al nivel intelectual de los adultos, sólo pueden hablar
de las cosas que saben. El proceso de la naturaleza que consiste en ayudar a la
formación del pensamiento del niño es continuamente evaluado, hasta que el
mismo subconsciente se da cuenta de que no hay más forma de expresión.
Entonces, podemos tratar de ayudarlos dándoles oportunidades de conversación
entre grupos de niños y adultos. Les contamos historias y les pedimos a los niños
que nos las repitan. Algunas veces las dicen muy bien, pero con frecuencia
cometen muchos errores. Si os adultos los corrigen, pararán de h hacer el intento
por repetirlas, en cambio pueden corregirlos de forma indirecta, repitiendo la
historia de forma correcta dirigiéndose a otro adulto, pero no al niño mismo. Si
dicen la historia correctamente o no, no importa, lo que nos importa es motivarlos
a expresarse, a hablar. Por errores como estos, nos encontramos con problemas
en algunos adultos que se paralizan y no logran comunicar.

Traducción cortesía de Tita Llerandi.


MARÍA MONTESSORI OCTUBRE 19, 1946
LECCIÓN 20

En esta carta me estaré refiriendo a los niños de cuatro años y medio y cinco años
– y con estos niños uno de los errores que veo en las escuelas Montessori es que
tan pronto como los niños empiezan a escribir, las maestras esperan que lean.
Esto lleva con frecuencia a que los niños se resistan a leer y les desagrade
escribir. El problema es psicológico. Aquí está una actitud definitiva de mente que
está presente cuando la mente está trabajando en algo con interés especial. Si
una persona está muy interesada en una cosa es difícil, en ese momento, que se
interese en otra. Si tú interrumpes este ciclo de desarrollo estarás destruyendo el
interés, al menos que el interés sea muy profundo. Es muy parecido cuando la
mamá interrumpe el juego del niño pidiendo que se aliste para la cena o para ir a
caminar. El niño pide más tiempo de juego, pero no es posible. El niño se siente
rebelde y desea resistirse. Es lo mismo con la escritura. El niño ha descubierto
algo. Tiene un juguete nuevo. Ha descubierto que puede analizar los sonidos de
las palabras que posee, él puede traducirlas en sonidos y externarlas en escritura.
Es un borbotear del lenguaje que posee. Si intentas interesarlo en algo más no
tendrás resultado. Parece lógico para nosotros que le guste escribir y leer. Pero no
es así. Para el Guía podría ser una dificultad, ya que las mamás están
acostumbradas a las escuelas ordinarias donde hay una actividad ordenada –de
libros copiados y lectores. Mientras que el niño Montessori se va a casa y cuando
le preguntan le dice a su mamá que no ha hecho nada. Entonces la madre
empieza a preguntar ¿Cuándo va a empezar a leer y escribir mi hijo? Si hay tan
pocos alumnos, etc., y el Guía tiene que ganarse su sueldo, tales afirmaciones
dan lugar a la tentación. Pero El Guía debe explicar el lado psicológico. Otra
dificultad es la carencia de fe en el niño. Uno los ve dibujando y dibujando o
escribiendo y escribiendo y uno empieza a temer que no están haciendo nada
más. Uno empieza a estimularlos.
Es afortunado si el niño viene a la escuela a los cuatro años ya que entonces no
se esperará que lea por ley sino hasta los cinco o seis años, dependiendo del
país. Entonces es fácil dejar que el niño vaya a su propio ritmo. Hay momentos
cuando es obvio que el niño está listo para leer. Si sales con el niño ellos
empiezan a poner atención a las palabras en las tiendas, ventanas, etc. es
entonces que la lección de lectura deben ser presentada. La actitud de la mente
es despertar. Vayamos a la lectura. ¿Lectura? ¿Significa que es para ver si el niño
sabe las letras? O ¿es para ver si el niño entiende el sentido de lo que lee? O ¿es
para ayudarlo a leer en voz alta? ¿Cómo puede saber El Guía si el niño entiende
si no lee en voz alta? De otra forma puede que solo este viendo las letras. Pero
¿alguna vez te has dado cuenta de lo que significa leer en voz alta? Es difícil de
hacer y necesita una mente especializada. Un puede tomar una pieza de papel y
leerlo sin ninguna expresión de sentimiento. Pero en realidad significa dar todas
las expresiones y sentimientos del escrito. Uno intenta transmitir al escuchar el
significado de las emociones de la persona que las escribió. Para poder hacer esto
los ojos deben estar listos antes que la boca. Y el primer paso que usualmente se
demanda para el niño es que pueda leer en voz alta. Sin embargo, reflexionemos:
cuando entras en una biblioteca hay silencio. Imagínense si todos ahí tuvieran que
leer en voz alta, al igual que los niños tienen que leer. La esencia de la lectura es
alcanzar el significado de la palabra. En orden, para encontrar, más adelante, si
los niños entienden lo que están leyendo, entonces estamos trabajando con lo que
llamamos “lectura interpretativa”.
Como maestros que deseamos enseñar a los niños a leer, podemos mantener su
interés solamente si le damos la guía por medio de la que, si ellos quieren, podrán
obtener todo lo que hay que aprender de la lectura. Debemos guiarlos hacia una
“lectura total” y no conformarnos con la lectura superficial. Muchos de nosotros
somos lectores superficiales – lectura para nosotros es solo un tipo de droga, un
entretenimiento temporal, pero no tenemos la paciencia para ser entretenidos:
siempre estamos volteando las hojas hasta la última. Si mucha gente lee la misma
historia te la repetirán de manera diferente; ya que cada uno de ellos estará
impresionado de diferentes aspectos de la historia; y en la mayoría de los casos a
ti te impresionan solo las partes que están relacionadas con lo que ya posees.
Poco son “lectores totales” ya que la mente no está entrenada para ello. Tienes
que guiar a la mente paso por paso para tomar de la lectura la totalidad de lo que
se expresa. Si analizamos los factores de lectura encontramos que hay diferentes
aspectos. Cada materia tiene dos aspectos principales: llamaremos a uno
anatómico, el otro funcional – por ejemplo: en geografía – es el aspecto anatómico
el que se discute cuando decimos que tal formación de tierra es una montaña y
que otra formación de agua es llamada un rio o lago. Estamos estudiando lo
funcional cuando encontramos que el rio drena el agua de la tierra o que las
montañas quiebran el viento y recolectan el agua.
Hay todavía otro factor a considerar – es la construcción – para cada mente hay
una forma diferente de expresarse a sí misma – las palabras son usadas de
manera diferente. Un buen escritor puede expresar en tres o cuatro palabras un
sentimiento o pensamiento el cual otra persona expresaría en 13 o más palabras.
Uno debe darse cuentas que a través de la lectura se entra en una “inmensa
jungla de pensamientos.” Uno está en contacto con el pensamiento de miles de
generaciones que han asentado su pensamiento en libros o artículos. Un niño
tiene que encontrar su forma a través de una masa enorme de pensamientos. Es
confrontado con la exploración de los pensamientos de todo el mundo. Es como
pedirle al niño quien solo ha vivido en su jardín trasero, que vaya a encontrar su
mundo a la selva. La cantidad por sí misma es abrumadora. Para poder guiar al
niño por esta riqueza de palabras debemos darle una justificación que le permita a
su mente ver y explorar estas cosas por sí mismo. No hay nada más efectivo para
esto que la habilidad que tiene el hombre para ordenar y clasificar. Si haces uso
del orden y clasificación, el niño podrá encontrar su propio camino hacia la lectura
inteligente. La gramática tiene como propósito ese orden y claridad. Puede
parecer raro empezar la lectura con gramática. Pero es el alfabeto del
pensamiento. Había lenguas antiguas en que cada palabra tenía una señal propia.
En la vieja China, creo, tenías que aprender miles de señales para poder escribir.
Con el alfabeto, uno podía expresar muchas palabras con pocas señales. La
clasificación del sonido hizo fácil aprender y usar miles de palabras. La gramática
sirve en mucho de esta manera –cada palabra por si misma se separa y se pierde;
en gramática hay solo nueve partes –todas las miles de palabras caben en uno de
estos nueve grupos. Con el conocimiento de los nueve grupos la mente puede
realizar las funciones y el uso de cada palabra. Por ello, al inicio de la lectura
empezamos dando una visión de la función de los diferentes grupos de palabras.
No vamos a dar la visión de las funciones para que el niño sea capturado con la
función de cada palabra. Damos esta ayuda para la construcción del lenguaje al
inicio, no al final. Es uno de los factores básicos de la lectura y escritura. Por ello,
damos estas dos ayudas prácticas al inicio. Debemos también considerar la
psicología del niño como individuo. Para poder interesarlo en la lectura, en el
principio debes apelar a su intuición. Mucha de la lectura es hecha por intuición y
no por los ojos y el razonamiento. Lees unas pocas palabras y sabes lo que sigue.
Damos símbolos como una ayuda para los niños, para que visualicen y realicen la
función de las palabras. Cuando dimos el alfabeto dimos los símbolos para los
sonidos. Un símbolo es una gran ayuda mental para la claridad y la concentración.
No hay quizá nada más abstracto que la religión, pero encontrarás que todos esos
ideales y pensamientos están simbolizados. El símbolo surge y centra al interés.
La pequeña estatua puede que no sea como el santo, pero uno es capaz de
concentrarse en frente de esas figuras. Encontraras a gente que dice que ellos no
creen en ninguna religión, pero veras que tienen algún tipo de bandera o símbolo.
Necesitan algo en qué concentrar todos los sentimientos y pensamientos dentro
de ellos. Un símbolo es como una solución saturada: la substancia está ahí en
gran cantidad pero en una manera invisible y difusa, como un cristal y el contenido
se vuelve visible bellamente cristalizado. La sustancia estaba ahí antes; pero
ahora es visible y clara. Por ello usamos símbolos para ayuda r a los niños a darse
cuenta de la función.
En países donde son muy afortunados al tener un lenguaje, los maestros se
complican por el hecho de que a los niños no les gusta leer. En esta conexión,
recuerdo una de las demostraciones más maravillosas que he visto dar a la Dra.
Montessori. Fue durante una de las primeras lecciones de lectura. Teníamos
pocos objetos, jarra, hombre, jamón, tronco, biberón. Estos objetos son sólo de
ayuda. Tu función como guía es abrir el camino para los niños que deben estar
activos. La Guía (alemana) levantó un trozo de papel “ahora lee esto – s-t-a-m-m”
(que es tronco en alemán)… nada más sucedió, entonces dijo que el niño no
estaba interesado. La Dra. Montessori vio esta situación – ella le preguntó a la
Guía “¿Por qué no lo dices más rápido?” “stamm” se dirigió al niño y dijo “stamm,
stamm, stamm” El niño se dio cuenta que la palabra era stamm. Estaba feliz. “Sé
cómo leer.” “Debo decirle a mi papá.” Y al final tuvimos que telefonear al papá
para que él pudiera escuchar todo sobre lo sucedido. La preparación mantiene el
interés vivo; en la etapa final sólo la intuición del niño puede traer la realización
que los sonidos aislados unen para hacer una palabra. Cuando se alcanza esta
etapa el trabajo directo de la Guía ha terminado. El niño no parará de leer ahora;
recuerda que el niño está lidiando con su propio lenguaje. Ve los objetos, no son
animales extraños. Sabe sus nombres; cada trozo de papel escrito corresponde a
un objeto. ¿Por qué sucede casi milagrosamente? Bueno, supón que un día ves al
Sr. Truman en una cena; bueno, ahí está, un hombre amable, casi un político. Otro
día, ves a Sr. Harriman, un caballero muy interesante, lleno de historias sobre
Rusia y España. ¿Sr. Byrnes?, lo has visto muchas veces, claro que es un amigo
de la familia. Cada uno de estos hombres es una individualidad separada, bien
distinta, reconocida. Un día tú los ves a todos juntos: Sr. Truman, Sr. Harriman, Sr.
Byrnes, y dices: los conozco a todos, a los tres. Pronto me doy cuenta que todos
son miembros del gobierno de los Estados Unidos. Los conozco por separado,
como conozco cada letra por separado. La cosa nueva es darse cuenta que juntos
ellos forman un gobierno de los Estados Unidos. Necesitas el enlace, en lectura lo
obtienes con la ayuda de la Guía.
El interés es ayudado por le objeto, pero la intuición juega una gran parte. El
interés de descubrir hechos más allá, hace que el niño siga y siga. El problema
ocurre si el maestro no los ayuda de esta manera. Si en lugar de eso, ellos
levantan una tarjeta s-a-r-t-e-n. Dicen los sonidos, los unen para hacer una
palabra y luego ponen la tarjeta junto al objeto. Todo el trabajo está hecho. No hay
más que el niño pueda hacer. Pero, el niño quiere descubrir por sí mismo cual
tarjeta pertenece a qué objeto. Es el interés de la personalidad, no la parte externa
de poner las tarjetas en los objetos lo que cuenta. Es el interés lo que los lleva
hacia adelante.
Puedes aumentar la colección de objetos. Poco a poco añade más. Un día toma
un nombre sin fonética como “queso”. De muchos objetos que tienen nombres
fonéticos hay uno que no lo es. Otra vez la intuición del niño llega. Tomó el pedazo
de papel, no la podía leer, así que la dejó a un lado. Entonces miró los otros
pedazos de papel y los colocó al lado de sus objetos. Luego se dio cuentas de que
solo quedabas un queso y el pedazo de papel con la palabra que no podía leer.
Por ello, el queso debe pertenecer a esa palabra. El niño fue con la Guía muy
seriamente y dijo “esta debe ser queso, ¿es así?” “Sí claro, así es. Qué grandioso
que la puedas leer.” “no, no la pude leer. Era la última tarjeta que me quedaba.” El
niño preguntó ¿Cómo es que esta palabra hace queso? Parece como q-u-e-s-o.
Los otros niños están igual de interesados. Ellos fueron con la Guía. La Guía le
dijo “Sí, es extraña, esta combinación de letras en nuestra lengua suena ke.” El
niño inmediatamente fue con sus amigos “¿saben que q-u-e suena ke?” se
dirigieron a la Guía para más palabras con ke. Así es como pasó. También
vinieron conmigo para ayuda, pero fui inútil ya que no conocía el idioma. Después
de que estos niños habían agotado el conocimiento de la gente a su alrededor se
ayudaron de un diccionario. El siguiente día ellos trajeron diccionarios y trabajaron
en ellos por cinco días. Cuando el trabajo en esa combinación de letra se había
agotado, pidieron otra combinación.
Nuestro trabajo hasta ahorita ha sido lo que le llamamos anatómico. Un nombre
corresponde a un objeto. Fue en este punto donde presentamos de nuevo las
tarjetas que los niños habían usado antes cuando estaban aprendiendo nombres.
Entre estas tarjetas hay muchos fonogramas- ch-ango. Ellos se dan cuenta de que
el sonido sueno como es porque ya conocen la palabra. Así que pensamos darles
otro ejercicio. Usamos las mismas tarjetas como las dimos para biología y
geometría – pero con los papeles con la palabra separada. Si no puede leer la
palabra, su intuición puede ayudar. Él sabe cuál es el animal, puede ver el pedazo
de papel con la palabra, busca la palabra mono pero no empieza con m, así que
no es lo que necesita, pero ch es como inicia la palabra que tiene, entonces busca
chango, hasta que asimila.
Encontramos que estas dificultades ortográficas son un gran punto de interés para
la lectura.
Aquí hay otro ejercicio, otra ayuda que el Guía puede dar. Hay una caja, dividida
en compartimientos, con botones, clavos, estampas, ganchos, de hecho, todo
objeto pequeño que encuentres. Dile al niño, “dame el botón.” Ella te dará uno – di
“no, ese es un botón, no es el botón.” “Ahora dame el clavo.” “No, ese es un clavo,
yo quiero el clavo.” “Ahora dame el gancho, es correcto. Cuando sólo hay un
objeto, es el gancho. Un clavo, cuando es uno entre muchos. Ahora, ve si tú
puedes darme lo que te escribo. –un clavo –un botón” Hay sólo dos palabras por
papel, pero la gramática ya empezó. Esta distinción entre el uso de un y el o la
trae a una claridad de la mente. Cuando el niño ha tomado un botón, le damos un
símbolo para ponerlo sobre las palabras: un triángulo negro grande sobre la
palabra botón, el nombre de la cosa y un pequeño triangulo sobre el o la o un
dame un clavo (escríbelo). Ponle los símbolos también. Cada sustantivo tiene un
triángulo negro sobre él; ellos son las palabras que indican objetos. Hay miles de
palabras indicando sustantivos. No hay necesidad de decir esto a los niños, pero
el uso del triángulo indica la función de los sustantivos en la mente del niño.
Gramática, simbolizada de esta manera, aísla las funciones de las palabras en las
mentes de los niños. Esta gramática ayuda a la lectura. Forma partes de lectura y
es una guía. A través de ella el lenguaje se vuelve claro para los niños.
Quizá muchos días más tarde procederé a otro juego. Tengo botones rojos,
verdes y azules. Di al niño, ahora ve si tú puedes decirme cual botón es el que
quiero: escribe el botón (te da uno). No, no el correcto. En otro papel escribe rojo.
¿Podemos decir el rojo botón? No, es el botón rojo. Intenta otras maneras, “rojo el
botón”. “rojo botón el”. Solo una forma es correcta; las otras te dan risa. Pero la
importancia de la posición del adjetivo y el sustantivo queda clara.
Ayuda a la mente del niño a ver la función y posición de los sustantivos, adjetivos
y artículos. Él empezara a buscarlos en todo lo que lea.
No nos limitamos a estos juegos, no damos estas cosas y les quitamos los libros.
Vi a un niño de cinco años tomar un libro para once años. Le pregunté si sabía lo
que estaba leyendo. Dijo que no pero que podía identificar esas palabras. Así que
no teman a darles los libros para leer junto con todo este trabajo.
Traducción cortesía de Tita Llerandi
MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 18, 1946
LECCIÓN 21

Para poder aprender a leer, la mente del niño deber ser ayudada a explorar el
mundo del habla. Le debemos de dar las llaves para hacer del medio ambiente del
habla, una educación sensorial; hacer el mundo externo claro para él. Hay ciertas
cualidades que deben ser aisladas y luego presentadas. Son estas cualidades
especiales las que ayudan al niño a que le sea clara la idea de lo que es el
lenguaje en sus diferentes partes: incluyen el significado, posición y función de las
palabras. Después que al niño le han sido presentadas a algunas de las
dificultades de ortografía, hay ciertos ejercicios clasificados que le ayudan a
superarlas. Debes darte cuenta de que sólo son ayudas. Así como la clasificación
de los colores y de las formas de geometría son ayuda para la observación y no
son la enseñanza de los colores o de la geometría. De hecho, fue hace mucho
cuando dimos los nombres de los colores y de las formas geométricas. Fue una
clasificación sensorial la cual dio una idea de la mente geométrica y de color. Tal
fue el caso, que cuando le dieron los nombres, el niño no podía dejar de
mencionar los nombres y formas a su alrededor. Ya los había visto, pero no
habían alcanzado su consciente.
En lectura, tenemos que educar a la mente a ver ciertas cualidades. Luego, estas
cualidades atacarán a la mente. ¿Cómo podemos hacer esto? Primero debemos
tocar otro punto. Le damos los fonogramas primero y luego otro material de
lectura. Damos tres cosas de manera paralela. Un día damos los fonogramas, otro
las funciones de diferentes partes del lenguaje y junto con eso damos lectura. La
materia de la lectura está siempre ahí. El niño puede tomar libros que no sabe
entender. Había un pequeño niño que había tomado ese libro, cuando le
preguntaron que si podía leerlo, él mencionó todo lo que sabía. Estaba explorando
el libro para encontrar algunas palabras que él sabía. No alcanzo a entender el
sentido del libro. Su hermana tenía un libro hermoso con ilustraciones de biología.
Tenía fotos e historias de leones y tigres. Ella le leía cuando él le pedía. Él podía
ver las fotos. Si ella estaba ocupada, se le podía ver al niño con una expresión de
profundo estudio; uno podía pensar que estaba leyendo, pero solo podía leer
algunas palabras. Aun así, él repasaba cada página leyendo algunas palabras que
conocía. Así que no tengan miedo. Estos libros difíciles llevan al niño a que lea.
También hay libros que son especialmente preparados para los niños, libros
atractivos con fotos e ilustraciones. No les den los libros tradicionales, donde hay
una palabra por dibujo, esto los limita. Algunos de los libros de nuestros niños son
escritos con bases científicas. Contienen definiciones de sus estudios en
geometría y en biología. Tenemos la definición en una página y la ilustración en
otra. Fue una gran sorpresa darnos cuenta lo que los niños aman estas
definiciones. Nos dimos cuenta después que era porque ellos tenían una
observación subconsciente de estos hechos; ya los habían visto. Esto les permite
disfrutar al tener las definiciones sobre los hechos en pocas palabras claras. Uno
hubiera pensado que estaban muy secas para leer y que a los niños no les
gustarían. Los niños pequeños tomaron estos libros que habían sido preparados
para los niños de nueve años para ayudarlos a memorizar la definición. Algunas
veces la definición estaba escrita en una tarjeta y la figura correspondiente tenía
que ser encontrada para que hicieran juego con sus pares. Era trabajo aburrido
para los niños de nueve años, pero nos dimos cuenta de que los niños pequeños
venían a la mesa de los niños más grandes y tomaban el trabajo con gran interés.
Cuando los niños grandes habían terminado, los niños más pequeños tomaban el
material y lo llevaban a su mesa.
Esta experiencia indicaba claramente que el trabajo debería ser hecho por los
niños para obtener los mejores resultados. Están los folletos, fonogramas y
funciones.
Fonogramas. Sé que este trabajo también puede ser hecho en la etapa del
alfabeto móvil. Siempre tengo el miedo de que los maestros que no tengan
suficiente conocimiento de la psicología de los niños puedan imponerles estos
ejercicios para que puedan superar las dificultades en ese periodo. No todos los
niños de entre 4 y 41/2 están interesados en hacerlos.
Hay diferentes pasos que se deben tomar:
El primer paso es tomado después de que los niños han encontrado uno de esos
grupos de dificultades ortográficas como que. Hay un gran sobre en el cual hay
palabras con las diferentes formas de pronunciar ese sonido. (Sólo palabras con
esa combinación que-qui.) Dentro de este sobre hay sobres más pequeños con
tarjetas con las palabras que tienen estas dificultades.
Los sobres están preparados para que las maestras los usen. Sigue el mismo
procedimiento para los ejercicios sensoriales. Primero da los contrastes y las
gradaciones después.
Puede tomar un sobre de los sonidos específicos.
1.- Hay series de fotos para palabras que contienen el sonido. El niño toma una
tarjeta y luego buscan la palabra que corresponda a la foto. Los pone juntos. Hay
series de fotos y palabras para las palabras que contengan diferente combinación
de letra.
Esta es una presentación de las dificultades. Pero puede suceder que los
esfuerzos bien intencionados del maestro para multiplicar el aparato, limite la
mente del niño a estos pequeños objetos y tarjetas. Puedes hacer un esquema
comprensivo con objetos y fotos y aun así dar pocas palabras. Necesitamos
ayudar al niño a que se dé cuenta de que ahí están esas combinaciones, luego
ellos buscaran por sí mismos en el ambiente de lenguaje. Si los limitas, el interés
se termina. El material debe servir como un trampolín hacia una mayor actividad.
Hay ejercicios paralelos con sobres que contienen las fotos de las diferentes
partes de insectos, hojas, flores, etc. Hay tarjetas con los nombres escritos en
ellas para ser apareadas con la foto, otras tarjetas tienen la foto con el nombre
escrito abajo.
2.- hay pocas palabras que contienen el sonido hue en el sobre. Estas listas
pueden cambiarse, los niños reproducen estas palabras en dos alfabetos
coloreados y recortados. La hue siempre está escrita en el mismo color y el resto
de la palabra de otro color.
Si las palabras del sobre están escitas en dos colores, el interés del niño no será
muy grande, así que escribe en la lista todo del mismo color.
La actividad y la actividad mental traen claridad a los niños. Si los niños leen la
lista sin actividad solo van a tener una vaga impresión, nada vivido quedará.
Claridad e interés son llevados a la mente con actividad. Así que mostramos a los
niños como escribir estas palabras en los dos alfabetos coloreados.
Las listas de palabras de los alfabetos deben ser comprensivas de tal forma que
se puedan cambiar hacer el ejercicio pueda ser hecho con diferentes palabras.
3.- listas mixtas. Palabras de ambas listas revueltas. Los niños las hacen con los
alfabetos móviles.
4.- diferentes fonogramas con el mismo sonido. Esta vez con fotos solamente.
Funciona como verificación. Si el niño comete errores, entonces puedes ver que el
niño no recuerda la combinación. Tiene que reproducir las palabras de memoria,
las puede verificar de las listas. Sus errores ayudan a arreglar la ortografía.
5.- Dale tres alfabetos coloreados para que pueda enfatizar la vocal que se
pronuncia y la otra que es más o menos silenciosa. Rojo para la vocal o que es la
que suena y rosa para la letra que no suena.
Con estos y otros ejemplos los niños adquieren un gran conocimiento de las
diferentes formas de ortografía. A los seis años de edad ya pueden deletrear bien.

6.- Un sobre de rompecabezas con tales palabras, que parece que no siguen
ninguna regla. (Dar 2-3 palabras primero, aumentarlas después de unos días
hasta que los niños estén familiarizados con ellas.)
Los fonogramas son meramente una ayuda. No los exageres. Cambia las listas y
los objetos y dales muchas más cosas para leer también. Sirven para abrir una
puerta; enfocan la atención y son un motivador para la lectura.
Ahora pongamos unos ejemplos en el lado funcional: Juego de “el” y “un”
Tengo una caja con un número del mismo tipo de objetos en cada compartimiento:
botones, estampas, clips, cualquier objeto pequeño. Hay un gran botón rojo, un
pequeño botón morado y un mediano botón verde. Pido al niño que vea cuál de
estas cosas quiero y luego escribo “un botón” en un rollo de papel. Lo rompo y le
pido que me de lo que he escrito. Él me da cualquier botón, luego yo digo “no, ese
no es el correcto. Yo quiero este.” Y escribo rojo. El niño lee “botón rojo.” No, así
no se dice, ¿verdad? ”No” Así que rompe el papel y acomoda las palabras en el
orden correcto para que suenen bien. “el botón rojo” Luego continua con el juego.
Pide al niño que te de lo has escrito.
Motiva a los niños a leer grupos de letras que den el sentido. Para corregir las
funciones de las palabras, pon símbolos sobre las palabras. Un triángulo negro
sobre el sustantivo, un triángulo más pequeño azul sobre los adjetivos, un
triángulo muy pequeño sobre los artículos. Esto ayuda a cristalizar las funciones:
siempre pide a los niños que pongan los símbolos sobre las palabras. Para este
juego hay pequeños juguetes representando pequeñas unidades sociales, una
granja, una escena de pesca o el interior de una casa o una villa. Si es una granja,
ponla, escribe en un pedazo de papel “el caballo negro” etc. Pon el pedazo de
papel en el objeto y pon los símbolos sobre las palabras. Escribe “la casa blanca”,
“la vaca café” etc. Cada vez hay tres palabras y cada vez los tres símbolos
triangulares están iguales. Está claro que aunque hay innumerables palabras,
siempre son los mismos triángulos los que se usan.
Pon tres flores en la mesa. Ahora veo una flor que quiero. Escribe “la flor amarilla”.
Pon el papel con los símbolos en la flor. Haz lo mismo con cada flor. Luego di,
“ahora miren” y toma las tres flores y amárralas con un listón. Luego escribe “la flor
roja y la flor amarilla y la flor morada”. Esto da la primera idea de una conjunción.
Tres cosas que están aparte, ahora están unidas en un todo. Sólo muestra la
función, no hay necesidad de preocuparte por la palabra de conjunción. Escribe la
palabra “y” en el papel, de un color más brillante y pon el símbolo encima de él. El
símbolo esta dibujado para representar dos uniones de una cadena.
El Guía luego cambia la posición de unas tarjetas; “la flor amarilla y la flor roja y la
flor morada”. Los símbolos se quedan igual, el bonche de flores se queda igual.
Debo decirte algo que da miedo a los niños si leen libros. El niño puede que lea
todas las palabras en una página, pero la página de un libro es más de lo que cree
poder leer, la cantidad de palabras puede asustar al niño. Así que haz una lista
larga de muchos objetos, no importa que tan larga sea, el niño estará feliz.
También estará emocionado de saber todo lo que puede leer.
“La flor roja y la flor amarilla y la flor morada”, “el florero blanco”, “en” esta última
palabra une dos grupos de palabras. Hace que las flores cambien su posición.
Ahora están en un florero. El símbolo para la preposición es una flecha verde.
Toma la granja. Escribe “la oveja gris”, “en”, “la carreta amarilla”. Dile al niño que
cierre sus ojos unos minutos y cambia el orden “la carreta amarilla en la oveja
gris”. ¡Cuando cambias el orden con la conjunción nada pasó! Aquí la preposición
es la misma pero la posición de la ha cambiado y el resultado es desastroso. Las
preposiciones deben estar en una posición definitiva para poder dar el sentido
requerido. La función y posición de la preposición ha sido clara.
Esto es lectura interpretativa, no es gramática. Estamos dando a los niños
ejercicios en lectura, ellos interpretan el sentido y conllevan la acción.
Hay diferentes juegos para enfatizar cada pate de leguaje.
Juego de Adjetivos
Hay un juego de triángulos. Todos los tipos son recortes en cartón de colores. Yo
escribo “el triángulo escaleno” por ejemplo. Hay tres tamaños de cada uno de
estos triángulos, haciendo 63 en total. Pueden ser distribuidos en el piso. Ahora,
de todos estos triángulos, quiero uno en especial. Así que escribo “el triángulo”. El
niño me da un triángulo. “No” le digo, “yo quiero” y escribo “el triángulo amarillo”.
De esta manera, todos los triángulos que no son amarillos, son eliminados.
Guarda todos los triángulos, excepto los que son amarillos. La búsqueda queda
restringida a un grupo especial. Yo escribo “el triángulo grande”. Así que todos los
triángulos medianos y pequeños desaparecen. Ahora quedan siete triángulos. El
niño puede darme el triángulo de ángulo recto. “No”, yo escribo “el triángulo
isósceles”. Esto deja sólo tres triángulos. El niño me da uno. “No” yo escribo,
“ángulos obtusos, triangulo isósceles amarillo”. Con estas palabras, he podido
obtener el triángulo que yo deseaba de los 63 triángulos. Este juego muestra el
poder de detección de los adjetivos. Resalta la fuerza de los adjetivos. Después de
éste puedes escribir un sustantivo con muchos adjetivos que lo califiquen.
Presentación Visual. Entre más edad tenga el niño, más damos la ayuda de
representación visual. Entre otras cosas, damos los símbolos que van arriba de las
palabras. Los niños empiezan a darse cuenta de que el artículo, adjetivo,
sustantivo están siempre juntos. Como la madre, el bebé y el niño pequeño. Uno
está en los brazos de la madre y es el que está siempre pegado a ella, mientras
puede haber una pequeña niña que viene en el camino con la mamá.
Colección de la Granja. Saca todas las tres palabras para describir cada uno de
los objetos. El árbol verde, la mula negra, el viejo granjero, la vaca café, etc., etc.
Los papeles están puestos cerca de los objetos. Ahora juega le Juego de la
Preposición. Esto les da a los niños una idea de la función de la preposición.
Muchas palabras pueden se pueden combinar como una preposición, una frase de
preposición, la casa verde – en medio de – el campo verde. El establo café – al
final de – el campo verde. El árbol grande – en frente de – la casa blanca. El
puerco rosa – debajo de – el árbol grande.

Traducción cortesía de Tita Llerandi


MARIA MONTESSORI OCTUBRE 19, 1946
LECCIÓN 22

Uno puede empezar a trabajar con cualquiera de los ejercicios con un niño:
entones es probable que muchos niños sean atraídos y muchos que estén listos
para leer pedirán ser incluidos en el grupo. Así que muchos niños se van a unir a
estos juegos para la preposición o adjetivos; puedes dar tarjetas a todos ellos. Las
lecciones son muy vivaces. Después de un rato los niños jugarán solos, así que
debes tener papeles listos para que los usen. Te acabo de dar la primera
presentación: todos los nombres están escritos, al igual que las preposiciones y
las frases de preposiciones para más tarde. Pero cuando presentas el juego,
escribe las palabras en ese momento, los niños te ven y lo llevan a cabo. Es
mucho más efectivo que solo dejarlos con los papeles impresos. Con los adjetivos
nunca los dejes adivinar hasta el final, luego la función se aclara muy fácil: de otra
forma, solo se convertirá un ejercicio de lectura. Tu trabajo como guía es dar esta
claridad de una manera astuta. Después de una lección así, habrá oportunidades
para llevar a cabo el ejercicio individual.

Se requiere de una preparación indirecta para la lectura, la mente la necesita para


esta exploración con razonamiento. El método de aislamiento es necesario para la
exploración del medio sensorial. Tuvimos que dar este método de observación
aunque el niño estaba siendo ayudado por sus sentidos. Ahora no hay
presentación de los sentidos para ayudarlo en la exploración del mundo
intelectual; por ello, es que necesitamos una preparación de la mente para ver
todas las diferentes partes. Puede que se den distracciones de atención hacia los
detalles que pasarán desapercibidos, detalles de belleza o fealdad. Las diferencias
entre una mente educada y otra que no lo está recae en el hecho de que uno
educa no los sentidos, sino la inteligencia. Cuando un niño ha trabajado con el
Gabinete de Resaques, no desde ese momento va a ver triángulos o cuadrados
por primera vez, pero sí que por primera vez los verá de manera inteligente. Si
esta preparación de la inteligencia fue necesaria para el trabajo sensorial, es
todavía más necesaria para la exploración del mundo de ideas y pensamientos
que se plasman a través de los símbolos del alfabeto. Uno debe dar esta
preparación de la mente se puede encontrar algo vago o desagradable, es lo que
sucede cuando encuentras a una persona que pasó por el mundo sin una mente
preparada. Cuando estaba chica, tenía gran interés en Zoología y Botánica y
podía estudiarlas, el interés sigue vivo aun. Así que ahora, aun cuando estoy
hablando de otra materia de gran importancia, necesito moverme para ver quizá
alguna planta con hojas que son nuevas para mí; entonces si me preguntan por
qué corté la presentación, me veo obligada a admitir que no me había dado cuenta
que los interrumpí. La mente está preparada bajo ciertos lineamientos, es el
subconsciente que lo dirige a uno. Tiene que haber una preparación de la mente
para poder ver ciertos detalles. Debe ser de suma importancia para el
subconsciente. Vi algo que no era familiar, que no podía clasificar en mi mente.
Debía tratar de encajarlo en lo que yo sabía. Para algunos no hay ninguna
atracción en la jungla: consiste en plantas verdes y animales feroces. Es porque
van por ahí sin mentes preparadas: los ojos ven, los oídos oyen, pero eso es todo.
Existe el mismo daño al leer con una mente no preparada. Uno obtiene lo mínimo.
No es suficiente para los niños obtener solo el esqueleto pues va en contra de la
naturaleza que ha puesto actitudes muy definidas entre nosotros: la atracción o
repulsión por ciertas cosas. Si lo vemos desde el punto de razones utilitarias
debemos estar convencidos de que será más económico y menos costoso en
cuanto a esfuerzo tener ciertas cosas, por ejemplo, ¿por qué la gente tiene nariz?
¿Por qué tienen dos ojos? ¿Uno sería suficiente?, o por ejemplo la belleza, que
sirve para guiarnos por la vida y para darle continuidad y sentido, hasta nosotros,
sin ser vanos, nos gusta ponernos guapos; las señoritas se rizan el cabello, por
ejemplo, principalmente lo hacen porque se admiran a sí mismas, pero también lo
hacen para que las admiren los demás, arreglarse es una forma de respeto y
amabilidad hacia los otros. ¿Por qué la belleza de la lectura no puede ser parte de
la vida? No hay necesidad de quitarle toda la belleza de la vida a la lectura. Si lo
haces, los niños no se sentirán atraídos. Uno debe darse cuenta de que si algunas
palabras están impresas, debe ser por algo atractivo para este grupo de
humanidad, y porque es para toda la humanidad es que tenemos todo un bosque
de atracción que está representado en los libros, son atractivos para la mente.
Debe haber un atractivo que invite a la exploración a lo largo de las líneas que son
un bosque de pensamientos por el que estamos guiando al niño, de tal forma que
pueda hacer en su mente un todo armonioso. Si una persona tiene una mente
educada, se pueden dar cuenta de los puntos de belleza. Los pueden ver
claramente, no solo de forma vaga, es necesario tener una mente educada para
apreciar los detalles; por ello, educar a lo largo de estos diferentes canales de
lectura llevará a la mente a una altura en donde pueda apreciar los puntos de
belleza.
El trabajo con adjetivos, artículos y sustantivos le da al niño la habilidad para ver
cada palabra en su posición y darse cuenta de su función. No es al azar, cada
palabra está llena de fuerza, no des este conocimiento al final cuando ya pueda
leer de manera mecánica pues perderá interés y sentido. ¡Dalo al principio! Es la
semilla de algo que crecerá conforme vaya leyendo más y más a lo largo de toda
su vida. Dale los significados del desarrollo para la inteligencia. La lectura es un
gran crecimiento intelectual, ¡esto es lo que buscamos!
Debemos dar el análisis de cada parte para que cada una esté completa; al final,
habrá una síntesis en cada mente que leerá. Así como en la escritura dimos los
significados de preparación al tocar letras de lija, colorear figuras de resaques de
tal forma que se formara una persona que pudiera escribir, que un todo fuera
formado, sí, toda esa preparación fue dada para un propósito intelectual que es
aún más necesario para la lectura pues cada parte tiene que ser preparada para
obtener resultados óptimos. Hemos visto las partes anatómicas y funciones.
Hemos visto el factor humano completo, la construcción. La habilidad constructiva
es algo peculiar en el hombre. La construcción puede ser física, una casa o un
puente se construyen… O puede ser mental, un pensamiento es expresado en un
párrafo. De acuerdo al grado de educación que hayas recibido, la construcción
que hayas producido será bonita o no. Escribir no es solo la habilidad de registrar
un pensamiento después de otro. Hay cierta belleza de fondo que es la que hace
que una pieza de escritura sea grandiosa o común. No es solo un problema de
conocimiento de las palabras, sino sobre todo se trata de obtener la habilidad de
agruparlas en una forma atractiva: un cambio de posición en las mismas palabras
hace que un párrafo sea atractivo o desagradable. Esta habilidad no es un don
natural (puede ser natural en pocos: tenemos que tomarlos como nuestros guías).
Por ello, escoge los ejemplos que ofrecerás a los niños de entre los escritores
clásicos por la belleza de sus frases que son reconocidas por todos. Deben ser
elegidos para poder educar la mente del niño para esta apreciación.
Ahora, hablemos del sentimiento en la escritura. Este sentimiento es difícil de
provocar en gente que es indiferente, ya que el sentimiento y la indiferencia están
en polos opuestos. Cuando no existe el interés nada sucede, al menos que uno
tenga un tipo de gabinete de resonancia espiritual. Uno puede leer lo más
hermoso y pasar por pasajes bellamente escritos, pero sin esa sensibilidad,
bosteza y se duerme. Hay palabras que transmiten gran profundidad de
sentimiento en libros de rezos y en la Biblia, pero aun así, la gente bosteza. Es
necesario aprender a vibrar con las palabras. Solo un ser humano puede hacer
esto. Cuando les presentamos a los niños arte dramático es con la finalidad de
que puedan vivir el sentimiento. Si tienen que actuar lo que está escrito y
transmitirlo a otros, deben examinar el escrito para poder entenderlo, deben actuar
de tal forma que otra gente lo pueda entender y sentir.
“Me paré con una sonrisa en mi cara como si yo supiera lo que otros no.” Tengo
que reproducir lo que está escrito a través de las expresiones de mi cara. Cada
palara adquiere una tremenda importancia. Poco a poco ellos empiezan a estudiar
cada detalle y cada palabra. De esa manera alcanzan el sentimiento y a través de
él cada palabra se pone en contacto con el lector, hasta que se obtiene la belleza
de cada parte.
Todo es una ayuda para que la personalidad del niño logre alcanzar esta
apreciación: es imperativo darle al niño esta preparación al inicio de su estudio del
lenguaje. No es algo que se puede dejar para el final pues se torna en algo
artificial para entrenarlo como actor u orador. Debemos ayudarlo a crecer en algo
realmente hermoso. Nosotros como educadores podemos dar esta ayuda.
¿Cómo? Ya te mostré la primera parte, la mecánica: Lee las letras una a una. Dos:
la lectura pasiva interpretativa, en la que el niño no es una parte directa del
desempeño, él interpreta lo que está escrito y mueve objetos alrededor. Tres: en
esta parte toda la personalidad del niño es importante. Esta es la parte que hace
que el niño logre apreciar el sentimiento de la lectura. Se da cuenta de que en
cada libro hay comunión entre la personalidad del lector y alguien, cerca o lejos,
que habla sin elevar su voz. Es una comunión silenciosa con aquellos que
pudieron haber muerto hace miles de años. En cada libro hay un espíritu que está
hablando solo conmigo que estoy leyendo.
Un día puede pasar que haya algo como un juego de preposiciones que estén
jugando. Yo me uniré al grupo de los niños y escribiré algunos pedazos de papel
para ellos: salta, brinca, canta, etc. los niños empezaran a moverse, pero los
objetos están todos inmóviles porque son sólidos inanimados y no se mueven a
voluntad. Esta es la primera introducción con la diferencia entre verbo y el
sustantivo: la diferencia entre energía y materia. Objetos sólidos, concretos, son
firmes y quietos, nada los cambia, pero en el otro hay movimiento constante,
pasan muchas cosas; cuando el movimiento cesa ya no hay nada de energía –
nada queda de los saltos, brincos, trotes, cantos: pero los otros, los objetos, se
quedan. Pero, atención: viste algo mientras la energía duro, sin embargo no
quedan marcas. Esta es una impresión de las diferencias entre la energía y la
materia. Así que es necesario dar verbos energéticos personales para iniciar con
esta presentación. Después indicarás acciones más delicadas. Al inicio da solo
verbos intransitivos. Muéstrales el círculo grande rojo usado para indicar palabras
de acción. Luego diles a los niños que muevan los objetos a la caja. Hay una
relación entre energía y materia. Los objetos ya no están ahí, aunque no han
dejado de existir. Una energía ha cambiado su apariencia y posición. Entre las dos
fuerzas, materia y energía, obtenemos posición. La energía actúa en la materia,
puedo explicar esto a los adultos. Los niños tienen cinco años, todo es una
preparación indirecta ya que la materia la discutimos con ellos cuando tienen siete
años, es hasta entonces cuando lo abordamos. A los cinco años solo damos la
impresión, esta preparación indirecta da una experiencia para el trabajo gramatical
venidero.
Han trabajado con artículo, adjetivo, preposición, sustantivo. Ahora trabajan con el
verbo. Le llamamos lectura dinámica porque los niños empiezan a mover, a hacer.
Es un inicio del arte dramático. Tratan de representar algo a través de sus
movimientos y expresiones. Escríbeles una acción a la vez, una acción que tenga
más o menos expresión energética. Yo escribo caminar, carcajearse, caminar
despacio, caminar rápido. La acción puede ser modificada por una segunda
palabra. Muéstrales el círculo más pequeño color naranja, el cual se usa para
estas palabras. El adverbio es para el verbo, lo que el adjetivo es para el
sustantivo. Hay un cambio físico en la acción al agregar un adverbio. Ahora uno
puede empezar a presentar algo que tiene efecto psicológico. “camina despacio y
orgullosamente” el lado psicológico empieza a tomar parte. La interpretación
silenciosa de estas acciones introduce al niño al hecho de que alguien está dando
un mensaje de manera personal al niño. Solo uno oye: el lector; los otros pueden
ver y adivinar, eso es todo. La comunicación es silenciosa. Los llamamos órdenes.
El control del error se hará manifiesto si el niño no entiende las palabras que están
escritas y hará las acciones de manera errónea; entonces sabré que no está listo
para leer tales palabras y sugeriré que haga algo de trabajo con los programas
preparatorios.
Aquí esta una lista de diferentes tipos de ejercicios. Los enlistaremos ahora, pero
serán para trabajarlos más adelante:
- Ejercicio que requiere una acción.
- Ejercicio que requiere dos acciones.
- Oraciones coordinadas (Él se rio y se sentó.)
- Oración principal y oración subordinada (Si tomo el tren hoy, iré a Bringhton.)
- Tres acciones – principal y dos coordinadas.
- Oraciones subordinadas y oración principal, siempre con el mismo sujeto.
- Oración principal con dos subordinadas.
- Oración principal y oraciones subordinadas con diferentes sujetos.

Traducción cortesía de Andrea García.


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 21, 1946
LECCIÓN 23

Una vez que ya presentaste el estudio de lenguaje como lo describí la última vez,
te darás cuenta de que la clase se convertirá en lo que alguien que no conoce
Montessori imaginaría que es indisciplina. Esto es verdad después de que se ha
enseñado el verbo. Una persona ajena a Montessori que llega al ambiente verá a
los niños saltando, brincando, corriendo, etc. Esto no es indisciplina, esta actividad
es una de las ayudas esenciales para el mantenimiento del interés. Mantiene vivo
el interés de los niños, hace que quieran continuar con el ejercicio y los hace
ansiosos de leer más y más. Después de todo, lo que estamos intentando hacer
es ayudar al intelecto, no a mantener una disciplina perfecta. No estamos
intentando entrenar a muchos soldados, estamos tratando de cultivar la
inteligencia de tal manera que los niños sean la fuerza que conduce y no el Guía.
La ayuda que el Guía debe dar a los niños es darles un vistazo interior a los
hechos que hacen el lenguaje. Uno de estos hechos es concordancia en el
sentido. Ciertas palabras van bien unas con otras. Un juego muy sencillo y
entretenido se juega con sustantivos y adjetivos para ejemplificar este acuerdo
lógico:
Material
El Guía elige unos 20 sustantivos y un adjetivo para describirlos. Los sustantivos y
los adjetivos están escritos en tarjetas separadas. Los sustantivos deberán ser tan
diferentes de cada uno como sea posible y también los adjetivos deberán ser muy
diferentes.
Juego
Pon los sustantivos en la mesa. Mezcla los adjetivos y ponlos uno en frente de
cada sustantivo sin ver si corresponden o no. Lee el resultado: víbora perfumada –
mesa suave – hoja amable – mamá café – marino venenoso – etc. esto entretiene
mucho a los niños.
La segunda parte del juego es poner cada adjetivo en turno con el mismo
sustantivo, viendo cuantos harán sentido con ese. Marino perfumado, (no), marino
amable (si), marino suave (no), marino café (no), marino pequeño (si), etc.
Jugamos el mismo juego con los verbos y adverbios: hablar fuertemente, saltar
suavemente, sonreír dulcemente, etc.
Cambiamos los sustantivos y adjetivos de vez en cuando para que los niños
tengan nuevos billetes para leer, lo mismo haremos con los verbos y adverbios.
La lectura de todos los adjetivos con cada sustantivo hace que los niños se den
cuenta que un nombre puede tener muchas cualidades. Estos dos juegos sirven
para dar a los niños una idea de que ciertas características van bien con ciertos
nombres o acciones. Esto no es solo leer, es sobre todo la cultivación del intelecto.
Hasta ahora el intelecto ha estado recibiendo, pero a partir de este momento
empezara a producir. Todos estos ejercicios son una preparación para la
composición y auto expresión.
Cuando te mostré cómo presentamos el verbo en la última lectura, yo debí haber
explicado que hacemos este ejercicio con un grupo de niños. Cada niño recibe un
pedazo de papel y realiza la acción escrita en él. Hay un momento cuando le
damos al niño no solo ordenes dirigidas a él sino pequeñas oraciones que
describen una o más acciones. Elegimos estas de los mejores escritos clásicos.
Estas oraciones no están dirigidas personalmente al niño, por ejemplo: “Ella sacó
su pañuelo del bolsillo, lo desdobló y se secó las lágrimas.” Estas oraciones están
escritas en pedazos de papel. El niño las lee y las interpreta.
Clasificamos estas piezas de lectura de acuerdo al número de acciones que hay
en cada una.
- Primero le damos pedazos de papel con una acción en cada una:
El hombre pasó de un lado al otro del cuarto.
El hombre la miró de reojo.
El niño corrió tan fuerte como pudo.
El niño estudia el papel con atención y de repente salta en acción. Es un juego
muy entretenido. Los niños tienen que estudiar el significado exacto de las
palabras para poder hacer la acción.
Después de que el niño ha realizado la acción, el Guía pone los símbolos que
corresponden a los verbos, sobre cada uno de los verbos escritos.
La segunda serie tiene oraciones que contienen dos acciones:
Ella aplaudió y se rio felizmente.
El niño con frecuencia recuerda una de las acciones y actúa solo una. El Guía
entonces intenta atraer la atención del niño al hecho de que hay varias acciones.
Llamamos a esto “la cacería del verbo”. El Guía pone un círculo rojo sobre ambos
verbos para que el niño se dé cuenta de que hay dos verbos. Estas dos acciones
son realizadas por la misma persona: “ Ella se carcajeó y aplaudió”. El Guía
puede ayudar al niño a escribir las oraciones de esta manera
se carcajeó
Ella y
aplaudió

El guía (si puede dibujar) pondrá un dibujo de la acción al lado de la oración.


Le damos al niño las oraciones que contengan dos acciones en un pedazo de
papel nuevo. Partimos una actividad, partimos las conjunciones y ahora está muy
claro para el niño que hay dos acciones. El niño actúa cada frase otra vez y luego
reconstruye las oraciones.
También podemos transponer las oraciones, supongamos que había dos Ella y
cambiamos las oraciones de lugar: “Ella aplaudió y ella se carcajeó”
Las mismas acciones se llevan a cabo pero no es tan impresionante. Las palabras
son las mismas pero el arte del escritor es dar belleza al lenguaje y significado
claro. Ayudamos al niño a adquirir experiencia de cómo están construidas las
oraciones.
Hay dos acciones, estas están unidas por la palabra “y”, por ello escribimos “y” en
un color diferente. Cualquier color mientras sea efectivo. Cuando la escribimos la
flecha indica quien hace la acción. En un lugar hay dos cabezas donde el sujeto se
expresa y una donde solo se entiende.
se carcajeó
Ella y
aplaudió

La misma oración es retomada y los símbolos se ponen arriba. El símbolo para el


pronombre se presenta. Este trabajo se realiza a los cinco años y medio o seis.
Pasamos a tres oraciones coordinadas: “Ella sacó un pañuelo de su bolsillo, lo
desdobló y se secó las lágrimas”.
Esta vez, el niño pone el símbolo del verbo sobre las palabras que denotan
acciones. Tomo, desdoblo, limpio. Lo escribimos por le niños:
sacó un pañuelo de su bolsillo
Ella lo desdobló
Y
se secó las lágrimas.
Después de un tiempo, el niño puede escribir las oraciones de esta forma por sí
sólo.
Tomamos la misma oración en un pedazo de papel y la dividimos en diferentes
secciones: ella sacó el pañuelo de su bolsillo, lo desdobló, y se secó las lágrimas.
Ahora sigue la trasposición y la reconstrucción. Ella secó las lágrimas, tomó el
pañuelo de su bolsillo y lo desdobló.
Esto es muy entretenido y el niño ve claramente cual arreglo hace el sentido más
claro. Finalmente el niño reconstruye la oración como era originalmente. El resto
de los símbolos es añadido. Para poder ayudar al niño a entender quien realiza la
acción preguntamos:
¿Quién sacó el pañuelo del bolsillo? “ella”
¿Quién lo desdobló? ”ella”
¿Quién se secó las lágrimas? ”ella”
¿Qué sacó del bolsillo? ”su pañuelo”
¿Qué desdobló? ”su pañuelo”
¿Qué se secó? “las lágrimas”

Después de esto presentamos las oraciones subordinadas:


“Mientras estaba haciendo el dibujo, estaba examinando las flores muy
cuidadosamente.” Otra vez hacemos la división y reconstrucción la oración. Si
ambas oraciones tienen sentido por sí solas son coordinadas. Podemos poner:
“Mientras él estaba dibujando, él estaba examinando las flores cuidadosamente.”
“Él estaba observando las flores cuidadosamente, mientras estaba dibujando.”
Las palabras y el sentido son los mismos, el cambio de posición alteró el estilo. El
estilo hace a un escrito aburrido y pesado o afectivo. Después de que los niños
tengan las acciones divididas y reconstruidas, él pone los símbolos en el papel. La
oración ha sido estudiada cuidadosamente desde cuatro puntos de vista.
- Impresión
- Cacería de verbos encontrando cuantas acciones hay.
- Cacería del sujeto
- La realización de la función de las palabras.
Todo esto se vuelve muy claro para los niños. No las pueden definir todavía pero
tienen una impresión de las funciones de las palabras. El estilo, el orden, el
número de acciones y la sucesión de las secciones. Hay una gran variedad de
estas oraciones: “cuando había logrado voltear la perilla sin hacer ruido, a
hurtadillas abrió la puerta y hecho un vistazo al cuarto.”
Los niños realizan estas acciones mucho mejor que los adultos porque ellos no
están conscientes o acartonados. ¡Deberías de ver con qué expresión las realizan!
Algunas de las acciones deben realizarse por más de una persona. Los niños
deben unirse. Algunas acciones están hechas por un niño pero otro niño también
es requerido. El otro niño responde también con gran sentimiento. Los niños
realmente van al espíritu de las cosas.
“Se quitó la gorra e hizo una caravana”
“Cuando María abrió la puerta, Jorge fue a su encuentro con una sonrisa de
bienvenida”
Este es un avance más adelante para niños de seis años y medio.
entró por la puerta
sosteniendo su falda con una hermosa mano
Beatriz mientras
con la otra sostenía un candelabro sobre ella
La luz caía en su cara.
Cuando hay dos sujetos hacemos la división como esta. Solo estamos
considerando la acción, no hablamos de oraciones. Esto es para hacer que el niño
se dé cuenta de cuantas acciones realiza una persona.
Esta oración también está dividida, transpuesta, reconstruida y con los símbolos
añadidos.
La edad para esto es de seis años y medio. Hay una división entre los dos sujetos
Beatriz y La luz. La división está para mostrar cuantas acciones son realizadas por
una persona. Más tarde haremos el análisis.
Les daremos listas impresas de estas piezas diferentes de lectura ya que los libros
no están disponibles pero hay traducciones del italiano y no suenan muy bien en
inglés. Los Guías deben escoger piezas de su propio lenguaje siguiendo este plan.
Extractos de los mejores escritores de su país, que queden bien para esta edad.
Este es el orden:
- Cacería del verbo – cuantas acciones hay.
- Reescribir la oración y dividirla en actividades. Poner las conjunciones
por separado.
- Cacería del sujeto y objeto.
- Reescribirla con el sujeto y las flechas mostrando las conjunciones o lo
que una las frases muy claramente de otro color.

- El niño pone la oración.


- El niño reconstruye la oración y hace trasposiciones.
- Los símbolos son puestos arriba de las palabras.
El sujeto debe ir antes del verbo y el objeto después del verbo. Nosotros damos
esta impresión a los niños. El trabajo que ya han hecho ha sido una preparación
para este juego. El símbolo del centro es rojo para el verbo.
¿Quién es ese?
Rojo ¿Quién o qué?
¿Qué es eso?
Tomamos una oración como: “María comió el pastel”
Sacamos comió y lo ponemos en el círculo rojo.
Preguntamos “¿Quién comió el pastel?” “María”
Entonces María se pone en el primer círculo negro.
Luego preguntamos “¿Qué se comió María?” “el pastel”
Entonces pastel se pone en el último círculo negro.
El Guía hace esto con el niño muchas veces y luego él podrá hacerlo sólo o con
otros niños.
En todas las comunidades hay niños que están constantemente preguntando, Son
considerados “traviesos”. A través de preguntas uno intenta hacer la idea más
clara y más completa. Algunas mentes nunca se satisfacen – la curiosidad es uno
de los atributos del hombre, sin la curiosidad no habría descubrimientos y no
habría progreso.
Para este juego tenemos el símbolo de la cachucha del travieso. Para los que
juegan este juego es necesario tener a uno que sea más despierto, inteligente que
los otros. Hay un grupo de preguntas que se permiten hacer. Se le dan a un niño.
Quizá un niño haga las preguntas, otro responda, mientras que un tercero
mantiene la lista y dice cuando una pregunta no es permitida.
Toma la oración “Mamá horneó un pastel.” El travieso hace la pregunta y escribe
la respuesta.
“¿Quién hornea el pastel?” “Mamá”
“¿Qué horneó?” “un pastel”
“¿Cuándo lo horneó?” “en la mañana”
“¿Cómo lo horneó?” “lo horneó dorado”
“¿Por qué lo horneó?” “porque teníamos una fiesta”
“¿Por qué motivo lo horneó?” “para la fiesta”
“¿Dónde lo horneó?” “en el horno”
“¿Con quién lo horneó?” “con el cocinero”
“¿Cómo estaba vestida tu mamá?” “no permitida”
“¿Para quién lo horneó?” “para mi”
“¿Cómo estaba el pastel?” “estaba quemado”
“¿Cómo estaba el cocinero?” “gordo”
“¿Cómo estaba el horno?” “grande”
“¿Cómo se horneó?” “muy rápido”
Ahora del original “La mamá horneó un pastel” tenemos toda esta información
adicional y podemos tomar las respuestas escritas y arreglarlas para hacer esta
oración.
“En la mañana mamá, con el cocinero gordo, horneó un pastel rápidamente en el
horno grande para mí, porque vamos a tener una fiesta, ella lo horneó dorado y
estaba quemado.”
¿Por qué?
¿Cómo?
¿Cuándo?
¿Dónde?
¿Qué es eso?
¿Para qué?
¿Para quién?
¿Por quién?
¿De dónde?
Después de haber hecho varios ejercicios como este, toma unas oraciones que ya
estén escritas. Las preguntas se dicen y las respuestas se ponen en los círculos
correctos. Empieza con oraciones simples. Estas oraciones deben estar escritas
muy bonito, recuerda que deben ser frases que se puedan actuar y no deben ser
muy pesadas. El niño debe poder actuarlas, de otra forma no llamaran su
atención. Si tiene que actuarlas, debe estudiar el significado cuidadosamente.
Tiene que estudiar el significado de cada palabra, tienen que ver cuantas acciones
hay, quien hace las acciones y cómo se llevan a cabo. Si el niño se equivoca
entonces reconstruye la oración, la impresión ya no es tan buena si ve que el
orden equivocado no tiene sentido.
Las conjunciones que sirven para enlazar las oraciones le dan al niño una idea de
los diferentes lazos y de la manera como pueden ser expuestos. Es la disposición
de ideas la que los hace claros y bellos, no es suficiente solo tener ideas. Para
estas experiencias damos pasajes de los mejores autores de los países de los
niños y le damos al niño una guía para leer. Los niños se vuelven capaces de
apreciar lo que leen. Cada pasaje es una pequeña gema. Una pieza de joyería es
hecha al montar las piedras preciosas juntas y una buena mano de obra lo hace
bello.
La Dra. Montessori siempre da una impresión del todo primero y después estudia
el detalle. Nosotros empezamos con una impresión de gramática, la sintaxis y el
análisis se darán después. En otras escuelas, usualmente un niño estudia los
detalles de gramática primero. Esto es artificial. Es como si para que puedas darte
cuenta de la belleza de la persona que estudias, veas los ojos, la nariz, las orejas,
etc. de manera separada. En lugar de que te sorprenda la belleza de toda la cara,
la admires y después te intereses en los detalles.
El niño recibe una preparación indirecta para la composición a través de este estilo
de estudio. Percibe la belleza de la escritura y como es lograda. El juego del
travieso lleva al niño a encontrar tanta información del sujeto como le sea posible.
Más tarde, un niño empieza a escribir sus propias composiciones. Los niños
escriben de manera espontánea sus propias oraciones. El control del error aquí
está en el niño que actúa estas oraciones. Las oraciones pueden ser sin sintaxis
así que aquí enseñamos a los niños que la elasticidad y ligereza de una oración es
dada por el número de verbos.
“Era de mañana. Mi hermosa mamá fue a la cocina con su libro gordo, porque
nosotros vamos a tener una fiesta en la tarde. Ella cocinó el pastel tan rápido que
se hizo dorado.”
Esto lleva a escribir los primeros párrafos y las conjunciones deben ser usadas
poco a poco, de esta forma, la armonía de la composición va siendo desarrollada.

Traducción cortesía de Andrea García.


MARIO M. MONTESSORI
LECCIÓN 24

Me da miedo que sea difícil darte una idea clara de esta lectura. Ayer di una lista
de las etapas sucesivas que siguen en cada serie de billetes de papel. Los niños
siguen eventualmente estas etapas sucesivas. Pero si los Guías las siguen de
manera rígida, el trabajo se volverá muy artificial. Es verdaderamente necesario
trabajar con los niños y ver lo que pasa.
El estudio de las oraciones desde este punto de vista está hecho para cuando los
niños están interesados en la construcción de las oraciones por sí mismas. Los
niños deben de tener cierta experiencia. Será una tarea difícil lograr que analicen
las oraciones a menos que estén ya interesados en la oración y el estudio de la
oración. Es un problema de interés personal e individual. Los niños en esta edad
son imitativos, ellos imitan esas cosas especialmente cuando ven que son de
interés para otros niños. Un niño puede tomar una oración que contenga dos o
tres acciones. Puede actuarla de forma fácil, espontánea y bien, pero otro niño
puede no entender todas las acciones. Para poder ayudarle, muéstrale como
analizarla en las diferentes secciones. Cuando los otros niños lo vean hacer eso,
ellos pueden interesarse también, es algo nuevo. Algunos lo imitarán, otros no.
Otro niño puede ser ayudado rompiendo las oraciones para mostrar las diferentes
acciones. Todo toma tiempo, con estos ejercicios la mente se aclara. Estos
ejercicios existen para ayudar a los niños que tienen dificultad en llevar a cabo
acciones. Se vuelven de uso formal para todos los niños porque hasta quienes no
pudieron realizar las acciones fácilmente, estuvieron felices de hacerlas. Por ello
todos pueden estudiar de este modo, pero no todos estarán interesados en hacer
todas las oraciones planeadas para este ejercicio. No te preocupes, déjalo a su
espontaneidad. Un niño está interesado, otros se vuelven interesados y hacen el
mismo trabajo. No es una imposición o generalidad para todos. El Guía no tiene
que enseñar todo el trabajo a todos, recuerda que el interés y el conocimiento
llegan de manera natural.
Los ejercicios que te di ayer son un tipo de tienda de donde el Guía puede tomar
aquello que le sea útil para poder resolver las dificultades de los niños de manera
individual. La cosa esencial es despertar el interés. Es suficiente para algunos
niños recibir la oración escrita en un papel, otros quieren algo más, para ser
ayudados rompiéndola o respondiendo tales preguntas como “¿Quién es el que
hace…?.”
El juego del travieso es jugado con un pequeño grupo de niños, quizá 2 o 4. Los
otros niños, al escuchar la risa de los compañeros, querrán unirse también.
“Vamos a unirnos.” Entonces se amplía. Todo surge de manera espontánea.
Quieres vida y vivacidad. Es la vida del espíritu lo que tienes que mantener activa.
Estos niños entre 3 y 6 años tienen una facultad natural de jugar e imitar. Da la
lección a uno o dos niños y se ampliará como una epidemia. No es bueno
inocularlos, de lo contrario no habrá epidemia, sólo resistencia.
En cada clase y con cada Guía, los resultados son diferentes. La forma de
educación será variada de una persona a otra. Tienen que dar ayuda para la vida
de la inteligencia. La ayuda será variada y solo será dada de vez en cuando.
Debemos considerar por un minuto por qué ciertos pasajes fueron elegidos para
esta lectura interpretativa. Un buen escritor tiene una buena habilidad para captar
y mantener la atención. Organiza sus palabras para asegurarlas, no para matarlas.
Una de las estrategias que usan es mantenerte el suspenso – “Cuando el niño
logra voltear la perilla sin hacer ruido”-
¿Qué pasa entonces? “Sigilosamente abre la puerta”- la atención se mantuvo – “y
entra al cuarto.” Casi puedes ver su cabeza entrando al cuarto. Las acciones
principales vienen al final de la oración. Esa es una de las habilidades de un buen
escritor. Otra estrategia que usan para mantener el interés es el aumento gradual
del drama: “Ella se reclinó hacia atrás en la silla- algo dramático sigue- cubrió su
cara con sus manos- aumento gradual de la tensión – y lloró.” Toma otro “Ella se
reclinó hacia atrás en la silla, como si estuviera muy cansada”: como si llevaras la
atención. Cada escritor usa una técnica diferente según los efectos que quiere.
Estas técnicas tienen que ser absorbidas por la mente. Toma estos puntos en
consideración cuando elijan pasajes para los niños. “Jorge tomó el libro frente a su
cara.” (La oración) “Para que” (sostén la atención) “nadie lo viera reír.” “Ella
caminó lentamente por el cuarto con cabeza agachada, como si estuviera muy
triste.” “Cuando María abrió la puerta” (¿Qué sucede?) “Jorge fue a su encuentro
con una gran sonrisa de bienvenida.”
Cuando analizamos las oraciones, escribimos las palabras: como si, aunque,
cuando, etc. en diferentes colores, ya que son las palabras que unen partes de la
oración y mantienen la atención. Cuando reconstruimos una oración que ha sido
quebrada en las diferentes acciones, estas palabras de enlace son colocadas no
de acuerdo a la lógica del niño, sino de acuerdo al estilo del autor. Si usáramos la
lógica del niño, el resultado tal vez no sería tan interesante. Un esfuerzo de
memoria, construcción y pensamiento toma lugar y es esto lo que imprime el estilo
en la mente del niño.
Todos son ejercicios que deben darse al inicio como una ayuda para la buena
lectura. Son guías que los llevan a los libros y tienen el objetivo de construir para
sus propias mentes que más tarde querrán expresar sus propias ideas con la
escritura. Tienen el objetivo de ayudar y organizar la inteligencia. No es solo la
lectura lo que nos resulta tan importante, sino la construcción de la memoria y este
aspecto social de la inteligencia. Cuando los niños han hecho un poco de este
trabajo, estarán muy interesados en la lectura: los niños tienen acceso a los libros
que tenemos en el ambiente. No son libros de texto, ni el tipo de libros producidos
para los niños con textos cortos que son solo bufonerías. Nosotros debemos
preparar el ambiente con textos “verdaderamente bonitos”: libros científicos,
historias, ¡buenas historias!
Recuerda siempre: estos ejercicios no son de lectura, únicamente son una guía y
una preparación, por lo tanto resultaría un insulto para la mente del niño darle
todos los tipos de libros de literatura considerada infantil que en realidad es
literatura barata y sin estructura gramatical o lógica en el lenguaje. Los hace como
si fueran personas que tienen que estar borrachas para mantenerse vivas. Existe
una tendencia hoy en día a actuar como si nosotros tuviéramos que entretener a
los niños. Es un vicio que está alejando a la mente absorbente del niño de su
construcción verdadera. Si los niños están abonados y aburridos, ¿nosotros
debemos darles este entretenimiento superficial? Pero ¡te darás cuenta que los
niños están verdaderamente interesados en todo lo que es bello! Su interés es tan
grande que ellos superaran grandes dificultades, somos nosotros, adultos con falta
de sentido común los que pensamos que son dificultades insuperables. Los niños
en esa primera escuela en Roma no tenían libros, de hecho nada impreso. La
Guía escribió a mano y los niños aprendieron a escribir en letra cursiva. Un día un
niño vino con una hoja de papel sucia que había encontrado en el camino. Se la
mostro a otro niño. Ambos la miraron. “¿Por qué, si es solo una pieza de papel
sucia?”, les preguntaron. “No, aquí hay una historia.” Los niños estaban intrigados
porque la pieza de papel contuviera una historia. Cuando a estos niños les dieron
libros, había que señalar que los libros serian arruinados si ellos los rompían de
las páginas que les interesaban particularmente. Nadie les enseñó las letras
impresas en molde: por intuición los niños pudieron pasar de la letra cursiva a la
de molde sin ninguna ayuda de los adultos. Si tienes el interés de leer las
diferentes letras no hay dificultad imposible.
Las dificultades de enseñar lectura surgen cuando los niños vienen a la escuela a
los 5 o6 años sin ninguna preparación previa. El niño está en otra etapa de
desarrollo. El periodo sensible casi está terminando y el niño ha completado un
ciclo de desarrollo, por lo tanto, las fuerzas tempranas de la naturaleza ya no
están vivas en el niño; hay una muerte del Espíritu “horme” referente a lo que
concierne al trabajo temprano. El Guía puede decir: “bien voy a respetar al niño.
Voy a respetar a las autoridades educativas. ¿Qué debo hacer?”. Sin embargo,
las dificultades son mayores cuando la naturaleza ya no ayuda al niño. Uno debe
regresar a esos ejercicios simples como tocar las letras de lija, pero el niño mayor
ve las letras y te ve a ti que quizá tengas una amable sonrisa, pero él piensa: “Lo
haré mientras me veas, no más.” Es difícil regresar a un periodo sensible que ya
ha culminado. No es la naturaleza la que los obliga a trabajar. El tiempo para tal
trabajo ha pasado. ¿Qué puedes hacer?
Si te obligan a comer cuando no tienes hambre, solo puedes comer con un gran
esfuerzo. No aprecias la comida. Esta es la dificultad enfrentada por los maestros
prácticamente en cualquier escuela. ¿Qué podemos hacer? Una vez más te digo
que es solo en base al interés. Al menos que el trabajo corresponda con sus
naturalezas y sabores, no puedes hacer nada. Todavía hay una fuerza de vida en
los niños, hasta los seis años. Las fuerzas de vida no han cesado, pero emergen
de diferentes intereses. Así que debemos seguir estos intereses y dificultades que
no pueden ser enfrentadas de otra manera y serán superadas. A la edad de siete
años los niños están interesados en las razones de diferentes fenómenos que
ocurren en la psicología de vida, cómo y por qué estas cosas ocurren. Así que
hay mucho trabajo científico para trabajar en el ambiente, hay varios experimentos
biológicos que se pueden ver, semillas plantadas en envases para observar el
proceso de la germinación, observar cómo los brotes crecen hacia arriba, las
raíces hacia abajo. No importa la posición en la que se siembren las semillas, los
brotes y la raíz siempre crecerán en esa dirección definitiva. Otras semillas en
germinación hacen claro las diferencias entre las plantas monocotiledóneas y
dicotiledóneas, estos experimentos son parte de una educación científica que los
niños pueden seguir aunque no sepan leer ni escribir. En las escuelas Montessori,
los niños pueden ir libremente a los otro ambientes, por lo que todos los niños
pueden ver el movimiento de la vida en la pecera, en la granja, en las parcelas, en
las mesas de observación de otros ambientes, etc. los niños ponen un interés
tremendo en todos estos trabajos hechos por otros compañeros y son muy
respetuosos, poniendo gran cuidado al visitarlos. Cuando son muy pequeños,
encontraras que tienen un sentido de posesión respecto a todo lo que les rodea:
“ese es mi pez. Yo lo pesqué.” “Ese escarabajo es mío, yo lo atrapé.” Pero al
siguiente día puede ser que el pez se muera y que el escarabajo se escape. “¿Por
qué?” “¿Qué pasó?” El niño pequeño preguntará al más grande. “Bueno, los
escarabajos vuelan en la noche si el acuario no está cubierto, y no debes poner
tantos peces juntos” le responde. “¿Cómo sabes todo eso?” pregunta el niño más
pequeño. “Mira aquí, está en el libro.” “¡Ah, léelo para mí!” Se lo lee todo. Este
niño mayor, a través de su interés en biología, aprenderá a leer, en un momento
dado le pedirá al Guía que le enseñara a leer y seguramente trabajará con todo:
con las letras de lejas, el alfabeto móvil, en fin. Estos niños por lo general leen
primero y luego escriben. Las letras de lija usualmente no son usadas como un
motivo para actividad sino como para explorar el ambiente. Su interés es
estrictamente utilitario: tienen la intención de enseñar a leer; en un primer periodo
la naturaleza obliga al niño a repetir el sentirlas; pero ahora la naturaleza lo obliga
en otro interés y es a través de su propio deseo que ejercita tanto como necesite
para aprenderlas. Sus manos pueden estar bien controladas así que alcanza una
cierta habilidad en la escritura, pero la escritura comenzará a ser deficiente, en
niños que han pasado su período sensible es siempre mala, puedes ver la
diferencia en la escritura de estos niños que llegan tarde y la de los niños que
empiezan en la edad correcta; uno tiene que ayudarlos de diferentes maneras
para motivarlos a analizar las formas de las letras, que noten el trazo, el tamaño,
etc., en esta forma ellos mejorarán su trazo. Cuando este interés en la lectura ha
empezado, es importante darles las órdenes de lectura siempre siguiendo su
interés, una buena idea podría conectar las órdenes los experimentos de física y
química más sencillos.
Más tarde ellos harán experimentos más complejos y a través de estos
experimentos los niños también aprenden las bases de gramática y llegan a tener
un interés en lenguaje por sí mismo. En toda vida escolar hay muchas ocasiones
en las que se manifiesta a necesidad de leer y escribir, se transforma en deseo
que les ayuda a lograr superar las dificultades de una manera sorprendentemente
fácil. ¿Las autoridades educativas reconocerán algún día el valor que tienen los
grupos en donde los niños de diferentes edades trabajan juntos? No hay mejores
maestros que los niños mismos. Una clase de 25 niños de 5 a 14 años con una
maestra pueden estar muy tranquilos y placenteros. Recuerdo bien un incidente
que ocurrió cuando un grupo de visitantes vino a ver la escuela en Laren. El
Doctor Smart quería saber qué pasaba si un niño pequeño iba a ver a un niño más
grande que estaba haciendo el trabajo de extraer la raíz cuadrada de los números.
Justo en ese momento ocurrió un incidente. El niño más chico pregunta, “¿Qué
estás haciendo?” “Sacando la raíz cuadrada” fue la respuesta. El niño pequeño
solo se alejó: nada más paso. Si el trabajo es mayor que su poder mental, el niño
se aleja; si le interesa trabajará con él. Es la vida; es muy simple.
Ahora me gustaría mostrarte un último paso en el estudio de Lenguaje que ocurre
durante el sexto año. En este momento, los niños son expuestos a la gramática
formal. El niño es ayudado a volverse consciente de todas las experiencias por las
que ha pasado. Es paralelo al tiempo en el que se le dan los sustantivos: “esto es
un triángulo, esto es un cuadrado” a un niño que ha estado trabajando con las
figuras geométricas. Enfoca de manera específica ciertas partes.

Cajas de Gramática
Estas cajas son hechas de manera extremadamente atractiva con colores
variados por fuera y también por dentro:

Caja del Artículo de color pulido por dentro.


Tiene tres compartimentos cada uno con tarjetas: uno largo, lleno de tarjetas, uno
pequeño con tarjetas y otro pequeño con tarjetas negras. En frente del
compartimiento pequeño hay tarjetas: una con “Articulo” escrito en él y el símbolo
gramatical dibujado arriba, el otro con “Sustantivo” y el símbolo. Las palabras en
estas tarjetas están escritas sólo con tinta blanca. Los niños leen lo que está
escrito en las tarjetas largas y luego lo reproducen con las tarjetas más pequeñas.
En el compartimiento del articulo hay solo tres tarjetas con los cuatro artículos: el,
la, un, una. El niño lee en la tarjeta grande “una manzana”. Busca entre las tarjetas
“una”. Busca entre las tarjetas negras “manzana”. Hay muchos sustantivos en este
compartimiento (todos los sustantivos que son escritos en las tarjetas grandes),
mientras que solo cuatro tarjetas en el compartimiento de los artículos. Puede
formar las frases.
Una manzana
La perla
Un libro
Luego necesita formar “el pañuelo” pero ya usó todos los artículos. Por ello tiene
que usar uno de los artículos que ya usó. Esto enfatiza el hecho de que no importa
cuántos sustantivos use, hay solo tres artículos que pueden ser usados.
Los símbolos para partes del lenguaje son colocados sobre las tarjetas cuando
son colocadas en la mesa.

Caja del Adjetivo


En esta caja hay cuatro compartimientos: uno largo con las frases; tres pequeños
con los “artículos”, “sustantivos”, o “adjetivos”. El interior de la caja es color café
claro.

La primera tarjeta larga pude decir:


El color amarillo
El color rojo
El color azul
En el compartimiento del sustantivo hay solo una tarjeta con “color” escrita en ella;
en el compartimiento del articulo solo “el”, “la”. El niño saca la tarjeta pequeña “el
color amarillo”, pone el símbolo y pone el carrete de color amarillo ahí. La
siguiente frase es “el color rojo”. No hay otra tarjeta con “color” escrito en ella.
Entonces ¿qué podemos hacer? Ya sea quitar la tarjeta con el color amarillo, o
empujarla más arriba sobre la mesa, para que lea “el color rojo”… pero, hay algo
equivocado. El carrete de color amarillo debe ser movido y remplazado por el rojo.
Cambiando las tarjetas amarilla y naranja un objeto – el carrete de color – va y se
reemplaza por otro. Demuestra la función del adjetivo; describir un sustantivo. El
símbolo está colocado sobre las tarjetas. El niño pronto se da cuenta que estas
palabras al tener una función definitiva, vienen del compartimiento llamado
adjetivo, por ello se da cuenta que los nombres especiales son dados a palabras
con una función dada. Luego uno puede realizar ejercicios en transposición: por
ejemplo, cambia la posición de las tarjetas.
Color el naranja
El naranja color
Color naranja el, etc.
Solo en el orden: “el color naranja” las palabras dan el significado indicado por la
presencia del carrete color naranja. Con la caja de gramática uno puede estudiar
tres cosas:
- La función
- El nombre de las partes del lenguaje
- La posición que cada parte de lenguaje tiene en una frase

Traducción cortesía de Andrea García


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 25, 1946
LECCIÓN 25

Las matemáticas parecen ser algo vago para la mayoría de las personas. Ha
habido discusiones respecto a la edad correcta en la que los niños deben iniciar
con ellas. En algunos países se cree que no debe ser presentada a los niños
hasta muy tarde en el currículo y en otros dicen que deben de presentárselas
temprano porque son esenciales. Sin embargo, en todas partes se ha acordado
que es artificial, que no es algo natural, que es una abstracción y por ello es difícil.
Ya que es un estudio difícil, está casi ligado a ser desagradable y por ello debe ser
presentada en una edad cuando los niños están mejor capacitados para acoplarse
con cosas que les desagradan.
¿Qué es natural y qué es artificial?
Llamamos a algo artificial cuando no existe en la naturaleza. Pero, ¿Qué es la
naturaleza? Llamamos a la miel natural cuando es producida por abejas. El
hombre es en mucho una parte de la naturaleza como las abejas y él ha producido
las matemáticas. Entonces, si es su producto especial, ¿Por qué es artificial y no
natural? Si otras especies producen algo especial debe ser natural para esa
especie, de otra forma esa especie no lo produciría.
Las matemáticas son una de las cualidades que distinguen al hombre de otros
animales y por ello serían desagradables para un caballo o un perro, no deberían
ser así para el hombre quien fue el que las creó. Debemos mejorar las escuelas.
No debemos decir que esta materia es difícil pues entonces los niños la tienen que
sufrir porque es muy importante. Y por ese sufrimiento ahora ellos podrán lograr
superar el sufrimiento más adelante. No es un salmo con frases porque en el
futuro habrá una guerra y debemos prepararnos matando e hiriendo, porque al
hacer eso ahora, nos estaremos preparando para matar y herir en el futuro.
Aquellos que han aceptado el hecho de que las matemáticas deber ser enseñadas
dicen que no debemos empezar este estudio hasta después de los seis años.
Dicen que los niños no tienen voluntad y no tienen inteligencia antes de los seis
años de edad.
Debemos pensar cuidadosamente lo que queremos decir por voluntad porque en
este caso, es renunciar a la voluntad misma, es obediencia a la voluntad de
alguien más. Hemos llegado a la conclusión de que a eso se refiere con
inteligencia insuficiente. Los exámenes que han sido dados para medir la
inteligencia del niño hacen que su inteligencia parezca menor de lo que es.
Si un niño se construir a sí mismo, debe seguir las exigencias de la naturaleza y
no sustituirla por la voluntad de alguien más. La inteligencia necesita una actividad
manual para poder concentrarse y construir. Si al niño no se le permite moverse,
entonces la inteligencia no puede absorber ciertos hechos hasta edades mayores.
Si usamos la ayuda de la naturaleza, entonces vemos que el niño está dotado con
una súper inteligencia.
El lenguaje es una abstracción, una abstracción mayor a las matemáticas, sin
embargo el niño ha sido rodeado por lenguaje toda su vida y sin embargo, no ha
sido rodeado de matemáticas. Por ello no tiene posibilidad de encontrar una
orientación en este campo y por eso le parece difícil.
La mayoría de la gente no se da cuenta de que una abstracción no puede ser
enseñada al menos que ya esté ahí como vivencia. En este sentido, que el niño
tienen que construir y concentrar conocimiento subconsciente a través de la
experiencia. Si le vamos a dar a los niños algo nuevo para que nosotros
construyamos una abstracción, debemos primero capacitarlos a tener una
experiencia activa. Para poder construir una nueva abstracción debemos ir muy
despacio, debemos dar experiencias y dar pasos muy pequeños hasta que un tipo
de plataforma haya sido construida. Después el niño puede avanzar más rápido.
Los números no entran mucho en la experiencia de los niños. Oyen a la gente
hablar sobre muchas cosas pero no hablan de números frecuentemente. Los niños
están interesados en el lenguaje porque siempre han oído pláticas a su alrededor,
pero no de las matemáticas porque ellos no han tenido experiencia en ello.
A pesar de esto, cuando la gente en las escuelas presenta los números a los
niños, ellos empiezan con lo más difícil: empiezan presentando el símbolo de los
números. Algunas veces representan las cantidades con pequeños puntos o
contadores. La maestra dice “Este es uno” luego pone otro objeto similar al lado
del primero y dice “Esto es dos”. Un tercer objeto: “Esto es tres”. Este objeto debe
ser un contador. El niño puede saber que es un contador pero debe aceptar el
hecho de que es un “1” (uno), pero cuando la maestra le llama a un segundo
contador dos, el niño no puede captar el hecho de manera fácil. Para la mente de
un niño, si esto es llamado uno, si hay dos de ellos, será uno, uno. Esta dificultad
ha sido vista en niños de capacidades diferentes. Crea una barrera subconsciente.
Hay resistencia y por lo tanto se crea una falta de interés. Una vez que esta
barrera subconsciente ha sido puesta, es muy difícil de superar. Mucha gente
adulta tiene esta resistencia y solo pueden ser atraídos a las matemáticas si ellos
atraviesan estas etapas por la que pasan los niños.
Esta gente que tiene barreras para las matemáticas puede tener alguna luz si
vuelven a empezar a entenderles. La Dra. Montessori tenía una amiga de 30 años
que le pasó esto. Ella se volvió a interesar al grado de no hacer otra casa, más
que matemáticas por dos años. La mente del hombre es por naturaleza una mente
matemática. Una mente que ha sido frustrada se aferra a la posibilidad de
satisfacerse a si misma cuando esto sucede. No es una cuestión de no tener una
mente matemática, sino de no tener una abstracción. Debe ser una abstracción de
la persona en sí misma. Si hablo contigo en un idioma que no sabes, bostezas y te
aburres, pero si hablo tu idioma te interesas porque puedo alcanzar tu mente. Mi
discurso es inútil hasta que alcanzo tu mente.
Este es el camino que seguimos con el niño. Si no ha logrado hacer esta
abstracción, será difícil para él entender cualquier explicación. En este método
damos al niño la experiencia. Ha lidiado con cantidades, cantidades que existen a
su alrededor. La aritmética es meramente una forma de medición de estas
cantidades. Si ciertas cantidades son dadas con exactitud lo llevan a una habilidad
de reconocer cantidades, y una habilidad para calcular. Aun cuando el niño no
conoce los números y no puede contar puede distinguir entre estas cantidades.
(Barras Numéricas). La mente se da cuenta de la diferencia entre las cantidades.
Puede reconocer la secuencia de estas cantidades. Puedo decirle al niños “Este
es uno” o “Este es dos” (barra 2) o puedo decir “Esta es 1,2” (barra 2) porque la
barra está dividida exactamente en dos partes. Puedo decir esto “esto es 1, 2,3”
(barra 3). No hay nada de dificultad para el niño en esto. El niño ha escuchado los
nombres antes y por ello solo tiene que asociar el nombre con la cantidad.
Si tomamos objetos separados y los contamos “este es 1, este es 2”. 2 no tiene
individualidad propia: 2 es dos 1´s. debemos siempre de proceder muy despacio
cuando damos una nueva abstracción.
Debemos siempre dar la materialización de las matemáticas en una forma que los
niños puedan manejarla con sus manos (edades de cuatro a cuatro años y medio)
siguiendo la urgencia de la naturaleza en esta edad. Este 2 (barra) es una
solidaridad inquebrantable: no se puede desaparecer en dos 1´s separados. Es 2,
compuesto dos 1´s. es una cantidad que es doble. Su individualidad es muy
separada, solida e inquebrantable. Esto es un individuo de valor 3 (barra 3), esto
es valor 4 (barra 4) y así sucesivamente. El niño puede entender esto. El grupo
nunca se quiebra en la primera presentación.
Para nosotros estos pequeños pasos hacia la abstracción parecen absurdos
porque nosotros ya pasamos esta etapa, pero ellos la consideran como la gran
ayuda que les podemos dar, antes de que el niño haya alcanzado la abstracción
debemos dejarlo que tome pasos graduales y que llegue a la abstracción por sí
solo.
Damos este material en la presentación de los tres tiempos. La primera dificultad
es la conexión entre la barra y el nombre. Es importante que cada vez que le
pidas al niño que te de una barra, “Dame 3” le pidas que la cuente, “1, 2,3”. Dale
las primeras tres barras y luego presenta las otras en secuencia, siempre
manteniendo las que ya se le dieron con anterioridad.
La secuencia de los números es dada por la longitud de las barras. El niño ya ha
hecho la escalera con las Barras Rojas. Estas son las mismas barras dividas en
colores alternando rojo y azul. Puede ponerlas en su orden correcto, si una es
colocada fuera de lugar, el orden ya no es armonioso.
Después de que hemos presentado todas las barras podemos jugar pequeños
juegos para arreglar las cantidades en la memoria. Podemos tomar cualquier barra
y decir “Dame la que va antes de esta” o “Dame la sigue de esta”. Has que
cuenten la barra cada vez. De esta manera ellos contaran usando los nombres.
Luego los niños ponen todas las barras en orden y ellos con frecuencia
encuentran la primera abstracción por sí solos. Cuentan la barra larga y se dan
cuenta que es 10 y cuentan la cantidad de barras que hay y se dan cuenta que
hay 10.
El segundo paso en la presentación es:
Dar los símbolos que representan estas cantidades. Damos el símbolo separado
de la barra. Presentamos el símbolo al tiempo que el niño está aprendiendo las
letras de lija y ya ha aceptado la idea de símbolo por sonido. Por ello, es fácil que
acepte la idea de símbolo para los números.
Damos el símbolo con la lección de los tres tiempos tocando las figuras de lija de
la misma manera como lo hacemos con las letras de lija.
Cuando el niño sabe todos los símbolos le presentamos el tercer paso. Hacemos
la asociación entre el símbolo y la cantidad que representa. Este ejercicio se hace
con símbolos impresos en tarjetas.
Las barras están en el tapete, se le muestra un símbolo al niño y se le pide que
encuentre la barra que corresponde a ese símbolo. El niño cuenta la barra y pone
el símbolo que se representa en ella. O podemos tomar la barra y pedirle al niño
que encuentre el símbolo. Finalmente el niño pone las barras en orden y pone el
símbolo correspondiente en cada barra. El niño ahora ve el símbolo del 1 al 10 en
forma sucesiva y ve la secuencia natural de los números representados por
distancias en las barras.
Una vez que el niño ha entendido todas estas, ya tiene las bases para el sistema
decimal. Con estos símbolos puede escribir cualquier número. Con el 10 le has
dado las bases para el sistema decimal, el cual es la base para todos los números.
Ahora podemos proceder a dar los detalles.
Los niños han visto las cantidades. Podemos darles experiencias de cálculo con
estas barras.
Podemos enseñarles la suma con las barras.
1 al lado del 9 = 10
2 al lado del 8 = 10
3 al lado del 7 = 10
4 al lado del 6 = 10
Podemos hacer restas quitando las barras.
Si a 10 le quitamos 1 = 9
Si a 10 le quitamos 2 = 8
Si a 10 le quitamos 3 = 7
Si a 10 le quitamos 3 = 6
Cuando hicimos la suma solo el 5 sobró, volteando el cinco el niño se puede dar
cuenta que 5 X 2 = 10 o que 10 entre 2 = 5.
Hemos construido las bases de todas las matemáticas con las Barras Numéricas y
los Símbolos. Le hemos dado al niño la posibilidad de hacer cualquier cosa en el
mundo de los números. Para cualquier número que queramos escribir, si va en los
millones y millones, seguiremos usando estos mismos símbolos.

Traducción cortesía de Andrea García.


MARIO M. MONTESSORI OCTUBRE 26, 1946
CONFERENCIA 26

La idea fundamental de la suma es hacer que los niños se den cuenta de que hay
diferentes grupos que representan cantidades que pueden ser medidas en
unidades especiales. Ayuda al niño si estos grupos se mantienen juntos y no son
divididos en grupos con diferentes valores, cada grupo debe ser una unidad por sí
misma.

Aquí hay un grupo de unidades juntas (barra 10). Este grupo sobre sale más
claramente que 10 unidades puestas juntas.

Las experiencias repetidas como tú ya sabes ayudan a reafirmar los hechos en la


memoria. Por ello presentamos la misma cosa de tres maneras diferentes.

1- Damos la barra
2- Damos el símbolo
3- Damos la asociación del símbolo con la barra.

También debemos recordar que si el subconsciente no está empapado de


experiencia, los hechos no serán entendidos y retenidos. Es el subconsciente el
que recuerda y no el consciente, y por ello, es el subconsciente el que debe tener
estas experiencias prolongadas. El consiente puede ver y entender un hecho más
rápido pero le toma al subconsciente un tiempo más largo. Es la habilidad para ver
y entender rápidamente lo que hace a la memoria permanente. Si les damos este
material a los niños de 5 y 6 años, lo entenderán rápidamente con su consciente
pero no les interesa trabajar con este material y por ello el subconsciente no
retiene el conocimiento. Si le damos esto a los niños de 4 años y medio, en la
edad cuando la naturaleza le ha dado al niño el poder de llevar acabo experiencias
formativas y a la edad cuando los niños aman repetir un ejercicio muchas veces,
entonces veremos qué tan interesados están en repetir experiencias formativas
con estas piezas de madera. Si les das el material a esta edad, el motor de la
naturaleza los hace repetir y repetir el ejercicio, y así, reafirman los hechos en su
subconsciente.

La repetición de los ejercicios con el material sensorial es lo que los lleva a ver las
cosas que no resultaban aparentes en un principio. No es el ojo sino la inteligencia
la que percibe. En el caso de los colores, el niño fue guiado a través de
experiencias repetitivas con el material para recibir pequeñas impresiones de las
diferencias que podían no ser vistas antes. A través de esta larga experiencia uno
llega a una conclusión del intelecto, es lo que llamamos abstracción.

En este material Barras Numéricas, las diferencias entre cada grupo es siempre 1.
1 sirve como paso de una barra a la otra. Este orden tan simple que el niño más
grande lo entiende de manera inmediata, por eso no les interesa hacer este
ejercicio. Lo ven, lo entienden y lo ponen a un lado, así como nosotros lo
haríamos. Con frecuencia la gente que llega más lejos en la vida es esa que
resulta aburrida en un principio. Hay niños con una inteligencia deslumbrante, que
entienden rápido y otros que son lentos y tienen que tener la misma explicación
muchas veces. El primero pasa rápido mientras que el segundo persiste con un
ejercicio hasta que lo entiende. Al final son aquellos que han persistido los que son
la gente de carácter y claridad intelectual real. Esta es la gran deferencia entre los
niños de 4 y 6 años. El interés del niño de cuatro llega al subconsciente. El niño de
seis años no está interesado, no persiste con el ejercicio al menos que sea
obligado y si es obligado, habrá un disgusto.

El niño de 4 años y medio puede ver las diferencias conscientemente de manera


más fácil pero no de manera subconsciente, el subconsciente no toma la
información tan rápido como el consciente y le toma más tiempo llegar a cierta
abstracción. El consciente percibe mientras el subconsciente no. Ya verás eso
cuando presentemos al niño la siguiente pieza de material, aunque es lo mismo,
pero encuentra cierta cantidad de dificultad.

Llega un momento cuando el niño empieza a contar objetos de manera


independiente de las barras. Ha llegado a la idea de la abstracción del número.
Para él, el numero 10 por ejemplo ya no es una pieza de palo con esa cantidad de
divisiones marcadas en él. Ha llegado a la idea que los números representan
grupo de cosas separadas. Ha llegado a esta conclusión por sí mismo. Ahora le
damos la ayuda para otra pieza de aparato.

Caja de Husos

Contiene 45 husos. Los husos son todos idénticos. El ejercicio es ver si el niño ha
retenido la memoria del tercer paso, que es cuantas unidades representaban las
diferentes tarjetas. La caja está dividida en 10 compartimientos y los símbolos del
0 – 9 están escritos en orden, uno en cada compartimento.

El niño ya se ha dado cuenta de que los números representan grupos de


unidades. Se da cuenta de que el símbolo representa cierto número. Se da cuenta
de que el 1 va con 1 huso, el 2 va con 2 husos, etc. un compartimiento guarda los
dos husos juntos pero a algunos niños le gusta amarrarlos. La mente ha llegado a
la conclusión de que son unidades separadas pero al subconsciente le gusta
reafirmar los grupos. No podemos apresurar a la mente. Si la abstracción no está
lista, no la puedes dar, la tienes que construir a través de experiencias. Cada
individuo necesitara progresar a un ritmo diferente. Hemos encontrado que a los
niños de diferentes países les gusta amarrar los husos. Este descubrimiento
universal muestra que esta necesidad es parte de la mente del niño.

En este material los símbolos dan la secuencia de los números. El niño solo tiene
que reconocer el símbolo y poner el número correspondiente de husos en el
compartimiento. Esta pequeña dificultad mantiene el interés del niño y lo guía
hacia la repetición del ejercicio.
El cero viene en este ejercicio por primera vez. El niño pregunta lo que es 0 y le
damos la definición. Lo acepta como un hecho, sin discusión.

Debemos imprimir el hecho de que cero significa nada en la mente del niño. Para
hacer esto tenemos un juego muy entretenido:

La Lección Especial del Cero

Los niños reciben pedazos de papel doblado. En cada pedazo de papel está
escrito uno de los números del 0 – 9. El niño tiene que abrir el papel, memorizar el
número escrito en él, doblar el papel y dejarlo en la mesa. Cuando todos los niños
hayan memorizado sus números, traen la cantidad de objetos correspondiente al
número que memorizaron y los colocan en la mesa junto a su papel. La maestra
verifica cada uno. Entre estos números esta un cero. Un niño obtiene un cero. No
trae nada. Es muy impresionante. Otro juego del Cero es tener unos pocos niños y
decirle a uno que venga dos veces, a otro que venga cinco veces, etc., luego
decirle a uno que venga cero veces – “ven rápido cero veces “ (para ser
insistente).

Hasta ahora siempre ha habido algo en el material que sirve como guía. Ahora la
mente del niño se vuelve la guía. Si el niño no ha obtenido este conocimiento en
su mente no puede realizar el siguiente ejercicio.

Fichas y numerales

Los numerales están pintados cada uno una tarjeta por separado y están en una
caja de 45 fichas (cualquier otro grupo de unidades idénticas, atractivo y no muy
grande funcionará.) el niño tiene que poder poner los numerales en su orden
correcto. No hay guía. El niño tiene que saber el orden. Esta es la dificultad
agregada que hace este ejercicio interesante. Las tarjetas con los números son
colocadas en su orden natural y el número correspondiente de fichas es colocado
por debajo de la tarjeta. Las fichas son colocadas en pares. Cuando el número es
impar, la ficha que sobra es colocada en el centro por debajo del par. Esto
muestra muy claramente las diferencias entre números pares e impares. También
da una idea de la divisibilidad de los números. Ahora algunos números divididos
entre 2 son iguales y otros tienen un residuo de 1. Pueden tener la primera idea de
la multiplicación también. Es fácil ver que 6 = 3 X 2, 8 = 4 X 2 etc. no hablamos de
números pares e impares, división o multiplicación, solo le damos al niño el
ejercicio y más tarde cuando llegue a las tablas de multiplicar, este conocimiento
estará listo en el subconsciente. Todos estos ejercicios son como hacer un
órgano. Un órgano no solo tiene un teclado, tiene un aparato muy complicado que
hace sonidos cuando lo tocas. Todo esto es la preparación subconsciente para
que cuando llegue el momento de tocar las teclas. Un amateur puede tocar las
teclas y el resultado será ruido, no música. Cuando el órgano está construido, ahí
está la posibilidad como magia, de hacer sonido. Si nunca lo tocas, nunca habrá
sonido. Si el Guía le da la abstracción, claramente la mente la puede ver si ha
tenido una construcción previa. El niño por ahora ha tenido seis meses de su
experiencia y las ideas están bien reafirmadas en el subconsciente. Los niños han
tenido experiencia con la suma y la resta. Ellos saben que si las dos cantidades
son colocadas juntas obtienes una tercera que vale más. Si separas cantidades
obtienes un número de cantidades de menor valor que la cantidad original. Saben
la secuencia de los números del 0 al 10. Ahora si seguimos la secuencia lógica de
los números 11, 12, 13, etc., lo que obtendríamos seria aburrimiento y una
disminución de interés en el niño. Ya le hemos dado al niño todo lo que necesita
para el sistema decimal.

Ahora, para poder mantener vivo el interés del niño, le damos el sistema decimal.
Le damos una visión del todo y luego le damos la visión del detalle. Si le damos la
posibilidad de explora todo el mundo de números con el conocimiento limitado que
posee, va a estar muy interesado. La posibilidad está dentro de sus poderes.

Debemos darnos cuenta cuánto tiene que aprender un niño, la jerarquía de los
números, la naturaleza diferente de las diferentes sumas, el cálculo de diferentes
sumas, etc., tiene todo un mundo que explorar. Pero tiene una llave y si le
permitimos usar la llave él adquirirá una visión completa antes de tener
memorizados todos los detalles. Ciertas cosas llegarán por sí solas siguiendo el
interés que surge de una visión del todo.

El niño puede distinguir los dieces, cientos, miles y millones. Puede dividir con tres
cifras sin saber la división, o sumar grandes números sin saber el mecanismo de
suma o puede contar más de 10.

Todo esto puede sonar muy difícil pero nosotros nunca hemos hecho uso del
descubrimiento de las matemáticas en su totalidad. Nosotros complicamos las
cosas. Piensa en el alfabeto, de la representación de sonidos por su símbolo, con
26 símbolos podemos hacer todas las palabras que hay en algunos de los idiomas
más desarrollados. Es lo mismo con el sistema decimal. Tú puedes hacer
cualquier cosa con él.

No es posible dar a un niño pequeño la teoría y la práctica del sistema decimal a


través de palabras. Lo damos con experiencias sin palabras. El niño no podría
seguir las palabras pero puede trabajar activamente. Este material capacita a los
niños entre 4 y 6 años de edad a adquirir experiencia y conocimiento sin
explicación verbal. Nosotros presentamos el sistema decimal en esta modalidad:
recuerda que el niño puede contar hasta 10. Esto es una Perla Dorada. Esto es un
grupo de perlas que forman una unidad en sí misma (una barra de 10 perlas
doradas). Le pedimos al niño que cuente cuantas perlas doradas hay en una
barra: 10. Él sabe cómo contar hasta 10 de tal forma que ahí no hay dificultad.

Entonces le damos el cuadrado de 100. Le preguntamos al niño cuántas barras de


10 perlas doradas están unidas para formar esta nueva unidad: 10. Damos el
nuevo nombre “esto se llama cien.” Otra vez, no hay dificultad y él debió haber
oído la palabra muchas veces antes.

Le damos el cubo del 1000. Este es grande y más visible pero no es más difícil de
contar que los otros. Le preguntamos al niño cuantos cienes se unen para hacer el
cubo: 10. Le damos el nuevo nombre “esto es mil”. La única cosa nueva es la
asociación del nombre con el nuevo objeto (cubo del 1000). A esta edad los niños
toman de manera espontánea los nombres, así que no hay dificultad.

Colocamos unos pocos de estos grupos en la mesa y le pedimos al niño que traiga
varios números. “trae 300”. El niño trae tres de los cuadrados del cien. “trae 4000”.
El niño trae cuatro de los cubos del 1000. No hay dificultad. De esta manera
damos al niño la posibilidad de asociación de los nombres con los objetos. Le
pedimos 3 dieces o 4 dieces. Todavía no usamos los números 30 o 40, etc. nos
quedamos con los nombres simples para no confundir al niño.

Cada jerarquía es un objeto, completo en sí mismo:

Un 10 es una barra
Un 100 es un cuadrado
Un 1000 es un cubo

Los niños pueden decir este es el cuadro del 10 o este es el cubo del 10. Estos
son hechos materiales que los niños ven ante sus ojos y los pueden expresar.

Es criminal reducir a los niños a un estado de imbecilidad en las matemáticas


simples. Deberías ver lo que hacen con este material y con el gusto que lo hacen.
Debido a que las matemáticas son una fuente de gran regocijo para los niños y a
que se han formado una mente matemática, quieren tener la oportunidad de
descubrir algo que está dentro de ellos.

Cuando los niños han tenido esta experiencia con el material de las Perlas
Doradas, entonces damos las tarjetas de números por sí solas. Los símbolos
están escritos en estas.

Decimos:

Esto es 10

Esto es 100

Esto es 1000

Hay un objeto representado por 1. La diferencia en su valor se muestra por el


número de ceros. Es como en el ejército: un oficial y su privado ambos son
hombres y la diferencia entre ellos es sólo el número de estrellas en sus hombros.
- Las unidades están escritas en verde
- Las decenas están escritas en azul
- Las centenas están escritas en rojo
- Las unidades de millar son verdes
- Las decenas de millar son azules
- Las centenas de millar son rojas

Podemos reconocer cualquier número por la cantidad de ceros que lo siguen. Aquí
la dificultad es reconocer el número de ceros.

Ahora damos la asociación de las tarjetas con las perlas. Ponemos el material de
las perlas en la mesa y el material de las tarjetas en otra mesa, en un lugar
diferente del salón. Colocamos cierta cantidad del material de las perlas en una
charola y le pedimos al niño que traiga las tarjetas que corresponden a esa
cantidad. Supongamos que pusimos un cubo del mil, dos cuadrados del 100 y 3
líneas de 10. El niño encuentra las tarjetas. Ahora le damos una indicación de todo
el número. La tarjeta más grande va abajo, colocamos el resto arriba según el
largo. Tapamos los finales de cero en la mesa y obtenemos 1235. Le pedimos al
niño que lo lea. Él dice 1 mil, 2 cientos, 3 dieces y cinco. Ahora le decimos que 3
dieces son treinta. El niño puede continuar con este ejercicio. Luego le podemos
dar las tarjetas y dejarlo que busque el material de las perlas correspondiente.
Empezamos a presentar ciertos números que son más difíciles. Los de un cero:
290, 1014, etc. el niño comienza a darse cuenta que en realidad cero es solo un
espacio vacío y que el lugar que ocupa una figura en la jerarquía da el valor.

Traducción cortesía de Andrea García.


MARIO M. MONTESSORI NOVIEMBRE 2, 1946

LECCIÓN 27

Habrás notado que los pasos que hemos dado entre los ejercicios al enseñar
matemáticas han sido pequeños; vemos que los resultados externos son grandes,
pero los pasos son muy muy pequeños.

Iniciamos dando una visión del todo, para que la mente pueda entenderse sin
depender de la memoria y luego damos un estudio de mayor detalle. Es un tipo de
drama que muestra el orden de los números y cantidades, cómo se comportan,
como se agrupan, etc. esto es muy diferente a la manera en la que atacamos el
lenguaje, ahí abordamos directo en un análisis de un minuto porque el lenguaje
era ya una abstracción en la mente del niño.

Las matemáticas todavía no son una abstracción y por ello todos estos pequeños
pasos deben de ser tomados en orden para preparar la mente matemática, en
orden para dar al niño una apreciación de lo que son los números y las
cantidades. Después de tener toda esta experiencia, el niño podrá hacer una
abstracción de ellos y aplicar su conocimiento en logros personales. Debemos
tener experiencia para alcanzar esta abstracción; a través de la experiencia la
mente se prepara. El niño no puede tener una abstracción al menos que tenga una
visión clara y un entendimiento claro. Debemos darle esta claridad a la mente
matemática recién nacida. Si, en un campo nuevo podemos dar una visión clara y
emocionante, la mente se interesa y quiere saber más. Este interés llevará al
individuo de dificultad en dificultad. No son dificultades imposibles de superar para
el niño en cada presentación. En, comparación, las escuelas ordinarias presentan
todas las dificultades juntas por lo que el niño no logra tener un buen
entendimiento.

Si lamente no entiende no se puede interesar. Si construyes toda una pared de


dificultades psicológicas, la mente del niño se opone a las matemáticas y esta
oposición incrementa según el niño va creciendo.

La mente se debe preparar paso a paso. Este material es simultáneo, no es difícil.


Los ejercicios son simples y dan una preparación clara para el estudio de las
matemáticas. La mente se prepara paso a paso.

En el primer ejercicio las cantidades son dadas por las Barras Numéricas. La
relación entre una cantidad y otra es 1. Cuando nosotros vamos de un número al
siguiente la diferencia es siempre 1. Cada grupo diferente esta individualizado
como una cantidad. Cada cantidad se forma al hacer 1 a la cantidad previa. La
relación es 1 unidad.

Al tener estas experiencias con estas cantidades y al dar los símbolos


correspondientes a estas cantidades el niño conecta la representación visual con
ciertas cantidades. El símbolo representa los diferentes grupos. Esa es la base,
una serie natural de números y luego los símbolos.

La primer abstracción que hace un niño es cuando se da cuenta de que un


número no está conectado sólo con una cosa, sino que puede estar conectado
con cualquier cosa. Que 2 no está conectado con una barra especial sino que
puede haber 2 de cualquier cosa.

Otro hecho importante es entender el valor de cero. 0 que representa nada. Esto
es esencial porque la jerarquía del número está representada en base al cero. Una
vez que esto ha sido presentado introducimos nuevas cantidades en las que la
relación ya no es 1 sino 10 por ejemplo:

En las Barras Numéricas esta jerarquía la relación será siempre 1, tomo de


uno en uno hasta 10 –de 7 a 8

En el caso de las Perlas Doradas toma 10 de cualquier categoría previa


para hacer 1 del siguiente.

Esta es la nueva categoría de los objetos de matemáticas que damos al niño.


Tienen una representación simbólica de tal forma que hacen al símbolo caer en su
posición natural. Cada número tiene uno representativo pero cada uno cae en la
posición determinada para él por su propia importancia. El cero muestra la
importancia de cada uno. El significado real de cero en el número se plantea de
forma clara en este material, cuando una categoría carece del cero, está ahí para
mostrar el espacio vacío. En el número 1027 el cero muestra que no hay cientos
para ocupar su espacio determinado; cero significa el espacio vacío. A los niños
se les da una visión clara de la formación de los números, pueden construir su
conocimiento a través de la experiencia y de aquí, hacer una abstracción.

Se vuelve claro para los niños que solo hay 9 de cada categoría, puede ser
cualquier número hasta 9 pero no más. Este entendimiento viene a través de la
experiencia, no con la explicación dada.

Cuando los niños están bien relacionados con todo esto son llevados al
descubrimiento visual de las diferentes combinaciones que pueden agruparse.
Hay diferentes maneras en las que las cantidades pueden agruparse en la suma,
multiplicación, resta y división. La suma y la multiplicación son ambas
acumulaciones de una gran masa confusa, en una es una cantidad de diferentes
números y en la otra de números iguales. La primera cosa que hay que hacer en
ambos casos es crear orden. Para separar un tipo de otro para poder ver lo que
tenemos frente a nosotros.

El segundo paso es prepararse para llevar el cambio del 10 de cualquier tipo por
uno del siguiente. Cuando todos los cambios necesarios han sido hechos, sea
cual sea el número original, nunca hay más de 9 de cualquier cantidad. Si hubiera
12 unidades obtienes 1 diez y 2 unidades. Si hubiera 12 decenas tu obtienes 1
diez y 2 unidades y así sucesivamente. Con esta experiencia viene la realización
de una claridad que solo hay 9 de cada categoría. La mente obtiene una impresión
visual clara de todos los eventos que pueden suceder.

Ahora se les enseña a los niños cómo los números grandes pueden ser divididos
en cantidades a través de la resta, o cantidades iguales a través de la división. En
el caso de la resta un número puede dejarse, pero en la división nada puede
dejarse, todo se lleva a cantidades iguales. La diferente naturaleza de cada clase
de adición o sustracción se aclara para los niños a través de operaciones con el
material de Las Perlas Doradas

Algunas de estas operaciones son más fáciles de realizar. Se les dan divisiones
cortas primero. Luego mostramos las operaciones de divisiones largas. Las
divisiones largas son un proceso extraño. Primero los niños entienden que en una
división corta sólo hay un digito pero en la división larga hay más dígitos. Tenemos
un juego para mostrar estas divisiones largas. Llamamos a 12 – 13 niños; por
eemplo, tenemos 2,808 entre los 12 niños que llamamos.

Mandamos a 9 niños y le pedimos al décimo niño que represente estos 9 que


mandamos. Ahora, si le doy a este niño la barra 10, le debo dar al niño que
representa las decenas un cuadro del 100. Empecemos con el 1,000. Se los doy a
este niño, luego le tengo que dar a cada uno de los otros dos un cuadrado del 100
a cada uno. Divido todo el número de esta manera cambiando cuando es
necesario. Cuando esto está hecho, cada niño encuentra cuánto tiene y encuentra
el símbolo pequeño que representa el número.

Dos niños tienen 234 cada uno

Un niño tiene 2340

Ambos están satisfechos y se pueden sentar, pero este niño que representó a los
9 niños en el principio es muy rico, era realmente un delegado, así que ahora debe
compartir lo que tiene con los niños que representó. Ella divide los 2340 con ellos
y ahora todos los niños tienen 234, la suma correcta.

Esta división larga es realmente una división realizada simultáneamente, por


unidades y decenas.

Cuando los niños han entendido una experiencia, es natural para ellos querer
estudiarla más de cerca por ellos mismos. Para poder capacitarlos a hacer esto
tenemos el juego de Los Timbres.
El Juego de Los Timbres

Hay cuatro grupos de estampillas como pequeñas calcomanías. Hay un número


en cada estampilla. Un grupo es todo, el segundo grupo 10, el tercer grupo 100 y
el cuarto grupo 1000 en los colores verde, azul y rojo que usamos para estos
números. También hay bolos y el juego de las tarjetas con números. Los niños
usarán grandes números cuando trabajen solos.

Si tienen esta suma:

2100

+ 3040

1227

Tomaran el número correcto de estampas de cada folleto para


formar cada número

Cuando el número correcto de estampas ha sido tomado, son acomodadas en


orden en sus diferentes jerarquías. Las unidades juntas, las decenas juntas, las
centenas juntas, etc., todos juntos hacen 6367. Si el niño comete un error en este
punto, no te preocupes no lo corrijas.

La respuesta exacta no importa,


es la forma correcta de trabajar
lo que importa.

Este material puede usarse para restas, multiplicaciones y divisiones.

Si queremos hacer divisiones largas, usamos los bolos para representar los niños.
Uno pequeño verde para las unidades, uno grande azul para las decenas, uno
más grande rojo para las centenas y uno muy grande verde para el millar.

Tenemos que distribuir este 6,324. Tomamos las estampillas, cada uno de los
bolos de las centenas recibe 100, cada uno de los 10 bolos recibe 10, cada uno de
los 1 bolos recibe 10. El restante no dividirá así que tenemos que cambiar el 3,000
en centenas. Ahora tenemos 31 centenas pero solo 1 decena así que cambiamos
una centena en decenas. Ahora tenemos 30 centenas y 11 decenas. Cada vez
que nos falte un número hacemos este cambio.

Traducción cortesía de Andrea García


MARIO M. MONTESSORI NOVIEMBRE 1, 1946
LECCIÓN 28

Quiero decir unas palabras con respecto a la memorización de las combinaciones


de la suma. El problema de la memorización de las combinaciones es que debe
seguir el patrón que sigue la naturaleza, como en todo lo demás. La memorización
es usualmente un proceso seco porque es usual que memoricen conscientemente
sin haber tomado la lección que da la naturaleza para considerar, por ejemplo: que
antes de que el consciente pueda tomar con interés y sin fatiga, el subconsciente
debe haber sido tocado.
Cuando dejamos a los niños que trabajen ciertas cosas, como el Juego de la
Serpiente, no hay pregunta de memoria. Es un juego con el sistema decimal –una
búsqueda de las decenas. Cuando tienen dos objetos como la barra 9 y la barra 8
el juego consiste en encontrar cuantas decenas hay, sustituyendo las decenas y
sumando lo que sea que sobre, en este caso 7. Si otro 3 se suma a esto hay otra
decena. Así que el propósito consciente del niño no es memorizar que 9 + 8 = 17
(10 más 7) o que 7 más 3 = 10 el propósito consciente del niño es sustituir las
cantidades indicadas en La Serpiente por tantas decenas como contenga La
Serpiente. Pero durante la búsqueda de interés consciente de las decenas hay
una experiencia subconsciente. El niño ve que 8 más 9 es transformado en 10
más 7. El subconsciente absorbe las diferencias y después de un rato en lugar de
contar cada barra de las perlas, el niño memoriza el hecho de que 8 más 9 es 17.
Esta adquisición es consecuencia de otro interés, la búsqueda de las decenas.
Después de cierta cantidad de trabajo con el ejercicio, cuando el interés cesa (que
usualmente es cuando las combinaciones son adquiridas subconscientemente) el
consciente adquiere interés en lo que hacemos y es entonces cuando
presentamos El Tablero de la Suma. Está hecho de madera. En el Tablero de la
Suma, las líneas llegan después del 10 y hay una distribución en el color de la
figura de arriba: 1 – 10 están escritos en azul, 11 – 18 en rojo. El niño escribe el
resultado de la suma que hace con esta tabla. Hay dos ejercicios que hay que
hacer. Uno es sumar cada uno de los números indicados en la parte azul con el
número en cada uno de las tiras rojas y escribir el resultado. Tenemos 7 sumado a
5, poniendo la tira del cinco y la del siete juntas: el resultado se muestra, 12. Con
la línea en la tabla dibujada después de 10, uno ve que 7 y 5 son usados para
hacer 10 más el 2 que están del otro lado de la línea. La línea muestra cuánto va
para completar diez y cuánto sobra.
El segundo ejercicio consiste en ver en cuantas formas un numero puede hacerse
con solo dos de las tiras, por ejemplo: 18 = 9 más 0. No hay otra combinación
posible con solo dos tiras. 17 = 9 más 8 o 8 más 9. Cada uno de estos números
pueden estar compuesto en diferentes formas; 6 = 5 más 1 – 4 más 2 – 3 más 3 –
2 más 4 – 5 más 1. En este caso la mitad de las combinaciones están repetidas
así que solo hay tres combinaciones.
Después de que el niño ha escrito estas cosas le damos una gráfica de la suma.
La consciencia y el interés se reafirman en esta edad a través de dos cosas:
movimiento acompañado de inteligencia y un cambio de interés el cual está
centrado en el mismo objetivo consciente. Con la primer tabla, la suma esta escrita
en un billete, por ejemplo 3 + 5. Los niños toman de la caja un billete, busca el
primer número hacia abajo de la tabla y el segundo a lo largo de la parte superior
de la tabla. Si uno sigue las figuras hacia adentro partiendo de las dos figuras, se
llega al resultado donde se encuentran. Los niños escriben la respuesta. Pronto se
darán cuenta de que la combinación está repetida a lo largo del diagonal; por
ejemplo 5= 3+2 o 2+3 ¡es lo mismo! Esto es llevado una vez más a la consciencia
del niño a través de la gráfica que tiene solo la mitad de la combinación de la
suma impresa. Los niños tienen las sumas impresas en pequeños billetes, buscan
el resultado y los escriben; por ejemplo 4+7. Cuentan hasta el final de la cuarta
línea (4), y luego cuentan tres hacia abajo.
Al cambiar los objetos para continuar con su interés, el interés por sí mismo se
mantiene vivo. Los niños repiten el ejercicio y así memorizan los hechos. La
memorización llega con la repetición y el esfuerzo pero no con la fatiga.
Por ultimo hay una gráfica vacía. Es la tabla de control. Sirve como prueba para el
niño. El niño toma un papel en el que está escrito 3+4. Hay una tarjeta pequeña
con el 7 escrito que queda exactamente sobre uno de los pequeños cuadros.
Gradualmente llenara toda la gráfica con los resultados. El niño trabajó con la
memoria por completo sin ayuda. Puede descubrir sus propias fallas y corregirse.
Pueden hacer cualquier suma sólo porque conoce estas pocas combinaciones. En
realidad no hay suma mayor que pueda hacerse que sea mayor que 9 + 9. No hay
una sola suma que sea mayor por eso, si sabes estas combinaciones, ¡puedes
realizar cualquier suma! En las escuelas ordinarias algunas veces es difícil hacer
que el niño memorice la carga de los números de 13 al 19. Uno usualmente dice 4
+ 2 = 6; 6 + 6 = 12; 12 + 7 = 19 y así sucesivamente.
Aislando y dando claridad a cada artículo, en este caso en las combinaciones de
la suma, todas las complejidades de la suma se absorben, con el esfuerzo pero no
con la fatiga. Un método construye la inteligencia, el otro la exprime.
Resta. Aquí uno se encuentra con hechos similares. No hay combinaciones
mayores a 18 – 9 . si tienes 18 – 9 en las decenas de millar es la misma resta
como una unidad. Si tienes 19 – 9 la combinación es entre 9 y 9. El diez no es
afectado. Para afectar el 10 tienes que tener 18 – 9. Entonces pides prestado del
10 las suficientes unidades para poder restar 9. Si tienes 48 – 9 no tomas en
consideración más de un 10, un 10 entra en juego, así que 18 – 9 es la resta más
larga posible. Haz que el niño absorba y retenga esta combinación. Entonces
podrá hacer cualquier resta sin importar lo larga que sea.
Usamos diferentes perlas para la resta en Juego de la Serpiente.
Para el juego de la Serpiente Positiva estas perlas de diferente forma son usadas
para las cantidades negativas (en cada barra hay una pequeña después de 5 así
que uno no tiene que contar las barras más altas). Decimos que cuando un niño
llega a una de estas tiene que contar hacia atrás. El resultado se hace en las
perlas negras y blancas. Hay pequeñas charolas en las que las barras de las
perlas que se han eliminado son colocadas. Estas perlas positivas son colocadas
en una caja, las negativas en otra. Si alguna de las decenas es eliminada son
regresadas a la caja de las decenas. La maestra también debe dejar claro al niño
que antes de colocar cualquier barra de perla negativa debe haber varias barras
de perlas positivas. Entonces, no hay posibilidad de obtener una negativa alterna.
Después las barras positivas y negativas se deben alternar. Tenemos la suma:
1+3+4+8-6+7-5+2-7+5-6+6-4+2-5+3-8=
Los resultados se muestran por barras de decenas en las perlas negras y blancas.
En lugar de esperar por barras de decenas cambiamos el resultado a las perlas
negras y blancas. Inicia 3 + 1 (ponlas en la caja) toma la negra 4. 8+8=16 toma
barra 10 y 6 negras y blancas.
Luego – 5 así que cuenta para atrás a lo largo de la barra 7. Te quedan 2. Quita la
7. Luego 10 + 2 + 2 = 10 + 4. Luego 10 + 4 + 7 siete sobran. Así continua a 8 – 8 =
0. Parece que entre más trabajo, menos tengo. Esto les impresiona. Así que trata
de darles una suma con el resultado la primera vez. Luego sigue la revisión:
compara las cantidades negativas y positivas. Pon las dos juntas, las tres juntas,
etc. las barras de las perlas son del mismo color, las ponemos juntas.
El 4 positivo elimina el 4 negativo
El 8 positivo elimina el 8 negativo
El 6 positivo elimina el 6 negativo
El 7 positivo elimina el 7 negativo
El 5 positivo elimina el 5 negativo
El 2.2.1 positivo elimina el 5 negativo
El 3.3 positivo elimina el 6 negativo

Uno puede presentarle el juego a los niños, quizá hacerlo con ellos dos o tres
veces para luego dejar al niño a que lo haga solo. Hacen sumas muy largas. El
resultado deberá siempre ser positivo al principio. Da al niño la oportunidad de
ejercitar su mente.
El proceso de revisión introduce a los niños al algebra. La cancelación es una
preparación al hecho de que las cantidades positivas y negativas del mismo valor
se eliminan mutuamente.
Juego de la Tira para la Resta.
Hay dos juegos de ejercicios. En ambos casos los niños escriben los resultados.
Les pedimos siempre empezar la resta con la tira más larga posible. Saca las tiras,
una debajo de la otra. La línea coloreada es azul en esta gráfica y esta dibujada
después del 9. Las figuras 1 – 9 en la gráfica son azules, del 10 – 18 son rojas. 18
es el número más grande en la gráfica. Pon la tira 9 sobre ella, pero sólo puedes
anotar los resultados del lado izquierdo de la línea azul; por ello 18 – 9 = 9 pero
cuando 18 – 8 obtienes un 10 rojo por respuesta, la figura cae en el lado
equivocado de la línea azul: por ello no la anotes. Así que con 18 hay solo un
número que puede ser quitado.
Ahora cubre el 18 en la fila de arriba. Luego 17-9=8, 17-8=9 pero cuando obtienes
17-7 el resultado cae más allá de la línea. Por ello no consideres el resultado. Uno
continua hacia afuera, hacia los números más pequeños: por ejemplo 8-8, 8-7 y
así sucesivamente. Entonteces tenemos una tabla que muestra todas las
combinaciones de resta que uno tienen que saber.
O puede ser colocado de otra manera.
Ellos usan estas gráficas para encontrar los resultados. Luego escriben las
respuestas.
Finalmente, hay una gráfica vacía y pequeñas tarjetas que quedan en los cuadros.
Con esto el niño puede ver lo bien que sabe las combinaciones.

Traducción cortesía de Andrea García


MARIO M. MONTESSORI DICIEMBRE 3, 1946
LECCIÓN 38

GEOMETRÍA
Hay tres figuras que son las bases de la Geometría: el círculo, el cuadrado y el
triángulo. El triángulo es llamado El Constructor (pero no con los niños en un
inicio) porque con el triángulo podemos construir cualquier figura geométrica plana
formándolas con series de triángulos. Podemos construir diferentes figuras de
acuerdo a tipo de triangulo. Por ejemplo, con el triángulo isósceles de ángulos
obtusos podemos formar el rombo, un paralelogramo o la cabeza de la flecha.
El segundo paso es dar los triángulos que se dividen en diferentes partes dentro
de un marco, dando los nombres apropiados. Una perpendicular dibujada de la
base hacia el punto opuesto es llamada “altura”. En realidad la línea no existe.
Muchos de los misterios de geometría se vuelven comunes con este material. Esta
es una figura geométrica llamada triángulo y lo que existe no es un número de
líneas, sino la forma que está dentro del marco. El niño ve tres líneas dibujadas
para un triángulo y luego se le dice que las líneas no existen en realidad, y esto es
confuso. Ciertamente si dibujas una línea imaginaria y no tienes experiencia en
este material, geometría se vuelve un poco difícil. Si tienes este material puedes
ver una línea que va desde la base hacia arriba pero es meramente el límite de la
pieza de material, entonces si tomas ese camino la línea no está ahí. Podemos
mostrar con este triángulo, la media, la altitud, el bisector, etc., según la figura a la
que pertenecen estos nombres.
Mostramos estas diferentes piezas y los niños empiezan a experimentar los
hechos: que estas líneas son llamadas “bisectores del ángulo” y dividen el
triángulo en tres partes iguales; estas tres partes iguales son ángulo obtuso,
isósceles y triángulos. Con esto los niños juntan dos de ellos y hacen un rombo.
Luego vemos un hexágono formado con dos trapecios, seis tercios del triángulo.
Cuando tenemos la división de cuatro en un triángulo vemos que la suma de dos
piezas hacen un rombo y si al rombo le sumas otro, resulta un trapecio. Cada
pieza hace diferentes combinaciones. Tres de ellas juntas hacen un trapecio y si
este trapecio se coloca de otra manera hacen un hexágono con seis cuartos. Este
hexágono es igual a un rombo y ese hace otro rombo y dos triángulos que hacen
un tercer rombo de tal forma que este hexágono es igual a tres rombos y el
triángulo por sí mismo es igual a dos rombos.
Esto es llamado la altura del triángulo y esto es llamado el diagonal largo del
rombo. Así que el largo diagonal 1 del rombo es igual a la altura del triángulo y el
diagonal corto del rombo es igual a la mitad del dado del triángulo, entonces
empiezas a ver como llegó el Teorema. Si un triángulo de ángulo recto tiene uno
de sus lados adjunto el ángulo recto es igual al diagonal largo del rombo, y si por
otro lado tiene el diagonal pequeño del rombo son iguales en área.
Los niños deducen cualquier cantidad de teoremas del material que no están
incluidos en los libros de Euclides que se da en las escuelas ordinarias. Ellos
trabajan estos ejercicios entre 7 y 9 años de edad.
Este hexágono es el triángulo equilátero el cual está formado por juntar los
vértices alternos del hexágono. Al manejar estas piezas de material que está
construido con gran exactitud con partes del mismo triángulo equilátero, puedes
alcanzar algunas conclusiones extraordinarias, hasta esa en la que pruebas el
Teorema de Pitágoras, no solo para el cuadrado, sino también para el triángulo.
Así que ves por qué el triángulo fue llamado Constructor.
Ahora vamos con el cuadrado. El cuadrado puede ser dividido ya sea por esta
línea que llamamos la media o esta otra llamada diagonal. La línea que viene del
vértice hacia el vértice opuesto es llamada diagonal. Para poder dar nombres a las
líneas, la Dra. Montessori hizo estas figuras. Las dos medias dividen el cuadrado
original en cuatro cuadrados y luego si nosotros dibujaremos la media del
cuadrado más pequeño, tenemos la figura subdividida en 8 partes, trayendo el
estudio artístico de geometría con patrones y así sucesivamente. Si tú divides
estas otra vez con una media más, tienes el cuadrado dividido en seis partes.
Entonces tienes una sucesión de cuadrados y rectángulos; primero un cuadrado
se divide en dos partes, se volvió triángulos, al dividirlos se vuelven cuadrados,
dividiendo esos se vuelven rectángulos otra vez una y otra vez.
También seguimos el mismo procedimiento con los diagonales y tenemos aquí
dos triángulos isósceles de ángulo recto –todos los ángulos del cuadrado son
ángulos rectos. Si tienes dos diagonales, otra vez tienes isósceles de ángulo recto
más pequeño y si divides otra vez continuas con una serie de triángulos similares.
Estas figuras que tienen la misma forma pero no el mismo valor son llamadas
figuras similares porque una es un rectángulo y luego un cuadrado pero ambas
tienen el mismo valor ya que ambas son la mitad del mismo cuadrado. Estas dos
son figuras equivalentes y las otras son figuras similares.
Ahora viene la actividad del niño. Al manejar este material pueden decir “este
triángulo y este cuadrado son equivalentes” etc., y ¡es un problema seguirles el
ritmo! Experimenté esto cuando un niño vino cuando estaba escribiendo una
carta, y dijo “¿es verdad que un cuadrado que está inscrito en otro cuadrado es la
mitad del primer cuadrado?” la vi y dije “No”. Se vio confundido y otra vez dijo “¿es
verdad que un cuadrado que tiene por su mitad diagonal de otro cuadrado….?”
“Mira, este cuadrado es uno dividido en cuatro partes (triángulos) y si pones estos
dentro de los marcos es un cuadrado inscrito y la mitad del otro.” De la
observación llegó el teorema. Esta es una de las interpretaciones de Pitágoras,
porque si tú tomas estos triángulos dividiendo un cuadrado en cuatro partes, cada
uno siendo un cuarto, este es el cuadrado del hipotenusa. Estas cosas son una
consecuencia natural de trabajar meramente con las piezas y adquirir la
experiencia, en lugar de intentar trasmitirlo por medio de la explicación de la
maestra. Este es un aspecto y aquellos que estén interesados podrán continuar
con el estudio más tarde con Miss Child y Miss Homfray.
No hay otra razón por la que el cuadrado es llamado El Medidor. Cuando le
decimos a los niños que 20 pulgadas x 30 pulgadas = 600 pulgadas al cuadrado,
lo que confunde es porque se convirtieron en cuadrados. Primero era una medida
lineal y luego se volvió cuadrada. Si tú los muestras dividiendo una gráfica con
líneas paralelas dibujadas del lado opuesto, tendrás una hoja cuadrada que
puedes contar: 10x5= 50 cuadrado. Entonces la regla llega de manera muy
sencilla que para encontrar el área de un rectángulo, multiplicas la base por la
altura. Eso significa que encuentras los números para la división que hay en la
base y tienes tantas filas de pequeños cuadrados como hay divisiones en la altura.
Meramente cuenta los cuadrados sin dar la regla primero.
Eso está bien para un rectángulo pero cuando se trata de otras figuras que no son
ángulos derechos el problema empieza porque uno no puede contar un número
completo de cuadrados completos. Se vuelve difícil contar las piezas parciales.
Pareciera que la única pieza que podemos medir es la de ángulo recto, entonces
¿qué podemos hacer? En el caso de cualquier paralelogramo (que significa una
figura que tiene todos los lados opuestos paralelos) la base se multiplica por la
altura, lo largo de un lado por la distancia perpendicular entre los otros dos lados,
es la regla. Entonces recuerdas que con el triángulo puedes construir todas las
figuras de cuatro lados, así que si puedes hacer figuras en triángulos, podemos
calcular cuántos triángulos hay en la figura. Si sabes cómo encontrar el área del
medio, puedes hacer el área de la figura.
Si hay seis triángulos, por ejemplo, es muy simple. Esta es la base de los
triángulos y esta es la altura de los triángulos. Nos encontramos en la misma
dificultad que con el paralelogramo, para contar los pequeños pedazos, podemos
quebrarlo y reorganizarlo en un rectángulo. Entonces vemos esto en mitad de la
base y el otro es un todo de altura. Entonces el área del triángulo es la mitad de la
base multiplicada por toda la altura. Para un triángulo más que un triángulo de
ángulo recto, no tiene solución de esta manera, pero puede ser solucionado
volteando el triángulo y entonces el área es la mitad de la base multiplicada por la
altura. Este mismo triángulo dividido a lo largo de la altura en dos partes hace un
trapecio y un triángulo y divides el triángulo a lo largo de la mitad y otra vez tienes
un rectángulo que tiene la misma base como un triángulo y la mitad de la altura del
rectángulo. Esto es verdad con el triángulo de ángulo recto isósceles. Con el
triángulo de ángulo recto obtuso tomas la mitad de la altura y sumas el triángulo a
la otra parte tienes una paralelogramo.
Este material para los niños esta hecho de 3 capas de madera.
Traducción cortesía de Andrea García.

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