Sei sulla pagina 1di 6

Intervención en Crisis

Unidad 8:

Normativa aplicable
ÍNDICE

8. Normativa aplicable
8.1. Introducción

8.2. Preceptos legales de la aplicación

CONCLUSIONES

BIBLIOGRAFÍA

2
8 Normativa aplicable
8.1. Introducción

Toda persona tiene el derecho constitucional a la libertad y seguridad, si es retenido en contra


de su voluntad (como sucede en aproximadamente un 10 % de los ingresos psiquiátricos) se
necesitará informe médico que avale y justifique su retención y la posterior autorización judicial
amparándose en las excepcionalidades descritas en el Código civil.

Lo dicho con anterioridad nos garantiza, o al menos prácticamente nos garantiza, que nuestros
derechos como ciudadanos no serán violados gratuitamente por las malas actuaciones, que en
ocasiones pueden darse, de profesionales del orden público o sanitario.

La contención mecánica como acto terapéutico impuesto al paciente debe considerarse


vinculada a los mismos condicionamientos legales que el ingreso involuntario. Sólo se podrá
sujetar a un paciente cuando lo indique el psiquiatra, siempre que su ingreso sea involuntario.

En el caso de un ingreso voluntario se procederá igual, siempre que sea una medida urgente y
puntual. Cuando se prolongue (supere las 24 horas) o se repita, se modificará el tipo de
ingreso, solicitando del juez la autorización de ingreso involuntario.

El objetivo de esta unidad didáctica es conocer la normativa legal que regula el procedimiento
de la contención mecánica de una persona en el entorno sanitario. Citaremos los distintos
artículos reguladores del procedimiento y distintas leyes relacionadas al respecto.

8.2. Preceptos legales de la aplicación

Cabe señalar que la aplicación de sujeción mecánica a una persona atenta contra un derecho
constitucional de toda persona: el derecho a la libertad, y sólo podremos aplicarlo en aquellos
supuestos que nos indica la ley.

h Constitución: art. 17.1: «Toda persona tiene derecho a la libertad y a la seguridad.


Nadie puede ser privado de su libertad, sino con la observancia de lo establecido en este
artículo y en los casos y en la forma previstos en la ley.»

h Ley 41/2002 reguladora de la autonomía del paciente (arts. 5, 8 y 9).

h Código civil (art. 211) y Ley de enjuiciamiento civil (art. 763) sobre internamiento no
voluntario por razón de trastorno psíquico. Los preceptos sobre internamiento no voluntario,
establecen la necesidad de autorización judicial previa o a posteriori cuando se trate de
internamiento de persona que no esté en condiciones de decidirlo por sí. En efecto, el art. 763
de la Ley de enjuiciamiento civil expresa: «El internamiento, por razón de trastorno psíquico, de
una persona que no esté en condiciones de decidirlo por sí, aunque está sometida a la patria
potestad o a tutela, requerirá autorización judicial [...]».

h Información sobre la adopción de la medida: la utilización de la medida excepcional


y urgente de contención mecánica deberá ser informada al paciente de modo adecuado a sus
posibilidades de comprensión y a las circunstancias existentes en el momento; también se
debe informar a las personas que, vinculadas a él por razones familiares o de hecho, se
encuentren acompañando al paciente (art. 5,1 y 2 de la Ley 41/2002).

La información debe darse con carácter previo, durante el mantenimiento y posteriormente.

3
h Historia clínica y documentación: en cualquier caso, debe quedar constancia en la
historia clínica de las circunstancias que han justificado tanto la adopción de la medida como su
mantenimiento en el tiempo. Deben recogerse todas las incidencias que hayan rodeado la
medida.

h Consentimiento: el consentimiento de la medida de contención mecánica de persona


con capacidad y en condiciones de decidir sería válido de conformidad con el art. 8.2 de la Ley
41/2002, antes citada. En dichos supuestos es conveniente recoger la firma de conformidad del
paciente.

h Comunicación al juez de primera instancia (incapacidades): debe considerarse la


notificación al juez cuando se trate de una medida de larga duración, así como los ingresos no
voluntarios, en un plazo de 24 horas.

h Decreto 176/2000 de 15 de mayo, de regulació del Sistema Català de Serveis Socials.

h Derecho de los usuarios: derecho a no ser sometido a ningún tipo de inmovilización


física o farmacológica sin prescripción médica ni supervisión, salvo cuando exista peligro
inminente para la seguridad física del usuario o de terceras personas. En este caso, las
actuaciones efectuadas deberán justificarse documentalmente en el expediente asistencial del
usuario.

4
CONCLUSIONES

Podemos concluir diciendo que la normativa legal existente no regula de forma práctica ni ágil
la multitud de situaciones y circunstancias en que se puede aplicar la contención mecánica a
un individuo. Actualmente el seguimiento explícito de la normativa vigente que rige y regula el
procedimiento de la contención mecánica se hace de forma irregular según el hospital o centro
médico donde se aplica. No se sigue con el mismo rigor en un centro de internamiento
psiquiátrico penitenciario que en una residencia geriátrica o una unidad de vigilancia intensiva
de un hospital general. Mientras que en el primero se comunica inmediatamente al juez en los
otros casos, queda bajo control del médico en muchas de sus ocasiones.

Lo engorroso de la tarea administrativa sumado a la falta de jueces y médicos forenses que


puedan llevar a cabo el control riguroso que exige la ley respecto a la sujeción de un paciente,
provocan un vacío legal que regule, de forma más acorde con la realidad, el procedimiento de
contención mecánica. Podríamos decir que deberían revisarse dichas leyes reguladoras
adaptándolas a las necesidades reales que acontecen en el medio sanitario.

5
BIBLIOGRAFÍA

ALLEN, M. H. y otros: “The expert consensus guidelines series. Treatment of behavioural


emergencies”, Postgrad Med. (Spec No), pp. 1-21, 2001.
AMADOR, M., S. ARIAS y J. PORTA (et col.): “Protocolo de contención mecánica de movimientos”,
Hospital Universitario 12 de Octubre, Septiembre, Madrid, 2003.
GONZÁLEZ GARCÍA, R. y E. MOLINA ALÉN: “Estudio de las incidencias sometidas a control en la
UHB de Psiquiatría del Hospital de Móstoles de los años 2001 y 2002”, en XX Congreso
Nacional de Enfermería en Salud Mental, AESM (Asociación de Enfermería de Salud Mental),
pp. 451-460, Alicante, 2003.
KAPLAN, H. y B. SADOCK: Psiquiatría Clínica, Waverly Hispánica, Buenos Aires, 1996.
LÓPEZ-IBOR, J. J. y M. VALDÉS: DSM-IV-TR, Manual diagnóstico y estadístico de los trastornos
mentales: texto revisado, Masson, Barcelona, 2002.
MCALLISTER-WILLIAMS, R. H. e I. N. FERRIER: “Rapid Tranquillisation: time for a reappraisal of
options for parenteral therapy”, The British Journal of Psychiatry, 180, pp. 485-9, Stanford,
2002.
PABIS, D. J. y S. W. STANISLAV: “Pharmacotherapy of aggressive behaviour”, The Annals of
pharmacotherapy, 30, pp. 278-87, 1996.
RAMOS BRIEVA, J. A. Contención mecánica: restricción de movimientos y aislamiento: manual
de uso y protocolos de procedimiento, Masson, Barcelona, 1999.
REID, W.H. y G. U. BALIS: “Evaluation of the violent patient”, en R. E. Hales y A. J. Frances:
Psychiatry Update, The American Psychiatric Association, Annual Review, vol. 6, American
Psychiatric Press, Washington DC, 1987.
TARDIFF, K: “A survey of assault by chronic patients”, en John Lion y William H. Reid: Assaults
within psychiatric facilities, Grune & Stratton, New York, 1983.

Potrebbero piacerti anche