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l. CO'llCCPTO
des europeas las Facult11des de 1lumanidades, tradición que lue- El humanismo plantea u na metodo logía de acción política
go se extenderá a las universidades del continente americllno. Esta revolucionaria, pero d.i sti nta dela trad icional; puescuestiona aque-
¡ccpción, que se vn tra nsformand o wn el ti<:!m po,es solamen te un llas prácticas que hacen de la violencia parte integrante del siste-
aspecto de Jo que se entiende por humanismo. En el siglo XVIII ma. la violencia, seg(m el humanismo, es u n r.ecllr·so práctico qu e
este térmi no apun ta lvicia toda u na concepción del m und o, toda depende de las circunstancias históricas, pero es un recurso
una i<lcologfo que se fun<lamenln en la dignidad humana y crea apelable sólo en última instancia, que tkbc evitarse hasta donde
las condiciones para la transformación del mundo. Es por eso que se pueda. Si se puode hacer el cam bio sin violencia, hay que pro-
los grand es movim ientos revol ucion arios de occidente se recla- ceder a hacerlo;y en caso de que lil v iokmcia sc<i inevitable, debo
man h umani stas. Así, se habla de un humanismo cuyas raíces las ulili7.a rse yaplicarse sólo en situaciones imprescindibles, pero con
enconlntmos en el liberalismo clásico que exaltó la democrncia la firme convicción quedeberá r.egresar·se a u na si luaeiún de cam-
como forma de gobierno, apeló a !a libertad individual y política, bio con libertnd lo más rápido posible.
y a la iguald11d et\tre los hombres. Hay también en el pensamiento Una vez hecha la revolución, el hu manismo no aC•)pla pre-
cristiano clásico y en el contemporáneo una concepción h umani s- textos para mantener u na dicti.'ld llra sustentada en la violencia
ta de la sociedad; lo mismo sucede con el socialismo y el marxis- insti tucionalizada que contrndiga sus principios.
mo,que se reclaman hu manistas al plantear una sociedad ba sada El humanismo,como concepción del mtmd o,y el humanist'a
en la distribución cqtútativa de la riqueza, en la sociedad sin da· que lucha por la liber tad y Ja justicia,constituyen, como teoría y
ses,en la supresión de los meca nismos de dom inación, p roducto pr<íctica, una actitud de rebelión profunda contra los mecanismos
dé las injusticias y la desigualdad. de dominación y explotación, en cualquier tipo de sociedad en
También se ha bla de un huma.nisrn o raciona lista que, fu n- donde se impide por med ios represivos explícitos y subliminales
dánck>sc en la "razón huma na", plantea u na sociedad justa e la re11lización plena del hombre.
igualitaria, en donde predom i ne la jtts ticia, la equidad y la liber- El h ui:nanismo, pa ra parafrasear a Emm anuel Kant, consiste
tad. Hay, pues, toda u na c()ncepción política h umanista que, a lo en toma r a los hombrescomo fines en síy no como medios o ins·
largo de la historiit, ha plan teado formas ideales de organizar la trumen tos al servicio de otros hombres. Por ello,quien se procl11-
sociedad, el poder y el gobierno; de acuordo a principios éticos me huma nista y asu ma los principios que del humanismo se deri-
fundamentales como Ja libert<>d, la igualdact 111 justicia, la paz. van, debe lttchar por una sociedad sin clases, justa, libre e
En este sentido, y sobre la base de que debe plasmarse en igualitaria;por la democrntización del mundo,contra la domina-
la sociednd un nuevo orden susten tado en los grandes principios ción i mperialista, el racismo,el sexismo;y con tra tnda forma que
antes mencionados,el humanismo deviene una concepción revo- discrimine al hombre,que ofenda su dignidad.
l ucionaria radica l cu yos postulados nos cond ucen hacia una so-
ciedad sin clnses, hacin una sociedad socinlista, libre y ju sta. 2. HUM/\NISMO CRISTIANO
Es,pues,un hecho inevitable queel humanismo cond uce al socia·
lismo y que el socialismo es en esencia humanista, que no se trata ¿Es posible un hu manism() cristiano? Hay quienes sostienen
de una posición tercerista; muy por el contrario, busca concilia r que no porque no puede haber un h1Unanismo t rascenden te que
la jw;ticia con la libertad; pretendiendo resolver la gran con tradic- p<lnga a Dios por encima del hombre. En el fondo,afirma n, el hu -
ción que generan la dictad u ra del Estado y la dictadura dol manismo es an tropocén trico porque el hombre es el t'rn ico ser ca-
d inero. paz de decidir su propio destino y esa capacidad de decisión es
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totalmente libre de la idea de Dios y de su influencia sobre la natu- plícita mente los crist ia nos pri mi tivos como, por ejemplo, San
raleza y la sociedad. El miténtico hLtmanismo es ateo (l). Ambrosio,cuestionaron las injusticias de la sociedad en que \'i-
Sin emba rgo,en tm sentido genérico, la au téntica actitud cris- vieron y se pronwK iaron en favor de los pobres.
tiilna, sin prescind i r de la idea divina, eshumanista porquese tra- El origen del h u ma nismo cristiano,tal como ha llegado hasta
ta de una actih1d ele a mor y de servicio al prójimo. El hombre es la n uestra época, se encuentra en los trabajo s de Erasmo de
i magen y semejanza de Dios, y la acción cri::; tiana, que se basa en Rotterdmn, quien parte de imperativos morales y religiosos para
el amor,concentra su esfuerzo en servir a la htunanidad . Además, definir y prescribir reglas de acción . Su posición en defensa dd
en sus orígenes, fue una religión de servicio a los pobres y necesi- hom bre y de sus manifestaciones científirns, culh1ral.es y artísti-
tados. ' Es mi\s fácil que un camello pase por el <>jo de una aguja, cas, Jo convierten, al decir del historiador de las ideas, el francés
que un rico entre al reino de los cielos",sentencia Cristo. Jean Touchard, en el "príncipe de los h uma nistas".
Desde esta perspectiva,sí se puede ad mitir el ca lif ica t·ivo ..hu- Erasnw rechaza Ja g11erra, Ja bmta lidad y la mentirn en nom-
manismo cristiano", es decir, en c1.rnnto actitud. bre de Ja caridad cristia na ilumi nada por la sabiduría.
Pero, como sucede con todo Jo humm10, un cristia no puede La a plicación de los preceptos cristianos se impone tanto en
asun1iT actitudes con tradicto rias. No se puede decir hu man ista a Ja vida pú blica como en la privada; y no sólo por razones religio-
un cristiano que no esté al servicio de los pobres y qtte, por el sas sino porque es la condición del orden y Ja prosperidad en to-
contrario,defienda egoístamente susinter<:'ses matNialcs y declase. dos Jos niveles de Ja vida social.
A lo largo de toda la historia de Occidente, el cristianismo Dura nte el im perio de Carlos V sobr esalen dos humanistas irn-
instih1.cionalizado sigu e cmni nos muchas veces conh·a rios al mo- portmltes:
delo cristiano de v ida. Francisco de Vitorin y Bartolomé de las Casas; ambos cre;1do-
Hechas las aclarnciones previas, se entiendeque en los diver- ms del Derecho Natural que tiene sus f uentes en Santo Tomás,
sos trabajos sobre J-listoria de las Ideas Polític<is los especialistas quien se inspiró a su vez en Aristóteks y en Josjuristas romanos.
nos hablen cid humanismo cristia no. Francisco de Vi toria, aunque monárqu ico, plantea una tesis
El hu ma nismo cristiano es moderno, no fue conocido por San ;,nt i i mperia listn (pnra uti lizar la terminología actual). Es el pre-
Agustín ni por SantoTomás; til mpoco está incluido en la patrística; cursor del Derecho lnternaciona 1 Públ ico, al que lla ma Derecho
por lo menos en forma sistemática y rigurosa, a pesar de que im- de Gentes.
El gran jurista reflexiona sobre el problema de Ja "guerr a jus-
(li Para d hum;mi"" brit;n ko H. J. llbtkhMU, Jos idoas imloo·crl>tiouas son inrni:m<'1ibles ta" y sobre la condición huma na de los naturales de América. Sos-
l.'Vl\ c·t pcnsarn:cn:o hum,1nis!<l. Po:que ·'<l '' !li\S,1r.-;u1n<'ill,lf\<lt1(·;;.l) ('I univt-r o csti atur<l· tiene que ellos son libres y tan humanos como los europeos y tie-
do dt- prop{1 ilv: ti pr•)pó ito E"'i un elemen <> intrfr se<:C> d J<' c"S:rnt ur,\ dl' todo: b) los
hoF.lb i:s<:st<'11\ en ltbl'rt;1d de ilci>p!a r ode cambi,w e.sie fH'O¡>óstto, pero 1\0 de<'lt..:·r,1rlt>;i', dt.· nen, por consiguiente, los mismos derechos.
noa<:<'pla:lo.$(' <:v1\dt11íln 1 la fulilidad y a la nulidr.d;()el<1rdll l<'1nporat de 1,\ 1""tur,1l.:-z;"1 A pesar de esa escla recedora observa ción, ju stifica el dl•recho
t>S, fil dero Sé lllit O, inforior e Husorio, secund.1rio a u:-i <iNen t;((!rJlO ,1 · es !a rc.,Jid:\d
final. que tienen los espmioles para adoctrinar "cristianamente" a los
Frente ;;, t>Sli! iesi::., B!,l<:khi'l. 1:ldice q-.1e, n.:ambio,el humanisn•(l afirmil 1.1 vali<le7. de.:01\· indígenas. Asimismo,sostu vo que la colonización puede ser legí-
'l."eptos cor1trrir:os: l\} (TI(· itw: f l(1«.l t.·n dE';. :)cub:ern en l ,1 naturaleza no es propian1enl<-
teo!6gko;b) quf! los har11bn:-s $Cll libr<.'$ de inlr1.x.!1.1Ci r p1op{lsitos váli dospropios)'de n1ul· tima, pero a condición de que se proceda por el bien y la prosperi-
t'plk<1r las pc·sibilidad del prop6sit<.l, e>:ph)r'aod o los usosd las cusas;y. e) que no hay dad de los indígenas y no en provecho de los españoles. Las con-
ri\iit1' 0 p;1r;1 pi:'nsar que el ord('n tempo r.:ü d );\ nilluMl<-"1..'l t'H• -.,;.printt·ro y finahnente, l<l
OOJldid(•n <l.:> toda experien('i )'de 1,\ r "liz.adóo hunl<l •\. tradicciones de Vitoria son una prueba palpable del cond iciona-
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miento ideológico detcrmin,1do por la\ ,·igcnc1asde su época, las tos. En l-.;ta línea destacan, por e,emplo, l.1s prédicas de lutcm,
que no pudo supera r total mente:un caso típicode <'.Ul"OCentrismo Cah•ino y Zw1nglio y la obra "Defensa de la Libertad contra los
que ha cistido en casi todos los pensadores eu ropeos de esa tiranos"(Vi nd1ciae contra tyranos) del hu¡;onote J unio Bruto (2).
época. Como mO\·imiento político, el o;oci,11-cristianísmo es recien te.
De las Casas sigue un pensamien to ;.imilar al de Vitoria y Puede definirse como unil alternativa pollhca frente al socialismo
discute sobre la libertad de los hablt11ntes del Nuevo Mtmdo. Él marxista. El hecho de que las ideas socia listas emp=ron a im•a-
episod io de s11 f,1mosa polémica con SE>púlveda lo sitúa en 1ma d l r Europa duran te los comlen10. del presente siglo, y a ganar
tendencia progresist11 y de avi11l:t. da con relación a s11 época In- adeptos rápidamente, puso en guard ia a In Iglesia }' a los moví·
cluso, mucho hitoriadores están de acuerdo en afirmar que las mientos cristiano laicos. Est,\ prcocupad6n no fue sólo leóric;a
ideas del domínicoi níluyeron e inspirnron las lla madas •teyesde si no pr.ktic.1 y dio nacimiento a la IJcmocr,u:ia Cristiana.
Ind ias', que fueron un iMento norma tivo pa ra controlar )05 abu- El fund11dor de la Democracia ('rishana fue Don Sturso, un
sos de lo encomendero:.en A mérica . i talia no con:,crvador que interviene en política adoptando u na
Nada de esto se logró;por lo demá,,, la hitoria fue fiel testigo posición anticom u nista. De allí que la raf1 política dcl social-cris-
del fracaso ci.pañol en América; que, pese a 105 i n tentos de "cristia- tianismo es conservadora. Su meta Clil l'nfrcnt-arse, dentro de la
ni1.ar"en el l'Cill sentido de oque se entiende por cri. tiani¡;mo,optó democracia formal, a los mo,·irnicntos socia l-demócratas y socii\-
por la colonización; dando paso a formas de dominación listas, principalmentede Alemania, Francia e Italia. El social-cris-
antihuma nas a tr;wésde mocanbm de e,pJotación escla,·istas. El tianísmo,en su versión polihca democristiana , triunfa despuésde
hum.mbmo crbtiano frncasó en esta oportunitfacf y Occidmte se un tiempo en A lemania e Italia, pero no produce ningún efecto en
engrnndcdó obrc lo:, hombros del hombre.1mericano. Frnnci.1 y, menosaún, en España y Portugal.
El hll m.mbmo crístinno contem por neo tiene dos l íneas de lil fenónwno socínl-cristiano e tTm,lndn a la América Latina
pensam ien to. En la pri mera, sus fll<.:ntes M.! encuen tran en la IJ,1- dura n te los año cincucnli1 y rinde us frutos entre Jos sesen ta y
rnndn Doctr i no Soci a l de la lgksi;1, f u11d amen l11l mente en las setenta en Ch i le y Venczucln. E n el Pcn'1, el ocial cristii111ismo no
encfcllc11s pap,1lcs. La segunda es de ul'igcn ln ico, producto del pasó de ser un 1nov i11.1 lento de cumlro . La luchas en su interior y
pensmn i c1lto socia l y poJrtico de imporlnntes pensadNes cristia- las postc;rimes subd ivisiones, que con ti n (1a1\ hASt<1 la fecha, son el
nos: M ounicr,Maritai n, Marcd, 13crdiacff, en tre otros. ta lón de Aq u i les de la Dcmocrncia Cristi n 11a peruana.
l,;n somero análisi s de las endclicas papn l es 1,os permite ob- A par til' de la Segu ndn Guerra Mund ial, d pensamiento so-
servM las cont r.1diccioncs q ue hay en ellas. Por un Indo, algunas cia l -crii.tiano alcan za u 11 a l to nivel gracias a los trnbajos de
encíclicas, las más recientes,como Reru m NovMum ", "Pacem in Em ma n uel Mounicr,Jacques Maritain, Nicolá,, Berdiaeff y Gabriel
Terris•,"Populorum Progressio",y •·t.aborem cercens"tienen una Marce!.
orientación progresista, de avant.ida y rcformbta. Otras más clá- Sin dci.mcrccer los aportes de Maritain, Berd iaeff y Marre!, a
sicas, como la encíclica "Ad Beatissima" de Benedicto XV y nuestro criterio corresponde a Mou nier ser el introductor de la
"Quad ragessi mo Anno" de Pío XI, son conservadoras. corriente radical en el social-crbtianh.mo.
Debemos aclarar quecuando hablamos del pensamiento cris-
tia no, i ncluimos los movimientos protestantes que aparecieron (2) Jt•nl<l llrul.f\, &UO.n. Vvu:I ConJr.1 TynnM tOtf',.,...,. de 1.t hb(>.rt;lJ C\irnlra Ws hr.t•)
EA l -0"> ''''Wf'< opoifu..:..-. \V f'bftv.lf'ln Pd Kn·otJ J<'OxhJt>n.h>_ t.bJ.nJ. J'lh5
durante la Reforma y qued ieron nacimlen to a d iversos movimien - PIJ::S- 396 y "b'ot'-
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Mounier fue un autor poco conoodo en !>U (-poci!. Su posi- moum t a, sino que están matiado:. de categorías marxista<;.
ción es revolucionaria frente a las tendencia t rad1c1onales del so- Sin embargo,la influenciamourusta no fue tan marginal como
cial-cn,ha nismo. Su conducta rebelde mohvó el rccha«o de los se pil-ru.'.\. Al parecer,sus ideas fueron conocidil por la juventud
social cristianos conservadores y de la autondnd ecll:'Siástica de la demócrat;i-cristiana a mediados de los L-..cnta. Quizás este factor,
época. No ob.tantc,Mounier fue un autn tico cristiano. al ladodP cierta tendencia marxbtil en aquellojóvenes,ju nto con
Din:ctor de la revista "Esprit", es au tor de diversas obras y en- ot ro asp1> . ct()S de orden programát ico y de predominancia en el
sayos, en donde dctacan el "Mruúficsto Perso11aHsta" y el "Com- Part id o Demócrata Cristiano,determi n6 I n rupturn con la autori-
promiso tk In Acción". d d part id Mi a de en tonce y dio origen n l M ov i mien to Socia lista
Su pt111samle11to político contlent:dl v ér os nspcctos id eo- Ct11m1nitm'io de poca duración. pero q u e l or;ró elaborar un mterc-
lógicos y doc trlnnri.os. llay en él dcmi.:ntos n no 1·q uit11s combin- n ntc docu mento que con lenía id eJs de M m111icr y Marx respecli-
üos co11idc."liberales de la Revol ución Frnncesn, y también mar- vn men lt>.
xistas. Un hl-cho decisivo que va a influir en l.'I Cilmbio de la conduc-
Sobre Mou nier,el filósofo panameño Alfonso Vill¡¡rreal Pin- t l política de ciertos sectores de la Iglesia, eSpl'Cialmente de lo$
7.Ón ribe que én lo medular del P'-'ru>amiento mounista encon- sacerd otes del Tercl-r '.\1undo,fue el de los continuos movimit"iltOS
tr uno!> un1rom'1cción espiritualista prof und.1, una religiosidad de liberación en América Latina, Afr1ca y Aia. E!.tos mo, ÍlJÚen-
profunda, pero t.1mbién una honda sel\$ibilidad !>OCial y política tos, pri ncipal men te los de Afric l, M!inicia n con las luchas
cuando plant<'a lil necesidad de de:>olid.ui/..U el cri>1t.1nismo del an ticoloniales y.posteriormen te, se Viln rad1cah.mndo hasta que
·stcm.l 1mpcrM1t e b.1sado en la injusticia y la dom mación." (3). se rontit uyen en estados naaonalíi.ta de ILquierda y socialistas
t- 1(1unier cr••ía <!lle la única altemilllvn del crihhanismo era l'n algunospaísesdel coatinente negro.Otm t<into pasa en Améri-
compnunctl·r c con su época parn alcan1ar una t ransformación ca Latlt111 con la consti tución de gobierno• milit rcs naciona list11s
rc\'ol ucionnrin que fuera ideoló1,;ica y polflka. De allí que para y progrcsistM como en el Perú y 13ol ivin, y ta mbié>n democráticos
Mounlcr el crist l1111ismo es algo más q ue un.1 ncti h,1d co11fcsional: de 17.<i ul crda, como el de Allende c11 Ch ile.
es u 1\ compro1nlso l'..'11 favor de los pobres. Est<1 tcsi lo induce a El n umen to de la pobreza, de lo marglnn l idad odal, el hecho
plan tear la ncct:sidnd del compromi o terrena l y rev<il ucionario di.' IJ LIC no se pod ía romper con los mcc1111is111os de dominación y
del cl'istiuni mo. dependencia, consecuencia del impcri,11isrno, In postración cultu-
Solamen te conocido en un reducido círculo de intelec tuales, l'<l l y c<luca tiv<1 de millones de seres humanos, el a ba ndono de la
Mounier ha tenido poca influencia en el pens.imie11to ial-cr is- nii\e1 y los desnh·eles nutricion.1les muy bajQ'. en todo el Tercer
tiano peruano, que igue, principalmente, las ideas de Ma ritain. Mundo, y en algunas de esas reg1on'lS tíln infrahumanos que muje-
Este hecho es eviden te cuando anali«lmO:. IO!> aporte!.de ciertos re!l y hombres mueren por las calles, asl como las polít icas
teóricos social-cristianos,desde tma óptica tercerista mat i1.<1da con at entatorias de los derechos huro.1006, son fenómenos que van a
idea:.pmgrL"l1stas.Más inJluencia que \ounier ha tenido también inlluir en la posición política y hasta 1deológ1ra de la Iglesia ten:er-
Berdiaeíf, que ha sido estudiado en nutro medio graoas a los m und1st.a.
trabajos de Hem<1ndo Aguirre Gamio; pero estos trabajos.algu-
Algu nos sarerdotcs empieza.o il cuestiOnM el orden imperante
no in('<h t os, no expresan única y exclusiva mente el pensanúento
y se comprometen con los pobres que luchan por una justici a so-
cial apa ren temente inalcanzable. Apa recen Sílccrdote- guerrilleros,
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como t'1 c:olombfono Camilo Torres, que n<> encuentran otro cami- pecto,añadeque:'es innegable que la lucha de clases plantea pro-
no que no sea la violencia como mecanismo p<1ra la Liberación. blemas de la universalidad del amor cristiano y a la unidad de la
La Iglesia lalinoamericana y tercennundista se enfrenta a los Iglesia. Pero toda consideración sobreellosdebe partir dedoscom-
P?dcrcs constituidos, y m uchos curas son flCUSados por los go- probaciones elementales;la lucha de clases es un hecho y la neu-
bicmos represivos de 'enemigos del orden·o de "comunistas". tralidad en esa materia es imposlble." (5).
lo q ue fue hace poco la "Iglesia de los ricos" se va conv i rtien- En su obra, ''La Fuerza Histórica de los Pobres",libro que abun-
do en la "Iglesia de los pobres", no sin cont rad íccl<.lnes y con pro- da en citas bíblicas imprcsion.mtcs por su mensaje l i berador y re-
blemas in tomos . Del seno mismo de las luchas de liberación nace vol ucionario,Gutiérrez entiend e que el Libro Santo ha sido inter-
In n\1evn m odalidad dereplantea r,en términosde téorfo, lo qm!se pretado desde el punto de v ista de la duse dominante.Al respec-
estaba rcn liza ndo en la práctica; el germen de lo gue ahor.a se co- to,sostiene, "no se puede olvidor, en efecto,que la Bi blia ha sido
noce por Teología de la Liberación se había formado. lelda y com un icada desde los sectores )' clases dominantes. Se ha
LaTc:ologia de la Liberación tiene va rios expor1en tes, pero a hecho jugar entonces a "lo cristia1\o" un pa pel dentro de la ideolo-
nu est ro cri terio el más i mportan t e es Gustavo Gutifrrez, .-acerdo- gía I mperante, que cohesiona y afirma uno sociedad dividida en
te peruano y,sin d uda, el pensador cristiano de mayor significado clases. L. sclasespopulares no llegará n a u na au téntica conciencia
y trascendencia que hay en el país. política sino en la participación directa en las Luchas populares
Gustavo GutiérrC.'i:, luego de hacer interes;1ntes observacio- por la liberación. Pero en la globalidad y complejidad del proceso
nes sobre la t('.Olo¡-,ía clásica,se plantea el problema de la libera- social, que debe quebra r el istema opresor y conducir a una so-
ción y el rol que le compete al cristianimo en la lucha de libera- ciedad sin clases, la lucha ideológica tiene un lugar importante.
ción. g(m Cutifrrez, el tema de la liberación apm'(x:c frnncamente Es,por ello,que la comtmicación del mensaje relcfdodesde el po-
trntado en el M ens<1jc de Los Obispos del Tercer M u ndo, publ icado b1·e y oprinúdo, y desde la militancia con las ludias, tendrá una
com o repucst,1, precisamen te, al llamamiento de la "Populorum fund611 desen mascaradora de todo intento dehacerj uga r el Evan-
Progressio". Y se encuentra hasta casi constilui 1· 1,1sín tesis de di- gelio pnra justificar una situación con t raria a la "justicia y eldere-
cho mcnsuje, en u n tex to de mayor imp<>rt<incia que d m1terior cho", como dice l a Biblia." (6}.
desde el pwlto de vista de la autoridad doctrinal: los docull\en tos Bstil larga cita nos la hemos permi tido hacer para demostrar
de In ll Conferencia General del Episcop<ido Lat i noamericano, ce- el cambio que se está operando en líl manera de interpretar, a la
lebrada en Medc!Hn en 1968. luz de las Sagradas Escrituras, hs diversas modalid<tdcs y la
En ti ende Gutirrez que "la perspect iva ha camb.iado. En es- i m plicancia delcompromiso terrenal del cristiai10, qtte sejust ifica
tos textos ya no se ve la situación a partir de los pa íses centrales y en la med ida en que su obra sea ekctiva en este m undo, y no la
se empieza, más bien, a adoptar el ptmto de vista de los países expresión de una conducta pasiva de dejar hacer y dejar pasar.
periféricos,a asumi r desdeden trosusantiguas aspiraciones." (4). La crítica contra el industrialismo de la sociedad contempo-
Otro aporte de Gutién:ez,realmente sustancial, seda cuando ránea, que en lugar de favorecer al hombre lim ita su desarrollo
plantea el problema del cristianismo y la luch .1 de clases. Al res- natural potencial, el mismo que puede sersuperado si seconstru-
ye una'sociedad convivencia!",ha sido hecha por Iván llich.Este
(5) Op.cit.Pdg.:ló3.
(6) CutJ.:rrez.. GoslaVl). l .a Fu<? r11 Histórica de l\Js l)c;)l::r. Ed. CEP. t.iln.a. 1979. Pá¡;.32.
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!><'lccrdote austriaco,que dirigió en México el Centro lnternaciona 1 J <1)' útiles que no puedl l ser manipulados por los hombn-s,
de Oocumentaci1ín (CIDOC), que tiene numerosos SL-guidores, los que pierden con trQI sobre )QS m ismos y se someten a ellos,
plantea la modificación total de la sociedad para que el hombre porque todoslos útiles no son accesibles a todos loshombres sino
pueda seguir libremente su propio destino. El hu manismo de llich a Jos que lumen diploma o licencia llich d ice que hay útiles que
se puL'tie definir como u n humanismo de ),\ praxis . por u d imensión no pueden ser d i rectamente mani pulados.como
llich, en sus obras •Sociedad DcsescoJ,mzada" y "La Socie- "los muebles de oficina y los mercados mu nd iales".Por eso, sos-
dad Com·ivenciar. plantea las si¡',1.iientt-s tesis: t iene que ")0$ útiles nec 1ri0$ di! una l>Oeicdacl convivenóal de-
•1. U na ed ucación u ni versal med ia n t e l a escola rización
ben ser ll• suficien temente simples para que cua lquiera pueda
aprender a manejarlos, lo uficit•ntemc•ntc pequeños para que el
com pulsiva no L'S factible. individ uo o los grupos de pt•rso11.1s no l' l"'dali/A,clas puedan uti-
2. Los nuevos sistemas ed ucat ivosson más efoctivos que los tra- J17 ulos en fu nción de sus fines y que no dependan de ellos.- (8).
dicionales, más atractivos y seduct ores, pero t.lmbién más Sotiene llich que es·mucho más i mportante m una sociedad
insid iosa mente destructores de los valore' fundamentales.
com•i\·cncia l dt ar que cad a uno disponga libremente de una cuota
3. Una M>cicdad confiada en los altos niveles dt.' educación com- ruonable de energía, que pcrscgmr la quimera de un reparto
pa rtida en in terrelación personal crítica debe establecer lími- igu.llitilno de los bienes.La sola pmpicdad pública de los medios
tes pt-dagóg1c0!' a la hipertrófica cxrancia ind ustrial" (7). de prod ucc16nconducecasi ine\·1tablemenle al estalinismo;en cam-
4. La medid na crea másenfermedades que las que cura. bio,Jos criterios que acabo de mcncion.u conducen inevitablemen·
5. La crisis de l<ls socit-dadcs ocridentalcs eslil ligada al creci- te a 101> ideales que persiguen la mayor parte de los socialistas,una
miento dl'•ml'surndo de los instrumt•ntos que han comen7.a- sociedad sin clasc·s de productores sobernnos." (9). La sociedad
do a e>('l<IVil.ar ,, los ind ividuos,en ve7. de servirles, a pMtir convivencia ) sería sorial ista, pero ron ti t ui ría u n socialismo
del momen to en que sus dimcn•ioncs han uperndo cierto basad o y sustentado enla asociación libl'C y t-spontánea de Jos pro-
l ími te. duclon s.
Siendo ev id ente la crisis de n ucstrn soci edad, rtich propone U no de Jos plank<i mienlos de llic:h consiste en dcmosh·ar que
como n l t ernn tlv l o que él llnmn ln "socieda l1 convivencíI". la propiedad colectiva de los úlllcs puede significar que la colecti-
Ln sockdad con vivencia) sería a quella forma de organización vidlld se comprometa a u tili:wr a l guno bienes esenciales,de nm-
socia l a u tónom,1 en donde los ind i vid uos pt1ed1111 disponer libre· nera que se promueva n relaciones sociales convlvendales. Pero,
mente de ,1qu el las herra m ientas que les son í1tilcs. !'ara ello,esas en este cnso,se compromete rá también a ren unciar lo más pronto
herrarnicn t.1s,no sólo máqu i nas sino tambin instituciones,deben posible, y a cua lquier costo, a los gr.1ndcs unidades por eficaces
ser d islrutadas por igual entre todos los hombres y no por una que sean. fin una palabra, Ja socialización de los útiles puede y
mjnorla reducid11. :-Jo obstante, ciertos ú tiles son los suficientes y debe servir para desterrar que éstos,por sus dimensiones,su po-
necesarios dentro de la sociedad convivencia!:aquellos útiles que tencia y su naturaleza no permiten un L>stilo de vida convivencial.
además de ser creados por el hombre pueden ser manipulados por
él sin problemas que restrinjan sus potencialidades crea tivas.
(!);) 111.-:h, h"1n t.. M>C1td.1d conv1vtn0•I Ed ·n.)(X:. Cu&d,.rro 1ll2
' 1 Cuema;tdi.A, 1'112.
f7) Ukh, hr.tr\ H "' uoJ wck'd.kt i.vm'h"-ncill 1:.d <.:UXX C"u.adfrno 1021 Cllf.rruv·.ica,. 2-"
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1'11 Op ª' ,.,.,,.. ·lll
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262 lh NA,..l)MI}
263
3. Jl iA'llSMO l'vlARXISTA
la revolución socialL ta y a la con,,trucción del e<>m unimo.
1 lay una discusión que hilSta el momento ha conl'ribuido a El humanismo m.irxista es un intento de íund,1mentar el w1-
oun.'.Cr más quea aclarar la problemática del hombre en el mar- lor de lo hu rmmo en las leyes objeti vas yen el conodmientocienlí-
xismo. Sería red nda nte el insistir en ella; pero,por lo que e des- flco de la realidad. Para Marx la plenitud del hombre radica en la
prende de lns prm 1pales bras de Marx, se puede ,1íinn.ir q ue el coincidencia de su r con su conciencia.
nao.1smo es la1b1én una torma de humanimo, unn de Jasexpre- Siempre que Marx se refiere a la l ibcr<tción h u ma na Jo hace
s1onc m.ls rod 1ca les del pensamien to filosófico a favor del hom- teniendo en cuen ta los mce<mismo.<; deenajenación. Entiende M<irx
bre en 11. historia. que la única form.1de lograr la plC'ni tud dd hombre es alcanzan-
A Ma rx se le atribuye haber sido humanist,1i.óloen su ju ven· do su liberación de toda forma de enajPnadón (.1lii>nación).
tud, Cllo\ndo <-. scribió sus fa mosos ..Manuscritos íkonóntico Filo- Según Marx,el obrero (C'l hombre) se convlerlc en 5iervo de su
sóficos , en 1844, y los "Cuadernos de París". T1
. 1 af i rmnción no es objclo en dos sent idos: primer(), en cuanto n l,1adquisición de u n
correc:t.1 porq ue en sus obras de madu re7. como "La Ideología objeto de trabaj o; se¡',llndo, en cuanto ,1 l a ndq u bk ión de los me-
Alc.mnnn'> e i ncluso en "El Capital",está prt•sc11tc el problema de d ios de sustento. 1i1mblén dice Ma rx que In economía política es-
la hbcmc16n hu mana. Por eso, el filósofo ruso f'edo;icv afirma, conde la enajenación contenida en la misma t...cncin del trabajo,por
con acierto,que "reducir el humanismo de arx sólo a las obras el hecho de que no considera la relación directa enlre el obrero (el
tempr.ums y no ad,·erti r el humanismo de "FI Capital", <'.11 reali- t rabajador}y la producción ...Evidentemente -señala Marx- el tra-
dad, es hacer caso omiso de la. vías de formación de la ideología bajo produce maravillas para los ricos,pem prod uce pri\·,ciones y
c1entffic.i y de las leyes objetivas del desarrollo de l,1s l uchas pro- pcnunas para los obreroi.. Produce palacios, pero ,1loj.t a los obn.
letaria'>." ( 10). ros en tugu rios.Produce belleza, pem tulle y deforma a los obreros.
lgualm'l"ltc,la filósofo V.Keshel1wa indica que precbamt"rl· Sust ituye el trabajo por máquinas, pero condcn.1 una parte de los
te el carácter revol ucionario del marxismo es inclicndor inequ ívo- obreros a integrarse a un tr,1bajo propio de bá rba rm y convierte en
co de Stt l!scnia hu ma nística. lln efecto,pri mero, l ucha por la res· máqui nas a la otra pMtc. Prod uce cspiritu, pcrn produce estupid ez
tm1rnción 1·11d1ca l del mundo de la explolación; i::gundo, ccmsid e- y cr\!tinismo par a los obreros." (H).
ra que In sltunci6n en que el l ibre desarrollo de c dn i ndividuo . Vibran te In d muncin d e Ma rx, que dcm t ll' tra su preocu pa-
condiciona el Ubre desarrollo de todos los denuls, es l'CSu ltado ci ón por los hombres cxpl ot,1dos y ma rginadtls. Denuncia que,
imprcsci nd1ble del movi miento de la historia, que, al m bmo tiem- por ol ro lado,es una pru eba del antihu manismo dd sistema capi-
po, es el desa rrollo de los individuos (11). tali t.,.
El merito de Marx es haber liberado al humanismo delas con- En unodesus manuscritos recientemente de-;cubiertos, y que
cepcionc;, religiosas y bu rguesas e inten tado cen trarlo en las rcali· vendría a constitui r luego los llamados "Cuaderno de París.., se
dad concreta.Para Marx,el comunismo es cl humnm mo real por· puede apreciar la idea radical que tuvo Ma rx sobre el nombre, no
que el concepto de humanismo está ligado a la lucha de clases, a como ser indh•idual si no como ser social, in men;o en una realidad
que se le opone y enfren ta, es deci r,la socil'<lild capitalista.
264 265
En los "Cui'ldcmos de París",Marx i,osticnc que li'I economía mática de la liberación humana, es bá!.ico y m;irca un hito en l.1
polítici'I no preocupa en absoluto del intcr nacional y social historia de la filosofía,que si rve para el desarrollo ulterior dd
del hombre,sino unícamente del ingreso neto, de la ganancia, de humanimo.
li'I renta, y que éstos aparecen como el fin úlhmo de la nación y la Entre el humanismomarxista y el hu manismo moderno hay
bOCicc.l.id. Dice Marx que ('Il elcapitalísmo la vida del hombre no una diferencia de metodología en la forma de superar la aliena-
tiene ni ngún valor, q ue el'alor de la clase obreril se red uce exclu- ción h u ma na y alcanzar la libernción, d ifcrel\cia que más que tl.'Ó·
sivamente n los costos de prod ucción ncccarios, que los obreros rica es práctica y obedece al cuesli onami enlo de la metodología
sólo cx lst0n pa ra el i ngreso neto, para Ja g,111,111d<1 de los capitalis- p11ra org;rniz;u el poder cn la sociedad y 1\0 a In concepción ma r-
tas y I n ren ta del terra teniente. xista del hombre.
Part ilmdo de estos supuestos,entiende Mnrx que mientras el Si el hombre en la sociedad capl ta l Ista es un objeto más del
hombre no se reconozca como hombre y, por tan to, organice el apa rato prod uctivo,sudcsh\Una.ni:wción e total; pues deja de ser
mundo de manera hu mana, la com un idi\d npnreccrá bajo la for- el protagonista de la historia pa ra convertirse en un objeto de la
ma de enajenación (alicnación) debido a que MI ujcto, el hombre, ociedi\d dominada por clases privilegiadas.
es un ser enaj1> .. nado de sí mismo.Esta comunidad son los hom- Así, mientras los hombn'.S no participen por igual del fruto
bll..>S; no es una abtracción, sino romo individ uo;. partículi'l rcs, de la rique7..a que genera su trabajo,con tinuarán enajenados de su
vivos, reales; y el modo de ser de ellos es el modo de ser de la propia creación. Por consiguiente, hay que cambiar las relaciones
comunidad. de producción para que el hombre pueda dominarlas libremente.
Vemos, pues,que a Marx le preocupa fundamentalmente el Por eso, siendo la propiedad pri,•adn de los med ios de prod uc-
problema del hombre como ser real y concrclo,creador de su lús- ción el princi pal obstáculo para l,1plenit ud humana, debe ser abo-
torla, t rnni.formador de la naturaleza y de la sociedad. La meta. lida y reemplazada por la propiedad social de estos medios. Se-
scgi'm (:1,es el comu nismo, creació11de una sodcd nd hu mana ple- gún M«rx, de esta manera los hombres pod rán realizarse plena-
na nwnte libre de loda forma de enajenación y explotación, que mente y ser l ibremente desalienados de todn forma económica e
son c:I pl'incipal obstáculo para la rea Liznci6n del ser humano. ld colót ica.
Es te plantc¡imicnto de Marx fue descstin111<111por algunas in· El trabajo en la socied<id capltallsta 110 es ll l1 bien para el obre·
tcrprct11cloncs escolásticas marxista s, de cor te cst,111 nista. Creemos ro, es a lgo que se J e aparece nc¡;ativo; por eso, sólo socializando
que tal descuido se debe a su concepto erróneo de lo que es el los medios de producción se podrán creM las condiciones futuras
humanismo,muchas veces interpretado como 1111conjunto decon- para llegar al comunism o,que es la socicdnd humanizada por ex-
ceptos abstractos, sentimenta les,individualistas y carentes de ri- celencia.
gor cn la fundamentación, que impide el dcsam11lodel pcn.o;. mien- Este procesodehumanizaci ón nol"' mecánico sino dialéctico.
tocien tífico. Sin embargo,el humanismo se tenla en bases rea-
Bn él se dará n u na serie de conflictos sociales,porque la clase c.1-
les,por el h«ho de pa rtir del hombre como ser real
pi talhta se opond rá al progreso del proleta riado; y es, por · .
Loque sucede con arx es que formula una teoría del hom- qui: la luchi'IS de clases se desarrolla rán en ese periodo histórku
bre como cr !.<lci11l e inmerso en la lucha dc clabes, algo que no de la sociedad.
pud ieron prever los humanistas pre-marxi sta. Ma rx lle\'a el "hu-
Pa ra Marx, la solución al conflicto de clasl'S en la socic'(,l,1d
ma nismo realista" a su máxima expresión.
capitalista no es únicament e económka, es h1mbién ideol6gic.1,
No cabe d uda de que el aporte de Marx, en torno n la proble-
11VMANlSMO
267
política y soci<1l porque no basta cambiar la estruchtra económica; Entre las corrientes marxistas huma n.istas cabe indicar tmn ·
es necesario capl1.1rar el poder político pa ra transforma r la socie- bién a la conocida escuela de Fra nkf u r t, repr€se nlada p(>r
dad, lo que implica profu ndas modificacio nes de lct ciencia, la téc- Horkheimer,Adorno,Marcuse, Habermas y Wellmer, que seña l/'I
nica, el arte y todas las expresion es culturales del hombre.En la elcarácter deshumanizador y wtldimensional del capitalismo. Esta
actualidad existen una serie de interpretaciones teóricas y prácti- escuela tiene el mérito de haber a nalizado a fondo los mecattls-
casque enalgunos casos,pese a su origen, han llegado areplantear mos de ideologización que hay en la sociedad indtLstrial constan-
algunas ideas de Marx sin cuestionar su pensamiento esencial. temen te deshumanizada. La escuela de Frankfur t es un intento
En toda esta ga m a de corrientes y opciones,la idea que Ma rx serio por desmitificar los argumentos que el sistema de domina-
tu vo del hombre como ser ind ividual y social, lo que se conoce ción de la sociedad ind ustrial presen ta dentro de categorías
como humanismo marxista, esmateria d e polémica enh·e los mar- epistemológicas de ra íz positivista.
xistascontemporáneos. Se trata de una polémica enriquecedora y El problema del hombre y sus luchas por u na sociedad justa
esclarecedora que abarca un horizon teA mplísimo,compuesto tanto fue estudiado por Lenin. Lenin sostuvo que dentro del Estado
por aquellas teorías que niegan los elemen tos hu manistas en burgu és-liberal, el hom.bre como ser social estaba sometido a la
la teoría del filósofo alemán, como por aquéllas otras que las ideología del Estado-Nación; por consiguiente, era Lll1 sujeto so-
afirman. metido alpoder del Estado burgués y alienado a la concepción cid
mundo impue ta por la burguesía, que había hecho del consumo
Para los pri meros, por ejempkl Al th usser,el marxismo no es y del trabajo mecanismos de dominación.
u n hu rna nismo, porque Marx cuestiona el llamado humanismo
En Europa Oriental, cabe mencionar los aport·es de Dubcek
filos<ífico basndo en un a ntropocentrismo pequeño bu rgués.
sobre lo que él llamó un "socialismo de rostro humano", gu e con-
De ahí que el humanismo filosóf ko se opondría a la visión jugaba la libertad de crítica con el desa trnllo socialista.
hmnana y dialéctica que tu vo Marx de la sociedad. Esta tendencia En Polonia, desde una perspectiva marxista, Kolakowsl<i cri-
sostiene que si bien de las ideas de Ma rx, y de la aplicación de su ticó el "carácter no marxista de los socialismos estatales",que im-
teoría a la realidad, se desprenden condiciones favorables al ser piden el desa rrollo pleno del hombre.
humano, de ningún modo puede inferi rse de ello que el marxis- También,en la ex Yugoslavia,filósofos como Markovicsehan
mo sea un hu manismo.
abocado a estudiar losmecanismos de poder y su carácter técnico
La otra corrier\tc indica queel marxismo si es humanista por- burocrático,q ue son el principal im pedimen to para. el desarrollo
que la principal preocupación de lvlarx era la transformación de la pleno de hombre,porque éstecontinúa sometid o al poder del Es-
sociedad capitalista, que enajena al hombre, con Ja f inalidad de tado y de una burocracia que concentra privilegios,por el rol que
alcanzar una sociedad plenamen te humana. Hay un intento por ocupa en la estructura social.
conciliar lajuslicia socialista con lalibertad; porque,en último caso,
elsocialismo eslibertad.Así,por ejemplo,loentiende Fromm, pa ra
4. HUMANISMO ExrSTENCIAl.iSTA
quien no es el hombre el queestá enfermo sino la sociedad y, por
consiguien te, hay que cambiar esa sociedad. Esta corrientesostie- Jean PaulSartre y Albert Cam us son los principalesexponen-
ne que la teoría althusseriana, con sus pretenciones decrítica tota l tes de la versk'ín francesa de la tc?oría existencialista del hombre.
a la raíz humanista de Marx, es tan sospechosa como la ciencia La concepción existencialista francesa se relaciona de m<ínc -
universal del idealismo trascen dental. ra más directa con la acción política. Al respecto,es necesa rio i'lda-
269
rar que existen otras versiones de existencia lismo,como la del ale- "La fi losoff a rc\"ol ucicmaria, M1pcrando a la \'E'2 el pensa mient o
mán Ilcjdcggcr y In espal'lola de Ortt>ga y Casset; pero no tienen idealista, que e burgué:., y el mito materialista,que pudo conve-
mayor relación con la acci(m pollhca . nir un tiempo a t,\s mas,\S oprimidas, pretende ser la filosofía
Elhumanismo eí.,tcnci<1lista lrancés flmdamcnta el valor del del hombre en g1mcral y l'8 muy natural. Si ha de ser cierta será
hombre en la libertad . Se car.xt erit.il por la denuncia de todos los univer.al .'º (14).
mecanismO!. i.11l'l; que atcnt.111 contra la libertad, i ncl uso meca- En su critlc,\ al materialismo filosófico y político, Sartre lo
nismos éttcos aparentemente bien fundamentados. c-aliflca de ambiguo y prec1"<1que l>sla ambigüedad estriba enque
Sartre, en su obra ''Matcriillbmo v Re,olución",analiL<i a fon- a!>pira a i,cr un.1idl'<1logía de clasecomo I,\ expresión de la verdad
do el problema de la libertad, .su rclaéión con la revolución y con ab.olu ta.Ante la idrologm1ción dt'I materiali.!>mo,Sartre oponela
la re<>hZilción plena del hombre.A lo que él llama "filosofía revo- actitud revolucionaria pr.lctic.1 y real. Para él, el re,•olucionario
lucionaria" opone otras concepcion<.'!. y con. idera que la libertad asume una po:.1C1ón pridlegi,. da en el momento mismo que se
es una cond ición b.\ica para la reall7<\Ción del humani. mo.Al res- pronuncia por ¡ , rcvoluc16n.
pecto,indic.:i que 'más ali,\ de la organi7.ación racional de la colec- No combate por la conservación de una clase, como el mili-
tividad, la conciencia de clase reclama un nuevo hu manismo. El tante de los pa rtido' burgue.cs,sino por la supresión de las cla-
socialismo no es otra co que el med io que perm itirá realizar el ses. No divide la socied;id <'n h<nnbrcs de der<-.cho divino )' en
reinado de!el libertad, u n i nlimo materialista es cont radicto- hombres con d cn.-chos naturnlc:., >ino que reclama la unificación
rio, porque el SO<'ialismo e pmpone por fin un huma nismo que el de los g(upos étnkos,dr l;i cla iies; en suma, la unidad de todos
rnaterialbmo lince inconrebi hlC'." (13). los hombres. No se 1.kja mbt ificar por derechos y deberes si tua-
De cstns pnl nbr.1 Sl' dcprcnd c que, pMa srtre, el socialis- dos a priori en un cielo l nlr1tl'iigible; por el contrario, plantea el
mo es la heri-.u11k11t,1 con la r u a l se 11lcan.Ga la libertad y que el neto mismo de rebclar>c contrn ellos. Es el hombre que quiere que
hur11i1nismo es el objet ivo de todo social ismo. el hom bre aum11 libre ylo a lmcnt·c su destino. Su causa es la del
Sartre sostiene <111c lns co11ccpcioncs idCéllista y materi alista hombre y st1 filosofía debe cnuncinr In verdad sobre el hombre.
nc> condu cen 11 la l l be1·tnd y n l;i rca l iza<•i611 plena. Bstc papel está Según Snrt rc, <d pnp¡:J libernclor de la "filosofía revoluciona-
reservado p;m1 la critica im p loca blc de la "filosofía revol uciona- 1'ia" rndic:u en lo <lésmit lfl c<'ICión de l os VR l ores que gobiP.rnan la
ria", quepone en Ida ele Ju ido tanto el ldclismo como d materia- socied Rd dcshu1t1n nl znd n; pero esta filosof ía será revolucionaria
lismo. Hi oriento la p1'<1xis pol ítica n li1 upresión de las clases y si satisface
J'a r,1 Sar tre, a la "'filosofía revo l uciona ria", es decir, a aquel la al ho.mbrcCOIJ\O ser soc:inl.
d isciplina que utili zo la n1:1611pa1·a cuestíonnr todas las creaciones Si ello es verdad, los plantea mientos de la "filosofía revolu-
culti.u:alc.corresponde cnc.1u.tar la revolución. Este pl;i nteamien- cionaria' ser.in univer s;1lcs. !.in este nivel ele su pensamiento es
to es un antecedente remoto de la ach1a l rilosoffo de la liberación
donde Sart re vlsl u mbril un hecho funda mental: el problema de lil
(así como hay una Trologí.1 de la Liberación, se ha formado una objetividad rc\"ol ucionnria, que tkbc estar sometida a la realidad
Filosofía de la Liberación) que se desarrolló principalmente en
humana.As{, humanbmo y objetividad son dos puntos de vista
América Latim1 y en otros pa ises tlél Tercer Mundo.Apunta Sartre:
intimamente relacionados.
270 FR..\S<:1sco Mu<> Qur:sAOA n"º" H t:MANJS!'>tO
27 1
"El hombre no es otra cosa de lo que élse hace" (15) dice Jean "El hombrees li.1 (mica cri,1tura que se niega a ser lo quees" ( 19),
Paul Sartre; y agrega que este es e.1 primer princip io del existen- dice Albert Camus, en su famoso libro "El Hombre Rebelde". Este
cialismo. Pero ¿qué es lo que d iferencia esta subjetividad hum.ana hombre rebelde es un ser que dice no, "pero si se niega a ser lo que
de las cosas? La diferencia esencial estriba en que el hombre es u n es no renuncia, porque es además un hombre que dice sí, desdf! el
proyecto,"es lo que habrá proyectado ser" (16). Por el hecho de ser primer momento",(20) sostiene Camus.
u n proyecto es un ser responsable, no sólo responsable ante los Para Ca mus,el hombre vale por el hecho deserlo y su princi -
demás sino ante la hu manid ad, porque Jo queescoja cada hombre pal cualidad es rebelarse contrn todas las trabas que impiden su
en su proyl•cto atafie a tod a la humanidad, la a fecta; poi·eso su realización. La rebeldía ca musiana es universal, metilfisica, políti-
elección personal incide en todos los demás seres humanos. ca, religiosa, histórica y artística. Dios es el orden establecido, y
"Así, nuestra responsabilidad es mucho mayor de la que po- las concepciones culturales )1 estéticas creadas por Occidente son
dríamos suponer, porque compromete a lahumanidad entera." (17) puestas en tela de jui cio.
dice Sartre. El mito de l'rometeo y Ja rebeldía de Satán son aspectos ca-
Esta <'lección que afecta a la humanidad se torna en w1a an- racterísticos dela rebelión metafísica. La rebelión de los burgue-
gustia existencia l;y, para Sartre, "esto significa que el hombre que ses ant<' la aristocracia y la revolución de los proletarios contra los
se compromete y que se da cuenta de que no es sólo el que elige bu rgueses son aspectos propios de la rebelión h istórica y política.
ser,sino también un legislador,que elige al mismo tiempo quea sí La poesía maldita (Baudelaire, Lautriémont) manifiesta la rebe-
n'ismo a la h umanidad entera, no puede escapar de su total y pro- lión artística.
funda respon sabil idad." (18). En resumen¡el hombre cam usiano es un rebelde que lucha
El humanismo existencialista no es trascendente como lo es, con denodada energía contra todos los me<:anismos de domina-
por ejemplo,el hu manismo cristiano. El hum anismo existencia lista ción que existen en la historia.
es un humanismo real, fundado en la sociabilidad e historicidad Seg(m se ha señalado, Marx llega a una concepción del hom -
hu mana.Se trata de un humanismo solidario y Ílll1damentado en bre que supera en radicalismo a las que existían en su época. Pero,
la libertad, porque el hombre puede realizarse proyectándose a el rad icalismo de Marx está planteado dentro de determinados
los demás pero dentro de una libertad que le es propia, en su con- marcos teóricos. En cambio, Camus lleva su rad icalismo hu ma -
dición de ser el único ser capaz de elegir y responsabilizarse por nista hasta límites difíciles de concebi1 rechazando todas las tra-
su elección. No se trata de lU\a responsabilidad formal sino de bas teóricas y prácticas que se oponen 11 la realización de la pleni-
una responsabilidad universi.11,es decir,histórica. Por eso se expli- tud hlllnana.
ca su angustia y su drama ante la elección, porque una mala elec- Para Camus,el hombre da sentido a la historia mediante la
ción lo compromete ante los demás y puede comprometer a la rebelión contra todo aquello que lo opri me.La meta de la historia
hu manidad en su proyecto integral. es forjar una sociedad libre, una sociedad sin dogmas ni prejui-
cios,sin clanes,en que sea imposible el dominio de unos hombres
sobre otros.
( l5) Sath ,Jean. rauJ,El ex:istCl''l(H'lliSt'!\O <'.S UHlnu'J\an:Snto. Ed. Sur. Bs.t\S., 1975. p - 17.
(ló) Op. cit. l\\g.18.
{l?)Op.c;t. P,ig. 20. (19}Cln,us, Al bert. El H ombre Kebelde. l!cl. los..l.da. Us. As., l<J?S. f'.1g. 17.
{)) Op. c;1. PJg.21. (20) Ibídem. l ág. 17.
HUMAN iSl'-J O
273
Los pla nteamientos de Ca mus_rebasan Jos marcos teóricos. Por med iode la razón Ja denuncia social es más eficaz. Usan·
La teoría es sospechosa puesto qlte es uti liza.da para justi ficar Ja do su razón muchos hombres demostraron la falsedad de las teo-
opresión. rías que j ustificaban el carácter divino del poder.Por medio de la
El hu manismo de Camus se funda en un intenso sentido d razón se dernostr·ó que en Ja sociedad burguesa los hombres con-
solidaridad humana,en una justificación desesperada con Jos opri- tin uaban explotados y no eran plena mente libres. Por medio del
midos,en Ja decisión inquebrantable de liberarlos. análisis racionalse descubrieron Jos mecanismos compulsivos que
Cam us llega, así, hasta la profundidad de la conciencia hu- impiden el progreso del socialismo y la libertad . Por medio de la
mana, expmga su miseria y muestra un cuad ro horrip ilante de razón se dem uestra que dentro del socialismo es necesaria Ja re-
tra iciones.Pero no nos habla sólo dt!la miseria hu mana; nos habla volución contra el bu rocrntismo. En tal sentido, la razón es sub-
también de su grandeza. versiva: por ende, revolucionaria.
Afirma Camus quela histor ia dela humanidad es la historia En sentido general, se puede afirmar que el humanismo
de Ja rebelión que da origen a las revoluciones. La rebelión es más raciotialista tiene sus orígenes en Kant. En el siglo XX, esta co-
que la revo.l ución. A l respecto,Cm11usseñala: "Ta n pronto como la rrien te ha seguido desa rrollá ndose, no gracias a Kant quedio las
rebelión, olv idando sus orígenes generosos, se deja contaminar pautas,sino gracias al poder subversivo de la razón.
por el resentimiento,niega la vida, corre a J a desh·ucción y hace Bertra nd Russell y Noam Chomsky son los principales re-
que se levante la corte bmlona de esos pequ ·ños rebeldes,simien-
presentacll'es del h umanismo racionalista n1oden10.
te de esclavos, que termina n ofreciéndose actualmente en todos
los mercados ·de Europa a cualquier servidum bre. No es ya rebe- Kant desarrolla el concepto del reino de Jos fines, en relación
lión ni revolución, sino rencor y ti ra nía. En tonces,cua ndo la revo- al cual se aplica la ley moral. Esta ley es puramente racional y
lución, en nombre del pode r y de la historia, se convierte en ese objetiva, poi· lo cual pa ra proceder subjetivamente de acuerdo "
mecani smo mortífero y desmesurado, se hace sagrada de nuevo ella se ul'i l i¡,an las máximas. Ha y tres máximas equivalentes: de
la rebelión en nombre de la miseria y de J a vída. Estamos en ese ellas, por tener mayor i mpacto, citamos Ja siguien te: "Todos los
extremo.El término de esas tin ieblas es i nev.it!lble.Sin emba rgo, seres racionales esl·«ín sometidos a esta ley, J a de no trata rse a sí
hay una luz que adivinamos y sólo tenemos que Juchar para que mismos,o •mosa otros como simples medios,sino r·espetarse siem-
sea. Más allá del nihilismo, todos nosotros, entre las rui nas, pre- prl' como finE·s en sí. De aquí resulta el enlace sistemático de seres
pa ra mos un renaci miento, pero muy pocos Jo saben." (21). racionales reunidos por leyes objetivas comunes;es decir, un rei-
no (que en verdad es sólo un ideal) que se puede llamar reino
5. HUMA N ISMO RACIONALI STA de J os fines, puesto que estas leyes precisamen te tienen por objeto
establecer entre estos seres una relación recíproca de fines y me-
El humanismo racionalista fundamenta el valor del hombre dios." (22). Agrega Kant que "unser racional pertenece como miem-
en la razón. Estima que gracias al pensa miento raciona l se han bro al rein<1 de los fines cuando, dando leyes universales, está él
iniciado los diversos procesos de liberación en la historia.Toda mismo a ellas sometido y pertenece como je fe, cuando no lo está,
sociedad justa tieneque ba sat\se en principios racionales. como legislador a voluntad extraria algw1a. El ser racional debe