Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
en el Trabajo en México
Dr. Juan Dávalos Viurquiz
México D.F. Mayo de 2007
Síntesis
Organizado en dos partes, la primera se circunscribe a los criterios universales establecidos por la
legislación mexicana en consonancia con los convenios internacionales 155 y 161 de la
Organización Internacional del Trabajo y que están ratificados por México. La segunda se centra en
la revisión de los mecanismos de interpretación y operación de la NOM-030-STPS-2006 de los
Servicios Preventivos de Seguridad y Salud en las empresas, vigente a partir del mes de abril de
2007.
Introducción
Los programas preventivos se derivan del análisis sistemático de las condiciones de trabajo en las
que los trabajadores desempeñan sus labores, son propios a cada centro laboral, pero en todos los
casos parten de un reconocimiento de los agentes de riesgo laboral y su tipificación, lo que permite
el desarrollo de actividades de vigilancia del personal ocupacionalmente expuesto a dichos agentes.
Los mecanismos de operación de la seguridad y salud, se establecen en la Ley Federal del Trabajo,
los que varían en concordancia con la dimensión de los centros laborales. A este respecto, se
reconoce que las empresas deberán al menos disponer de una Comisión de Seguridad e Higiene, la
que desarrolla funciones de vigilancia de las condiciones de trabajo y mediante recomendaciones
hacia el patrón se busca la adaptación de las condiciones de los centros de trabajo a los
lineamientos de seguridad marcados por la autoridad laboral.
Cuando el tamaño o complejidad de las empresas hace de un centro laboral, un área dinámica en la
cual se dispone de un número creciente de trabajadores, la Ley Federal del Trabajo(1) establece
obligaciones especiales entre las cuales está:
Esta es una obligación universal, sea una empresa de un trabajador o de miles, los botiquines de
primeros auxilios y personal entrenado en los mismos, deben existir en cualquier centro de trabajo.
Por término general otras leyes como las de Protección Civil efectúan el mismo señalamiento en la
mayoría de estados de la república, situación que hace redundante un principio. “Aún en las
mejores condiciones de seguridad se pueden sufrir accidentes o la aparición repentina de
Hoy en día no existe una ley o norma que marque cuantos botiquines deben existir en un centro de
trabajo, se acepta como conveniente la existencia de al menos un botiquín portátil por cada 50
trabajadores.
Cuando los centros de trabajo disponen a su servicio 100 ó más trabajadores, la Ley Federal del
Trabajo prevé.
2) Disponer de una enfermería con el material de curación suficiente, la que estará a cargo de un
médico cirujano.
En sentido estricto la Ley ha sido interpretada de manera equivocada, como la obligación de tener
un médico en el centro de trabajo para dar consulta y atender urgencias. Nada más lejos del
objetivo de estos servicios, para ello es necesario comprender la esencia de los servicios y las
obligaciones de los mismos.
En primer lugar las enfermerías referidas en la Ley, deben entenderse como Servicios Preventivos
de Medicina del Trabajo, es decir, sus funciones son de carácter preventivo mediante la integración
de programas de conservación de la salud de los trabajadores y en los casos que las condiciones de
trabajo lo exijan establecer la vigilancia del personal ocupacionalmente expuesto a agentes de
riesgo, con ello las funciones asistenciales como la atención de emergencias y consulta médica son
intrínsecas al ejercicio del médico responsable de los mismos pero no su objetivo.
Es importante señalar que las empresas inscritas al régimen obligatorio del Seguro Social, quedan
relevadas de esta disposición por el simple hecho de estar inscritas, esto es de gran utilidad en
pequeñas e incluso medianas empresas, que ven el servicio médico como una carga financiera. No
obstante, se debe señalar que la pertinencia para que exista un servicio médico en la empresa,
debe basarse en un análisis detallado de las ventajas y beneficios en productividad que este puede
representar.
Finalmente cuando los centros laborales disponen de un número de 300 o más trabajadores la Ley
federal del Trabajo establece.
Esta obligación evidentemente presupone una inversión poco viable para la mayoría de empresas
incluso las muy grandes, por lo que nuevamente se debe señalar que es una obligación de la que
queda relevado el patrón al estar inscrito al régimen obligatorio del Seguro Social. No obstante,
esto no impide que la empresa pueda contratar servicios adicionales mediante convenios o seguros
de gastos médicos, cuando los centros de trabajo se encuentran distantes de los sitios de atención
hospitalaria que proporciona el Seguro Social.
En 1997 las autoridades laborales emitieron el Reglamento Federal de Seguridad Higiene y Medio
Ambiente de Trabajo(2), que suprimió a un número significativo de disposiciones en materia de
seguridad que impedían un cumplimiento armónico de las obligaciones.
Como primer paso los responsables del centro de trabajo deben elaborar un diagnóstico de las
obligaciones en materia de seguridad y salud en el trabajo, el cual comprende la identificación
sensorial de los agentes de riesgo que existen en la empresa. Es pertinente indicar en este
momento que si usted no tiene experiencia en la materia, dispone de servicios gratuitos de
asistencia técnica que le pueden proporcionar las autoridades de la Secretaría del Trabajo y
Previsión Social y sus delegaciones federales, las autoridades locales del trabajo en los estados y el
propio Instituto Mexicano del Seguro Social.
Estos servicios son gratuitos y no son utilizados para inspeccionar o infraccionar a quienes los usan,
un temor injustificado muy generalizado en los círculos empresariales.
Proceda a efectuar un recorrido por la totalidad de las instalaciones en las que desarrollen sus
tareas regulares el personal a su cargo, lleve consigo una libreta y anote cuales de los siguientes
agentes ambientales están presentes.
1) Maquinaría
2) Recipientes Sujetos a Presión (compresores, reactores, marmitas)
3) Sustancias Químicas en uso, almacenamiento o transporte
4) Almacenes o bodegas con estiba de productos
5) Equipos para Izar (grúas, polipastos, rodamientos)
6) Equipos generadores de ruido
7) Equipos emisores de radiaciones
8) Equipos que eleven o abatan la temperatura por más de 10°C (hornos, cámaras
frigoríficas)
9) Si se realizan actividades de buceo
10) Si operan ferrocarriles dentro de las instalaciones
11) Si los equipos requieren de disponer de tierras físicas y estas existen
12) Si dispone de subestaciones eléctricas o equipos que operen a más de 220 Volts.
13) Si cuenta con equipos que generen vibración
14) Si algún área de trabajo requiere iluminación especial
15) Si se usan equipos de soldadura de cualquier tipo
Esta comprende:
1) La identificación de los factores del medio ambiente de trabajo que puedan afectar a la
salud de los trabajadores; mediante la elaboración de un mapa de riesgos basado en la
distribución funcional del centro de trabajo o el proceso industrial de la misma.
Dado que la protección de la integridad y salud del trabajador es crucial, los equipos deben
ser determinados de manera conjunta entre el responsable de la seguridad y el médico del
trabajo que efectué la vigilancia del personal ocupacionalmente expuesto y jamás deberá
basarse su selección por el criterio del más económico, ya que un equipo de seguridad mal
seleccionado puede acelerar los daños a la salud del trabajador.
a) Tener libre acceso a todos los lugares de trabajo y a las instalaciones que la
empresa facilita a los trabajadores;
La vigilancia de la salud de los trabajadores comprende un ejercicio que se desarrolla por médicos
del trabajo debidamente entrenados, para el caso de México, el Reglamento Federal de Seguridad
Higiene y Medio Ambiente de Trabajo establece que estos deben ser los responsables de los
Servicios Preventivos de Medicina del Trabajo, los cuales pueden ser trabajadores propios de la
empresa o externos, en todos los casos se requiere que sean calificados, entendiendo esto último
como capaces de desarrollar cualquier disposición preventiva que sea señalada por las Normas
Oficiales Mexicanas en materia de Seguridad e Higiene y que establezcan la vigilancia del personal
ocupacionalmente expuesto como una obligación patronal.
Los criterios para evaluar la exposición de trabajadores no disponen hoy en día de una normativa
general, por lo que la determinación de ¿qué? y ¿cómo evaluar? es un prerrogativa de la capacidad
profesional del médico, en tanto no existe un marco regulatorio.
Al respecto es necesario basar las evaluaciones en un sentido lógico acorde con los agentes a los
que se expone el trabajador, por ello, se debe señalar que no existe un método universal de
evaluaciones médicas, estas deben ser dirigidas e integradas mediante esquemas de vigilancia
epidemiológica que parten del mapa de riesgos.
Los pasos a seguir para determinar un sistema de vigilancia de la salud de los trabajadores son los
siguientes:
1) Disponer del mapa de riesgos del centro de trabajo con la tipificación de riesgos y con esta
información proceder a la determinación de personal ocupacionalmente expuesto.
2) Integrar el catalogo de puestos de trabajo en conjunto con el área responsable del recursos
humano, determinando funciones y áreas operativas.
3) Integrar los grupos homogéneos de exposición, esto es tipificar por trabajador a los
agentes que esta expuesto y el tipo de exposición de este, siendo fundamental el tiempo
de exposición a cada agente en particular.
4) Integrados los grupos de exposición por agente ambiental, se deberá diseñar el protocolo
médico de evaluación que se seguirá para cada tipo de exposición, utilizando los
procedimientos médicos, estudios de laboratorio y gabinete que científicamente han
probado ser los mas adecuados en la identificación de daños, en el caso de sustancias
químicas el médico deberá utilizar los Índices de Exposición Biológica que se han
establecido en la literatura mundial en tanto México no los regule.
El responsable médico de los servicios preventivos de medicina del trabajo deberá consignar los
datos relativos a la salud de los trabajadores en expedientes personales y confidenciales. Dichos
expedientes deben contener informaciones acerca de las tareas que hayan realizado los
trabajadores, de su exposición a los riesgos inherentes a su trabajo y de los resultados de toda
evaluación de la exposición de los trabajadores a tales riesgos.
El personal que preste servicios preventivos de medicina del trabajo es el único que podrá acceder
a los registros de cada trabajador considerando a esta como información confidencial, en caso de
ser requerido por el patrón, sólo se proporcionará la información correspondiente al estado de
aptitud del trabajador.
Todo expediente laboral deberá ser guardado después de su última anotación por espacio de 5
años, excepto que el trabajador haya tenido exposición a radiaciones ionizantes o agentes químicos
con potencial carcinogénico, en cuyo caso deberán conservarse por 20 años.
Como criterios de evaluación se considera que las examinaciones médicas podrán ser:
1) De ingreso
Corresponde a la evaluación de la salud de los trabajadores antes de que se les asignen tareas
específicas que puedan entrañar un peligro para su salud o para la de los demás. En todos los
procesos de evaluaciones de ingreso la determinación de aptitud, debe ser en función a un puesto
de trabajo y vigilar que este proceso no sea efectuado con fines discriminatorios.
2) Periódicas
Comprende las evaluaciones de la salud a intervalos periódicos durante todo empleo que implique
una exposición a riesgos particulares para la salud basado en un protocolo previamente
determinados directamente en correlación a las exposiciones que tenga el trabajador.
3) Reingreso
Se refiere a la evaluación de la salud de los trabajadores que reanudan el trabajo tras una ausencia
prolongada por motivos de salud, con la finalidad de descubrir sus eventuales orígenes
profesionales, recomendar una acción apropiada para proteger a los trabajadores y determinar la
adaptabilidad de los trabajadores a sus tareas y la necesidad de rehabilitación o de reubicación;
4) De retiro
Cuando la vigilancia de la salud haya permitido detectar una enfermedad profesional, ésta debería
notificarse al patrón de manera inmediata y la autoridad laboral o de seguridad social para que sea
determinada la indemnización que en derecho proceda y los medios de tratamiento que permitan la
reversión o limitación de los daños.
Los programas de capacitación se rigen mediante un calendario de acciones del que se dispone
evidencia de su impartición, entre otros medios, listas de asistencia, cuestionarios de evaluación y
Constancias de Habilidades Laborales debidamente emitidas en los formatos oficiales señalados por
la autoridad laboral.
1) Primeros Auxilios
A fin de fomentar la adaptación del trabajo a los trabajadores y el mejoramiento de las condiciones
y medio ambiente de trabajo, los servicios de seguridad y salud deben promover el adiestramiento
de las comisiones de seguridad e higiene, con la finalidad de hacer de este un grupo operativo pro-
activo, que impulse y difunda las medidas de seguridad en la empresa.
D) Planes de Emergencia
De manera directa los servicios preventivos de seguridad y salud en el trabajo, son responsables de
la instrumentación de las obligaciones patronales relativas a las medidas de emergencia para la
atención de accidentes o situaciones de alto riesgo que pongan en peligro la vida o integridad de
los trabajadores en el cualquier centro de trabajo.
Para ello, el patrón está obligado a disponer de un plan de emergencia debidamente integrado y
documentado, y que en los casos previstos por las leyes, disponga de la aceptación o autorización
de la autoridad competente.
En el caso particular de México, los planes de emergencia son requeridos al menos por tres
instancias gubernamentales, la Secretaría del Trabajo y Previsión Social bajo la denominación de
Programa de Prevención y Combate de Incendios de conformidad a lo establecido en la NOM-002-
STPS-2000, la Secretaria del Medio Ambiente en los casos que la empresa este obliga a disponer de
autorizaciones federales o locales en materia ambiental el cual se denomina Programa de
Prevención de Accidentes (PPA), y finalmente las autoridades locales de Protección Civil en los
Estados, a los cuales se les dan diferentes denominaciones como Programa Interno de Protección
Civil, Plan de Contingencia o Programa Específico de Protección Civil.
Es importante señalar que los planes de emergencia independiente de su denominación son únicos
y propios a cada centro de trabajo, para su diseño debe seguirse una ruta crítica.
Todos estos documentos si bien dispone formatos diferentes, todos establecen obligaciones
comunes las cuales son:
1) Efectuar un análisis de riesgo de los siniestros o desastres que puede enfrentar la empresa,
en el caso de la autoridad laboral sólo se contempla para incendios.
Como medida complementaria todo debe estar documentado y disponer de una bitácora de
mantenimiento de equipos que demuestre que estos reúnen condiciones de operación adecuadas.
Para integrar los programas de protección civil, las empresas pueden recurrir a la asesoría gratuita
de las unidades estatales y municipales de protección civil en la república mexicana, o en su
defecto contratar los servicios de terceros acreditados debidamente reconocidos por las autoridades
de protección civil en los estados.
Los servicios preventivos de medicina del trabajo en particular, deben participar en acciones de
atención primaria siguientes:
2) En los casos previstos a solicitud del patrón, proporcionar atención médica de primer
contacto a los familiares de trabajadores o personas que sin ser trabajadores sea solicitado
el auxilio por enfermedad o accidente en la comunidad que se encuentre el centro de
trabajo.
4) Aplicar inmunizaciones en relación con los riesgos biológicos que se presentan en el lugar
de trabajo;
F) Funciones Administrativas
Los servicios preventivos de seguridad y salud en el trabajo deben elaborar planes y programas de
trabajo, de los cuales a intervalos apropiados emitirán informes sobre sus actividades y las
condiciones de salud en la empresa. Estos informes deben ponerse a disposición del patrón y de los
representantes de los trabajadores, de la Comisión de Seguridad e Higiene y la autoridad
competente cuando sean solicitados al patrón.
Todas las acciones de prevención deben ser registradas por escrito y en los casos que lo amerite se
podrá hacer uso de medios electrónicos para facilitar las tareas, teniendo la previsión de disponer
G) Investigación de Accidentes
Como función sustantiva de los servicios preventivos, estos son responsables de ejecutar las
investigaciones de accidentes de trabajo, que ocurran en el centro de trabajo, proporcionando en
su caso los medios de auxilio necesarios al trabajador de manera inicial.
De toda investigación se deberá elaborar un informe por escrito, en el que se asienten las
conclusiones y recomendaciones que eviten la ocurrencia de un nuevo accidente, estos informes
deberán ser entregados al patrón y a la comisión de seguridad e higiene y dar el aviso en los
tableros de comunicación guardando la confidencialidad del o los trabajadores involucrados.
En todos los casos los servicios preventivos son los responsables de notificar a las autoridades
laborales o del seguro social de los accidentes ocurridos utilizando para el efecto los formatos
oficiales marcados por estas instituciones.
En la medida de lo posible, los servicios de salud en el trabajo deberán estar situados en el lugar de
trabajo o en las proximidades de éste, o bien estar organizados de forma que se garantice el
desempeño de sus funciones en el lugar de trabajo.
Para el caso particular de los Servicios Preventivos de Medicina del Trabajo, la empresa deberá
disponer de un lugar acondicionado como consultorio, el cual debe disponer de las dimensiones y
características físicas que marca la NOM-178-SSA1-1998, para consultorios de medicina general,
previendo la opinión del médico responsable sobre equipamiento adicional que se considere
conveniente para el desarrollo de las actividades de Vigilancia del Personal Ocupacionalmente
Expuesto.
Los servicios preventivos de seguridad y salud en el trabajo deben estar formados por equipos
multidisciplinarios constituidos en función de la índole de las tareas que deban ejecutarse. Así
mismo en los casos pertinentes deben disponer de personal técnico en número suficiente, con
formación en la materia y experiencia en esferas tales como la medicina del trabajo, seguridad en
el trabajo, higiene industrial, ergonomía, protección civil, ecología y cuidados de enfermería del
trabajo y otras cuestiones conexas.
Este personal deberá mantener un elevado nivel de capacidad por lo que debe ser sujeto de un
programa de capacitación y adiestramiento continuo que le permita el desarrollo de competencias
para el trabajo acordes con las normas oficiales mexicanas aplicables a la empresa y en la medida
de lo posible, mantenerse al corriente de los progresos en los conocimientos científicos y técnicos
necesarios para el cumplimiento de sus funciones mediante procesos de formación en instituciones
de educación superior.
Referencias
(1) Artículo 283 fracción IV y 504 de la Ley Federal del Trabajo, Diario Oficial de la Federación 1 de
abril de 1970
(2) Reglamento federal de Seguridad Higiene y Medio Ambiente de Trabajo, D.O.F. 28 de Enero de
1997
(3) Convenio 161, Organización Internacional del Trabajo. Sesión 71 Ginebra, 17 de junio de 1985.
(4) Artículo 153-A, 153-N, 153-O y 153-Q de la Ley Federal del Trabajo, Diario Oficial de la
Federación 1 de abril de 1970
En México la regulación de las funciones de los servicios preventivos de seguridad y salud en las
empresa es un tema que tardo más veinte años en ser determinado, ello derivado de un
desconocimiento de las ventajas de disponer de estos en las empresas por parte de los círculos
empresariales, aún hoy, se tienen fuertes confusiones sobre la aplicación y operación de la norma
la que fue publicada el 19 de octubre de 2006 y prorrogada en su vigilancia por 6 meses, tiempo
que se considera como suficiente para su aplicación por parte de los patrones.
A diferencia de muchas otras normas emitidas por la autoridad laboral, esta no presupone nuevas
obligaciones a las empresas, por el contrario, sólo refuerza las líneas estratégicas que debe
considerar cualquier programa de prevención de seguridad y salud en el trabajo en la creación y
operación de un conjunto de modalidades para lograr el cumplimiento de la legislación laboral ya
existente.
Luego entonces, podemos definir que esta norma sólo define de manera clara los mecanismos de
cumplimiento hacia las medidas de prevención, sino que además deja en claro indefiniciones e
interpretaciones equivocadas que se hicieron de la Ley Federal del Trabajo y del propio Reglamento
de Seguridad Higiene y Medio Ambiente de Trabajo vigentes.
Previsiones de Cumplimiento
En el caso de empresas que disponen de sistemas de seguridad acreditados por la autoridad laboral
“Programa de Autogestión” o “Empresas Seguras con Certificación por la autoridad laboral” y que
gozan de los beneficios fiscales de modificación de la prima de riesgos de trabajo ante el seguro
social, no están obligados a cumplir con esta norma, por la simple lógica que su sistema de
seguridad y salud ya contempla las disposiciones de la NOM-030-STPS-2006 y lo operan como un
elemento central del modelo de gestión.
La norma establece que las empresas deberán dar cumplimiento a las obligaciones marcadas por
esta norma de la manera siguiente:
Los responsables de la empresa deben efectuar una clasificación del centro de trabajo en función a
los riesgos y peligrosidad de sus actividades, para esto se consideran dos mecanismos.
Cualquiera de los métodos que se haya seleccionado para clasificar a la empresa las respuestas
probables son:
1) Empresas de riesgo bajo o medio de incendio, o que no dispongan del uso de productos
químicos señalados como 3 y 4 en salud, se les reconoce como centros de trabajo tipo A.
2) Empresas con riesgo de incendio alto o que usan sustancias químicas marcadas con 3 o 4
en salud, se les reconoce como tipo B.
3) El patrón debe asegurarse de la capacidad de los responsables de los servicios preventivos, para
lo cual el personal de los mismos debe ser capacitado cuando este sea de contratación propia y
verificar que esta disposición se cumpla cuando sea personal externo.
4) El programa de seguridad y salud que sea integrado debe contar con funciones, objetivos
programáticos, a fin de que los responsables de su coordinación emitan informes periódicos sobre
los avances en la integración de las medidas de seguridad en la empresa.
3) El programa deberá estar redactado por escrito y debe conservarse al menos por dos años como
evidencia de las acciones preventivas.
De manera clara identificamos que las obligaciones marcadas para el centro de trabajo tipo A, no
cambian de las obligaciones generales que se han señalado por la Ley Federal del Trabajo.
En sentido estricto sólo se pide un medio de integración operativa que demuestre el cumplimiento
de las obligaciones por parte del patrón en la prevención de accidentes y enfermedades de trabajo.
Al igual que un centro tipo A, las obligaciones son similares teniendo la previsión de atender de
manera puntual y en detalle aquellos riesgos a los que se expone al trabajador. En un juicio
inmediato podemos entender que una empresa clasificada como tipo B, es una empresa de alto
riesgo y por ende con mayor probabilidad de tener accidentes y enfermedades motivadas en el
trabajo.
b) Desarrollar los planes de atención a las emergencias, los cuales deberán contener
al menos la siguiente información:
Importante señalar
4) El responsable de los servicios preventivos debe realizar una evaluación del cumplimiento de la
relación de medidas preventivas o del programa de seguridad e higiene en el trabajo por lo menos
una vez al año, y presentarla en forma documentada al patrón, a los trabajadores o a sus
representantes.
De acuerdo con la complejidad los centros de trabajo Tipo A, pueden optar por disponer de una
relación de medidas preventivas de seguridad e higiene en el trabajo o la conformación de un
programa como tal, para precisar la modalidad que debe seguir el patrón debe identificar el número
de trabajadores del centro de trabajo, si este es menor a 100 deberá apegarse a una Relación de
medidas preventivas, si es de más de 100 es conveniente se desarrolle un programa, esta previsión
está señalada por el artículo 131 del Reglamento Federal de Seguridad Higiene y Medio Ambiente
de Trabajo.
La relación de medidas se debe desarrollar para salvaguardar la salud y vida de los trabajadores, a
fin de evitar la exposición del trabajador o la interacción con los agentes y condiciones que pueden
ser factores de riesgo. En un sentido estricto la relación de medidas es un “programa chiquito” el
cual debe contener al menos:
III Biológicos (seres vivos que al estar en contacto con el ser humano ocasionan enfermedades
de tipo infeccioso, parasitario, alérgico o tóxico),
2) Identificar las circunstancias que representen condiciones físicas, peligrosas o inseguras, que
puedan ser un riesgo a los trabajadores, en:
4) De los agentes identificados deberá consultar las normas aplicables y desarrollar los
documentos, estudios, análisis y capacitaciones que le obligue cada norma en particular y disponer
de una bitácora de evidencias que permita la identificación del cumplimiento.
5) En el caso que las normas establezcan la obligación de efectuar la vigilancia del personal
ocupacionalmente expuesto, el patrón deberá apoyarse de un médico del trabajo que le permita
dar el cumplimiento, con ello no implica disponer de un servicio médico en las instalaciones, ya que
hay que recordar que la vigilancia puede ser periódica mediante exámenes médicos a intervalos de
tiempo, los que no requieren de una persona a tiempo completo.
Contenido de un Programa de
Seguridad y Salud en el Trabajo
En el caso que el centro de trabajo sea tipo B, o que siendo tipo A se tenga más de 100
trabajadores, el patrón deberá efectuar la conformación de un programa de seguridad y salud en el
trabajo, dicho documento describe cronológicamente las actividades, métodos, técnicas y
condiciones de seguridad y salud que deberán observarse en el centro de trabajo, y los
responsables de operar y dar seguimiento a la prevención de accidentes y enfermedades de
trabajo.
1) La identificación de los factores de peligro en el centro de trabajo por el uso de materias primas,
sustancias químicas, productos, herramientas, equipo, maquinaria, medios de transporte,
instalaciones y tipos de energía del centro de trabajo. En otras palabras un “diagnóstico situacional”
que permita la elaboración de un mapa de riesgos.
2) Identificar la exposición del personal ocupacionalmente expuesto del centro de trabajo, que
implique el tiempo, la frecuencia y las concentraciones o niveles y que permitan la conformación del
“Programa de Vigilancia de la Salud de los Trabajadores”.
3) Establecer al más alto nivel de la organización las políticas, objetivos y metas de seguridad y
salud, para la prevención, protección y control que se deben instrumentar en el centro de trabajo.
4) Dotar los recursos financieros, técnicos y humanos que permiten dar cumplimiento al programa
de seguridad y salud.
6) El programa de seguridad y salud deberá contemplar, para los casos donde técnicamente no sea
posible evitar riesgos, la dotación de equipo de protección personal específico para prevenir tales
riesgos.
7) De los agentes identificados deberá consultar las normas aplicables y desarrollar los
documentos, estudios, análisis y capacitaciones que le obligue cada norma en particular y disponer
de los programas, licencias, análisis de riesgo, estudios ambientales que permita demostrar el
cumplimiento de las medidas reguladas a través de normas.
8) En el caso que las normas establezcan la obligación de efectuar la vigilancia del personal
ocupacionalmente expuesto, el patrón deberá apoyarse de un médico del trabajo que le permita
dar el cumplimiento, con ello y de acuerdo a la complejidad el patrón podrá optar por integrar los
servicios preventivos de medicina del trabajo, cuidando que su responsable disponga de las
habilidades de interpretación y operación de las obligaciones marcadas por las Normas Oficiales
Mexicanas que le son aplicables a la empresa.
9) En los casos que el patrón decida la integración de los Servicios Preventivos de Seguridad e
Higiene o de Medicina del Trabajo, la designación de funciones será al menos las contempladas por
el presente documento, no limitando el que por necesidades propias de la organización puedan ser
incorporadas otras directamente relacionadas como son las derivadas de la legislación en materia
ecológica o de protección civil.
Como se puede ver la seguridad y salud en el trabajo no es un asunto nuevo o que requiera de
ampliar su regulación, si bien es cierto que muchos de los agentes de riesgo carecen de
lineamientos generales para el desarrollo de medidas preventivas, también es cierto que la
evolución de los procesos productivos genera un número creciente de enfermedades laborales
emergentes para las cuales los estudios de su incidencia y mecanismo de aparición es tema de
investigación. Es esperable que la legislación disponga de un rezago natural que sólo es subsanable
mediante la capacidad y la calidad de los que ejercen en estas áreas, lo que hace importante
señalar que los responsables de la seguridad y salud en el trabajo deben aplicar los preceptos de
mejora continua en su ejercicio y adoptar esquemas de formación multidisciplinaria y basada en el
desarrollo de habilidades profesionales y laborales crecientes, considerando que en sus manos
queda la estructura y funcionamiento de los servicios preventivos su mejor indicador de desempeño
es la reducción de días laborales perdidos por motivos de salud y trabajadores sanos que
desempeñan sus capacidades en el desarrollo productivo personal y de su empresa.