Sei sulla pagina 1di 10

2.

CAPITULO II:

PRINCIOS REGULADORES DE LA CIRCULACIÓN


Los principios que regulan la circulación de peatones y vehículos,
dentro de un marco de seguridad, constituyen la base, el
fundamento, para alcanzar la finalidad aludida, creando derechos y
obligaciones.

A. PRINCIPIO DE CONFIANZA
Este principio está basado en el estricto cumplimiento de las
normas de circulación. Es la CONFIANZA, que debe tener toda
persona que los demás han de respetar las normas de
circulación. Es el DERECHO, que se tiene de pensar, que los
demás usuarios van a actuar y comportarse dentro de lo
reglamentario. Es la GARANTÍA inspirada en la mutua
confianza de un comportamiento basado en el respeto.

Este Principio no es absoluto. Se complementa con otro


Principio, el Principio de Seguridad, que se impone cuando se
prevé que por parte del otro usuario, dadas sus
manifestaciones externas, se puede presentar una conducta
antirreglamentaria. La prudencia está a cargo de todos los
usuarios de la vía, pero si uno de los dos es imprudente, obliga
al otro a extremar sus medidas de prudencia.

B. PRINCIPIO DE SEGURIDAD
Este principio se impone cuando el otro usuario actúa
contraviniendo las normas de circulación, pero tiene que haber
una manifestación externa del peligro, y darse cuenta por parte
del otro usuario de este peligro, haciéndose necesario ceder el
derecho, para evitar un daño o para disminuirlo. Obliga a un
máximo de prudencia, de diligencia, contra la imprudencia o
negligencia por parte del otro así esté dentro de la confianza
que le brinda un derecho, por seguridad, por humanidad, ante
una maniobra riesgosa o peligrosa del otro, no puede
ampararse en el derecho y no tratar de evitar el accidente. El
peatón no debe cruzar a mitad de cuadra, pero si el conductor
se percata que lo está haciendo, debe tomar sus medidas
preventivas para evitar el accidente.

El Principio de Seguridad no es otra cosa que la denominada


“Circulación a la Defensiva”.

C. PRINCIPIO DE INTEGRIDAD PERSONAL


Se entiende por este principio que la normativa que regula la
circulación, no puede exigir al usuario algún tipo de acto que
comprometa su integridad física. Se entiende que al cumplir el
sujeto una norma de tránsito está realizando un acto lícito, y
todo acto lícito protege al sujeto de derecho, y el sujeto en el
tránsito no puede estar ajeno a este amparo.

Es así, que ante un riesgo el reglamento no puede obligar a un


conductor que ejecute una frenada brusca en una pista mojada
y en bajada. Para ello hay que tener en cuenta cuando se
encuentra en un estado de necesidad, al no haber originado la
situación peligrosa y resultaría absurdo exigir una acción que a
manera de auto sacrificio, comprometa su integridad o
seguridad personal. Es por ello que cuando se encuentra en el
estado de necesidad, se ve en la obligación de causar un daño
menor para evitar otro daño mayor.

D. PRINCIPIO DE SEÑALIZACIÓN
Cuando existe alguna anormalidad, obstáculo o variación en la
circulación, debe estar debidamente señalizada. Este Principio
de Señalización está ligado al Principio de Confianza, puesto
que mientras no haya una señal que indique la alteración de la
normalidad, el usuario puede confiar, en que puede circular con
la seguridad de no encontrar ningún obstáculo.

CONCEPTO DE SEGURIDAD VIAL


Conjunto de acciones coordinadas para prevenir conductas
riesgosas que pudieran poner en peligro la integridad de los
elementos de tránsito tanto en el peatón, vehículo y la vía

3. CAPITULO III:

TIPOS DE SEGURIDAD VIAL


Existen dos tipos de seguridad vial:

 Seguridad vial activa

 Seguridad vial pasiva

LA SEGURIDAD VIAL ACTIVA


La seguridad vial activa o primaria tiene como objetivo principal
evitar que el accidente suceda.

LA SEGURIDAD VIAL PASIVA


La seguridad pasiva o secundaria comprende una serie de
dispositivos cuya misión consiste en tratar de disminuir al máximo la
gravedad de las lesiones producidas a las víctimas de un accidente
una vez que éste se ha producido.

SEGURIDAD VIAL EN LOS ELEMENTOS DEL TRÁNSITO


 Seguridad vial activa en el ser humano
Están referidos al comportamiento del elemento hombre, a sea
como conductor, peatón u ocupante.

Como Conductor
Debe poner en cuenta en todo momento los principios
reguladores de la circulación mediante un manejo defensivo
que consiste en una serie de buenos hábitos mediante los
cuales se llega a evitar, colisiones, atropellos, vuelcos, y toda
clase de accidentes de tránsito. Así entonces, manejar a la
defensiva consiste en conducir, previendo todas las situaciones
de peligro originadas:

a) Por actos inseguros del conductor, tales como: fatiga,


distracción, visibilidad, etc.

b) Por actos inseguros de otros conductores, tales como:


los anteriores, así como manejo peligroso e inseguro.

c) Por condiciones adversas que muchos conductores


consideran imprevistas, tales como lluvia, neblina, viento,
desvíos, etc.

Por lo tanto, no se justifica que un conductor argumente que el


accidente se produjo porque él no se imaginaba, que el otro
conductor haría una maniobra inesperada. Resumiendo
podemos decir que quien conduce a la defensiva debe:
ESPERAR TODO, IMAGINARSE TODO, SUPONERSE
TODO.

En síntesis: MANEJAR A LA DEFENSIVA SIGNIFICA SER


PRUDENTE EN EXTREMO, EVITAR TODO EXCESO DE
CONFIANZA en:

a) Sí mismo: Cuando se considera un conductor experto,


de gran habilidad, y se hace alarde de no haber tenido
accidentes, el accidente, pero no tuvo la habilidad de
haber evitado el accidente, responsabilizando del mismo
al otro conductor o a su vehículo, que a última hora le
falló.

b) En el otro conductor: a quien sin conocerlo, lo


considera un buen conductor, incapaz de cometer errores.

c) En su vehículo: considera que lo puede sacar de


situaciones apuradas ya que sus respuestas son muy
buenas: rápida aceleración, grado de viraje, ajuste de
frenos, etc., olvidándose de que esas respuestas no las
da el vehículo por sí solo. Debe haber alguien tomando
decisiones y accionándolo.

Como peatón
Referidos al comportamiento del peatón y uso adecuado de la
vía ya que de ello depende la seguridad de su integridad física
durante la circulación, lo que comúnmente se conoce como
cultura vial.

Como ocupante o pasajero


Referido también al comportamiento del elemento hombre ya
sea como ocupante o pasajero, durante su traslado en un
vehículo, desde la forma adecuada y segura tanto para subir y
bajar en lugares establecidos, así como el modo de trasladarse
en un vehículo.

 Seguridad vial pasiva en el ser humano


Está referida a los usuarios de un vehículo, ya sea como
conductor, ocupante o pasajero y el uso de los elementos de
seguridad pasiva con que cuentan los vehículos, tales como:

 Cinturones de seguridad
 Casco de seguridad

Mientras que para un peatón solo queda el conocimiento de la


norma y el uso adecuado de la vía.

 Reglamento Nacional de Tránsito

DE LA CIRCULACION DE LOS PEATONES Y EL USO DE


LA VÍA

Art. 61º.- Obligaciones del peatón


El peatón debe acatar las disposiciones reglamentarias que
rigen el tránsito y las indicaciones de los Efectivos de la Policía
Nacional del Perú, asignados al control del tránsito. Goza de
los derechos establecidos en este Reglamento y asume las
responsabilidades que se deriven de su incumplimiento.

Art. 62º.- Inclusión en el concepto de peatón por extensión


Las reglas de tránsito para peatones, también se aplican a las
personas que usan sillas de ruedas para minusválidos,
andadores motorizados y carritos de compras, así como a los
vehículos de niños, como triciclos y cochecitos.

Art. 63º.- Derecho de paso del peatón en vías no


semaforizadas
El peatón tiene derecho de paso sobre cualquier vehículo, en
las intersecciones de las calles no semaforizadas, ni
controladas por Efectivos de la Policía Nacional del Perú o por
señales oficiales que adviertan lo contrario, siempre y cuando
cruce la intersección de forma directa a la acera opuesta y no
en forma diagonal, y lo haga cuando los vehículos que se
aproximan a la intersección se encuentren a una distancia tal
que no representen peligro de atropello.

Art. 64º.- Derecho de paso del peatón en vías


semaforizadas
El peatón tiene derecho de paso en las intersecciones
semaforizadas o controladas por Efectivos de la Policía
Nacional del Perú o por señales oficiales, respecto a los
vehículos que giren a la derecha o a la izquierda, con la luz
verde.

Art. 65º.- Derecho de paso del peatón en entradas o salidas


de áreas de estacionamiento
El peatón tiene derecho de paso, respecto a los vehículos que
cruzan la acera para ingresar o salir de áreas de
estacionamiento.
Art. 66º.- Preferencia de vehículos de emergencia y
oficiales
El peatón no tiene derecho de paso respecto a los vehículos de
emergencia autorizados, tales como Vehículos de Bomberos,
Ambulancias, Vehículos Policiales, de Serenazgo, Grúas y
Auxilio Mecánico, y sobre los vehículos oficiales, cuando estos
hagan uso de sus señales audibles y visibles.

Art. 67º.- Circulación del peatón


El peatón debe circular por las aceras, bermas o franjas
laterales, según el caso, sin utilizar la calzada ni provocar
molestias o trastornos a los demás usuarios, excepto cuando
deba cruzar la calzada o encuentre un obstáculo que esté
bloqueando el paso, y en tal caso, debe tomar las precauciones
respectivas para evitar accidentes. Debe evitar transitar cerca
al sardinel o al borde de la calzada.

Art. 68º.- Cruce de la calzada


En intersecciones señalizadas, los peatones deben cruzar la
calzada por la zona señalizada o demarcada especialmente
para su paso. En las intersecciones no señalizadas, el cruce
debe realizarse en forma perpendicular a la vía que cruza,
desde una esquina hacia otra, y de ser el caso, atendiendo las
indicaciones de los Efectivos de la Policía Nacional del Perú.
Debe evitar cruzar intempestivamente o temerariamente la
calzada.
Art. 69º.- Uso de puentes y cruces subterráneos
En vías de tránsito rápido de acceso restringido, los peatones
deben cruzar la calzada por los puentes peatonales o cruces
subterráneos.

Art. 70º.- Cruce según semáforos


En los lugares donde funcionen semáforos vehiculares los
peatones deben cruzar la calzada durante el tiempo que los
vehículos permanecen detenidos por la luz roja. Donde
funcionen semáforos para peatones, éstos deben cruzar la
calzada al iluminarse el campo verde con el letrero “PASE” y
se abstendrán de hacerlo cuando se iluminen el campo rojo
con el letrero “ALTO”.
Cuando el letrero “PASE”, se vuelve intermitente, tiene el
mismo significado que la luz ámbar y los peatones deben
abstenerse de comenzar a cruzar la calzada.

Art. 71º.- Uso de semáforos accionados por botones


En las intersecciones en las que existan semáforos peatonales
accionados por botones, los peatones deben pulsar el botón y
esperar que la señal cambie al letrero “PASE”, para iniciar el
cruce de la calzada.

Art. 72º.- Reglas adicionales para el cruce


Cuando no exista un efectivo de la Policía Nacional del Perú,
dirigiendo el tránsito, semáforos u otras señales oficiales, los
peatones al cruzar la calzada de una intersección, deben
observar las reglas siguientes:

a) Usar los pasos peatonales, conservando en lo posible el


lado derecho.

b) Cruzar la calzada cuando los vehículos que se


aproximen se encuentren a una distancia no menor de 40
metros en Jirones o Calles y a 60 metros en Avenidas.

Art. 73º.- Cruce en vías no señalizadas, sin puentes ni


cruces subterráneos
En las vías que no cuenten con pasos peatonales en las
intersecciones, puentes peatonales o cruces subterráneos, los
peatones deben localizar un lugar donde puedan cruzar con el
máximo de seguridad posible y lo harán lo más rápido que
puedan o estimen conveniente.

Art. 74º.- Regla general para el cruce


Para cruzar la calzada en cualquiera de los casos descritos en
los artículos anteriores, los peatones deben hacerlo
caminando, en forma perpendicular al eje de la vía,
asegurándose que no exista peligro.

Art. 75º.- Pruebas de intoxicación


El peatón está obligado a someterse a las pruebas que le
solicite el Efectivo de la Policía Nacional del Perú, asignado al
control del tránsito, para determinar su estado de intoxicación
por alcohol, drogas, estupefacientes u otros tóxicos, o su
idoneidad, en este momento, para transitar. Su negativa
establece la presunción legal en su contra.

Art. 76º.- Prohibición de cruce


Los peatones que no tengan derecho de paso, no deben cruzar
la calzada por delante de un vehículo que se encuentra
detenido, o entre dos vehículos que se encuentran detenidos,
salvo los casos en que la detención sea determinada por el
cumplimiento de una disposición reglamentaria.

Art. 77º.- Conducta del peatón ante señales de vehículos de


emergencia y oficiales
El peatón al percatarse de las señales audibles y visibles de los
vehículos de emergencia y oficiales, despejará la calzada y
permanecerá en los refugios o zonas de seguridad peatonales,
cuando las condiciones lo permitan.

Art. 78º.- Reglas de tránsito para el peatón


Para transitar en vías que carezcan de aceras, los peatones
deben observar las siguientes reglas:

1) En vías de tránsito de doble sentido, los peatones deben


caminar por las bermas o franjas laterales a la calzada, en
sentido contrario a la circulación vehicular.

2) En vías de tránsito en un solo sentido, los peatones


deben caminar por las bermas o franjas laterales
contiguas al carril de la derecha.

Art. 79º.- Reglas para subir o bajar de vehículos


Para subir o bajar de los vehículos, los peatones deben
hacerlo:

1) Cuando los vehículos estén detenidos.

2) Por la(s) puerta(s) ubicadas a la derecha del timón,


cuando el vehículo se ubique en el carril derecho de la
vía.
3) Teniendo precaución con el tránsito de vehículos menores
y bicicletas.
Art. 80º.- Tránsito de peatones que no se encuentran en
completo uso de sus facultades
Los ancianos, niños, personas discapacitadas y en general, los
peatones que no se encuentren en el completo uso de sus
facultades físicas o mentales, deben ser conducidos por
personas aptas para cruzar las vías públicas.
En el caso de grupos de niños, éstos deben ser conducidos por
las aceras en no más de dos filas o hileras, con un guía
adelante y otro atrás, preferentemente agarrados de la mano.
Para cruzar la vía, cuando sea posible, el guía debe solicitar el
apoyo de los Efectivos de la Policía Nacional del Perú,
asignados o no al control del tránsito.

Art. 81º.- Prohibición de circular por la calzada


Está prohibido a los peatones circular por las calzadas o bajar
o ingresar a ella para intentar detener a un vehículo con el fin
de solicitar su servicio, o por cualquier otra situación o
circunstancia.

PREFERENCIAS DE PEATONES CON DISCAPACIDAD


Los efectivos de la Policía Nacional del Perú asignados al control del
tránsito, concederán preferencias respecto a las normas de
circulación, a los siguientes beneficiarios en razón a sus
necesidades:

a) Las personas con discapacidad, conductores o no.

b) Los diplomáticos extranjeros acreditados en el país.

c) Los profesionales en prestación de un servicio público o


privado de carácter urgente y bien común.

Personas con discapacidad


Nuestra Constitución Política establece la obligación del Estado de
brindar una atención prioritaria a los sectores de la población que
presenten mayor vulnerabilidad, implementando políticas destinadas
a compensar la eventual desventaja comparativa en el plano real
frente al resto de la comunidad. El Artículo 7° de la Constitución
menciona el derecho de las personas con discapacidad a un
régimen legal de protección, atención, readaptación y seguridad;
dando paso a la Ley Nº 27050.
Derechos de los peatones con discapacidad
Las personas con discapacidad gozan de leyes y ordenanzas que
les permiten recibir una atención prioritaria, teniendo al CONADIS
como entidad que vela por su integración y participación en la
sociedad, por ejemplo: en el ámbito de la salud, de la promoción y el
empleo, educación y deporte, de las empresas promocionales, de la
accesibilidad.
Así, la Ley Nº 27050 contempla en el ámbito de la accesibilidad, todo
aquello que está relacionado con la libre circulación de las personas
con discapacidad, sea como peatones o como pasajeras:

 Derecho a la reservación de los asientos preferenciales en los


vehículos públicos (Art.45º de la Ley General de la Persona con
Discapacidad).

 Toda institución pública o privada está en la obligación de


acondicionar o dotar de áreas y acceso a las instalaciones,
ambientes, corredores de circulación, para el desplazamiento y
uso de las personas con discapacidad, (Art. 44º de la Ley
General de la Persona con discapacidad y Ley Nº 27920 Ley
de adecuación urbanística y arquitectónica de las
edificaciones).

 Las municipalidades dispondrán de la reservación de


ubicaciones en cada parqueo público para vehículos
conducidos o que transportan personas con discapacidad (Art.
46º de la Ley General de la Persona con discapacidad).

El Ministerio de Vivienda, Construcción y Saneamiento junto con las


municipalidades coordinarán la adecuación progresiva del diseño
urbano de las ciudades, adaptándolas y dotándolas de los elementos
técnicos modernos para el uso y fácil desplazamiento de las
personas con discapacidad.

Basándose en la Ley General de Transporte y Tránsito Terrestre,


Ley Nº 27181, la Municipalidad de Lima dispone, en su Ordenanza
Nº 104 Resolución Directoral Nº 607-2000, una infracción a los
medios de transporte público que se nieguen a recoger en los
paraderos a escolares, adultos mayores, discapacitados o cualquier
otro pasajero. El incumplimiento a esta ordenanza acarrea una
sanción del 15% de la UIT.

La Ley de Atención al Preferente, Ley Nº 27408, dispone en su


artículo único que en los lugares de atención al público las mujeres
embarazadas, las niñas, los niños, las personas adultas mayores y
todas aquellas con discapacidad, deben ser atendidos de manera
preferente disponiendo que los servicios públicos, como el de
transporte de pasajeros, deben implementar medidas para facilitar el
uso y acceso adecuado para las personas a las que se les debe
brindar atención preferencial.

Potrebbero piacerti anche