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El presente trabajo tiene como tema fundamental dar a conocer a los lectores la estructura que
constituye el Derecho Penitenciario en nuestro país, tema que fue elegido por contener los
aspectos para nuestro conocimiento sobre la pena, los sistemas penitenciarios y, sobre todo, la
realidad de las cárceles en el Perú, porque aún hoy en día no se conoce muy bien la situación
en la que viven los reclusos al interior de un establecimiento penitenciario (llámese Castro Castro,
Lurigancho, Santa Mónica, etc.), ni sus necesidades, su tratamiento, o su reinserción a la vida
social, además de saber las principales leyes y medidas que se toman al momento de la
ejecución de la pena, de acuerdo a cada situación y hecho delictivo.
En el capítulo II tocamos el tema de la pena, su propósito, y las distintas clases de penas que se
aplican a los delitos.
En el capítulo IV estudiamos la ciencia penitenciaria, lo que dice la doctrina sobre las diferencias
entre Derecho Penitenciario, Derecho Penal y Derecho Procesal Penal.
En el capítulo VI, tratamos el Código de Ejecución Penal, su objeto, sus comentarios y los
derechos del interno.
Por último en el capítulo IX hacemos un breve resumen del Instituto Nacional Penitenciario.
Para hacer nuestro trabajo practicamos la lectura con el resumen, es decir, después de consultar
los libros, escribir lo que entendíamos y citar las notas que nos pudieran servir o que pudieran
explicar mejor nuestro tema, luego nos ayudábamos también con información de Internet y con
imágenes para nuestras diapositivas.
En las conclusiones damos nuestra apreciación sobre los diferentes puntos de la monografía.
Sobre los libros que consultamos, decidimos averiguar con respecto a los principales autores en
la materia: Hugo Vizcardo, (Manual de Derecho Penal y Penitenciario), Alejandro Solís
Espinoza(Ciencia Penitenciaria), pues cada uno de ellos da una descripción detallada sobre el
tema y pudimos encontrar algunos puntos que nos sirvieron de referencia para la estructura del
trabajo, así como también otros libros y tesis(Regeneración de Penados en las Cárceles del Perú-
Julio Bellido R., Historia, evolución, nosología y clasificación de la población pena- Ernesto
Delhonte López) de ex alumnos sanmarquinos quienes llevaron a cabo esta tarea de
investigación para optar el título de Bachilleres en Derecho y Ciencias Políticas, ya que en estos
trabajos se puede notar el esfuerzo que pusieron y la dedicación para obtener el grado, su lectura
hace ver el contacto con la realidad que tuvieron para investigar.
Sin embargo, también hubo limitaciones para la elaboración del trabajo pues no todas las veces
pudimos encontrar los puntos que queríamos en los libros, o bien para un mismo punto
encontrábamos varios libros, lo cual implicaba una revisión mayor y detenimiento en la lectura,
también para trabajar con las tesis pues no se permite fotocopiarlas, por lo tanto, tuvimos que
quedarnos en las tardes leyéndolas y analizándolas.
Incluso con las dificultades presentadas esperamos haber cumplido no solo por el curso sino
también por nuestro aprender constante y nuestros deseos de que este sea solo uno de los
tantos trabajos que haremos para escalar posiciones en la carrera que hemos elegido.
2
SISTEMA DE EJECUCIÒN PENAL EN EL PERU
1. Desde el día que la sociedad quedo políticamente organizada, se creo la función represiva,
estableciéndose las sanciones respectivas (pena, penitencia que contenía aflicción y sufrimiento)
para los autores de las violaciones del orden jurídico a quienes se les guardaría en locales a
propósito (cárceles), desde aquel día surgió virtualmente el problema penitenciario.
Al principio la pena era tomada como venganza social estaba dirigida a destruir al delincuente,
después se conceptuó la pena como castigo y dolor (mal pasión que inflija a la mala acción),
castigando dentro de los limites de la justicia, para resarcir el derecho violado por la acción
delictuosa; las leyes penales se dirigieron entonces a combatir la delincuencia y no al
delincuente.
Por este tiempo apareció el libro de Beccaria a fines del siglo 17, al que el insigne Voltaire lo
denomino “código de la humanidad”. Beccaria comienza planteando cuestiones que aun hoy en
la actualidad cobran benéfico influjo y vibran en la conciencia social palpitante de serias
objeciones: ¿Cuál es el origen de las penas?. ¿y sobre que esta fundado el derecho de castigar?
¿Cuáles pueden ser los castigos que convengan a los diferentes crímenes? Es la pena
verdaderamente útil, necesaria e indispensable para la seguridad y el buen orden de la sociedad?
Son justas las tormentas y las torturas? Ellos conducen al objeto que las leyes se proponen?
Cuales son los mejores medios de impedir los delitos?. Son las misma penas siempre iguales,
en todos los tiempos?, cual es la influencia que tienen sobre las costumbres?
El origen de las penas parece que estuviera fundado en el derecho de castigar. “para hallar el
derecho de castigar, dice Houtefort, es preciso primero considerar la formación de las primeras
sociedad y llegando hasta el primer crimen encontraremos la primera ley criminal, donde la ley
no es sino el grito de la naturaleza y del deseo de la conservación, y no el resultado de las
convenciones hechas entre los hombres libres”.
Toda pena, dice Montesquieu, en su “Espíritu de las Leyes”, que no se deriva de la absoluta
necesidad es tiránica, de lo que se deduce que todo acto de hombre a hombre sin la absoluta
necesidad es tiránica, porque es el Estado el que asumen el derecho de castigar tales delitos
como representantes de la sociedad. Es la necesidad social la que ha obligado a los hombres a
ceder parte de su propia libertad para asegurar su defensa.
Los delitos se miden en razón de la gravedad de la violación y de la relación que tiene con el
daño hecho en la sociedad. El fin de la pena no es el de atormentar o el de afligir al delincuente,
ni deshacer un delito ya cometido. El fin no es otro que impedir al reo cause nuevos daños a sus
semejantes, y retraer a los demás de la comisión de otros iguales; la proporción de los delitos
entre las penas deben ser mas fuertes con motivos que retraigan a los hombres de los delitos.
3
El principio de la pena para Platón, en sus diálogos sobre las leyes, fundamenta la legitimidad
de la punición, el que reafirmando por Seneca lo sintetizo en la prevención intimidatoria de la
sentencia como aseguran los filósofos del S.XVII y XVIII. El Código Penal Albertino.1839, anuncio
el entendimiento del legislador estableciendo que “la pena debía de ser enmendatica para el
culpable”.
La escuela positiva nos representa el estudio concreto de la infracción, Lombroso, ferri y Garofalo
lo fundamental el delito no como una abstracción jurídica, sino como un hecho natural y social
de la persona; con el mismo método jurídico que sirvió el positivismo jurídico para separar la
criminalística del derecho penal, se aplica, prudentemente, para diferenciar entre ciencia
penitenciara y derecho penitenciario. Del mismo modo, es enorme el progreso del derecho
penitenciario alcanzado en los estados soviéticos; el código penal ruso de noviembre de 1919 y
el proyecto de reforma del mismo marcan una orientación científica: rechaza la doctrina
tradicional de la pena expiatoria y retributiva, y establece las “medidas de defensa social”.1
1
LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho por la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lima, Perú.1939.
4
3. La autonomía del Derecho Penitenciario distinguirse desde 3 puntos de vista:
La ejecución de la pena se desarrolla y ejecuta siguiendo las normas y las ordenes que la
autoridad ejecutiva establecen para que los órganos administrativos realicen la restricción de los
bienes jurídicos en las penas y medidas de seguridad, que se ejecutan, conforme a la sentencia
del juez, que no establece los limites y su contenido, y solo cuando en el curso de su realización
surgen controversias entre la autoridad que impuso la ejecución y la que vigilo la ejecución,
respecto de los derechos y obligaciones respectivas.2
No puede señalarse, con precisión, la fecha en que empezó a recluirse a los hombres en
locales cerrados, su uso se pierde en la lejanía del tiempo; sin embargo, cuando se estudia el
problema carcelario, puede salvarse en el Perú, haciendo una apreciación de acuerdo a los
periodos de nuestra historia, es decir: Incanato, Coloniaje y primeros años de vida
republicana. Durante el incanato las prisiones solo servían para recluir a los que esperaban
que se dictara sentencia , fuera esta condenatoria o absolutoria ; o por otro lado , tenían por
objeto impedir la fuga de los que habían sido condenados y esperaban la ejecución de la
2
LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho por la
Universidad Nacional Mayor de San Marcos. Lima, Perú.1939.
5
sentencia , aplicándose frecuentemente la pena de muerte . España, trasplantó sus
instituciones al Perú .Los locales destinados para la reclusión eran marcadamente estrechos
y antihigiénicos, debiendo los internos pagar “carcelaje”, es decir pagar su permanencia en la
prisión, siendo dispensados de esta disposición tan solo los pobres y los indígenas. Como la
gran mayoría de las disposiciones que se establecieron para las colonias, por parte de
España, se ordenaba a los carcelarios dar un buen trato a los reclusos, estas órdenes jamás
fueron obedecidas y el trato fue diferente dependiendo del color de las personas.
1) El proyecto de ley que autorizaba al Poder ejecutivo para realizar la venta del terreno y
construcción de lo que era la Penitenciaría Central y Cárcel Departamental de Varones de
Lima.
El merito de esta obra gigantesca recae en uno de los más ilustres adalides de la Reforma
penitenciaria, el Dr. Don Julio AltmannSmythe quien dejó la Dirección General de
Establecimientos Penales y quien lo sucedió no tuvo la formación apostólica de aquel. Luego
se dio la aparición del D.L. 17851, el 15 de abril de 1969; denominado “Unidad de normas
para la ejecución de sentencias condenatorias” promulgada por el Gobierno Revolucionario
de las Fuerzas Armadas del Perú.
En todo sistema social o conjunto de individuos siempre habrá unos que cometan abusos frente
a otros por diversos motivos, entonces, para superar estas situaciones, se deben establecer
sanciones o por diversos motivos, entonces, para superar estas situaciones, se deben establecer
sanciones o medios por las cuales se eviten tales conductas, por ejemplo, la educación al tiempo
que prepara académicamente también enseña a respetar los derechos los demás. En suma y
aun respetando el pluralismo, cualquier grupo social aspira a una mínima homogenización que
haya posible la convivencia. Se establece así unos límites cuya trasgresión el sistema no está
dispuesto a tolerar.
El derecho penal queda en manos del estado, aquel es el instrumento de control social que usa
el estado con el objetivo de evitar que los ciudadanos transgredan los limites del sistema y
atenten contra la armonía y equilibrio social.
“la característica fundamental en este aspecto, del derecho penal es que se trata de un
instrumento de control social formalizado: es decir, que reúne una serie de garantías que
proporcionan la seguridad de unas respuestas previstas, objetivas e iguales. Precisamente por
la magnitud de las respuestas penales consistentes, como sabemos, en la privación o restricción
de la libertad u otros derechos, es preciso someterlo a formalización”3
3
HUGO VIZCARDO, Silfredo, Manual de Derecho Penal y Penitenciario, Ediciones Jurídicas Novus Iuris,
Perú, 1997, pág.56
8
cambio, el fin de la pena esta en la prevención, es decir, los individuos saben lo que les puede
pasar si comete un delito, por lo tanto, se obtendrán de delinquir, como señala feverbach.
Asimismo los partidarios de la prevención especial (von lizt), nos presentan dos maneras
mediante las cuales se puede lograr la prevención: la 1ra es la inoculizacion, que consiste en la
cadena perpetua o pena de muerte y la segunda es la realización, que consiste en readaptar al
individuo a la sociedad tratamiento y terapia social. Y las teorías de la unión solicitan que es una
combinación de las diferentes posiciones.
La pena se dirige a todos los ciudadanos, pues el modo en que activa esta modificación.
La fase de ejecución de la pena, ha de tender a la redención social del individuo, como sostienen
cabo del Rosal y BoigReig, la reinserción no es fin de la pena, sino una medida a la que debe
tender la ejecución de la pena privativa de la libertad y la medida de seguridad, a diferencia de
la retribución y la prevención.
También hay que tener en cuenta que la realización se debe conseguir para que el ciudadano
respete el sistema con el privatismo ideológico que es, no lo olvidemos valor superior del
ordenamiento fundió al que se pretende la adaptación.
Es preciso lograr un equilibrio sobre los fines de prevención general y especial, tarea encargado
a los legisladores (formulación general) y jueces (ejecución particular), quienes la confianza de
los ciudadanos en las normas quienes no se puede ver afectada por medidas de prevención
especial, así como también no se debe abandonar un mandato constitucional producto de
reacciones de venganza.
Se diferencian en que la pena no solo es consecuencia de una “sanción interna”, es decir, que
atentan contra los principios y contra una “norma subjetiva de determinación”, sino también a la
media de seguridad supone la declaración de peligrosidad social del individuo..
“Ambas, se justifican por la medida en que son necesarias para obtener la salvaguarda de los
bienes jurídicos, si bien su legitimación es diferente.”5
9
2.3 SISTEMA DE PENAS
2.3.1 Clases de Penas:
2.3.1.1 Pena Privativa de la libertad.
Supone la pérdida de la libertad ambulatoria del sujeto imputado, por el tiempo señalado
específicamente en la sentencia.
Muchos autores concuerdan en que la pena privativa de la libertad es el medio mas efectivo de
sanción, pues “gracias al encierro”, se puede extraer al delincuente y aplicar sobre el los
tratamientos de rehabilitación y reinserción a la sociedad.
No obstante actualmente, ha entrado en crisis y perdido legitimidad, dado su evidente e histórico
proceso como instrumento de control social. Pero hasta la fecha, no se ha podido encontrar un
sustituto efectivo por lo que se aplican todas las medidas posibles de reduccionismo penal.
6
Ibíd., p. 77
10
saber que nunca podrá salir.También se le considera errónea para la aplicación de tratamiento
penitenciario pues imposibilita la reinserción social.
“Tal forma de sanción fue introducida en nuestro sistema punitivo, como instrumento de la lucha
antiterrorista (D.L. 25475 y 25659), siendo posteriormente ampliado a ciertos delitos
extremadamente graves, pero de orden común como el caso de la violación de la libertad sexual
de menores de 7 años, en cuanto el agente causa la muerte de la víctima o le produce lesión
grave o si procedió con crueldad (artículo 163-A); o en el caso del secuestro, cuando producto
de la privación de la libertad el agraviado resulte con graves daños en el cuerpo, o en la salud
física o mental o muere durante el secuestro o consecuencia de dicho acto (artículo 152
modificado por ley 26630).”7
b) La expulsión
La expulsión esta reservada para los extranjeros que han cumplido dentro del territorio nacional
por tráfico ilícito de drogas por ejemplo.
Pero la ley no ha definido una duración de tiempo para la persona alejada del país, entonces, se
debe entender que tal medida resulta perpetua y el extranjero no podrá regresar al país.
7
HUGO VIZCARDO, Silfredo, Op. cit., p. 80
8
Ibíd., p. 81
9
Ibíd., p. 82
11
libertad, sobre todo en los casos de corta duración. Por ejemplo los señalados en el art. 31 del
Código Penal.
La prestación se cumple en un tiempo de diez horas semanales entre los días sábado y
domingos, así no chocará con la jornada normal del trabajo del individuo.
“Esta pena se extenderá de diez a ciento cincuenta y seis jornadas de servicios semanales,
disponiéndose que los procedimientos para asignar los lugares y supervisar el desarrollo de la
prestación de servicios será establecida mediante Ley. El Código de Ejecución Penal (Decreto
Legislativo 654) establece las pautas para la ejecución de este tipo de pena (articulo 119 al
121).”10
La supervisión de la ejecución de esta pena está a cargo de la administración penitenciaria
correspondiente, la que informará periódicamente al juez que conoció del proceso y al
representante del Ministerio Público.
También conocido como “arresto domiciliario”, el art. 35 señala que el penado debe permanecer
los días sábados, domingos y feriados, por un mínimo de diez días y un máximo de 16 horas en
total por cada fin de semana en un establecimiento donde se le dé tratamiento educativo y
orientaciones tendientes a su rehabilitación. Esta pena se extenderá de diez a ciento cincuenta
y seis jornadas de limitación semanales.
10
HUGO VIZCARDO, Silfredo, Op. cit., p. 84
12
7) Suspensión o cancelación de la autorización para conducir cualquier tipo de vehículo; o,
8) Privación de grados militares o policiales, títulos honoríficos u otras distinciones que
correspondan al cargo, profesión u oficio del que se hubiese servido el agente para
cometer el delito.”11
d) Multa
Consiste en la obligación de pagar cierta suma de dinero al Estado por parte del condenado,
como forma de reprimir la comisión hecho punible.
a) Fundamentación de la pena
b) Individualización de la pena
Al respecto, el legislador de 1991, incluye también, en el art. 46, once supuestos orientadores
para la determinación de la pena:
1. La naturaleza de la acción.
2. Los medios empleados.
3. La importancia de los deberes infringidos.
4. La extensión del daño o peligros causados.
5. Las circunstancias de tiempo, lugar, modo u ocasión.
6. Los móviles y fines.
7. La unidad y pluralidad de los agentes.
8. La edad, educación, situación económica y medio social.
9. La reparación espontánea que hubiere hecho del daño.
10. La confesión sincera antes de haber sido descubierto; y
11. Las condiciones personales y circunstancias que lleven al conocimiento del agente.
11
HUGO VIZCARDO, Silfredo, Op. cit., p.87.
13
El juez deberá apreciar la responsabilidad y gravedad del hecho punible cometido, debiendo
tomar conocimiento directo de la gente y, en cuanto sea posible o útil, de la víctima.Ç
g) Penalidad en la participación
La instigación (art. 24) como la complicidad primaria (art. 25, primera párrafo) son forma de
participación que se sancionan con penas equivalentes a las del autor.
14
CAPITULO III: SISTEMA PENITENCIARIO
Para que un sistema de control social sea eficaz, deberá garantizar la conformidad del
individuo y su sometimiento a las normas de convivencia (disciplina social) dirigiendo
satisfactoriamente los procesos de socialización.
De acuerdo a los mecanismos o medios utilizados para resolver los conflictos, el sistema
de control social puede ser informal o formal. El control social informal, es el conjunto de
relaciones sociales (normas, roles, creencias comunes, valores, formas de comunicación y de
cooperación, etc), que pueden presentarse entre los miembros de un grupo permanente, pero
que no están prescritas ni definidas por las reglas de dicho grupo; tiene además, un espacio
amplísimo y los medios que se usan están más o menos ocultos, encubiertos. Este control se
ejerce a través de la familia, la disciplina social, la educación, las normas sociales, la medicina,
la religión, la actividad política, los medios masivos de comunicación (mass-media), la actividad
artística, la investigación, etc. Los medios que se utilizan son difusos y muy diversos, pero en
todos los niveles de control predomina una amplia intercambiabilidad y una considerable
flexibilidad.12
Los mecanismos de control informal, actúan sin regirse por procedimientos formalizados
o preestablecidos e imponen sanciones de carácter social que no tienen capacidad de coerción,
pues no son más que “mecanismos naturales de regulación social”.
Ahora bien, cuando los conflictos comportan una mayor gravedad y no pueden ser
solucionados por los mecanismos antes mencionados, entrará en funcionamiento el denominado
“control social formal”, que instaurado por el Estado, tiene como expresión máxima al “sistema
penal”, que está conformado por varias agencias de control y medios normativos que pretenden
garantizar el mantenimiento de una mínima convivencia social.
12
PEDRAZA, Wilfredo y MAVILA, Rosa. “Situación actual de la ejecución Penal en el Perú”. Consejo de cood.
Judicial. Vol. 3.Lima. Abril, 1998
15
extenso. El sistema penal es entonces, la parte del control social institucionalizado, que contiene
un discurso punitivo.
El profesor argentino Eugenio Raúl Zaffaroni, expresa que los sistemas penales
latinoamericanos presentan características negativas, como la utilización de la violencia abierta
(detenciones arbitrarias, ejecuciones sin proceso, apremios ilegales, etc), sectorización
(funcionamiento asimétrico, descoordinado de las parcelas del control social penal),
burocratización (separación de funciones en contradicción de discursos y actitudes, lo que da
por resultado una compartimentación del sistema penal) y corrupción (actuaciones de los
operadores con fines de lucro). El sistema penal nacional –pensamos- no está exento de estas
observaciones.
La institución policial es uno de los instrumentos de mayor fuerza con que cuenta el poder,
Está al servicio del Estado y en tal condición, al lado de los ciudadanos, si éstos obedecen los
mandatos del mismo.13
13
PEDRAZA, Wilfredo y MAVILA, Rosa. “Situación actual de la ejecución Penal en el Perú”. Consejo de cood.
Judicial. Vol. 3.Lima. Abril, 1998
16
La potestad de administrar justicia emana del pueblo y se ejerce por el Poder Judicial a
través de sus órganos jerárquicos con arreglo a la Constitución y a las leyes (Artículo 138° de la
Carta Política y Art. 1° del D.S. N° 017-93-JUS – Texto Único Ordenado de la Ley Orgánica del
Poder Judicial).
Evidentemente, la capacitación de los operadores judiciales tiene una relación directa con
la calidad y eficiencia de la administración de justicia. Cuanto más formación tiene un juez,
contará con mayores recursos para resolver los asuntos contenciosos puestos a su
consideración. Consideramos que en materia penal, donde los bienes en conflicto son mucho
más sensibles (vida, libertad, etc.) la adecuada formación de un juez, será una garantía de
respeto al debido proceso y a los principios de un derecho penal moderno y democrático.14
Tengamos presente también, que las diferencias porcentuales entre la población penal
procesada y sentenciada en nuestro país, ha sido siempre relevante (ver anexo Nº 01: Población
penal por situación jurídica), situación que en parte se debe a una inadecuada administración de
justicia.
Esta agencia de control penal, no ha sido objeto de gran preocupación intelectual y discusión
teórica en América Latina, por ello, carece de un desarrollo doctrinario independiente y de
14
GARCÍA VALDES, Carlos. “Estudios de Derecho Penitenciario”. Tecnos, 1982. Madrid. 168 Págs.
15
PEDRAZA, Wilfredo y MAVILA, Rosa. “Situación actual de la ejecución Penal en el Perú”. Consejo de cood.
Judicial. Vol. 3.Lima. Abril, 1998
17
investigaciones empíricas. Los pocos estudios sobre su funcionamiento obedecen a
preocupaciones personales, algunas crisis circunstanciales o cambios menores en su legislación,
más que a una constante preocupación intelectual.
Este segmento del control, es el órgano de ejecución de las decisiones del poder penal.
Corresponde a la tercera etapa del proceso de criminalización, que se puede denominar “poder
de ejecución”, porque es la fase que permite al gobierno o la administración decidir en torno al
tratamiento, el sitio de reclusión y el régimen disciplinario a que es sometido el condenado.
1. HUGO VIZCARDO, Wilfredo. “Manual de derecho penal y penitenciario: compendio teórico practico para
una defensa legal eficaz”. Ediciones Jurídicas, 1997.Lima. 240 Págs.
2. PEDRAZA, Wilfredo y MAVILA, Rosa. “Situación actual de la ejecución Penal en el Perú”. Consejo de cood.
Judicial. Vol. 3.Lima. Abril, 1998
18
la presunción de normalidad del detenido, los programas de reintegración pueden resultar más
adecuadas a las exigencias de cada individuo.
El sistema supone organización, estructura coherente, con fines y metas claros, bajo cuyos
principios subyacen o pueden primar determinadas teorías o doctrinas penitenciarias.
AltmanSmythe señala que “en el terreno penitenciario, sistema es la reunión ordenada de los
modernos principios de la Ciencia Penitencia aplicados a una determinada realidad, debiéndose
considerar factores tales como el lugar, la época, los medios materiales y culturales del país, en
donde se le hará funcionar”.
En países donde no existe un verdadero sistema penitenciario, no basta con implantar normas
buenas para hacerla efectiva. No es suficiente la buena intención y el deseo de implementar un
conjunto de medidas si antes no se ha efectuado un diagnostico completo de la realidad
penitenciaria en sus diversos aspectos, ya que el desconocimiento previo en que se encuentra
nuestra realidad penitenciaria podemos intentar señalar medidas convenientes para implementar
un sistema que modifique las estructuras y costumbres penitenciarias existentes, las mismas que
pueden ser medios que impidan un adecuado plan penitenciario nacional.
1. SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas,
1997. Lima. 204 Págs.
2. BELLIDO R., Julio.“Regeneración de penados en las cárceles de Perú”. Lima, Perú. 1938. 186 pág.
19
Sin embargo, fue en Estados Unidos, en la ciudad de Filadelfia, y bajo la influencia de los
cuáqueros que se puso en práctica en la prisión de la calle Walnut creada en 1776, tal régimen
de confinamiento en celdas con aislamiento absoluto de día y noche.
Al resultar estrecha dicha prisión, se acordó en 1818, por la legislatura del Estado de Pensilvania,
la construcción de una nueva penitenciaria. Posteriormente en 1821 se aprobó una ley, en baso
a la cual se construyo la “Eastern StatePenitentiary” en la que se implanto un régimen celular,
habiendo recibido sus primeros reclusos en 1829.
Con este sistema existe una serie de ventajas que seria un completo orden en la prisión, la
imposibilidad casi absoluta de evasión, la imposibilidad de corrupción entre los reos, la posibilidad
de mantener en prisión miles de reclusos con escaso personal, puede recibir delincuentes de
diversa peligrosidad y mantenerlos aislados. Pero las desventajas serian que atenta contra la
salud física y mental del reo al aislarlo en celda día y noche, sin contacto humano, no se prepara
al preso para la vida libre, alto costo de la prisión, se aumenta el sufrimiento al reo ante la
espantosa soledad de la celda, aunque posteriormente se agrego el trabajo individual, en nada
humanizo el régimen.
Este tipo de régimen atenta contra la característica social del hombre, al privarlo de la relación
con otros seres, contribuyendo más bien a la aparición de una serie de problemas psíquicos y
físicos en el condenado.
Este sistema, el más antiguo, surgió como una necesidad para impedir la influencia corruptora
que ejercían unos delincuentes sobre otros dentro de los muros del Penal. Fue inhumano y cruel
que, lejos de regenerar los penados, los convertía en fieras humanas o en locos temibles. El
aislamiento celular diurno y nocturno no dio buenos resultados y por el contrario constituyo un
peligro para la salud del delincuente y una amenaza para la sociedad.
Por eso, y con mucha razón dijo Ferri, que el sistema celular absoluto fue una de las aberraciones
del S.XIX, que no favorecía a la readaptación del delincuente a la vida social, sino que mas bien
fomentaba al vicio y propagaba las enfermedades dentro de las estrechas celdas por falta de sol,
aire y movimiento.
1. BELLIDO R., Julio.“Regeneración de penados en las cárceles de Perú”. Lima, Perú. 1938. 186 pág.
2. SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas,
1997. Lima. 204 Págs.
SISTEMA DE AUBURN O MIXTO.- Fue en la ciudad Auburn, estado de Nueva York, en Norte
América, donde por primera vez se implanto el régimen auburniano.
20
En 1816, en la ciudad de Auburn, se construyo una prisión, y la dirección de ella fue asumida por
Elam LYNDS, a quien no le satisfacía el régimen filadelfico, por lo que desde 1823 implanto uno
mixto sobre las bases siguientes:
Este tipo de régimen fue adoptado por la mayoría de prisioneros de Estados Unidos, además
tuvo una fuerte repercusión en diversas partes del mundo.16
Las ventajas que aducen los defensores de este sistema es que se da una economía de la
construcción, reducción de gastos mediante el trabajo colectivo de los reclusos, evita los malos
efectos del aislamiento absoluto, evita la contaminación moral por la regla del silencio. Sin
embargo las desventajas de este régimen, al igual que el celular son también bastante fuertes
como la falta de comunicación atenta contra la naturaleza social del hombre, la persistencia del
aislamiento celular nocturno contribuye a producir conflictos mayores al recluso y el castigo
corporal, si se contraria las reglas del silencio, son medidas que provocan mayores
resentimientos sociales en los condenados.
Este sistema aurniano subsiste aun en los prisioneros de muchos países, pero no es el más
favorable para los fines de readaptación.
SISTEMA PROGRESIVO: Es una combinación del sistema celular absoluto con el aislamiento
nocturno y régimen en común diurno. Según este sistema el condenado pasa del Filadelfico al
de Auburn y de este al progresivo, mediante su buena conducta y su laboriosidad hasta alcanzar
su libertad condicional. El penado carece de finalidad y es necesario concederle libertad
condicional, ya que ella constituye un excelente medio de reforma.17
Este sistema surgió como una alternativa a las deficiencias y limitaciones de los dos sistemas
precedentes. En gran medida vino a ser una yuxtaposición de ambos sistemas con el agregado
de un periodo nuevo.
Es un sistema que organizados en grados o periodos, permite preparar al recluso para la vida en
libertad, mediante el paso de un grato a otro.
Sin embargo, el llamado régimen progresivo, no vino a constituir un modelo único en los diversos
países en los que fue acogido, sino más bien adopto diversas formas, desde los iniciales
regímenes progresivos del siglo pasado hasta manifestaciones desarrolladas durante el presente
siglo.Existen variantes del Sistema progresivo y las principales son las siguientes:
16
BELLIDO R., Julio.“Regeneración de penados en las cárceles de Perú”. Lima, Perú. 1938. 186 pág.
17
SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas, 1997.
Lima. Pag. 74.
21
Fue desarrollado por el capitán Alexander Maconochie en la isla de Norfolk ubicado en Australia,
cuando fue nombrado gobernados de dicha isla en 1840, concibiendo corregir al delincuente
tomando como base el trabajo.
El régimen ideado por Maconochie adopto el criterio de la duración de la pena según la gravedad
del delito, el espíritu de trabajo y la conducta que observara el condenado. Para dichos efectos
les entregaba marcas o vales que acreditaban el esfuerzo en el trabajo y la buena conducta. El
número de vales para obtener la libertad guardaba proporción con la gravedad del delito.
1. De los Hierros: el reo era ubicado en celdas aisladas, con grilletes y cadena, etapa que
se podría superar en base a su conducta.
2. Del trabajo: periodo en el cual el condenado podía escoger el taller en el que trabajaría,
teniendo opción de seleccionar la actividad de su preferencia dentro de una variedad de
tareas.
3. Libertad intermedia: caracterizado por el otorgamiento de permisos para visitar
familiares o para trabajo, según el buen tipo de conducta del recluso.
a. Entrevista con el Director sobre las causas de su detención, medio ambiente del que
provenía, etc.
b. Examen medico clínico.
c. Examen Psíquico.
1. BELLIDO R., Julio.“Regeneración de penados en las cárceles de Perú”. Lima, Perú. 1938. 186 pág.
2. SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas,
1997. Lima. Pag. 75.
Posteriormente podía pasar por cuatro etapas de acuerdo al tipo de conducta que presentara:
1. TERCERA CATEGORIA: En esta categroia estaban los recluso de peor conducta, entre los
que se hallaban también los que pretendían fugar.
22
2. SEGUNDA CATEGORIA: Se ubicaban en esta fase a los que habían mejorado en su
conducta y trabajo. Las restricciones eran menos graves. No llevaban cadenas en los
pies, tampoco usaban uniforme y eran mandados por pupilos de la primera categoría.
3. PRIMERA CATEGORIA: En esta categoría se encontraban los recluso de mejor conducta
y dedicados al trabajo.
Se caracterizaban por llevar uniforme azul, kepi militar, tener graduaciones y ser
mandados solo por oficiales. Además, recibían la mejor comida, premios, haciéndose
acreedores cada vez a mayor confianza y regalías.
4. LA ULTIMA ETAPA: LIBERACION CONDICIONAL : los reclusos que habían llegado a la
primera categoría podían obtener libertad condicional bajo la palabra de honor de cumplir
las reglas de conducta que les fijara el Board of managers.
Sin embargo, en los últimos años se esta intentando implementar una “reforma penitenciara”, lo
que también esta ligado a la reestructuración de un verdadero sistema penitenciario nacional.
1. SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas, 1997.
Lima. Pag.76
Régimen penitenciario viene a ser el conjunto de condiciones y medidas que se ejercen sobre
un grupo de reclusos que presentan características similares. Además cada régimen se
caracteriza por una serie de normas o reglamentos que lo diferencia de otros regímenes. El
23
régimen penitenciario, que a veces erróneamente se denomina sistema penitenciario, viene a
ser de este modo la especie dentro del género que es el Sistema.
El crecimiento constante de la población penal, nos debe motivar a fortalecer los criterios
de la política criminal moderna, con la finalidad de sustituir totalmente las penas privativas y
mediana criminalidad. Recordemos que al primer trimestre de 1989, en Lima Metropolitana
existían 8,437 internos, de los cuales la elevada cifra de 7,404, es decir el 87.76% permanecieron
en un establecimiento penal de 01 día a dos años. Desde entonces, se ha realizado importantes
esfuerzos para evitar su aplicación.
18
SOLIS ESPINOZA, Alejandro. “Ciencia penitenciaria y derecho de ejecución penal”. Ediciones Jurídicas, 1997.
Lima. 204 Págs.
24
Existen términos denominados como las de Penología y Ciencia Penitenciaria, algunas veces
considerando dichos términos como conceptos diferentes y en otros casos empleados ambas
denominaciones como iguales.
Al respecto se considera la palabra Penología que posiblemente fue creada en Norteamérica por
el publicista germano-americano Francis Lierber quien hablo de PENOLOGY en una carta
privada dirigida a Tocqueville en 1834. Es precisamente en Norteamérica donde este término se
emplea más. Sin embargo en Europa y sobre todo en Francia ha tenido mayor difusión la
nomenclatura de Ciencia Penitenciaria. Según Giovanni NOVELLI, el médico alemán N.H.
JULIUS sería uno de los primeros en usar esta denominación. Más tarde, el mismo profesor,
retomando unas publicaciones de los establecimientos penales, los denominó “Anuarios de la
Ciencia Penitenciaria y de los Establecimientos de corrección”(1842). Poco después podemos
recordar que los primeros congresos internacionales del siglo XIX sobre esta materia, se
denominaron “penitenciarios” e incluso en el cuarto congreso de San Petersburgo de 1890 se
recomendó y a la creación de la cátedra de Ciencia Penitenciaria en los diversos países.
Para Solis Espinoza y por aceptación del grupo el vocablo Penología tiene el mismo significado
que Ciencia Penitenciaria. Nos parece inconsistente la pretensión de separarlas cuando
realmente por el objeto de estudio predominante y la orientación resocializadora que siguen en
la práctica, indica que constituyen un mismo conocimiento.
Al respecto las acepciones que se han dado hasta el presente han sido variadas. Así por ejemplo
Italo LUDER19 dice que estudia los principios, doctrinas y sistemas relativos a la ejecución de las
penas privativas de libertad y de los resultados de su aplicación.
Los especialistas franceses SCHMELCK y PICCA 20 lo consideran como “La Ciencia del
tratamiento de los delincuentes”.
Un concepto de Ciencia Penitenciaria acorde con las actuales tendencias de la misma, pueden
ser el siguiente. “Es una ciencia interdisciplinaria que estudia todo lo relativo a la ejecución
de las sanciones privativas y restrictivas de la libertad, tanto en medios cerrados, abiertos
y libres, así como de la orientación post-carcelaria, con el fin de lograr la readaptación del
delincuente”.21
19
LUDER, Ítalo. La política Penitenciaria en la Reforma Constitucional. Buenos Aires. 1952. Pag.80
20
SCHMELCK Y PICCA. Penologie et DroitPenitenciaire.Paris. Ed. Cuyás. 1967. Pág. 25
21
SOLIS ESPINOZA, A. Ciencia Penitenciaria. Op.cit.pág. 81
25
El hecho de considerar a la Ciencia Penitenciaria como disciplina de orientación enmendativa
que se basa en diversas ciencias que estudian al hombre, nos hace ver que no en una ciencia
estrictamente jurídica, sino más bien una integración interdisciplinaria los conocimientos, método,
y técnicas de un conjunto de áreas científicas vinculadas con el tratamiento del delincuente.
Es una ciencia cuyo objetivo puede caracterizarse tanto desde el punto de vista técnico como
práctica. Toda la elaboración teórica relacionada con los problemas carcelarios y del hombre en
prisión, generan una gama de aspectos que tienen que ver con la práctica de esta interciencia y
entre sus objetivos más saltantes consideramos a los siguientes:
1. La Resocialización del delincuente: este propósito se halla vinculado a superar los viejos
conceptos de la pena como castigo, asignándole un propósito readaptador
2. Orientación y ayuda familiar del recluso
3. Orientación y asistencia post-carcelaria: para facilitar que el ex recluso logre su integración a la
comunidad y ésta le brinde acogida.
Otro punto es el referente a la arquitectura penitenciaria, que también está vinculado con los
metas básicas de nuestra disciplina.
Otros aspectos vinculados con el tema son los relativos a los regímenes carcelarios, al sistema
penitenciario, la clasificación penitenciaria, entre otros.
Para hacer realidad esos objetivos se requiere la práctica concreta, su aplicación real, y para
ayudar a ello están los métodos y técnicas de la Ciencia Penitenciaria, además de los recursos
necesarios.22
La vieja polémica del método propio de cada conocimiento ha sido superada por la necesidad de
la interdisciplinariedad
Esto significa que no podemos enfocar el tema de la Ciencia Penitenciaria encuadrándola como
una ciencia encasillada en un cajón aislado de otras, ni suponer que es una disciplina penal
totalmente.
De todas la ciencias que tienen que ver con los objetivos de la Ciencias Penitenciarias, destacan
principalmente la Pedagogía o Pedagogía correctiva, tal como lo denominara Karl Peters en
Alemania. A lado de dicha disciplina también tienen vital aplicación la psicología, la sociología el
trabajo social, la medicina, entre otras, sin cuyos aportes no podrían lograrse los propósitos
penológicos.
22
ibid
23
Ibid. Pág. 99-100
26
a confusión al estudiante e incluso a profesionales no ligados a la especialidad penitenciario, así
como reitera que la penología o Ciencia Penitenciaria y la Criminología no son disciplinas
estrictamente jurídicas ni respectivamente penales, por cuanto rebasan en mucho el marco
estrictamente penal.
El Derecho Penal es una disciplina que estudia las normas jurídicas que determinan las
acciones de naturaleza criminal, tipificando el delito y vinculándolo con una pena o
medida de seguridad (WELZEL). Mientras tanto la Ciencia Penitenciaria es básicamente
extrajurídica, no estudia normas jurídicas y trata de todo lo concerniente a la ejecución
de las penas y medidas privativas y restrictivas de libertad desde una perspectiva
extralegal y su propósito fundamental es resocializar al delincuente. Históricamente el
Derecho Penal precede al desarrollo de la Ciencia Penitenciaria, por ello no son
disciplinas totalmente independientes entre sí, aunque existen claras diferencias entre
ambas.
La diferencia con el Derecho Procesal Penal estriba en que ésta es una disciplina jurídica,
relativa al conjunto de normas legales que regulan el proceso o juzgamiento de las
conductas tipificadas como delito por el Derecho Penal. Son pues disposiciones jurídicas
que norman el procedimiento de la acción penal que está en manos del Poder Judicial.
También es importante no confundir las diversas disciplinas penales vistas hasta el momento. El
Derecho Penal y el Procesal Penal históricamente son anteriores al Derecho Penitenciaria, ya
que el primero tipifica las conductas clasificadas como delito y la pena que les corresponde,
mientras que el Derecho Penitenciario regula la forma de ejecución de la sanción, una vez que
cometió un delito, su autor ha merecido una pena impuesta conforme a las normas señaladas
por el Derecho Procesal Penal.
24
GARCIA RAMIREZ, S. La Prisión. Op cit. Pág. 51 y ss.
27
Así lo externo y lo interno componen un anillo que ahoga el desarrollo del penitenciarismo. Un
difundido desdén social hacia el delincuente sentenciado torna impopulares las medidas que lo
benefician; esta impopularidad frena la acción política y aun, a veces, la orienta contra las
medidas de progreso en la ejecución penal.25 El tratamiento es otra forma de prevención
¿Cómo olvidar en esta relación de obstáculos a los intereses creados, ala corrupción, al
burocratismo?. El burocratismo paraliza los mejores esfuerzos
Pero hay algo más, que toca la raíz de la cuestión: la crisis de la prisión misma como medio de
represión y tratamiento.
El hecho fundamental está en el valor criminógeno de la prisión: ésta crea delincuentes. Por otra
parte, ha fracasado en su empeño de recrear hombres libres; así lo evidencian los índices de
reincidencia. Es ciento nuestra prisión se encuentra en crisis. Lejos de frenar la delincuencia,
parece auspiciarla. Hiere a veces indeleblemente, al que por primera vez la pisa y ofrece un
hogar natural a sus huéspedes habituales.
La prisión ideal- tal vez la del mañana- ha de ser un instituto de tratamiento, científico, humano,
amoroso, del hombre que ha delinquido. No más el mero conservar hombres entre rejas, como
se contiene a las fieras, para tranquilidad colectiva. Por el contrario, tratamiento en reclusión,
dirigido hacia todos los factores de crimen en el caso individual. Enseñanza de un oficio para
quien carece de él, curación de males físicos y mentales, instrucción adecuada para el ignorante.
Una prisión así, instituida bajo el aliento alerta del moderno tratamiento criminal, no resulta
atacable ni podrá ser atacada.
Quizás la verdadera medida del interés, del apremio, que una materia suscita, radica en las
proyecciones constitucionales e internacionales que consigue. A esto no es obstáculo que la
constitución política y del Derecho común internacional hayan poseído, hasta un pasado aún
cercano, determinadas limitaciones de contenido, impuestas por una técnica tradicional.
25
A la falta de orientación del público en torno a los temas del tratamiento de los delincuentes constituye el
secreto que a menudo pretende guardar la administración penitenciaria en torno a estas cuestiones. Contra esta
predilección por el misterio, cf. Ericksson, Problemas relacionadas con la reforma del tratamiento de la
delincuencia, rev. Cit. pp 846-7
28
En la idea de conflicto, siempre presente, quiérase o no, en la porción dogmática de las
constituciones. Hay coincidencia de propósitos: la resocialización figura la cabeza de los
desiderata individuales y sociales. La pena, en suma, como medicina. Con todo, el mandato
constitucional subsiste para asegurar esta identidad de fines y de procedimientos por parte del
Estado, para impedir que la desviación el tratamiento ceda frente al castigo. Esta es, de algún
modo, también la explicación de los dos órdenes de normas penitenciarias captadas en las
constituciones.
Otras dos cuestiones convienen traer a cuentas. En la Conversión europea se acoge ya la acción
sobre el estado peligroso sin delito, y en el Pacto Internacional se indica: “nadie será sometido
sin su libre consentimiento a experimentos médicos o científicos”
Todas estas cuestiones permiten suponer que la internacionalización por el cauce del tratado es,
todavía, un ideal improbable. Más aún resulta serlo si se toma en cuenta la extendida
desobediencia nacional a las Reglas. En el foro de su reforma se planteó varias veces,
certeramente, otra reclamación: cumplimiento. Por hoy, la tarea inmediata continúa siendo la
tensión internacional y de progresiva asunción interna de las Reglas. Sólo en este sentido
podrían tales normas aspirara convertirse en Derecho internacional, dentro de un plazo
razonable.
Se ha manejado otra posibilidad: el desdoblamiento de las Reglas en dos textos: destinado uno
a fijar los derechos del tratamiento. Esto equivaldría a deslindar los dos órdenes de
26
Tradicionalmente, la mediatización de los hombres por los Estados de los que son naturales o ciudadanos,
“prueba que en el principio los individuos no son sujetos inmediatos del D.I, y si súbditos de un Estado”.
VERDROSS. Derecho internacional público. Pág. 57
27
Evidentemente este texto informó el de la Convención americana sobre derechos humanos de 1969, cuyo
artículo 5, aparte 6, determina: “las penas privativas de libertad tendrán como finalidad esencial la reforma y la
readaptación social de los condenados”
29
consideraciones a que hemos venido aludiendo desde que nos ocupamos en la sede
constitucional de la ejecución. Preferimos la unidad de fórmulas, aun a riesgo de lña confusión.
La unidad refuerza algo que interesa sobremanera: cohesión entre derechos humanos y técnicas
de tratamiento.
30
En el estado actual de la evolución jurídica, recibe el nombre de Derecho penitenciario aquél,
que recogiendo las normas fundamentales del Derecho penal, del que es continuación hasta
rematarle, desenvuelve la teoría de la ejecución de las penas, tomada esta palabra en su sentido
más amplio, en el cual entran hoy también las llamadas “medidas de seguridad”.
Sería esta una primera definición abreviada; porque, sometiéndola después a revisión,
veríamos que, dentro de ella, como en un núcleo central, rodeado de una zona periférica amplia,
podíamos añadir, “y especialmente de la ejecución de las penas centrípetas de libertad y de las
medidas de seguridad que implican detención o clausura, equivalente de aquéllas”.
Las distintas penas posibles pueden ser divididas en tres clases: penas de eliminación,
penas de readaptación y penas de sanción, simplemente. Las penas de eliminación quedarían
en la zona periférica del Derecho penitenciario, tanto por su propia finalidad, cuanto porque su
ejecución suele ser simple, limitada a uno o pocos actos desenvueltos brevemente, que, además,
llevan a cabo agentes bastante alejados de las funciones judiciales. Este sería el caso de la pena
de muerte, que cumple el verdugo y, asimismo, del extrañamiento y del destierro, que corren a
cargo de funcionarios policiales.
En resolución, el objeto nuclear o central del Derecho penitenciario son las penas
centrípetas de libertad, o de otro modo dicho, las penas de clausura, las de prisión. La ejecución
de las otras clases de penas quedaría sólo en la zona periférica del mismo, que, por lo mismo,
pudiera ser omitida o tratada con menor amplitud.
El Derecho penitenciario es una sección, una parte, una división del Derecho penal, en
una palabra; la cual, bajo la rúbrica general del Derecho penal, comienza inmediatamente
después a continuación de la parte del capítulo del Derecho penal dedicados a la aplicación de
la pena.
Hasta aquí llega el derecho penal propiamente dicho; hasta el momento en que los jueces
firman la sentencia, absolutoria o condenatoria y, en este último supuesto, fijando la pena
correspondiente al delito, en clase y medida, según los términos legales.
1. BERNARDO DE QUIROS, Constancio. “Lecciones de Derecho Penitenciario”. 1953. México 293 Págs.
El Derecho penitenciario, recogiendo el fallo condenatorio, tal como es, sin poder alterarlo
en lo más mínimo, atiende después a la ejecución de la pena, hasta el último momento en que
elimina al condenado, definitiva o relativamente por la muerte, el extrañamiento o el destierro, o
le devuelve a la sociedad, extinguida legalmente la pena.
31
En los últimos tiempos, a partir de la segunda década de nuestro siglo, y en Italia
especialmente, se ha señalado un movimiento en pro de la sustantividad,de la independencia del
Derecho penitenciario, desprendido autónomamente del Derecho penal. Esta tendencia
particularmente italiana la inició en época fascista, y se manifestó en el Tercer Congreso
Internacional de Derecho penal reunidos en Palermo en abril de 1932 en plena dictadura de
Mussolini.
El Derecho penal unas veces absuelve, y otras condena. Cuando absuelve, desaparece
su relación con el derecho penitenciario. Cuando condena concluída su misión, se desentiende,
se desprende ya del condenado, al que no vuelve a ver sino a través de las visitas carcelarias
que cumplen los jueces, verdaderos órganos del Derecho Penal, como un deber accesorio.
El Derecho penitenciario está siempre más influido por la opinión libre de la calle, de la
prensa, de las instituciones de patronato, de las asociaciones de beneficencia, de los puntos de
vista de los pedagogos y los médicos, tiene de la pena un concepto más humano, un sentido
más liberal que a cada momento se manifiesta, no obstante el deber de acatamiento a los
preceptos penales, tal como los recibe de las leyes penales.
Las fuentes propias del Derecho penitenciario son: en primer lugar, la Constitución
política del Estado, que, desde los orígenes del régimen constitucional, no deja de sentar algunos
principios fundamentales de la penalidad; luego, el Código Penal, que recoge y amplía estos
preceptos, organizándolos en el tejido íntimo de su estructura; en tercer lugar, las leyes de
ejecución de sanciones que acompañan ya de ordinario a los códigos mismos, como apéndice
reglamentario, y finalmente, los reglamentos de las instituciones penitenciarias y las resoluciones
de la administración penitenciaria en el ejercicio de sus potestades, reglamentaria, jurisdiccional
y disciplinaria. No dejaremos de añadir las costumbres penitenciarias, en los últimos e íntimos
detalles de ejecución olvidados por los reglamentos por muy minuciosos y acabados que sean.
La disciplina jurídica que mantiene estrecho contacto con el Derecho Penal Penitenciario es el
Derecho penal; establece, en efecto, primero la ejecución de la sentencia, que pueden
32
comprender penas y medidas de seguridad. Esta conexión no significa que el derecho
penitenciario sea un capitulo del derecho penal.
El derecho penal estudia los delitos y aplica las penas y medidas de seguridad de acuerdo con
la personalidad del delincuente. El Derecho Penitenciario norma la ejecución penal de acuerdo
con los fines jurídicos y sociales que el Estado impone cumplir su función punitiva.
De la relación del Derecho penitenciario con el Derecho Penal puede muy bien repetirse, lo que
se dice del Derecho Administrativo frente al Derecho Constitucional. El Derecho Procesal Penal
que establece el procedimiento que se sigue ante un hecho delictuoso, tiene relación efectiva
con el Derecho Penitenciario que cumple en forma irrevocable la sentencia.
La Ciencia Penitenciaria es el estudio teórico de todas las cuestiones que orientan a la ejecución
penal, con el exclusivo objeto de alcanzar los fines que se propone la represión; El Derecho
Penitenciario se encarga de la realización positiva de la Ciencia Penitenciaria en el campo de
una determinada legislación de un país o de un código, mantiene la técnica penitenciaria
concerniente a la múltiple actividad de las funciones de los establecimientos de reclusión.
Los objetivos de la represión solo se consiguen con el Derecho Penitenciario que hace la
conveniente adecuación de la sentencia al sujeto delincuente y, constituye la norma que regula
las relaciones entre el Estado y el criminal, después que se ha reconocido, determinado y
sentenciado el hecho antisocial cometido.
Para reprimir la delincuencia a la criminalidad no basta tener un buen Código Penal, es menester
también poseer pautas técnicas referentes a prisiones, para que se cumplan las penas y medidas
de seguridad. La ciencia penitenciaria es la base sustantiva que precisa los fundamentos del
régimen penal que acepta el Estado, y por ello se requieren conceptos definidos sobre la forma
como deben cumplirse las sanciones que imponen los tribunales de justicia.
La sociedad provocada, ultrajada y lastimada por el delito, como dice Saldaña, reacciona con un
gesto defensivo empleando formas intimidativas o eliminatorias según que el crimen lleve cierta
gravedad contra la sociedad y el individuo; La Ciencia Penitenciaria encausa y dirige aquella
reacción compleja en forma correctiva o tutelar, como seguía medio de evitar gravísimo mal;
hace proficua la finalidad practica del tratamiento de los delincuentes, pero, para llegar a este
tratamiento es justo que se simiente bien el axioma.
1. BERNARDO DE QUIROS, Constancio. “Lecciones de Derecho Penitenciario”. 1953. México 293 Págs.
2. LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho. Lima,
Perú.1939.
33
La individualización penitenciaria de la pena según sea la característica del delincuente, es
resultado de la ciencia penitenciaria: la higiene, alimentación, seguridad, salud y recreos son
elementos indispensables en ese tratamiento especial.
La disciplina que se ejercita como función justificativa del tratamiento especial, deja de ser
empírico, para convertirse en técnica. La ciencia penitenciaria, por ultimo, asegura la continuidad
de la vigilancia en el periodo carcelario y post carcelario o ulterior a la liberación.
Tarea ruda es la que les toca realizar a los hombres de estudio que, verdaderamente, se
consagrará al bien público en el terreno de la defensa social en el Perú. Actualmente su solución
es tenue, confuso y desorientada.
La ciencia penitenciaria cumpliendo con los fines de las defensa social trata de impedir el
aumento delictivo, y la reincidencia perfeccionando las áreas de reeducación, readaptación y
eliminación de ciertos elementos peligrosos; pero, para consagrarlo se requiere de personal
técnico y establecimientos seguros.
1. LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho. Lima,
Perú.1939.
Dentro de un sistema democrático, la relación Estado – interno no se define como una relación
especial sino como una relación jurídica con derechos y deberes para cada una de las partes,
34
los cuales deben estar especificados sobre derecho humanos así como en las leyes y en los
reglamentos que desarrollan las mismas.
Siendo que esta relación jurídica estado – interno garantiza la permanencia de un estado
democrático de derecho, resulta necesario que este haga eso de su iuspuniendi- faciltad
otorgada por la sociedad solo de manera excepcional e indispensable al no existir otros
mecanismos que brinden una respuesta satisfactoria a los conflictos sociales mas graves.
Por ello se establece que el interno tiene derecho y obligaciones que deben observarse en la
fase de ejecución penal, desde el preciso momento en que la sentencia legitima la ejecución de
la pena privativa de libertad, hasta su finalización.
- Derechos directamente afectados.- La constitución política de 1993 en los incisos 11) y 24)
del articulo 2º preserva el derecho de la persona a elegir libremente su lugar de residencia y a
transitar libremente por el territorio nacional.
1. LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho. Lima,
Perú.1939.
Por lo tanto, la persona que se encuentra privada de su libertad es un sujeto titular de todos los
derechos fundamentales amparados por la constitución e instrumentos internacionales
ratificados por el Peru.
Por otro lado, los derechos de trabajo y educación se encuentran supeditados a las posibilidades
materiales y presupuestarias que dispone la Administración Penitenciaria.
- Derechos Inalienables.- Son los derechos que los internos – en calidad de procesados
sentenciados- preservan al ser inherentes a su status de persona con excepción, obvio es de
aquellos que se encuentran limitados o afectados por la ley y la sentencia judicial respectiva. Con
esta categoría de derechos se incluyen aquellos que forman parte del núcleo duro de los
derechos fundamentales de la persona recogidos y garantizados por nuestra Constitución
Política y reconocidos en los tratados y pactos internacionales, sobre derechos humanos
ratificados por el Perú, los cuales constituyen el marco jurídico fundamental de la ejecución penal
en concordancia con lo estipulado en el articulo 3º del Reglamento Penitenciario, que contiene
el mandato general de respeto de los demás derechos fundamentales de los internos, al
establecerse que: “ la ejecución de la pena se cumplirá respetando los derechos fundamentales
de la persona consagrados en la Constitución política del Perú, y en el resto del ordenamiento
jurídico peruano. Los derechos de los internos son los siguientes: derecho a la dignidad, derecho
a la vida, derecho a la igualdad, derecho a la integridad personal, derecho a la salud, etc
1. LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de bachiller en derecho. Lima,
Perú.1939.
28
FRISANCHO APARICIO, M.- CABRERA FREYRE, R. Comentarios al Código de Ejecución Penal. -------Pág. (66-90)
36
Artículo II:La ejecución penal tiene por objeto la reeducación, rehabilitación y reincorporación
del penado a la sociedad. La misma regla se aplica al procesado, en cuanto fuera pertinente.
La premisa para sustentar cualquier percepción que se tenga de la pena será siempre el
provocar sufrimiento de la persona recluida. Tanto es así que es inconcebible la pena privativa
de libertad que no lleve a la aflicción
Se percibe entonces que desde sus propios cimientos el ideal del tratamiento
resocializador está muy lejos de alcanzar su meta teórica. Son muy numerosos los
cuestionamientos que recibe, empezando por el concepto mismo de resocialización y la
idea que le sirve de eje.30
c) Pero no es sólo la indeterminación del término lo que se puede criticar , sino la idea de
resocialización
e) Es muy fácil decir que el delincuente debe ser tratado, pero ya no lo es tanto el decir de
qué forma debe serlo.
29
HOHNEIER. Seguridad y Socialización”. En Kriminologisches Jornal, 2. 1970. Pág. 15
30
MUÑOS CONDE, F. La resocialización del delincuente. Análisis y crítica de un mito. En C.P.C, núm.7. 1979.
31
MUÑOS CONDE, F. La resocialización del delincuente….op.cit.pag.94
37
¿Cómo y para qué resocializar a alguien que por razones coyunturales de desocupación
laboral, grave crisis económica, etc., comete un delito contra la propiedad, mientras esas
razones de desocupación y crisis económica sigan existiendo?
f) Con mayor sentido, otros autores recalcan que muchas veces, en los países periféricos
no se trata de discutir cual es el límite del tratamiento como sucede en los países
centrales, sino el debate, se plantea con más crudeza y se da entre la pena o la
represión indeterminada con pretexto de tratamiento.
g) Por último, si se acepta y se da por buena la frase de Durkheim de que “la criminalidad
es un elemento integrante de una sociedad sana” y se considera que es esa misma
sociedad la que produce y define la criminalidad;¿Qué sentido tiene hablar de
resocialización del delincuente en una sociedad que produce ella misma delincuencia?,
en otras palabras; ¿no habría que empezar por resocializar a la sociedad?
El Código Penal vigente trae a nuestro medio novedosas medidas alternativas sustitutivas a la
pena privativa de la libertad; la urgencia de buscar otras medidas sancionadoras para ser
aplicadas a los delincuentes de poca peligrosidad, o que han cometido hechos delictivos que
no revisten mayor gravedad.
La reforma ha dado nacimiento a la prestación de servicios a la comunidad; como la pena de
multa; conversiones de la pena privativa de la libertad; suspensión de ejecución de la pena.
En suma, era necesario que se elaboraran estás formulas, pues está demostrado que la pena
privativa de la libertad genera unos efectos extremadamente perjudiciales en el autor
delincuente.
La propia naturaleza de la prisión, como institución total, conspira contra los teóricos objetivos
resocializadores.
En el ámbito más personal, la pena produce una fractura clave en la vida del interno que,
cuando sale en libertad, se encuentra con la mayoría de las puertas cerradas. Es conocido el
fenómeno de la estigmacion o sea el alto grado de señalización jurídica o social que sigue como
consecuencia de la pena.
38
También, debemos de considerar cuales son los efectos del aislamiento en prisión de un
individuo dentro de su grupo familiar.
Por último se dará una constante: la falta de los medios e instalaciones adecuadas y del
personal capacitado para llevar a cabo un tratamiento mínimamente eficaz.
No obstante sus limitaciones, las “reglas mínimas de las Naciones Unidas” constituyen, en el
plano internacional, el más autorizado y conocido documento de referencia en materia de tutela
del a situación jurídica del recluso. Pero es oportuno aludir brevemente a otros textos de las
Naciones Unidas que se refieren a la misma materia.
Dichos textos son el Pacto Internacional de Derecho Civiles y Políticos, la Declaración sobre
Protección de todas las Personas contra Tortura y otros Tratos o Penas Crueles Inhumanas o
Degradantes, y el Código de Conducta para funcionaros encargados de hacer cumplir la ley.
32
FRISANCHO A..- CABRERA F..Op cit. Pág. 84 y ss.
39
6.3. LA AUTORIDAD DEL JUEZ DE EJECUCIÓN PENAL
Nuestro moderno Código de Ejecución Penal debe ser estudiado, para una orientación jurídica
en el campo de su aplicación e, implementando en forma progresiva como lo dispone su primera
disposición transitoria para su efectiva y eficiente administración penitenciaria.33
La imposición de una pena privativa de la libertad, tiene por finalidad “la reeducación,
rehabilitación y reincorporación del penado a la sociedad, lo que significa que nuestro sistema
penal sigue la filosofía de las teorías utilitarias de la pena, por cuanto están dirigidas a promover
actitudes positivas del condenado, con miras a su reintegración a la sociedad.
33
OTOROLA MEDINA, Lucia. Ejecución Penal y Libertad. Pag.76 y ss.
34
Pedraza Wilfredo, Situación actual de la ejecución penal en el Perú: primera aproximación
empírica, Lima, Edit. Lima-Perú, 1998, pag.51-52
40
convivencia interna (buena conducta) y desarrollara , aunque sea solo para este propósito ,
actividades laborales o educativas.
Un “beneficio” es una gracia, un favor que se le otorga a una persona, es decir, tiene una génesis
premial; en cambio, cuando nosotros hablamos de “derecho”, nos referimos a una facultad de
exigir todo lo establecido en nuestro favor por la ley.
Si tenemos en cuenta esto, es fácil percibir la gran importancia que tiene los mecanismos que
permiten el acortamiento de la pena impuesta, en el régimen penitenciario, ya que de su acertada
concepción dependerá su real aplicación.
Particularmente , considérese que los beneficios penitenciarios son verdaderos incentivos que
permitirán al interno observar las normas de conducta en le acampo penitenciarios , tendientes
a lograr el acortamiento de la pena impuesta , mediante los mecanismos de la redención de la
pena por el trabajo y la educación para luego alcanzar la semi-libertad y la liberación condicional,
accediendo paulatinamente a la libertad , por ello es que los beneficios penitenciarios no se
pueden concebir como un derecho no como una gracia ;pues si así fuera en el primer caso ,
habría una exigencia al cumplirse los requisitos que le harían perder su concepción dentro del
tratamiento , pues el penado seguiría siendo uno más del establecimiento penal , en tanto no
alcance su libertad definitiva y en el segundo caso, porque noes un acto de condonación o perdón
como el indulto y la amnistía que ponen fin a la condena. Los beneficios penitenciarios requieren
de una evaluación particularizada pues no vez concedidas están sujetas a reglas de conducta
cuyo incumplimiento provoca la revocatoria que no opera en la gracia , de allí su diferencia y su
calificación como incentivos que permiten , a la administración penitenciaria , mejor control y
programación de las acciones de tratamiento al interno , manteniendo durante su permanencia
en el centro penal , nueva conducta y promoviendo actitudes positivas para convivir
adecuadamente en la comunidad social.
41
Son incentivos que permiten al interno descontar de la pena impuesta, una parte significativa de
la privación de la libertad o tener acceso a otros beneficios que consolidan el proceso de
reeducación, rehabilitación y reincorporación del penado a la sociedad.35
El Sistema progresivo, que es el que inspira el Derecho de Ejecución Penal Peruano (Art. IV del
título preliminar), consta de tres etapas: observación, tratamiento y prueba. Dentro de esta última,
encontramos el permiso de salida como un beneficio penitenciario que se concede al interno que
ha observado buena conducta y ha cumplido con los requisitos establecidos en el art. 43 del
Código de Ejecución Penal. El permiso autoriza la salida del interno con custodia permanente en
situaciones de emergencia en caso de enfermedad o muerte del pariente o como medio que
permita obtener el contrato de trabajo para los efectos de la semi-libertad o frente a la proximidad
de la liberación condicional.
a) Enfermedad grave debidamente comprobada con certificación médica oficial, o muerte del
cónyuge o concubino, padres, hijos o hermanos del interno. La enfermedad grave requiere
certificación médica oficial, no basta la de un médico particular o clínica, deberá ser corroborado
por el personal médico del Instituto Nacional Penitenciario o del Instituto Peruano de Seguridad
Social, del Ministerio de Salud o del Instituto de Medicina Legal.
b) Nacimiento de los hijos del interno. La razón de conceder el permiso, en este supuesto, es
perfectamente comprensible. La llegada al mundo de la prole requiere siempre de la presencia
de ambos progenitores.
35
Small Arana German, Los beneficios penitenciarios y su influencia en el tratamiento
penitenciario, Lima, Edit.BLG, 2001, pag.58-60
42
7.2.1.3 CASOS DE IMPROCEDENCIA DEL PERMISO DE SALIDA:
Es necesario destacar que la ampliación del plazo máximo del permiso por ocurrencia de 48 a
72 horas , que establece el Código de Ejecución Penal , constituye un avance y mejoramiento
del beneficio , toda vez que este tiempo está concebido para un solo acto como el de acudir , por
ejemplo . al sepelio del familiar mas cercano , o puede dividirse en varios tiempos que no excedan
de las 72 horas en el caso , por ejemplo , de salir con el beneficio para la búsqueda de trabajo
o documentación para el estudio , en los que se podría salir en varias oportunidades hasta
completar las 72 horas concedidas.36
Articulo 44º.-El interno redime la pena mediante el trabajo , a razón de un día de pena por dos
días de labor efectiva, bajo la dirección y control de la Administración Penitenciaria, salvo lo
dispuesto en el artículo 467º.
Articulo 45º.-El interno que recibe educación en sus diversas modalidades, bajo la dirección del
órgano técnico del Establecimiento Penitenciario, redime un día de pena por dos días d estudio,
siendo aprobar la evaluación periódica de los estudios que realiza , salvo lo dispuesto en el
artículo 46º.
36
Ibíd., p.63-105
43
Articulo 46º.-En los casos de los artículos 129º,200º, segunda parte, 325º a332º y 346º del.
Código Penal, el interno redime la pena mediante el trabajo o la educación a razón de un día de
pena por cinco días de labor efectiva o de estudio en su caso.
7.2.3 La semi-libertad:
El Sistema penitenciario progresivo , caracterizado por las etapas que concibe para lograr la
rehabilitación del interno , establecido en la fase de la prueba la semi-libertad ubicada entre la
reclusión y la liberación condicional , como mecanismo adecuado de comprobación de las
acciones realizadas en el establecimiento penal. En tanto que en estos beneficios la autoridad
penitenciaria sigue teniendo el control respecto el interno había cuenta que pertenece al centro
penal de donde ha egresado y sigue siendo uno más de la población penal.
37
Barreto Santamaría Cecilio, Manual teórico practico de derecho penal excarcelación: casos
prácticos, Edit.Temis, 1992, pag.46-47
44
Se puede revocar la semi-libertad, cuando el beneficiado comete un nuevo delito doloso o cuando
incumple las reglas de conducta impuestas, entre ellas:
-Prohibición de ausentarse del lugar donde reside sin autorización del juez.
-Repara los daños ocasionados por el delito, salo cuando demuestre que está en la imposibilidad
de hacerlo.
De conformidad con el actual Código de Ejecución Penal. El interno debe reunir lo siguientes
requisitos:
-No tener proceso pendiente con mandato de detencion: Siginifca que para acceder a la semi-
libertad del interino no debe contar con otro proceso penal en el que se haya dictado en su contra
mandato de detención.
-Haber cumplido un tercio de la pena o dos terceras partes: En la generalidad de los caso el
interno accede a este beneficio al cumplir el tercio de la pena impuesta, es decir, cuatro meses
por cada año salvo en los caso de los delitos contemplados en el Artículo 46 del Código de
Ejecución Penal que exige el cumplimiento de las dos terceras partes de la pena y el pago de la
reparación civil y de la multa en su totalidad para que proceda el beneficio de la semi-libertad.
-Contar con un informe favorable del Consejo técnico Penitenciario: El Consejo Técnico
Penitenciario esta integrado por especialistas que cumplen las actividades del tratamiento para
lograr la reeducación, rehabilitación y reincorporación del interno a la sociedad.
El estado con la política de sancionar drásticamente los actos de terrorismo, ha dictado leyes
que prohíben al interno comisor de esta clase de delitos acceder ala semi-libertad, siendo ellas
las siguientes:
45
Recientemente en el contexto de seguridad nacional, el Gobierno ha dictado por delegación
Decretos Legislativos como el 895 referido a terrorismo agravado, en el que se precisa que no
es procedente la semi-libertad.
Dentro de la misma línea de lucha contra la subversión, también se dicto la Ley Nº 25659
conocida como de Traición a la Patria que independientemente a su mayor penalización, impide
el acceso a cualquier forma de beneficio penitenciario entre ellos ala semi-libertad.
El crecimiento del índice criminal en lo que se refiere a delitos como la libertad personal , trajo
como consecuencia la dación de la Ley 26630 de junio de 1996, modificatoria del artículo 152
del Código Penal , que , independientemente , ala agravación de la pena a no menor d 20 ni
mayo de 25 , en los caso de los incisos 1 al decimo de este articulo , determino la cadena
perpetua cuando el agraviado resulte con graves daños en el cuerpo o en la salud física o mental
, o muere durante el secuestro o a consecuencia del dicho acto.
La ley 26630 modificatoria del artículo 189 del Código Penal establecía la improcedencia de la
semi-libertad en el delito de robo agravado.
Recientemente dentro del marco de las normas sobre Seguridad Nacional, se ha modificado
nuevamente el artículo 189 del Código Penal. , disponiéndose no solo una penalidad mayor que
va hasta la cadena perpetua, sino prohibiéndose la concesión de la semi-libertad.
Considerando que el Tráfico Ilícito de Drogas se concibe como un delito de lesa humanidad , por
afectar a la cuidad en su raíz misma sin tener en cuenta edad , ni condición económica,
entendemos la preocupación de los gobiernos por cerrar frentes de cooperación y apoyo que
han dado como resultado la formación de organismos de lucha contra este flagelo que
independientemente a ellos han provocado la firma de acuerdos binacionales y regionales como
mecanismo de cooperación y ayuda que impida la producción , comercialización y consumo de
droga.
La ley 26293 de fecha 11 de febrero de 1994 modifica diversos artículos del Código Penal,
concernientes a este tipo penal , desde el numeral 170 al 177 , agravando al penalidad en cada
46
casi particular , igualmente incluye modificatorias al capítulo IX del título cuarto del libro segundo
del Código Penal, mediante el articulo 173-A , que establece cadena perpetua `para este tipo
penal; asimismo , el articulo 178-A determina lo siguiente:”El condenado a pena de libertad
efectiva por los delitos comprendidos en este capítulo, previo examen médico o psicología que
determine su aplicación , será sometido a un tratamiento terapéutico a fin de facilita su
rehabilitación social.
El Decreto Legislativo 896 sobre Seguridad Nacional modifica el Código Penal en los artículos
173 y 173ª, refreídos a la práctica sexual y otro análogo con un menor de 14 años o cuando se
causa la muerte de la víctima o se le produce lesión grave que el agente pudo prever. No se
permite la semi-libertad como si se acepta en los demás tipos penales.
La liberación condicional se concibe como la última etapa del sistema progresivo penitenciario ,
ubicada en la fase de la prueba; se puede definir también como el ciclo de la probanza en le
medio libre de las acciones rehabilitadoras llevadas a cabo en el estableciente penal; por ello ,
se ha considerado en la doctrina como uno de los mejor medios de tratamiento en libertad , que
surge como una nueva concepción del sentido de la pena que busca la reinserción y
reincorporación del penado a la sociedad , en forma gradual , a fin de evitar el choque y , muchas
veces , frustración que produce la libertad definitiva , cuando la familia ni la comunidad están
preparadas para rescindir al egresado de prisión , crenado rechazo que . a la postre , puede
significar la vuelta a la actividad delictiva.
Loa liberación condicional, como su propio nombre indica, no es una libertad definitiva, sino una
pre-libertad otorgada al penado durante el cumplimiento del la condena, pues, el liberado
condicional sigue siendo un condenado hasta el cumplimiento total de la pena, pero su egreso
esta sujeto reglas de comportamiento.
De los diversos sistemas que se han practicado, el que proyecta al interno para la aplicación de
la liberación condicional, es el Sistema Progresivo, por las siguientes ventajas:
a) Prepara al hombre para el goce de la libertad en forma gradual, evitando el cambio brusco de
ambientes que se producen en otros regímenes penitenciarios.
C) Favorece la readaptación social del interno, enseñándole la manera d afrontar el peligro que
entraña el usar su propia libertad; por esta razón se ha dicho que la liberación condicional es un
ensayo de vida libre.
47
Constituye la liberación condicional uno de los mejores medios de resocialización del hombre
recluido y la forma a través de la que se puede efectivizar la comprobación de la conducta
observada en prisión y la que se observara en la comunidad libre.
El delito contra la libertad sexual se encuentra tipificado en el libro segundo, título IV, capitulo
IX, artículos del 170 al 178 del Código penal.
Asimismo, en el delito contra la libertad personal secuestro, Art. 152 de Código penal modificado
por el Decreto legislativo 897 se determina la improcedencia de la liberación condicional.
48
En los tipos penales de los artículos 188 y 189 referidos a robo y robo agravado , conforme al
Decreto legislativo 897, es improcedente la liberación condicional , manteniéndose en el caso de
robo agravado la misma prohibición contenida en la Ley 26630.
El Decreto legislativo 896 modifico también el Art. 108 del Código penal referido a homicidio
calificado y en la procedimental decreto legislativo 897 se determina la no concesión de la
liberación condicional.
Uno de los aspectos mas sombríos y complejos de la realidad carcelaria ha sido y es el problema
sexual en las cárceles, derivado de la continencia por meses y años que se ven obligados a
guardar las personas que ingresan a un centro penitenciario.
La sanción privativa de la libertad no implica la perdida de los derechos naturales que tiene el
hombre, dentro de los cuales está la práctica del acto sexual. Pues si la pena de privación e la
libertad conllevara la accesoria de la abstinencia sexual, estaría precisada en la sentencia, por
ello resulta, evidente que no se puede imponer como pena secundaria, esto sería injusto.
Las estadísticas, los archivos de los penales y los testimonios de quienes han sido internos de
un penal son la prueba acusatoria más contundente de la necesidad de propiciar la función
sexual normal en le preso. No es posible que la sociedad pretenda que el interno, que por razón
de su edad viril tiene las necesidades de su sexo, las domine , las reprima y acabe por anularlas
o pervertirlas.
La visita intima, además de cumplir la importante función de aliviarte las tensiones y la ansiedad
de los reclusos, tiene otros efectos colaterales benéficos como el mantener el vinculo matrimonial
que, sin ella, probablemente se hubieran deshecho.
El cumplimiento de una larga pena privativa de la libertad , sin posibilidad de contacto físico ,
acaba por resquebrajar las relaciones sentimentales tan necesaria para el ser humano .Nuestra
legislación otorga este beneficio a todos los internos sin distinción de situación jurídica ni
49
categoría delictiva , con la única exigencia de cumplir con los requisitos que establece el Código
de Ejecución Penal.
Es uno de los asuntos más discutidos y reñidos. Sin duda alguna que tiene mucha importancia
por la consecuencia que trae. La abstinencia sexual, a no ser en espíritus muy elevados, causa
trastornos físicos y psíquicos de gravedad. La homosexualidad es una de las consecuencias más
notorias y uno de los problemas mas graves de las cárceles.
En cuanto a las personas que pueden realizar esta visita, s cuenta a la esposa, a la concubina
y en, algunos casos, a prostitutas. Obviamente esto facilita el tráfico carnal de las prostitutas, es
decir, la venta de la mujer por el acto sexual. En otras palabras, el rufianismo. También, por esta
vía, se pueden introducir elementos para las fugas; pero esto último puede ocurrir con la visita
común, si no hay minuciosa revisión.
Este beneficio, evidentemente, se concede a los penados de buena conducta, los días domingos
.Los éxitos obtenidos son buenos, habiendo desaparecido la “degeneración sexual en el penal”.
Carlos Gallino Yanzi, profesor de Derecho Penal y Director del Instituto de Derecho Penal y
Criminología de Corrientes, dice que “no existen pervertidos sexuales si los presos llevan una
ordenada vida sexual”.
Con este procedimiento se ha querido evitar , además, la propagación del onanismo sistemático,
cuyas consecuencias degenerativas engendran problemas de salud moral y física aun mas
graves, como la inversión sexual, etc. ;sin embargo, puede concederse licencias periódicas que
permitirían la salida de los hombres a las casas de tolerancia o prostíbulos , previa autorización
de la autoridad penitenciaria. Ello es conveniente para evitar los vicios y anormalidades sexuales
que son tan frecuentes en lugares donde hay hacinamiento, como son las cárceles, internados
y otros establecimientos de esta naturaleza. Además sirve para el mantenimiento de la disciplina
y de las relaciones familiares.38
38
Small Arana German, Los beneficios penitenciarios y su influencia en el tratamiento penitenciario, Lima,
Edit.BLG, 2001, pag.60-182
50
8.1 Concepto de Tratamiento:
El termino tratamiento es muy genérico que engloba las diversas formas de influencia
para la resocialización del interno. No obstante, los especialistas en la materia no comparten la
misma definición. En este caso diremos que el tratamiento viene a ser “una acción o conjunto de
acciones dirigidas a modificar la conducta del recluso, teniendo en cuenta sus peculiares
características personales con la finalidad básica de su reincorporación a la sociedad y entra su
reincidencia.”39
Para nuestro C.E.P.”El tratamiento consiste en le conjunto de actividades que tienen como
objetivo la reducción, rehabilitación y reincorporación del interno de la sociedad”. (art. 61).
Al respecto también se han pronunciado diversos expertos, por ejemplo, JUAN ANATEL dice que
“es una manera de obrar con el delincuente, determina por la práctica criminal en hogar”.
Para MARC ANANCEL, hay tres conceptos de tratamiento: 1) concepción médica que no incluye
a internos sanos. 2) concepción administrativa: Con qué leyes ejecutivos se trataran a los
reclusos y 3) concepción socio-criminológica: Asistir al interno para cambiar su conducta,
MAPELLI señala que “por tratamiento entendemos un conjunto de actividades terapéuticos
asistenciales encaminadas directamente a evitar la reincidencia de los condenados.”
LUIS GARRIDO dice “podemos definir el Tratamiento Penitenciario como trabajo en equipo de
los especialistas, ejercido individualmente sobre el delincuente con el fin de anular o modificar
los factores negativos de su personalidad y dotarle de una función general idónea, para así
apartarle de una residencia y lograr su readaptación en la vida social.”
Hay que tener en cuenta la modificación de la conducta del interno, pues de no ser posible cambio
alguno en la conducta del interno, no tendría sentido la aplicación del tratamiento.
39
SOLÍS ESPINOZA, Alejandro, Ciencia Penitenciaria, Perú, 1990, 4ª Ed. pág. 333.
51
8.2 Tipos de Tratamiento:“Los diversos métodos de tratamiento se esquematizan de la
siguiente manera:
a) Educación Cultural
b) Educación Técnica o laboral
c) Pedagogía correctivo, etc.
a) Individual :
- Orientación dinámica
- Orientación conductiva
- Orientación cognitiva
b) Grupal :
- Orientación dinámica
- Orientación conductiva
- Orientación cognitiva, etc.
-
4.- Medicina Penitenciaria:
a) Tratamiento Farmacológico:
- Psicofármacos
- Otros
c) Tratamiento de Shock:
- Choque Eléctrico
- Choque insulínico
-
5.- Orientación Social:
- O. S. de reclusos en prisión
- O. S. de reclusos en libertad.”
Pero para llevar a cabo el tratamiento también obviamente, se necesita al mejor equipo de
profesionales. Actualmente el reglamento del C.E.P. vigente dice que en cada establecimiento
penitenciario existiría por lo menos un equipo técnico de tratamiento que estará conformado por:
a) Un asistente social
b) Un Psicólogo
c) Un abogado”
52
8.3 La cultura social como pauta resocializadora en el tratamiento penitenciario:
En primer lugar se debe tomar en cuenta que no existe contrariedad en la función que
cumple la sociedad y la conducta del individuo. Un error común en el tratamiento penirecarlo es
considerar que “el sujeto delincuente sufría influencias condicionantes de un medio social y que
este a su vez reintegraba a la sociedad todo lo que negativo implicaba su accionar al margen de
la ley y que precisamente por esa razón había que separarlo del entorno para así evitar que
cause a los demás.”
Esto se explica por que en realidad la sociedad y la conducta criminal no son antagónicas
sino que el delincuente se sirve de las circunstancias en las circunstancias en las que viven para
“alimentar” su experiencia (como ocurre en los delincuentes de “cuello y corbata”).En realidad, el
estado aparato legislativo tienden a cultivar en la mente de la población dicho antagonismo, pues
expresa las conductas socialmente aceptables aquellas que obedecen a la ley. “Es la ley la que
impone lo que imponerlo que debe o no hacerse, cuando se vulnera la dignidad de otro y empieza
el derecho ajeno; que ideas profesar y activarlas sin caer en el exceso de conducta ilicita, etc.”
Este punto es muy importante para comenzar el trabajo de tratamiento penitenciario: “ningún
sujeto delincuente puede llegar siquiera al umbral de sus posibilidades de resocialización sin una
cultura de admisión en la que insertase y participar”42
La tarea del trabajo previo, durante y post-penitenciario esta reservada a los monitores,
quienes se encargan de brindar la asesoria necesaria para cambiar la conducta al interior de los
establecimientos penitenciarios.44
41 TREJO ZULOAGA, Ciro, Derecho Penitenciario, Apuntes para una filosofía del tratamiento penitenciario, Ediciones Laborales,
Perú, 199-¿ , pág. 89.
42 Ibíd., p. 90
43Ibíd., p. 91
44Ibíd., p. 92
53
“Trabajar en función de la cultura como parte resocializadora en el ejercicio penitenciario es
asumir que el individuo delincuente que pertenece a un sector o grupo de sociedad cualquiera
sea el delito correcto implementada respuesta a los niveles de frustración de colectivo donde
se ponga evidencia los mecanismos propios en el entorno social del que proviene”8, es decir,
que el profesional en tratamiento penitenciario debe de ubicar al individuo dentro de las reglas y
parámetros establecidos( status quo) y de esa manera crean las condiciones de reinserción.
Los sujetos que delinquen son el resultado la fuerza modeladora del estrato social donde ejerce
su cotidianeidad.
Hay que tener en cuenta que también habrá sujetos que no logren completamente su
readaptación a la sociedad, solo algunos afortunados cuya nueva conducta reúna los meritos
necesarios y la empatía con al gente, podrá ser parte de la comunidad de nuevo de lo contrario
se crearan frustraciones y problemas de socialización, los cuales deberán ser resueltos en los
centros de tratamientos especializados para tal efecto, además se deben promover una
campaña de educación destinada a los mismos fines.
Hoy en día la ciencia penitenciaria y criminológica nos permite identificar los porqués del
delincuente porque ha sido sancionado y en virtud que ha sido conseguido su liberación a partir
de estos elementos se puede elaborar el camino hacia el reencuentro constituyente consigo
mismo pero no debemos olvidar la situación expresada en el medio circundante. “La restitución
debe lograrse por caminos que sean compatibles con las modalidades y parámetros
establecidos por el contorno social en convención tacita o expresa de convivencia de grupo.”45
Por otra parte, estudios sociológicos han comprobado, como es obvio, que los internos cuyo
tratamiento no contemplan una cultura de la aceptación, creando las condiciones necesarias
para ello, fracaso es comparación a los que si lo hicieran (familiares, amigos y medio
circundante).
45
TREJO ZULOAGA,C. Op. Cit., p. 95
54
Estos últimos en logrado insertarse en su medio “y esto fue posible debido a que en estos últimos
la resolución no tarda en concretarse pues ha sido educado en el sentido de no verlos como
perversos o vicioso, y has aprendido a aceptarlo sin recelo.”46
El readaptado entiende que la sociedad que así lo acepta es porque ha comprendido que el
delito está integrado en toda sociedad como una posibilidad permanente.
El tratamiento penitenciario ubicado en ese camino deberá cumplir con éxito su fin resocializador.
No se debe tratar al que cometió un crimen como un ser anormal o un psicópata, solo hay que
entender que esa conducta es una extensión de su normalidad existencial. “Su culpa; su sentido
de inadecuación; sus fallas, son consecuencia de la ignorancia que la tradición social le impone,
y pocos son los que pueden alcanzar una vida satisfactoria si no los sostienen las modalidades
de su sociedad.”47
El restablecido también debe promover la misma tarea que se hizo con él, es decir, hacer que
los demás no se desvíen del camino que exige el respeto de las convenciones sociales. Pero
cuando una cultura es un mundo en sí misma como la comunidad rural, el tratamiento se as
más sencillo pues es un pueblo aislado y relativamente aislable .No obstante, el trabajador
penitenciario siempre deben enfrentarse a modalidades culturales cambiantes, no se puede
basar el trabajo en una moral que nos fue enseñada, o en un criterio único, se debe amoldar a
la circunstancia.
El Instituto Nacional Penitenciario (INPE) como el organismo rector del Sistema Penitenciario
Nacional. Considerando que la administración penitenciaria es una función eminentemente
técnica y compleja, se establece que esta será dirigida por un órgano colegiado (Consejo
Nacional Penitenciario) integrado por tres especialistas en asuntos criminológicos y
penitenciarios cuyo presidente tendrá funciones ejecutivas. El consejo tendrá como una de sus
funciones principales elaborar la política de prevención del delito y tratamiento del delincuente
.Se ha diseñado una estructura orgánica funcional que permita cumplir cion los objetivos y fines
del proyecto, enumerándose los órganos que la componen cuya organización y funciones
estarán determinadas en el reglamento. Para la complementación del proyecto el Poder ejecutivo
deberá proveer en forma progresiva los recursos necesarios.48
El Instituto Nacional Penitenciario, INPE; fue creado por D. Leg. No. 330 del 06-03-85 Código de
Ejecución Penal y por D.S. No. 012 del 12-06-85 JUS Reglamento del Código que complemento
su estructura orgánica .Se establecía que estaba dirigido por el Congreso Nacional Penitenciario
integrado por 5 miembros: Un Presidente, un vicepresidente y tres especialistas en asuntos
criminológico y penitenciarios; quienes debían señalar los lineamientos de la Política Criminal del
Estado y dirigir, ejecutar y controlar el Sistema Penitenciario Nacional.
46
Ibíd., p. 99
47
TREJO ZULOAGA, C., Op. Cit., p. 100
48
Barreto Santamaría Cecilio, Manual teórico practico de derecho penal excarcelación: casos prácticos.,
Lima, Edit.Temis, 1992, pag.4348
55
La estructura orgánica del INPE, estaba integrado por:
La nueva estructura organiza, establece los 3 niveles señalados en el CEP y su reglamento, con
variaciones en los órganos que lo conforman y la creación de otros, con las funciones que se les
especifica.
-Órganos de dirección: El jefe del Instituto es el funcionario de mayor jerarquía, dirige y ejecuta
la política del INPE, ejerce su representación y es el titular del pliego presupuestal, de acuerdo
con sus dos directores: El Director Técnico Penitenciario que tiene a su cargo los aspectos
criminológicos y penitenciarios: y el Director Técnico Administrativo que tiene a su cargo todos
los aspectos administrativos.
49
Otarola Medina Lucia, Ejecución penal y libertad: Beneficios penitenciarios: Indultos, Lima,
Edit.Imprenta Valdivia, 1989, pag.33
56
de la seguridad en los Establecimientos Penitenciarios a nivel nacional , así como la construcción
, mantenimiento y equipamiento de dichos Establecimientos Penitenciarios.
Los objetivos generales que deben cumplir las Direcciones Regionales son: lograr niveles
óptimos de seguridad, salud, educación, trabajo, deporte y readaptación el interno.
50
Ibid.,pag.35-40
57
CONCLUSIONES
1.- Sobre el tratamiento penitenciario no debería entenderse este como una medida obligatoria
ni que cause miedo en el interno sino como una tarea responsable por parte de los monitores y
profesionales para hacer que el responsable del delito se reinserte en la sociedad, porque, tanto
ellos como nosotros merecemos una segunda oportunidad.
2.- La función de la pena es salvaguardar el orden en la sociedad pero este orden no se debería
dar por un temor interno que origina la sanción sino por una convicción propia de hacer lo que
es correcto.
5.- La mayoría de los penales peruanos y muchos latinoamericanos, hay una escasa cuota de
tratamiento, precaria infraestructura y sobrepoblación, esto es hacinamiento y promiscuidad,
alcohol, drogas, violencia, etc. Sin que ocurra una reducción de la delincuencia, lo que
prácticamente muestra la ineficacia en los sistemas penitenciarios
6.- En la cárcel el interno prosigue y perfecciona su carrera criminal a través del contacto y con
las relaciones con los otros delincuentes. La cárcel cambia ciertamente al delincuente,
generalmente lo hace para empeorarlo. No le enseña valores positivos sino negativos para la
vida libre en sociedad
58
RECOMENDACIONES
Se deben de respetar sobre toda política criminal, a los Derechos de los internos.
Se debe agilizar la Justicia Penal de nuestro país, pues es inconcebible que más de la
mitad de los reos no tengan condena.
Hay que dotar a la PDDH de cierta fuerza vinculante, para que así, las autoridades de
los centros penales piensen dos veces antes de violentar los derechos de los internos.
59
BIBLIOGRAFÍA DE LIBRO
11. TREJO ZULOAGA, Ciro. “Derecho Penitenciario, apuntes a una filosofía del tratamiento
penitenciario”. Ediciones Laborales, 199? Lima, 110 Págs.
BIBLIOGRAFIA DE TESIS
60
1. PEREZ POSTIGO, Herly. “La rehabilitación del interno por el trabajo y la educación en
los centros de reclusión del Perú”. Tesis para optar el grado de Doctor en Derecho y
Ciencias Políticas. Perú, 1972.
2. SIMON MENESES, Ingrid. “El control jurisdiccional del sistema penitenciario peruano
como garantía de los derechos fundamentales del interno.” Tesis para optar el grado
académico de Abogado. Asesorado por el doctor Germán Small Arana. Lima, 2006.
3. LAHURA, Mariano. “Derecho Penitenciario”. Tesis para optar el grado de
bachiller en derecho. Lima, Perú.1939.
4. BELLIDO R., Julio.“Regeneración de penados en las cárceles de Perú”. Lima, Perú.
1938. 186 pág.
BIBLIOGRAFÍA DE REVISTAS
1. VADILLO VILA, José. “Informan sobre la situación de los reclusos extranjeros”. En:
El Peruano (Sección Derecho), viernes 16 de mayo del 2008, p. t. Lima, 2008. pág.
10
BIBLIOGRAFIA ELECTRONICA
61
posadasegura.org/cursos-actuales/derecho-penitenciario
www.derecho.usmp.edu.pe/.../ai_derecho_penitenciario.htm
www.ciberjure.com.pe › Blog
62
ANEXOS
NOTICIAS:
Solo dos días después cuatro narcotraficantes se escaparon del penal de Abancay luego de que
dos hombres ingresaron con armas y los ayudaron a salir del presidio. La reacción de las
autoridades fue la misma: destituir al director del penal.
Esta mañana, tres delincuentes le dispararon en el rostro al director del penal Miguel Castro
Castro, Manuel Vásquez Coronado, en el frontis de su vivienda de El Agustino. Pese a que el
penal Castro Castro alberga a los más peligrosos delincuentes del país, el jefe del Instituto
Nacional Penitenciario, Rubén Rodríguez Rabanal, confirmó que Vásquez no contaba con
resguardo policial.
Mientras las muertes, motines y fugas se producen en los diversos penales del país, el ministro
de Justicia, Aurelio Pastor, insiste en promover la entrada en vigencia de grilletes electrónicos
para liberar presos de menor peligrosidad.
63
¿CUANTO DINERO PUEDE TENER UN INTERNO EN UNA PRISION PERUANA?
Jaris Mujica
(Publicado originalmente en Revista DedoMedio.
Año 3, número 31 (mayo de 2010). pp. 30-34
S/. 180.00 es lo que se le puede entregar a un interno en cada visita semanal, según el
reglamento de visitas del Instituto Nacional Penitenciario (se está autorizado el ingreso de
“moneda nacional hasta un 30% del Sueldo Mínimo Vital”). Es decir, el sistema penitenciario
señala “oficialmente”, de manera “legal”, “formalmente”, que los internos pueden tener dinero
consigo. Haciendo un cálculo simple, S/. 180.00 a la semana hacen alrededor de S/. 640.00 en
un mes, aunque circula la norma informal que los internos no pueden tener más de S/. 300.00
consigo. Esto muestra que hay un considerable flujo de dinero que entra de manera regular y
permitida a los penales de nuestro país, y que este circula evidentemente en su interior. La
pregunta evidente es ¿cuál es la función del dinero que ingresa oficialmente a los penales? y
¿cuáles son las consecuencias de que esto suceda?
1. Dentro de las cárceles del Perú existen múltiples negocios permitidos por el propio sistema
penitenciario: venta de comida y de bebidas, venta de enseres de limpieza y utensilios de uso
cotidiano, venta de productos para cocinar, de ropa, frazadas y cobertores, venta de tarjetas para
el teléfono público del penal, etcétera. Sin embargo, existen también múltiples negocios que no
son permitidos formalmente, pero que son tolerados por las autoridades del sistema: venta de
bebidas alcohólicas de diversas calidades, desde destilados caseros o macerados, hasta
cerveza y ron (muchas veces a sobreprecios, por ejemplo, una lata de cerveza puede costar
entre S/. 8.00 y S/. 15.00), venta de chips o equipos de telefonía móvil, armas punzo cortantes,
drogas de diverso tipo, combustible (que en muchos casos se utiliza para cocinar), etcétera. Los
precios de los productos son variados, pero considerablemente más caros que fuera del penal,
debido al sobreprecio que implica conseguir estos productos y al trabajo que implica introducirlos
en la prisión.
2. Porqué hay negocios permitidos dentro del penal. Pues se supone que algunos de estos tienen
que ver con la resocialización, y generar un trabajo y mantenerlo se muestra como un “indicador”
de logro y alejamiento de la delincuencia. Esto, que no es del todo falso, muestra también un
lado perverso, pues es evidente que un negocio de dispensa de alimentos en una prisión y la
compra-venta de alimentos significa que no todos son correctamente alimentados. ¿Qué sucede
con el presupuesto para los alimentos? ¿Quién controla la correcta ejecución de este servicio
que tiene un presupuesto asignado por el Estado? Pues es evidente que las raciones no son
suficientes y que no son de la mejor calidad. El problema reside en que el sistema penitenciario
reconoce formalmente que los internos pueden tener dinero para alimentarse dentro del penal y
que el presupuesto no es utilizado adecuadamente.
3. Pero es obvio que el dinero que ingresa cada semana tiene una dirección que excede a la
compra de alimentos, útiles de limpieza o tarjetas de teléfono para llamar a familiares. En efecto,
el dinero permitido alimenta una lógica cotidiana de pequeños actos de corrupción. Esto va desde
la compra o alquiler de espacios para dormir, el pago de montos pequeños (S/. 1.00 ó S/. 2.00)
para trasladarse de una pabellón a otro, o para regresar al pabellón que corresponde, pagos para
mantener consigo telefonía móvil, televisores, radios, para poder cocinar en el penal, pagos para
poder beber alcohol sin sanción. Al mismo tiempo, este dinero alimenta también una maquinaria
compleja y amplia de pagos para atención médica, tramitación de expedientes, pagos de
abogados, pagos para tener vistos de asistencia en las escasas sesiones psicológicas (aunque
no hayan asistido), pagos a trabajadoras sexuales y otras tantas funciones que son ampliamente
conocidas por los internos, por los servidores penitenciarios y las visitas. A este sistema de micro-
corrupción y de cobros pequeños pero constantes, se le conoce como mangueo.
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4. Evidentemente no todos los internos tienen dinero. Algunos tienen mejores posibilidades
económicas que otros, y sus familiares o sus negocios permiten que estén constantemente
abastecidos para poder soportar las economías penitenciarias. Hay brechas dentro de los
penales y es evidente que hay internos con más dinero, más recursos y mejores condiciones,
pueden acceder a mejores servicios, tener estancias más cómodas y mejor alimentación. Otros
en cambio, duermen en espacios hacinados o en corredores, patios o sobre la tierra (y esto no
es una exageración). Solo en el Penal de Lurigancho, con capacidad para 1800 internos, y que
alberga a casi 10mil, se muestra las condiciones de un sistema sobrepoblado, precario, inseguro
y con alta incidencia de actos de corrupción. Aquí la función del dinero resulta una garantía de
acceso a servicios y de comodidades que si no serían imposibles (como lo son para la mayor
parte de los internos pobres).
5. Pero, además de eso, en muchos casos, el dinero que ingresa al penal para cada interno,
puede ser mayor al propio salario de un servidor penitenciario. De manera que los S/. 180.00 que
se le pueden entregar a un interno hace, en la suma mensual, más que los S/. 550.00 que un
servidor gana como salario (los sueldos en el INPE oscilan normalmente entre los S/. 550.00 y
S/. 1200.00). ¿puede haber internos con más dinero en efectivo que un servidor que los vigila?
Pues sí, y eso resulta un problema, pues no solamente permite lubricar el entramado del
mecanismo de corrupción, genera un modo de poder sobre los propios servidores. Generan una
lógica de oferta amplia, internos que son mucho más en volumen, que tienen más contactos y
mejores servicios y que además tienen más dinero consigo que sus propios custodios. Es
evidente que en muchos penales, el sistema funciona porque los internos lo permiten, no
necesariamente porque el INPE tenga el control.
7. Aún así, somos uno de los pocos países del mundo, en donde los internos pueden tener dinero
de manera formal y permitida por el sistema, que en esta lógica reconoce la existencia de
corrupción, de negocios formales e informales, de la compra constante de servicios y objetos
prohibidos y de una mecánica perversa que es sostenida por el dinero que permite ingresar. S/.
180.00 a la semana por 40 mil internos, abren legalmente la puerta a la posibilidad de que más
de 7 millones de soles ingresen cada semana a nuestros penales.
Cárcel de Yanamayo
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URGENTE : GRAVE SITUACION EN LA CARCEL DE YANAMAYO.
El Estado peruano continúa impunemente violando los derechos humanos sin que la "Comunidad
Internacional", la Organización de Estados Americanos, etc., hagan el intento de parar a este
régimen "violador de todos los derechos de un pueblo", según denunciaron el Instituto France
Liberte y otras organizaciones humanitarias en sus intervenciones en la Comisión de Derechos
Humanos de la ONU. El gobierno de Fujimori, continuando con su política de exterminio de
presos políticos, ha ordenado el traslado de otros tupacamaristas del penal de alta seguridad
Castro Castro hacia la de Yanamayo, ubicado a 3800m. sobre el nivel del mar.
El traslado de presos es una nueva sanción que constituye un ensañamiento contra los presos
políticos y sus familiares, quienes debido a la crisis económica que vive el país, no tienen las
posibilidades de dinero para los pasajes y de un viaje que requiere un tiempo mínimo de 3 días
para ver a sus seres queridos, y esto sólo una hora al mes.
Los presos políticos que se encuentran desde hace varios años en Yanamayo, han visto
deteriorarse su salud día a día, todos se encuentran afectados por enfermedades
broncorrespiratorias, debido a las bajas temperaturas (5º en el día y menos 10º en las noches),
en celdas que carecen de calefacción y cuyas puertas y ventanas solo tienen barrotes de hierro,
en las cuales permanecen cerrados 23 horas al día; la mayoría de éstas enfermedades
broncorrespiratorias degeneran en tuberculosis, debido a la mala alimentación y la carencia de
atención médica, que es responsabilidad de las autoridades penitenciarias y del gobierno. Las
organizaciones humanitarias que conocen éstos casos, saben la gravedad del problema y de la
situación de los presos y presas políticas de este tenebroso penal.
El objetivo del traslado, según fuentes del servicio de inteligencia nacional, tiene la intención de
provocar por medio del hacinamiento la protesta de los presos políticos y usando el pretexto de
motín, el ejercito y la policía volverá perpetrar otra masacre, como sucediera en 1984, 1986 y
1992.
La mayoría de los presos sociales en el Perú no son personas que nacieron para ser
delincuentes, ha sido la aplicación irracional de un modelo que no le interesa la vida humana el
que lleva a las personas más necesitadas a estos extremos. Un modelo que no sólo no genera
empleos, sino que a desempleado al 75% de nuestra población económicamente activa, ha
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obtenido como resultado el aumento de la delincuencia en nuestro país. Sin embargo, el gobierno
que ha desarrollado esta política no quiere hacerse cargo de la rehabilitación de las personas
que delinquieron para sobrevivir. El gobierno peruano está optando por el camino más fácil y,
como en otros países, se exterminan niños de la calle, en Perú se está exterminando a los presos
sociales a vista de todo el mundo civilizado, sin que nadie diga nada por quienes a pesar de todo
son seres humanos.
De igual forma sería importante que las organizaciones defensoras de los Derechos Humanos
se constituyan en este lugar para comprobar in situ lo difícil que resulta respirar y vivir a 3800 m.
s.n.m., y de esta manera tomen conciencia real de la amenaza de muerte que pende sobre estos
seres humanos.
A los medios de prensa, sumarse a la campaña en defensa de la vida de los presos políticos,
haciendo saber que estos traslados tienen un sólo objetivo: la eliminación de los presos políticos.
Protestamos también por la ejecución extrajudicial a la que son sometidos los presos sociales
que fueron trasladados hace más de un mes a Challapalca, a 5120 m. Las protestas y dramáticos
testimonios de los familiares, que aseguran que ellos se encuentran botando sangre por la boca,
exigen una acción urgente, práctica y real.
En la medida en que los familiares sólo reciban el apoyo de algunos organismos de Derechos
Humanos y en la medida en que la "Comunidad Internacional" no se pronuncie sobre esta
violación de los Derechos Humanos, el Gobierno del dictador Fujimori continuará con la política
de exterminio de los presos políticos.
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El Estado peruano mantiene en prisión aún a cientos de prisioneros políticos, que ya llevan entre
18 y 22 años de carcelería ininterrumpida y tienen condenas de 25, 30, 35 años, hasta cadena
perpetua sin beneficio alguno; y con un promedio de edad que fluctúa entre los 35 y 78 años.
De todo este tiempo de prisión, por más de 8 años 5,000 prisioneros políticos fueron sometidos
a un régimen carcelario de aislamiento y aniquilamiento sistemático y sofisticado en las cárceles
de máxima seguridad, siendo la más dura la Base Naval del Callao. Que hasta hoy este
ignominioso régimen se sigue aplicando en este penal militar.
Alos prisioneros políticos se les ha aplicado leyes de excepción. Fueron juzgados por
Tribunales Militares y jueces sin rostro, juicios ilegales que con la lucha de los prisioneros,
familiares, fueron anulados, juzgándosenos nuevamente en tribunales civiles pero también
con leyes de excepción. Y a pesar de que la esencia de la inconstitucional legislación
antiterrorista se mantiene, una parte logró salir en libertad: algunos, luego de más de 10 años
en esta dura carcelería, fueron declarados inocentes; otros cumplieron sus penas; y otra parte
logró su libertad con los muy restringidos beneficios penitenciarios (redención de pena de 7x1
y liberación condicional con ¾ partes de la pena) que, después de 16 años se les restituyeron,
en aras de compaginarse con los convenios internacionales suscritos por el Estado peruano.
El derecho de todo preso a alcanzar su libertad antes de cumplir su condena por medio del
estímulo de los beneficios penitenciarios, es parte de las libertades democráticas que todo
Estado democrático otorga.
________
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Establecimiento
Nroº Departamento Director Teléfono Dirección
Penitencial
Direccion Regional Lima
1 Chincha N/a N/a -
2 E.P. Chiquián -
Robles Blanca,
3 Ancash Procesados Chimbote N/a N/a Cambio De Puente - Chimbote
Sonia
Cupe Espinoza,
4 Ancash Sentenciados De Huaraz 043424971 Av. Bolognesi Cas. - Pampas
Migue
5 Callao Callao Cabanillas Noriega, Centenario A.h. Sarita Colonia - Bellavista
6 Callao E.Transitorio Procesados Callao AlbitresSuparo, Dia Av. 2 De Mayo N° S/n N/a - Bellavista
7 Ica Sentenciados De Ica Mateo Suyo, Jorge 056214056 N/a Cas. Cachiche - Ica
Car. Panamericana Norte N° S/n N/a
8 Lima Ancon Castillo Guerra, Jua 5502481
Piedras Gordas - Ancon
Av. Defensores Del Morro N° 1046 Z.i. -
9 Lima Anexo De Mujeres Chorrillos Estrada Tarrillo, Gl 2513541
Chorrillos
10 Lima Aucallama Huaral Burga Trujillo, Migu 928003 N/a Cas. Aucallama - Aucallama
Melendrez Paulo, N/a Ex-Fundo Barbadillo N° S/n N/a - Ate
11 Lima Barbadillo 2852498
Tom Vitarte
Fernandez Morales,
12 Lima Cañete N/a Cantera Alta N/a - Nuevo Imperial
J
13 Lima E.P. Castro Castro SamamePeÑa, Alex 3887115 Av. Santa Rosa N° S/n A.h. - Lurigancho
E.Transitorio Procesados Cono Rivera Torres,
14 Lima 5223449 Av. Izaguirre N° 176 N/a - Independencia
Norte Maria
15 Lima E.Transitorio Procesados Lima Aldave Valerio, Davi 4284775 Jr. Aljovin N° S/n N/a - Cercado De Lima
Cardenas De Av. El Sol N° S/n A.h. - San Juan De
16 Lima Eprco Lurigancho 3875409
Prada, Y Lurigancho
Av. Nicolas De Pierola N/a Cercado De
17 Lima Lima Portilla Quispe, Jul 4274100
Lima - Lima
Rojas Medina, Av. Defensores Del Morro N° 1046 Z.i. -
18 Lima Mujeres De Chorrillos 2515407
Maria Chorrillos
Silva Palacios, N/a Caleta De CarquinA.h. Carquin -
19 Lima Procesados Carquin Huacho 2323121
Manu Huacho
Anaya Solo, Dante
20 Lima Procesados De Yauyos Jr. Trujillo N° 189 N/a - Yauyos
En
JaenMurrugarra, N/a Ex-Cuartel Tarapaca N° S/n Urb. San
21 Lima Virgen De Fátima 2584298
Mar Juan - Chorrillos
_________________________
Fuente INPE
Para facilitar la exposición de los resultados se clasificaron 116 países en seis regiones de
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acuerdo con la división regional que utiliza el Fondo Monetario Internacional: África, América
Latina, Asia, países desarrollados, Medio Oriente y países en transición; incluyendo las
denuncias por robo o asalto, robo a propiedad, daño a propiedad ajena, homicidio, violación,
secuestro y tráfico de drogas.
Por lo que respecta a la región de América Latina, esta ocupó el tercer lugar en el crecimiento
de la criminalidad, antecedida por los países en transición, reportándose un crecimiento de
88 y 192 por ciento, respectivamente, durante el periodo.
En contraste, la región que registró el menor crecimiento de criminalidad, de acuerdo con los
datos de la encuesta, fue la de los países desarrollados, la cual presentó un incremento de
sólo 14 por ciento en el periodo, lo que equivale a un crecimiento promedio anual ligeramente
menor a uno por ciento.
Sin embargo, si uno observa la tasa de criminalidad, los países desarrollados tienen el mayor
número de denuncias, seguidos por Latinoamérica. Así, puede decirse que los países
desarrollados tienen un nivel alto de criminalidad, pero no está aumentando
significativamente; mientras que en lo que respecta a la región de Latinoamérica, el problema
de criminalidad es relativamente alto y se está acentuando a un ritmo importante.
Las tasas de criminalidad por robo y homicidio reflejan no sólo el importante aumento de la
delincuencia, sino también el de la violencia en el ámbito mundial desde principios de la
década de los ochenta. Mientras que el robo se incrementó en 59 por ciento, el homicidio
intencional aumentó en 87.5 por ciento de 1975 a 1994.
Por periodos resalta que, a pesar de un ligero retroceso en las tasas de homicidio de 1980
a 1984, en los siguientes años ese delito creció en 60 por ciento. Por su parte, el robo
presentó un nivel similar durante los ochenta para dar lugar a un crecimiento de 26 por ciento
en los primeros años de los noventa. Esto indica que el uso de la violencia se incrementó en
2.3 veces más que la tasa de delitos por robo durante la primera mitad de los noventa.
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Con base en lo expuesto, se puede deducir que el fuerte crecimiento de la criminalidad en el
ámbito mundial es consecuencia del importante crecimiento en tres regiones principalmente:
América Latina, Medio Oriente y los países en desarrollo. Sin duda, el problema de la
inseguridad pública constituirá uno de los retos más importantes por resolver durante este
siglo en un gran número de países.
Publicado por FERBLOG
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“SISTEMA DE EJECUCIÒN PENAL EN EL PERÚ”
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ÍNDICE
DEDICATORIA
INTRODUCCION
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5.3 La Ciencia Penitenciaria y su influencia sobre el tratamiento de los delincuentes, la
defensa social y el servicio social
5.4 Los derechos fundamentales del interno en el Sistema Penitenciario peruano
CONCLUSIONES
RECOMENDACIONES
BIBLIOGRAFIA
INDICE
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