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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN AGUSTÍN

FACULTAD DE DERECHO

DERECHO PROCESAL PENAL

DOCENTE:

FELIX GUTIÉRREZ SONCCO

PERTENECE:
MARCOS IQUIAPAZA HUAMAN
YLUSION MORA SALAZAR
HECTOR MENDOZA TORRES
FANNY ROMERO CHULLUNQUIA
YENNY MURILLO PFOCORI

AREQUIPA- PERÚ

2019
LA ACCION PENAL

1. ANTECEDENTES, CONCEPTO Y NATURALEZA JURÍDICA


Los orígenes de la acción penal se remontan a los tiempos en que el Estado
se hizo acreedor del monopolio del uso de la fuerza al inaugurar la acción
penal, con la finalidad de asegurar el orden y la paz social, ésta reemplazó a
la venganza personal y a la autodefensa; por lo tanto, la acción penal supone
un ejercicio de poder por parte del Estado y un derecho a la tutela para los
ciudadanos que sufren las consecuencias de un delito cometido contra su
persona.
En un sentido filosófico, la acción penal es una de las formas que tiene el
Estado para reestablecer la paz social que fue alterada por la comisión de un
delito. La promoción de una acción penal puede ser ejercida tanto por el
poder estatal como por particulares.

1.1. Concepto

La acción es una categoría pura y única desde el punto de vista de la


teoría general del proceso, que se encuentra íntimamente relacionada
a la Jurisdicción, ello en la medida que ambos forman parte del servicio
de justicia que presta el Estado. La acción es presupuesto necesario
de la jurisdicción, ya que la función jurisdiccional permanece inmóvil
mientras no reciba un estímulo externo que la ponga en movimiento,
es decir, la acción penal es el punto de partida del proceso judicial.

El concepto de la acción penal ha sido objeto de diversas


interpretaciones desde que apareció en el derecho romano con el
nombre de “actio”, hasta nuestros días, en que, como resultado de la
evolución en la doctrina procesal se han formulado diversas
proposiciones.

Peña Cabrera Freyre, indica que la acción penal es el poder- deber


que detenta el Estado en base a una propiedad inherente a su propia
soberanía, poder que se ejercita a través de las agencias estatales
competentes y que pone en funcionamiento todo el aparato
persecutorio del Estado, a fin de promover la acción de la justicia y que
finalmente recaiga una sanción sobre aquel que cometió un hecho
constitutivo de un delito.

Ugo Rocco, señala que el derecho de acción es un derecho subjetivo


individual, frente al Estado, de pretender su intervención y la
prestación de la actividad jurisdiccional para la declaración de certeza
de los intereses tutelados en abstracto por el derecho objetivo.

Para Carnelutti, la acción es un derecho público y abstracto que tiene


por objeto una prestación. Es un derecho autónomo, en cuanto que el
interés que el mismo protege no es el interés sustancial deducido en
la litis, sino que es el interés a la justa compensación de la litis. Si el
interés tutelado con la acción es un interés esencialmente público, la
acción debe concebirse como un ejercicio privado de una función
pública.

Nuestra constitución la consagra en su Art. 139º. 3, como un derecho


de carácter procesal “el derecho a la tutela jurisdiccional”. Asimismo,
desde otra perspectiva, el Art. 159º, en sus Inc. 1 y 5 de la
Constitución, atribuye al Ministerio Público como misión sustancial la
promoción de oficio o a petición de parte de la acción de la justicia en
defensa de la legalidad y de los intereses públicos tutelados por el
derecho; y como encargo específico, en materia penal, la persecución
penal, el ejercicio de la acción penal de oficio o a petición de parte.
En cuanto a las leyes infraconstitucionales, el Código de
Procedimientos Penales, al igual que el Código Procesal Penal de
2004, señalan: Primero, que la acción penal es pública o privada;
segundo, que la acción pública se ejercita por el Ministerio Publico de
oficio o a instancia de la parte agraviada, o por acción popular en los
casos autorizados por la ley; y tercero, que la acción privada se ejercita
directamente por el ofendido, conforme al procedimiento especial por
querella.

En consecuencia, la acción es el derecho público y subjetivo del


accionante a exigir, al órgano jurisdiccional, la emisión de una
resolución motivada y congruente que se pronuncie sobre la
procedencia o no de su solicitud para iniciar el proceso.

La acción penal importa el análisis de dos perspectivas:

 Como derecho a iniciar un proceso, sea por la autoridad


pública encargada de tal función: El Ministerio Público, quien
ejerce la acción público, o ya sea por el agraviado en los
delitos de ejercicio privado, respectivamente.
 Como derecho a la acusación y a juicio que culmina con la
resolución definitiva del juez, materializándose el derecho a la
tutela jurisdiccional.

Aunque la acción como concepto de la teoría general del proceso es


unitario, en el proceso penal adquiere características especiales, dado
que su origen radica en la configuración de un probable hecho
delictivo. En el proceso penal, el ejercicio de la acción permite que el
Estado, en uso de su ius imperium, pueda resolver el conflicto que
surge por la comisión de un ilícito penal.

La acción penal es la potestad jurídica de promover la decisión del


órgano jurisdiccional respecto a una determinada relación de derecho
penal. El ejercicio de la acción penal domina y da carácter a todo el
proceso: lo inicia y lo hace avanzar a su meta (la resolución del
conflicto generado por el delito). El proceso, sin el ejercicio legítimo de
la acción penal, no puede surgir ni continuar.

La acción penal es ejercida, en los delitos públicos, a través denuncia


formalizada o de la disposición de formalización y continuación de la
investigación preparatoria, por parte del Ministerio Publico. En los
delitos de acción privada, se ejerce a través de la querella interpuesta
por el agraviado.

A diferencia del proceso civil, el ejercicio de la acción en el proceso


penal no pretende una resolución sobre el fondo del asunto, ni mucho
menos una resolución de contenido concreto; sino que, ante la
existencia de determinados indicios racionales de criminalidad, se
configura un ius ut procedatur, es decir, un derecho de acceso al
proceso que se satisface con la práctica de aquellas diligencias
encaminadas a la averiguación del hecho y a la identificación del
sujeto activo del delito.

En el proceso penal, la acción no puede concebirse como un derecho


a que se dicte una sentencia condenatoria o una pena determinada ni
como un derecho a que se realice todo el proceso y a que se dicte en
él una sentencia de fondo; pues, el derecho de acción puede darse por
satisfecho, si solo se expide una resolución motivada que deniegue la
incoación del procedimiento preliminar o instrucción por considerar,
por ejemplo, que el hecho afirmado no es constitutivo de delito.

Por otro lado, la acción penal no solo se manifiesta con el inicio de la


investigación judicial, sino que estará presente a lo largo de todo el
proceso, en sus distintas etapas, pudiendo alcanzar hasta tres
momentos.
A. Momento Persecutorio, conformado por las actuaciones del
órgano encargad de ejercer la acción penal.

B. Momento Acusatorio, es el perfeccionamiento del ejercicio


de la acción que se manifiesta con la acusación.

C. Momento Punitivo, el cual constituye la culminación del


conjunto de actos procesales que ha generado el ejercicio de
la acción penal.

1.2. Naturaleza Jurídica

El Ministerio Publico, ejerciendo el monopolio de la potestad


persecutora y en cumplimiento de un deber constitucional (Art. 159.5),
tiene el poder de poner en marcha la actividad jurisdiccional del
Estado, a fin de obtener una resolución motivada en un caso
determinado; debido a ello, la acción penal es considerada como la
potestad jurídica de instar la actividad jurisdiccional.

Este concepto de acción penal está vinculado con la naturaleza


pública y obligatoria de la persecución de los delitos. Ello hace que la
acción penal, en la gran mayoría de casos, tenga también un carácter
imperativo.

Cierto es que existen delitos cuya persecución queda a decisión de la


persona agraviada por el hecho delictivo. Sin embargo, estos casos se
consideran como excepcionales, pues la mayor parte de delitos
previstos en el Código Penal son perseguibles de oficio por parte del
Ministerio Publico. Ello le otorga a la acción penal un carácter
imperativo u obligatorio, cuando la ley así lo prevea.
2. CARACTERÍSTICAS DE LA ACCION PENAL

a) Publica, pues es una manifestación del ius imperium del Estado.

b) Oficial, pues su ejercicio está asignado a un órgano oficial, con excepción


de aquellos delitos perseguibles por acción privada

c) Obligatoria, la cual se expresa en dos sentidos. El primero hace


referencia a la promoción de la acción penal: por mandato de la ley el
funcionario que toma conocimiento de la perpetración de un hecho delictivo,
está obligado a promover la acción penal. El segundo sentido, alude a la
sujeción de los sujetos procesales a los efectos producidos por el ejercicio
de la acción penal.

Ello debe entenderse como la obligación de los órganos de persecución


penal, de promover y mantener el ejercicio de la acción penal, ante la noticia
de un hecho punible, siempre que así lo determine la ley en caso en concreto.

d) Irrevocable, Una vez ejercida la acción penal, esta no puede ser objeto
de revocación, suspensión, modificación o supresión; salvo que la ley lo
permita expresamente; es el caso, por ejemplo, del principio de oportunidad,
que luego de iniciado el proceso penal, permite al Ministerio Publico, en los
supuestos determinados en la ley y previo control jurisdiccional, retirar la
acción penal ejercida.

e) Indivisible, pues la acción penal es única, ya que constituye una unidad


que no se puede desagregar. En virtud a ello, la realización de un hecho
punible no genera distintas acciones para perseguir independientemente
cada una de las conductas o cada uno de los agentes que hayan participado
en el evento criminal

f) Indisponible, pues el ejercicio de la acción penal no puede cederse ni


delegarse a persona distinta de la legitimada para ello.
CARACTERISTICAS DE LA ACCION PENAL PRIVADA

Iniciativa de parte: Los actos procesales se practican a solicitud o


requerimiento del ofendido. No existiendo mecanismos de control al
respecto, dejando a la victima de manera autónoma la potestad de decidir al
respecto.

Disponibilidad: Significa que el ofendido puede renunciar o desistirse de la


acción penal. El accionante tiene disponibilidad sobre la acción, no sobre el
derecho de castigar, aun cuando la disponibilidad sobre la acción puede
llevar a la no punición. No obstante, si el legislador plasma un delito de
ejercicio privado de la acción opta conscientemente por la posibilidad de no
sancionar, pues la puesta en marcha del aparato judicial queda a criterio e
iniciativa del ofendido.

DIFERENCIA ENTRE ACCION PENAL Y PRETENSION PENAL

Vásquez Rossi, llama a la pretensión punitiva solicitud de pronunciamiento


condenatorio sobre un sujeto a quien se entiende como autor de un hecho
delictivo. Aparece como un contenido posible de la acción, procesalmente
concretado en la acusación y derivado del derecho sustantivo.

Es decir que, por el ejercicio de ésta se busca la realización de la pretensión.


No deben confundirse, dice este autor, las nociones de acción y pretensión
punitiva, ya que de incurrirse en ese error no podría comprenderse cómo la
legislación procesal contempla la expresa posibilidad de que el titular de la
acción o Ministerio Público pueda solicitar al órgano jurisdiccional el
sobreseimiento del imputado. La pretensión punitiva es sólo un contenido
posible de la acción, la que debe definirse únicamente por su esencial
carácter requirente de actividad y pronunciamiento jurisdiccional en torno a
un hecho previsto por la legislación penal.
En ese sentido dice Manzini que la acción penal tiene siempre por objeto una
pretensión punitiva derivada de un delito, concreta o hipotéticamente
realizable. De esa cuenta, el juez, ya fuere reconociendo o desconociendo el
fundamento de la legitimidad de la pretensión, pronuncia una decisión que
agota completamente todo lo que a la realizabilidad de esa pretensión se
refiere, cuando existan las condiciones de procedibilidad.

3. TIPOS DE ACCIÓN PENAL (En los delitos de persecución PÚBLICA)

Acción Pública
La conducta criminal realizada por el autor o participe genera ámbitos
sociales insoportables para la comunidad, sus efectos nocivos desestabilizan
el orden social que debe imperar en una comunidad de gentes. En tal
sentido, la persecución y sanción del delito, no es sólo un interés de la
víctima, sino de toda la sociedad en su conjunto. Surge así el interés público
en la persecución del delito1
El Estado es el titular de la acción pública porque la afección
de bienes jurídicos está dirigida contra el interés público o el
interés personal pero por la naturaleza de la afectación jurídica el Estado
debe intervenir a fin de protegerla; ejerciendo de oficio a través de un
representante, para esto se le atribuye al Ministerio Público, amparado en la
Constitución y normas legales vigentes. Ejemplo: La persona que conduce
en estado de ebriedad, ese hecho atenta contra la sociedad, el fiscal de oficio
con el apoyo de la policía está obligado a promover la acción penal. En otras
palabras hace referencia a lo que concierne al ministerio público, sin perjuicio
de la participación de la víctima.

Presenta las siguientes características:

1
PEÑA CABRERA FREYRE Alfonso Raúl. Exegesis Nuevo Código Procesal Penal, ibid. p. 468.
La acción penal es publica: Es publica porque surge del ejercicio de una
atribución conferida al Ministerio Público, para promover el reconocimiento
de un derecho público jus puniendi o un derecho individual, el jus libertatis,
ante un órgano también estatal como el Poder Judicial. Cabe recordar que si
bien es cierto el Estado es el titular del juz puniendi, para hacerlo efectivo
necesita de un ente autónomo como el Ministerio Público el mismo que tiene
asignada constitucionalmente las funciones de promover la acción de la
justicia en defensa de la legalidad, de los derechos ciudadanos y del interés
público tutelado por la Ley, de oficio o a petición de los interesados.
La publicidad de la acción penal se refiere a su contenido, es decir, que está
dirigida a satisfacer un interés colectivo, general, de modo que, no pediría
ésta su carácter, ni aun cuando fuese ejercida por un ciudadano particular
sin embargo o se puede excluir una explicación que tome en cuenta también
el sujeto al cual pertenece la acción penal: El Ministerio Público.2

La oficialidad: Deriva de la naturaleza oficial de la función del Ministerio


Publico, por ello el Ministerio Público en ejercicio de sus funciones de oficio
persigue el delito, promueve acción penal, tutela intereses de la sociedad
entre otras, teniendo como fundamento esta característica el MP. tiene en la
obligación de oficio aunque no haya pedido de la parte agraviada, de
promover y ejercitar la acción penal, puesto que al considerarse que a través
de la acción penal se concreta la protección de los bienes o intereses vitales
de la comunidad prodigada por el derecho penal, se asume el proceso penal
como un "asunto de la comunidad jurídica", en nombre y en interés de la
que se tiene que esclarecer el crimen así como perseguir y castigar a
delincuente3

Obligatoriedad: Niega toda discrecionalidad al Ministerio Público al


promover y ejercitar la acción penal; ello porque en su favor se estableció

2
GÁLVEZ VILLEGAS Tomas Aladino, RABANAL PALACIOS William y CASTRO TRIGOSO Hamilton. El Código
Procesal Penal Comentarios descriptivos, explicativos y críticos, Op. cit. p. 91.
3
Ibid. p. 92.
el monopolio de su ejercicio. A partir de ahí, solo es el órgano público está
autorizado para ejercer la acción penal en los delitos de acción pública.

4. TIPOS DE ACCIÓN PENAL (En los delitos de persecución PRIVADA)

Generalidades
El Estado en su calidad de titular del ius puniendi, cuando en la comisión de
un delito los intereses privados se sobreponen al interés público, y la
represión interesa muy de cerca sólo al ofendido, reconoce al particular
(ofendido) el derecho de acusar (ius acusationis).
En estos casos, se produce una lesión tenue a la sociedad, pero la afectación
al particular puede ser de trascendencia. Es decir el bien jurídico afectado
tiene un carácter privado. Estos son los casos de ejercicio privado de la
acción penal, donde el interés preminente que persigue el accionante
(ofendido) generalmente es patrimonial o compensatorio.

Concepto
Es aquella acción que el legislador otorga exclusivamente al ofendido. Es un
acto de ejercicio de la acción penal, mediante la cual el particular asume la
calidad de agente acusador a lo largo del proceso.

Características
Iniciativa de parte: Los actos procesales se practican a solicitud o
requerimiento del ofendido. No existiendo mecanismos de control al
respecto, dejando a la victima de manera autónoma la potestad de decidir al
respecto.
Disponibilidad: Significa que el ofendido puede renunciar o desistirse de la
acción penal. El accionante tiene disponibilidad sobre la acción penal, a
diferencia de lo que sucede en los delitos públicos donde el órgano actor no
tiene facultad para desistir; una vez iniciado el proceso, no tiene más que un
fin: la sentencia.
5. QUERELLA

La querella es un acto procesal, mediante el cual se pone en conocimiento del


Órgano Jurisdiccional, la perpetración de hechos con carácter de delito (delitos
contra el honor) y, además se ejercita la acción penal, sin participación del Ministerio
Público, lo que hace que el querellante se constituya en parte activa del proceso.

También es el acto procesal por el cual se ejercita la acción privada por uno o más
delitos determinados, contra los presuntos autores ante el juez, quien puede
querellar es el dueño exclusivo, de su voluntad, de poder someter alguien al
procedimiento penal y a la decisión de los tribunales penales en un caso concreto.
Por esta razón es el único que puede conducir como acusador, el procedimiento
hasta la sentencia , proporcionando los medios para su comprobación. . El NCPP,
lo denomina al impulsor del proceso por delito de acción privada "Querellante
Particular".

La querella constituye uno de los modos de iniciar el proceso, es decir, que mediante
esta se ejercita la acción penal a consecuencia de la comisión de un delito. El
Nuevo Código Procesal Penal establece que en los delitos de persecución privada,
la acción penal se lleva acabo directamente por el ofendido mediante querella
conforme dispone el inciso 2 del artículo 1 del NCPP .

En nuestro NCPP; están señalados los hechos punibles que exigen querella de una
parte, para que el Estado pueda iniciar el ejercicio de su potestad punitiva.

El catálogo de estos hechos punibles es el siguiente: Delitos contra el honor –


injuria, calumnia, difamación artículos 130 al 137 del Código Penal; violación de la
intimidad articulo 154 y 157 C. Penal.

COMPETENCIA.

En los delitos sujetos a ejercicio privado de la acción penal, el directamente ofendido


por el hecho punible formulara querella con los requisitos establecidos en el artículo
108 de NCPP, por si mismo o por su representante legal, ante el Juzgado Penal
Unipersonal. El directamente ofendido se constituirá en querellante particular.

JUZGADOS PENALES UNIPERSONAL Y COLEGIADOS.

Corresponde a los Juzgados penales colegiados, integrado por tres jueces, conocer
del juzgamiento y fallo en los delitos que tengan señalados en la Ley, en su extremo
mínimo, una pena privativa de libertad mayor de seis años.

Compete a los juzgados penales unipersonales conocer del juzgamiento y fallo en


los delitos cuyo juzgamiento no se atribuya a los juzgados penales colegiados

EXTINCIÓN DEL PROCESO.

Conforme al artículo 464 del NCPP; y demás artículos pertinentes del Código, y los
criterios desarrollados por la doctrina, la acción penal privada puede extinguir el
proceso por declinatoria, renuncia, desistimiento, caducidad.

 La renuncia, es la manifestación del ofendido de no promover la acción penal.


Ella no está condicionada y no depende del consentimiento del autor del
delito. Se entiende que la renuncia favorece o comprende a todos los
procesados.

 La transacción, es el cuerdo a que el ofendido llega con el que querellado,


en cuyos términos renuncia o se desiste de la acción iniciada, con lo que
fenece el proceso.

 La caducidad, es una figura que provoca la extinción del derecho de acción


con la subsecuente extinción del proceso así se encuentre instaurado. Se
puede dar por diversas causas, entre ellas:

 Fallecimiento del accionante o sobreviniendo su incapacidad no


comparezca parta proseguir, dentro de un plazo determinado, el
cónyuge, ascendente, descendiente o hermano.
 El querellante deja de comparecer sin motivo justificado a cualquier
acto del proceso en que debe estar presente.

La caducidad con las demás causas extintivas de la punibilidad, es decretada de


oficio por el Juez independientemente del requerimiento del accionante.

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