Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
XXII
SANTIDAD
Por
LO. ENGELMANN.
)i
,'. <
. .•
'
': ,,
-.. , -~ ~ r ., .1 ;
-- --------
---
.:<-~~
- ~- ----~
8
una persona consagrada tendrá por fuerza que ser una
persona separada. Quien ama la limpieza, necesariamen-
te tiene que aborrecer la suciedad. El murciélago, que
ama andar en las tinieblas, huye de la luz; no la quiere.
Y el hombre que es consagrado a Dios, necesariamente se
separa del pecado y del mundo.
,.
;:•
.
' .
:}; ¡ . •·,
. ~ ~
'¡-;,
~~ r f! r;
"l
:•-.,;
CAPITULO 11
·.:
~ ~
: ;·
,·::;:,d.
CRISTO,EL CENTRO
; /
·''
__ _:..::::.::__;,~--
-"'----=--;:;_:=..;·--~----~ ~-~---·--·-
declan.. A estas ·gentes se les llam~pa. ~~banqidos", y· donde
se les prendía . se les fusilaban. Hay el) nues~ra copvenr
ción bandidos que deberían fusilarse, pues, aunque se
dicen ser Cristianos, ·y protestan mucho, no siguen a
Cristo; ni' L.o obedecen..
' ' ""
11
,....,.,-
~
L_
Volvemos a decir: que Cristo es el centrq, <!el·. Cris'-
tianismo. •El que no permaneciere en la doctrina de Cristo,
sencillamente no es Cristiano, no tiene la salvación. (2
Juan 9-11). A tal persona no le debemos dar entrada
en nuestra casa, ni mucho menos en nuestras. Iglesias y en
nuestra Convención, que en efecto es una Iglesia tem-
poral. A tal persona, que no tiene la doctrina de Cristo,
no se le debe admitir, ni darle la bienvenida. Pues, si lo
hacemos, nos hacemos partícipes de sus malas obras.
13
i; -
rt Qo~ d--ltdtro· del Cristianismo es Cristo. Cemro de ·nues- ,! ";·~il
tr
h ttá ;fe; d~ nuestra salvación, de nuestra lealtad; idef rtuMra
~· é!sperariza. Sin. Cristo no hay Cristianismo. 3tJuntando
las dos ideas antes expuestas, resulta evidente que,.n~
~
1 debemüs asociarnos. con los enemigos de Cristo.. . 1
~
1
~
~
1
V
.-.
;1
;¡
,- ·¡
., '
f
14
l ~-
·. l
f •• 'f
' • ~~ 1 'i . ¡.
•,'
r1: ..
,_'¡
. :
' ; ¡ ·, ~. : :
'
CAPITULO ~U :, .
·"', ' · T ••
,,,_
l ~ ... - .
•'i
j". ; ..
r
"~
,.
' clo le plazca. A la misma vez, la Congregación tiene la
'
,._¡
müma facultad de separarse de un miembro cuando por
alguna razón lo creyere prudente. Es una asociación vo-
luntaria de personas iguales e independientes.
16::.
'\,
&.....
de Dios. Me oyeron, y no volvieron :a acordarse, del
asunto. .. < '. ~
17
•
;¡-
.-
.
¡:
i/
:¡¡,:
¡'¡
•pllrtido;·no; había un centro de lealtad comb' lo:tériemos
~1 los Cristianos. ,, ·,y·
,L: Una' ConvénciOii' (o' sea Asociacíón, pues tiene los dos
,,. némbres) es, básicaménte, una Iglesia temporaL Mien-
~tras la Iglesia local se reúne continuamente, la' Conven~
.ción se reúne genet'almente urla vez al, año. . En efecto,
uha Convención seLfonna cada año de nuevo,, .. ' ..:cuando ,se
lS
juntan en fraternidad un ,grupo de hermanos p;¡tra · rea,
lizar consultas. Son miembros de . ella los hermanos que
asisten, y no las Iglesias de donde vienen. .
En tiempos pasados existía una. costwnbre en nuestra
Convención Nacional Bautista .de México, que al igual
que en otros países, se ha abandonado y es muy .rara la
persona· que siquiera se acuerda de ella. Cuando se reu-
nían los hermanos cada año para la Convención, se. for-
maba una lista de los asistentes, ·y .ésta se leía ante· la
concurrencia. No se necesitaban al. principio credencia-
les, puesto que los BatJtistas éramos PQCÓs y, .conocidos.
19
,.1:
20
t .
.... -----
de la Iglesia y que sus relaciones con ésta: se .hallan. en
buen estado. Toca a la Convención recibido .,de. la mis~
ma forma en .que la Iglesia rec;;ibe a un miembro. Y cuan-
do el mensajero emite su voto en la Convención, debe
hacerlo como él mismo crea que Dios quiere que voú;
y no según piense que la Iglesia votaría. No r~presenta
a nadie.
21
,.
j
lH
H
jj'
;,l
t :·1
•·,,,,
dado no ·dade ta:t permiSo. Se enojó el oficial de la Con-
vención, •:diciendo···que?. como ·oficial de la Convención
tenía derecho dé tomat la palabra en cualesquiera Igle-
sia Bautista de la. República. Se ofendió mucho cuando
no aceptaron tal actitud, y tuvo que irse sin predicar en
~~ Iglesia.··
f.¡
:~ ',
22
cdnejo· se. comía las plantas;' se vistió con· su ·armadura
de guerra, niontó · en !SU :. bueri caballo marcial,. y fúe. a
galope tendido, furioso por todos los sembrados, gritan-
do que desafiaba al.cónejoy que s~liera a luchar con él.
Resultado: No salió el conejo;; a; ·batallar -contra el ca-
ballero, y los sembrados ·fúeron déSfruiélos. · Di()S ·nos de-
fienda de nuestros amigoS"}' prótecto're8, q~e ·quieten
agrandar lá Convención, petó siri '·conecimiento dé la
naturaleza de las 'Iglesias. · ·· · • ,. : '
-23
j
:,,.
L'
1 ¡i
~·}.'.
t1l
:r~
u¡¡
Debemos mencionar aquí; que el continuismo, es de-
g.:._ <;ir, que las mismas personas, .sigan en el poder i,n.defini-
l1j:.·
1¡¡; 9-amente, por lo general abarca algo del "gobierno por
j.íil
camarilla". Un grupo de hermanos hace los planes, y
· los perfecciona a su gusto en lo particular, y los presenta,
t;¡-
b
'·'·
,¡,
ya "tajados": y "secos", para la aprobación de la Asam-
blea.· Y se considera como una falta de lealtad a la Asam-
blea que alguien se oponga. Generalmente (no siempre)
Jff a esta camarilla pertenecen los más consagrados de los
;,¡;
hérmállm, y a la vez los más activos. Se espantan si al-
~¡1 gbien- se atreve a llaniarles "camarilla", pues creen estar
'etl lo jl.f.sto, y que sólo llevan adelante la Obra divina.
(Ast sucedió con los Judíos, entre los cuales se formó; el
Sanedrín, la cámara que gobernaba en el tiempo _de Cris-
tO, aUri.que el Sanedrín no fue establecido · de ninguna
·martera en la Ley de Moisés. ·. ,
:· , _ } ~ 4 ~ :-¡ .~
~'·.:;
H.anos dicho que,en una camanna generalmente hay
:dedos. lriásL-consagradós y mejores hermanos; pero a la
vez. hay: en-ella prísGnás q0e.o no son las mejores o no
Mm ·consagtadaS. . y, ;gmieralmen~e en la camarilla hay
.~
~lino o das· q\W son ·enérgioos, lo, que el mundo llama "Ií-
-deres;·por. ruicimientn'', .que manejan el grupo· a su .gus-
·to.. Generalmente son .personas· guapas, con una sonrisa
:de~ nacimiento. .deLsol~ que saben captarse la amistad y
24
buena voluntad de la gente, y se hacen populares. Y son
buenos políticos, que saben bien hacer planes que, hu-
manamente, son buenos y halagadores. Y saben presen-
tarlos de tal manera que encantan.
Qué hacer para librar a una Asamblea del dominio
de tal camarilla es un problema. Es más difícil que librar-
se de un solo hombre. Pues las camarillas generalmente
son como la hiedra, que, cuando se le cortaba una cabeza,
le nacían tres más. Pero, con oración y calma debemos
tratar de independizar a nuestras Asambleas.
. . . .le hay
a la
••·ohay no
. . . .IDa ulí-
'- ,<)flilfili>J
;;' 'ü;b 1 f;
25
MllliC::.::;.:I@\1
*:
~
L(,,
<'
'l.¡,.
~t H
Ijf;
,,
·'"'
·.¡·.:H.!
w:
:f#'
,~!
' ;~ ¡~
)_:;
.~' ~
i
a:
JiJ
,:..
,i; .
•~~! '> \
!i¡i
e';
CAPITULO IV
SANTIDAD DE VIDA
l,
1L¡
'
L.- ..
,
la maldad se considera .·como la base · para .• acercarse a
Dios y recibir perdón¡ .
27
i¡
ft ci61f·~tfe- Israel -consistió en que, siendo llamada a .ser una
J' nación santa, no lo fue. (Deut. 28:9). Y. desde el- co-
~
mienzo del Cristianismo, en las Iglesias se ha luchado por
la limpieza, comenzando con Ananías y Safira; a quienes
Dios castigó con la muerte por su mentira. Y a veces
pienso qué sería de nuestras Iglesias si Dios matara así
a todos los mentirosos, y a todos los que no Le siguen.
''
¡.
lj·_
i
------
1·
30
chÓ, también ·ahora decimos ótra vez:.".si; al~o os ánl.ln~
ciare otro evangelio del' que habeíS' recibidÓ, 'sea ··anate:..
ma". Nótese que aqhí pone ''ma1d.1:ci6n",''y para· dar
.~n;fasis . la repite . sobre cualquiera que . q:Uis~e~a .1ad~l~erar
el santo. Evangeliq .una v<;z dad<?. ,a ~ó~ sánfós~ los :Mo-
dernistas, con su evél;Ílgelió 'd~ seiVi.Ci<f~Socl~f:.Y\ ~l( #ega-
ción de la Biblia' y c{e la sc;.I~~{ón por 1a ·~gré ~('Cris
r.·' . to, 'ESTAN BAJO~¡\ ~~9J<;!IqN,D~.·~~gs.;·y· el
•tdll~lugar de que los. reeibe y apóya~ ·-Pfi~tdpa 'con ellós dfla' tpiSina
l
31
---------· -~ · - - _ _ _ _.:.;o
~~tnt· ~·~:~d~~~l~\~a e~~~k~st: ~~~~:n!a~:
cpsas~ mundanales yacercando a Dios'.· . . .· '.: .
l:
..
¡
f~
~
t1
34
¡
r·-t·.
--!!!!o"'=""=="=~----·-----
tras año e indefinidamente controlan la dirección de la
Convención . o de la Iglesia.
35
.d
. ·~'!
-:t.:)""!'
.;,;~
;'
36
CAPITULO VI
DIVISION EN LA CONVENCION
' /
~ ,.
38
-~·-_---~-.-.
<
~· ,-
~
·~
39
----·------------------------_;,_:.a
~--------------------~-~----
;r
40
'l
CONCLUSION:
1 ;
42
"Escogéos hoy a quien sirváis •.. " (Josué 24: 15). El
futuro nuestro y de la República Mexicana está en ma-
nos de Uds.
43
·- -~--· ---------------~
.<
"r ;
44
resulta que muchas veces nuestras ofrendas que deben
ser para Cristo, van a enriquecer a Sus enemigos. Y, co-
mo tenemos el deber de sostener la Obra de Cristo, tene-
mos también el mismo deber de NO sostener la obra de
Sus enemigos.
L. O. Engelmann.
INSTITUTO BLIBLICO DE GUERRERO,
San Jeronimito, Gro., México.
45
"'-
UNA PARABOLA
NUESTRAS LIBRERIAS
49
' .
;
50
La Vuelta Indispensable. Ezequiel 33 : 11.
La Ultima Guerra. Ezequiel capítulos 38 y 39.
Tortilla Quemada y Masa Cruda. Oseas 7: 2.
51-
----~--------------~
La Ciudad que Votó Expulsar a Cristo. Mateo 8:34.
La Ciudad que Votó Recibir a Cristo. Hechos. 8:5-6.
Los Odios de Dios. Prov. 6: 61.
El Amor de Dios. Juan 3: 16.
El Gran Caso de Arbitraje. Job 9:33.
Tres Fuegos. Mateo 3: 11; 1 Cor. 3: 15.
El Arrepentimiento de David. Salmo 51.
Hasta lo Ultimo. Heb. 2: 8 y 7: 24.
Creciendo en la Gracia. 2 Pedro 3: 18.
Cómo Evitar el Caer de la Gracia. (NO de la Salvación).
2 Pedro 1:10. (Nota: Caer es la palabra griega para
tropezar).
La Fuente del Evangelio. Zacarías 13: l.
Joyas Cristianas. Mal. 3 : 17.
Bienaventurados los Que no se Escandalizan. Mateo 11 : 6.
¿Cuánto Vale tu Alma? Mateo 16:26.
La Cosa más Valiosa en el Mundo. Mateo 16: 26.
La Religión de la Calabacera. Jonás 4.
Y Ahora, ¿A Dónde Vamos? 2 Cor. 5:10.
Cuando se le Acaban al Hombre los Nombres. Hechos 4:
13.
Nunca Más. Juan 8:11.
Fue Volando. 2 Reyes 2: 11.
Hemos dicho que cuando un pastor no halla textos
para predicar, es prueba de que no estudia mucho su
Biblia. Agregaremos ahora que es prueba también que
no estudia mucho otros libros religiosos. Pues en los es-
critos de otros predicadores hallaremos muchísimo mate-
rial para formar sermones que nosotros podremos predi-
car.
52
""\,_ ,",,
tomado casi íntegramente de un capítulo de mi libro
"LA NUEVA MORALIDAD".
53
el mismo asunto. Prediqué repetidas veces (de vez en
cuando, no todos los domingos) sobre el mismo asunto,
pero con diferente texto y diferente bosquejo e ilustra-
clones.
54
ORANDO POR EL PODER DEL ESPIRITU
SANTO
56
"~.i:·.
sea, ser llenados· del Espíritu, es Uiia rosa, dada ·para ser-
virle en el évangelismo. ·Los. dones .del Espíritu, enume-
rados ert Gálatas 5: 22~23, son va~ y, como se nos dice
en J Corintios 12: 4-11, nadie recibe todos los dones del
Espíritu. Y nadie debe menospreciar a otro que no re;
cibió el mismo don que él. Cada uno debe buscar utili-
zar para la gloria de Dios el don que reéibe. ·
57
;
tl
¡
l
1
1
·l'
~
•
ción
58 Unos pasos
INDICE
SANTIDAD
Pág.
Pág.
Una Parábola . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 46
N~ 0291