“LA CRUZ ES IMPORTANTE…

PERO AÚN MÁS LA RESURRECCIÓN

TEMA: La Resurrección, sentido de la vida cristiana.

OBJETIVO: Presentar a los centinelas la importancia de la Resurrección,

como experiencia de vida.

PREPARACIÓN DEL LUGAR: Habilitar un pequeño calvario que

conduzca a una imagen de Jesús resucitado.

ORACIÓN INICIAL: Espíritu Santo, conduce nuestros corazones para

comprender las enseñanzas de Jesús. Permítenos estar dispuestos a aceptar la
voluntad del Padre, aunque no siempre la entendamos. Animamos día a día para
encontrarnos con Jesús en la fracción del pan, por Jesucristo nuestro señor.
Amén.
La Resurrección de Jesús es un acontecimiento histórico, cuyas pruebas entre
otras, son el sepulcro vacío y las numerosas apariciones de Jesucristo a sus
apóstoles.
Cuando celebramos la
Resurrección de Cristo, estamos
celebrando también nuestra
propia liberación. En ella
encontramos la clave de la
esperanza cristiana: si Jesús está
vivo y está junto a nosotros, ¿qué
podemos temer?, ¿qué nos puede
preocupar? Cristo triunfó sobre la muerte y con esto nos abrió las puertas del
Cielo.

Es por eso que cualquier sufrimiento adquiere sentido con la Resurrección, pues
podemos estar seguros de que, después de una corta vida en la tierra, si hemos
sido fieles, llegaremos a una vida nueva y eterna, en la que gozaremos de Dios
para siempre.

San Pablo nos dice: “Si Cristo no hubiera resucitado, vana seria nuestra fe”
(1 Corintios 15,14)

Si Jesús no hubiera resucitado, sus palabras hubieran quedado en el aire, sus

promesas hubieran quedado sin cumplirse y dudaríamos que fuera realmente
Dios. Pero, como Jesús sí resucitó, entonces sabemos que venció a la muerte y
al pecado; Él ganó para nosotros la vida eterna y de esta manera, toda nuestra
vida adquiere sentido.
La Resurrección es fuente de profunda de alegría. Por tal motivo, no podemos
vivir más con caras tristes. Debemos tener cara de resucitados, demostrar al
mundo nuestra alegría porque Jesús ha vencido a la muerte.

¡Es verdad! ¡El Señor ha resucitado!” (Lc. 24,34). Lucas da afirmación decisiva
de nuestra fe.

ORACIÓN FINAL: Señor dame la Gracia de continuar en el camino que

has preparado para mí, mantenme atento al servicio de los que me rodean, para
experimentar en ellos tu presencia. María, madre mía, acompáñame para ser fiel
a tu Hijo Amado. (Padre Nuestro, Ave María y Gloria).

HIMNO DEL CENTINELA…

OBJETIVO: Despertar en los adolescentes un espíritu de recogimiento,
dispuesto a acompañar a Jesús en su Pasión y Muerte.

PREPARACIÓN DEL LUGAR: Realizar un monumento para el Santísimo

Sacramento en torno al tema de Bautizados y Enviados y un camino hasta él.
INICIO: Invitar a los centinelas a descalzarse; tomar una cruz simbólica y
emprender el camino en el cual encuentren obstáculos que a su vez sean
tentaciones en las que ellos ocupan tiempo (celulares, música, películas, otras).

Al llegar al monumento, leer: Lc. 22, 39-46. Jesús

en el Huerto de los Olivos. Jesús también se sintió
solo, con miedo, al saber que se acercaba la hora
de ser entregado y su único refugio fue el padre…

QUE ASÍ COMO JESÚS, NOSOTROS TAMBIÉN BUSQUEMOS REFUGIO,

FORTALEZA EN EL PADRE, SIENDO CENTINELAS DE CRISTO EN TODO
MOMENTO

OBJETIVO: Invitar al centinela a participar del

Triduo Pascual, sabiendo que son los días en los que se
recuerda la pasión, muerte y resurrección de nuestro señor
Jesucristo. Haciendo énfasis en que al igual que Jesús estamos llamados
resucitar a una vida nueva en él.
OBJETIVO: AGRADECER LA ENTREGA DE JESÚS Y LA VIDA QUE NOS
DA.
SE RECOMIENDA REALIZAR UN COMPARTIR PARA CELEBRAR LA
PASCUA, PUES JESÚS HA RESUCITADO Y NOSOTROS TAMBIÉN.
CONTAR LAS EXPERIENCIAS VIVIDAS.

ORACIÓN FINAL: ORACIÓN DEL CENTINELA