Documenti di Didattica
Documenti di Professioni
Documenti di Cultura
En el quinto pregón del Kerigma, Dios nos promete enviar a su Santo Espíritu: “yo les daré un
solo corazón y pondré en ellos un espíritu nuevo: quitaré de su carne el corazón de piedra y les
daré un corazón de carne, para que caminen según mis preceptos, observen mis normas y las
pongan en práctica, y así sean mi pueblo y yo sea su Dios”. Ez. 11,19-20.
Todo cambió a partir de esta efusión del Espíritu Santo sobre cada uno de los apóstoles y los
discípulos ahí reunidos que eran ciento veinte. A partir del día de Pentecostés la Iglesia nace
gracias al bautismo en el Espíritu Santo que recibieron.
La palabra bautizar viene del griego babtizein y significa sumergirse, empaparse, estar inundado.
Entonces cuando los apóstoles recibieron el Espíritu Santo quedaron llenos de ÉL, esto es
quedaron bien empapados y se les notaba.
Podemos decir que:
a.- Fue el Espíritu Santo quien les hizo conocer en verdad la Persona y la Misión de Jesús. Los
apóstoles pensaban que Jesús venia a restaurar un reino como el de los hombres. Veían a Jesús
como rey pero al estilo del rey David. Una vez que llega el Espíritu Santo comprenden en verdad
a qué vino Jesús, y se lanzan a predicar la Salvación en Jesucristo. Prueba de ello es la predicación
de Pedro el día de Pentecostés (Hch. 2,14-39).
b.- Fue el Espíritu Santo quien cambió sus corazones.
Donde está el Espíritu Santo no puede existir el egoísmo, la envidia, la avaricia. El Espíritu Santo
te enseña a vivir la vida de otra manera, con un corazón alegre y sencillo (Hch. 2,46).
c.- Fue el Espíritu Santo quien convirtió a Jesús en el centro de sus vidas. Porque decir: “Jesús es
mi Señor” es un don de Dios, , es el Espíritu Santo quien te lleva a vivir conforme Cristo quiere,
observando sus mandamientos y consultando en todo momento su voluntad (Ef. 3,8).
d.- Fue el Espíritu Santo quien los hizo testificar con palabras poderosas.
¿Qué es un testigo? Es alguien que conoce sobre un asunto y da testimonio de ello. Los apóstoles
daban testimonio de que Jesús estaba vivo y lo hacían con la gran seguridad de que llegaban a los
corazones de sus oyentes. Así el Espíritu Santo hace que tu predicación sea con valentía y poder.
Es muy difícil que los creyentes se puedan resistir a su acción. El apóstol Pedro así lo hizo y en su
primera predicación convirtió a 3000 personas. ¿Cuántas veces has predicado y no se convierte
nadie? Hace falta estar lleno del Espíritu Santo.
Dice la Biblia que los primeros cristianos acudían al templo "con entusiasmo" (Hch. 2,46). Es
interesante porque la palabra “entusiasmo” viene del griego Entheos, "En" es dentro de y
"Theos" es Dios, entonces se decía que una persona es entusiasta porque tiene dentro el Espíritu
de Dios. Así que si tú estás lleno de gozo, lo transmites y lo contagias. Si en verdad tienes dentro
el Espíritu Santo la gente lo va a notar y va a querer vivir conforme a ese espíritu. Por eso hoy te
digo que:
La promesa también es para ti.
Todas estas maravillas que te estoy contando no son solo para los primero cristianos. Jesús al ser
glorificado en el cielo, recibe una Nueva Efusión del Espíritu y es tan grande esta efusión que te la
quiere compartir a ti. Así que la promesa del Padre también es para ti.
El último día de la fiesta de las Tiendas, que era el más solemne, Jesús, puesto en pie, exclamó
con voz potente: "El que tenga sed, que venga a mí. Pues el que cree en mí tendrá de beber. Lo
dice la Escritura: De él saldrán ríos de agua viva. Decía esto Jesús refiriéndose al Espíritu Santo
que recibirían los que creyeran en él. Jn. 7,37-38.
¿Cuánto te cuesta el don del Espíritu Santo? Nada. ¡Es completamente Gratis! El que tenga sed,
que se acerque; y el que lo desee, reciba gratuitamente el agua de la vida. Ap. 22,17b.
PRÁCTICA- Puedes hacer tu oración a Jesús pidiéndole una nueva efusión de Su Espíritu en este
momento en un ambiente de silencio y recogimiento (puedes poner también un canto de
meditación como fondo). Puedes hacerlo solo, con tu familia, amigos o vecinos.