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2
ÍNDICE
Intro
Desde el gueto para el mundo: dimensión histórica del rap hip hop
1. Signifying, toasts y dozens: precursores del rap hip hop
2. De los años sesenta a los setenta: del toasting y el signifying al rap
hip hop
3. De los años setenta a los ochenta: consolidación comercial y
aparición del reality rap
4. De los años ochenta a los noventa: nace el gangsta rap
5. De Boogie Down a Neza York, ¡hip hop no para!: el rap llega a
Tenochtitlan
Cruzando fronteras: funcionamiento ideológico y poético del rap
hip hop
1. Ideología y hip hop: el rap se globaliza
2. Poética del rap hip hop: una aproximación
Guerreros líricos: intertextualidad, retórica e identidad hip hop
1. Los renegados del funk: DJs, samples, y hip hop
2. “Arriba los buscavidas”: crónica de un concierto de hip hop en el sur-
oriente de la ciudad de México
Outro
Entrevistas
Fuentes bibliográficas
Fuentes sonoras
Glosario
3
Intro
1
Digo ‘reduccionista’ pues es necesario recordar que en el Curso de lingüística general sí se afirma que dejar
“a la lengua al margen de su realidad social hace de ella una cosa irreal” y que ésta no existe “al margen del
hecho social” pues “es un fenómeno semiológico” (p. 116).
4
En este libro se presentan los principales antecedentes discursivos del rap
hip hop, señalando sus raíces en los juegos verbales conocidos como dozens,
toasts y signifying, practicados en las comunidades afro-americanas desde hace
más de cien años. Estos géneros del arte de la oralidad causaron bastante revuelo
en la academia norteamericana a mediados del siglo XX, pero en la literatura en
castellano son casi desconocidos y por ello resulta pertinente presentarlos con
detalle.
5
ajenos para crear una música que, en aquel entonces, se llegó a cuestionar
incluso si lo era o no realmente, pues para muchos la técnica del sampleo2 y el
DJing3 no constituían una forma genuina de “creación musical”, sino más bien un
robo sonoro, una especie de piratería disfrazada de arte. Pero la verdad es que a
mí, desde niño y bajo la influencia de Salgari, siempre me cayeron bien los piratas.
2
Ver Glosario.
3
Ver Glosario.
6
Como dije, el rap hip hop ha estado presente en mi vida desde la
adolescencia. A través de solistas y grupos como Gil Scott-Heron, Ice-T, Kid Frost,
BDP, Public Enemy, Mexakinz, Afrika Baambaata, Mellowman Ace, RUN-DMC,
Tone Löc, Digital Underground, Beastie Boys, Psycho Realm o Cypress Hill
descubrí este estilo musical, desarrollado con base en fragmentos sonoros
tradicionalmente considerados como “no musicales” y colocados en un nuevo
contexto para hacerlos canciones, que hizo tambalear los límites entre la música y
el ruido, diluyendo y acercando las fronteras entre campos semánticos
supuestamente opuestos.
El rap hip hop se acerca a la idea que ofrecía John Cage al definir la música
como “organización de ruidos”, concepción opuesta a la del Diccionario de la Real
Academia, donde se afirma que la música es “sucesión de sonidos modulados
para recrear el oído”. Serge Moreux, pionero de la música electrónica, dijo en 1950
que “el material de la música concreta es el sonido en estado puro, tal como lo
suministra la naturaleza, lo graban las máquinas, lo transforman las
manipulaciones” (Schaeffer, 1995: 57). Y esto es la música hip hop.
4
Ver Glosario.
7
Al igual que ocurre con la música hip hop, donde el “ruido” se transforma en
sonido musical, en el discurso verbal del rap se retoma el habla cotidiana y se le
trasforma en poesía. Por lo que, haciendo una analogía con el graffiti, otro
elemento primordial dentro de la cultura del hip hop, si se intenta llevar a cabo un
estudio del rap como género discursivo no puede disociársele de la música sobre
la que ocurre, de la misma manera que “no se puede entender al graffiti
separándolo de los muros en los que aparece” (Lomas, 1973: 71).
5
Ver Glosario y sección 1.3.
6
Para un análisis detallado acerca de la diferencia entre el graffiti hip hop y otros tipos de graffiti, en
particular los de pandillas, ver Phillips, 1999.
7
Ver Glosario.
8
Ver Glosario.
8
distorsión) de la acentuación silábica, haciendo que las palabras fluyan en un
golpeteo constante.
9
Ver Mcgill, 1971.
10
El término ‘folklore’ es acuñado en 1846 por William Thoms, mientras que la práctica folklorista, en sí,
surge con el trabajo precursor de Jacob Grimm y su recopilación de la tradición oral germánica.
9
alfabetizado, y por tanto no podría clasificarse como ‘literatura oral’ si nos
apegamos estrictamente a la definición de Sebillot.
Quedamos así con el concepto de ‘poesía oral’ como el más pertinente para
describir al rap hip hop, pues evita las confusiones etimológicas que tanta
discusión han generado y mantiene implícito el alto grado de sofisticación verbal
que implica un género poético, ya sea oral o literario.
11
Una de las críticas más famosas es la de Walter Ong (1999: 19-24).
10
discursivo, analizando de qué manera su proceso de globalización responde a
intereses en conflicto, contradictorios.
A inicios del siglo XXI, el rap hip hop está presente en todo el mundo bajo
un doble aspecto: como fuerza globalizadora del imperio cultural norteamericano,
pero también como expresión en barrios de los más diversos puntos del mundo.
En este segundo capítulo se desarrolla también una aproximación a la poética del
rap hip hop, buscando describir las estrategias retórico-poéticas que, de manera
recurrente, se presentan en el género.
11
Desde el gueto para el mundo:
dimensión histórica del rap hip hop
12
1. Signifying, toasts y dozens: precursores del rap hip hop
Todo texto surge vinculado con géneros discursivos anteriores ante los que se
opone y une, enfrentando y retomando tradiciones para definir su propia
actualidad. O, como dice Iuri Lotman, “para producir textos, es necesario tener ya
un texto… para que su mecanismo de pensamiento pueda empezar a generar
textos de forma independiente” (Lotman, 1993: 100). Los análisis discursivos se
deben llevar a cabo tomando en cuenta no sólo los textos en sí, sino sus
contextos: las condiciones sociales, ideológicas e históricas en los que surgen.
12
(Smitherman, 1998: 208).
13
“Hombre, no debes saber quien soy yo,/ soy el dulce peeter jeeter, el que sacude la cuna,/ el que esclaviza a
las nenas, el que se queda con las apuestas, el que encuentra a las mujeres./ Conocido desde la Costa Dorada
hasta las rocosas playas de Maine,/ Rap es mi nombre y el amor mi juego” (Abdullah, 2002: 27).
13
Algunos autores, como Cheryl L. Keyes (1996: 225), afirman que los
orígenes del rap deben trazarse hasta los griots14 de la costa occidental de África y
sus narraciones orales, que fungían como medios de circulación para la tradición
mítica yoruba; otros, como Tricia Rose, definen al rap como:
Rose es una de las teóricas del rap más importantes en nuestros días y su
libro Black Noise. Rap Music and Black Culture in Contemporary America (1994)
resulta clave para comprender la música rap como medio de afirmación de “las
historias y narrativas comunitarias del pueblo de la diáspora africana” (Rose, 1994:
64).
No sabemos con certeza si el rap se remonta en línea directa hasta los los
griots, aunque sin duda lo sospechamos; pero, como demostraremos, éste es sin
duda el resultado de prácticas orales más recientes: los toasts, los dozens y el
signifying.
14
Los ‘griots’ son narradores orales cuyo oficio se transmitía, y se transmite hasta nuestros días, por línea
sanguínea. Uno de los griots contemporáneos más famosos es Youssou N’Dour, quien ha obtenido gran
reconocimiento en Occidente a partir de sus incursiones en la música popular.
14
Signifying.
Al hablar acerca del ‘signifying’ se hace mención a un juego retórico que no se
limita a lo verbal, sino que puede incluir, según un ejemplo de Roger D. Abrahams:
15
“Trabajos etnográficos recientes acerca de grupos negros en África y el Nuevo Mundo ofrecen indicaciones
de que esta actitud y patrón [de significación] es una retención cultural africana en sus situaciones del Nuevo
Mundo” (Abrahams, 1970: 3).
15
Deep down in the jungle, so they say,
There’s a signifying motherfucker down the way.
There hadn’t been no disturbing in the jungle for quite a bit,
For up jumped the three one day and laughed, “I guess I’ll start some shit”
16
implica el predominio en un discurso dado (tanto verbal como para-verbal) de una
retórica oblicua que consigue la persuasión a través del discurso indirecto.
Por su parte, los toasts y las dozens son más bien subconjuntos dentro del
conjunto mayor del signifying, que como vimos es: “el tropo de tropos de la
negritud, la figura de figuras de la retórica negra” (Gates, 1988: 51).
SIGNIFYING
Toasts Dozens
Toast
El concepto del ‘toast’, o ‘toasting’, es un término del inglés que aunque podría
traducirse al español como ‘brindis’ o ‘saludo’, dentro del sociolecto afroamericano
implica una “forma narrativa” (Kochman, 1983: 118) que es “la culminación del
crecimiento verbal” (Abrahams, 1970: 59) dentro del desarrollo del arte oral en los
jóvenes del gueto, quienes comienzan ejercitándose con las dozens y al paso del
tiempo:
16
Como los de Pope y la tradición del heroic couplet, cuyos orígenes se remontan, en lengua
inglesa, hasta la obra del escritor medieval Geoffrey Chaucer (Hobsbawm, 1996: 22). El verso
pareado tiene una estructura de versificación AABBCC, etc.
17
el ejemplo siguiente, de un toast que tiene ya una antigüedad de más de sesenta
años:
Aquí podemos percatarnos del vínculo causal entre los toasts y el rap hip
hop, tanto en sus objetos como en sus estrategias discursivas. El “MacDaddy” de
este toast recopilado por Abrahams a mediados de la década de los cincuenta en
Filadelfia, no se aleja demasiado del personaje a punto de ser ejecutado que, en el
año de 2001 y en México, nos presenta Sociedad Café con Aliento de Muerte, una
de las letras recopiladas para este trabajo.
18
En este fragmento aparecen evidencias estilísticas (versos pareados), como
de sujetos y objetos discursivos (la narración en primera persona, el desprecio a la
muerte), que comienzan a mostrar la cercanía entre los recursos retóricos de los
toasts y el rap hip hop, incluso cuando éste ocurre en otro idioma.
El narrador es dueño de la situación que narra, director de las vidas de los héroes
en la narración. Él logra este tipo de control no sólo a través de la fuerza de sus
poderes vocales sino de la creación de una persona narrativa a la cual le llamo,
por falta de un mejor término, el ‘yo intrusivo’. En los toasts, el punto de vista es
estrictamente el de la primera persona, permitiendo la completa identificación entre
el narrador y el héroe... Este ‘yo intrusivo’ le permite al narrador tener dos
personas dramáticas al mismo tiempo, la suya propia como narrador o
comentarista, y la del héroe (1970: 59; cursivas mías).
19
See fit eat dick all don't know shit17
(Califa Thugs, Sureño Thugs)
17
Los enemigos no van a durar, guarden sus glocks [arma semi-automática]/ soy el cabrón más malo de todo
el bloque/ me pongo algo mareado cuando fumo un toque,/ me cojo a una perra y una puta a diario,/ el
maleante mágico, maleante de Califas,/ con el silenciador matando al cabrón... // Muchos hijos de puta dicen
que mi ritmo es lento,/ que fumo demasiada mota y sueno como negro/ escupo la mejor mierda en todo el
oeste/ me parece bien que chupen verga todos los que no saben de esto”
20
versificación como la estrategia retórica-narrativa del “yo intrusivo” para lograr,
entre narrador, voz narrativa y personaje, una complicidad encaminada a la
glorificación de un ser que, en desventaja de recursos, obtiene a través de su
habilidad en la práctica de la oralidad y e engaño, un triunfo donde lograrlo
recurriendo a la fuerza física hubiese resultado imposible. Es decir, el toasting es
una forma de signifying.
Dozens
Dentro del desarrollo discursivo de los hablantes, los toasts son posteriores a las
dozens, lo que resulta sencillo de comprender si se toma en cuenta que una de las
características de las dozens es que son sumamente cortas y, por tanto, más
fáciles de memorizar por niños y adolescentes; además de que más que un
carácter narrativo (que implica mayores exigencias nemotécnicas) las dozens son
fragmentos netamente descriptivos en los que la retórica se utiliza para la humillar
al oponente (particularmente a su madre), a través de una “mezcla de estilo y
poder verbal... para controlar y manipular situaciones y gente y otorgarse a sí
mismo una ventaja” (Kochman, 1983: 123).
A diferencia de lo que ocurre en los toasts, que son dominio masculino, las dozens
son practicadas también por mujeres. De acuerdo a H. Rap Brown, el connotado
activista de la década de los sesenta que hemos presentado en el epígrafe de esta
sección: “algunas de las mejores jugadoras de Dozens... eran chicas” (Gates,
1988: 72).
Sin embargo, estos “juegos de insultos verbales” (Kochman, 1983: 120) que
también se conocen con el nombre de ‘dirty dozens’18 o ‘sounding’, tampoco
surgen en un vacío discursivo, sino que a su vez derivan de rimas infantiles
18
Es interesante anotar que la referencia más antigua de las “Dirty Dozens” que encontró Abrahams (1970:
264) viene de la revista popular norteamericana Current Opinion y se remonta a Septiembre de 1919, en un
artículo sobre una cantante blanca de blues, Gilda Gray.
21
tradicionales dentro de los países de habla inglesa, como pueden ser las “nursery
rhymes”19 (rimas infantiles) y las “jump-rope rhymes” (rimas para saltar la cuerda).
Para Roger D. Abrahams los duelos verbales que nos conciernen “retienen
las formas y fórmulas de la expresión infantil” y son formas de “regresión” por
medio de las cuales los adolescentes utilizan el poder de las palabras aprendidas
durante la infancia para mantener un “sentido del control”, además de que sirven
como medio para reafirmar su sexualidad, pues las palabras “funcionan de
poderosa manera dentro de la batalla sexual típica de la vida adolescente” (1970:
43).
Las Dozens son juegos verbales de tinte sexual en los que se insulta al
oponente a través de estrofas en versos pareados (dísticos, cuartetos y, con
menor frecuencia, octetos), con las que se busca probar la habilidad poética del
adversario y su temple. El perdedor es aquel que pierde los estribos o resulta
incapaz de contestar la ofensa con una rima de mejor calidad (Abrahams, 1970:
48), y se dirá que el triunfador es aquel que ha “puesto abajo” (Abrahams, 1970:
46), en obvia referencia sexual, a su oponente. En el siguiente ejemplo se muestra
la influencia de las rimas infantiles dentro de dos dozens cuyo nivel de procacidad
nos muestra, evidentemente, un emisor más maduro:
19
Nursery Rhyme: “Puede definirse como una rima o verso preservada en el mundo infantil. Algunos
ejemplos son: Humpty Dumpty sat on a wall/ Humpty Dumpty had a great big fall/ All the kings horses and
all the King’s men/ Could not put Humpty Dumpty together again...’ o ‘Rain, rain, go away,/ come again
another day’” (Preminger, 1993: s.v.).
22
I hate to talk about your mother
She’s a good old soul.
She’s got a ten-ton pussy
And a rubber asshole.
She’s got hair on her pussy
That sweep the floor
She got knobs on her titties
That open the door.
23
De modo que un verso como el anterior, transcrito a fines de los años
cincuenta, se transforma en boca de H. Rap Brown, en los años sesenta, en una
rima al servicio de la militancia negra:
24
como
masculino.
ESTRATEGIAS Rastreables hasta el Influencia de Presencia del “yo
DISCURSIVAS: uso del tropo yoruba las nursery intrusivo” como
de Esú-Elewá, rhymes y las recurso narrativo.
materializado en el jump-rope
“Signifying Monkey” rhymes.
(trickster).
Como hemos visto, las dozens “utilizan muchas de las técnicas del discurso
infantil pero colocándolas en un contexto que lleva directamente a los modos
adultos de expresión” (Abrahams, 1962: 53). Y fue precisamente un adulto, por
añadidura campeón mundial de boxeo en la categoría de peso completo, además
de musulmán y nacionalista negro, Muhammad Alí, quien habría de presentar ante
el mundo un estilo de habla que parecía singular al momento de su recepción en
países como México, ajenos a la tradición del signifying, pero que en realidad
estaba bien arraigado en los estilos artísticos de la oralidad comunes a la vida del
gueto en los Estados Unidos de la década de los sesenta.
El famoso “Fly like a butterfly, sting like a bee” (vuela como mariposa, pica
como abeja) del campeón que se rehusó a combatir en la guerra de Vietnam era
un eco de otros signifyings, otros toasts y otras dozens que habían dejado atrás la
infancia y comenzaban a transitar hacia objetos discursivos más maduros o, al
menos, más contestatarios; así como hacia estrategias retóricas más complejas
que los acercarían cada vez más al discurso del rap hip hop como lo conocemos
actualmente.
Leamos ahora este toast, recopilado por Elridge Cleaver (Cleaver, 1968: 37-
38) el 16 de Agosto de 1965 en la Penitenciaría de Folsom (California), al tiempo
que ocurrían las históricas revueltas de Watts, en la ciudad de Los Ángeles.
25
El toast en sí está marcado en cursivas, sin embargo la actitud retórica del
signifying se encuentra presente en el texto entero:
-Hombre -dijo uno –, ¿qué andan haciendo por allá? ¡Suéltalo, nene!
-¡Home boy, esos hermanos se están encargando de los negocios! -chilló otro,
lleno de felicidad.
Entonces un low-rider, entrando al círculo formado por los demás, echó su peso
hacia atrás sobre sus piernas y se acomodó la hebilla del cinturón con los
brazos, como había visto hacer a James Cagney y George Raft en demasiadas
películas de gangsters. Me uní al círculo. Sintiendo que un momento creativo
estaba germinando, todos nos quedamos muy quietos, inmóviles, y otros presos
que pasaban se nos unieron, asumiendo la misma actitud.
26
2. De los años sesenta a los setenta: del toasting al rap hip hop
Keep asking, no matter how long
On the war in Vietnam I sing this song
I ain't got no quarrel with the Vietcong...
...Clean out my cell
And take my tail to jail
'Cause better to be in jail fed
Than to be in Vietnam, dead20
--Muhammad Ali, 1966
No son sólo los significantes los que sufren desplazamientos y cambios con
el paso del tiempo, sino que los significados mismos cambian de acuerdo a
convenciones sociales, dentro de una lucha ideológica por la hegemonía
discursiva. Como dice el lingüista soviético Valentin Voloshinov, “la palabra es el
fenómeno ideológico por excelencia” (1992: 24). Y el ‘rap’ es un buen ejemplo de
esta lucha por el significado, a través de su historia podemos constatar el
desplazamiento semántico de una unidad cultural en su vida dentro del terreno de
la interacción social.
20
“Sigue preguntando, sin importar por cuánto tiempo/ cante esta canción sobre la guerra de Vietnam, no
tengo problemas con el soldado vietcong./ Limpien mi celda/ y lleven mi culo a la cárcel,/ porque es mejor
estar en prisión alimentado,/ que muerto en Vietnam”.
27
A lo largo de esta sección se mostrará cómo el campo semántico del ‘rap’
se ha ido transformando hasta designar al género de la poesía oral que
conocemos en la actualidad.
Antes se presentó ya una cita del libro Soul on Ice (1968), de Elridge
Cleaver, quien poco tiempo después de salir de la cárcel se uniría al Black Panther
Party. Organización en la cual, debido precisamente al éxito que obtuvo a través
de esta obra, habría de convertirse en Ministro de Información.21 En Soul on Ice,
además de una reflexión acerca de la situación del hombre negro en los Estados
Unidos previos y contemporáneos al movimiento de los derechos civiles, se nos
presenta una palabra, o una “unidad cultural”, para ponerlo en términos de Eco: el
término ‘rap’ y su campo semántico a mediados de la década de los sesenta.
21
El cargo de ‘Ministro de Información’ consistía en ser vocero e ideólogo del partido. Para mayor
información acerca del Black Panther Party ver: Newton, 1996.
28
sociolingüista William Labov justamente por aquellos años, en su libro Language in
the Inner City: Studies in the Black English Vernacular (1972).
22
Jamil Abdullah Alamin fue también Presidente del American Muslim Council y, en la actualidad, se
encuentra sirviendo una sentencia de por vida, acusado del asesinato de un policía. Esta acusación ha sido
apelada y varios testigos afirman la inocencia del Sheikh Jamil.
29
Time, como “el primer rapero” por “su habilidad para componer rimas a la
carrera”.23 Aunque no hay lugar a dudas acerca de la habilidad para rapear que
durante su juventud mostró el más famoso entre los campeones de los pesos
pesados, afirmar que haya sido el primero en hacerlo sólo demuestra el profundo
desconocimiento que tiene el público, e incluso la prensa anglosajona, sobre la
tradición discursiva dentro de la que surge el rap hip hop.
23
www.time.com/time/time100/heroes/profile/ali01.html
24
Que a lo largo de este libro nos tomaremos la licencia de castellanizar como ‘rapeo’ o ‘rapear’,
dependiendo del contexto.
30
Signifying (rap, Toasting
Rap hip hop
dozens, toasting) (Jamaica)
(E.U.A.)/
(EEUU) Dancehall,
Raggamuffin
(Jamaica)
Un análisis del rap indica varias cosas. Por ejemplo, resulta revelador que uno
rapea a una persona en lugar de rapear con una persona, lo que apoya la
impresión de que el rap debe verse más como un performance que como un
intercambio verbal” (Kochman, 1970: 148).
Así mismo, el trabajo del lingüista norteamericano J.L. Dillard resulta útil,
pues este autor menciona que: “utilizaciones lingüísticas características del gueto
tales como ‘shuckin’ ’n’ jivin’,’ ‘rappin’,’ ‘copping a plea,’ y ‘the dozens,’ resultan
ahora bastante conocidas” (1972: 4). De manera que, para 1972, el término
‘rappin’ era ya “bastante conocido”, aunque entonces se refería a un estilo de
habla característico del gueto y no al rap hip hop como lo conocemos hoy en día.
31
Del rap al rap hip hop
¿Cuándo es que el rap como performance verbal se transforma en el rap hip hop,
el género de la poesía oral que estudiamos? Se ha demostrado ya que el rap
como performance verbal precede al rap hip hop y forma parte del conjunto de
juegos retóricos de la lengua vernácula negra que se han analizado bajo el
término genérico de ‘signifying’.
Es importante hablar ahora sobre la historia del hip hop como cultura, para ver de
qué manera surge y la fuerte influencia que, en sus inicios, tuvieron sobre ella los
sound-systems jamaiquinos y sus toasters, después conocidos como MCs,
quienes son los que terminarían de conformar y definir el discurso del rap hip hop.
Para que surgieran estas primeras rimas, fue necesario que alguien
mostrara la posibilidad de unir la estética del habla coloquial con una plenamente
artística o, utilizando términos del funcionalismo estructural de Roman Jakobson,
era necesario que la función expresiva y la función fática cedieran preponderancia
ante la poética. Este proceso requirió de tiempo y, sobre todo, la hibridación de
dos ramas de la diáspora: la jamaiquina y la norteamericana.
25
Famoso cantante jamaiquino de dancehall quien, al ser albino de ascendencia africana, se hacía llamar
Yellowman por el tono amarillo de su piel.
32
que esto tenía que juntarse pues se trataba de hermanos idénticos, sólo que
uno era del Caribe y el otro de Brooklyn.
Matt Robinson (Cross, 1993: 174).
Si bien es cierto que los poetas urbanos negros de finales de los años
sesenta e inicio de los setenta, los creadores del Black Arts Movement, fueron
definitorios en el desarrollo del rap hip hop, también es cierto que no se puede
dejar de lado otra de las influencias en los orígenes de este género: la del toaster
jamaiquino.
Clive Campbell, mejor conocido en el mundo del hip hop como DJ Kool
Herc, nació en Jamaica en 1955 y emigró junto con su familia a los Estados
Unidos en 1967. Una vez en Nueva York, Herc estudió mecánica en la escuela
técnica Alfred E. Smith pero pronto se encontró con conocimientos obsoletos
dentro de un mercado de trabajo en el cual la mecánica tradicional comenzaba a
verse desplazada por el avance de los autos electrónicos y computarizados (Rose,
1994: 35).
33
En lugar de ejercer su profesión, el joven jamaiquino decidió poner en
práctica un negocio que desde mediados de los años cincuenta había probado ser
sumamente lucrativo en su isla natal y, con la ayuda de un un amplificador
Macintosh y un par de enormes bocinas Shure (a las que nombró como sus
“herculoides”, debido a su apodo original de “Hércules”), Herc estableció en Nueva
York el sound system más poderoso de su época (Rose, 1994: 195). 26
Los bailes de los sound systems eran el sitio en el cual la gente del gueto
venía a divertirse, sin aires de superioridad ni de grandeza; era estar entre tu
propio público... Ser adolescente en Jamaica durante aquella época era lo
mejor del mundo.
26
Para mayor información acerca del desarrollo de los sound systems en Jamaica, ver Bradley, 2001.
27
“Ratas en la sala, cucarachas en el cuarto de atrás, heroinómanos en la callejuela con un bat de béisbol”
34
mezcladora, para crear una continuidad en lo que antes sólo había sido un corte
rítmico (breakbeat) dentro de una canción entera.
Con dos viniles de un mismo tema, Herc tomaba los fragmentos deseados y
los repetía, pasando de una copia del disco a la otra, lo que le permitía mantener
durante tanto tiempo como quisiera, por ejemplo, un ritmo de batería que en la
canción original duraba tan sólo uno o dos compases.
Su experiencia [de Kool Herc] como DJ le decía que los bailarines jóvenes del
Bronx amaban los “breaks” en los discos, las secciones que se desvían de la
melodía para presentar enérgicos ritmos percusivos.
35
De acuerdo con Tricia Rose, el “hibridismo diaspórico” de la cultura africana
en las Américas se ejemplifica con el hecho de que, en un inicio, Herc haya
intentado tocar música de su isla, reggae, ska y dub, sin poder “lograr que el
público respondiera ante la música jamaiquina” (1994:195), así que recurrió al
disco, el soul y el funk, aplicando la técnica bien conocida por los sonideros
jamaiquinos de cortar y pegar fragmentos musicales (cut and paste) y creó, en
1973, los breakbeats que son la base sonora del hip hop.
En este libro no se busca establecer una genealogía rigurosa del hip hop
como estilo musical, para lo cual sería necesario mencionar también a precursores
como DJ Hollywood o DJ Lovebug Starski, a los locutores de la radio afro-
americana y, por supuesto, hablar en profundidad acerca de Grandmaster Flash,
quien desarrolló y popularizó el scratching29 que inventara Grand Wizard Theodore
a los 13 años, o sobre Afrika Baambaata con su Zulu Nation e incansable
búsqueda de break beats en discos que iban desde el euro-disco y techno-pop
alemán, hasta la música hawaiana y el soca caribeño.
La intención de este trabajo es presentar una visión completa del rap hip
hop como género de la poesía oral y hasta ahora lo que se ha demostrado es,
simplemente, que DJ Kool Herc llevó las tradiciones del sound system jamaiquino
a las calles del Bronx. Ahora hay que aclarar que un elemento indispensable del
sound system era la presencia de un maestro de ceremonias (MC), o toaster,30
quien se encargaba de saludar a los presentes, comentar la fiesta y hacer rimas
de doble sentido sobre el ritmo de la música para amenizar.
29
Ver Glosario.
30
En la Sección 1.1 se habló acerca del toasting afroamericano como un género narrativo, sin embargo, aquí
se usa el término en su sentido jamaiquino que, como se explica en el cuerpo del texto, implica más bien a un
encargado de animar fiestas, de ahí el término ‘maestro de ceremonias’.
36
con los agresivos públicos de la isla, especialmente si estos esperaban la
aparición de uno de los grandes ídolos del dub, como “el gran U-Roy”, y se les
presentaba a cambio un número más nuevo, como en el que él participaba: Lee
Perry and the Upsetters:
Era mucho mejor [en Inglaterra, durante los años sesenta] que con el público
de Jamaica. En serio. En la isla la única manera en que sabías que lo habías
hecho bien era cuando no te abucheaban. Incluso hasta llegabas a pensar que
el abucheo en sí mismo no era tan malo, porque en ocasiones te abucheaban
y te arrojaban botellas y piedras y de todo. Y a veces no era por nada que tú
hubieras hecho, sino por un problema del promotor o cualquier otra cosa por el
estilo. Recuerdo una vez en la que se suponía que U-Roy, el gran U-Roy, iba a
hacer un espectáculo en provincia, pero no estaba ahí... así que Lee Perry y
su banda, los Upsetters, de la cual yo era vocalista, tomamos su lugar: el del
artista principal. Subimos al escenario ahí, en la provincia, y salió el MC y se
dirigió a la multitud: “Damas y caballeros, desde Kingston, Lee Perry y los
Upsetters con el famoso Dave Barker”. Cuando salí al escenario escuché a
algunos de esos hombres de campo en las primeras filas rechinar los dientes y
decir: “No queremos a ningún Dave Barker... U-Roy... ¿Dónde está U-Roy?”
Créeme, Carlton y sus hermanos, la banda de los Upsetters, tuvieron que
dejar el escenario por tantos ladrillos y botellas que empezaron a caer...
Carlton tuvo que tirarse detrás de su batería cuando casi le cae un ladrillo en
la cara. Así que el abucheo no era tan malo (Bradley, 2001: 250).
Puede ser que esta rudeza asociada a los conciertos haya sido otra
característica que el sound-system y la cultura popular jamaiquina heredaron al hip
hop. Sin embargo, para nuestros fines, lo importante es hacer notar el contexto del
término ‘MC’ en un discurso acerca de un evento ocurrido en Jamaica en los años
sesenta, y señalar el hecho de que los cantantes de los grupos jamaiquinos no
eran la figura principal del grupo, como ocurría por ejemplo en el rock, el soul y,
anteriormente, en el rhytm and blues, sino elementos subordinados a la música.
Lo mismo ocurrió en los inicios del hip hop, cuando DJs como Kool Herc,
Grandmaster Flash y Afrika Baambaata —quien también tiene raíces familiares en
el Caribe (George, 1988: 57)— robaban todos los reflectores y los MCs (los
Furious Five, en el caso de Flash; The Rock Steady Crew,31 en el de Baambaata;
y Coke La Rock, en el de Herc) eran acompañantes que se encargaban,
simplemente, de amenizar la fiesta con sus habilidades vocales.
31
Cabe señalar que “rock steady” es, de hecho, un género musical jamaiquino que fusiona el rhythm and
blues con el ska.
37
La relación entre el toaster jamaiquino y el MC hip hop de la “vieja escuela”
es descrita por Nelson George en Hip Hop America (1988: 17-8):
Por ahora, baste decir que lo que estas expresiones del arte verbal tienen
en común entre sí, y con el rap hip hop, es que todas forman parte de una “actitud
y patrón [que es] una retención cultural africana dentro de sus situaciones del
Nuevo Mundo” (Abrahams, 1970: 3), todas son producto de la tradición literaria de
la diáspora africana, y todas son “vida destilada”, como definió Gwendolyn Brooks
a la poesía.
38
3. De los años setenta a los ochenta: consolidación comercial y
aparición del reality rap
Como vimos en la sección anterior, desde antes de la mitad de los años setenta
los DJs Kool Herc, Afrika Bambaata y Grandmaster Flash habían definido ya, con
sus tornamesas y épicas búsquedas entre vinilos viejos por el “beat perfecto”, el
sonido del hip hop. Ahora, resulta necesario resaltar que los B-Boys surgieron de
manera casi paralela a los DJs y estos B-Boys, en su gran mayoría
puertorriqueños, serían los encargados de suministrar la coreografía de la cultura
del hip hop.
También hay que mencionar que ya desde finales de los años sesenta las
paredes y las calles de la “gran manzana” habían comenzado a llenarse con las
firmas plasmadas en marcador y pintura aerosol que darían lugar a la expresión
plástica del hip hop: el graffiti. De manera que, de los cuatro elementos que
conforman la cultura hip hop, el rap fue el último en desarrollarse.
Vimos ya que la figura del rapper, o MC, en un inicio no era tan importante
como la del DJ, incluso se puede decir que estaba subordinada a las del B-Boy y
el escritor. En los años setenta, el rapper era una presencia secundaria, como
32
(Abrahams, 1970: 42, 59; traducción mía).
33
“Sin rap, no hay voz que le responda a la máquina” (Cross, 1993: 189).
39
podemos corroborar si recordamos que los Furious Five jamás aparecían
nombrados sin ser presididos por el DJ Grandmaster Flash, o que Coke La Rock
era sólo el animador de los conciertos de DJ Kool Herc. Con el tiempo esto habría
de revertirse.
Dejando de lado este ejemplo, que más bien muestra lo mucho que la
compañía productora del disco, Spring Records, subestimó el potencial comercial
del género, existe un consenso general acerca de que “The Rappers’ Delight”, de
The Sugar Hill’s Gang, marca el inicio de la comercialización del rap hip hop.
34
I.e. Herc, Flash y Bambaata (George, 1998: 57).
40
Es importante destacar esto, pues si bien tocar repetitivamente un break de
una canción conocida era justamente lo que hacían los DJs, al utilizar un grupo
musical se ponía en evidencia que la marca particularmente distintiva del nuevo
género quizá no radicaba tanto en el DJ, sino en las rimas rítmicas, en el rapeo de
los MCs.
Now what you hear is not a test, I’m rapping to the beat
And me the groove and my friends are gonna try to move your feet.
I said a hip hop the hippie the hippie
to the hip hip hop, and you dont stop
rock it out baby bubbah to the boogie da bang bang
the boogie to the boogie da beat...35
Wonder Mike, “The Rapper’s Delight”.
El público que unos meses antes había llevado a los primeros lugares de
las listas a Chic y su éxito “Good Times”, ahora corría a comprar una canción que,
aunque replicaba su música casi nota por nota, cambiaba por completo el
desempeño vocal al utilizar como MCs improvisados a un sobrino de la misma
Robinson y sus amigos, en lugar de la voz femenina de la canción original.
En el mundo del hip hop neoyorquino, que llevaba ya casi una década de
desarrollo, “Rapper’s Delight” se recibió con una mezcla de desprecio –el MC
Grandmaster Caz, de The Cold Crush Brothers, no ha dejado de afirmar desde
entonces que la mayoría de las rimas de esa canción le fueron robadas por MC
35
“Esto que escuchas no es prueba de sonido, estoy rapeando sobre el ritmo/ y ahora mis amigos y yo y este
compás intentaremos mover tus pies./ Y entonces dije:“hip hop, el hippie, el hippie,/ y con el hip hip hop no
paras,/sacúdelo hermanito, sigue el boogie y con el boogie el ritmo.”
41
Big Bank Hank, quien antes de participar con la Sugar Hill’s Gang trabajaba como
guardia de seguridad en la puerta de varias fiestas donde se presentó con su
grupo— y entusiasmo, pues el triunfo comercial de una canción pronosticaba el
futuro éxito de otras. Las compañías disqueras “descubrieron” el rap hip hop en
1979 y, con la llegada de la nueva década, las fiestas callejeras dejaron de ser su
principal medio de reproducción para trasladarse al vinilo.
42
En la actualidad, por otro lado, la oralidad ha resurgido con el uso del
teléfono, la radio, la televisión y otros aparatos electrónicos que, sin embargo,
dependieron para su existencia y funcionamiento del desarrollo previo de la cultura
escrita. Hoy en día la cultura oral “primaria”, es decir, aquella en que se desconoce
la cultura escrita por completo, casi no puede encontrarse en ningún lugar del
mundo, si no es que resulta, incluso, inexistente.
No obstante, como nos recuerda Walter Ong, “en grados variables muchas
culturas y sucbculturas conservan gran parte del molde mental de la oralidad
primaria” (Ong, 1999: 20). El discurso del MC, formado originalmente dentro de
este “molde mental de la oralidad primaria” –primero como juego verbal y después
como performance del arte oral—, al grabarse en disco pasó a convertirse en texto
capaz de ser fijado y repetido con exactitud y, con esto, dejó de ser en cada
concierto “un original, si no ‘el’ original” (Lord, 1960: 101),36 para ser una copia
entre miles más, maquiladas y distribuidas por una industria profundamente “post-
literaria”.
Broken glass everywhere/ People pissin' on the stairs,/ you know they
just don't care/ I can't take the smell, can't take the noise/ Got no money
to move out, I guess I got no choice.../ Don't push me 'cuz I'm close to
36
Albert Lord fue pionero en los estudios académicos de la literatura oral y, para él, una de las principales
características de la poesía oral era que en ella el performance era siempre un evento único, siempre
“original”.
43
the edge/ I'm trying not to lose my head/ Uh huh ha ha ha/ It's like a
jungle sometimes It makes me wonder how I keep from goin' under.
“The Message”
Cuando en 1982 Grandmaster Flash & The Furious Five presentaron “The
Message”, con Melle Mel y Duke Bootee como MC invitado, obtuvieron el segundo
disco de oro entregado para una canción de rap hip hop, habiendo pertenecido el
primero a Kurtis Blow con su sencillo “The Breaks (Part I)”, de 1980. La
importancia particular de “The Message” es que mostró el potencial de denuncia
social que podía alcanzar este género, alejándolo del party rap de los setentas y
sentando las bases para el nacimiento del reality rap que, a su vez, daría lugar al
gangsta rap de finales de los años ochenta y principios de los noventa.
Si bien es cierto que desde su nacimiento el rap hip hop estuvo vinculado a
la vida del gueto y que sus creadores eran justamente los marginados de la
sociedad post-industrial norteamericana, también hay que recordar que en las
primeras grabaciones de este género estos “maestros de la lengua vernácula
44
negra” dejaron casi en el olvido las antiguas consignas políticas al estilo de H. Rap
Brown y Muhammad Alí, por no mencionar la poesía revolucionaria de Leroi Jones
(Amiri Baraka), The Last Poets y The Watts Prophets, para centrarse más en un
discurso festivo del tipo de “The Rapper’s Delight”, con sus invitaciones a que “el
ritmo no pare hasta el amanecer” y disertaciones acerca de la importancia de tener
una buena televisión “para ver a los negros jugar basquetbol”.
45
a “luchar por el derecho de festejar”, o le pedían a su público que “caminaran por
su camino”, usando, claro está, tenis Adidas para hacerlo.
Sin embargo, otros grupos como Public Enemy (PE) y Boogie Down
Productions (BDP), habrían de retomar la estafeta del rap contestatario. El año de
1987 es clave en esto, pues fue entonces cuando estos grupos neoyorquinos
editaron sendos primeros discos, Yo! Bum Rush the Show (Def Jam Records) y
Criminal Minded (B-Boy Records). Un breve análisis semiótico de la portada del
primer disco mencionado puede arrojar algunas pistas acerca de los temas, la
política y la estética de un grupo que, con el tiempo, sería casi sinónimo del rap de
denuncia, también conocido como ‘reality rap’ o ‘raptivism’.
En la portada de Yo! Bum Rush the Show vemos a los miembros de Public
Enemy dándose la mano, con la actitud de quien sella un pacto. El claro estilo de
dramatización cinematográfica nos presenta la puesta en escena de una reunión
de los Panteras Negras, de una junta guerrillera. Lo cerrado de la locación, con la
única luz del foco colgado al techo, realza la tensión dramática. El escenario, un
sótano probablemente, remite de inmediato a la clandestinidad, al ocultamiento.
Esta foto pone en juego un código connotativo que nos hace pensar en los años
46
sesenta y la lucha por la liberación negra. Además de la iluminación y el
escenario, el vestuario ayuda también a conferir estas connotaciones. Las
gabardinas negras, o la boina del personaje que se encuentra en primer plano no
son vestido-habla, ropa que se usa sin seguir un código, sino vestido-lengua,
piezas de vestuario con una función connotativa cristalizada, unidades culturales
como las del lenguaje con un significado socialmente asignado y claramente
establecido (Barthes, 1970: 33): la boina fue parte tanto del uniforme de los Black
Panthers como el de los Brown Berets,37 la boina está presente en las imágenes
de Fidel Castro y el Ché Guevara. En pocas palabras la boina, y en especial si es
roja, puede verbalizarse como un signo que representa resistencia activa; la boina
es utilizada en su calidad de monema, concepto sugerido originalmente por el
lingüista Martinet, quien lo define como la “unidad mínima de análisis gramatical”
(Martinet, 1974: 109) y que sería retomado por Roland Barthes para aplicarlo al
universo del estudio semiótico de la moda.
Estos eran los inicios de las reaganomics y de la epidemia del crack que,
para muchos, fue parte de un esfuerzo deliberado por parte del gobierno
estadounidense y la COINTELPRO38 para desarticular a los movimientos políticos
radicales dentro de los Estados Unidos. Eran los tiempos en que Huey P. Newton,
37
Organización de autodefensa chicana de los años sesenta, creada en emulación de los Panteras Negras.
38
‘COINTELPRO’ es el nombre del Programa de Contra-Inteligencia que desde los años sesenta y hasta los
ochenta implementó el FBI para contrarrestar los movimientos revolucionarios dentro de los Estados Unidos.
Para obtener mayor información al respecto consultar: Clegg, 2000 y Ward, 1990.
47
el más joven entre los fundadores de los Panteras Negras, murió también baleado
por un vendedor de cocaína. Eran tiempos en los que la retórica del nacionalismo
negro de Public Enemy, Boogie Down Productions, Erik B y Rakim y tantos otros
comenzaba a ser un eco del pasado, tiempos en los que los Crips hacía mucho
habían dejado de ser una organización de autodefensa barrial para convertirse en
la principal pandilla negra en los Estados Unidos, tiempos fértiles para el
nacimiento de algo nuevo, un discurso más crudo y desesperanzado. Eran
tiempos del gangsta rap.
48
4. De los años ochenta a los noventa: nace el gangsta rap
Hace tan sólo cinco años los seguidores del hip hop no sólo
estaban interesados en habilidades verbales y ritmos,
nosotros sentíamos que formábamos parte (¡imagínense!)
de una causa justa. Chuck D iba a entrenar a 5,000 líderes
negros en cinco años. KRS-ONE iba a escribir un libro y a
repartir millones de copias gratis para todo hombre, mujer y
niño. El término ‘plan maestro’ aparecía en casi todas las
rimas y la palabra ‘vendido’ tenía, de hecho, algún peso.
--William “Upski” Wimsatt40
39
(Cross, 1993: 183).
40
(Wimsatt, 1994: 9).
49
Durante los años setenta los principales impulsores del breakdance fueron jóvenes
portorriqueños avecindados en la ciudad de Nueva York, newyoricans como Crazy
Legs (Ricardo Colón) de la Rock Steady Crew, o Trac 2, de Starchild La Rock, dos
de los primeros grupos de breakers que hubo.
Los latinos han estado presentes desde el inicio de la cultura hip hop y fueron ellos
quienes desarrollaron el breakdance y lo mantuvieron vivo cuando todo mundo
pensó que sería una moda pasajera que pronto se olvidaría.
Los chicos hispanos siempre estaban en los círculos, bailando. Cuando Charles
Chase comenzó a salir como DJ nos alentó muchísimo, pues ahora teníamos un
latino representando. No importaba lo que dijeran los chicos negros: nosotros
teníamos un DJ puertorriqueño e íbamos a bailar a nuestro modo puertorriqueño
(George, 1988: 15; traducción mía).
BREAKDANCE
Popping Locking
50
El primero de estos estilos californianos, el popping, consistía en la
imitación de movimientos robóticos que desarrolló Charlie Robot en el espectáculo
televisivo de los años sesenta Soul Train, y que después fue modificado por un
bailarín de Oakland, de apodo Sen Robot, responsable de acelerar el ritmo “lento y
meditativo” de Charlie.
Por otra parte, el locking consiste en una “perversión” del Funky Chicken,
popular baile a inicios de los años setenta creado por Rufus Thomas y que los
Original Lockers de Los Ángeles (Cross, 1993: 19) habrían de desarrollar en un
complejo juego de dislocaciones y movimientos musculares coordinados, que
hacían parecer que el cuerpo del bailarín era recorrido por una corriente eléctrica
que iba moviendo uno a uno sus músculos.
Sin embargo, al pasar por el tamiz de Hollywood, estos tres estilos de baile
se fundirían y su mezcla pasaría a ser lo que ahora conocemos como breakdance.
51
Pero, claro está, la historia de las pandillas en Los Ángeles resulta más
compleja que su retrato hollywodense.
52
El origen de las pandillas en Los Ángeles, “capital de las pandillas callejeras
en los Estados Unidos” (Vigil y Yun, 1998: 117), no yace en la población de origen
africano. Más adelante se hablará acerca de las organizaciones sociales
afroamericanas nacidas en los años sesenta durante el periodo de euforia del
movimiento por los derechos civiles, y que en los setenta y ochenta se
transformarían en meras organizaciones criminales, en parte debido al acoso y la
infiltración policíaca. Es necesario aclarar aquí que el pandillerismo, en la ciudad
de Los Ángeles, se remonta por lo menos hasta los años veinte, como podemos
comprobar con la siguiente cita:
El MC Kid Frost, autor del primer éxito de rap hip hop chicano, “La Raza”
(1991), habla al respecto:
53
que sucedió con el popping y el locking en su relación con el breakdance, al verse
reflejada en el espejo mediático hollywoodense terminó fundiéndose con la cultura
afroamericana del este de los Estados Unidos, para amalgamarse en lo que sería
la segunda “nueva escuela” de la cultura hip hop.
Organizaciones como los Maravillas, White Fence y Calle 1841 sentaron las
bases de la cultura pandillera de Los Ángeles, primero pachuca, después chola y
marera en el nuevo siglo. Ellos crearon el placazo (lenguaje de señas que
identifica a los miembros) y, como dijimos, fueron los primeros en usar la tipografía
de las letras góticas para tatuarse los nombres de sus barrios y decorar sus
muros, prácticas ambas que serían retomadas por la población afroamericana.
54
las guerras cristeras. Algunos de estos personajes establecieron vínculos con
organizaciones nazis y fascistas y no está de más que recordar que esta tipografía
era la utilizada en la Alemania Nazi de aquellas épocas. Incluso, algunos “oficiales
eminentes del condado de Los Ángeles... [llegaron a afirmar que] estas pandillas
juveniles estaban inspiradas por agentes nazi y fascistas” (Rosales, 1996: 102).
55
En los años sesenta, la palabra ‘blood’ se utilizaba entre la población
afroamericana como sinónimo de ‘hermano’ y no fue sino hasta mediados de los
setenta que se empleó para nombrar a un miembro de una pandilla. Por su parte
‘crip’, en el contexto de las pandillas negras, se usa para hablar de un miembro de
la pandilla afroamericana de mayor afiliación numérica en los Estados Unidos y
acérrima enemiga de la pandilla minoritaria de los bloods. Aunque muchos
piensan que este nombre surgió por su similitud fonética con el verbo ‘to creep’
(reptar, moverse lenta o cautelosamente) Susan Philips nos muestra que CRIP es
acrónimo de Community Revolution In Process (Revolución Comunitaria en
Proceso), organización de autogestión barrial que buscaba mejorar las
condiciones en el gueto, como podremos ver en el siguiente testimonio de un
miembro de la pandilla Original Gangster Crips, entrevistado por esta antropóloga
en su excelente libro sobre el graffiti en Los Ángeles (Philips, 1999: 285):
[Las pandillas] no son sólo un montón de gente del gueto. Quiero decir, yo soy del
Valle [barrio de Los Ángeles de mayor afluencia económica] y me uní para ser
parte de la revolución, para ser parte de la Revolución Comunitaria en Progreso.
Además de inundar las calles con cocaína cada vez más barata, encarcelar
las voces disidentes (algunos ejemplos son los casos de Mumia Abu-Jamal, los
56
Cinco de Angola, Jamil Abdullah al-Amin y Geronimo Pratt), forzar al exilio, el
retiro, y la grotesca transformación en caricaturas de sí mismos a los antiguos
líderes,42 durante los años ochenta el gobierno estadounidense llevó a cabo una
serie de recortes presupuestales que dañarían severamente los programas
sociales en ese país, privilegiando las industrias militar y penitenciaria.
Gangsta rap
Muchas veces se cita como primer ejemplo de gangsta rap la canción “West Side
Park Killers” de Schooly D (1986), a continuación se menciona a los neoyorquinos
Boogie Down Productions con su álbum debut Criminal Minded y se coincide,
finalmente, que el gangsta rap tal como lo conocemos en la actualidad terminó de
cuajar en la ciudad de Los Ángeles con el disco debut del grupo NWA, Straight
Outta Compton (1988).
42
Dos ejemplos son el de Elridge Cleaver, ex-pantera negra y ahora“nacido de nuevo cristiano”, además de
miembro del Partido Republicano, y el del ya fallecido Jerry Rubin, cabecilla en los sesenta de la
organización radical hippie conocida como YIPPIES y quien pasara sus últimos años, antes de sufrir un paro
cardiaco, como corredor de bolsa en Wall Street.
57
Aquí no se niega la influencia de estos precursores, sin embargo, es
necesario recalcar el hecho de que el gangsta rap surge precisamente en Los
Ángeles, la segunda ciudad con mayor número de mexicanos después del D.F., y
en el barrio de Compton (que no es un gueto exclusivamente negro, sino
mexicano y negro como aclaró Kid Frost).
Los “creadores oficiales” del gangsta rap fueron los miembros del grupo
NWA, siglas de Niggaz With Attitude (Negros Con Actitud), grupo que colocó en
1987 su primer sencillo, “Boys ‘n the Hood”, dentro del compilado NWA and the
Possee y que saltaría a la fama un año después con su disco Straight Outta
Compton.
43
Esta distorsión de la palabra “gangster” se usa para distinguir al pandillero moderno, influenciado por la
cultura chola y hip hop, del antiguo mafioso de la época de la prohibición del alcohol en los Estados Unidos,
al estilo de Lucky Luciano y Al Capone.
58
Si bien en la Costa Este la aparición de los “negros con actitud” (Eazy-E, Ice
Cube, MC Ren, DJ Yella y Doctor Dre) resultó una sorpresa absoluta, en Los
Ángeles era bien conocida su trayectoria individual dentro del hip hop californiano.
El iniciador de NWA fue Eric Wright, mejor conocido como Easy E, quien antes de
utilizar este sobrenombre fue bastante conocido dentro del ambiente hip hopero
angelino, aunque sin jamás tener mucho éxito más allá de esta ciudad.
Por otra parte, Doctor Dre y DJ Yella, antes de acudir al llamado de Easy E
y formar NWA, eran parte de un grupo de electro hip hop conocido como la World
Class Wreckin’ Cru.
A inicios de los ochenta, el hip hop angelino retomó la batuta del “party rap”
surgido en la Costa Este y la Wreckin’ Cru se presentaba en las populares fiestas
móviles que organizaba la Uncle Jam’s Army (Cross, 1993: 121). Con brillantes
uniformes como los que años después usaría el exitoso rapero de Oakland, MC
Hammer, la Wreckin’ Cru mostraba mayor influencia del primer disco de rap
angelino, “Gigolo Rap”, que de Schooly D y su canción “West Side Park Killers”, o
BDP y Criminal Minded.
59
En vista del éxito comercial del grupo arquetípico del raptivismo,44 Public
Enemy, los raperos angelinos que unos años antes imitaban el funk-pop de Prince,
pintándose los rostros con maquillaje y con la firme intención de seguir el ritmo
hasta el amanecer, ahora se apresuraban a quitarse la brillantina, dejar atrás las
coreografías grupales y poner su mejor cara criminal, lo que les trajo un éxito
comercial sin precedentes.
Este tránsito del party rap al reality rap y, finalmente, al gangsta rap se
puede apreciar en los siguientes fragmentos de entrevistas con miembros de la
vieja escuela del hip hop angelino:
Si bien puede parecer banal esta discusión acerca del maquillaje, sirve para
mostrar el radical cambio en el ethos de los hip hoperos angelinos durante la
década de los ochenta. El comentario de Lonzo acerca de su negativa a ponerse
zapatillas deportivas para salir al escenario ilustra la actitud de los raperos de la
vieja escuela en la Costa Oeste –quienes preferían más bien calzar zapatillas de
charol o ante colorido, sumergidos como estaban en la cultura electro-funk
(Parliament Funkadelic, Afrika Bambaata et al)—frente los raperos neoyorquinos
de la nueva escuela, como Run DMC, A Tribe Called Quest, o los ya mencionados
BDP, o PE, que ya no se uniformaban al estilo de las antiguas bandas de soul funk
44
Ver: Glosario.
60
y disco de los años sesenta y setenta, sino que subían al escenario con ropa de
calle, zapatillas deportivas y gorras de béisbol, intentando mostrar una
informalidad que los acercaba al discurso de honestidad y descripción cruda de la
realidad que comenzaría a caracterizar al rap en todo el mundo, mientras que el
ritmo rápido y la actitud despreocupada del party rap y el electro-funk quedaron
atrás durante algunos años.
Lo que ellos hicieron con Straight Outta Compton fue seguir el ejemplo de
otros raperos angelinos que no tenían el respaldo de una disquera y su música se
distribuía de mano en mano por medio de casetes piratas vendidos en escuelas,
presentaciones y mercados de pulgas, copiando el estilo de gente como Toddy
Tee, quien sacó su canción “Batteram” en 1986 (dos años antes que NWA)
inspirado por las violentas redadas policiales contra las casas de crack en esa
ciudad. También, por supuesto, seguían el ejemplo de Ice T, citado como epígrafe
de esta sección, y quien después de darse cuenta de que al rapear como
animador de fiestas estaba “fingiendo”, retornó a sus antiguas rimas gangsteriles
influenciadas por la literatura del novelista negro Robert Beck, mejor conocido
como Iceberg Slim, en honor de quien Ice T tomó su nombre artístico.
61
inicio, mostrándonos una vez más que el rap es un desarrollo de estos géneros
discursivos:
Ice T: La primera música hip hop que escuché fue la de Sugarhill Gang, eso fue
lo primero que escuché con alguien en un disco tirando rimas. Cuando estaba
en las pandillas aprendí acerca de tirar rimas, cuando yo era un pandillero
hacía rimas, rimas pandilleras. Podría decirte una más tarde... ¿Quieres que te
diga una?...
Strollin’ through the city in the middle of the night,
Niggas on my left and niggas on my right,
Yo I cr-cr-cr-cripped every nigga I see,
If you bad enough come fuck with me,
Seen another nigga, I said crip again,
He said fuck a crip nigga this is brim,
So he pulled out the roscoe, Roscoe said crack
I looked again nigga was shootin’ back,
So he fell to the ground and I aimed for his head,
One more shot the nigga was dead.
So I walked over to him, took his gun,
Spit in his face, and began to run
(Vagueando por la ciudad en medio de la noche,
negros a mi izquierda y negros a mi derecha,
Yo!45 Acechaba a cuanto negro veía y le decía,
si eres los suficientemente malo intenta joder conmigo.
Vi a otro negro, le tire el placazo otra vez,
él dijo a la mierda los negros crips, esto es el colmo,
sacó su escopeta y Roscoe46 dijo chale.
Miré de nuevo y el negro ya estaba disparando.
El hombre cayó al suelo y apunté a su cabeza,
un disparo más y el negro había muerto.
Caminé hasta él, le quité la pistola,
le escupí en la cara y comencé a correr) (Cross, 1993: 180-1).
45
‘Yo!’: Interjección apelativa.
46
Juego de palabras entre el término de caló para escopeta (roscoe) y el nombre personal Roscoe.
62
gangsta rap posterior a Straight Outta Compton en realidad entra dentro de la
esfera discursiva del simulacro, pues más que la expresión genuina de
condiciones de vida marginales presenta un retrato caricaturizado, además de
alienante, con abundancia de “representaciones pornográficas y estereotipos
brutales” (Dyson, 1996: 182) y que, como dice en entrevista uno de los miembros
originales de NWA, Ice Cube: “Es como una caricatura, con muchos balazos pero
pocos muertos” (Cross, 1993: 207).
Para mediados de los años noventa, los principales exponentes del género
estaban más cerca de codearse con deportistas multimillonarios como Mike
Tyson, o estrellas de Hollywood como Jennifer López, que con los vendedores de
crack y sicarios del bajo mundo de los que hablaban sus letras. Algunos
mostraban sus antecedentes penales como una especie de retorcido pedigrí y sus
63
problemas con la ley se explotaban con toda la fuerza de la mercadotecnia, por no
mencionar el triste hecho de que sus muertes, especialmente cuando fueron
violentas, terminaron haciendo millonarios a agentes, familiares, “amigos” y socios,
quienes ni tardos ni perezosos se apresuraron a capitalizar el capital simbólico
provocado con los asesinatos de Tupac Shakur o Notorious BIG.
64
Hacia mucho tiempo ya que el rap no era neoyorquino exclusivamente y si
bien desde sus primeros momentos fue un fenómeno pluricultural, en particular
negro e hispano, una vez que los raperos chicanos incorporaron la música
indígena, los mariachis, e incluso las trompetas pseudo-latinas de Herb Albert &
The Tijuana Brass y empezaron a rapear en español y espanglish, el escenario
estaba preparado para su aparición en México y el resto de Iberoamérica.
65
5. ¡De Boogie Down a Neza York, hip hop no para!: el rap llega a
Tenochtitlan
Como se dijo, hay una fuerte influencia boricua en el origen del breakdance y la
participación latina dentro del hip hop en general es relevante. Retomamos ahora
el break, elemento coreográfico de la cultura hip hop que fue el primero en llegar a
México; además de que durante muchos años fue también el principal responsable
de su permanencia y desarrollo en este país.
Con todo esto, el hip hop llegó a tierra mexica percibido originalmente como
un subgénero de la música disco.
Orígenes
La inserción inicial del rap hip hop en el mercado mexicano se dio a través de los
medios masivos de comunicación, en particular la radio y la televisión, en
programas como Fiebre del 2 (1980) y posteriormente XETÚ (1982).
Fue en estos programas que las primeras crews de breakdancers mexicas, como
los Neza City Breakers, con el afamado B-Boy Manolo (Manuel García Olmos) y
47
Cedric Muhammad fue manager del grupo Wu-Tang-Klan (Coll, 2004: 8a).
66
los Rekas, de Xochimilco, que aún siguen activas, encontraron un escenario para
mostrar sus habilidades.
La B”U”K era butibanda, son puros burgueses, bailan break; sí se visten acá,
pero nel, bailan break y eso (García Robles, 1989: 222).
48
www.rapmexicano.com
67
A pesar de las distinciones finas que este informante pudiera percibir entre
Panchitos, aficionados al punk rock, y B”U”K, que cometían el “pecado burgués”
de bailar break, para la televisión comercial no existía mayor diferencia entre
breakers, rockers y punk rockers, entre B”U”K”s y Panchitos, entre la raza de
Santa Fe y los vatos de Neza: para el imperio de las imágenes todos eran,
simplemente, “chavos banda”.
68
house Claudio Yarto, quien hacia finales de los años ochenta era encargado de
programar música en discotecas como el Christine, de Ixtapa Zihuatanejo y el
Danzoo, del D.F. Caló fue concebido, nació, creció y murió a la sombra de la
empresa Televisa, lo cual sin lugar a dudas le ha quitado credibilidad por parte de
los hip hoppers nacionales, al grado que José Tejeda afirma que éste era un grupo
“tan prefabricado y falso como Timbiriche”.49
Un hito fue el éxito de Kid Frost y su canción “La Raza” (1990), en la que el
rapero angelino siguió el camino natural marcado en generaciones anteriores por
los pachucos y mezcló con el hip hop resabios de música mexicana para rapear
en spanglish sobre ritmos nacidos en el seno de la cultura afroamericana. Esto era
lo mismo que, en los años cuarenta, hicieron con el swing músicos méxico-
americanos como Lalo Guerrero, Don Tosti y el Chicano Jump Blues (Cross, 1993:
68). Al menos desde el segundo cuarto del siglo XX, la cultura chicana y la
afroamericana se han influenciado mutuamente en California.
49
www.rapmexicano.com
69
Con “La Raza” y el surgimiento de otros grupos angelinos como, por
ejemplo, Booh-Ya T.R.I.B.E. (de origen samoano), el rap empezó a ser percibido
más que como un fenómeno negro, como uno de minorías, de grupos marginales
o “gente de color”, como reivindicaba en México el colectivo Sector Lúcido:
50
www.afilma_inf.br/joven/diga%zola/hiphopmexicano.html
70
Uno de estos últimos casos es el del MC afro-mestizo Yoalli G, de Zihuatanejo,
Guerrero, quien es uno de los que mayor tiempo llevan en activo, tanto en su
estado como en la ciudad de México:
Tiosha: Estás rapeando desde finales de los ochentas y apenas ahorita sacas tu
disco, ¿por qué es eso?
Yoalli G: Pues porque si no tienes varo, no avanzas, compadre. Eso es así de
simple. Yo soy de Guerrero...de la región de la Costa Grande, donde si no vives
del turismo no vives y si no tienes el varo no tienes forma de sacar nada. En
últimos años, ya van como unos cinco, seis años, que dije: “Bueno, estoy viendo
que otros están sacando una lana de lo que yo hago muerto de la risa, mientras
que estoy platicando contigo estoy haciendo una rola, brother, pues entonces
pues voy a ir allá a buscar ese varo que están embolsándose esos otros
grupos”, la verdad. Me harté de estar trepado en el cerro, padeciendo
enfermedades curables, y dije: “Güey, vámonos a la ciudad a buscar esa lana”...
Es por eso que hasta hace poco que llegué y empecé este desmadre aquí en la
ciudad y por eso hace poco el disco.
Tiosha: ¿Tú al principio dónde tocabas, dónde rapeabas?
Yoalli G: En la esquina del barrio, en la cancha de básquetbol. Allá en
Zihuatanejo hay canchas en todos los barrios. Al momento en que se empieza a
juntar más banda en esto, empiezan incluso a pedirme en las fiestas, bodas,
quince años, y empiezan a decir: “Oye, pues que venga el Yo a rapear” y ahí
también hay un foro. Por medio de casetes empiezo a buscar la forma de sacar
copias de lo que estoy expresando y a distribuirlos. De esa forma empiezo a
tener un ingreso y a generar un poco de varo, hasta que ya logramos lo del
disco, pero esto ya fue pocos años acá y, así, también estando ahora en la
ciudad, los foros poco a poco se han ido abriendo al género como tal, como
cultura.
De manera que la apertura de foros para el rap hip hop y la cultura hip hop
ha sido algo relativamente reciente. También Ximbo, de Magisterio, señala que
incluso hacia la segunda mitad de los años noventa los conciertos de rap ocurrían
en “garages” e incluso mercados callejeros:
71
La primera oleada importante de MCs mexicanos surgió a principios de los
años noventa, época que marcó la transformación del hip hop de un género
musical barato en cuanto a su producción (al requerir sólo de samples,51
tornamesas y voz, en la mayoría de los casos), para convertirse en uno
extremadamente caro por los problemas de derechos de autor derivados por el
uso de estos mismos samples.
La historia de las demandas legales en contra de los grupos de rap hip hop
se remonta hasta los orígenes del género, cuando el grupo Chic demandó a Sylvia
Robinson y la compañía Sugar Hill Records por utilizar en “The Rapper´s Delight”
un fragmento de su canción “Good Times”. Al término del juicio, el equipo legal de
Chic consiguió que Robinson cediera un porcentaje importante de las ganancias y
que se señalara a los compositores de la canción original como autores en los
créditos de futuras impresiones del disco (ver sección 1.3).
51
Ver Glosario.
72
Poco después, en 1992, Gilbert O’Sullivan, un cantante de baladas quien
fue popular en los años setenta, demandaría al MC Biz Markie para conseguir que
retirara de circulación por completo una canción en la que Markie utilizaba un
fragmento del éxito de O’Sullivan, “Alone Again (Naturally)”.
73
hay la teoría de que si tienes menos de diez mil discos no tienes bronca, y aquí
los discos no llegan a las siete mil copias, se tiran cinco mil, siete mil, por
mucho.
Como señala Aztek 732, en México se ha utilizado una forma del sample
que para algunos ni siquiera puede llamarse cabalmente ‘sampleo’ si se considera
éste como el uso creativo de capas de fragmentos sonoros pregrabados para
crear un nuevo universo sonoro. En lugar de hacer sus propias pistas, muchos
grupos mexicanos rapean sobre la música (y, por supuesto, sobre los propios
samples) de otros grupos de rap.
74
Durante los noventa el rap chilango fue creciendo y refinándose, sus pistas
se complejizaron. Brown Society cambió de nombre a Sociedad Café y comenzó a
llevar danzantes de la tradición mexica a sus conciertos, a hacer sus propias
pistas utilizando en ocasiones instrumentos prehispánicos y sampleando a grupos
como Los Ángeles Azules y Los Pasteles Verdes; surgieron grupos como Crimen
Urbano, de Ecatepec y Cartel Aztlán; el sur del la ciudad de México estaba
representado con Canasta Básica (posteriormente Aztec Soul), los MCs Waxer y
Pequeño C (ahora MC Burrón), quienes en diferentes momentos serían parte del
crew Magisterio junto con Van-T, así como con MCs como MC Junior, más tarde
Akil Ammar, Speedy One, ahora conocido como Bocafloja, y el colectivo Sonido
Líquido. También se sumaron al movimiento mujeres como Jezzy P., Malik, Yoez y
Ximbo.
75
Grupo de camaradas... un grupo de amigos que se convirtió en un sello de hip
hop... como del ’94, ’95 empezamos a juntarnos. Nos veíamos en todos los
taquines lo que era el Petate Funky, Lu-K cuando llegó del gabacho, el Homie
cuando estaba en Sociedad Café, el Jerry, que después estuvo en la banda del
Rapaz, nos juntábamos toda esa bandita, nos conocíamos. También Crimen
Urbano estaba, Sociedad Café se juntaba también, había morrillos, un compa
que le decían Bola, que su jefa ya no lo dejó ir a los toquines porque iba mal en
la escuela y había más banda ahí, éramos la Vieja Guardia.
Mi teléfono y esta casa eran las oficinas de la Vieja Guardia, las fotografías del
álbum aquí se hicieron, aquí se hacían las juntas. Sí, lo acepto, me distancié de
la Vieja Guardia, pero ellos saben que siempre los he traído aquí [en el corazón],
en mi álbum nuevo hablo de la Vieja Guardia, soy el único güey que trae tatuado
“Vieja Guardia”…Para mí la Vieja Guardia es con los que empecé, es mi crew52
de por vida, pero en la Vieja Guardia también está la Sociedad Café, en la Vieja
Guardia también está el DFK, está el Yoalli G, está toda esta gente que tenemos
años y años dándole en el medio, el Roco, la Maldita, toda esta gente que
tenemos años queriendo hacer algo con el hip hop.
Dentro de la definición laxa del término ‘Vieja Guardia’ que ofrece Lu-K, se
incluyen grupos como el ya mencionado Crimen Urbano, que está presente en la
escena del rap chilango desde 1994. La palabra la tiene ahora 2 Low, miembro
fundador de este grupo, cuyo relato acerca de sus primeros contactos con el rap y
sus inicios como MC resulta interesante pues nos muestra, de nuevo, la
52
Ver Glosario.
76
importancia que tuvo el breakdance en México dentro del primer desarrollo del hip
hop chilango:
Desde mediados de los años ochenta, el hip hop como cultura, y el rap
como elemento específico de esta cultura, se fueron desarrollando poco a poco,
sin espacios y de manera autónoma a los grandes medios de comunicación que
impulsaron a grupos como Caló y que lanzarían, en 1997, a Control Machete con
su disco Mucho barato. De repente –un poco como les había pasado a los
creadores del hip hop en el Bronx de los años setenta con The Sugar Hill Band—
un grupo que no formaba parte de la escena del hip hop surgía sonando a una
especie de Cypress Hill (el productor de Mucho Barato, Jasón Roberts, también
produjo a este importante grupo angelino) y cantando totalmente en español.
77
apurarse a grabar las canciones que llevaban años presentando en conciertos, de
manera que no resulta sorprendente que la mayoría de los discos de rap hip hop
de la Ciudad y el Estado de México surjan después del ’97.
Así mismo, hacia finales de los años noventa, algunas personas que habían
pertenecido al movimiento punk tardío de la ciudad de México comenzaron a
incorporarse a las filas del hip hop, atraídos por sus posibilidades contestatarias y
de denuncia. Éste es el caso de Wilson, quien actualmente vive en Oakland,
California, y quien junto a Zeta (productor) y Spía 104, formó en 1997 el grupo
Reporte Ilegal. El caso de Reporte Ilegal sirve para ejemplificar un aspecto
fundamental dentro del proceso de circulación del rap hip hop en México: la
piratería.
78
Como sabemos, la piratería es de gran importancia en un país que ocupa
uno de los primeros lugares mundiales en este rubro. Alentada por la falta de
oportunidades laborales dentro del sector formal, e incluso por campañas
propagandísticas gubernamentales como fueron la de “empléate a ti mismo”
durante el sexenio de Carlos Salinas de Gortari y la promoción de los changarros
que se hizo durante el sexenio foxista, la piratería es un elemento básico en la
economía mexicana y el rap hip hop nacional no se ha mantenido ajeno a esta
tendencia.
79
Guadalajara, San Luis Potosí, Durango, toda esa gente me ha escuchado de
piratería. ¿Sabes cuántos e-mails recibo a la semana de gente que me dice:
“Oye, dónde puedo comprar tu disco original?”. ¡Puta! Tres, cuatro personas a la
semana me escriben de que: “Oye, ¿tu disco original dónde lo compro?”. Y yo
que: “Perdón, pero no hay discos originales”.
Claro que este punto de vista acerca de la piratería no es unánime entre los
MCs y DJs. Muchos de ellos, especialmente los que han sacado discos con
empresas independientes que tienen acuerdos con distribuidoras (como es el caso
de Crimen Urbano, que sacó su disco Mundo Criminal (2003) bajo el sello Histeria
Colectiva), consideran que la piratería los exime de ganancias que, por derecho,
deberían ser suyas. Para sustentar este punto, veamos los testimonios de 2 Low y
Zay-G:
80
y ropa con aerógrafo, Wilson hace perforaciones en un estudio de tatuajes) y
aunque tienen posiciones encontradas acerca de sus posibilidades profesionales a
futuro, casi todos consideran que el rap en México está creciendo y se muestran
optimistas sobre cosechar frutos por tantos años de trabajo. Para terminar este
capítulo, leamos algunos de sus testimonios al respecto:
Tiosha:¿Tú crees que hay un resurgimiento del rap, o es algo que está
pasando?
Ximbo: Afortunadamente no lo veo como resurgimiento, sino que veo que el
resurgimiento sucedió en el ’96 ó ’97, ahí surgió otra vez. Ahorita aquel
resurgimiento está empezando a dar frutos, los grupos ya han evolucionado un
poco y veo que, también por cuestiones del contexto en general, cuestiones
como la computadora, cuestiones como que ya haya quemadores de CD, que
cualquiera pueda tener un Acid en su casa para hacer cosas, eso ha hecho que
se dé un levantón muy cabrón, sobre todo con las nuevas generaciones.
Antes, para pasarnos música tenía que ser en un casete y no cualquiera se
ponía a grabar un casete y, aparte, se daba mucho el fenómeno de que la banda
no quería pasarte la música, porque era tan difícil conseguirla que uno era muy
celoso de su música, “no se la voy a pasar a cualquiera”, un rollo muy raro. En
cambio ahora hay por todos lados, te metes a Internet y puedes bajar las
canciones que quieras. Cualquiera, o casi cualquiera, tiene un quemador en su
casa o un compact con quemador. Ahora se vende hip hop en las calles, te vas
a cualquier tianguis y va a haber un puesto de hip hop, antes no había.
O sea, sí se ha ido poniendo muy fuerte, pero creo que fue porque las bases,
que empezaron a surgir en el noventa y tantos, fueron raíces verdaderas, se
empezó a hacer una raíz neta. No fue un rollo pasajero. Esas bandas
evolucionaron y aquí están y los morros tienen el apoyo de esas bandas y su
influencia, directa o indirecta. Aparte de que el hip hop a nivel mundial está de
moda ahorita, ves los Grammys y hay un chingo de nominados que son raperos.
Entonces, yo creo que sí, se está poniendo muy fuerte. El resurgimiento fue un
poquito antes, pero ahora es cuando se está poniendo fuerte y creo que ahora sí
va a ser en serio. Dudo muchísimo que vuelva a pasar, por lo menos en México,
ese rollo de que pase de moda y termine la actividad, creo que va a seguir y si
pasa de moda seguirá alguna banda haciéndolo y cuando vuelva a estar de
moda van a estar más cabrones todavía, eso es lo chido.
* * *
Tiosha: ¿Ustedes ven un futuro profesional dentro de esto?
2 Low (Crimen Urbano): Ésa es la idea que tenemos, pero obviamente
todavía el hip hop en México no es rentable, no hay gente que pague tanta
lana por ciertos grupos independientes como por pagarle a Control Machete, a
Cártel de Santa, o Akwid. Como independientes no hay gente que realmente
te pague lo que sí vale tu tiempo, porque el tiempo es muy importante para mí,
que tengo mucho y no recibo todavía nada.
* * *
Tiosha: ¿Piensas que hay un futuro con las disqueras?
Yoalli G: Mira, vamos a empezar por un punto: las disqueras son consorcios,
son empresarios y, pues, no encuentro mucho de conveniente en que un MC
esté pretendiendo una disquera. Te van a dar difusión, se van a quedar con tu
producción, te van a dar fama, se van a quedar con tu lana... eeeh, no
entiendo eso.
81
Ahora, me parece que, como medio de expresión, es importante que la gente
que está adentro del movimiento del hip hop se dé cuenta de lo que puede
hacer. Por un lado, al comunicar, la responsabilidad de estar en el escenario y
decir algo que valga la pena, que tenga fundamento; segundo, si lo está
tomando como una forma de vida, pues debidamente que sea también esa
remuneración. Vamos, se puede hablar de intercambio, hablamos de moneda,
yo te vendo mi disco, tú me lo compras directamente sin esperar que haya una
disquera detrás poniendo aparadores y tu póster, tu foto en todos lados. Tú
mismo vas a los eventos y los organizas. Creo que lo que debemos hacer
como creadores es buscar esa independencia, porque las disqueras son
empresas que te van a manipular y decir qué hagas y qué no hagas.
Tiosha: ¿Tú ves un futuro profesional como MC, crees que puedas vivir de
esto decorosamente?
Yoalli G: ‘Decorosamente’... No sé qué es eso porque creo que nunca lo he
tenido, pero acostumbrado a no comer alguna vez y otra vez tampoco, que
cuando tengo lo disfruto, debo decir que actualmente vivo expresando lo que
pienso y vendo mis discos. Tengo más de cien canciones y, por ende, más
discos, más cosas que mostrar. De esta manera es que me he ido
manteniendo. En Guerrero ya conocen más mi material que aquí en el D.F.,
acá en el D.F. apenas hice esta producción de la Breve Antología, pero igual
no deja de ser una forma de ingreso, como me he estado manteniendo.
* * *
Tiosha: ¿Tú ves un futuro profesional como MC, crees que puedes ganarte la
vida como MC?
Jezzy P: Sí, sí, yo creo que sí. O sea, manejándolo bien, llevando disciplina,
echándole ganas. Yo sí siento que sí... sí, sí.
* * *
Tiosha: ¿Tú ves futuro profesional dentro del hip hop en México?
Lu-K: Creo que teniendo un niño y viviendo con una chava mi lírica va a
cambiar bien cabrón, liricalmente voy a cambiar bien cabrón, porque ahorita
realmente sigo siendo el pinche mismo MC marihuano de siempre. Tengo un
poco más de conciencia, pero sigo siendo... el mismo hip hop güey, ¿no?
Digo, soy el único que mete al Tío Gamboín, al Rogelio Moreno en sus líricas.
Lo que yo siempre he querido hacer es ser un MC reconocido en México por lo
que dije, no por cómo me veía, por lo que dije. Por ejemplo, esa rola de la
comida (“Lupita’s Taco Shop”) no la saqué en este álbum, pero la quiero sacar
en el segundo porque esa rola yo sé que me va a dar de comer, ¿no?,
literalmente.
* * *
Tiosha: ¿Tú vez un futuro profesional al ser MC?
Shiker: Pues... yo quería verle un futuro profesional, pero por lo mientras
quiero tener algo, una base con lo que yo pueda luego hacer lo que a mí me
guste. Estoy estudiando diseño gráfico y cuando termine quiero seguir con lo
de la música y mi futuro, pero quiero tener una base con la que yo pueda
mantenerme y hacer las cosas que me gustan, porque ni modo que con el
dinero de mis papás me esté manteniendo, ¿no?, pues no. O sea, sí está un
poco, un poco difícil.
* * *
Tiosha: ¿Tú ves un futuro profesional como MC aquí, en México?
Spía 104: Sí lo veo, porque cada vez surge más gente y ahora sí que, es
chistoso, es lo que igual a mucha banda le digo, ¿no? Cuando nosotros,
bueno, cuando yo empecé tal vez yo era una persona que está, vamos a
ponerlo que aquí está un chingo de gente y yo estaba aquí [pone su mano
derecha en puño y la izquierda cerrada con un único dedo estirado], todo esto
82
[el puño] es un chingo de gente y aquí [el dedo] estoy yo. Entonces, conforme
han pasado los años o yo he estado avanzando o la gente ha llegado, una de
las dos. Ahorita ya nos estamos encontrando entre toda esa gente y siento
que se va a comercializar, porque aquí en México lo que buscan mucho es el
dinero. Se va a comercializar y va a crecer, pero no en el pedo cultural, sino en
el pedo lucrativo; va a haber gente que dice: “Mira, esto es lo de moda, esto es
lo que está pegando ahorita”, como lo que pasó con el ska y lo que está
pasando con el reggae. Igual también tiene que haber dinero, para que
sigamos sacando producciones. Pero también hay que sacar dinero
inteligentemente. O sea, realmente el dinero si va a llegar pues llegará a su
tiempo, no lo voy a buscar; si a mí me lo dan, lo voy a aceptar, no voy a decir
tampoco “no, no, no, no”. Si me lo van a ofrecer de corazón, yo lo voy a recibir.
* * *
Tiosha: Bueno, algo que es un estereotipo del rap es la cuestión del dinero.
En el rap el estereotipo es el oro, tener un chingo de “perras”, un chingo de
lana, un coche del año, etcétera...
Aztek 732: Como yo... [risas]
Tiosha: Sí, como tú... De hecho aquí en México nunca pasa eso, ningún
rapero que haya entrevistado, o que conozca, realmente ni siquiera vive del
rap. ¿Qué opinas, le ves un futuro profesional?
Aztek 732: Sí, yo sí veo que va a haber billetes en esto, pero no los veo en mi
bolsa. Creo que va a llegar alguien más listo y le va a poner precio a todo y
etiqueta y lo va a vender... ¡Adiós! Pero va a pasar como con el Grand Wizard
Theodore, no va a vivir de que “yo inventé el scratch y cada vez que te
avientas un scratch tienes que pagarme”, imagínate si así fuera. En el rap va a
pasar que va a llegar alguien que va a decir: “Va, te hago tu producción y te
compro tu producción y te voy a dar, no sé... tanto varo” Pero él la va a
comprar y va a hacer sus billetes, el dinero es de los empresarios y no del
artista, sencillo.
83
Cruzando fronteras:
funcionamientos ideológico y
poético del rap hip hop
84
1. Ideología y hip hop: el rap se globaliza
El rap y el hip hop surgen en los Estados Unidos y, como hemos visto, son fruto de
la interacción de distintas comunidades de la diáspora africana, en particular la
norteamericana y la jamaiquina. El rap hip hop es desde sus raíces un producto de
la globalización donde se unen la tradición africana de la narración oral, basada en
el poder fundante de la palabra creadora, o nommo, con las técnicas de
improvisación verbal de los animadores de fiestas jamaiquinos, los toasters, y los
juegos callejeros de la oralidad practicados en las urbes norteamericanas: dozens,
toasting y signifying.
85
de la opresión, sino también producto comercial inmerso en la dinámica mercantil,
e incluso instrumento para la hegemonía discursiva estadounidense.
Al analizar el fenómeno del rap hip hop es importante tener en mente estos
dos polos y mantener una perspectiva dialéctica. En su proceso de globalización,
el rap hip hop ha sido válvula de escape para la expresión de un discurso
prohibido, el de los grupos oprimidos, pero también efectivo vehículo del
imperialismo cultural, alentando la imposición de valores de consumo y
fetichización del dinero, entendiendo este último concepto como un fenómeno que
“abarca todos los niveles de la estructura social capitalista, y se manifiesta como
una cosificación de las relaciones sociales entre las personas, que aparecen como
relaciones entre cosas” (Haidar, 1990: 23).
Girls, all I really want is girls!.../ Girls, to do the dishes,/ Girls, to clean up my
room,/ Girls, to do the laundry,/ Girls, and in the bathroom,/ Girls, that’s all I really
want is girls! (¡Chicas, todo lo que en verdad quiero son chicas!.../ Chicas, para
que limpien los platos,/ chicas, para que aseen mi cuarto,/ chicas, para que
laven mi ropa,/ chicas, y en el baño,/ ¡Chicas, todo lo que en verdad quiero son
chicas!) (Beastie Boys, 1986).
86
poder” (Reboul, 1986: 22) y, por el otro, expresión de la voluntad colectiva de un
grupo, como dice Emilio de Ípola, defensor de la ideología entendida en su sentido
amplio, (1982: 135):
Ideología
Es necesario ahondar un poco en el concepto de ‘ideología’ y los sentidos
restringido (o negativo) y amplio (o neutral) que se le han asignado. El primero en
definir el concepto de ‘ideología’ fue Destutt de Tracy, filósofo francés, quien lo
introduce en 1796 para hablar, simplemente, de una ciencia de las ideas. De
hecho, para de Tracy y sus seguidores del Institut National la ideología no
pertenecía al campo de la filosofía o las ciencias humanas, sino al de la zoología;
pues como cita John B. Thompson: “nuestra comprensión de un animal es
incompleta si desconocemos sus facultades intelectuales” (Thompson, 1993: 49).
53
El término ‘contracultura’, surgido en los años sesenta con el trabajo de Theodore Rozak (Roszak, 1969) y
otros académicos de la Universidad de California en Berkeley, se utiliza escasamente en este trabajo pues
desde sus inicios tuvo una definición poco clara. Con el paso del tiempo y la mediatización de las otrora
expresiones “contraculturales” el término ha adquirido una ambigüedad que, a mi parecer, impide su uso. ¿Se
puede considerar contracultural el trabajo de magnates de la industria musical y ahora incluso miembros de la
realeza británica como Mick Jagger o Paul McCartney? Para ver una excelente crítica del término
‘contracultura’ y su aplicación en México, recomiendo consultar: Gaytán, 2001.
87
militares en Rusia, provocando que la palabra ‘ideología’ pasara a significar “ideas
erróneas... divorciadas de las realidades prácticas de la vida política” (Thompson,
1993: 51).
Esta connotación negativa del término fue heredada por Marx y Engels,
quienes en La ideología alemana la calificaron como una “tiranía de los
pensamientos”, una “cámara obscura” a través de la cual se presentaba invertida
la realidad, en aras de la explotación del hombre por el hombre.
Las ideas de la clase dominante... son las ideas dominantes en cada época, o
dicho en otros términos la clase que ejerce el poder material dominante en la
sociedad es, al mismo tiempo, su poder espiritual dominante... las ideas
dominantes no son otra cosa que la expresión ideal de las relaciones materiales
dominantes (Marx y Engels, 1979: 50).
Claro está que acerca del concepto de ideología se han escrito miles de
libros y no es la intención de este capítulo cubrir ni siquiera medianamente la
historia de una noción tan compleja Sin embargo, la doble acepción del término
nos permite una mejor comprensión del fenómeno que nos concierne, pues la
ideología es significado utilizado por el poder para mantener las relaciones de
dominación, pero también conjunto de ideas de un grupo social orientadas hacia la
acción.
88
De manera que, más que profundizar el debate acerca de una noción
enredosa aquí se abordará al rap hip hop como producto ideológico en ambos
sentidos del término y se mostrará brevemente la ruta de su globalización bajo
esta doble perspectiva:
There's a lump in my throat/ But I just can't swallow my Brown Pride/ I'm like an
eagle with a snake in its mouth/ and a brown fist representin’ Frost in the house/
Coming back hard on the rap scene,/ It's all about the red, white, and green
(Tengo un nudo en la garganta/ pero simplemente no me puedo tragar mi orgullo
moreno./ Soy como una águila con una serpiente en la boca/ y un puño moreno
representando que Frost está en la casa,/ regresando con fuerza a la escena del
rap,/ todo se trata del rojo, el blanco y el verde).
89
Los latinos, particularmente newyoricans, dominicanos, cubano-americanos
y méxico-americanos, fueron fundamentales en el desarrollo de la cultura hip hop
desde sus inicios, con DJs como Charlie Chase (de origen puertorriqueño),
taggers como Julio 204 (de origen mexicano y a quien se reconoce como el
segundo tagger neoyorquino, después del greco-americano Taki 183), grafiteros
como Lee Quiñónez, o breakdancers como Crazy Legs, sin olvidar al
puertorriqueño Spanish Fly quien, junto a los Terrible Two, sacó en 1981 (apenas
dos años después del lanzamiento de “The Rapper’s Delight”) la primera canción
de rap hip hop bilingüe, titulada “Spanglish”, bajo el sello de la disquera Enjoy.
Y es precisamente esta asimilación del rap hip hop al español a través del
spanglish lo que permitiría su posterior desarrollo no sólo hacia México, sino
también España y el resto de Latinoamérica, pues los MCs chicanos marcaron el
discurso que surgió más tarde en los diferentes países de habla hispana, como
podemos comprobar verificando que la totalidad de los entrevistados para este
trabajo (ver Apéndice) coinciden en que una de sus mayores influencias para
rapear en español fue haber escuchado a Sinful e Intellect (ahora I-Man), MCs del
grupo chicano Mexakinz; que grupos como Ilya Kurriaki and the Valderramas, de
Argentina, utilizaron samples de la película chicana Sangre por Sangre en su disco
Horno para calentar los mares; que uno de los productores reconocidos del hip
hop ibérico, Jefe de la M, deriva su nombre de la famosa organización criminal
méxico-americana conocida como Mafia Mexicana (la Eme); que los Racionais
MC’s de Brasil utilizan tipografía gótica (característica del muralismo y el tatuaje
chicano) en sus discos; y que un grupo chileno como Tiro de Gracia utiliza en sus
letras elementos léxicos del caló mexicano como son ‘güey’ o ‘pinche’.
Los sujetos productores del discurso del rap hip hop en español han
reivindicado el discurso del nacionalismo chicano como referencia-choque,
haciendo una analogía con las “palabras-choque” que Olivier Reboul define como
“términos o expresiones que producen por sí mismas, debido a su fuerte
connotación, un resultado incitativo, cualquiera que sea la frase en que se
90
inserten” (Reboul, 1986: 116). Ideológicamente, en su sentido amplio, esta
referencia-choque funcionó como elemento de cohesión e identificación alrededor
de un discurso marginal, en búsqueda de la “desalienación lingüística” que “sólo
se hace posible cuando el proletariado adquiere conciencia de clase” (Haidar,
1990: 43-44).
Sin embargo el rap hip hop chicano, que originalmente fue producido por
verdaderos “sujetos de enunciación”, entendiendo este término “con un sentido
social, colectivo, como representante de una clase social... desde una posición
clasista insertada en determinadas condiciones histórico-sociales” (Haidar, 1990:
45), al ser imitado por grupos como Control Machete o Illya Kuriaki, dependientes
de grandes trasnacionales y conformados por los hijos de la burguesía
regiomontana y porteña respectivamente, al estar en boca de sujetos discursivos
que no vivían una realidad de opresión y marginalidad, que eran parte del centro y
no la periferia en sus países, se vería transformado, distorsionado y
esquematizado por estos nuevos “pseudo sujetos de enunciación”; categoría que:
54
“Quihubo, aquí estoy soy MC Kid Frost/ soy jefe, patrón, I’m the Big Boss [soy el mero-mero]./ Mi cuete is
loaded, is full of balas [mi cuete está cargado, lleno de balas],/ I’ll put it in your face and you won’t say nada
[te lo podré en la cara y tú no dirás nada]./ Vatos cholos, call us what you will [vatos cholos, llámanos como
quieras],/ You say we are assassins and train ourselves to kill [dices que somos asesinos y nos entrenamos
para matar]./It’s in my blood to be an Aztec warrior [está en mi sangre ser un guerrero azteca], /to go to any
extreme and to hold no barriers [llegar a cualquier extremo y no tener límites], /Chicano, and I’m brown and
91
posibilidades creativas de las versiones subalternas de la realidad, las
subversiones que ofrece el rap hip hop.
Para el momento en que “La Raza” salió al mercado, con la ayuda musical
del también chicano DJ Tony G, Kid Frost cargaba a sus espaldas una trayectoria
de más de diez años dentro del mundo del hip hop angelino, habiendo participado
desde los inicios del movimiento junto al MC afroamericano Ice T, con quien
rapeaba en las legendarias fiestas organizadas por la Uncle Jam Army durante
inicios de los ochenta, y habiendo sacado su primera grabación, “Rough Cut”, en
1984. Este sencillo, que pasó casi desapercibido fuera de Los Ángeles, tenía una
letra completamente en inglés, en la cual si bien había ciertos elementos de
denuncia social, el origen étnico del MC resultaba irrelevante, como podemos ver
en el siguiente fragmento:
Sometimes you wait around rockin’ cold hard streets,/ People strugglin’ hard just
tryin’ to make ends meet./ I just stand tough, hold down my feet,/ Never
understand the meaning of the word ‘defeat’ (A veces esperas entre calles frías y
duras,/ con la gente luchando tan sólo para salir adelante./ Me mantengo firme,
con los pies bien plantados,/ sin comprender nunca el significado de la palabra
‘derrota’) (Cross, 1993: 71).
proud [Chicano, soy moreno y orgulloso], /Want this chingazo? [¿Quieres este chingazo?] Simón, ése, you
better get down [simón, ése, mejor agáchate]” (Kid Frost. 1990. La Raza. Virgin Records).
92
sampleaba ferozmente a James Brown, por aquello de tener al creador de “Say it
Loud (I’m Black and I’m Proud)” como música de fondo. A finales de los años
ochenta e inicios de los noventa, en tiempos previos a la caída del muro de Berlín,
no era necesario que los manifestantes escribieran “otro mundo es posible” en sus
pancartas, pues todo mundo sabía que así lo era y las verdades que son
demasiado obvias no resulta ni siquiera necesario enunciarlas.
Fuck tha police!/ Comin’ straight from the underground/ young nigga got it bad
cuz I'm brown/ and not the other color, so police think they have the authority/ to
kill a minority…/ Fuckin with me cuz I'm a teenager/ with a little bit of gold and a
pager./ Searchin’ my car, lookin’ for the product,/ thinkin’ every nigga is sellin’
narcotics…/ Just cuz I'm from the CPT,/ punk police are afraid of me./ A young
nigga on a warpath,/ and when I'm finished, it's gonna be a bloodbath/ of cops,
dyin’ in LA./ Yo Dre! I got somethin’ to say:/ Fuck tha police! (¡Que se joda la
policía!/ Saliendo del metro, soy un joven negro y la tengo en mi contra por ser
moreno/ y no del otro color, así que la policía piensa tener la autoridad/ para
matar a un miembro de la minoría.../ Me joden porque soy un adolescente/ con
un poco de oro y un localizador de personas,/ revisan mi auto buscando el
producto,/ pensando que todos los negros venden narcóticos.../ Sólo porque soy
de CPT [Compton]/ los policías maricas me tienen miedo./ [Soy] un joven negro
en el sendero de la guerra/ y cuando termine va a haber un baño de sangre/ de
policías muriendo en L.A./ Yo Dre! Tengo algo que decir:/ ¡Que se joda la
policía!).
El discurso del rap hip hop en la Costa Oeste comenzó a adquirir un tono de
confrontación abierta que hacía patente el desencanto producido por una década
de reaganomics, el plan económico que junto con las políticas de la primer
ministro inglesa, Margaret Thatcher, serían el preludio del neoliberalismo, o
capitalismo salvaje, del que tanto se habla en nuestros días.
93
A raíz tanto de los problemas legales derivados de canciones como “Fuck
tha police!”, como de las revueltas de Los Ángeles en 1992, al comprobar la
influencia ideológica (en el sentido amplio) del rap hip hop sobre los jóvenes del
gueto, las disqueras irían dejando de lado el rap político y privilegiarían la
pasteurizada fusión de hip hop con soul y rhytm and blues que se conoció con el
nombre de New Jack Swing y fue promovida por productores de la Costa Este
como P. Daddy (George, 1998: 114-118).
De forma que, mientras que por un lado el rap hip hop comenzaba a
alcanzar grados de éxito comercial sin precedentes y su discurso se iba haciendo
cada vez más inocuo (New Jack Swing), por el otro se volvía más explícito que
nunca antes (Gangsta Rap) y comenzaba a ofender las conciencias no sólo del
FBI y las instituciones gubernamentales estadounidenses, sino también las de
líderes de todas las tendencias religiosas y políticas dentro de la misma
comunidad afroamericana, desde la cristiana y conservadora Dolores Tucker,
hasta Louis Farrakhan, dirigente de la Nación del Islam y promotor de la famosa
“Marcha del millón de hombres negros” hacia la Casa Blanca.
55
www.jrep.com/info/10thAnniversary/1997/Article_8.html
94
catedrático en la Universidad de Colorado, así como autor del ensayo “Chicano
Rap and the Critique of Globalization”, más que promotores de un discurso sucio
los MCs son “intelectuales orgánicos” (McFarland, 2000: 301) en el sentido
gramsciano del término (Gramsci, 1971: 6), quienes “cumplen con la función de
solidificar una auto-comprensión de la juventud chicana” (McFarland, 2000: 312).
Para McFarland, el rap hip hop expresa la “teoría de las mayorías sociales”
(McFarland, 2000: 297), entendiendo este concepto como la mayoría mundial que
no tiene acceso al estilo de vida de la modernidad; es decir, las dos terceras
partes de la población del planeta que han quedado excluidas, tanto dentro como
fuera de los países del primer mundo, de los bienes y servicios de la sociedad
post-industrial (McFarland, 2000: 310).
Si bien es cierto que muchos MCs presentan en sus discursos una crítica
articulada de estas condiciones de opresión, generalizar la categoría funcional de
“intelectual orgánico” a la totalidad de los MCs de rap hip hop acaso resulte un
tanto exagerado, pues la dicotomía entre el rap hip hop de denuncia y el rap hip
hop dedicado a la idealización de la vida criminal y la sociedad de consumo es
patente, aunque hay que matizar esta afirmación indicando que muchas veces el
llamado gangsta rap muestra patologías sociales reales, utilizando siempre un
tono cínico que raya en el desenmascaramiento a través de la ironía, como en el
siguiente ejemplo, fragmento de la canción “Confessions (Hell Don’t Pay)” de Tha
Mexakinz (1994):
95
Que chingue a su pinche madre.../ este mundo me tiene encarcelado,/ bien
presionado, en este lado,/ vicioso pa’ salir con un milagro./ Cuidado, ¿no lo has
mirado,/ no te ha pasado? Mira,/ mi sueño es tener un chingo de mujeres,/ una
pinche mansión, mucha lana y un nuevo Mercedes,/ salir del barrio que es más
bajo que una mina,/ sin medicina, emborracharme como en una cantina,/
moverme lejos como el mar, sin estorbar,/ sigo siendo ambicioso como Pablo
Escobar./ “Ten fe, pídele a Dios y algún día vas a pegar”,/ mi jefa siempre me ha
dicho, pero es muy duro llegar./ Pa continuar yo necesito concentrarme,/
cuidarme de estos güeyes que ya quieren terminarme./ La vida no es para jugar
y tú lo sabes,/ ¡'toy listo para los chingadazos como Julio Cesar Chavez!
Some feel this oppression no longer exists,/ well here's something they missed:/
Self D means self determination./ To put a stop to colonization/ we begin with a
historical analysis/ to illustrate a Mexican paralysis./ See, Mexico's been
occupied since 1848,/ which left the mexicano at a constant second rate./ Now
learn the word called ‘colonization,’/ stranger in your own land under
exploitation,/ this is the state of the indigena today…/ We didn’t cross the
borders, the borders crossed us!/ We didn’t cross the borders, the borders
crossed us!/ We didn’t cross the borders, the borders crossed us! (Algunos
sienten que esta opresión ya no existe./ Bueno, aquí está algo que pasaron por
alto:/ la auto-D, significa autodeterminación./ Para poner un alto a la
colonización/ comenzamos un análisis histórico que ilustra la parálisis
mexicana./ México ha estado ocupado desde 1848,/ lo que dejó al mexicano
constantemente en segundo nivel./ Ahora aprende la palabra ‘colonización’,/
extraño en tu propia tierra bajo la explotación,/ éste es el estado del indígena
hoy en día.../ ¡No cruzamos las fronteras, las fronteras nos cruzaron a
nosotros..!/ ¡No cruzamos las fronteras, las fronteras nos cruzaron a nosotros..!)
Otros gupos, como Psycho Realm (2000), reflexionan acerca del papel de la
policía, los medios y las drogas para el control y el embrutecimiento de la gente:
The master plan don't include us so they shoot us,/ supply weapons, coke, crack
and buddha,/ Keep track of who took the bait through computers,/ enslave and
regulate the hoods through the juras./ We're all victims as the plot thickens,/
better recognize the big plan clock's ticking,/ stricken by the plague no sign of us
saved,/ Satan is the ruler of the modern day (El plan maestro no nos incluye, así
que nos disparan,/ proveen armas, coca, crack y buda [marihuana],/ siguen la
pista de aquellos que mordieron la carnada a través de computadoras,/
esclavizan y controlan los barrios a través de los juras [policías]./ Todos somos
víctimas mientras que su complot va se va haciendo cada vez más denso,/ es
mejor que reconozcas que el reloj del gran plan está corriendo,/ atacados por la
plaga, ningún signo de que nos hayamos salvado,/ Satán domina en estos
tiempos modernos)
96
Algunos más, como el texano Capone (2001), más bien se identifican con la
policía en cuanto figura de poder:
Fuck the intro, straight to the point,/ the mero mero's back here to rock this joint,/
straight from the streets with the gangsta beats,/ run the goddamn calles like the
police [A la chingada con la introducción, vamos derecho al punto,/ el mero mero
regresó para arreglar los asuntos./ Vengo derecho desde las calles con los
ritmos gangsta,/ domino las malditas calles como la policía].
Estos fragmentos nos muestran las similitudes discursivas entre textos con
una carga ideológica distinta y sirven para ejemplificar una vez más que la división
entre el rap hip hop contestatario y el gangsta rap no resulta tajante, sino es más
bien parte de un continuum discursivo. Analicemos ahora el extremo fetichista y
cosificador.
56
www.unesco.org
97
originalmente se dedicaban a fabricar ropa para un público inmerso en la cultura
hip hop y ahora puede encontrarse en tianguis y tiendas departamentales; o
comprobando el fanatismo con el que los cholos recorren al uso de las marcas
Dickies o Ben Johnson en su vestuario.
Roco y Bocafloja en
la UACM
¿Qué tan importante es la moda en el hip hop? Es una pregunta a la cual se le
pueden dar muchas interpretaciones e igual número de respuestas. Todos
sabemos que los pantalones "baggy", "hoodies", artículos Adidas y fat laces son
sellos distintivos de nuestro estilo de vestir, pero ¿qué pasa cuando la excesiva
comercialización de un estilo, antes exclusivo de hip hoppers, se convierte en un
negocio más, en donde lo que menos importa es el hip hop mismo?
Todos sabemos que en un principio el usar una cierta marca tenía como
finalidad el sentirnos identificados, sentirnos parte de algo; hoy en día
desafortunadamente no es así. Actualmente, marcas como Ecko, Pelle Pelle,
Sean John, Fubu, Damani Dada, Enyce, por mencionar algunas, tienen como
intención primordial la de convertirse en líneas de ropa más generalizadas, no
exclusivas del hip hop, con el fin de abarcar un mayor número de consumidores
y por ende mucho más dinero; es decir, ellos intentan crecer al estilo de Levi’s o
Gap, que son marcas que las puede usar una ama de casa, un rockero, una
persona de edad avanzada, en fin, cualquier tipo de público…
98
El cuestionamiento entonces ahora es: ¿quién carajo nos representa hoy?, estoy
de acuerdo que aún existen marcas que siguen en la misma ruta hip hop como
pnb, rp55, akademiks, triple five soul y algunas otras, pero la industria del hip
hop ha caído en el mismo vicio mercantilista en exceso como todas las demás
industrias…
Quizá la opción más viable sea restarle un poco de importancia al logo que
nuestra camiseta muestre y buscar un estilo auténtico con el que nos
identifiquemos realmente. ¿Por qué representar a alguien que no te representa a
ti? ¡Creo que la esencia verdadera de la cultura hip hop va mucho mas lejos que
un look y ambiente frívolos!
De reflexión es la cuestión.
Bocafloja.57
Los raperos brasileños recalcan la importancia de ver al hip hop como un medio
para expresar su realidad cotidiana. Ellos identifican al grupo norteamericano de
rap Public Enemy como su principal fuente de inspiración, pero expresan fuertes
sentimientos en contra del estado actual (el cual consideran como
comercializado) del rap en los Estados Unidos. DJTR, el DJ de MVBill critica no
sólo a estrellas norteamericanas del rap como 2Pac, Notorious B.I.G. y Coolio,
sino también a los raperos brasileños que obtienen su inspiración de estos
“desviados” modelos a seguir. Como explica: ‘Hay raperos brasileños que se
auto-transportan a Los Ángeles y Nueva York, queriendo ser afroamericanos...
piensan que tienen que manejar un auto fino, que tienen que beber cerveza
norteamericana escondida en bolsas de papel estraza, que tienen que decir que
todas las mujeres son prostitutas. He conocido tipos que andan en ese viaje y
57
http://abzurdasonnora.imess.net/manifiesto/artículos/bocafloja.html
99
les digo, hombre es como si estuvieras tomando el libro del hip hop, la historia
del hip hop, y la leyeras al revés... no me importa si el gangsta rap en los
Estados Unidos habla acerca de cosas sin sentido, yo soy afrobrasileño y tengo
que luchar por mis ideales aquí en Brasil. 58
Por todos los medios (siendo uno de ellos el rap hip hop) las “minorías
sociales” buscan imponer ante las “mayorías sociales” su visión del mundo para
mantener las relaciones de dominación, y estas últimas utilizan todos los medios
de expresión a su alcance (siendo uno de ellos también el rap hip hop) para
manifestar un punto de vista contestatario.
100
Sin embargo, tanto en los guetos de Estados Unidos como en los barrios
marginales de Asia, África y América Latina, el rap ha logrado que los jóvenes de
las “minorías sociales” se familiaricen con las grandes figuras de la lucha por los
derechos civiles en Norteamérica, como podemos comprobar con la lectura de Al-
Ahram, periódico egipcio de gran circulación:
59
http://weekly.ahram.org.eg/2003/651/cu4.htm
101
ideológico complejo y que la ideología siempre podrá ser analizada, y utilizada,
desde dos polos radicalmente opuestos.
102
2. Hacia una poética del rap hip hop
La palabra llega a los oídos como viento que vuela, que ni para ni
reposa, y se aleja ligera, si el corazón no anda al acecho, listo para
cogerla.
--Chrétien de Troyes, El caballero del león, 1300 d.C.
60
“Desde hace aproximadamente cuatro siglos, leemos, en general, con la mirada, sin proferir sonidos,
directamente de la percepción de dos a cuatro palabras a la comprensión del significado. Al leer, el alfabeto
ya no existe; no proferimos sonido alguno. Sólo hay ideogramas. La lectura visual transforma las secuencias
de letras separadas por espacios en blanco en ideogramas, aunque sean fonéticos” (Lapacherie: 76; cursivas
mías). Ver también: Guglielmo y Chartier, 1997.
103
verdadero objeto de la lingüística, de acuerdo a Ferdinand de Saussure,61 como
base para la creación estética.
61
“El objeto lingüístico no es definido por la combinación de la palabra escrita y de la palabra hablada; ésta
última constituye por sí sola ese objeto” (Saussure, 2000: 53).
62
El concepto de “oratura” (orature) es presentado por diferentes autores como Thiongo (1986), o Chinweizu
y Madubuike (1983), dentro del contexto de una crítica literaria “descolonizadora” para evitar los problemas
etimológicos implícitos en el término de literatura oral.
104
Si el antiguo esclavo era capaz de leer y escribir al igual que sus amos, si
era capaz de la “creación artística”, acaso también participara del conjunto de la
comunidad humana y fuese elegible como un ser con las mismas
responsabilidades y, sobre todo, con los mismos derechos.
Como se ha planteado a lo largo de este libro, el rap hip hop surge del
diálogo entre la tradición afroamericana de los juegos verbales, que hemos
agrupado bajo el concepto del signifying, y de la práctica afro-jamaiquina del
toaster, o MC, surgido en el contexto de los sound systems, que eran comunes
durante los años sesenta en esa isla.
En el caso del rap ocurrió un fenómeno similar al que seis siglos antes
sucedió con el soneto, que del provenzal pasó al resto de las lenguas europeas,
105
reteniendo convenciones formales, retóricas y referenciales rastreables fácilmente
hasta sus orígenes en escritores como Petrarca.
106
encargado de proveer el equipo de amplificación, podremos comprender que los
MCs tenían que probar sus niveles acústicos sobre la marcha, haciendo que la
emisión fática, que buscaba probar la capacidad del canal comunicativo,
adquiriera a través del ritmo y la entonación matices emotivos, apelativos y, sobre
todo, estéticos.
Otro vestigio estilístico que guarda el rap hip hop y nos muestra de nuevo
su relación de descendencia con la práctica afroamericana del signifying, es la
presencia del “yo intrusivo” que, de acuerdo a Roger D. Abrahams: “le permite al
narrador tener dos personas dramáticas al mismo tiempo, la suya propia como
narrador o comentarista, y la del héroe” (1970: 59; ver arriba).
107
El pensamiento que yo exporto [es] del que envenena,
tus hijos siguen mis valores falsos, já, es una pena,
prenden la televisión y forman parte de la cadena
que te ahoga y te mantiene al nivel del piso,
soy el infierno pero te muestro sólo el paraíso,
ésa es la paradoja de éste mi hechizo.
Podemos decir ahora que una de las características más recurrentes del
rap hip hop es el uso de la primera persona como sujeto y objeto de la
enunciación; es decir, el uso del “yo intrusivo” planteado por Abrahams. Sin
embargo, para esto también hay excepciones.
108
funciones referencial, que ofrece información acerca del contexto discursivo, y
apelativa, que se dirige al receptor.
Claro está que al decir que una función es preponderante en un texto dado
no se afirma que otras funciones no estén presentes, como nos indica Roman
Jakobson:
Aunque distingamos seis aspectos básicos del lenguaje, nos sería sin embargo
difícil hallar mensajes verbales que satisficieran una única función. La diversidad
no está en un monopolio por parte alguna de estas varias funciones, sino en un
orden jerárquico de funciones diferentes. La estructura verbal de un mensaje
depende, primariamente, de la función predominante (1988: 353).
Sin embargo, más que polemizar acerca de las funciones del lenguaje de
Roman Jakobson, aquí lo que se busca resaltar es una serie de características
109
retórico-tipológicas del rap hip hop, habiendo nombrado hasta ahora: (1) el paso
de lo fático a lo estético (la prueba de sonido, el habla de la calle); (2) la voz
poética en primera persona que permite el desdoblamiento narrativo (el “yo-
intrusivo” de Abrahams); y (3) un carácter aleccionador que se delata en la
recurrencia con que este discurso recurre a la apelación (uso de la segunda
persona).
Para reforzar nuestra tesis acerca de este tercer punto, quisiera mostrar
otro ejemplo más, ahora de Sociedad Café (2002), grupo que no busca
evangelizar sino ofrecer la perspectiva de un joven criado en el barrio, utilizando
tambén la apelación como estrategia discursiva:
Resulta interesante señalar que incluso las letras de rap hip hop escritas
totalmente en primera persona, que de hecho son autodescriptivas, también
pueden resultar apelativas,63 al interpelar al oyente a través de la descripción de
un yo intachable que se convierte en una especie de fórmula ideológica, en el
sentido de este término planteado por Oliver Reboul (1986: 8), que está ahí para
ser imitada, ofreciendo una realidad que “obliga a tomar posición”.
63
“La función conativa o apelativa se orienta hacia la segunda persona, hacia el oyente o receptor o
destinatario al cual exhorta. Constituye un toque de atención para el que escucha, una llamada para que
comprenda el mensaje y así poder actuar sobre él, influir en su comportamiento.” (Beristáin: 225).
110
El siguiente texto, del MC defeño Bocafloja (2002), ejemplifica lo expuesto:
64
Ver arriba, sección 1.3.
111
Claro está que la rima es en sí una forma más de lograr ritmo, pues éste no
es más que “el efecto resultante de la repetición, a intervalos regulares, de un
fenómeno” (Beristáin, 2003: 445sv.); además de que, como nos indica Iuri Lotman:
“la repetición cíclica [el ritmo] es una ley de la existencia biológica, a la que se
hallan sometidos el mundo animal y el hombre como parte de este mundo” (1999:
48). Aquí vale decir que en toda la poesía (y en toda producción musical) “el
desarrollo de la enunciación... está orientado hacia la repetición cíclica de
equivalencias” (Beristáin, 2003: 447sv.), lo que la diferencia, precisamente, de la
prosa (o del ruido).
65
Un buen ejemplo de la actitud hostil hacia la palabra hablada en algunos escritores queda manifiesto en la
siguiente cita, del poeta experimental español José Luis Castillejo: “La servidumbre de la escritura a la
palabra hablada no terminará mientras McLuhan y sus seguidores, que son legión, pretendan ‘retribalizarnos’
y mantenernos en una actitud complaciente respecto al actual abuso de los medios que el hombre emplea para
informarse sobre la realidad[...] El odio a la escritura tiene la finalidad de enterrar la modernidad y abrir una
nueva era totalitaria, conformista y tribal, libre de toda crítica radical que puede poner en entredicho todos y
cada uno de los supuestos de nuestra cultura” (Sarmiento, 1990: 254).
112
a toda esta vida que está hundida en maldad.
Aprendiendo a vivir di muchos tropezones,
voy mejorando, aceptando mis errores.
Cuando eres loco, un mal viviente entre la gente
eres despreciado, un enfermo, un demente.
Cuando todo estaba bien era, simón, ejemplo,
siempre trabajando y no es que sea modesto.
La gente que me ve: “¡Mira! ¡Oh, ¿qué es eso?!”
Soy lo que soy, lo que el barrio me ha hecho,
soy duro, correoso, no tengo sentimientos,
lágrimas derramadas que se ha llevado el viento.
Cada uno de los versos de este texto está dividido claramente en dos
partes a través de una pausa (hemistiquio), lo cual, como hemos sugerido, es una
de las convenciones estéticas del rap hip hop. No resulta sorprendente que así
sea si consideramos, como se dijo, que estos fragmentos discursivos no ocurren
en un vacío sonoro, sino son acompañados por patrones rítmicos musicales que,
casi en su totalidad, presentan compases de cuatro cuartos con el segundo y
cuarto tiempos de cada compás acentuados y, por lo tanto, las letras tienden a
adecuarse al esquema binario de la música.
113
Sin embargo, y éste es un fenómeno interesante que vincula estilística e
intersemióticamente al rap hip hop con el graffiti hip hop, el Wild Style,66 surgido en
el mundo de los graffiteros y que implica la complicación de un tema hasta hacerlo
irreconocible, se ha traducido al rap.
En el caso del rap hip hop en español este tipo de estilo se ha desarrollado
principalmente entre MCs portorriqueños como Mexicano 777 o Winchester
Yankee (hoy conocido como Daddy Yankee, dentro del género del reguetón);
mientras que en México solistas como Big B retoman y nativizan esa misma
tradición.
66
Ver Glosario.
67
En la rima asonante “la homofonía o identidad de sonido se da sólo entre las vocales”, mientras que en la
rima consonante, o completa, “coinciden todos los fonemas” (Beristáin, 2003: 444, 445sv.).
114
distintos sino que se aplica dentro de cada verso, otorgando, de acuerdo a la
definición que hemos dado de ‘ritmo’, una mayor cualidad rítmica, al involucrar la
continua repetición de partículas homófonas.
Analicemos ahora otras de las estrategias retóricas del género. Uno de los
tropos recurrentes dentro de la cultura hip hop es la honestidad, el “mantenerse
real”, el “no fingir”. Esta importancia en la negación de la materialidad de la
simulación ha llevado a que un escritor especializado en la cultura hip hop, William
“Upski” Wimsatt, escriba un artículo –encabezado por la caricatura de un hombre
afroamericano cargado con un libro que nos recuerda a las tablas de la ley de
Moisés y donde se lee “don’t fake the funk” (no falsifiques el funk)— en el que se
pregunta irónicamente qué es lo que significa con precisión el “mantenerse real” y
cómo se puede saber si se está fingiendo (1994: 56-57).
115
cotidiana en los barrios y, por lo tanto, la metáfora no se usa con tanta frecuencia
como el símil. Las comparaciones se establecen a través de la partícula ‘como’,
vinculando por contigüidad al emisor, el MC, con las hazañas de algún artista o
deportista famoso, o personajes históricos.
116
Aquí no se pretende una revisión exhaustiva de la poética del rap hip hop,
sino mostrar que dentro de la poesía perteneciente a la oratura, y en particular en
el rap hip hop, existen convenciones estilísticas y retóricas definidas, cuya
presencia puede y debe ser estudiada desde la perspectiva de las ciencias del
lenguaje y la crítica literaria, ya que el rap hip hop es una práctica artística que se
constituye como eje creativo de numerosos artistas de la oralidad, quienes por
este medio encuentran vías de expresión y encauzan el impulso creativo verbal
humano, que no pertenece sólo a unos cuantos elegidos, sino a cualquier persona
que con honestidad y trabajo busque plasmar en palabras su visión del mundo…
“manteniéndose real”.
117
Guerreros líricos: intertextualidad e
identidad hip hop
118
1. Los renegados del funk: DJs, samples, y hip hop
68
Rose, 2001: 146; traducción mía.
69
Russollo, 1991: 8.
70
Como se ha mencionado, la palabra inglesa ‘sample’, que se puede traducir como ‘muestra’, dentro del hip
hop implica la grabación de un tema musical para su posterior reutilización en una canción nueva. Los
sampleadores están encargados de recopilar numerosos de estos fragmentos musicales para re-mezclarlos en
una creación original nueva. Ver: Glosario.
71
Si tomamos la invención del scratching (1975, GrandWizzard Theodore) como evento fundacional, lo que
no deja de ser, sin embargo, arbitrario.
119
La importancia de la inserción de los platos72 como instrumento musical es
tal que algunos autores comparan su relación con el hip hop a la de la guitarra
eléctrica con el rock and roll (George, 1988: 95).
Como se ha mencionado, los DJs fundadores del hip hop (Kool Herc,
Grandmaster Flash, Afrika Bambaata) surgen a principios de los setenta en el
barrio neoyorquino del Bronx, en un medio social desfavorecido y con fuerte
presencia de inmigrantes, particularmente caribeños.
72
‘Platos’ es el término que se utiliza para referirse a los tornamesas para tocar discos vinílicos.
120
sentido de este término propuesto por Olivier Reboul, quien define la ideología
sectaria como una ideología “propia de las minorías[…] en abierto conflicto con la
ideología difusa, con las ideas ‘recibidas’[...] la ideología sectaria desprecia lo que
está y predica el cambio” [1986: 24]—. El hip hop surge entre personas excluidas
de los servicios de recreación hegemónicos y que, por tanto, tuvieron que crearse
ellos mismos una infraestructura propia (Rose, 1994: 34-35).
Este procedimiento se instauraría como la base del sonido del hip hop
(recibiendo el nombre de breakbeat) y trastocaría las nociones del discurso
musical, particularmente en cuanto a sus conceptos de ‘originalidad’, ‘oficio’ y
‘autoría’. Esta característica es importante, pues con el posterior desarrollo (a
inicio de los años ochenta) de la tecnología de copiado y reproducción sonoras
digitales,74 se popularizaría también el uso de elementos sonoros no musicales,
como diálogos de películas o fragmentos de discursos, abriendo aún más las
73
“Todo producto ideológico posee una significación: representa, reproduce, sustituye algo que se encuentra
fuera de él, esto es, aparece como signo” (Voloshinov, 1930: 31).
74
Los samples.
121
definiciones de lo musical y cuestionando profundamente la exclusividad del autor
sobre su obra.
Este rasgo nos permite también comprobar de nuevo que las formaciones
semiótico-discursivas dependen profundamente de las formaciones ideológicas y
las formaciones sociales, pues fueron hechos ideológicos y sociales los que
facilitaron que la profesión del DJ se popularizara en tan poco tiempo: era mucho
más sencillo y económico producir canciones con las nuevas técnicas que
desarrollando habilidades musicales tradicionales. Además de que los
instrumentos utilizados (un par de tornamesas y una mezcladora casera) también
eran mucho más baratos, en ese entonces, incluso que una guitarra eléctrica.
122
en un banco de datos. En 1981 se creó el primer ordenador dedicado
exclusivamente a la digitalización de sonidos, el Emu Emulator (George, 1998:
92). En un principio estos aparatos fueron diseñados básicamente para abaratar
los costos de producción cuando se necesitaban instrumentos caros o de difícil
acceso en alguna grabación. Pero los DJs, acostumbrados por los breakbeats a la
manipulación de materiales ajenos para recontextualizarlos, encontraron en el
sampler un instrumento ideal para sus fines.
Vale la pena citar a Dan Sicko, de cuyo libro Techno Rebels. The
Renegades of Electronic Funk (1999: 93) se toma el título de este apartado, quien
además de presentar un repaso histórico del desarrollo de la música electrónica
en la ciudad de Detroit, menciona que a inicios de los años ochenta en esa ciudad:
“el techno y el hip hop eran casi una misma cosa”.
Esto es porque fue con el surgimiento del hip hop que comenzaron a
ponerse en práctica masivamente las máximas de la música concreta, que plantea
que la música no puede limitarse al terreno de lo instrumental, sino que tiene que
abordar e incorporar los ruidos de la vida cotidiana. Y esa teoría hoy en día es
práctica casi hegemónica dentro del discurso de la música pop, mucho más allá de
sólo el hip hop o la música electrónica.
123
En un disco fundacional, tanto por el uso de samples como por su retórica
verbal, que por primera vez aborda directamente temas políticos y el nacionalismo
negro, como es el caso del disco It Takes a Nation of Millions to Hold Us Back
(1988) de Public Enemy, se utilizan desde guitarras distorsionadas de grupos de
heavy metal como Anthrax, hasta fragmentos de discursos de oradores de la
Nación del Islam de Louis Farrakhan, pasando por sirenas de ambulancias,
balazos, rechinidos de llanta, ruidos de intercomunicación policíaca, y voces de
personajes de dibujos animados.
En el hip hop se vuelve abierto lo que antes era velado: que la creación no
se da en el vacío sino en el contexto del interdiscurso. Mientras que en el pasado
se buscaba la originalidad, ahora comienza a buscarse la transformación, el
reciclaje: procesos constitutivos de la intertextualidad.
75
“Con el término intertexto se designa el conjunto de las relaciones con otros textos que se manifiestan en el
interior de un texto” (Maingueneau, 1976: 22).
76
Con este término se intenta hablar de “rupturas semánticas en el hilo continuo del discurso” (Maingueneau,
1976: 137).
124
Me gusta hacer música que nunca podría haber sido hecha por músicos, para
mí la parte creativa de la producción de hip hop consiste en tomar música de
diferentes géneros, de distintos periodos temporales, de distintos estilos, y
fusionarlos en una nueva pieza musical, una nueva totalidad (distinta de la suma
de sus partes), algo con alma propia.
Para muchos, el uso de los samples debe castigarse con igual severidad
que cualquier otra forma de piratería.78 Para otros, el sampleo es un truco que sólo
sirve como enmascaramiento de la falta de un “verdadero” talento musical. Esta
postura, indudablemente ideológica,79 en el sentido restringido del término, coloca
por un lado a los instrumentistas tradicionales (con sus estudios y dominios
técnicos como una especie de bastón del poder)80 y por el otro a los carroñeros
77
“Las metáforas permiten romper con los tabúes, con la palabra prohibida, con los temas prohibidos (como
plantea Michel Foucault), permiten romper con el poder que hace silenciar y callar” (Haidar, 1991: 26).
78
Para ejemplos de esto se pueden consultar las páginas 94-95 de Hip Hop America (George, 1998), en las
que se describen las demandas impuestas a finales de los años ochenta e inicios de los noventa por los autores
originales de fragmentos sampleados, contra grupos como De la Soul, Public Enemy y Biz Markie.
79
“Lo que hace de la ideología algo muy diferente de una simple visión del mundo, es que está siempre al
servicio del poder, y su función es la de justificar su ejercicio y legitimar su existencia” (Reboul, 1986: 22).
80
“El poder bajo el antiguo régimen era ostentador. Se afirmaba y se mantenía mediante signos que apuntaban
directamente a la imaginación: el trono, la corona, los ornamentos, el cetro, la etiqueta de la corte, etc. Y esto
125
recopiladores de fragmentos ajenos, a quienes se les niega incluso el calificativo
de ‘músicos’.
es así no sólo en el caso del poder real, sino también en el de los jueces, los médicos, los universitarios, poder
del cual Pascal decía que se relaciona menos con la competencia profesional que con el hábito.” (Reboul,
1986: 26).
126
2. “Arriba los buscavidas”: crónica de un concierto de hip hop en
el sur-oriente de la ciudad de México.
127
análisis de las formas simbólicas lo más estrechamente ligado a los hechos
sociales concretos” (Geertz, 1973: 39).
81
“La cultura es pública porque la significación lo es” (Geertz, 1973: 26)
82
Comunicación personal.
128
hasta la ropa holgada, los tenis y la ropa deportiva que a diario vemos en las
calles, así como en los samples, los DJs y la noción de música reciclada.
Como nos dice Spía 104: “el hip hop está abierto a cualquier género,
porque nosotros nos robamos sampleos de cualquier género”. Así, en Berlín un
grupo de rap conformado por turcos tiene el nombre de Islamic Army y utiliza
elementos de la música tradicional de su país de origen; en Brasil, Planet Hemp
incorpora instrumentos y ritmos locales en su material; en Bolivia, Wayna Rap y
Ukamau Y Ké rapean en aymara y quechua, mientras que Los Nin, de Ecuador,
hacen lo propio en quichua; Aztlan Underground, de California, o Sociedad Café,
de Ciudad Neza, usan teponaztlis mezclados con cajas de ritmos y soplan
caracoles marinos mientras rapean en náhuatl discursos zapatistas, en el primer
caso, y los versos del famoso poeta-emperador Netzahualcóyotl acerca de lo
efímero de la vida, en el segundo.
Para Fredrik Barth, “los límites de los grupos parias son conservados de un
modo muy estricto... por lo cual se ven obligados a hacer uso de diacríticos
fácilmente reconocibles para anunciar su identidad” (Barth, 1976: 39). Este autor
considera que “si un individuo depende para su seguridad del apoyo voluntario y
espontáneo de su propia comunidad, la autoidentificación como miembro de esta
comunidad deberá expresarse y confirmarse explícitamente” (Barth, 1976: 47).
129
no estaban aceptando el orden de las cosas; tampoco lo hacían los B-Boys, que
no necesitaban más que de un pedazo de cartón para ponerse a girar en cualquier
esquina y organizar un concurso de baile, ni los escritores, o los grafiteros,
quienes se apropiaron de la ciudad misma como lienzo, ni tampoco lo hicieron los
raperos y MCs.
83
“En la calle están los socios y los negocios/ lo primero es lo primero y es conseguir dinero,/ para vivir hay
que buscarse la vida, así es la movida:/ ¡Arriba los buscavidas!” (Ari: 1999). Une versión previa de esta
crónica fue publicada orginalmente en la revista Punto de Partida (2003).
130
crípticos: tags y bombas que además de agregar color a un entorno gris, sacan
transitoriamente del anonimato a sus autores.
84
Comunicación personal con Venus, veterano grafitero defeño, ahora radicado en Querétaro, que durante su
época de mayor actividad (a finales de los noventa) fue “rey” del sur-oriente de la ciudad de México.
131
Y este ‘casi’ es importante, porque acaso a unos kilómetros más hacia el
corazón de Iztapalapa, en un sitio menos kitsch que ese bodegón vuelto rincón
tropical a base de humo artificial y luces de colores, de un mural con hojas de
palmeras y animales salvajes un tanto deformes, acaso en el mero culo, en el
hoyo fonqui en serio, un concierto como éste hubiera sido un tanto más apestoso
y, acaso, interesante.
85
Comunicación personal.
132
personaje manga; en las barbas finísimas, conformadas por apenas una línea de
vello marcando la quijada y el nacimiento del labio superior. Hacerse estos afeites
debe tomar horas.
Las mujeres, por su parte, traen el pelo con dreadlocks, o repleto de trenzas
al estilo de las negras del gueto, o muy corto y erizado con gel. Las cholas aún se
pintan los labios de negro pero ya cada vez menos, ahora predomina el look
infantil, colorido, o el militar, con pantalones baggie ya no tan inmensos como hace
unos años, pero aún dos o tres tallas más grandes de lo necesario: tops apretados
y ombligo perforado al aire, boxers subidos y pantalones abajo, brillantina en el
rostro de niña, los tenis reglamentarios.
Los jugos, los refrescos y el agua cuestan veinte pesos, las chelas
veinticinco, pero casi nadie compra. La mota, lo que cuesta es el trabajo de
ocultarla porque la revisión a la entrada ha sido minuciosa, pero por lo que se
puede olfatear en el antro se deduce que mas de uno logró pasar sus leños o su
hitter, y se fuma más o menos abierta y libremente en el área frontal al escenario,
donde los B-Boys forman círculos para hacer sus quiebres, sus aspas de molino,
sus poppings y lockings. El dance-floor está caliente, cubierto con humo de una
marihuana que quizá no sea la “crónica” del Dr. Dre en California, pero seguro es
zacate fresco, michoacano u oaxaqueño.
Cuando Ari comienza a tocar, los B-Boys ya no tienen espacio para sus
acrobacias pues la gente se empuja contra el escenario, emocionada. Esta rapera
mulata no ha sido distribuida en México por disquera comercial (o independiente)
alguna. Su fama se debe a la piratería comercial y privada, al MP3, a los discos
quemados que pasan de mano en mano como recomendación entre amigos, a los
CDs piratas que vienen con todo y la portada y la contraportada originales, hasta
con las letras (cosa que el CD original no ofrece), y que se pueden comprar en
Tepito, en el Mercado de la Bola, en Santa Cruz, en Xochiaca. Los presentes
conocen bien el trabajo de Ari, rapean a unísono sus letras, gritan los coros, se
133
emocionan con “éxitos” que se han vuelto tales sin la ayuda de hit parade alguno,
sólo a través de voz de boca, de la “radio bemba” como dirían cubanos y
argentinos. La misma Ari parece sorprenderse de ser tan conocida en un país en
el que nunca antes había estado.
El nombre del juego es hip hop y su centro, como dijimos, se llama respeto.
Y éste se obtiene a través del trabajo y las “batallas”, que se dan en paredes para
“escritores”, pistas de baile para B-Boys, platos para DJs, y micrófonos para MCs:
Tan sólo sé que de heroína sólo tengo una: yo y nada más que yo,/ pues ya ves
aquí estoy, sin envidias ni avaricias,/ orgullosa de lo que soy. A la mierda con los
héroes fuera de serie,/ con heroínas que te influyen con lujosas vidas, dime/
¿dónde están cuando me encuentro sola,/ dónde están cuando las cosas no
funcionan?/ ¿Dónde están, eh, dónde están, dónde, coño dime, dónde están?
Al final del concierto, a manera de despedida, Ari toca dos anchores y, por
supuesto, cumple con un rito canónico de cualquier concierto de hip hop que se
respete: el free-styling, el cypher, el palomazo, en esta ocasión con los anfitriones
mexicanos. Suben al escenario MC Lu-K, ahora de La Vieja Guardia y antes del
desaparecido grupo Chicalangos; Aztek 732, directo desde Olivar del Conde, así
como Ximbo, representando a las raperas mexicas y al crew Magisterio.
134
otra party, ya sea en el mero culo de la ciudad, o más para arriba, en la cabeza del
gran cadáver viviente en que se ha convertido esta enorme México-Tenochtitlan.
135
OUTRO
136
Espero haber mostrado un panorama claro del desarrollo del rap, desde sus
raíces como juego verbal en los guetos de los Estados Unidos hasta su llegada y
desarrollo en la ciudad de México.
137
Espero poder presentar en el futuro trabajos que aborden algunos de estos
temas y que surjan nuevas voces en el diálogo sobre un fenómeno cultural que,
aunque ha sido abordado extensamente en la literatura anglófona, en castellano la
crítica y la investigación sobre el tema no reflejan aún la riqueza del fenómeno y
su presencia en las urbes de hispanoamérica. Quisiera invitar a otros
investigadores y entusiastas, tanto en nuestro país como en el extranjero, a seguir
expandiendo el universo del discurso acerca del hip hop “con eñe”.
Quisiera pedir disculpas a todos los que han quedado fuera y expresar mi
deseo de incluirlos en trabajos futuros. Entre ellos, además de los que en este
momento olvido o desconozco, se encuentran: JCP, Crimen Urbano, R.A.P,
Acaxao, MC Arzola, Weaponz, Sureñas Mexicanas, Estado Krítico, Nedman
Guerrero, Sombras Urbanas, México Estilo, MC Tenso, Killah, RX3, Inkizición,
Miclas, Soldados Aztecas, Almas Aztecas, Two Phase, C-Zión, Imperio del Verso,
Tibu, Casta de Bronce, Milicia Callejera, Asesinos Líricos, Arte Lírico, D Black,
Colmillo, Olor a Vicio, el Niño, y muchos, muchos más. Espero poder contactarlos
en el futuro para seguir documentando el desarrollo del rap hip hop en nuestro
país.
138
Finalmente, como dice Aztek 732, “MC sin estilo... escriban un libro, MC sin
flow, escriban dos”. Este libro es la contribución de un MC sin estilo ni flow al
desarrollo de la cultura hip hop en nuestro país. ¡Y que no pare!
139
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GLOSARIO
BREAKDANCE: Uno de los cuatro “elementos” del hip hop, junto con el graffiti, el
DJ: Siglas de ‘Disc Jockey’. Dentro del hip hop el DJ es en realidad un músico que
DJING: Término que se utiliza para nombrar el performance del DJ (v), acto de ser
DJ.
FLOW: Literalmente, ‘flujo’. Se refiere al “flujo” verbal que tiene que desarrollar un
MC (v) al rapear.
del rapper (v) puesto que debe ser capaz de improvisar (v. ‘freestyle’’) y mostrar
como animador.
MCING: Término que se utiliza para nombrar el performance del MC (v), acto de
ser MC.
estilo del hip hop o que guste de cualquiera de los elementos de esta cultura.
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RAPPER: A diferencia del MC (v), el ‘rapper’ no tiene que estar comprometido
RAPTIVISMO (RAPTIVISM): Género del rap que implica su uso como herramienta
política.
ROLA: Canción.
sonoras nuevas.
Aunque las técnicas de sampleo han existido desde los años sesenta, no fue sino
hasta el surgimiento del hip hop que esta técnica se convirtió en elemento
un sample (v).
TAG: Literalmente, ‘marca’. Se usa este término para referirse a una firma, hecha
con aerosol, marcador, u otro medio, de poca elaboración y que puede hacerse
con rapidez.
un tema (por ejemplo un nombre) hasta hacerlo casi irreconocible; en el rap este
principio ha sido retomado por MCs (v) que hablan a un ritmo sumamente rápido,
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