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Distrito de Buenaventura, Abril 09 de 2019

Dr. JOSE EDWARD ARROYO ANGULO


Director Departamento de Lenguas, Lingüística y Literatura - DELIN
Universidad del Pacífico
Ciudad

Cordial saludo,

ASUNTO: Preservar la memoria pedagógica

Las cascanueces en la cabeza y la última neurona que me queda1

Hija: ¡Mami!, mis amigas dicen que tengo cascanueces en la cabeza.


Mamá: tranquila mi hija, yo sé que te irá bien con la neurona que te queda. Pp.22.

Memoria viva, memoria andante, memoria diciente, memoria individual, memoria colectiva:
Memoria. Que no se pierda la memoria de la niña que sigue reflexionando sobre la relación
entre las cascanueces y los risos de su cabello.

El docente la observa y la comprende, dice para sí mismo: “si fuera hombre tal vez le diría
que con el jersey o rapado ¡da igual!, sigue siendo atractivo para las chicas”. Pero esa
estudiante es mujer (repite el profesor en su parloteo mental) ¿Será que la mamá de esa
muchachita no tiene plata para comprarle una alisadora pa^que deje de joder tanto con ese
espejo y se concentre en la clase?

Pasa la coordinadora por el salón y pregunta ¿todo bien? Responde el profesor: Excelente mi
coordi, pa^lante porque pa^trás asustan. Sin novedad.

La coordinadora sigue su ronda de salón en salón. Observa que todo marcha bien. El espíritu
del panóptico de Foucault, se cumple en todo su esplendor.

Termina la jornada. El docente sabe lo que piensa pero sería una vergüenza escribir en un
observador estudiantil que el cabello es un distractor de clase. Además, no sabe si realmente
sea el cabello o el espejo para mirar el cabello. Ya no importa. Es mejor centrarse en lo
importante “piensa el docente”. Finalmente para cumplir la norma de la institución y llenar
el observador estudiantil, toma la decisión de escribir: “La estudiante se distrae con
facilidad”.

1
Tomado del libro “La familia precoz”. Cap. 2. “El mal hablado del hijo de la comadre
Etelvina”. Autor. Yurley Cuenca Montenegro. FLACSO. 2016. Actualmente, docente de
lenguaje de la Universidad del Pacífico. Abril 09 de 2019.
1
Dos meses después, se queda la acudiente de la niña tras una reunión de padres de familia y
pregunta: ¿Por qué mi hija perdió disciplina? Responde el director de curso: Señora, mire el
observador estudiantil. El profesor pidió una hoja adicional porque no le alcanzó el papel
para exponer que su hija tiene un problema de atención “se distrae con facilidad” y debe
pasar a la oficina de psicología. La psicóloga lee el observador y de tanto leer “el observador”
con la misma situación pero diferentes palabras que varían por el plural o singular, concluye
que la niña tiene déficit de atención (sin seguimiento alguno), solo por la repetición lineal de
veinte renglones que dicen lo mismo: “La niña no presta atención a la clase, se distrae con
facilidad” – “La estudiante se distrae con facilidad, no presta atención en clase” (Bis). La
mamá mira rallado a la niña. Le jala el celular y le grita es el ¡colmo …… de la puta
mierda!¡So^^^vergonzosa!

Se repite la escena.

La aseadora escucha. Le dice a la niña: ¡no llore mija! Con mi hija pasa lo mismo: ¡yo le
digo!: ¡tranquila, yo sé que te irá bien con la neurona que te queda…! ¡Porque la pobre va
terminar descabezada de tanto echar peineta, es que nada le entra en esa cabeza! ¡Le compré
una gel, le cociné su linasa y listo, mañana le traigo un poquito…, ya verá como toditico se
le resuelve!

¡Sistematiza, registra, lleva la memoria!

Distinto fuera el desenlace de la historia de estas estudiantes si, por ejemplo, el docente se
permitiera observar y escribir que sus estudiantes quieren participar en clase pero les da
vergüenza que las vean despeinadas. Tienen cabello afro y prefieren verlo asentado:
Respetar, ver, entender. Estar sensibilizados con las dinámicas de vida del contexto social al
que pertenecen nuestros estudiantes. Leer la competencia comunicativa intercultural. Abrir
espacios. Sumarnos al programa de preservación de la memoria del mundo de la UNESCO,
colectivos pedagógicos, centros de estudio, fundaciones e incluso hasta los grupos de
cuenteros de otras universidades. Tantas y tantas cosas que pueden aportar a una pedagogía
mejor, si tan solo registramos aquello que se observa y se escucha en la comunidad
universitaria, en el salón, en los pasillos, en el carpati o jeep 4 por 12 de pasaje a 1.700c/u
con puesto en la barra de la carpa o en los jeans del que va al lado.

En fin, nuestras estudiantes no tienen déficit de atención. Ellas no están desinteresadas en el


aprendizaje, tampoco tienen retardo mental y, aún si lo tuvieran y desearan estudiar aquí,
existe la política de habilidades diversas, por tanto, ese no sería el problema. Nuestras
estudiantes están manifestando unas cosmovisiones de vida diferentes que se convierten en
un reto para el docente. Las expresiones de los estudiantes en general datan de un tipo de
sociedad que se pierde y se olvida porque los profesionales a cargo dejaron de ser los
guardianes de la memoria. Siguen la lógica de un modelo pedagógico extranjero y ortodoxo.

¡Sistematiza, registra, lleva la memoria!


2
Bitácora. Diario de campo. Observador. Es necesario para comprender. ¿Cómo vamos? ¿Qué
está pasando? ¿Cómo respondemos a unas necesidades pedagógicas reales y no imaginarias
sobre la forma que deseamos enseñar y no sobre la forma en que aprenden nuestros
educandos?: Competencia comunicativa intercultural. Estar sensibilizados y hacer procesos
de transposición didácticos con respeto sociocultural.

La UNESCO abrió la línea de memoria del mundo para los docentes: “Memoria del Mundo
y Patrimonio Documental”.

¿Nos inscribimos? ¿Nos capacitamos o auto capacitamos en procesos de sistematización para


abrirnos paso en el mundo?

Le apuesto a la preservación de la memoria pedagógica como parte de la memoria del mundo.


Somos los docentes portadores de la historia. Quien más sino nosotros para escribir la
pedagogía lingüística que necesitamos o mejor aún la pedagogía lingüística de y para el
contexto universitario en el que estamos.

Para finalizar, comparto los datos del enlace de la UNESCO del componente pedagógico que
en este momento se encuentra apoyando los procesos de Latinoamérica desde Uruguay.

Quedo atenta a su respuesta sobre lo viable o inviable de sumarnos a la propuesta de la


UNESCO para inscribirnos en el próximo encuentro internacional del Proyecto “Memorias
del Mundo – Patrimonio Documental” que se realizará en Octubre del presente año,
recordando que para ello, se debe presentar una ponencia y/o bitácoras de las experiencias
pedagógicas en la docencia universitaria.

Cordialmente,

Yurley Cuenca Montenegro


Docente de español –DELIN.

Contacto,

Luis Carrizo.
Coordinador Académico del Proyecto Oficina Regional de Ciencias de UNESCO para
América Latina y el Caribe Luis Piera 1992, 2º Piso, Montevideo, Uruguay. Tel. (598) 2413
2075 Ext. 118 E-Mail: l.carrizo@unesco.org

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