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TU VIDA ESPIRITUAL

Esta es la principal área a trabajar y es sin duda la fundamental, ya que se trata de tu ser, tu
identidad cristiana. Por ello debe ser siempre lo primero a estabilizar, a crecer. Contemplar tu
vida de oración, tu encuentro con la Palabra, tu vida sacramental, tu proceso de conversión, etc.

Un proyecto de vida espiritual supone que nuestra vida de fe


tiene que ser alimentada constantemente con la presencia de
Dios.

San Pablo nos manda que “oremos sin cesar”. Esta oración
constante, que es estar en la presencia de aquel que sabemos que
nos ama, se tonifica con los “momentos fuertes” de oración que
debemos tener cada día. Esto lo podemos hacer de muchas
maneras. Es importante conocerlas y luego organizar tu
propio proyecto de vida espiritual, de acuerdo a los tiempos y
circunstancias reales de tu vida.

Por vida espiritual entendemos: “La vida según el Espíritu de Jesús. Es el seguimiento de Jesús,
que
supone un esfuerzo por vivir como Él vivió, haciendo nuestras sus actitudes y prosiguiendo su
causa. Esel modo concreto de vivir nuestra condición de bautizados. Es la manera específica de
vivir el Evangelio,
en la Iglesia y desde la Iglesia, en un tiempo y lugar determinados”. VALADEZ FUENTES S.
Espiritualidad
Pastoral, ¿Cómo superar una pastoral “sin alma

Pasos para elaborar un proyecto de vida espiritual

Aunque el padre Sías señaló que el plan de vida espiritual es distinto para
cada persona, enumeró algunos aspectos importantes para su realización.

1. Pedir a Dios la gracia y la luz para elaborarlo. Aunque es un


trabajo humano, estamos hablando de vida espiritual, entonces
también es un proyecto divino.
2. Discernir en nuestro estado actual de vida presente. Esto
implicaría un conocimiento de sí mismo y mucha humildad para
reconocer cómo estoy, cómo me siento, que necesidades tengo,
cuáles son mis limitaciones, cuáles mis cualidades.
3. Acompañarse de un director espiritual. Es necesario para
juntos elaborar un plan de vida espiritual a través del
discernimiento. Esto quizá pueda ser más fácil para las personas
que lleva largo recorrido en la fe. Quien no tenga la ayuda de un
director espiritual puede ser un poco más difícil, mi recomendación
es que se deje acompañar por un sacerdote.
4. La Piedad. El proyecto de vida debe contemplar la experiencia de
una vida de piedad, es decir, la oración, el silencio, la escucha.
5. Los sacramentos. El plan de vida espiritual debe incluir los
sacramentos como el perdón, la Eucaristía, renovar el Bautismo,
sacramentos que nos van a transformar y a través de ellos y la
vivencia diaria, nos irán iluminando porque Dios se va
comunicando a través de ellos, de su gracia y sabiduría.
6. La lectura de la palabra de Dios. Se deben tener espacios de
silencio para escuchar la voz de Dios, porque hay que escuchar la
voz de Dios para elaborar el proyecto de vida espiritual, no
solamente escuchar mi voz y mis necesidades. Muchas veces
puedo hacer un proyecto de lo que yo busco y yo quiero, pero
estoy partiendo más desde mí y termino en mí. Un proyecto de
vida espiritual es Dios y yo, entonces es, escuchar mis
necesidades, mis realidades, mis dificultades, pero también lo que
Dios me está diciendo, qué espera de mí y qué creo que Dios me
está pidiendo ejercer, por eso es importante el silencio, para
escuchar la voz de Dios.
7. Estar atento a los signos de los tiempos. Un proyecto de vida
espiritual puede ser una pauta de auxilio, cómo estar atento a los
signos de los tiempos, qué me dice Dios a través de los
acontecimientos, de la historia que estoy viviendo, qué llamados
me está haciendo Dios.
«

Por qué voy a inquietarme?


¿Por qué me voy a angustiar?
En Dios pondré mi esperanza,
y todavía lo alabaré.
¡Él es mi Salvador y mi Dios!
Salmos 42:11 | NVI | adoración alma

Por tanto, digo:


«El Señor es todo lo que tengo.
¡En él esperaré!»
Lamentaciones 3:24 | NVI | materialismo reconocer

Ahora bien, la fe es la garantía de lo que se espera, la certeza de lo que no se ve.


Hebreos 11:1 | NVI | fe verdad
Corto plazo: estaré estable espiritualmente y en tranquilidad conmigo misma.
Mediano plazo: controlar mi carácter a través de ejercicios espirituales.
Largo plazo: conocerme a mi misma para saber actuar y ayudar a demás personas.

Corto plazo: educarme para ser profesional culminando mis estudios de bachiller y universitarias
Mediano plazo: ser totalmente un profesional y especializarme para ser una buena profesional.
Largo plazo: tener clínica de acuerdo a mi profesión y trabajar en lugares adecuados a mi especialización.

 Metas a corto plazo: no perder la fe,ni la esperanza,ir a misa y eventos que


me puedan ayudar espiritualmente para estar mejor

 Metas a mediano plazo: seguir asistiendo a la iglesia y sitios de


buen animo que me llenen el alma, y seguir adelante siempre con
optimismo

MI AREA FAMILIAR

Corto plazo: Vivir unidos y felices con mi familia, con mucho amor y paz entre mis
padres y mis hermanos

Mediano plazo: vivir en casa y que no falten la bondad y la compresión.

Largo plazo: formar mi propia familia y ser un hombre admirado por mi pareja.

MI AREA ESPIRITUAL

Corto plazo: orarle a Dios y practicar cada uno de sus mandamientos.

Mediano plazo: asistir a la iglesia, cantar para Dios y leer la biblia.

Largo plazo: Ser líder en la iglesia para interpretar ó para predicar las buenas nuevas
a nivel nacional como también a nivel internacional.
DEJARNOS “TOCAR” POR DIOS

“Tanto amó Dios al mundo que envió a su Único Hijo.” (Jn 3: 16)Es a veces imposible entender este amor de
Dios, sobre todo cuando nos vemos en nuestras situaciones de pecado y de nuestras limitaciones. Sin
embargo, ésta es la grandeza de Dios: es un Dios cercano a nuestra vida y a nuestra historia. Para Dios no
pasamos desapercibidos como un grano de arroz en medio de una cazuela de paella. Desafortunadamente, a
veces racionalizamos mucho este amor, sin dejarnos “tocar” por Dios y simplemente corresponder a su
llamado de amor con amor.
En el discernimiento espiritual, no hay otra salida que dejarnos “tocar” por Dios. Esta es la única forma de
distinguir lo bueno de lo malo. Es dejarnos conducir por Dios en el camino de la vida. Este Dios toca nuestras
vidas no porque seamos mejores que otros, ni siquiera porque tenemos más capacidades que otros. La
diferencia radica en nuestra respuesta, en nuestra capacidad para transformar nuestra vida a la Luz de Dios.
Cuando nos dejamos “tocar” por Dios, nuestra vida adquiere un nuevo sentido que se manifiesta en la forma
de hacer el bien a los demás, y de ser capaces de transformar la historia, nuestra historia. Hoy en día es
necesario contarles a los jóvenes una verdad trascendental: Estamos en el corazón de Dios, y lo único que
hay que hacer es dejarnos amar por Él. Hay que abrirse al amor de Dios y corresponder a su amor
La Misión de Proyecto de Vida se
fundamenta en cinco pilares Bíblicos. Predicar
las buenas nuevas de salvación (evangelismo),
e incorporar a los creyentes en la familia de
Dios (comunión), para
La Misión de Proyecto de Vida se
fundamenta en cinco pilares Bíblicos. Predicar
las buenas nuevas de salvación (evangelismo), e incorpora La Misión de Proyecto de Vida se
fundamenta en cinco pilares Bíblicos. Predicar las buenas nuevas de salvación (evangelismo), e
incorporar a los creyentes en la familia de Dios (comunión), para educarlos en la Palabra de Dios
(discipulado) y equiparlos para la misión de Dios en su vida (ministerio), y así glorificar a nuestro
Señor Jesucristo (adoración).EDUCARLOS en la Palabra de Dios (discipulado) y equiparlos para la
misión de Dios en su vida (ministerio), y así glorificar a nuestro Señor Jesucristo (adoración).

El corazón humano genera muchos proyectos, pero al final prevalecen los designios
del Señor” Proverbios 16:3
La palabra cónyuge quiere decir unidos por el yugo, en referencia a la
yunta que mantiene unidos a los bueyes para que puedan arar en la
misma dirección. El matrimonio debe estar unido en todos los sentidos y
la unión espiritual es vital. Debemos estar unidos en Cristo, ambos amar
y obedecer a Jesús para poder vivir en armonía y para que Cristo sea
glorificado en todo lo que hacemos.Ante ti, Señor, están todos mis deseos; no te
son un secreto mis anhelos” Salmos 38:9

No hay temor a someternos el uno al otro cuando ambos estamos llenos


del amor de Dios. Confiamos que Dios guía a la otra persona dentro de
su voluntad y no tememos que se aproveche o nos haga daño a
propósito. Por eso es importante casarnos con un hombre temeroso de
Dios y lleno de su Espíritu Santo. Si sabemos que sus acciones y
palabras están guiadas por el Señor no tendremos miedo a someternos.
El amor perfecto que Dios nos da echa fuera cualquier temor (1 Juan
4:18).

6. Amar como Cristo

Esposos, amen a sus esposas, así como Cristo amó a la iglesia y se entregó por ella
para hacerla santa.
(Efesios 5:25-26a)

El matrimonio debe trabajar junto por metas comunes uniendo esfuerzos


para ver cumplidos los sueños y anhelos que Dios pone en sus
corazones. Cada uno debe velar por el bienestar del otro, cuidarle y
ayudarle. Si uno cae, el otro lo levanta, le venda la herida, le anima a
seguir
 1. A quién Dios ha unido, ningún hombre podrá separar.
 2. Dios bendiga este matrimonio.
 3. Somos el uno para el otro, ambos para Dios.
 4. Los dos se funden en un solo ser.
 5. No busques a una pareja para ser feliz. Sé feliz primero tú, para que luego
puedas hacer feliz a esa persona que Dios pondrá en tu camino.
 6. Me encanta que ames a Dios más de lo que me amas a mí.
 7. La historia de nuestro amor es el guion que Dios escribe día a día en nuestras
vidas.
 8. Pídele a Cristo descubrir la belleza que no se ve con los ojos, pero que
realmente enamora. Busca eso en tu matrimonio y amarás por siempre.
 9. La persona correcta y pareja ideal para tu vida es aquella que te acerca mucho
más a Dios.
9 características que todo cristiano debe tener
Categorías: Destacados, Inspiracional // Publicado 17/05/2017 a las 04:00 AM

Ser cristiano significa seguir el ejemplo de Jesús. Cuando lo aceptas en tu vida, Dios se
convierte en el dueño y Señor de todo lo que tienes; y por lo tanto, tu vida cambia. Gálatas 5:22-
23 (TLA) dice: “El Espíritu de Dios nos hace amar a los demás, estar siempre alegres y vivir en
paz con todos. Nos hace ser pacientes y amables, y tratar bien a los demás, tener confianza en
Dios, ser humildes, y saber controlar nuestros malos deseos. No hay ley que esté en contra de
todo esto.” De este versículo se entiende que todo cristiano que verdaderamente tiene a Jesús
en su corazón, debe reflejar las siguientes características:

Es imposible que alguien diga que es cristiano y no refleje amor. Esto en sí ya es una
contradicción directa, pues, Dios es amor. La Biblia no nos dice que amemos cuando el amor
es recíproco, o cuando la otra persona lo merece; sino que amemos a otros de la misma manera
en que lo hacemos con nosotros mismos. Sin embargo, para amar a otros, primero debemos
amar a Dios. Marcos 12:30 dice: “Ama a tu Dios con todo lo que piensas, con todo lo que eres
y con todo lo que vales”, una vez que cumples esa parte, amar a los demás es un simple reflejo
de lo que ya llevas dentro: “Cada uno debe amar a su prójimo, como se ama a sí mismo” (v. 31
TLA).
Demostrar alegría no significa sonreír todo el día. Cuando eres cristiano, entiendes que tu lugar
no está en la Tierra y que, por lo tanto, las cosas que aquí ocurren son pasajeras. Cada aflicción,
problema, tristeza, o preocupación es nada comparado con la eternidad que nos
espera. Colosenses 3:2 nos dice que fijemos nuestra atención en lo eternal; y cuando piensas
en el cielo que Dios nos tiene preparado, la alegría que Él pone en nuestros corazones se
muestra en cada área de nuestra vida.

“Estén siempre llenos de alegría en el Señor. Lo repito, ¡alégrense!” (Filipenses 4:4, NTV).

Ser cristiano no significa estar libre de problemas, sino tener la paz y seguridad de Dios cuando
estas cosas ocurren. Juan 16:33 (NTV) dice: “Les he dicho todo lo anterior para que en mí
tengan paz. Aquí en el mundo tendrán muchas pruebas y tristezas; pero anímense, porque yo
he vencido al mundo.” Hay muchas técnicas y ejercicios que prometen traernos paz; sin
embargo, la paz que Dios da no se iguala a ninguna otra, pues, su paz no es circunstancial, sino
que es duradera.

La paciencia es algo que todo cristiano debe reflejar, independientemente de su personalidad.


Ser paciente demuestra confianza, esperanza, amor, fe e inteligencia (Proverbios 14:29). Si
alguien no es paciente, se puede perder las más grandes bendiciones que Dios tiene para su
vida.
Te interesa: ¡La Decisión es Tuya!

Ser amables implica demostrar un genuino interés por la otra persona. Filipenses 2:3-4 (DHH)
dice: “..que cada uno considere a los demás como mejores que él mismo. Ninguno busque
únicamente su propio bien, sino también el bien de los otros.” Uno puede practicar la amabilidad
desde pequeños gestos y esforzarse para hacer que otros vean el fruto del amor que Dios nos
da.

Hay distintas maneras de demostrar buen trato y una de ellas es con las palabras. Efesios 4:29
nos advierte que debemos decir palabras que edifiquen a la comunidad y traigan beneficios a
quienes las escuchen. Debemos de tratar bien a otros, incluso cuando ellos no hacen lo mismo
con nosotros. En Mateo 5:43-44 (TLA) también nos recomienda a orar por aquellos que no nos
desean lo mejor: “Amen a sus enemigos y oren por quienes los maltratan. Así demostrarán que
actúan como su Padre Dios, que está en el cielo.”

Dios nos pide depositar toda nuestra confianza en Él, sin importar los momentos difíciles que
pasemos, así como dice Hebreos 11:1 (TLA): “Confiar en Dios es estar totalmente seguro de
que uno va a recibir lo que espera. Es estar convencido de que algo existe, aun cuando no se
pueda ver.” Dios sabe recompensar a quienes le tienen fe, pues, al hacerlo le estamos
demostrando fidelidad. Al ser fiel a Dios, le estás poniendo por sobre todo lo demás en tu vida;
y cuando lo haces, todas las cosas siempre trabajan para bien.

La humildad no puede faltar en los cristianos. Efesios 4:2 (TLA) dice: “Sean humildes, amables
y pacientes, y bríndense apoyo, por amor, los unos a los otros.” Ser humilde es aceptar que
sin Dios no podemos ser nada, y que, gracias a Él lo tenemos todo. Humildad no es sinónimo
de baja autoestima ni pobreza, sino de dejar que Dios sea más importante que nuestro yo.

1 Corintios 10:23 (TLA) dice: “Algunos de ustedes dicen: «Yo soy libre de hacer lo que quiera.»
¡Claro que sí! Pero no todo lo que uno quiere, conviene; ni todo fortalece la vida cristiana.” Dios
nos ha dado la libertad para elegir entre el bien y el mal. Cada elección que hagamos tiene una
consecuencia. A diferencia de los animales, Dios nos entregó dominio propio para que
aprendamos a controlar nuestros malos deseos. Quien necesite ayuda para gobernar sus
impulsos, puede acudir a Dios para que Él le dé la fortaleza necesaria.

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