Acelerar los tiempos en el nivel inicial: juego o enseñanza posibilidades; requiere que los jugadores comprendan que aquello que se manifiesta no es lo que aparenta ser; finalmente, al no cen- de las disciplinas trarse en la obtención de un producto final, se da una alternancia La idea de avanzar en la comprensión de fenómenos complejos Y entre medios y fines que torna más flexible la conducta infantil atender a las verdaderas posibilidades de cognición llevó también a [Sarlé, 2006). Por medio del juego favorecemos la adquisición de experimentar en el interior de Los niveles de enseñanza. Es así ~orno propuestas de socialización, hábitos de conducta, normas de traba- se diseñaron experiencias en las que se adelantaron la ensenanza jo. El juego entre pares es el método privilegiado para la adquisición de los temas de la ciencia y la tecnología del nivel primario al nivel de conductas que favorecen la cooperación, enseñan la solidaridad y la fraternidad, la buena convivencia y la ayuda. El tiempo asignado inicial. El fundamento de estas propuestas radicó en tres cuestiones. La al juego dramático y al juego en rincones posibilita la adquisición de primera consiste en reconocer que muchos de los propósitos de la estas normas y favorece la intervención de las maestras y los maes- alfabetización de la escuela primaria se alcanzaron de manera tros en las situaciones de conflicto o de manifestaciones incorrectas espontánea en los niños del preescolar. La segunda, en la obse:~a e inmaduras. En el caso del nivel inicial, es posible que el tiempo ción de la enorme capacidad de aprendizaje de los niños y las n1nas asignado a la enseñanza de las asignaturas desplace al tiempo del y, finalmente, la tercera reside en el reconocimiento de la posibili- juego, tiempo dedicado a las prácticas en que se inscriben los pro- dad de provocar un mayor desarrollo cognitivo al pon_er a,l_alcance d~ cesos de socialización. Por otra parte, es probable que los conoci- los niños conocimientos importantes del mundo c1ent1f1co. De ah1 mientos disciplinarios que se adquieren a edad tan temprana deban que se instaló la idea de avanzar de manera explícita en los conoc~ revisarse, al estar teñidos de sentido común y no guardar la necesa- mientos disciplinarios del nivel siguiente. Para lograrlo no es posi- ria vigilancia epistemológica requerida, entre otras cuestiones. ble recurrir a las estrategias lúdicas propias del nivel Y se hace Evidentemente, nos preguntamos acerca del valor relativo que con- necesario apelar a un modelo explicativo propio del método de ense- figura ese adelanto. ñanza disciplinar. Se trata, entonces, de dos modelos diferente~ p_ara Hemos soslayado un debate por demás interesante referido al la educación inicial. En uno, el foco del trabajo está en la soc1al1za- juego como estrategia de enseñanza, a la posibilidad de hacer pla- ción y la construcción de hábitos; en el otro, el foco está en la adqui- centero el proceso del aprender, al juego y la motivación o a las opo- sición de saberes, priorizándose la instrumentación de una base de siciones que se construyeron entre juego y enseñanza, teniendo en contenidos para el desarrollo de la etapa siguiente. El juego puede cuenta las dificultades que genera incorporar esta estrategia a la ser motor de la enseñanza en el primero pero difícilmente lo sea en hora de enseñar conceptos o contenidos académicos. En síntesis, los currículos contienen propósitos diferentes por (./) w el segundo. . nivel, y la existencia de grupos homogéneos por edad en el nivel ini- -, < Si reconocemos que las estrategias lúdicas son la mejor manera N o de abordar las actividades de los niños pequeños, Yéstas no pueden cial favorece el trabajo cooperativo y el encuentro fraterno entre z pares. Transformar la enseñanza del nivel inicial en una escuela pri- o:: w o:: ser diseñadas para la adquisición de un número importante de con- < •Z CL ceptos, temas y/o problemas, nos obligamos a revisar el valor de las maría nos hace perder una maravillosa oportunidad en la que w < U}
mediante el juego se adquieren hábitos esenciales para la vida en zw
experiencias lúdicas del nivel. Patricia Sarlé reconoce tres ca~acte U} o_J w o:: rísticas del juego que son de profundo valor para el desarrollo infan- los grupos, en tanto se diseñan propuestas y actividades que segu- o < (./) zw til: se trata de una actividad a partir de la cual el niño crea para sí ramente requerirán una revisión en procesos ulteriores. La enseñanza y el aprendizaje requi~ren ti~mpo::;:_Son l.os tiem- º ~ LL CL mismo un escenario imaginativo en el que puede ensayar respues- o < o:: pos que demandan las buenas propuestas, el diseño de actividades _J w et tas diferentes sin temor a fracasar, actuando por encima de sus