DE LOS LLANOS OCCIDENTALES “EZEQUIEL ZAMORA” SAN CARLOS ESTADO COJEDES SUB-PROYECTO: PRINCIPIOS DE QUÍMICA II Facilitador: Robín Hernández Participante: Yolimar García C.I.: 9221929 El equilibrio químico y sus aplicaciones: industria y cotidianidad
En cada uno de los contextos en los cuales nos desenvolvemos, nuestros
sentidos nos permiten percibir reacciones químicas con diferentes velocidades de reacción que son estudiadas a través de la cinética química, así como las reacciones irreversibles y las reversibles; estas últimas, aquellas en las que, los reactivos interaccionan para dar lugar a productos que, a su vez, se regeneraran en reactivos dando lugar a un equilibrio donde las velocidades de descomposición de los reactivos y de formación de los productos tendrán valores similares.
En este orden de ideas, estamos dilucidando respecto al equilibrio químico,
es decir, aquel estado o indicador que permite determinar la cantidad de producto a conseguir a partir de una determinada temperatura (variable termodinámica), en un lapso de tiempo e intrínsecamente relacionado con la presión del sistema. Una vez obtenido dicho producto, el resto permanecerá constante, es decir que, se habrá alcanzado el equilibrio. Cabe destacar, que si se presenta algún agente externo, el sistema reaccionara de tal manera que la perturbación de este, se verá contrarrestada, alcanzando un nuevo equilibrio (principio de Le Châtelier).
Otros factores externos que pueden alterar el equilibrio químico son:
introducir o extraer alguna cantidad de una de las especies químicas involucradas, las variaciones en el volumen del recipiente que los contiene y la adición de un catalizador. Es así como el concepto de equilibrio químico fue desarrollado por Berthollet (1803) cuando encontró que algunas reacciones químicas son reversibles, señalando que en una reacción, tal como: α A + β B ⇆ σ C + Ɵ D, está en equilibrio, si y solamente si, las velocidades de reacción directa e inversa tienden a ser iguales. Es preponderante señalar que el sentido de las flechas apuntando en ambas direcciones enuncia el equilibrio; por su parte A y B, son los reactantes o reaccionantes, mientras que C y D son los productos, con α, β, σ y Ɵ representan a los coeficientes estequiométricos de los reactantes y productos. La posición de equilibrio de la reacción se dice que está desplazada hacia la derecha, si, en el equilibrio, casi todos los reactivos se ha utilizado y hacia la izquierda, si solamente se forma algo de producto a partir de los reaccionantes.
La importancia y el conocimiento del equilibrio químico en diferentes reacciones
es incidental en muchos aspectos, tanto industriales, en medicina e incluso en nuestra cotidianidad, primando la búsqueda, innovación e incluso el desarrollar productos, servicios más eficientes, ahorros de costo-producción, siendo necesarios sencillos estudios a nivel de laboratorios químicos y su conexión con las grandes revoluciones industriales y tecnológicas en cualquier ámbito.
De esta manera, puedo citar algunos ejemplos de las aplicaciones del equilibrio químico dentro del marco industrial, farmacéutica y salud. Tal es el caso de:
la industria de la fermentación láctica y la alcohólica, tanto en cervecería, la
elaboración de vinos, ron, (entre otros) como en la elaboración de derivados lácteos (yogurt, kumis,…) el Principio de Le Châtelier es muy utilizado para determinar el tiempo y la velocidad de la fermentación. la síntesis industrial del amoniaco en el proceso Haber-Bosch llevado a cabo a través de una sucesión de etapas de equilibrio, incluyendo procesos de absorción. en la Industria de alimentos permite determinar el período de caducidad de alimentos enlatados y el uso de conservantes. cuando las moléculas a cada lado del equilibrio son capaces de reaccionar irreversiblemente en reacciones secundarias, la proporción del producto final se determina de acuerdo al principio de Curtin-Hammett. la cromatografía o extracción líquido-líquido como Intercambio iónico. la ecuación de Nernst en electroquímica que alude a la diferencia de potencial de electrodo como una función de las concentraciones redox. el equilibrio ácido-base, la constante de disociación ácida, en la hidrólisis, soluciones tampón, Indicadores, Homeostasis ácido-base la industria farmacéutica, por ejemplo, en el coeficiente de partición (P), es decir, el cálculo del cociente o razón entre las concentraciones de esa sustancia en las dos fases de la mezcla formada por dos disolventes inmiscibles en equilibrio, donde la lipofilia es una propiedad importante de para la elaboración de medicamentos o de una drogas de índole de salud pública. en la industria de la perfumería o la producción de sustancias estables y con olores agradables, dado a que cada perfume posee una formula específica a través de una reacción química, entonces se necesita que toda la cantidad de aromas a utilizar sean exactas con el fin que la producción de sustancias sean estables (equilibrio químico) y obtener aromas agradables. en la captación y liberación de oxígeno por la hemoglobina en la sangre y en el funcionamiento de los riñones. en la medicina, para las operaciones al corazón abierto; es necesaria la alteración del equilibrio químico, disminuyendo la temperatura a 4º C para que los procesos metabólicos sean lentos y así, minimizar los posibles daños producidos a los tejidos. incluso dentro de las células de nuestro cuerpo, constantemente se están produciendo reacciones químicas reversibles que responden a las necesidades del organismo. en la química de la atmósfera y del agua de los océanos. la industria cementera, al determinar la temperatura ideal la cual, es determinante sobre la reacción de los reactantes para lograr la producción más eficiente y de mejor calidad en el cemento.
No obstante, el equilibrio químico también forma parte de nuestra vida cotidiana,
estando presente en infinidad de reacciones que se llevan a cabo continuamente, así puedo citar entonces:
la disolución de CO2 en el agua de lluvia.
al bañarse, hay un equilibrio químico entre la disolución que se produce entre la mugre y el jabón; éste dispone su parte hidrófoba hacia la grasa, y su parte hidrófila hacia el agua, de forma que las moléculas de jabón “encapsulan” a la grasa, y la parte de fuera de esa “cápsula” que es afín al agua, así que ésta puede “arrastrarla” y limpiar el cuerpo. De igual forma ocurre en el lavado de ropa, trastes, pisos, etc. a simple vista, cuando una botella de agua, cerveza o de algún refresco bien fríos y entran en contacto con la temperatura ambiental, tiene lugar la condensación externa en las botellas, hasta que alcanzan el equilibrio de temperaturas interna y externa y en consecuencia, dejan de producir condensado. en una piscina llena, es el agua represada adquiere la temperatura ambiente hasta alcanzar el equilibrio. un gas en un recipiente cerrado, un ejemplo peculiar es del vapor en las ollas de presión, las cafeteras con válvulas a presión para usar en hornillas. Referentes Bibliográficos
Criado S., M. (1983). Introducción Conceptual a la Termodinámica Química.
Editorial S.A. Alfa Centauro. Madrid- España
Chang, R. (2002). Química. Editorial Universidad Andrés Bello Caracas –
Venezuela.
Rodríguez, M. (2002). Química de Primer año diversificado. Editorial Salesiana.