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LA IDENTIDAD NACIONAL EN LOS NIÑOS

La identidad nacional se entiende como el sentido de pertenencia que tienen las personas a una
colectividad –en la que se comparte una historia común, un territorio, valores, hábitos, creencias,
comportamientos y otros elementos socioculturales-. Debido a ello, la identidad nacional es muy
importante porque va a influenciar la manera como hablamos, la comida que solemos comer, la
vestimenta que utilicemos, la educación que recibimos, etc. Lo más importante de la identidad
nacional es que una u otra medida va a determinar cómo es que percibimos el mundo y la forma en
la cual nos comportemos. En esta línea, la identidad nacional resulta tener un fuerte componente
nacional –que consciente o inconscientemente- marca nuestra vida
cotidiana.

Con respecto al aspecto cognitivo, es indispensable tener


conocimientos sobre la existencia de una comunidad, emblemas
patrios, costumbres, sucesos y personajes históricos que representan
simbólicamente la nación. Por otro lado, el aspecto afectivo hace
mención al sentido subjetivo de pertenencia a la comunidad nacional,
sentimientos hacia las personas que conforman dicha comunidad y
sentimientos de arraigo en relación al territorio.

En conclusión, la identidad nacional es un sistema complejo de conocimientos, creencias,


emociones, sentimientos y evaluaciones acerca del grupo al cual uno pertenece. En esta línea, es
algo dinámico que está en constante construcción y movilidad. Debido a ello, la identidad nacional
puede verse transformada y adaptada de acuerdo a los aportes de otras culturas, lo que termina por
evidenciar que el proceso de globalización afecta a todos los países.

Por lo mencionado anteriormente, es necesario que las currículas


de los centros educativos cuenten con cursos o charlas que
busquen fortalecer la construcción de la identidad en los niños y
niñas, desde muy pequeños. Un ejemplo claro de esto, podía ser
que en el curso de historia del Perú se les enseñe sobre sucesos
y personas relevantes de la historia del país y del mundo –
mediante relatos, narraciones, vivistas, etc. que sean elementos
representativos y significativos de la historia del Perú-. Asimismo,
los estudiantes deben desarrollar habilidades para identificar y
valorar los símbolos patrios, reconocer personajes y significados de los acontecimientos más
relevantes de la historia personal. Sería interesante si es que en cursos de arte se pueda proponer
trabajos en donde se valore el patrimonio cultural y en cursos de educación física se podría poner
trabajar algunas danzas y juegos tradicionales.

Los padres como agentes de enseñanza y educación deberían de


ayudar a construir la identidad nacional de sus hijos. En esta línea,
es posible que los padres busquen mostrar a sus hijos las riquezas
naturales y culturales con las que cuenta el Perú, en sus diferentes
regiones. Sería bueno que los padres planeen viajes a los diferentes
departamentos del Perú para que los niños puedan conocer los
lugares turísticos que ofrece nuestro país. De esta manera, los niños,
que son el futuro de nuestro país, podrán tener una verdad
conciencia sobre el país en el que viven lo que permitirá el
fortalecimiento de la identidad nacional y patriotismo. Gracias a ello,
los niños podrán ser defensores de nuestro patrimonio histórico y
cultural ya que desde pequeños se irán apropiando de los valores
culturales presentes en los diferentes lugares y comunidades del país.

Por otro lado, es importante, ampliar el mundo de los niños y estimularlos a mirar más allá de su
entorno cercano, muchas veces privilegiado, para que paulatinamente vayan tomando conciencia
que existen otras personas, otros niños que viven en condiciones diferentes. Así iremos
desarrollando valores de solidaridad y cercanía con los demás

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