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ÍNDICE

I.- DEDICATORIA
II.- INTRODUCCION
III.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN EL
AMBITO PROFESIONAL
1.-ACTITUD PROFESIONAL
2.- ACTITUDES Y VALORES
3.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN EL
AMBITO DEL EJERCICIO PROFESIONAL
4.- LA ÉTICA EN LA ACTITUD DEL CONTADOR
PÚBLICO EN EL ÁMBITO DEL EJERCICIO
PROFESIONAL
5.- LA ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO SEGÚN
EL CÓDIGO DE ÉTICA PROFESIONAL
6.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO SEGÚN LOS
PRINCIPIOS DE CONDUCTA
7.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO DENTRO DE
UNA EMPRESA
8.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN EL
AMBITO FISCAL
9.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO ANTE LA
CORRUPCIÓN
10.- ACTITUD HUMANISTA DEL PROFESIONAL
CONTABLE
11.- ACTITUD DEL CONTADOR DEL SIGLO XXI EN
EL ÁMBITO DEL EJERCICIO PROFESIONAL (VALORES
Y ETICA)
IV.- CONCLUSIONES
V.- BIBLIOGRAFIA

DEDICATORIA

A nuestros padres que


siempre nos brindan su
apoyo y a nuestro
profesor de curso que
con su ejemplo y
enseñanza moral nos
guía para la formación
de nuestros valores y
ética profesional

II.- INTRODUCCIÓN

La función que cumple el contador dentro de cualquier organización, está


destinada principalmente a apoyar la toma de decisiones de la alta
administrativas. Así como también el análisis de la moral de éste frente a las
decisiones administrativas que van en contra de los principios y valores de su
Ética Profesional.

El contador como parte dinámica de la empresa debe proveer las herramientas


necesarias para la toma de decisiones de la empresa, a niveles legales,
administrativos y operativos.

El contador público, en su desempeño profesional, debe tener siempre presente


que ante todo es persona honorable, con alto grado de principios éticos en el
desempeño de sus funciones, a fin que tanto su nombre como el gremio de
contadores no se vean envuelto en asuntos de dudosa procedencia, o manejo
inexplicable.
La condición de profesional sirve como garantía de un adecuado espíritu de
servicio y responsabilidad social. Al que ostenta la condición de CP se le advierte
un profesionalismo de alto nivel y se le supone que trata de servir, en primer
lugar, a la sociedad ante la cual tiene un agradecimiento y una responsabilidad.

Los principales instrumentos de trabajo de un contador público son sus


conocimientos y su capacidad intelectual; en su moral está el usarlo para el bien o
para el mal.

Toda actividad del contador debe ajustarse armónicamente a las normas de


moralidad, para de esta manera darle prestigio, enaltecer la carrera y por
consiguiente merecer la aceptación general en el ámbito donde es aplicada.
El contador público es un profesional animado por el deseo de prestar un
servicio excelente, académico, profesional y humano a la comunidad en que vive
y a su país.

Con su actitud, su trabajo y su ejemplo da testimonio de honradez, anteponiendo


a sus intereses personales, los intereses de la sociedad a la que sirve. Su
compromiso profesional con la sociedad manifiesta un humanismo - vivencial y
operante.

De esta forma el contador público pone en marcha todo lo aprendido durante su


ejercicio profesional, como conocer, analizar y aplicar las reformas fiscales
aprobadas y hechas públicas por las autoridades correspondientes, hacer análisis
financieros para la toma de decisiones, analizar y utilizar los modelos
matemáticos aplicables en la administración óptima de los recursos de una
entidad y diagnosticar los problemas de las organizaciones para proponer
alternativas de solución
III.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN
EL ÁMBITO DEL EJERCICIO PROFESIONAL

1.- ACTITUD PROFESIONAL

El profesional debe cumplir con sus deberes lo mejor posible y esto debe hacerse
desde su etapa de formación, planteándose el estudio como una actividad seria y
“profesional”, porque ya en esta primera etapa un trabajo debe realizarse lo más
perfectamente posible y será la base para todo el posterior desempeño del
profesional. Debemos señalar que la capacitación del profesional no debiera
terminar nunca debido a que el mercado laboral es altamente competitivo, por lo
tanto quien no haya innovado sus conocimientos quedará fuera de este sistema.

Otra actividad importante es el aprovechamiento del tiempo, por ejemplo: una


reunión programada a las 10am comienza media hora después, termina media
hora después y así va atrasando todo lo programado; además el retraso se
produce por otros factores como el no asistir preparado, de esta forma se
improvisa y se arrastran los temas a tratar. Entre otras causas de la baja
productividad podemos señalar los malos hábitos de la oficina como:
 Comentar el tema del día en el pasillo

 El cafecito de rigor

 Los largos almuerzos “ejecutivos”, entre otros.

Todas estas son prácticas inadecuadas en el modo de enfrentar y hacer el trabajo.


Para evitar todo esto un profesional tiene que “actuar como se debe y estar en
lo que se hace”. Para ello se deben cuidar una serie de pequeños detalles como:

 Esforzarse para cumplir el horario citado para la cita.

 Comenzar y terminar el trabajo a la hora indicada.

 Cumplir con todos los encargos aunque resulten difíciles o aburridos.

 Ser ordenado con los documentos.

 Formar equipos de trabajo.

 Ser discursivo, es decir, terminar una cosa y comenzar con otra.

 Planificar el día, la semana y el mes de una actividad.

En resumen, mientras nos esforcemos por realizar nuestro trabajo diario de la


mejor forma posible, no sólo nos hacemos mejores personas, sino que servimos
mejor a quienes nos rodean ayudando así, a que los demás se hagan también
mejores personas.

Estos son los principales valores y actitudes que se asimilan en los códigos de
ética del Contador Público. Cabe decir que este código se aplica según la
situación que determine la profesión. Además, cada colegio determina que
normas deben seguirse según cual sea la profesión. Ejemplo: los contadores
deben comportarse y actuar de una determinada manera en las empresas y con el
Estado.
2.- ACTITUDES Y VALORES
 Vocación e interés por resolver los problemas de la empresa.
 Respetar los Códigos de Ética Profesional siendo la base para su
desarrollo profesional.
 Vocación emprendedora para diseñar, innovar e instrumentar modelos de
desarrollo empresarial.
 Compromiso para asumir la responsabilidad para el logro de los objetivos

3.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN EL


AMBITO DEL EJERCICIO PROFESIONAL

El contador público basa su personalidad o actitud en dos elementos esenciales:


técnica del trabajo y calidad humana. El primer término implica una preparación
académica que comprende conocimientos de contabilidad, matemática, economía
y ciencias afines, y el segundo que de manera alguna cede información al
primero, presupone la existencia de ciertas normas morales sin la cual el contador
público no merecería el crédito que justifica su razón de ser.

Las actuaciones del C.P. se clasifican en técnicas y éticas. La técnica se


adquiere con el estudio, la ética se adquiere con la práctica habitual de los
principios morales que la sociedad estima esenciales para depositar su confianza
en un individuo. La técnica sólo hará, en el mejor de los casos, un buen factor,
pero n o basta para cimentar una personalidad profesional. Por otra parte, la
integridad y honradez del C.P. serán las bases de sus actividades profesionales y
las que en mayor grado contribuirán a formar una clientela; integridad para
investigar la verdad y honradez para exhibirlas.

Los contadores públicos advertimos que si la sociedad le otorga un estatus, exige


una cierta responsabilidad en la mejora de la misma desde nuestra profesión.
Estamos llamados a ejercer el liderazgo en el rol que nos toca actuar, es decir,
ejercer una cierta dirigencia social. Todo liderazgo o dirigencia significa co-
ayudar al cambio de conductas.

Por lo tanto, debemos ser creativos, innovadores, transmitiendo mensajes en


forma clara y transparente y actuando en forma decidida con fortaleza y
prudencia profesional. Liderazgo que se estime en términos de humanismo y por
lo tanto en el marco de la ética general y en particular la profesional.

Comprender que lograr el contador globalizado significa que esté preparado para
actuar en cualquier parte del mundo profesional y que se logra la excelencia
cuando se alcanza satisfacer las necesidades de la comunidad nacional, regional e
internacional. El contador público vende su técnica pero no su integridad.

Los contadores tenemos que tener "un compromiso con la verdad". que conlleve
a vivir la honestidad como actitud de cumplimiento de las obligaciones
profesionales, evitando los fraudes, los sobornos, los cohechos…, no basta la
buena voluntad, sino que es necesario la elección ética en el actuar, para eso es
preciso una mayor calidad en la formación humanística, que logrará una mayor
calidad ética en el ejercicio de la profesión.

Los contadores públicos deben tener un rol protagónico en todo el proceso de la


instrumentación de la política fiscal, desde la elaboración hasta su ejecución,
contribuyendo a una relación equitativa entre los distintos actores sociales .

Actitud Del Contador Público

 Iniciativa y creatividad al emprender y proponer acciones o elegir


alternativas de solución, relativas a las diversas problemáticas que se
presenten al desarrollar sus actividades profesionales.
 Responsabilidad y disciplina en el manejo de la información y recursos
económicos; con el fin de brindar un servicio de calidad a la sociedad.
 Ética, actuando con respeto y honestidad en el ejercicio de su profesión y
recursos económicos, de conformidad con valores y criterio profesional, al
trabajar en forma individual, en equipo e interdisciplinariamente.
 Servicio, apoyando a sus clientes en la consecución de sus objetivos
teniendo como principio la honorabilidad.
 Disposición para la superación y actualización constante en la búsqueda
de sus objetivos, con mentalidad innovadora generando nuevas
alternativas contables, con un pensamiento siempre abierto a la
competitividad.

El Contador Público, juega un papel decisivo dentro de la economía y por lo


tanto debe comportarse a ese nivel, debe proyectar su imagen a través del
trabajo, la puntualidad, la dedicación, la responsabilidad, el dominio de la
profesión , la actualización permanente, un amplio criterio de decisión, la
honradez , la confiabilidad, el respecto la discreción, y la Ética a toda prueba
y en todos sus actos.

En el Sector Privado:

Dentro del sector industrial, de servicios y de comercio, desarrollando


actividades de Contaduría, Administración, Auditoria, Finanzas, Fiscales,
Contraloría; así como diseñando e implementando sistemas de control y/o
información.

El Contador Público Colegiado que ejerce la profesión en forma individual o


asociada, deberá actuar y ofrecer sus servicios en forma seria y mesurada, sin
hacer abuso de la publicidad, y sin dañar con ella la dignidad profesional y
personal de sus Colegas.

Sector Público:
En dependencias y entidades integrantes de la Administración Pública
Federal, Estatal y Municipal; realizando actividades de Administración,
Contaduría, Auditoria, Finanzas, Fiscales, Contraloría; diseñando e
implementando sistemas de información financiera y de control, incluyendo
presupuestos y cálculo de impuestos.

Sector Independiente:

Realizando actividades de asesorías: Contable y Administrativa; Fiscales,


Consultorías y Auditorias.

Docencia:

El contador Público puede desenvolverse en áreas de apoyo académico,


desarrollando actividades de docencia o de investigación.

El Contador Público Colegiado que ejerce la Docencia Universitaria


tiene la obligación de trasmitir los conocimientos actualizados de la profesión y
las normas de conducta dispuestos por el Código de Ética Profesional a sus
alumnos, y ceñir todos sus actos académicos y administrativos a los principios
éticos y las virtudes morales.

Cada contable en su organización debe actuar de modo que genere ideas, sea
creativo e innovador procurando siempre el logro de los intereses de sus
accionistas, los suyos y los de la sociedad, generando conciencia social, sabiendo
de antemano que cada entidad dentro de la sociedad en general cumple como es
lógico una función social y conjunta, la cual consiste en combinar los recursos
para la producción para que de esa manera se puedan satisfacer las diversas e in
cuantificables necesidades humanas.

El Contador Público, en el ejercicio de su profesión, no puede mantenerse al


margen de los acontecimientos que se le presentan en un entorno en el que él
mismo está inmerso, dado que su perfil no solamente debe ser técnico
profesional, sino también humano, espiritual y social.

Por tal razón el área contable, como eje básico de la formación del Contador
Público, debe orientarse al desarrollo integral del individuo para despertar su
creatividad, su espíritu investigativo y su capacidad de propiciar cambios con un
sentido crítico, económico, social y político.

La formación integral de las nuevas generaciones de contadores implica hoy la


posibilidad de tener una identidad, la posibilidad de desarrollarse en todas las
dimensiones humanas y de crecer como pensadores sociales, para entonces sí
hablar de un buen ciudadano y del ejercicio responsable de la profesión.

El verdadero servicio que puede prestar el Contador Público a la sociedad es


anticipar, detectar problemas donde aparentemente no existen; recetar nuevas
medidas de higiene tan pronto como sea posible para prolongar la vida saludable
y mayor satisfacción de vivir a las empresas.

La cultura contable debe estar enmarcada básicamente en dos dimensiones:


La respetabilidad académica de la contabilidad como saber disciplinal y;· El
respeto por la ética en la práctica de la profesión contable, dada la gran
responsabilidad social y ecológica que implica hoy su ejercicio.

No es suficiente descubrir que tenemos capacidad, talentos y aptitudes con las


que nacemos, también debemos contar con una visión clara de formarnos como
personas autónomas y buenos ciudadanos, de altas calidades morales, antes que
como profesionales que han asimilado solo habilidades y destrezas mediante el
aprendizaje y la apropiación de esta u otra competencia aislada de las
dimensiones del desarrollo humano.

Decir contabilidad hoy no es solo contabilidad financiera; un contador que solo


sepa de contabilidad financiera, ni de contabilidad sabe. No es un contador
competente, en el marco de la teoría moderna de competencias básicas para
aprender a vivir y protagonizar.

Hoy más que nunca, el compromiso con la realidad está soportado por la
investigación y la enseñanza de la contabilidad como ciencia, cuya misión
principal debe ser orientada hacia el servicio de la humanidad y como
herramienta política de su transformación dada que su utilidad no debe
condicionar intereses colectivos.

La meta fijada, a través del proceso educativo, debe ser el conocimiento y no un


título.

El contador Público tiene una actitud responsable y cooperativa que facilita su


participación en el trabajo interdisciplinario, y la asunción del compromiso ético
y social de su práctica profesional

Actitud del Contador Público en el Ámbito Profesional frente a sus


Colegas

Lo ideal en las relaciones de los contadores públicos con todos aquéllos que
laboran dentro de la función contable, ya sea éstos empleados en la industria,
comercio, firmas y otros, o sea que ofrezcan sus servicios de manera
independiente, sería de que existieran vínculos de compensación y no de
competencia.

EL CP tiene para con sus colegas, en mucha mayor proporción que para el resto
de sus semejantes, el deber de ser justos y honrados.

• Compañerismo:

Entre los profesionales debe existir la armonía y estimación, pues éstos son el
resultado de las buenas relaciones producto de las actuaciones civilizadas regidas
por normas preestablecidas.
• Solidaridad:

Somos solidarios de hechos con la sociedad en que vivimos. El realiza un acto


solidario cuando cumple con los principios y normas que rigen el ejercicio de la
profesión y se une, a fin de que sus metas y objetivos se materialicen de una
manera real y positiva.

• Respeto mutuo:

El respeto mutuo es una de las normas más importantes que deben cumplir los
C.P. porque es así como damos muestras de apego a los más elementales
principios éticos. Debe prevalecer su trato sincero y honorable.

El descrédito de la profesión y el interés personal de dañar la reputación de los


colegas, con calumnias, manifestando sus defectos, su falta de credibilidad ante
la gerencia, culpando a éstos de los errores que cometen en la empresa por no
tomar en serio las consideraciones que el CP hace a la hora de la toma de
decisiones, es faltar al respeto.

Actitud frente a sus Clientes

La actitud que debe exhibir frente a su cliente o empleador es una conducta


cordial y respetuosa. A éste que le corresponde actuar correctamente por la
formación superior que ha adquirido, haciendo que su comportamiento con los
clientes de la información contable se asemeje de acuerdo con las normas
dictadas.

El tiene una responsabilidad moral consigo mismo, con la profesión, con los
colegas y con la sociedad; así que, no debemos dejarnos maniatar por los dueños,
los accionistas y acreedores de la empresa en donde estemos realizando una
labor, sólo el sabe el problema moral que corre si acepta las decisiones
administrativas que de alguna manera tienen influencia en la información que
éste tiene que presentar.
• Cordialidad:

Es una fuente generadora de buenas relaciones, la cual debe mantenerse frente a


los clientes de una manera sincera.

• Respeto:

El profesional está obligado a respetar los acuerdos a los que ha llegado con el
cliente, empresa o casa en la cual labora. Ninguna empresa debe abusar de la
generosidad para basar sus equívocos en el mal manejo de sus operaciones
financieras, tomando decisiones e imponiendo la misma al para beneficio de la
compañía.

• Seriedad:

Todo contador debe ser caballeroso. Sus actos y conducta deben hablar por él, en
el día a día de los quehaceres de la profesión éste debe presentar las más altas
credenciales de seriedad.

El DEBER PROFESIONAL.

El Contador tiene un papel importante en la sociedad. Los inversionistas,


acreedores, empleadores y otros sectores de la comunidad de negocios, además
del gobierno y público en general, confían en los contadores para tener una sólida
información financiera, y consejo competente acerca de una variedad de materias
en negocios e impuestos.

La actitud y comportamiento de los contadores al proporcionar tales servicios,


tiene un impacto en el bienestar económico de su comunidad y país.

Es necesario que el Contador goce de confianza pública, ya que esta es a la larga


directamente proporcional a la capacidad real de este para desempeñar su función
social, y esta capacidad esta directamente relacionada con el nivel de
conocimientos generales y específicos requeridos en su profesión.
LA HONRADEZ

El profesional Contador deberá mantener incólume su integridad moral


cualquiera que fuere el área en que practique el ejercicio profesional.
Conforme con ello se espera de él, rectitud, probidad, dignidad y sinceridad, en
cualquier circunstancia.
DIGNIDAD PROFESIONAL

El Contador tiene la obligación de contribuir, de acuerdo con sus posibilidades


personales, al desarrollo, superación y dignificación de la profesión, tanto en el
ámbito institucional como en cualquier otro campo que, como los de la difusión o
de la docencia, le sean asequibles.

El SECRETO PROFESIONAL.

El Contador está obligado a guardar la reserva profesional en todo aquello que


conozca en razón del ejercicio de su profesión, salvo en los casos en que dicha
reserva sea levantada por disposiciones legales.

SOLIDARIDAD ENTRE COLEGAS.

El Contador debe tener siempre presente que el comportamiento con sus colegas
no sólo debe regirse éticamente sino que debe estar animado por un espíritu de
fraternidad y colaboración profesional.

PROTECCIÓN Y APORTE AL DESARROLLO DE LA SOCIEDAD.

La responsabilidad de un contador no es exclusivamente satisfacer las


necesidades de un cliente o empleador en particular, sino que es una
responsabilidad de interés público, entendiendo por tal, el bien común de la
comunidad de personas e instituciones a las cuales sirve el profesional.

DENUNCIA DE COLEGAS QUE HALLAN COMETIDO FALTAS DE


ÉTICA GRAVES.
Cuando el Contador tenga conocimiento de actos cometidos por sus colegas, que
atentan contra la ética profesional, está en la obligación de hacerlo saber a las
autoridades del Colegio de Contadores aportando, en todo caso, evidencia
suficiente y competente.

4.- LA ÉTICA REFLEJADA EN LA ACTITUD DEL


CONTADOR PÚBLICO EN EL ÁMBITO DEL
EJERCICIO PROFESIONAL

La ética representa las características humanas ideales o de autodisciplina en


exceso, de las exigidas por la ley.
En el caso de los profesionales, puede considerarse la ética como un sistema de
principios morales y la observancia de reglas para gobernar las relaciones con los
clientes, el público y otros contadores públicos, y está relacionada con la
independencia, autodisciplina e integridad moral del profesional.

Con este fin los miembros de la Junta Central de Contadores deben en todo
momento de acción, guardar estricto secreto de los asuntos de sus clientes,
esforzarse constantemente para mejorar su habilidad profesional, observando las
Normas Internacionales de Auditoria Generalmente Aceptadas (NIA), promover
las formas más completas y comprensibles en el informe financiero, sostener la
dignidad y el honor de la profesión, y mantener altas normas de conductas
profesionales.

La moral profesional es una aplicación de la moral a la profesión, o mejor dicho


el profesional que es el hombre y puede ser cristiano con una función que
cumplir en sociedad. No deben ser distintos los principios que rijan la moral del
profesional en cuanto tal, de los principios que han de regir la vida de cualquier
mortal, puesto que la moral como la verdad no puede ser más que una.

Entre los protagonistas de las ciencias económicas o del proceso económico se


destaca el contador como árbitro, y en cierto modo responsable de los métodos
administrativos y como el autor, consciente de las informaciones, las cuales
fundamentalmente requiere la economía.

El papel de la contabilidad es iluminar la administración para que opere de la


mejor forma posible, en su doble carácter de acción y razonamiento.

Mucho depende de la capacidad y responsabilidad de los contadores, porque si el


comercio y la administración consisten en el manejo técnico de los bienes y
servicios, la función de los contadores tiende a orientar esa acción.

La función del contador, en el sentido estrictamente profesional:

- La mayor trascendencia.
- La que propone mayor responsabilidad al contador.

El contador público tiene la obligación de la consagración y el adiestramiento,


haciendo conciencia de sus propias funciones. Si de él depende el rumbo de la
empresa, con su sinceridad, lealtad y capacidad deriva la apreciación de un
patrimonio cualquiera que sea, según su acción en la particularización, podrá ser
considerado este profesional como un fruto superior o no.

La actitud intelectual del contador es operar en la realidad con arreglo de las


esencias y principios de la ciencia, para, de manera responsable, iluminar la
administración y las decisiones que tiene que tomar en las empresas.

El Código de Ética Profesional es explícito con el papel del contador público al


servicio del sector privado, en cuanto a su integridad y lealtad con las empresas.

Todas las Profesiones implican en la actitud del contador una ética, puesto que
siempre se relacionan de una u otra forma con los seres humanos unas de manera
indirecta y otras de manera directa, como es el caso de los Contadores públicos,
los Profesores, los Médicos, los Abogados, etc. puesto que deben tratar
permanentemente con personas en el transcurso del desempeño de su profesión.
La ética de cada Profesión depende del trato y la relación que cada Profesional
aplique a los casos concretos que se le puedan presentar en el ámbito personal,
profesional o social en cuanto a su vinculación con las personas con las que trata
permanentemente.

El Contador Público en el Perú es un profesional capacitado que presta


asesoramiento a las empresas para la toma de decisiones eficientes, y el buen
manejo de sus recursos económicos y financieros que tienen una participación
activa en la vida económica del país y, por ende, una responsabilidad actuando
con rectitud y buena fe, manteniendo el honor, dignidad y capacidad profesional,
observando las reglas de ética mas elevadas en todo sus actos en el desarrollo de
sus actividades ya sea independiente o dependiente de la profesión contable.

Los contadores deberán acatar las normas de conducta que señala el código de
ética profesional en caso contrario tendrán que someterse a responder civilmente
o penalmente por los daños y perjuicios que podría causar por incumplimiento de
sus obligaciones o cometer delitos tributarios durante el ejercicio de su función y
en consecuencia.

Estará inmerso en un proceso penal; también veremos el delito contable con la


finalidad que el Contador Público pueda tener una visión amplia y clara acerca de
las consecuencias penales que pueda acarrear en el ejercicio de su profesión.

5.- LA ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO


SEGÚN EL CÓDIGO DE ÉTICA PROFESIONAL

Las normas de las Éticas profesionales buscan normar el buen desempeño de los
Contadores Públicos y se aplican a los miembros de los colegios profesionales
del país.

Este código norma la conducta del Contador Público en el ejercicio de su


función, cual fuera dependiente e independiente; así como también la conducta
con sus colegas.
Dentro de las normas generales del ejercicio profesional menciona que el
Contador Público deberá actuar con propiedad y buena fe, manteniendo el
honor, la dignidad y la capacidad profesional, observando las reglas del código
de ética profesional más elevadas en todos sus actos.

El Contador Público no podrá hacer declaraciones públicas en contra de la


institución, ni participar de actos que sean lesivos a la profesión.

El Contador Público no podrá expresar su opinión sobre sus informes


financieros, dictámenes, declaraciones juradas, etc., refrendados con su firma. No
podrá retener información de sus clientes sean libros o documentaciones, sea cual
fuere la causa, por tratarse de una apropiación indebida.

El Contador Público tiene la obligación de guardar el secreto profesional, es


decir, el de no revelar por ningún motivo los hechos, datos o circunstancias de los
que tenga conocimiento en el ejercicio de su profesión, excepto por las
informaciones que obligan las disposiciones legales.

Tampoco podrá beneficiarse haciendo uso de la información que obtenga en el


ejercicio de la profesión ni podrá divulgar a otras personas con el mismo fin; no
podrá revelar datos que identifiquen a las personas o negocios a menos que se le
autorice.

El Contador Público en el desempeño de su función debe mantener


independencia de criterio, no dejándose llevar por sentimientos, ni
susceptibilidades ofreciendo así el mayor grado de objetividad e imparcialidad
donde se desempeñe basándose en hechos debidamente comprobables en
aplicación de los principios y las normas contables de contabilidad y de auditoria
y también las técnicas contables aprobadas por la profesión en los congresos
nacionales e internacionales.
El Contador Público debe tener presente que su actuación profesional conduce a
tomar decisiones que repercuten hacia terceros, por lo que al emitir sus opiniones
debe hacerlo con independencia de criterio.

En cuanto a la relación entre colegas el Contador Público podrá asociarse con


otros colegas para el ejercicio profesional, de acuerdo a los dispositivos vigentes;
no pudiendo ser socio de más de una Sociedad de Contadores Públicos.

El Contador Público deberá abstenerse de hacer juicios, de emitir opiniones o


comentarios sobre la intervención profesional de otro colega.

En las sociedades de profesionales sólo podrán suscribir o refrendar informes y


estados financieros quienes poseen título de Contador Público otorgado por una
Universidad Peruana o revalidado en ella y debidamente colegiado e inscrita en
la sociedad y registro que le corresponda.

El Contador Público podrá ejercer su actividad tanto: en forma dependiente e


independiente; cuando asume el compromiso de prestar sus servicios debe
determinar el monto de sus honorarios, tomando como referencia, así como la
responsabilidad que asume, la importancia de la empresa y otros factores, de tal
manera que dicha base no resulte lesiva a la dignidad profesional.

El Contador Publico en la docencia universitaria tiene la obligación de trasmitir


los conocimientos actualizados de la profesión y las normas de conducta
preparados por el Código de Ética Profesional.

Toda actividad del Contador Público Colegiado debe ajustarse armónicamente


a las Normas de Ética Profesional, para de esta manera darle prestigio, enaltecer
la Profesión, y por consiguiente merecer la aceptación general en el ámbito
donde se desenvuelve el Contador Público.

Existen una serie de normas y disposiciones que rigen el desempeño del


Contador Público Colegiado en su permanente relación con sus Colegas,
Clientes y Público en general, las cuales se encuentran dispuestas en un
Código de Ética Profesional, las que están supervisadas por el respectivo
Colegio departamental mediante su correspondiente Comité de Ética
Profesional, cuyo acatamiento y cumplimiento es de carácter obligatorio para
todos los Miembros de la Orden Profesional .

El conjunto de reglas de conducta dados por el Código de Ética Profesional que


regulan la actividad del Contador Público Colegiado, constituye guías mínimas
de orientación o criterios de comportamiento que adopta la Profesión Contable
frente a su diario accionar al servicio del Público en general; además establece
que estos principios son igualmente válidos para todos los Contadores Públicos
Colegiados ya sea que trabajen en el sector público, privado o en la docencia.

Todo Contador Público Colegiado debe tener presente que siempre debe estar
ceñido a los principios éticos de Integridad, Objetividad, Independencia,
Confiabilidad, Responsabilidad, Observancia de las Normas y Leyes,
Competencia, Actualización Profesional, Respecto y Colaboración con los
Colegas.

Los profesionales de la Ciencia Contable, toman decisiones e inducen a otras


personas a tomarlas, por lo que la información que producen debe reunir
características de veracidad, oportunidad, objetividad, confiabilidad,
verificabilidad, de tal manera que sus servicios se conduzca bajo la guía de las
virtudes morales como la prudencia, la justicia, la fortaleza y la templanza.

El Código de Ética Profesional, no solo sirve de guía a la acción moral de cada


Contador Público Colegiado, sino que también mediante él, la Profesión
Contable declara su intención firme de cumplir con la sociedad y servirla con
lealtad, honradez y diligencia.
6.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO SEGÚN
LOS PRINCIPIOS ÉTICOS

1.- Responsabilidad.- Al cumplir con sus responsabilidades como profesionales,


los C.P deben hacer juicios profesionales y morales sensatos en todas sus
actividades.

2.- El Interés Público.- EL C.P debe aceptar la obligación de actuar en forma


que sirva al interés público, fomente la confianza pública y demuestre un
compromiso con el profesionalismo.

3.- Integridad.- A fin de observar y ampliar la confianza pública, el C.P debe


actuar con el más alto sentido de integridad y deben cumplir con todas sus
responsabilidades profesionales

4.- Objetividad e Independencia.- El C.P. siempre debe actuar con objetividad y


estar libre de conflictos de intereses en el cumplimiento de sus responsabilidades
profesionales.
EL C.P en práctica debe ser independiente de hecho y apariencia cuando
proporcione asesoría contable y otro tipo de certificaciones.

5.- Cuidado Debido.- El C.P. debe observar las normas técnicas y éticas de la
profesión, esforzarse continuamente por mejorar la competencia y la calidad de
los servicios y actuar con responsabilidad profesional hasta su límite máximo.

6.- Alcance y Naturaleza de los Servicios.- EL C.P en práctica pública debe


observar los principios del Código de Conducta Profesional al determinar el
alcance y naturaleza de los servicios que ha de prestar.

7.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO DENTRO


DE UNA EMPRESA
La contabilidad, a nuestro entender, es la ciencia financiera más completa en lo
que a una empresa se refiere.

Partiendo de este postulado debemos entender que el contador es la persona con


mayor preparación dentro de una empresa, esto así porque el contador en
cualquier momento puede ocupar diferentes posiciones en la empresa, como es:

- Contador.
- Auditor.

- Administrador.

- Encargado de compras.

- Gerente de ventas.

- En fin, toda una gama de servicios puede asumir.

Por lo general, teniendo el contador estas cualidades, entendemos que es el asesor


ideal para cualquier empresa. En el área impositiva quién mejor que éste para
manejar estos asuntos tan delicados. En el campo laboral el contador domina
estas leyes sin ser abogado, y en el campo de la seguridad social, quién más que
el contador.

Una de las funciones básicas del contador es tratar de que las empresas cumplan
con el logro de los objetivos más profundos, que son custodiar e invertir el total
de valores de una empresa, a mantener los sistemas de información adecuados
para el control de los activos y operaciones de esa empresa, y a proteger el capital
invertido.

El simple hecho de que un profesional del área de contabilidad tenga el título de


licenciado en contabilidad, no significa que puede ser asesor de una empresa. El
contador debe reunir determinados requisitos y características peculiares, como:
experiencia en el campo profesional y conocimiento de la disciplina
administrativa contable, fiscales, legales, de manejo de personal, producción y
mercadotecnia, al grado que les permitan enfrentarse y resolver con diligencia los
múltiples problemas que se le presenten en el desempeño de su trabajo, no
porque sea el responsable directo de todas y cada una de aquellas funciones, sino
porque debe estar preparado a fin de coadyuvar a que las mismas se realicen
eficientemente. De ahí que sea necesario señalar la necesidad y acaso obligación
que tiene este profesional, no sólo de mantener, sino de acrecentar día a día sus
conocimientos mediante la práctica constante del estudio, lo que lo mantendrá
siempre enterado de los últimos adelantos y cambios en las materias propias de
su campo de acción, con lo cual se encontrará más capacitado para desarrollar en
forma eficaz y diligente sus labores.

El contador como asesor debe, y sobre todo tiene, que poseer algunas
actitudes tales como:

a) Practicar adecuadamente las técnicas de las relaciones humanas, no olvidando


que el personal es el factor fundamental a través del cual se desarrollan las
operaciones de las empresas.

Es por esto que cuando asesora a una empresa debe tener todo el cuidado de que
tal propuesta no afecte, o si lo hace sea de manera mínima el personal de la
empresa.

b) Precisar en forma clara los objetivos que alcanzará la empresa con tal medida
a aplicar. Debe de cuidarse de utilizar terminologías complicadas, dado que la
persona a quien asesora no domina su lengua y lo que más debe de evitar es
confundir al cliente.

c) Sus sugerencias deben ser dadas directamente a la más alta instancia de la


empresa, esto permitirá que la empresa utilice de manera eficaz todos sus
recursos tanto material como humano con que cuente la organización.
d) Debe tener un gran interés manifiesto por la investigación, para así
recomendar a cualquier empresa mejorar sus procedimientos en el área contable,
de tal manera que se superen las condiciones existentes en una empresa y se
alcance una mayor eficiencia de operación.

e) Poseer de manera prioritaria el interés de conocer las necesidades de la


dirección de la empresa y el nivel gerencial, en cuanto a la información que
requieran para conocer el resultado de las operaciones, y que le sirva de base para
la toma de decisiones.

f) Actuar en su momento como consejero y participar en las discusiones que


tratan de resolver problemas de áreas diferentes a la suya, evaluando métodos y
alternativas, y sugiriendo mejorar. También de señalar con toda honestidad y
valientemente, en forma imparcial, las deficiencias y puntos débiles que observa
en la organización, y aceptar sinceramente los puntos de vistas de otros para
evitarlos y corregirlos.

g) Practicar un riguroso control sobre su propio trabajo, evitando aquellas


actividades que le distraigan y entorpezcan sus funciones, y asegurarse
completamente que las normas y políticas de la empresa sean cumplidas de
manera eficaz.

Estas actitudes no son una regla universal debido a que algunas de ellas el
contador no podrá aplicar, porque tendrá que ver con cuales disposiciones
cuentan las autoridades suprema de la empresa.

8.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO EN EL


AMBITO FISCAL

En una economía globalizada, al Contador Público se le presentan nuevos


desafíos a fin de cumplir con el rol que la sociedad le ha asignado, en particular
en materia tributaria y fiscal. En esta sub.-área se pretende analizar con la
profundidad adecuada, los distintos roles que el Contador Público realiza, no sólo
como asesor de los empresarios, sino también como auditor tributario, como
profesional calificado al servicio de la Administración Fiscal, como legislador,
gobernante o dirigente gremial o asesor de los mismos, etc.

Se espera que los trabajos analicen el rol protagónico que nuestra profesión debe
tener en todo el proceso, desde la elaboración de las políticas fiscales hasta su
ejecución, así como todos los aspectos vinculados a la materia tributaria y fiscal
con la formación, educación, actualización y demás condiciones profesionales y
morales que debe ofrecer el Contador Público a comienzos del próximo milenio.

9.- ACTITUD DEL CONTADOR PÚBLICO ANTE LA


CORRUPCIÓN

En todo ese quehacer económico-social, el profesional contable tiene particular


injerencia. Se debe tomar conciencia de la responsabilidad personal en orden a la
erradicación de la corrupción. Ella no es un mal que origina la sociedad, sino que
es un mal que origina el hombre y se afecta a él, a sus semejantes y la sociedad
toda.

Quien se encierra en el anonimato, omitiendo su actitud necesaria, aduciendo un


accionar impersonalizado de la corrupción que aparecería así como un virus
social contra el que es imposible luchar y, por el contrario, tonel que se debe
contemporizar, no hace honor alguno a su condición profesional, ni de
ciudadano, ni de hombre.

El Profesional Contable debe mantener un alto nivel de conducta profesional y


ética, si queremos que nuestra profesión sea notablemente reconocida por el
comercio y el mundo de los negocios.

Un Contador que tiene ese reconocimiento, recibirá el respeto necesario que le


dará preeminencia en el mundo de los negocios. Preeminencia que se
fundamenta, no solamente en sus cualidades técnicas, sino en la integridad y
elevado conocimiento de las cuestiones morales de los negocios.
La personalidad moral debe manifestarse en el ejercicio de la Profesión Contable
como un sello.

El mundo exige una acción enérgica de defensa común que debe ser solidaria. S
e trata de promover u ejecutar la que responde a la normalidad de la profesión, es
decir, lo que realiza y asegura el justificado beneficio de los intereses inmediatos
y el bien común.

Un contador debe sentir el orgullo de oír decir que es inaccesible a ciertas


dádivas inmorales. “Cuando semejantes caracteres unen a la probidad una
verdadera competencia, se abren camino y serán consejeros y ayudantes en al
más difíciles situaciones”.

Por lo tanto:

- La corrupción social es consecuencia del accionar indebido de sus


componentes. Origina, en consecuencia, una responsabilidad personal e
indelegable.
- La lucha contra la corrupción es también, una responsabilidad personal e
indelegable de todo ser humano como componente de la comunidad
social.

- Esa responsabilidad es aún mayor para nuestros profesionales, por su


condición intelectual y por su importante participación en el mundo de la
economía y de los negocios.

- Se hace necesario un cabal conocimiento de los principios éticos y de una


decidida voluntad pendiente a su respaldo y vigencia.

- En todo este quehacer las Entidades Profesionales que nos agrupan tienen
pautas claras, cuya divulgación merecen ser intensificados.

10.- ACTITUD HUMANISTA DEL PROFESIONAL


CONTABLE
En definitiva, el término “humanismo” se aplica actualmente a toda doctrina que
considere al hombre como instancia superior y tenga como meta su felicidad.

De acuerdo con lo dicho, la “formación humanista” que propugnamos en


nuestros profesionales contables es aquella que, partiendo del hombre como
sujetote toda actividad social, tienda al enriquecimiento personal del espíritu y se
manifieste en hechos de servicios comunitarios.

Para todo ello será necesario, un enriquecimiento paulatino y permanente de cada


profesional, como persona humana, como profesional en sí y como sujeto de
cultura y progreso.

Ese es esencialmente el “humanismo” que puede y debe pretenderse del


profesional. O sea, a través del profesional descubrir al hombre, con todos sus
atributos que hacen a su verdad y a su destino.

En nuestro días, el excesivo tecnicismo, la absorbente especialización y la


sobredimensionada competitividad nos han llevado a centrar exclusivamente
todos nuestros objetivos en a formación del “Especialista” olvidando tal vez sus
irrenunciable calidad de persona humana.

Conviene recordar que para el hombre es siempre peligroso y perjudicial crecer


sin desarrollar armónicamente su naturaleza.

Es que la formación humanista, que se promueve en el Profesional Contable, no


puede tener otro objetivo que:

- El enriquecimiento personal del Profesional Contable.

- El incremento del prestigio de la Profesión.

- El mejor servicio y progreso de nuestras comunidades.

- Un profesional que crece armónicamente en ciencia y humanidad.


La necesaria formación humanista del Profesional Contable debe
manifestarse en un total cumplimiento técnico y ético de las exigencias de su
labor.

Es conveniente que ese Profesional Contable acreciente su bagaje cultural,


con miras a su enriquecimiento personal, al incremento del prestigio de la
Profesión y al mejor servicio y progreso de la comunidad.

Se debe proponer que la currícula del Contador Público, tenga una adecuada
expresión la relación con su formación humanista.

El sentido de la comunidad y la voluntad de servirla, deben caracterizar la íntima


actitud del Contador y su actividad profesional. Constituye un error intelectual y
una inmoralidad la existencia de un “apego a sí mismo” financiero y económico.
Toda la vida económica, con su mecanismo tan complicado, interviene e influye
en la vida social. Pero la sociedad tiene derecho a la existencia y a no ser
sacrificada por los intereses privados de los particulares.

Quienes tienen influencia sobre la economía y finanzas, deben orientar sus


juicios y su acción conforme a los principios de la moral social.

La sociedad en que se mueven es un cuerpo en el cual los órganos particulares


tienen diversas funciones, comprende diferentes clases debiendo servirlas a todas
sin excepción alguna y , si bien las exigencias de la justicia social son iguales a
todas en su formulación en su forma concreta depende también de circunstancias
de tiempo, lugar y cultura.

11.- ACTITUD DEL CONTADOR DEL SIGLO XXI


EN EL ÁMBITO DEL EJERCICIO PROFESIONAL
(VALORES Y ETICA)

Actualmente la mayoría de las profesiones poseen un código de ética que rige las
acciones de sus egresados, el cual es tan importante como los conocimientos que
pueda tener cualquier persona que presuma tener un título, puesto que la ética
profesional respalda el prestigio y la confianza de una carrera.

En el caso de los contadores públicos, la ética profesional es tan importante como


los principios contables, puesto que un contador poco confiable o ético nunca
será requerido para realizar una auditoria, llevar la contabilidad de una empresa
ni para delegarle responsabilidades.

Actualmente se hace mucho énfasis en que los contadores deben respetar el


código de ética de su profesión, pues se le ha caracterizado como una persona
tramposa que invade impuestos u oculta información al fisco, no sólo en nuestro
medio, sino también en países como Estados Unidos. Las consecuencias de estos
comentarios pueden perjudicar a la profesión, puesto que el trabajo se encuentra
desmeritado y de no mejorar la reputación, pudiendo ocasionar graves problemas
a las futuras generaciones de contadores públicos.

La actitud que debe tomar el contador público de nuestro siglo es una actitud
positiva en donde llegue a incrementar cada día sus conocimientos, actualizarse
con nuevas tecnologías y cambios en las leyes fiscales, actuar con honestidad
para no perder la confianza que se deposita en sus habilidades y siempre tratar de
hacer un trabajo de calidad, lo más exacto posible.

Otra de sus obligaciones es impulsar el desarrollo económico del país, mediante


la honesta contribución de impuestos, así como orientar a las empresas a cumplir
con sus obligaciones e impedir evadir al fisco.

IV.- CONCLUSIONES:

 Por ultimo, deseamos concluir planteando una preocupación adicional con


respecto a nuestro papel en la sociedad, debemos de establecer desde un
principio que cuando hablamos de relaciones en sociedad, nunca
pecaremos al sobredimensionar el papel que cumple la confianza en la
sociedad moderna, así, en la esfera de lo publico y en el contexto de la
sociedad moderna, la relación que tiene el contador con esta, esta
revestida de un carácter especialmente particular, donde la ética
profesional se debe corresponder, desde un enfoque social practico, con
una moral humanizante, promotora de valores que contribuyan al proyecto
histórico de la equidad, a partir del libre desarrollo de la personalidad
basada en la autonomía de acción que posibilite una verdadera libertad
humana.

Frente a esto considero que la educación deberá brindar los elementos


imparciales de juicio para dirimir el singular conflicto ético versus esa
búsqueda incesante de la maximización del beneficio privado aquella que
nos hace olvidar por un momento los fines colectivos trazados por las
ciencias humanas.

 Dentro de las normas generales del ejercicio profesional menciona que el


Contador Público deberá actuar con propiedad y buena fe,
manteniendo el honor, la dignidad y la capacidad profesional,
observando las reglas del código de ética profesional más elevadas en
todos sus actos.

 El CP es responsable de sus actos libres, por tanto sólo es responsable del


mal cometido, ya sea por acción, ya sea por omisión o porque lo ha
querido libremente, si éste ha sido el dictado de su conciencia.

El profesional que se entregue al creciente interés que despiertan las


normas éticas y los principios fundamentales de la profesión, dejará de
sentir en su conciencia la amargura y la decepción que le producirán actos,
hechos, recuerdos de su vida realizados con inconscientes desenvolturas,
creyéndolos justos y morales, y creyendo que no procedió con error.
 El C.P debe hacer juicios profesionales y morales sensatos, deben actuar
por el bien común de la sociedad, con integridad, deben ser objetivos y
evitar conflictos de interés, deben se cuidadosos y evaluar la idoneidad de
la naturaleza de los servicios que proporcionan.

 El contador debe tratar de mantener la integridad moral que caracteriza la


fe pública.

 Por lo tanto, debemos ser creativos, innovadores, transmitiendo mensajes


en forma clara y transparente y actuando en forma decidida con fortaleza y
prudencia profesional. Liderazgo que se estime en términos de humanismo
y por lo tanto en el marco de la ética general y en particular la profesional.
 El contador de nuestros tiempos debe de actuar como un agente de
cambio, que logre facilitar las tareas de pago de impuestos, desarrollar
nuevas formas de analizar la información contable de manera más sencilla
y exacta y, en general, mejorar y aumentar la visión de su profesión, ya
que como futuros trabajadores, está en él hacer un cambio que realmente
contribuya con nuestro país.

V.- Bibliografía:

 Internet : Google.com
Monografías.com
 Actitud del Contador público en el
Ámbito Profesional
 Actitud y Ética en el Ejercicio
Profesional

 Actitud Profesional

 Valores Éticos en el ejercicio de la


profesión
(XXIII Conferencia interamericana de
Contabilidad - Puerto Rico)

 El Código de Ética Profesional del


Contador Público
 La Ética (José Vicente Vitta)

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