Sei sulla pagina 1di 13

• Acción Resolutoria. Concepto.

Es la facultad, una opción, que tiene una de las


partes en un contrato bilateral, cuando ésta cumple con su prestación, de ponerle
fin al mismo, a través de una demanda ante el órgano jurisdiccional, y en
consecuencia ser liberada de su obligación, si a otra parte NO cumple con la suya.
Fundamento. El Art. 1.167 C.C. establece “En el contrato bilateral, si una de
las partes no ejecuta su obligación, la otra puede a su elección reclamar
judicialmente la ejecución del contrato o la resolución del mismo, con los
daños y perjuicios en ambos casos si hubiere lugar a ello”.

Aquí se señalan las opciones que se tienen en un contrato bilateral


cuando una de las partes cumple su obligación y la otra no. Estas opciones
son mutuamente excluyentes entre ellas, o se usa una o la otra, entonces se
podrá:

. Ó como otra opción, se podrá exigir judicialmente la resolución del


contrato, ponerle fin porque ya no le interesa el cumplimiento del mismo,
esto es a través de la ACCION RESOLUTORIA.

Efectos. La doctrina señala como efectos principales los siguientes:

I. Entre las Partes:


a. Efectos liberatorios. Al ser declarado resuelto el contrato se extinguen todas las
obligaciones nacidas del mismo: se considera terminado no desde el momento en
que se declara la resolución, sino como si jamás hubiese existido, volviendo las
partes a la misma situación en que estaban antes de contratar; se extinguen todas
las obligaciones nacidas del contrato.
b. Efectos restitutorios. Al extinguirse las obligaciones, las partes deberán
restituirse mutuamente todas las prestaciones que hubieren cumplido.
c. Daños y perjuicios. La parte cuyo incumplimiento culposo da motivo a la
resolución queda obligada a la indemnización de los daños y perjuicios que la
resolución cause a la parte accionante. La mayoría de tales daños pueden quedar
satisfechos por los efectos restitutorios de la acción resolutoria; pero el actor tiene
derecho a reclamar todos los daños que le produzca la resolución, tanto los daños
emergentes como el lucro cesante.

II. Efectos respecto a Terceros: La resolución con los efectos indicados, se


produce tanto entre las partes como con respecto a terceros, en virtud del principio
de que resuelto el derecho del enajenante desaparece el derecho del
causahabiente, pues nadie puede transmitir un derecho que no tiene.

III. Los Efectos de la Cosa Juzgada: El subadquirente tendría que haber sido
demandado para que la sentencia que declara la resolución le sea aplicable. En
materia de venta con reserva de dominio, basta que el contrato tenga fecha cierta,
para que sea oponible al tercero subadquirente (art. 7 Ley de Reserva de
Dominio), por consiguiente, le es oponible la sentencia que declara la resolución.

Diferencias con otros medios de terminación de los contratos.


A. Diferencias con la nulidad de los contratos

La doctrina distingue diferencias fundamentales, a saber:

1° La nulidad es un modo de terminación de los contratos que han nacido con un


vicio que afecta su eficacia. La resolución es un modo de terminación de contratos
que han nacido legalmente perfectos y que pro-ducen los efectos normales
propios de todo contrato válido.

2° Las causas de nulidad surgen con el contrato mismo. Las mismas causas de
resolución (incumplimiento culposo) surgen después que el contrato se ha
perfeccionado.

3° Como consecuencia de las diferencias apuntadas, la nulidad no es más que la


constatación de un contrato inválido o ineficaz. La resolución es la terminación de
un contrato perfecto.

4° La nulidad es la consecuencia de la violación en el contrato de normas de orden


público que tutelan intereses generales (nulidades abso-lutas) o intereses
particulares (nulidades relativas) y opera aun cuando las partes cumplan o quieran
cumplir sus respectivas obligaciones. La resolución ocurre en los contratos
bilaterales, motivada a incumplimiento culposo de sus obligaciones por una de las
partes.

B. Diferencias con la rescisión

La rescisión es un medio especial para atacar ciertos contratos bila-terales, que si


bien no violan ninguna cláusula de orden público, estable-cen una desproporción
excesiva entre las prestaciones de las partes en perjuicio o detrimento de una de
ellas.

La doctrina expone que en general la rescisión tiene carácter subsi-diario y sólo


opera en falta de otro recurso capaz de colocar a las partes en situación de
equilibrio. La resolución no tiene carácter subsidiario, ni tampoco opera a falta de
otro recurso.
El efecto retroactivo de la resolución no es aplicable en los casos de rescisión.

C. Diferencias con la disolución

1° La disolución es un medio voluntario de terminación de los con-tratos mediante


el cual las partes de mutuo acuerdo deciden la extinción del contrato. La
resolución no es propiamente voluntaria, sino que es motivada por el
incumplimiento culposo de una de las partes en un contrato bilateral, viéndose
obligada la otra parte, en resguardo de sus intereses, a pedir la terminación del
mismo.

2° En principio, la disolución del contrato lo extingue hacia el futuro pero no hacia


el pasado, quedando plenamente cumplidas y con total vali-dez las prestaciones
efectuadas. La disolución no tiene efecto retroactivo. La resolución tiene efectos
retroactivos, el contrato se considera como si nunca se hubiese efectuado,
volviendo las partes a una situación pre-contractual, a la misma situación en que
se encontraban antes de efec-tuarse el contrato; salvo en los casos de excepción
(contratos bilaterales de tracto sucesivo).

3° La disolución del contrato es un medio general de terminación de todo contrato,


sea de la clase que fuere (art. 1159). La resolución del contrato es típica de los
contratos bilaterales y sólo para los casos de incumplimiento culposo.

D. Diferencias con la revocación

1° La revocación del contrato, tomada en un sentido estricto, es la terminación de


determinados tipos de contrato por voluntad unilateral de una de las partes. Ello
ocurre en algunas clases de contratos: mandato, sociedades por tiempo ilimitado,
sociedades dé hecho, entre otros.

La resolución no depende de la sola voluntad de una de las partes, sino que es


motivada por el incumplimiento culposo de la otra parte.

2° La revocación opera hacia el futuro, no afecta las prestaciones cumplidas con


anterioridad a esa revocación, prestaciones que son válidas y producen sus
efectos.

La resolución, por el contrario, tiene efectos retroactivos colocando a las partes en


la misma situación en que se encontraban antes de celebrar el contrato y, por
consiguiente, tiende a eliminar las prestaciones cumpli-das con anterioridad,
mediante la mutua restitución de las mismas (salvo los casos de excepción).

La resolución convencional y la resolución de pleno derecho.


a) Resolución Convencional. No siendo una materia en la cual está interesado
el orden público, las partes pueden estipular libremente las causas de resolución y
sus consecuencias, salvo en ciertos contratos en que la ley limita, restringe o
regula la acción resolutoria. Las partes pueden limitarse a determinar causas
especificas de incumplimiento (falta de cumplimiento dentro de cierto término,
incumplimiento defectuoso determinado por un tercero designado por las partes,
retraso en la ejecución de una obra). El papel del juez, cuya intervención es
entonces necesaria, se limita a determinar si efectivamente se produjo o no la
causa de resolución; pero no podrá calificar si el incumplimiento es o no es
suficiente para declarar la resolución del contrato. Ejemplo: El Decreto Ley de
Arrendamientos Inmobiliarios, el cual limita las causas para exigir la resolución de
los contrato por tiempo indeterminado a las previstas en ella (art. 33) y concede un
plazo de gracia para el pago del canon de arrendamiento.

b) Resolución de Pleno Derecho. Puede estipularse que la resolución se


produzca de pleno derecho ante el incumplimiento de una de las partes. Será
necesario que la parte inocente, que tiene la alternativa de exigir el cumplimiento o
la resolución, notifique a la otra parte que ha hecho uso de la facultad de resolver
el contrato por su propia voluntad. No siendo una cuestión en la cual está
interesado el orden público, las partes pueden libremente determinar las
consecuencias del incumplimiento de una de ellas, salvo en los casos que la ley
limita las causas de resolución. Tampoco será lícita la cláusula cuando ella es
abusiva. La resolución del contrato se producirá tan pronto como la otra parte haya
sido notificada, sin necesidad de intervención judicial. Sin embargo esta no se
excluye en todos los casos. Si el contrato se ha cumplido parcialmente, la parte
inocente que notifica su decisión de dar por resuelto el contrato tendrá que recurrir
ante los órganos jurisdiccionales para que se le restituya la prestación cumplida,
pero en tal caso el juez no tendrá que decretar la resolución, ya que operó la
voluntad de las partes.

• Teoría de los riesgos. Concepto. es una teoría con la cual se pretende establecer un
criterio adecuado para los fines del derecho y de las necesidades sociales de nuestra época
por medio del cual determinar cual o cuáles son los responsables de un daño ocasionado a
una persona natural o jurídica que no tenía por qué soportar. Este criterio se estableció debido
a la necesidad de lograr un criterio que no tuviese las mismas dificultades que tiene la noción
de culpa que reinaba anteriormente en el campo de la responsabilidad civil. En efecto, la
noción de culpa era insuficiente ya que en muchas ocasiones es casi imposible determinar
quien fue el que ocasionó el hecho dañino, en especial teniendo en cuenta que en nuestra
época, debido a la tecnificación, al crecimiento de las ciudades y la complejidad de nuestra
sociedad, determinar quién tiene la culpa puede ser una tarea inmanejable.

La teoría del riesgo es una teoría que se aplica al campo de la responsabilidad civil
extracontractual y es un criterio para determinar la responsabilidad de las personas (naturales
o jurídicas) involucradas en el daño ocurrido a otra persona (natural o jurídica), sin haber
tenido tal persona que soportar el daño que se le ocasionó. Este criterio dice que son
responsables de los daños de tipo extracontractual todas aquellas personas que efectúan una
conducta que tenía el riesgo de que se presentara en concreto el resultado dañoso
acontecido. Es decir, son responsables todos aquellos que asumen el riesgo de llevar una
acción que puede tener una consecuencia dañosa para las otras personas, aún cuando la
persona que asuma el riesgo efectúe la actividad o conducta con el mayor cuidado y
perfección posible. En otras palabras, es responsable todo aquel que lleve a cabo una
conducta que conlleva el riesgo de un resultado dañoso. Si este resultado se presenta, tendrá
que responder patrimonialmente.

Principios.

La Teoría del Riesgo, plantea soluciones que oscilan alrededor de dos grandes principios:
el“res perit domino”, que hace recaer los riesgos de la cosa sobre la persona que es titular
del derecho de propiedad sobre la misma, y el principio “res perit creditori”, que ordena que
los riesgos recaigan sobre el acreedor o sujeto activo de la obligación.

Igualmente cabe observar que la expresión “res perit creditori” y su noción antagónica “res
perit debitori” se aplican con preferencia en materia de riesgos del contrato, más
específicamente en materia de riesgos de la relación obligatoria nacida de un contrato;
mientras que la expresión “res perit domino” se emplea con más frecuencia en materia de
riesgos de la cosa. Los principios expuestos varían según las situaciones a las que se
apliquen y presentan variedad de excepciones.

En criterio del autor Maduro (1987), toda solución en materia de riesgos es susceptible de
resolverse mediante la aplicación de la noción “res perit domino”, tanto en los casos de que se
trate de riesgos del contrato como cuando se trate de riesgos de la cosa. Para ello se podría
partir de una reestructuración del concepto del dominus. Tradicionalmente se ha considerado
el dominus como al propietario de la cosa, es decir, el dominus supone una persona que está
caracterizada por una relación jurídica que necesariamente recae sobre una cosa, relación
jurídica que está integrada por el derecho de propiedad sobre la cosa.

Es en este sentido que se emplea la expresión “res perit domino”, cuando se quiere significar
que en los casos en que la cosa se pierde debida a una causa extraña no imputable, la cosa
perece para su dueño, o sea, para la persona que era propietario de la cosa en el momento en
que fue destruida por dicha causa extraña.

Sin embargo, el término dominus no sólo significa la persona que necesariamente tiene una
vinculación de carácter real (derecho de propiedad) sobre la cosa, sino es sinónimo de
persona que tiene la titularidad del derecho de crédito de que se trate. En este sentido, el
acreedor es también un dominus, por cuanto tiene la titularidad del derecho de crédito
inherente a la relación obligatoria.

En consecuencia, cuando debido a una causa extraña no imputable el acreedor no puede


ejercer su derecho de crédito y debe resignarse a que el deudor no le cumpla, se estará en
presencia de un caso en el cual se aplica el principio “res perit domino”, pues el derecho de
crédito, que configura la expresión cosa en su más amplia acepción, perece para su titular, el
acreedor o domuius.

Mediante la tesis expuesta se unificarían en una sola noción todos los principios aplicables en
materia de riesgos, se aclararía el análisis y desarrollo de la teoría, porque se eliminaría el
antagonismo entre los principios “res perit creditori” y “res perit domino”, y también se dis-
pondría de una sola noción para comprender los alcances de los riesgos de la cosa y de los
riesgos del contrato.

Excepciones.

En caso de que el deudor se constituya en mora de entregar la especie o cuerpo


cierto debido 1550

En caso de que el deudor se haya obligado a entregar una misma cosa o dos o
mas personas por obligaciones distintas

En caso de que las partes convienen en que el riesgo sea del deudor

Cuando la ley lo establece, como en el 1950 N°1; 1486; 1996


Efectos. La doctrina distingue determinados efectos de la teoría de los riesgos, que se
desprenden de la naturaleza de los mismos y que se pueden sintetizar así:

1° El contrato queda terminado desde el momento mismo en que ocurre la causa extraña no
imputable que hace imposible la ejecución de las prestaciones.

2° No hay lugar a indemnización de daños y perjuicios, ya que el incumplimiento no se debe a


hechos imputables a las partes.

3° Si el contrato se ha cumplido parcialmente y las prestaciones ejecutadas no son


equivalentes, la parte que haya cumplido prestaciones por mayor valor tiene derecho a que se
le restituya lo que haya cumplido demás, dentro de los límites del equilibrio patrimonial.

En opinión del autor Maduro Luyando, ello sería la solución correcta, porque de lo contrario se
consagraría un enriquecimiento sin causa en favor de la parte que cumplió prestaciones por
un menor valor.

• Efectos del Contrato. Internos. Externos. Excepciones a los efectos


internos y a los efectos externos.
Los efectos del contrato son estudiados desde dos puntos de vista, los llamados
efectos internos
(relatividad) y efectos externos (oponibilidad). Los internos comprenden las
consecuencias que el contrato produce para las partes y los externos abarcan las
consecuencias que el contrato acarrea para terceros.
2-EFECTOS INTERNOS:
 1- Partes: Personas que han consentido para la celebración de un contrato.
Existen circunstancias que pueden convertir a los terceros en partes, como los
causahabientes a titulo universal, y los cesionarios del contrato.
 2- Terceros: Son personas cuya voluntad de ninguna manera han intervenido en el
contrato, son personas totalmente ajenas al contrato.
 3- Categorías intermedias:
 1- Causahabientes a titulo universal: Son aquellos que suceden a una de las
partes en la totalidad de su patrimonio, tal como heredero único, o en una parte
alícuota de su patrimonio, tanto en su activo como en su pasivo. Son considerados
partes y no terceros en los contratos celebrados por su causante bien pudieran ser
personas naturales (Art 1163) y jurídicas (Resultan de
las fusiones de empresas Ej: Banco bicentenario-banfoandes).
 Excepciones: Están excluidos de los efectos internos del contrato cuando
expresamente lo han querido las partes o por la naturaleza del contrato.
 2- Causahabientes a título particular: Son aquellos que suceden a su causante en
un derecho individualizado, en un objeto determinado, que forma parte de su
patrimonio, y no en el conjunto de Derechos como por ejemplo el legatario que
sucede al de cujus en la cosa objeta del legado.
A-En contratos de derechos reales el causahabiente a título particular sufre los
efectos del contrato y las cargas.
 n contratos que establecen derechos personales no produce efectos para el
causahabiente a título particular, pues este es considerado como un tercero.
 Excepciones: En materia de arrendamiento art 1605 y en casos de sustitución de
patrono.
 3- Acreedores quirografarios: El acreedor quirografario es aquel que tiene un
derecho indiscriminado y no privilegiado ni preferente sobre los bienes de su
deudor. Este tipo de acreedor se equiparan a los causahabientes universales por:
A-Los causahabientes universales tienen vocación al patrimonio indiferenciado del
causante igual que los acreedores quirografarios tienen crédito contra todos los
bienes del patrimonio del deudor.
B-Los herederos y acreedores quirografarios no tienen jerarquía alguna entre
ellos.
C-Los causahabientes a titulo universal, al igual que los acreedores quirografarios
se benefician o se afectan con las oscilaciones del patrimonio del causante,
derivada de los actos efectuados por este. Esta tesis ha sido desechada porque
los acreedores no están obligados por los contratos, y porque solo se benefician o
perjudican por el resultado económico del deudor.
 4- Penitus Extranei: No son parte pero el contrato le es oponible como una
situación jurídica.
4-Excepciones a los efectos internos:
*Contratos con efectos a favor de terceros: Casos:
-Tercero convertido en acreedor de un contrato Art 1164, 65.
-Cuando la ley concede la acción directa. Art 1584.
-Acción del trabajador contra el beneficiario de la obra. Art 1643.
-Contratos colectivos.
*Contratos con efectos contra terceros:
-Actos a título oneroso hechos por el heredero de buena fe Art 1001.
-El pago de buena efectuado por el deudor al poseedor del crédito, es válido,
frente al verdadero acreedor Art 1287.
3-EFECTOS EXTERNOS:
1-Oponibilidad: Es un complemento necesario de su relatividad que comprende el
reconocimiento de existencia del contrato y la regulación de sus efectos frente a
terceros.
2-Requisitos:
-Que el contrato exista y sea válido.
-Certeza de la existencia del contrato, lo que implica prueba del mismo.
-Fecha cierta del contrato, en materia civil queda restringida según los casos de
1359 y en materia mercantil puede probarse libremente.
 4- Consecuencias y límites de los efectos externos:
-Contratos por los cuales se transmite o crea un derecho real: El tercero puede
alegar un derecho real sobre el mismo inmueble en cuyo caso es indispensable
que el respectivo documento este registrado, cumpliendo los requisitos
de publicidad registral.
-Contratos por los cuales se transmite un derecho personal: No se puede
desconocer la transmisión de derechos personales bien sea por cesión del crédito,
en cuyo caso es necesario que el deudor haya sido notificado o haya aceptado la
cesión (1550). O por pago con subrogación (1301). En contratos de prestaciones
de hacer o no hacer los terceros respetaran la nueva situación jurídica, siempre
que se cumplan con los requisitos para la oponibilidad del contrato.
-Acreedores quirografarios: Sufren variaciones patrimoniales del deudor.
 5- Actos que no son oponibles a terceros:
-El documento privado o contradocumento privado que demuestre la simulación no
es oponible a terceros, estos siempre podrán impugnar el contrato que se les
opone alegando simulación.
-Los documentos privados sin fecha cierta.
-Los documentos declarados fraudulentos.

• La clausula Penal. Concepto. Clases. Efectos.


Es una obligación o estipulación accesoria, donde las partes en caso de
inejecución o retardo en la ejecución de la obligación el deudor cumplen con una
prestación de dar o de hacer.
2-BASE LEGAL: Art 1257,68.
3-CLASES:
 1- Compensatoria: Es aquella destinada a resarcir al acreedor por el
incumplimiento de la obligación total o parcial, por lo tanto no puede pedirse su
ejecución junto con el cumplimiento de la obligación principal.
 2- Moratoria: Es la indemnización debida por el deudor en los casos de retardo en
el cumplimiento de la obligación, por lo tanto su ejecución puede ser pedida junto
con el cumplimiento de la obligación principal.

Las arras. Concepto. Arras es la entrega de una cosa, por ejemplo dinero, que hace la parte de un
contrato a la otra, con el propósito de servir de prueba de la celebración de un contrato, como potestad de
desistimiento del acuerdo contractual o como indemnización en el evento en que exista incumplimiento
de las obligaciones por alguno de los extremos de la relación contractual.

El contrato de arras o arras, también conocido como anticipo, es un contrato privado donde
las partes pactan la reserva de la compraventa de bienes o inmuebles (como podría ser una
vivienda), entregándose como prueba una cantidad de dinero en concepto de señal. Forma
parte de los denominados precontratos, dado que lo que se está contratando es la obligación
de firmar un contrato (el de compraventa) en el futuro.

Existen tres tipos de arras en función de la intención de las partes:

 Confirmatorias: como parte de pago del precio total. Si una de las partes no cumple, la
otra puede exigirle el cumplimiento del contrato o su resolución y la indemnización de
los daños y perjuicios ocasionados.
 Penitenciales: cantidad que perderá el comprador o deberá devolver dobladas el vendedor
en caso de que no se realice la compraventa.
 Penales: cantidad que perderá el comprador o deberá devolver dobladas el vendedor en
caso de que no se realice la compraventa por incumplimiento de obligaciones. No
obstante el que ha desistido en la ejecución del contrato, no se desliga de la obligación
incumplida que puede ser exigida coactivamente. Existe indudable analogía con la
cláusula penal por lo que se le aplicará su normativa (indemnización de daños y
perjuicios).

Fundamento. El pacto de arras es una cláusula accidental regulada en el artículo 1859 y siguientes
del Código Civil y en el 866 del Código de Comercio.

• La estipulación a favor de terceros. Concepto. Clases. Efectos.


Es un contrato mediante el cual el deudor denominado promitente se compromete
frente a otra persona denominada estipulante a ejecutar una prestación en
beneficio de un tercero.
El tercero generara un derecho de crédito frente al promitente.
2-BASE LEGAL: Art 1164.
3-NATURALEZA:
 1- Sistema de la oferta: Es una oferta que el estipulante le hace a un tercero del
crédito adquirido contra el promitente que se perfecciona cuando el tercero
manifiesta su aceptación. Se le objeta:
-Si fuese una oferta la estipulación, desaparecería si el estipulante muere antes de
la aceptación del tercero.
-Antes de la aceptación del tercero el derecho permanece en el patrimonio del
estipulante, pudiendo ser embargado y ejecutado por los acreedores de este
último.
 2- Gestion de negocios: El estipulante es como un gestor en beneficio de un
tercero que vendría a hacer el dueño. Se le objeta:
-No explica el derecho de revocación que tiene el estipulante ya que el gestor no
puede rebuscar.
-Si fuese una gestión el estipulante tendrá la acción para indemnizar gastos.
 3- Teoria de declaración unilateral de voluntad: Se requiere la declaración de
voluntad de dos personas promitentes y estipulantes.
 4- Teoria de la figura suigeneris: Figura propia del carácter consensualista de los
contratos.

La promesa por otro.


Es una convención en virtud de la cual el promitente se compromete con el
estipulante a que un tercero asuma la obligación o realice un determinado hecho.
Art 1165

• La acción por simulación. Clases. Efectos.


Opina Maduro (ob. cit.) que existe simulación “cuando las partes realizan un acto o
contrato aparentemente válido pero total o parcialmente ficticio, pues es destruido
o modificado por otro de naturaleza secreta o confidencial que es el que
realmente responde a la verdadera voluntad de las partes”. (p. 580).

Por su parte, Ossorio (ob. cit.), expone que la simulación es la “alteración aparente
de la causa, la índole o el objeto verdaderos de un acto o contrato”. (p. 889).

También puede decirse, que la acción de simulación o acción de declaración de


simulación, como también se le denomina es definida por la doctrina como
“aquella que compete a las partes del acto simulado o a los terceros interesados, a
fin de que se reconozca judicialmente la inexistencia del acto ostensible, y con ello
quedan desvanecidos los efectos que se imputaban a dicho acto” Esta acción
aparece consagrada en el mencionado dispositivo legal así:

Fundamento juridico

Artículo 1.281.- Los acreedores pueden pedir la declaratoria de simulación de los


actos ejecutados por el deudor.

Esta acción dura cinco años a contar desde el día en que los acreedores tuvieron
noticia del acto simulado.

La simulación, una vez declarada, no produce efecto en perjuicio de los terceros


que, no teniendo conocimiento de ella, han adquirido derechos sobre los
inmuebles con anterioridad al requisito de la demanda por simulación.

Si los terceros han procedido de mala fe quedan no sólo sujetos a la acción de simulación
sino también a la de daños y perjuicios.

La simulación entonces supone la realización de dos actos o convenciones: uno ficticio, aparente o
simulado, y otro real o verdadero pero que es mantenido en secreto por las partes. El acto simulado
aparente y ficticio recibe generalmente en doctrina la denominación de acto ostensible, mientras que el
acto verdadero o real se denomina comúnmente contradocumento.

Clases de Simulación

La simulación puede ser clasificada en dos grandes clases: la llamada simulación absoluta, cuando el
acto ostensible no existe realmente en forma alguna porque en realidad· las partes no han querido
efectuar ningún acto; por ejemplo, cuando una persona A simula una venta con una persona B,
continuando A con la propiedad de la cosa aparentemente vendida; y la denominada simulación relativa,
cuando el acto ostensible no es totalmente inexistente, sino que sólo lo es parcialmente porque en
realidad las partes han celebrado un acto de distinta naturaleza; tal es el caso si las partes realizan como
acto ostensible un contrato de venta, cuando en realidad efectúan una donación.

La simulación relativa puede ocurrir en varias hipótesis, siendo las más comunes las siguientes:
1. Cuando se encubre la naturaleza jurídica de un acto.

2. Cuando se simulan algunas de las cláusulas del acto ostensible (por ejemplo, un precio mayor que el
real).

3. Cuando se simula la fecha de un acto.

4. Cuando por ese acto se constituyen o transmiten derechos o bienes de personas interpuestas que en
realidad no son las personas a quienes se transmite.

También se distingue en la simulación la llamada simulación lícita de la simulación fraudulenta. Cuando


la simulación es lícita, el acto verdadero produce sus efectos legales, siempre que a nadie perjudique ni
tenga causa ni objeto ilícito. En la simulación fraudulenta o ilícita, el acto cae por completo y no produce
efecto alguno; tanto el acto ostensible como el verdadero no pueden producir efecto alguno, el primero
porque no corresponde a la voluntad real, el segundo porque es nulo por objeto o causa ilícita.

En la simulación lícita para que el acto verdadero produzca sus efectos entre las partes debe reunir dos
condiciones concurrentes:

1° Que no sea prohibido mediante disposición expresa del legislador.

2° Que el acto verdadero reúna los requisitos de validez fijados por el legislador.

También existe la simulación por interposición de personas, en la cual, además de la intervención de las
partes, interviene un tercero que presta su complicidad en la simulación. En principio produce los
mismos efectos que los demás tipos de simulación conocidos.

Efectos de la Simulación

la declaración judicial de simulación verifica la inexistencia del acto aparente. Esto


producirá consecuencias diferentes según que la simulación sea absoluta o relativa.

Si es absoluta, quedará acreditado que el bien objeto del acto no ha salido del patrimonio
del deudor, y los acreedores podrán ejercer sus derechos sobre él.

Si es relativa, se verificará la inexistencia del acto simulado, y al mismo tiempo se dará


eficacia al acto oculto. Si este acto oculto es perjudicial a los acreedores, podrá ser
atacado por éstos por la vía de la acción revocatoria; si los bienes hubiesen pasado a un
tercero de buena fe podrán los acreedores ejercer la acción de daños y perjuicios.

La prueba de la Simulación.

Entre las partes, el principio general es que la simulación se prueba por el


contradocumento (documento emanado de las partes, generalmente secreto, en el cual
consta que el acto es simulado), pues el art.960 in fine expresa: “...sólo podrá prescindirse
del contradocumento para admitir la acción, si mediaran circunstancias que hagan
inequívoca la existencia de la simulación”.

Se puede prescindir del contradocumento, por ejemplo:


a) Si hay imposibilidad física o afectiva para otorgarlo (tal es el caso de que las partes
sean analfabetas o de que sean hermanos).

b) Si se ha extraviado por caso fortuito o fuerza mayor acreditable (incendio).

c) Si hay principio de prueba por escrito.

En cambio, cuando la acción de simulación la ejerce un acreedor o un tercero


perjudicado, no se le exige contradocumento, porque como es de suponer si éste existe lo
tienen bien guardado las partes. Por lo tanto, el tercero podrá probar que el acto es
simulado por cualquier medio de prueba, en especial las presunciones.

• El abuso de derecho. Naturaleza. Concepto. Fundamento. Posiciones


Doctrinarias.
• Enriquecimiento sin causa. Disposición legal. Condiciones para la
procedencia de la acción in rem verso. Reglas que la rigen.
• Pago de lo Indebido. Disposición legal. Casos diversos: Accipiens de
buena fe y de mala fe, enajenamiento a título gratuito y a titulo oneroso.
Situaciones en las que la cosa ha perecido total o parcialmente.
• Terminación de los contratos. Diversas Formas. Enumeración y diferencias.
Teoría de las nulidades. Nociones generales Casos Efectos

Potrebbero piacerti anche