Más papistas que el Papa.

La “Santa Cruz”

No se ha encontrado escritos antiguos que expliquen cómo era la cruz que los romanos
utilizaban para ejecutar a los esclavos, extranjeros y delincuentes condenados a tal
suplicio. Lo más parecido eran un poste y un travesaño, o patíbulo, formando una T, que
utilizaban antiguamente en otras culturas diferentes a la romana. También hay
evidencias de que pudo haber sido dos troncos unidos en forma de X. Ver el siguiente
documental: https://www.youtube.com/watch?v=lFf3sVixfys

Muchos cristianos han tomado la cruz como algo más digno de adorar que al mismo
Cristo, al punto que en templos y amuletos corporales la muestran sin la imagen de
Jesús y la llaman "Santa Cruz". Eso es tan irracional, como esperar que los amigos y
familiares de una víctima de asesinato veneren al Santo Puñal, la Santa Metralleta, la
Santa Horca o la Santa Guillotina como algo milagroso. Eso no tiene sentido lógico, ni
tampoco lo tiene el que coloquen en sus casas y cuerpos réplicas del arma con la que le
quitaron la vida a su amigo.

Si una cruz les evocaba tan amargos recuerdos a la madre y los hermanos de Jesús, pues
era señal de que su hijo había sido comparado con un delincuente, creo que ni por su
imaginación les pasó colocar en su casa la imagen de ninguna. Y supongo que Jesús
resucitado tampoco pondría en su cuerpo una cadena o pulsera de la que pendiera tal
objeto, pues, de ser ciertas sus palabras en el huerto, cuando tuvo la visión de la que
sería su muerte, "Si he de beber de ese amago cáliz, que se haga vuestra voluntad y no
la mía", se deduce que una cruz le causaba miedo y dolor, como a cualquier reo.

Si queremos recordar a Cristo, imaginémoslo resucitado, vencedor de la muerte en cruz,

con los brazos abiertos para abrazar, alegre y receptivo a las peticiones de sus fieles
seguidores, en vez de la imagen tan común en la que aparece adolorido y acongojado.

Evitemos colocar imágenes en los templos, pues de la adoración a Dios, representación

de la causa primera de todo cuanto existe, intangible e inimaginable, a la adoración
idólatra de muñecos de barro, de yeso o de madera, sólo hay un paso imperceptible. Las
costumbres de muchos fieles, que hacen porque ven hacer, o que creen porque les dicen
que crean, cuando alumbran, rezan y tocan con profunda fe a muñecos que suponen
milagrosos, demuestran que muchos cristianos bien se pueden catalogar como idólatras
más papistas que el mismo Papa, cuando hacen cosas que ni el mismo Cristo hizo o
hubiese hecho.

Jesús siempre dijo: "Tu fe te ha sanado... Vete y no lo cuentes a nadie". Nunca se

refirió a objetos como elementos de comunicación espiritual, ni se autonombró Dios, al
que identificaba siempre como su Padre. Recordemos sus supuestas palabras: Mateo
27:46 “Y cerca de la hora de nona, Jesús exclamó con grande voz, diciendo: Eli, Eli,
¿lama sabachtani? Esto es: Dios mío, Dios mío, ¿por qué me has desamparado?”

En el año 431, en el Concilio de Efeso, se proclamó dogma de fe para la Iglesia Católica

que María es Madre de Dios. Dogma de fe significa que los fieles deben creer esto por
irracional que les parezca. Si suponemos a Dios como el Principio de todo cuanto existe,

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la simple lógica descarta que pueda ser engendrado por alguien resultado de su propia
creación. Dicho de otra manera: Dios no puede tener madre.

Prefiero ser ateo por convicción, que creyente por tradición o herencia familiar. Afirmar
que algo es cierto porque así lo creen desde hace cientos de años, sería dar por hecho
que un error se convierte en verdad con el paso del tiempo.

Aurelio Mejía Mesa

amejiamesa@gmail.com
www.aureliomejia.com
Medellín, Colombia