UNIVERSIDAD PEDAGÓGICA NACIONAL 27 DE MAYO DEL 2019

FACULTAD DE BELLAS ARTES

LICENCIATURA EN ARTES ESCÉNICAS
Cuerpo, Cultura y Autoconciencia – Marttine Matauer
Andrés Camilo Hernández Cubillos – 1016040657

EL MÉTODO FELDENKRAIS (QUESTEL, A; 2002. En: Movement for Actors. NYC)

“El movimiento es vida. Sin movimiento la vida es impensable”

Moshe Feldenkrais

En el texto, Questel, hace una breve introducción al método Feldenkrais; cuenta las situaciones
por las que paso (tanto el cómo Feldenkrais), las decisiones que tomo, su llegada al método, sus
alivios, sus reflexiones. Además, deja un par de lecciones prácticas para ir degustando de este tipo
de técnicas; mencionando que esta se enfoca en la “capacidad innata del ser humano” para
desarrollarse, crecer y potenciarse. La clave es comenzar a de construirnos, para que a través del
movimiento comencemos a generar nuevas formas de “pensar, sentir y conocer”, mientras se va
reconociendo como hemos “aprendido a aprender”. Como resultado se obtendrá mayor
consciencia corporal, logrando estar presentes e involucrados con nuestra acción.

En términos prácticos, esta metodología comprende dos modalidades: la Integración Funcional

(IF) y la Autoconsciencia a través del Movimiento (ATM). Con la IF se pretende, a través del
contacto por medio de las manos examinar el cuerpo, registrando lo observado para orientar un
mejor uso de este. La ATM consiste en una serie de movimientos guiados, los cuales se han de
realizar de manera suave y sin esfuerzo, generando mayor autoconsciencia, alivios y sensaciones
de bienestar y conexión corporal; también se puede mencionar que estas sesiones tienen impacto
sobre la creatividad y espontaneidad.

En nosotros existen ciertas cualidades interdependientes: el pensamiento, las sensaciones, los

sentimientos y el movimiento. Por lo tanto, su identificación nos proveería una visión compleja de
nuestro ser; no obstante, no somos totalmente conscientes de estas, lo que no nos da control sobre
su cambio o trasformación. A excepción del movimiento, las demás cualidades son abstractas, por
tanto esta excepción es una forma de acceder a ellas; tenemos acceso directo a él y lo podemos
observar.

Para el actor, este método, no solo le aporta para su desarrollo personal, le permite “la afinación
del instrumento”. Tanto para al actor como para la mayoría de la gente, la comprensión sobre el
cuerpo es limitada, por lo tanto, vale la pena hacer un examen de nuestros hábitos, develándolos,
y con eso saber cómo nos movemos y poder re aprender, y hacer lo que deseamos, de forma
orgánica.

Tanto este método como las artes escénicas beben de la repetición, solo el ensayo y práctica llevan
a la perfección. Por ello, es importante mantenerse aquí y ahora a la hora de aplicar técnicas
Feldenkrais, a pesar de las continuas asociaciones de pensamiento, para que “a través de un
entendimiento más refinado de cómo nos movemos y de la habilidad incrementada para sentirnos
a nosotros mismos, podemos mantenernos presentes de manera más efectiva en lo que estamos
haciendo”. Por otra parte, en estas repeticiones, suelen haber lesiones por la diversidad de usos
requeridos, solo una atención certera podrá llevarnos a un mejor uso de nosotros mimos, y a
creaciones más complejas, detalladas y sinceras.

Al sentirse conectado con si, estar presente y practicar con la sensaciones, es posible escuchar y
observar lo desconocido, lo incómodo y lo complicado, dando lugar a una profunda exploración y
evaluación, en la que no hay restricción ni afán alguno, para crear un dialogo que permita
investigar, distinguir y elegir. El fin no es el éxito, pero si lo es el proceso.

En el proceso de creación del actor, su trabajo no es solo su habilidad para contar, también su
habilidad creativa y propositiva. Este método, aporta lo que se requiere para tal objetivo, ya que
incrementa las posibilidades para hacer y disminuye la probabilidad de atorarse. Hace falta buscar
la libertad para experimentar, hace falta buscar un espacio para observar y cometer errores, y con
ello poder “descubrir potencial creativo”.

Teniendo en cuenta los beneficios de este método, vale la pena replicar, compartir y ahondar en
esta metodología. Para ello ser a importante: consolidar perspectivas para las lecciones, indagar
otras formas de entendimiento, crear circunstancias y experiencias a través del movimiento;
volviendo concreto lo abstracto, superando el aprendizaje meramente informativo. Técnicas como
la ATM proporcionan sensaciones diferentes; es una experiencia inusual, aparentemente sin mayor
relevancia, pero que produce un fuerte cambio de percepción; lo ideal es lograr distinguir y crear
nuevas relaciones corporales, teniendo criterio interno y en consecuencia autonomía. Es necesario
seguir practicando y explorando.