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Fecha: 28/02/2019
ÍNDICE
ESTIMACIÓN SENSORIAL……………………………….………………………….4
COMPARACIÓN DIRECTA………………………………………………………….4
COMPARACIÓN INDIRECTA………………………………………………………5
SITUACIÓN A-DIDÁCTICA……………………………………………………………….…..5
1.- Introducción de la Magnitud considerada.
1.1 Introducción:
Aunque las capacidades del niño sean básicas, es muy importante empezar a trabajar
con él las magnitudes y medidas ya desde muy temprana edad, aunque su respuesta
vaya a ser escasa o nula.
Para trabajar estas magnitudes y medidas con los niños, les plantearemos diferentes
situaciones en las que sea necesario aplicarlas. Y separando entre los cuatro tipos:
tiempo, longitud, masa y capacidad.
Unidad objetal: la unidad está asociada a un único objeto, con relación incluso con el
objeto que se quiere medir. Por ejemplo, en el caso de la longitud es normal que use
como unidad algunas partes constitutivas del objeto a medir.
Unidad situacional: unidad que depende todavía del objeto que se va a medir,
cambiándola para otros objetos en función de la relación existente entre los mismos.
El niño prefiere unidades más pequeñas para objetos de menor tamaño.
Unidad figural: la unidad va perdiendo la relación con los objetos a medir, aunque
todavía se asocia a figuras concretas. La unidad sigue identificándose con alguna forma
determinada. Ejemplos paradigmáticos los observamos en el caso de la capacidad, y en
la superficie donde encontramos una identificación entre el cuadrado y la unidad.
1.3 La Masa:
Las diferencias que existen entre la masa y el peso a nivel físico son, que la masa es
una magnitud escalar por o que sus cantidades se expresan con números. Por otro
lado el peso es una magnitud vectorial ya que es una fuerza que necesita del número,
una dirección y un sentido.
El aislamiento de la magnitud masa
Existen dos interferencias que hacen más difícil el aislamiento de la masa de las otras
magnitudes: el volumen y la composición/recomposición.
Es habitual en los niños que ordenen según la masa de dos objetos basándose en su
volumen. En cuanto a la descomposición y posterior recomposición de un objeto,
puede provocar errores, por ejemplo, si descomponemos una masa de arcilla en varios
trozos, puede que el niño entienda que la masa resultante ya no es la misma.
Por otro lado los materiales como la arena, plastilina, arcilla, etc. son especialmente
indicados ya que permiten materializar la masa de otros objetos, pudiendo unirlos y
separarlos según se quiera.
ESTIMACIÓN SENSORIAL:
Colocamos a los niños en frente de nosotros, les mostramos dos objetos y los
colocamos sobre la superficie de una mesa a una distancia a la que todos ellos puedan
verlos con claridad. Lo hacemos de esta manera para que los niños tengan que
determinar a simple vista cual de los dos objetos es más pesado.
A continuación, les damos la siguiente consigna: “¿Cuál de los dos creéis que pesa
más?”. Con esta pregunta pretendemos que los alumnos indiquen, mediante su
percepción visual, cual creen que es más pesado.
Esta actividad se llevará a cabo con la bola de billar y el lápiz. Elegimos estos elementos
ya que su diferencia de peso puede ser más obvia que entre otros posibles objetos.
Repetiremos esta actividad empleando otros dos objetos distintos (un borrador de
pizarra y una goma de borrar), haciendo uso de las mismas consignas con la intención
de que los niños vuelvan a realizar la comparación entre dos objetos mediante la
estimación sensorial.
Les decimos a los niños que con una mano cojan la pelota de ping-pong y con la otra la
bola de plastilina. La consigna es la siguiente: “Con una mano coge la pelota de ping-
pong, ahora con la otra la de plastilina. ¿Cuál crees que pesa más de las dos?”
Mediante este ejercicio, provocamos que el niño realice una comparación directa de
los objetos, ya que éstos le caben en las manos y pueden sentir el peso de ambos en
ellas y así diferenciar cuál de los dos pesa más.
Hemos elegido la bola de ping-pong y la de plastilina ya que pueden ser del mismo
tamaño y tienen una diferencia de peso muy obvia.
Haremos lo mismo con el plátano y les preguntaremos en cuál hemos utilizado más
canicas. Cuando sepamos el número de canicas que hemos utilizado en cada caso les
preguntaremos cual de los dos objetos pesa más, si la fresa o el plátano.
La consigna es la siguiente: “Id colocando canicas una a una hasta que la balanza
quede igualada” (vamos contando con ellos). Cuando hayamos pesado ambos objetos
y sepamos cuantas canicas pesa cada uno preguntaremos: “¿Cuántas canicas pesa la
fresa? ¿Y el plátano? ¿Cuál de los dos pesa más?”
Consigna: “Mirad, la balanza se inclina hacia el plátano porque pesa más que la fresa.”