Sei sulla pagina 1di 10

De la Crisis del Año XX

al Pacto Federal.

El Año XX.
Actividad 1:

1- Lee el siguiente texto y subraya las ideas principales

Los congresales reunidos en San Miguel de Tucumán estaban convencidos de la necesidad de sancionar una
constitución para las Provincias Unidas del Río de la Plata. ¿Sabés por qué? Porque en ella se definiría la
forma de gobierno que regiría al país. No obstante, esos hombres tenían diferentes ideas acerca de cuál era
el mejor sistema para gobernar.

Así, unos sostenían la posibilidad de establecer una monarquía parlamentaria, es decir, un gobierno
encabezado por un rey y acompañado por una cámara de legisladores que sancionara las leyes. Otros, en
cambio, defendían la creación de un régimen republicano, cuya máxima autoridad política fuera elegida por
el voto de los ciudadanos. Pero las diferencias no acababan ahí, ya que algunos creían que debía
sancionarse una constitución unitaria que estableciera un gobierno nacional con amplios poderes, y otros
entendían que debía constituirse un régimen federal que preservara el poder de las provincias (su
autonomía) para gobernar sus asuntos locales.

Los meses pasaron y como no se llegó a un acuerdo, se dispuso interrumpir el debate hasta el año
siguiente, cuando los representantes provinciales retornaran a San Miguel de Tucumán. Pero en 1817, los
realistas que ocupaban el Alto Perú lanzaron un ataque sobre el actual norte argentino. Y como era
peligroso reunirse en Tucumán, los diputados decidieron seguir sesionando en la ciudad de Buenos Aires.

Una constitución fallida

Luego de dos años de funcionar en la ciudad porteña, el Congreso sancionó una constitución. Esta tenía un
carácter centralista, ya que el Poder Ejecutivo, a cargo de un director nombrado por el Congreso, tenía
amplios poderes. Entre ellos, el de designar a los gobernadores provinciales, lo que afectaba la autonomía
de las provincias.

Aunque la constitución fue votada por una amplia mayoría, Santa Fe y Entre Ríos se opusieron. Poco tiempo
después, los gobernadores de ambas provincias lanzaron un ultimátum: la constitución quedaba sin efecto
o su destino se dirimiría por las armas. Y como sus reclamos no obtuvieron respuesta, en febrero de 1820,
las tropas entrerrianas y santafesinas se lanzaron al ataque y vencieron a las del Directorio en la batalla de
Cepeda. Así quedó sellada la desaparición del gobierno central, la disolución del Congreso y la derogación
de la Constitución de 1819.

2- Responde las siguientes preguntas.


a. ¿Qué hechos provocaron el desprestigio del Directorio?
b. ¿Qué actitudes tomaron San Martín y Belgrano llamados a defender al Directorio?
c. ¿Qué consecuencias tuvo la Batalla de Cepeda?
3- Lee los artículos del tratado de Pilar y subraya sus principales estipulaciones.
El tratado de Pilar.

Luego de la Batalla de Cepeda se firmó este tratado. Lee estos artículos y subraya sus principales
estipulaciones.

PACTO DE PILAR

Pacto celebrado en la Capilla del Pilar entre los Gobernadores


de Buenos Aires, Santa Fe y Entre Ríos

Artículo 1° - Protestan las partes contratantes que el voto de la Nación, y muy particularmente el de las
Provincias de su mando, respecto al sistema de gobierno que debe regirlas se ha pronunciado a favor de la
confederación que de hecho admiten. Pero que debiendo declararse por Diputados nombrados por la libre
elección de los Pueblos, se someten a sus deliberaciones. A este fin elegido que sea por cada Provincia
popularmente su respectivo representante, deberán los tres reunirse en el Convento de San Lorenzo de la
Provincia de Santa Fe a los sesenta días contados desde la ratificación de esta convención. Y como están
persuadidos que todas las Provincias de la Nación aspiran a la organización de un gobierno central, se
comprometen cada uno de por sí de dichas partes contratantes, a invitarlas y suplicarles concurran con sus
respectivos Diputados para que acuerden quanto pudiere convenirles y convenga al bien general.

Artículo 2° - Allanados como han sido todos los obstáculos que entorpecían la amistad y buena armonía
entre las Provincias de Buenos Aires, Entre Ríos y Santa Fe en una guerra cruel y sangrienta por la ambición
y la criminalidad de los muchos hombres que habían usurpado el mando de la Nación, o burlado las
instrucciones de los Pueblos que representaban en Congreso, cesaran las divisiones beligerantes de Santa
fe y Entre Ríos a sus respectivas Provincias.

Artículo 3° - Los Gobernadores de Santa fe y Entre Ríos por sí y a nombre de sus provincias, recuerdan a la
heroica Provincia de Buenos Aires cuna de la libertad de la Nación, el estado difícil y peligroso a que se ven
reducidos aquellos Pueblos hermanos por la invasión con que lo amenaza una Potencia extranjera que con
respetables fuerzas oprime la Provincia aliada de la Banda Oriental. Dejan a la reflexión de unos ciudadanos
tan interesados en la independencia y felicidad nacional el calcular los sacrificios que costará a los de
aquellas provincias atacadas el resistir un Ejército imponente, careciendo de recursos, y aguardan de su
generosidad y patriotismo auxilios proporcionados a lo arduo de la empresa, ciertos de alcanzar cuanto
quepa en la esfera de lo posible.

4- ¿Cuáles son los principales principios que se establecieron en el tratado de Pilar?


5- Lee el siguiente texto y completa el cuadro de situación política de las provincias después de 1820.

La desunión de las Provincias.

La disolución del Directorio significó el fin de la experiencia de gobierno central iniciada en 1810 y
el comienzo de una etapa que algunos historiadores llaman crisis de 1820. Estas visiones, que ponen el
acento en los aspectos críticos del proceso de construcción del Estado nacional, desconocen la importancia
que tuvo para algunas regiones del antiguo Virreinato la ausencia de una autoridad central. En efecto, fue
justamente a partir del fin de la etapa del gobierno del Directorio cuando las provincias debieron
organizarse para gobernarse a sí mismas.

En aquella época, la cantidad de provincias era menor a la que conoces en la actualidad. Esto se
debe a que las provincias se fueron constituyendo a medida que las intendencias en las que se dividía el
Virreinato del Río de la Plata se iban desintegrando. Este proceso de desintegración de las intendencias se
inició en 1813, cuando un decreto del Segundo Triunvirato separó Cuyo de la Intendencia de Córdoba. La
fragmentación se aceleró al año siguiente, ya que Entre Ríos y Corrientes dejaron de formar parte de la
Intendencia de Buenos Aires, y Tucumán se separó de Salta. En 1818 fue el turno de Santa Fe, que también
dejó de integrar la Intendencia de Buenos Aires. Luego de la desaparición del gobierno central, las
subdivisiones continuaron. Ese año La Rioja se separó de Córdoba; y Santiago del Estero, de Tucumán. Por
su parte, Cuyo se dividió en tres provincias: Mendoza, San Luis y San Juan. Al año siguiente, Catamarca
también se erigió como provincia autónoma.

Con respecto a otras divisiones administrativas virreinales, desde 1811 la Intendencia del Paraguay
había seguido un camino propio. Con respecto al Alto Perú, como ya vimos, estuvo ocupado por los
realistas hasta 1825, cuando se independizó con el nombre de Bolivia.

Al desaparecer la autoridad central que representaba el Directorio, en 1820, las provincias debieron
abocarse a la difícil tarea de crear sus estructuras de gobierno. Esa tarea significó crear nuevas
instituciones, sancionar sus propias constituciones o leyes orgánicas y formar instancias administrativas,
judiciales y fiscales que hicieran posible el trabajo de gobernar. Los resultados de este proceso de
construcción de los Estados provinciales fueron desparejos. Así, mientras algunas provincias alcanzaron un
mayor grado de institucionalización, otras solo pudieron armar una estructura estatal mínima y poco
compleja.

Situación política de las Provincias


Año Provincia Gobierno

Actividad 2.
1- Lea el siguiente texto y subraye las ideas principales.

Los caudillos y las provincias

En la década de 1820 fueron los gobernadores quienes ejercieron un papel político de fundamental
importancia en el proceso de formación de las estructuras administrativas y políticas provinciales. La razón
de tal protagonismo es sencilla. Ellos eran la máxima autoridad política en el ámbito provincial.

La mayoría de los gobernadores de la etapa que se abrió en 1820 eran personajes reconocidos en
sus respectivas provincias. Casi todos pertenecían a familias de buena condición, cuyos antepasados habían
integrado la administración colonial, o eran propietarios de grandes extensiones de tierra o tenían fortunas
amasadas gracias al intercambio comercial. Pero, a la vez, esos gobernantes eran caudillos locales
respetados y queridos por la gente del pueblo, pues muchos de ellos habían comandado tropas durante las
Guerras de la Independencia.

Hasta hace unas décadas, muchos historiadores sostenían interpretaciones acerca de los caudillos
que señalaban que ellos habían sido un grupo de personas poco instruidas y violentas. Según estas miradas,
los caudillos impidieron o retardaron la organización nacional, ya que buscaban mantenerse en el poder sin
atenerse al respeto de ninguna ley. En la actualidad, esas interpretaciones se han revisado. En primer lugar,
porque los caudillos provinciales intentaron, en muchos casos con pocos recursos financieros, establecer
las bases de la administración y el gobierno en sus provincias. En segundo lugar, porque para ello
procuraron dotar de marcos legales a sus administraciones. Así, por ejemplo, impulsaron la sanción de
constituciones o reglamentos en los que se reglaban las funciones de gobierno y dotaron a sus provincias
de diversas instituciones políticas, además de fomentar el progreso de su población mediante la
construcción de escuelas.

Los caudillos y la sanción de las constituciones provinciales

Algunas de esas instituciones fueron las salas de representantes. Estas salas eran poderes
legislativos que sancionaban las leyes y las constituciones provinciales, y establecían la forma en que serían
electos sus gobernantes. Su composición variaba de una provincia a otra. Unas estaban compuestas por
una cámara; otras, por dos. Pero, en general, estaban integradas por personas elegidas por el voto de los
habitantes tanto de las ciudades como de las zonas rurales.

2. Responde las siguientes preguntas.


a. ¿A quiénes se llamaba caudillos? ¿Qué rol desempeñaron después de la crisis de
1820?
b. ¿Qué aspectos positivos poseen estas figuras?
c. Nombra a los distintos caudillos en las provincias unidad en 1820
d. ¿Qué eran las salas de representantes? ¿Quiénes las integraban? ¿Qué funciones
cumplen?
Unidad nacional y autonomía de las Provincias.

3. Complete el siguiente cuadro comparativo.

Unitarios Federales

ACTIVIDAD 3

Buenos Aires en la década de 1820


1 -Gobernar Buenos Aires en 1820

La gobernación de Martín Rodríguez

En Cepeda, la derrota de las tropas del Directorio, integradas por hombres de Buenos Aires (doc. 4),
significó mucho más que una contienda militar perdida. Para los porteños sus consecuencias fueron sobre
todo políticas. Esto se debió a que los gobernadores de Santa Fe y Entre Ríos impusieron —como
condiciones previas a toda conciliación— la renuncia del director supremo, la disolución del Congreso y la
anulación de la Constitución de 1819, así como que los porteños eligieran libremente a nuevas autoridades.
Ante la presión de los vencedores, el Cabildo de Buenos Aires eligió gobernador provisorio a Manuel de
Sarratea, quien debió encargarse de acordar los términos de la paz con Santa Fe y Entre Ríos. Esta se
concretó el 23 de febrero de 1820 con la firma del Tratado del Pilar.

El Tratado del Pilar no fue bien recibido por ciertos grupos porteños. Estos entendían que la libre
navegación dañaba el monopolio comercial ejercido por Buenos Aires y que la adopción del federalismo
significaba una rendición incondicional ante el Litoral..

Un nuevo conflicto estalló en abril cuando, al realizarse las elecciones para la Sala de Representantes,
triunfaron personas vinculadas al derrocado Directorio y también ricos hacendados y comerciantes que
impugnaban la apertura de la navegación por los ríos del Litoral. La nueva Sala de Representantes eligió
gobernador a Ildefonso Ramos Mejía, quien renunció en junio, ya que su autoridad no era respetada más
allá de los límites de la ciudad. Entonces una nueva Sala convocada por el Cabildo nombró gobernador
provisorio a Manuel Dorrego, que decidió enfrentar con las armas a Estanislao López, para obligarlo a
retirar sus tropas de Buenos Aires. Pese a que —en la batalla de Pavón— Dorrego fue el vencedor, pocos
días después fue derrotado por las fuerzas de Ramírez.

El fin de la crisis política

Como la situación en la provincia era caótica, el rico hacendado Juan Manuel de Rosas decidió intervenir.
Bajo su influjo, el Cabildo nombró gobernador a Martín Rodríguez. Sin embargo, cuatro días después de ser
nombrado, este tuvo que enfrentar un motín generado por un sector del Cabildo disconforme con su
nombramiento. Rodríguez se mantuvo en el cargo gracias a las milicias de la provincia que, al mando de
Rosas, sofocaron la revuelta. A partir de entonces el poder del gobernador se fortaleció y el 24 de
noviembre de 1820 firmó el Tratado de Benegas. Este consistió en un acuerdo de paz entre la provincia de
Buenos Aires y Santa Fe, que puso fin a un año plagado de enfrentamientos en suelo bonaerense.

La gobernación de Martín Rodríguez

La gobernación de Martín Rodríguez fue el intento más exitoso de institucionalización de un Estado


provincial en la década de 1820. Sus principales apoyos provinieron del llamado Partido del Orden, que
estaba integrado por un grupo de la élite de Buenos Aires. El lema de esta administración fue "paz,
civilización y progreso", y para alcanzar ese objetivo se estableció un ambicioso plan de reformas
administrativas, eclesiásticas, sociales, culturales, económicas y urbanas, del que fue responsable su primer
ministro, Bernardino Rivadavia.

A diferencia de muchas provincias, Buenos Aires no sancionó una constitución; se gobernó a partir de un
conjunto de leyes llamadas fundamentales. Una de ellas fue la Ley Electoral, que estableció desde 1821 el
derecho a votar que tenía todo hombre libre mayor de 20 años, sin restricciones por lugar de residencia,
fortuna o nivel educativo. Esto significa que podían votar no solo los habitantes de las ciudades sino
también los de la campaña. Otra fue la que depositó en la Sala de Representantes la responsabilidad de
elegir al gobernador. La Sala pronto se transformó en el centro del poder político de la provincia. ¿Por qué?
Porque además de elegir al gobernador, fue la responsable de debatir las reformas a emprender, los
presupuestos adjudicados a la provincia para la administración y la creación de nuevos impuestos, entre
otros asuntos.

1. ¿Por qué llega Martín Rodríguez a la Gobernación de Buenos Aires? ¿Quién lo respalda?
2. Investiga que reformas llevo adelante Bernardino Rivadavia como ministro de Martin Rodriguez y
completa el siguiente cuadro.
Reformas del Gobierno de Martín Rodriguez
Políticas Económica Culturales Militares Eclesiásticas

ACTIVIDAD 4:

Dos intentos constituyentes


1- Lee el siguiente texto.

.En 1821, el gobernador federal de Córdoba Juan Bautista Bustos convocó a la reunión de un Congreso
Constituyente. La cita ya había sido anunciada en el Tratado de Benegas. Sin embargo, a un año de la firma
de ese acuerdo era evidente que Buenos Aires no estaba dispuesta a sancionar una constitución de carácter
federal.

Aunque la provincia bonaerense envió tres diputados a la ciudad de Córdoba, el Congreso no pudo
inaugurarse al estar ausentes otras delegaciones del interior del país. Aprovechando esta situación,
Rodríguez y Rivadavia ordenaron el regreso de la delegación porteña. Su decisión hizo que el Congreso
Constituyente fracasara definitivamente, pues sin los diputados porteños no existía ninguna posibilidad de
avanzar en la sanción de una constitución.
En 1824 el gobierno porteño convocó a las provincias a elegir representantes y enviarlos a Buenos Aires,
donde se reuniría un nuevo Congreso Constituyente. Este cambio de actitud por parte de los porteños
estuvo asociado a la posibilidad de que Gran Bretaña reconociera la independencia del país. Y a partir de
ello, los dirigentes de Buenos Aires pensaban firmar acuerdos comerciales para ubicar sus productos
ganaderos en el mercado británico. Pero para que el reconocimiento de Gran Bretaña se concretara, era
necesario que el país demostrara una cierta unidad política. De ahí la repentina importancia que para un
determinado sector de los bonaerenses adquirió la necesidad de sancionar una constitución.
Como en los años anteriores, llegar a un acuerdo no fue fácil. Sin embargo, se tomó una importante
decisión: dictar una Ley Fundamental. Esta determinó que hasta que se promulgara la constitución, los
Estados provinciales se regirían por sus propias cartas constitucionales. También establecía que, llegado el
momento de sancionar una, el proyecto redactado sería puesto a la consideración previa de todas las
provincias para su aprobación. De este modo, solo se podría promulgar una constitución luego de que la
totalidad de las provincias se hubiesen expedido favorablemente acerca de ella.
En 1825, la influencia de los diputados porteños se hizo notar en la ley, ya que Buenos Aires fue designada
como la encargada de conducir las relaciones exteriores del país
2- Marcá si los enunciados son verdaderos o falsos. En el caso de ser falso explique por qué lo son.
El primer intento constituyente, en Córdoba, fracasó porque los delegados no pudieron
ponerse de acuerdo sobre la mejor forma de gobierno para el país
El gobierno porteño convocó a otro Congreso Constituyente en 1824.
La importancia de constituirse como país estaba dada también por la posibilidad de
entablar relaciones comerciales con otros países.
La Ley Fundamental tenía en cuenta los intereses económicos de los porteños.

El Congreso de 1824 logró sancionar una Constitución llamada Ley Fundamental.


.
ACTIVIDAD 5.

La Guerra con Brasil


1- Lee el siguiente texto y subraya las causas de la Guerra con el Brasil. Trasládalas a un esquema.

En diciembre de 1825, mientras el Congreso sesionaba en Buenos Aires, estalló la guerra contra el Brasil. El
origen de este conflicto hay que rastrearlo algunos años atrás, cuando los portugueses vencieron a las
fuerzas de Artigas y anexaron la Banda Oriental a su imperio. En 1822, Brasil se había independizado de
Portugal y había heredado todos los territorios americanos de la Corona lusitana.

En 1823 un grupo de orientales, apoyados por Buenos Aires, sublevó a la población de la Banda Oriental,
pero fracasó en su intento. Por esta razón, solicitó ayuda a las Provincias Unidas del Río de la Plata. Si bien
un sector de la clase dirigente porteña veía como una fuente de problemas la concreción de esa ayuda, el
Congreso decidió aceptar la petición de los diputados orientales e incorporarlos en su seno. Un
representante diplomático de Buenos Aires anunció al emperador del Brasil la decisión asumida en Buenos
Aires, aclarándole además que tal resolución estaría respaldada por la fuerza en el caso de no ser aceptada.
La respuesta del emperador no se hizo esperar: ordenó romper relaciones diplomáticas con las Provincias
Unidas y dar inicio a las hostilidades.

El desembarco de treinta y tres patriotas orientales

El estallido de la guerra hizo que los congresales reunidos en Buenos Aires decidieran avanzar en un
proyecto que creaba un Poder Ejecutivo Nacional. ¿Por qué? Porque consideraron imprescindible contar
con una representación común, capaz de aunar todas las provincias, organizar a las tropas y llevar adelante
las negociaciones diplomáticas, aspectos que excedían los principios enunciados en la Ley Fundamental.
Entonces, se tomó la decisión de constituir un nuevo gobierno central, con un presidente como máxima
autoridad.

1- ¿Qué establece la ley de presidencia y por qué se dicta?


2- ¿Crees que las Provincias Unidas del Rio de la Plata tenían razón en su reclamo de
soberanía sobre la Banda Oriental?

ACTIVIDAD 6.
1- Lee el texto y subraya las ideas principales

La presidencia de Rivadavia

En febrero de 1826 el Congreso designó presidente de la Nación a Bernardino Rivadavia. Una de sus
primeras medidas fue la de designar al general Carlos María de Alvear como jefe del Ejército y al almirante
de origen irlandés Guillermo Brown como el encargado de crear una fuerza naval. Tales decisiones tenían la
intención de crear una fuerza que estuviera en condiciones de enfrentar con éxito a las fuerzas imperiales
brasileñas.
Si bien a lo largo de 1826 no hubo combates decisivos entre argentinos y brasileños, las Provincias Unidas
comenzaron a sentir las consecuencias negativas del bloqueo impuesto al puerto de Buenos Aires. Este
bloqueo impedía el ingreso y la salida de las naves mercantes o de combate. Aunque en 1827 las tropas de
Alvear expulsaron a las brasileñas de la Banda Oriental y las fuerzas navales a cargo de Brown alcanzaron
algunos triunfos, estos no fueron suficientes para ganar la guerra ni tampoco para romper el bloqueo.
Mientras tanto, el comercio se hundía, y la crisis se hacía sentir en todos los aspectos, repercutiendo
negativamente en el gobierno central.
Poco a poco el gobierno de Rivadavia fue perdiendo apoyos para continuar la guerra. Quedó claro entonces
que era necesario ponerle fin antes de que una crisis aún mayor se extendiera por el país.
El fracaso de Rivadavia

Además de la guerra contra el Brasil, Rivadavia debió afrontar otras dificultades. Algunas de ellas fueron las
diferencias que había dentro del Congreso que lo designó presidente y que siguió funcionando después de
su nombramiento. Esas diferencias dieron lugar a la formación de dos partidos, cuyos intereses pronto
fueron irreconciliables. Por un lado, el partido unitario, que buscaba instaurar un gobierno centralizado que
impusiera sus decisiones en todo el país y por el otro, el partido federal, que sostenía que era necesario
respetar la soberanía de las provincias y su capacidad de autogobierno.
Estas divisiones se profundizaron cuando Rivadavia presentó un proyecto de ley para declarar a Buenos
Aires como la capital del territorio argentino. La llamada Ley de Capitalización separaba a la ciudad de
Buenos Aires de la provincia de Buenos Aires, y la subordinaba al poder central. Si bien la ley fue aprobada,
terminó quitándole antiguos apoyos al grupo unitario más cercano a Rivadavia. Esto se debió a que la
capitalización afectó a los intereses económicos de los hacendados y comerciantes de Buenos Aires,
quienes se sintieron afectados por el traspaso de la Aduana porteña al ámbito del gobierno central.
Sin embargo, Rivadavia y su grupo subestimaron esta ruptura y se decidieron a impulsar la redacción de
una constitución nacional. Así, en septiembre de 1826, la Comisión de Negocios Constitucionales del
Congreso dio a conocer un proyecto. Si bien sus integrantes tomaron como base el texto de 1819, su
carácter centralista había sido relativamente atenuado en el nuevo proyecto. De igual forma, para los
federales se trataba de una constitución que recortaba la capacidad de gobierno de las provincias. También
criticaban otro artículo, que excluía del derecho al voto a los criados, jornaleros, peones y soldados, es
decir, a una importante franja de la población. Luego de acaloradas discusiones, a la hora de votar ganó la
propuesta del grupo rivadaviano.
Pero al sancionarse la llamada Constitución de 1826, la crisis ya se había profundizado y el gobierno perdía
cada vez más apoyos, ya que algunos de sus partidarios se pasaron a las filas federales. En un clima político
cada vez más incierto y reacio a la instauración de un poder centralizado, Rivadavia debió enviar una misión
diplomática para negociar las bases de la paz con el Brasil.
El tratado de paz con el Brasil

La misión diplomática que Rivadavia envió a Brasil firmó un acuerdo preliminar de paz que aceptaba que la
Banda Oriental era territorio brasileño. Criticado por todos, Rivadavia se quedó sin apoyos y decidió
renunciar. Finalizaba así un nuevo intento de constituir un gobierno central. Aunque el Congreso nombró
presidente provisional a Vicente López y Planes, este careció de poder y renunció a los pocos días.
Nuevamente, sin gobierno central, las relaciones exteriores quedaron en manos del gobernador de la
provincia de Buenos Aires, quien sería el responsable de firmar la paz con el Brasil. Esta se concretó en
1828 y a partir de entonces, la Banda Oriental se convirtió en una nación independiente, bajo el nombre de
República Oriental del Uruguay. Mientras tanto, cada provincia se replegó sobre sí misma. El tiempo de la
unidad política definitiva aún no había llegado.
1- Responde las Siguientes preguntas:

a. ¿Qué conflictos debió enfrentar Rivadavia en su Presidencia?


b. ¿Podemos afirmar que la Presidencia fue inconstitucional? ¿Por qué?
c. ¿Por qué fue rechazada la constitución de 1826? ¿Qué establecía?
d. Investiga: ¿Qué política llevo Inglaterra durante el Conflicto con Brasil?
e. ¿Qué estipulaba el acuerdo de paz con el Imperio de Brasil y que consecuencias tendrá para la
política de las Provincias Unidas

Potrebbero piacerti anche