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1136-4815/06/48-52
ALIMENTACION, NUTRICION Y SALUD ALIM. NUTRI. SALUD
Copyright © 2006 INSTITUTO DANONE Vol. 13, N.º 2, pp. 48-52, 2006
D. Ramón Vidal
DEPARTAMENTO DE MEDICINA PREVENTIVA Y SALUD PÚBLICA, CIENCIA DE LOS ALIMENTOS,
TOXICOLOGÍA Y MEDICINA LEGAL. FACULTAD DE FARMACIA. UNIVERSITAT DE VALENCIA
BURJASSOT, VALENCIA. DEPARTAMENTO DE BIOTECNOLOGÍA. INSTITUTO DE AGROQUÍMICA Y
TECNOLOGÍA DE ALIMENTO-CONSEJO SUPERIOR DE INVESTIGACIONES CIENTÍFICAS.
DEPARTAMENTO DE I+D, BIÓPOLIS S.L. VALENCIA
RESUMEN ABSTRACT
Palabras clave: Probiótico. Validación. Producción. Key words: Probiotic. Validation. Production.
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nos. Se suelen seguir estrategias de enriquecimiento que asegurar la dispersión homogénea del mismo en el
haciendo cultivos en medios a pH ácido adicionados seno del alimento. Este trabajo es más sencillo al traba-
de sales biliares. De esta forma se seleccionan cepas jar con bebidas que con alimentos sólidos donde se ha-
que posteriormente sean capaces de resistir las condi- ce necesario afinar las operaciones unitarias de mez-
ciones extremas del tracto digestivo y puedan por lo cla. Sin duda, en esta fase lo más importante es definir
tanto ejercer una acción positiva sobre la salud del la concentración del probiótico en el alimento o bebida
consumidor. Las cepas seleccionadas se someten a final. Dicha concentración debe ser un compromiso
una caracterización taxonómica exhaustiva, combi- entre la dosis efectiva diaria de probiótico y la ingesta
nando propiedades fenotípicas con características ge- usual diaria del alimento. A título orientativo, la Fede-
néticas. Es importante definir una huella genética de ración Internacional de Lechería o la Asociación Japo-
la cepa que permita posteriormente identificarla a ob- nesa para los Derivados Lácteos recomiendan 107
jeto de protección jurídica. Además se evalúa la resis- ufc/ml en matrices líquidas. En el caso de alimentos
tencia al pH ácido y a las sales biliares y también se sólidos los expertos sugieren cifras en torno a las 109
estudia su capacidad de adherencia a mucus intesti- ufc/g. El problema es que las distintas matrices alimen-
nal, se analiza su perfil de resistencia a antibióticos y tarias pueden afectar diferencialmente a la viabilidad
la posible producción de determinados metabolitos in- de un mismo probiótico. Para conocer este efecto se
deseados. A todo ello se suman estudios bioquímicos analiza la supervivencia del probiótico almacenando el
y fisiológicos in vitro e in vivo con animales de expe- alimento en las condiciones de venta. En estos trabajos
rimentación que permitan definir las bases molecula- hay que considerar entre otros la influencia del pH, el
res de la actuación del probiótico en la patología o oxígeno o el tipo de envase. Se han descrito casos de
función fisiológica objeto de estudio. Este hecho es grandes pérdidas de viabilidad (menos de 103 ufc/ml o
uno de los requisitos de la nueva reglamentación so- 106 ufc/g en el alimento final) que invalidarían el efec-
bre alegaciones funcionales. to funcional (9). Es un problema especialmente grave
Optimizar la producción industrial de un probióti- en el caso de alimentos con larga vida útil (papillas in-
co no es tarea fácil. Cada cepa tiene un compor- fantiles) y también con determinados probióticos (bifi-
tamiento diferencial, lo que obliga a definir los dobacterias). Una de las formas de evitarlo es acudir a
parámetros de crecimiento (medio de cultivo, tem- la microencapsulación del probiótico. En este sentido
peratura, agitación, oxigenación, fase de crecimien- se ha descrito la microencapsulación en lípidos como
to) y conservación (fase de cultivo para la recogida, una estrategia de mejora de la vida útil tras tratamien-
tipo de secado, crioprotector, temperatura de alma- tos térmicos y también el empleo de gelatina, gomas
cenamiento) para cada nuevo probiótico. A pesar vegetales o geles de alginato como materiales de en-
de su precio, se suelen utilizar medios complejos capsulación que podrían incluso proteger al probiótico
como los denominados BFM, MRS o TPY (4). En el de las condiciones extremas de acidez del tracto diges-
caso de las bifidobacterias y Lb. acidophilus, dada tivo tras la ingesta (10,11).
su baja actividad proteolítica se suelen añadir al me-
dio aminoácidos, extracto de levadura o hidroliza-
dos de caseína (5,6). Se optimiza el inóculo inicial,
la temperatura y, si se trabaja en feed-batch, el ré-
ÚLTIMOS PASOS: EVALUACIÓN CLÍNICA
gimen de alimentación del nutriente limitante. Suele
Y REQUISITOS LEGALES
ser crítica la aireación y en consecuencia el poten-
cial redox, por lo que se suele crecer el microorga-
nismo en un ambiente anaerobio. En ocasiones es
adecuado añadir algunos compuestos con actividad Como antes se indicó, el nuevo reglamento eu-
antioxidante como el ácido ascórbico o la L-cisteína ropeo sobre alegaciones funcionales exigirá cono-
(7,8). En cualquier caso, esta fase de producción del cer las bases moleculares de la alegación funcional
probiótico debe ir ligada a la siguiente que se refiere asociada al probiótico, pero también obligará a de-
a su conservación. En este sentido, la liofilización mostrar su efecto en al menos dos ensayos clínicos
suele ser el método más conveniente. Para optimi- en hospitales diferentes. Para llevar a cabo este ti-
zar esta fase se analiza la fase de cultivo en la que po de experimentación clínica se recomienda se-
recoger la biomasa (fase logarítmica versus fase es- guir las directrices del grupo de expertos
tacionaria), se ensayan diferentes crioprotectores y FAO/OMS que en el año 2001 se reunieron en la
su efecto sobre la viabilidad del microorganismo, la ciudad argentina de Córdoba (12). En esencia, es-
textura del probiótico desecado y su influencia orga- tas recomendaciones sugieren una dinámica de
noléptica en el alimento final. Con todo ello se estu- evaluación comparable a la que se lleva a cabo con
dian distintas temperaturas de almacenamiento y se fármacos aunque con una exigencia menor. Es im-
define la vida útil del probiótico como ingrediente portante destacar que las evaluaciones clínicas
alimentario en las condiciones subóptimas de alma- siempre se deben llevar a cabo con el alimento fi-
cenamiento. nal adicionado con el probiótico y no con el pro-
Finalmente hay que escoger la matriz alimentaria a biótico aislado. Como en el caso de las evaluacio-
la que añadir el probiótico. Una vez seleccionada hay nes de fármacos se habla de distintas fases.
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La llamada fase I, o fase de evaluación de la seguri- ción y etiquetado de los alimentos con probióticos, so-
dad, implica un trabajo previo de determinación del bre todo el primero de ellos que pretende que: a) la
perfil de resistencia a antibióticos del probiótico, la au- evaluación científica sea el único motor del desarrollo
sencia de producción de compuestos indeseados y, a de alimentos funcionales; b) las alegaciones funciona-
ser posible, su estatus GRAS. Si el desarrollo del pro- les se basen en pruebas fundadas, objetivas y apropia-
ducto se ha llevado a cabo de forma racional, buena das; c) las pruebas se sustenten en exigencias científi-
parte de este trabajo ya habrá sido abordado durante cas en vigor; y d) las alegaciones sean verdaderas y no
la selección del probiótico (vide supra). La fase II, o fa- induzcan al error al consumidor.
se de evaluación de la eficacia, conlleva los ensayos en
voluntarios humanos informados. Deben ser ensayos
al azar a doble ciego y con un control de placebo. Co-
mo antes indicamos, se recomienda llevar a cabo al EL FUTURO
menos dos ensayos en centros clínicos independien-
tes. La fase III o fase de evaluación de la efectividad es
opcional. Consiste en comparar la efectividad del pro- El futuro de la investigación en probióticos vendrá
biótico con la ejercida por un producto comparable de la mano de las nuevas tecnologías “ómicas”. Debe-
(otro probiótico previamente comercializado o un fár- mos incrementar nuestro conocimiento sobre la ecolo-
maco). En la medida de lo posible conviene llevar a ca- gía microbiana del tracto gastrointestinal para, de esa
bo estas evaluaciones en poblaciones sanas. Como an- forma, desarrollar probióticos más eficaces. En este
tes se indicó, el coste de este tipo de evaluaciones sentido es interesante destacar el comienzo de algunos
implica que las empresas del sector no abordan su eje- proyectos de metagenómica de bacterias de la cavidad
cución hasta tener una completa seguridad de la vali- bucal y el tracto gastrointestinal (14). A ello habrá que
dez tecnológica del probiótico. sumar los estudios de secuenciación de genomas de
probióticos. En la fecha de redacción de este artículo
Superadas todas estas evaluaciones se llega a la co-
hay secuencia pública del genoma de tres cepas pro-
mercialización del alimento adicionado con el probióti-
bióticas (B. longum NCC2705, Lb. johnsonii
co. En la actualidad en la Unión Europea (UE) se co-
NCC533 y Lb. plantarum WCFS1) aunque existen
mercializan muchos productos con probióticos. Con
proyectos en marcha de otras muchas más (15). La in-
más frecuencia de la deseada en su publicidad existe
formación que de ellas obtengamos, unida a estudios
un marketing demasiado agresivo y se hace uso de
de transcriptómica y proteómica, será la base de los
alegaciones funcionales que no se corresponden con la
probióticos de la próxima década.
experimentación preclínica y clínica abordada para esa
cepa concreta. En la UE no existe una definición legal Llegados a este punto conviene recordar que ya se
ni una legislación sobre probióticos pero existe una se- han desarrollado los primeros probióticos transgéni-
rie de legislaciones horizontales que las empresas pro- cos. Se han diseñado cepas transgénicas de Lactococ-
ductoras deben tomar en consideración (13). La pri- cus lactis que expresan el gen de la subunidad B de la
mera de ellas es el reglamento de nuevos alimentos. El toxina tetánica (16) o genes de interleuquinas (17) y
listado de categorías de nuevos alimentos incluidos en también cepas transgénicas de Lactobacillus que pro-
esta reglamentación incluye un apartado para ingre- ducen antígenos capsulares de rotavirus (18). La poca
dientes alimentarios que sean o consistan en microor- receptividad de los consumidores europeos a este tipo
ganismos. Una interpretación razonada de este requi- de productos dificulta su desarrollo aunque nadie duda
sito implicaría reconocer como nuevo alimento de su valor en algunos países en vías de desarrollo.
cualquier nuevo probiótico. Sin embargo, a pesar de Desde la UE, con la barriga llena, es fácil decir no a es-
haberse presentado desde el año 1997 un total de 53 tos desarrollos que solventan problemas sanitarios que
aplicaciones de nuevo alimento, ninguna ha hecho re- no afectan a nuestra sociedad. La pregunta clave es:
ferencia a un nuevo probiótico. La segunda es la regu- ¿aceptaría un consumidor europeo un probiótico
lación sobre producción orgánica que limita el empleo transgénico eficaz contra la enfermedad celiaca? Qui-
del término “bio” o “eco” para los productos de la zás en este caso la respuesta fuera otra. Lo que es pro-
agricultura ecológica. La falta de base científica para bable es que ese desarrollo marcaría un antes y un des-
tal decisión sólo puede ser explicada por los intereses pués de la investigación con probióticos
económicos y las presiones políticas que la promovie-
ron. Lo bien cierto es que un producto que contenga
un probiótico no podrá usar esta terminología a me- CORRESPONDENCIA:
nos que se haya elaborado siguiendo las directrices de Daniel Ramón Vidal
Departamento de Medicina Preventiva y Salud Pública,
la agricultura ecológica. El resto de normativas hori- Ciencia de los Alimentos, Toxicología y Medicina Legal
zontales que afectarán a la comercialización de probió- Facultad de Farmacia
ticos en la UE aún no están en vigor. Son el anterior- Universitat de Valencia
mente mencionado reglamento sobre alegaciones Avda. Vicent Andrés Estellés, s/n
funcionales y la propuesta de la Comisión para la regu- 46100 Burjassot, Valencia
e-mail: daniel.ramon@uv.es
lación del yogur y los productos similares al yogur. Sin
duda, su aprobación marcará pautas de comercializa-
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