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MESA REDONDA

Candela Dozo
“Es una mesa compartida, es una mesa en la que todos tenemos un lugar, en la que todos somos
iguales, Es una mesa en la que la vida de todos es importante. Es una mesa en la que Jesús se
sentaría. Es una mesa que Jesús hubiera elegido para su hogar, que era el pueblo. Creo que una
mesa redonda era las preferidas de Jesús. Y en ese camino de seguirlo, somos esas mesas redondas
que tenemos que ir construyendo y compartiendo en el camino”.

P. Miguel Dedyn
“Lo primero que me viene es que no tiene cabecera, estructuralmente la cabecera es quien preside.
El poder pensar una mesa redonda en la que no hay alguien que preside sino que todos somos parte,
por lo tanto la palabra es de todos, El lugar es un lugar de iguales. Entonces la mesa redonda tiene
que ver con la igualdad, con el poder expresar y el entender que todos tienen una buena noticia para
compartir sin que nadie presida, sino que todos somos parte”.

Teresita Thibuad
“Una mesa redonda me refleja una mesa de familia. Sobre todo me invita a que sea un espacio de
dialogo. Un espacio en el que nadie se sienta extranjero, como dice la canción. Que sea mesa de
encuentro, de dialogo, de compartida, en la que cada uno pueda dar su opinión y ser escuchada y
que escuchándose entre todos se pueda trabajar juntos”.

Fernando Granados “El Pola”


“Lo primero que me vino a la mente es la palabra igualdad donde todos esten, voy a hablar de una
mesa literalmente redonda, que es lo que me imagino, me imagino en una mesa redonda gente que
esta en un mismo pie de igualdad que no hay diferencias entre ellos, que todos tienen la misma vos,
están a la misma altura, tienen la misma categoría por decirlo de alguna manera y eso me parece
muy lindo muy positivo para generar cosas lindas. Pensaba en eso que siempre hablamos de la
escucha atenta, que esta bueno esto de poder mirarse a los ojos, poder escuchar con todo el cuerpo,
todos con todos, unos con otros. Es linda la mirada transmite mucho y después algo que me gustó
muchísimo es estar todos en torno a un mismo centro, que podamos dialogar teniendo siempre un
mismo centro y si hablamos en el ámbito de la fe, podernos sentar con Jesús como centro, me
imagino una mesa donde se puedan sentar todos, donde haya lugar para los mas excluidos, que las
mujeres puedan tener vos, puedan tener voto, se las escuche.
Por otro lado busque el significado etimológico. Y redondo viene de rueda lógicamente, igual no es
tan difícil. Y pensaba que cuando se generó la rueda y pensaba que cuando se creo la rueda, eran un
montón de rectas juntas para poder trasladar cosas hasta que se creo la rueda y se pudo avanzar con
mas facilidad. Y la imagen de la mesa redonda me da también esta posibilidad, haciendo esta
relación medio mala, pero sirve para el concepto, esto de que una mesa redonda puede ayudar a
facilitar el avance de proyectos, el avance de ideas y que sean para bien siempre”.

Francisco Boch
“Una mesa redonda me hace pensar en principio que no tiene puntas, no se sabe muy bien donde
comienza y donde acaba. Me hace pensar en el espacio ritual de la ronda, ese espacio que todos los
pueblos crearon para encontrarse en lo religioso, en lo fundamental, en lo ceremonial, me hace
pensar en la recuperación de ese espacio no se si de iguales, pero si de hermanos, de hermanas, un
espacio fraterno. Me hace pensar en la eliminación de ciertos estas, ciertos privilegios, de ciertos
oficios de hecho, Me hace pensar en un espacio mas carismático, de celebración, de encuentro. A
ese espacio sin duda invitaría a las personas que me han enseñado quien es Dios, que no están en la
facultad, que no están en el colegio, sino que han sido vecinos, que han sido compañeros, hermanos
del chaco, del chaco salteño. Invitaría también a mi familia porque es gente que me ha ayudado
profundamente a entender como se mirar de frente, ni para arriba, ni para abajo. Y si yo pudiera
invitaría también a una gente que se dio gusto haciendo mesa compartida como Jesús y como tantos
y tantas de la historia argentina, que supieron abrir la mesa para las mayorías. Algo así es lo que yo
sueño, o veo, o añoro, o también camino con otros y con otras para una mesa compartida”.

Fray Marcos (Capuchino)


“Una mesa redonda no tiene extremos estamos todos a la misma distancia del centro y por ende
tiene mucho que ver con la horizontalidad franciscana, con buscar no ser mas que nadie, con tener
todos peso, con ser todos iguales. Eso es lo que primero se me venía a la cabeza.
Me gustaría que nuestras reuniones de Pastoral, incluso en la Eucaristía poder vivir esta
horizontalidad. Poder poner en el centro a Jesús, me imaginaba. Porque tiene que ver con el a quien
invitaría. Me da la impresión que en una mesa redonda nadie tiene que invitar a nadie, sino ya
habría alguien que tendría un rol distinto, debería venir el que quiera, debería participar aquel que se
sienta cómodo con esto que tiene que ver con el compartir y no con mandar, sentirse más que, ni
menos que. Se me viene a la cabeza una sociedad de iguales, se me viene a la cabeza poder disfrutar
del otro, del que tengo al lado, enfrente sin sentirme ocupando ningún rol, ningún cargo, ninguna
responsabilidad o una responsabilidad compartida, al menos.
Esto lo estoy haciendo en el marco de una semana de solidaridad que estamos celebrando en Gálvez,
asi que me hacia mucho ruido esto de la solidaridad como un valor circular como esta mesa”.

Leticia Quispe
“Una mesa redonda es una invitación a la igualdad, a la hermandad, a la fraternidad, a la no
discriminación, a la autenticidad. Una mesa redonda se usa para compartir lo bueno y lo malo de lo
cotidiano, de la vida y también de las cosas que se puedan resolver. Creo también cuando en una
mesa redonda se invita compartir con el otro porque se pueden mirar a los ojos. En una mesa
redonda todos se sienten iguales y nadie es mas que nadie, se siente respeto, se puede observar a
cada uno en la mirada, en la actitud. Entonces uno se siente valorado.
Yo invitaría a mi mesa redonda a quien se quiera sentar, porque ya tener una mesa redonda te está
llamando te está invitando. Entonces justamente como la mesa redonda no excluye sino incluye
cualquiera se puede sentar en mi mesa. También cuando me invitan a una mesa redonda, me siento
de la misma manera, siento que me tratan con igualdad, con respeto, siento que me aceptan tal cual
soy. Eso también quiero y representa para mi una mesa redonda.
Creo que en una mesa redonda nos podemos sentar todos porque no hay jerarquía, no hay
desigualdad, no hay discriminación, sino que todo lo contrario, hay igualdad, hay respeto, hay
hermandad, hay fraternidad y se puede compartir”.

Estela Aguilar
“Una mesa redonda es un espacio donde uno tiene mayor dialogo, donde uno interactúa mejor,
donde no hay liderazgo.
¿A quien invitaría? En esas condiciones invitaría a personas con las que no estoy teniendo un buen
diálogo, una buena interacción, entonces aprovecharía ese espacio para invitar a personas para tratar
de integrarnos mejor, para tratar de conocernos mejor, interactuar mejor, comunicarnos mejor y de
esa manera mejor en el trato, en la cercanía. Creo que una mesa redonda es eso, un espacio para
compartir, para interactuar, para mirarnos cara a cara y decir aquí estoy, pongámonos de acuerdo.

Sergio Namuncurá
La mesa redonda está dentro de la cosmovisión mapuche, nosotros no estamos en una división de
espacio ni en una configuración de estructura. Nosotros estamos así alrededor para vernos la cara y
escucharnos y también porque somos iguales y nadie es mas que nadie, somos diferentes pero
somos iguales, compartimos todos lo mismo. Y esto de estar así alrededor y de vernos la cara y ser
todos iguales y tenemos derecho de hablar y de escuchar al otro y de tomar decisiones, parte de mi
participación es valida como la del otro.
Si yo tengo una mesa rectangular, hay alguien que es más que yo y hay una que es menos, hay una
relación de poder

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