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LA RESURRECCIÓN DE JESÚS

Por: Joe Cabanillas

Pues bien, esto es lo que predicamos tanto ellos como yo, y esto es lo que han creído. 12
Ahora bien, si proclamamos un Mesías resucitado de entre los muertos, ¿cómo dicen
algunos ahí que no hay resurrección de los muertos? 13 Si los muertos no resucitan,
tampoco Cristo resucitó. 14 Y si Cristo no resucitó, nuestra predicación no tiene contenido,
como tampoco la fe de ustedes.

-1° de Corintios 15, 11-14-

La Resurrección de Jesús es el tema central de nuestra fe cristiana. Si no somos capaces de creer


que Cristo venció a la muerte, nada de lo que hemos predicado o hecho en su nombre tiene
sentido. Por ello, es importante descubrir y entender el verdadero significado de la Resurrección.

En la biblia existen 3 formas de entender la resurrección.

1. Los Escritos de la Resurrección (Mateo 28, 1-8; Marcos 16, 1-8; Lucas 24, 1-12; Juan 20, 1-10
2. Los Escritos sobre las apariencias de Jesús resucitado. (Mateo 28, 9-20; Marcos 16, 9-20; Lucas 24, 13-53;
Juan 20, 11-21)

3. Las reflexiones teológicas sobre la resurrección.

Muchas personas, al leer la biblia, piensan que su contenido es material histórico o científico,
olvidando así, que en realidad la biblia es “Palabra Dios”; es decir, lo que busca es que el SER
HUMANO se conecte con DIOS. A este proceso de buscar entender a Dios, se le denomina
teología. El objeto de estudio de la teología no es encontrar una verdad histórica o científica, si
no más bien encontrar una verdad ESPIRITUAL, más allá de toda ciencia.

Por ello, es importante tener en cuenta que, los escritos de las apariciones de Jesús Resucitado
tratan de describir en palabras, una realidad espiritual y verdadera; algo que hasta el día de hoy
es muy difícil, puesto que, no resulta sencillo describir la experiencia de una fuerte emoción que
muchas veces solo puede ser comprendida por una persona que ha pasado exactamente por lo
mismo.

Los apóstoles y discípulos de Jesús, no creyeron simplemente, porque alguien se los dijo o
porque vieron una tumba vacía, antes de estar convencidos de su resurrección, primero tuvieron
que experimentar el encuentro personal con éste Jesús Resucitado.

Estos escritos, fueron su manera de describir esa experiencia espiritual de sentir la presencia de
Jesús Viviente como una realidad. No es una ficción de sus mentes, no están imaginando cosas
o viendo fantasmas, ellos están experimentando “una cosa real”. Es muy complicado entender
esto hoy en día, ya que en estas épocas modernas, todo es explicado y comprobado
científicamente, sin embargo, lo espiritual no puede ser analizado en un laboratorio porque son
experiencias personales e internas, fuera de alcance de toda ciencia.

Nosotros también debemos enfocarnos, al igual que los apóstoles, en disfrutar de la presencia
real de Jesús Resucitado en nuestra vida. Para seguir a Cristo, más que creer en su resurrección,
tenemos que sentir su resurrección, ir al encuentro de Jesús; porque si Jesús todavía vive,
debemos poder encontrarlo y ver su divina presencia.
Todos los escritos sobre las apariciones de Jesús, tiene 4 características en común:

 Las personas que tuvieron este encuentro con Jesús, no lo reconocieron


inmediatamente, pese a que siempre estuvo allí. Cuando finalmente reconocieron a
Jesús, no era porque Jesús se quitó un disfraz o tomo forma humana, sino que fueron
ellos los que cambiaron.
 Las apariciones de Jesús, solo estuvo limitado a los creyentes, ningún fariseo lo vio, ni
Herodes, ni Pilatos. Si Jesús se les hubiera aparecido a estos personajes, todo hubiera
sido más sencillo, pues su testimonio sería más contundente. Sin embargo, la biblia
demuestra que las personas que vieron a Jesús Resucitado, solo eran aquellos que iban
en su encuentro. La Resurrección es un hecho real y verdadero, que solo puede ser vista
con “los ojos de la fe”.
 Cada vez que un discípulo vio a Jesús Resucitado, no dijo “VI A JESÚS”, sino que dijeron
“VI AL SEÑOR”; es decir, está haciendo una declaración teológica que expresa, no una
visión física sino una discernimiento. Ellos vieron que Jesús ha entrado "en el campo de
Dios", en su forma divina, unido a Dios como uno solo.
 Cada encuentro es descrito como un encuentro separado y singular. No hay una
sucesión de eventos, es decir; cada encuentro era un primero encuentro con Jesús
Resucitado.

Todo esto nos dice que los escritos de las apariencias son símbolos más que descripciones
históricas. Son una manera concreta y gráfica para expresar una fe en Jesús Resucitado.

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