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UNIVERSIDAD NACIONAL DE EDUCACIÓN

“ENRIQUE GUZMÁN Y VALLE”


FACULTAD DE CIENCIAS SOCIALES Y HUMANIDADES
CIENCIAS SOCIALES – HISTORIA

ORIENTACIÓN DEL DESARROLLO HUMANO


S1 – 2016

MAPA MENTAL: LA ÉTICA PROFESIONAL

Alumno: Chuquiyauri Sullca, Yodet

Docente: Guillen Moscoso, Julio Cesar

Chosica - Perú
2018
Comentario sobre la ética profesional y la corrupción

La corrupción en este tiempo es como el pan de cada día que se presenta como una
necesidad olvidando su ética profesional en todo el campo desde el hogar hasta en el campo
de trabajo, profesional y no profesional, considerando los escándalos de corrupción en que
se han visto involucrados empresarios y funcionarios públicos, políticos en nuestro país.
Sin embargo, este año ha sido un periodo de mayor corrupción.

Trabas burocráticas, corrupción y falta de ética van de la mano y se retroalimentan. Con


cada norma, se genera una nueva traba burocrática y la oportunidad de crear una caseta de
peaje que incrementa el costo de hacer negocios y participar en la actividad económica es
decir un golpe a la competitividad.

En el Perú la corrupción y falta de ética lograron desincentivar la participación de empresas


no dispuestas a involucrarse en actos de corrupción. Con ello, el mercado quedó en manos
de unos pocos que pudieron imponer sus condiciones y beneficiarse a costa del perjuicio al
país. El monto de las coimas, la mayor parte está en la mayor utilidad que logran las
empresas gracias a los sobreprecios; eso, en términos monetarios. Por eso, el mayor daño
de la corrupción sobre la sociedad es más difícil de calcular, en otras palabras hay un
deterioro moral. Con frecuencia escuchamos el término Ética profesional, el cual hace
referencia al conjunto de normas y valores que mejoran el desarrollo integral de las
actividades profesionales en un ámbito de transparencia. Infortunadamente los grandes
escándalos de corrupción que a diario transmiten los medios de comunicación, nos llevan a
pensar qué tanto se está aplicando la ética en nuestras profesiones y en general en nuestra
sociedad, entonces nos desahogamos responsabilizando al gobierno de turno, los políticos y
a los grandes órganos de control del manejo ineficiente de los recursos públicos.

Es tal vez indiga escuchar comentarios de nuestros familiares o amigos, sobre la forma
como se denigra a la profesión contable debido a los grandes escándalos que incluyen a
contadores, fiscales, entre otros. Muchos se preguntan entonces dónde quedaron los valores
y la ética profesional. Esos juicios son comprensibles, ya que como peruanos estamos
cansados de tanta corrupción en muchos sectores de la sociedad, pero también hacemos
poco, o nada, y nos hacemos los de ‘la vista gorda para terminar con el cáncer de la
corrupción, que hoy por hoy se ha convertido en nuestro pan de cada día.

Para generar un cambio significativo es necesario empezar por el individuo, una formación
de calidad enfocada en la ética y los valores permitirá que los profesionales que lleguen a
las instituciones, tanto públicas como privadas, tengan unas bases sólidas que les permitan
actuar generando acciones donde prime el bien común sobre el bien particular.
Nos hemos olvidado de la responsabilidad social en la que se busca por excelencia ir más
allá de las leyes, es decir, más que tener un compromiso ante la norma es fomentar el
bienestar de las empresas y la comunidad en general.
Esto se podría decir a consecuencia del sistema capitalista donde todos compiten la cual
dejan un lado lo ético y moral en la actividad profesional
Debemos comprender que la profesión es de suficiente entrega y dedicación, a estar en
constante actualización generando alta credibilidad ante la sociedad, sin embargo, hoy en
día nuestra misma cultura está permitiendo que pierdan esa confianza, cometiendo errores
tan graves hasta el punto de llegar a negociar nuestra ética profesional, solo porque si
nuestros colegas incurren a una falta los demás nos encontramos en el mismo derecho, y se
continúa con estas prácticas como si de una herencia se tratara, o como una enfermedad.

Pienso que para combatir la corrupción seria:

 Enseñar valores en casa, es decir educar a nuestros hijos bien, papel importante de
los padres.
 Tenemos que dejar de verlo como algo normal.
 Con educación, porque mientras la calidad de misma de hoy sea deficiente la
corrupción en el Perú seguirá por muchos años más.
 Integrar una estrategia preventiva con una punitiva por medio de la procuraduría.
 Hay que fortalecer los órganos de control en cada constitución pública.
 Transparentar todos los actos administrativos creando una autoridad central en
temas de transparencia y acceso a la información.

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