La poética del espacio en la pintura de José Luis Ramírez

Por: Estefanía Reynoso Márquez.

Todo el teatro es mi patio, mi infancia

Está en todos los lugares, y la pelota viene a tocar música,
Una música triste y vaga que pasea en mi patio
Vestida de perro verde tornándose jockey amarillo...

Fernando Pessoa (Antología)

La pintura de José luis Ramírez (Durango, 1981) es una invocación al recuerdo de la

infancia. Sus temas son diversos, pero hay una constante: y es que parece que el pintor
duranguense no duda en recurrir a los recuerdos que se imprimieron en su inconsciente
durante la primera etapa de su vida, plasmando en su pintura elementos estéticos de las
caricaturas que influyeron en su niñez y de los paisajes con los que convivió en el transcurso
de su vida. Fragmentos que rayan en el realismo mezclados con trazos que se antojan más
infantiles.

Este recurso de mezclar la memoria y la imaginación marcan la obra del pintor. Se apodera
del valor estético de la ensoñación, creando su propio lenguaje pictórico; pues el ensueño
tiene incluso un privilegio de autovalorización. Su pintura goza directamente de su propio ser.
Los cuadros que pinta José Luis tienen valores de onirismo constante, como diría Gaston
Bachelard en su propia Poética del espacio: “Fulgores de ensoñación que iluminan la
síntesis de lo inmemorial y del recuerdo”.

La elasticidad psicológica de las imágenes de Ramírez nos conmueven con una

profundidad insospechada, pues no busca ser un historiador de percepciones concretas,
evocando sólo recursos realistas, (ya que la nostalgia que nos producen los recuerdos de la
infancia no se basa en la precisión de estos) sino que entiende que crear con la memoria y la
imaginación produce un bienestar en el espectador, pues esta sensación de satisfacción
viene a vivir por el sueño. Como dice Bachelard: “En esta región lejana, memoria e
imaginación no permiten que se las disocie. Una y otra trabajan en su profundización mutua.
Una y otra constituyen, en el orden de los valores, una comunidad del recuerdo y de la
imagen.”

José Luis Ramírez ha sido seleccionado para participar en la décimo tercera edición de la
Bienal de Pintura El Cairo 2019 que se realizará el mes de junio, siendo el único mexicano
que expondrá en dicha bienal de talla mundial. La obra pictórica de José Luis tiene su propio
recurso visual, esto lo convierte en un digno representante del nuevo arte mexicano que
expresa a través del onirismo y los recuerdos su propio ser.