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UNIVERSIDAD NACIONAL DE SAN

AGUSTÍN
FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL
ESCUELA DE INGENIERÍA SANITARIA

CURSO: MECÁNICA DE SUELOS


TEMA: ENSAYOS DE RESISTENCIA AL
SUELO.
DOCENTE: Jean Paul
INTEGRATES:
 Zavala Concha, Rosa María.
 Cotacallapa Cáceres, Maribel
INTRODUCCIÓN

Cuando sometemos una masa de suelo a un incremento de presiones


producida por algún tipo de estructura u obra de ingeniería, se generan en el
suelo en cuestión, esfuerzos que tratarán de mantener el equilibrio existente
antes de aplicada la solicitación externa.

Cuando la carga exterior aplicada tiene una magnitud tal que supera a la
resultante de los esfuerzos interiores de la masa de suelos, se romperá el
equilibrio existente y se producirá lo que denominaremos, de aquí en
adelante, Planos de Falla o de deslizamiento que no son otra cosa que
planos en los cuales una masa de suelo tuvo un movimiento relativo
respecto de otra.

Es decir, que, en estos planos de falla, las tensiones internas originadas por
una solicitación externa sobrepasaron los límites máximos de las
tensiones que podría generar el suelo en las condiciones en que se
encuentra.
RESUMEN

La propiedad de los suelos de soportar cargas y conservar su estabilidad,


depende de la resistencia al corte de los suelos. Cualquier masa de suelo se
rompe cuando esta resistencia es superada.

 Leonards define la resistencia al corte, siendo como la «tensión de


corte sobre el plano de ruptura», en el momento de la ruptura.
 Haefeli afirma que «entre las tres propiedades principales de un suelo
la compresibilidad, la permeabilidad y la resistencia al corte; la más
importante y más difícil de determinar experimentalmente es esta
última» las dos primeras propiedades son independientes de la tercera
la resistencia de corte depende no solamente de la permeabilidad,
sino también de la compresibilidad del suelo.
De acuerdo con la ecuación de Coulomb: t = c+s.tg f se puede afirmar
que:
 la resistencia al corte de un suelo se compone básicamente de dos
componentes:

 la cohesión y el ángulo de rozamiento entre las partículas.


Se considera ángulo de rozamiento interno de un suelo, al ángulo que las
partículas hacen entre sí debido a las fuerzas de rozamiento.

La cohesión resulta de la presión capilar del agua contenida en los suelos.


Puede también deberse a las fuerzas electroquímica de atracción de las
partículas de arcilla.

Los parámetros de cohesión y ángulo de rozamiento de un suelo no son


constantes de material. En la determinación experimental de la resistencia al
corte de los suelos hay que reproducir en la práctica tantas veces cuando
sea posible, las condiciones a que será sujeto en la realidad por la obra a
implantar
INDICE

1. MODOS DE ROTURA. RESISTENCIA AL CORTE

2. EL MODELO DE MOHR-COULOMB

2.1. CRITERIO DE COULOMB. COHESIÓN Y ÁNGULO DE

ROZAMIENTO INTERNO

3. ENSAYOS DE RESISTENCIA -GENRALIDADES

a) ENSAYOS DE CORTE

b) ENSAYOS TRIAXIALES

3.1. ENSAYO DE CORTE

3.2. ENSAYO TRIAXIAL

3.3. ENSAYO DE COMPRESIÓN SIMPLE

4. CONCLUSIONES

5. WEBGRAFIA:

6. ANEXOS
RESISTENCIA AL CORTE DE LOS SUELOS

1. MODOS DE ROTURA. RESISTENCIA AL CORTE

La resistencia a tracción de los suelos es prácticamente nula.


Solamente en los casos especiales de suelos cementados (que
constituyen un caso de transición hacia el comportamiento de las
rocas) y, en menor medida, en suelos parcialmente saturados (con
uniones entre partículas por meniscos capilares), tienen relevancia
práctica los estados de tracción.

Estos dos casos (rocas y suelos parcialmente saturados) se estudian


por separado en capítulos posteriores.

Por ello, el interés se centra en la rotura o deformación por


deslizamiento relativo o rodadura entre partículas, que
macroscópicamente se traduce en deformaciones de corte. Por ello,
cuando se habla de resistencia de los suelos, se entiende
implícitamente "resistencia al corte".
2. EL MODELO DE MOHR-COULOMB

a. CRITERIO DE COULOMB. COHESIÓN Y ÁNGULO DE


ROZAMIENTO INTERNO

Los primeros estudios sistemáticos de la resistencia al corte de los


suelos fueron realizados por Coulomb. En su famosa Memoria de
1773 planteó a partir de observaciones reales que las tierras
situadas tras un muro de contención que vuelca se rompen por
deslizamiento a lo largo de una superficie plana inclinada
(Figura6.1).

Para evaluar la resistencia al deslizamiento a lo largo de este plano,


partió del hecho experimental de que el deslizamiento entre dos
cuerpos sólidos se produce cuando la fuerza tangencial entre ellos
alcanza un valor, r, proporcional a la fuerza normal, N, siendo la
constante de proporcionalidad el denominado coeficiente de
rozamiento entre ambas superficies, r :

r = r ⋅ N (1)

Por extensión, Coulomb postuló que la resistencia al deslizamiento


por unidad de superficie en un plano en el interior del suelo, en lo
que llamaba "tierras recientemente removidas", se debe sólo al
rozamiento entre partículas, y debe ser por tanto proporcional a la
presión normal actuante en dicho plano1; el coeficiente de
rozamiento lo expresó como tangente de un ángulo, que llamó
ángulo de rozamiento interno del suelo, φ:

r = σ ′ ⋅ tgφ (2)
En "tierras cohesivas", supuso Coulomb que podía haber otro
sumando de valor constante e independiente de dicha presión
normal, al que denominó cohesión, c. Así pues, la resistencia
tangencial según un plano vendría dada en el caso general por:

r = c +σ ′ ⋅ tgφ (3)

A los parámetros c y φ anteriores, su significado y determinación


experimental se va a dedicar gran parte de este capítulo. Conviene
exponer ya que no son propiedades intrínsecas del suelo, sino
parámetros de un modelo teórico de comportamiento, planteado por
Coulomb de forma implícita. Con este modelo ocurre algo similar a
lo expuesto al principio de este capítulo respecto al modelo de
Hooke: es tan sencillo y de aplicación tan extendida que tiende a
olvidarse que se trata de un modelo, y que la cohesión y el ángulo
de rozamiento interno no son parámetros intrínsecos del suelo.
3. ENSAYOS DE RESISTENCIA -GENERALIDADES

Existen varios ensayos de laboratorio para medir la resistencia y


deformabilidad de suelos. Puesto que el modo fundamental de rotura
es por esfuerzos de corte, el objetivo fundamental es hacer actuar
esfuerzos tangenciales sobre la probeta. Hay dos tipos de ensayos:

A) ENSAYOS DE CORTE.
Caracterizados por la aplicación directa de tensiones tangenciales
sobre las caras de la muestra.

 El más primitivo de ellos es el de corte directo, en el que la muestra


sólo puede deformarse por deslizamiento a lo largo de un plano
predeterminado. Se trata del ensayo más antiguo, y a pesar de sus
limitaciones se continúa empleando.
 En el ensayo de corte simple, de desarrollo más moderno, se permite
a la muestra deformarse de forma homogénea, distorsionándose
uniformemente en todo su volumen. Salvo en algunos países de
centro y norte de Europa, este ensayo se utiliza sólo en investigación y
estudios especiales, pero no en trabajos convencionales.

 Ensayo de corte directo: durante el ensayo se pueden realizar


lecturas
 Deformación horizontal
 Deformación vertical
 Fuerza cortante aplicada

Este ensayo tiene ventajas en arenas y cuando conocemos el plano


donde ocurre la ruptura.

El plano de ruptura está previamente definido. La ruptura es


progresiva, sucede inicialmente en el borde de la caja y avanza hacia
el centro. No hay control del drenaje.

B) ENSAYOS TRIAXIALES.

En los que una probeta cilíndrica es sometida a tensiones normales


verticales y horizontales. No se aplican directamente tensiones
tangenciales, pero al ser distintas las tensiones aplicadas en dirección
horizontal y vertical, hay tensiones tangenciales sobre cualquier otro
plano inclinado del interior de la probeta.

Una variante simplificada, de gran uso en la práctica, es el ensayo de


compresión simple, en el que no se aplica ninguna tensión
horizontal.

 Ensayo triaxial permite el control de las tensiones totales, tensiones


efectivas, tensiones neutras y deformaciones durante el corte. Puede
ser:

 Ensayo consolidado no drenado (CU): son conocidos por


ensayos rápidos;
 Ensayo consolidado drenado (CD): el drenaje es permanente
(siempre ocurre drenaje). La tensión neutra es siempre nula. No se
genera exceso de tensión neutra.

De esta forma las tensiones totales son iguales a las tensiones


efectivas. Este ensayo se considera un ensayo lento.

 Ventajas del ensayo triaxial:


 Permite el control del drenaje
 No hay ruptura progresiva
 Permite el ensayo en diversas trayectorias

 Desventajas del ensayo triaxial:


 dificulta en el moldeado de probetas de arena
3.1. ENSAYO DE CORTE DIRECTO
 Generalidades
Cuando una estructura se apoya en la tierra, transmite los esfuerzos
al suelo de fundación. Estos esfuerzos producen deformaciones en el
suelo que pueden ocurrir de tres maneras:
1. Por deformación elástica de las partículas.
2. Por cambio de volumen en el suelo como consecuencia de la
evacuación del líquido existente en los huecos entre las partículas.
3. Por deslizamiento de las partículas, que pueden conducir al
deslizamiento de una gran masa de suelo.
El primer caso es despreciable para la mayoría de los suelos, en los
niveles de esfuerzo que ocurren en la práctica. El segundo caso
corresponde al fenómeno de la consolidación.
El tercer caso, corresponde a fallas del tipo catastróficos y para
evitarla se debe hacer un análisis de estabilidad, que requiere del
conocimiento de la resistencia al corte de suelo. El análisis debe
asegurar, que los esfuerzos de corte solicitantes son menores que la
resistencia al corte, con un margen adecuado de modo que la obra
siendo segura, sea económicamente factible de llevar a cabo. Vemos
que es absolutamente imposible independizar el comportamiento de la
estructura y el del suelo
.
Por tanto el problema de la determinación de la resistencia al esfuerzo
cortante de los suelos puede decirse que constituye uno de los puntos
fundamentales de toda la Mecánica de Suelos. En efecto, una
valoración correcta de este concepto constituye un paso previo
imprescindible para intentar, con esperanza de éxito cualquier
aplicación de la Mecánica de Suelos al análisis de la estabilidad de las
obras civiles.

El procedimiento para efectuar la prueba directa de resistencia al


esfuerzo cortante tal como se presenta en este informe, se aplica
solamente al más sencillo de los casos que pueden presentarse en la
práctica: aquel en que se prueba el material en estado seco.

3.1.1 Corte Directo


El ensayo de corte directo consiste en hacer deslizar una porción de
suelo, respecto a otra a lo largo de un plano de falla predeterminado
mediante la acción de una fuerza de corte horizontal incrementada,
mientras se aplica una carga normal al plano del movimiento.
3.1.2 Principio del ensayo de corte directo:
Los aspectos del corte que nos interesa cubrir pueden dividirse en
cuatro categorías:
o Resistencia al corte de un suelo no cohesivo (arenas y
gravas) que es prácticamente independiente del tiempo.
o Resistencia al corte drenado para suelos cohesivos, en
que el desplazamiento debe ser muy lento para permitir el
drenaje durante el ensayo.
o Resistencia al corte residual, drenado, para suelos tales
como arcillas en las que se refieren desplazamientos muy
lentos y deformaciones muy grandes.
o Resistencia al corte para suelos muy finos bajo
condiciones no drenadas en que el corte es aplicado en
forma rápida.
3.1.3 Clasificación de ensayos de corte directo

Ensayos no consolidados – no drenados

El corte se inicia antes de consolidar la muestra bajo la carga normal


(vertical). Si el suelo es cohesivo, y saturado, se desarrollará exceso de
presión de poros. Este ensayo es análogo al ensayo Triaxial no consolidado
– drenado.

Ensayo consolidado – no drenado

Se aplica la fuerza normal, se observa el movimiento vertical del


deformímetro hasta que pare el asentamiento antes de aplicar la fuerza
cortante. Este ensayo puede situarse entre los ensayos triaxiales
consolidado – no drenado y consolidado – drenado.

Ensayo consolidado – drenado

La fuerza normal se aplica, y se demora la aplicación del corte hasta que se


haya desarrollado todo el asentamiento; se aplica a continuación la fuerza
cortante tan lento como sea posible para evitar el desarrollo de presiones de
poros en la muestra. Este ensayo es análogo al ensayo Triaxial consolidado
– drenado.

Para suelos no cohesivos, estos tres ensayos dan el mismo resultado, esté
la muestra saturada o no, y por supuesto, si la tasa de aplicación del corte
no es demasiado rápida. Para materiales cohesivos, los parámetros de
suelos están marcadamente influidos por el método de ensayo y por el
grado de saturación, y por el hecho de que el material esté normalmente
consolidado o sobreconsolidado. Generalmente, se obtienen para suelos
sobreconsolidados dos conjuntos de parámetros de resistencia: un conjunto
para ensayos hechos con cargas inferiores a la presión de pre
consolidación y un segundo juegos para cargas normales mayores que la
presión de re consolidación. Donde se sospeche la presencia de esfuerzo
de pre consolidación en un suelo cohesivo sería aconsejable hacer seis o
más ensayos para garantizar la obtención de los parámetros adecuados de
resistencia al corte.

Componentes de la resistencia al corte

De la ley de Coulomb se desprende que la resistencia al corte de suelos en


términos generales tiene dos componentes:

 Fricción (tg Φ) que se debe a la trabazón entre partículas y al


roce entre ellas cuando están sometidas a esfuerzos normales.
 Cohesión (C) que se debe a fuerzas internas que mantienen
unidas a las partículas en una masa.
3.1.4 Ensayo de corte directo
La fig. 1 muestra los principales detalles del aparato de corte directo,
en el cual la muestra de suelo se introduce en un molde dividido
horizontalmente en dos mitades. Se aplica luego a la muestra una
fuerza normal N mediante una placa de carga, y, luego de fijar la mitad
superior del molde, se corta la muestra en un plano horizontal
mediante la aplicación de una fuerza cortante t.

El diseño del molde no permite el control del drenaje de la muestra.


Esta no es una limitante en el caso de arenas y gravas, que son
materiales de drenaje libre y por lo general fallan en condiciones
completamente drenadas. Sin embargo, en depósitos de arcilla un
elemento de suelo en el campo puede fallar sin ningún drenaje, con
drenaje parcial, o drenaje completo. La falta de control del drenaje
hace obvio que exista una incertidumbre sobre si este valor representa
o no la verdadera resistencia no drenada. Por esta razón, la
resistencia al corte no drenado de un suelo arcilloso a menudo se
mide en una cámara Triaxial, la cual permite el completo control del
drenaje de la muestra. Sin embargo, el ensayo de corte directo puede
utilizarse para medir la resistencia drenada de los suelos arcillosos si
primero se consolida por completo la muestra bajo la carga normal y
luego se corta la muestra a una velocidad suficientemente lenta para
asegurarse de la disipación inmediata del exceso de presión intersticial
que se produce durante el corte.

La Fig. 2 muestra las relaciones típicas esfuerzo-deformación unitaria-


cambio de volumen. Al graficar el máximo esfuerzo cortante tf en
función del esfuerzo normal efectivo s´ se obtiene el ángulo de fricción
efectivo para un estado de densidad en particular. Para establecer la
envolvente de falla se realizan diferentes ensayos con diferentes
valores de presión de confinamiento (esfuerzo normal) y se dibuja una
línea recta desde el origen (ya que s´ = 0 en suelos granulares)
pasando por los respectivos puntos; la pendiente de esta línea se
designa con j’.

En la fig. 5.22 b y c, se ve que los cambios de volumen tienen una


influencia fundamental en el valor de la resistencia al corte de los
suelos. Tales efectos se reflejan empíricamente en el valor j´ en la
ecuación de Coulomb. Sin embargo, un tratamiento detallado requiere
un estudio del comportamiento de las partículas del suelo para separar
el componente de la resistencia debido a la estructura de partículas,
de aquel que corresponde a la fricción entre partículas.
Algunas veces para obtener el desplazamiento necesario debe
invertirse de manera repetida la dirección del corte, pero ello
distorsiona el alineamiento de las partículas y no se logra el verdadero
valor para el estado mínimo. El problema puede resolverse utilizando
el aparato de corte de corte tipo anular en el cual se prueba una
muestra de suelo de forma anular en un anillo partido horizontalmente
en su plano medio, lo cual permite que la mitad inferior de la muestra
sea cizallada continuamente en una dirección sobre la mitad superior
fija, sin cambio de contacto en el área de contacto entre las dos caras.
3.2 ENSAYO TRIAXIAL
3.3 ENSAYO DE COMPRESIÓN SIMPLE

Una variante muy simplificada del ensayo triaxial es el de compresión


simple. En este ensayo, de profusa aplicación en la práctica y de desarrollo
muy anterior al triaxial, se somete la muestra a una tensión vertical hasta
rotura, midiendo la deformación axial.

3.3.1 DIFERENCIAS QUE EXISTEN FRENTE AL ENSAYO TRIAXIAL


 La muestra está expuesta al aire, sin célula ni membrana impermeable
que la rodee.
 No se aplica presión lateral.
 No se mide ni se controla la presión intersticial de la probeta.
 Como consecuencia de lo anterior, la fase previa del ensayo
(saturación de la probeta y anulación de la succión capilar) no tiene
lugar.

Este ensayo no sería posible físicamente si la carga se aplicara con drenaje,


pues aun en arcillas la cohesión efectiva es realmente nula o muy pequeña,
con lo que la resistencia a compresión simple sería prácticamente cero. De
hecho, la probeta no se podría mantener estable por sí misma si la tensión
efectiva fuese nula.

El ensayo sólo tiene sentido, pues, si se realiza sin drenaje y el agua


intersticial de la probeta es negativa, es decir, succión capilar (si no existiera
esta succión, la probeta no sería estable, y se desmoronaría simplemente
bajo su propio peso). Al no existir membrana, el control del drenaje es
posible sólo a través de la velocidad del ensayo, como ocurría en el ensayo
de corte directo, lo que en todo caso limita la posibilidad de ensayo a los
suelos arcillosos.

ENSAYO DE COMPRESIÓN SIMPLE. ENSAYO U

En el ensayo de compresión simple, al no llevarse a cabo la fase previa de


saturación de la probeta, ésta estará sometida a una cierta succión capilar
inicial. Esta succión hará que, aunque la trayectoria en tensiones totales
comience en el origen de coordenadas (p=0), la trayectoria efectiva esté
situada más a la derecha (p'>0), dando lugar a una resistencia no nula.

En estas condiciones, el ensayo es en realidad un ensayo de tipo C-U, en el


que la presión de célula es sustituida por la succión capilar inicial de la
probeta, en principio desconocida. Por otra parte, al no medirse las
presiones intersticiales, sólo es posible el análisis del ensayo en tensiones
totales.

La tensión total lateral es nula durante todo el ensayo, por lo que la


trayectoria en totales será una recta inclinada 45° a partir del origen, hasta
que se produzca la rotura para un cierto valor del desviador.

De la trayectoria efectiva no se conoce nada. Sin embargo, es posible hacer


algunas consideraciones sobre el valor inicial de la succión. Sea una
muestra inalterada, tomada del interior del terreno a una cierta profundidad,
en la que la presión efectiva media de confinamiento era p'0, que
supondremos isótropa (Ko=1) para simplificar el razonamiento. Supongamos
también que todo el proceso de extracción de la muestra, transporte y
tallado de la probeta es sin drenaje, es decir, sin pérdida ni ganancia de
humedad. Entonces, puesto que las tensiones iniciales y finales del proceso
son isótropas, la deformación producida deberá ser necesariamente isótropa
también.

Pero como no ha habido variación de volumen, la deformación debe ser


nula. La ausencia de deformaciones implica que no ha habido variaciones
de las tensiones efectivas, por lo que la tensión efectiva de la probeta debe
ser igual a la que tenía in situ, p'0. Esta es una conclusión de extraordinaria
importancia, pues indica que el ensayo se realiza sobre una probeta
consolidada precisamente a la presión efectiva media que tenía en el
terreno.

Comparando la Figura 6.24 con la Figura 6.22 se puede ver que el valor de
q en rotura, es decir, la mitad de la resistencia a
compresión simple, es precisamente la resistencia al corte sin drenaje, cu,
del terreno en su estado in situ. Este hecho es el que proporciona sentido al
ensayo de compresión simple, y también a cualquier otro ensayo sin drenaje
sobre una muestra ideal como la descrita. En realidad, las tensiones en el
terreno no son isótropas K0 ≠ , y durante los procesos de extracción,
transporte y tallado se produce un cierto drenaje y alteración de la muestra
que implican que la succión sea en general algo menor que la predicha. Sin
embargo, se acepta que la resistencia obtenida corresponde de forma
aproximada con la teórica.

De hecho, el ensayo de compresión simple es la forma más habitual en la


práctica de medir la resistencia al corte sin drenaje. En cuanto al ensayo U,
ya se ha comentado que sólo tiene una finalidad práctica, para garantizar la
ausencia de drenaje en ensayos de compresión simple en suelos de
permeabilidad media. La aplicación sin drenaje de una presión de célula
cualquiera no produce ningún efecto sobre las tensiones efectivas, como se
ve claramente comparando la Figura 6.25 con la Figura 6.24.

ENSAYO DE COMPRESIÓN SIMPLE


Es el ensayo más sencillo de una muestra tallado de suelo.

Las muestras se pueden obtener de dos formas:

a) Muestra inalterada obtenida mecánicamente in situ. La muestra tiene


forma cilíndrica y con un diámetro comprendido entre 33 mm. y 150
mm.
b) Se toma manualmente una muestra del terreno inalterada de forma
cúbica, se parafina y se envía al laboratorio, donde se retalla de
manera adecuada.

Ensayo compresión simple en suelos con cohesión

El ensayo de compresión simple en suelos es semejante al correspondiente


para probetas de hormigón. La muestra rompe con una tensión: σ1 = qu

Donde qu es la resistencia a compresión simple de la muestra obtenida en


el ensayo.

El circulo de Mhor obtenido es del tipo:


El ensayo nos da directamente la cohesión sin drenaje = cu, que coincide
con el radio del círculo de Mohr:
𝑞𝑢
El valor de esta resistencia es:𝐶𝑈 =
2

Según el valor de la resistencia a compresión simple, las arcillas puede


clasificarse según Terzagui y Peck (1955)

Maquinaria para el ensayo compresión simple en suelos.

La maquinaria varia según se trate de modelos en función del suelo a


ensayar: para arcillas blandas, duras, calizas o rocas. Pueden ser manuales
o automáticos
CONCLUSIONES

 El ensayo de COMPRESION SIMPLE, a pesar de su profusa


utilización y de su aparente sencillez, es en realidad difícil de
interpretar, pues se trata de un ensayo sin drenaje, en el que las
presiones intersticiales, que no se miden, son controladas por la
respuesta del suelo.

 El ensayo triaxial nos permite obtener más datos.


WEBGRAFIA:

 https://ocw.unican.es/pluginfile.php/1555/course/section/2012/cap
itulo6.pdf
 file:///C:/Users/ADMIN/Downloads/basurto_rd.pdf
 https://www.fceia.unr.edu.ar/geologiaygeotecnia/TEORIA%20DE%
20CORTE%202016.pdf

ANEXOS

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