Lista la orden para cancelar a 40 abogados de Seguridad

09 Jul 2017 / 11:10 PM

Una investigación comprobó su participación en el tráfico y borrón de
expedientes y en el cobro ilegal por arreglo de juicios.

Un equipo del Ministerio Público intervino en noviembre pasado las oficinas de

asesoría legal de la Secretaría de Seguridad para documentar el caso.

Tegucigalpa, Honduras

Un grupo de al menos 40 abogados de la Secretaría de Seguridad se resisten a

ser cesanteados como parte del proceso de depuración y reestructuración de la
Policía Nacional de Honduras; pero la orden ya está girada y en los próximos
días su despido se hará efectivo, confirmó a LA PRENSA una alta fuente de esa
institución del Estado.
PUBLICIDAD

En las investigaciones hechas por la Comisión Especial de Depuración se

detectó que un grupo de abogados conformaron una red de corrupción a través
de la cual se traficaron autorizaciones, permisos no justificados, borrón y
alteración de informes y dictámenes, así como la extensión de licencias de
forma irregular para favorecer a oficiales y agentes de la Policía que estaban en
proceso de investigación o que se encontraban en lista de depuración por
diversas irregularidades.

Anomalías
Documentos en poder de La Prensa establecen que hubo arreglos de
juicios para favorecer a policías depurados.

LA PRENSA documentó en una investigación publicada en octubre del año

pasado que por estos servicios irregulares los profesionales del Derecho
investigados cobraban entre 5,000 y 50,000 lempiras, lo que motivó la posterior
intervención del Ministerio Público.

“La decisión de la Comisión de Depuración ya está tomada y la orden está en

el escritorio del ministro de Seguridad, Julián Pacheco, para que proceda a dar
las instrucciones y volverla concreta”, apuntó la fuente oficial que prefirió
omitir su nombre.

Nueva estructura

Mediante acuerdo ejecutivo número PCM 006-2017 publicado en el diario

oficial La Gaceta el 3 de marzo del presente año se eliminó la estructura vigente
de servicios de asesoría legal y se sustituyó por una nueva Dirección de Asesoría
Legal adscrita a la Secretaría de Seguridad.

Investigación
Tráfico y emisión de autorizaciones, permisos no justificados, alteración
de informes y dictámenes, así como la extensión de licencias de forma
irregular a policías investigados por delitos o faltas.

En vista de lo anterior, la Comisión Especial de Depuración recomendó al

ministro Julián Pacheco Tinoco cancelar a todos los profesionales del Derecho
que estaban al servicio de la Policía Nacional y contratar nuevo personal que
cumpla con esas delicadas funciones, bajo parámetros de honestidad. “Son más
de 40 profesionales y ya se han empezado los trámites para su cancelación,
indicó un funcionario de esa Secretaría.
Luego de esta decisión los depuradores se aprestan a evaluar al resto del
personal administrativo de la Policía Nacional en cumplimiento a su mandato
legislativo.

Vienen requerimientos. LA PRENSA confirmó que el Ministerio Público ya

tiene adelantadas las primeras investigaciones integrales y en los próximos días
se formularán los requerimientos fiscales contra los profesionales del Derecho
que tejieron una red de corrupción dentro de esa dependencia estatal.

En noviembre del año pasado, el Ministerio Público abrió un expediente por

este caso de corrupción oficial, y tras siete meses de indagaciones logró recabar
información relevante que establece que hubo cobros y resoluciones al margen
de la ley por parte de los asesores jurídicos.

Comisión Depuradora recibe fuertes presiones

Los miembros de la Comisión de Depuración de la Policía han sido objeto de
amenazas y fuertes presiones para evitar el despido de profesionales del
Derecho que se coludieron con policías investigados por delitos y graves faltas
en su hoja de servicio.

El pastor Alberto Solórzano, miembro de esa instancia, confirmó a LA

PRENSA que la decisión ya está tomada; pero hay fuertes presiones para evitar
que los abogados sean cancelados.

El depurador Omar Rivera confirmó que se pudo constatar que había

dispersión, ineficiencia y falta de armonización en las innumerables y poco
articuladas unidades que daban asesoría, procuración, representación y
conciliación legal en la Policía Nacional; además, había varias denominaciones
de puestos, salarios diferenciados, responsabilidades disímiles y una enorme
anarquía en la dirección, supervisión y evaluación del desempeño de estos
profesionales del Derecho, razón por la cual se tuvo que implementar una
radical reingeniería institucional.

Aclaró que “aquí nadie está cazando brujas o haciendo barridas; solo estamos
optando a rediseñar la Dirección de Asesoría Legal”.