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Gustavo Adolfo Lezama Argüelles

¿Cómo la ciencia busca la verdad? y ¿Es la ciencia capaz de llegar a


entender la realidad del cosmos?

Hace cierto tiempo se realizaron unos estudios de comportamiento en primates,


más exactamente en chimpancés cuyo fin era si puestos a discernir, los chimpancés
recordaban y corregían ciertos errores. El experimento consistía en poner unos muy
atractivos plátanos en un lugar elevado, de modo que cuando el animal llegaba al
plátano recibía una molesta descarga eléctrica.

El experimento pudo dejar palpable dos observaciones: 1. Que los descendientes


de los individuos castigados por la descarga obviaban acercarse a los plátanos y 2. Parte
de los chimpancés que convivían con los que habían recibido la descarga “aprendían”
de los otros la limitación de acercarse a los plátanos.

Esto nos puede llevar a sugerir que, de alguna manera, el concepto de error y
transmisión social del mismo existe también en los chimpancés y no sería muy correcto
decir que solamente en los humanos existe el hecho de ser consientes del error.

No obstante, aquello que podríamos decir nos distinguiría de los primates (aun
compartiendo más del 90 % del ADN con ellos) es la consciencia de la propia existencia
que provoca la constatación de la individualidad única y la sensación de total soledad
frente al resto de humanos. Esta sensación de aislamiento respecto a todo el entorno no
priva que como seres sociables y socializadores nos lleve a unirnos al resto de humanos
para compartir una vida en común. Esta idea ya era intuida por Kant en los apartes de su
crítica a la Razón Práctica y la frase que en aquella ocasión usaba era la insociable
sociabilidad de los seres humanos1. Junto a ella también todo un revuelo científico con
aquellos que defendían e problema de la conciencia en primates y que chocaban
directamente con estos postulados, pero esta es otra historia de corte filosófico-
científico que no atañe a este trabajo.

Ahora bien, Observando los procesos que el hombre ha estado utilizando desde
la prehistoria para ir avanzando en el descubrimiento de nuevos conocimientos son los
bucles generados entre: los métodos de observación, hipótesis, experimentación, error,
corrección, nueva hipótesis, error, rectificación y así sucesivamente desde la técnica de
hacer fuego y hasta el descubrimiento de las partículas subatómicas más elementales; se
fue gestando la tecnología más primitiva, transmitida de generación en generación y con
ello se ha ido articulando una organización social basada en la división de funciones de
sus integrantes; ¿esto a qué viene a nuestro proyecto de responder a la pregunta?
1
SERRANO GÓMEZ, ENRIQUE. LA INSOCIABLE SOCIABILIDAD. El lugar y la función del derecho
y la política en la filosofía práctica de Kant. Barcelona: Anthropos Editorial, 2004

Gustavo Adolfo Lezama Argüelles 1


Este avance en el conocimiento y la consciencia de la propia existencia permite
al ser humano intuir que se acerca a la verdad de la realidad de su entorno; pero a la vez
el ser humano tiene otra característica distinta al resto de los seres vivientes en nuestro
planeta y tiene que ver con la permanente insatisfacción y la búsqueda de amor y
felicidad en un plano no meramente fisiológico.

Esto provoca en el ser humano la necesidad de dar sentido a su existencia


individual y colectiva y le empuja hacia la transcendencia y la búsqueda de la verdad
objetiva, basada en su experiencia subjetiva, “se va complementando el conocimiento
de su entorno”.

Pero ¿cómo planteamos la búsqueda de la verdad desde cualquier ámbito del


conocimiento humano? Recordemos que cuando empezamos nuestra vida comenzamos
a interactuar con el mundo exterior mediante nuestros sentidos, recordemos la gran lista
de sentidos que comentábamos en la pregunta pasada, pero que los 5 básicos
comenzamos a usar unos más que otros. Pero de hecho de forma inconsciente nos
relacionamos con el medio con otros sentidos de los cuales hacemos un uso casi
vegetativo de los mismos; cuando empiezan a interactuar entre ellos en el momento de
“interactuar” con el exterior, empieza la cosa a complicarse.

No olvidemos que nuestros sentidos son ventanas al exterior que sólo detectan
una parte muy limitada de la realidad. Los umbrales de detección de señales exteriores
de nuestros sentidos nos permiten conocer solo una parte de la realidad y si a ello
añadimos la incapacidad de abarcar todas las variables que intervienen en un fenómeno
observado, es obvio pensar que nunca llegaremos al conocimiento de la Verdad Total
(recordemos no más el ejemplo de las galaxias que vemos y percibimos gracias a la
“coloración” que artificialmente se hace del espectro electromagnético no visible, a
simple vista no están, pero eso no significa que no esté allí)

Con el método científico de investigación de la realidad sea en las especialidades


de la ciencia de la naturaleza o en el sentido más amplio de conocimiento de aquello qué
es la materia y del por qué existe, o bien sea en las otras áreas del pensamiento humano
como las ciencias sociales(incluidas la filosofía y teología), estamos avanzando hacia un
conocimiento más amplio y exacto de las verdades parciales a las que accedemos; es
como si tuviéramos un gran pastel de frutas troceado, donde una parte tiene una fruta
distinta de la otra pero que guardan la esencia del pastel completo, cada parte tiene y
guarda la verdad que corresponde como trozo de pastel que es, del que pertenece, le
aplicamos todo lo relacionado a los distintos métodos para “conocer” más y mejor ese
trozo de pastel y describirlo lo mejor posible, pero ojo, no es el pastel completo.

Aquí es interesante hacer alusión al Papa Francisco quien en Evangelii Gaudium


tiene tres subtítulos del apartado tercero del capítulo cuarto con una muy digna síntesis
donde se encuentran frases geniales que nos iluminan muy bien sobre el tema que
tratamos y que el comentario a las mismas frases (desde el punto de vista de la
experimentación científica y su relación con la verdad) nos llevaría a un progreso muy a
tener en cuenta.
Gustavo Adolfo Lezama Argüelles

Los tres sub títulos son los siguientes:

1. “El tiempo es superior al espacio”2,

último párrafo: “Darle prioridad al tiempo es ocuparse de iniciar procesos más que de
poseer espacios. El tiempo rige los espacios, los ilumina y los transforma en eslabones
de una cadena en constante crecimiento, sin caminos de retorno. Se trata de
privilegiar las acciones que generan dinamismos nuevos en la sociedad e involucran a
otras personas y grupos que las desarrollarán, hasta que fructifiquen en importantes
acontecimientos históricos. Nada de ansiedad, pero sí convicciones claras y
tenacidad”.

2. “la realidad es más importante que la idea”3

“Existe también una tensión bipolar entre la idea y la realidad. La realidad


simplemente es, la idea se elabora. Entre las dos se debe instaurar un diálogo
constante, evitando que la idea termine separándose de la realidad. Es peligroso vivir
en el reino de la sola palabra, de la imagen, del sofisma...

La idea —las elaboraciones conceptuales— está en función de la captación, la


comprensión y la conducción de la realidad. La idea desconectada de la realidad
origina idealismos y nominalismos ineficaces, que a lo sumo clasifican o definen, pero
no convocan. Lo que convoca es la realidad iluminada por el razonamiento. Hay que
pasar del nominalismo formal a la objetividad armoniosa. De otro modo, se manipula
la verdad...

La realidad es superior a la idea. Este criterio hace a la encarnación de la Palabra y a


su puesta en práctica: «En esto conoceréis el Espíritu de Dios: todo espíritu que
confiesa que Jesucristo ha venido en carne es de Dios»” (1 Jn 4,2)

3. “el todo es superior a la parte”4.

“El todo es más que la parte, y también es más que la mera suma de ellas. Entonces,
no hay que obsesionarse demasiado por cuestiones limitadas y particulares...

... Se trabaja en lo pequeño, en lo cercano, pero con una perspectiva más amplia...

... El modelo no es la esfera, que no es superior a las partes, donde cada punto es
equidistante del centro y no hay diferencias entre unos y otros. El modelo es el
poliedro, que refleja la confluencia de todas las parcialidades que en él conservan su
originalidad...”.

Creo que mejor explicado no puede estar expresado lo que deseo hacer en este tema…

2
Evangelii Gaudium, 222 – 225.
3
Evangelii Gaudium 231 – 233.
4
Evangelii Gaudium 234 – 237.

Gustavo Adolfo Lezama Argüelles 3

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