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PROGRAMA FACULTAD DE DERECHO UNIVERSIDAD DE CHILE

I. Preámbulo

La Facultad de Derecho se constituye como un ente relevante a nivel nacional, no sólo


respecto a la formación de profesionales que se desempeñarán en cargos de importancia
pública y privada, sino además porque ha sido una herramienta con capacidad de actuar en
el escenario público impulsando y posicionando en el debate procesos de movilización y
transformación social. Así, durante las últimas décadas ha sido el escenario de grandes
conflictos de distinto género, ya sea desde la lucha contra la dictadura mediante la
movilización triestamental que tuvo por finalidad deponer al rector designado Federici, hasta
las últimas movilizaciones feministas a nivel nacional e internacional que han significado un
proceso de transformación social aún en movimiento.

Sin embargo, nuestra Facultad tampoco ha estado ajena a la situación general que vive el
movimiento estudiantil en nuestro país; la demanda por una educación pública, gratuita y
de calidad -que en los hechos reivindica un derecho social a la educación-, también ha sido
un eje programático que significó múltiples procesos de movilización tanto en nuestra
Facultad como en el resto de universidades del país y que terminaron por generar un
proceso de reflujo social que indicaba un cierre del conflicto educativo, motivado
principalmente por el gatopardismo de la Nueva Mayoría que, a través del actuar del
gobierno de Michelle Bachelet, tomó las demandas del movimiento estudiantil para
deformarlas y neoliberalizarlas, contando para esto con la complicidad del Partido Comunista
de Chile quien se encargó de obstaculizar las movilizaciones ahí donde mantenía una
histórica presencia, vale decir: Colegio de Profesores y la CUT, siendo ambos actores
criticados por su intencionada irrelevancia en la coyuntura 2014-2016.

Por otro lado, la situación interna del movimiento estudiantil comenzó un lento declive en
su actividad en el periodo 2012 - 2017, motivada por una dirección política que
instrumentalizó el movimiento social para parlamentarizar los conflictos y con ello crear una
brecha en la institucionalidad de la dictadura que permitiera una ruptura con el régimen
neoliberal presente en el país. Dicha táctica política subordinó el quehacer del movimiento
estudiantil a los intereses y tiempos de esta nueva coalición - también conocida como Frente
Amplio- y la enfrascó en debates estériles que terminaron entregando en bandeja de plata
la actividad política del movimiento e imposibilitando una respuesta a la táctica del gobierno
de la Nueva Mayoría que se basaba en: 1) dividir al movimiento social parcelando las
reformas según sector educativo y 2) Dicha división estaba motivada según peso específico
de cada actor social, comenzando la desarticulación de los elementos más radicalizados que
se encontraban en el movimiento secundario, para avanzar luego con el sector universitario
y docente. Así, todas las federaciones estudiantiles controladas por organizaciones
pertenecientes al FA terminaron cayendo en la mera reacción frente al avance legislativo
del gobierno de la NM y también de los últimos años de Piñera.

Es bajo este resumido contexto que debemos situar la acción política en nuestra Facultad,
la cual también cuenta con una especificidad propia que motiva la creación de un programa
político centrado en el acontecer de nuestro espacio, donde los conflictos internos han
tomado mayor relevancia al decaer la coyuntura educativa nacional siendo dos los aspectos
relevantes; los casos de violencia machista vividos al interior de la comunidad universitaria
y; los intentos de reforma vividos bajo el periodo de la decanatura saliente. Sin embargo,
todos los conflictos internos de la Facultad parecen estar anudados desde la rencilla pequeña
y la parcela de poder amparada en estatutos universitarios hechos a la medida de los
intereses de la academia, lo que significa que su resolución última nunca estará dentro de
las paredes de nuestra unidad académica, sino en la configuración de un movimiento
universitario más general tarea que igualmente nos incumbe hacer.

Para Contra-Corriente resulta importante ir avanzando en la articulación política con otros


sectores organizados de la clase trabajadora, con el objeto de ir fortaleciendo la organización
actual e ir levantando nuevos espacios donde no lo haya. De esta forma apostamos a una
articulación real y activa del estudiantado con otras luchas sociales que evidencian las
contradicciones del actual sistema político en el cual estamos inmersos; pensiones, trabajo,
salud, mov. feminista, socioambiental, derecho a la ciudad y pueblos oprimidos, todos
ámbitos parciales que demuestran las contradicciones del capitalismo-patriarcal y que nos
demanda un trabajo mancomunado en aras de formar un nuevo movimiento popular para
el siglo XXI. De ahí en más nuestro epígrafe: “educación para los pueblos, estudiantes para
las luchas”.

Para finalizar, nuestro programa para la Facultad de Derecho de la Universidad de Chile es


un anexo del presentado con ocasión de las elecciones al Senado Universitario de la misma
institución, y cumple la función de aterrizar y concretar algunas ideas específicas para esta
particular unidad académica, muchas de estas medidas también son proyectables para el
nuevo proyecto de desarrollo institucional (PDI) que se debatirá a finales de este año. De
esta forma, el presente programa también cuenta con ciertas ideas transversales que
irradian cada propuesta concreta y tratan de entregar al lector/a ciertas claves para una
cabal comprensión de este, las cuales son cinco (5); feminismo popular e inclusivo,
democracia y cogobierno, condiciones laborales y sindicalización, vinculación con los pueblos
en lucha y bienestar. A su vez, los ejes bajo los cuales se divide nuestro programa son
docencia, extensión y multisectorialidad, investigación, comunicaciones y cultura, bienestar
y comunidad universitaria, condiciones laborales y política nacional e internacional.

II. Ejes Programáticos

a. Docencia.

El eje docencia incorpora todas las temáticas relacionadas al proceso formativo de las y los
estudiantes en un sentido amplio, es decir, no solo respecto de lo que ocurre al interior del
aula, sino desde la amplia gama de relaciones que se forjan desde el ingreso y egreso de la
universidad. De igual forma, en la calificación de la fuerza de trabajo estudiantil también
operan agentes que, para un correcto desarrollo del proceso formativo, deben trabajar en
condiciones óptimas de funcionamiento, por lo que su añadidura en este eje da cuenta de
un concepto ampliado “docencia”. Nuestro eje docencia se subdivide en dos; acceso y
permanencia; problemas del cuerpo docente.

i. Acceso y permanencia.
Según el último informe de admisión y caracterización de estudiantes nuevos para el año
2018, la cantidad de estudiantes que ingresan por sistemas alternativos (SIPEE, BAE, PACE,
ETC) de admisión llega al 15% de vacantes siendo usadas tan solo un 8%. Del mismo modo,
a nivel de Universidad la cantidad de estudiantes de colegios particulares pagados llega al
31,41%, cuestión que debe compararse con el lugar relativo de estos establecimientos
respecto de la matrícula escolar nacional, la cual no supera el 7%. En particular, en Derecho,
de acuerdo con la información del Registro Social de Hogares, más del 50% de la matrícula
no presenta información, lo que implica que no existe siquiera necesidad de postular a
becas, mientras que el rango de mayor vulnerabilidad alcanza recién a un 25%, el menor a
nivel Universidad. De esta forma, nuestro programa de acceso y permanencia está enfocado
en la profundización de los sistemas de ingreso alternativo y un perfeccionamiento en los
programas de permanencia o acompañamiento.

Propuestas:

1) Aumentar cupos de ingresos especiales, que hoy son el 15% de vacantes de la


matrícula, siendo ocupados sólo el 8%. Esto ocurre debido a la exigencia de un
puntaje mínimo de postulación de 600.
2) Eliminar la exigencia de puntaje mínimo para postular a la Universidad.

ii. El problema del cuerpo docente.

La situación actual de los profesores y profesoras en nuestra facultad se caracteriza por una
serie de privilegios e infracción a la probidad administrativa -especialmente en algunos
departamentos-, sin hacerse cargo de las obligaciones que son inherentes a la función
pública que ostentan. Creemos que es tiempo de evidenciar una serie de abusos y
aprovechamientos de una parte del cuerpo docente, que van en directo perjuicio tanto de
los y las estudiantes como de la Facultad misma. Así, se ha vuelto recurrente en una serie
de cátedras que las y los profesores no asistan a clases o que lo hagan rara vez, dejando
de lado sus obligaciones mínimas. De igual forma se pueden observar ayudantes con
mayores responsabilidades y poderes de aquellas que les corresponden, departamentos que
no sesionan o lo hacen rara vez y directores de departamento que no cumplen con sus
obligaciones, docentes a los que se les pagan horas de clases que no se llevan a cabo, en
circunstancias de que existen estudiantes sin cupos para inscribir ramos que necesitan y,
arbitrariedades irresponsables de profesores que, amparados en la “libertad de cátedra”,
toman represalias políticas contra sus estudiantes luego de movilizaciones. Desde el
estudiantado entendemos que hay que poner fin a este tipo de prácticas y denunciarlas
tanto en los órganos internos de la Facultad como también Contraloría de ser necesario.

Nuestra meta siempre estará puesta en comprender al proceso educativo como un proceso
que debe ser desarrollado poniendo énfasis en la sanidad mental de nuestros compañeros
y compañeras y en el necesario equilibrio que debe existir al momento de impartir la
docencia, buscando siempre erradicar todo tipo de conductas que resulten abusivas, es por
esto que nuestras propuestas para este punto se enfocan en terminar con prácticas que se
han vuelto cotidianidad para nuestra enseñanza.
Propuestas:

1) Registro público de docentes que no cumplan con el reglamento de evaluaciones.


Denuncias públicas para docentes que tomen represalias políticas contra estudiantes.
2) Comunicación inmediata con Dirección de Escuela cada vez que un docente no
cumpla con su jornada laboral o cuando solicite a ayudantes realizar labores propias
de su función.

b. Extensión y multisectorialidad

La extensión universitaria ha sido tradicionalmente tratada como la mera entrega de


conocimiento en instancias abiertas al público, es decir, bastaba con la organización de un
foro, conversatorio o seminario para cumplir con los estándares de extensión que utilizan
las autoridades universitarias. Sin embargo, para las y los estudiantes, la extensión cumple
una función distinta que trata sobre cómo los avances de la ciencia, tecnología, desarrollo
de las artes y humanidades pueden expresarse en el territorio repercutiendo directamente
en la calidad de vida del pueblo chileno, pero al mismo tiempo, estos avances se nutren del
contacto directo con los problemas cotidianos de la clase trabajadora. En definitiva, la
extensión no es una forma de caridad universitaria, sino un elemento indispensable de una
Universidad compleja que se entiende inmersa en una realidad social histórica.

De esta forma, en nuestra Facultad la extensión se ha caracterizado mediante discusiones


sobre problemas públicos desde la óptica del Derecho, planteando problemas de técnica
legislativa y lege ferenda, sin embargo, la extensión históricamente ha significado mucho
más, sobre todo para la actividad estudiantil y, por tanto, merece ser un espacio de contacto
con los problemas concretos de la sociedad chilena más que una actividad estrictamente
académica. Nos posicionamos contrarios a la idea de separar lo académico de lo político y,
por tanto, abiertamente dispuestos a luchar contra la Universidad abstraída de la realidad
social en la cual pretende incidir sólo de modo ideal. Abrir la nuestra Facultad a la clase
trabajadora es más que posibilitar su ingreso a ella, sino que también orientar su quehacer.
Por ende, queremos que la Secretaría de Extensión sea una mesa de coordinación entre las
organizaciones sociales y la Facultad de Derecho, para diseñar una política en donde la
Universidad cumpla su rol de realizar Extensión.

Propuestas:

1) Realizar un catastro general de organizaciones sociales y populares del sector, que


permita generar un vínculo entre estas y nuestra Facultad con el objeto de facilitar
asistencia judicial en diversos trámites legales (subsidios habitacionales) que puedan
ser canalizados a través del departamento de Clínicas en conjunto al CED.
2) Abrir la infraestructura de la facultad a organizaciones sociales y populares
pertenecientes a las comunas aledañas a la Escuela y/o de otras partes del territorio,
con la finalidad de que el espacio de nuestra Universidad pueda ser un verdadero
espacio público.
3) Crear un registro de uso libre de la sala de reuniones del CED, tanto para
organizaciones locales -quienes tendrás preferencia- como para otras que lo soliciten
con el debido tiempo.
4) Reforzar las ayudas a las organizaciones ya presentes en nuestra facultad mediante
la entrega de fondos permanentes y la creación de una imprenta que tenga por
finalidad la entrega de materiales para las organizaciones sociales que lo requieran.
5) Creación de piquetes estudiantiles cuya misión es realizar demostraciones de
solidaridad de clase, aportando en la dinamización de huelgas mediante espacios
formativos y distintas acciones de solidaridad.
6) Mantener un calendario actualizado con las actividades y convocatorias de las
organizaciones sociales de la región para poder participar como Facultad.
7) Avanzar triestamentalmente en la organización y difusión de la huelga general
feminista para el 8 de marzo, en conjunto con la Coordinadora 8M.
8) Incentivar el levantamiento de pre-encuentros para el “Encuentro de mujeres que
luchan” de manera triestamental.
9) Esfuerzo activo por plasmar las demandas de académicas, funcionarias y estudiantes
en un programa para la Huelga del 8 marzo.
10) Armas espacios de discusión y talleres, que expliquen las razones del porqué apostar
a la Huelga nacional el próximo 8 de marzo.

c. Investigación

La investigación se ha alzado como una de las funciones primordiales de la Universidad en


lo que se ha llamado la “sociedad del conocimiento”, que no es otra cosa que la explosión
de empresas creadoras de servicios mediante el acceso al crédito que posibilita tanto su
surgimiento como su consumo. Así, la Universidad se ha visto inmersa en el proceso de
transformación del conocimiento en mercancía, mediante el desarrollo de la propiedad
intelectual y la orientación de este. Dicha situación ha gatillado un periodo de hiper-
producción científica donde la calidad se ha visto mermada al ser exigida la producción
incesante sobre cualquier otra consideración, cuestión que también afecta a las y los
trabajadores encargados de producirla, es decir, los investigadores.

En nuestra Facultad, la situación de las y los académicos destinados a la investigación es de


las mejores si se compara con otras unidades académicas de la Universidad, sin embargo,
ello no obsta a que existan situaciones que merecen ser subsanadas, tales como: la tajante
separación entre pregrado y posgrado que muchas veces significa un obstáculo para la
carrera académica de estudiantes, al no existir mayor facilidad para la continuidad de
estudios y que termina por convertir el rol de investigador en uno en el cual sólo pueden
optar estudiantes con condiciones económicas privilegiadas.

Propuestas:

1) Generar un programa de continuidad de estudios entre pre y postgrado.


2) Establecer un programa de becas y de mayores descuentos para estudiantes de la
facultad en los programas de postgrado.
3) Establecer condiciones laborales dignas para estudiantes que apoyen la labor
investigativa de académicos.

d. Comunicaciones y cultura

Si se piensa la sociedad actual desde una perspectiva comunicacional, a simple vista podría
señalarse que, desde un tiempo a esta parte, se ha avanzado notablemente en este aspecto
debido a la invención constante de nuevas tecnologías. Sin embargo, pareciera ser que
cuando este análisis se realiza en mayor profundidad, surge otra realidad, pues a pesar de
la diversidad de medios de comunicación, resulta que cada vez nos es más difícil
comunicarnos, escucharnos, generar diálogo y, en base a este, construir en comunidad. Se
ha limitado el concepto de comunicar al mundo de lo virtual, provocando una cosificación
de las relaciones humanas.

Para evitar que esta falta de comunicación siga siendo una realidad en nuestra Facultad, es
que es urgente refundar esta secretaría. Es preciso plantear una nueva forma de
comprender “el comunicar”, concibiéndolo como un proceso activo e inclusivo. Parte
fundamental de esta reformulación conceptual, es comprender la comunicación no sólo
desde una perspectiva informativa, sino también en función de movilizar a las y los
estudiantes, de forma que permita involucrarnos realmente en las luchas sociales
contingentes, sobre todo en las que están siendo constantemente invisibilizadas.

Dentro de este mismo marco, es que la comunicación resurge como un elemento crucial en
la elaboración y planificación de acciones políticas tanto dentro como fuera de la Facultad.
El idear las estrategias se vincula directamente con la comunicación, en tanto las acciones
son exitosas cuando logran producir efectos determinados en los distintos receptores; cómo
llegar a ellos es evidentemente una labor comunicacional.

Por otro lado, destacamos la importancia de incorporar a la secretaría de comunicaciones la


labor cultural, concibiendo la cultura como elemento sustancial de la comunicación misma,
pues representa una manera distinta de informar, cuestionar y comunicar. Intervenir
permanentemente los espacios y generar instancias de encuentro entre empatía y
conciencia. Reivindicar la cultura como una herramienta de lucha, como una toma de
posición política.

Propuestas:

1) Labor comunicacional tradicional: Referido a la tarea habitual de la Secretaría de


Comunicaciones, consistente en la entrega de información básica al estudiantado
como, por ejemplo, procesos académicos, calendarios, actividades institucionales,
entre otros.
Además, resulta necesario instalar una manera inclusiva de informar, que considere
las formas ideales de comunicación de todos y todas nuestras compañeras de la
Facultad y que, a la vez, resulte lo menos tediosa posible al momento de transmitir
la información relevante.
En este eje también se inserta la renovación del “Info. CED”, diversificando e
innovando en los formatos en los cuales se presenta la información, por ejemplo,
elaborando videos mensuales.

2) Visibilización de las luchas: El objetivo de este eje es la visibilización de aquellas


luchas que buscan la emancipación de los pueblos y sectores sociales, que
históricamente han sido, y están siendo omitidas y silenciadas por los medios de
comunicación tradicionales. Se divide en dos momentos; Visibilización (¿Qué está
pasando?): En este primer momento se busca que el estudiantado entienda e
internalice las luchas y reivindicaciones sociales que están ocurriendo en el país. Es
el momento de la información, comprensión y toma de postura política en los
distintos conflictos, momento en el cual tomarán preponderancia las infografías, los
videos e intervenciones en el espacio interno/ Facultad; Acción y lucha (¿Qué
hacer?): Una vez comprendida la problemática, es necesario organizarse y hacer
algo al respecto, entendiendo que se debe respetar la forma de organización y
accionar del grupo en lucha determinado, ayudando desde donde se nos solicite, y
proponiendo acciones cuando sea pertinente hacerlo. Cada movilización debe tener
objetivos concretos, planificación del despliegue y un balance final, referido a lo que
se esperaba de la acción y lo que se logró efectivamente.

3) Intervención constante de los espacios: Es en este último eje toma fuerza la cultura
como herramienta política y comunicacional. Éste se divide en dos objetivos:
i)REcuperar: Alusivo a la recuperación de espacios de los cuales se alega neutralidad
por parte de las autoridades como, por ejemplo, el frontis de la facultad.
ii)REsignificar: Referido a la intervención de espacios cotidianamente ignorados
como potencialmente político-culturales, tanto dentro como fuera de la Facultad.
Las intervenciones se realizarán al menos una vez por mes, en múltiples formatos y
en relación con el acontecer nacional del momento, y también a las fechas relevantes
correspondientes de cada mes.
Además, se propone instalar un viernes de cada mes, un micrófono abierto, para
que los y las estudiantes de la Facultad puedan realizar distintas manifestaciones
artísticas, y compartirlas con la comunidad. Estos micrófonos podrán ser temáticos
y dependerán de la comisión de comunicaciones y cultura CED.

e. Bienestar y comunidad universitaria

La jactancia y búsqueda del mejoramiento académico por parte de la facultad, no se ha


visto proporcionalmente relacionado con la búsqueda de condiciones materiales y no
materiales de los estudiantes para lograr este excelentísimo académico de manera sana, lo
que ha generado por años que l-s estudiantes se levanten para solicitar en este eje sus
disgustos más concretos, contextuales y más visibles en el día a día de la facultad.

Esto conduce a que no haya una preocupación de fondo de las condiciones materiales y no
materiales del estudiantado frente a la exigencias y lógicas que presenta la institución, más
aún, el conflicto principal de esto es que como estudiantado no nos hacemos cargo de que
la facultad es la cristalización de una sociedad altamente segregadora y con lógicas de
mercado en todas las áreas de la educación.

Es por eso que como comunidad necesitamos preocuparnos por generar un espacio en
donde no simplemente se expanda la matrícula para el ingreso de compañeras y
compañeros, sino que también necesitamos preocuparnos de las distintas condiciones en
las que se encuentran est-s sujet-s para asegurar un desarrollo y progreso en igualdad de
condiciones, donde exista una real preocupación de la integridad de cada un- de l-s
estudiantes, como también, es imperante hacernos cargo de la eliminación de todo tipo de
discriminación ya sea de carácter social, racial o machista en la facultad.
i. Salud mental y condiciones académicas.

1)Gestionar un programa de salud mental para la facultad, con espacios de


concientización y prevención.
2)Mejorar y ampliar el programa de acompañamiento para estudiantes que han
ingresado por vías alternativas de acceso y estudiantes que lo requieran según
rendimiento académico.
3)Detectar a las y los estudiantes que tengan un tipo de complicación, ya sea física
o psicológica, concentrándonos en las y los estudiantes de primer año, para
contactarnos con ellos y ofrecerles apoyo, especialmente en lo académico y
administrativo.
4)L-s estudiantes tenemos derecho a rezago, pero no tenemos cómo justificar una
evaluación que no se encuentra contemplada en las dos exigidas por la DAE, y
quedamos al arbitrio del académic-, por lo que se debe establecer una política que
regule estos vacíos.
5)Fiscalización de las pruebas orales para evitar arbitrariedades, por medio de
grabaciones y fiscalización mancomunada desde el CED y consejo de delegados/as.
6)En casos de arbitrariedad flagrante perseguir la responsabilidad administrativa del
profesor ante rectoría.

ii. Bienestar Material

1) Institucionalizar beca código en el sentido de que no dependa CED, sino que de la


misma Facultad como ocurre en otras escuelas de Derecho del país.
2) Eliminar el cobro por certificados de notas.
3) Eliminar el cobro de estampillas de ius postulandi.
4) Acordar con Bienestar que se le informe al CED las nuevas becas asignadas a los/as
estudiantes, para poderles dar aviso a tiempo. Además, que se nos informe también
cuando se abran becas de emergencia para dar mayor difusión.

iii. Espacios comunes

1) Armar un programa de reciclaje central, en coordinación con todas las unidades


académicas.
2) Solicitar sistema de sonido en todas las salas de la facultad.
3) Solicitar que se renueven y agreguen implementos tecnológicos que se les presta a
los/as estudiantes (ej. que compren notebooks para pedir prestados en la biblioteca,
que mejoren y agreguen más pc’s)
4) Condiciones básicas de higiene como papel higiénico y jabón para estudiantes y
funcionari-s.

iv. Sexualidad

1) Semana de la sexualidad -Sexmana- que integre diversas actividades sobre una


sexualidad responsable y libre.
2) Distribución gratuita de métodos anticonceptivos, asesoría para uso misoprostol y
campañas periódicas de educación sexual.

v. Vida Universitaria
1) Coordinar con los delegados/as la creación de espacios para generar redes y ayudar
a la integración de los estudiantes dentro de nuestra comunidad universitaria.
2) Gestionar lugares y tiempos para diferentes actividades de distensión y recreación
tanto dentro como fuera de la Facultad.

vi. Infraestructura

1) Casilleros para estudiantes.


2) Espacio de estudio 24hrs en las salas del 3er piso (extubi) con previo registro
mediante TUI en el ingreso y salida por la puerta de Santa María.
3) Mejora de la infraestructura deportiva de la Facultad.

f. Condiciones Laborales

Proyectar nuestra facultad a una universidad pública, implica terminar con ciertas lógicas de
mercado que operan dentro de nuestra facultad, dicha acción implica poner término
inmediato a todo tipo de subcontratación, entendiéndose esta como una expresión
dramática de precarización laboral, no obstante, para acabar con esta y demás formas de
precarización laboral que se encuentren presente en nuestra facultad, es que se hace
necesario una reflexión profunda a estos problemas.

L-s estudiantes de la facultad no se han encontrado libres de errores en los últimos años de
implementación de estas medidas, sin embargo, no podemos negar que se han logrado
generar análisis mucho más profundos y avances cuantitativos, lo que tampoco obsta a que
nos falte trabajo por realizar. Es por ello por lo que como comunidad y como CED,
necesitamos generar espacios de reflexión de dicha problemática, sin que ello signifique una
suplantación de las peticiones políticas de los trabajadores de la facultad. Muchas veces esto
se debe al no entendimiento de que el estamento de funcionarios es un sujeto político activo,
el cual posee sus propias demandas y sus propias lógicas.
Una consecuencia de lo anterior es que el estamento estudiantil y funcionario de la facultad
deben construir paso a paso una verdadera alianza por la universidad pública mediante un
pliego de lucha conjunto que integre sus demandas históricas y genere procesos de
movilización y lucha conjunta.

También se hace imperante problematizar y entender que la precarización laboral se genera


de una manera transversal en todos los niveles de la facultad (administrativos, profesorado
y funcionarios), obviamente, manteniendo siempre la ponderación de dicha precarización.

Propuestas:

1) Fin al subcontrato en todas sus formas dentro de la Facultad: Internalización del


Casino, tal proceso requiere un plan general, por lo que se hace necesario generar
una comisión que se encargue de dicho conflicto.
2) Mesa de trabajo conjunta entre estudiantes y trabajadores por un pliego de
reivindicaciones mancomunado.
g. Política universitaria y nacional

El periodo de movilizaciones estudiantiles que fue en ascenso desde el 2002 hasta nuestros
días, hizo que la discusión política nacional girase en torno al sistema educativo y su
financiamiento. De esta forma el movimiento estudiantil fue prefigurando un programa para
su sector que sobrepasaba a la tradicional demanda gremial, apuntando sus dardos al
modelo económico heredado de la dictadura al criticar no solo el sistema educativo, sino
que también la desigualdad rampante fruto de la inequitativa repartición de la producción
social, es decir, de la riqueza generada por l-s trabajador-s. Lo anterior indujo a una política
de contención por parte de las elites gobernantes, que tomó forma a través del gobierno de
la nueva mayoría, cuyo programa político trataba de coaptar las demandas levantadas por
los sectores organizados del campo popular para quitarle todo contenido que amenazara el
neoliberalismo chileno.

Sin embargo, el ciclo político abierto por estas grandes movilizaciones aún sigue vigente, lo
que en caso alguno significa que permanezca igual, pues, el resurgimiento del movimiento
feminista debe leerse como una ruptura con el proceso movilizatorio anterior, cuyas
potencialidades están aún por verse pero que sin dudas ya ha traído cambios al interior de
la sociedad chilena.

Nuestra apuesta es fortalecer todo germen de organización popular que se identifique con
los intereses de la clase trabajadora, y por ello con una crítica radical al capitalismo-
patriarcal; pensionad-s, pacientes de la salud pública, pueblos oprimid-s del mundo,
estudiantes, activistas socioambientales, poblador-s sin casa, todos ell-s son la semilla del
nuevo movimiento popular chileno y el desafío esta en ser la tierra fértil que permita hacer
de aquellos árboles un bosque.

“¿Qué le tengo que decir a la Universidad? Le tengo que decir que se pinte de negro, que
se pinte de mulato, no sólo entre los alumnos, sino también entre los profesores, que se
pinte de obrero y de campesino, que se pinte de pueblo, porque la Universidad no es el
patrimonio de nadie y pertenece al pueblo…”

Ernesto Che Guevara


Universidad de La Habana.
Cuba.

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