ACTIVIDAD FÍSICA COMO PROTECCIÓN ANTE LAS ENFERMEDADES

CARDIOVASCULARES

Ocampo, J. F. (2005). Beneficios de la actividad física en la enfermedad cardiovascular.

Archivos de Medicina, 34-41.

José Fernando Aristizábal Ocampo es un profesor de la facultad de medicina de la

Universidad de Manizales, también es coordinador de Medicina Interna. Ha supervisado la

creación de una gran cantidad de artículos en la revista de la universidad, estos relacionados con

la medicina.

El texto es una recopilación de investigaciones que se llevaron para que se puedan

conocer que beneficios deriva el ejercicio o actividad física. Se evidencia un incremento de la

población sedentaria y como se llega a tener un alto índice de enfermedades cardiovasculares

debido a esto.

El autor nos informa sobre los beneficios de la actividad física donde menciona los

efectos vasculares, esta genera que se reduzcan los niveles plasmáticos de la coagulación de la

sangre, y un ejercicio regular mejora la capacidad de reacción ante una herida, con esto evitar

una hemorragia.

En cuanto al endotelio vascular permite que el tono arterial se regule, además que mejora

la función del endotelio. En personas sedentarias se podría decir que presentan una sangre

“espesa”, lo cual significa que tienen niveles de viscosidad a un alto nivel y gracias al ejercicio

dichos niveles se reducen. Del mismo modo reduce los agentes anticoagulantes.

Generalmente las personas que no entrenan tienen una frecuencia cardiaca bastante

elevada, cuando se hace ejercicio aumenta la actividad parasimpática, lo cual provoca una
reducción en la frecuencia cardiaca. El sistema nervioso parasimpático se activa en personas de

mediana y edad adulta que se han preparado físicamente.

Se presenta un efecto en la actividad del miocardio, donde se vuelve mas fuerte y

demanda menos cantidad de oxigeno para cumplir con su función. Así también el ritmo de

movimiento del miocardio es mas lento, con esto evitar la muerte súbita en pacientes con una

enfermedad cardiovascular.

El ejercicio permite que se baje la posibilidad de tener hipertensión arterial y si ya se

tiene reduce los efectos de dicha enfermedad. El problema es de mayor dimensión en hombres

que presenten sedentarismo en contraste con los hombres que entrenan su físico constantemente.

Una alta actividad física disminuye de gran medida los riegos de muerte por causas física, donde

se incluye enfermedades coronarias.

La actividad de la glucosa mejora debido a que los músculos gastan mas que el tejido

adiposo, también las personas que entrenan tienen una mejor asimilación de la insulina y reduce

la posibilidad de tener diabetes. Si una persona que sufre diabetes realiza actividad física evita

que tenga lesiones, con esto se puede decir que una persona sedentaria esta propensa a tener

diabetes.

El ejercicio físico permite que haya una reducción de peso de una manera controlada

junto a un menú de alimentos, permite que haya menos concentración de grasa en el tejido

lipídico, esto deja que la energía necesaria para realizar las actividades este controlada y no

exista reservas de energía excesivas que es lo que genera obesidad.

 El texto de José Fernando Aristizábal Ocampo explica los cambios positivos que genera

la actividad física en nuestro sistema cardiovascular, actualmente no nos detenemos a reflexionar

sobre si nuestra salud está en estado óptimo. José Fernando Ocampo piensa que un cuerpo sano

se debe apoyar en el ejercicio físico, para así poder prever o controlar las posibles enfermedades

y en este caso específicamente las de tipo coronario. Además, nos muestra sobre una

clasificación que permite saber que tipo de personas pueden realizar actividad física de manera

intensa o si presenta bastantes restricciones, esto se resume a que personas que presenten

enfermedades cardiovasculares se deben regular en cuanto a el ejercicio se refiere, pero esto no

quiere decir que tienen que estar en constante reposo. Permite al lector identificar cuales son los

aspectos positivos del ejercicio. Es sugerido para las personas que quieran entender de una

manera clara sobre lo que ocurre con el corazón y con la circulación.

Vale la pena que como estudiantes de licenciatura en educación física reflexionemos

sobre lo complejo que es entrenar o educar a una persona acerca de su cuerpo, con base a este

texto podremos tener en cuenta aquellos aspectos que nos ayudaran a mejorar la calidad de vida

de nuestros alumnos.

Por: José Nicolas Silva Heredia

Referencias
Ocampo, J. F. (2005). Beneficios de la actividad física en la enfermedad cardiovascular. Archivos de
Medicina, 34-41.