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ARQUITECTURA
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JOfoIN RUSKlN
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LAS SlETE LAMPARAS
DE. LA
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ARQUITECTURA
.Ncticia timl~ db
Josn R, DEStllr4N0
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C,~RMliN DI! BaRcos
(C•lomhín<)
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Las célebres palabras de John Keal!i: ''V114 cosa bella es una
olegrin para siempre", embriagaron a Rusl;.iu con la Tll$OUai1-
cia dP 1n11¡ músiea 1·evé'l111lort1. Sin embargo, para Ituskin al
l'l6'1'TCIA UMIN.ill
NOl'fClA .tl1'flN U\
i'l. espíri't11 a .r.
-. .. . nn tlJl!'o Y eJ sensible.
• E~as cualidades las heredar·:
lo que r.;n ihiB o ejett11abo era cOtlstdt!~do i:o1n~ JJ1Hr!1ne.n- Sll In 10 Iohn. 1lu:s!(tJ. · . ·. · · il
l .. d . 1 • ¡t qutert 1 o porvernr le tleparalfá una
1n eo;encial del csv.iri111, o r.on1n E>jemplo úuíco de v1~;1, 1'1T'ath1s g ori,µ eslurnb.rAJJte en Iuglrttll:.l'ra.
falntllhn-;, .ilci1111ahlln s.!!& libres que eran 1Hflrrtili1los por roda
TnW"!tetr;t: (UCL7.1. <le ella, ;P mttllipllralnu1 incesantf!l.nPJ1te JA¡¡ 1
•' La e~t.enci'lt de Buskin trauscurrié sil?l'1,p1•e en medir' Jp
irt1<rlalmosíera de ro!IC'l•ad;i cultura. Teniendo pocos años n11jn
;liciones fr.audnlr.nt.'lS¡ cada uno de sus escritos e.rA devora- mue lt'l•rqn su padre, en. cJiligeJ]cia, obseevando fervoro~amet1te
UT!írtr- lciiln o comen tant'.I I'"r io masa >Ít'Jllprr.> creciente < !'1:1 las catedrales,· - los castillos
.. • ¡, ,_ .
"'~- rmnas. .
l!nnguns f(lTe se Je-
511,
iuimiraili>rE<. Tal fl"'!lk:une11t0 habra adquirido su presti- van ta:b
· an a su paso · ''Para 1111,· las. fllf! · dras f ueron siempre
~.o. que- en <U tiempo. Harrisen le crmsideraba. "corno el más Cómo el nr¡ . 'ib'll'a. con ~xaltad0 a~ento. nQhirei,:y.a.. a-m-
tr 'fl." • P.SttrJ
lu:í!latdn eenio i·rru?Ui.' de T•1(!lt11erra' . m111a
. · ...,
v llll.llJ!.12:a lllllll1Cl05aménle
· • I~lo que pi\Sa ante st1$
<Sanforme 11i:-,imaha el sii;:lo. en. Londres, lV[11nt.hl'st<'l'.. Cilas-
º!~·~~.Q1!ilu«1rlos. No tiene nt1nea apresLu·amierrtas o negliuen-
@.?1"· I :\'l!FJical se fnniJMon.l!.S~@.df!s tft l~~de Rusldn".
eiii<, Tln ·~·~t.ufUo prrwtirado !Jnlre (o:> rQsale$ .de los inrrline~
,
fllira ~ntrr Iern1Lu¡w¡:ue..sm obras: .a través de In~ ntl!fi- de San TVJ1nu1.to. o en:tre la seremilrul di? To.~ riprese.~ tle 7~
11.a< .:.e un nerioo1r~ edirado p.Jra el caso. S!" anunciaba la apa-
Pullrtn,, romt1na de lllor!J'l}cia. --escri.b- fi1111rfl .5ien1prc antre,
ñriiin rlt- las mismas, AL UUTtn una llbrerla Irmdada de- ex- los r.ecuert:Í}!$ n1(Í.~ can¿s 1li.> rri r:riitl?nc{á" Enrrmoratlo rle la
púÍC'ó. ta Ru.1/Jn 1101u e-. C(JTI asieutc en Londres, se etrcargj;ihá 1 ~otuTillllba va ha.cía rula transido & enlusi:is;._;o-;-; tlpa~iona
de d.;TIJl::;;rl.u: y como ~¡ lodn esto no
.Inera suíicienre, en
'I"'. !..'l !Qd¡¡\'i.a, .., narraba su hlm!rafía mmbada con conlornns ,1 !rlll'.llP n liJ petP-n11iél,ad de s.us b,ell!V¡,;¡s: rerm¡¡nece atite ella~
011' estado <l.9 acloradón contemplhliva. .
como de leyenda. los arnstas f!T'8hahan !QS dibnios- que Buskin Ciclos. árboles. J)ájaros, montañas y ma1es son -para r.Lc:P..
'"ie::u1nhi4 lo' t.riucc~ ezponlan ron l"Xilllaalón radiante sus 1
mo li_is acon1es 1le nnti sinfo11ía si.u fi,11 qllE' t.le:.'lpiartmi ~u
docm."la! e'!t 5úra;, o exrrsian de sus libros de arto cementa-
0 1 vo~ar1ón n1tls e:n1raiiahle. TJniase a tt1do eso. Uilll pasiátl .Sll]*lt;..
dm P.U'7'l ta~ guias rlt UIU~ Poro a TJCY'O. torln lngl11t¡¡>l'llll 1
~1IYa 11or !as telas d~ Ttrrnor el gran. f1!).Ísailsta inglés riel
· "'16 fPI1dieuli> de sns palabras o de sus actos. de su nombre
~igk.X IX, su <Jgon.út 1·f!J11eÚll relif:l'i"1fillmenle: "El sol
-t'¡ue.. en
fl'IÍa romo un ~ero do hu hecha PSpÍ'l'Íl1J inmarcesible es Dios". 'Como ·SÍ viviera hiera de los 1h11,bitos del n1undo, le
Nath i.J,. c,tjraiio rír.n.-,, Nt c<Jn>etllf'nt:ia ']llf' T(>foi.vi 1,,. hava ~xaJLación estr\ht<J Fué -para Ru,skin su norn1a imic.a de v-ida.
ettl.tf11 ~~o,como uno de· los n1á1 ¡zrnndl!f> horn lrres del siglo. ''La hi:•tflrÍl1 dt'-s/1 111'da -st.ilirav& Simiun:,~ no es- s1TW la
N¡¡ 111 Husl.Ju en Lond~ 1•11 d añto tfllY. Su Jli1drir Jehn ltist!~ria 1la sir§ c.0J1l.ar.tns crm hr t1at11r11lr-4 d~· ,<1~ t•i(ljl,'1• que
lamn= l\usbr~ 1¡ti~ !<• d•~lical·a· ill l!lml'p·ir1 11n ,.,n,;;. Pni 1.111
rrini(e1111. rrrr711 flña. 1.'0fl .~us ¡ia1lres duran/e d(JI tL'T'cios ¿,..su
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L ¡iro h o, ·1n1r·u:ro. cuico. quP.
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faba humildemente. En camblo, las expresicnes del arte clá-
sico, fuera este griego. romano u renacentista no le ntraian
en le más mínimo. La abnegación. el desinterés .. la hnmildad
eran pa1J1 Buskin 'las únicas virtudes merecndnras de respeto,
Creíe que los siglos más esclBiecido~ eran aquellos en que
los creadores eren. anónimos' aquellos cm qu.e l1;1 íe -era ta cua-
Iidad imperativa rlel líoruhre Con qi1ii !ervOl' hubiera r~etiili>
B1!1$kin las S!,\g~:entwi palabra& de Mále: "La catedral; gótica
-es un. auto de [e"
ffi\ anal.ijis em:i.stiiwít1 para RLISkiñ el Instrumento esencial
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. .. -~ pinitecrria dt> iJoos sueltas, que no colección de hilas rle Turner, do ese deslnmbrado de l:a luz.
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'---ha en un. caos! Procedi a Rus 1cm,
mrll1'!o ~c1wJ.U 1 amo. ~··· • como a: quien amaba por sobre todos los pintores. l1xtl1tal1ai Buskin
-~<-. . d '
ad""""' que eselPU<A"' ' J la simplicidad, eomo una U.e las virtudes permanentes de ta
d uiño ·a que a1wle San .:\gttslin, que prPtcnd.la oncerrar e
• ,.,.,,.,. ranido en la i.tff?Dil Je In plava. existencia, "No emplees nunca --t\consejah·a can ironía-« ara-
mar l!ll i'J uv.r~ . l . do tle oro, ni'eneuademes /JJs LLbrl)$ de ouerüas cion esmalte; ni
¡}diaba J\uskin la fea]ilad en todes sus tlS'pecios, a consi-
deJ11bil ClllDO algo in.frnhUCDAfTO. Para '?~ªlÍrt~ en Inglaie- pongas baiorrelieues .en las muelas del. molino",
• •··-ho ti.enodadamente con una paSloD heroica. No ésca- Si se examina la '\T)da d~ Ruskín, ¡eómo sus Iervores este.
rra, UJlo d . ~ baos -se manífiestan a través de ciertos repudios y 11r:eferilil·
.r tú ~íqmerael clespjlFn..,.,.. e su [lL'óp11i tortuna.
t!m.O es._u.e~, ~ .. - .. . ' '1-
l)c.rado di.• Wl4 rensibilidaci viva, esu.-eJl1ecrd.it "VI.VI<! se su- .º cias! En la niñez. le fastidiaba lJI\8 w:ímn suya, porque se pei-
naba con bucles a la inglesa. estilo que: é1 consideraba anti-
mitli.i en el "JDUDilo de sus sueñes. ci1audo no de sus capnchos.
Dtsk ru niñez hasta su ,'lljez su refinamiento e!iletiGo se tué estétieo. Le disgustaban m sus diil~ de estudiante eJJ Oxtórd.
~drando hasta lo intleci!TIE": ,A que espiritualidaél suma le los co1ulisclpulos·o prores·ares, q= ·en su ind:uttJenti'lna, no tu-
vi~n ·algo del Erasmo pintado por Holbe1n. Por etlucacián.
.hahlan wnduciilo sus metlitacrO!relt acarea de T!l eelleza. que
su ami¡;rl Carlvle 1 e llamaba. "ei etéreo Ruskin" l
~o perobü,. Buskin ln bello a través de la seu.sihilida<l,, o ~
\' protesl<1nte recil\ida e.n el hog<11', he.i;ha más entrañable por
la lectui:a de la Biblia, e.ra contrario al Papado. Sin erribw·go.
elogjaba la belleza ~aje~'tuo~.a que b·ascenilia de las figuras
in!JéMto, mio por medio de un algo abstracto que denomi-
n;;lm facultad rairica. Sin duda. íici bajo eT influjo de las i de los Papas. Ni éra un -pens<tdm- ni un pSIG<Slogo, Ruslcin.
Era .so}I) un es teta. 1 Y tau to romo lo era, lo t~"t&iacizaha en
ideas purililllil! que u~ a esa concepción estéLí<;a, que bajo
l.a ÚOUTI! penetrati~·a de: sus aná1isi$t ~uskin no parecia un
!11 <rpOllUlll.e riqueza de análisis, encubre su estrachez. e i:1Jco-
hab~'tante de e,sli! n1111ulo. No podía Yi.'>:ir, sino pens.auilo en
berencie. cosas singulares o hermosas SoñriJJa con el uso de ·1J1nnedas
En la .....m.mcia de Ru.skin no .b...1hía nada de afectado,
eon el cQ:ño concehítlo por orfi!hre.s, cou10 el arti!itico norin rl1:
il!'ndo todos los actos de su vivir cet illia tlo encamínados ·a
~a Florencia del Renacimiento.
mmohlccer el alma de cus conciudadanos. Como las censuras
oo lo desanhr..arnn eu los tui:11i2117.os, t1u:r:u)nCQ en la edad ma- Josi, R. OE$i:b.~o.
dura. lii gloría lo l:nfautaba.. De roda &tl plil'Só11a emal.1i1La ll'll
illre de mQdl!s1,. dulzura. Inclinado al áx111sJs oontemplativo, 1•
no n:h11i~ le. lucha ml!llldo esta era necesoria. Sl"n~IJle lmsta
W íucre1IJI!!, le hacl:i d'1ñ1J lu qui: resbalnlm ~oluP In vida <le
ID'I 01"'5. La ro:Ht 1,r<i sn flor predJll!rtr1; su divisa To dav: Sí,
\r.1b;1:¡.1r fu, tll ntam;:, 11Ut1c.t1 rlr'1rn<mtid,,, I~.,,., ibir .\. n1ú~ \
..-,cnl11r •·ralo mlÍ~ 1ayt1 iru:l111lihlu. 1 Inhin Jngu1do 1•1•1111i1 Lll111
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que. cnmprentlir;i.!tdu ,, arh.uitir,ndo como eondiciones de su clases:
Religiosa, con;:i_p.r'e:n<lientlo Loilas las construcciones erígiilas
funétruiJll'liento las e..s:iJlem:ias •· nei:esitladr.s cottiro.ttes del
en sevvioio o en houoi: de Dio.s.
ediTu:io• .l[l'i¡n ime a su forma ciertos caracteres venerables
Conmsmarativ(I, comprendiendo a la vez monun1en\es y
y lwllcs, aunque i.UÜúle5 desde otros puntos Je vista. 1?011 esto
aru!i<= calif1cnr;i de arqtillec:tónicas las leyes 'l ue dm:erntinan tl!liiba~.
• Civil, comprenclie11do todo edificio levanll1do por na·Llllil
la i:.Iwra o la lJOilCÚn tk un bastión: pero cuanrlo al revestir
ción o. una sacie~t\. a im_pulso ,fe li!s necesidades, o los pla-
In pic.JrJ se 1.e añada un UVT.O mutil, una esh:íii, por ejmnplo,
b:ibra arqUÍlcQUra. Sala. igualn1rule ilógicb el calificar de ~ere.'> Uu.1ti tnales.
l11filitar. cemprendiendo totlos l(ls traha¡os. privados a pú-
.
!:lgl'-'lS arc¡ut!L'G1Íilllro> lns almenas v las ballesteras. to1.li.1 ver: .
blicos !}e d,efen~a
que ellas no connsren müs: i¡ue en 1111a ¡,¡ulf'rí11 avanzada o 'f?oiut'.~ilc11, comprendicnd¡¡ lils habitacitme< de tailits clases
r.n una Olllii de llllll<lií ~aL1!11 !l.s (:1J11 a lll!rt urns sin ié UrÍl!llml'il 1 le
y de t0do géutJro.
Mlpc¡¡dli.• [IDt dch;r¡o ¡;isro lanzar' In!> proyecules. Sin embargo, ..\si. 1111es, entl'e le>s pnncip1.os qne n1e e~fuerzo en desa.No-
cnr11J+i estas masa1 calienies terminan 1111r 1l.. h11jo 1•11 r1•n1a l'ci~ llar (nl1J.tque torl,os se dehen ;iplitar. coµio he' d1che, El ~ad~
iafondMrlti;:, O •·~l~I túsp1t!!' r~ii\11 l1•:1111S 1ln ¡¡jlf'ituras nr • periorl-0 y n enda c.~lilo dr ario), los hay que se Tf'lacionnn.
r¡•:emJu~ O tll'1':11ratUu t(J1J J1ojat rJc Ui•ool, lu CjUl' Inmlucn 6(' ncr.r.\sn ritu11t•11tc; llul 1nodo nm:; com11Je10 cou UJl. géliero de
; 11.g¡¡ tllflC'l'fluo. lmhm ~rqu1u"tt111t, No ,.., sir.r11pn.i fñr ll rJ1c. _.,
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l._.A!; "Ctb"Ti> ~'1!1',>JiAS IIB. L.\ AJlQlJTtt.C°l' Ull.•
• tro romo son tos que tienen por fuén.te pensamiento. Se 11'! pµtid~ definír, 11or tanto, rle la manera
[
aw•t111mÚll que rou o • .. .. ..1
· . . . • 11 •-· ~alas. Entre éstos- CJ.u1siera i;.u.i0car .més entusiasta Y. tal vez i,nÍÍs n.egt1li\'a, cl)Íl]J) lo contrarie del
•
. .....l..tn1 o d.1snAs101~11 que temen d o m-
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la 1nspiranfill
,__ ) u 1 "' senunuento cnracteeísueo de la época moderna. la cual desea
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m pnn1er ,..¡¡ar e =t>~ .-- · d r.il'ite.ner Ios mejores resultados en la f01'111á más lleonómica.
__i....- • -·•·-es1;i más ei."tn!cltarne:nte rel.acror\U o. con
flu!?llCJa:s SWJJ.e wu=. . • . Ji
ia arqulh<ttn:a religiosa y co~ewora~~ es¡u1.1tu o spo~
Se aúnan, pues. en este o;e.nt:rmienLo das aspectos. distintos:
-el primero, deseo de; practieer la a hnegación por puro amor
.•• , ;.-- para el trabaj o matei'lale~ preciosos. 110 [l~
olClflII que o.... -~ .· ·5 . d l de contricción, deseo satlslecho J:l(lr el .abandonc tle cosas ama-
l.. ...-c.1.d ful edlficro. sino como. oíre:ocla y sacrr ere li1 o
'VJt'11!1.WLd
-·
de.."'ariaruoo
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ncsetros nusnLOs-. Este suun:u_ento,
• •
que das a codlciadas, sin que. al hacerlo se tenga presenté-ningún
1l8J'<l objeto directo, como el de Jlener necesidad alguna; él segumlo,
% ha 1eoido en ruenta _por eompleto en t.odo trernpo, es
desee dé complacer a orno por la riqueza del saccificio, La
~ aun hoy por los. que constl'uyen 'eliil;icios- raligio-
realización. eu el 'primer caso es ya p-tivaqa. ya púnTu:a, más
;o> J hnsta podri.a. decirse que m:icl1os en'.1".e- ~otros lo co~·
a menuda -y CJ ui7Íl ntás &$=iel1le privad.it, :mienl!ras que en
Jde:;:ar.m remo un pcipío di> tgn~-a'lll!la pehgroso Y- en-
snlo.nl ~o entra en mi, ánimo el clismrtir abara las objeciOuClS
el, seg1lludo ,caso el acto es ¡¡or lo. g¡:nar.U y p~ su mayor
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- T !•¡p·"·~ DE LI .\RQl'ITF.CI'Ú)IA l..A LkMFAllA l>RL SAOIW'ICIO
~ ~ ......"'-" ~
_ • n. las parteS ,. tle Tilltl todos Jos día~., El1"- es mi lujo de buena ley, sentido y gozado, y del que nace un
d:.• cn.::enruua:> por •v< • . ,_ 1
~ Qi5CQDos y sacerdotes los que nos .haGen Ialta Y no
5ilil proveche. Ee¡¡¡o en la mayor parte de los CB.S!)S nada pareeido
y in:i<lo sabre este 1111nlo e mte.rcedo IJOI! tll. se gozíl; los recursos medios del h~l~l·e 11.0 alcanzan 1!aI'll
IITTjllllet"!DS. o . • d d tanto, y a los que les puede alcanzar no tes causa el menor
l)es¡'endamos a nosotrcs mi.nuos, y "'ea~o~ s1 esta ver a e-
• 1 ra:uln de nues tra ínfer1cmtlad en esta obra placer ·y pu~pe.n .Pasarse sru ello. Se verá en el transcurso
romenu.• aqm 11 · ~, ·
menor. EJ debaro no es entre ]a casa de. Dios :Y sus pobres, de los capítulos que siguen que uo abogo por la mezquindad
m:i e:;; en~ la casa de. Días y su ª'"Bngelio.
en las habitaciones privadas. 'Introducizia voluntaciamenle to-
[& en;re fa casa de- Dios ] la mrestrá, ¿No tenemos nos- da: magnificencia, lodo esmero y toda belleza en. donde sen
etres .IIJj);airr.:> en nue;;a:os pisos. frescos (UlJll'ichosos saore posible; pero 'l'IO baria 'ese ~asto. inútil empleéndole en ador-
DU6LltF ti:clio;. estatun.5 eJJ los :oíchos do nuestros con-ell9res, nos de cualquier género o en vulgaridades: cornisas en los
mr.i!hles dcradü> en nnesJ:tO,; salones y obietós preciosas en techo$, pinturas en lns puertas, fnu1Jas en les cortinas y
1J11l!Sm!< .-ir.ri:na>? ¡:Hemos ofrecida siquiera el diezmo de tocl'o t¡mtas oti'lls casas q110 han llegaClo a ser cOJ.trientes pmr estti-
pidez. y por apatía ~sa"> de necesidad aotriente; de las
~to? Tcd> esto es o .if)hia. ser el tes.tirna:nio de que nos hemos
coJI..;agra:do lo $UÍÍs.-Íi!nie a las pesadas exígenoias de las. .nece- cun les dependen co;rnereios entwo0, d11 las que rtunca l:ta
r emanado nn solq. rayo rle placer. -ye.r.datlero, y qiie se de-
sidade-- humanas. y de que .nes quedaba esto que podria¡:óos
rivan de UJl aso muy anliguo y muy vulgar-, cesas que
t!mtlll!m' en el lt( il .hl pues. sera más
grané1a )- más neble
llevan tras de sl Ir. mitad dit l.os ,gastos Jec la vid11, y qUe des-
~ esre lujo ~-.ta el aportar al servicio sagrado una pacte j
truyen, más d~ Ta mil.ad de su bienestar. de su noble7.a, de
UI' las °*lllS r .11resmuarlo.;; come U!I .recuerdo de que el
stt dign'ifJad, de su ireseui;p y de su raeílitlaJ
Eterno, que JICi1 ;la a la vez la [uerza y la recompensa, l¡a
Hablo por e:x;periencia: sé lo, que es yivk en 'llIUI cttboña
;au1i.!ired1> taJJta m1e¡tro placer cromo nuestro trabajo, Mien-
ent:J:1,1 i;i:n tublado y unas -vigas de a.beto. CO!l. un bogar tle
tr<U .no hayamos hecho esto, uo i;omprentlo cómo podemos
micasquito. y sé también qUÍi por muth(?s to~l'eplOs' es esto
~ !Ale; h..,:-11ec 1 SP.r" Ieliees, No comprendo cl santi-
:rn<Ís sano que vi"vir enlre taµices Je Turcp1ía y a.rtes0t1"<1dos
m:mw qi;c: .arqu•-a <>!egante111en1e unestros portales y ado- de o.ro, cerGa d~ una reja de acero de bnrtotes pi.!ll.mentados.
qu1n.1 el umbral, y dejn a t.. [gles.ia WJa puerta nw.zr¡u.i:n:n No digo q1Je esto nO' lenga su higar -y conve:o:ie.l'lcia. pe.ro
r un umbr.il d,e tierra molida; el ~11Li.n1iorlt(l r¡uc enriquece decll:l,1'.o aou energía c1ue el ,dfreciin1ento ca)ccti.vo y un tipar·
llllé".trU! propios l&lnnes con la mayor sunmosidad y tolera tuno empleo ele la decima patle ele los gasto$ sacri1tcnillis en
l.t <'!.-mur!')?. de Ies p;1rr.d'::'> ,. la ".!lrcr.hrp tle.l templo, Ra:ra vanidades do111~l.icas (nuuulo 'ria perdlclos estüpi1lamento J
l'tr ~ 11u"1:)11 mm e h'<'cl•~n la n 'l'!Vf!l"IJ, rara vc~1. es po-
l~r. lle 1111 nioclo nhsolulo. en ínoonvenienl~ y Pncurnill'il1ru~J.1lo~
rihk ..)•'«fl 1111a tal renunciu. f'.x,sl1:n casos aislndr¡s, l'fl lo~ Ullrnésticas) ptffroitirh111 C!l11Stl'lllr 111111 iglesia de n1ármoJ 6tl
ttue Li 1lith11 V 111 .. ciividuJ ü111>J1!{.'Ulal e],, lo,, ho1nhrl"~ c-~li'1n l cu<la pueolo tli.; Jnglntt:!rL"fl ,ui111 iglesm 1.111 q1.1e seda auesttn
;uOOnhn.oJ.t: a <.krw grvdu dto lbJ'' r·n cu~ d11.1r:itla!; r-ruonces
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L.~ Sl :::rE L.\.,; i:.:i. W!~AllA DEL SACllIFlClO
• diclia al apnr.Gntao1os e.11 nuestras excursio- . el polv~ de Ad~lla.mP ¿Y. no valla, sin embargo, más <¡ne si
al~gnaY !1Ue51Ti1 .J!.~ 1alesie tal, que vista de
un« ...,,
~ vaseos wu .. -., lá hubiera bebido? ¿Cuál era la ventaja o utilir\at1 de este
ne> ~ en l'.lll • • • • ~éuuo>e al ta v bello por
• laui!ea.:.ra ante 1 os o¡o>, e • acto npasionntlil del sacrificio cristiane. ci:mtra Ja cual Ja ob-
1e)Oi resp • lu·~1 clti los ~abos de Ios humildes, jeción que emitió por prirnera vez una boca desleal -tle la
mclma dit la pur~ mu ll.lU ' ' ··
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tn l•}l litrl~ 1k• f~•lhlcll!!?ñ, t.ótl l;i <u11J nJ 1 CV J1• ('1·111•1 J11VfJ
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J,..\)'vll'AllA o¡¡;r., SAClllFlOIO
~ sfE:I:EL:.'!l'-~IL'~ DE -i. \ ,ffiQUl'fECTUll:A
. d srticularmente impedir que se medida :unís extensa <le toda gran facul tad e!;:piritual allí
Q u P ventaja que la conce di1 da aI
· • p:or tao to• quen>'.n>cito ' do~~e estas , Iaeulrades hubieran sido sabia 1· reliqiosamente
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• !)]1!SÍde .. su prcsentaGton, , l:1llr
pueue utilizadas. S1n .embargo. el impnlso a CJ.ue a!udo seria, huma-
~•le t»"p!I'l~ <llli.ctJCa ~tuosa de ~ principio~usto nall'!ente hablando, cierto, y resultado natural de J¡;¡ surmsiéu
~rl'.!e notar que dpnt ilo, inienor Al isl'.aeli ta se le ei.,gian
w;ultara. a pesar e ll) estim io de fidelidad; mas f a est:is. do~ grandes eondiciones corrcberedas ]Ja:r el espíritu
de s~fic10, cuando trabajando de la majar manera posible
L.•. pd111idll5 de ;:i;I5 \nenes en t OID . . d .> conslderásemes todo cúmulo da trabajo aparente como cúmnlo
• , -e ee • ici~ ern recoillFl!J1sadó' a con1l11tu au
· · .,.11e i?>'o<>- prmi un surnento de sus 1-'ruenes. R..1que11as,
el ¡¡a¡:o de belleza en e 1 edificio. Sacaré aTgur11!,S tlerl.ucci.o~ pril.c:tl-
Y" e.~rr..-"'mentepor · 'd. _ cas de >!Stas dos, conc1u$ones para teJ'll'linar.
_ -.r , • eran las i:ec0D1pensas. promen as )' cono-
liJ'1!3 r."" l' F . · b
ocl~ de :ni·1141toc.'lnsto. aunque no debl.1lll ser. sm em ~r~o,
.fin El diezmo satitleclto a la tienda era Ia candiclón IO. Respeclo a la primera. bas1:!1 ella nll$na para gaUUl-
tiza:r el reSllltádo .Es necesaciQ observar c06mo tropezamos
:muiada de, bien obrar para la .recepción de aquélla, a¡,1yo
constantemente. Ninguno de nosotros i>.$ tc!P btien arqu.Í•
lu¡;ar IIO i;;ltarla. 'Y así sera srempre. Dios "Dei o1'vicla jamás
ter:to que pueda trabajar ror enóma ~i1e sus fnerzas, y sm
~qniertrahaio ;:¡ lábnr dl! amor" y en cuanw a las prime-
em bai:go, na eonozco 1ro j!diJ:icio éle construcción: recien-
ra; :i· me]~ J)ililes o fuerzas a El ofrecidas, serán ~1Jltipli-
te en cl que no sal te a la vista q U!! ni el aTqcitecto ni e1
cadaf' amnen!adas al sép111plo. Asl, aunque no este uscésa-
que or(lenó la obra lo lúcierou tl¡; un modo irrepror.llable.
riame~ en: el in~ de la religión admitir él serricio de Es la ca:raclé1•ística particular de toda ol>r¡¡ modepla Casi
las mes, las- nr~ no prosperarán jamás sin, haherse con- tótlos los anliguos tr:iibajos fueren e]C(:\'it:ad.os parientem011te.
~do primero a estf! servicio, po:r medio del aTql)Ítecto Podrion ser tal vez .duros, labro- ile Diños, ne: biírbarhS, ele
~ t'!el odmínistrador: JlCI' el primero. en un objeto de amor aldt:ií:nos, petto s·on siempre cl'.lncienm1dos. En nuesiros días
~!~ 1· ffilt!:!l"O! por el segundo. f.QTI tanta o más fran- i·eeibimos la in:rpresi6n lle que ln~ tenemos por nucstl'o Jint."'-
qu;~ y Ui11to o más cálculo qne sí se tratase de la sarisfac- 1'0, la in:r¡wesián de una hrnsca detención Pl'll' to11as pat'les,
eón de ros JITapÍiK wiñruienttX. \dmita:ruos lealmente este de u.na indolencia: ton1placierite 'l)or los hajos precios: illDlflS
¡ll'k=ipin. y por frlo, pór restringido que pneda e~t.ar poi' la :vecib1mos la impres.ióu de llU leal en1pleu de rtni!Sl.ras h.1er-Las.
priu;•.ie:i, ¡:nr fh\\)il que fll!oda €' t 61.J rea 1 i1úl ll~llt:ÍO y por 1Pesuich11da mauora de t.rabainr1 Atrojemos 1le =sotros se-
e:nncqneíl!!tirlD quri rcwlle .,\ c.im(tl'.r ;a~·,11lu por la oposi- li1ejn11te l.en1aciÓT1,. . UQ llO,S re!JnJCmOS d.c morio volUnlariO
tí6u ile la ranida1l y d!!I u1tl!r/-s, su ,1rnplc rcr.onhri1T1Íl'nto para en segtiida unn-n:lurar y dnplorur 11T1~_1Ta h1suliciencia;
~w~ en v ta rl'<'.rJIUJll'IISfL C".un nue -trn ¡¡ttuol 11c:1u11u1111:i611 c(lnÍ\!§.etEO~ nuestra pohr1iza n nu(''trn paxsimoniá, ¡1cro no
dr Dl~Ínl T de lnleliW'flr.14 d '1fit> rr;Cllhrnrin uu Ün1J1.Li~o Y culunniiernos rn1e~Lrn 1111c1igeucia hJ1n1(1n<• No Sl' traul 1le
una ~·11&lldníl t!~nrKW•I\ •!•~" d 1iglo xru. Nu .1rirrr10 11ctll1 stlht'r t'tl1í111n tlt1b@ru.os 11<te·o1\ $ino r'Órn¡¡ se tlebl! C$to hocl!r;
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_L-'\.;;I~~..... - en .donde baya 'de estar cerca de.la vista y: groseramente allá
,. T-·~ aqut, B decir .,-erdatl utill le)' per- donde. ha d';. estar alejado. Esto es er1gañ0,so y deshones.to
una .dl'Cl'p{J011 ......,.,___ - bié ·
- · · ·~ nMie de nuestT!l watet:m· pero q\1e tfll)'t 1e11 Estudiad. cuáles QJ'Jlf!merilai¡iane.~ harán buen efecto de lejos
1enec.n•.nte d º"'u r-· - • <- d. ) ,cuáles otras lo b.ari1n de cerca, 'i d.istcil>uiillas de medo qu<'
¡rul.'11; formúla~ aqui. Sum:ipre que en la cons truccson e
'""' • ......,. ~• rU>5 ll)l1UJll1llCÍÓ'n de otras que ÍOrJl18U 4_ueden ame la vista aquéllas de naturaleza, tk!licada. y lejpr,
w: ei!Jllt1'l a ....
--~nnmtaci6n~• 1-·-- ix;ttltas a la vista, debe cesar r10 de ella las t1tt más atrevida y Inerte. ejecuc~ón. S1 un ortlen
'!!.ta~~- 1¡uedarL • .
la orni!nlenmi:ión en esas partes. Se cree eli SU. e:x:i.st~ma: de 01'll.31ll<aci6.n ha de estar a la ve~ pr6lcimo y leiano,
nn debe ser er:~o;,amente supri.Jni<la. En el caso, por e)em,. timccl cuidado (t\.W. la ejeeu<li6:n sea tan atrevida y tosca donili:
nW en Ia ~tura de des estllluaS crel or.namet'llO de un sal te a la -vista como donue se aleje, ele manera que el espec-
~fu, a l;i> que qcii1 jamlls ha de verse, ttn. p.1'lr ~~o he dé tador se dll cuenta d.e 1o que aquello es y e.le lo que vale .• Así,
dej;t.r;eliJs sin t,mninaL lguál sucede (J)l1 la e1ecuciotl. de, ros todos estos adornos ppsib1¡¡s de ser ejecutadQ's en generol poi·
ndor:m: en. los <iti~ lleno; de !llrubra u ocultos·; mas vale obreros, pueden set repa!'lidos 1)01' lbllo el etlliicio. mas Jps
cnar- por un exi;""° de perfec<1ón. L-0 mismo con la conti- bajorrelieves, Jos niehos y Ics tapi1.elns de un. trabaio fino,
anac1óu de cc.--ilru1~ > de otr.lS :mnluuras análogas. No es ~ertin r.eservados 11•1nl la parre baja. La f.omprens.ión ele esta
riue r10 pu,"ila d"!en~ cuando han de }U'Dlongarse hasta nec(1)lid1;1J hanal añadirá dignidnil al edilicio aunque resu1t1•
a1¡¡an nncén irnpern!b:able entone~ se las detiene de un cierre deso1·det[ o alguna asimen:ta en el orde1111miertto. En
modo illn;il:l1e. airendan1ente, bajo un adorne final. bien visi- San Zeno, dé Ve:co11'a, loS tiajoa·etíeves, llenos de movimienl<>
Wr., a fui de queno se ;UJl(IDga que están en donile no existen. •, y de i.nt;er~s. est&t situados en el paralelo¡!lt\mo rle la Jachada
~ ,orr.os di: 1* t•~ que franquean los cruceros dé la cate- y JXO pasan de la allur? .le Jos ca¡)iLeles de las c.ohmmas riel
dral rie Boncn tienen en el uacimiento curvas decoradéls ipor pórtico. lf.11cirua no se enouenl.J'll sitio un. simple y pér¡ueño
TO'ieW >obr~ los ~ }.!d<,c .-isihles y no las lie.neii en el f·ecl1e. arco de UÍl cllbu10 graciliso, ~· sobre éste las l)lll'.edes lisas con
La TEr;litwl cli:I procedurucnts es. ante Leldt1, un asunto tle colnn1:uas fa¡ret;adas re.¡ru\ru:mente. El (onjunto es aii:1t veces
más iJnpGUenle y 1i:u~s bello que si la [achi:rda fi'Sl\!Yíera com-
tl~f1011Ja· cnnun.,~rJa.
plelantl!l'lle Ilena de adoimos detestables Be aqui un ei!?Jll~
de lo. mancr<1 de confor111arn<ll' cól1 poco cuando no potlemos
12. :-;Q oh·idcm!1> r¡tre li1 ""'isibilidad dependa no ya 1le la
ccL;cnción, mm de la tlkt<tncia. El 1rahajo uunoa es más
pern1iili.'llo~ .ruurho. Lo ntismn que las ."Porla.URS u~l
r:i~.:-cro
Cle lu t·11terlrnl <le T\011~1. estún ilstas 1•,1Jb1erLns de h1,11orreli~ves
("-'~ "/ ma~ i.mprudl!JrWnl!IJ\I' dcJTor.bRrt!I par Ull elCC(!$0 ti!? 11e1ii·ados (1le loA LJllD ya lu~blúre p.x1eusamente) hn~le cel't'a
dcllGJill'.u cnn111 wlirP lac- !''l~ alr•jodris rl~ lu visia. Aq il'Í nll~u·<l y ttll'dia de t1u butt1b.1•e: por c~t.ima se levtinlRD los
nL.ll d!!ll'<. ~in ~rgc., l'Cglí al prin~ i¡u11 ¡J,. la huuroll<YL UD 1U, ~ ,¡0s csint1111~ l.whiluole$ ~lli' propor~ioues m<i& vis1ulcs
nu~ ·~ lr.l!ia)o. No d~tht!:n1r1> ejce;ut1u:• un ;i<luniu que hr1 Je iiclin~ s11c!'lil•' unn .,1 Camp1111.íle. l'l:l 11lorl'ntia: su clrc:ulo di?. ha-
1lµnnl
nnibnr lodo •11 ·~ifíc:kl •'flli•ro 1 u f¡(Jr lo mcnl)ji 11110 lte1110~ ¡13
dt f'titon"rnr t·n rJJda nnn 1111 ws .,.,rrin~ ¡1,1rti·s) cuu 111luucin
+2
'
LA WMP.&M D.11.L ShClíl:TPrCIO
1...'5 ~u:,:n;: L.~:\U'All ~S DE L.o\ ;,JIQUt'l'Ec:Tl-""l\A es malo. La portada 'cenÚ'SI de Bonen Ci a mi mtimder el
mir.irl°" y no depende esto de su 1u111nilo .ul ele la mál<i trono dél m.ás exquisito estilo Ilamigero, aunque hay¡1 algo
.-afid,ul.de ls obr.; -reveiadol"á\! a ~.uas Je t~ \Cll.to y ·d~ <le.. decadencia en las partes superiores, en CSlJl!CÍál en el ro-
• sillo de que parecen 1Ilil5 b1~n propias para in setón._ La .PO~tada toc~a es de un periodo purísimo. y no ha
ur;enu\-a.-. bl ,..,,tar (Xllotadas en un cafrcc.illo de ter- siRo apenas influenciada tpor al Banaclmicnto Ha)~ cuatro
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CTQ>UiT, un r.itw e e
. .,,,,ro -~ mu\ mm.Ies para res1st1r
r~ulmn • la [ue¡::z,1 cardones en estos nidios ( Gllila uno con des figuras dehajo J
a::ipeio. ~ ..,,... .,n ~ • e . • • d alrededor del p?,tttico, desde el suelo .hasta [¿¡ b9vetla, con. tres
de les .;·~Cfll'OS y lo> ataques del frío. Se uene losuma ~
e~: son una rumte· de ansíetlatl y Je tormento .. Pensamos órdenes de rriohos intermedi;i:rli¡s de ctros mayones. y. mas
qu.e una ~ple colnmt•" ~6\ida hu hiera valido m~s. -~un. en retocados ad~s de los seis doselesprincipalesdé cada píe
- ~< ca,.,., ""' preciso teller en c.uetúa la :realiza016n d~cho ex.tel'lor. El nümero de lQS' nichos menes importan 1 es,
de ksm~graiulf'
t:~~ \ ..m~
de Ja decarecióu. Si la decoración ci.unpie r:
~-· ¡;;~
fine; Y' can un motive ilif~rentedé decoración para cada compartí•
ili di!ber. si SU5 ci1a]ida1les- de luz. y <le sombra con.turren. a mento; se eleva a ciento setenta y seis. Sin emhar:gu. en todo
un ei~ ~.J. no nos e.-..-t.rañani que' el escultor. en la el conjunto no hay un lóbulo .i:r¡.útil 11.i un rasgo ile cincel
pienimil de eu anaginacixin. se permita <lar 111ás que simwes. eje01.1 tado con ligeriµa. La gracia y la Ti.qu~ son perfecta-
:mpr1!5lGllf:f da 1uz. y J.e sombra y cnmpo.ng.a un f?I:Lrp~ de mente visih~es, sensibles casi aun, a Ia n1í:rail.a mdíferertte:
f1gu.."1S.. Pero :;i. él omamento no responde a su 1111, sr de
y toiln esta minucia no tesla majestad a la noble bóveda, ile
t~i~ no tiene ,edildera potencia dec.otaliYa, si en conjunto la cual am11enta el .mistenio. Es un alarde de ciertos astiles
el rio.tler sopertar el decorada., como lo es de otros el no 110-
no resulUi má~ (Jll!' 1.IDH simple y i.osca ú1crustac~qn bruta 1, 1
J.j!]· llesÍstirlos. Estas son las pausas y las monotonías del
iÍ!l !ll:Ilif1cadbn .." no e' utiremos al verla de cerca sino que
ba ~tado much!ii ;úio; tl~trahajP y que encierra -miles Je arte. A su exaltación, unas veces afm-tunada. otras alta, rle-
figura~ y dP. ltiíimins qne ganaTíim al ser e:s:-an1inatl¡¡.c; con beroos e.~as bellas (acl1adas 1Ie mosaicos variados llel'IOS i.le-
una ltqia. Tu> srr.ñ la gr.nllleza. del gótico rlel Norte, en opo- 1as loctu·as ele in1aginación:. y de las s~bcias "DJ.Ultitudes ac
la llS'(lul\u.rll, ll'llÍS vivas y ~ e""1rañlis que los misterios q_1.1e
~ al iiaHanQ ind> reciente. Aq_µl-.l Jliiga a la misma exa-
119111;111 los sueños de nuestras noches de verano, 1J1s arCO$
gl'fiJc:iñn de ]<$ detalles gu p+~tli:r de vista el ol¡jeoo arq ui-
l1.e estas :portatlas, los Pnre.jados dé hojas compactas, las t"OS'lf·
ialtar ilUM~ a ln potencia deceraí iva. No hay
l!!dl~llltO',s1u
tas i;mtrela7.auas y la d.es1umbraure l1,17i de es'lo.~ laberintos,
nna simple hoíi qui• 11() balilf'~ 1¡11e '"' •iguiltque algí' En
1111 veJ.J1e11as; esas n1asa!l imponenles de múll.iples pináeulos
llU c.aw ami.o este. el espleuil<rr qu" le µuede ]Pgíl.i.rriu J no-
y de toi;.tes ceüidns <l<! diaaenws, únicos testimonios que. nos
WPmente 1lar 11 l~un¡n, r-· ill.rr11tndo. q11e1lau 1al v.e'I. d«¡ 111. fe v tle1 temor de los pnelilos. Toilo
cuat1ro ¡.ltll'll sus nrq1urnclos h1é objeto ele un sacrificio lia
13, L.ltetl.' ¿ lliru1~ 11uo dr lcr. c:i11ri1 luir. rl1• los ,1T11ui·
(:!I
dosapareciu-o~ los intereses ue su exílitendfl, i>µs aspi:teciones.
ti'• 1.m 1<1 tlr twh1hr d" d1·wra~one• (;1hrcc:u'!l~dn0, bl 1l!!rnrnil11
47
nu ll!lS ilf,lhn:r.;irwado 11 •:s Lu''"º· y l•> r.~t/, •11·r11¡i1'L• 1•1ut11du
.,r,
- ........ --
'1
•
•-··--
1,
'
l l. Existe una s~1ej,anv.a marcada entre las virtudes dcl
hombre y las luces del globo ·en que 'habi l.!!. igual graduación
¡ de fuerzas hasta los confines de su dnnrinio. Igual oprJsición
de sus contrarios, igual crepúsculo en- su pUJJlo de contacto,
' zona algo más la:rga que la línea par la que se deSliza el
:m1111do por la uoche, páJlnmln.a extraña de las virtudes, snm-
bría región de controversias en la cual él celo se convierte
en impaciencia, la templan-za en austeridad, la justicia eu
crueldad, en suptll'stició11 la Ce, y e11 d.oncle lodo se esfuma
en las tinieblas.
No ol;lStll n te, la :mayov parte ele las veces, aunque J¡¡, nbs-
ounidad aumente en un mod~1 gradual, pod.emos notar el
momento de 51.l 1lesapa.i'ícilÍl'1, y ataia1• feli'Mllenlc Ja son1bl·a
en el ca11•il'lt1 de su descenso. Pera hay algo para lo que lu
lu'len del horizonte es írt:eg11ln1· P. lutl~fiuide. y pr11j::í~nn1CJ1lt·
es ol ecu11c\or y el e írculo de lodo; la verdad, la única cosa
Jltll'll la •'UIÜ no huy p;l'il<i\O~, ~¡111,1 T'l~!'J)CI uos deSg¡tlTQtU!5 )'
'.í J
-
~pAJL\S< TJE t-4 ARQUlTECTl l\A LA LÁl\M•AllA DE LA VERDAD
¡_.\5 <1!'.TE ~
, tierra aunque i;olun1na nebulosa,
. r,oI\llJ!llll ne 1tl •• . l . d ·terente
ele cado 'uno de nosetros pam consigo mismo •. Esto
ruptura>. . --'·· . :bre la cual se <1¡1ist:üi a vrrtu y es lo qui.' artoja esle. negro .mieterió sQbre la humarridad,
• J¡,rada ' e>lTl'U", so • d.isimu
. 1
[~ . • la pohüca y Ja prutlenCJB an, que Agradeee~-iamos a cualqniera qu~ taladrase un pozo corno
[;;; ruerz¡¡,., que .r., ldftftH que el valor guarda con egradeceríamos al que lo encentrase en el desierto, Ielices
1 jjanl]ad ~ [u rer lt'9" .mo .......,..
n • . .ruiudóu robre con sus alas y que la U.e que )a sed de verdad subsista en nosotros hasta cuando
!1! ..._"OJ.do. '11ie . .,. u:na,_
sus · 1w·1D1as. tCuátl dlf
1 1c1·1 depe
· ." •
1_
_ :i. hfu.
voluntnriamente hemos abandonado sus. íuenms. Los mora·
car.dad oJ?>curece .~ - • 1 . .
_, ... ~ _..,, :autocidail la eual. ademas l e repl"l.l'fllT Lista! no deberían confundir tan Irecuaurernenra la b:npor·
~ ""1D8lll"'-"'' .,.~ - . b 1
la ho;riliilañ de los pean$ Jlrinclp'.os del hombre •. de e a a tanrna .8.e_l pecado con su falla de .me.recimiento 1le perdón.
nrrmi:'. los e41raV10' de los znas buenos "! contmt1ameute L;is dqs 1deás son COXl1)11eta.me.n te dislint~- La pnrlez.á de
~-~-
.. -•tmfu tos U1W5 y lra:Ícionada por 1 os otros, mira . con una !alta esln subovdinMa, ·en parte. a la nntura.lc:ti<i c:le l.a
.lSU1 por • • - 1 a, persona cQTltnl q1úw ha sicl.9 c;ometüla. )- en. p;ir\e a la ex-
la e . __ ....;.:i~d 1-'< nóllloone5 rrun1mas que . as g unes
a m·-ma ..':: t1U-~ J.it.::: - •
ten~óll de sus 1:onsecuencias. La [al tl! de merecimi~o de
.!l tta~ de 5u.,
lc>y~l Emteu fnltaS ligeras a los ojos del
11II10r, exiz-;:n ,...nareo; ligeros "Para los dictámenes de la cien: perdóu estú su.bordl.uadu. 16,gicamen.tc pénsa.mda, 11 L grado d.r
eia; ~l!'ro ta ..-erdad ne _rerdouB ninguna Ea lta ni sopO!!ta nin- tentación que se e:i.1Je1rin1enla. Un11 serle d& .círcun>;ta.n.cias
determinan la imµc1r.tanci.n del castigo asignado; ol.r¡l serie
;ima ;mic-.Ua.. de ell11s. los \ítiilos pa¡q lt1 renlisión U.e la pena. J?ero como
N11 .rEílex~mmmo> lo núicien1a sobre esto, 11,0 rehulmels las no .le es dallo fil hambre valuar Ja impo1tancia T0111tiva tlel
menores !f (IJ(Itill1lllS· oce;iones efe ultrajarla. Tenernos el há-
úlillLo ni conocer las conseimen:cias rclátrvas, es par lo gen.enal
hiw I!! a111wnplar lil falsedarl en sus mas negras consecuen- nmclente Tiln.Ullciar al cuidado úe W!luaaiones tan delicada~
aai con las iJrtsu;ÍOilf:S llÍlÍ5 nefastas. Esta milig1.taGión q,.u~ y de Cól1creta:rse a la o1Jra condición méÍs cl;µ-a fu¡ L'ltlpabllidnd,
¡ireil!nd.trum ~-perimemar por. la .mentira, no la expe:i:imen- prestando más importiulcia a Ja.s faltas que sugirió unB' ten-
bmm maW=ente máo qup por la memira pe.rDiciosa. tación más pj!qneña. No quiero an1engul\l: la "1tup!!l'llción
N~ imt.u:ios tonltil lá ralumnm. la 1.ii pocresia y la per.fi día, <le! pecado, 11e.tjud1cial. y m11lo, rl,e la rnlseilail egoista y reffe-
porqur IlOi hm:m dnño. prro no porr¡pe sean con trarias 11 la xiva. pwa lo oual me pru·eci! el medio más Tápido el ovitar
~;;il Qu1tamr.d a ll: {aliedad [;1 di Í (lJJIBC iÓll y el perjuicio las [o.1'rnas ma~ s0D1brras de la mentira y velo:r escrtipulosa-
r no qncd;i ap;u..: ulUI !PV!' wmln'>I, Si la 1·ransrormt'Ul1ÓS l:n<ii'l lt:! sobre las CJ.Ue ·se 11ll':r.iJla11 lmpu1tes en. nuestra vida
1?.11 ida~ lll c::llllWl pl.atr'l'. Nr1 son, pcr tbJ1t,,, la c11lum11ia prilino:ria. Ne¡ mintamos iámlis. No consideréis la ml!ntira
n. la perfídta las qui: ¡:mduren en ,-,ste rnuodco la 111.ayor ooxno iuoffill.Si\'Et. como f1'1til o ran10 .involuuteria Descar-
p;¡rl!' dc. lill mílli::s, t ¡,, lfil'Jtllrn hrilla1111• .,. dulce o. un tiem- té1noslas totlas; Cútile~ n ío1-tt.útas, -r10 devm de ser lll h.qUín
(lo, J;¡ ÍJ··~rl omablc Li m"nlÍr.l f•<llJ'1r~tirn 1lc:I ft1qt(1rintl~r, ( tlel tl('gI'O J!WbO d.1>1 abL=io. Es preciso ptll'ülcal' nvestro
la n1• 11ura e;.lc¡¡}¡ida drl borr.11ru ,J, r~1ndo. In rr1•·nllrn del t·nrt126n, sin cuiderno$ de nyeriguer cu.ú..l 1nentira es. la más
~~ O:·lmti, U U~ll\llr• J!ttlllir-u tlt.1 0111111!'1, lu 111"11tinJ. uuli "i3
52
• l'ARA DI!: LA Vl!MA D
T"4 .l.A.M
'llll'~'L>.!i l)E ¡_\ !JtQU.l'l'ECTqIIA
L:\-~<!E'Il: L"" .
--'· 1 eemo la bella letra, no se ~gnijoneados por el acicate cnballeresco. Es maravilloso ob-
• iiJ'S La ''eiu•lt,
ueik3 o m;is ne11 • • ti Es más sünple una cues- servar cuánta fuerza y uuiversalidad encierra esl e ~iJlo [Jcin-
•. ron ID pral: rea. · .....
.adquiere :ims que . . _ bre. ,..
creo que tuJa oc;¡¡,s1uw.
110 cipio, )r cómo de su couocirmento o de. su olvido dependa la
riñn de ~1,.,.Ull1ll d qUt'• .de
_ co.;11.Ull ·•
de a;tlqni1•ir sem:ejll1lle 1.na• b"1t!;\ pue da mitad clc la elevación ó de la decadencia ole todo arte y dP
0
t'tlllkturer.i dé prarticruabl •• 0 brar con tD<le yeJJdacl constaJJte todo acto del hombre. Me. he esforzado en mostrar su exten-
!notente. H· er : · • síén y- Sil 'P-O'lClJlCÍ<I en pintura, y se pcdcía escribir un volu-
pasar JIOI! • . tan difícil 1 .•
T .D1enl11'0sa como un-
nactamentl!. e; ro..:a Cil•I • • , __ er constar IDOll en lL1gar de un capitulo sobre la influencia que cierce
Y - liajn Ll · amenaza ce "'"m Seria cunosa . =e
• 1 '11>..,.-· • ¡ • Q
:ne:;¿o di! -.....-.1... ' no hava otro tan CGill:pietame.nte aplicaciéu mfu; f;lci!Juenle que pudiera hacerlo un seco aná-
tl" ~o:lce lD5 l""-~ tru vez : t dí~ 1a merrtir0 ni nin- lisis de la verdad. A lo menos es indispensable, par lo pronto,
- nl Todopoderoso -amo es e " ' .''' . esta blecer f larameute en qué ccnsis l!! Ja esencia de la 1111!111.Írtl
c;omrana • ·. 1•.1~-,,;•'-· del bien de la virtud :Y <le
¡;uno que e;te lllG """t'' v · • "'
- ~1 •· la a.e caer en y en que se distingue de la suposición.
Ja rida ", es r.tertami'nle una rai:i. UISUL~ma .
_,, ,_,,. ,_ menar l¬ IIltatum a. sm tentación_ a 'veces,
liln ~!L~a hWd ,a "' ""'u ' l 3. Se puede ercer en el primer momento que eJ \'BSt'O du-
•• ~-• -hnn1brP h.Clllrado decidirse a, q11<', sean ns
"' tnm' ei::no ll:!!I - 1 1 minió de. la lmaginaclén es semejan.te a1 de la mentira. No,
'lt
-
• r,. men ...~- 0 la> falsedades a que el curso e e
aw: fat etr ......... . a.> • · • . La Imaginación es elJJamarniento voluntario a la ccncépcién
h. Tiila J11111ln conducirle, mngnna turbe la se~enirlad de
:J,.U.U.
•S m¡ t..~ ,tltQt.'CTRC';['lll\A
-¡~•
~·~c.•-~' • "•IF:' R .~ LA .L..\MJ?{IRA DE LA '1l!IID•\D
bu!u. . e.~ta fue 1Joo hii.i¡tlUl.te exten-
-
elide o donds se ha tolerado -indica UI• envilecimiento especial.
te de la pin!·.trn - uo se p.ropone otra r·l n l'¡t\e el
-1 ¡>riiliera ~ 1-
· ~ _la~ .~·tes. A no obedecer a alguna otra causa pear, la
dida: qu~ cl ar d r el concrari(l µroctirll 1·epresentar los
mtli:acio?' de una Ial la, genenal, de probiilatl sincera no se
d e_ en""anar.
" • ruan
•
0 W Ol.IJlO puede ser posrible Por l\Jeru-
dJlriclan ·
e:'i>lioa s1110 por nuestro conocimiento de la exLraiia. separa-
ob1etc,; •'.OD ~la · lea de una montaña o de 'Q.Ua roca, y QÓn que 1lur11nte siglos eJtlste entre los arles } los otros astm-
lo di:~:!IJ uar u . lab .
P. • - - ~ ~---'bir la forma. Pero las pa,u. 1-a!' son msu- tos del espíritu humano Esta auseneaa de conciencia en
aormen:m P.UI .....,,..., . [ ,. I)
fioentes: di""lº-
•-
=·-···~ -' .,-
'-- - ~....,-"_ -e- din-n: ··Tal ara su =a
.
. es-
J • r , un;;ta•o el calor y carne las y,a labras no
pues re}!!'OO DCJJ'lñ e- ,, Es .i'
l'.Qélas Ias {aoµl tades que tienen zelación con el arte, ai;l\!más
de J1abell ¡:¡erji1dicatlb a las arte5 mismas, ha hecho también
• n•ntll '.l di_.au; "Tal era su. color' . te p1·0te41- ele· cierta manera íúti.l el testimonio que .de otm medo huhíe-
l1¡¡_<Jm:il1Tl.. :--- • - -
·• _...;..,,;,, hasta que la esGeilll entera parece que existe. can podido Ilevar sobre el earácter de las naciones respecdvas
w~m...,...~- . . ~-
?umll .,n;<Inam en es~ exis.tenC:~ aparente, ""'
grnn [!lata' en las cuales habrlan sido cultrvn.clas. Sin te1;rer esto Cll
la oomunicacióu de un acto de Ia :unag¡:naCltll'\, .no es tilla ctlerd:~, resaltarla sdrpretuleute q,ue una nación tan 11otabll!
mdllira. La nrenbra no poilni consistir más que en ·1 a afir- por su '.l!eclit.11d y su fe como ln J1aeión inglesa, admita en
ma06n de su e:llirencia Icosa que ni por un momento sucede i;u arqµilectura más ast1.u:ia, iüsimulo y falsedad que ningw1a
;e cree) o en. la t.ili.a reprochicción de las Iíneas y de los otal de nues¡;ro tien1po o ilcl pasado. E.-:te <lisim.ulo y fil \sedad
0 no han sido admitidos sino pov i.rtefle1'ión, _pero el resultad.o
l;ll!ars ~ eW>,. a decir vnrdad, sucerle can b:ecµencia des-
no es menos ~a lal Jlar¡¡ el ru:tl! y pat'll los que lo lia.D 'Practi-
!'Taci.:ülamenre) ~otnd que esta ejecución despreciable es una
" a . ....• cado. No ha sido otra lo causa de los per..c:an~s ll.C&ecidos en
mpertheri¡i l!ll .all!II!o ;!! apreznna a la semei anza ; to a pm-
cada gran ocasiOn. de acti.vítlad arquitectóuica; estas nie2!¡'Ui-
tura qUE llega a gfJ! grailo de realidad aparente se envilece
1)as faltas de J10J;1tadez artistica bastan a el>.-p!i¡¡llilos. Es dar
?OJ' ~ mirow hecho. Ele in:istido lo sufinien le sobre esto
el p'l·imer paso y no el tr1e.11or bacía la grandeza el supri-
l!D 011tl lu~a:. mirlas; el prin1e10, l)_Ovq1,1e eiitá lau clara y tan fáciltaente
a nuestra mano. Ta 1 vez no ]lOdamos rccomm:idªr Wlll ll!:!LW-
5. lZ!. ';"t11!1K=1'.ln"S ¿,, l!i verdad que deshonren la poesía y tectura _b1,1ena, o bella ~u ~igrnaj.; pero _podemos ~!& u.ua
18 piolura ntnn en 511 mayor parte limitadas a le eslticta ti.rqt\.tl.e.g,Ju.l.'a l1oncada. Se puede, perdonar .a la J.)O~. SI)
e¡~ lle sus il.&"llnll1f.. En arquitecturu
hny otra violoc.i6n tl~bili4~<l, a la u lilich~cl su lni¡ierio. pero la niµqtftn.da_tl o la
pu-Jblr d'l la Vl!Jt!.1.f. peril mUI 1' <ll!sprt'.'l'Íllli1e la cometlda
•
:men1.irl1 no ~eheu encoultar más que desprecio.
oon. Ll naturaleza 1fe I°' ml'ltl:'riall!!i o ¡,¡ (!llsto do ln,1l\11jo,
enándo ~ ~ dinmulli dn modo prisiti\'omPnlf f<1l~1J. !!:s 1111 6. Las ru@-tÜJ:as arqui.tectúiücas ~e ~!).e,n _eslndiar, de Wl
rritttPn t'1I l.!.!!!. lli !!W!R!lOO ifl' líl p.1l11hrn; il' UfflU:.• \'ltUf!l"l'IJJ' nwtlo goneraL de~d.e ¡;;es p11n~os 1lt> vista: . •
•
l.into couw e ¡,¡¡lq1ni::r n1ro d1!lilu meral, PS i11<lluno n 111 vr:r.
• •
kft 1111¡tr1lC-i'i1111 d,. lai llflri(1111, J~n do11<lr: hr1 indo 1;1Xlt•ll-
•
'f" La sugestión ue tl.WI Jufraestr1.1clura o sostr.n d.istiuto
57
'ífi
-
U< g¡:Tr. t ..\:>U'AR.'5 11r. U A!!QU1!1'RC1.'1JRA
r..A J.ÁMl'Al,\A o¡¡ .L;i V:Él,WAI>
del ~¡jCO, C'QIDD Jos renJlcuJOS de las bóvedas de ~tilo
-
gótica ¡e_rcfilrie.
j es 'falso el confiar toda la s0lirle7i a las arisLaS o nl!rvius v
reducir' la bóveda intenncdia a una simple cáscara, Un ob-
.? La r<inttu:a de las superficies COJ~ el objeto t.le imitar
otros rua~ales que aquellos tle que están formadas 1:eal- servador inteligente adivinará el procedimiento ele construc-
ción la .primera v;(!7. que la vaa , Ía belleza ele sus <idprno~
mente r:omo .-..J pintar de mármol las maderas) o la repre- 1
WlllROOl1 falsa .W adornos esrulridos sobre estas superficies. queda realzada a sus ojos si 11caS11.tl y signen .las pcine1pams
lineas de resistencia. eero, si esta bóveda i1 ttennetlia e~
31 !:! 1?1!1!1foo íle adOJ'IlJ):< modelados o hechos a máquina,.
hecha ele madera en 1 ngBl' de piedre y hlanc¡ueada pnra con-
Luego puei.le tlE'cirre, de una manera _general. que la arqui,
fundirse con el restp; aei;á una ~perchettía lmperrlonable.
U!Cttrra sera
mas .nohle manto más eli(e todos estos J)l"OCC·
Una mixtificacién .se produce, no obstante. :necesarimnenté
Wmientas ia15Ds. Enn:e éstll•. 'sin embargo, existen ciertas es-
en Ja arquitoetura gótica. La que se relaciona, uo con los
peae; l]ll!!, giana:; .i SIJ uso frecuente o a otras circimstanoias,
punto; de ap'oyo, sino cou los mCIUOS de apoyarse. La rompa-
re han despojado di' este carácter de falsedad, has la el pun lo ración de sus cohmraas y de ~5 nervios con troncos V ramas.
ce floil"!Ul'. admiillile:. El Úl)raQo no es, por ejemplo. un enga- q lle ha originado U\.Ut<I cidic:Ul:a teoría. suscita en el espirrtu
fu> Bl arqni.tecrura. porque no lo toma nadie por oro. Pero del l!spectado .r el sentím lento ele una infn1e;¡tructi1ra corres-
en añcbrer!a si In es, parque puede confundirse; debe ser 'pondleure. OS decir. de una ÍU!!)'ZS uhroffi GoflSIB11te desde
wrui~!lada por sa razón. Surgen, pues, al aplicar las 'reglas la TaÍ7. hasta las ramas. y de una elasticid11d trausmi,U1l11
~e lo verdadero, no pocas excepciones v no pocas. sutillda- hacia !(> ah» suficiente para sostener las partes tamlficadas
~~oua"'ucia. Examinémosl11s todo L; brevemen te que 1'le admite dtlícilmente la idea de una -pesad.a bóveda soste-
nirla 11or haces tlc de'lgatl.as co1Ul1111:1as et ne tienen tendencia
no ya al a plasmn 1ierüo, sino a la di'llocaci6n y a la destruc-
i. j :-111':-""n·'-~ oc.
:J:: OJ!"STJ1.Ucetm.;, Las lie limitado al ción, sobre. todo cna.nd(rlos pi la res. si estuvifsen 11.1uy aban-
de lllll!IJOonal
una especie de sostén ilisLÍl.tt~ del ver- donados, .Iuesen débiles para >\I carga y e-.:tuvutran e:\.-te.r,íol'-
• r .El a:qu11r..-1u no «! halla obligt1do 11 hacernos ver Ja ml!lJ te arco1Jo1al:elados, como en el ábside de B:ea;uYais )' en
m r.-.estna:tnra llT(tUlf.....,,., .1 l
,,,...nuca, ' • 110 uP ll"UIOS, j'lOt la ruo nue- otras consllix~cione~ pawcidas dllé un gótico más atre,riclo. 'Esto
jl'l'!lr15: d !! 'IUE 11"3 1 lt "l es, pues, un delicado caso de cc¡ncieucifl, a cnva soluciórt 11~ga~
la ..r. ~ 001 e, como no nos lj1JPjAJ11c1~ de que
lillfl!:nltlff crt•nnm' d."'1 cu~·rpn uurnano , remos 1ínicamcrtte consit!e1•ancln que euando ul espú'llu esta
11.el _, no~ oc:ulten el 1
1) f'!(I <1!' '!11 OCiolb.tlllÚJ. r.1 J'f· ,• • l l ,
i:.t l'f 1 1t 111 n111r. flo 1 e beta ª'IUtll
eu1papatlo de 111 verclndo:rll nllllll"alem de. ~as cosas bo.s.ta ~
Wlil mt la
A
.l 1 .._.
. r~ .r., la .rmnre~ón que nos prad\.lce.tl de ser
na~~ .,.. ,- . - . -
'
qf IJ$ !1\111":>
· .r.~ ""~~a ¡11miJJosa ,. c;1hua de montanas; el
una 5Up!.'ri ,,2e pesau , .1 _
l!Dt:anlO que· no; can"-lt el cielo nace de que le ¡:onsuleramos
mmo una bóT~ azulada. )T1is en los _dos casos sabemos
'··;;uunentl! que 511c.ei[e todo lo ronlrdJ'lo; qne la nube es
8. Con los disimulos engañosos de la infraestructura deben
o un ¡¡m(Jlltw.)áJJÚ.ento d e corps ·'-
per.=.
una niebla 1liimtlda . .
w: nieve
calificarse, a Ul(g~e ue naturaleza más reprochahle aún, el
~ que ,,1 oclo es un aliL~ Sin fon(lo. 'El.1. esto no .hay ~~n- uso. de falsas atribuciones, 1a introducción de partes que ¡le-
fu3. v en cambio hay ene8Jl~ notables en 1a unpresion. berian fenel;. o r,J.."e pretenden tener 1ft¡ fin que no poseen.
¡¿
1'or tanlu, n .. entrltl que '\'ealllO> piedras y junturas, rnien- Se .enoontl.&an ejemplos muy e.'ltendinos de esto en la Iorma
tta.o rw •eaJD<* engañatlos respacro a los pntltos il:e apoyo en de botareles de estilo gótico terciario. L¡, utilidad 112 este
tm trozo de :uquitectura. padrmos alollar- más bien que re- trozo cqnsiste, naturalmente, ·!!11. 1.nln6nlbili el apoyo de un
c:h•r.tr: !do artificb deslinai!o; a hacernos. presentir iibr? eu soporte a 1 otro cuando el plan del edificio hac~.necesarie
bi> wlronna• y vidn t?IJ 511s ramas. El disimu lo <le Ios bota- o deseable que las masas soportailas estén .repartidas eu gru-
reles tsm¡lOtO ;~ reptw'lsible en tanlo que los pilares no pos: la· uec~da~ de este genero nace casi siempre de la
?aD .incuficien;es para su use, El !!SpeCtador JlO tiene pOr ~er1e de c~las intermedias o llaves laterales entre las lJ!ilre-
lo genmtl. DÍrl;.."illlll id;:a del peso de una bóveda y la,s precau- des del ábside y 4131 coro y los soportes que las n1a.nrienen.
tl!!llEf tnmadaf ~ ('0535 de las que no comprende la nece- La disposición natural, sana y bella es la de 'una barra de
!fldad Ill Ja >:daptar.íán. :-io e=, puee- engañar ocultar Jos me- pie<l:a de) áspera J!P.niliente sostenida l?ºr un arco del tl.lID
dio; d!: eo¡c te de. un peso euando DD se suele uno dar euem.a el tm1peno está colocado lo más lejos posible ~el la<l()' llajo.
tle !c'Ste pe;v, r !!! dejar, por tanto, que se -vei\ tan sólo el Y que va a morir en j¡1 vertii;al del ~aporte exto.rlor: como
apo¡t• ·nfioenb.> para cl peso que ;e calcula. Las columnas es nattu-al, este ~aporte llO es cuadrado: es más bien un
..Oflll~lan 4'1Íli Jo que r~ il'S supone, ; !!I sistema apoyo oe lro.7.o de· pated. ajustada en ángulos r!?clDs a los mni:os ;;os~
'!l!J~"ml!DtariO no se ~elll'. corno caso rk co11rirnri11, mostrer; 1'lidos y coronada en caso V.e nectes\dad por un pi.námtlo para
o:rno no se mue tran en UIHI fonlhi humana los órganos darle, si es lli!Cf!SBlÜo, un _pm10 más considera ble, Esta dispo-
~tm para Iuw:u.1111'$ i11viliLl"S. Mas .1 Ias conrliciones sición está exquisit'lllllen1e pii~~ta ·~ prácl.lcá. e11 el coro de
~ ~~enc..a se ~. la vr,rdad y ul "entim1<ll1IQ exigen Beauva.is. En el 1'tll.imo período del estilo góticQ el piuáculu
que uuoda •·:U tamb:t?t nn lO'i mu~rtUf rle r1poy<>. Na1]11 p!!or. se tenrvierle rººº a poeo C11 un cleruei1to deconrtivo, y se
e·~;;- ~1 pur.ru d1· or1;111 d1•l gu.nu ~ •l!' In 1·i111tü·nciu, q 111.r los l•m.ploa en todas partes, por su hl!!le.za propia. A estri ~' l1n)-
.;pt.?os 1•.tt:.nlJJD!'nte ~-;c1~tm, 111&p•·n,111nt•i; en el nir1• y n1r1)s objeCAÓl1' 1is ta.11 log(liruo construi.r ttn pináeülo po1· !ni belle1.a.
comli> ntrta torre. Pc:ro el bot.a1·11l se con"ivtió del n1isn10 ;mudo
wl:+rirlugim. Y hnnc.hruul~i; pé!TC(:i•l11c ll11p1• rtíllru 1;1111 j\JS·
L::lll pt•C t"n~ utc.•rv1> lit dh¡l{J 11:il111 1l1, 1r,~ ¡irl11t 1 pul1·s so· 61
6ó
W sI&O' r...\.MFA!t."' .nr: L\. .\J\"QtrreliC'.l'uitA '
l:<A UA;\&ARA DE LA VEl\l}Al)
• • r llllt en1p1eado
d.cs¡>ulis donde no lo que seria .a un cuerpo vivo y [µérJ:e su sombra. Los vientos
en un ..lemento
. • Uecora 'o,
U .
r últiJJW baio . para
fonuas que no sérv1a11 mismos que silban entre sus redes son. a los ecos sonoros
era :iere;ilOO· l ~ nn sim-•e 1.mcuJo, 1:10 eutre el soporte de las antigues murallas lo (Il:le a la "VOZ humana 'e L gemlilo
nBiiü·· -se convtrllO
• en la n.~retl
'.!"' y la cuna
• · · lo deco-
u'el pinucu de los. espectros,
,. la p.red.. ruio znrre ,- • 1 h. ~ :tl
. • ·· . • illl un punto que 110 tu 1er<1 poru o
r;rtJ.\'O, HJJ1'!TldO>e aSJ {I 1) 9. Tal ver. la fuente más fecunda de E¡,Sl;it gé.nerO de df•dt-
re;i,-trr ¡; un 1;mpuje. El ejemplo mas flagr'dn~ e cstet ª:r·
baris Ji' U1' ..-o ll!e acuerdo (aunque se wi en par e en dencia contra el cuál d.ebl'!IIlOS preve.limos en esta época nace
~: c.rur~~ños de les P¡¡is~ Bitjos) se encue~tra en la l'>ajo "uua forma ·~wm1a". de 'la que no es f,icil detenninnr
linlBrna a~ s.üut-Ouen (Rouen s , e11 t~ cual. el botar ~ c~do las leyes prcpias y Los limi tes, Quiere hablar del uso del hie-
~'Q.La défuúci6n dal arte· de la -arquitectnra que dimos en
y de CUl"\1!. omfulaaa :rl!?ull.a una ,"'aXllla clfi sauce destinada
a resistir ~~. Los pínatul05 enormes y stmt;J.tosamer,.te cll primer capitulo es .independren te qe los materiales cm-
pleados, J,1Rbientlc) sido, 110¡: tanto, practicada esta arte hasta
decCIJ'lUlo; no tjsen ~auna IDW6n sino levantarse alrede-
tlar de Ja torre centtal =º cuatro servidores desocu1Jados
comienzos 'del siglo XIX en arcilla, en piedra y en. madera.
resulta que 1!1 sentido de la pl'oporclón 7 las leyes de la
que son.'! romo $Cpertesheraldi~ de los qu~la tone eentt:el
consh-ucci6n estáll basailos. el uno por entero ;¡- el "Otro en
que. JID ,1endo mas que un cesto no necesita de bota:rele~)
gran J>Orte•. sob1-e las necesldades nacirl!li para el empleo de
s la hueca c:orona. En n-alidad no CQillJZCO nada lllJÍ s sor-
prondenle ni má- insensato que 1115 alahi=as protlif,.raclas· a
estos material~. ;r tiue el uso, en pa11te o llll totlo, de una
nnnazou metálica seria, poi· lo tauro, conSirlerads c01no des-
ista. Jintu.rna; e; uno de lo; trozo~ de esiilo gótico más despi;e-
cartada de los ~1eroi; pñm:1pios del arte. De una m,'Ull!ra
CI.abll!" de Europa; su oommentac1ón flamígera es del último abs.Lmeta 1.111 .se concibe :por. qué C"l hierro no se podría wrplear
gr!!® y del !l'lá3 dn:a1lente; ro plan todo entero y su decorado l'IUl hien coruo la Jt1.ru:l.era, y está cer.cano el mOIDenlo en el
n!Cl11'rllau la orn:imentación en caramelo de la confitoría com- 'C\lal se fol'niule un ltUevo cétligo ele leyes arquítec;lÓ11icaS.
pt1cada.. y uo llll!rl'I:" ninguna au~ucir.in. ~o hay a penas una 11daptáudose a la eonstrucoián tnetñlica. Peiro ttroo qi:w lll l,!!JJ-
dt: i:-sa¡ S!!r!mitl y magnífica,, <:Qu;trurciones drl gó'li.co pri- tlencia de. utiestrQs ~stos actuales v de nuestros rei;ueroos
ml!no qtm UQ fuera en ~1 trnnliClllW J~lo~ üenrpos adelgawdu es la tle Limitar la idea de Ja nrqu.iiectul'll. al tl'ahajo no met<i-
y ccn ~l.!ad~ l1A ni (l)n\·rrtu'l>t' en loe esqueletos que si a veces, lico, y ílo falto tazón1 Si la arquitectura es la primera de
¡:uando 01~ lio,~1 >Jgtll?l'I la infn11':.Ln1ctur.1 rle las masas em- las er(~s que se pc1fccciona. preceder.Lsiempre, cQ'lno precedió
gumn~ ofnii;cn t\ llller~i de: ju redr:e1ll;1 hhruS"a Je una hoja ei1 sus coll1ilm7.0S. eR toda 1Jaciqu primillva. a 1a rosesión 1le
a b r.ilb 11C h.! s¡¡pnnudn su 6ulisbi11(:1a verde, en la m<tyorlu la ci<'ncia nec.csariu "Pflr<I oht<!l'.l<u· d hiern.>. Su pni.ó1"1"il apa·
d!! la:. ~ no prfW1U:rn toh'a roi;a 1¡1.11) norvios tnr1:JCltls y l'ici611 y s11s pri1neras J.eves dchen depender 1ll!l cn1plco tle
.. rrugnd°' tCJIDll fanttnuflh <:!Ul<'Tmtrus 11 t1.t¡n11 r;a1·it·11turni: gro 111ntod11los n.cccsihles 11or su ca11Li<l.ad y Sll colot~aulóu ~obi.-e
•• ik. ca¡,15 qllt' ru~rc¡n, Su1I u In \¡1lpl11tl1•n1 rirq1111111't11r11 (13
62
- -
LA l.ÁI>IPAl\A DE LA vannxn
hierro labrado en la torre central, Si no queremcs, pw tanto,
caer en el viejo soíisma de los granos y el mrrntóri de 1ri~
1 nos es .nccssario enconímz una regla 'que nos ccnsieuta il~tP·
nernos en alguna l)arte. La regla es que los-metales se pueden
emplear como cemento a arlanu1sa )' 110 como .sostrn. Lo•
otros cementas son a menudo tan resístemcs. que se podría
n1l\.> fácilmente romper las piedras que separarlas, y sin 1)ér-
der por esto su carácter- de· arquitectura el .muro se convierte
en una .masa sélidn: no se explica, desde luego, ¡)QJ" qué
cuando una naciéu, ha adquirido el conncimlenro y la prac-
~ 0 no este punto. es. -abso1utament;e
10. Q-'1B ~ ~i:i-, lacionada con tas proporcionr.s, las tica dcl 'hierro, no le utiliza en tallos o cuñas en lugat' dcl
cierto que """' iaee -i:'. cQ'I1St:rocción. del .nredo que cemente para dar Ja misma o mayor t11m.a .de ndherencía
:l ODI!$. la dearraoim o 1. e . sin que se separe en 'lo más .mínimo de los tipos y del modeJ.o
' •m1ros: am=tumbradus a obra!'. y jll%gll', depe~1cle· de la pre-
de arquitectura hasta entonces estab:lec.iao. La única varia-
~in di! m11teriiúl".s ídéntiro!;~ r.00110 me siento personal- ción que habrá en su empleo desde el punto de vista de la
_,......,ª...,,e
a la influencia Je estos pre-
>UJ)Oo
mtme ~
• •
•
= ~ .. ~·-
.r,
· ·
les ílcontecera ID mismo a rnrs J e et ore s '
belleza, depende de la colocácíón de estos tallos o Ligaduras
llJl~IDS r '~.~:U:~
•e me pernn;:rr¡¡ ...., • ~~ ,:up~•er
,..,.
que la verdirdera arquitec-
•
de metal en el cuerpo del muro sobre su superficie exterior.
ó
wduz: no cuiuice nada di:' la canudad ni de 111 [~&za del (!~ arlorn.l) por' me(Ü'c¡ de· la arquitecturn, y es que por poco
entn etmt~O. pero concibo! geueralmen te las piedras del. deseable que sea el ver 'construcciones llevarlas a CTJbo con
::00 CIJil~sepa-r.iíile;;:Sll aprecio dt> la habilidad del -~rqm- los juegos da paciencia de los chinos, la 1.liJ'ici 1 l tad misma
f!Cto 5e 'f!?grü. pues. en gran -parte.. sobre la .concepcron il.e de 'ellos será siempre un obstáculo para su. 1le[inicilm No es
e;1a couchción r en las dificuJtades que an ella depencL.'\n. .necesarin presentar problemas de medo que el espectador
:ie. es ~J# l.uWJ m5~ sincero. Y el estilo de la arquitectura tenga qua reconocer que ninguna :piedra.. p{illllipal pedrla es-
-·~, •:n 1u:or .,- en ciencia usando sólo 1B piedra y la arga- tar colocada en una posición •1we le Inera Imposihle guardar,
~c.u..u .... •
masa nara amseguir el ~jcrr resultado posible son la fuerza aunque a veces LU1. cni,,."lilll aqtú o al!ií, en las 't>a-rte~ h'islgnl-
• • ficantes, puede sc.noi.r 11am llamar la atención sobre la alba.-
de la una T la re-:Lctenria lie la otra, J a veces conviene
"3r:ófimr una gracia o r:mrlesar una debilidad mejor que itilaria hnsta totn<111Ja i:n:teresanle y aun paril r1.1r una 1mcan·
t.atlora idea 1le cierto pot!Jw sobreuatu.l·ill en el arqrutocto. 011
ct..onder !! !a UJlll :;- disimular ;i la otra por medios i·ayanos
lindo ejemplo de eslo es Lo qu~. sucede (.(JJ]. el diiiteJ di! la
et (.¡ falta di: p.~d. puerta latei:al Je la r~ leilrál 1.fo l'i·a¡o, l!n cl que uo &<!. pirede
C-ut ~ ClJSDdo en ciertas partes del edillií10 muy
r;oru¡n·e:u<le.r el sostén de aquellas pieJras vísih1emertbl .epa-
bellas y perf;;c:as. y tan dcliadas y ligeras cQIDo se pudieran :rad!ls y allernativame11 te de n1;irmal y ile .(Jfita si na se "ª
~. ,;u mntrua:ión y ~~riJ.atlestán de cierta manera prin1eto su corle transversal e ·ir1terior. é'ada bloque conserY!l
~ ::d ~ple<> del hierro, 110 lo ct)n<lenanios con 1nlerionnen1e una especie de engrm~uie que Jo s11jP.ta de mouo
1.al & qui' se haua tc.n éJ 1000 .lo que pudiera hacerse con una lnvisihle l)ara el e·spe.ctado1·
hutM urg:a.in;u¡; ¡ una 11\lcn;, nl11aiíil1·r:Ía. '{ con i.Lil que la
mnfian1.a en l.11 ~ dl)l hierro l1.0 en 1 rañe ninguna ne¡;¡\i- l.~. A.u.tes rle aba11don<u· el tenJn de las falsedndt'~ clB carts-
gelül! en el trllba¡o. Suc~e con esta auton:1.;icim1 como 1:011 l.t11cci6JJ. r¡uisier•t l"l'r,ortln.r ¡¡l arr¡u i l!!cto •L:Ul' puedo s11po11cr
lll d1>l uso d~l nltohol el h~mhtú lo ¡11w1l1• u~rll' ··rt caso de lunila y esirocl111 iüütt1111ct1lo los recursos de t-u arte, r¡u.e se
!!!tl'CD!lelli1d, fnll 1.11 ¡1111a nlim!!J1lun<- allli 1ga a lR m,¡is a ltn expres:iótt 1le granJe7.ll Y <le snhitlutla
so1uolítÍ11dose ¡¡ ciPr{as t'1'sldrcionés volu11HH'Jtlllle.t1Ie ronse\1-
(17
~ !'!"I.n; t..l\UJU-ti 1)& U \nQUl"l'F.CTURA
:J::.
~
~dt!S.
tra w t!ificUlta•le<
;no.lo vollJlllill"IO '
qu~ la Absoluta
((JJl!O Jl'
Pot&u:ia Divina
fin de lucha. Estas
.,.i biai se .. ncuen.tra11 baro la foi;m~ de leyes f
Jl;a._ .........
•
La T,l\.lo'l"J>AM D'& LA VIDlllAI)
._.3.,. ·1 m1;m11 cieTta .noble2a . hara un mal papel, ¡ 17 .. ~a pintura, sin embargo, no es lo 1~uicél con que pué-
=~
h:t .u!JtUlTJUL' ~ den dlS:u::'11.ilarse. o mejor aún, simularse les materiales, como
no o[-rñ i?T'll"emt!lrtll·
pero _...,,,.¡; ; en~ de fallff' de rarader sagrado ni de hemos VllilO, el o~i.1l~lQS no es una mala acción. El blanqueo
~" • ..,,........-º ..... . . -
.fealdad ll!)tahlr ". IJU?lihle 'eII Ja~1glcs1as de aldea, JlOr sen- J)or la cal, por CJemplo, que puede con .Irecuencia rechazarse
ól1:> W!f.eD:Icnte c:oU$trmtlas que estén. ruando .n_o se arl- (n~ siempre) como 1.lD medio de disimulo, no puede ser eom-
0 . ..;,,;., ..- la .,,,edra. la .madera. y en las ventanas bando corno una falsedad, puesto que 'le ~enta ccme lo
mll2 en e11ª :¡ u .... "t--- .- . -
mireja.W ~ blancos ndrúP. Pero los mUl'OS bauatlo.s· de es- que es, y no in tanta el blanqueador 11l'innar nada sobre el
lllt l!rillalr..e. Ios 1echo:; 1Janss decorados ran ventiladores, material que 1lCulta. El dorado, a tlmseawncif,T de sn fre-
~'O~ bordeadas di! amnrillt.J -:-~adornadas con múlti- cuen le E>.mplca, ha Ilégado también a ser inocente v se le toma
~e" !:rOOto' -de cristal mate. la n1aaera dorada a bronceada, por lo que, es: un velo Y' nada más. Es. en cierto modo, per-
!\extremo:
~ de lo; pi.'11nd!I. ID> horribles· colines y cortinai11s. los altqs m:i tido. No- digo que see Imenn; es uno de l()S' prqcedimlentos
<le mngnilicenai¡¡ ele los que más se ha abusado, y dudo que.
baí'Jco; y el enrejado del alear, las Ilamas de
metal Bu·min!?ham. T sobre tndo el ..-arde Y el amarillo nan- <le cnalquier- modo que lo usemos, ]iuedp contrarrestar (pot
~o de la: imiun:innP.S de mátmol: la falsedad, f¡n suma, t ser tan Inecuerne su \'1stn y l,¡¡ -suposicién de Sil Ialsedad) Ja
' pértlicln tle placer experimentada en la contemplación de
-: la m·•ntí.ra, za quiBne< IB gl!SlaJl estas cosas? cQLriénes las
todo qbjero de"\'.crdailero oro: crea qµe í!J 01'0 ha sido desri-
d•-•Rnllm? ,Qiúen las :hace? !\o he encontrado iamás a nadie
natln a no sel' visto sino I'Bl'll vez y a ser admirado tomo une
•quien le e¡µ-ada~ ::mfdenrmimie. aunqué he vis1Q gen-
tosa preciosa, y desearía a ~eces que todo lo que brilla fuese
te{que illi ¡~aban ruestio~ ;.ewndarias.Y 1al vez: lo sean
oro o que ~o -brillase lo que u:o lq fuera. La nrlsma Naturaleza
para Is f!'h,~cio t ;I bien hav muchos a 'luiene.~, como a mi,
no se libra de estas simllirudes. pero ella ba recurrido 'para
Ptm ob¡e~os '!i !:Ot\ un l'N1]a11~ro o!>l't.<itulo para el reposo
estos efectos a la luir; yp, ~or .mi 11ru•Le, profeso un cariño muy
df!l -.:spiritU y \!,el alma, 11!pOSO que debe Jll'"lr.eder a las ·p°l'IÍC-
grande aJ arte piadoso de otros tiempos para separarmn de
ñtz de la de't'oci{1n1, pero 1w asi p~ro l;i l'irme;r,a general $HS Iondos 1lesl:nmlirantes v de sus radiantes nimbos, S6lo
dr miesllo j¡¡icí<> r rk r111esltos S{!l1bIIU(:lllOS. Ivliral'TlOS segu· debe usarse con res¡ietll para a·presar la magnificencia o la
ramellli!, no ya mi tol~rantúl. sine. con cariño. las fOnrlas snrrlidad, 110 por Yarlidad 'J'l./,rliga O para la pinmra 1le insig-
d1.: <ata<matcrinles que acmtumbramos a m;oaiar a 111lBSU10 nias. N11 es éste el momento ile l ratar tle su utilldad ni de
r.ol•o. prro etlrirfm~ ¡rrc.11ar.1do~ 'f)llrU llt sruhrir o rép.rendar su eolor, Aqul inyestigru:nos tan ~6\o lo que es licitn. uo lo
li¡ ~ la t.ajt'l.i ) el di: írn1 •'ll ot.rot g1h1eros fle d••· f!U<' es 1111 desear lli1 cuanto a otros {li&fraqis di' la ruperilcie.
t<-~. ri tomin!Jb.em~ i!c.~í1gnrar ,¡,. m11nn111 tar1 iuron- I¡:¡les rn11'\0 el pol VO de lapizl{tzuli o Ja de DlQSlltCO
inU\BCÍÓll
"'r-:il'r.~ los ubje'4> r¡nr. JlCrll!nr<en al mí1s ¡r,JPJ'IHIP tlP todos on pied ras ele colc11·. 110 ha.y ape1'1as necesidad de hall1nr E1
ltr. t.itltDf. pr1nci11io se 11pUtttró i¡¡uehnrníe n todos todn slD1ulación es
75
74
Ll.:i si:cu:. L.t,~AIV.S lIB -W AR(¡UI'l'EC1"tl11.5
•
LA Ll\J\llPAl!A llE LA. ·Vfil\D,'J)
• .L¡ "- ~ •. do al!'Quu.ios• Los verdaderos colores da traba jo manual, por el de molde o di? J:llliq uina, o a lil que do
rua; estau e lid}~ Slll - .•
_ : fura <OD Jo; de la piedra natural, y 111 usiera verlos- un modo general calilicaremos de menara de producci6n.
t. a. ..,cqu.let -
amnl~·l"" «rr>\t!ChOSH1lleDle.1'ocl a~ 1 !IS vanC. d a des ae . Dos razo~CS< de igual importancia .militan C-Ollb¡l esta prác-
s:m1¡11i.' ~...,.irauvo ,... - •
matice> i!e;rlr el amm:illo páliJo hasta el p1u-p11ra, _p~anclo tica: la pnrnera, que todo U.'ll.lJajo a mdlde o a máquina es
.. 1 ~iadD;. el rojo y al obscuro, e$Íl1 por completo: a malo comq trabai9; la segunda, que es innoble. Hablaré 1Jrl-
JIOI'" "'
!Illesrril di;¡p®aón; pod.emQS oht.euer LatnutC!ll t. •
tec) os ¡·~S· untos
• n_1eí'o de su mala calidad, que no es una razón suíicíeme por
a.tl ,wi}e v del ~ÍS; rou érlo< V el hlanco pITTO, ¿qUt' armo- ¡1 sola para no emplearle .si no hubiera otra. Peto 'su falsedad,
:;Jo8$ !!O pod.renro; tt..'lli:zar:' De piedras teñi.das 1'?r tonos tJj.
n'UlllSll!Uc>Jm a m3 parecer, es susceptible de. J.etenninar el que
, eisw ha<> ana ..-ariedad ifuujtarl.a de espí!ClP-5. Donde los co- sea rechazado de una manera absolnta y sin.la menor reserva,
lore: ~ br.Jlantes ;e hicieran 11ecesario&, ~plearíanies el El decorado, .eomo be hecho notar con lirecuencia. tiene iloo:-
ndiio y et·GTO [lrot?gitlo por el vidrio eo mcsaiecs -género dti! oclgenes tl fuentes Al! attaeción 13er[l!~tamente distintas: la
L"aba¡o tan dura b!e =ºla piedra uillntla. ) de ~s cuales ~
lD!llIPo no arrebatará la ln:illantez-. Reserv!!}'tlo~ el tr1rba30
una, la belleza abstracta de sus Iormas, que nosotros supon-
dremos por un momento id"cnticas. ya sean debidas al trabajo
aet pmtw para la ;;.roriclaridad de la loggia y del Ju~ar apar- manilal. ya al mecánico; la otra, el sentimiento del trabajo
rado.. &le e; el fl!l'dadero y smrero .JJWdo de construir. Cuan- humano y del 15"stO de esfuerzo'r Podemos tal vez damos cuen-
ta de la real grrmdev.a ele esta 1.11 tima influencia. CjJDSÍtlerando
do estn no ~ ¡;ueila hacer. .no será deshonroso recnrrir a la
que no bay en ninguna hemlidum tle caalqulcr ruina un
J?lllUTa e;-¡¿>ma, necesario recordar q1.1e llegm.'ll un
_?:!'O e:;
ramito 1Ie hierbas que> no tengn una belleza bajo todós sus
trempo en el qiw esta ;;.y-..11!a >l' liara defectuosa ,} e1.,µi_¡inu-
aspectos casi igual, y en algunos otros inconmensurablemen-
men1Q morirá QllilO "1 JclfuL te supenior' a la de la escultura mas labrada y .acabada ele
V-afu rno:. el edif1c10 durablr< -qué d deshrrnlrmnte. Los ala•
sus piedras¡ que todo nuestro Interés 11or esta escul tura y
ilastm> tr.im¡iarenlei clt Snn J\finialo y los :mosaicos de San
toda nuestra emoción ante su riqueza es die2 veces :í.uleri.or
. -
!>LuQR ;>•cambian ~- tIJ.roa11 mil; vivos .., brlllanl'es carla vet.
q~ 1~ nhm1Lran los r;:1yoa del ...lbi1 !'• U'! la la.rd.,, mientras
a la mata de hierba cercana: que nuestro se.rtt±rniento d.l"
su delicadeza, mil veces menos dellcatlo; que nuestro senti-
r¡UE: 1M mati•-:e, de mieriru l"<1trdr.lle.; tt! Jl'svauecen. co1no .los miento de li.\1$ atractivos, un millén de veces menos admira-
di'l 11mi fri5 en l;.¡ .nuhc, aqucllos U!lllplos. cu ~·o ar.ni y púrpu- bles . . hastn q ue nos llega a resultar la obra del hombre
ra trillah::n en otro tiempo ¡.or ffiO:iJlla tlr. !ti~ !)J'onltJ.lll()VÍO~ pobre, torpe y trab11iosa. Su vertindero encanro depende de
de la r,rr-:r!t. r.cmww;(el1 har con G\I hl11u1:11ra rnardutn, rou10 que JlOdl.lln(\)ii üesculnúr en eUa 11n leslin1011io de ideas, ele
Ja Dil!Y" flll!' MJil l·•·I ida 111 \lJJ ~' c;p t.M;;l>.•i iil'~l\11ciones, de pruebes y 'P$Sd1a~. de conquistas \' tle gozosos
triunfos. Unn miracln P-\."}1e:rtá po<lxli leer en ella todo esto,
19. 3 La Óll:rn;, fnrn¡a ~.~ J;¡ fult•?rlrul nos pt'<lflll
1¡1.t1~ y suponíendo qut· .esio sea obscuro. lo odh·i.u11ri1 o n1pouJ.l'<I.
t1i11JUOo, t.f!IUUt¡jf l'TA.. «imo ,,._ m(l)rrlnr~, ¡,. ~uvtilu1.1611 °lt·l 79
7F:
i..;¡< ~rr: t..'-"JPA~'-"nE L.~AllQL'l'l'EC't'URA -,\
1ll
l
oa..¡¡t :P\)? az1:¡¡¡:s -
.
,Jj
En ~llti re,-u!C> el Talo~ ÜI' la eosa. car.no en ello r_asiJ.e el val.or
di:
1000
lo qUf' rnli.W;amDSde prPCJOSO. El precio de UJ1 día- l1 !
~e Iülte i1e la concepción del tiempo t~l'ISagrailil a su
dt4:DlirtnÜl!"filil ante= Je ser tallado. .E.~10 tiene 1111 valor in-
triu~ del c:ua! carece el di~manie, cuva bellei,1;1 neal no es
min'nl', bit?D mirada, que lti de un vidrio Así, pues, valién-
d~~ de ~-w <:ompttraoon. y ann snponiendo que el adorno
dt'hiuo al trabaio :m.anllal .1lQ se 1listtnjll¡j~a Jel <lehido al
lllf!!C".=CU lo 11u;· un d111manlllaaténtiro tle otro qnínnco. y que
el amo Jllldiera par un mmnento burlar. la .mirada del cons-
mn:\or. como el otro el exronen de un joyero, :! que góJo
un e!!mlliio atl?n!D pudiera d1ferencia:cleo, a pesar de todo, y
a.ri oomo nna muj~ elegante desileñarla llevar alhajas Ialsas,
UD 2!1lUit.éCtO qua ~ ~pete desdenaria CSWS JalSOS ad01'i'JoS.
Su emploo ~ una mentira tan solapada e inexcusuhle como
rnali:¡uiEI: otra: es serriroe de objetes que pretenden un valor
que no tien.m, que pretenden haber costado y ser lo que no
han ~rado fil son. Es. pues. una inrposti.J.J'a, una prueba de
mal rusto. una inton\"!'Iliencia )- W1 delito. Arrojadlas. Tprrl·
pedías, dPj.atl anle!: vacil?S su sitio sobre la pared, Nadie tiene
ztM•mnd <11! adamas en este mundo; pero a todos JilOS • es
!ll'tesaria la int..'"!riiliul. T odas bi~ bellas .hrvencrones que se
lllltigln;u·oo n11 valen una mentira Dejad vnestras paredes
~ h!oJS ..-: desnudas como una ta.lila o cnnstruídlas de barro
rooda y de paf.. Ju"T<'lda, pero nr1 lns ll11ye.sáis con mentiras,
Tal f.'S, P\IM. n\le;mJ Jr·y E("TleraL La considero más irupe-
roi."a quu tt.it!M Ias que he prohi.hirlo. l.U1~id1•rn estos ac LOS
Óf: fa! edad b más Yílr· .. y m¡Jt•tflun-:. ¡¡, u1·11an·1untaci6n llS
ClJQ 11r..temni'i y cam¡ll•,1am~ili.t indign.'.l sí 1?6 í11 Isa Siti em-
llllJ1].(J; n _1;es;ni- dti nU•"'llrll lr,y, hay nlf.(110ll' ('11'.f t>pt·icntps J'tilit·
11 01~ n ClttlA~ tllh>llinci .. ~ ¡>0r;¡it-11l1tf1!r y n '11 emplee.
R-0
•
LA l.AMP~ D.E U VEl\DAD
tob !~ desJt.> el .n1omet1Eo que nosotros la suponernos ui una verdadera alegría; (Il.!Oc1Jo se deben utilizar allí donde
.ru.t ~JI•: 1. ?llJIDO del l10mbre, no la Jcben10.> P.scu:lpir ellas pudieran pas;w por otra cosa de lo 111111 sOÍJ y de un
~-711IJ11ul! por a
• • . -'- aru. Iiicia
:'\o de!iemos l'Illple.ar t;i pieura . l cons-
val,pr más grande ~µe el que ellas li1U11u1; ) que, por último,
atrtnda
.mxquula. • ni a1iD~ de esntai de l co1 or tle 1a piedra
. :molde ·
JlO se pueden-asociar ;¡ una obra vr-rdadera porque seiria ver-
• " ·,~~<ar -nnr ella. como las molduras del patio gonzos_o encontrarlas mezeladas con ella.
o itUil ptI1111!r.i re- r.- • . •
uiterio:r &l P.;il.azzo '\'eo:hío, ~ Flcrcncia. que arrojan la Tales son los tres principales géneros de meutiras •n1e pue-
- T •- .. i"........i.n sobre todas las liarles restantes drl den eorromper la arqultecrura, Existen. además otnas Iozmas
~ "'2'tl!"DLCi JJi .. ~·-- • ... • • [
edIÍicio. En r.uanw a lo; ma1eriale; ch11;1Jles )' ~ usib es. como mr!~ su liks~ cantir.i h1s cuales la vigilancia d"fl .uu espirítu
, _....::n~ --' hierm ,. el l•ronre, podemos servrrnos de ellos ~ Y sencillo nos protegerá n1ejor qu.e una tegln l>ien defi.-
lJ a.JUJ..Ul• es .. •
zm.e;tro capricho. !EJJ!en1lo en cuenta que su valnr esta en n'idu. Como he111os vislo ¡nttes, ciertos géneros rl.e rl~epd®es
3 110 se extie11dcn si no a las l!IUOl!iones y a la.~ idéa~. Entre
~ al trohaja que ;e I~ lw consegradc y en la n1e~da
,,11 q1!I! ell17: se afu:man y Jl11."'e111S11 netamente como salidos t'.slas las hay de 1111 empleo noble, como .la ele- que h@10s lTa-
lndo ülltes de ab(J).:a· la a pwicncia arborescente Je sobcrllio5
¡:fe mo1dc
Afm.-a !ñ;?n. no ha l':aiiidc causa .más activa, para el anvi- ue:rvios Jnterales gótic.os. Faro en la n1ayor parte de 'lo:; casos
.leo=!!IIW Je nuestm i;u:-w natural por la belleza que el uso lti cantidad de destreza 'Y de simulnc.ióo su~le' $l!I" tal. que
com'..anw de lt6 ,.~ de hierro, Las ordinarias obras en 1•el1ajf¡ el estilo en el que l)l'ev.alezc.n E!l• 'C111111dad conSlilerable.
(Jna ve~ edm.itida jJi;e;valecerá de un. n:mdo iodLscutlbk, suje-
l
~m> dE l:. Edad :"-ledia eran tan sencillas .como gra.ndes
en 6i;c.!OI. y ccnsistían en follaje rajado en plano en la plan- ta cmuo esta a ~er 11.t'I agt'lltlo 1Ie arqµitectos si.ti gran lntagi-
naci6u y de espe~mdores desprovistos de sentimiento o de
.dsa r lorcii1o o1 ;)UstO d<>J forjwlor- Xo hay nade, por el con-
espirit1.1 mediocre y ll.U<jl•íl· Cuar.1tlo !!$las 51¡1.ileioias están acom-
lI'llrtn.. W1 fr.o. ran torpe, tan -eulgar y san esencialme11te
pn.ñada¡¡ po1' el atlorno ·de Ullll talla tliestrisl1na o da Una
.tn~paz en una bella lliifa o una somhra corno esos adornos
prestidigitación arquitect6njC<L criuaz de llegar por .si sdla a
Cmu}iiiM. Aun.'ltue no rlJ!lnm15 alegar nada en con tra de enos,
ser objeto ·(le atlnJi:r11ci611. es una ~llPJ"le. ttlll llU q_ue su con,..
~'° qw: $e 1.-. d.!;un¡!!J!l a primen; vista de los uhras trn- tenrplaci.ón ntl uos lleve leios de teda (W?J1le •le verdad.eró
ba1 ~ ol m11no y nD !C les tblali fiOr Jo IJUe l)D ~O Iístov, SÍJI
cara1:ter artisti<'o y .ttQ lél.1.nil)e cu la ¡1n.r:ilisI~ oompleta de
~. ll"fWllduJo ik qoe Wl pw!hlo que se deia llevar ~sl-e o en sn e,x1it1ció11. Coiitra: e.sm no queda otro :r¡¡crurs9 rn1,.
1it•: r tt llllillllltl<ttu'S '9'U!l!af1!!1 desprecia hlCJS. on 1 ugQ r del Ut;?SdeftBr SOVel!!lll'l.0.lllle tod& mvestra tl!! virtuosiuátl ,. ue
nrli-
1k.or11d:. l'<'·da•ll!l~. ¡nndc tedn eopr-r.u1:rB ,Je un tuture pra- ficio.s iMgenhiSGs y enfocat toda In potencia de nuesh'll imu-
l;~ f!II otl ..ir!~ l\(t: roQT7.af•~ !'ll prol>:Jr PJI r¡JJ'll 0C3SlÓrl ¡[¡? giuacion ruJ Ja disposic1Ón de las TI1~11S J íl.Q las ÍOl".lllllS1 sal 1
une r:-.nh!'n r.i•s mnclUF!'rJlc su sm.Uu1ría y su pobru1AI, A11ul j cuidarnos de la 111ariéra en qu.e e~lil~ n1asas y formas se doto
TI!E ~ ··W t:sU f.!llldu: ..'..n IWlltíiil: 1¡u1: J¡,¡y ("(),¡u; h<ltU"tldlfS llm1, con\Q urt grall piutíll' :rro sa cuida de la dicr,cdqn dP su
ltcl1~ '11 .. rtUlll!'. til'l\ fl"1dr-.in prfi<\IHir un ll•gflnno orp:1111o 83
82
~ , • , ~ ..:JL'>-~ DE L-1. A}IQD l'l'.P.CTUl\A L.o\ LÁMPARA l}g L.A VBRDAD
1-~ ~-e.:~;;;.~,,_,..u---
,
LA LAMP NRA ])¡.: t.A V l!JIDAD
L\.~ ~arru i....\.\.fl'.\ll.\S DE L~ 1.1tQt71TEC'1'U11A
,
-
LA r.ÁM'PAJ\A D~. l.,\ YUUAb
[_~
·~· • I•."""n \.> DE: LA .-\l!QUJT1l0Tl'RA
-::-ue-1..L ~~ ·;.-....n-
'P.~pacios limí Lados, ,estas. lineas· iml]~ezaJ·on li gtt¡tr d ar una
J.6. Eu el
dihujo que osttinl!ID las cohunnas da la puerta '•
• • ,_,1 . '
ex;is.tt:ncia ..u,µepei1i!lan'e dondequiera que se Irallaban y dí-
de la t;,ti:'dral de lisieux bajo ~ umpa11C1, 1)11erle vers1• esta
[ePenles .molduras se asociaron cpn traba¡·o papu ..,... l 1
.i:. • 'u •-· ""'" hablrunos l universal tlei."Pues ei.i. los gran- · d l ¡ . '~ ·1u ener a gu-
na varre ac 1311 as. Iíneas de intersección, Ah ora ¡nen. · ue .t b e-
des periodn<""t, ..rle- mol~
~-po>lCll'
intl!r5ecr1onadas. y fundidas'
unas
mes, mostramos justes cou los arquitecto -~ tos pos t m1orcs,
· en
eh. otra; baste '1JU\·~e en 1111a sola en el p~to· Lle cruza-
1.p.UenE!ll se observa un seruimlento ilt> pl'opotll!ories ntás rafi-
;:zw¡otn 0 ~ [l)D tacto, Hasta se evi'Ui~ ordina:nam~te una
nodo que en. el de.Jos artífices primirivns. Se nota JlllIDlero
,mterrea:?Óu tan il1$llda como Ja de Lis.\eu.x.; ese ~bu¡o no era
Cl'I las bases de los pilares divididos o -mohlnras de arco. en
ns~ nada más que Wlíl f-01'lilll puntiaguda de la
Ias que. las columnas más pequeñas tenían 011 un principio
ant1glll! arqui1ecwra cnar:man<lo,en. que los arcos t;JillÍn é°:tre-
sus bases Ionmadqs por la base coníiuuada <le µ¡ columna
lazado> r puesto5 rada uno debajo del precedente y encima cautral o de otras columnas más graneles coli las que estaban
del SÍ.O"llll.~te <amo la Torre de .Anselmo en Cauterbury. p;ues-
agrupadas. Mas luego ·se comprendió que ~a· dimensión dé la
lD qlll! }a -mayur parte de los dibujos 01and_o las molduras
moldura, si bien ara buena para la base de una grau co1u11'1-
o;e ennu.'Jrtran coini:iden en Ullll !!arle c:onstderahle de sus
l na, no lo era 'para la base de una pequeña. y cada cclnmna
cm;-a;. encontrándose l)Or ran~o
,;ea:ion:
miis bien que por inter-
el punm d~ encuentro. la ~<1CCÍÓU d~ .cada :mol-
O!tl
tuvo su base lndependiente. Rri:rnoro la de las rnás peqnenas
vino a terminar sobre la de las más grarules. y cuando .se com-
dura dí;brrtil •e convierte en una rola, bundiendose la in1a
rli!Ja1•on los secciones verticales de la una y de la otra, se
en la otra. ~ ~ '~ sucede que dos mOldw·as d1Ie-
consideró a la~ liases de las columnas .más pequeñas romo si
rente! -e encuentran: eso se autonzaba rara ve?:. en los gran-
~xis\iesen erí las más grandes. 'V el sitio de su alevación se
~ Jl'!l"Íodo&. y man® l!i!J) ~uce<lín, se realizaba .ll1UJ tor-
ca lculó con un escrúpu le y una p¡:qcisió11 singulares, En una
fl('I!l.."11 te base rrabajada de columna c:Irvitlida como las de la nave de
Ahbevillé, "Se creería que las columnas más pequeñas fueron
Zí. Ln m••ma torpeza r.on que lns anug11o-;· arquitP.ctos todas torminadas primero basta el suelo, cada una eon su base
afrnutaron a mcdidi> f!U~ ourgían. rada una de las dilicul~ completa y complieada, y que después la base envolvente
ta~ ~"" t!':IO pr·.;o"ltlBba, i:wJica su a\'em&n por el sfatP.IJül., del soporte cetrlral habla. sido cubierta p9J' encima ile arcilla,
fil rcpug:nanna a de1.ew:.-ne an1~ s~.ml'!jante rli~pl)91ción. Es tlej¡¡ndo salir por 11lgul}.as>pai-tE?s sus pnntas y sus ángulos .co-
•
li.lt!zrin mils uiháLil la w1F111 di' loe; arcos •uperiores o in.Ee- mo aristas de c1istaLe,~ agudos. La cantidad de vit1tuosismo
rfutt'i d· l 1nfon11111 de S;iL1h1Jn'. que 'onhniu1 en l¡i sQ111l1r.a, técruco que i·c¡n:esentaJJ al¡_¡uuGS de estos t.rah¡¡jos es a veces
•trn.l~, todas 1110 pintnrns \ acla1!.Jl, 1nulrlun1~ id<inucn.1nente
0
94
1
l
L Cuando recordamos las impresiones prodncídas por las:
obras del hombre tn111scor:cil:10 _ un espacio de tiempo bastante
largo para envolverlas a todas en las thueblas salvo lo más
brillarrte, llQS ocurre i1 menudo -ellCOlllJ·ru· UJUl superioridad y
una l\x !~afta d·~1rat!ÍÓn en muchas de aquéllas, !!D cuyo vigor
apenas haboiamos eontado, permiti&il1onos declarar que en, el
d:e~erro del recuerdo lie han desarrollado ciertos puntos: de su
carácter, que el juicio no nos habla desoubiertc a1 corrrienzo;
tal ocurre '1WL estas venas de una roca dura, cuyo trazado no
llc,ertó la mirada a percibir desde un principio y el cual evi-
dencie In aecién de los parásitos y el ~gua El viajero que
désea reparar- o coreegir los lllWO!'es de. iuitio que en1rafian las
Ül!Sigualdn,!es de humor. las conl.nrrie<lades del memento y
los azares de la 11so,~iaci611, no tiene clro recurso que esperar
111 plácido veredicto de los años pasados y traducie o serpren-
dei: an es tas imsgeues últimas l]tle retuvo su memoria el
T11 rovo ordei i 11.e f::J'l111dllUI )' Iorma, asl COl'YIO OD la cni¡Ja ~·
97
.. • ol
-
L\S SfLlL L-'M'?,\!lA5 DE L.- .\l\QUl'IEO'rL'fu\
de;.eeIBO t!e un la,,<TO de las montniia& traducirla el mlSino·vI~ el crgnllo de más de- un. maiestucso -p¡¡la,cio, 41 cpnlencia de
1
conlurtJO>,;il.Ce$Í'-U: J~ r.nla orilla rrneva y descubrí- :JJ1Ó.s de una obra enriquecida de pedrerías, se levanLe.rá a tra-
la vernanera lir eCCw>I
JeIO
• ·"" Ja mon.,,...
r..a eo
~ bis i:Iwm;:
=
J., correr sus sauas
_......... -
que nlmeron
·
.r., .l
1
1n;; repllegne.s
·
:.<.
más proíundes
vés d& su bruma J<;i, blance imagen de alguna capilla de már-
mol aislada sobre la orilla de un :río o en la l'inde de un
de 0 Jecho prúniú\'ll o la> tammfi!S que los socavaren, Retro- t
1 bosque, donde, bajo sus aIT,(IS como bajo una, b6-v:eda de nieve
travémlanG> dé .,.~ llli)(lo a les rea.1erdos de Tas obras de ar- reciente.. tiemblan. delícadas cinceladuras· de Ilores,' o mm la
qntL.-c:iuraqtto; :nos 1105 ii"n agr11JaJo, vGno;i que, en general, an1plia laxitud de alguna muralla Ilena de sombra, cuyas
se dn,den ea do; ¡;rancies da.>~:. car-.ictenzad<) la 1l1l8 po-c piedna~ disgregadas se a~~nejan a las r.le una montaña.
un v¡;l_ar v una dehcadeza excesh es, a Jos cuales 1'0C111•rimos
can oerc¡ ~llt!!Diento de. afetmosa admiración; señalada la 2. La difáJ·en1j¡¡ entre estos dos gén11ros d~ erl,ifitios, sin
otra po.r mra Illl;_¡~1áil severa, y en ~uchos ~os miste~iosa, 1>:mhar.go1 no. es <>ólo la que en la Naturaleza existe entre las
lli eral ro: Il!'IÍllllJI); con tID respeto Siempre igual. semeqarrte cosas bellas y su blimes. Efn)- aún otra ilif11r~ncia· entre lo que
al que se ~ en prei'encia 'I' bajo la impresión de es derivado y lo q,ue es origin¡jl eh ta obra uru hombre. Lo
aigmr¡i tr.m- rot"ºªª e.-pn:irual. Lejos de e.si~ dos grupos di) que en arquitectura es bella o espléndido, -se consigue imitando
i?':lJt!n!CE que ~¡emplos inte1•rnediárins pondrán más. o me- Iermes na turales; lo qué n9 es así derivado, aquello en lo que
nos en a"lI11lI1Úi,, pero '!U!! ma.n:ardn 9empre. con claridad y la dignidad descansa en la reglamenmGión y el orden reclbi-
dl' nn modo iliitiuta. e!eru.:ntus de belleza o fuerza) irá a dos de la .ínteligencia l:i"t.Lmalla llega a ser la expresión de la
r.m!r0e la mu11Jtnd de r.stas n-cuerdos de edilicios, euya
l fuerza lle esta inteligencia, y la sublimidad adqui.r.ícla esUí err
r tfu¡en; D!!prrtlOtl g:¡}!fl' nuestros es¡J.ntus no era quizá de proporción cou la íue¡:n que e.'-"}JTl!Sa Tollo edilicio, por tan-
Itlfiltlrr'! pretei1s11mes. pero cuya fuerza. sin embargo, era to, n(is presénla al .lunnh.re recro¡riendo u ordenando: el seo:¬ to
dr_1dll a r....roctexe; d;, lllJ.c¡; urJb!cz.a ~.o J)tU'lllanei.lle, al precio del éxito consiste para él en saher ln ctue .tttflgerá y c6ruo
dí! lns niall'ri1'1eo, 1t la nrumulación de los ornamentos o a otd¡m,¡urá. He aq11i las dos grandes ló:m_pa.tClS intelect:uades de
is }1¡; tiilidad de! obrero. Ei;tQ; elementos puilileu suscitar 1JTI la ai:qwLt!cL111<1. Consiste la primera en una iusl¡i y 4umilde
1nten:. paru, :aLu: La mt!l4,oria, pcir cou<iguieute, puede ha- veneración de las obras de .Dios . sobre
. la .tierra; estriba la se-
gtmda ¡m la iuteligeucia ele hi -auto1-idad con. la que>el liQm,
br.r ~ ..~adCI aiII fid::lidad <>I recuerdo de ciertas partes o de
¡ br.e ha sido re.v115tido sobre ~tas obras.
e rtl>'< r ~ocff.11 Je constn1tcj,in¡ (l".J'O -011n esto 110 Jo "'vuirará '
nt;.; r¡\IJ.· ms '.lt1 •:1Íuer.a; •t!:tÍ~n y ,¡n onocir11u11i;<> En Instan-
3. Atlemii.s de Ja ex_presióu de fuer'l.a y de autoridad vivien·
l!' fil"' TU!. f"JT -l tir."lltrario, COl1 UJ1 Ü<len•s <OJIIllUVWIOr, SI"
te, se e~e.l'imei11,a tl\ntbiéi:¡. en las turma~ de un noblo edi-
nc1· r(¡1l'OI! .r.r • en IJella y itr•lt:rnut: (91JlflilÍlia, la imuge11 Je
íioio fllgo semoiante a la anuonia .rniis subliwe e~iente eu
un.1 [¡.:ll~a. motJ: 1'11ra )' ilf! un ¡tod!!r 111:,, c;¡u11h111l. l.11lu11ces, las cosas uatuirales. E.s.de ln: fuertll domi:nnllte regiila por esta
wu.o nurtlr!> p<tti.llnl͕ nta11 <l~11rl.JoC<Jnw ,,u 1111 polvo rle uro
99
fJlí
L~ <J:ETI' l:ÁJ\0"'(11. ...'.:i DE ~ 1.RQlll'.fECTUR.\
llt:nUJnla ue la cual VOf JO 11 f.!SÍOl'ZlU'lDl>' ahora en descubrí; murales} los pinéculos del prqmon1P1f0' roquizo, sin envile-
le .llll1uencin. renwic1Jl11du n toda invesfigm:ió11 eu e:I dnminio cerse, simulan ttr1 fantástico parecido con las rerres da una
!lllb ah;n-aeto Je Is 111Teilción. Sí esta última facultad, tantu fo.rtáleza. y el cono imponente ele la moutafia lejana tiene
da si propio en su aislaraíento una rnslaucolla que se presto
cnmo 11?! cuc;i.ÍattJ:$ de proporción Y ordenación no "Se pueden
'• a Ja imagen de tumbas sin 1tpmb:re sobre orillas pí1]Ulas o a la
ifisi:nnr mas que en 1111 estudio de ccnjunto 1le las artes, su
de• '{!Jllotilonan:ú(:!nlus ile arcilla y- junco donde ·l!D su mortali-
óinJputla.. en a~n~ra. para Ta grande "J- potente autoridad
dad se disgregan ciudades,
de la ,¡\;itnmlera. ~ puede eiraminar rapidamente con tanta
nmyw ~;>DI.aja pr:tr otra parte cUBJJtx> que, desda Iiace algrm
u.em-iJ(I. tos arqrritec l11i Li lrau sentido o considerado poro. Re
-t Vemos, l'l'-11~ en qué consisten tistli Iuarza y esta ma-
jesmcl que la Ns mraleza misma no desileña rt!tihir de
~to !!It récllmli"' ~-íuerzos una gran .rivalidad entre dos es-
las OJ;ir¡¡s del bontbl:es y en q_ué consiste: tamlnén esta su-
amla< (la una afuc:ando la originulidatl, Ja otra la Iégalidad),
blimidad de las- masas edificadas ¡10Y Sl1 energia cornlina.
~ !!!!Italir->..s de bell!.'.Dl del dibnie v numerosas aplica-
respetable cuando por 61-t as0,ci;H;ión 5e la compare con la de
~ mgeu.ie;ai; de cnnsrruccíén, IW be visto nunca la menar
;i;¡nraaón a ln expreti6n de ... Iuerza abstracta. ningún ras- ..
'1
estas mo11taf111.q_ de époita Ignorada que han podido s<!las sopor-
tar lemblores de. tierra )- escnpar a los dil\1-..-los. De~<le luego,
:gu .di; >:>IP ~to, que en él arte prumtivo ele 1- hombre es\9 1$ sólo en la 1lirueusi!ÍJ1. Se podr:in no creer. riosible ma-
t&ru< lu~ pura la nfirmacum de sus ralacienes.cou las obras
lizlll' liajo r.sLe aspecto con los ol:ijl!ll1S natw•alP.S; esto na 5!!1'1a
,Jt; Dir,,, las ~ pr;tente> r las más bellas. V t¡UP su Ji!/uestro posíW~. 1!11 efP.elo, ·Si el atJqulteeio no luchase contra ellos en
lll1 aul.l)n7..at.!u !Kibiéntlnlas camo una glona adicional de su baLalla 011d011ruln No seria f{1cil o'ldiíicar pirámítles l!Il el '-'tille
a--.or.1atión con los ~IUBl'ZliS sinceres dcl pansamien tu hnma de Ch.ro:nounix. y mi la iglesia olé San Pedrll aparte de otras
no. En íes edifirio; del hnmhre se debería hallar el culto res- CllT' i vor.acionP.s. uo se cal1$Íélecruria como li;i menos perjutl,icial
p)IDOS(l ] la Ul'"estig.adhn. no srilb del espíritu que rodea la> su emplazamiento sobre la pendit•nll! de una roll.na ü1sig-
Í"1nr..s J., la r.elva r ~ la bóveda de sus avenidas (q.ue ni.f.itoote, PéJ·o, ~up0J1edla sttuado en la plairicie de Marengo,
da !uo ue..,.ms il ~ ~a, cl hrillll a li1 cene ha y la ,gracis a o com0 la Superga de 'tw;.'UJ, n- romo la Salute Je Venecia.
a11l.i ptilsatJnl que agÍUI el orsanlsmo animal J. sino también Lo -c9ncepcMll (le la rl i me.usión tlé los ahjetos naturales ( r.o;ruo
este espi'"ltll que rerimclia IM julares de ta tierra, r.düicll 5US !lis ele la ru·q111tec11n·a) depende (h> u11J.\ feliz emoción imiv
•·5'<.f}lüifura1 <iriclnr en ltr rn.1Jria\l di: ln5 nubes y dhdgl! los • ~nativa m-.is qµe ile le tnf'ilitla de los o\osi ol arquitecto ·dis-
~ \\lpt;rnl-tlS dt< ruJC molftai1.-is d•· púl.'pura l1a10 la lióvedll ]l!Ule, -p\!C5, ole In V!?ntn¡11- precia511 de p<>der ~prc:ulmar a In
p;J1d.! dcl ciclu, l:'.51a~ ¡¡J"nas ' otr;i, <iUJT 110 reh11y1111 111' •
viitta In m11sA n16.s r.onsiderable qiu: 111111ít1¡-¡\ edllicar. Pocas
m~ ug11ni. 4JiJ11 :;e &J J,¡ ola:a <l.-! ¡u¡ yifopi.1 n11111tJ~ Loe Jr!S· 1 rocas. ann en 1'11l AlpP.s. tl~nen u11a caída vertical tllll illl11
pct ... c!<'ffl\ gn.~ llCJ p!1.'1"'l•Jf'. 1111d.li de> 'u r11,ltlt•7J1 eunndu evo ~llmo •'l 001·0 lle la rntodra1 de Bea11v1lis: si ~onslrultt'los tn·m
f.CU ('D ro.;;ttl)~ J,¡ Ídt:<i ¡j,- 1111'1 inmr·nuiJ,uJ CtdÍljll'll rJo llll'dt-n5 101
1011
•
--~-
u• sisrc L.ÓG'AA-"' -m: 1.~ .mQU1TllC'l'tlM '
.L~LAMI'ATIA ml r:.,\ !Tl,Jl;t\7.A
bella cl;.>\°aoon de pal1!d o el ala J~ de unn torre y las se halle de un ll!lotln Ptid:enle al alcance del ·arq ui1 ecñQ; llegar
có!Xtm!ú<i conJ.: .no lLly terma natural enwmc para compa- ' a lo menos a este úl timo grado de grandeza, donde comienza
rarl.;', ~tiremos en ellas un cleclo de suhlimidad en sus ln-sublime, que se puecle definir· (jJ. PQllét da hacer oparecer
rfñn~e;. Bajll <5fe enueepto, puede ser un manantial, de una figura viva in]eriór a la uida que la rodea. La desgracio
enlwill51no ml.i que de deecpcimn::s. pntentitar cómo el hom- de la mayor parte de nuestros monumentos nuevos viene de1
uns arruma. la ~nhllmidad de Ja Naturaleza con más Ireruen- deseo <le 1.1 i:rn1uirlas una excelencia -untversal, porq,µe entonces
oa qµtJ }¡¡ Naturaleza aniquila la fuerza humana. No es 111·e- ama parto de los fondos pasa a la pintura. otra parte a le»
Ch"!I eran esuerz.o paro bnmill.rr WUI montaña. Una choza, dorados, otra parte a J;is ventanas, otra -parle se destina a
i? ~. l.a.;urJ. En L! al1Je.u de Chamounix yo ao 'levanto- psq ueños cállf¡'lsnarios, otra a ornanientacicnes diversas. y
¡amá; }JE ojos hacís Ja aarganta do Balme sin un vivo sen- ni ventanas. 7.U campettarios, ni cmamerrteciones, son dignos
:imieDlo ae des;ieciio rontro su hoSP.itaTlil!ia cabañlta. cuyos
•
de Jos matérlales. Se Ioema una costra sobre la parte sensible
muros. de an blsncn tin1.lanoo. presentan. una mancha visi- ·c.ll! la inteligencia de los hombres que es preeisn ln;Vllril.ar antes
hlemeni:.e r.llitdrnrla en la verilura ;,· destruyen por r.omp]etQ de poderles tocar a lo YÍVQ; y aunque pudiéramos separarla,
fudA idea de .ill ekrnciñn. Una snla aldea reinará en ocasio- vahlrla mtis- llil hacerlo si no logramos atravesanla de un pro-
f!P" sobre IDdo un palsaje y destrnuarri una dinastía a~ mon- fllndf'l go1p!"; si In ott:11vei>!lnlQ~. así en algún lugar, no sera
tañas; el .:llrñpolis de •.\leu.as y el Partenún, respecto del nece~ario 11r1 segundo golpe; el corte 11.(l necesita ser más "gran-
,e¡:·
,,.¡¡¡eiD,.·,nt.! rom.truidu por debajo. quedan reduci- de que una .Puerta de íglesic" con tal de que sea $11/icienJa;
-·
palnao ~
~ .a la; proparoones de Uli modelo. Las montañas, en suma, sólo el pei¡o Uega1·á alll, es una manera siníestra de Ilognr.
no sen tan nll~ r;¡mo n11Só~ las unagluamcs, -y CIJanJ,p a la -pmro !'Ji segura. La apatía que un 11frllvte$é nn ranrpanario
r~ WJJin--iiJn de. di menciones compara tívamente importan- pequeño o que no ilnmine una ventana. pueda en un instante
tes se ar.ad!! el senlmuento dro la lebor rle los lwcrlos y 1lul dt>.$apa:rccw l1ajo el peso .solo de· una am'f!lia muralla, El ar-
tlt-'llt•t:1lmu1 human», sP·Jle&a ;¡ una sublimidad que sélo po- quitecro que no dispone el.a grant!~!. 1·ecur~o..~ halla del;~e un
dtla d.eruTur un error (!T!l!l!!ro e n la distribuciún de sus partes. princi:p)o e~cción de un pnnlo clé' ataque: s1 h.nce clí!tn6n do
su d:ime:nlliÓl'I. qtle renuncie a le. rlecornción. A. rne.no~ de t1jµ'U·
par y n11.1lti plii:ar lo sufícíl!l'llf! .( ~r1T~ poner di'? lleno su r•n1-
5. & tnrin para ermc>blecrr un proye<:to m•idiocrc 1:unh¡11iet
j11uto en e\ ide11cia). tot!Qs sus omamq:n1;ps uo 11t1ldritn lo ¡:¡ue
e-:cc:10 clo.: ~.uu!eo>;i 51 J!IJ dr.p-.•ndier,. miís qur. t]p Jn; din1ensio·
u.nn pie11rn 9noi•tne. La elocci6n 1lcl!e ser -perénto~m. su1 a~-
r.n ~! rf'~ li.-Jlo. wn t.:il tll! '!ll" le r..nmunÍe<ll'O cíorT.O gr11do
prQni.iso. No se tnl lll ile ~il lie_r si sus capiteles l.lll:113rlttn 111e)OI'
di-: ruililna. !Almicr1(' d('tr-miimir, <liJSde ltt"f{t>. •Í l'I ••illf1rno up111 le11cin .~on ¡j}guuas csCtLltunrs. ~pe rll'j1· h~óqt1e.< el.11.ll'nles:
&Ir n:'f' ·nmp)1·m··•11tl' bcll•l o rún1plln11°11t•• iul1lime. Sl rl1•l1c si sus bwedoti roclan1fll'lll! más ricos arcputrabr:is, rp1e los
,,! !'ir..v, nccc nno, r1or c.1,11~11il!TaclÍJn pnra In~ pOT'lt"I
olevt' !!ti 11ic qj )11'0lle¡ l'lll 111utro ums (lJl lq langilu1l de la
Wl' n1J e!
rr. n11 rm¡iedrrle 11lcan:1..t1r (()l')a 111 ntn1)IÍl111l ron liil 1h.• tll",
103
1 (i2
- -
•
WI LAl'd.PAB.A llE LA l>UE'l\Z..>\
;:;eTe le 'T'".il•lr.i n~ que un piso o suelo de ruosaice, y una do api•eetaFSe de una sola mirada, toda ~ez que en el caso
rbei.l IIJk e1? el UJU1'l> e-.:rorior que un ejérctto de pináculos.
• (~ una toses cornisa minguná de ~u¡. "j:Jatles puede ser di-
La dunensián ao ;e iJr_bi. li:IDitar más que por e 1 destine del simulada, porque la conunuldad dé su linea terminal que-
dará r~la. y no se podrá, en. consecuencia. evaluar el l(¡rgo
ele que :.e <l1sponga.
-
.,difufu o el espaoo
'
J U:
de. _hnea. El error se hace -más grave cuando una parte del
edlfioio queda oculte, come en el easo harto conocido de la
6. D.:-!emünad.1 la. limimcÍIÍn ceníorme a sus éircuirstan-
cúpula de San Pedro, y más generalmente én l~ iglesias, cuyas
cL•. ;e ptl'gllllllil'll tómo podría ponerse más en rel:ie<ve su partes más elevadas, cúpn las o torres. están por encima de su
rÜJni!t1qtÍn eÍ•~\B. puesto que no acontece sine muy rara
cruz. Asi puede decirse que no hay sino un rnmto desde el
~&..qi.izá nanea. que .un 1n01=ento que blasona de vastas
cual el observado1· puede. darse cuenta lle las- dhnansiones
r~· zan grande como es. La aparienciá de
..ij.lllN7C8
de la ca redral de Florencia, donde desde el áugulu 11ne hace
iu:..ira alr.iada 5Íllllip'1'.e en, cada una de sus _partes. y más esquina ti liJ; vía 13nl!!slrieti, fsquf°e ir frente al ángulo sudeste.
un3
con re!ie,·~parcrido.• a un ~lll solemne 1 uo Ioroz) como en el línea, en bis obres ~e ~tllo romano y de estilo gótico, el
Piü.scio VecdñD de Flarenc:iB. Es el carácter que dan siempre. muro es un elemento 111d.ispensahley se .,lt!ja Irecuemementa ¡¡
la; puitores a las roca; sin ~ Iundamento para elle, riorqne la luz caer ·sobre sus vastas superficies .diferentemente decora-
lM 'l'1!ril;iúera• roca~ 110 lo so'Slime11 de buen grado. Pero ·a das. Ahora bien; -estes dos principio> son admitidos por la
pesar de esto, la impresión de emenazu que da esta forma es j Na tural~i;a, .el uno por sus maderas )' sus tallados, J'!l otro por
de un caráct.ec mli;; .noble que t.. Je la simple dimensión. No sus pl~asJ su~ t~-i:.azRs y sus easeades. El último es- JlW: a:\'-
una. cormsa. la pared entera se debe, como Júp~t:el"• .iu-
ba,,""t;i ~ele.il~ .el pl'n1c~p10 de la !.Ul!I"'.t.3.. y en un .sentide en r1ue
clinar y ui1, a: mtervrene l.¡\ belleza tanrbiérr, Cualquiera que sea la .m-
rpiir1ád de hermosas formas que -puedan encontrarse en el
inüri11cado bosque, hay una más hermosa a mi parecer en
~ r ~ qne rS necesario en el despliegue de las drmensiones
la su periicie tranquila tlé un lago . .No co,1107.<;0 mu.la- parecido
de fa altura debe ~" .. lmnnte cuidarse en la superfieie que
a lás columnas o a las rosáceas que no· oamhiaria poi: la luz
6te riézupr'! unida, E< preciso 110lar en ll:l eoncernieiue ul
del .sol eayendo sobre ci.11,1lquier fachada de mármol liso,
?alano \'et:dno y otro; poderesos mommientos <le este orden,
e 5mo E em5tiF."a la idea de la dímensién que para Jll:OtJucir t grande y casi ltu11'.lana. Sin amhargo, si la n.mplitud de la
superficie debe ser hermosa, su subtancia debe también ser
~ "' deLe df".IUTO!lar en altura v en longi rud, pero no •
hermosa y: t10 dehcmos precipitemos para condenar a los ar-
de wa manera igual' se descubrirá ¡iflr el coutrerio que W$
qui tectos del Ntn1.e po1: ocuparse exslusivamente de Is. di'
tno::iw1ít'llto; ma~ 'l;;,&to; en apariennin son en conjunto los
visión de las líneas antes de recordar por lo .manos la il!Ie-
qu~ es1ÍU urJdo• en Wl poderoso cuadrado y r1~1e se dirían
tttMiidas par b3 ,-dra del .iugel. -La anchura. E!] largo y la reacia que hay entl'.1! una .superficie lisa Je piedras de Ca-en
y una sui~eiíicit- mixta de maternales venidos de Gér10~ o de
illturn = pL""'"· J\qui J~beme» fijarnos ert un pu11to en
Carrera y heshos de JJÍearas serpentinas )- de nieve, Pero en
t>I cmtl. les an¡wleetO;. Gt~'ÚJJ CI'ffl, no han refle.'rionarJc) su·
lo que.concierne a la íuel'7'ª abstracta y a le majestad. la duda
fiot•nkmrntc rin1J con una idf'a ligera.
no .es posible. Sin la amplitud de supeníicie se I¡¡ buscar.\ en
Entre las ntnnerosas y largas <l.iv1~1cn1f'~ ha¡l'l Jaq cuales se
vano siempre que la superficie sea larga, atrevida y c1JDLL-
pur.dn \o- la arquilectura, no P..! pern mi la m{tS significativa
!il dJ;-u1611 dn ciliJír:io; dandi? el intE!ff~ r1!S.icle en lilS murallas
n~1a, "aunque sea ae
ladrillo o de jaspe. El ¡uego c:le. luz del
o f!ti edificios donde r·I Ínt~ r<.-side en !ns lineas ele <¡111'.' cielo y al peso de tlerre que encierra son siempre lo q1m nos-
otros pedimos. Es en efecto extranrdlnur.i,o que el esplritn pue-
partl'.11 ~u ri!11"'lr-1, F..u el tr.mpl1> grleg11 el mnro 110 ,., 11;Jtla.1
Wrlr1 El ill\!!rrl ene J!Obre las COh.llllllltf (l~t<J~Üll~ V ltis lriAOS
\la a l¡¡i vez olvii.la1•$P. del .elt>maniO material y del lrahajo si
solnmanre tleue. bastante espacio pare recorthu!le, aunque sea
qis.- ella~ 'iQS1ÍCll<.!m en ni ~lllnflarrrÍJ,!1:ro f r1111ri; v l'Ttrí'S"il''l
~U!.- Mlllo !l!.'.l·¡1<m1!11:1.1lllr M" Lrat11 de dt •'lflhur.1vr11 91• 1)1• n111.r rlrhilmenlo, 111 . tlegríu qua se siellte al r.outemph1r la
ex le11sión 11111dá de Ins va~H1s planicies y tle lo? iuluensos
LI. mPffÍÍCl1'! ffiUJ'aJM Y' rle t!Ct<'ncr la \'Ítta SOUJ'() Ju tJ1Í~l1lU•
J07
106
-
lul. t..Á.Ml'.ARA DE L'\ l'UE.llM
mares. Es para el hombre un noble trahaie conseguir con estas graC!Íll y la peJ!fe~ón c).e proporción exigen una ;¡rrolaugaciór1
pi"11.ras talladas o su arcilla amoldada rlar 11 la superficie ae en UJI .sennclo cleternirnallo, ')' una sensanióu rle fnena puede
un mure 11 ci1iari~cia del infinito ,v hacer destacar s11 alero cormnuearse a esta íocm<i de amplitud por una serie conunna
l!D el cielo como si Inera el hcrizonte, Si el no realiza un de trazos marcados <le tal manera qne a le vista sea impo-
trabajo mmor es bl«Livia exqnisilo séer1ir su Lrtga superficie s.í.ble contarlos: su atrevimiento. su decisión y su. mnpli.cidnll
\
en ~1 rayo de' IJ luz fugiti'i'il v ver ..ror cuántos -artlíicics y nos liarán $.en1 iT al mismo LieurpQ que son veúlaclen:un~rne Ias
grad;ic í~ de nubes y de sombra, el tiempo y la tempestad cantidades que nos han embaraeado, no 111 c;o.ufusíóu o lo
Il.eva:n sus feroces rúbricas; ver toda-vm cómo al ·empezar y al llébil de -su Íorma. ll:ste medio de serie continuada engendra
ternñ11ar el dia el crepúsculo termina de- una manera iu1i·forme la sublirnidad de 101>. arces <le los muros la terales de todas
~ •i6r:o!Drida ~hre su hermosa frenle y se desvanece sin. las filas ele columnas y sobre una escala más pequeña las mol-
tÍl!jar de- trazar 'El largo de- sus filas de piedras confusas " duras griegas que se repiten hoy día sobre las Iormas má-s
i 111111 all!faWe¡. insigrnficarrtes y más familiares de nuestros muebles y cL! las
cueles es imposible prescindir. Es evidente que le anquitec-
9. E;m e; a mi parecer uno de los elemen los partír-u I ares tura ~iene UI eleccíén entre dos tipo,s ele focrnas, cada W10
de 1cl ilnlWl•"!Ó!Il"él snhlime: esto debe- necesamamente llegar asociánrlose perfectamente 11 su propio genero de inlerés o
para el couíunto la eleeríén de una fonna parecida a] c:ua- de decoración. E.l cuadrado o mayor espacio se escogerá sQhre
drnúo. todo cuamlo el pcnsanneuto tenga U. su perficie por obji?to,
Desde cualquier liírec.:fon que se mire el edificio. es en y el espacio alargado cuando el pensamiento tenga por objeto
e;ta dire(dfut hacia Is eual se dirigirá' la vista sobre las líneas las rU visiones ele Ja superficie. Estos 1 los Qltletl~ d11 Iormas,
tcrminalf?S'_ T' el sentimiento de la superficie 110 sertí eom- cemo casi 10Jas.
las 011ras fuentes de fuerza y de belleza, se
Jll"IO hasta que 5lib líneas se prolenguen en todas direc- unen maravillosamente en este edificio con JlUe ~emo fatigar
lÍm:""S tan le¡os ctimo <ea Jl''.l"Cihle El rua11rado y el ('Írc.ulo al lector ofreciéndole muy a menudo, por modelo de toda pe.r-
'CCID (»!" lllrW!{Utl'nle las re1.ieríir.ies clo fueNa por excale.n- Iección, el palacio Je los Dux en \renecia. Con10 disposicién
Cllienu'1:l J¡¡_, 11u" limlran lil.S. lú1ea~ •·erdadt..'ti'Onente dc.rer.h.a$ de conjunto ·un cuadrado. la Caoba& principal es obloilga Y
Q cunas¡, V&;¡¡¡~ son la~ fi~d.5 r11nec¡¡i<indiP.11tll~ lll c11h11 y la alineada a la vista por trua serie de 3·f arquííos Y Je 35 co-
~..J!I1l r IOI rilido; ((,~rÜ.:>nlet. .J ... progresión (es el nom- l umnas: en el centro tle la vornana, 'un rico u atu:no en lu
hre q.ul' (1JI L1 Lu~c;, J,.. li·y~ d~ pl'llJll11'&'..iñu der.> a t•.9la& ma~as '
part() superior que la divide en dos parles maclzas l!II que la
nqes11lod·11 Jl"ll Ja :JlTQgr<-tÍÓ11 rle una wrexfi1.it• .JI' fotmlt. o:l l 111·11 J' ta lo'11¡,>tt uu estiiri PU propcccióu Lle cuatro a cinco.
dt1tlr. ,.¡ IJ1rgr, •l•· 1111n linfl& eu nri;, 1liTrcr.if.in deti>rmi uudn). limitarlns ;i los pisos mfcnorcs, estas arcadas, ~lll!? le tlnn. la
[.;,; c:oltrmn;; w.i<irn1ffl; .W cillnuriru 1•111 Jw 1·lrm1·11los di' l'H('l- ltingiLucl, y el pj.,;o superior, euíre sus largas v~1n11as. dejan
7A mfn 'rnndt~ rri rl '1Nlru nrq11Íl<'rh1r1.1 Por Oll'n ltl.<lo, la u11(1 p<llle'rosn ~UJICl'Cici1• Je nrúrmol liso altcrnatn ;1m••nle mez-
108 1 Q!)
j
~ qrn; J:.L"'!l'.'1!AS DE ~\ \JtQUlTECTUBA J.A '
LAMPA~ JIE LA E1Jl?R7ül
1:lá1lo Be hloqnes de color rosa o blanco. Sería imposible tienes de arte, Los ejemplos qlla he pre$entado justrhca.
inrogiruir una céunhioación .mñs ;'Dagnifil'B ole lotlo cuantn • :'l.Ín, segúu piense, una dclensa de la fo?'llla cuatir¡ldiJ de las
hay en la arquitectura de· .m•'rs nobles v de m.as bello. ll.J \1('.C~ vas que s~ han. lamtatlo contra ella muy a ¡8 ligera.
NQ .,$'lJlo se podria ha'ter J¡¡ defensa de está Iorma e:u. su ca-
lO. En el estilo romane lnmbardc los dos Jlrilrcipios $C fu- rácter de linea dnmínanta, sino lodavía ¡io:r sus ccnstantes
sionan aua mu<. v tenemos de ello un \'j¡;n1plo lle los mií_s maniíéstaéiones en los mejores mosaicos y- en esos mll mótivos
caracrerísticns en ta catedral de Eisa. Las proporciones del éfe decoraeiún de un ornen inferior que. no puedo analizar
laq;o ;.! mnn ifiéstan por un sistema de arcos 21 superiores ahora, Mi principal reiviudicacíén dé la majestad que Je es
y t5 in!wiares a los ]ad-Os de 'la nave, La fachada, cuadrada. propia dese/lusa Simnpre en que ella es el interprete de ID
~ Uf a!J'lrridá grandeza en sus proporcione.<:; esta Iachada se extensrón y de la superficie, y que dehe, por con9igµier;ite;
tlrridP en arras superpuestos; la parte baja, en columnas, se adoptarse, Seíl pAra; dominar en sus lineas, sea para decorar
ClllilJIO!li! 1ia ilete i!JT.!)S; las ¡;,¡ratro partes superiores vuelan eon sos combiuacionss' de 11~2y de somhra aquellas parles Je
auñ"71T!entp Iuera del suelo de la muralla y proyeotan una los edilicios cuya superficie deba hacerse ')'lreCiosa u hOIJO-
:umbra 'ñgarosa: Ja primera por encima del su bbasamsn lo rable,
CUenLJ 19 arco>; la segunda 21; la tercera y la cuarta 8
cada una: 63 arcos en totál todos redoudaades sobre colum- Ll, Hemos dicho lo suficiente en lo que se refiere a Ias
na; cillndricas, y IQS znes liafr;s con ornamentos encuadrados Iormas genera les y los órdenes en que dobe revelarse la es-
en ~e db-pueslD diegonalmente l>ajo sus semicirouJos, de- cala arq1 utecténica, V eamos ahona las ma nifestacienes de Iner-
rnraciDn UW\~ un este estilo. .h.l ábside ueue forma de za que pertenecen a sus de talles y a ros elamen tos de menor
t'ªmkú.Pula y tres ftlás de arcos singulares' para su decoraaión impertatrcia.
esterror, En el tOl'P.nOT rle Ia nave una Iiln ck• m!COS reden- fil primer elemento que ti!D!!lllOS que estndiar es et inelu-
Q1>_¡¡dm' bajo un triforimn ea arco redondeado y una 'vasta díble de .la a1bafúleria. Este elemento p1.1ede ser disimulado
$UJ>!!rfic1e plana, r~tendi!dlo bien, •lP muro decorado so.b11e 11 Lue.r:za de m•l.e; '[)ero me par¡¡~ qUe es mlJ)lWJ.e~Lc y p<¡r.o
mármol jaspeado .. El orden todo no tiene nada de partieular ltonraJo proceder as.i. Y la g:rau 111zón da ello estriba eu qlle
)' ca.t:llClenza lili 1 ~esías dP ese periodo, '1.lle il rnr j uícío son se puede obtener siempre gran noble'Zll de. carácler, l.allto por
def rípo mes tmponenn; DO wlo por $!.'?' l'j más bello, SÍUO una c¡pos.ició:u tle ¡,Tfuesas piétl.1-as cou divisiones Je llllibíii.lar.i.o
el m.it IlfJÜci(l;r. qUe haya r.on(Pbjdo [amus el esplruu huma- co1no par In oprn;íoión de pi.101-es y cohunnas de n11rr sola Jlle7.a
11;1, ~ Lasado ··11clw•Í\"1ln1•'nh> <-11 la romhin;iriftnl!S 1lr·l clrcu- o de tlú11'11lcs s 11n¡ui 1-t·abés ~cizos <'.On mw·os 114! ladrillos Y
fo Y del c;r;;idr.-.drJ. piedra peque.na, eidsl"C ci!lrta or¡;ani:zución en PI orden de -es·
01~-n-v r¡u•· me inl.J'OllUl(O "º
1111 lorreuo que rlosno reser- 1 tas partes, que nJcnei·dá la de las huesos tontiunndl'i~ dPI es-
vsr para examen m/,,, f-'tOfuntln 111 m f!f111nu1• dr• 01 r11• cues- c¡i.1l'letrl en nposicl611 eón las \•erl~hras, 11 lo cual lli:• se debe
11 o 111
1
•
n'tlllnr íar $0>1~0, ,1ues. !lflT esta razén '" a lgnnas otras, que r W. LÁlVWAf!ADl? U PlIEJl7'A
la albaiiilerla ue un edificro debo .realzarse: sostengo todavín junlu.ra~ visibles, presentan el aspecto Je haber siilo lºP.ru•
que cen. Jllll.)- JIOE;<ÍS excepciones l come en el caso de las ca- biertas de un enrejado n111y espeso. La ulbañileria más mag-
pilln< y otro; edificios Je un trabajo rnuv llmittidb,). cuanto n ifii:¡¡ será, pues. la que, sin empleo de materiales sislemá-
.mlis pequeño sea el edificio mas atrevida deLe ser la alba- ticamento grandes IJ ¡icqueiios, se .incline franca y natural-
fuleri'a. y vlceveesa. Si un t!!illici1> tiene dimensiones i1úerio- m~te a las condrciones y a la estructura del trabajo, y .mues-
res 11 'las dimensiones medias. no está en nuestra poder acre- tre igual C.'!)lacldad en. el manejo ele les grandes masas y en Ja
renlaT sus .ilimensiunes aparentas lQeln.l;!SÍll.do Cáciles de me- realización de su objeto con las más pequeñas., tanto ern-
dirJ par ami cllsn1inllcion proporcionada a la escala de: tu plli7.al).clo roca sobre roca con una aulondacl de titán. como
.-ilbañilerí;i; pero pé>demos con Irecuencia imprirriicle cierta uniendo despoios pelvorosos y Iragmentos irregulares para
~udeza cnus1ruyi?ndola de }rie11ras 1111Jdw$, o por lo menos formar bóvedas y redondear cúpulas. Si sentimos por lo co-
!:.."ltroduoendolas en la estructura. Así es imposible dar ma- múu predileccién por la nlbañuenla franca y natural, no arueu-
jesrad a una cabaña heclui de Iadrillos, pero 'se encuentra, cier- gñemos su dignidad nivelandc las superficies y alustandn las
1:{1 grado notabh~ile sublimidad en el irregular ~, lasco ·<!mpleo [unturas. La; sumas c¡yr gastamos en pulir las piedras y ni-
de rocas que se ve en las cebañas znoutañosas de> Gales. de velarlas, cuando serla mejoe dejarlas tal como han sallde de
Cur11!imarul y 11: Escocia. Su dimensiún uio ha disminuido las canteras, 'permitirian añadir' t111 piso más al monumento.
abselutamente jlOrt¡Ue del suelo al limite del L>•'clio cua tro Q Debemos añadir algo tcdavía respeGlo a los materiales; $i t:ons-
cinro pw.tlras .=e usan pcl1' los áp&'ll1D~ o porque uua roca il'Ja- truimps con' m~nnol o una pi!'!ci.n:I calcarJ:?a cualqu1enh la fa-
uua1 prupurritrue {l(il" camallllaú un. saliente c<í1nódr~ y esté cilich¡d del lráuajo liaría aln'liuu la f-alla ele éste 11 11!.'gligen-
empotrada. en cl encnadramiento del muro. Por utna parte, cia; es aonvenifll'.lte. pues. aprovechar la cscase7 de dtU"eza de
~" que un "'lificio alt.cUJcP el grado de ampli 11.ü:I majes- la .Riedra pal'á hacer el rli,l:iujo delicado y suboriliuado a l<1
tiwsa. unporta, hahlarulo cou verdad, relativamente poto qu~ igualdad de las superficies lisas 1vlas s1 construimos eu gra-
rJ trabaje. 1k albañileria sea más o manos notable. Si éste uitp 9 lava, es 11bsur{lo, en Ja .ruaJ'm'ia d.~ lo.s c-0.sos, mulg-.r.;tar
es !j'ranile por IOde>i cm1CP.pto;, !.'lllf*queñe(;erá a .menudo la e1 rrahajo necesario pa;a pulirlas~ es .mnc:Lo más irlteli-
<ÍÜfilrnión Jl<.or falta de mmlida; sl es peq ueño, i;ugcciní la idea genle Lu1c:er el rlibujo gnrnitíco ta:mhilin y nt-iar los blo<JUBS
fil. 1B r.obn·u ¿,.JU"> rn!ilerinle> o dt' insuficiencia de recursos gl'Oseran1enle e11cu11tl.rados. No .niego que e~i$ta cir•Mo l!'-
"n l'l consuurter, '!:" siwnprr- l11l1'rYe11tlrá j'J1111n con las H1uias ' plendor y cierta sensación de fuerzo en el pulimento del sra·
del (W ujo ,. ¡., delt(ade1~1 del truba]o, Se enrl1Pntra un eje.m-
0 1TÍll) l' en la sumisión absol11n1 lle ~11 resi$tencia de lñ01•rcl a
¡ilo riruy J<'Sdirhn!lr> de •'..lli1 i11ter\·1:11f'ÍIÍJ1 .,H .(¡; ía11harla de la IA-sUpretUacia hun'lana; pero CJ1 ltt lllavor parte ele los CllSO~.
1g1""..ia de la !l.ia!!dul•:J10. 1!1• Pa:d~. cuy~• ulumuns. rcnstruulns a mi entender. d tr<1l111io y el t1ai11p0 que f)lJ !!llo SC! •'mpll'llll
di nwy ft'~Jllf'íu1s pi~rlr''' d" casi ig1•1iles duuonsroues. con po1h:íin1 apro\ecl:uu:se mt'jlir en Qlra>< co~a!i. L anslruir lll1 f.'<li·
112 ficto de den ¡úes de altura 1;on blor¡ues groserps. vale mtls
113
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WS SlO E L-o\MP.\ll.'\!>J)l:; l-\ .ARQt.TlTF.CTtrllA
~ Lt\M?,\JlA DE nA FIJER7-A a'""~
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q ne cm.rstnilr otro JP. setenta ¡ti~<'OU piP.drH~ pnhdas Y pues- .
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_ _,...---=-~~ ~-------
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LA L~n>.~1'1\
DR LI\ FOEllZ.\
f•.trnlllS es1an trazadas por In lUL sebro la sonibra, como u11 <l s1j dibuio claro podla inlrJigiblemente destacarse-~ aten-
la escultum :r
lo;: pilares g6egos; el otro: en que aquéllas uién »e lll!~:n1traba CD este f¡11 Único de lectura r1i1'..iJ v pureza
estan rrazatl.a;; por la sombra sobre l¡1 "luz. como -en la fllHR .i; exprt>st~l'I Toibi la eompcsícíén, toda 1~ 11mtonía. ,<¡ne
ruin del ;.rótico pdntario. E..~ cierte que no compete al dibu- digo/ ja ~L~a hdad mísma V Ja E!'OPt•gia de los JJl'U¡'lds aislados
jante ,'1riar de una mauers definiti vn los gFaf!os. y las colo- erau sacrifiearlcs en caso .uecesarín a 4i claridad No tiene
caci..1nes de Ja sombre, pPro 1· compeie variar en direceiones preferencia de.:ningú" genero por ninguaa Iorma .. i\dopia Ies
di:rmninadltf 51.L> grados Je 11T.t. Por lo tanto, el P.:rnplee de ícrmns rl'tlvudai; ,en las _tollllllD;Js y los principales motivos
masa.; de ~ombrn caracteriza p01 1o w.nt>r,11 nn estilo tlE- di- de drcomcíón. no por 1>llos misuros, sino comn car11c1~rislicm
b~ja t:llrfanh;, con el cua! snniliras' y luces son plenas y termi de ólrjetps representados. li'.l'an maruvillosamente redondas
nadas por un berde ag1ulo: el uso, _par el contrario, rl!l masas· porque l~ griego.~ hacían pcn· ,Jo general .hien. Jo qur haci11n
rlarss ,,;J asOCJ11 del .mismo modo con un !Láneró de tlihnj<1 Y no porque prefirierau Ja forma redonda lo cuadrada, 11
pl!'llll .,. suave, en el qui> la reflexión de las luces que se formas severamente l'éc:tili11!.'as se confundlau ccn las curvas
n><liilldean y ~ funden en las sombras comunica .a éstas una eu la corrusa v en los t1•iglifos: una ranura q'Ue 111? fu.jos des-
tonalidad m3, calliL. El té11nino que hplina 'Milton fl los t11ula mucho rll"J !¡¡maño, diviñia la masa del pilar, R~ú11a•
~lúrn'; ihíri!ll!. Bos.sJ • caraerenza 1 come Milton carac- rnieu l¡¡,; stln•sivo~ y et ael'i'tCdu'truuiml lo Je la decoración V'i-
nieron ~1 atenuar In fuerza de luz r¡¡¡e engendraben estas
tertm siempre en to<la! sns epitetes l tiste g~erq C.PU mayen
rloriiJail qru:, otra palabra aralr¡1tiPrn ele la lengua Inglesa: disposiciones pninutivas v rontluunron utenuándola en las
obras romanas, hasta el momento en que el arco de forma
par otrn ¡l8Tll!. el uh=mino mre describe específicamente el ele-
redond¡i se propagó como motivo lle 1.le~uradón Su línea
mento d•1 riewmrión prrncipal <h!I góficn pcimario, la ho)fl,
graciosa )" sencilla acestumbra 1oS' OJO~ .a aúgir una linea
d~"1!a cl.unmr.n'" 1amluér~ un espacio ~ sombra plana.
terminol idtlnt1r.a para las f:ormas ~1i•las: siguió la l'Ú]llJla.
y dcsur entonces llls masas Jecoraii:\'ru Iuenon ordenadas en
15.. 1\1e <>cupare romernmert!e dr! !oS> medios de u.s11r da 1!111
relación fil carácter cscnciol del edificio y siempre en relación
?ll(lrla1ñeturn L..,ti!S dn:1 esp<.'Cics de masa~. )"en primer lugar <;on áJ De. aíli In rausa pm· la que entre Jo~ atquiteelo~ hi-
dl' 111 111.u.; tl.iro o r•·Gúntle;itla. J.¡¡ ll'IITTUll'a por la C."l.W.l el zanli11'(l.~ el i;j<tonu1 •I<' Jecoración estaba circunsi;rito a las
ri·!!tr.e fuú a:--cgtira·!Q ¡l(lr lii~ fnrma• u1üs salien les del haío· superficies de rua.sa~ ('tll"VÜineas. m1 rp11• se pro~d;iba \;¡ luz
rnfu-.." ~re Ir,; ip-ic-'.!m. ha sidn cfr·01Jµ;1arln hirn ilesrr11a en ILDll grrulnri1ín tuu 11nn1in1ia i'd1110 "dlü·e uoa r,úpula o una
f-01' 81rJak"' pllr'.J qu~ ~~" pniciso rnc ~pilularln. La con C(}!Lutma. :rnienl1'as que los d1>tnlle> .le la· StlJ>erÍici!' ~hrrulwnrla
ch. mr qu" Jópcttm••nl!' u• 11•-ipl'rnd•· d" los br.cho~ r¡pc be st> col't;ihn11 con Írl!l'll(lnr;in rn ullil confu,-;,ión ~i.rigttlJll· el!' lus
«rmt ••ilrJ • 1 :1:¡111 l•J, y ~llhrr: In r u.11 tt·111lr1i 11111~ íl\h•l11nle ni'iís 111g!i'llit1-~ns. Es 1\1,~eserio tOll('r rn i;uenlu lo virt,posi1iml
OC' 16 .Y. · dll 11r, t 'I"" (·l 11111í1r., 1•11••1¡:<1 ~ntulilorohu In del 11rtistu: t1:nln11"!r en 1n1 hloqui> s<'llirlo 1is n1as úidl que
"nn'i.:1.1 :5!o (.orno un f•indo oli •un> ~obre 1•1 i:unl HT lig111 A l l9
118
L~.:: srrrra t..\J\U'AR.'d; m: U 1\l\QUIT~01ºllll"-
l.Ao. LAMPAl\A OK L\ f'Ul';)IU
Ias J'R:rteS salientes de la hpja. en- el cnpüel griego.
IÜ']Jo.)Jjl'.f
sofista 11i -penetracrl1J, sino envolvomn y miswciosa. luerza
&te; rapirelcs hoj~o> se eneuerrtrnn, sm embargo, también mas sincera que reflexiva. 11ue concilie y iáev-w nsucho más
eur~[!k (¡12a111inos. v su e1ecución. dé rma habilidad uotoria,
c:am¡orueba que s.1.1 preferencia por la Iorma maciza no era .
~ lo .l[ue crea, rnef"4a qua no se compren.día tri se donú.11nl1a .,
.
íor=tla. 1·yo no puede esWllJlrla eu poco. l ljas y el viento en las montañas. :r que no podía 1lutenPrsP en
\lienl:ra'l que la ordenación de la .linoa denota un arte mas
•
~
la e.•1Jres:Íó11 o reallzacién ele une f arma aca h¡¡1la Era rmpo-
cmmrruado en el e a.pite! griego, la luz y l,a sombra de Jos si ble sepultarla entre hojas úu acanto, S11 escultura hahía
bizannnes ron incontestablemente mas grandiosas y más vi- sido arrancada a Ja sombra de las tempestades y de las mon-
riles. ba..<ada~ sobre aquella cualidad de gredacíén pura qua. tañas .Y se asociaba al dla y In noche U.e la tierra misma
JlC)"ffn ca-"t to.ii;is lo< objetos naturales 'Y cuya realizacién
es, en ,en:lail. el Jin primero y el más palpable en Ja orde-
16. He tratado en V8Ilú de i:lar una idea de una de estas
MCUÍII nat1.r11l de ULa forma grandiosa, La aglomereción bolas de pietlra que envueltas en un Iollaje ondulante se
de nnbes tempesruo"Bs. .llenas de 1'.lesga1'rones y rodeadas di;' 11nrne11lran .muchas veces sobre el arquitrabe del portal can-
vapores qJl1! todo en. una masa amplia, tórrida
lo abserben tnal a San. Marcos en. \renecia, JVTe parece d.\' una bell.e'U!
• 'Uberlña.. y la obsn1ndau profunda rle la noche que proyec- exlraon.linacia en la umdacl de su Hgeueza .r le delicrule1a
tm: el Ievamamienio casi tan majestuoso dé' los flances de <le sus de Lall<!§ por su e<o n tí<lad: dé luz.. Sa iliria qt~ sus
!;i awnta.ñ¡¡, toda quehrant.rula y cartapa por la profundidad hojas, ·co1no ooun·e a las slll'!Sittvas, se lwn ·alnertb y •::.etratlo
de l:!; de:lliadt1"!< las MÍ!Jtas de las rocas, sin que pierda
j ío:rmandcr un botón por algi:\n contacto bn.iscp. paro abd10e
mmca la WJ.iilad de su grandeza lummosa o de su. pendiente lle nuevo. Lf;is cru·nisa.:~ de. San l\'Iiguel 1le Lu~ c¡ne ~e ven.
tó(¡JJI}tria. la COJí" rie todo árból corpulemo, enriquecido por
rn;efot1!?$ da huías y de ramas, ~ero rartado ~1Jhre el aielo
-
endina v deLajs del arco. 11os D1uestran un. LIÍecta rll' (0TI11je
vasto y ile tallps flSJJesos oroín1ail1>s sobre una superilcie en
par \Uta ><::nlr.1.!er.i línea v rodeado por UTJ horizonte de ver- que la cur''ª e.s salruneute Lul cuadrante Y en que a su al.re-
dor.i !JU€' nu!hipl1r-ado en la 'lllva lejana le pone, visto desde dedor va exlen<liéudose 1!! Ju-1 gradualr:nente. Sera tlifiriJ i.m11-
IUUl ahuc.L. en JK'M'!C.lo reli&•·e; ttJdo esto qcliíal.a como ley giuArse uaJsi Jl'lM noWe, lbAisto sahre el largo caractoi· de
@rat11f1: \." <1dmirah1'! la di1usi6u de la luz. conforme a la cual sus ordeJ1anzas wnto más \iYamelite nuanlo que, mf)(liEicallo
~ W7lli1Úlio~ dilmf<il•11u ~u; ornan1f'nt11ciortL'>- tnosu.·iindC11J6s •, en .lo snt.esi"vo por uua rfce11ción ml'jor. ~e c-0nTiert1? •in lln
que r.-sru: arqmtectos i;untian c.r,11 111<i< v"'r<Iad su aimpall11 po'll \J·azo caracteríslJco de los ru11s hcm.iosos dih11io.s gc\ii¡.0$. &
totfo lu IJlil' (Jii.d la:. hecho tk nrnj1;&lllf>SO y ~ra11dc Cjl10 el interesante \'Cr 1111 folJafe lílll ahnrulantt> absohdAntro:t\1? SU.-
l(ncg11 eu SU cnrtt'!l11plilcJ1í11 )' satilíar.rjft!J df' si mismo. Sr'> Jiortliuat.lo A l!i. lo.ngiULll dr> dos masas ele luz y tle sombra.
ql!F <ótnparnnrlu, t"ilci'I ~111 l1.~Tt11u·o~¡ pet<> (J1 "'ª11 hor•bar.i.e Lo rp1c Jn1 rcnliza1lCi el ;1tq11i1e~ \¡1 Yl'llr'ciano corr un pod~ laU
exr•tr ~1!.'t(ñ l11tr1.a <l1: lr1nll mrir. ~r:v1•10, lorcrzn que 110 tos ni i1~·csis1 lhh· c;o1nu el i.le le~ 111tis del .nwr q'nl! la cnvoh·iau. los
121) 121
•
L-1.5 sn;.r¡: 1-Á.'ill'ARAS llE L\ ARQUITHCTlJJL\
maestres del c<lilil i¡Qtll'o cisalpino lo han hecho con más rat'.ÍÓU: el conjunto del pie iler.echo exterior está .lrecho de
timidez, de una manera hin. qtll' par eso ue dl•ja de ~""J>le- la misma Forma, si bien es verdad que se compone en parte
nmentar el mb-n•aacatanuema a Ja grnn lev S1> creerla ett. de :cti.nra\-itlades, de columnas cuatlmdas, de estatues y rle
rnntrar en este trabajo un refleicl y la irrflnancia de LQ.s téin- trabaros de orfeb.rerra v el corriumo c:on1ponc una larrt.! ri-
panos d~ hielo del :\arte .1 1le su 11rz quebrnutada: las hojos camente redornléada,
ryne ba ja la mano del italiano se- muestran, ,IJTI rlu lan y se
inél1nan por euci:ma de sus ;.wnlrras negras C!QµlO nu. 111 láxi- 17. No puedo abordan aquí les curiosas cuestiones que se
tnd dfil grü.n c.i!w del mediodia, esuin en el Norte marclmas encarienan con el rrnpl~CJ de las superficies, curvas más exten-
¡ l1elada<, arrugadas por los extremos centelleantes corno didas: las causas de la dllerencia de proporeicnes que se
rDCJo. Pero no se ha huscade, y sentido la redorul~z lle la debe nr-cesariamente -ebservar entre las torres redendns y
farm.; dominante, fu de un gusto idéntico a 1 del capitel ías cuadrudás. ni, las .cazcnes por las cuales \UIA ~unma o
bizarrtiuo. retlo!ldeado en la parte baia del cimacio por cuatro una bola pueden ornamentarse ricamente. mientras que las
rarn,1s Ilenas de hojas d~ eardenchas en r¡ lfE' los tallos •111e 1lornraríon()S <le superficÍI! serían inoportunas sobre mnsa~ ra-
1all!n (!P I2~ ángulos se encorvan ·l\Xteriorrnente y caen, pro- mo ctl eastillo t1c Sa1:r1':\11golo. el sepulcro de Cecilia '!'vloteUa o
rPctnndo su espina certade en plena luz para Iormar ocho la cl>¡mln de San l.>!;!i!ro. Pero LOdo lo q1w hemos Jicho <Ir
W;J;io ~w 1\o he potllilo S[ll'f)ximarme suficientemente a la~ yen1ajas JP. la seveuidacl pttra las soper!'icill5 planos. se
3te penacho del prruirulo para darme cuenta exacta riel gra- aplica aún <'Oll mayor prcc:isi6n a las srrpet'licie~ curvas. E.<
do de delicadeza de la escultura da la espina. pero he .Jihu- (lt!~CÍSQ JU!I olvidar que i!xáttt.Ü:Jamos allhl'a c6n1cr es1n seren1-
¡ada allidr1 tle una mazorca natural de uoi11s de cardcnchas con tl.:ul y usU\ Inetzn p~reden transporlarse a loa claman.tos rueni>-
e:l Jm de f.entlllrr ,.1 lector comparar los modelos J ver cen res v no cómo ~.J r~áct~ Qt'namantu] ile fomia!t •eEmulariAs
qtl5 wlento m:ren pa1'8 la forma ;ilnrg;u.la del corii1u:i1.o. Pero pw:1in. en c!Ül!1•le$ GaSJlS, aulo1•izar a llll'bo.r la cnhna de la
El pe..'l:il~hn ,¡~¡ pinii•·ut11 dr: San Lot no es nada más que uno ]11'.fileipal. Alll1 cu<111t.lo los .e1emjtlo; l'(He l1en1ós eshCJzRtlo se
de lo< mrl ejempla$ que se. podrían citar hasla en el flamlgere t•efi~rr.n ¡:ni11cipahu1·nl:P il la.~ ma<as es(éricas o 1:Tlludricas,
en ro rc111pletn rlt-sarrollo. la H'nsai:-ión rle la lnngimd se con- uo ~aria c<1UVF'1tleu1e ji.11.gt1r que la atnplitu<l pU<'lle confir-
u:n-it, en dr<'t•1, =n una ornamentación menor 111ucb1> uem po rt1flrse sólo pov ellos. l\lurhas t:le la• lonnñs ina.s t10lilcs es1all
~it:ciitatla~ l'TI curra a1c11i1ada,. algunas ,-eces a~nás p!'l'C~J'l-
d!!!ipn~ ile hnlie1i;e borrarlo i>I dibrno principal. J alr{11uas ' tilile, -¡iru•o es iudtb'J)ensahle qne haya c:iu:v~. tlr .cualq·u1ci:
vrcc: vul'lv•· n flthr coprlt h~pm~nte ilr· 1111 P.7'11rl"111ti nl 01.1•0
rnm(I en U., nitht'l'S v p<·ilr·~t.~1"~ ñH11rlrii:oq que anrtnuocen clase ·qn<' stla ¡111r<1 as!'gurar u11a ->iuna Clialqu1~ri1. d~ grat1dr>~1
1'11 111111 p1;1<¡11elia n1as<1 tle luz. \Jna r1e la$ dfat1.nr.1ant•s mas
10> pónirrr. de l;is catt.-dralr-s d1< Ca11<lnhrw .> rli Ra111·n. li:1~
l s m.:s lralinjñ<la~ h¡¡y CJtllll'1J "li:'lr•·nin~ ~ulíi>111us Jlvtdldos 1101·11hlrs entre uu .artislil ~· otro, t1é~Ufl eol pu11to di:' 'VlSf.O ni'
'
por dos arbotnnte5 f'TI ocho d1\."1~ion'!s n•donrJondas de rlcco- la lmbillt.!11tl, ~·~ ••rh uulrn.ril uu la deljco~.evi relativa d•' su
(Z.3
1~
l..,\:i> S1LT.lt t..i."\IP¡UL\li DI! L-\ Al!QVITR<;r'URN
-
5,. )¡o imaalna con10 si Jescrmsase· en un plano unifoeme o
como si fupra wposa, ren una serie de ramas dispuestas
sink'tñtamen1,. ) en Indo.~ <lpl1es.tos, Se le oree regular, im-
p<l'thI<> de reproducir y feo. Pero uo consiste en eso la poten-
cia .-fe este arbnl, ~ halla, por el contrario, en s~1 tinte som-
brío, =n lo plaue ) ;cíliúc del follaje qui?' presenta sobre sus
hrszes vi,,GQrosos. que se enrOTVIUl li.g,e:ramente sobre sí mis-
woo;, romo broqueles, }" sr muestra en sus axtrémidádus en
fn11na de una mano. Es inútil ensavar In pintura del follaje
afilado. poblado, ranfuso, v tanrn, que na se -4<1 Fija~o aún
~ Iarmn pri111.'1pal La ahr ...viacléu Jr las remas más p-rÓ·
.cima~ al espectador recuerda algo esí crono un país monta-
ñrr,n, PJJ ..J f!lie la! alurras se hallan n1uy lejas 1111a$ de otras
v las extren11da1!~, semejantes a dedos. sncogidos lrasra el
.:pla tnmiento. e11ge11 tanta delicadeza r-n el dibujo coma la
mano de l;1 l\1agdal.ena •<1!.iri> ••J vaso e!l el Tioia:no ¡]p Ito-
e•·~~ Su oblendrFis vosotros i;ste úrbol sino retratando su
fnlldj••, }" S'I IJI) fitl""º Ii;)lJaJ" 1111 iU"(lsta que lo haya logra/lo.
l t.~ ";IlrL'Üt> e11 to.Jr, dil,utn y <>u hiÚa "~L11ll:m:a; la Iacultnrl
d" trdanrlear 'ttlUVt.:ruenlt! 1• con perfección coda masa serun-
r'.arm ·~ lrJ qu1r ¡¡,1n111ti1.u 111 st"r'f'rriiiatl rlel conjunto. ubser-
rendo la v~rdml •· tr. r¡ue- r•ii~ ¡¡J art{fir,. ,.J mayor sabcrr y
tt..~1.1 Lo M>l<1 reprr¡ducr1(1n d o•nuu •Hnplc hoju h11J1ll:lr.Í
F>tnpre J.iilnl t>l'()('l.111uír ··l 111•;nlll ti•• u11 dihuj11, v h1i' ,,,1111p11P
"l 1cr.F.inn de· ·~l<l amplitud y pur•·,_;1 dt '11purl1rre con bor
1 t!•} 1 ',
U. 01nli1Jt!ll/lfo1 ratn;fot d• t11h1v,-, Áo)'t~I, V ..10110 1 Pcnfllct
Lit. L41PARA OE. !A FUER'l.A
ción Y' form.>s Je las snmbras. E• imposible encon trar nnda i Venecia. U ulcamante üv este medo puede msmfestarsa su
1
de un gtL<to anb exquisito que la olispnSlrión do la ventana entera halloza, ll:r.l las cousu"Ucciónes domé<;liéas ti en 1 .. ~
principal de Ia cúpulu de Giotto Q 1lP le igle.Síá D'Or San ventanas •le las iglesias ne<fe$<J~trrenta vitrtadas, el cristal
;\!írhele. El e.fei:LO está Ll.D eompletamonte subordinado. qne se colocaba por lo general detrás dnl 11o~etim. Las vidrieras
es absoluuuueme inútil dihujar una rosa italiana Al b·1líQ; ~ la ca 1 edral de Plorencía eStáu colocadas a una disraneia
si se Jlropm!J! lUIO produi:Ü efecto vale mrrs marear los trazos que parece producir, en la mayor parte ele los ealades. la
b~ \' no ocuparse del resto, Bien emeud:iLl.r,r r¡ur~ si se IJ<J ta t;1pa.cieucia de un rosetón doble. II.n algunos casos en que el
d" uht~ Iírreas y
una exacta ..raduci;itlu. Llel dibujo, sus cristal está empo trado en él rosetéu mismo, como t:IJ Or San
molduras saran suñeiarues: pero suceda a menudo que los t:'ra· '.Vlichele, el efecto queda de cierta manera deshecho Quizá le
bajos ;obre la arquirecmra san fil; una ilulica<ler.11.ítn'1tíl. pues- alenci611 particulnr que llevó a Orcas.na a Ía omememaeién
to que no dan al lector n:i:ngrin medro de ju'l.¡,Fir el efecto de lo superficie, obedecia a su mtención de virrinrlas de este
deseado del orden en que ellos hablan, Nadie <11 rnirar Un mo1lo. Es singular en. 111 auquitectura más repente ver que
dtbu¡o arqu11R:tural de J~ láhules ~ de los nJ tervalos rica- se considera e'S1'1! virriado, que desesperó a los constructnres
¡ més antiguos, coma un .madio precioso q¡.te añadir a la .esbel-
mente esc1.Jp1.J05' de D'Or SSJJ i\IkbPle ccmpreutleria que
tD'.la e;.;a •scnlnna er<1 exterior q11E"" JJQ era más que u11 sim- lo;¿ de la~ lineas del rosetón, como acontece en las -ventanas
pk derroche de ¡:railll que no tenia nado que ver con la ver. de i\tl ertan College, en Osford, en las. que el cristal es de
dader.: ..natemia dn In 1lbrn y que can algunas .<1 ITP-viuns tallas 1 cerca de dos pulgadas Imela el ruetlio 'h' la barra Je! rosetéu,
en la flW" SI.' pt11lr.ia obtenPr tl!I un golpe el objeto priucipel. a rin de impedir 8 la profundidad de SWIIbra disminuir toda-
'
i\!(= i>ofu~'!"Zo. sobre todo, en la ¡tlanubn clibuj<id~ por GioUo vía más el Vi\00 aparente. Una grllll parte di? )¡¡ rápida
rn "i<licar ~ puntas de imenaiún, alU comu eu teilcs lbs impresién que provocan los rosetones es debida a esta dispo-
ck:tlltl e¡tinplOS, las Iortnus r:regms de rrna Í 0111m gracrosa sición, en apariencia i.J1signi:fic-ctttte Pero dé un modo ge.ruwal,
=e ext1end1?D robre la ;i1f"'·rfiri1? blanca rle la J1il'ltlni como las el crista,} estJ·Qpea redos.Ios rosetones, y debe siempre. cuan·
.!w¡11~ couwria' rolocada~ ••Jl1n> la niev=, D1• a11ui 171•ov1ene¡ do no pueda mb:oducirse .con facilidad .desearse que esj,; bien
cemo h<:'nto.• hct'ho notar. el nombre rle hoja universalmente oculta denlrG y n::sel'vav los dibujos más estudiados ' mas
rludi) .. Mta 00tamf!ntm:íó11, bellos ,para cuando puedan ser pasados al cristal
•
t
19, "'Im d.~ t)bt.r•w•r uu 1·I~cw r·tinl(llelo, e<; llienes.ter lHlll 20. l.t( t11é1odo rle 1!eéoración por me1lio de la sombra ha
l(T!lTI pn1dcni:~ en ol eml'I' n ,J,.¡ c-rtslaL E.11 los tn.~ · hcrmr.i'ó~ sido, ro11'1.1'1 1J.ln10.~ dicho, t(noún al góbco deJ Norte J el!!]
tr.vdelm, lo l'UF!lti111.. w.11 t'i11.ln1 1~il111lhi, ~a "11 J11s lon·r;~ Nlecl1odín Sin lllll.h¡irgo. 011 l11 p,ractic~ JC'I o;.islC!m<J lwll tllver-
_.,.on.1 l"ll Ir,~ 1li11u¡o; rlr (;11111.0- -, y¡j 1•11 l~Jl an:adar. , co1nn gidn iurucdlar11p1eulo. Teni~ilo a llJ.ill1o el mar111ol y la al'"
lll. d!J l'.bntfl(rJ:.)nto MI f'1w '' 1·11 ol p¡¡Jnr io ,1,, l1;1> Un)· 1•r1 c01•aci&n rh\síca ente la visr.n. cl c:anstructor ml!TiJiounl puJ.o
12.; i~7
t
e;cnl¡ür un ío&je exquisito "n los espauiós intermediarios
o~ en su superficie mural par una íacrustaclé» de pie-
dras. El ccnstrur IDr del Norte desronoulu los mode los anti-
gj,1(!$ ~ no tenia tt su disposicién materiales tan Uclii:ndos, poi'
Jo que no nrru otro remedio que cubrir sus muros de calados
eenades en Ionn.l de: .ho.iaS", como los de Las ventanas, T111 f,ue
5U deos-ión que, ss bien torpe. se rea]izó siempre con un l
:igurmo <:entitnie.ri1a de la cmn.11osici1\n, ·au·11yendo 1a aten- i
m&n: sob?e la sombra para aumentar el efecto. Cuando rl
mm o era muy grueso para ser .atravesado y cuando las bojas •
1
eran lan::a3.. las sombras no llena han cl espatio, pero por su
colocaríén. la forma se representaba bien o la vista. Cuaudo
era r~1ble. estaban recortadas eo~o en. lo~ tabiq uas elevadas
rei:m1aúas bastante profundamente para producir rl.esdé Juera,
del timpann de la fachada Oeste de la catedral de! Bayeux,
de una tft;¡n1. linea recta de luz. UJl gran espació de sombra.
El timpano Sudoeste de la catedral de Lisieux pertenece \
a llIId di: las puer:l.iil más atrevidas y mas curiosas de la 1
Nonnaudla, qlli! probablcmen te está a puntó tle desapf.U•e<:et
pera siempre por !a eenuuuación de las obras de albaúileeie 1
que y.i han ~.leStruhlo J;¡ I01Te rleJ Norte. Su ejecución es
tose.o. ~ llena de entusrasmo. Los tímpanos opuestos están lí
·lut,,dUi de ornamentos distintos casi iguales, muy mal ajus-
wdc..:; cadn PT:ela o estrella (qui:! parecen Ira liar sido en 111 l
r
¡.art¡¡ nirenor et IDGU\•o de c1r11:0 rnmas hoy complatamerue
des11gnru'1a. t-st,'i "'~cu.lpida lf!'lbre su rrqpír1 bloque de J)iedra
;: d~pue;t.1 iW ~ran enidad«, lo cual pn.tPlm especlnlmeme
"I {>IUtlo .;obre el r¡ur· h<• 1ns1s1i.do untes. la uhsnlutn negligen•
t,¡¡i 1lr•l ;irqu•''"''º para lili f<irn1.1G tl!! pir.dn1 i111.err11odífJt'Ía en.
1orté Jlt•l'Í~>dr> primario.
141 nrt;uJ,, íum1a lnr fl1lnl'º• ci" 111 pna1 la; tres colunmas
128
-
p!inado a mi parecer que ninguna otra arqiuíectura merebe Foscarij o de nn listel (palacio Úí' ID.• Duxi Todo completa-
~s que ésta ~ nuestro respero. l. no exceptuó ni aun el ••
meni~ v:_iaihle, siu esfiu¡r.to,-recortadc tan v igo:roso.mente. que
uñnru griego; este no tuve nada que rechazar; el· veneciano habla a los ojas clesde dos kilómetros el!! distancia can sus
del >iglo xr tuvo que re(baznr uno por uno, y durante siglps, cuatro hojas negras. N('> se consienten n.i ramos ele Ilores,
todo> 10> esplemleres que el arte ) la r.jc! ueza pudieran pre- nt ornamentos Je ninguna especie <JUe cdntrarien fa pllrP.Za
sentarle. Depuso su: e-Omita J sus joyes y sus aros y colores de m11 íormas- Ja terminación es .PPr lo general aguda. liJe·
oomu el rey que abdica; .remmcié al e-jP.rcicio temo el atleta ramnrrte truncada en el palncín F~cR ri ;,- tl!mrinada pQr una
uní! di!"c•nsa; caprichoso v fantástico primero, se sujetó a &imple hola en el palacio tle los Dux. Los cristales de las
J~yes tan imiolables. o inmutables como l'!s <le Ja Na:tuxaleza ventanas, cuando los habla, tistli ban, come nosotros los vimos,
•
111imia. ~a guan1ó nada, sino ~L balleza y su fuerza, ambas sujetes detrás. de la albañilería de tal suerte, que nlugún
~. ambas repri.mulas. Las estrías .góticas. eran de nú- rayo de l U7. pudiera Contrariar la prl>firnd.irlad, En las Ior-
mero ~- ~ las mnldneas venecianas Iucron Inmutables. . mas ya corrornprdas, de la Ca rl'Oro, del palacio Písanl y
alguuns otras, r10 servlau i:ruls 111u:- l)a:t'tl 'clest(ti;ar 'la majestad
El mudo dárico de omamentació.u DO admitía fentacián algu-
na. era d avuno del anacoreta. la ornamentación veneciana del dibujo ordinanie.
•
ahraza; ea '" ntn reina, todas las formas de la Ilora ·y .¡le Ju
fauna Fué la te111peranda lmmana. el imperio de Adán sobre 22. Tales-son los prinripales pun.tos qjrese gueCI.~ fijar en
la c.-eaaón. No ccnosco ninguna prueba tan magníííca de el manojo de: los dos generes de masas, de luz y de,-samhra,
f entre las manos .'fe los primeros .arquiteetos: gradaciérr para
l.1 auttJI::idad hun1ana come esr poderoso in1Jlf't1Ío del arte
-v<:n?<:1ano .ol:re su p.rr:¡pia cmberaneia de imaginación: la la una, igualdad para lll otra, eA"ti!rn'ÍÓn para mnbas: busca-
tranquila y solemne contención can que un espíritu tQ•li;i das y maaiíestadas per todos las medios pesíbles hasta el
Ilene ál."l pen"'1mí!!lllD de un follaje ondeante y tJ.e una 'VWa pm:í6do en l!I cu11 I, cmno rlijimos, la línea sn~tituy6 a la masa
como u1odo de dívisióu ele las superlicies. hemos dicho bas-
ardiente. da a 5Wi r.ensamientos una expresión momentánea
tante Trcini <leu1ostnrrle eu lo y1~i;o,nciern\l a las rasát~.
f Juego ~ retira ll.iiUS barras .macizas y SQ,S J.6bi.Jos de piedras
Y ali.o1-a digamos ÜDs palabras. ooferenies a las 1111>\duras.
.igual(.-;.
liln Los -p1iineros \.iempos las mal~ $~ forruah1111 rasi
'F;l ntJ urvo ittt!t"La para hacerlo sino poi· haber gnardcdo siemp1re por i:o1ulnllll~ alternadas, cLtadtatlas y cillrulricas,
«'11 u rntina lal formas ~e las sombras. Lejos de .atraer ~ asociadas de diverso <nodo }- propnrci.onadlls. Cl:lll11do h¡bi¡¡
mmuiás ¡fi)r1: loo orn.1m!.!J1los ¡J,, J¡¡ ¡Tir.<lra, renuncia u nllos cot1c1niil;1de~. como lns Je las soh1>.rbía.'i pot~atla$ Oe.:tc 1le
u110 a LID!i¡ ~ •m tanto c¡w· sus 1nlJhJun1· ''"cihMn un arden la t:aleclrul de f3n.veux. se encontrllbim enlre coltunnas cil.in-
Y una mnel.ria de Jtu rnns 1~~rír:ctas. «n estrecha c:unínrrr1idntl tlrí.éas qu~ eslalmu é!l phmn luz La ,;,sia olesal!Jl.S~'lba soúrc>
cm1 la:i rrJS1i0••1 il•' ll0Uf:1¡, rntl!itr.11 «n 1:1111•, las ~u111-~rficll!~ grmltles sltpmilcics v· de 11nliMdo sobre uu pcquP.iio númt!ro.
tomp!etamen1e i1!1u1.-1$, 4!C.la1h!r1~ a ''""-!'; 1111 uu ti•,;bol (pnlac10 1 JI
130
-
--= -,~---- ........
133
11:t
1
-
,- Li snmhra -teclm iucliudtlo, pértlco n liekón saliente, ukha viejo, sin cuerpo. 1.' no halilo JI'.' fas llOUstruci:iones modernas:
Íirofnndo, tl-l5Ilfl18dl?l'O ma~zo. parapeto h1cliuad~~ . Oh Le- , hemos edillcadn como ranas y ratones desde r.1 ~iglo xm,
ned primero sombra s
sencillez, ~d.t· lo den.tés seguu·a. ? :u excepto en nuestros castillos ¡Qué contraste entre las mise-
tiempo: dibujad primero con Jo.• ojos del buho J a<lquun.re1~ rebles pequeñas nhertúras de Ias puertas lle la fQchada Este
'los del lislcñti lle Salishnry, que recuerdan las entradas' de una colmena o
de UJJ aviS¡¡_lko, y CSOfi arcos altivos o esos ceronamíentos
2+. ~- apenado poi: háber hablado ta.rrtp sobre lo IJUll JJP,gios rle las portarlas de AhhevJile, rle Bouen y ele Reíms, o
par=cla tan. ,encillu: perdonadme que, a pesm- de su T\ana- esos soportes 1 allados e?1 roca de Chartres, o esos pórticos de
lidad. rui, a insistido sobre la que de todas les grandes y
~~; 1e\?E dél arte es de las más Iáciles de seguir.
bóveJln sombría y pilares torcidos de Venonal /Pm-.i que ha·
blar lle arquitecrara doméstioa? 1Ql.lé pobre y chahacana y
So se sabe slntera y Irancamente cuán Iácíl es· plégavse a miserable es eJ1 su mezquina elegancia la mejor que nosoírcs
sus ex.iJrelu:ras. No ha1- en este país cinco hombres qltl' pu-
tenemosl ¡Qué por debajo del desprecio y del vhupedo más
dieran. ccmprrrer, -ni veinte que -purlieran esculpir el fóllnje
extenilirlo nnlre .nosolros] ¡Qµ6 extraño sentimiento de feal-
qne 1iei:ora las. D'Or- San Mlclm]e, petó hay mis
-;-il!Jtanas
dad. 1le praci~i6il. escogida. dt> a'Dctitud e.ttE'<ive. •11> misan-
di;, un. curca de aldea que rmfria idear y lli;paner sus negras
tropia minuciosa 110 experimentamos al nbandonar les calles
ah<>_i:,ura> y 11(1 hay ningún albañil de aldea que :nrt /plldi,(!J~
grosorns de Picardía JlOT nuestras ciudades comerciales de
tallarlas. Disponed algunas horas ele trébol o de salvia sobre
K<1nll F:n tanto .que la arquitectura <le nuestras calles no sea
un nepe! l.ilanco: Ja menor modifícacién en. s1.1 dispesici6J:J
mcioracla. en tanto que no les hayamos dado In amplitud y
;ugeri:.i dibuja; qU¬ ..valientemente tallados, sobre una plan-
el d.esaltogo n~c~rlo. en tanto no hayan¡(>~ dado 'JlT')funtli-
eha dt: mármol, valdrán por todos los rosetones de ventana
dad .a nuestras ventanas y espesor a rmestras paredes, no
que pudiPra lrnutr tm arquitecte durante un largo 111.a t.lf
podremos tiwroi::haJ: a nuestros arquitectos su rlebilidad en
verano Bar pocos hombres en el mundo capaces de dibujar'
lris 1ral1aios zuás ihrportautes. sus ojos ésiáu hahrrnadns a la
un. rnpjl•·l grÍt'.?ll. y en cambie lJO 1.l! hay que no JllltWn pro-
estrechez v a Is 1.e.m.erirlad; ¿podemos esperar verles ordeuar
dwnr un electo de algún vigor c011 iliLuj0s <le hoj¡is sob1·e un
y concebir la amplitud y h1 soledad hruscamente? .No tll'hlnn
Ll•x1ue l:.u;.;nU11o: pocn<i hay qn11 pucdnn pi·ú,hicir una larJ1".d.e
vivir en nuestras ciudades; hay 1>.tl sus mlseraliles muros lo
p;;l.llil1a o un Íl'!HIJ.IÍn ílami!!l!'IO, muchos qi¡e JlOr.fríar.t t!dil.i~
bastante pan¡ malar las imaginaciones de los hombres, ll.1~1
ca:r una m'ls;i <.1111dr.ula ro1110 t>l p11lar1u Strozzl Nfo s(• IR
segurameutc eomo parecerla 111111 monja perjura. Un a:rt¡1u-
ca111D tl<: C!Tlll. ll 110 11er que nues.1ro' corn:t.OJJes i11gl1?.ses enci~ recto 110 Jebe vivir en la cmdad, tumo tampoco 11n ptntnr.
rr~n nt&\ de ~11cina qur: 11c pi,,rlrn, y teng11n nu\~ •in1pirlia Enviadle a nuestras T110ntaii11s; que a]'l1-eilil11 en ellas li' que
por ln1 ¡, ...II[;t..,s qu~ yxir los Alp•~. fl'""º llJ (l!•rln 1•< cpw rotlo Jn Naturaleza tiene para sus al'liomutes. lo qne tiene por
'" q1ic li.1r.cm°' t!S ¡¡er~11e!10 y 111r·zt¡tJ1110, cLtando no lorpe,
135
1 :¡4
•
l 3ri
•
l.
•
t.A t.Í,1'1J>AllA DF- L\ llRLLE;:M
1lllll interpretadón geni:r<JI de la >igcificat:j611 de lá 1111lnhra
las.
. fom1t1s h1ntun1as. tvrós aún: • el 1·~ ,.,1,1'l<>'
"-' ·l"'m··
• u •fJ uo era ·rrmta-
•
bi-lleza y ha:- que SllJJCIID'!r Uuhersal e lÍISlÍllÚ\'O el ~enti-
tívo, pero. t?da la lidll?7.i1 i.lé r¡11e \ll'a susceptihla dcpuidín
Illicnto ..Ít'l hombre :;llhre este punto y sohT e esta hipótesis,
I)"' I¡¡ pr,l!ll.15JÓlJ ae su óvalo. la. curva natural, ID~S Irecuenre,
n.n f.i qTIF lia;ar,; nu' 111'""-tlgadnllt" ¡¡dualiis. N'ti con~ideran-
'feda .Ja b_i>lillta 1h1I. :npitcl jónico íilivw:rc:róu arqtutJa(lural
do como bello !ilno .¡¡q11elto r¡uc s111 díscus1ón se n1e cnuteda
.nnry inf en~ar a nn ¡,~11c10) estaba, !iln e1ul1ru:g0, sµhnnhJ'lmm
<llmD lllL eDSlr.TI"l! bn>1'erur.n1e la 1tU1!1Pr11 de .mosh·¡¡r ele.
a su uchiprnrjón rle la lfnl)l! espiral, la nu\s hnrml c¡uizt. ,}t,
(!ue modo e•re deweuLo tle got<' puede ~er lle'i'!ltlo 11 111 arqui- rodas las 'fue caracteriasn los órilimes Iníerieres rJ[.I[ crganisrno
~ los. manantiales más plu'Qs íle donde, 11uerle derivarse Y de la ltahítnció11 anima l. Todo 11rogreso paslei;lti:r nn SI!
> ~ erro~ 'fl'" rer:,
preciso evitar :P!ITll Jogi•ar alca1izarlo. ,pudia realizar sin una imítncióu dírf'alf1 tle lo llílJo a~
aéa1uo.
El arco romano es bello como linea abstracta, NCIS(Jtto•
2. ~ creer.1 qni:-:o que be limi:lad.t1 ..inconshleTifdam~e los reuemos sicru¡'ll'e auíe Ja vlst¡¡ su tipo i.:I.eal en la li6\1eda
- e:ITTn; de L1 !wlleza arquitectural a las Iormas imitativas. aparente del cielo y el hcnzouts 11<.' la tim:!'n, .El 'fliltlr cllin-
No pre1.?n1ln .;o<l!mt!r que t{lllll or1lF.naei11t1 1111 la linea ·esié drico es ~e1np1•e bello; Dios ha µ·eado el tronco del arbol
dimctmn•'llte >U_g!!ñcl1 por un objeto 11at1tn11. sino q•üe todas \ de 1 al suerl e. que complace siempre a las mi nulas. El .Jrr.o
Jn:. lmeai l'Ptlas ron iH!aptacián de las Iíneas, rn.rs difundidas
• ojival agudo ~ bello: es .isi como terminan todas las hojas
"'n f<> crear ÍÓll e:>.terior. que en [~'rOpott:iÚu de Sll riq llCZ<I de que ba lancenn Ias brisas del estío, ) Ias COJnbinar.foncs .ntll$
~latilin,. l.; :remí"iam.a rrm lo obra da la Naturaleza. tomán- Jelices están directamente l.orr1<1das del trébol dP.- los pmclos
dola rr mn LJ!". y cmllf) aymla, se <ll'beo buscar más estrecha- o de las lorn'las es1J!el111la.s de sus ílores. :'11.is to<la,;u, J,u
merl• ~ ~et'IP. COD DlOS claridad v que más allf1 de 9erto inverrci.611 i.WJ• hombre no _poclra elevarse sin 'l:ma Lraru:a .!rui-
plrnll). tlllif infaior, él hombre no avanzará en fa invención lución. Un p.,so n1ás, y hel¡.1 aqul esCQ@.é<ndn l~s ílan-s nli•-
de la belleza ~in imitar 1lirectameule las Iormas na rurales . nu1s 'jJat-a eni:relazlldo¡¡ en guirualcl11s Cll lu~ capit•·h!.I
•'\>; en cl templo ,J&ñ.-o, r,I tni::lifo Y la cornisa no son puntos
111Úl'11im• •) lo ~011 dt· w1a rortatl11n1 "rlíEii:ial de la madera. ~- -Ah()ra quisiera .ini;isti.r ¡1arl.in.il;;u'lllenle sobl·¡¡ P.ste. be-
Natfi• CH!tf1caria 1ie hi!llu; •••l•J< eleureruos, A su severidad cho -y t.en<lrí11 ejemplos para Ilan111r la alentJÓn ,¡.._ mis
v a 111 1'ir11plicid.,tJ 1116 a lo que deben su influencia sobro lectores-: t-odus las bellas fop111as. v los hclJos pensanúeatoS
mt:t11rr4 L.:.. ~lrlf1 tbl 111 colum11;1 eru, ¡¡ no tludorlo, ~J ~tn· ~láu tou1atl~s. tlirect(Htll'ntei de lo~ ol1í('h'.1!;- 11altu01les, n1e vel'ia
hr.1"1 ~ de !11 corteza ''"' .~dt<Jl; ~· Iníltativu eu su origen au101'Í2ll.Jo con guillo n asegurar que Loun~ lns loi-inas que
Y rn:'U!;:rd¡¡ PI! r¡,.r~11w<lt1 fielml'ntn las estrncturus 01,gón.i· no rstu"icsen to¡nadas rle los dicho> P'bi1•tn, w1tur<ilt•J;. ~·
t'.iD fui C"J>'>rm1<•rua tr1111 lruurrliut,~ "'ll~lt1:11j11 rl1· br- l l 1'7.0, J)f'l'll LWt't!SiLé'.l<u1te11l11 fl'll• Y¡¡ <il? quP cl~!o e; 1um prl'.ltem;llÍ!t ;itrc-
rl·• Ufl ankn Ílth.:nol' !.A lnren a «f l'O'H<11• 1úl'J s<• l 1 usen 1n1 1 as v rda: puro no pul'do cxoruíuer aq ui e11 c¡ 11r roumte In 1,.•l l P~
f rrnill' Vf•rWlt:Jf'= dt• J11 VÍ1f¡¡ l11'J{lSt1iq1, r t'!if!Cl.ÍHltn"lllll l'lt ese11ri11l de In r1)l'JllU 1u~lalen1a .!ntuil~iilllo CSJ'Ul(\~tl Jlil.fll S<!l'
l4f) l l·J
'L'\S $tEl"S Lc\.'ftp,\.IL~ bF. LA ..\ll~U!TE.C"l'UUA
mas que el recurrir a esta accidental pru~ba ". y1ed.r¡¡ de • Y .ésta .no es mi ü1tenc.ión, porque yo D:nagino q,ue no hay
u:ique de !a l>cl]l!Z<!, e~~Jn. por 1A ccnsideración qu.e yo lotm;J ') grupo de formas concebible del ílfAt! .ne¡ se pueda Cl1-
SUllli!ten? en k) $UC~To. ConTI'Ilcev a rms lectores de su exac- coutrar UlJ efcnrplo. en c11alq1.üer _parte del universo. Pero creo
titud. La caliñco de accidental puesto que las formas no son estar .en lo fume al GOnstde.rar como las mds naturales aque-
lieliM por el mero hecho du estar" t:op.iat!i;s d.e la Natur~leza; Ilas formas que son más frecuentes, o por lo menos tQn9id~
pero no le /!$ posih te. al hom br~ ronc~bu _la bel leza _ sin S'\1 randa qua Dios ha uuprsso a las fol".lllas que en este mundo
ª' uda Pienso (lll"' el lector eensiderará sabli[er.ho e~e punto cada dla san I ami liares a los ojos del hcmbre los cara cteres
de belleza que por su 'ltoWntad mua lo .natnraleza del hom-
e~ les .,U,,.,,pJo;c antes catados: la con linnza que se me conce-
'~,-- ~. 1 bre, Y ha .mostredo, por eJ . contrario. que en ciertas Lumia
da t!ebe igualmente acordarse a la aceptación t e sus c~n-
la adopción de Ilneas excepcáonale$, no siendo netamente ne-
elnsiones. con lo cual me será licito resolver uná cuestién
cesarías, formaban, sin embargo, parte .del tollo· ermoniose
de interés esencial, a saber la de lo que es y 1o que i10 es
de Ja creación, Nosotros podemos 'razonan de este modo sobre
un adnzuo, Parque hay en arquitectura u!1.11 p,orci6n de f~-
la Irecuencia de la belleza. y viceversa, Desde el mumento que
ma> que s,e suelen llamar decorativas, y a las que se les
una cosa es f.reauente, podemos conceptuarla bella y conside-
ha recibido, por coJlSiGuíeTite. con aprobación o en toc~o caso ríli: corno más bella lo .I!lJis frecuente; entendíéndese. claro esbl.
sin: riesgo de criticar y de n:wperar, y que DO tengo rungnna
uisiblcmente [recuente, 'porque las cosas sepulradas P.J1 las ca-
v.icibción en declarar que no-pueden ser 'un 01n:1mcn1:0 com- , veruas de In tierra o en el interior del cuerpo animal, no están
plelJJ y q~ las considero corno cosas í~as ;r cuyo ci-ost; $1l evid.eu1emerHe destinadas por el Grea.dot a seslen~ la mirada
<11;b7cra imt.rihir en la memoria tlel ~'Í]UlÍ!l,~lo en. el mw1tulo
habi 1 ual del hombre. Y por f'recuaru:.ia yo et1 tiei1do Ja frecullll-
-ciasms empt~dos -en el aft.am1enlo" Nosotros oonsíderamos
da .funjl.ada y aislada, que es la caracterhtica Je toda rerfi!C-
est<M deformidades rutinarias con esa cemplacencia -salvaje
ci611; noJa simple 11oundanciii, sino·a la manera que uoe rosa
que lleva al indio a la . outemplaeién di:' sus la.tuajes ( t_otlas es llJJ.a flor CO'lnUn sin que haya en el arbusto (antas rósa~
......
t-- nacicn18 esl~n el'! una cierta
'
rel.:tción com1rtreitas de salvajes 1
medida y bajo una eierta
Ésperr1 no necesitar pro-
. como hojas. Desde .este punto de vista, la Na lw-aleza ecoEo-
xniza su Dll!J'Or LclleZ"ll )" prodiga su belleza ínfeciQ}·; J1(lro
bar qu~' snn ¿1cautn1osa;, y probarlo r.atl::gúricame:ule. Ert el la f'lo~ es, sm en1bargo, 1·an C.;eruentl'.! cruno Ja. h(lja, porque
lntecin no Jlt!d5ito al~ar en tlcíensa de mi convicción sino en todas: partes dQTide ,;e produze<1 la nna se dará 11rdi11ari11-
que! no son naturales, ;hjen6n to la •JIJ~ el ler.t1:1r c~1cedcrí1 ment!! la otra, eada uua en la ¡J¡'Oporción qne le esra asignatle.
el V&lw r¡u_¡. 1 .. pli.1ca_ P<1r To
ta11to,1 $11 pr!>>Mtla \!.1111 d1I1cul~I
pnrucular en el ejemplo d1' P.51n piedra de lor¡uc; olla obltg,) 4. .El pi.:imc:r adorno de esta duse que yo dt?senlJu ulae<Jr es
al oulür a ¡J1't:lvnder, irt1¡H•rti11,.ull•rne111 ... '111 .. 110 hay 1it1<l11 IJ1 _gTCC!l, c:o11ncit.lu ltoy f:!1)llet'i1ln1e.u~e, según creQ. l1lll el nom-
n.ltan11 SlltO Jo <jlle •'! ltrt \"lilu O lo que el SUJ'One t.jllfl existo, bre haJ1nno de guilloolds, quo se acuontra precisamente en
142 143
-
L'5 SJ:UIOti;vrP.\"a\:. m; L\ AllQUll'l;CTUl!A 1
.,¡ CliO de 1111e se rn1t11 En los: cristales tlel hismuto, Porm{li:!os
por i;J enfriamicnr» regulnr 1W metal Iuudido. si! encuentra
j
una :>emejama .natuml Cll11 ""t;i Íprrnn casi perfecta Mas los
cris~ de bismuto 110 ;:e-- enruenrran roruleníemen . '
le en la
"<ida diaria, T su lamia es. que vo sepa. urucs entre los m.i.n~-
raJ-><, ,.• .ue .:olamenw 1i:ni..--... sinn n?alliada «m ayuda de 1u1
procedimiento aruficial, no hallámlosa esto metnl jannís l'tll
'
l!'itadopum. ~·o re.-~rd1) otra substancia que tenga seme-
janz:i con este mnuv•J dt> .ornamen taclén, griega, y cr~o poder
Iiarme de ro mcuioria en lo que concíerue a las disposicícnas
~ ¡it;BeJJlan ·~ Iarmas exteriores de Ias cosas comunes y
familiares De aquí que afirme que este a<lótmo sea feo, r¡
en cl -.mrido Iirera], de la palabra. monstruoso. difenonre de
Lodo lo 'tlll' r"' nntnral df.' admirar en el hombre. ,. Yo prllfi.eTt)
j
un .liw.i:!I a un pluno sin cmcelar al lintel o al ,-ilinw reeuhiertn
d~ tan .rui."1!1-able encadenamiento de Iíneas rectas, a menos
que se Ie ~1.üe para realizar un verdadero adorne, lo· C')tle
put:tle tr~., ¡¡Jgtwa rez con ventaia. a condioimi de que sea 1
t'Xt• CSViUUeit!e J)':iqnefui cemo en Eil Q!SO 1ie las monedas, en
Id~ cuales se ve llleru:JE la rodea ch- su especie,
11'~
1
-
U ÚMPAI\.\ PE.. /J\ !1ELLE7ú\
da) ~~ct,íon) solamente 111 Iorrna. del huevo, sino que est<i
d:epñmidtz JJOI' la supe.rfioie superior con una deliradew -y un
vivo sentimiento dt, la cueva, r¡w~ ne se podria alabar ·surl-
cientemenra tode Jo que representa este 6val.u deprimido e
imperfecto. t¡ue tent11•.iJTUF'Ve de cada diez ve-ces la fol'mll del
canto arrojad.o nol' el azar sobre la playa b¡¡1.ide por la> olas.
Omltid este a1Ptistlln1íonlo, y la moldura se convierte eu vrllga:t.
Es igualmente singular que la ÍnS<ll'ci6n dl! esta forma reden-
deada en la ·qrnaml!Il tación, tenga su semajama en pintura
en el plumaje del pava .r:eal; los 0jo~ y las plcm¡es son mati-
zados con. una 1lJl precisión. que representan uua fnrrna oval
situada en una cavidad.
...
-
nr L\
:..-\SstETt: [:!.Ull'AJ\.~~ .\J\Q\ mc'!'.Ul\l\
..
!:.A t.J.~tPAl\ADE .Ló .UElJ..t:zA
Ilares, ~ino las podéis .reuuir sin anudarlas: esc~ibfu nada
11() sonaje el movimiento pa d
sa o ~1 pr..,,en to Y casi e! único med·
sr no podeis escribir sobra una tablilla, sobre un libro o sobre d e expresan a la visi a la fuerza d . h tn
a este .tnQ\•tmiCUlo Los . · e 1, graved.ll<l ~que resisle·
1111 rollo de papel Y" .sé que voces nutoriZ11d11~ sP lll''aJil1u•án
• ...... ~ gneg~ se servran del pano Irecuen-
contra nu trona. Tu .recusnlo las banderelns dP.. los ángeles ' emen '""'· ma~ como de una ~orpe nec~~.1dacl:
•
:i: . pero lo usaban
del Perugine, las cintas de los arabescos de Rafael .Y las glo- vo un t11mmi:nte ]'l~ra toda tepreseri 14loi6n de acti vidad, exa .
.rio•ac Ilores de bronce ~¡., Ghiberti Pero no importa. Esto geraado que ex""eºª''ª
nn ;a:¡ más que errores y torpezas, .Raf¡¡el Lo comprendía de · · la d ilisposic16n
1 •- ""' tw, licgerei;a .J1•é 1a .ma· tena .
y SlgUt<Wc . o. .a actitud del J)t,rsmia¡·o~- Lo s escwtoTcs
.. 1 ••
cnstíanos
ordinaric y re...~ a la honesta y rszonable tab1illa, c(!mo que _5l.ll cuidarsr, r.le.l cuerpo ' "· !Üntien·'- . . por el• se'
, = averston
'21'.l la madcna Út> Feligno No ruego gUB se encuen tren en Ja consagra b an exclU$ívru.nenle· a [Q íis • · •
1 , l . · · onom1a. aceptaron desde
'.".aturaleza modelos de estas tablillas; rero la dlfsrencia estÁ uego_ vo uutanamente ni rQpa1·e co""'~ el
.f ...,_. 1.111 V 0 Y '[ll'OlltO des-
r..n. que ~~tasno Se ruloeau CUlllCJ adornos y las tiritas y ban- C~l'llU'Gn una J_acullac,1 de expreslóu que In GTI!Oia .no habla
derolas §Í La tahlrlla que. COD10 en al .Ad;11 r Eva de. Albert@ visto o que ha bía desdéñado La éatacten·....: d ta
"6 - • snca e es expre-
Durare, no re cnlor-'l ,;Í¡J.Q come auxilio para l¡i eseritara, se s.i n entrañ aba la completa supresión de mcvimienro en lo
armpnmdr y autoriza como una [ea pero neeesaráa interrup- que tan susceptihls era c}p· ser ~.,; ... ,,,., ca·1a recto sobre 'ia s
~.,,,,,u.,.
aón. La baudecala se desliza en .Iorma ornamental, lo que formas humanas, an'ostrando 1 orpewente sobre el suelo di-
~llano ~rcrá jamás. s.úntúan'.1<> los pies, mientras .fl.Ue CDlTe los griegos el ;oPaje
se recp~1a sobre la cadera. Las !:el11S ínpidas y groseras de la.s
LL Pero :e úini que este defecLo de organ-izauión y de for- ropas de los ~~o)Jies. tan completamenre·dile.rentes del Ilgero
ma se podría afirmar aún de ]os· p¡¡iios. 'Y q~, si.Ji emb!ri:go. Y delga.do te¡1dcJ dP la materia antigua, sugirieron a la ve-z
son un noltl1> motiyo e•culluraL De nmgll.ll.ll n1anera. ¿Cuán- la simplicidad de los pliegues v lo torpeza de su Mida. No
do los raños fueron moti Yo- llll si mismos rle escult o:ra, excepto se pdcl:ían <}"'ugar ni subdividír El ropaje mm así a carac-
en la fmmi, t.ie .-el<l ;obre las- umas d.el ~¡,g'lo XV!l y en 1tlgunas terizar gradualmente !11 reposo. como antes habill caracterí-
decornaon"< ( ;.c:PniCilS ítahanru; de orden mferior? Los -paños, zado el mcvimien ¡9¡ el reposo-santo y austero. .EJ viento quedó
crmw tales, son &icrnpr<: anbartisticos, no rule:i,esan sino ,P(!)l" sin Iníluencln sobre la vesti¡iurli aom.o la pasión .sin iníluencia
hó!> colares r¡ut> rcv1•h·11 y In~ efedos [tuc les comunicara cul- sobre el .alma: la actitud de las figuras añadla tan sólo una
qu1rr fonna o .;u¡¡lq11ier fur~a ext.r·aii<o. 'J'odo pañet noble, dulce curva a la inmovilidad tlt.'l velo fllle la seguía como la
i;ea Hn ¡1hnri111. ~ea rn arr¡uitr.ttur<1 ( aqul c·~uíu de miís el ligera Iluvia sigue la tnarchn llmtlL J.e Ll nube, La ondulación
n¡lür )º el te1idu Ur ne, ,.11 i'U.1tll'• ea 011"8 cosa que una pma no se b'ac{u Iigera sino para las 1!;1n7.;1~ éla los ángeles,
n1>C<-ilu~J, qtuJ curriphr ron wna de> rlo$ gr11nd.es t!uttdO"nes: Así 1 ratadu, el 1·o_paie asume vrnlaJera nnlileZIL pl!ro toda-
"'11 IO!t 1nt(n prc:tci$ ilrl rllfJ\Írnirrtlo 1 rle 111 ¡¡1'aViti\1:tón. IT..o vie es inuirprtl'le <lt• cosas rrnli: oll'vnrlas. Con10 intérprete de
esr.1 formil CIHl el 111r.llo 111u prctHJBO <Ir <!Xprcsar c11 ~ITT per- la g111YÍ\41ricSn, está ~otado do u1111 tntJies1.t1d pnrt.ícular. Es,
1-50 tói
~~~~~~~~--__.......... __
LA TÁl\11'.t.J\,\ 1)1'. L.~Bl!iLJ..J¡7.\
pn:¡p:iamente hablando. el único medio de r¡ua d.ispor.i.ernos
t
ta. .
N<> llegan\ a afii:m
lla 1
... -
ar que 1 a n ll tura leza no e'lnple!'! fflJ-
i:ari;. r~resentar esa mi~wriu;;i fv,e1"U! DJlflU'al de Ja lie"1·a
ones, . e os ama y los usa fltQfusaruente. sélo q 1
tporque el agna en su caicfa <!S meuas pnsiY& y de Uneas .hace smo en esos Ju · ! b l ue no o
menas; iJ,•finida;) .En lo~ Yel:os ann 1$ beJlo como r.:e~en- .1 . , gares '" a une 1u1cm cxcesn•ft tlooJ4. pay,é-
eeme que t éherían huscélrS<!" rw'amenle lQs ti .
lat:IOn de una Sup"....rlicie solid.'1 CU1''8 y C:OUJO e.\.-prOslÓll¡ <le les. "' J· 0 • • , pos llrqlllll!.:lura-
,,. ~-or ranto, un Pítl.nr1ano suspendido una 1- 1
!a Ítl!!r.m de un otro elen11m.lo mvisible. Pero cJ ropaje, ahan- tratatl11 c:oi1 clesenvoltux .. ,• . ama r.o game
tlnnado a ~us pr:opio5 u1éritu:;, cl ranaj(' f!ll si -(:OlTlO el de . . :ª
Y Slilna. podran 1qt.rodllci'r.se Inliz-
mente en una d11corac¡ón lujuriante (no <ería L 1 d
Cado Dolci y el de la; Carra!'.ci- es "iien1pre vU. b ti · · • por •'<! ta e
e eza, $ln~ Pº'. faJta de ··ouvetúrncia .irq1u1.ectnraL por lo
que resultaníau 11up1'0j11as para es1•e e111~1,.,0·) p . ·
• dne · I"" ere, G1}ne se.me-
11. El abuso de .las banderolas está en estrecha relación con janze llº mos es.tablecer entre éste ejempld v Wi11 masa dt
el de las guirnaldas )• .lns festones <le Hores como rlecoración Ilores y de mitos de toda especie, tOl1]lemente reunidos en
arquitecrural, r.arqne la ausencia del natural en la cnlocacién un largo racii:nci grueso por el medio y fiíi» por sus extremQS
es Tan lea cerne la ausencia del natural en las for:n1¡¡¡s. La a Un muro sm v¡da( Es extl'afio que los t:onsLmctores más
11.nlUlteG.'Ura, tomendo sus objetos de la Neruraleza, e5t<\ obli- desarreglados y. lo~ más capriohosos de Ia arquuécmra ver-
g;;da .n disponerlos. eu tanto le sea posible. en combinaciones daderaments lniuriosn, no se .hayan arriesgado imna~, qu.e
apropiada: & su erigen. :s susceptibles rl~ expresarlo, No debe Yll. sepa, a suspender 1.u:i ~mnp~ ntl1>.ntrM que lo~ maestros
cop1ár servilmente la disposícián natural, na tri o>< preciso n111s severos del llt'rr11clIIU etrl ti gpego se permi tlerClli. el em-
esculpir ;aJ.lm; d•_. híedra a leIargc de las columuas pal'o explí- 1 111eo ele este extrao1~linll.l'io motivo de exq1Llsíta im·pcr.a en
car. las hoja~ de -su cli;rillit:. pero debe, sin embargo. escoger medio de suped'icies 1 is¡¡,s_ Desde que tal d.tsposicilin [ur!
psr<1 su crnamernaciéu el sitio de mayo~ .exuherancia, rl .adoptada, el valor t?rtti:ro d~;f t.lib11jo de la$ íltlre$ se perdió.
lugar f1P.ciso t¡llt'! la Nanrral&UI hubiera escogido, Asi, el ¿Quién aJ adnúntr Ja orrunnen taculit <le la<1' !laJ·e; dPI e<lllido
Ga¡a ~'tl rr;nntio ~ bello partptP." se despliega bajo el {lhnco de San Fal.Jlo uo .se dejie~ a cpulemplo.r sus adornos de flores'
como lo humera he-dio Is Naturale7.a al desplegarse, y parque Son ~an ocahados y ritos conui es poslhle. y natla. ~ t'!ltlhett-
rus ho¡n~ m r,arecPn le11Pr sino una sola raíz y ~sta invisible. go, añadeu al ~.can.lo del ec.ti[1cio. No forman pwltl de eL &
Las ruohlutis.f· de hoja,¡ del estilo ílattúgero son bellas porque una mala ubra de arte. Conrehiinos siemp~ el "dillc:io sin
at1:u:ntkn: ¡¡ lo bqra de fus- <".nvrdarl<'s. amdandc eh ellas, eUas. y sedan1os ciiel..tosos uo 1'Íéntlttlt• Ll1rhauo ~ou su pre~nn·
gir, m1·ri1·111lo In- /111g11Jo9 .~ ro1lt.>;111tl() l11s columnas corno lo c.ia. Lejos· de luu;ei'lP uarecet snblhne. 1fruJ al resto del mo11u·
buL11:r.m l:nc.!10 l;;a hv¡n~ rm111r11IP.s. No son simples inutacio- mr:!nto t.lli IÜ1'e i.1e pobn•u; 'i ;uhmi:ís uan~a gustara p9r ~ 1ni;.
nes dri hojr1s n.1t1m1I~ ; c11ftn 1·onli1dt1$, n!gt1lanz;1dus .\ 111'L¡11i rn;is. Colot:adas en su verdatlert'l lugar, ou lbs capiteles. se las
U,?• •lirucruni:11lt! clispuPJitllll, fl<:Tl.I ~-c1li1Q1dns "fi una Ji1positíón 0011lt:rq1¡ll.orl11 uhll yr.rdnd1wn gu;ao. Y rto digo (!11e esto fuese
natural, y Jlr•r co1u1gi111!llU! bello. posi!Jle on los i11ou~une11loJ:> al'.Untles, riorc¡ue este gcnl!I'O de
152 15$
LA L~M·P.\ llA DI.:. l./\ Bl!:l.ilaF.ZA
ornamentación no llene otro objeto que el hacer hermosos revestio; pero en es 1 e caso. 0 bien ru es . ,
dooarados sea donde sea. pero si en los IJ!le existen s(! hubieran ,_, , :pac;to Sel'll émltunw.do
y l as .rno1uuras atl¡urr(a& lo más sevo .bl •
c;olor.a<l.os estos gru~· 1le flores en los lugares que les corres- ~. • d d eras JlOSl e, O bien e J
tronton cua ra o se debe <!trlJJlctir cóm . -'
JX!ndian neruralmeure, o en otros edificio -. de otro estilo, se . . • _, ~- "' o un p1.ua.cul11 j~ aso
erar pnnc.rpu.unente iL los motivos de la olllio,.;. .... ió d d
hahña ><·n~1rlo sn valer tau vivaruente corno actualmente . d · ... -~er,...., n. 011 ~
pre ommara
. . esta Iorma
. rela
· liva de fu- .
~·i'.a. e 1 circn
su imrtílidad. Y esto q ue decirnos de los f estoues es aun 1 o. r.omo
en e 1 gouco veut¡i:11l:l'lo. florentino 0 toscano P"~ .. : · •.
más verdad de las guirnaldas. Es sobre la cabeza doade de~e --mg:Q
' so bre. vuestro. cuadrado. . tenninaJ
. ·~ ""9
.~·
... usurpais,
lin
-. • 51• •.Or....., IS sns eas
verse mra guirnalda, porque aquí es donde únicamente nos po~ la lnmil o· 111;5 \fo! véis exterioanente, habéís perdido Ia
parece recien cogida '\' alegremente llevada. Pero JlO e~tá he- unidad de extens1Ón,. No es une linea da niá& d
cha para ser ru.,pendida de nn muro, Si queréis u11 adorno en "·-- - did . ~ <) o, ~ una
unea ~a 1 a, . aislada y lo ,más. lon>e
. _,. ,.v... . LW«lmmo.
"""'ble -uc._ · d a
circulo. ~OO!o de mármo.1 de color, c0n10 eu la casa Doria lu largo del paisaje, y ved si podéis descubrir una linea rnr-
y eu otros palacios tle Venecia. n bien colocad una estrella, vada y Iraccionada como la de esta extraña cornisa. N ¡
a un lllt'dallón. o si os hace fa] ta un llrri lle, hacedlo, macizo, .1~ 1 • •• IJ a
,..sscu nnreis; es tnQll$lrtrose. Reú.tie todos los clemerttos de
pero un esculpáis guirnaldas que- se creecia que habían sido la pesadez; es dcs<1grndablll!11ente quebrada, sin recordar 11
ffi!Pleada; i:n la última pror.tajón. y colgadas a:l+1 después ninguna otra; no está eu armonía ni ron la construccíón
parn qiw $>?' secasen y pw:liei;an servir por segnnda ver. lillll'- rrl con. lá rlesoraeién, no tiene pun lo de apoyo arquitectural.
clmas. ¿-Pm 1w' entonces no esculpir som.brerosl' parece- estar encolada .al .muro y ú.n:ica:ménte la aparerne
probabilídad de su. caída le presta' una agradable cualidad,
14. Em C(U'DÍ5a recµerda por Sl.l Io:mna los 1:emi;i tes~de nup.s- Podría continuar. pero la 'tarea es penosa y creo haber
tra.S cómodas. ·y ~a encuentra po.r encima de las ventanas enumerado los falsos mo:tJvo.~ de decorado de- nuestra arqui-
de Eronlha cuadtailo ile '~ monumentos de) tiempo' la ae tectura moderna, los más peligrosos en su. mísms razón de
rn.m11 1 sab,.l, obra de arte tan c.lioca:nt~ por su pobreza co- su derecho de ciudad. los har barismos de su capricho :indi-
mo la; gu1rnaldiú por Sl.l profusión, es. a pesar de su a~- vidual son tan innumerable como indlgnos, Do merecen que
rente uwgnilirdncia' uno de lo~ peores e.nem:igqs de la arqui- se les ataque. P11~·0 las q¡te he nombrado son admitidos. los
lEl:tur<I ¡¡<itir::a n1tule-na Se tc;cordan: qt1e demostra1nos en unos por -su empleo en la antjguedad, los otros par el de
Tlaettm precedente i:.1prt11lo f1lW Ja r!Jrina ru11drnda erá la altas autondades: han deprjmitlo las escuelas mas altivas Y
df' iuff'.1;¡ pár i.>xceJ¡,nr 1i1, \' qutt 1Jel¡in adn-plane y Limllm'
}11 contaminadn las 111as puras; están ran bién, establecidos por
el rtispl~anv ,j,. 1.1m1 i.xr1,ngÍÓ11 <• ~uperf1c1e. Asi. t:uando la usos recieutes, que esto que yo he dicho .niás tiene su origen
Vl'litmi:1 d1.:Li.a {1•r ,.¡ i¡¡térprdtJ: dt1. (;; í11er·r.1.1. c:oru'l la tle Mi· en la vano sa tisfacción de testimoniar contra ellos que de salir
gnel 1\llgel ••n cl Jl¡f<(I 111fr·ri•,r ti~! pulAtlu ltiel:llrdi, 1!11 Flor&r- airoso convenciendo seriamettte ele su maltlntl.
'
f:1a, el frontó11 C.'l!edrado ere In íorn1a rnñs noble que podfu
154 155
-
f
l.A L~M:PAR.~ 'tl e LA Bti.LL"7..\
lS.. \t~t~no nas tleterulr~ sobre lo que rto es il\'J do- estas a legrias, por Ias cuales. la Nnturale?.a
m1ma de la crnamentacién. Lo que consntuye ornurnen- • heeé amar del horu bre, No pued h en tQdo tiempo ~
d f e acer que su hi.erbu se·
&acu'in lo determinaremos fncilmente i\plicruiJo nl1~'1 r¡t pro- ver .e y res'.113. y que Ílll.-ite al reposo, 11ualidadcs la
cedimienio de prueba Consistrre en atentas combinaciones Na turaleza tiene ésta pl'incinal meil"' que en a
e, . r- para e1 1unnhre; no pue-
"'
ue Immas qui' imi1arin o sugerirán las Iormas. naturales , de nacer que oSUS flores sean LiP.m lJ.
= e:xrendjdas en la vida, quedando co1110 la ~~ nllhlt• perfume. c;ualidacles q ue <!.l t la N"'tas .'fl enas de colar Y. de
. " ura eza 1on sns princi e-
ornamentación la que represente las clases n órdenes más les fuentes de dellc.tas. Lis Ul1 i cas cuolid d ·1 • p
• 'l " a es que e podra lle-
elevados -le la vida. L& nm ración Je las Ilcres sr.uá más no· nar serán as· referente.<; a los caracteres sev~os de Las ÍCIOl:tas
ble que la imitación de las jliedras, la de 1 os anima les n~ás que el hombre .no verá en la NAlurul-~ si· d ,
. • • ~-- 1110 es.pu.,, ,1r un
fJ.Ue- la ¿,.. las fleres. ·" entre ladas las Iormas anímales, la eX'amed . ate'llti5lttlo y· de UJ:\a atenció'" ,._, ••. ti
" , •..ur.c..i. y sostem a
ñriitación de la fbmla humana ~e.rá lu más uoble. Mas L(ic .dc s11 vista ;¡ de sus per1samir.nlos: el hombre nfl.tesi:tará tnnr.
das se combinen en Jas obras de decoracióu las más .ricas: bifl'>e sob1·e el cél!ped y ponerse a acechar cl entr
eeruzarmen-
to e1 e 1 as
L.' . t.
la t11Ca. la f uente, el arroyn crarrieirtl" sobre su Jecho di! can tos. ,. mereas antes tic <lesc1rbrir lo que allí ......
oarra eneon lrar
el mar. las nubes del ciele. la hierba tle los prados. el árbol el A!'CJUll!'lcte, Por encantadO?;ll que nos sea 1,en todo tiempo
'.argado de Irntos, el. ser que rastrea, el pájaro. la 'b(!ij1Ía, el la Nlltu.raleze, por agr.Eldablen<Jente que se ...n1e2cle en nuestros
hombre -v el á.Imel
~ mezclan 111 belleza d1· sus flores sobro el pensarnientos, <(11] nup.strós trabajos ) ;i lodti& Ias horas de
bronce de ~ nuestra existencia l<t conteroplació1i y !il senthuiC>I11r.l de sus
Tuda cosa imitaii\'a 115 JecQl'atlva. y siendo así, '1•ogarP al obl'll.s, esta- imagért suya q~ie lleva el arq1.1itecto r~prl!S4!Itta !u
lector fije su atención sobre algunas oousideraeiones get1erales. que no ¡niede pe1·cibir en ella. sino f10r un real esruel'7.o in1e-
las 1iníc.i1 1111e pueden llq!ll presentarse LO~J:e a u11 asunto lecto;1l rrui:- ella exige. de nosoIJ;os por !oclas pilrtes por Jonnl'
tan •·asUi. S,,. Ja; puede. para má.~ comodidad, repartir eu lrt!S aparece WL es[uena h1tilectual tlel rnism11 orden
qne eJ que
ratl!i(tlrÍlli. ,<:uáJ es el lIIgar cmrveniente para un rnonumento- noso-b·os necesitadnmos para poderla crunp.render \' sentir.
¡¡rquirecturali' ¿G.11itl es L'l modo natural rle rretamieuto que Es la liransu1-ipció1J o .el' solla rle u:n>i lmpreSJ.ón. producida por
debe tmr,r ornamento arquuee urral-' ¿C11ál es el empleo con- un objeto que se b~(:a ,. sa encne.utra, es uua Eonna que- rP-
1·.,nie111e rlr•l tol!Jt' en tu aoociaciñn ''º"
la f()lmtt imitativa <ir- sultEI de UJ.la 1nves1 igaci6i1. t'.S In expresión ~-0rporat !W una
c:¡uiti-..cUual? idea.
16. 1 - ¿(_;ual us el sítio dt! 12 \ll'TtnlT1rnln.ci!ÍJJt Pensad. li. AhoJ';t vennll)..• u.u iit~ttllllP el eíef'to que TJI'l'.)dw:iri11 la
di'.S(}p luego, 'llif! 11~ au;,rtl'r-1~ rl•t ¡,,, •1hif•tl'ls n;Jl11ralt?S 1111.e ""l'1f"liciót1 C'011ti111¡¡1 rlt1 la e•xpresnm de un belio p11w;amicrrt.o
pu~ A:!J.lt"Y'nlllr •!l :u-r1uil•'Cto -;r1r1 ,...Ju1.Hl1n y .,1,~11·11tll1s. N11 solu·e alg111111 1lt• 11uesl r¡1s l'ac11l111tle, "u 111u rrltllllll!llo tm 1¡He el
puOO•J in111nil1f u cu 11bra 1rni1.n1h·a !11 m11~ urirndc parte •In e~¡1í.rit11 110 putlía11l oliligax a esta IacultruJ a con1prendcrle.
l 5tJ 157
-----
"LA •
':;z\llrPAllA O& l.A
serán jamas de . . mcr.1,F-ZA
Supongam~ que en UlJ momento de seria preocupaciÓll, ele rrescura y su pureza
utilidad. los 1 b ..
h. UJ ~s ma l<i.do o rnanej ,
ahsóJ'benle ocupación, un. amigo nos rt¡pitien1 constanremeu-
por el Iu~o n1uchos Pª"UYl!l'Otl Os será preciso h lado; 5U
re al oldo ¡ilgíUL pa~ie de uu poe·ta favoci10, sin .dejaT1o en tarl · =S<tlllretili)~ ..... acer pasar
todo d dsa. estar18JilDS no sohlmettte cansatlos y clisgustatlos arres e1 calor ti e mucho , anos_ arrtes · antes de purl Iic l . pres.
Je h - ~.os,
BCCl'lo¡¡ VlVJr
del ritmo mismo. sino que llegarla 1111 ll')amet1to ,en_ que la
:;.tg:mficaciim en1era del pasaic t:e nos escaparte. y nos serla 19. ])e· fillr la l
hoy Je d
preci;o hacer 1t11 esfuért.o ¡>ar.a apoderarnos de ella y dese:g.- . . . y a ~unpleeybuan general -<le una .
se.nti.do- singul ar lm1111rtaru:ia
TP.<larla. Al miSm..· tiempo su cadencia 110 hahria ayudado al creme íl los Eil'l.es de la ví.tl . ' de no decorar lo que e
trEhajo de e;;i:.e cur.:o. mientras que cl encanto se encontraría quier dbnde .háyáís d a dacu:vay Ia boriosa. .Decorailº dn-
, hi b' · e po er .repo lli per o-
de ahora l!Il adelnnte di~inuido. l.e mismo -suc~de con cual- es tá ;pro 1 ido, lo está igu lm san; ª donde al reposo
quiera Oin [arma ne pensamiento tl~itlo. Si imponeis la mezclar
. la ernam
. ent a·m. 'ólJ aa losente ""IÍcisri
trat la' balleza. ES. .,. no
expr~ilma TI!f:.>tra> Ia"Cul1at4ls éllnndti el espíritu está eme ¡uego. Trabajad prime · iajos Y que .no 111ezclét: I
de · ro, 1uego observ ¡ ·
ar ; pero no. os slreáís
(!
peiiado en otroS caS<E, e<;ta ~Jll'esión será, p<)r To ¡n'611te, iu- une reja de arado domd
Iros grandes libros. No ol' a, :Y no b~rnif.éis de esmalte \1les-
<'fu;az:. y l!U ~i.a .~ ~u clarii1arl seriru sien'lpvP- desil"u:idt.1.s.
ni esculpéís Lajol'reliev g ~ee1s .r¡l. trigo con un. trillo labrado
'Y cr•n ~,. razon si la ímponéls cuando eL espuftu es'1.iÍ pel;lll-
pregu:nta.réi~· ¿I - es .pna piedra molar ''¡Cómo!-
;;imenle afeciado o aiormem:ado o :im,ponéis u.n pensamiento ' racernos Dosotros estó?" ,,.. :rue
pre Y pon todas pa1tes r _ Jd · · · .' .;,1ert;lmente; siem-
~raclahle en cuomstannas. inoportunas, esta expresió:p re- iti , ..... as ma . uras '"'•eg ..
SI o mas corriente las "- l o· . as tienen ltoy ccme
vestirá para fil"!llPre una apariencia penosa. l 1 ' ' rae l8das de nuest ...._ hn ' .
ray en as calles •Y en-las e·lUtUillCS -'-·' Jl'IJU!s'- iros
d a acenes,
. Nó
e'.~capru·ate, TIÍ mest rado r ciue no . esté ~" idC cornercmnte,
d ní
IS.." (Aplic~i~ el :principío a 1!$laS expresiones del pensan1ien- wou
v,el1 tados para decapar tem los emh revestí o e adornos m-
lo qui> perohen ~ ojos' Bct:or.cb1rl que los ojos están a vu'eS~ y no presentan la más ep _Y ellecer palacii:>~ d1; reyes.
11':1 rn;;rad mdS que In~ aúlo5. ·Al ojo mi sl:! le. pu.ede impeilir cuentra No .: ...1 . p queue ventaja alll donde ~P. los en-
. - .... enen ,,....uor al ru1:1 . • . . .
que vea". Su Dem•1 Tll' "" embttta uu1 fiicilmente como el del ducn- placer: no hacen ~ o ~1 pesi~1dad alguna de pro-
oldn; ff,!:lll!Jllmll''ªle ke se o¡;upa 1m seguir y acechar las prcpias formas Mueh de saciar la l'\sla y p~lltuir sus
f!ll iwtS t'WllidO el 01dr.1 l<SUÍ etl rl!pO~O. 51 le p)·eseo:t'.Í.lS f oI'Jl'l8~ de cosas bell· .• • '·l,U os , en;tm
· eJ1os son excelen tes coptas
r6:n "- a,:;, cosns q11e
. ¡;urns
' . • por consunuente,
. . nos .,,, .... _
agradnh!i.s mando él no puC'dl'o ll;in1er al aspirilu en su ayuda · · = encuentra mas- e1 e UH liudo oraterio°- v · • ,,_..,
Y eJJll1;óhí•·l•~ ~lgtw" , ~n una diFJ1q!Ú<:i611 1•echruiable, no graciosa consola en I .. mas ne u na
}<> i•1mp1a.cet'l'1~ 01 !!l ,ool:r:irr 1s 1:1 r1hjeH) vulgar. Pll'tó l1e- ros y son1hrt>reros :\ tiendas de nuestros especieros, leche-
1111r.>Ji1 V fallgaréii 1:11 010 ª"' 11.uJlil• Fnrmus hellas, y gas· liQ11iprenil ' e ruo ll$ q11P nuestros rorur1•cí11.ntes no
t.Jn~ fSl:l• 1nl!l111Ji~ ftJnDilS por la vi rlgarirllltl Jr los ohje- telas s en. nue sólo vendiendo buen ui, buen queso y buenas
. o olH1ene el que vr11gti11 los die.nre>s ni:raídos por le
1.!X 11 los ~alet I~ 'féÍS yi11\t·r11.iirn••t1h' m1J;t.Llados. No os
159
1 iíll
....
• :~~AR\!' UE _u \RQt¡:l'l'Et;Tl1l\A
L-'S $J:'~E'°"l-.-t:.
~ ...'US"·
1 hlJ 161
~~-·----
LAS ~E'I'E J.Á.'1PA'IUS DE 1-\ .'IJ\QUITECl'URA
LA r.,Ú\lPAl\A nr LA B"El e E7,,\
la estación. El camino d11 hierro es por t~dos conceptos al~
.,._,,,
mmo de ~"""""" ~
Ubrat'Se lo más
UI'!!ente. de1 que es preorso
. . . .
. . una tllo"''iiJ.ªd pr;opi.1'
tendría · solo
-si
' se roncreísra 11 GUlTJJM
primta posib1e. Trans'.~' aJ vmjero ~ [arelo ~iVl.ell~. Por rus fuies. No ~arg<iníis de sortíjas los dedes ue UJJ b!,crez·o.
un -tiem!l(l dado, el VlllJeI'O cambia Ias c~1<1ctt>rlstic~s mas no-
hlei de su Inunauidad contra una potencra planétania tie lóro- 2~. No es solamenrs en los casos cil;ulos eu los fJUe ~l·pro-
mDCión ~'o le pidáis que se admire dl! nada. Serla corno tlu~':"los, abusos de que hablo. No hey hov apenas. una apli-
caoron de obra decerativa que no sea erl par1e vituperable ri 1
pedbalo al .-imtu. Tran.~portaclle..sano y salvo. liber.tadle
ml!hno modo. Tenemos Ia mala costumbre de· itu.entar dlsím-
pronto; esto .e~ todo lo que os pedirá. To~á tentail:va para
lar las necesidades desagradables bajo la Iorma de un deco-
agra.darle de ot:ro .modo, será :ddiculez, }' un insulto roda ob-
rado descuidado. que por todas partes- s11 asocio con estas
¡ero por el cnal intenteis llegar a tal fin. Jamás hubo locura
neces1~des .mismas. No uitaré siao 1111 ·ejemplo, al que ya hire
maror ni mayor unpertinencia que e1 adorno, aunque insig-
alust6n1 las rc¡sas. que en los techos planos ile nuestras caplllns
mficante, en todo lo que concierne a los caminos de hierro ocultan los ventiladores .. 'Muchas de •lS\<15" reses son de un
o a lo que les rodea Tenedlos bien ¡meparado$'; hacedles pasar muy b~e dibujo. tomado de obras soberbias, toda s¡.1 gracia
Jiü1'. los paises més Iros que encontréis. reconoced su carácter '..\' ~U tl.clicadEl!Z~ S()iJ invisibles cuando están cerradas. aparte
moleste, y no o; ocupeis, por lo q¡Je a ellos se refiere, sino de que su Iomna se asocia en seguida a las grCJ.<c1-a$ ccnstrnc-
de su prontitud.)" de $U seguridad. Dad grandes emolumentos cienes !J1.1 donde suelen verse generalrnm:ite--,.Y todas las sober-
a las .senidi:ors útiles, graniles premios a los buenos fab.cl- lnas rosas tle.l g6Lico prhruuiu inglés y francés. espl!<'lalmente
canres, grandes beneficios a los obreros apros, qne el hierro las ro~qs !Jt:.ábad1simas rlel triforrum de Goutnnccs, quedan
sea resistente, el !adriTh> sélidn ) los vagones bien acondicio- despojadas Ú!l .su e'uéanladota infl11encill. Esto si.u que ailen1á-;..
Mdn;. No esl:ii quitii lejano el lIID'l:De11 to en <ilue -será difícil tengamos nada q11e agratleaer 1l Jn c:itada forma. No bav un
hat.Pr [rettte a estas primeras necesidades. aumentar lo$ gas- soió liel itue háye recibido jamás de l!Sfas rosas del lecho el
:m.enor rayo de al egrfa: se tus considera con incll f=aie
.
tos. DOT otra riM!i:::,
. es una lecura l\'lás valdría enterrar el
l1i~ se pií<rden en una iurpresióu gl!!léral de vatib ¡ronoso.
o
t;ro en In!. talud~•¡ue guarnecee con adornos las estaciones.
¿}Iiiuru un roto vutjeni tjue con,;in riera en pagar un supl~-
mentn sobre la linea del Sudoeste porque las columi itts de la '23. ¿Pero no debemos nosotros. se preguntan\. buscar In
t!mlami !!illl71!'rancubiertas de ruotivcs asieios: o sobre b1 LeJJe.:a1 en las 1omntt5 ~JU!? ·asociamos Q. la virl¡i cliai;a? Cierl:li-
munte, si se hace de un 1nodo compat 1hle con ella v r.irt tngaL'el'
del lllon" ¡.on¡ue en ella fo> vean modelos ele tbn¡~anG'S anti-
rlonde se pue<la bb.servar ft.tc)ln1enw: mus :no, ;i us ~vís
l{U!>S en las lxr1eda; de la estación de Cr.,.we? Jl;stu lll> hacia
ile ln forma bella comu de lluu <11:11\scnra 11 eu,•olt urn de l0s
nm f!U" dÍimlnuir el ¡.r!•1ir.i ,¡,. lrJ' rn¡¡rltlP-s aslries del llritish
caracteres propios y dC> la arlivídad de las i:psas-, ,1 si la iu-
..lut~1J1J11J y 11u" gll.Slli1/•n mr-nos lo~ fll''1lollpos ilel Hotl!l tia
ll·oclucís f'll lbs l'tig~e.~ rese11vallos al írabajo. Coh'JCaúla ei1
Ville d1: C.:rP.w~. l.¡¡ arquitt•r.tur;; rlr los cirmincs de )¡J('.11'0
(GS
1 r,z
1
,,.,---
•
UlD1eno:1~es ~ucmas al nlcalltt> de la vista y e.9culpicln tll1 I~I\ t.A:i.1·111\n.\ DE
..... "-·~··"
l A ¡=
t::a·n·..
un mllt~ f~o. podrá. según creo. ah:m~.zar lici!.luaenl't! In de cslocarles, l~niendo siempre ffi:C!SP.nle e] cuidado r~~Clt1
~ jJG"!E!CC!Oll po~b]e,
a su ª.f~cto ge:llerlll, ~·, di! ligarlas despnás al resto par 1;111&
Uert.unenJ!!'. 110 J)O<Ítianto~ ilesenr mayor acahanrie11to ,1 gradacíén de avsl:race1011. Tíay sobri· este peligro una salva-
las que animau la:> mnlduras <le la parlada S1u· de la catedral guardia . .'respecto de lil que yo quisiera imi~lir. No imiu;is
di: !'l~ci&i. ni c¡tri,,iérdtnos que tos pti.jaro~ ,i.Jl! Ios capiteles nunca sino Iormas naturales. y que ~(<is sean -sus partes
c!d µalaClO de los Dux ÍUl'ran despojados de una sola de SUS acabadas, las .más nobles, EJ. e11vi\eehruento 1lel d~coraila ilt:f
¡dumas. siglo xv .no íué debido a su .na1,uralis.rno. a Ja fidelidad. de
sus .lmitaciones, siuo a la imrtaci6n <le fonnas reas de úmnas
.'
3-i. <;qmetJch1 a estas restrlcrione!l, creo qua la escultura per- que no eran naturales, Etl taiuo que se limitó a la ralla de
Iecta pll'-le fam1úr parte de- la arquitectura más ,severa. MiiS. la flora y de lli fauna, Iué noblo. El ualcón rle una casa en.
el campo SaTI Benedetto, en Venecia, nos ofreee. una tle las.
va aijt> q~ ffill 1k:tlei:t:i6n era un peligro. Desde cl momento
manifestaciones prunitívas de los nrabesoos del siglo XV. Cgn.
en que el arqunec10 se deje arrebatar 'por las partes imitadas.
siste an Iijar soh1•e I¡¡ -piedra uno o dos tallos de flores VÍ'>-'CIS,
UDJc: el peligro de perder de vista el papel de su ornamente,
pues se ha di cho de paso 'que los aldeanos rle Francin e Italia
c¡ue forrnq trarte ilit un rnnjurite, y. sacrificará las Iucs y los tli'jen fl'<~t1Jentemer1te con un gusto exquisito. Este a.r.ib~-
las ;omhm, al HJCanto tle una escultura rléli1·eda y estará co se .desiaca eomo una sombra sobn: la r:ii;lllld hlanca bajo
perdido. Su arq uitecmra nt• será más que un marco o una le p~ tina de los años. y es a· la vez bello y p.ul'O. Tanto. que
montura para su esrnltnra. que el querría ven, colocada en la decoración del Renarim ierito que tiene e$las fonnes se la
rilriua; puede considerar con una estimación .inmerecida Pero des-
í'.()nvi."11'º, lill"". al jover1 arquitecto aprender a e.onsiqe¡:a1• de el rnnmeruo en que las Eonnas. que no eran naturales.
c>l adonio mntanv« .-:nruo exageraciones de gracia en al estilo. se asocrason a estas, y las anmaduras )~ los instrumentos dr
No es é'itf! el que rlebe, tenerse presente, ni debe obtenerse música, las fantásticas Jl msigmñcamss banderolas, y los. es-
a t"%Jlf:nsa1 d~ la int'!n1:ión, del sénudo, !le la Iuerza Y de la cudes bordeados dorninarnn cu su omsmentaeián, se decidió
(mianmt. ~. en verdiul, una perfección -la menor de lo~~s, su condena. y con ella In de lo. arquuectura del rnunde,
f sar1 ~ ••I coronerniento de rdla~_ una perlec.'.'1011
qui' por ella, l" tl)rnacl<i cll misma uo PS sino :u;a Iarnidad
!iÍ 35. ilY - Nuestra· l.í.l tima caestió'n se Tcl'iere al usci dol color
.itqlutl·c tural, Eiendo a la f'::t. r·I c,.lJo de LUJ esp1 m lu elevar)p conto Ott11Jn1entRci6u arquili>e.tural.
cu ..iadó ~,. a•I)( lfl .o tJIJ'ó§ ( .r•"J rirrtderlle ver prlmorll l0~9 J'.1'.e siento incapaz: dl! ª"Prl!Satme 1:011 segur¡dad sobre la
fci.d • u11 pwll.tJ ti" víeltt 1\P.~1'Tamr•r11t• ah;;lrurt1>, e.~tnrido d~- coloradfil1 de 111 escnlltn•11. )'o q11.isiem .lllÍl.ó hacer ubsr.m'llt'
1 In 11 fnl'r« ¡u;;<il;(J, '' i:X'11or11·iln •k· i•Follf .i:uouu; de~p1rPs este ptu3tO! 'la ~scull.1n'll es 1u repro.~eu1ec1611 de unu idea.
~ I''"e·L~
r' 1 .
d .. murr.11 ... u•~t>Jllj\,)1~ 1]1• UJI
"'
lllHOlOSf1 llrttha1n11'llh'/, rHíei11-ras q\te la ;t1'q11i~(!i:tru:¡¡ e; una renlided. !'..a Jdea sr
178 t 79
•
...
•
L.\.! -~TE L~•\ll'UA < PH .Lo' \JlQUTTEC'l'l · liA
!-A LÁl'<rP AR;\ l)l'. f;6. BKLLJ~ZA
mnrr~ que sea a ~ :aut1llidi1u de los hon1b.rcs ante ninguna
conduSldr; que me unponga la 011>-er, ación ele pnnc:iplos r1R- rizada con un objeto natural no se so.rprend<mi (le encontrar
u..~': en los adonro,. escul pides, 1:10 pin la ré las hojas 0 (!11! él una ·apariencia de cuida.do- y rll! esmere, l\1as bay lugar
]-:-5 _iiPiras (no puede. con el Iri;o de EJWul de ,LUJ color y a sorprenderse y a iníól'ma rse cada vez que se vr Un objetn
el Jani!o de ntrn, sruo que db-ptiudre el fondo y las figuras t¡ull' acuse descuido e i.ll'.rperfecci6n. Estn no está en el orden
en un todo aa!lonia.;o Notad lo que bate la Nntnraleza en .babitual, debe, pues, tener un objeto especial E<:tu sorpresa
IIIla flor ~e matice; 'Vanados· no hay una ho}n roja y la otra la experimentará, creo, todo 111 que despu~ de un estudio
blanca, ~1!10 en cada una uu purrtn de rojo v una zoná de atento de a lgüna farma orgámca abigarrada se ponga a co-
blant:Q o de orro color. En algunos sitios J)Och·áís aplita1• vues- piarda con un cuidado grande con toaos sus colores. En cual-
tro~ 00s Slsté'll:laS ~ f'str:echaTUell!e, y en Otros Uéjru·!~ l r quier objeto que fuese, se encontrarían los limites de lil~
par.tl~ mas velad por que colores y formes no .ccin- formas dibujádos Có'1 una delicaaeza y una precisión t¡ ue
cídan ssno cnmo do; órdenes de znoldueas que se ruezclÉtse.n .ninguna ruano humana podría s~h·. Se encontrnria en nu-
por un. momento. pern conservando cada una su c'Jj.1•('cci6n merosos easos la rlisposici9n de sus colores, regulados par
una cierta simetría gro~era e irregulares, sin embargo, e
propía Lo, !Iiotivu& aislarlos pueden ser Iamhién de un color
.imperfectos, cubiertas de alteraoiones. sujetos a toda clase de
lill.lado, Como a l'eC'eS la cabeza rle un plifaro es de urr e-olor
y ,u dorso de:- otro. asl podres hacer vuestros capiteles ª" accidentes y de torpezas. Obsen'l!d el díbujo de las lineas
sobre una ele esas conchas de moluscos donde parece que-veis
dis.tinto mlor que el Insta, aunqua en -g~eral los mejores
levan larse las tiendas de UD. campo: mirad con r¡ué sxtreva-
'U.Dos para lc;i;; e •llnre;, 5erán las supet:ficies grandes y ni;i los
gancís y con qué torpeza están, allí tolocndcrs Pero .IU) siem-
JllUIIO!!. ínteresa:uies ya por su farma. Un animal está rnan-
1111e sucede lo rnismc, Algunas veces. cerno en los o¡os de las
childO ~OÜl"I:' el darso y el vientro. r<tl'amen1P sobre las palas
Tihrruas deI pavo real, hay una precisión 'aparente, aunque
o .a1redNlor. de kn (rjr,;;: colocad. pues. átrevidamente vuestra
Sl.11 embargo. inferior a la del dibujo de los filamentos que
dh-er.idad de tinta• sqhr;, el muro J' la extensa columna. mas producen es ta mancha rlllliciosa; y en la mayar parte íht los.
lG!dlá ron circuI1spección En el capitel y li1 n~o}.dtu·a, Es casos· se .admite mi el color un grado 111' desorden Y Je varia-
gempre uu priw:ipin pn.ulMl tP simplificar el color cuando la ción, 1• mejor aún de dure-za y de violencia, !}lle seria mons-
Inrrna es nea, .y ~c<-i.·er<.11 C,ansldeJll que i;torln conveníentn
truos; e11 la J"tu:la Observad la difl.'reucia i'le prrtÍ$ÍÓO ."nir'e
E cWfllT fr..s 03pitcli.r:i y lo; nrlOl:llo• graciosos ei1 mármol blan- 1 as escamas tle un pez v las ·manchas sobro estas rnimms
eio n lwbfuu i.fe wr luegt. d"}fldos en este estado,
escamas.
Ji. lJ.ua ~~,. 8tl!!!11rada la i11tfl'f.,'t1rl1>nriu, ¿qué conto1,110 38. P·rorur¡u~ 1J111emiuar aqwi. p(ll' que si> \'ll 111 ~olor mu-
fmat adaptnrcm•J'.I para el SUl<•nta ¡J.,1 rolor? . ·
cho n1eior eu e.sl:as couclic1ones. '"''=,..;~ Sl se debi!
JNO· u1veou.,~
•
F.rtO) pa:íe<:U1mt•nte ..egun .. clr.. '}UH foda jJl;J'90tlt1 r(ltnilia· admiili· ' c9111p leccirSn el t111c Dio,s
· 110 (!U.1"'"
· ~ .... emplear eu m1
182 j.83
1
-
L\-" ~ •,A •tf'.>IUS OE: l \ \l\Q\JTI'n("l'UIV.
Ll\ LÁM P-Al!A DF. LA '.BELLl!llA
mi~n10 obj2to Inda.> las condicionas de lo agra9ahle. Pero
e> un hecho ciar.o que Dios crdena srenrpre el -colo?' bajo Las más exquisitas annaiil11s se 11ueden ccmpouo- de fuil más
!Drnla~ sencillas o rudas. Se han escrltQ una .multiunl de simples eleruentos, los unos tiernos, llenos tl1< mm11ihas. de
ionteria~ !'l!::>J)EC:to a la uciéu del color perfecto ton la Iorma eelor vivo o diú1ndic:!o; en ctros "amativo~ y brillantes
11
perÍe<::a. Pero .no 5'-' unieron ÍélifJás n:i se podrían ifi.tru:ls unir. vigorosos y citos, formados por grupos e¡ por· iragm~ntos des-
La e..YJ1erie11cia nos enseña lb mismo. El CQlilr. para ser per- lumbrantes. Se. puede manifestar ¡¡n la ·relación de s11 can-
fK10, de~ t\'.ner un omtari10 aéreo y sencillo; (y uo J:11,Iede tidad una encantndora pel!feccióu de propol'ción, y puede
presidir- su disposición una 'invenclón mfinita, Mns en todos
1~ un fiuo c~~ no pnede estar determinada, y jatilá1;
~ buenas Vldrieras coloc1111do en ell.ns figuras· bien dihu- Los casos su forma .no producirá efecto sino en tamo que
¡ada~. Tratad dF poner etLarden y en Ierma los aolores de un determine so cantidad y regule su 'aeC'ión 111 une sohre la
UUZQ de épalo. otra, por la intl'oducción entre la extensión de lo una, lo•
extremos fil los bordes de la otra, )e a&i indefinídamenf,I!. Las:
formas triangulares ~orr: cémodas y otras lo .más simples po-
39 • De donde deduzco que toda disposicién de color de for.
sible: el observador -de este modo experimentará glaetrr can
mas gtaClOsa~ .per si mismas es bárbara, Dar color 11 las lineas el color- y con el color solo. Los contornos curvas; ~ohr~ lodo
e:a¡u¡s.itJS de una mo1Jura clt> boja griega es un procefilmieutc)
si son elegantes, a:morfÍWlonín el color y desconcertarán el
~je Xo ¡n1eJ.,. eiu:ontl"lll3é nada semejame en -el color espirutu, En la misttra -pmtura de figuras, los 1n1Í5 granrlrs
natural: IlD -stli err lo ordinario. Lo , encu,;..u:o e11 toda Iormn
arfístas, o bien han Iundido los contornos. como a menudo
'
natural, jam~s en el color natural Si. pues, rruesu-o colar lo hicieron COJ'l'Cggio y Rubans, o intencienalmentn han dado
arquirr:ctw'al rru!ere ser· bello. como lo era su fcrnma (,guedn'tl,;. a sus masas una forma mdeterminada. como ul Ticiarul, o
do mrltativaJ, mr. Tunitaremos q- las condiciones si$'uientes: han colocado SUS LODOS más vivos en
los trajes, i:jl.ll! les JIOd,ian
iihnpl"" '1lla"1s de- color zonas. como en el arco .iris y en proporcionar lindos. dibujos, como Verenés, y sobre todo '\n-
las t~bra~; nubes r llamas. romo en las conchas y en les gélico. e.n el que, sin embargo. el vigor absoluto del color esta
plumajes . o Dlilllcl1uc di' f•n:mt1s J ile dimMs-iones variadas. subordinado a la ·graria de las lineas. Así, no· rérurrié ianuí~
T txf.is estas c1Jruijc1ones ;orJ llS<'t!plJhles c)P diferentes gr~dos éste a ésos matices que Sé Iunden en el Correggio. 001no sobre
di' e.-m"ro y Je dalíurde1.;i r de 1.:ornplicaoiones en la dispc- el ala del pequeño Cupiao. err su T'ónrts r Níerct1ri(I. liino
e:iaón. Le. zona puP.<11> t'OU\•1>rticse Au una linea delicada y sí('mp1•e al modelo más sevei"Q, la pluma del pR\'o ~ea!: T.~os
d151111é;:f<1 ~ ra; ·o z111zague11n res, LRs llamas se f)L\e(lr.n de- estos pintores huhieiráll considerado con una avlll1!lon infinl1a
lt•f'UUl'lar mi\~<1 n e r n :(1mo sobre la hoia del tulipán, y se el FQllaje r los dibujos de bl!Dderólas q1l_e_ forruall el íondo
pu1?1le:u repro·t,.ntar romo un irii1ngulu di! cqlo1· y rllsponerse de c:ólor de nuestros vidcios mot!f'mos, Y SlJl embargo; todQs
l!.'1 Íom111 ~ CSIT'C'J[as ~· r-n otraa to1•n1a~; ol punfo S!I p1Wd1> los q 11e he citado e.stabnu ya alarmentados -par el amor de lo~
graduar «.'11 111u1 rnirndia o en un r.uad rada n oi1 1Jt1 clrcule, ln1hajQS del Re111tcínile1tto.
1 íl·J 185
•
pintar y la 1,lruulw:a di: esooacíén tle sus Iíneas, habni nmri- Jacheda del palacio de los Dux de 'Venecia "' el modelo mas
vos qu" ~erán re\'e:ro;. para el pintor v muy r~Q.~ para un p~o "Y_~ás casto quo yo pu~J~ <lar (el úniGol <le Ja ;1151.1
rnomnnen:to. Cree, pues. t¡lll' un se bahía do ser 1111iy e-xatto aplicación del color 11 los edlllc1os ·públi.cos La esculttlra y
O! _inuy angular en la pmrurn arquht.Jctµi>¡¡l; así, r!isp9sicion~
las molduras son complet:a:rueute bl11ñcas; mas la 'mperJiciP.
qne son 'rirnperab]5 desds el punto de vista de la fotma, mural es abigarrada }- fQ.m:lada por bToque;; de m~l'llla'¡ de
son en color las mejul"'5 que pueden imaginai-se. Yo ha ha- un .resa 11áliilo, sin que el ahigan·amiento se arW!.)¡Ü¡¡e· ab$ir
lutamente nada con las fol'mas de las veutanas. Se cl trla que
blado. por ejemplo. ron desden del estíln Ue la época de 1os
la. superficie IUJ? acabada -p1in1&-o y que luego se mr.Ol'laro11
Tudor, que ll.ahienrlo renunciada a toda p.!ietens:ión dP espacío
las ventanas. Las· columnas de S11n .l\11.igl.tel rle Luca tienen.
y d., ~Wn.si0n +-habrendo dividido ~s superficies po11 uu
estos motivos en verrle y blunco, cada m:ilw:nna está bunacla
llllnl!'1".'infinito de líneas. sliminó además ll')s únicós carac-.
de un dibujo diferente. Los Ú(,)S son niu) bellas. pero el de
h!r~ que ¡iodián dar bP..lleza a la linea-, sac::ciíic6 totln .su
arniba ~ mejor, lib:J es,¡_:ul ttrra, sin ernhargo. las lineas hubia
niried<1d J. toda IB gracra que por -espricio de mucho tiem¡to ran sido bárbaras y las ele aliajo poco elegantes.
~an. sido Ja excusa de los caprichos clel estila fh1mígero,
-v adop16 «nn" Plemento principal un em reCl'llzamiento de
l.'ü•f'Sáño; T' de verticales. que incli;cahau. tanto espíritu de
40.. LinúJái1do.nos empleo de Ics motivos sm\ci:l los, según
11 l
nuestro color 'estil s1.1bordio11do a la coustn1cc1ón nrc¡tdtectural
in•encióu y habilidad df' c:h1J1110 como el [uegn de las m¡¡llas
o a Is ~ol:Cll11 escoltural, nos q·ui!tla aún tm UlOdr> de CllQla·
de nna criba de albañil Esta cmnhinació;o de mallas era. sin
m,ert tación que añadir a los medios gene.rnles de efcrto: el
,..ml~ ri~ color muy bello: todos lQ:. blasones y otros rno-
tlibujo monoctomo iJ;a.Lei:mediado de la pjnt11rn y J¡1 escultura.
trril~ que desde el punto de vista de la Iorma sénían mens-
Las relacio11e.~ del sistema cómpl!!l!l lW de.oor<ido nrquiteci-
tm~ resuhahan ":!:IJW•itos como lema. de coloración (míen- lura 1 se· _¡nu;?~en '[oi;ruar así:
~ .no i!Dcerruhan líneas aéreas o m,uy ezn·osr-aaas}. Esto
haG!i Cfº" una vez calareadas adquirieran una sfilnejan,za epi¡. lo Fant11A. o¡¡aÁNlc,, o~ '""'TE. - Escultura verdader.¡¡.
la Nntnrale"l.a fqllF no ~!' h11bien,i podido encontrar <>n la lntlt\pend.ierue ~' Je hultu: ripo~ aapitele<; } llega~
.!holdurns.¡
has.ta la perfeáció11 de la to1n10. que no ser.:1 abslrocta; de¡ar
0
-"
,...._
~SA.P.\RiCIOJ'C
. '
COMPl.iET,\ llB. LAS, FOR'NM.$ l)lllGANICAS. -
se en prmcjpal, o en todo tase) cesa de ser asunto dsl arquí-
1,ectp. Es preciso dejar e L plan al pintor s~gim el esmero di!
i\llt~ geamCtri:c:os o matices variables riel color :más vivo, todo el ediíicio. COl'UÓ para Ias, ohras del Vr¡¡raues y de Gior-
gione que decoran los palacios ele Venecia.
Del otro lnilrJ ele esta escala, partiendo del mptwo en color.
miar.a r:-P la,¡ diferentes Iormas de pimura q ne se pueden aso-
ciar a la o;rquitectura. en primer lugar. y como las más 41. El deccrado arqtri tectural puro se puede considerar co-
a¡¡rnpiadas a es:m objeto, el mosaico, dé una alta abstracción mo limitado a Ios cuatro géneros especificados más arriba,
en 5Il ejecución e. iu trotlucienclti vivos colores en la masa. L<1 que 'Se separa u casi inrpereeptiblemerrte unos de ~Iros, El friso
madcna J<> Tm-elTo es, creo, el tipo IllJÍs .noble ele este género. de Elgín, por ejemplo, es un meaocromo vecino yn di! .la
y <'1 r.;iplist•:ono ¿,,.. Parma el má~ rico, escultura. ·7 gnardaudo largy tiem¡>1!, a mi senur, la piel
semitlesnuda. Otro ejemplo dt!I monocromísmo puro es el de
En ;P.!mJido lnimr. el fresco. puramente de<:or,alivp, como
cl de la- capilla ,\rP.na, ~ noi; último. el fresco convertido la Caclia~n de Siw l\tJiguel de L11~a. Está compuesta ~ +o
areos-semejantes eubiertcs de adornos ignahnente trd.ha¡ad~.
en terna principal, come en PI Va1üw10 y n11 la capilla Sixtf-
na. PE-ro no puede ~eguir con perFecta spga 11'idacl Los principios oomp letazuents ta U a dos a la proíuud idad de una tJU l¡¡aija ~~n-
xímame» íe. en rnánnól blanco llano, en el cual los espaoO!;
~ lií ah$tracoón r.n esta nn111tnn11tar;ión en pintura, puesto
vacíos están colmados de trczos de nfita verde ~te proce-
t¡11~ IM eiemples m1i• nobles qu<, lt>n1>mos 111e ¡lRFACe que
. .
ihnuento us de ltls mas . comp·ü caej o,·~·· ~-•xiue
., WJ ct11rl<UID muy
c!r>l~ n ¡i¡ mn~1.11 ó'll't<1Ír:11 la facu.Jtcul de su aplicación a Ie
g1'flll1le ,y rn1a ¡>Xcesiva .11reC11ucl'ó n en . e 1 iJJ·usre,• lu que 11.
• eva
,,
11n¡uitccturn T..i; uhslrar::i:ínr• v l 1 <1rlrniTRhl'l senoillee que
tieD•!ll las ag••ntl!S, prc.pios rl1·I 111i1J1 •,u.lJllmc r-of<'Jridu. ne se consiuc¡ úJ1 l.l.'t1ba¡o• t!uble, puesto que ii 5 pretiso lalliu .ul)S
v11r.11s"' l¡¡s mifil:uas linras 1!11 w_ i .i.u.,nn
~ dl Y ea la ofilli · Ln e.~Ge-
188
l8Y
• ....
•
LA;, ~TI: LL\tP-ll!AS' Dr L-\ Al1Qtl01F.CT1JR.\
LA w\M'.PAJL\ liE l;.I\ BELLEZA
,¡,.;; :.lmplicidad úe las. for:ruas se ve al momento; Iós oj05
de l\l> an1UJales. JIOr ejemplo, son uuilcados por un ,pequeño raservados a. las cornisas :y a los pilares esculpi"d ·e
• .t~ _ os. rep r.¡ue
rWondcl fonn.ada por UD Circulo ue cerca de zuedía pulgada Ia gi;ac.ta 1,., las forll,las e5'cu!p1clas se ve mejor cuarttll) Pl1'\
se opon~ osadaruama a los di\rujos en color, n:tlentr¡¡s que el
!ahmdo en la ili:.,. Auuqne s.imple. hay a lTlénudo w.acia
co~ mismo, cerno lo_ h~oo -v.i11~ nosDtros. es simnpre
~al en las curvas como <!l'I eJ mello del JlE\jaro colocarlo enci- 111;17
saliente cuando se precuca en disposiciones mib'Ulares. A;i,
ma dt>) i ~lar "' .mauo derecha. Las inscrnstanciones de ofita
el color conviene a la escuJtum y Ja realza. y en opiJ<ir.ián
estan a ,..,-- ·a11.1tu a én su; Jugares. dejando scmhras negras
"- la blancura y gracia del mármol t>!:Mllpitlo es romo se ve
mmn lns dcl brazo del caballero. de, la parte in Ferioi-del cuello con mayor ventaja.
tle1 plÍJaTO ~- Je la línea semic:h·c,11lar 11li·e(l;edor del arco o liras
•·~ lliu1a del mismo dibnio. El restahlecii11iento éle lll& pa.ctés
4~- En e1 transcurso ele este eapf tulo y del 'preceden te he
c:aida5 lo eqilicaria mejor que yo puedo hacerlo, pero dibujo
enumerado la 1na~or 'J)11l'Le de las conc:Iícione.s tle fnena y
;;:ien11u~ les cosas tala C(l]TID SWJ. pues íengo horrer a las
de belleza que desde el principío afi:o.ué como base de las
r""'muracinnes~ Qui;;iera. en oposición con la abstracción ÚJ:' impr~orres más profUr.tdas que podían afectar al e!i!Íltitu
.s: .figura; menoemmas . Ilamar especialmente la atencián. del humano poi' medio ~la arquÍ<leGla:ra, Qµisiecra. sin am:bargo .
lector ;ohra .la 1oe.dección en P.l adorno esculpido de Ias CGr- me hte!ia. permitido recapitular sobre ellas, 11rdeuántlolas. a
msas de lwinncl. de las formas del motivo de cruz y fu:. lin <le .ínvestigar si podiau ofrecerse. como modelo d." eonror-
Li;: eAf r-d5 .O•!ocarlas entre los arcos y del adorno triangular
0
dancia, en la medida de To p_ós.ibl~ lle todas ellas. ~Wlián-
aln!dedor cU!l arco por la izquierda. donos¡ pues, .al priucipio del aapitíllo m :; dejando én ~u
lu,gar las 'tonilicim1es. incidentemente '1Xamfuadas en los dos
42. P.or estas riguras mcnocroma ~ tengo una verdadera pa- capítulos precedentes, tendremos la siguiente lista de los i:a-
Sliin F'.:q)lican Ir. ritla )" el soplo maravilloso que prestan a racterlsticas de nobleza.
todas f,,; obras Bll 1iue las he encotnrario. Creo, sin embargo, D~11Sió11 considecable, 111anifes1ada por sencillas líni!n~
qu" r.l grado ~rces11·0 di! abstracción t¡ue ímplir.an, nos o~~,SS terminales (cap. ur, p8.rn. 6° J. PrO} !lCCton hacia lo .allb (p.in:.
a colocarlas C>rl e! rango de 1111 arte progresivo o imperfecto; 79) . .Exte1J~iPn ae la SUperÍirie plana (páJ.T, 8~) . .l]vi.$ion
.,. •tU!! un edílirio p!lrlccln w dPherfo 1:3{is l1ie~ componer d.ii cuadxada <le esla superríciP (pá~'l' <J0) C!lnstrw:cióu. 1·~ada
J;¡ 1 !íiul1111-:i ni.is L·l•"• :ida f11n11a OJ1JIÍllJCa rlomiunnte y s~1- y visible (pa1T. 11). V.tgor delD sombra \pilrr. 13), mruuft>.s-
dorui1Jlltllt"/ ti500llda a motives dl· 1'.'dloi 'sobre las ~upP.l'f1c1es ~at4i po;· .ro~etolli~S cal,lldos (pi\rr. 18). Pr(lporción 'l'.lllliada ell
P.JOltn-.. ) plan .. 1. (.u wterlral d1! Pisa, ,fr. un n1oil~lh .~ás elevaoión (cap. 1v, pát•1• 28) Sime11·ía la1er111 1 pá.rr. 28)
•111~.idt. Escnlt1.1ra dehcad!si.i11n ~n l.1 base lcap, 1. ¡wrr 19) Pnilu-
111.1,, 1,1 d~ f.ttt".U, igttr? ¡1r.,1:ii;;1111r•r11J• rsfr, pr111r111111i
1 rr,lr;r 1•\l<t r••¡1;11 tuln •'11 !11111111; g1•n111~ll"i1·11~ qQf1t't las super- <11611 1le adornos en Jo "''º (pi\1T 11) !4ruHum 11h~lracb1 eil
frei • ~ 1" lorJ11l:!E J¡, 1ulHn1.f1•¡ y In• 11rariosos rollair.s e~láll los adoiruoi> iiilariote~ y mohltinl~ ¡cap. 1v, párr. 31 l. col!IJlle-
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LA ~IPARA DE LA VIDA
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1118 199
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L.\ J.Ál\!PAJIA Jm LA VlllA
~ cammo. Todes los hombres son susceptibles de ser
en cierto modo. helados de esta manera; todos es tátt, eu' cía y la lrigitl.éz. s6' a~dderan del hombre b.echó; vetl los tipos
parre, cargados y '11híerf-os de esta materia estéril come d(.' q,µe apenas llevan el sello fresco de le imp;resiJSn de La Idea
una cnr~; sin embargo, si ellos tienen en si mismos Ja víd'a obscurecida -poi· el l)rO ¡ ved la concha d.61 viviente en 511
real, estarán siempre prontos a romper esta cort.eza eon nobles forma adu lía, cuando se bao márdtltado sus colores, cuando
!U~es Iíasta que ésta Ilega a ser, corno esos sonibrio's lia perecido su huésped: es un espectáculo más humillante,
Iragmentos que se desprenden de los álamos, un tes.tin1oltló más punzante ~¡ue la ¡¡!ltclida •le toda ciencia y el retorno
a 1a ceguera de una infancia Impotente,
dr su Jlrol'ia fue.na interior. Pero a despechn de lo;¡ ~fuerzos
Serla deseable un .reton10 posible. Habría lugar para la
que haren los hmnhres mejores. la mayor paute de su exis-
esperanza si 1 a 'parálisis se pucliera toruar en un estado de
tencia se deslíza como un sueño, dende ellos obran y c.mnple~
'"'1tan~a; pero yo no s~ hasta qué punto podrlsmes retornar
;u papel a los ojos de sus compañeros de sueño, peso sin tener
a 1 a ±n fa ncia y comenzar nuestra vida perdida. Muchos creen
dnramen1.. conciencia de lo que Ies rodea o de .lo que hay: Jeno de promesas el movimiento que se nota en .nuestras
en ellos: son tit-go; e insi'nsihles 1•1uOQOt. No quisiera lanzar aspiraciones arquitecturales de hace algunos años a esta, parta
la definición hasta hacer un llamamiento al oído dµt.o y .al Yo no sa bria decir si estd' era ciertamente el germen da una
rorazón d?.bil; no me ocupare de ella sino en su reacción con .seniilla o u11 sacudímiento de huesas, y no desconozco (ti.re
esta. coniiic:üm tan 'Íre("Uenie de la existencia natural, ya de sacia .Iructüoso para el leqtOr investigar hasta que punto todo
:w.ehl.05, ya de individuos. de afícíenarse a ellos en pt:apo1·- lo (J ue nosotros hemes reconocido hasta aquí. como lo mejor
cimt a SD edad. La \Wa de un pueblo se ·parece habitual- en prluqip~o', poqi.ia ponerse e11 prácµca sín esta alma o vita·
1Dl!ule al cursa de un torrente' de lava. primero resplande- helad que pudiera comunicar influencia. valor o encanto.
cie1t: e .impetuoso. después suave J 1enti), y por úJ'~o no
.r.an7.ando •ino por la caída sucesiva de sus bloques helados. f. L1.1.ego en primer lugar -y .este es un punto importante--
Esta última CGndicióu es triste considerar. Tocias estas fases no es señal Lle. estancamiento en un arte el q,ue inri le o Lame
~n 11;; lam!'-'1\e Eenalarlas en las artes y en la arquitectura ,p:r:eslado, mas sl, lo se@ el imitar sin díscernimiente o t))inar
mt.')or 1¡1u! en uingt.lna otra. Suliordlnada, sobre todo, como sin gran cuidado. .El atte de u11 pueblo que se rn;senvueh•e
r:oibam!M de decir, itl. raJor ti" la vida verdadera, es tamhíén sin conocer otros ejemplos más nobles que sus pmmcros. es-
partlail.\rml'nte scnuhlr, r1J frío mortal de la vida falsa. No ftier.ms propiqs, . acusa ur1 p11ogreso eonsíante .. ·.v comnrensihle.
-..- 'uz.
CO.llOLCO n¡¡iJ.'¡ tan tri&te, una vez que el cspirltu está Iami- Q·uiz1\ se le. énnsillere 1·esperable. como onünar1a.i:i1eote_ se 1
..t Pe•1.·o 1-av
µ .4 sem•11
liarr.aido con esli?$ caraclr-dttinas, romo lu vista de uno arquí- ga, a causa de su es-pontal1c:J<19•1·-'" .,-
mi• treen.·
ctura
tcctur.J mui:n''· u deb1h•liu.l tl1, Ia in Íttnóa ~)stá Jlena da (\ill. . .Ugo n1lis mnjr.sluoso cllÚU el'! la vida .de ime.arq~da de
pr~ Y d!' i.11tcro1 la l11clta de la cit,11CJ11 iruperfuéúl ¡iamo la. Lle los lom bai:dos. lO$CU e iufimtil e.u 51• ro ea
ll!::nll rle flllrr~ y conthntidnrl-; mas ved c:6mo lIL ínrpoten- frugruento.s de , un 1lJ'l!t. m,ns
· no lle1 ' que ella estó pronta a
200 201
•
LA LAMP.Al\;'IDi; 14 'VrDA
admirar y a inritar y de la cual el instinto nuevo es, sin
mular la gradación de orígénes tle una copia. Tia[ael toma
emba!'RO, lo snücieutemenle fuerte paca reconstruir y volver
a <mieiar todos los fragureuros que reune o copia amnoni, ~na figurn l!l!ltera a MasaCCJo, o toda Una c;mñpo~ioión al
Parugino, con la uianquilidaJ, simpli~dad y car1dar de un
zandolns can sns prnpios peusamieujos, Esta armonía, en un
pilluelo espartano. El construct on de una haS.íüe<i romanu to-
pnncipio to~~· sin unidad. se completa rwalnxenle y se íu:a-
maba sus columnas y sus fll!.pil-cles dO'nde los podía enr.onll;ár.
dt en. una urgani%llción perfecta, en que todos los ele.m,entos
como una hormiga sus pequeños y -variailisimos trocitos de
~do;. rubordinárulore a su propia vida 'primitiva, quedan
~níidera Frente -a una tan franca aceptacion hay, pl)r Jo
1déntiros. .\o cono zoo sensación más agrada ble que la de
menos, la presunción tle que en tfil espíritu existe fuerza
~ndJJir 10> .indicíns de esta lucha megnlfica poi- la conquista
capaz de transforma» y de re~nerar todo lo atlQpmtlo, de
de una e.uslern:ia inrlepen.Uierrt que la de encontrar- pensa-
un senLimiento muy touseient~ muy elevado para qua me-
mii;m-us tomades. ver los bloques y las piedras ,mismas l{Jle
rezoa el nombre de pl1,1gmio; 1le un. seníimiente demasiado
en oua_.. .!pocas esculpieron otras manos ajustarse en nuevas cierto de poder probar y haber probado su independencia
muralla; cen tilla impresión nueva y un objeto diferente,
'para temer ~1l'eSlil' uu homenaje por lo que él admita de
CIJD!ti ~ bloques de rocas indomables [paca seguir 1111es1xa la manera mas abierta e incontestable La ccnsecuencía ne-
primera t:omparació111 que encontramos en el corazén, del cesaria de este sentinriento de fuerza sld el otro ratiícqir
to11 ente de lava, terumonios elocuentes de que la fuerza de que he señalado -la audacia de la ejecución cuando se hagn
la humaza de 51.1 Iu~ homogéneo lo fundiera todp .menos necesaria. el sacríñeio completo y resuulto !le! precedente
aquello; Iragm!!nlo; talci uados,
cuando el precedente se convierta en inromódidad->, Asl,
entte Las formas caracterdstícas del r01na110 l talieno e la parte
i ":ómo ~e pl'1!gU!ltará- liJ imit11r.i0n se hará sana y ·Jüpétte;ii del templó pagano, Stll=edió la uave :<!b~hin; por
; . ·if'.il'~ IJe,;graciadamente_ aunque sea Jácil enumerar los consiguiente, el frontón de la fuchaila .Oeste se dL•"lcl1a en u-es
~l!;!llúi d~ la nda. éSta es .Íití¡losihle de definir o ele comu- partes. de las cuales Ja ¡;¡ou:ián central, coma La ':r".sta de
nkar l.mn¡ue todo ínLeligeme historiador del arte ha insis- un yacimiento levantado por una eonmon'ó n 1epen -' WI a, des-
tid!J J4h:t la illlC:rencia r¡ue se encuentra entre las imitaciones embarazada y libre se eleva por encima de todo. Quedaban
dr: un ~nodo de progT!'so y la! de Qtl'Q de retroceso. n1nguno en. los extremos· d e '1as. n-l as nos
·1 t rnz ¡¡;¡~ru:e.> Je Iron-
ozos triau-·1
lw potlillo rnrnun1car po1· J~C'(> que fuese la f11erza de vida tón que 110 se- podla u e11J:Ollces revestir ile les modos de dc'?c
a1 Imi.i..d<_,i ~bn:- ttl que podia ver un:1 mflue11ci:1.. Es par lo radn' aproplados
· ' • a un espacio contmuo: • La diñen ltad• se hacia
- 1.... entral, del frotrton estaba
nreno;¡ intl.!t?;:ua(', Cllantlo no dfllm'<'Ch..'lb)a; r.l obs_er'V!J1• que ,-
más grande cuando la percion e _ b
d11J cnrac11 n!J c~L·11ri;¡lm1>111r,> Jutmll\<u,, 111· J;i Jn1ítación v]vn ocupada P,or columnates, que no se podían sin peL!QSlllN 1'U$-
w P.llCUOltrnn <'11 '11 fret111i1•P.7a y Sll audncin Su ír·w11uw.a, ,.
quedad dejar cortas en 1. as e;o>.1 rl!lllidiule>• rle Ias 11 as.
_ ·o se
.
.tire. todo, E'1I i;iuguJ;,z Jmnf.a '1: liizo ltfl t:sfnerr.o riara di.Si- .
qné es, lo TJHe h11l11ern11 ll ec 1 10 en tales circunsrnnqas arqiu-
202 203
4 lL'.tP4M DE LA '1:0JA
teE1as imbuidos de un la.o gran respeto por lo ¡wéi;edente:
a Ja aparente ~rpxobahilidad para los grandes dílrujéntes de
ne .hahrla sido iertamente lo que. híao el arq1.Jitecco lascat)o;
descender al CJJídad? de detalles tan despreci&dos entra nos-
continuar las cnlnmnatas hasta en el espacio del tímpano,
otros. NO' ~ólb admito ple:oame¡1te este hecho .imporlant
recortándolas en ro: extremidad hasta qlle el fus té di! la últi., fi
1o con~º· . .. ey
suic que qU1Sler11 todaYía i.risisti.r y decir que
!IEI cnlumna clesapai:eceria eenrptetamanta, no quedando Sino
el térm~ll~ peffecto Y ~ más delicaJo~ en su punto, es la
el capitel apo;yado en el ángule sobre el plinto de su base. earactertstíea de las .más grandes escuelas tle arquitectt¡m
.-\;q se trata de investigar en este momento si tal disposi.Qón como lo es de las de pintura, '
era o no graciosa. La doy ~pl()1nente como 'un ejem¡,lo de Mas, por otra parte, igual que el esmero perlecto es el
esaaiía casr sin i~aL que rechaza "t_otlo principio adnlitido adecuado a un arte acabada. el esmern pt()gr~vo es pr9nio
que le presentase obstáculo. y que lucha centra Lada diseor- de un arte llfog¡'E!Sivo. No creo que se- pueda encontrar en
dancía :r toda dificultad para llegar a .la realización de sus un arte poco desarrollado un signo más íatal de estupor o
Íib ;j ams propios.
de estaneamien to que el de vérsela desconcertado por su pro-
pia ejecución y de ver e1 trabejo sob~jar el dibujo, Pero
6. La Irauqueza no debe. sm embargo, excusar la nepeli- aun admitiendo el esmero alisoluto en su lugar; como el atei-
óoa ni ta audacia la llIIl.(J\'eci6;n cuando la una es indolenta buto de uns escuela de perfeccién, creo podarme reservar el
n la otra descarada, Es preciso buscar otros signos más
e; derecho de responder, ¡¡ mi manera, a dos .muy iinpertanles
noL~ :; a1;hc "5egru:D5 de vida: signos independierrtas a la vez cuestiones: ¿Qué es Ja perfección? ¿Cual es su verdadero lugar?
del carácter decoratn'O u original del estilo, y constantes en
todo fitílo resucl.tanientl! progresivo. ·7. ·Al explicar uno u otro de estos puntos conviene recordar
Entre ~~ es ImO de lo~ mas importan.tes un cierto aban- que en los ejct:Qplos existen 16 la ailopción de dibujos de un
d!llUI, un cierto desdén en Ia elegancia de la ejecución o en periodo progresivo por artlfices de un período grosero inter-
otm case. una c;;uboniinac1ón vísible de .la ejecución o de l.a viene CJJ Ja ¡¡elación rlel 1.rabajo eon el pensamiento. Todas
cencepcíén anlinariameure involuntaria. mas Irecnentemenre las .ma.niiestaclones primeras de la arquitectura cristiana son
d~cla. _ Erpre.;ándome sin temar sobre este punto. debo ca- de este género. y de aquí resulta naturelmente una separa-
mmar; 1111 embargo, con prudencia }' dlscrecián j~H ra e.vitar ciéu. visible más grá.ude entre la potencia de rt>.alizaetó~ Y la
el ne;go de !tn1 "T \'qUiv~o 1lcligri;¡samonte el sentido de mis belleza de la idea. Tenemos una imitacién casi .sah"ll)e en
µ~1.-l,nu. Lord Ltntka_y ha IIQllltlO muy justamente, y asi>- su Mldeza de un dibujo cl;í.si110, (i(ITI los progresos del.
·5
ru;:e.
rtltsm•J f.liJ1l:i.:n11l>, 1¡11e los n1ejores dibuj¡;iutei; •le Italia fueron a mocn car· e1 d~bu¡o. ·
1
una mezcla '
de gotlco grotesco viene•
tounl.üén aquvfJo$ !fU!: ]1UsiCTOn rn11~ ccridado en su biabujo, y lo ejecución se hace- más completa, hasta .que una ª~.on~a
J.;, e...tahiliifail Y 1•) "~m•:l°Ct <Í~ llJF tJbtll~, UC ~ll~ 1110Sl!iCOS O ·
se C)jl;ahlecl" e11 t re los rlo~ para lern'linru: por este equihbno.
de !.bdo ni.re elrmrnlr) .f111Ton '•<mJprr• p,..rfciclos con 1'elocirll'I en una ¡icrfecG1itlu uueva. Dcspi.uis. en el J)l"T¡odo mi qtlt' 0 1
204 205
1
L1S Sll:T.1' LL'JP.\RAS D:E L\ 1\1\QVVl'f.:C'J'Ul\A
[.A T..Ál\'IPA1\A 011. LA VIDA
L;S
.
SIETE L--1..'J.P~ I>E L.~AJIQUITl!CTURA
1
. . 1*,... ;:
'-;
..
..,:-.-;"'·~·
·'(-;..;.~:,_,
LA r);MJ'>AJIA DE LA Vil)"
¡
f
pide de los ·quabto siruados más· al Oeste. l.o,s· 1uT~ se inelinms
al Oeste y se hunden fil! el suelo. :nuentras que la cornisa
se eleva (o parece elevarse}, deja;udo de ledos modcs, y;t sea
por Ja elevacién de Ja una o por el hundimiento de los otros,
entre la cennisa y la m1splde del arco ~.cideotalun .intervalc
de más de dos pÍes, colmado. de adiciones de obra lle alba-
ñilería. Hay todavía un ej<:n¡plo curieso de esta lucha del
- - arquitecto 0011tra la incliuaci6.n de los muros eu las cohrmnas
de la entrada tirincipal. (Estas notas no tienen qq.iztí tilla
G'ran relación con nuestro asunto inmediato, mas me parecen
de gran .intarés. Prueban por [o menos uno de los Jl\.Dl~tl&
sobre los cuales yo. quisiera insistir, cóino los. ojos lle aquellos
impacientes arquitectos podían soportar imperfecciones y va-
2J l
1
a
•
1
•
--
a
Oeste 5011 más grandes que los ilem¡i"s, y en lugar de .estar
e comprendídos, como debían, en el .espacie <le1 Últim~ arto
<!! inferior, ocupan a la vez el lugar del arco y e] de- su larga
-.
{I J,
• pilastra. Esto, sin embargo, no ora lo suficiente irrcb'rulnr
~ para salisJa~er la vista del constructor. porque había aún dos
~•
o
y arcos superiores ~ara corresponder 11 cada arco inferior. ¿Qué
.!! hacer, pues. en la extremidad Este. en la que el número de
....
D
roila.. ,\s\. p;¡n.ieudu deJ Es11> las medidas Sf'tQtl las Slf:l'llientes• • tttúl Liplés ·alJJsiones al palncio de 'los Dus v 111 t'ampanario
de San Mareos corno llllltlelqB 111· p!lrírr.cilin, y más aún des-
..
BriUJ P11lm.o~
----
'Pul?d•< pués élel ruogto que mee del prin111rC1 por :iquelln salida del
l' 3 n 1
muro poi.' encima d'e su s$1nilit a rea tura; los pasajes s.1guien~
2' j o 2 '
3' ;l :l 2 L!l"s. frnnatlos al peri.óclico del arquitecto Wood y pubJjc;iirJo<
.¡• 'l 3 ¡¡ Y: a Sil llegada a Venecia, pueden nr~untrrr una agradable fres-
cura y proba-r <file los prjncipw qui' vo .l1e expuesto no ~Qll
La .aJCl.lhu3 superior e.<:1 ~ ordenada según pj mismo priu-
completamente rerrierues o aceptados.
cipio Se diría que había tres arcos 'para cada. par mferior-
"No puede cnnfrmdirsa con ótra ohra rsta ettrnña iglesia
Pern llO hi\y en ~lida1J sino l.re~I I' oc'.ho (O treinta }'
y este gran campanile tan grosero. E1 interior de esta igle5ie
iilt=:e, no It'l:llerdo bien la cifra 1 para [os veintisiete lie abajo
os sorprenda poi" su i>Ji:kll:iin fealdad nuis q11e por otm cosa"
Las. columnas ocupan toda clase de posiciones relativas Y ni "EL palacio Ducal E!S !ll:llJ m¡\\; Ieo que todc lo t¡U<> yo he
aun a.:i. :;e considera satLlechQ el arquítecto, le es jareciso mennionade prrredente:mente. Fiia11d~ en sus detalles, no
Ilevar la i=>gularula1l 11 les puntos de nacimiento <le l~ arcos, 1
puedo Imaginar ruodi Gcaci6n <usc.e¡¡tiblr> de tornarles acep-
v = realidad, mientras que el efi!do general es el de unu 111 bles. Sin embargo, si esta aira pared hubiera sido situada
areatnra ;'iinétrlra, oi un solo arco es de la mism11 ¡¡.ltur{I ltacla atrás 11e los dos pisa~ ilP. arcaturas pt•qt1eñitas, hehría
"w; cú:pi•f;w; ondulan a lG largo d.P.J muró COTT\O las nlas a lo resultado una muy noble producción".
far.ro ~ )a linea de 1u1 nueno. las unas easi en conlaeto eon Después de diferentes notas sobro "una rinrta exartitud dP
••l -~<Ión ín!eriar~ las ,,tras apilrbi.nrlose de cinco a seis proporción" }' snbre UDa aparieueia I~ riqueza V de hte~
~"Jldas. en, m iglesiíi a la que él atrlhuve un efecto agrarla)lle.. PlllSl-
gi,1e: "Hay quien pretende que esta in·~gUlari~~ es un -ele-
14. F_um1narem~ <1ltor11 ~l ¡1lan Je Ja fachada .Oeste t1D mento necesario de su axcelencia, Yo rreo ilec11lithn:nl!DtP. In
San '\!..reos en ,. ePJrtia Si ta 1 fachada es i1n perF ecte. por tl)ni;rari!), y he que1!i11l0 c(lnyimcjclo .tlc q lle un dibujo regular
il!~ cimr,,ptlY e vn 1"<1mhio u.nn de los suenos n1i\s bel.los del mismo genP.ro serio muy su pericr, Que u11 rec;f~uguln tle
e que dJó PMl;if!D la 1rroi¡in;1t.ió11 ltumñnll par ~ns pr.oporcim1es buena arquitectura, pero sPnaillo. dé r.nt.ralla a una ~sa
T ••1 exriuhiw rolen~ i:Tay. $in en1bargo. que hacer una adve1·· catedral erguido enu'e rlos altas· torres con df)s o'"kef1scr>S ~e.
r. ntm ni lér:or cobre ~
~!< rl11 11) q'l" \"{1
IP.: punro 'JU(l t¡¡I ''"Z 'le ii1térese. 1J¡>,.
br dlrhQ pr('t:<-.Jr·nLr1n.-•11f P llr lo proporcion
.. lante: que de cada ladc ilt> esta catedral Ulrl'.l~ do<> espartes
cuadrados se abran sobre el pl'imero y que uuo 1lé ~11.os de;:·
rienda hasta la puerta o basta la orilla del ruar. ,. tendréis
r~n WrJ!'J1i], ~brr 11)<!!0 .,,,~i'1n la opiuió11 que vo he C'Jrfll·c~1J<lo
una idea rle i:stP espert:óculo que pudiera clesaw.r to~o I~ qne
f'1•Í•'1'1 nlr al •:.rror rl•• J.ú tr1rrr ,¡,. lcilrJtfr,J• .. ran~lr11í1T111< p~l"
existe". Después de haber leldri los des pasa ¡e• siglúl!rltes
p'1n<JH \" por l 1 T"'HIJltJrid:itl 1l-' '''"'' <111111¡11 1lt"lpu;.o cln nll~
211
21 ·~
L.!\~ 51ITE L •\ ,TP.\R.\S DE L\ AJ\Ql. n!EC'1'tillA
l.A LÁl\n>Ml,\ n~ ~
sobre Caracci y ~uguel Angel, comprenderá el lt?cior poi' q1~ó "- •··' VTDA
"'""ood. era Incapaz de apreciar el color de Sa:tt :Vlarcos o de ~5: La . f ach~Cla en l!li-11 ~e contp011e 1:10 una doble sal"ÍP su-
cmnfU'l'llller la. majestad .del pruacin Ducal. psr1Ci)¡ 1~ ~Iemor ,de arcos que 0'.Dci=i11 esp~r.i11> <le lllllrO
"Los cuadros aqni fBolourn son. según mi gusto. pi:efe. decorado de !llOsa~co~ -y ~nste.oi'llo por series de columnas, do
zihles .; los de '\' enecia, ptrrt[ul' fil 41 llSCQttln veneciana 111ren- las ·qur en 1n sene J~nferior lle los art<1~ une tanda superior
taja o la de BoJania en .,] colorido y qulzá en lil ro1l'.1Posicióri, se superpone sobre ntrtt irllerior, Tenemos asl cintr.1 tl:ivl~itmes
la 5CJiel;; de Bolouía es decididarncnre- s1~-pe.ci0t· par el clibujo verticales de la fachada, es dP.Gir. dos seris d¡i columnus y
~ L1 !>i¡.n-esiún. les Caracci aqui rasplandecen corno dioses", el :nuto ·a;r<i.ueado f:J.Lte ~las seportan cneima, Sm
l!ltlh11rgo,
¿Qo~ <E" admira tanta 11n r>Ste artistn ( Miguel Angel)? Los a fu do l.igar las dGS pnncipales dívitionas, el arco superior
centra] (l;¡ en!:r¡¡d;i principal) se levanta por encima drl nivel
WIO~ -alaban ta l'l"il ndeza de 1 a eomposíción en IRs .Ilneas y
dela galería y de la balaustrada ,rp::re ecronan 109 arcos laterales.
J¡¡ disposicién de las figuras, He aqu.i, lo eonfieso. lo q1Je .no
La proporción de las columnas y de Ics .murQS del. pisa ínfe.
puedo cou:1prender. Sin E!lllba.rgu. vo. admi tiend'q l¡¡ helleza
rion es tan graciosa y variada, que savia preciso páginas muv
de ciertas fonnas: y de ciertas p:roporci Onés en .arc¡i1ilect1~.ra. descrlptrvas pai:a har.erlas 1:ou1prenr1er bien O!! P.~te modo
no pue.do c:on~ecnP.Dtlln1enie negar q.1~e mél'it.os semejantes
general puede exponerse asi: expresemos separadamemo por
pneda.n eristir !'ti pintm-a, m& tPngo Ja desgracia de ser inca- a, b y e, después a : r u ' li ( si1•tido f1 la mñs elrvaila •
paz ue-' apreoar- 1os,.·•
la altura de las columnas interiores, d" Jn• supeciores v el.el
Crro que estos pa<;ajes tiei.ten un valor real. Demnestran. muro. ~ diárnerro •11' la columna b 3!!J'~ generalníeun, al
el !!Í<... l"1 llic uu g1.H".o fa.lsi) Prt pintura, de im sah!i!r estrecho diárnau-o de la columna a lo que la altura b es a la a1t11J'a a;
• de una E'!lre(:ha c.ompren~hin de llt1 pi·opio 11.vlp. por .pa:rtP o un poco monos. tcniondo en menta el SJ1111 plium IJUT·
di? un ;.i:guiieclll. }" además ilein11esl.ra11 con qnii ou1iosas d]Smínu.ye la altura apareuf'e ile la rolumnu supericr Aun-
nacian- '' n11Slellria 1le- :1nríones ile la proporción ha sido que es ésta su proporción do lonmtud, una columna snperior
pra1rtiC<Jilo a l'!'"Ce> tal ane. W00t1. lln t'!fecto, uo se bntes- ei-t;l colorada por encima de unn l11íerío~- a veces otra enlum-
i!'il iutr.hgetHc en rus notas. ~Tas los que prefi.ol'ea el Ticiano .na superior se mterpOite: mas en los arcos ex tremes. rmn
a Ülnirci ~· !:'JWU..°lllran <ilgo ry11 .. adtnir~ en JVl'ignel Angel, .sola columna inferior sopomu 11~ snperinres, fll'l)pnrcionndai:
r.'Oil~tir.in qtH7..Í l'll haC.l'~r oonntigu llll P.Xame:n Cilnt<ili·VO tan exactamente ('óm(I las ramas tle un árbol. es decir cine
di> Ja B11rlhr<t dr San i\larco'i. Y ounqun "' curso actual de el diámetro ele cada colunma superior es ignal a 2/~ di' la
los &tt1nt d1n1•11ttl); r>Ur11¡teos nos 111'í!~en1a rr1n10 11robahl" la
1 eoltuuna 'infeoior [¡Q~ tr~s témuno~ de Íu proporoión están
f'ÍC!C.uciñn de: l1n mr.illficacic•111·~ f""'P'lf';J<1s por Wnocl, nos- tomarlos de este modo _paro e.l piso inferior .;RI su¡>l!J\ior, divi-
' tros ~'d"ll!M n1lcmoi; dichosos pol' habe1•la conternplnrlo dido en dos .mi~1br1'l~ principales ¡j Iin dr que Sll' altura
1irtttl!'!n1tBi t• r.:inu1 lo.. (llntorn"~ ,¡,,] :if61o ;;1 la rh1j111·011. rntera 1.10 ~é T'lll!cln dlvidír en un numero par. ;o:l~rx nn
tercer témuno con los pin1iculos. Esto plil'a la divisiéu ver-
'>J,.. !l 7
- ¡
•
rit"nl La lü1P111l es aun .más sutil Hay siete arcos para el
piso inferror. Sr llamamos a al arto central v contarnos b.asta sobre el clésa:r:rol](, 11oberhio de los ár!JoTe~ lle la u· -
~•a que
In ª-' 11Y111idarl mm disminuyendo en el orden al lerna tivo ,1, ignoran su propia belleza,
c. b, d. El pi_~ superior tiene eineo arcos 1· des pináculos:
rii•minnyendo en orden regular, el arco central es el tnas 17. Quizá, sin •!l:nnat:go. nos encontremos en la íadmtla iJ,,
grallde Y el último el nnis pequeño. De modo que CUl!ndo la '.atedi;a 1 _ae
Bavsux un ejeJTtplo ,rtlás l"rtrañn !JUB uinguno
nna proporción es ascendente, la otra es des<;i>..néle,ntl". como ~ es~; que 11'.31"05 iladn de variación osatla de la pretendida
cierras melorllas musicales, La forma -piramidal no es menos sunetrta. Consísts en <:inco ercos lle Emnlo!les rectos. los dos
apro:cimada al conjunto. con una partícula r-idad aún: ninguna extremos son planos, los tres del ·centro con puertas . .Pllrrceu
de la< culunmas de la arcatura superior domina las de la: lu primero én dlsmimtclén. en una proporción regular desde
el frnntén principal al centro .Las dos puentas l;¡ff'ralPS cst.in
arcatura Infedar.
tratadas di' modo muy &llrit:i!i-0. Los timpanos rlr. sus arcos
están llenos dt1 bajorrelieves <olrte euatro series: r-n la señ~
16. Se creería que este plan bastaba para una variedad su- más baja ha, en ·cad11 uno nn 'pequeño temple o portada
fi!lierac-, má; aún si no se ennsíderé satisfecho; norqrle -y -contenlendo la figur.i principal (m fa de Ja derecha es la
"""18 es un punto de nuestro tlmla arltlal- si llamamos SÍP..m- puerta de los i uíiernos con .Lucif or l. Este pequeño templo
pre a al arco central v b: e rl los la terales sucesivos, los arcos está r.9.lm¡arlo, come un eaplte], ~obre una rohtttma aislada
¡, v e Norte san.mucho más largos l')Ue les 71 y e Sur: mas el •, que parte ele! arco entero a 'l/ préxímamente tlé su longillliL
aren ti Sur es, en la misma proporción. más largo que el arco quedando la parm tnas gr.rnde por (uM"a J" estanrlrr en ella
d :~nrre. :r .además mas ha-jo por debajo de la cornisa. Mejo1· ]a pu,,rt'll dr (ll1lratln in tQrior. U. re.lodón exacta eu la ej1.>cí.1-
aún. 111J creo que une 511Jn rle estos miembros de la fachada, r:i6rr de das fl\leJ·tas ¡TUdieni llt'ttlrno~ a s¡rpouer 1111a relació11
en zipariPnría símétriciM, IPnga rea T simetría can ninguno PTI sns tli'merl'riones. NAd11 .re
l!Slo. La pel¡l1añ11 entrada inw-
dt' lm ,,;rm Siento nn poder dar las medidas exactas; he dor NGr-le miclé. en pies v pulgadas iuitlcsas. (mltrn l)Ü!s Y
reJ1111H:iadn A lon1arl.l: "11 PI lugar a cama ne su excesiva sii;te pulgadas rle 1111 lado al otrp, ,1· la entrn11n Sur cinco
r.omphcnr~r v rkt P.I11harn:t'1 produrido por la inclinación pies exactoS. LR portada 1>_x1erin'r N'orte mrde de WJU a otra
<f.,. lo; arr ñs: coltu:rmi\ trece TJÍc>• y ante 1iu1midns, In c¡11r ra nn TI?•ull¡¡¡]o
t\~CT8k r¡u11 hr. arti\1ll' hi1,n~1ti)1os, srgi'il1 yo dejo ,iruil- de siete pnJg¡¡1las en 1:alorcr pies v n1edio. Hay tambiéii
~u;ir-. te11mn prf'S"llll'S en el t•cpiriiLU, 111 construir, tuclo~ estos Ya1,u¡cio11es en el docorudl'1 rlc> los tímpanos n.o m1•110~ eltira-
(l'int'ipiCIS 1li!1!Tr "''"'' Creo 1p11? ••!los construían con sa a lma, nrdi)rnrio.
Y por to11nr111r nsI "" h·~ vili rr-rurrer ••n tnrles %!& lir1lrnr~
"Sta ví(l,1 rrnrra\·111•1'"1, et;t:i ~Jnedad v <..:La .::11Lilicl11d surpren- 18. Gren haber presenwdo ~uiki.entes c>jemplti; -podi!ia
d.-111=• Ru1.11r1.. 1n11 , r:r1 lllTTlll, 'oh1·n 1111 vracimro e1li.fir.ín, cpmn n1i1ll,lplir.a1•Jos htrlt•[i11lrln1?1f'Jllt~ parn pn1ber qua est.ElS "Va-
21 lj 219
t'lnQtIDe~ no son puros errores .ni !Úmf11 es desenidos, sino
resultado de nn desprecio absoluto. casi eversión, b11éia 18
ex.ic~ud en las medidas. Es en la mayor parte éle los cases,
a mi parecer, rma resclucíén finne por llegar a un efe¡¡to rle
-simetria por medio -le variaciones tan sutiles como las d!! Ia
Xanrraleza . .Podríamos ver !Jasta qué 'punto · era a veces se-
~udo este principio, examinando la singular ?J.isposicióít do
las tnrres de la cah:!dral de Abbeville. No digo qne est'o estr
híen •. menes aún gue fjte mal. mas es una prueba ma:ra¡viilosa
de- te intrepidez de nna arquitectura viviente. Hr1bríam.qs
podido de..ir mny bien que el Ilamígero de B'rancla, pon
nmrhJdo que fnet;e. =stába dotado de una vida más ardiente
r tan intensa como ninguna otra de las fase<;> de. la .inteligen-
eia lmmana. Aun hoy "ivi:l'ia si no .hubiera sido mezcladc
ron la lal•!'!!la<L Ya .fu! .hecho notar Ia dificultad general que
SIJP.(lne ordenar una dívisíén Lateral, cuando ella consta tl~
din partes igttales. a menos que no haya un tercer elemeuto
1ec.aru-iluulrn-: Ya dñTf: otros ejemplos· de cómo esta reconci-
lia.cif.u 'º eíecrúa HI las iarres de ·d:oble ventana: el cbJ;lStt'l,u;-
lor de ilhl~ hi:I resuelto muy "Vivamente la ·dificultad.
f\foleitado por l¡¡ falta OP unidad de SLIS dos ventanas, 11$'
-
me7A".lado Jas cúspides y Ita cnnrorneado. las curvas ojivales,
hasia el p1tnto ele no dejar por encima un trozo en forma de
~..bol por lll p:tr!<> iritcriq; -v lrr.s por 19 exterior de cada arll9·
AkX'lB•ÚI a Ias .Jiícrour115 ondulaciones tlf' las curvas del estilo
lliunlgrrr., w la iir,111 apenas mi la torre, a la que envuelve
en una m~a- t.Í•: gr:in f'Í"('.lo.. E> fea v mala, lo tói:ltctlo, pe1·(1
'
'ftl nmo )r.g Ialtn de ll1li~ gfueto pol In valen lÍll (J~P atesti-
guan, íll h'(:lor \'er:Í 1111 ejr.mplo (ir• L'!;lé mismo estilo rle E
nr1¡uitm:u1ra ')' J,. una l°ÍfJln•·i6u ..h- .11~ prtlrrri'f)ioi;,, por 111111 -
:
u11c1 i:W lf~ pil.lJ'í"!. < ~111.f\l )o IP1rn111.1lta 1111 it1Vt>~li~ucióH • sitios que on otta~, que tie ha detenitl11, IJ.ne ha prestado ~ás
')Ji"'''' n 11lgur10> ~1:1ulffiorr.~ J,. •1l11•·lr.\i v11rJoS qu.o SP ¡,¡uaro- ate.nció'u. que .Lay nt.ros tlesroidados. otros hec.hos di' pl'ISa,
'.L!:l
2~3
LIS ~IEI& ÚMPAltAS l!E: .U \l\QU~C'l'tnlA
LA LÁMP.ui..\ r¡¡¡. L\ VIDA
p aqiri el cincel h.d golpeado tl1rno, alll llgeramente y más
lejos de Ul1 moili> tímido. Si el obrero ha l)UílSLO su espírrtu y de mani f.iesto la Iorma, sina comunica
~~ _ la fu t't7ia; son toques
su camzén, en el trabajo, todo- se reflejará en buenos lygaxes. de luz Y de so1ulira. producen una arista o un huei;o vérda-
y cáilii L!1lZO liar.. resaltar al inmediato, y el efqcro del con- dero, pero para obtener una Unea rle 102.. o una mancha· de
jumo senl el mismo que el de una poesía Ielizmente dicha som lira ', ~e un .ll1btlo grosero, esta ejecución es. mny nuu-tad.'l-
J' profundament-e sentida, mientras que este mismo dibujo, e? la Vle¡.a escultura i!'aur~¡¡ sobre maderar Ios iris de Jos
ejecutado a la maquina o por una mano sin a~ .• no produ- ojos de sus ~stntQS- qui.mén.icos .son 11.l!mpli! osad'amentl!
cirla otro á.ecto que el de la misma poesía rep~tiJa tle mamo- tallados en. agujeros que¡ c~loaad.os de diversos modos siem- s
pre sombrios, don ¡i sus fisonomlas· fantastit:as, de miradas
ri,.i, Hahci gentes para quienes la diferencia será .impereep-
obllc~as. toda clase de expresiones extrañas y- sobrecogedcms.
·~"bles, mas para In> que aman la poesía ser1í _pre~eribl~ 1u1
Qu1z11 eneontraremos en las obras de 1\Tu10 tln Fiesole hi>
o1rla dt1 aingiin modo a olrla mal dicha. Igual sucederé
1 nás bellas modelos de esta pintura esculpida los efectos más
can la:; qr.te aman 111
arquitectura, la vida· y la expresión ele
Íll.eJltes son o'bLe~idos- por un toque angular y en aparien-
.a n1ano sobre todo. ::Vlejor no querrán ver adomos, qu~ verlos cia grosera del cincel, Los labios de uno de los niños c¡ue
mal esculpidos. esculpidos sm sima No me cansaré de 11et)e- están sobra las tumbas de la iglesia de Badía, no :pamcierulo
udo no es escultura deslavazada tau mala, además
UDa sino medio acabados, vistos de cerca, tienen, sin emhargo,
eculrura fria que necesariamente ha a!l ser mala, ademés una expresién más vivída e ínefnhle que cuantas illllll'i& vi
de ser fria: la apariencia de una pena igualmente repartida, en t111Í111ll.Oles, sobre lodo dado la· ileti.cadcia y Ja dulzura de
la :tranquilidad apacible por todas partes idéntica, de un tN1- SUS trazos i:afanti les. 'En un gmiei:d mh~Si!verQ, las ilJ! las
ba)o apábro tl'ruenla la uniformidad del arado sobre el cam- estatuas di! ln .sacristla de Snn Lorenr.o les ig¡mln.u. _v no es
po Uano.1..a friaklad sel'.iÍ en trn trabajo acabado, más sensible s1no por su c:m-ácte.r macabailo. Yo no conozco obr-a lle f.onnas
que en lll:m; .:i es et pulimento Jo que ha de producir la ab,soltuament.e v,erdader.is y CP:mpletas dande semejante l'e-
perl<>e1:11~n1 .;¡ "'°'"'
no .P.Ued11 alcanzarse sino con ayuna del sultad.o hayn sitio produ.eido. NI aún en las mistna5 esl!Ulturns
papel de Iija. más vale abandonarle desde luego al tomo griegas se le en~t('ntra.
mecánico, porque la buena terminacién no es más que la
l"XprMiim "º"'l'l~ta de la imprj!sión ÜPseacla. La terrninación ;22. Es t>Yidentc q11e en arqulteclU1l!I esta vru:oniJ eji.'CUción,
perlecta e> la ex11resllir1 d.e una Irnpresióu viva y deseada .. suso~ptible con10 ella es de conservar todo su efecto, pues
No R> tDmfU-P11rl1, bír·n, a mi parecer. que la es-cultura no llls años deterioran. una terntinación n1ás p!!rÍellta, es si.em¡m'
f..l.ltl51'1t> a1 tallar nt111 [orm« en la Hletlr¡¡ y ~¡ en tallar el de lo .mé.s ventajoso. Como es impOStble. por deseable que
•'fect(), Bil'll H menudo el maMllol uo 1Joria lil imagen de la l!St() sea, qne SC TCll18f(\ll per[ectiunente UD TIÚtnero tausidf'-
fc>~n:i ~<·1'dnrll'ra 111b11t:1. l!:I 1.$tí1l!or rlol1" J1í·11t;;i1· cou 1111 cincel l'llbJe de atlornos lle un ed.ilieío. se comp:re.rulern todo el nui-
La .lll.ll}'Orporlr U.• $Ui hl'.JU• · llu l1•111lrúu ¡11Jr cibjeto poner rito de !a Íliteligen<i!I c¡ne ile esta inip!lrfer.ciún mi6Itt<J hllce
~~
22-t'
L\.> S!Bi Eo LAMP~UIAS DE: L~ ARQUl'l!ECl'QI\,\
qtie "~':"' ruan~o los tQqnt>.s son nidos y raros. entre los di) siguientes por b, a 1 quinto y sexto por e-y por d. ten<lxemosque
un ~¡líribJ neglígenn- y los rle un espíritu cuidadeso. N0 es d (al tuás gr-ande): v : : e " a : a : b. Es mnravilloso cómo
fácil desrub~r el carácter de un simple bi;lsq-uejo. pero sin dependen <le la gracia del conjunto estas variacumss.
embargo, 1D mtemanm1os de 1u10 ele los bajorrelieves Norte
de la l'.:!lt! &al
de Bouen. Hay tres pedestales cuadrados sobre 23. teda uno lle los dngnlos está ocupado por un. animnl
los tres nichos pñnciprue.• de cada uno tle los lados y uno Hay, pues, 7Q X 4 = '280 anímales, todos diferentes. nada
si el tt:o un; cada uno de el!os esta sobr.e dos de . sus l11dos rnás que cama 'para .llenar los huecos tle Jos intervalos de
d!:air.ido de cinco lienzos formados por un cuadrifolio. Tene- lop bajorrelieves. No .hahlará de su dibujo general ni clt~ la
linea de sus álns y de sus es_~amas que eslán par encima,
znns, pues, setenta cuadrífulios en el decorado rnferior ele
salvo- en lo que se i;efiere al rlragon central, de, la vulgaridad
!n puerta sola. sin cantar la hilada exierior. y dos pedestalés
corriente tle 1u1 buen trahiljo ornamental, mas hay en sos
.d"' fuera Cada -c;uadrifolio está adornado de un bajorrelieve, trazos una muestra .de reflex.ión o de Í'llll tasia c¡ue no es
~do el c:.onjunto a poco .más de la altura de un hombre. común ppr lo menos P.II nuestros días. El anima L colocallo
l:n arquitecto moderno habría creído ei:1temlerlo haciendo en el alto izquierdo roe algo cuya fbnma es. apenas -visible
i'1al16 Ios aneo cnadrifolios de cada uno de los lacios de Jos en la piedra cleteriprada; pero está en actitud de roer y no
proeiliiles. Pe-'"D no asi otro de la Edad Media. La foi;m,n se -puede menor de encomrar en sus ojos esta expresión que
fr'~l parece ~!!r Ja de U1J cuarlrifclio compuesta de semi- no aparece nunca, según creo, más que en los ojo; de los
ctreulos colocados sobre los lados de un cuadrado, mas se des- perros que roen algén objerd jugueteando y ~e 'dispcnen a
cnhrírá. Oe$pllÉS de fijarse, que ninguno de los arcos es un llevárselo, en una loca carrera, Se- siente l¡¡. signilicaciéu de
emicin;ulo 'y quP nmgana de las figurás básicas es un cue- esta mirada, tanto tomo In puede fijar un simple golpe tlil
drmlo F.&to~ últ..imos son ñguras romboidales. de las que los cincel comparándola .a los ojos de la ligura ac-osta~11 a la
nngolns a~?S u ohtusos están encima, según su dimensión derecha, tie aspecto sombeio y huraño. El dihu]o de la cabeza
Ra rmii gra.uéle o más Jl'i!(lueña, Los aTCOs ele los Indes se y el movimiento del gorro sobre la frente son bellos.
dM}tt.i!D t:ín bien como mal los ángulos de] paralelogramo Examinando el conjunto de cualquiera de ellas, podrá pa-
qUl' l~ anciorra, dejando en cada UIIO de los onatro ángulos recer miserable :y wosero, sobre tocio si se comparan sus
dímensiones o delicadas tallas; mas cuando se -ccnsirléra que
un JnlP...rtaJo d~ f11mw ürtrl'l'nte, ocvpado cada t.U'IO por un
no so11 sino e1 simple relleno de un i:rrteI'SLicio ~"terior de
11iwal .El tanlttüo el!? rad .. lienzo es, pues, variable¡ los dos.
-una portado de cat~aj en la que hay más dJ.> t1·escientos
11úcri!lrr< 91n :ilto~. llls dos siguJenles cortos y el más elevado (11r:11,que en mi cálculo rto he comprendido los (ll!d~es
" m as al 10 qui! Jos ,fe ab:1jo. En la ~r·ri~ flé n!Jaj,o, reliaves que
exteriores). es~o ates.t1gu~ lo qu~ era el arte ili! unu epoca
~ l:i rur.rt.a, m 11osotrtl! d<>.signluüos- al uno v al otra, de los ~e la Yitllliilntl u1á~ noble,
dm tn(enores rque sou i¡,ruales] por u al uno, o 111 011·0 de Jos
22r.
..
L\S Sn:TE: W~!PAJL\S. DE J._\ AllQUI l'ECTUI{,\
24; Croo que la verdadera cuestión que ha~· (LUé plátlt!'a~, U J.k'vn>AJ!Á Dll LA V,!Dh
lac.ant.e a Ja arnameznac.tón. es ésta.
¿Ha sido hecha con gusto? ¿Estaba satisfecho el attt.ista menos podría resul íar de la atlopc±Qn enérgica de esta ele se
de díbujo.
trahajanrlD en ellaí1 Podía ser el trabaje lo más pe.no_sn posible
1•
producirle_ sin embargo, tanty pldcei· como penoso fuese¡ Mas hay una cosa que aesotros n.o 'podemos hacer, Y _.es.ta
de confiar e] ademo a Ja maquina J: las obras en J'tuu~icl.on.
~..¡ es preciso que él fuera dichoso, si no, 110 Será un lr!lbajo
Todos los metales estampados, las piedras falsas. las 'mnta-
lleno d.> vida. Qué cantidad de trabajo excluirá esta condjción,
ciooés ae, madera o de bronce -tle la ~ivenciQ,¡de las cual~
no me an:ie;gare a deternrinar:la. mas la condicióh es '.formal. estamos oyendc alebanzas todos los Cl~as-. todas las cons_
~ 1ta rorncada tocientemente cerca de Rauen una iglesfo ~ •
trucciones pequeñas, baratas Y lBciles dé ba.cer, todod eso ' ili:.
gótica: es, a decir ~d, bastante burda .en su ·composición
lo c:iial el mérito consiste en su .dificultad ·n:n;ifi..:_,
• ma to os T"3~ estos
gaieraj, mas ex<esit·aniente rica eu detalles, La ~ayor parre son obstáeu 1 os sobre :nues 1 IO u' ••VR- muy.
. cammo ... w toso, UWJ.
de ~ estan dibujarlos 'con ~to 3· evidentemente es obra es.h:i no nos hace .U más felices ni más ~~ios_. no aumentar:,in
de un hmnhre que ha estudiado los IJ·abajos antiguos. Mas 1 ullo del entendimiento ni ~ privilegio de .la <!legrl~.
es tan znuerm antro las hojas de Diciembre; no hay en toda eNó$org 'harán, en eambio, más super fj C:ª.• 1
es ~ .e1 JUic10• · mas.~o
1a fachada un solo toque tierno, un solo toque a,riliente. Los Irios de scrazén, más dúbiles de espn•1tu. Y con ~ ·no
hombres gue la .han hecho le tenían avel'sión y se alegraron tamos en este mundo para hacer cosas en las c~a es .
de haberla roncluido. En tanto que así se trabaje no se 11arií riollei~~ poner el ccrazén.Tenemos. !!~ Jnacar
estam · un cierto• tra-v
si.na so~r las lll!1'edes de arcilla. Las gui.rnalclasde bajo pon nuestro pan, que debemos hacer d boon
- senergia,
hacer de
bie<lr.i del Pere-la-Cha:ise son un adorno lná's alegre. No . po;r mrestr
un otro trQ b a10 .,.,...0 nlucer
" ' 11.ue· e emoedias o par
6 Ni el uno ni el otro se debe haser a m
ohfendcei.;seníunioow pa(?andolo -el dinel'o ne puede com- coraz. IL .. . 1 un ta d. Eo que no valga el esfuerzo,
prar la ;-üfa- Na ~toy bien segw;o de que podáis ohtenettla necesidad, sine con vo Q . á l que tenemcs que hacer
¡¡cl!clt!.ndali¡ ~· lruscan.dt;la Es cierto que de tiernpo en tiemw no lo hagamos ~de luego. U~7. •0 • del ~orazón y tle la
""-puede eucourr&r un a.rtilke que tenga la vida en si mismo, no tiene otro objeto que UJJ a¡erc1ao d caso 110 se -p11ade
. , til P.h. sJ . mas en to o ·
mu ~te uo Ee ocupata en trabnjQs inferiores -trabajara yo]untad y es mu , • . ' d al mismo tiemp0-
nasar de su débil ub1idad. Sl no le amos. a nuestra in-
por ser 11cadtm11:0-. La Iur.rta ha h u.l<,lo <le la masa de Jos ,. h . J1lleslt1a enetgf a. i'f\i com'lene . ·
artífli:1;1 titi),'1. e imioro e11 t¡utl mPú.i<la pudiera rerobrarse. naestr,9. ·'-d
rar.o Yro· avudas .mcomp.au'bles con su autoridad m
1<i qui:~ es ~ll!l lodo f.!tl"o i.:o11<agrado él UlJ adorno esculpido mortaliua
. . ~6111· trumentps d e ¡ o; qt 1,. r·- 'a -presclrtdit se
,_ ""'fll
Permitir qtie· ms • t\filcncs construyen
en fa ~nrllcion .acw~]de <:sta íuer-ra, ~e> iu~r..ribe dírectamente JI
en el caplt~lo duJ r.acrifiuo, pere sólo f'.(Jnl(i .s11c1-i.fir.lo n flCOJI rle.>lir.en entre
. e ª Y las cosas
. r¡ue nge.
· "'
..........
. 1' Gla con un ln~u .u.u.ucn A-to 1üstillto de
6~n S;;gú11 yo, el 1'11ír,,, 1nr,.Ju de d"r"l'fJtlo rico (jllP J'IOS qwido
creaciones- dti su u1tel~. tosos.si pudieran. a los Ein!Jl!-
su propia mauo obs11qu1n_na11 ~ fotili1ar así la meluiliosa
C(.ln'fiu.1.• "11 loo n.1,;,1ir:.os g1!0111<!1 rit<1N en r.olor, y liste por fo les dol cielo C:Dtl org;rnill0$ P ·
22a 229
tarea Hay suficientes ensueños. suficiente bajeza y suLiciente
~.msu;,Jir!ad eu la naturaleza humana para que trnnsfolllJJé-
~ en metámi;os -sns escasos momentos de e~jile11dor. Si
nue:.t.= \'J!Íl! no 2$ a lo mejer nada n1as que un vapor que
~ un instante para desaparecer- luego. que apatezca,
por lo menes, "!IUO una nube en 1a5 alturas del cielo y no
cti!IlO esa> t!nieblas densas que enslllll.brecen el Iíumo de la
LA. J_,AlVI.PAR.A. DEL RECUERDO
burn<J.U y los remlod,unes ele la rueda.
'
U, oU:tt
•
L\i'>Il' \.RAS DE l...~ .\RQ1JI1$C'tu~
.la-.&ti el tronco nudoso de un lirbol espeso JlUC' .sostion(! y .CA ~~fPAllA DEL iRECUl;:JU)O
eenunua la l-Ol.un1na del án,,:"t>, J lfcl que la wasa de hojas mármol. ni aún rli- las .eaciones del .ausmo cenuneme, y
::=broa 'Y em:iquece .en CO:nJ•mto. El capitel por debaio en- menes tenemos excusa alguna [!Or no prestar' atencién a
cierra mrtre su folia¡e una figura de la Justicia sobce Ul estos puntos (J'Ue aseguren la duración de un edificio.
~ Trajano haciend1J justicia a la viuda, A.tdstótt>le¡; ch; Como esta es una cuestí6u tle las .más imp0}1lln tes jlOT su
die leg?c ~-~o o. dos asuntes más que el. decorado de la 1'elacián con la elección de diversos moúos de cl.ecorotlo. \?S
p~ .nace 1n1nieligihles. ~os capueles que vienen a conti; necesario estudiarla con. bastente amplhud,
troJa?'•n representan, sucesivamenee, las Virmdes como ga.
.rartt1a de la paz )' <le las fuerzas nacionales. ,- lbs \licios 9. ES raro pueda suponerse que las consideraciones v las
e~~ de_sn perdida; y por último, la,Fe con la inscr~p- intenciones. benévclas de una '1glon1eración de hombres, iCl
oan !ilL>s
uptimo rr Deo est, Del otro lado del eapitel hay extíendan n;Jás allá de su propia generación. Qu.i.ui cnnsl-
=_ ngw-":.. qne arlara áI Sol Despue> vienen uno o dos capi.
;eles ertranameme deterados de pá,jan:is, y después una serie
dereu la pes Lm:i.da<l como un público. y trsbujeu per atraerse
su atención y merecer sus alabanzas: pueden enniae con ·ello
rt!p~ primero diferentes Irruos, luego trajes naciona, para recenoca- les méritos reconocidos y someter a u11. tribu-
les, Y ~ Ultimo, animal!!'& de los, CÜYersos _paises soihet.itlos na 1 las iniquidades coutcmporéneas. Mas totlo esto no es más
a Venooa. que 11uro egoísmo, y no implica la 111w1or c1.msidert1ción par
10$ intereses de aquellos qua qrugérámos VI!!' engresar el
'
circulo de nuestros admiradcres, y sobre la autoridad rk los
8. Afmra, sin .balíJar de edilicios mas mrportantes, imazí- cuales apoynrínmos voluntariamente nuestros dl'reciios actual-
ll~G· 'll -. . . . .e
'u "-'-ro _m~u~sll!no de Indias deeorede de este modo mente con testa bles. La idea do un d~tercs I)Or la pO$b?rÍdud.
di: ~~hucas lriswnc:;;~ o simbólicas; fuertemente construido miswa. la idea de pr¡\otie<rr en cl mfmlento p!'eSente la eeo..
en pnmer térmmo. después eirculpirio de bajorrelieves re- illlmÍll en favor 1Je Jos q(1c¡ han da uacer. de plantar bosques
pr:~E-ll!and!> • nuatiw combates en las Indias y con una a cuya sombtil podian vivir nu~.strcy descl!llJjentes o ~diflcar
001Clmenrac1on de ílnres Ot:Íénta 1 o incrustada de piedras (le ciudades que lJabitarán naeioues futuras, 110 ha sido co.o1ada
Únnn.!P UI! ) d ¡
· ·• e crrientos P < Pcor¡¡do 111á$ Jmpertantes estarían jamás. que yo sepa. enll-e los n16viles i·e:onoeiclós de nu~
Ci;mpUE'itas d<= umnn ·
- o r"'"• Y d ~ paisaJes
• · 1Jl • d os, y expresarían a~here~ No h.ubiéramo;; j 1,12glldo con>~Tl te miesti:a IlUSIPil
e:1 1llame11te lns fantan u;is r1 r. l cu 1 to 1J1 d o ~111''"'1garios
, sobre la uerra si nuestra 11Lilidncl querLda y teflexi11nada Sl"
(.~ru, ·Nu • por la
tuld •. fI · · ~ ·
s• J\ e n,. WJ ~ti¡1:1~· 8~1 DJJ1 loD10S de L.istOl'ia? ~e(.idese únican1ente a r1ue.rlros tlllnpnñetos inmediatos \. all
'· fas :o'j¡' '.\·m '111"
no 1.Cnen1uc i11111gi11aoi611 suficiente p¡¡ra a los suceso;CS de rtüestra peregri11ouió11. Dios .nos ha pr<'>t~do
un l'I1!1!Jantn e:;fu .. r.ro -v "'"ta el estn Lierro. du:ran\e. nuestra \·ida¡ nr1 ~ más ql1e un _bil!ll
., "" 1•.;; una e- las 11111yo1·l'ls excusas
qu .. !rOrtl.:JU.GS '"•rl!i•'n•.,. ·•~ .
,. • - " ..., 1111••s1n¡ 1mp<Jtl'nc1a eu esta materia, wteto a Teslitllr.fón. Pci:teneee e los q11e TI.llldrán pesp11P<> de
!JI) tt'flf!llJOt J1fl1r.!!1' en ·~urr.»11115 j . -'--•
nosou·os, oµyos T10J.LW< •"'- ya inscritos en el lll1ro de lo.
"º e·v¡.uu
~ ,-~ 1 ,. ll(>~OI ror. UIJ6TJIOli, UJ t'11
2-H 245
l
~-~··--
y fo aprorlraa a m Creador. úm tal piedr<i de toque. no hay ohjlfto.s naturalés del rn11ndo qu~ les rodea. se ve por com-
accion ru ª""' r¡u;:: pueda s& P.Yaluado en !l'.JJ majestai.l. Cuan- plem dotada de lenguaie Y oe
vida.
.Jo rotl~lnly<UllDiditemos, pue$ que L:i)nstr11/'tn~~ para sieinpre.
Qu.- uo w.a la.o li4ilo por 1:1 alem-!a do la hora prese11te y J101\ eríodo de esta duraeíón es pana el que debe-
11. Para un ~i:=u _ •varnes de la
la tinica úUladad .dP. ~tu. QuE> ~ea u11 t:rnbajo por el cual nos · ;_ Cierto es que no vamos a pn .
en•:lJ ;¡grarlr~dri:S r1U('<Jtro§ desce1ulífln lf's, ('len~eme$. r.olocutt.cli!
pi~-tlta :soltl'f.' J•t"'lra, 'Jrl~Jlep.:ara 1u1 tíenJflQ en r1l t 1 mi estas
mos CO}IStrUll
alegria de. 'ª •
r!"1a.
p¡¡rfecció.n
ele su carácter suliorürn
te 0 a privar a crerras panes
•
delicadeza de su ejecución,
ríec · án posible, porque
IÜMru.- si-ron con•,.ptu;ula1 sng1·atlas porque 11ues1.ras manos "UJl siempre debe llegar a la 1ne¡or pt>I 1 ci - s tales detalles
Isa 1<1• ""'"' \' flU" )n~ ht¡mJ,n'!: ·lirñu r.1n1~ide.ranrlo la labor
"'
sepamps TJU~ quíza eu
, , el transcurso e <! os m
.
'º
· ..J . L, .en un trabajo
. rrcciso tener r.u1.,¡¡uu, .
In rrhd•'rrJ lntl'lc;j111fa '',l\.llnuf fJ,, illJul ICi r¡111• 11uestros dehen perecer; :n~<1s es 1
.
·r·
de no saon 1rar
uinmma de sus cualidades
e- •
J4'1dl'T lñdFmn JlllnJ 110:1¡1"1§ 1" l ..r1 rnn\'or l{lor111 di· U11 <:Jl de este ¡?euCJ;"O, .0 leba 11110¡¡ /Ji> su ruerza
d r.scal .1 les, y- e¡ ue <11 consírucci n no r .
frcio T"!l fW¡mn•I•:, tll t1Ír><l11, 11i di· -11 ¡¡í1·drn .. 111 d(! su r.u·a. Sn •
247
24li
•
L1S SI:ETI;;. L \MPARAS DE L.\ ñ.UQVTJ'ECT ORA
'J..¡\ 1.Ar.tllA!lA nai. :JlECummo
;; lo q•~ en c1 sf'i? de- uaruraleea perecedera, Esta debía ser,
en 1q[l~U!; cirrunstenrias. la ley de lo buena composición: , ~ que la esencia de lo pin tcresco tonsístia en lii expresión de
Uis "ruinas", Sel'í¡t curioso. ver una tentativa de ilnstmoióu
la dl!'J)Orlo::um de la~ mn;.a~ más considerables dohía ser, en de esta definición terminar en una pintura de llores .marchi-
efecto. una cuestión m1is importante que la ejecución de las tas n de frutos. ;Jjados, y no menos curioso Sé¡¡u1r las e:tap¡¡¡¡
pequt·ña,;. :-.1..5
en arquitectura, una buena parto rle esra 1 de un razonamiento qui), d.~spués de esta teoría, quisiera
ejl.'b:u:iñn fill 1!$ hahil slnn en Tu mérlitla e11 que tiene presen tes \
explica.e- lo pintoresco de un b<miq!J.lllo en ccmparacién con
!CS' l!!ecr~ µmbabies ifel tiempo: hav en estos efe(;tos 'una lo de ua asno ya erécido. Mas el frataso mayor en estas
lreíli?Z.il que .:;radie podria reempleear y <¡111.1 nuestra destroza daíínicioues 1;iene excusa, puesto que es. en roma, una ¡le
!tebla OJn~har y amhicinnnr, Aunque hasta aqui no hayamos las euesticncs más obscuras entre las · c¡~ce se pueden lícita-
hablado de la impresión de la edad, hay una belleza en la men le somotec a la .1t111.ón humana. La it!Pa en si es tan
pá,tinn de los si'!IOS tan real J" tan grande. que llega a ser múl tiple para el espíritu ele tos diferentes hombres se¡¡ún el
~1r:11temr..nle ohjetn de la persecución especial por parta objeto de si;t~. ¡life:rentes estudios, que no puede '.'~!! a nin-
da ciertas escuelas de arte caracterizadas ordinaria y asaz guna deííniclén abrazar sino un cierto nümeec de sus formas
v2gaJIIEllÍ" con el nombre ne "pintnrescas". Conviene al fut innumerables.
que per=igames lijar la verdadera siguificaeién de está ex-
~Wit. tal como ED nuestros días es géneralmanta empleada, 12. Sin embargo, 111 c:m·actt-rístíca partícular que distingue
Ha."r. en efetta, IJUe deducir de este uso un plliuci"p~o. que In pintoresco de otros caracteres propios a los asmrtos perte-
h,;;hienda '~..do de base a una gran parte de verdad y da necien les a las esferas m/ís elevadas del arte ( v ésta es la
f:rilieza en nuestras apreciaciones, l10 ha Sido aún snfíeien- única de.finiciqn qui' .nos importa aotualmente). puede expo-
~mt'.IJU; esfudiado, para hacerlo aprovechable. Quizá ni11gt1na .
nerse con brevedad y de una manera tl-"··'üva
es.rru • Lo • toresco •
, ¡nn
palabra d!! la lt!Ogua (~JitasJas expresiones teológicas) en estos caeos es lo sublime -parásito. Lo sublime, come ID
bya EJdo ohp.:to de disr:u.sionf"i tan freeueníes y tau fW(Ylru1- ,bello es en ~ senlidO puramente etimológico, 11in1oresco~
gada!, DllJgm>11 sm ernbarpo, ha quedado mM' vagfi. Es, pues, . ' que es suseép libl
es de.mr~ . e de poo · ~er convertirse
. en aswitQ
dr- intaP.s Úln'SJ!gar la t:!encia de esta idea, que todos sienten pura 1m el.ll!rlro . .LO sulilirne es. euu e1;1 e~ sentido pa:rlull~~
. · . Jltir ¡¡'-'1:sir.1ÓJ'I a lo bello. ,~...)
en &p!ln!!llcia J crm rel11CJi511 ~ nlijetos semejantes, znas ele ,1 ue vo q q1eto Jarl e. p1utotes.ro vv
In qut: Ti>dai la~ d.!ft11idones 110 han c:irlfi oirá cosa t( Ut.>' una n1us
. , . l <
de pin tnresc(1 1:1n 0$ a un °• .
t • de 1\IHguel Angl! 1 que etl
"
P.fllmillr.1!:1~11 J., y d~ ohjetos r.on los cuales estaba
t•fet:t01 los del l"f'rngi11(>, Lothl V<l7i qi1e Q) 1'1en1er1lo ~11.llün1e ~a ~
'·' , l lo bello 1\1~ esta: earacter.sllcu. de qu
re L1cumndó cl tfnnino o cJIS."'1.f()', 1lci illi:;lra.('cionos más i~efl- •!.! pm· tll'lcuna· e e · 'rl tlllvilccedor
·~l'reraclo se con;i ern rmn 0
f"D!• mm que 11~ que l!IJ otro urdan 1lt> itlP.fl~ l1a11 ci1hiN·10 w 1 generu 1 e 1 uso t!'l<"t' 1 u'-li'~e-•lavo
· bl' • ilo P~to e~. os 'ª ~ ~,,
do> r1¡m_,u¡¡; cll!T1)n ÍnViY-fii;:&rJonl'!l u11;1.&ff511·as Asj, re11lC111l:e·
il pArn 111 J1rtr>, es lo su imo par~s ' · • _ · nle· deo los
. il l , ortares meno. e,P.nw. ~
llll:nlr., uu C'ltlt:(I tic ·~ie nrlc 'l()~lefli;, gravemorne Ir- l11ottifl tle los arcnlent11~ o I! ,os <ar ·
!r49
24~
LA l.ÁM.J:A(l:A DEL RECUERDO
oh1et11S a los cuales pertenece, La pintoresco se envuelve aisla- Uni~8l11enle de ellos depende la fuerza _y lu sttLlim11, In~
dantenl" en riropar.ción exacta di' un alejamiento ele este srunb1-as 110 existen ~ino ea -vii;ta de los rasgos. Al ecntranio. en
conjunto t1= pensamiento que es la earacterisuce propia de Rembi·and t, Salvator Besa o Caravaggio. los trazos ub •!XÍ1>teli
lo sublime, Lo pmtoresco revela, pues. dos 'ideas esenciales: sino 1>..11 vista 111! leS' sombeas. La otenui.6n es atenida sobro
Ja primera, la 1.k lo sublime la belleza pura de ningún modo Los caracteres de luz u de ,sotubra accidentalmenta pri>yPda-
filil11l]'1!<;!:!1 y w llegando a serlo sino en proporción de 1o dos sobre estos rasgos o .alrededcr de ellos. y S1Jbn1 ellos es
subirme que a .;Ha se mezcle l; la segunda. esta .si 1 uación asjmismo alraúla toda la potenéw ilt>l
artista. Tul Remhrand;
inferior o nam<ita de lo sublime Teda carácter Je 'líneas o enco111.ra1n0s frecuentemente un sublime esencial en la rnven-
di? sombra o de expresión que e:ug=dre la sublime, engen- ción y- en, Tu e~uresióñ1 y \l> en~qµtnm1~ al .mismc IÍémJio en
drara lo pintnresco. 1'.o me esforzaré más tarde en mostrar ttn ru u~ alto grado en la: l üz, ) en la sombra misma. Mas.
extensamente cuáles son estos caracteres; mas entre los que en generaL es un sublime _parásito, o in:íe:rtado con reladón
'!: admiten generalmente, puedti citar las lineas angulares y al asun lo del cuadro, es éJJ es~!1 medida misma ~wres~o
qllébradas, las 0J105ÍC!enes vigorosas de luz Y de. sombra y el
i:t"..!tl'ib-tE viclentn T E'Ilé@cn de los colores. -Eil clec1d es aun 14. En la ojecución 'de las esculturas del . .Par1e111Íu, la som-
máF cansidetable cuando, por semejanza o .por asociación, bra esl á frecuentemente empleada come un fondo sobre el
dícbos 1..mo~ CYOC'!.Il objetos llenos de mi sublime verdadero cual, resaltan las Jermas. Esto es muy visible e11 las metopas,
Y llS_eru:tal c:nmo roca> o montañas, r> nubes tormentosas y -y lo ha 11.ehitlo. ser otro tanto en los l'rontaues. La ~9m~ no
elas. S. estes caracteres u otros de un sublime más elevado renia otro objeto que el de mos.trar el corrlol'l'IC'> de las ~glll'llS;
r más abstracto se encuentran. en el corazón mismo y en la vista se detiene sobre sus linea~ :r no s.obré las ormas
!a n1~"iancia dP lo ri se nosetres contemplamos --Ci'ml.O el de sombra que están detrás. Las Il.gurns mismas so~ enb ~
~UlJWnf' de ~'J1guel J'~} tlepende Ue Ja expresión. deí oarác- . e concehi
posibl · idllS Bn [!u:u
lena 1< iz • rea Izadas .por .reOe10>
· n-
•A•
exactam.lW te com,o en a}mln[í.;
.,-- va-·
Ll!T normal de rus fil!llras más que de la nobleza de las lineas
•
Ilanres: están díhu¡ndas
M la CG-m)'l'1.<ición-. el arte que representa estos caracteres fi,gw·as' blancas sob1~ tIJJ foutlQ sou1brio. Los esrollores éSlllD
~ enrueatra en cttal1uadli!S acciilentale.s o exteriores, resultará b sea ab~oh1tamt>JJte nece-
• dispensados de Lod11 ~om 111 'Ine no - . · han he!;hp t0<ln
lo plnfures;;o. sarla a la cxplicaclon ele la f1mnn: ) ~ l' ""'·tice
. 1 Al ·onLrano. en la esCH LUra e;v
lo posible paxa cvilat a. ' . lcl samh~1ita
13.. Mi, ert la (,;r(ur¡¡ de Jris rasgps 11«1 11ostro 1le · .... lla 1n1swa en ClhJl.'l.o l pen
h11·m;n1ó lu somhn1 -,;I'! tonVTe•·•0 e · ·· ,.,..,,1·b1e Je 1'er
. colo 11 ohscuro1 . s us-..- ' .
I~ninri;i o d" hn~lir•J, lt1§ <nrnhl">•~ Dll 1il'ne11 por ci],jeto Se la consnlt'Xll como µ 0 L f.i IJ1l< h¡UJ sido e¡oon-
r rr, lmr..<'T t·ntir n1ejor •'I c(ll)t1Jrno tic• los rasgos. Le a1enc1ón ilispues-10 en .J'.llll61lS agraclnllllls. ..~s . gt .1 ·su ..-11rtici6u; v
-suh11r .... na1 se , •-~
d"I ~iect.Ptl•Jr ce fijrt tlirccwrni:-nt•· 1nj,,,. dir!Jos roggnij ( rs t:aÜas Í!'!!naeutl'DIC>Hle pora ] l fClr!llllS q:Ue reCUb!'e,
d• r 1r, '!n!m- kl'f r.a n1• l"rl!S ~nclit J ,,.. tl•·J ohj1•ICJ n•prr'~l!nllulo) • . si• uirMquece
!!l lllnJe ª ... ,.
¡.vnen•as i ·~ as
.251
250
-
LA'.'. !-ll':I'E LU l'.\BA< DI\ L.\ \.R(¡t.rTrEC1'lmA Ll. LÁAt:PAll~ .Om. ltllCtlEITT)O
fin de comp.l ira r y dt> vaciar más lolo puntos de som bras,
11 ha referido un espíe persa l<i visnera de la Jnitalln de las
Hay. pues. en essultura y en pintura dos escuelas en cierto Termó pUas, o releer en Homero una descñpciún tle la fomna
mnclo cpuestas, de las que la una torna como pun !(t de partida ideal para comprender que· era puramente esculium! esta ley.
la forma tt>encial de las (:05RS, ,. la otra las luaés y l(!s· s'dlll- q_uo limitaba la represeutacién de la cabellera, cu)daudo que,
hras que sobre ellas accidentalmente se unen. Hay entra en ·:rr<1ZÓ;u de la ventajn necesane que presentaba el elemento
ellas ilifenlli115 grados rle r:>Jl()SÍ_,:ión, grados b1 termndios, ·"ton10 material, 1.10 contraniase la nitidez Lle las Iormas del rastro.
en las obras de Correggio. v Lodos les gratlos <le elevacién .Más tarda, al cerarano, el artista lleva toda su ate.nci6n sobre
o de decadencia en las diferentes numeras; mas se denomina- la cnbellera. En tanto que los rasgos y 1~ miembros son de
la una Ja escuela de Ja pureza y la ól.rta la escuela de lo una ejecución torpe y grosera, l~ cabellera eru:ortijada •e
µimoresm Se encentraran Iragmentcs de una eje<1µc;i.ón pin- .enrolla., escu lpída con un relieve osado y sombrío, y se orde-
llllt.-,ca en los griegos. ~- fragmentos de una ejeeuoién pura na en masas de. una =a111rntaciQ'n tnrb¡¡jada. 1ilay un Sulili-
'i'lI el gr~l.iooi d!' la una como ti!'!- los otros hay ejemples nurne- me real en las lineas. y en los claroscuros de estás masas,
roses. <Obre todo en. las obras de Mlguél Angel, en ras 'rrue mas con relación a la faz rapresentada, es un .sublíme pará-
[a¡ semhras se ccorrertiai:r en un medio de expresión precioso, sito, y por consiguiente pintoresco. C~ esta ~~ slgnifi-
~ <e ralocahan, por ccnsiguiente, en el número de _!as carac- catión puede c¡<lm:prencle:rse la nplic;¡ao~ del ternnt10 a la
reristicas erenciale..c:. Yo no puedo ahora entrar én esas dis- pintura moderna de animales; es distinguida, en: efncto. pres-
tmcianes y en esas excepciones múltiples: yo no me detengo, tando una atencion par.t:h:ular eil el color, el bl'illo -Y la con
m '!Íer....!ll. sino en probar la pos:ihilidad 'ele uua 11plicaci6n extura "tlel ai..1:ecim·. y no solo rssulta cierta en. el arte la
a tensa di! la definición gellel'al, .clerl'nición En Jos animales mismos, cuando lo sublime dape.n-
•• ó<·dsus
de de Ien1u~s mirsc:nlares 0 de M nun·1D11ent· · 0 e
Sl\S
L'i, La 'liistinci.ón se ew:ontrara aiui no solo en'h·e las forr- alributós neCY:sarios y principále<'. como en el ~obalJ: ..~
riculanmente no ¡lecimbs que .son -pmtorescas. sm9 q .
l!la! Y la.; Ml.mbra.i r:amo afección de ;iisunto. sino entre las • 'bl · d asocsarse ron
formas es-~n· hiles~ las formas ~ecun•larifl~ Se encuéi1tra una consi<leramQS como 1'!$éncialruente si1sceplí es ~. , ..l.
· • · , ·
uua tema nuramente iustonao. ........... a r "~ 1· ,,roporaon e.xa~w.
_,_
en
de I~ prinripale r.listincicsues entre las esc-wela.s de escullura blimid d da en los ""'menios
la cual tal carácter de su UJ.W ª se
¡· .
e
dnunálica y rnntnresr;, en la faclllr.l c:le los rahe.llos. Los 1 bi ote ilel león. en lo; CU2[Jto.
i<rtist;is del ~11tli> dP. Perir!es I~ '..O»§idi>rahan romo ut1a cosa secundari Os, en Ia n1ele.IU1 Y e g · ¡0 datlo ante-
. l 1 hirsu ta toiuo en e 1 e¡en1p
ilp;!J'I>', indit.J'lhan con I;, fi)'1uJa de algunos llueas groseras
11111 del ciervo, E'.Il n pie · d ~l ~ en las plu.m11S.
lir · rnyas e 1 u e .. i. .. 0
J' 1M ~honlinab.it1 llf!jo lodns conceptos 1J Jqs rasgos prinri- ricamente del asno, • eu s s ,.• lo son en 111' te, Cl1 . µ....rnarción
•w1·
rcJ{~ F.1 in1'rt1! prt1h&r 11ue "514 rorfl 11nu í1l1m l:oJ11plP.ht111en11' ósl-os lleg-.u1 a ·SP.11 pu1l0re5co · · . · . .
• él f'~lo< nrssmos n~r acterl!!' s
ecundurias.
nrtb1u~ Y 110 ttnti lrl~-. 11tirio11al No 101101110~ que bace11 sírro exacta 11 lo tlonunante e · - ·nl!Dle;: pueil.MJ.
5111111
PLtodc 1111¡!111' h¡IN\.11 ~m· úLl.l ol lfllC! prcem.i '
li¡amt.1\ •-!11 111~ l)l;:ll¡iaooni'li de lo~ '''(11\rliiTl(J~, rul 1:orn'1 111~
21.>3
252
t.\ LÁl\ll'MlA llEL REOIJEJ\DO
añadir un alto grada Je majestad. como sucede can los carac- una (unción más no1Jlc; será eJ iq!órprete de la edad, <le c<e
teres secundarles del leopardo o clel jabali, En mano de. arlis- atribut·º· ~.ue hemos dicho es. el truís l1ell.o ~lire ,¡0 gloria
tas como Bubenso .'f Tintereto, estos atcihutns se eonvianten del ed 1 ficío. Los signos cxtenores de esta glona. tlota1los 1le
en un medio tl.i realizar las Impresieues más a] tas. y mas una fuerza más grande que Ta de los que pertenecen sola-
ideales. Pero le tendencia pintoresca de su idea se reconoce mente a su belleza .seusible, se deben, pues, con.~íuerlll' Pn PJ
-uempre dísuntameuie, come adheridn 11 la superficie, al carác- número de los earacteres puros y esenciales, tan eseneialas,
1'"!1" mna.z; esencial, y CC1ll10 produciendo un sublime diferente a mi modo de vmt que un edificio no se pued1,> conlutnpl;ir
del de la erianrra mis:n:ra· tm sublime f'lt r.iir.l'(Q modo común a en todo su esplendor basta que uo han pasado sobre él cuatro
}¡¡<e-abj.,10. ~.1e In creación o itleutii:O'$ a sus elementos constitu- o cineo .siglos, Así, pues, debé ser cl c:u.i<lrulo de ta] errarlet1cia
tno;;0 m s.ubii:rue que se. busea en las ondulaciones de la cuando hnya iranscurnido esie pcrlcdo Je tiempo el quP JE!ba
cabellera. en las hendiduras y escarpados d!! las rocas, en la presidie a la elección del conjunto y ¡¡ l¡t disimsirióu de sus
hoja de l~ tallos, en Ja pendlante Je las laderas, en las alter- deta líes, de tal modo, que mi se admita nada susceptible de
natrvas alegres o tristes de los marices variados de las conchas, sufrir un" desgaste mnterial pos las intemperies o el n:i-tnr.al
de la: plm:mE o de las nubes, deterioro que Lleva· consigo uu semejante espacio de tiempo
16. )la; +l'l~ a nuestro objeto. En m'tJ,uif'E¡clUNJ, esta li. No entra en mis: intenciones abordar muguna de ~ns
h<>..11~ afia1lida y accidental resulta mu.v a menndo incom- cuestiones que ~epresentt111 la ap1kación de eslP. ¡t1'111op10..
parihle con la canservación del carácter origina I; es, por Ellas ofrecen un illLeréi; muy vivo y son mnv can1ple¡as-para
mn5ÍguÍf'..ll1e, en su r..aducitlad eu donde se busca lo pin toresco; poder ser resullllas en Jos linHteS de esie eslwiio. pero ole
corullt?, u·gwi parece, en las ruinas. Consiste únicemente u1i motlo e:naral se élébe oli~ervar (!lle estos estilos ¡nnlo-
en F.) sublime de los estragos v de las rupturas, en el sublime rescos de ~arq111te1;.tu.ra,
· cu 1 os que Al
u
decorado
· •
eow subor·
do: la pátma o d.,- la. "':'geldción quP. asemeja l:a arquitectura d.i.narlo 1l la clispopición de pL1.ntos de sombrl\ mns . que a la
. d e SLi.u.u-
. r -· - ll\ usura p11roal 1le los
a lil$ oo'ura< d" la Naturaleza y le dan el color y 1 as fonnas ureza (le con10111os, le¡os . 1 b·-'
Itn inilúida no poco sobre la fonnacióu <le los dos estilos, y- la misteriosa sugeslión lle lo qu habí .
perdido, del encanto de las nu:vas ~ sido y de lo t¡ ue haWa
JebG wfurn!ll1lll" aun más impaiost1men le nuestra elección
las lluvias. Nada de esto pUetle .haber :Siaobra del sol y de
.entte el uno •> el etre, la .O:OC"\'.a escultura. Ved lbs anim l brutal 1.h.1r!'7.a de
- l '-''I . . . n es que yo {II'e$enllí. como
h po e e u.<t rajo vivientell y suponed que 0 1 dibu¡r¡ . ue . t , l¡u •!SJ:a·
IS. ~¡¡ ent:a aillnismo en mi plan actual lmtar exteusa-
mas·d o de 1os. s.: enbe os, 0. las arrunas
o-
d e su. Irente estén , obscu-
lJli!nte el segundo deber. del qlll> ya Imhlé antes, el de la
reci as¡.;;i.~li quien podría restaurarlos'• El pnD1(')' · . re~uliatlu . de
omser:JlCiñn de la arquitectura que J)Oseemos. Reto 1'e me • •
una
d .. re,"!'1JTIIC\Qn
. , (~'ll
. ' la hite notar --' ,_,_ ·I
ru .,. ..... I" le 1 Ba . -
pernu.tici rlecir alguna" palabras. necesezias sobre todo en ptísterío
~ .P!Sa, de la> C¡¡ .d Oro de Venecia o de la cetedral, ele
une; :.r;i époai. El ,·erdadero seutido de la palabra restaura-
Lisieux) es_ el de reducir a la Dada .el traha,io anuguc, El
ciOn no la comprende el pühlico JÚ los que tienen. el cuidado se~rlo, presentar 1a copia. más- vil y' desprecíable, 0 enamo
de ·. elar por nuestros monumentos piíblÍi;os. Sigujfif)ll Ja des- .mas, .POl" cuidadosa y trabajada que este. una imitacu\n fria
tru..'"Cliin má..~ cmnpleta que pueda sufrir un ediliGio, dastrüc- modelo de las partes qi;ie, se _pudi~an modelar con añadid~
cilln de la que nu podrá salvarse la menor parcela. destrucción
lnpó,lé1il!.(1S. Mí. experiencia llcr mi' ha suministrado sino un
arompañada di! una Ialsa destripción del mnrnanento des- ejemplo: el dél Palacio de- Justicia de Houen en ei que el
rraido. ~o alrusare ;obre este punto tan importante; es lmpo grado .de fidelidad mayor posible fuli realizado o inll!lttade1.
shle. t= imposible amo resucitar 11 los muertos, restaurar
lo que fr.. :;:r.iruie o bello en arquiree 1 ura, Lo que, como ya 19. No hablemos, pues, tle r~rauración La cosa en si =
h!: diclto. ".w..<tiwye la vida del coniunlo, el alma l'{Ul! sólo' es eu - suma más que un cn~o. Pi;id\il,$1.raccr el mooRlci .Je
¡r,_¡_alen dar Lo; brazo; y los oios ilel artífice, no se. puede iarnás un edificio, como pud~s ):¡acer el de W1 ruerpo. y yuestm
rest-:1uu·. Oira ¡;p!l(a podría darle otra alma, mas esto serla tnodclo (lllterrlll'á lll esqueleto de los viej¡;¡s muros u rl esque-
un UW?VQ e·tificin. ,Sq '" evocará el espíritu del artistll :µinertó. leto del 8.ic.bo cue11)0, n~s ya na \'00 111. \'e11taja de- esto. El
.no se !~podni hacer que dirija otras -manos y otros pp,nsa- vi.ajo eriifioi<r está dést:ruido. más aún que si est111iera fn!e-
mirntOil En cuanto a la pura imitación- ahi;olu:La, es rrnrtcrial- vrad o en 'Ul1. rilontón de polvo p se11ul Indo enll'~ llllll 111asa
.menw 1mpO'Síl1lr- ¿Qué imi1:1u·ión puede hacerse de unas sil• de arcilla. Se saco w6s dn las ruÍDJI~ de Nlmw qu~ ilé ·1a
tdfiu..r.s de las que ha desaparecido unu ml:'d'ii't pulgada de 1·~-cc;uistn1cci611 rle 1Vfilán. ~las,se clirñ. In restmu:nt:ióu. puede
·-•¡>{'50T7 Todo !ll 11r.;1badn di! la flbra r~taha en la 1necli'a pul- lléga1· a ser una necei,-idad.. De acuerdo. i\lirad frente a ltenlr
i;ad., ¡J¿,~p!IP.rid:i1 d 111t..,nu\i9 r~1nura1.· esto no lo. ha,rAis a la necesidfid y aóijltadl1t, tloatrt1ld el erliDciu, ruiroiml las
Clll!I J>Or supo;iciórt; ·11 cupil1i5 lo que rL1Jcd". >JllTI ,¡tlr11itlendo piedrm; n los .,jJ1c9nes tttos aportados, y relinced los tfo lu~'tn'
la poormJl!lad lle h•l<e1·lo (jr;lmclll•• • r r.lfU•' c11id-a<lo y vjgi- o 1noitlm:·o u vuesu•o gu~ Lo, mns hacedlos horµ;\darnentll: no
1¡,ndn 1111\ lo gara11tí11i'J, ¿vn 1¡11•~ '.!l 111.11•vll tl'nbaio l)l•Vfl,l'IÍ los 1·ec11tp.lacéis por 1nHI ineill'ira. Ex1imim1d ~a ne<:esuhid
C'M1t.u¡11 l!Jhrt ~1 1U1U14ut>? E.u 1•J .. 11ug110 hahit• vitl.1, l111hln 1 257
2'ili
-
lb SIL<E r,brPJm..\5 DE L.A Al\Ql l'l'EC'I!UUA •~ • •
LAMP,\I\h Dl?L~10
.anes
t
_ de
q
º" ;.e os 11re$tll'lh~ .y
podréis evi~atla. El principie
. . • /' .r • el derecha de tocarlos. No nos pertenecen Perle .
Je 1P oeropas modl!rn.os (pru1cr¡llo. :>e,,IJ'Ull vo, ap uiaao slste- a los que los censtru . · · necen en parte
J d . . ' yeron, J c.TJ narte a las generaoiones que
rniitu:tm:mrr ,xy [os constructores. a lo n1at1~~ en Fnu.1cia.
par.:
dia Jepn:>o
~L-~
~·-· =
trabajo y rausa de la de~tr:ttco1on i.le la Aua-
s.a.uh-0Ui.>I4 .
deroiilila por los magisl~ados de la ~illa
e~ºb::
11IU e. venir detrns. Los mwi.rto~ líen!!n aún dereeh
no tenemos el daraclm de. destruir el obj~to od:º ,:
b
268
·-
2G()
,
1. En las pághu1s que preeeden he querido demostrar de
que manera toda forma noble de arquitectura es en cierto
.modo la ancarnecién de l¡¡ polltiea, Je la \•lela, ele la hlsteria
'(· y de la .religión de los pueblos Uno o dos veces en ~1 trans-
curse de este estudio he aludido a cm principio sobre rl cual
lle de insistir aho11a, r.on objeto de asignarle un lugar definido
entre aquellos que afirman esta encarnscién. Apareee el ú.llí-
eno, no tan sólo porque éste es el lugar más enrrveniente a
la humanidad que le es propia. sino pOITIJue aparece asi romo
elemento de s11vreD111 gracia y coronanliento de todos los
otros. Es el [uicio a que la políuca debe su oistabilidad, Ja vitla
sú dieha, la fe su aceptación ) la ereaciéu su eeudnuidad,
La obodrencia.
Este principin ha sitl.p una de las más wontle$ fuentes d.e
satisiaccióll sBllÍn que he enco11tradc1 en el e&tudio de un asun-
to que desde trn piiucipió me [lareció •r.misen·aba una lejana
roluoiéu cou los graves intereses p<! la humanidad. Las erm-
26~
'
•
•
LA LllMPARA OE LA OBEDlr..!"CIA
dro.uue;: de perf e.:.:iun znateria 1 que como conclusión he de. ejerae:i la .autesidsd, y el r~!¡J)eto ele Lodos aquellos qui' sqn
examinar; arortan, en efecto, una prueba ClU'Í.Osa de In Cl'J'Ó- sometidos .ª ella.' la venerac~6.n por el bien, la piedad por el
nea y desatmada que es Ju per.secución de ese fantasma pérñdo mal y la simpaua por la debilldad: si entandéis 1ll18 vigilatlllÍB
que 1~bmnbre:o Tian1<1n la libertad Es, en efecto, de Lodos completa sobre todos los pensamientos, la templazan. en los
los Ianta<.rra; l!l mñ~ péliido, -porque el más hábil res:p landor placeres y la l)ersev-ero.uclll en él lrab11jo; si en una palabra,
d!? razón nos rumia mostrar seguramente que no só1o es Llti· entendéis este servicio definido en la liturgia de la f¡¡lesia
pcrcihle alC3Il.nrlo. sino que su e..~enó.a misma es rmposíble, inglesa. como la. expresión de la .libertad perfecta, d)Or qué
Nada. llay qué -'!: le asemeje en el unrverso. No se le encon- la llamáis por el mismo nombre .que para 1!1 voluptuososígni-
trara j=s ~o le tienen los astros ni la tierra; no la llene Eica licencia. 'Para el perdouavidas significa alboroto: qµe
la mar, V Ios hombres DO ranemos sirio una imagen o seme- paro el graT1L1ja signiflc.~ Tapiñn, para el necio igualdad; q\19
•
janza ;uya para nuestro mayar castigo. para el granuja signiíica anarqula -:¡ violencia para el malo?
Llnmadla can otro nombra completamente dislintd: el mejor
~ ano de los ¡:oemas más grandes por las imágenéS ~
v el más verdacleró será chedlencia, La obellieocia está. en
par la annonia. de nuestra antigua Jiterrrtura, el poeta ha
bu~rndo. en la naturaleza inanimada la espresién, de esta efecto. basada en una especie de libertad, porque J~ otro
modo .se convertiría en un pnl!á Sér'vilismo. Mas esta libcrJ¡id
Jihén;!d que había amado v visto entre Ios. hombres, bajo
ne está conc¡;d);d,; sino para hacer a la obedien.cia -más {ll'.r·
::u verdadera 7 somhrfa l ilZ . Pero [con qué notable falsedad
recta. Una cnntidad de llcencia ~ necesaria para la rt1Velación
de mte1 ¡netacibn' Uno de los versos de su innovación contra-
de Ju energia individual de las oosas, pero su be.lJ:za. su ~~.an-
di<.e las 6\t~iaones del resto. y se conoce la presencia ·de lo v su perfecci611 consisten en oo sobrepasar cíartos ümHes.
una ~IJlllhre que no l)C!1' ser eníera es menos rigurosa.
t C'-ómD potláa obrar t.!e otro modo? Si hay -algún principio
G~parad. un rio desbo¡·ílado con otro coniendo emre :n.~
orillas: comparad las 11-uhes esparc:Ulas sobre In. ía2 J.e1 ci~o
mas altmnerlte proclamado que el resto pOJ: todas las voces con las que anwut011anon los viento~. Si Ia CJ.rcunsp!!tcifm
ele la r;reaciñn vi.rlble o más profundan1ente gnibado sobre absoluta é inGeSaute uo pueile. i(lllJ,Íls SI!!'. bella, no e> porque
el nenor de il.h {ltmnof. no es <:rcrta:ttrente el principio de la ·"- • mal sino tan s6l<1 porgne CUSlldO •?S e.'tllgl!"
Ji1.crwJ. ~1no el de 111 ley = sea en si un · cnid milral'ÍB
rada excede a la natiu:a1eza de 1a cosa cout . a y e •
~ "' 1 . ml5D1ª esta com-
las otras leyes de las cuales. esta nli~B b~ za le la creacíóu
2. Ln 1:1rt11E.larta. replicar~ l')tl~ por la libertad se euliendB puesta. El ~~ullibtÍí) de~ cual s~ '\ ¡e .: T~ rosas regidaso
l le~· d<• 111 lihFrtad F..iitonc,._~, ¿por qtu~ servirse! sólo de esta eutre las leyes ele vida y de e:mter e a 1 - st<ÍI1 $ometldas.
est.n p:.iJ;,}1m; mcnm¡1rr•usiblr>s? 51 por 1.ihcrl.ad er1trmdúís 111 · • · neneral a las¡ tua C> e
v las leves de dOJtl.LHaCl(ll't 1>
0
medai! T le es sí nónimiL en tanta que li1 ab11ndanci1;1 de honor nlArtLl Cfl['!!rar que la rijan leyes más severas en su accién
;;·de belleza nacin únllnariamente por -parte de la model'llció;¡ y su salud, Ella l1D goznrá concesiones r¡uc se extiendan a
o dt· ta at"c1t'·n de la ley superior l mas que de su. .natl1ralei:a las obras del espiri.tu individual: elirntlfrá su 111!Soluríon con
!l acción de la ley cinht!rentc La p;ilab¡-a más noble (!el catá- tofu¡ lo que universalmenta importe 'i!l uspirLIJ.1 humano y
Jogu <le h rirtvd social es ''Lealtad". y la más dulce que cl por su prapi.a sumisión ma [esrnesa eviileucianí '\U se1.11éjan-
hambrn aprendió en los pustm:eas por la -vesta soll!dad es za cou lado aquello ele lo cual dependan la luche v In fuer-
~Grey" za .social de la humarridad. Podrla deducirse, aun sin las
l uces ele Ja experienera que 1s arquitectura no podrá ja-
l. Y no es esto todo. Podemos observar que el 1rr_adci de per- más prosperar sin sajeciáu e una ley nacional tan estricta
íecr16n, de obediencia a las leyes que rigen Ias cesas es pro- y tan mínuciosameute inrpel'iosa como las leyes e¡ue regulan
p(lldonal a! grado de .majestad que se les asigna en, la escala la relir:{ión, la voHti.Cl8 y las relaeiones sociales, más imperiosas
ele la ru!a.. La ley UP la graviíaclén es .menos paciente y aún que Ins de éstas, como susceptibles que son tle se!' ruéstas
:meno~ instsmáneameme obedecida ¡;¡or un grano de polvo en viger más ll.ll absoluto; sobre una materia que es mas
que por: et S{il r la luna. El flujo y reflujo <le] or!érino están pasiva. y ;11111 como exigiendo esta cciuliciéu de ser mií.;. en
~ ;i iafluencia.~ qul' no canoce el lago o el ri0. Jgual-
.absoluto. toda vez que 11q se tratá de mi o cual lev, -smo
mente, para evaluar' la dignidad de toda acción o ele toda Q11e la ley es absoluta para todos Mas en é'Sto la expt'.l'Íl!llcia
Q01f.aci6n lnrmana, quizá.no hay mejor piedra di! toque que lrahla más alto que le -razón 'Sí; en s:ignitmtlo los progresQS
la Jll"'-'i;-UUta ...¿S!ln estrictas las ll'~?". Su. rigor sérá verda- dr. La act¡nitectµÍ-a, es una QJestióll que resalta netart!L'nt".¡
dsramcnte proporcionado a le nnportancia de las multitudes,
si eJ.1 mrxlio llr Jos testin1onios contrarios ti~ he>.rl:w< asompa-
de ia~ cuales CtJnrentrará la labor y de las que rp1irá los fiados lle :o:mniíestaciones op11est.1• con caracteres Y _d,.talles
. . l '6 se nueda rleduc:i:r cons-
•rder!!SeS. opuestos existJ? una cene u:si u q.ue - ,. . .
tarite ~ indigcutililmner1tc.. el. Pstn la arq1uLectura_ ¡]e 'una
Este rigor debe. pues, manifestarse mas que en otra cosa· · ·l 1?111'rrtada
uacién no es granae en ranlo 110 e.< tan un1y¡n-sa J t . d
en ~le arte df'l cual la; producciones son roii~ extensas y diferencias p1'0,·1nciales e
Cllli tvniE>.11~ ¡ cuya ~alización '5upone la c0operaai6n de GOIUO sn leng\ta1 y Pll l8llLO sus . . . P< • 5
esillti .no .son sino dialecl(ls. J...1s otras condi~011e; nec •. ~aJ
masa! de hombres por una parte. v la persevorancia <le g~ne- · · L · mes, han IPu.uiti wquirec"n:u
flJCÍCifl':'li wr~\·¿,,s para asegurar (lJ perfección pcrr otra. Si 5q11 n1enos absolittll:s. a;. !lllCIO l · ueza
• 1\c vohre7ll que en las r ll nq_
\lmllUIWi en ~si,1':rar1!in esla infJUMttia conuuua que la lo n1ismo e11 1 a~ cponas . d~ _,1,.,.,,~ria ¡,11¡·0goburrnns
• ,_ ~I! h:11~1al"ll:l 'V " -·is~'~ • .
arqunectnra ejerce sobre la~ emociones de la vjda diaria Y de guP.rra \ '"" .paz, · JDj)S urta rtiuu1('.luu ·-· '· • '" [ué rotli;t.antl!: le
W Tl!&litl'Jtl en o~c:ión ~ ~ll• do; herma nas la •"~CIJ Hut'O Ube.i'.lllC'.S o ar l11lruno•.
. • ,1_ , toil 1, lu!?ntC~ v to os
a t.fumpijS de que
y lit pmtura, i¡u.e 1un111 11 ,,u,, no Li1•1w11 inns realidad que e~¡t(ll)CJll rvHwHlC oc
_, b'a ,•ht<.- .,.,·Ar
l. ~ ·
ln 1Te una csc¡u!l11, ' q
• ue nin¡¡Ím capn·
WB reJ1r.c~~nlacior1t'S de cuentos ? dP. .uenos, porlnmos de 0111(!- su 11l u·a ue 1
2fi1
21ilÍ
•
t.A l.AMPAllA lJ1' lJA Ólllil)l.ENCJ;A
de nuevo cada
La vez que. se tonstiru"a
., un. h osp,1t10
cho indi.,.'idwtl pc)drá sustraerse a sus tipos aceptarll'ls o a; su.• ..
.1 · ]• e¡¡ una sala
Jecoraa.anes habituales n:i n1odilicatlas nmterütlmer,üe. Desde ue escne
. "· · maycna
· de los arqui1 1ectos en iruestru épocn
!e clinm ba..-m t?1 pala.do. tlll$tle la capilla a 1a bastlicá, desde se equrvoca n • a mi parecer de uu modo a:SOTIUJCOS()
~ 1. .su bre la
d muro del 1arilin lmsla el t.erraplán ele la fortaleza, ca1.le ~<1 LU:aleza inlS~~ de_ la originalidad y lle lQtlo eu lo t¡U1< ella
uuo de los rasgos v de los elementos do;: la arqu.iLiictura de ~onsist~; 4 onfil!Jaliilafl en la expresión no depende de la
una "QiH:iÚII rkhe .set. l..-'111 1:orrleitie J hm [rancamenle ecep- mvencion ele palabras
. , nuevas, ,,·' la orieinnlídad
~,.,... uiau en poes1n '
t.ado tamo las palabras de Stl lengua y las pie,zas de su no nace tle lo invención ~l~ nuevos pies, ni en la pintura de
moneda. nuevos eolbres o <ll' 11ue\•a mo nera de emplea r Pwis. Las
notas en 'música. las armenias en los colores. Tos principios
4. :So 1amscnrre JIJ día sin que nuesrros arquireetos ingle- generales ae agrup®iQn.. de las esculturas pesadas han siclo
ses se preocupen en. buscar el modo de mostrarse origina les detemnnadcs ha ya mucho tiempo, y segü.n toda p·robebilidad.
y di? immnar un estilo nnevo, lo cual 'li!lile a ·ser tan razo- no puede ascp'al'se que ~e les 11µeda cambiar. Y aun admi-
tieudo que esto sucediera, no .sorá le .obra de LUl iD1Uvi<1uo.
nnblé v nccé!ario cnmn solicitar ele uno que jamái; hubiera '
sino la del eiempo y las muchedumbres. Podremos tener un
cuhfurto <ns espaldas con la ropa necesaria pana protegerse
Van Eyck que se .i;evela.Ji~ (¡()IUO el inleiador de un unevo
deJ !río, Ú! invención. de un corté nuevo de sobretodo. Dadle
estilo u:µa ''ll<Z en iliez-siglos, mas él mismo aldbu.ira -su inven-
¡nimero ':'l. sobretodo. Iuego :i a se inquietará por su certe.
ción a a 1 guna investigación aceiden l:a l; aun la. reallimción t1.e
No aecesirama; ningún nuevo estilo de arquitectura. .¿Se
esta Invención dependerá ()n ahsoluto de las necesidades de
~!llJT!a un nUE111 ~o de pintura o de escultura? Lo t111e·
los instintos populares de. la epoca La originalidad llO depen-
nos hace falta e> un estilo. Poco imparta si nosotros tenemos de· de nada de esto. El l\.om bre atinado tomaré lnd.istiJrtanlL!llte
un c&U¡ro y ru:; li:.yes son buenas. que. ellas sean recientes
el estí1o vulgar, el estilo de su tiempo y lJ;lllajani en. el Y
o aII1tqW1$. l!A>tranjraras o indígenas romanas o sajonas, nor-
Uegará a Ja grandeza. y su obra aparecerá tao ~esca J ta o
mnrulas o 1nglf .sas. Lo que importa esencialmente es que bella como si el pensamiento 'lue la Inspirase hubiera rlescen-
ll't~am.M un códigi:i y que este código sea aceptado y puesto
elido d-él cielo. No digo que no se tomen cictrtas Hbei:trulcs con
m1 vi:¡:n; dr!Sdc: un EA-tremo a otl'o rle la i'lla y r¡.ue la ley sus materiales o las leves que les JeLen regir, o que sus
r¡ue 1lide un j11e;1 !'!JI lo mismo en Ynrk que ('11Exeter. · · - ¡ ·· · l' ott ~urio•••moillii.cacio-
esfuerzos ele. m1agm.ac an. no 1u1p 1qu- " · ·~· _
Imralmorue, no Importa apena~ que le arquitectuua sea anti- nes en unos y ou•as. t\1as esto$ r.ambl.os serán i.nS1rlJottvos,
RllB u moden1a, 11) r¡ue imtl<.ltl<! ~ubar es c>Í ~f>r·á 111111 arqui- tla~ural(!S, riw.;IP.s y no pocas veces maravilloso~; .lli.l Jo.s hab~á
u-rtun1 digna .J,. ~lP. numhr«, uua nrquit,,c111ra cuyes leves • ¡• • -•- ¡ 11 '1 ~~1 mdcpe.uderma.
buscado como ne<.·esar1os a su 11gn1,u,ut ·
puedan luego enseñar en la1 escuelas desde f'.,or1101~1;1llles
lwrt.:i Nitrtin1mb'i!rlnnil, romn '" l'Jtr.Piia 111 (¡rfugn1fia y l1t
Las líbe1•tades que él se p~nniln sc.rán °~111~ !ª5 qur ~e f~~a
• ·" 110 ('(ITl&ht111ri111 un dese llJ
11u. g11;111 orador co11• Sil 1w01na.
gromótlca msf•-sa, o uun llt"!UÍl··•h1n1 •¡ ¡JJ• 11., de ~Cl' lrrventnda 269
21i!S
1
L•.> SfEIE L t.'\l'f'AR.4.~DE LA ABQt.rtrl!.C'l'UllA LA l'..ÁM.PAn""na LA Ollll:DmNO!h '
S'".J:S leyes ¡x.r aii1n de! singuleriMirse, serán consecuencias su condición; presei1'te y en vista t1 1 ·-' _ • •
se continúa. e os e .......e, esta condición
w""'1talrles, e>'panlÁnen< y brillantes de Ull esí uerzo hecho
para expresar lo que- la tengue. sin esto míraceión, IIO mbJ'ie
podido t?Xpl"e"...ar tau bien. • . v. lo·• ~ambi10s por
5. No. es preciso . buscar 111 odgi:nalldatl
E.ay momentos en !u:oc cuales. como ya lo he dicho antes e11os ll"liS~19$, por buenos que sean. No se podril CJhten& ni
d8 ahora. la vida de un arte se manifiesl<1 por sus modifica- la una nr les. otros, por una· lucha ",, ~""
~,... u.......;.'·~· • contra
e •.,,,.. ... ion
ciones y- por su repugnancia a plegarse a las antignas restric- las leyes ordrnarias. No tenemos necesidad de 1tJ un" ni de
cienes, Sucede lo propio ron, la \'ÍUn del Insesto. La cond.idfui Ios euros. Las formas ya conocidas de l¡¡ arnuitectirra
_ ..rL.' -·• .......,. son
y la vida del msecto ofrece un vivo interés en estos periodos, "':u.u,,1entemente buenas para nosotros y aun para otros me-
en las cuales esms cambies están cercanos a su rea.li:2aoión J 01'e~ que nos o tros, Y<! hii.b¡rá tiempo de .invemgar y de per-
por .natnral desarrolle v fuerza de su constrrucíén. Mas seria íeccionarles cuando las sepamos emplear tal 'Y coinn eílns
san. Pero hay cosas de las cuales .rro solamente tenemos
desgrar-.ade y neas la cruza que en lugar de conformarse
necesidad, sino sobre }ap euales 110 !lºdcnlos wsar; todos los
cnn n. lida de o=g;¡ .r de alimentarse cemo 1.aJ. se esforzase
• é's.fu(!tzoS,, todas las desolaciones, ¿qué dÍgo? todo lo que
sin cesar en C1.1Db1ar,l" e>.tl crisálida, v seria desgraciada le
Inglaterra encierra de verdadero talen to y de :rnso1ución. no
cnsa!ufa que. despierta en su noche, se revolviera 011 su
nos p~rmiti.rJa pasar sobre ella~. y son la obediencia, la unidad.
ill¡)Ulla bameruio ;ncesantes esfuerzos para cambiarse puema-
la asociación y el orden. Todas .nuestras escuelas de, dibujo.
ummli!nl.e en ma.ripo$a. S•.!rá desgraeiada igna 1 mente el arte
todos nuestros árbitros de gustos, todas nuestras academias.
que fil! 1 ugar de ses «merse ~· contentarse con la alimentación 1 nuestras conferencias y nuestros penódicos. lodos los sacri-
v ln; h.1hito" que l-;a,.-taron para sostener y ~rigir otras arles ficios que comenzamos a h;icer, 1od11 la lealiad tle nuestra
ant•.:s qt1" ella. luchara )- se l:risJ.Ltri!ccionara contra las Iími ia- na bn:¡¡ leza inglesa, la pQtencia Je irue.s.tr'a voluntad iJ:lglesa,
ciones naturales de su existencia y se esforzam por cambiarse la vida de 11uestra intcú.igenma i.nµlll§a. será!L 1·11 este puillo
en r,•n_ C<rSd clininta • Aunque esté en la nobleza tk· las Gciirtu- tan ~teriles eomo los r,SÍt1\l.J'.7.0S· y las eml!lcirules en 1w st¡ciul,
.ras :m11. ~·l!•valLP ¡lf'''er ,.
parte cllll'l1rrer1dér los carubios
e>J1
si .no consentimos ea somet~ la arquitectul'll Y tilda> 1115
que 1~ mn ari!Vllldos. preparándose de anremano. y si, c:omo
h.ilñtual .))<U"<• .lo.s caml>ia> asignados, sou éstos a una condi- . lo. 1'es Lllllte, a lo ley inglesa.
artes, como
aon . .111.fu ~1lr:i a1í11 t1!'$clndultH y rr.gocl1á11dose con la aspe- 6. Digo la arqui~e~b.u'll y totles las a;rt.es, porque, scgim yo,
ranza de su realizoci¿n, lo que no obstante da Iuerza l',I toda la arq tii 1ectuhl i]ebe ser la me IJ:Í7 tle Tal' nrres: las oJ:r.8j ~
cri¡¡111r;; f•:ii'.<t \JIU! Pll.a ~;:U " ur. ,¡,. nalun.lLJza \"Rl'ialilr>. es ~lcbdl't seguir n su t.Terr~pQ .Y (!Tl sLI or<leu. ljar.i mi. lU pros
el lf11" t!Sil"- ,¡J Jlr<'~P!lle {;11lr.f<>cl1:i u•• la<; condiciones de su • d de 1 . tlhr ¡1inlilfil ,. ,Ji, e.o¡cnJ turd. d
pe1•1da :tl!Jt>.~IJ'Rf> 1'$Ctll' lls ,
E".Ct""itt·ncn1 v 110 ;;e pjfnr,rce r-n ;rl.i:u1u· lu~ rambros quu 111111 la6 cuah'~ untli~· negara tu 1"il11li1lntl, eunque ,¡¡lg11ntts n1e¡¡ucn
ddtl<l, ut1•1 Qun11lici11lo hnnu el lir1 lm 1t.·l11·ri'~ m.ig11111J10~ u o~¡
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27(1
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~:ª:~
que tod as - . id d · ºPll1 servil y exi · d
•- n ,_ • ~~ cero lo proclamo con tanta .seguri El como exactu.ud absoluta e,¡, la fo ,, gnno~ e ellos una
y \.•'S ... a ""~·~· .- .
dría en afirmar Ia u.ed'sidad para la segundad ele 'la se han hecho dumí~ ele. 0d.e las _lctl'as: cuando elles
=e<itul de un gohieme legal bien comprendido y fuerte) no podemqs lmJ?eCÜ.des "ll.1! -·'"" s CO!Ttenles d~ escritura,
• • '"' 111..w;¡ 1quen ésta en al '-'L.
I1]Je>tI:a ñll!tuteC"tnra {ang11iJÍtT.t-'TtÍ hasta c:nve.utu'S~ ~D .polvo $:US sentmuentos, su &iluatió · r ª""'ª eón
. . n o su caráct<?I'. Cuando . ,
;1 n.o se ta su)eta .más virilmente al prJ.rrter prmcrpio de] conuenza a estudiar latlu . .. un JQI en
sentido C{)1DÚJl, ~¡ .na efé adopta y se !":\"tiende 'Jl9T todas partes cada trua de lM . se exige 1le- ~J una autceidad para
a
:r.
expresrones que emplee· pero
- ratema wriversal de formas. y de trabajo. Se puede excla- ~ lengua _puede pern1itirsé la liberta·' m•~d cnanl o posee
que- es imf!OSihle, ]\l¡¡s ¿qué importa la poS)bilidad e de obrar asl , • • e sentrr e derecho
"'Jj'Y
•
L.\~ snrrn z.A!llP.\JI.-\S ~ L\ MQUI!l'l!C::'l't!R4
LA r.Á!'.'!PAl\A OE, U. QB1ro11!1'(CJA
9. Hay otros "<D•h·hos canales Je gastos melles· grandes, pe-
10. Me tlXtenderia gustoso sobre é.ste asunto mas 1
to m.-ls amstantes.. )\iosotros no tenemos por ajeniplo, el há- b ·¡ id . • ~ engo so-
bito de ~ al observar tal Icrma particular ele. b:1jo re e J leas. e;f{traiias que serla qJllzá müs prudente n~ ex.
o tal resorte habitnal de In vida, si el género lle oficio median le po~er a a ligera Me bastará af~ por última vez lo que
f~e: .el tema de ·este estudio, que sea cual fuere la .importan,
el nial 1G tenemos. es tan sano )' conveniente para el obrero
era que pudiera at.nüuirse a su objeto imne~iato, hoy por Jo
cmno otro r¡ue hubiéramos pedide procurarle. No sólo es -pre-
ll1E!no~ algún valor en las analogías que DOS ha presentade v
ciso B"ilgurar .al hombi;> la -subsisicncia, sino ~dera11 el.
alguna e11sefi.anza que ili!di.u:ir de la relación frecuente d~
genero de vida que entrañan para él nuestras exigencias y stls -~ecesi~aaes más comunes con las leyes potente>, en. cuyo
e4x:r.arnos en lo pesihle por que nuestros deseos'y necesidades sen.t1d,o todo honibre es erquiteóto, y a todas hcras se le ve
man susceptibles de hacer progresar a los pobres ctne.t·rab¡¡jan, ocupados en disponer y arreglar su G~ y ~s piedras,
mejor aÜD que de alimentarlos. Más vale distribuir un trabajo En 111 curso de este escrí lo he suspendido frecuentemecte el
que ~té ]:10r -enchna de los hombres, que enseñar a· los hom- hilo de mi razonamiento, temiendo izupoJrtµrtar reilexionando
hres un trabe¡o que ene
fJl)r debajo de ellos. Puede pregimtar- sobre la vanidad próxima de toda arquitectnca, excepto da
.se.. ,poi: ejemplo. si los hátntos de lujo. que ex:ige un numeroso aquella q_1:1e no es obra .de nuestros brazos, Está llena 1le som
¡;er.:--Olla] dmnéstú:o, ron una fuente de gastes sana, y si las bríos presagios la luz, que nos ha permitido examinar, entre
llJD<la; que ti•:nden a engrosar el .número de fockers de ca- r lat obras- de los siglos jJlll'Í catos, los bellos restos por entru los
ballerizos son una forma de oeupacién intelectual. Ved. por que acabamos de vagar. Yo sonrío al presenciar el entusiasmo
otra parie, cómo las .naciones civilizadas emplean infinidad de muchas gentes porJa% progresos recientes de La ciencia di>I
de· b1JTI1hres =n !a lll lla de Iacetas d~ los día man tas. Se gasta mundo y del vigor de su esfuerzo, come si estuviéremos aún
una suma considerable de destreza, de paciencia y de activi- en la autora de los urüneros días, Tin1tol'co.mo se jluminn d~
dad CLllSllll1it4 en producir el brillo dé las diademas, sin pro- resplandores el alba, el horizout» se 'carga de rayos. El sol
cw-...r, ;r:gún yo. e· JA; que la$ Ilevan o a quienes las ven, i.m brillaba sobre la tierra cuando Lot entró en ~r
placer capaz di!' compensar la pérdida de vida y de una fuerza
mt<'.k-.•anal que e-.ige la eor¡.¡par1ón del artista. Tallar la piedra
¡,. sería .má's sano y agraaa!JI.,, ciertas rualidades de su e$¡)i-
rih1. a las que ni) permiri:> espacio so labor actual, se doson-
o"UlTerliiu más nohl<·m,.nte, y CTC'01 f.olrre todo, fJIJé h1 mayor
¡.111ru: s! las ntUJ"TI'< pref,.ritli\n, ;,J orgullo tf!! JJ,,,-ar un cierto
0
•
INDICE
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C.1•.1ü 84
Canot.1rl<lgt" tit. l/i7 Llslcu. .Sñ. ~o. J2S,. is;
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T.J.U•dt~:
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1. Or.mut.1l.ll1IO~ d~ 11ts. lUledr1tlos dir T\011t t.l. Sn1.n1 ~.a y , ...f-f'u•ria
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l. Gubleto ne lo ntt.,¡frnl 1lu Stiln1 Lo, Nn1nmmlín. tlS-69
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i-:. lruorseccrcues Lle molr1ur1r~
h. C•11il~I do 111 •1ftn1tlú. itllMin1· üel l'<JIOc10 Ducal, <le Velll!l::ca ?!>~•
7. Arco de lu lechodil do In iglt<;i,. dP Sau, ~lígu...t J" Luea 116.11•
6. O.nunm•nl0< ctolndu• ,¡., LlsTim.x. Veruna y Pu~uo IJ+l:H
!l Vcntmrn dd f>n lnc1q l'n<cm:i rll! V"nl'fla. •• l'.!8 l.!!~
IÓ. 'l'nit1'tlD> ,. .uU)\tlum< ole lll~ coletlrnle• dt• llouen y Sal.i!!lnm 114 lit&
l'll-19>
11. Jluk1;11 dr Cnm¡10 li;rn 1\ont?dJ\tto, '\ •·111·ri 1.
IÍ. l'nrgm~nlU> J.: lit\ Í¡tÚ•<i8' di' Abl"" 111<·. Luca, Vm!ECl8 ¡ 111.;a. .IL'fl.:10\l
l ~- T<'rnf!WOUto< de In• o.rcmlo> del lodo "" d• 111 r11¡udmi 1lr
F-urrn1"~. • , 2.12'~~)
I •~ liMµ]1ur.1 ,¡~ 111 ealoelral tlll Rnu1•Jt. .. !!2j}_$1l
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