Fundadores de una gran

misión

Olvídenme si quieren
pero no olviden
a mis pobres

Mis hermanas,
permanezcamos
pequeñas,
desaparezcamos.
 Índice
 Quien fue Virginia Fournier................ 2

 Breve Biografia de Virginia Fournier….3

 Algunas frases de Virginia Fournier……. 4

 Quien fue Jose Onesimo Brousseau…. 5

 Breve Biografia de Jose Onesimo ………

 Algunas frases de Brousseau ……………. 7

 Congregacion Hermanas del Perpetuo Socorro

……………………………………..…… 8

 Los inicios en Canadá ……………………… 9

 Un poco de Historia ……………………….. 10

 Como se autodefinen las hermanas……….. 11

 Años de fundación de la congregación…….. 12

 Iconos de la congregación……………………….. 13
 Virginia Fournier

¿Quién fue?

Se convirtió en un elemento indispensable de estabilidad sobre

la cual reposaba la fundación de la joven comunidad.
Virginia abandono todo y se consagro al Señor el 28 de agosto de 1892. Se
le dio el nombre de Madre San Bernardo. tenia también las
responsabilidades de Maestra de novicias, ecónoma, secretaria y
educadora. Acompaño en todo momento a sus hermanas en el proceso de
la vida comunitaria y les infunde su celo misionero. Ella vivio en el olvido
de sí junto a los ancianos, los pobres, en la cocina y el lavadero. Cuido a los
enfermos, enseño a los niños y con sus conocimientos sobre plantas
medicinales se hizo una farmacéutica. Llena de solicitud tanto para sus
hermanas como para los pobres, la fundadora se dio sin reservas. « Mujer
de todas las tareas », inculcaba a sus hermanas, a través de su ejemplo los
valores de la sencillez, de olvido de sí, de humildad, de compasión, de
acogida incondicional y de amor por los más pobres.
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 Breve biografía

Familia Fournier-Samson

Virginia nacio y crecio en Lauzon en la costa sur de Quebec, en la casa

patrimonial de Samson, en el seno de una familia amorosa y prospera. fue
la tercera de una familia de nueve hijos. A los tres años sus ojos se vieron
afectados por una grave insolación y esta enfermedad la persiguió toda
su vida.
A temprana edad, Virginia aprende el sentido de la hospitalidad al lado de
su madre que jamás cierra la puerta a los necesitados. Por su atención a
los otros, su compasión ante los pobres, y su gran devoción, ella siembra
en el corazón de Virginia las primeras semillas de su vocación religiosa.
A los 19 años, fue ingresada en el noviciado de las Damas de Jesús y
María. Días antes de su entrada, la infección de sus ojos amenaza con la
ceguera. Virginia es declarada no apta para la vida religiosa.

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Virginia fue una persona muy
expresiva y solía expresarse
mediante frases, las más comunes
fueron :

 Mis hermanas, permanezcamos pequeñas,

desaparezcamos.

 Todo pasa, Dios solo permanece.

 Esperar contra toda esperanza.

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 José Onésimo Brousseau

¿Quién fue?

H ombre discreto, trabajador ardiente, visionario y

piadoso, el Padre Brousseau se preocupaba por las

necesidades de su tiempo. Proveer a las necesidades de los
pobres, los huérfanos y ancianos, desarrollar la agricultura,
asegurar la educación cristiana de los jóvenes y detener la
emigración a los Estados Unidos, tal era su programa. Su gran
compasión le inspiraba proyectos audaces. La única garantía de
éxito radicaba en su fe inquebrantable en la Divina Providencia.

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 Breve biografía
José Onésimo Brousseau es el hijo menor de una familia de
agricultores. Se crió en una zona rural donde solía trabajar en los
campos. Su infancia estuvo marcada por su piedad y su atracción
hacia el sacerdocio. Asistió al Colegio de Lévis y el Seminario de
Quebec para ser ordenado sacerdote en 1878. Cuatro años más
tarde lo encontramos como sacerdote en San Damián.

En respuesta a las necesidades de los pobres, los ancianos y los

huérfanos, el Padre Brousseau busca religiosa para ayudarle en
sus obras. El llama a varias comunidades, pero en vano.
Sometiendo su petición al Cardenal Taschereau, éste respondió:
« Haga las hermanas usted mismo, esta será la mejor manera de
encontrarlas ».
Con « un dólar » en el bolsillo y la fe absoluta en la Divina
Providencia, continuó sus proyectos. Integró a las cuatro
primeras religiosas, entre ellas, Virginia Fournier (Madre San
Bernardo) que será la piedra angular de la nueva congregación,
llamada Nuestra Señora del Perpetuo Socorro (NSPS). Es así
que el 28 de agosto 1892, estas cuatro servidoras visten el hábito
religioso y se le dio un nuevo nombre como se acostumbraba en
esos tiempos.

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El padre Brousseau siempre solía
decir :

 Olvídenme si quieren pero no olvide a mis pobres.

 En un futuro no muy lejano, ustedes verán las

tierras montañosas y rocosas de San Damián,
transformarse en hortalizas y vergeles magníficos.

 Por mi mismo yo no puedo nada, con Dios lo pudo

todo.

 Atrévete todo lo que puedas.

También solía expresarse

mediante su lema que es :
 Dios proveerá.

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Congregación hermanas de nuestra
señora del perpetuo socorro

En respuesta a los rostros sufrientes de aquel entonces, le

surge la idea al padre Brousseau de buscar religiosas para
ayudar a aquellas personas mediante la creación de una
congregación llamada nuestra señora del perpetuo socorro.
Integro a las cuatro primeras religiosas, entre ellas Virginia
Fournier. Es así que el 28 de agosto de 1892 estas cuatro
servidoras visten el habito religioso y se le dio un nuevo
nombre como se acostumbraba en esos tiempos.

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 Los inicios en Canadá
La Congregación de Hermanas de Nuestra Señora del
Perpetuo Socorro nació en San Damián de Bellechasse,
un pequeño pueblo de la Provincia de Quebec, Canadá,
pobre y perdido entre bosques y montañas, donde “todo
estaba por hacer”, según la expresión del sacerdote José
Onésimo Brousseau, al ser nombrado primer párroco de
la Parroquia San Damián, hacia el año 1882. “Sintió
lástima de aquella gente porque andaban como ovejas sin
pastor y les enseño muchas cosas.

¿Con quién contó José Onésimo?: Con la firmeza y el deseo

profundo de la señorita Virginia Fournier de ofrecerse como
don para Dios y los demás.: «Me entrego. Haga de mí lo
que Usted quiera. No tengo nada. Soy pobre como Jesús en
el pesebre»

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Los inicios en República Dominicana
Esta fue la primera misión fuera de Canadá. Aconteció 56
años después del 1892.“El 20 de octubre del año 1948 llegan
a la República Dominicana, a bordo del Vapor “Borinquen”,
en compañía del Padre René Bouchard MSC, cuatro
hermanas de la Congregación de Hermanas de Nuestra
Señora del Perpetuo Socorro, para dar inicio a una
nueva misión.

Su destino: Parroquia N.S. de Altagracia de Santiago de los

Caballeros. Que es su primera misión en el país;
esta misión recibió el nombre Casa de Betania. Las cuatro
hermanas canadienses fueron: Sor María de la
Asunción (María-Anna Cantin) Sor Susana (Loretta Poliquin),
Sor Emery (Licienne Pepin) y Sor Bernarda de Sito
(Fernande Boudet) quienes sin conocer nada de este
pequeño mundo ni hablar español, fueron las pioneras de
esta obra.

Un poco de historia
Todo comenzó alrededor del año 1935 con la llegada de
los Sacerdotes Misioneros del Sagrado Corazón a
República Dominicana. El Padre Cipriano Fortín MSC, en
la década del 40, buscaba con mucho interés, religiosas
que se dedicaran a la pastoral parroquial para que
colaboraran con ellos en su trabajo pastoral, sin obtener
ningún resultado positivo en República Dominicana ni
tampoco en Canadá, hasta que se dirige a nuestra
Congregación, en San Damián de Bukland, Quebec. Aquí
se abre por primera vez la puerta de la frontera
canadiense para la Congregación, cumpliendo los deseos
de nuestro fundador, quien seguía los deseos del Señor:
Vayan por todo el mundo…

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El Padre Carlos Guillot, MSC, canadiense igual que el
Padre Fortín, quien tenía una prima religiosa en la
Congregación del Perpetuo Socorro, un DOMINGO
MUNDIAL DE LAS MISIONES en el año 1947, fue invitado
a la Casa Madre en San Damián, Provincia de Quebec, a
hablar de las misiones y muy particularmente de la
misión de los MSC en República Dominicana, motivando
a la Superiora General de entonces, para una fundación
en este país. La semilla cayó en buena tierra y de
inmediato se ofrecieron muchas hermanas para la vida
misionera. La Superiora General en aquel momento, Sor
San Pedro Celestino, tomó el asunto en serio y lo
interpretó como una llamada del Señor.
El 17 de noviembre de 1947, el Superior Provincial de los
MSC canadienses escribió una carta al Arzobispo de
Santo Domingo, sugiriéndole ponerse en contacto con el
Arzobispo de Quebec, de quien dependían las religiosas
de San Damián, lo que facilitó la fundación en RD.
En enero de 1948, por decisión del Consejo General de
la Congregación del perpetuo Socorro, viajó a RD la
Madre General San Pedro Celestino acompañada de su
secretaria en visita de exploración. Visitaron las
parroquias de los MSC y la decisión de fundar fue
tomada en serio. Pero la Superiora, que no quería correr
el riesgo de cometer un error, le pidió al Señor una
señal, un signo inequívoco de que esa era su voluntad. El
Señor no se hizo esperar. La señal fue la primera
vocación dominicana: la señorita Antonia Reyes, una
joven dirigida por el Padre Fortín, quien desde hacía
algún tiempo tenía inquietudes vocacionales. Al conocer
a las hermanas se decidió a ir a Canadá para hacer su
noviciado. Fue la primera hermana dominicana, y la
única que hizo su Noviciado en Canadá. Al profesar
recibió en religión el nombre de Sor María Altagracia, en
honor a la Virgen de Altagracia.

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 Las hermanas de la congregación se autodefinen
como
Una congregación religiosa de vida apostólica
caracterizada por su estilo de vida sobrio, sencillo y
frugal, que realiza su misión sin distinción de raza, color,
cultura, procedencia familiar ni posición académica ni
económica. Fuimos fundadas con el fin de dar ayuda
perpetua a los pobres y los infortunados a través de:
• Formación a niños y jóvenes
a través de obras educativas.
• Colaboración en la Pastoral
Parroquial.
• Atención a niños y ancianos
desamparados.

Icono de la congregación hermanas de nuestra

señora del perpetuo socorro

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Años de Fundación de la congregación

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