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Tarea #2 Texto Paralelo

EL HOMBRE LIGHT Alexis Jared Tzub De León


Autor: Enrique Rojas Carné: 2010516

Enrique Rojas Montes Nació en Granada, el 21 de febrero de 1947, es un médico


español catedrático de Psiquiatría de la Universidad de Extremadura en excelencia.
Sus trabajos de investigación se centran en dos temas: las depresiones y la
ansiedad. Sus ensayos han abordado la sexualidad, las crisis conyugales y la
voluntad. Casado con Isabel Estapé Tous, miembro del Consejo de Administración
de CriteraCaixa, se le ha vinculado por algunos medios al Opus Dei.3
Rojas es autor de varios libros de autoayuda, ensayo, artículos periodísticos y otros
textos.
Una constante en su pensamiento es la búsqueda de la felicidad. Desde su punto
de vista, una vida lograda exige afrontar adecuadamente algunos de los siguientes
problemas que afectan a la sociedad actual: el hedonismo, la permisividad, el
nihilismo, la promiscuidad sexual y el relativismo. Esta lucha se expone de forma
clara en sus ensayos como El hombre light, Remedios para el desamor, Los
lenguajes del deseo y otros. Entre sus recientes trabajos, Adiós, depresión, aborda
en un tono divulgativo el tema de los trastornos depresivos.
Premio Conde de Cartagena de la Real Academia de Medicina de Madrid por su
libro “Aspectos de la depresión”.

Capítulo #15: La felicidad como proyecto


La felicidad es una vocación, consiste sobre todo en la ilusión, que es la mejor forma
de ser feliz y supone encontrar un programa de vida satisfactoria y atractivo,
distinguiendo entre desear y querer. Desear se mueve desde lo sentimental o
emocional y querer es un acto de voluntad. Para hallar la felicidad hay que combatir
dos factores: la dispersión y la falta de profundidad.
Se puede decir que la felicidad es la máxima aspiración que tiene el hombre pues
no es algo sencillo de conseguir. Y como nos denomina Rojas a los que no tratamos
de conseguir algo superior “Hombres light”, para dejar de serlo debemos de
trascender, dejar el individualismo y el materialismo, conocer las prioridades de la
vida y darle sentido a todo lo que hacemos
Rojas, se refiere a la felicidad como “la vocación fundamental del hombre, su
primera inclinación y hacia la que apuntan todos sus esfuerzos”. Y su objetivo es la
realización personal, quiere decir, haberse encontrado a uno mismo, y teniendo un
plan de vida. La felicidad consta de hacerse ilusiones, porque esa es la forma más
fácil de ser feliz. Y tenemos que tener, claro, un proyecto de vida, pero sin perder la
diferencia de desear y querer. Desear es algo sentimental, algo emocional. Puedes
desear cualquier cosa del mundo, pero sólo eso, desearlo. Y querer, es un acto de
voluntad, una lucha por conseguir un objetivo planteado. Para hacer un proyecto de
vida, este tiene que tener un contenido, dirección, estructura, dispersión y
compromiso; y para realizar este proyecto, necesitas: orden, constancia y voluntad.
La tetralogía de la felicidad según el autor Rojas, es encontrarse a sí mismo, vivir
en el amor, trabajar con sentido y poseer cultura como apoyo. Y según el derecho
romano, para tener una buena existencia se necesita de tres cosas: vivir
honestamente, no dañar a nadie y dar a cada uno lo suyo.
Rojas, menciona algo muy interesante “la felicidad absoluta no existe”. Y en mi
opinión, creo que existe, pero de una manera en la que nosotros no logramos
entender aún, que quizá estamos viviendo con la felicidad, pero no logramos
deducir. Probablemente sea cierto, probablemente sea falso. Para mí, la felicidad
se trata sobre todo del camino de la vida; es lo que recorres y los momentos que
pasas. Es un estado de ánimo, no una meta. Porque si piensas que es una meta,
nunca llegarás a ella, por lo tanto “nunca serás feliz”.

Comentario:

Ser hombre es amar la verdad y la libertad porque tienen la capacidad de pensar,


esto lo diferencia de otros seres, aunque a muchos hombres no les interesa la
verdad porque implica un compromiso y hasta la perdida de la libertad. El hombre
light no tiene felicidad porque lo único que quiere es bienestar y placer. Él se mueve
alrededor de sí mismo y de su individualismo olvidándose de la solidaridad. Otro
problema de la sociedad es la falta de sinceridad, ya que decir la verdad implicaría
ser totalmente transparente y resulta más fácil el engaño. Por esto para algunos
decir la verdad implica un compromiso del cual prefieren escapar. Rojas al escribir
este capítulo pretendía hacer una completa y detallada descripción del hombre light.
Y lo ha conseguido tomando los aspectos más demacrados de la sociedad y
juntándolos en un solo individuo, creando así un ser sin sustancia alguna, lleno de
contradicciones, sin una opinión segura y afianzada. Ha descrito todos los aspectos
por los que un hombre puede ser, light. Por supuesto todo desde su opinión por lo
que puede haber personas que no estén de acuerdo con sus criterios.

Y se puede inferir en que muchas veces debemos de ver lo mejor de nosotros en el


presente y pasado. Y podemos tomar una frase de Martin Luther King, “Si queremos
avanzar, tenemos que volver atrás y redescubrir esos valores preciosos, que todas
las bisagras de la realidad sobre bases morales y que toda la realidad tiene un
control espiritual”.

Para entender la felicidad tenemos que conocer la diferencia entre libertad y liberal,
la libertad para referirse al hombre no esclavizado, no sometido. También la libertad
de la voluntad "proceso de educar la voluntad para que se oriente hacia las metas
más altas" y la libertad de elección "búsqueda de la felicidad" Y utiliza liberal para
definir a una persona abierta, pluralista, tolerante, capaz de dialogar con personas
que defienden posturas opuestas a la suya. Es un problema social confundir libertad
con libertinaje, un hombre libre no juzga, no se impide ser feliz.

Obtener felicidad no tiene propósito de que el hombre se mantenga viviendo en


línea recta, que por esto es que se perdió mucho de la sociedad pasada, sino más
bien se trata de buscar un hombre más digno, más culto para ser más libre, Dotar
la vida de valores fuertes, se trata de volver al hombre más espiritual, más humano,
cultivar en su interior la sabiduría clásica.

La solución al hombre light está en retomar lo que un día fue la sociedad, una
sociedad en la que el hombre era más digno de lo que es ahora, un hombre
espiritual, amante de lo bello, que busca ser feliz con lo que tiene y es capaz de
amar y entender todo lo bello, noble, grande y sencillo que tiene el mundo.

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