PARTÍCULAS, PRETRATAMIENTO Y RENDIMIENTO EN LA FILTRACIÓN DE AGUA

Resumen

Se presentan y aplican las relaciones entre la calidad del agua cruda, las instalaciones de
pretratamiento y el diseño de filtros de lecho empacado. El tamaño de las partículas, la
concentración de partículas, las características de la superficie de las partículas y la química de
la solución en el suministro de agua cruda tienen efectos importantes y predecibles en el diseño
del filtro. Un enfoque integrador para el diseño de la planta de tratamiento de agua, desde la
calidad del agua bruta hasta el rendimiento del lecho de filtro, facilitará la evaluación del proceso
y tiene el potencial de proporcionar una base para el diseño óptimo de la planta.

Introducción

Tres preguntas se abordan en este documento. ¿Qué eliminan los filtros de lecho empacado de
la suspensión en las plantas de tratamiento de agua? ¿Cómo logran esta eliminación? ¿Cómo se
puede utilizar este conocimiento en la práctica del tratamiento de agua? Las respuestas que se
dan aquí se derivan de los trabajos de muchos investigadores, incluidos algunos alumnos
pasados y presentes del escritor. Las partículas en el afluente de un filtro en una planta de
tratamiento de agua pueden haber estado presentes en la fuente de agua o se han producido
mediante la adición de productos químicos en los procesos de tratamiento previo. Un punto
esencial de este documento es que el diseño y la operación de un filtro de lecho empacado
implican, ante todo, la selección de la fuente de agua bruta y luego el diseño y la operación de
las instalaciones de pretratamiento (por ejemplo, tanques de floculación y sedimentación). La
selección de medios de filtro, aunque importante, tiene menos impacto en el rendimiento del
filtro que la calidad del agua bruta o la práctica de pretratamiento. La discusión posterior se
mueve a través de una planta de tratamiento de agua desde partículas de agua bruta hasta el
tratamiento previo para filtrar el rendimiento y concluye con consideraciones de diseño óptimo.

¿Qué Borran los filtros de lecho compacto?

Muchas plantas de tratamiento de agua extraen agua de lagos o embalses. Las partículas en
estas aguas superficiales varían ampliamente en origen, concentración y tamaño. Algunos son
constituyentes de insumos terrestres o atmosféricos (arcillas, organismos patógenos, fibras de
asbesto) y algunos se producen por procesos químicos o biológicos dentro del lago o embalse
(algas, precipitadas de CaC03, FeOOH, Mn02). Dado que el tiempo de residencia hidráulica en
tales fuentes de agua varía típicamente de meses a años, puede haber una considerable
oportunidad para que la sedimentación de partículas ocurra naturalmente. La evidencia reciente
(2,27) indica que la estabilidad coloidal de las partículas naturales en las aguas superficiales
depende bastante significativamente de la dureza y del carbono orgánico disuelto (sustancias
húmicas) en el agua. Los ácidos fúlvicos actúan como agentes dispersantes y estabilizan las
partículas naturales mientras que los iones de calcio pueden desestabilizarlos. Una consecuencia
importante es que, además de actuar como cuencas de sedimentación, los lagos y los embalses
también pueden funcionar como tanques de coagulación. La coagulación natural puede
complementar la sedimentación al eliminar partículas de las aguas del lago, incluidas las
productivas, si la solución química favorece la coagulación. Los resultados tienen efectos
sustanciales en el diseño de la planta de tratamiento de agua.
TABLA 1. — Características y alternativas de tratamiento para dos suministros de agua superficial

Los resultados de las mediciones de los parámetros de calidad del agua seleccionados en dos
lagos se presentan en la Tabla 1. La estabilidad coloidal en estas aguas se expresa mediante el
factor adimensional, α, que es la fracción de los contactos entre partículas que ocurren por
procesos físicos que resultan en la unión o agregación entre partículas. . El lago Zurich en Suiza
es un lago productivo eutrófico que, sin embargo, contiene muy pocas partículas. University
Lake en Carolina del Norte es un suministro de agua protegido que contiene una turbidez
considerable.

Debido a su largo tiempo de detención (2 años) y partículas inestables (α = 0.1), el lago de Zúrich
es un eficaz sistema natural de coagulación y sedimentación. Las partículas son inestables
porque el agua es dura (𝐶𝑎2+ = 1.2 x 10−3 M) y los agentes dispersantes naturales son bajos (el
carbono orgánico disuelto, DOC, es de aproximadamente 1 mg / L). El número de partículas y las
concentraciones de volumen son bajas, 105 / cm3 y 1 ppm, respectivamente. Debido a que
tiene un tiempo de detención corto (unos pocos meses) y contiene partículas más bien estables
(α <0.01), University Lake es un sistema de sedimentación y coagulación natural deficiente. Las
partículas son estables porque el agua es suave (𝐶𝑎2+ = 2 𝑥 10−4 M) y los agentes dispersantes
naturales están presentes en concentraciones sustanciales (DOC en el rango de 5 a 10 mg / L).
La agregación natural en el lago de Zúrich puede hacer que la floculación Esta agua en un sistema
de tratamiento es algo difícil. El tiempo medio para la floculación ortoquinética (t1 / 2) se puede
escribir de la siguiente manera:
Filtros de maduración

Durante la filtración, tanto la pérdida de carga como la eficiencia de eliminación cambian con el
tiempo. Se dice que los filtros se "ensucian" o "maduran". Aquí se selecciona la palabra
"madurar" para enfatizar que el proceso real de remoción de partículas es importante para
mejorar la eficiencia del filtro. Los cambios en la pérdida de carga y la eficiencia de filtración son
provocados por partículas que se eliminan de la suspensión y se retienen en el lecho. La pérdida
de carga aumenta con el tiempo a medida que avanza la filtración a un caudal constante. La
calidad del efluente generalmente mejora al comienzo de una carrera y luego puede
deteriorarse con el tiempo. Algunas veces se sugiere que el mejor diseño de filtración u óptimo
sea aquel en el que la pérdida de carga disponible se agote al mismo tiempo que la
concentración de filtrado aumenta (se deteriora) a un valor crítico predeterminado. En la
práctica, sin embargo, es más deseable diseñar un filtro con algún factor de seguridad. La calidad
del efluente es generalmente más importante que la disipación de la pérdida de carga. Por lo
tanto, es más importante que los filtros mantengan un rendimiento excelente en todo su
servicio; La longitud del recorrido del filtro se determina mejor por la utilización de la pérdida
de carga y no por el deterioro planificado del filtrado. En los estudios discutidos posteriormente,
generalmente se hace hincapié en los aumentos de pérdida de carga y en las mejoras del
efluente debido a la maduración del filtro, en lugar del deterioro del efluente debido al
agotamiento de la capacidad de eliminación de un filtro sucio. Dicho de otra manera, los filtros
deben retirarse del servicio y limpiarse si la calidad del efluente se deteriora, pero no deben
diseñarse para permitir que esto ocurra.

En muchos y probablemente la mayoría de los filtros de lecho empacado utilizados en la

filtración de agua y aguas residuales, los medios de filtro reales operativos durante la mayor
parte de la ejecución de un filtro no son la arena o el carbón especificados por el diseñador. Más
bien, son las partículas presentes en el agua aplicada al lecho y retenidas en el filtro. Dicho de
otra manera, los medios de filtro reales activos durante la mayor parte de una corrida de filtro
se forman a partir de partículas presentes en el agua y se alteran durante los procesos de
pretratamiento y de las partículas precipitadas durante el pretratamiento. Por lo tanto, el
"diseño" de los medios de filtro implica realmente la selección de la fuente de agua cruda y el
diseño de las instalaciones de pretratamiento.

La opinión de que las partículas filtradas se convierten en medios de filtro se basa en algunas
observaciones experimentales. Primero, se ha demostrado fotográficamente que la eliminación
de partículas suspendidas por fibras en la filtración de aire produce cadenas, dendritas o
"árboles" que crecen desde la superficie de la fibra a medida que avanza la filtración (3). Las
partículas eliminadas por la fibra de filtro sirven como sitios o colectores para la deposición de
material adicional. Segundo, en la filtración de agua, la calidad del filtrado continúa mejorando
durante períodos de tiempo considerables cuando la filtración es favorable, de modo que las
partículas suspendidas pueden adherirse a las partículas retenidas previamente (10). En tercer
lugar, los efectos del tamaño de partícula suspendida en el desarrollo de la pérdida de carga son
dramáticos y sorprendentes (10,19). Para una determinada masa de material eliminado, las
partículas pequeñas suspendidas producen pérdidas de cabeza mucho mayores que las grandes
a medida que avanza la filtración. Estos resultados indican colectivamente que las partículas
retenidas actúan como recolectores (sirven como medios de filtro para otras partículas
suspendidas) y producen una pérdida de carga sustancial (ejerza resistencia sobre la suspensión
que fluye).

Como consecuencia de estos procesos, la utilidad de las teorías para la pérdida de carga y la
eficiencia de remoción de los lechos filtrantes limpios está restringida. Las eficiencias de un solo
colector (por ejemplo, las ecuaciones 10-11) se pueden usar para predecir las eficiencias iniciales
del filtro de lecho limpio; estas son las eliminaciones más pobres que deben aceptarse en una
filtración favorable y, por lo tanto, son predicciones conservadoras. Las predicciones de pérdida
de carga a través de lechos limpios (7,14) no tienen una aplicación directa en el diseño del filtro.

Se han desarrollado algunas teorías para los filtros de maduración en el tratamiento de aguas y
aguas residuales (por ejemplo, 19, 26). Estos difieren en los supuestos y en los resultados
previstos. Sin embargo, generalmente están de acuerdo en describir las partículas retenidas
como posibles medios de filtro.

IMPLICACIONES PARA EL DISEÑO Y LA OPERACIÓN

En los sistemas de tratamiento de agua convencionales, el proceso de coagulación, la

sedimentación y la filtración en lecho envasado implican fenómenos químicos y físicos
notablemente similares. En la coagulación, las partículas se desestabilizan químicamente para
que puedan adherirse al contacto; luego se ponen en contacto por difusión browniana
(floculación pericinética), corte del fluido (floculación ortoquinética) y gravedad (sedimentación
diferencial). El mecanismo de transporte dominante en la etapa de floculación suele ser el corte
de fluido resultante del movimiento del fluido inducido por la mezcla lenta. Estas partículas
desestabilizadas y agregadas continúan chocando entre sí y se agregan en tanques de
sedimentación; Aquí también se retiran de la suspensión por gravedad. El mecanismo de colisión
dominante en los tanques de sedimentación suele deberse también a las fuerzas de gravedad
(sedimentación diferencial). Las partículas desestabilizadas que escapan a la eliminación en
tanques de sedimentación se aplican a los filtros. Es necesario que las partículas aplicadas a un
lecho filtrante puedan adherirse a los granos del medio (generalmente arena o carbón) en un
filtro limpio y también entre sí (partículas previamente retenidas en un filtro de maduración).
Algunas veces se usan químicos desestabilizantes adicionales (auxiliares de filtración). El
transporte de partículas dentro del lecho filtrante, como se discutió anteriormente, es por
difusión browniana, movimiento de fluidos (intercepción) y sedimentación. Cuando se utiliza el
tratamiento previo convencional (coagulación y sedimentación), la interceptación es
probablemente el mecanismo de transporte dominante.

Las formulaciones matemáticas para los procesos físicos de floculación, sedimentación y

filtración se han combinado para desarrollar un enfoque integral para el diseño de plantas de
tratamiento de agua (15,22,28,29). Algunos resultados de este trabajo se presentan aquí.

Entre las conclusiones presentadas por Lawler, et al. (15) y Ramaley et al. (22) son los siguientes:

1. El diseño de la planta de tratamiento de agua debe ser abordado con una perspectiva
integradora. Cada unidad de tratamiento afecta el rendimiento de las unidades posteriores de
manera predecible.

2. Los procesos de separación sólido-líquido (por ejemplo, sedimentación y filtración) y las

instalaciones de coagulación deben diseñarse para reflejar características importantes de los
sólidos (por ejemplo, algas en un reservorio, precipitados de Al (OH) 3 (s)) a tratar. Estas
características incluyen la concentración de partículas y la distribución del tamaño de partículas.
Sobre la base de los resultados presentados anteriormente en este documento (Tabla 1), a estos
se pueden agregar las características de la superficie de las partículas y la química de la solución
(por ejemplo, las concentraciones de iones de calcio y materia orgánica natural o DOC).

CONCENTRACIÓN EN MASA DE PARTÍCULAS EN EL AGUA CRUDA (mg / L)

Fig.2 Configuración óptima del tratamiento de agua en función de las características
del agua cruda (tamaño de partícula y concentración). Las áreas sombreadas
corresponden a la filtración directa como configuración óptima (Wiesner Ref 28.
3. La sensibilidad del rendimiento general de la planta al gradiente de velocidad en la floculación,
el tiempo de detención en la sedimentación y el tamaño del medio en la filtración es muy grande.
La selección de valores de diseño para cada uno de estos parámetros de diseño tiene efectos
significativos sobre las concentraciones de filtrado y el desarrollo de la pérdida de carga.

Wiesner y sus colaboradores (28,29) han considerado el costo óptimo de la filtración y el diseño
de la planta de agua. Las funciones tecnológicas para coagulación, sedimentación y filtración
utilizadas por Lawler y colaboradores (15,22) se combinaron con funciones de costo
desarrolladas por Clark (4) en un programa de optimización no lineal. Entre las conclusiones
alcanzadas por estos investigadores se encuentran las siguientes:

1. Los costos de filtración disminuyen a medida que aumenta el tamaño de las partículas en el
influyente de los filtros. El rango tradicional de tasas de filtración [cerca de 0.136 cm / s (2 gpm
/ pie cuadrado)] muestra una menor sensibilidad del costo al tamaño y concentración de
partículas influyentes que las tasas de filtración más altas que entran en uso hoy en día. Como
los filtros están diseñados para funcionar a mayores tasas de filtración, una mayor atención al
acondicionamiento del tamaño de las partículas en los procesos de pretratamiento puede
generar ahorros sustanciales.

2. El rango de concentraciones de partículas en el que el contacto o la filtración directa son

económicamente atractivos es algo más estrecho de lo previsto. La sedimentación después de
la floculación y antes de la filtración es deseable cuando la concentración en masa de partículas
en el suministro de agua bruta es mayor que 15 a 20 mg / L. Reducir la cantidad de procesos
unitarios utilizados para tratar el suministro de agua no equivale a reducir el costo del
tratamiento del agua.

Los efectos del tamaño y la concentración de partículas en el agua cruda en la configuración

óptima de una planta de tratamiento de agua se presentan en la Fig. 2, tomada de la reciente
tesis doctoral de Wiesner (28). Se consideran tres tipos de tratamiento: (1) Filtración por
contacto, en la que se agregan productos químicos desestabilizadores al agua cruda y la
suspensión desestabilizada resultante se aplica a los filtros sin procesamiento adicional; (2)
filtración directa, en la cual la suspensión desestabilizada se hace flocular para lograr el
crecimiento de partículas antes de la filtración; y (3) tratamiento convencional, en el que la
desestabilización, la floculación y la sedimentación preceden a la filtración. En este análisis, los
productos químicos desestabilizadores no agregan un volumen sólido adicional al agua que se
está tratando. La precipitación de Al (OH) 3 (s) o Fe (OH) 3 (s), a menudo utilizada para el
tratamiento convencional de aguas con baja turbidez y DOC (por ejemplo, el lago de Zúrich), no
se considera en esta comparación particular.

En la Fig. 2, los límites entre las áreas en las que predominan las configuraciones específicas del
proceso con respecto a minimizar los costos se muestran como funciones de la concentración
en masa de partículas en el agua cruda (mg / L) y el tamaño (diámetro promedio en volumen, \
im) de las partículas en esa agua. La filtración directa tiene dos áreas distintas de aplicación. En
la región inferior (partículas pequeñas y bajas concentraciones), la floculación proporciona un
crecimiento de partículas suficiente para reducir la pérdida de carga causada por partículas
pequeñas. Esta región es bastante pequeña porque la reacción de floculación en sí es lenta
debido a la baja tasa de colisión entre partículas a estas bajas concentraciones de partículas. En
la región superior (partículas más grandes y concentraciones de partículas algo más altas), la
floculación permite nuevamente tasas de filtración más altas (filtros más pequeños) al reducir
la pérdida de carga causada por las partículas aplicadas al filtro. La filtración directa no es óptima
para partículas en el rango de tamaño de 1 a 2 (j, m. Aquí, la calidad del efluente, establecida en
un límite de 0.1 mg / L, limita la aplicación del proceso. Este es un resultado de la "ventana "para
los filtros limpios que se muestran en las Figs. 1 (a-b)

La filtración por contacto es óptima a concentraciones de partículas muy bajas. Esto se debe a
que se necesitan periodos de floculación excesivamente largos para producir la agregación de
partículas en dichas suspensiones diluidas. Cuando la filtración convencional es óptima, se
requiere sedimentación para eliminar las partículas antes de la filtración. Las partículas se
eliminan a menor costo agregando tanques de sedimentación que construyendo filtros más
grandes en esta región. Para partículas muy pequeñas en cualquier concentración por encima
de unos pocos mg / L, los tanques de floculación son grandes, las pérdidas de cabeza son rápidas
y los filtros grandes; Los costos son altos y la región se denomina inviable.

Conclusiones

El diseño, la operación y el rendimiento de las plantas de tratamiento de agua deben reflejar las
características del agua a tratar. Aquí se identifican cuatro características importantes del agua
cruda: Tamaño de partícula; concentración de partículas; características de la superficie de la
partícula; y química de soluciones. La importancia de la química de soluciones ha recibido un
énfasis especial. La materia orgánica natural (por ejemplo, los ácidos fúlvicos) puede determinar
los requisitos químicos y la configuración del proceso en concentraciones de solo unos pocos
mg de DOC / L, incluso en aguas donde las partículas sólidas (turbidez) son la preocupación
aparente.

A partir de consideraciones sobre los mecanismos de filtración, se puede concluir que los filtros
eficientes son filtros "madurados". Los medios de filtro que dominan la eliminación durante la
mayor parte de una serie de filtros son partículas eliminadas de la suspensión en lugar de granos
de arena especificados en el diseño. Las partículas submicrónicas pueden producir pérdidas de
carga excesivas y, por lo general, requieren agregación antes de la filtración. Las partículas en el
rango de tamaño de 1 a unos pocos um tienen más probabilidades de penetrar en un filtro y
pueden controlar el diseño de los lechos de filtro y los procesos de pretratamiento.

Un enfoque integrador para el diseño y operación de la planta de tratamiento de agua, desde la

calidad del agua bruta hasta el rendimiento del lecho filtrante, facilitará la evaluación del
proceso y tiene el potencial de proporcionar una base para un diseño óptimo.

EXPRESIONES DE GRATITUD

Es un placer reconocer los esfuerzos de maestros y alumnos anteriores. Esto podría ser mejor
declarado como simplemente "maestros anteriores", ya que mis alumnos ciertamente han sido
mis maestros. Estoy particularmente en deuda con Mark Wiesner, Wang Zhishi y John Tobiason.
La financiación primaria para la investigación reciente reportada aquí fue proporcionada por la
Oficina de Investigación y Desarrollo, Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos,
bajo la subvención R808104.