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- LAS PRISIONES EN ESTADOS POPULISTAS/DE BIENESTAR


A mediados de 1930, en América Latina, algunos gobiernos recientemente
electos formaron alianzas populistas entre el Estado, la clase obrera
organizada y la llamada burguesía nacional. Pero esto no reflejó totalmente
una preocupación real por la salud mental y física de los presos ni por sus
derechos en calidad de ciudadanos sociales. Dentro de estos gobiernos
tenemos los de Getulio Vargas en Brasil, Juan Domingo Perón en Argentina y
Lázaro Cárdenas en México. De estos gobiernos mencionados, el de Argentina
es el único donde las autoridades penitenciarias procuraron extender el
bienestar social y la justicia social a los presos. En 1947 Roberto Pettinato, jefe
de la Dirección General de Institutos Penales realizó los siguientes cambios o
reformas:
- Cerró el infame presidio de Ushuaia.
- Eliminó el uso de números y uniformes a rayas.
- Amplió los beneficios de los presos (por ejemplo, «visitas íntimas», una
mejor dieta y protección al bienestar de las familias).
- aumentó la instrucción técnica y el aprendizaje de trabajos manuales en
prisiones federales.
- Promovió la práctica de los deportes instituyendo una división de
educación física dentro de cada establecimiento penal.
- Nuevo Estatuto del Servicio Penitenciario de la Nación aprobado en
1948, otorgaba nuevos beneficios al personal penitenciario, como
vacaciones pagadas, la categorización de puestos y nuevos cursos de
especialización en derecho y procesos judiciales.

Según el historiador José D. Cesano todas estas reformas fueron parte de las
políticas de bienestar social del movimiento peronista que tenía como ideología
los valores de la familia y el catolicismo. Pero además agrega que estas fueron
sólo una actualización de los reclamos históricos de cambio del sector político
y no como cambios fundamentales en la concepción estatal del delito y la
pena. Finaliza Cesano indicando que las cárceles argentinas tuvieron algunas
mejoras en las condiciones materiales y morales de los presos, pero esto no
significo un cambio en la concepción del delito ni en las bases teóricas de la
encarcelación por parte del Estado.
Jeremías Silva da otra interpretación a las políticas de «humanización» del
peronismo (Silva, 2012). Es decir presenta los cambios en las cárceles como
un elemento más de la propaganda peronista que muestra que el imaginario de
la Nueva Argentina tenía una fuerte base católica.
- Durante el primer gobierno de Perón los capellanes formaron parte
fundamental de la administración de las cárceles.
- Se incorporaron misas y procesiones a las festividades y
conmemoraciones oficiales.
- La Penitenciaría Nacional fue consagrada a Nuestra Señora del Carmen
y los presos integraban los coros para interpretar cantos católicos en
misas y procesiones.
- Pettinato era discípulo del justicialismo y pretendía que los carceleros
trataran a los presos con la caridad y compasión características del
catolicismo.
- Los administradores de las cárceles consideraban a todos los presos
como recuperables.
Debido a que estas reformas iniciadas fueron con el afán propagandístico de
ganar apoyo popular y que además se utilizó la Penitencieria Nacional y otras
prisiones para los disidentes políticos no se puede determinar con exactitud el
alcance e importancia de estas reformas durante los años 1946-1955, es por
eso que se requiere más investigación además de otros tipos de fuentes para
confirmar, rechazar o variar la visión de la administración de las cárceles de
este periodo.

Según los historiadores en el primer mandato de Getulio Vargas (1930-1945),


en Brasil, sucedió lo contrario. Se generó protestas contra el Estado Novo por
parte de comunistas y militantes de izquierda que acabaron encarcelados y
torturados. A la vez las tres cárceles principales de Río de Janeiro (la Casa de
Detenção, la Casa de Correção, y el penal de Ilha Grande) se caracterizaban
por la violencia, la arbitrariedad y el maltrato para los presos. Sólo el Instituto
de Regeneraçao Social en São Paulo (Carandirú) fue una cárcel-modelo
basada en el poder médico-legal. De acuerdo a Janete Tanno los familiares de
los presos enviaban correspondencia al gobierno para obtener su liberación y
denunciaban que habían sido detenidos injustamente acusados de ser
comunistas.

Entonces, debido a la falta de fuentes no se podrá emitir un juicio definitivo de


la reforma penitenciaria de los gobiernos tratados anteriormente. Y quizás
algunos de los dirigentes de esa época tomaron como una imposición la
resolución de 1955 que establecía condiciones mínimas para los presos.
(Primer Congreso de las Naciones Unidas sobre Prevención del Delito y
Tratamiento del Delincuente, celebrado en Ginebra en 1955, y aprobadas por el
Consejo Económico y Social en sus resoluciones 663C (XXIV) de 31 de julio de
1957).

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