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Como es bien sabido, la historia consigna que en la antigüedad existieron pueblos que se
distinguieron por ser excelentes mercaderes, tal es el caso de los fenicios en Asia y de los
venecianos en Europa. Pueblos comerciantes que desarrollaron, por necesidad, formas primitivas
de contabilización de sus operaciones, basadas en los instrumentos y formas de escritura de la
época en que les correspondió vivir. De tal forma que se han encontrado vestigios de este tipo de
registro, correspondientes a épocas tan lejanas como 3 000 años antes de nuestra era.
Por lo tanto, la historia de la contabilidad y de su técnica está ligada al desarrollo del comercio, la
agricultura y la industria. Desde que comenzó el comercio de bienes, se buscó la manera de
conservar el registro de las transacciones y de los resultados obtenidos en la actividad comercial.
Los arqueólogos han encontrado en las civilizaciones del Imperio inca, del Antiguo Egipto y de
Roma variadas manifestaciones de registros contables, que de una manera básica constituyen un
registro de las entradas y salidas de productos comercializados y del dinero. La utilización de la
moneda fue importante para el desarrollo de la contabilidad, ya que no cabía una evolución
semejante en una economía de trueque.
Se dice también que las primeras civilizaciones que surgieron sobre la tierra tuvieron que hallar la
manera de dejar constancia de determinados hechos con proyección aritmética, que se producían
con demasiada frecuencia y era demasiado complejo para poder ser conservados en la memoria.
Reyes y sacerdotes necesitaban calcular la repartición de tributos, y registrar su cobro por uno u
otro medio. La organización de los ejércitos también requería un cálculo cuidadoso de las armas,
pagas y raciones alimenticias, así como de altas y bajas en sus filas.
Algunas sociedades que carecían de escritura en sentido escrito utilizaron, sin embargo, registros
contables; es el caso de los Incas, que empleaba los quipus, agrupaciones de nudos de distintas
formas y colores ordenados a lo largo de un cordel, y cuya finalidad, aún no desvelada totalmente
era, sin duda, la de efectuar algún tipo de registro numérico.
Para remontar a los orígenes de la Contabilidad es necesario recordar que las más antiguas
civilizaciones conocían operaciones aritméticas rudimentarias llegando muchas de estas
operaciones a crear elementos auxiliares para contar, sumar restar, etc. Tomando en cuenta
unidades de tiempo como el año, mes y día. Una muestra del desarrollo de estas actividades es la
creación de la moneda como único instrumento de intercambio. De tal manera que se puede
aseverar que los orígenes de la Contabilidad son tan antiguos como el hombre.
LA ECUACION CONTABLE
La técnica contable está basada en una sencilla ecuación de primer grado denominada ecuación
contable, desarrollada con el fin de conocer las implicaciones y sustento de los reportes que esta
genera por tal motivo es muy importante conocer su funcionamiento. La ecuación contable está
integrada por tres elementos que son: Activos, Pasivos y Capital contable, donde la ecuación es la
siguiente A=P+C (Activo=Pasivo+Capital)
Al momento de estudiar cada uno de los elementos que comprende la ecuación contable, se
establece con la finalidad de mantener la igualdad numérica entres sus componentes, entonces
cualquier transacción realizada por la empresa se verá reflejada por los menos en dos de los tres
elementos que comprenden la ecuación. Es decir que, si una empresa incrementa sus activos, será
necesario identifica la fuente donde se origina dicho activo el cual pudo originarse mediante la
adquisición de un pasivo o por medio del aporte al capital de la empresa entregado por los socios.
En cuanto a los conceptos que se identifican como los activos de la empresa estos se integran por
todos aquellos bienes y derechos con que se cuenta, los pasivos representan las deudas y las
obligaciones, y el capital contable se encuentran ubicados todos los aportes realizados por los
socios de la empresa además de las utilidades o perdidas que pueden ocurrir.
La cuenta es el registro histórico donde se anota de manera clara, ordenada y comprensible los
aumentos o disminuciones que sufren los diferentes elementos del balance (activo, pasivo y
capital) y como consecuencia de las operaciones realizadas por la empresa podemos definir la
cuentas T como la representación gráfica de la cuenta contable con sus diferentes elementos, las
cuentas T nos permiten hacer registros contables y es la forma más utilizada para registrar los
diferentes hechos económicos que ocurren dentro de una empresa.
Nombre de la cuenta
Código de la cuenta
Su lado debito(debe)
Su lado crédito(haber)
Movimientos débitos y créditos
Su saldo
El saldo de la cuenta es el resultado de restar a los débitos el valor de los créditos, las cuentas T
nos permiten visualizar que en cada lado se cuenta ubicada una cuenta llamada débito y al otro
lado una cuenta crédito o también conocidas como DEBE Y HABER, porque cada cuenta tiene la
capacidad de dar y recibir, cumpliendo de esta manera el principio de partida doble, el cual en
toda contabilización o registro contable siempre hay como mínimo una cuenta que entrega y una
cuenta que recibe y que cada cuenta está en condiciones tanto de dar como de recibir.
LA PARTIDA DOBLE
La contabilización de los hechos contables se realiza basándose en el método de partida doble que
nos dice que todo hecho contable afecta como mínimo a dos cuentas, los hechos contables se
reflejan en la empresa en forma de asientos los hechos contables son los sucesos económicos que
afectan el patrimonio de una empresa.
La partida doble significa doble anotación, es decir, este sistema consiste en registrar las dos
partes simultáneamente, que son causa y efecto que debe aparecer en mínimo todo hecho
contable de la empresa.
En el sistema de la partida doble el resultado del ejercicio se puede hallar de dos maneras
diferentes
El asiento contable
Es el nombre que se le asigna al registro contable en el libro diario, los asientos deben tener
numeración correlativa, ordenados en orden cronológico. En todo asiento en el libro diario debe
tener las siguientes partes:
En cuanto a la forma de registrar los asientos, se escriben primero las cuentas de cargo (deudor o
dedito, representa ingresos de dinero o bienes, también se utiliza para registrar las pérdidas de la
empresa) y luego se escriben las cuentas de abonos (acreedor o crédito, registro de salida de
dinero y bienes, también se incluyen las ganancias de la empresa)
Con la siguiente regla se puede cargar (debe) y abonar (haber) a las cuentas en el libro diario:
1. Se identifican las cuentas que intervienen en la operación registrada, por lo menos deben
usarse una cuenta de acreedor y otra de deudor.
2. Se identifican cada una de las cuentas si son de ingresos o si son de gastos.
3. Se aplica al principio de partida doble.
BALANCE DE COMPROBACIÓN
Nombre de la empresa
Nombre del documento “balance de comprobación”
Folio del mayor de cada cuenta
Nombre de las cuentas
Movimientos deudores (debe) y acreedor (haber) de las cuentas
Saldo de deudores (debe) y acreedor (haber) de las cuentas
PREGUNTAS O DUDAS