Sei sulla pagina 1di 4

Década de Dictadura en Venezuela (Período 1948-1958).

Rómulo Gallegos en la toma de posesión del gobierno en febrero de 1948, aseveró: “Yo quiero ser el presidente de la concordia” y promete
“volver nuestro ejército a sus cuarteles”; develando la desconfianza o cautela de los civiles hacia los militares asumiéndose los últimos
contenedores de las “tendencias populistas”. Desde el primer momento Gallegos pareciese apoyar la estabilidad de su gobierno en el
Ministro de Guerra y Marina Carlos Delgado Chaulbaud quien había departido con este en su exilio en Barcelona – España mientras el
último realizaba estudios en Europa considerándolo de su confianza, desplazando o poniendo en segundo plano el apoyo político de Acción
de Democrática trayendo distanciamiento con Rómulo Betancourt.
Los militares demandaban apartar la influencia de Betancourt en el gobierno debido a su identificación antiimperialista incluso comunista y
desvinculación de Acción Democrática de la función gubernamental mediante reestructuración del ejecutivo por figuras independientes.
En abril de 1948, Gallegos ante el Congreso Nacional bosqueja su modelo de gobierno como una “democracia popular” con “fundamentos
liberales del orden social” procurando “formas de equilibrio económico y justicia social…” a la vez declara no compartir la ideología
comunista y combatirlo a través “… de procedimientos lícitos y además eficaces” refiriéndose “… por medio de realizaciones prácticas,
positivas, concretas.” El apoyo militar entra en crisis con el sector civil formalmente en el poder sobreviene un régimen corporativo militar
concretado en un golpe de estado en noviembre de 1948, consolidándose a partir de la Constitución de 1953, eliminándose en la práctica
los mecanismos de participación a través de los partidos políticos mediante su prohibición tácita. Entre los justificativos refiere a la
belicosidad con que actuaban la fracción extremista de AD incitando a las masas alterar el orden público y maniobras para dominar las
Fuerzas Armadas; critican a Gallegos que su condición de “excelente literato y novelista” no lo hacía apto para dirigir los destinos de la
Nación al considerarlo fantaseador y creador de imágenes en abstracto.
Inmediatamente a través de Decreto Ejecutivo se ilegaliza AD, calificada por la oficialidad como “marxista blancos”. La Junta Militar
consideraba al golpe de Estado 1948, el rescate y continuidad del proceso político iniciado en octubre de 1945, corrompido por AD. Se
interpretó este acontecimiento como respuesta al sectarismo del “proyecto revolucionario” de 1945 – golpe de estado preventivo- a pesar
que la elección de Gallegos resultó una línea moderada en relación a Betancourt.
La Junta Militar fue presidida por el ex Ministro de Guerra y Marina de la Junta Revolucionaria Cívico- Militar y del gobierno de Gallegos,
Carlos Delgado Chalbaud y los generales Marcos Pérez Jiménez – ministro del Estado Mayor – y Felipe Lovera Páez – sub jefe del Estado
Mayor- restituyó la Constitución de 1936 y reforma de 1945, pero acotaba mantener a discreción los adelantos progresistas de la 1947.
Disolvió los órganos legislativos – Congreso Nacional y asambleas legislativas de los estados de la Federación – se garantizó la actuación
política de los otros partidos políticos: COPEI, URD incluso el Partido Comunista Venezolano (PCV) ilegalizado en 1950. Gallegos al respecto
expresa: “La verdad, la ingrata verdad es ésta: la usurpación del poder llevada a cabo por la Fuerzas Armadas va encaminada forzosamente a
la supresión de la actividad de los partidos políticos.
Tras el asesinato de Delgado Chalbaud en noviembre de 1950, se designa presidente a Germán Suárez Flamerich – participe de la
Generación de 28 – constituyéndose la Junta de Gobierno bajo influjo de Pérez Jiménez; se decreta un estatuto electoral y autoriza el
funcionamiento de algunos partidos políticos con objeto de integrar el Consejo Supremo Electoral, se conformaría por delegados de COPEI,
URD, Partido Socialista de Venezuela e Independientes.
El 30 noviembre de 1952, se realizan las elecciones para representantes a la Asamblea Constituyente asegurándose que ganó por mayoría el
partido Unión República Democrática – URD – pero producto del fraude cuya autoría intelectual es atribuida al ministro Laureano Vallenilla
Planchart, dio el triunfo al partido oficialista Fuerza Electoral Independiente – FEI –; provocando el exilio de Villalba y la dirigencia de URD;
renuncia del Presidente y vicepresidente del Consejo Supremo Electoral, Vicente Grisanti y Juan Saturno Canelón quienes no lo avalaron; los
resultados aproximados manejados fueron: URD: 1.198.000, FIE: 403.000, COPEI: 306.000. En un telegrama atribuido a Pérez Jiménez
remitido a Jóvito Villalba e Ignacio Arcaya aseguraba que no se reconocería el triunfo al ser producto de un acuerdo entre Acción
Democrática y Partido Comunista; a pesar que Betancourt públicamente ordenó a la militancia a abstenerse de votar.
El 2 de diciembre de 1952, se disuelve la Junta de Gobierno y representantes de las Fuerzas Armadas proclaman a Marcos Pérez Jiménez
Presidente Provisional de la República; posteriormente la Asamblea Constituyente aprobó la nueva Constitución el 15, de abril de 1953,
proclamándolo Presidente para periodo constitucional 1953- 58; se designa nuevos magistrados de la Corte Federal y de Casación, Contralor
y Procurador General de la República, cargos ejecutivos a todo nivel como diputados y senadores al Congreso Nacional y asambleas
legislativas estadales conforme a la Disposición Transitoria Segunda de la Constitución de 1953.
La Constitución de 1953, preveía la celebración elecciones generales para el ejercicio del periodo 1958-1963. El 15 de diciembre de 1957, se
realiza el referéndum de carácter consultivo y vinculante con objeto de proponer Marcos Pérez Jiménez continuar un periodo presidencial
de 5 años; de aprobarse no solo se ratificaría al Presidente en su cargo, sino a todos miembros al Congreso Nacional, Asambleas Legislativas,
Estadales y Concejos Municipales de manera automática contrariando a la Constitución de 1953, que contemplaba la elección de un nuevo
presidente aunque no prohibía la reelección inmediata y otros cargos regionales y locales con participación de diversos candidatos y en
elecciones directas, secretas y universales.
El candidato de consenso a la presidencia de la oposición fue Rafael Caldera; quien es detenido acusado de atentar contra la estabilidad del
estado y expulsado el país. El Sí obtuvo 2.374.790 y el No: 364.182. Votos Nulos: 186.015. El 20 de diciembre de 1957; Pérez Jiménez
anunció continuar en el poder, basándose en los resultados obtenidos en el plebiscito de dicho año desconocidos por los partidos
opositores. La reacción contra la dictadura de Marcos Pérez Jiménez se manifestó en el campo civil con la huelga estudiantil
fundamentalmente universitaria, particularmente de la Universidad Central de Venezuela y Universidad Católica Andrés Bello el 21 de
noviembre de 1957, por la juventud de Acción Democrática – Silvestre Ortiz Bucaram – Partido Comunista de Venezuela – Guillermo García
Ponce – Unión Republicana Democrática – Fabricio Ojeda – Copei -Enrique Aristiguieta Gramcko- y militar con la sublevación del coronel
Hugo Trejo el 1 de enero de 1958, movimientos autónomos e independientes se llevó un proceso de coincidencia y negociación destacando
la labor de Oscar Centeno Lusinchi quien fuese mediador logrando unificar esfuerzos de la resistencia origino la “etapa contractual”
apartando circunstancialmente diferencias ideológicas en la izquierda venezolana – AD y PCV- consolidando a la Junta Patriótica cuyos
miembros militaban en la juventud de los principales partidos políticos que actuaban de manera clandestina.
Marcos Pérez Jiménez
No obstante, la delicada situación política, el día 9 de enero se instaló la Asamblea Nacional Constituyente y en ella se aprobó la ratificación
en la presidencia provisional de Pérez Jiménez, a pesar de la oposición de COPEI y del URD.
El 9 de abril, se anuncia que la Constituyente nombraría al presidente de la República, a los miembros de los organismos legislativos, cortes
de justicia y de casación y concejos, pero sólo después de ser promulgada la nueva Constitución Nacional. El 15 de abril fue promulgada
ésta, conocida como Constitución de 1953 . El 17 de abril, Pérez Jiménez es nombrado presidente constitucional y, en su discurso de
posesión del 19 de abril, anuncia el restablecimiento de la constitucionalidad, la cual estaría apoyada en el programa de gobierno y en la
doctrina del Nuevo Ideal Nacional. El 15 de junio, queda proclamada la celebración de la Semana de la Patria, por decreto presidencial.
Entre los días 27 de junio y 6 de julio de cada año y, cumplida la primera de esta serie de manifestaciones cívicas, el 6 de julio de 1953, Pérez
Jiménez expone, en el discurso de clausura, lo que será su interpretación de la política fundamentada en el estudio y comprensión de las
condiciones geográficas, la riqueza de los recursos naturales y las tradiciones históricas patrias. A esa concepción, corresponderá la
aplicación de una estrategia de desarrollo político (interior y exterior) que, basada en estos elementos geopolíticos, fue expresada como la
propia iniciativa y decisión del Gobierno con el fin de incrementar el poder del Estado. El 2 de diciembre, Pérez Jiménez, en una alocución
dirigida a los venezolanos expresa, tras la inauguración de 2 importantes obras como son la autopista Caracas-La Guaira y el Círculo de las
Fuerzas Armadas, lo que sería el anuncio y primer paso hacia aquella forma de Estado. El 31 de diciembre, en su alocución de Año Nuevo,
fundamenta la propuesta definitiva que incluye los planes extraordinarios sometidos al control del Gobierno, entre ellos: la planta
siderúrgica del Orinoco, el sistema de electrificación del río Caroní, el plan nacional de ferrocarriles, el sistema de riego del río Guárico, las
zonas turísticas de los Estados Mérida y Nueva Esparta.
Un acontecimiento de gran importancia lo representó la instalación el 1 de marzo de 1954 de la X Conferencia Interamericana de Jefes de
Estado en Caracas, Pérez Jiménez en su discurso de inauguración, invocó la necesidad de la unidad continental de los pueblos americanos.
Durante los días de la reunión, se suceden actos de protesta en los barrios de Caracas. El 26 de marzo, es clausurada la X Conferencia y
como resultado de ella, Caracas fue escogida como sede del Instituto Interamericano de Defensa Social.
El 17 de junio de 1954, el Premio Panamericano de Carreteras es otorgado por la Asociación de Constructores al presidente de Venezuela,
como consecuencia del impulso dado a los programas viales y de la construcción en general. Hasta aquella fecha, se evidenciaba en las
siguientes obras: las avenidas Urdaneta y Guzmán Blanco, autopista del Este, Centro Simón Bolívar, Casa Sindical, Centro Administrativo de
la Ciudad Universitaria, Hotel Tamanaco,cuartel de las Fuerzas Armadas de Cooperación.
Instituto de Nutrición, las denominadas urbanizaciones obreras (Unidad Residencial El Paraíso y Ciudad Tablitas), Concha Acústica y escuela
Agustín Aveledo, todas éstas en Caracas. Hotel del Lago en Maracaibo, Hospital Médico Quirúrgico en Maiquetía, hospital y escuela de
enfermeras en Barquisimeto y la Escuela Interamericana de Agricultura en Rubio, Estado Táchira.
Estos programas del régimen figuran entre los planes de mejoramiento social que, en combinación con la política de estímulo a la
inmigración, principalmente de Europa (España, Italia y Portugal), inciden en el dinamismo urbano de la sociedad venezolana.
Otros acontecimientos importantes en el gobierno de Pérez Jiménez:
El 1 de abril de 1955, fue firmado el anteproyecto de la Siderúrgica nacional que le fue encomendado a 7 grupos industriales de distintos
países (Alemania, Bélgica, Estados Unidos, Francia, Inglaterra, Italia y Noruega).
El 27 de junio de 1955, se inicia la celebración de la Semana de la Patria y en aquella ocasión, destaca la asistencia de delegaciones militares
de varios países de América y Europa.
El 1 de julio, es recibida en Caracas la imagen de la Virgen de Coromoto, proclamada por el Gobierno como la patrona de aquellas
celebraciones.
El 6, Pérez Jiménez señala, en su discurso de clausura, que los símbolos de la nueva conciencia nacional han de ser la jerarquía de las obras
ejecutadas y en el mismo acto, recibe las insignias de su ascenso a general.
El 3 de febrero de 1956, Pérez Jiménez informa que la Cancillería ha girado instrucciones para que se dé visa a un crecido número de
venezolanos exiliados; son escasos los que regresan, y la oposición no baja la guardia. Entre el 10 y el 20 de febrero, se suceden acciones de
protesta y de repudio contra el Gobierno (principalmente por parte de los estudiantes del liceo Fermín Toro y de la escuela normal Miguel A.
Caro en Caracas) que traen como consecuencia violentos enfrentamientos con la policía.
El 2 de julio de ese mismo año, es admitido por la Cámara de Diputados el proyecto de ley que propone 12 millas náuticas para el mar
territorial venezolano.
El 9 de agosto, Pedro Estrada, en su condición de director de la Seguridad Nacional, emite un comunicado donde anuncia que había sido
descubierto un complot para asesinar a Pérez Jiménez y en consecuencia, son detenidos el historiador Ramón J. Velásquez, el escritor
Manuel Vicente Magallanes, entre otros.
El 1 de enero de 1958 estalla un movimiento militar en la ciudad de Maracay y aviones de la Fuerza Aérea atacan a Caracas, pero el 2 se
rinde la guarnición sublevada, así como también un destacamento de la ciudad de Los Teques. El 7, los estudiantes inician sus
manifestaciones de protesta contra el Gobierno. El 9, renuncian los miembros del gabinete ejecutivo y el gobernador del Distrito Federal. Es
detenido el general Hugo Fuentes junto con otros militares. El 10, quedan nombrados y juramentados los nuevos ministros y continúan las
manifestaciones de protesta en algunos barrios de Caracas. El 13, es reorganizado el gabinete, y Pérez Jiménez asume personalmente el
cargo de ministro de la Defensa. Ese día se celebra una reunión del denominado Comité Cívico-Militar encargado de coordinar acciones en
contra del gobierno. El 15 de enero, circula la Declaración de los intelectuales que reclama la libertad democrática y solicita que los poderes
públicos sean la expresión genuina de la voluntad popular y el 16, los estudiantes caraqueños se enfrentan a la policía, siendo clausurado el
liceo Andrés Bello por disposición del Ejecutivo. El 21 de enero, se inicia una huelga en la prensa y luego, estalla una huelga general que
traerá, en consecuencia, la imposición del toque de queda por el gobierno. El 23 de enero de 1958, las Fuerzas Armadas se suman al
movimiento contra el régimen. Pérez Jiménez, acompañado de su familia, sale del país y es sustituido por una Junta Militar integrada por
oficiales de las fuerzas de tierra, mar y aire, presididas por el contralmirante Wolfgang Larrazábal.
Política Económica de la Dictadura de Pérez Jiménez.
El General de División Marcos Pérez Jiménez fue el presidente número 38 de la Historia de Venezuela, gobernando con mano dura
desde el 2 de diciembre de 1952 hasta el 19 de abril de 1953 (donde asume la Presidencia de República de manera constitucional por
designación del Congreso Nacional) hasta finalmente llegar el 23 de enero de 1958 cuando su gobierno es objeto de un golpe de
estado y así derrocado.
La política económica de su Administración fue conceptualmente enmarcada bajo los lineamientos globales del denominado Nuevo
Ideal Nacional.1 Venezuela llego a su máximo histórico en salario con 76 Bs, equivalente en Dolares a 6700$. Su equipo de trabajo
para el sector económico se vio integrado por personalidades de alto nivel profesional para la materia, como fueron los casos de los
economistas Aurelio Arreaza Arreaza y Armando Tamayo Suárez, el matemático Silvio Gutiérrez, entre otros.

En lo que respecta a las entidades ministeriales estas fueron clasificadas, y el Gabinete Ejecutivo de Pérez Jiménez se dividió en 3
grupos: los de Alta Política, los de Servicios Generales y los de Producción, siendo este último el dedicado a las actividades
económicas, financieras y del medio físico. En el Gabinete de Producción se encontraba integrado por el Ministerio de Fomento,
Ministerio de Obras Públicas, Ministerio del Trabajo y el Ministerio de Minas e Hidrocarburos.

El breve período en el que gobernó el General Pérez Jiménez se vio marcado por un alto índice de prosperidad económica, producto
de los ingresos petroleros y el inicio del proceso de intentar diversificar la economía venezolana, por lo que se inició una masiva ola
de obras públicas que modernizaron en gran medida el medio físico del país.

El régimen de Pérez Jiménez concretaba sus proyectos de grandeza nacional, apoyado en un aumento considerable de los ingresos
fiscales derivados del boom petrolero, que fueron producto de un conjunto de circunstancias ocurridas en la economía mundial,
entre ellas la nacionalización del petróleo en Irán, la reconstrucción de Europa, la guerra de Corea y el cierre del canal de Suez. El
gobierno, lejos de orientar el gasto público a políticas sociales, se destinó a obras de infraestructura; autopistas, construcciones
turístico-ornamentales, complejos arquitectónicos monumentales. Todas ellas concentradas en la zona central del país y
fundamentalmente en la capital de la República. Paralelamente a estas obras, el Estado se convirtió en un gran inversor mediante la
constitución de grandes complejos económicos, como el de Petroquímica y el de la Siderúrgica. Al mismo tiempo, la industria privada
de la construcción y sus empresas conexas experimentaron una expansión significativa, convirtiéndola en el sector de la economía
con el mayor crecimiento de la época, junto con el del comercio importador.

Financieramente Venezuela mejoró su posición porque, desde 1950, la explotación del mineral del hierro se agregó a las actividades
extractoras, haciendo de Venezuela uno de los principales productores y exportadores del hierro, con reservas probadas cercanas a
los 2.000 millones de toneladas métricas, cuyo contenido férrico es de elevado tenor a escala mundial. Por su proximidad al Orinoco
y al Caroní se facilitaron el transporte, reducción y extracción; el segundo río para proporcionar energía hidráulica.

Por mucho tiempo produjo moderados ingresos y divisas. El cerro “Bolívar” se convirtió, en Guayana, en un emporio por la
explotación de sus ricos yacimientos. La “Iron Mines Company of Venezuelan” inició su explotación: alcanzó en los primeros cuatro
meses una producción de más de nueve millones de toneladas; en 1951 comenzó la explotación con un volumen de 23.472
toneladas métricas con destino a Estados Unidos (plantas de “U. S. Stael”, Filadelfia), Inglaterra, Alemania y otros países. Luego
participó la “Orinoco Mining Company”, subsidiaria de la “United Steel Corporation”, que acometió el esbozo de las estructuras de las
obras necesarias para la explotación de sus concesiones en el cerro “Bolívar”.

La producción aumentó en casi 130 millones de toneladas métricas para atender la nueva demanda, y el presupuesto alcanzó un
total de ingresos de Bs 5.396 millones en 1957, equivalente a una suma mayor de la de todos los ingresos obtenidos por el Tesoro
nacional desde 1830 hasta 1935. Coyuntura favorable al país porque la mejora de los ingresos permitió al Gobierno acometer
grandes obras y enriquecer al grupo hegemónico.

Igualmente se forman bien definidos grupos económicos monopolísticos nacionales, que dominan fábricas de cemento, envases de
papel, concreteras, constructoras, cervecerías, financiadoras, urbanizadoras, seguros y capitalización, importación, bancos, prensa,
radio y televisión, dinero y valores; electricidad, producción y distribución de caña de azúcar; licores, cauchos, entre otros, que
señalan un fortalecimiento de la clase empresarial. Por lo tanto, la época Pérezjimenista fue una de las mejores que ha tenido
Venezuela en materia económica.
Marcos Pérez Jiménez. Marcos Pérez Jiménez al ganar la
presidencia de Venezuela.

Disturbios en Venezuela tras el derrocamiento a


la dictadura de Marcos Pérez Jiménez.

Potrebbero piacerti anche