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SERVICIO DE INVESTIGACION PREHISTORICA

DIPUTACION PROVINCIAL DE VALENCIA


SERIE DE TRABAJOS VARIOS
Núm. 70

MATERIALES
DE LA
NECROPOLIS IBERICA
DE
ORLEYL
(Val1 d'Uxó, Castellón)
Por
A. LAZAR0 MENGOD, N. MESADO OLIVER,
C. ARANEGUI GASCO y D. FLETCHER VALLS

OBRA EDITADA EN COLABORACION


CON LA
EXCMA. DIPUTACION PROVINCIAL
DE
CASTELLON DE LA PLANA

VALENCIA
1981
SERVICIO DE INVESTIGACION PREHISTORICA
DIPUTACION PROVINCIAL DE VALENCIA
SERIE DE TRABAJOS VARIOS
Núm. 70

MATERIALES
DE LA
NECROPOLIS IBERICA
DE
ORLEYL
(Val1 d'Uxó, Castellón)
Por
A. LAZAR0 MENGOD, N. MESADO OLIVER,
C. ARANEGUI GASCO y D. FLETCHER VALLS

OBRA EDITADA EN COLABORACION


CON LA
EXCMA. DIPUTACION PROVINCIAL
DE
CASTELLON DE LA PLANA

VALENCIA
1981
DIPUTACION PROVINCIAL DE VALENCIA - INSTITUCION ALFONSO EL MAGNANIMO

SERVICIO D E INVESTIGACION PREHISTORICA


SECCION DE PREHISTORIA EN VALENCIA DEL C.S.I.C.

SERIE DE TRABAJOS VARIOS


Núm. 7 0

I.S.B.N. 8 4 4 0 4 4 8 8 8 - 1 .-l.S.S.N.-0211-2264
Dep. legal V. 2000-1 9 8 1
Editorial F. Dornenech, S. A., Mar. 31-Valencia

© de la edición digital: Museu de Prehistòria de València, 2010 — ISSN 1989-0540


CAPITULO 1

LOS MATERIALES DE LA NECROPOLIS DE ORLEYL


EN EL MUSEO DE BURRIANA (CASTELLON)

ABILIO LAZAR0
NORBERTO MESADO OLIVER

A. LA PUNTA DE ORLEYL Y SU ENTORNO

El río Belcayde, topónimo ya registrado por Cavanilles (11,


nace en término de Alfondeguilla y tras recibir el aporte hídrico
del caudaloso manantial de S. José al oeste de Val1 d'Uxó -tra-
mo que por ello se denomina también Barranco de S. José-, y
de la Rambla Cerverola luego, penetra en la Plana de Castellón.
Su importancia en tiempos pasados -ya que más que un río es
una rambla-, radicaba en el hecho de haber sido límite meri-
dional de la ((Governació de qa lo riu d'Uxó» la cual se ex-
tendía hasta el Cenia, límite norte del Reino de Valencia.
El mentado cauce tras vadear por el N. la cadena de bajos
cerros de Xilxes, derramaba el agua de sus avenidas otoñales
por los términos municipales de Moncofa, Xilxes y Almenara
anegando sus tierras bajas (Z), cuya zona costera constituyó
una extensa albufera en tiempos prerromanos, de la que hoy
son restos los lagunajos de Almenara y sus entornas, inundados
aún en períodos pluviales (3).
Los cerros antedichos, de dirección NE./SO., formados por
calizas Jurásicas del Dogger (4), de algo más de 4 kms. de re-

( 1 ) A. J. CAVANILLES: ~Obsemacionessobre la Historia Natural, Geografía, Agri-


cultura, Población y Frutos del Reyno de Valencia., Madrid, 1795, T. 1, pág. 113.
(2) Ob. cit. nota 1, pág., 113.
(3) V. M. ROSSELLO: a l Medio Geográfico-Geológico dels Estanys., Cuadernos de Pre-
historia y Arqueología Castellonense, 2. Castellón, 1975, phgs., 14/20.
(4) E.. DUPW: «Mapa Geológico de Espana. 1 :50.000. Hoja 668. Sagunto.~Insti-
tuto Geológico y Minero. Madrid, 1959.
corrido, seriamente dañados hoy por canteras en explotación, fi-
nalizan adentrándose en cuña hacia el corazón de la Plana, ha-
biendo tomado por su configuración dicho extremo septentrional
la denominación popular de «LA PUNTA)). Honorio García nos
recoge su verdader topónimo al ubicar los diversos despoblados
árabes -alquerías- en el valle de Uxó: ((ORLEYL en las proxi-
midades de la montaña de la PUNTA, llamada en tiempos no
lejanos LA PUNTA DE' ORLEYL)) (5). Algo más de 6 Kms. dista
hoy dicho cerro del Mediterráneo, y apenas su mitad de la al-
bufera o marismas litorales mentadas, cerradas por la restinga
litoral (6).
Descendiendo por la carretera local de Vall d'Uxó a Monco-
fa, tras rebasar su Km. 2, el Belcayde colinda por su margen
izquierda con dicha vía, punto donde un viejo camino con di-
rección al mar por el piedemonte de La Punta., une con el ca-
mino Viejo de Xilxes y, hacia Moncofa, con el azagador llama-
do de «Les Cabres)) el cual finaliza cerca de los cimientos de la
supuesta Torre Forqada (7),de Biesma (8) o de Moncofa, que
baña el mar.
Sobre el cerro de La Punta de Orleyl se ubica un extenso
despoblado ibérico -quizás el mayor de cuantos existen en la
provincia-, cuya estrategia, al dominar la Plana meridional
(Plana Baixa) en un sector antaño estrechado por las marismas,
fue patente, dado que tuvo que controlar el corredor costero-li-
toral, paso obligado de seculares rutas.
El alargado cerro, de unos 500 m. de longitud, de cómodo
acceso, está coronado por una plataforma amesetada con acan-
tilado en su ladera mediterránea, cuya cota sólo alcanza los
120 m. s. n. m.
El yacimiento fue conocido por uno de nosotros (Mesado) en
el año 1962 gracias a la información que nos facilitó don Cris-
tóbal Mesado Franch, el cual poseía fincas rústicas en las cer-
canías del yacimiento, partida de la Punta, Vall d'Uxó. Tras ser
visitado desde entonces con cierta asiduidad en un principio, el

(5) H. GARCIA: «Notas para la Historia de Van de Uxó.)) Exmo. Ayuntamiento e


Instituto Laboral, Vaii de Uxó, 1962, pág. 30. En este mismo trabajo, en la nota 1
de la pág. 8 se denuncia ya el poblado prerromano de La Punta de Orleyl.
(6) Ob. cit. nota 3.
(7) Jaume 1: «Crónica., Véase la rendición del Castell d'Uxó.
(8) G. ESCOLANO: ((Décadas de la Historia de la Insigne y Coronada Ciudad y Reyno de
Valencia.» Valencia, 16 10.
Museo de Burriana expone materiales del Bronce Valenciano re-
cogidos en la cota alta del poblado, y cerámicas griegas de fi-
guras rojas e ibéricas zoomorfas (9), constituyendo un hallazgo
relevante las cuatro láminas de plomo con inscripción ibérica,
hoy en el Museo de la Excelentísima Diputación Provincial de
Valencia ( 10).
Arquitectónicamente destacan en el poblado varios lienzos de
muralla y los restos, en la cima del cerro, de una probable to-
rre de excelente cantería, que excavaciones clandestinas están ha-
ciendo aflorar.
En el extremo N. del cerro, en 1961, contiguo al camino
viejo de Xilxes, un hallazgo fortuito puso al descubierto la cá-
mara de lo que pudo ser un horno cerámico con múltiples pie-
zas apiladas, que fueron rotas en divertido juego por los brace-
ros, que explanaban la finca con el fin de transformar en re-
gadío un sector de secano con olivos y algarrobos. En dicho lu-
gar abundaban los indicios .para asegurar que había sido sote-
rrada, al explanar la finca, la cámara de cocción o laboratorio
de un horno, tal vez similar al cercano de la Torrassa (1l ) , lla-
mándonos la ,atención la gran abundancia de tiestos de ánfora
Dressel 214 cuyas superficies no presentaban desgaste alguno.
Por los campos colindantes han sido hallados repetidamente mu-
retes con argamasa, calizas labradas y sepulturas con cubierta
de tégulas.

LA NECROPOLIS
A fines del año 1962, al O./SO. del poblado dábamos con la
necrópolis o una de las necrópolis de la Punta de Orleyl, ya
que en superficie veíanse fragmentos de huesos calcinados, ce-
rámicas requemadas y pequeños fragmentos de metal. La vieja
colonización agrícola del lugar, comportando escasos y viejos al-

(9) Gran Enciclopedia de la Región Valenciana, Valencia, 1972, T. 8, pág. 112.


(10) Véase en este mismo estudio el capítulo sobre las inscripciones ibéricas.
(11) F. ESTEVE GALVEZ: ((Un horno de cerámica romana en Vall d'Uxó (Caste-
ilón.))) Saitabi número 718. Valencia, 1943, pág., 64.
J. ALCINA: xEl horno romano de Vall d'Uxó y su cerámica.)) Saitabi, IX, T." VII,
n." 31/32. Valencia, 1949, pág., 2.
C. ARANEGUI: ((La producción de ánforas romanas en el País Valenciano. Estado
de la ciestión., Archivo de Prevstoria Levantina, XVI. Valencia, 1981, págs.,
5291538.
garrobos, en tierras arcilloso-sabulosas de escaso fondo con
constantes afloramientos calizos, nos hizo sospechar que el yaci-
miento había sido destruido de antiguo, quizás con los abanca-
lamientos del siglo XVIII (12), por lo que no dimos mayor im-
portancia al hallazgo pese a contener innumerables fragmentos
de cerámicas importadas.
Independientemente, otro de nosotros (Lázaro), explorando
arqueológicamente el área del término municipal de Vall d'Uxó
-población en la cual residía con asiduidad- encontraba en los
inicios de la década de los anos setenta, el poblado de Orleyl y
su necrópolis (fig. 1). casualmente su visita coincidió con unas
recientes labores agrícolas que habían ahondado en exceso, po-
niendo al descubierto un importante material arqueológico que
quedaría ingresado en el Museo Municipal de Burriana, de cuyo
departamento de investigación es asiduo colaborador.
La necrópolis se sitúa a mediodía del poblado del cual dista
unos 400 mts., ocupando un área en exceso menuda para un
despoblado tan extenso como es el asentado en el otero de La
Punta, por lo que es de sospechar que existirían otros cemente-
rios prerromanos, aunque la cronología del material exhumado
cubre ((grosso modo)) el horizonte sociocultural de la población que
ocupó el cercano cerro de Orleyl. Sus restos se denuncian en
una área abancalada (fig. 2 y Lám. 1) que apenas alcanza los
1.000 m2., situada al E. de un alargado crestón calizo de direc-
ción S./SW. cuya altura apenas rebasa el metro (13).
Dicho campo, asentado en el declive NE. de un suave alto-
zano, queda al socaire de las crecidas otoñales del río, siendo
un punto bien visible desde el cabezo de Orleyl. Rebasado el
largo crestón calizo de 7 m. de ancho, un bancal de 64 m. de
longitud por unos 10 m. de ancho (fig. 2, letra C), puede conte-
ner también enterramientos. Esta necrópolis se alcanza cómoda-
mente siguiendo un camino particular -«Camí Escoladora))- que
delimita unos campos con naranjos en el piedemonte de me-
diodía del cerro de la Punta.
Desde la necrópolis vemos al N. el pequeño poblado amese-
tado de Maquial, Vall dlUxó, del Bronce Valenciano; al N./NE.

(12) Ob. cit. nota 1, pág., 116.


(13) En la finca donde fue destruido el horno romano, junto al camino viejo de
Xiixes, veíanse, también, diminutos fragmentos de cerámicas áticas, por lo que pudie-
ra haber existido en este punto otra necrópolis.

2
-olivos
a
--algarrobos
0b(30-muros
a
-
iLL
-calizas
- necropolis
ORLEYL 11

el pico de Sta. Bárbara, Vilavella, también del Bronce Valencia-


no y El Castell, poblado ibérico; al NE. la Plana con la zona
oeste del municipio de Nules y Vilarreal al fondo; al E./NE. la
propia cumbre de la Punta de Orleyl; al NW. el pueblo de Vall
dlUxó, y al N./NW. el poblado paleopúnico de La ToYrassa, don-
de en sus cercanías fue estudiado el aludido horno cerámico.
El término municipal de Vall d'Uxó, por su configuración
orográfica delimitando un sector de La Plana al S. del Millars,
es de suma importancia arqueológica, habiéndose realizado en
1 974 por el Departamento de Arqueología de la Excelentisima
Diputación Provincial de Castellón, la excavación total del im-
portante poblado ibérico que se asentó sobre las grutas de S.
José, contiguo a la ermita de la Sagrada Familia, en la margen
izquierda del Belcayde, yacimiento que en 1928 denunciaba don
Juan Bautista Porcar (14), de cuyos trabajos ha sido dada una
breve nota (15). ((El Repartiment)) y la ((Carta Pobla)) de la Vall
d'Uxó ( 1 6) nos conservan para la población histórica del valle,
topónimos arcaizantes, tales como CARE, HARATURLE (17), y el
propio de ORLEYL, los cuales, junto con el nombre dado al río,
BELCAYDE, pueden indicar un sustrato ibérico en la población
indígena hasta tiempos de la expulsión ((mora)) de Espadán.

EXCAVACIONES EN LA NECROPOLIS
Dada la importancia de los materiales ingresados en Burria-
n a , el D e p a r t a m e n t o d e I n v e s t i g a c i ó n H i s t ó r i c a d e dicho
Museo y el Servicio de Investigación Prehistórica de la Exce-
lentísima Diputación de Valencia deciden prospectar el yaci-
miento. Con suma amabilidad, su propietario, el conocido jurista
e historiador don Arcadi García Sanz, hijo del también historia-
dor don Honorio García García, el día 25 de septiembre de
1974- nos concedía por escrito el correspondiente permiso para
realizar las prospecciones necesarias, y el día 28 del mismo

(14) Ob. cit. nota 5, pág., 143.


(15) M. BRUGAL: ((Excavaciones en el poblado de S. José (Vall de Uxó)s Cuader-
nos de Prehistoria y Arqueología Castellonense, 2. Castellón, 1975, págs. 161 y 162.
(16) Ob. cit. nota 5, pág. 76.
(17) El profesor P. Guichard nos sugirió que el topónimo HARATURLE que apa-
rece en la Carta Puebla de Uxó, pudiera referirse, también, a la Alquería de Orleyl:
Harat = barrio, y Urle = Orleyl.
12 A. L A Z A R 0 Y N. M E S A D O

mes se pedía a la Dirección General de Bellas Artes la autoriza-


ción pertinente. La Comisaría General de Excavaciones concedía
el 1 de abril de 1975 el solicitado permiso de excavación, po-
niéndolo bajo la dirección de don Francisco Gusi Gener y uno
de nosotros (Mesado). El primero, conocedor de los yacimientos
de Orleyl por mediación nuestra, desestimando la doble direc-
ción señalada poq la Dirección General llevaría a cabo en el
mes de junio de 1975 la excavación de la necrópolis, cuyos re-
sultados serían dados a conocer en una nota publicada en los
((Cuadernos de Arqueología Castellonense», de los cuales es su
director, y en el XV C.N.A. de Lugo (18).
En dichas noticias se nos dice que los sondeos ((revelaron
pronto la extrema destrucción de la necrópolis ocasionada por
los distintos trabajos agrícolas)), y que «el espesor de tierra más
potente, tan sólo alcanzaba, en algunos puntos, los 0'20130 m.
de profundidad)), localizándose (cin situ cuatro urnas seccionadas
por encima de su mitad inferior)) las cuales «se apoyaban direc-
tamente sobre la roca natural, adosadas a los recovecos roco-
sos)); ((solamente una de ellas proporcionó un ajuar completo,
compuesto por una falcata y fragmentos de un pilum, todo ello
de hierro; una espuela de montar y varios fragmentos de cora-
za o similar, y unas pinzas, todo en bronce)). Entre el material
cerámico se menciona como más destacado la ((gran abundancia
de piezas precampanienses e incluso de cerámica ática, especial-
mente diversas asas de kylim mencionándose, también, «una pe-
queña arracada amorcillada de oro de baja ley). La cronología de
este ((pequeño campo de urnas)) la situará el señor Gusi ((alrede-
dor del siglo I V antes de nuestra Era» (C.A.C.) o a ((fines del s.
V y S. IV a. d. C.» (XV C,N.A.). Tras estos trabajos, y por creer-
lo conveniente, nosotros (Lázaro-Mesado) con fecha 25 de julio
de 1975 pedíamos un nuevo permiso para reexcavar el yaci-
miento, no obteniendo respuesta alguna.
A partir de las publicaciones comentadas tanto la necrópolis
como el poblado han sufrido intensas remociones clandestinas y
espectaculares desmontes. Pese a nuestros comunicados se sigue

(18) F. GUSI: «Sondeos arqueológicos en la necrópolis ibérica de la Punta (Val1


de Uxó)). Ob. cit. nota 15, pág., 163; y del mismo (Actividades Arqueológicas realiza-
das en la provincia de Castellón de la Plana.)) Actas del XV Congreso Nacional de
Arqueología (Lugo, 1977). Zaragoza, 1979, pág., 674.
hoy en día dando al traste con uno de los yacimientos arqueo-
lógicos valencianos más importantes (19).
B. INVENTARIO DEL MATERIAL ARQUEOLOGICO
DE SUPERFICIE PROCEDENTE DE LA NECROPOLIS
CERAMICA
1. Fragmento de hombro y arranque de cuello acodado, con el labio bucal per-
dido, de una ollita globular a torno (?) con incisiones de siete surcos hechos con pei-
ne. Rotura y superficies porosas con desengrasante calizo. Pasta negra.
Diám. bucal aproximado, 8 cm. (fig. 3, 1 y Lám. 11, 1).
2. Fragmento de hombro y boca de borde liso exvasada. Pertenece a un peque-
ño recipiente a mano de cuerpo ovoide. Pasta negra, porosa, con piedrecillas calizas.
Superficie externa de color ceniza e interna, beig.
Diám. bucal, 10 cm. (fig. 3, 2 y Lám. 11, 2).
3. Fragmento de ollita a mano de cuerpo globular y boca exvasada de labio li-
so, de la que nace una asa vertical de robusto tendón circular. Pasta negra en rotu-
r a y superficies porosas ocres.
Diám. bucal, 10 cm. (fig. 3, 3 y Lám. 11, 3).
4. Orejeta perforada con arranque de asa bífica de tendones circulares. Perte-
nece a un recipiente globular, probablemente a torno. Pasta muy rodada, siena, con
fina arenilla. (fig. 3, 4 y Lám. 11, 4).
5. Orejeta perforada. Ceramica basta con arenilla. Rotura negra y superficies
rojizocremosas. Pudiera ser hecha a mano. (fig. 3, 5 y Lám. 11, 5).
6. Base recta, acodada, perteneciente a una orza hecha a mano. Pasta grose-
r a muy porosa con desengrasante calizo, de coloración amarillenta con zonas anaran-
jadas en el plano basal.
Diám. 6 cm. (fig. 3, 6 y Lám. 11, 6).
7. Fusayola bitroncocónica con el plano superior -según dibujo- cóncavo. Pas-
ta sienogrisácea. Torno.
Alt. 1'5 cm.; ancho, 2'1 cm. (fig. 4, 1).
8. Fusayola troncocónica de aristas romas, incompleta, decorada con incisiones
paralelas ligeramente oblícuas. Pasta amarillenta de buena calidad. Torno.
Alt. 1'6 cm.; ancho, 3 cm. (fig. 4, 2).
9. Fusayola cónica rematada en boliche con el plano basal de gradilla aristada.
Pasta compacta negra en rotura y crema en superficies. Torno.
Alt. 3'4 cm.; ancho, 3'2 cm. (fig. 4, 3).
10. Gollete y boca ewasada de labio liso, romo, perteneciente a una botella u
oinokoe. Pasta depurada, harinosa, de coloración negruzca en la rotura del borde y
amarillenta en el resto. Torno.
Diám. bucal, 4'4 cm. (fig. 4, 4).
11. Dos fragmentos de media tapaderita cónica con orejetas perforadas, de ca-
beza esferoide. Pasta grisácea harinosa al tacto, con desengrasante micáceo fino. Tor-
no.
Diám. 6'5 cm.; ait., 3'6 cm. (fig. 4, 5).
12. Agarradero cónico, incompleto, con ónfalo, perteneciente a una tapadera có-
nica. Pasta de calidad con mica, gris en rotura y superficies anaranjadas. Torno.
Diám., 5'2 cm. (fig. 4, 6).

- (19). Los desmontes en el poblado se comunicaban a -la Delegación Provincial del


Ministerio de Cultura el día 21 de mayo de 1979 y, de nuevo, el día 24. de no-
viembre de 1980.
13. Fragmento de una pequefia tapadera con la señal de una orejeta perdida.
Conserva una decoración marrón de línea paralelas. Pasta grisácea, clara, con fina
arenilla. Torno.
Diám. aprox., 6'3 cm. (fig. 4, 7).
14. Tercio superior, incompleto, perteneciente a una urna esfero<de con orejetas
-hoy perdidas- y el tabique perforado junto a sus bases, donde una decoración de
cuatro filetes marrón claro circunvalan el recipiente. Pasta depurada de color gris. A
torno.
Diám. bucal, 8'5 cm.; diám. máx., 13 cm. (fig. 4, 8).
15. Fragmento de una pátera de paredes alzadas con anillo basal cóncavo. Pre-
senta una banda marrón en su tercio superior y filete y bandilla junto a la base, y
filete sobre el aro de sustentación. Pasta depurada de coloración gris perla.
Diám. bucal, 15'8 cm.; basal, 5'2 cm.; alt. 5'3 cm. (fig. 4, 9).
16. Base de pátera con el anillo inclinado y moldurado en ligero toro, y ónfalo
de fondo concavoplano. Presenta restos de un círculo marrón en el fondo del plato y
filete sobre la cara externa del aro basal. Cerámica sumamente compacta, de cali-
dad, de coloración sienoamarillenta. Fue recogida del interior de la urna que a conti-
nuación se inventaría. Torno.
Diám. max., 8 cm. (fig. 5, 1).
17. Urna glubular achatada con orejetas y ónfalo basal sin anillo de sustenta-
ción. En tono marrón muy desvaido presenta una decoración consistente en bandas,
filetes, línea de puntos y banda reticulada junto a la boca. Pasta depurada sienoama-
rillenta al exterior y naranja en rotura y en la cara interna de la ollita. Torno. Fue
encontrada fragmentada en el punto número 3 de la figura 2.
Diám. bucal, 9'7 cm.; máx. 15 cm.; basal, 6'7 cm.; alt. 10 cm. (fig. 5, 2 y Lám. 111, 2).
18. Urna bitroncocónica de cuello exvasado sobre ligero baquetón, con el labio
bucal redondeado y base con ónfalo sin anillo exento. Junto a la base conserva un
suave facetado producido por el rebaje en tierno del tabique. Presenta una decora-
ción geométrica bícroma practicamente perdida: en negro, teoría de círculos concén-
t r i c o ~y filetes tangentes; en tono rojizo, banda sobre el perímetro máximo del cuerpo
e interior del borde bucal. Pasta sienoamarillenta bien depurada. Fue hallada frag-
mentada (fáltanle dos fragmentos de la boca de 6 cm. y 1'6 cm. de cuerda), en el
punto número 4 de la figura 2.
Diám. bucal, 14'4 cm.; basal, 6'4 cm.; alt., 12'1 cm. (fig. 5, 3 y Lám. 111, 3).
19. Tapadera troncocónica de orejetas y agarradero discoidal de superficie recta.
Presenta una decoración externa muy desvaida rojizomarrón, consistente en un circu-
lillo sobre el botón terminal; grupo de tres filetes junto a su base, y banda estrecha
sobre los dos apéndices perforados. Cerámica bien depurada, sienoamarillenta, poco
consistente. Torno. Fue encontrada cerca de la urna con orejetas precedente, punto
número 3 de la fig. 2, con la cual encaja. (fig. 6, 1 y Lám. 111, 1 y 2).
Diám. bucal, 9'9 cm.; alt. 3'3 cm.
20. Pequeño plato hondo de borde liso revertido y base con anillo de sustenta-
ción vertical y ónfalo cóncavo. El aro basal conserva dos taladros. Cerámica gris
bien depurada de consistencia media. Torno.
Diám. bucal, 9'8 cm.; basal, 3'8 cm.; alt., 3'6 cm. (fig. 6, 2).
21. Pequeño plato incompleto de ala plana ligeramente oblícua con el labio per-
forado. En tono marrón banda que cubre tanto interna como externamente el borde
del recipiente, y filetes agrupados en el interior y exterior del cuenco, presentando el
ónfalo, junto a la huella del aro basal, otro filete. Pasta siena, clara, bien depurada.
Torno.
Diám. bucal, 12'8 cm.; basal, 3'6 cm.; alt. 2' cm. (fig. 6, 3).
22. Base de una gran urna ovoide con anillo de sustentación vertical muy poco
destacado, y ónfalo con gradilla media aristada y tetón central. Pasta amarillenta al
Fig. 4
Fig. 5
Fig. 6
~ l I I I ~ I Il /l Il I / l I I I I I I I 1 1 1 1 I I I I I I I I I I I I I I I I
O
I
1 2
1 ' 31 ' 41 ' 15

Fig. 7
exterior y ligeramente sienogrisácea hacia la cara interna del recipiente; de buena
calidad y sin elementos no plásticos. Torno.
Diám. basal, 10'8 cm. (fig. 6 , 4).
23. Base de urna de tendencia globular con destacado anillo de sustentación li-
geramente oblícuo, de huella redondeada y ónfalo cóncavo-convexo de tetón central.
Junto al arranque del cuerpo, banda marrón. Pasta anaranjada harinosa al tacto con
desengrasante micáceo muy fino. Torno.
Diám. basal, 11'50 cm. (fig. 6, 5).
2.' Fragmentos de un plato hondo de boca achaflanada revertida, presentando
en ella un taladro vertical a dos centímetros de la zona desaparecida. Base ligera-
mente aristada con el ónfalo apenas senalado. Pasta sienogrisácea con arenillas ne-
gras que dan unas superficies ásperas al tacto. Torno.
Diám. bucal, 16'60 cm.; basal, 7'8 cm.; alt. 4'6 cm. (fig. 7, 1).
25. Fragmento bucal perteneciente a un plato o tapadera honda con el labio re-
dondeado. En tono rojizomarrón presenta al exterior, bajo banda y filete, cenefa de
rombos tangentes y motivos verticales en escamas. Pasta anaranjada harinosa al tac-
to de consistencia blanda. Torno.
Diám. bucal, 37 cm. (fig. 7, 2).
26. Con calidad muy semejante al fragmento anterior -pudiera pertenecer al
mismo recipiente-, cerámica con decoración de círculos concéntricos y rombos sobre
filete e inicio de banda. Esta pigmentación, gruesa, es poco consistente. Torno.
Diám. máx. del tiesto, 33 cm. (fig. 7, 3).
27. Tiesto de igual calidad decorado con la cabeza de una zancuda o ave de
pico largo, ojo circular y puntos (motas) sobre su cuello. Torno. (fig. 7, 4).
28. Fragmento semejante a los precedentes con una decoración prácticamente
perdida cuyos motivos consisten, sobre banda y filete, en roleos verticales que delimi-
tan a la izquierda un campo con los restos de un motivo elipsoidal virgulado, escol-
tado por un escaleriforme. Torno.
Diám. del tiesto, 50 cm. (fig. 7, 5).
29. Tiesto perteneciente al hombro de una tinaja decorada en tono rojizomarrón
con banda y filete tangente a una cenefa de cuartos de círculos concéntricos y línea
inferior de eses. Pasta igual que las precedentes (fig. 7, 6).
30. Tiestos que salvo la base componen el alzado de una pequeña tinaja ovoide
de hombro carenado y borde bucal redondeado. Aparece decorada en espeso pigmen-
to rojizomarrón, poco consistente, por banda sobre la escocia bucal y banda con seg-
mentos verticales sobre el hombro; sobre la panza columna de virgulillas en ese de
la que nacen roleos simples sobre la metopa izquierda y trianguliformes terminados
en trípode sobre la derecha. Pasta como la de los fragmentos decorados de la lámina
anterior. T ~ r n o .
Diám. bucal, 14 cm.; de la panza,, 21'6 cm. Alt. aprox. 21 cm. (fig. 8 y Lám.
IV).
31. Media fusayola de sección vertical elipsoiaal de base cóncava, en cuyo inte-
rior presenta un círculo de puntos, en su cara basal impresas siluetas pisciformes.
Pasta sienogrisácea, clara, bien depurada.
Diám. 3'2 cm.; alt., 2'1 cm. (fig. 12, 18).

METAL
l . Fíbula anular de muelle confeccionada con hilo de bronce.
Diám. 1'7 cm. (fig. 9, 1 y Lám. V, 1).
2. Fíbula anular de muelle confeccionada con hilo de bronce. Incompleta.
Diám. 2'8 cm. (fig. 9, 2 y Lám. V, 2).
~ I I I I ~ I I1 I1 1I1 l l l l 1 1 1 1 l l l l 1 1 1 1 l l l l 1 1 1 1 1 1 1 1 I
o 1
I / 2I I 3l I 4I I 5I

Fig. 8
Fig. B
ORLEYL

3. Fíbula anular de muelle coqfeccionada con hilo de bronce. Incompleta.


Diám., 2'8 cm. (fig. 9, 3 y Lám. V, 3).
.' Fíbula anular de muelles confeccionada con hilo de bronce.
Diám., 4'4 cm. (fig. 9, 4 y Lám. V, 4).
5. Fíbula anular de muelle confeccionada con hilo de bronce. Conserva el
puente suelto por rotura y parte de la aguja perdida.
Diám.. 3'3 cm. (fig. 9, 5 y Lám. V. 5).
6. Fíbula anular de muelle con el puente ligeramente amorcillado. Incompleta.
Diám. aprox. 3 cm. (fig. 9, 6 y Lbm. V, 6).
7. Media anilla de una fíbula anular de muelle con el bucle de su ligazón.
Diám. aprox., 4 cm. (fig. 9, 7).
8. Puente de sección cuadrada perteneciente a una fíbula anular de bisagra. Bronce.
Longitud, 2'4 cm. (fig. 9, 8).
9. Fíbula anular de charnela en bisagra y puente con cazoleta de sección plano-conve-
xa y anilla de sección romboidal. Bronce.
Diám., 2'1; alt., 1'2 cm. (fig. 9, 9 y Lám. V, 9).
10. Fíbula similar a la precedente salvo la sección de la anilla que es circular. Redobla-
da. Bronce. (fig. 9, 10 y Lám. V, 10).
1 1. Fíbula anular de charnela con puente de cazoleta concavoconvexa y aro de sección
circular. Falta su aguja y el bracillo delantero del puente. Se trata de un remiendo viejo ya
que ambas piezas son de diferente tipología. Bronce.
Diqm., 3'2cm. (fig. 9, 11 y Lám.V, 11).
12. Fíbula anular de bisagra con el puente rectangular aplanado y sección de la anilla
de tendencia romboidal, con su extremo desencajado de la abrazadera o pie del puente. Bron-
ce.
Diám., 3'7 cm. (fig. 9, 12 y Lám. V, 12).
13. Fíbula anular de bisagra con el puente naviforme de sección triangular. Anilla do-
blada de sección circular. Bronce.
Diám., 3'4 cm. (fig. 9, 13 y Lám. V, 13).
14. Probable puente incompleto que pudo pertenecer a una fíbula de «bucle».Una deco-
ración graneada delimita su perfil, conteniendo en su centro dos circulillos impresos. Bronce
u oro de muy baja ley. Longitud, 2'3 cm. (fig. 9, 14).
15. Gran fllula anular de bisagra y puente naviforme de sección concavoconvexa. Se
halló fragmentada en 6 trozos y con el anillo (de sección tendente al romboide), deformado
por la cremación del rito funerario, Bronce. Fue hallada en el punto número 7 de la fig. 2.
Diám., 6'2 cm. (fig. 9, 15 y Lám. V, 15).
16. Fíbula de ballesta con el puente de sección rectangular roto y deformado por la cre-
mación. Bronce.
Longitud, 3'5 cm. (fig. 9, 16).
17. Sofisticada fíbula de pie alto y ballesta con la aguja perdida. Las cinco caras supe-
riores del puente, desde la ballesta o muelle hasta la larga mortaja, están decoradas por pe-
queños triángulos incisos alternados, los cuales dejan líneas zig-zagueadas en realce. El pie
presenta una lámina plana vertical con un plano inferior al cual se le superpone, con un giro
de 90°, dos discos en forma de 8 teniendo en su tangencia a ambos lados, una punta angula-
da. La ballesta o muelle aparece en el interior de dos piezas simétricas bitroncocónicas termi-
nadas en sendos discos abiertos, por los cuales se aprecian los muelles. Bronce.
Fue encontrada en el punto número 6 de la figura 2.
Longitud, 6 cm.; longitud de la ballesta, 3'2 cm.; altura del pie, 5'4 cm. (fig. 9, 17 y Lám.
V, 17).
18. Anilla de sección circular. Bronce.
Diám., 1'3 cm. ; grosor, 0'3 cm. (fig. 10, 1).
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Fig. 10
19. Pieza circular o anilla aplanada con escocia lateral y basal. Podría tratarse del aro
bucal de un pequeño recipiente. Bronce.
Diám., 2'5 cm.; grosor, 0'5 cm. (fig. 10, 2).
20. Anilla de sección circular con evidentes muestras de cremación. Bronce.
Diám. bucal, 2'5 cm.; grosor, 0'5 cm. (fig. 10, 3).
2 1. Anilla de sección circular con la chaveta de sujeción. Está muy afectada por crema-
ción. Bronce.
Diám., 2'8 cm.; grosor, 0'6 cm. (fig. 10, 4).
22. Media anilla de sección circular con clavo de ojal de sección cuadrada. Pieza muy
deteriorada. Hierro.
Diám., 4'8 cm.; grosor aprox. 0'8 cm.; longitud del clavo, 5'4 cm. (fig. 10, 5).
23. Anilla de sección circular con acusado desgaste lateral. Hierro.
Diám., 5 cm.; grosor max. 1 cm., mínimo, 0'5 cm. (fig. 10, 6).
24. Probable asa o manecilla de sección circular con un ligero engrosamiento en su
centro y un aplanado en sus extremos, donde presenta rotura antigua. Afectada por crema-
ción. Bronce.
Longitud, 5'7 cm.; grosor max. 1 cm. (fig. 10, 7).
25. Pieza discoidal incompleta con los restos en su centro de un vástago de sección cir-
cular. Afectada por cremación. Bronce.
Diám., 9 cm.; grosor, 0'3 cm. (fig. 10, 8).
26. Dos planchuelas cuadradas, simétricas, con restos del roblón o clavo. Bronce y hie-
rro respectivamente.
Chapitas, 2 x 2'3 cm.; separación, 0'2 cm. (fig. 10, 9).
27. Botón o roblón de fundición con cabeza troncocónica con cazoleta y pequeño hueco
circular en su centro. Bronce.
Diám., 1'6 cm.; alt., 1'20 cm. (fig. 10, 10).
28. Roblón de cabeza discoidal deformado por cremación. Bronce.
Diám., 2 cm.; alt. 1'1 cm. (fig. 10, 11).
29. Botón de cabeza y pie discoidal con el vástago desplazado. Bronce.
Diám. de la cabeza, 2'5 cm.; del pie, 1'3 cm.; alt. 1 cm. (fig. 10, 12).
30. Pieza similar a la precedente. Bronce.
Diám. de la cabeza, 2'9 cm.; del pie, 1'3 cm.; alt. 1'2 cm. (fig. 10, 13).
3 1. Cadenilla de tres eslabones circulares rematada el último por un boliche de cuello
destacado Bronce.
Diám. de las anillas, 1'2 cm.; grosor, 0'3 cm.; Iong. 3'3 cm. (fig. 10, 14).
32. Cadenilla de tres eslabones circulares con boliche ligeramente aplanado en ambos
extremos. Bronce.
Diám. de la anilla central, 1'4 cm.; de las laterales, 1'1 cm.; long. 4 cm. (fig. 10, 15).
33. Anilla con boliche esferoidal. Bronce.
Diám., 1'2 cm. (fig. 10, 16).
34. Medio brazalete de sección circular con muestras en uno de sus extremos de gote-
rones de fundición, efecto producido por la temperatura alcanzada en el ritual incineratorio.
Plata.
Diám., 5'8 cm.; grosor, 0'33 cm. (fig. 10, 17).
35. Vastaguillo recubierto por un muelle (?), rematado por tres esferillas bitroncocóni-
cas tangentes, abiertas y remachadas -cerradas- luego, sobre el eje interno. Probable pieza
perteneciente a una fibula de ballesta. Bronce.
Long., 2'6 cm. (fig. 10, 18).
36. Esferilla con restos de haber estado perforada o haber servido de cabeza a un eje o
varilla circular.
Diám., 1'05 cm. (fig. 10, 19).
37. Aguja de cabeza bicónica, ligeramente
- doblada, falta de punta. Bronce.
Long., 7 cm. (fig. 10, 20).
38. Aguja roblón de cabeza hemiesférica y ojal en el que conserva la arandela del tope
y en el ojo un fragmento del pasador o seguro. Bronce.
Diám. de la arandela, 1'5 cm.; longitud, 5'5 cm;; grosor, 0'4 cm. (fig. 10, 21).
39. Hebilla rectangular aplanada de charnela y aguja libre, la cual oscila sobre
un eje que taladra la totalidad del brazo lateral de la pieza de sección circular. Ape-
nas perceptible conserva una decoración troquelada cuyo motivo es una c. Bronce.
Long., 2'5 c,.; anchura, 2'2 cm.; grosor, 0'2 cm. (fig. 10, 22).
'O. Broche de cinturón de un garfio con decoración fuertemente burilada consis-
tente en dos incisiones paralelas que contornean en su parte basal la pieza, llegando
las dos líneas interiores a taladrar la plancha. Bronce.
Long., 7'2 cm.; anchura, 4'1 cm.; grosor, 0'2 cm. (fig. 10, 23 y Lám. VI, 23).
41. Broche calado de dos garfios con tres clavillos de cabeza hemiesférica para
su sujeción en la correa. La pieza, bien conservada, está decorada por una línea gra-
neada que siluetea la hebilla dibujando sobre su campo un circulillo con punto cen-
tral. Bronce.
Long., 6'6 cm.; anchura, 4'4 cm.; grosor, 0'25 cm. (fig. 10, 24 y Lám. VI, 24).
42/47. Serie de tintinábulos coniformes decorados -salvo la pieza número 29-,
por líneas incisas agmpadas que los circunvalan. Sus badajos, que rebasan las bocas,
con ojal de suspensión, penden de un vastaguillo horizontal, remachado en las bases
de las gruesas perforaciones. Las campanillas números 26 y 27 rematan con un
apéndice apuntado. Suenan. Bronce.
Alt. respectivas, 2'05 - 2'45 - 2'35 - 2'40 - 2'85 y 3'40 cm. (fig. 10, 25/30).
48/49. Platinas en C con sus extremos taladrados rectangularmente. Sobre sus
respectivos lomos dos escocias tangentes con arista central. Con ligero desplazamiento
de sus mitades, restos de una pieza de hierro, perdida ¿Espuelas? Bronce.
Alt., 5'2 cm.; ancho, 1 cm.; grosor, 0'25 cm. (fig. 10, 48, 49).
50. Restos de una lanceta con la hoja y tubo de enastamiento incompleto. Hie-
rro.
Longitud, 10 cm. (fig. 11, 1 y Lám. VII, 1).
51/55. Varillas apuntadas de sección circular, fuertemente oxidadas. Por rotura
antigua y moderna no conocemos sus extremos basales el cual definiría su uso. Hie-
rro.
Longitudes respectivas, 6'7 - 4'6 - 5'3 - 3'7 y 5 cm. (fig. 11, 2/61.
56. Regatón o contera. Hierro.
Long., 12'8 cm.; diám. rnáx., 1'9 cm. (fig. 11, 7).
57. Posible punta de chuzo o regatón cónico. Hierro.
Long., 10'2 cm.; Diám. máx., 2% cm. (fig. 11, 8 y Lám. VII, 8).
58. Posible badil de f o j a con el tubo de enastamiento ligeramente oblícuo. Apa-
rece despuntado y falto de dos pequeiios trozos en su lado derecho. La longitud que
conferiría a la pieza el mango, aboga por la denominación dada, aunque no se des-
carta que haya sido un instrumento agrícola o una paleta de albañil. Hierro.
Long., 25 cm.; Anchura mayor, 9 cm.; grosor mínimo, 0'25 cm. (fig. 11, 9 y
Lám. VII, 9).
59. Pendiente ligeramente amorcillado de sección circular. Oro.
Diám., 0'9 cm. ; grosor rnáx., 0'18 cm.; peso, 400 mg. (fig. 12, 1 y Lám. VI, 1).
60. Pendiente similar al anterior. Hierro.
Diám., 1'1 cm.; grosor máx., 0'2 cm. (fig. 12, 2 y Lám. VI, 2).
61. Medio pendiente amorcillado confeccionado con dos hilos enrollados. Plata.
Diám., 1'4 cm.; grosor rnáx., 0'28 cm.; -peso, 700 mg. (fig. 12, 3 y Lám. VI, 3).
62. Medio arete de sección circular del que sobresalen dos grupos de tres esfe-
-
rulas tangentes cada uno de ellos. Plata.
Diám., 1'2 cm.; grosor de la anilla, 0'17 cm.; peso, 1.000 mg. (fig. 12, 4 y Lám.
VI. 4).
63. Anillo segmentado del cual sobresale un menudo pivote. Una planchuela sol-
dada ciega e1 interior de la pieza, la cual acusa efectos de cremación. Plata.
Diám., 1'2 cm.; grosor, 0'15 cm.; peso, 1.000 mg. (fig. 12, 5 y Lám. VI, 5).
64. Anilla de sección circular. Bronce.
Diám., 2'5 cm.; grosor, 0'5 cm. (fig. 12, 6).
65. Anilla de sección elipsoidal. Bronce.
Diám., 2'8 cm.; grosor, 0'4 cm. (fig. 12, 7).
66. .Botón discoidal con ojal de puente en su cara inferior. Bronce.
Diám., 2'5 cm. (fig. 12, 8).
67. Aro aplanado de sección recta el cual presenta una decoración muy perdida
por efecto de la alta temperatura alcanzada por la pieza durante el ritual incinerato-
rio, la cual llegó a deformarla y licuarla en parte. La decoración troquelada consiste
en líneas laterales zigzagueadas y graneadas en el centro. Bronce.
Diám., 5'5 cm.; grosor, 0'3 cm. (fig. 12, 9).
68. Pinzas de depilar cuyas paletas, dobladas en sus extremos, presentan una
decoración incisa a troquel: puntos y líneas de diminutos triángulos con tres puntos
salidos (graneado) en cada uno de ellos. Bronce.
Alt., 5'2 cm.; ancho máx., 1'7 cm. (fig. 12, 10).
69. Pinzas de depilar cuyas paletas presentan una decoración graneada similar
a la anterior. Bronce.
Altura, 5'3 cm.; Ancho rnáx., 1'2 cm. (fig. 12, 11).
70. Pinzas de depilar cuyas paletas están decoradas por líneas laterales de finos
puntos incisos. Bronce.
Alt., 6'3 cm.; ancho rnáx., 1'2 cm. (fig. 12, 12).

VIDRIO
1. Fusayola troncocónica incompleta de pasta azul marino. Desde la base
-simétricamente-, nace una decoración incisa ramiforme que cubre la totalidad de la pieza.

Alt. actual, 1'5 cm.; ancho rnáx., 1'9 cm. (fig. 12, 13 y Lám. VI, 13).
2. Cuenta de collar azul celeste con cuatro gotss simétricas en su perímetro
máximo de color azul marino.
Diám., 0'8 cm.; aít., 0'35 cm. (fig. 12, 14 y Lám. VI, 14).
3. Fragmentos de un anforisco grecopúnico pertenecientes a la boca, de labio
revertido con el arranque del asa, y al hombro del recipiente, sobre el cual presenta
una decoración amarilla en zig-zag bajo filetes y banda; deformado por cremación.
Pasta de coloración azul celeste.
Diám. bucal, 2'15 cm. (fig. 12, 15).

PIEDRA
1. Fusayola troncocónica de base cóncava. Piedra pulida de color marrón cla-
ro.
Diám., 1'8 cm.; alt., 1'25 cm. (fig. 12, 16 y Lám. VI, 16).
2. Cuenta de collar troncocónica, cuyos taladros se efectuaron atacando la pie-
za por ambas caras basales. Silex de pátina blanca.
Diám., 1'5 cm.; alt., 0'8 cm. (fig. 12, 17 y Lám. VI, 17).
HUESO
1. Punta de una aguja de sección circular.
Longitud, 3'8 cm. (fig. 12, 19).
2. Extremo superior de una aguja con cabeza rematada por esférula. Deforma-
da por cremación.
Longitud, 5'4 cm. (fig. 12, 20).
3. Parte media e inferior de una aguja ennegrecida por cremación.
Longitud, 1'8 y 4'7 respectivamente. (fig. 12, 21).
417. De un grupo de 46 astrágalos de ovicáprido -la mayoría de los cuales es-
tán calcinados en buena parte-, destacamos éstos por estar taladrados y con alguna
de sus caras rebajadas por abrasión intencionada o por juego. (fig. 12, 4/71,

C. SEPULTURAS «IN SITU»

Detallamos a continuación dos sepulturas con sus respectivos


ajuares, del máximo interés científico por tratarse de hallazgos
cerrados, y por poseer la más moderna tres rollos de plomo
con inscripción ibérica. El primer enterramiento se localizó en
el punto 1 del plano de la necrópolis que damos en la figura 2;
la segunda sepultura en el punto 2, ambas en el bancal inferior
o «B», al amparo del crestón rocoso, donde el manto de tierra
es más potente. Dichos puntos quedaron denunciados en el sur-
co dejado por un arado, el día 5 de agosto del año 1972, reco-
giendo los ajuares y restaurándolos uno de nosotros (Lázaro),
acompañado por Jorge Traver Padilla. En días sucesivos se in-
corporarían al equipo Alberto Sendín Blazquez y Jesús Pareja
Langreo, ambos colaboradores del Museo Municipal de Burriana.

SEPULTURA I
En el lugar antedicho la reja del arado había troceado una
tapadera de orejetas, la cual estaba cerrando una urna de boca
exvasada, sumamente deteriorada. Alrededor de su panza seis
piedras de unos 12 centímetros de eje mayor constreñían la ur-
na, que descansaba sobre un lecho amarillo natural de arcillas
apelmazadas.
Es difícil saber la profundidad que alcanzó la sepultura en
un primer momento, pues es evidente que el abancalamiento del
área que ocupa la necrópolis alteraría su primitiva morfología,
aunque no en exceso -tal vez unos 40 centímetros- dada la
poca altura del crestón calizo, el cual afloraría también en épo-
ca ibérica, puesto que las pequeñas fosas para las urnas cinera-
rias y ajuares se hicieron ya a su socaire.
32 A. LAZAR0 Y N. MESADO

EL AJUAR
1. Tapadera de orejetas perforadas, en forma de casquete esférico rematado por
un botón hemiesférico hueco, el cual conserva sobre la escocia restos de pigmenta-
ción marrón. Cerámica blanda cienoamarillenta con fino desgrasante. Cubría la urna
siguiente.
Diám. bucal, 16 cm.; alt., 6'5 cm. (fig. 13, 1 y Lám. VIII, 1).
2. Urna bitroncocónica con boca de trompeta de cuyo labio liso -redondeado-,
arranca un asa vertical de tendones geminados, presentando en el cuello un ligero
toro. Base cóncava sobre un pie apenas señalado. Su decoración, muy perdida, pre-
senta un grupo de cinco filetes sienorojizos sobre la panza del vaso, y filetes y ban-
da en la base del asa y tercio inferior del recipiente; también el ala interna de la
boca conserva señales del mismo pigmento rojizo. Cerámica porosa, anaranjada en el
tercio superior y rosadoamarillenta en el resto de la urna. Aspera al tacto y craque-
lada por avanzada descomposición.
Diám. bucal, 13 cm.; de la panza, 22'8 cm.; basal, 9'3 cm.; alt., 25 cm. (fig. 13,
2 y Lám. VIII, 2).
La urna, en su interior, junto con restos humanos de bóveda craneana y frag-
mentos de huesos largos deformados por la incineración conservó el ajugar siguiente:
3. Canto de rodeno rojo con un fuerte desgaste pulido en su base. Se trata pues
de una pequeña moledera.
Alt., 4'9 cm. (fig. 13, 3).
4. Aguja perteneciente a una fíbula anular de muelle. Bronce.
Longitud, 4'7 cm. (fig. 13, 4 ) .
5. Anilla de sección circular. Bronce.
Diám., 2'7 cm.; grosor, 0'3 cm. (fig. 13, 5).
6. Anilla aplanada, incompleta, circunvalada por un hilo segmentado. Hierro.
Diám. aprox., 2'4 cm.; grosor, 0'23 cm. (fig. 13, 6).
7. Base redoblada, incompleta, de una hebilla de un solo garfio. Presenta una
decoración graneada delimitándola, e incisa -romboidal- enmarcando las tres perfo-
raciones para los clavos. Bronce.
Alt. del fragmento, 3'4 cm.; ancho, 2'2 cm. (fig. 13, 7 ) .

SEPULTURA II
Sin protección, al igual que la precedente, en el punto ante-
dicho de la necrópolis (fig. 2, punto 2), a 1'70 m. al N-NE. del
enterramiento 1 y a 1'50 m. del roquedo, el arado puso al des-
cubierto una nueva y sorprendente sepultura. Su ajuar estaba
compuesto por tres vasos áticos: una copa de pie bajo, incom-
pleta hoy, que sería retirada del interior de una patera que, a
su vez, cerraba la boca de una cratera de campana o urna ci-
neraria de figuras rojas, pieza atacada lateralmente por la reja
del arado. Los tres recipientes contenían restos humanos calci-
nados, y el recipiente último tres rollos de plomo escritos, los
que, siguiendo el orden numeral romano asignado a las prece-
dentes inscripciones ibéricas de Orleyl, designamos con los nú-
meros VI VI p-VIIl siendo los primeros textos edetanos apareci-
dos en un ajuar funerario, por ende estrechamente vinculados
entre sí, según se desprende de su contenido, y los tres refi-
riéndose a un BODODAS, posible nombre del incinerado.
Mientras los textos números VI y VI1 se recogieron del inte-
rior de la cratera, el V había sido ((escondido))en el fondo del
pie (véase la reconstrucción de la sepultura en la fig. 17). Junto
al recipiente, debajo de la asa derecha, superpuestos de mayor
a menor el juego de cinco pesas, sobre las cuales fue deposita-
do doblándose exprofeso, «inutilizado)), el platillo de una balan-
za, indicándonos este conjunto que se trata muy posiblemente,
de la sepultura de un comerciante. El mentado conjunto se ha-
llaba inmerso en un potente paquete de ceniza de 1'30 cm. de
diámetro, superpuesto al estrato amarillo, fondo natural de la
capa laborable.

EL AJUAR

1. Medio pondera1 discoidal de taladro central circular. Plomo.


Diám., 2'2 cm.; grosor, 0'4.5 cm.; peso, 7'770 gr. (fig. 14, 1 y Lám. IX, 1).

2. Ponderal discoidal con taladro circular desplazado. Plomo.


Diám., 2'4.5 cm.; grosor, 0'54 cm.; peso, 22'920 gr. (fig. 14-,2 y Lám. IX, 2).

3. Ponderal troncocónico de taladro central cuadrado. Bronce.


Diám., 3'1 cm.; grosor, 0'8 cm.; peso, 43'700 gr. (fig. 14, 3 y Lám. IX, 3).

4. Ponderal discoidal de perforación circular ligeramente deformado, por lo que


presenta una cara superior convexa. Plomo.
Diám., 3'2 cm.; grosor, 1'4 cm.; peso, 92'620 grs. (fig. 14, 4 y Lám. IX, 4).
5. Ponderal discoidal de taladro circular ligeramente desplazado de su centro.
Plomo.
Diám., cm.; grosor, 1'13; peso, 132'880 grs. (fig. 14, 5 y Lám. IX, 5).
6. Platillo de balanza con cuatro perforaciones simétricas junto al borde, con
pequeña rotura en su centro. Bronce de pátina verde.
Diám., 10'5 cm.; grosor, 0'08 cm. (fig. 14, 6 y Lám. IX, 6).
7. Copa ática de pie bajo. Se estudia en capítulo aparte.
Diám. bucal, 16'2 cm.; basal, 8'3 cm.; alt. 5'2 cm. (fig. 14, 7 y Lám. IX, 7).
8. Pdtera ática restaurada. Se estudia en capítulo aparte.
Diám. bucal, 24'2 cm.; basal, 12'7 cm.; alt., 7'1 cm. (fig. 15 y Lám. IX, 8).
9. Crátera ática de figuras rojas, restaurada. Se estudia en capítulo aparte.
Diám. bucal, 35'5 cm.; basal, 14'2 cm.; alt., 33'5 cm. (fig. 16 y Lám. X,XI,XII y XIII).
10112. Tres inscripciones ibéricas sobre plomo. Se estudian en capítulo aparte.
(Lám. XVI).
Al efectuar la limpieza de la inscripción V observamos que en varias zonas de su
superficie conservaba la impronta de tela de fina urdimbre. Igual acontece con la
Pig. 16
Fig. 17. Enterramiento 11: 1, Copa Atica de pie bejo; 2, Pátera Atica; 3, Crátera ática de figu-
ras rojas; 4, Platillo de balanza; 5, Ponderales; 6, Inscripción ibérica (Orleyl V); 7, Inscrip-
ción ibérica (Orleyl VIII; 8, Inscripción ibérica (OrleylVI); 9, Restos humanos calcinados; 10,
Cenizas alrededor de la urna cineraria en un radio de 50 cm.
38 A. LAZAR0 Y N . MESADO

VI1 (20) por lo que suponemos que los plomos debieron depositarse envueltos en tiras
de tela, las que tendrían en uno de sus extremos un pequeño palito que serviría pa-
r a arrollar la planchuela de plomo con la tela, suposición ésta que se basa en el he-
cho de que todos los plomos que hemos encontrado aparecen arrollados con un vacio
central circular o aplanado.

(20) Agradecemos a los Drs. Hermanfrid Schubart, Director del Instituto Arqueo-
lógico Alemán de Madrid, Jürgen Untermann, Profesor de la Universidad de Koln, y
Ulrich Schaaf, Director del Romisch-Germanische Zentral Museum de Mainz, la desin-
teresada y decisiva colaboración prestada en el salvamento del plomo Orleyl VII, el
que por su .deplorable estado de conservación precisó un tratamiento especial.
CAPITULO 11

CONSIDERACIONES GENERALES

NORBERTO MESADO OLIVER


ABILIO LAZAR0 MENGOD

Atendiendo a la morfología de los materiales indígenas inventa-


riados, citaremos sus paralelos más próximos -y por ello de nuestra
área litoral castellonense, extendiéndola a la ilercavona en general-,
haciendo, cuando el caso lo requiera, alguna incursión a objetos ha-
llados en yacimientos geográficamente más apartados, ya que su evo-
lución cultural y cronológica pudiera disentir, por lo que estas citas
serán pocas. Con ello dejamos de lado las largas listas bibliográficas
tan comunes a todo trabajo, obviamente conocidas, a las que, remiti-
mos al lector, pero cuya inclusión bien poco aportaría.
Habrá que recordar que toda necrópolis (entidad receptora de
creencias y modas), es reflejo directo del estado cultural del pueblo
que la produce. Con la presente publicación, pues, acercamos a todos
un Patrimonio Histórico que vendrá a ensanchar un poco más el ya de
por sí complejo horizonte del pueblo que ocupara en la segunda mitad
del primer milenio a. d. C., una área geográfica que hoy es la nuestra.

FIBULAS

TIPOLOGIAS DE LAS FIBULAS DE LA NECROPOLIS


DE ORLEYL (VALL D'UXO)

Anulares de muelle . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
.... 6, porcentaje 33'33%
Anulares de charnela.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 5, porcentaje 27'77%
Anulares de aguja basculante ............................... 1, porcentaje 5'55%
Anulares ((mixtas)). . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 5'55%
De resorte bilateral sin pie alzado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 5'55%
40 A. LAZAR0 Y N. MESADO

De resorte bilateral con pie alzado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 5'55%


Indeterminadas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .-
.3, porcentaje 16'66%
Total fibulas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .18

TIPOLOGIA DE LAS FIBULAS DE LA NECROPOLIS


DE LA SOLIVELLA (ALCALA DE XIVERT)

De doble resorte . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 6'70%


De resorte bilateral corto y pie alzado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4, porcentaje 26'70%
De resorte bilateral largo y pie alzado . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3, porcentaje 20'00%
De resorte bilateral largo rematado en esferillas . . . . . . . . . . . . . . . 2, porcentaje 13'30%
Anulares de muelle . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2, porcentaje 13'30%
Anulares de charnela.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 6'70%
-
Indeterminadas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2, porcentaje
Total fíbulas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 15
13'30%

TIPOLOGIA DE LAS FIBULAS DE LA NECROPOLIS


DE EL PUIG (BENICARLO)

De resorte bilateral y pie alzado.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .4, porcentaje 44'44%


De resorte bilateral largo y charnela de bisagra . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 11'1 1%
De resorte bilateral corto . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 11'1 1%
Anular de alambre y varilla.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .1, porcentaje 11'1 1%
Anular de charnela de bisagra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1, porcentaje 11'1 1%
Anular de muelle . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .A
. . porcentaje 11'1 1%
Totalfibulas . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .9
Resumiendo pues los tres yacimientos castellonenses advertire-
mos que, en la necrópolis de Orleyl, de un total de 18 fíbulas, 13 son
anulares de entre las cuales 8 pertenecen al horizonte ibérico antiguo ;
2 de ballesta (de resorte bilateral), y 3 piezas indeterminadas. En la
Solivella, de un total de 15 ejemplares, 9 son de resorte bilateral; 3
anulares (2 de muelle y 1 de charnela); 1 de doble resorte, y 2 indeter-
minados. En la necrópolis del Puig, 6 piezas son de resorte bilateral
(una de las cuales es de charnela), y 3 son anulares ( 1 de muelle, otra
de muelle y charnela y una tercera ((anular de alambre y varilla)) sin
que podamos apreciar bien, por el dibujo, la cabeza de la aguja). La
Solivella será fechada en el (cúltirno cuarto del siglo V, es decir, hacia
un 4-30/4-25a. d. C.)) ( 1), mientras que el Puig, según Meseguer-Giner,
abarcaría del 450 al 430 a. d. C. (2).

(1) D. FLETCHER VALLS: ((Lanecrópolis de la Soiivella (Alcalá de Chivert).))Servicio de


Investigación Prehistórica. Serie de Trabajos Varios, núm. 32. Valencia, 1965, pág. 57.
( 2 ) V. MESEGUER - V. GINER: «La necrópolis de El Puig (Benicarló, Castellón))),Beni-
carló, 1980. Estudio de próxima publicación por lo que agradecemos a sus autores el haber
podido utilizar a priori dicho trabajo.
Otra necrópolis castellonense, El Bovalar (también en Benicarló),
destruida en 1942, dio un puente de fíbula de pie alto con botón, que
por el contexto del resto del material exhumado se situará ((haciame-
diados del siglo V a. d. C.» (3). En La Oriola, Amposta, necrópolis de-
nunciada como todas las precedentes por labores de desfonde -aun-
que también pudieron realizarse trabajos sistemáticos-, fueron reco-
gidas 4- fíbulas (o restos de ellas) de pie alto rematados por esférula, y
2 anulares, aunque de pie alto y botón (una de muelle y la otra de
charnela). La cronología de este yacimiento «poco después del 450, o
sea hacia la segunda mitad del siglo V a. d. C.» (4).
Si bien el estudio de nuestra fíbula anular ha dado ya una impor-
tante bibliografía, propiciada en buena parte por Cuadrado y Almagro
(S), nos fijaremos, tan sólo, para ((ambientar))las piezas anulares de
nuestra provincia -y en particular las de Orleyl-, en dos puntos del
área mediterránea, uno al N. -Ampurias-, y otro al S. -Los
Saladares-. En Ampurias las fíbulas anulares se acompañan de pro-
ductos áticos. El primer ejemplar, aparecido en la inhumación núm.
55 de Bonjoan, es una pieza de 6 cm., de diámetro, de grueso alambre
cilíndrico con el puente amorcillado, el cual se une a la anilla por en-
rollado de sus extremos. El resto del ajuar está compuesto por un an-
forisco de vidrio similar a los restos hallados en nuestra necrópolis
(fig. 12 núm. 15); dos jarritas focenses, un vaso caliciforme de cerá-
mica gris ampuritana; un lekito ático de figuras negras «obra del pin-
tor de Haimon (480-470 a. d. C.))); dos lekitos del estilo del pintor pre-
cedente, y dos lekitos más «del grupo del pintor de Beldam, que traba-
jó del 480 al 470 a. d. C.))( 6 ) .La otra pieza ampuritana procede de
la incineración número 9 de la necrópolis Martí. Se trata de una fíbu-

(3) F. ESTEVE GALVEZ: «La necrópolis de El Bovalar (Benicarló, Castellón).))Archivo


Prehistoria Levantina, vol. XI, Valencia, 1966, pág. 139.
( 4 ) F. ESTEVE GALVEZ: ((Lanecrópolis ibérica de La Oriola cerca de Amposta (Tarrago-
na).» Estudios Ibéricos 5. Instituto de Estudios Ibéricos y Etnológica, Valenciana. Valencia,
1974, pág. 51.
(5) Entre otros trabajos véase:
E. CUADRADO: «Precedentes y prototipos de la fíbula anular hispánica.)) Trabajos de Pre-
historia del Seminario de Historia Primitiva del Hombre de la Universidad de Madrid, VII,
Madrid, 1963.
M. ALMAGRO BASCH: {(Sobreel origen y cronología de la fíbula hispánica.)) Archivo de
Prehistoria Levantina (Homenaje a D. Isidro Ballester, Tomo 1111, vol. V, Valencia, 1954,
págs. 1771186.
M. ALMAGRO BASCH: ({Sobreel origen posible de las más antiguas fíbulas anulares his-
pánicas.)) Ampurias, XXVIII. Barcelona, 1966, págs. 2 151236.
(6) M. ALMAGRO: ((Las necrópolis de Ampurias.)) Vol. 1. Barcelona, 1953, págs.
1931196.
42 A. LAZAR0 Y N. MESADO

la anular de muelle, de 3'5 cm. de diámetro, con el pie levantado y


terminado con esférula. Apareció acompañada de un lekito cuya fe-
cha estaría entre el 500 y el 480 a. d. C. (7).
Oswaldo Arteaga registra una sencilla fíbula anular de muelle de
2'8 cm. de diámetro, hecha con un alambre de sección circular de 2
mm. de grosor. Su puente es de sección circular ligeramente amorci-
llado en su tramo medio. Dicho hallazgo pertenece a la ((Fase11C» del
Sector 11 de Los Saladares, Orihuela (Alicante), correspondiente al
último período del denominado por su excavador ((HorizonteCultural
Ibérico Antiguo)),y cuyo contexto cultural (material) ya no denuncia
importaciones fenicias, destacando en él la cerámica ibérica de gran
calidad fabricada en el poblado. Los galbos cerámicos de este momen-
to ((dependieronde los prototipos ofrecidos por la cerámica fenicio-pa-
leopúnicm (8), destacando en este hol-izonte (Fase 11 C) las urnas con
orejetas perforadas y las urnas bicónicas con los bordes bucales en
((cabeza de anade))(9), siendo también populares las grandes ollas de
boca ancha. Arteaga colocará este horizonte en unas fechas compren-
didas entre el 525 -500 y el 450 a. d. C., y cuya cronología relativa
viene certificada por la potente estratificación del yacimiento cuya vi-
da ((trascurrió sin interrupción desde la época de su fundación -(me-
diados del siglo VII1)- hasta el momento que se abandonó definitiva-
mente (hacia el 375 a. d. C.)» (10).
De las fhulas recogidas en la necrópolis de Orleyl llama la aten-
ción la anular con puente de ((navicella)).Es curioso que dos yacimien-
tos castellonenses ((extremos))geográficamente -0rleyl necrópolis y
El Puig poblado-, con cerámicas áticas los dos, hayan dado sendos
ejemplares cuya única diferencia sea el diámetro de ambas piezas (62
mm. y 55 mm. respectivamente). Si el ejemplar de Orleyl apareció sin
contexto cerrado por desplazamiento antiguo, la del Puig fue encon-
trada en la calle número 4- ((directamente sobre la roca del suelo))(11 ),
junto a los restos del kylix. atribuido por Sanmartí/Gusi al pintor de
Penthesilea, cuya pieza -según ambos- llegó a dicho yacimiento cas-
tellonense, desde Ampurias, en el segundo cuarto del siglo V a. d. C.

(7) Ob. cit. nota 6, pág. 117.


(8) 0. ARTEAGA y M. R. SERNA: «Los Saladares-7 Ir.» Noticiario Arqueológico Hispáni-
co, Arqueología 3. Madrid, 1975, pág. 72.
(9) Ob. cit. nota 8.
(10) Ob. cit. nota 8, pág. 67.
(11) V. MESEGUER y V. GINER: ((Objetos de bronce del poblado ibérico de El Puig.w
Benicarló- 1, Cuadernos de Historia y Arqueología. Benicarló, 1979, pág. 2 1.
(12). Las obras ampuritanas del pintor de Penthesilea son fechadas
por G. Trías en torno al 4-60 a. d. C. ( 1 3). R. Navarro en un estudio de
síntesis para las fíbulas catalanas, al referirse a las anulares anota:
En la segunda Edad del Hierro, que en la península denomina-
mos cultura ibérica, se desarrolla un nuevo tipo exclusivamente pe-
ninsular; se trata de la fíbula anular hispánica, sus inicios se remon-
tan a principios del siglo V Ifechas a las que corresponden los ejempla-
res más antiguos de la Península)) (14.).Pese a ello, y dentro de las fe-
chas remarcadas, los ejemplares con ((navicella))de Orleyl y El Puig,
parecen -por su evidente arcaismo- productos llegados a nuestros
dos yacimientos a través del comercio griego, tan patente en ellos. La
fíbula número 11 de Orleyl conlleva también un puente con cazoleta
concavoconvexa, y derivaría de las de ((navicella))tipo Orleyl-Puig,
siendo un paso a las ya más populares de timbal lleno, fíbulas núme-
ros 9 y 10. En cierto modo las fíbulas de naveta como las reseñadas
pudieran haber actuado de prototipo para las fíbulas anulares de tim-
bal o puente alargado, fíbulas números 12 y 13, habiendo derivado la
anular de muelle de las de resorte bilateral sencillo, caso de la fíbula
número 16, en la que el pequeño eje que es aprisionado por el muelle,
habría sido unido al pie del puente para dar a la pieza una mayor ro-
bustez. La fíbula anular del muelle técnicamente está más cerca de la
sencilla fíbula de resorte bilateral -(fig. 9, núm. 16)- que de la anular
de charnela, y éstas lo están de los ejemplares de ((navicella))tipo
Orleyl-Puig.
Con todo ello queremos destacar que, aún conviviendo en buena
parte los materiales de las necrópolis castellonenses, sus fíbulas -ese
objeto que por modesto tanto acusa las modas y las étnias- disentirán
en extremo. Ello, para nosotros, sólo tiene una razón: que el Millars-
Udiva -como menciona Plinio ( 15)- demarcó un área septentrional,
la Ilercavonia, de otra meridional, la Edetania, en la que la fíbula
anular llega a alcanzar el 90%de las piezas escrutadas ( 1 6), mientras
que en el área ilercavona hay un claro predominio de la fíbula de re-
sorte bilateral.
(12) E. SANMARTI y F. GUSI: ((UnKYLIX del pintor de Penthesilea, procedente del po-
blado ilercavon de El Puig (Benicarló, Castellón).))Cuadernos de Prehistoria y Arqueología
Castellonense, número 3. Castellón, 1976, págs. 20212 18.
(13) G. TRIAS DE ARRIBAS: ((Cerámicas griegas de la península Ibérica.)) The Willian
L. Bryan Foundation, T. 1. Valencia, 1967, págs. 106/107.
(14) R. NAVARRO: ((Lasfíbulas en Cataluña.))Instituto de Arqueología y Prehistoria de
la Universidad de Barcelona. Publicaciones Eventuales, número 16. Barcelona, 1970, págs.
1141115.
(15) Plinio: ((Nat. his. 111, 21.))
( 16) M.a V. RAMS: ((Avancea un estudio de las fíbulas ibéricas de la provincia de Valen-
cia.» Archivo de Prehistoria Levantina, vol. XIV. Valencia, 1975, pág. 143.
PONDERALES

De nuevo se repite el hecho de encontrarse un conjunto de pesas


agrupadas, como lo estaban la serie de ponderales hallados en los de-
partamentos números 16 y 100 del poblado de La Bastida ( l 7) y en el
departamento número 27 del de Covalta ( l 8 ) , incluyéndose en-el pri-
mer departamento citado de La Bastida -al igual que en la Sepultura
11 de Orleyl-, un platillo de balanza. Salvo la pieza 3.", troncopirami-
dal, que es de bronce, cijn taladro cuadrangular, el resto de ellas son
de plomo con el taladro circular, cosa que se viene repitiendo en este
tipo de piezas, adoptando las de plomo la forma discoidal.
La pieza menor de Orleyl se encuentra rota, pesando hoy 7'77
gms; pero si tenemos en cuenta que su taladro está ligeramente des-
plazado, y la parte mayor de su peso recae en el fragmento encontra-
do, su conjunto no debió rebasar en mucho los 11 gms.
Bien aparente su proporcionalidad de visu, los pesos correspon-
dientes son:

Pieza 1." ..... peso aprox. ... 11'00 gramos


Pieza 2." . .... peso aprox. ... 22'92 gramos
Pieza 3." .. . .. peso aprox. ... 4-3'70 gramos
Pieza 4." .... . peso aprox. . .. 92'62 gramos
Pieza 5." ..... peso aprox. ... 132'88 gramos

Observamos, pues, que con las evidentes diferencias producidas


en parte por desgastes, raspados, oxidaciones, etc., su proporcionali-
dad sería l. : 2 : 4 : 8 quedando fuera de ella el pondera1 último, el
cual pesa la suma de las piezas 3." y 4.". Las pesas de Orleyl que más
se acercan a las estudiadas por 1. Ballester (19) son la número 2, simi-
lar a la número X de Bastida con un peso de 21'60 gramos, y la 3.",
que es similar a la I V de Covalta, cuyo peso es de 42'20 gms., difirien-
do bastante el resto de los ponderales. Por todo ello parece que no hu-
bo un sistema de pesos en el área ibérica con una metrología común,

(17) D. FLETCHER, E. PLA y J. ALCACER: «La Bastida de Les Alcuses (Mogente, Valen-
cia).))1-11, Servicio de Investigación Prehistórica. Serie de Trabajos Varios, números 24 y 25.
Valencia, 1965-1969.
(18) 1. BALLESTER TORMO: ((Losponderales ibéricos de tipo covaltino.))Comunicación
al IV Congreso Internacional de Arqueología. Cultura Valenciana cuadernos 111y IV. Valen-
cia, 1930, págs. 1/25.
(19) Ob. cit. nota 18.
ORLEYL 4-5

pareciéndonos poco productivo cualquier cotejo que se realice entre el


conjunto de pesas de nuestra necrópolis y las conocidas del área meri-
dional valenciana de Covalta y Bastida.
HEBILLAS

Tres son los ejemplares recogidos en la necrópolis de Orleyl: dos


de superficie -piezas completas de uno y dos garfios-, y un talón de
placa encontrado en el interior de la Sepultura 1.
La pieza de un solo enganche es, con evidencia, la más basta,
comportando una mayor oxidación, y se decora con fuertes incisio-
nes. El ejemplar de dos garfios conlleva una decoración de líneas gra-
neadas (((grenetis))), siendo una pieza bien conservada; en el fragmen-
to tercero, que por su forma pudo ser romboidal de un solo garfio, la
decoración alterna el graneado con la fina incisión.
Creemos que más que atender a su forma y número de enganches
a la hora de establecer paralelos y cronologías, debería atenerse más
a su decoración. En este sentido las hebillas de un solo gancho de la
necrópolis del Bovalar (Benicarló) (20),con «grenetis»e incisión fina,
las creemos más cerca de nuestras piezas 2." y 3.a que de la 1 .". Igual
acontece con las piezas de la necrópolis de Solivella (Alcalá de Xivert)
( 21), de un solo garfio, también con decoración graneada, técnica esta
que se repite en sus bellas placas de dos y tres enganches. De uno, dos
y tres garfios son también las hebillas de la necrópolis de El Puig de
Benicarló (22), con decoración similar a las de Solivella. En la necró-
polis de La Oriola (Amposta) Esteve recogió varias placas, siendo de
un solo garfio el ejemplar suelto -sin decoración- encontrado cerca
de la sepultura número 4 dándolo dicho autor como la forma más an-
tigua dentro de la secuencia tipológica establecida para estas piezas.
El resto de las hebillas de La Oriola quedan dentro de las caladas, de-
coradas con ((grenetis))e incisión fina (23).
En la necrópolis de Can Canys (Banyeres)broches de un garfio con
duras líneas incisas (motivo evidentemente arcaico que se da en pie-
zas de un solo enganche) son buenos paralelos para la hebilla número
1 de Orleyl, aunque ésta queda ya más estilizada (24). Dentro de es-

(20) Ob. cit. nota 3.


(21) Ob. cit. nota 1 .
(22) Ob. cit. nota 2 y 11.
(23) Ob. cit. nota 4.
(24) S. VILASECA, J. Mas SOLE y R, MAÑE: d a necrópolis de Can Canys (Banyeres,
provincia de Tarragona).)) Trabajos de Prehistoria VIII. Madrid, 1963.
te tipo arcaico tendríamos la conocida pieza de honda incisión del tú-
mulo G de Acebuchal (25) y el de la sepultura 184-de Agullana, cuyo
contexto responde a la última fase de la necrópolis, fechada por Palo1
alrededor del 500 a. d. C. (26).
Otro ejemplar de tipo romboidal con dos garfios y decoración gra-
neada (su motivo central está compuesto por un gran circulo radiado),
conserva el Museo de Burriana. Procede del Mas Nou de Bernabé,
Salsadella, necrópolis destruida hacia 1950. Este ejemplar fue de don
Juan Bautista Porcar y nos llegó por mediación de don José M.aDoña-
te junto con unos dibujos de las principales piezas que en aquella ne-
crópolis fueron halladas: dos urnas de galbo similar a la número 23
(superficie) de La Solivella, con asas bífidas verticales terminadas en
orejetas perforadas, y sus correspondientes tapaderas de botón he-
miesférico. Ambos vasos medían 40 y 50 cms. de altura; dos lanzas de
hoja foliácea con nervio y tubo, de 19 y 26 cm.; una moharra con tu-
bo, de 47 cm. de longitud, y una fíbula de resorte bilateral corto y pie
alzado con esférula (tipo ((Golfo de León))),de 8'5 cm. de longitud.
Bosch Gimpera -al que se le debe la primera sistematización de
las hebillas-, sitúa las romboidales de un garfio entre el 500 y el 475
a. d. C. (27).
En poblados de la riqueza de La Bastida, cuyos materiales forman
un completo muestrario del mundo material ibérico a partir del siglo
IV, aunque solamente se hayan dado a conocer sus 100 primeros de-
partamentos, no figuran placas de cinturón de la tipología predicha,
por cuyo motivo puede asegurarse que dichas hebillas son de fecha
((ante quem)).
OBJETOS VARIOS

a) CADENILLAS CON BOLICHE

Son comunes en todos los yacimientos castellonenses del Horizon-


te Ibérico Antiguo, especialmente en las necrópolis, caso de El Bova-
lar cuyos ejemplares son notorios. Las de tres eslabones y boliche

(25) Esta pieza la conocemos, entre otros, a través de G. SCHÜLE:«Las más antiguas fí-
bulas con pie alto y ballesta.))Trabajos de orehistoria del Seminario de Historia Primitiva del
Hombre de la Universidad de Madrid, 11. Madrid, 1961, fig. 1.
(26) P. PALOL: «La necrópolis Hallstattica de Agullana (Gerona).))Bibliotheca Praeshis-
torica Hispana, vol. 1. Madrid, 1958.
(27) P. BOSCH GIMPERA: «Los celtas y la civilización céltica en la península Ibérica.))
Boletín de la Sociedad Española de Excursionismo, vol. XXIX. Madrid, 1921.
-ejemplares de Orleyl-, se repiten en todas las necrópolis citadas del
Bajo Maestrazgo. Tampoco existen en Bastida.

b) PINZAS DE DEPILAR

Hay ejemplares de perfil recto en la necrópolis de Solivella (Sepul-


tura número 27), denunciándose en Los Saladares con idéntico perfil
en su horizonte preibérico: Aunque fuera ya de una área conveniente
de influencia, la Necrópolis de la Muralla NE. de Ampurias -donde
por otra parte se dan varios broches de cinturón de dos garfios con
decoración graneada que Almagro denomina «de tipo ibérico))-, en su
incineración número l. 1 una pinza de perfil recto estaba acompañada,
entre otros objetos, por una cadenilla con boliche, una hebilla lisa de
dos garfios y un escarabeo identificado por J. Padró como pertene-
ciente al faraón Psamético 11(28).Las pinzas más elegantes de Orleyl,
de silueta dentada y paletas decoradas, tienen buena réplica en los
ejemplares de los departamentos números 23, 3 1 y 91 de Bastida.

c) TINTINABULOS

Son comunes en el horizonte cultural de Bastida, donde los vemos


muy semejantes a los de la necrópolis en los departamentos números
2 , 48 y 84.185.

d) ASTRAGALOS

No se registran en las necrópolis del Bajo Maestrazgo. En Bastida,


en el departamento número 66 se recogió una taba desgastada y per-
forada tal como lo están varios ejemplares de Orleyl. Grupos de tabas
en las necrópolis de Ampurias son frecuentes, tal como vemos en la
Inhumación Martí números 9 y 99; Incineración Martí número 28, e
Inhumación Bonjoan número 12 (29).

Por sí sola nos delata la ancha cronología de la necrópolis de Or-


leyl, respondiendo a tres momentos culturales, los cuales denomina-
remos Horizontes 1. .O, 2." y 3.O.

(28) J. PADRO: «A propósito del escarabeo de la Solivella (Alcalá de Xivert, Castellón) y


de otras piezas egipcias de la zona del bajo Ebro.)) Cuadernos de Prehistoria y Arqueología
Castellonense, número 1. Castellón, 1974-, págs. 71/78.
(29) Ob. cit. nota 6.
48 A. LAZAR0 Y N. MESADO

HORIZONTE 1 .O
Responde a la fase más vieja de nuestra Cultura Ibérica (((Hori-
zonte Cultural Ibérico Antiguo)) según la denominación de Arteaga)
(30). A ella pertenecían los fragmentos de la figura 3 que arrastran
-en especial los tiestos números 2 y 6-, técnicas arcaizantes, respon-
diendo sus galbos a un Hierro 1, y fechados en el cercano yacimiento
de Vinarragell (niveles protoibéricos) a lo largo del siglo VI a. d. C.. Di-
chos recipientes convivieron con cerámicas tales como la urna de la
Sepultura 1(fig. 13, 2), cuyo perfil no denuncian las necrópolis antedi-
chas y que nos está recordando -«grosso modo»- ciertos vasos piri-
formes del área tartésica.
Dentro de este horizonte habría que situar las pequeñas tapaderas
con apéndices perforados (que serían de incineraciones infantiles), y
los primeros recipientes importados, caso de las copas jónicas y cerá-
micas de figuras negras, cuya cronología de deposición en la necrópo-
lis rondaría el final del siglo VI o los inicios del siglo V. Este primer
momento de la necrópolis finalizaría con las urnas ya más evolucio-
nadas de la figura 5, cuyo vaso número 2 (de decoración bícroma) es
de silueta caliciforme. La cerámica policroma (por lo general bicro-
ma) en el área valenciana ha llamado la atención, y así, en el X Con-
greso Nacional de Arqueología (Mahón, 1967),la señora Val1 de Pla y
don Enrique Pla, cursan una primera comunicación (31 ); don Domin-
go Fletcher en 1966 ya la considera de importación o procedente de
((alfares ubicados en estas tierras, pero regidos por técnicos ceramis-
tas extranjeros)),no considerándola propiamente ibérica (32).La fa-
milia Pla anota una particularidad peculiar a este tipo cerámico que
incide también en el recipiente de nuestra figura 5, así como en otras
piezas de la Plana (Vinarragell):«es corriente que las tonalidades ma-
rrones y negras hayan desaparecido)) anotando «que sólo se encuen-
tran en yacimientos ibéricos de la primera época, destruidos o aban-
donados en la 2." mitad del siglo IV y en los que hay cerámica ática de
figuras rojas y cerámica ática de barniz negro))(33),dando tres vías a
su procedencia: 1 . O , que se trate de un producto de importación; 2.",

(30) Ob. cit. nota 8.


(31) M. A. VALL DE PLA y E. PLA: ((Cerámicas polícromas en los poblados ibéricos va-
lencianos.)) X Congreso Nacional de Arqueología (Mahón, 1967). Zaragoza, 1969, págs.
288/305.
(32) D. FLETCHEB VALLS: ((Lacerámica ibérica valenciana.))Feriario XXXIII, número
35. Valencia, mayo 1971.
(33) Ob. cit. nota 31, págs. 294/295.
que sea fabricada en la zona valenciana por artesanos extranjeros (o
sea, la orientación que señala Fletcher), y 3.O, que representen las más
antiguas cerámicas ibéricas las cuales serían a su vez imitaciones de
productos orientales.
Más tarde Carmen Aranegui completará los yacimientos valencia-
nos donde se conoce cerámica polícroma (34),anotando que en el País
Valenciano se encuentra en ((contextos arqueológicos de los siglos V-
I V a. d. J. en adelante))(35).De las 19 estaciones en las cuales detecta
dicha policromía, 9 se hallan emplazados en la zona meridional va-
lenciana, lo que para dicha autora sería indicio de un posible camino
de introducción, «no encontrándose esta especie cerámica en necró-
polis, aunque en Andalucía casi todos los hallazgos provienen de luga-
res funerarios)) (36).En su Conclusión 111 dice que la monotonía tipo-
lógica de estos vasos policromos, es parangonable a otros tartéssicos
de barniz rojo, lo cual ((podría indicar un enlace con el mundo púnico
o preibéricos (37).Entre los yacimientos que se citan está Orleyl con
restos «de una gran vasija con decoración pintada en dos tonos: rojo
vinoso y negro, que forman motivos ornamentales a base de circunfe-
rencias concéntricas y segmentos igualmente concéntricos)) (38).Una
particularidad del tiesto citado es el llevar en toda su superficie una
homogénea aguada de cubierta de coloración crema, sobre la que se
pintarán los motivos geométricos. Esta preparación de fondo es tan
uniforme que sólo se apreciará si el fragmento cerámico conserva el
asa, o su arranque, ya que al no pasar el pincel por debajo de ella, de-
jará sobre el cuerpo del recipiente un espacio sin teñir. Vemos pues
que tanto este detalle, tan reiterativo, como la extrema calidad de las
pastas cerámicas; el gran tamaño de estos recipientes, así como los
motivos empleados en la decoración, nos asegura que el vaso del po-
blado de Orleyl citado por Aranegui, salió del mismo alfar que los va-
sos cuyos tiestos recogimos con abundancia en las capas superficiales
del Vinarragell, donde ya en 1 970 -el trabajo se publicaba en 1 97&
anotábamos las características de estas cerámicas polícromas caste-
llonenses y entre ellas, una estética: ((sus motivos decorativos, siem-

( 3 4 ) C. ARANEGUI: ((Consideraciones sobre la cerámica con decoración pintada polí-


croma en el País Valenciano.))Miscelánea Arqueológica, XXV Aniversario de los Cursos Inter
nacionales de Prehistoria y Arqueología en Ampurias ( 194711 9 7 1 ). Tomo 1.Barcelona, 1974,
págs. 87/99.
( 3 5 ) Ob. cit. nota 3 4 , pág. 98.
( 3 6 ) Ob. cit. nota 3 4 , pág. 99.
( 3 7 ) Ob. cit. nota 3 4 , pág. 99.
( 3 8 ) Ob. cit. nota 3 4 , pág. 88.
pre geométricos (en Vinarragell), se distribuyen con una gran soltura
y sentido rítmico, que en modo alguno en la región valenciana pueden
corresponder a una primera etapa artístico-autóctona, pues se trata
de una fase de síntesis producto de una larga tradición artesana))(39).
En dicho trabajo decíamos al comentar las pastas del período ibérico
del te11 cuyos niveles destruidos se asientan sobre potentes niveles
protoibéricos con cerámicas bícromas coloniales, que estas cerámicas
polícromas del 3er período cultural del te11 eran ((pervivencias))de las
fenicias del 2." período cultural (40).
En los Saladares, donde la evolución estratigráfica del yacimiento
no aparece alterada, las pastas polícromas encajan en su ((Horizonte
Cultural Ibérico Antiguo)),siendo importadas, y se detectan ((desdefi-
nales de la Fase 1B2», no llegando a ((desaparecerpor completo hasta
la Fase 111))(41),momento final que se paraleliza con yacimientos va-
lencianos tales como Bastida, Covalta y el Puig de Alcoy (4-2).La cro-
nología relativa de dicha cerámica en Saladares abarca desde el ter-
cer cuarto del siglo VI1 a. d. C., hasta mediados del siglo V (4-3).
Como hemos podido observar, la cerámica polícroma del horizon-
te ibérico está presente -con insistencia- en yacimientos valencianos
con potentes niveles coloniales a los que se superpone, encajando en
un primer momento del Horizonte Ibérico Antiguo y, seguramente,
sería fabricada en alfares comarcales cuya tradición artesanal habría
sido heredada del mundo colonial fenicio, y cuya cronología bascula-
rá según la idiosincrasia de cada área comercial.
El rito incineratorio de la Sepultura 1es el detectado en el resto de
las necrópolis del Bajo Maestrazgo: tras la cremación algunos restos
humanos -en particular de la bóveda craneana-, serán depositados
en una urna por lo general de orejetas, con su correspondiente tapa-
dera, y depositados en un punto que no será el usado para la crema-
ción. Confeccionado el pequeño hoyo, la urna cineraria se depositará
en él encajándola con piedras medianas. Incorporado el ajuar -den-
tro o fuera del recipiente-, será todo cubierto con tierra; no parecien-
do que fuesen usados señales para constancia de la sepultura, aunque
todas las necrópolis han sido encontradas en áreas de secano coloni-
zadas y abancaladas de antiguo.

(39) N. MESADO: ((Vinarragel1(Burriana, Castellón).))Servicio de Investigación Prehis


tórica, Serie de Trabajos Varios, número 46. Valencia, 1974, pág. 21.
(40) Ob. cit. nota 39, pág. 147.
(41) Ob. cit. nota 8, pág. 70.
(42) Ob. cit. nota 8, pág. 81.
(43) Ob. cit. nota 8, pág. 82.
Resumiendo, pues, la cronología de este Horizonte Ibérico Anti-
guo en la necrópolis pudo alcanzar un lapso de tiempo comprendido
entre fines del siglo VI -o inicios del V-, y llegar al segundo cuarto de
dicho siglo; cronología que vendría confirmada por las cerámicas im-
portadas estudiadas en el capítulo 111 (44).

HORIZONTE 2.O

Al Horizonte Cultural Ibérico Pleno respondería la -al parecer-


intensa.masificación de los productos importados áticos, cuyo expo-
nente máximo sería la Sepultura 11.Los grandes recipientes de figuras
rojas marcarían el ((floruit))de dicho comercio por parte del elemento
receptor indígena a lo largo de los poblados castellonenses más im-
portantes (El Puig, Orleyl y El Castell de Almenara), ubicados junto al
Mediterráneo.
Aunque en nuestra sepultura no se incorporasen cerámicas indí-
genas, reflejando una riqueza inhabitual -aunque falta conocer ne-
crópolis del mundo sociocultural de Bastida-, incorporamos a dicho
horizonte los platos con perforaciones de las figs. 6 y 7 (este último
con dudas), y las fusayolas, salvo la pieza número 3 de la fig. 4, más
evolucionada. Los textos ibéricos en el ajuar de la tumba nos indican
el alto grado cultural que alcanza ahora nuestra cultura ibérica ede-
tana, cuyo ((floruit)),de evidente cariz (cgrecófilo)),no puede darse sin
una fase precedente -la del Horizonte Antiguo-, de raíz colonial feni-
cia.
El insistente comercio griego -sin intermediarios-, de moda a lo
largo del siglo V (y sin hiatus en su primera mitad), y siglo I V a. d. C.,
((grosso modo)), dejará de reflejarse en la necrópolis hacia los inicios
del siglo 111,y la patera del taller de las pequeñas estampillas (hacia el
-285) pudiera precisarnos más el final de la etapa.

(44) Productos arcaicos griegos (tencajados))en este primer momento cultural, fueron
detectados ya por Junyent en la ((Cava de les Cinc)),Almenara. yacimiento a unos 10 kms. al
S. de Orleyl (E. JUNYENT: «Observaciones a unas cerámicas pintadas de Almenara (Castellón
de la Plana))).Cuadernos de Prehistoria y Arqueología Castellonense, número 3 , Castellón,
1976, págs. 1951204).Aunque las necrópolis del Bajo Maestrazgo no incorporen a sus ajuares
cerámicas griegas arcaicas, ello puede ser dehido a un ambiente poco innovador -normal en
los pueblos con un bagaje cultural bajo-, más que a la inexistencia de dichas importaciones
entre ellos, como lo denotan las cerámicas griegas del poblado de El Puig de Benicarló -ni un
solo fragmento ha sido detectado en su necrópolis-, y ciertos bronces: caso de los pequeños
colgantes zoomorfos representando ovicápridos y toros de la necrópolis de El Bovalar (como
bien ha señalado Esteve), similares a los toritos de la Torre de la Sal, playa de Cabanes (yaci-
miento con cerámica griega de figuras negras), que pudieran pertenecer a una necrópolis
destruida (D. FLETCHER: ((Dostoritos ibéricos, de bronce, procedentes de Torre de la Sal (Ca-
banes).))Penyagolosa, número 13, Castellón, 1976),o a los carneros del mentado poblado de
El Puig y necrópolis de Can Canys.
El rito incineratorio habría cambiado, aunque bien es cierto que
una sola sepultura no puede asegurarnos una generalización del ri-
tual, y ahora la urna cineraria será enterrada en el propio ustrino
donde se produjo la cremación, como lo demuestra el potente paquete
de cenizas en el que la urna estaba inmersa, y dado que los plomos no
acusan deformación por alta temperatura, habrá que pensar que los
restos incinerados se les da tierra, por lo menos, unas 24 horas des-
pués de la fase de cremación, cuando los últimos rescoldos de la pira
funeraria sólo son ceniza. Es el momento de ((esconder))unos textos,
cuyo contenido debe de estar en relación con el incinerado.

HORIZONTE 3 . O

La tercera fase de la necrópolis de Orleyl abarcaría desde final de


la precedente hasta la introducción de las primeras cerámicas cam-
panienses de barniz negro, las cuales no se han detectado entre nues-
tro material, pese a estar presentes en el poblado de la Punta.
Pese a ello las cerámicas ibéricas cuya temática decorativa está
orientada por el ((horror vacui)),como señalan fragmentos de las figs.
7 y 8, creemos alcanzan una cronología del siglo 1 a. d. C., y hallazgos
como una moneda romana del siglo primero encontrada en el punto 8
del plano que damos en la fig. 2, pudiera ser indicio de un prolongado
uso o recuerdo de nuestra necrópolis, aunque no hay que olvidar que
en sus cercanías hubo poblamiento romano, por lo que dicho hallazgo,
junto al caminillo que delimita por el SE. la necrópolis, puede ser ca-
sual, como lo sería, también la cuenta de sílex de cariz eneolítico reco-
gida entre las revueltas tierras del yacimiento.
CAPITULO 111

CERAMICAS IMPORTADAS DE LA NECROPOLIS


DE ORLEYL

CARMEN ARANEGUI GASCO

1. CERAMICAS DE LA GRECIA DEL ESTE

l . 1.Copa jónia de tipo B2, reconstruida a partir de varios frag-


mentos con labio de tendencia recta, pie en forma de trompeta y un
pequeño resalte en el centro interno. Pasta fma, ocre-grisácea por ha-
ber sufrido la acción del fuego. (fig. 18 y Lám. XIV, 1).
1.2. Copa jónia de tipo B2 de la que se conservan varios frag-
mentos que permiten la reconstrucción de su perfil, a excepción del
pie. Labio de tendencia cóncava. Como la anterior, muestra una pasta
de color grisáceo por efecto de su exposición al fuego. (fig. 19 y ~ á m .
XIV, 2).
Desde que Vallet y Villard describieron, clasificaron y dataron las
copas jónias (1) éstas han sido objeto de una atención creciente por
parte de los arqueólogos que las documentan en niveles estratigráfi-
cos de época arcaica. Al mismo tiempo las imitaciones locales del tipo
B2, que ya se señalaron en Megara Hyblaea (2),se van repitiendo en
las áreas de influencia de las ciudades focenses de modo que hoy está
fuera de toda duda el valor que el prototipo jónico tuvo en el campo de
las cerámicas.
El significado del hallazgo de copas jónias fue considerado, en un
primer momento, como un dato específico de la colonización focense
en occidente pero su aparición en Sicilia occidental (3) y en otros luga-

( 1) F. VIL,L,ARDY G. VALLET: ((MégaraHyblaea, V. Lampes du VIIe. siecle et chronolo-


gie des coupes ioniennes.)) M.A.H.E.F.R., LXV. París, 1955, pág. 7/34.
( 2 ) G. VALLET e t F. VILLARD: ((Mégara Hyblaea, 2. La céramique archaique.)) París,
1964, pág., 184.
(3) B. S. J. ISSERLING, W. CULLICAN and A. TUSA-CUTRONI: ((Motya: 1955.))Papers
of the British School a t Rome XXVI, 1958, pág., 26/27, por ejemplo.
Fig. 18
Fig. 19
56 C. ARANEGUI

res del norte de Africa de origen fenicio (4)ha llevado a la conclusión


de que su distribución no es exclusiva del comercio greco-oriental (S),
si bien parece evidente que es en los lugares de fuerte implantación
focense (6)donde se realizan las imitaciones locales de calidad cuida-
da.
Para la datación de estas piezas Villard y Vallet pusieron en rela-
ción la información textual acerca de las fundaciones focenses y su
evolución con los résultados de la investigación arqueológica referida
especialmente a los materiales de Megara Hyblaea, Elea y Massalia y,
de este modo, asignaron al conjunto de las copas B2 un período de vi-
gencia comprendido entre el 580 y el 54-0a. C. que es, en general, se-
guido por los especialistas aunque existe una tendencia a prolongar su
duración hasta el 530-520 a. C. o incluso hasta el final del siglo VI (7).
De hecho, a lo largo de toda esta centuria las copas jónicas son objeto
de un desarrollo cuya evolución es dificil de apreciar ya que, hasta el
momento, falta una tipología detallada de las variantes de la forma
B2, tanto de las que se consideran importadas como de las fabricadas
en occidente.
Los ejemplares hallados en Orleyl, por sus características de per-
fil, pasta, decoración y barniz, pertenecen a las importaciones, sin
que sea posible llegar a precisiones más ajustadas dado el estado ac-
tual de la investigación.
En la Península Ibérica encontramos una concentración de estas
copas en la zona litoral mediterránea, con una distribución que va
desde la factoría fenicia del río Guadalhorce (81, hacia los Saladares de

(4) J. P. MOREL: ((Kerkouane,ville punique du Cap Bon. Remarques archéologiques et


historiques.)) M.A.H.E.F.R., LXXXI, 2. París, 1969, pág., 494.
( 5 ) F. VILLARD: Cerámique ionienne e t céramique phocéenne e n 0ccident.n La Parola
del Passato, CXXX-CXXXIII. Nápoles, 1970, pág., 11211 13.
( 6 ) Para la distribución de las copas jónicas ver ((Les céramiques de la Grece de 1'Est et
leur diffusion en Occident.))Institut J. Bérard e t C.N.R.S., París, 1978, passim. P a r a las imita-
ciones n o cuidadas y, por lo tanto, m á s dudosamente derivadas del tipo original, ver M. PY:
«La céramique grecque de Vaunnages (Var)e t s a signification.))Cahiers Ligures de Préhistoire
et Archéologie, 20. 1971, pág., 29.
( 7 ) J. P. MOREL: ((La céramique archgique de Vélia e t quelques problemes connexes.))
Simposio de Colonizaciones. Barcalona, 1974, pág., 146. P. G. GUZZO: ((Importazioni fittili
greco orientali sulla costa ionica d'Italia», e n ((Lescéramiques de la Grece de 1'Est et leur dif-
fusion en Occident)), Institut J. Bérard e t C.N.R.S., París, 1978, pág. 10711 30.
(8) A. ARRIBAS y O. ARTEAGA: «El yacimiento fenicio de la desembocadura del río
Guadalhorce (Málaga).))((Universidad de Granada, 1975, pág., 8 6 y 91, nota 6, perteneciente
al horizonte ((Guadalhorce 11)).
Fig. 20
58 C. ARANEGUI

Orihuela (9) en donde se han señalado imitaciones de copas jónias, el


Tossal de Manises de Alicante ( l o ) , Los Villares de Caudete de las
Fuentes (1l ) , Sagunto (12),las piezas que ahora presentamos, el frag-
mento de tipo B3 del Tossal de les Forques de Borriol, y los de La Pal-
ma, Sant Just Desvern, Ampurias y 1'Illa d'en Reixac en Cataluña
(13). Ello establece una diferencia con respecto a la zona andaluza en
la que, existiendo un mayor número de yacimientos excavados con ni-
veles de época arcaica, estas copas son prácticamente inexistentes lo
que nos lleva a plantearnos la posibilidad de que la corriente comer-
cial que las difunde sea distinta y algo más tardía de la que introduce
las primeras importaciones griegas en el mundo tartésico.

2.1. Borde ligeramente reentrante de cerámica de figuras ne-


gras en el que se ve una banda sobre el labio exterior, una guirnalda e
incisiones que dibujan un motivo indeterminable. Corresponde a la
etapa tardía de las figuras negras y puede ponerse en relación con el
((leafless group)) de Beazley, fechable entre el 500 y el 490 a. C. (14.).
(fig. 20, 1 y Lám. XV, 1).
2.2. y 2.3.. Fragmentos de bordes, asas y peanas de copas de pie
alto del tipo de las «vicups» del Agora de Atenas ( 15) datables entre el
480 y el 460 a. C. Las peanas muestran una línea, la escocia y la su-
perficie de apoyo en reserva y la 2.2. ostenta un grafito en ibérico (fig.
20, 214 y Lám. XV, 4).
2.4. Fragmentos de copas de pie bajo pertenecientes a la ((deli-
cate class))de Sparkes y Talcott ( 16),muy rodados y con la decoración
trazada con descuido. En su variante decadente esta cerámica puede

( 9 ) 0 . ARTEAGA: <(Problemáticageneral de la Iberización en Andalucía Oriental y e n el


Sudeste de la Península.)) Simposi Internacional: Els Origens del Mon Iberic (Barcelona-Em-
puries, 1977). Ampurias 38-40.Barcelona, 1977-78. (19811, phgs. 23/60. Horizonte 11 B.
(10) P. ROUILLARD: ((Les céramiques peintes de la Grece de 1'Est et leurs imitations
dans la Péninsule Ibérique: Recherches préliminaires)), e n ((Les céramiques de la Grece de
1'Est et leur diffusion e n Occident)), Institut J. Bérard e t C.N.R.S., Paris, 1978, pág., 274/286.
( 11 ) E. PLA BALLESTER: ((Los Villares, (Caudete de las Fuentes, Valencia))),Trabajos
Varios del S.I.P., 68. Valencia, 1980, pág., 67, fig. 7.
(12) P. ROUILLARD: ((Investigaciones sobre la muralla ibérica de Sagunto)), Trabajos
Varios del S.I.P., 62. Valencia, 1979.
(13) E. SANMARTI: «Materiales griegos y etruscos de época arcaica en las comarcas
meridionales de Cata1unya.n Ampurias, 35. Barcelona, 1973, pág., 2331234.
(14) J. Q . BEAZLEY: ((Attic Black-Figure Vase-Painters.1) Oxford, 1956, pág., 632.
(15) B. A. SPARKES and L. TALCOTT: «The Athenian Agora XII. Black and plain pot-
tery.)) Princeton, New Jersey, 1970, pág., 93.
(16) Ob. cit. nota 14, pág., 102/105.
ORLEYL 59

llegar hasta el siglo IV, aunque es característica de la mitad del siglo V


a. C. (fig. 20, 5 y 6).
2.5. Copa de pie bajo del tipo de las ((insetlip» del Agora de Ate-
nas (17). Está incompleta faltándole parte del cuerpo y de las asas.
Puede datarse a finales del siglo V o durante la primera mitad del si-
glo IV a. C. (fig. 14, 7 Y Lám. IX, 7) (Sep. 11).
2.6. Fragmentos de copa de pie bajo de tamaño grande. Pie mol-
durado en reserva y fondo exterior recubierto de miltos con banda de
barniz negro en torno al pie. Puede pertenecer a una ((cup-skyphos))de
comienzos del siglo IV a. C. ( 1 8). (fig. 20, 7).
2.7., 2 -8. y 2.9. Fragmentos de cerámica ática de figuras rojas
correspondientes a la parte central de copas de pie bajo. El primero
conserva la representación parcial de una figura con himation bien
dibujado y tiene el fondo externo decorado con bandas y filetes; el se-
gundo muestra la cola de un cuadrúpedo en lo que queda del meda-
llón interno y el tercero no permite ninguna atribución por estar muy
rodado (fig. 20, 13, 14 y 8 y Lám. XV, 13 y 14).
2.1 0. y 2.1 1. Fragmentos de skyphoi del tipo A del Agora de Ate-
nas (19)fechables hacia el primer cuarto del siglo I V a. C. (fig. 20, 10,
11).
2.12. Dos fkagmentos de cerámica ática de barniz negro posi-
blemente correspondientes a una pequeña copa de pie elevado y mol-
durado. Presenta una decoración en la cara externa consistente en
ovas que descansan sobre una estría, detalle que sitúa cronológica-
mente la pieza a finales del siglo V o durante el siglo IV a. C. (fig. 20,
17).
2.13. Crátera de campana de cerámica ática de figuras rojas re-
construida de varios fragmentos. La decoración se desarrolla en una
franja delimitada por una cenefa de hojas de olivo en la parte supe-
rior y otra de grecas interrumpidas por aspas con puntos en los ángu-
los en la inferior. En el anverso aparece la representación de la Grifo-
maquia, con un grifo rampante situado en el centro que lucha contra
tres arimaspos; uno yace derrotado a sus pies y los otros dos, a uno y
otro lado, le hacen frente. Visten túnica corta, pantalones y mallas;
van tocados con gorro frigio y llevan el armamento propio de estas

(17) Ob. cit. nota 14, fig. 471.


(181 Ob. cit. nota 14, núms. 469 a 517.
(191 Ob. cit. nota 14, núms. 334 a 354.
Fig. 21
gentes míticas de la Europa Asiática: escudos con escotadura en la
parte superior y puñales cortos. En el reverso se aprecian tres jbvenes
con himationes. Dos de ellos se dirigen a la derecha con discos en las
manos decorados con aspas y puntos, y el tercero, mirando a la iz-
quierda, cierra la escena. Tiene un estilo muy parecido a los de piezas
atribuidas al ((Retorted eye painter)),de Beazley. Hay retoques de pin-
tura blanca sobre el grifo y los glóbulos que se ven a los lados de su
cabeza, en los escudos de los arimaspos y en el contorno de sus cabe-
llos. El autor de esta obra es el ((pintor de la Amazona)) de Beazley
(ZO),a quien también se le atribuye la crátera de Ensérune (21 ), de la
misma temática, que fue hallada en la necrópolis sirviendo de urna
cineraria como en el caso que nos ocupa. Trabajó a mediados del siglo
IV a. C. y, según Alexandrescu (22), incluso a comienzos del tercer
cuarto de este siglo (fig. 16 y Láms. X/XIII) (Sep. 11).
2.14. Borde de una pequeña pátera de labio grueso y reentran-
te. Barniz achocolatado, poco uniforme. Esta forma tiene una crono-
logía amplia que puede ir desde el 4-30 al 325 a. C. (23).(fig. 20, 15).
2.15. Pátera de cerámica ática de barniz negro decorada con
seis palmetas de hojas incisas, enlazadas y rodeadas por dos cenefas
de ruedecilla. Pie destacado con uña. Similar al número 835 de Spar-
kes y Talcott (24)datable hacia el 325 a. C. (fig. 15 y Lám. IX, 8 ) (Sep.
11).
2.16. Peana de una crátera con taladros de lañado que indican
que su utilización como urna cineraria se produce en un momento en
el que su estado de conservación es ya deficiente, detalle observable
en otras muchas necrópolis del área ibérica. Su perfil no corresponde
al de las cráteras de cerámica ática de figuras rojas sino más bien al
de las de barniz negro decoradas con una guirnalda vegetal sobrepin-
tada en blanco o rojo, atribuibles a la producción ática tardía o a al-
guna de sus derivaciones (fig. 21, 2 y Lám. XV, 2).

( 2 0 ) J. D. BEAZLEY: ((Attic Red-Figure Vase-Painters.)) Oxford, 1 9 6 3 , p á g . ,


1.47811.480.
( 2 1 ) J . JANNORAY: ({Ensérune.Contribution A l'étude des civilisations prérromaines de
la Gaule Méridionale.)) Paris, 1955, pág., 319, Lám. XLII, 4.
(22) P. ALEXANDRESCU: ((Historia IV. La céramique d'épogue archaique et classique.
VII-IVe. s.)), Institut d'Archéologie de Bucarest, 1978, pág., 466.
(23) Ob. cit. nota 14, núm. 850.
( 2 4 ) Ob. cit. nota 14.
62 C. ARANEGUI

3. CERAMICA DEL TALLER D E LAS HPEQUEÑAS ESTAMPILLAS»

3.1. Bol de la forma 27 c del que se conservan varios fragmen-


tos con rosetas estampadas en el fondo interno que reproducen el te-
ma 8 de la clasificación de More1 (25)-rosetas de siete pétalos sepa-
rados por puntos-. La pasta es grisácea por haber sufrido la acción
del fuego y el barniz es negro y fino, distribuido irregularmente por el
pie. Su cronología ha quedado establecida en torno al 285 a. C. (fig.
20, 16 y Lám. XV, 16).

4.1. Ungüentario fusiforme incompleto de pie corto de cerámica


de color ocre claro. Está decorado con filetes de barniz negro sobre el
borde, la base del cuello y la parte superior de la panza. Presenta un
perfil intermedio entre las formas típicas del ungüentario piriforine,
más bajo y panzudo, y del fusiforme, con cuello y pie altos. Aunque los
rasgos tipológicos no constituyen una prueba inequívoca para su da-
tación, puede situarse a mediados del siglo 111 a. C. de acuerdo con
otros hallazgos similares de la Península Ibérica y Baleares, norte de
Africa o sur de Italia (26). (fig. 21, 1 ).
4.2. Pie de un ungüentario pequeño con barniz poco cubriente y
de tonalidad rojiza en la cara externa (fig. 20, 12).

(25) J. P. MOREL: ((Etudesde céramique campanienne 1: l'atelier des petites estampi-


Iles», M.A.H.E.F.R., LXXXI, 1, Paris, 1969, pág., 5911 17.
(26) G. RIZZA: ((Leontini)),N.S.A., 1955, pág., 3401341.
CAPITULO I V

LOS PLOMOS ESCRITOS (ORLEYL V, VI y VI!)

D. FLETCHER VALLS

Habiéndose publicado en anteriores ocasiones los plomos ORLEYL


1 a I V ( 1 ), hemos dado a estos otros tres nuevos plomos, cuyas cir-
cunstancias de hallazgo se han reseñado en páginas anteriores, los
números V, VI y VII. Dichas circunstancias, se describen en el capítu-
lo 1y la datación de las cerámicas en ella aparecidas, se expone en el
capítulo 111.

ORLEYL V

Planchuela de plomo hallada en el fondo exterior de la crátera


(fig. 22 y Lám. XVII). Mide 270 m.m. de longitud por 4-4- de ancho. Es-
tá escrita por una sola cara, con seis líneas de texto. Parte de la se-
gunda y la tercera de dichas líneas, quedan enmarcadas por un re-
cuadro que se inicia en la segunda palabra de la línea segunda y ter-
mina en la última de la tercera; al escriba se le escapó el punzón, sa-
liendo desviado el trazo inferior de la segunda línea. Esta delimita-
ción de texto la hemos encontrado, por ejemplo, en Pico de los Ajos 1,
A (2).

(1) D. FLETCHER VALLS: ((Nuevas inscripciones ibéricas de la región valenciana.))Ar-


chivo de Prehistoria Levantina, XIII. Valencia, 1972, págs. 108-116, donde se estudian Or-
ley1 1, 11 y IV.
D. FLETCHER VALLS y N. MESADO OLIVER: ((Nuevasinscripciones ibéricas de la pro-
vincia de Castellón de la Plana.))Castellón de l a Plana, 1968, págs. 15-2 1, donde se estudia
Orleyl 111.
(2) D. FLETCHER VALLS: «Los plomos ibéricos de Yátova (Valencia).))Trabajos Varios
del S.I.P., número 66. Valencia, 1980, pág. 10, fig. 2.
La macrofotografía permite observar con toda claridad la im-
pronta dejada por el tejido que envolvía la planchuela o al que iba
ésta sujeta.
El total de palabras, atendiendo a los puntos de separación que
hay en el texto, es de 32, pero nosotros, para su mejor estudio hemos
desglosado algunas de ellas llegando a un total de 42 vocablos; obvia-
mente, hubiéramos podido alcanzar mayor número de palabras si al-
guna de las que estudiamos como una sola las hubiéramos desglosado
en sus varios componentes.
Los tres últimos signos de la segunda línea, NEI, no obstante estar
separados de la palabra anterior por línea vertical de tres puntos, los
hemos considerado como integrantes de ésta a la vista de los otros
DURANE que aparecen en estos plomos. Caso semejante lo tenemos,
por ejemplo, en un grafito sobre fondo de cuenco campaniense proce-
dente de Perpignan en el que se lee U ~ T I S:EN, interpretando el profe-
sor Lafon que los puntos están para indicar que los dos últimos signos
constituyen un elemento morfológico (3).
Contrariamente, el vocablo final de la tercera línea, ARICAR-
BINWLIGISE, debe considerarse compuesto de dos elementos, ARI-
CAR,que encontramos aislado entre puntos en la línea primera, y
BINWLIGISE. Ello nos hace dudar que las líneas verticales de puntos
sean siempre indicio de separación de palabras, duda que ya expusi-
mos en anterior ocasión (4).
Hemos contabilizado 269 signos pero si se tiene en cuenta que el
ángulo inferior derecho está roto y falta, cuanto menos, un signo, el
total debió ser de 270. El texto, a excepción de la letra desaparecida,
está completo, como lo prueban el final de la cuarta línea, IU- y el co-
mienzo de la quinta, -NSTIR, que forman la tan conocida palabra
IUNSTIR.
La lectura que damos es la siguiente:

Línea 1 . a . - ~ - R r ~: BO-DO-DA-S: BI-TE-BA-GI-R-S-BA-N-


E : BA-R-E-N-W-L-1-GI : A-N-TI-N-W-L-I-R-DU-R-
A-N-E : A-R-1-CA-R: S-E-KE-N.
Línea 2.a.-I-U-S-U : A-TI-L-E-BE-1-U : L-A-U-R-I-S-KE-R-GA-
TE : BA-N-W-L-1-R-BA-1-DU-R-A-N-E : CA-I-S-A-
N-W-L-1-R-BA-1-DU-R-A : N-E-1

(3) R. LAFON: ((Inscriptions en caracteres iberes de Perpignan.)) Revue International


d'onomastique, aiío 17, número 1. París, 1965, pág. 2.
(4) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 87, llamada 60.
66 D. FLETCHER

Línea 3 . a . - ~ ~ - ~ - ~ - : ~GU-DU-R
- ~ - ~ - :~BI-TE-R-O-KE-TE-
- ~
TI-N-E : E-R-A-TI-A-R-E : GO-GO-R : TA-U-E-
BA-R-TI-A-TE : A-R-1-CA-R-BI-N-W-L-1-GI-S-E :
Línea 4..a.-I-U-N-S-TI-R-L-A-CU : BO-DO-DA-S-E-A-1: S-E-L-
KE-A-1-BA-R-DU-N-E-A-1 : U-N-1-BE-1-KE-A-1 : A-
N-E-R-A-1 : U-N-1-BE-1-KE-A-1 : 1-U
Línea 5.".-N-S-TI-R-L-A-CU : U-S-KE-1-KE : BO-DO-DI-
GI : KE-1-E-TI-S-1-A-TE-N-S-E : U-S-TA-L-A-R-I-
CA-U-N-E : BA-N-W-1-R-E-S-U ...
Línea Gma.-L-U : BI-TI-R-O-KE-BE-TE-N-S-E : U-S-KE-A-N-E-
R-L-A-TI

La distribución de signos es:

Como sucede con los plomos de Castellón, Los Villares, Pico de los
Ajos y otros muchos textos, tampoco aquí se utilizan los signos BU y
M.
A continuación hacemos algunos comentarios sobre el léxico de
este plomo.

Son las tres primeras letras del plomo; en realidad, parecen la


parte final de un vocablo que hubiera estado escrito al dorso, pero no
es así.
En este mismo plomo tenemos TAILINIRE (palabra núm. 17); en
Tivissa, BATEIRE ; en Liria IX, BASSUMIWTINIRE ; en el plomo de Li-
ria (lectura de Gómez Moreno), IRA; en Pico de los Ajos 11-B-17,
I ~ N .
En vasco IRE = ((tuyo)).
ORLEYL 67

Esta palabra aparece varias veces, pero con diferentes finales:

ORLEYL V-2 ......... BODO - DAS


ORLEYL V-27 . . . . . . . . BODO - DAS - EA1
ORLEYL V-36 ........ BODO - D I - GI
ORLEYL VI-11 . . . . . . . BODO - DAS - EIKE
ORLEYL VII-A-7 . . . . . . BODO - DAS - EA1
ORLEYL VII-A-16.. ... BODO - DAS - TE

Como se ve por la anterior relación, este nombre, que no hemos


sabido localizar en ningún otro texto ibérico, se encuentra en estos
tres plomos, lo que nos sugiere la posibilidad de que pudiera referirse
al incinerado, recordándonos el BUDARE citado por Livio (33, 44,4),
así como el BODILCOS de las monedas.
El primer segmento, BODO, tal vez pudiera relacionarse con el
preindoeuropeo BODOS/BODIO (5).
Los profesores Navascués y Tovar mencionan al dios BODO, ha-
ciendo hincapié en que ((la inmensa mayoría de los nombres divinos
del oeste de la península son adjetivos y muchas veces aluden a la si-
tuación geográfica del centro de su culto))(6).A su vez, Palomar Lape-
sa opina que BODDI, BODILCOS, BODO, parecen representaciones de
la raíz'BHOUDH1 = Victoria, siendo frecuentes BOUTIUS-BOUTIA en
Lusitania, aunque también hay hallazgos en otras regiones célticas de
la península. Albertos escribe a este respecto: ((Casitodos son nombres
de cántabros. Estos nombres parecen extraños a la Celtiberia))(7).Pa-
r a el profesor Solá Solé, BODO sería feno-púnico, encontrándolo en la
base de una vasija campaniense de Puig des Molins; también un BO-

(5) G. ALESSIO: (a'inquadramento di Bodincus e Padus nel Lessico mediterraneo.)) Ri-


vista di Studi Liguri, XV, 314. Bodighera, 1949, ptíg. 223.
S. BARBERINI: ((11significato degli antichi nomi del fiume Po.» Sanpierdarena, 1967. Bo-
dinco sería el nombre del río Po; la raíz sena Bodo + Enco.
(6) A. TOVAR y J. M. NAVASCUES: ((Algunasconsideraciones sobre los nombres de di-
vinidades del oeste peninsular.)) Miscelánea de Filología, Literatura e Historia Cultural a la
memoria de Francisco Adolfo Coelho, 11. Lisboa, 1950, phgs. 178-191.
(7) M. PALOMAR LAPESA: ((Antroponimia prerromana.)) Enciclopedia Lingüística His-
pana, 1. Madrid, 1960, pág. 354.
M. L ALBERTOS FIRMAT: «La onomhstica de la Ce1tiberia.n Actas del 11 Coloquio sobre
lenguas y culturas prerromanas de la Península Ibérica (Tübingen, 17119, junio de 1976). Sa-
lamanca, 1979, pág. 139. No obstante véase lo dicho por S. MARINER: «Botorrita, topóni-
mo prelatino.)) Actas I.C.L., y C.P. de la P.IB. (Tübingen, 27131-5-1974). Salamanca, 1976,
págs. 49-55.
68 D. FLETCHER

DON, documentado en Arjonilla (Jaén),debe relacionarse con el feno-


púnico,BODO, así como el BODO de las monedas de Lascuta (8).
Según el profesor Untermann el centro de BOD- parece estar en
Asturias y su semejanza con BODILCOS y BODON puede ser casual,
pues estos últimos aparecen en un ambiente, totalmente distinto, de
nombres ibéricos; con posterioridad vuelve sobre el tema al referirse
al BODILCOS de las monedas de Obulco (9).
~n el plomo de Castellón tenemos BODUEI y en Enserune BODUR.
Como nombres de pueblo tenemos BODON (Salamanca), BODONAL
DE LA SIERRA (Badajoz);en Galicia BODONAL es terreno montuoso a
propósito para el pasto de BODES (machos cabríos). Ello nos hace
pensar en la posibilidad de relacionar BODO, divinidad, con BODE,
macho cabrío, y referirse aquel a un dios de la fecundidad. En la In-
dia BOD es una divinidad de la fecundidad.
Con respecto a los elementos sufijales nos referiremos ahora ex-
clusivamente al DASITAS del vocablo que estamos reseñando. Dispo-
nemos de múltiples ejemplos, unas veces con S y otras con S; ILDU-
TAS y BAISETAS,en Sinarcas; LACUTAS y SUISEBARTAS, en Ciga-
rralejo; en el plomo de Liria, EREBAUSITIRTAS; BASTUGITAS en la
Turma Salluitana. En territorio propiamente celtibérico, en las mone-
das: ICORTAS, ARECORATAS, UARATAS,y en Peñalba de Villastar,
BARTAS. Pero no sólo aparece como elemento sufijal sino que tam-
bién lo hallamos al comienzo de palabra, como en TASBARIGIBAS de
Azaila, etc.
Y terminamos este comentario sobre BODODAS con la siguiente
observación:

ORLEYL V, 27, 28 y 29 BODODASEAI SELKEAI BARDUNEAI


ORLEYL VII-A, 7, 8 y 9 BODODASEAI SELKEAI BARDONEAI

es decir, ambos textos con la misma secuencia de vocablos, con la so-


la excepción de la alternancia de U10 en el último de ellos, debido, po-
siblemente, a la manera de pronunciar cada uno de los escribas, ya
que los textos de estos tres plomos son de tres manos diferentes.

(8) J. M. SOLA SOLE: (¿Ensayos de antroponimia feno-púnica de la Hispania Antigua.))


Rivista degli Studi Orientali, vol. XLII. Roma, 1967, págs. 307-308.
(9) J. UN~ERMANN: «Elementos de un atlas antroponímico de la Hispania Antigua.))
Madrid, 1965, págs. 72-73, mapa 18.
J. UNTERMANN: ~MonumentaLinguarum Hispanicarum.)) Wiesbaden, 1975, pág. 337.
El primer segmento, BITEBAGIRS,podría tener sus paralelos en
el BITEBAGIS del plomo de ~ i r i apero,
; a su vez, este primer segmento
podría subdividirse en BITEBA - GIRS o BITE - BAGIRS,favorecida
aquella posibilidad por el BITIIBA de Liria LXXV. No obstante, nos
parece más apropiado que sea BITE, a la vista de los BITNBITI estu-
diados en Villares VI-9 (1O), donde señalábamos la alternancia BI-
TENDITAN de El Solaig; BITENIBITIN de Liria y, ahora, añadimos
las de las palabras 3, 19 y 41 del plomo que estamos estudiando.
Para -GIRS- tenemos paralelos en Tivissa, GIRSTO; Ampurias,
TIGIRSACAR;OLORTIGIRS y TIGIRSENI, de Sagunto; GURS, de Se-
rreta 1, etc., unas veces con RS y otras con RS o RS.
-BANE aparece al final de vocablo, tal en este caso o como, por
ejemplo, el BASBAKE de Liria LV, y también al comienzo, como en el
BANEBAR de Liria LXXIX; BANEN, de la lápida llamada de Valencia;
BANEGIS, de Sagunto, etc.
En cuanto a -NE, que se repite varias veces en estos plomos, lo
encontramos en otros textos, como en el TATEIARICANE de Pech Ma-
ho, etc.

Vocablo encuadrado entre líneas verticales de puntos (cuatro y


tres, respectivamente).
BAR- está en el comienzo de múltiples palabras ibéricas; en Pico
de los Ajos 111-B-1.8 ( 1 1), reseñábamos algunos vocablos con el co-
mienzo BAR-; ahora añadimos el BARBINKE de Villares V I y el BAR-
BINKEAI de Orleyl VII; BARBORBA y BARTAR,de Azaila, etc.
Otro segmento, -WLI- lo consideramos como una nueva combi-
nación del signo Y (12). añadiéndola a las ya conocidas y,v y y ip .

ORLEYL V-4 . . . . . . . . . BAREN - WLI - GI


ORLEYL V-5 . . . . . . . . . ANTIN - WLI - R
ORLEYL V-1 1 . . . . . . . . BAN - WLI - R
ORLEYL V-14 . . . . . . . . CAISAN - WLI - R
( 10) D. FLETCHER VALLS: «Villares VI. Nuevo plomo ibérico escrito.))Departamento de
Historia Antigua. Varia 1. Valencia, 1979, págs. 191-204.
( 1 1) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 82.
(12) D. FLETCHER VALLS: (tdDe nuevo sobre el signo ibérico Y .N Departamento de
Historia Antigua. Baria 1. Valencia, 1979, págs. 183- 189.
Recientemente, J. SILES: «La inscripción ibérica de la Peña de las Majadas (El Toro, Cas-
tellón).))Boletín de la Sociedad Castellonense de Cultura LVI, cuaderno LI. Castellón de la Pla-
na 1980, págs. 171-189, propone la identificación del signo Y con el sonido NA.
70 D. FLETCHER

ORLEYL V-Z4 . . . . . . . . BIN - WLI - GI - SE


ORLEYL V-40 . . . . . . . . BAN - W I - R -ESU...
ORLEYL VII-A-23 . . . . BORARN - WL[I - R]
ORLEYL VII-B-4.. . . . . BASERN - WL - BE ...

Ante la reiterada aparición de la N precediendo a y en todos estos


ejemplos, habría que suponer que la combinación, en realidad, es -
NWLI-, pero los comienzos en ANTIN-, BAN- y BIN- en otros tex-
tos, nos dificulta esta posibilidad. Nos queda la duda si en V-40 al es-
criba se le olvidó la L y si en VII-A-23 es BORARN o BORARI, puesto
que en Pico de los Ajos 11-A-23 tenemos BORARICU, por lo que no
sería difícil que, como ya decíamos al hablar de Pico de los Ajos III-B-
18, [BA]RTIBANBEN, el escriba hubiera olvidado el trazo distintivo
de la 1, quedando el signo en N.
El GI/KI final está muy extendido; ERTOIGI, de San Antonio de
Bechi; ARABAGI,de Villares V; INEWUGI, de Villares VI; UCIATENS-
GI, de Orleyl 11; BIURTIGI, de Orleyl 111; BODODIGI, de Orleyl V;
ASARUNGI, de Pico de los Ajos 1-D-22, etc. Ignoramos si tendrá el
mismo significado que el sufijo vasco GIIKI.

Forma un todo con el vocablo que sigue, pero lo desglosamos, da-


do que el segundo elemento se repite otras cinco veces sin que le pre-
ceda el que aquí reseñamos.
El último signo -R, se grabó como un DU, que es la sílaba por la
que comienza el segmento siguiente. Sin duda, el escriba al percatarse
del olvido de la R le añadió un trazo vertical exterior transformando
9
el A (DU)en una (R) bastante chocante (Lám. XVIII, A). Lo expues-
to queda probado, en primer lugar porque ya hemos visto que a la
combinación -WLI- sigue R ; luego, porque la macrofotografía nos
muestra que el trazo vertical está hecho en do3 veces, uno interior,
que corresponde al DU y otro exterior para transformarlo en R, y fi-
nalmente, porque sigue otra palabra comenzando por DU- que pudo
ser la causa de la confusión del grabador.
ANTIN- está en el ANTINUE de Cigarralejo; ATINBELAUR,de
Tarragona; ATINWR, de Enserune, etc.
-WLIR- ya se reseñó en el número anterior.
ORLEYL 71

Finales en -LIR los hallamos en ETESILIR y BURANALIR de El


Solaig (13)y en -IR, en Pech Maho, CULESIR,LEISIR, LEREUTINIR,
etc.

Ya hemos indicado que formaba un todo con la palabra anterior,


pero que la hemos desglosado para estudiarla independientemente
por considerarla con personalidad propia, según el siguiente cuadro
nos muestra:

ORLEYL V-6 DURANE


ORLEYL V-13 DURANE
ORLEYL V-16 DURANE - 1
ORLEYL VI-15 [DU]RANE
ORLEYL VII-A-27 DURANE
ORLEYL VII-A-32 DURANE

Paralelos serían DURABANU de Ampurias; DURANCAIE, de Ouri-


que; ARTIDURACUNAN, de Cigarralejo; SESKERSDURAN, de Serreta
1, etc., todo lo cual nos hace pensar en una raíz DURA-, acompañada
en nuestro caso por un final -NE que tanto se prodiga en estos plo-
mos.
Destacamos las siguientes correlaciones en las que aparece DU-
RANE:

ORLEYL V- 12 y 13 ....... BAI ....... DURANE


ORLEYL V- 15 y 16 ....... BAI ....... DURANE
ORLEYL VII-A-25,26 y 27 .... CALAISE .... BACARA ..... DURANE
ORLEYL VII-A-30, 3 1 y 32 .... [CALAISIE .... BACARA .... DURANE

Palabra delimitada por puntos. Vuelve a encontrarse bajo el nú-


mero 23, pero formando un todo con otra palabra, y también en Or-
ley1 VII-A-2 1, asimismo, unida al vocablo siguiente.

(13) Con respecto a Buranalir del plomo de El Solaig, publicado por D. FLETCHER
VALLS y N. MESADO OLIVER: «El poblado ibérico de El Solaig.))Trabajos Varios del S.I.P.,
número 33. Valencia, 1967, hemos de hacer la observación, a la vista de estos -WLI% de
Orleyl, que el signo que entonces interpretábamos como A pudiera ser Y, dificultando su lec-
tura la rotura del borde del plomo.
72 D. FLETCHER

En Villares V está ARACARER; en San Antonio de Bechi, ARICA-


LERCA; en Pico de los Ajos 11-B-16, ARECA y en 111-A-2, ARICU. Pue-
de postularse, pues, un elemento de base ARNAREIARI como ya ex-
pusimos en otra oportunidad (14.).
Finales en -CAR los tenemos en Pech Maho, por ejemplo, LECAR,
etc.
En vasco ARIGARI = ((admirable)).ARIKA = ((apedreamiento)).
ARIKARI = ((apedreador)).

Los cuatro primeros signos constituyen el final de la primera línea


y los otros cuatro el comienzo de la segunda. Al no existir puntos de
separación al final de la línea, como sucede con la tercera, hemos su-
puesto los ocho signos como constitutivos de una sola palabra en la
que señalaríamos dos elementos componentes, SEKEN y IUSU.
Finales en -SU los referenciábamos al estudiar el ALATESU de Pi-
co de los Ajos 1-D-35,añadiendo ahora el CUTIDUCUSU de Pico de los
Ajos 111-A-8, encontrándose unas veces con S y otras con S.

Es la primera palabra de la zona delimitada, de la que hicimos re-


ferencia al comienzo de este capítulo. El total de palabras encerradas
en el recuadro es de once (dieciséis en nuestro desglose), con 98 sig-
nos.
Disponemos de paralelos en el AITILERABE de Abengibre, con la
típica diptongación de aquellos escritos, como ya señalábamos en Vi-
llares VI-20 al comparar ADURTE con el AIDURTEN del citado Aben-
gibre (15); en el ATIL de Pech Maho, etc.
Los finales en -1U los hallamos en el cercano plomo de Castellón
ECARIU, ADUNIU, COSOIU,BORBORONIU, y en Pech Maho, SIRIU.

Aunque en el texto constituye un solo vocablo, a nuestro juicio es-


tá integrado por tres claros componentes: LAUR - ISKER - GATE.

(14) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 63.


(15) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 2 4 y op. cit. nota 10, pág. 202.
ORLEYL 73

Sobre LAUR ya escribimos ampliamente al estudiar los plomos de


Yátova, donde hicimos referencia a este LAURISKERGATE bajo el nú-
mero 9 de Orleyl VI pero que ahora, al remodelar su estudio, le hemos
asignado el número 10, siendo éste uno de los vocablos que aducía-
mos para poner en duda la división L-AUR,frente a nuestra lectura
LAUR (16).
-ISKER es muy conocido por otros textos de los que se pueden
aducir múltiples paralelos: ISKERATIN de Obulco; SACARISCER, de
Serreta 1; ISCAR y SACARISKER del plomo de Liria; SACALISKER de
Cástulo; SACARBISCAR, de La Bastida; AIUNESKER, de Azaila; CAR-
BANISKER,en cerámica de Sagunto; LEISKER, sobre piedra, tam-
bién en Sagunto; ISKERIABE del Llano de la Consolación; ISKERBE-
LES de Ampurias, etc. Para Untermann es un antropónimo que sola-
mente aparece en el área ibérica. Con respecto a su significado, en Vi-
llares VI- l , dábamos a conocer diversas opiniones ( 17).
El final -GATE está en Orleyl 1, -BEGATE; en Pico de los Ajos 11
B- 19, BIEIGATE. En Villares VI y Pico de los Ajos 1-C-11, hicimos re-
ferencia a la posible lectura de -TE en lugar de -BE en los finales de
La Bastida, apoyándonos, entre otros testimonios, en el -GATE que
ahora comentamos (18).

Forma un todo con los siete signos que siguen, pero para su estu-
dio dividimos el coqjunto en BAN - WLIR - BAI - D U ~ N Eapoyán-
,
donos para el primer segmento en su réplica, que encontraremos más
adelante (núm. 40), y que mencionaremos al referirnos al número 4-,
en donde también reseñábamos la combinación -WLIR.
BANWLIR,tendría además, sus paralelos en Liria X, BAINWBAR;
Liria LXXIX, BANEBAR y Liria LXXX, BANIWBAR.

Es frecuente en comienzo de palabra; aparece algunas veces en


interior de vocablo, pero no así al final del que sólo recordamos el TU-

(16) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 17 y SS.


(17) M. GOMEZ MORENO: «Misceláneas. Escritura ibérica y su lenguaje. Suplemento
de epigrafía ibérica.)) Madrid, 1948, pág. 29.
UNTERMANN, op. cit. nota 9 («Elementos...»),pág. 117.
J. SILES: ((Léxico de las inscripciones ibéricas de Sagunto.)) Saguntum, 12. Valencia,
1977, págs. 169-170.
FLETCHER, op. cit. nota 10, pág. 196.
(18) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 24.
74 D. FLETCHER

RABAI de Serreta 1( 19).Por dicha razón no lo hemos considerado co-


mo final del vocablo anterior, siendo más atrayente unirlo al siguiente
y leyendo BAIDURANE,tal como lo reseñamos en Pico de los Ajos I-
D-58, y que nos aproximaría al vasco BAITURA = ((prenda)),((hipote-
ca», (préstamo)).
Sin embargo, hemos de tener en cuenta que en los demás ejemplos
de DURANE,a excepción del número 16, no vuelve a precederle BAI;
además, éste nos recuerda el afirmativo vasco BAI, así como los dos
BAI (núms. 12 y 15) de este plomo tienen también su paralelo vasco
(((tanto... como))).Todo ello nos inclina a considerarlo con personali-
dad propia. En Liria LXXIV, tenemos BAI ...; en Enserune, BAILA o
BAICAR. En Tivissa, BAICAR SOGIN BAICAR, con igual duplicación
que en nuestro plomo.

Ya hemos hablado de este vocablo en los números 6 y 12, donde


destacábamos la repetición de las combinaciones BAI DURANEDAI
DURANE y CALAISE BACARA DURANE/[CALAISI E BACARA DURA-
NE.

Forma, con las palabras 15 y 16, un conjunto de 17 signos, encua-


drados entre una línea vertical de puntos y el final de la línea segun-
da. Para su estudio la desglosamos en CAISAN - WLIR.
CAISAN se paraleliza con el CAISCAR y CAISUR del plomo de Li-
ria; CAISCATA y CAISESA, de las monedas; BALCARCAIS, de Azaila,
etc.
De -WLIRhicimos mención en el número 4.

Ya mencionado bajo el número 12r

Una línea vertical de puntos separa DURA del final NEI; ello con-
firmaría lo expuesto en el número 6, es decir, la existencia de una raíz
DURA,acompañada ahora por -NEI, indicativo, posiblemente, de un
caso de declinación; como opina Tovar, -E1 es posible expresión de

(19) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 34.


nominativo del plural. Los puntos de separación debieron marcarse
por el escriba pensando en un sustantivo independiente de su sufijo,
tal como opinaba Lafon de URTIS : EN y dijimos al comienzo de este
capítulo (20). La existencia de otros DURANE nos autoriza ahora a
leer DURANEI y no considerar NEI como palabra independiente o co-
mo comienzo de la siguiente.
Finales en -NEI se señalan en el bronce de Botorrita y los en -E1
son conocidos: LAKEISEI, en Pico de los Ajos 11-B- 18; BALKEBEREI,
en Liria LXXVI, etc.

Acabamos de exponer las razones por las que, a pesar de los pun-
tos de separación, hemos unido los tres últimos signos de la línea se-
gunda (NEI) con la palabra anterior y no a la siguiente, es decir, la
primera de la línea tercera. De hacerlo así hubiera resultado NEITAI-
LINIRE, con paralelos en NEITIN y NEITEKERU de Ullastret. Pero,
por lo antes dicho, consideramos únicamente TAILINIRE, para el que
no hemos sabido hallar paralelos.
El final -IRE aparece como vocablo independiente en la primera
palabra de este plomo. Allí citábamos otros IREIIRA.

El letrero de Liria XII fue leído por don Pío Beltrán Villagrasa GU-
DUA DEISDEA y traducido GUDUA = «el combate)),«la guerra)), y
DEISDEA = ((llamada));es decir que, según dicho autor, significaría
((llamada a la guerra))o ((gritode guerra))( 2 l ) ,lo que se ajusta a la de-
coración del vaso, en el cual se representa una escena de combate. Es-
ta interpretación motivó larga controversia, llegándose a negar la an-
tigüedad de la palabra GUDU. Ahora, el GUDUR que aquí reseñamos
viene a unirse al citado de Liria XII y al Gudur de Liria XXXII, así co-
mo al GUDUI de Azaila y el GUDUBOIKE de Orleyl VII-B-6, siendo po-
sible que todos ellos puedan relacionarse con el vaso GUDU = ((com-
bate)), ((guerra)).Además, a la vista del GUDUR de Liria XXXII y este
de Orleyl V, cabe pensar muy fundadamente que en Liria XII en lugar

(20) LAFON, op. cit. nota 3.


(21) P. BELTRAN VILLAGRASA: «Nota sobre el estudio de las inscripciones ibéricas en
cerámica de San Miguel de Liria.)) La labor del Servicio de Investigación Prehistórica y su
Museo en el pasado año de 1934. Valencia, 1935, págs. 57-58 y 62-63.
de GUDUA habría que leer GUDUR, ya que el últímo signo aunque es-
crito P (A),bien pudiera ser una 4 (R)escrita en sentido contrario,
posibilidad confirmada en Liria LXX, donde se lee KELTEGIAR no
obstante estar escrito el último signo como una P (A). La confusión
entre A y R ya fue señalada por Gómez Moreno quien escribió' a este
respecto: ((Nóteseque si en lo tartesio la dirección de los trazos latera-
les obedece al sentido de la escritura en lo ibérico resulta ello inde-
pendiente, salvo para el P que es A y el Q que es R, sin que falten
ejemplos de confusión entre ellos))(22).De aceptarse nuestra sugeren-
cia quedaría zanjada la cuestión de la antigüedad del artículo vasco
A, puesto que en Liria XII no sería A sino R la letra final y se leería
GUDUR, como en Orleyl V.
De todos modos, leída de una u otra forma Liria XII, todos estos
GUDUR creemos que, como opinó Beltrán Villagrasa, pueden relacio-
narse con el vasco GUDU. Si en el citado vaso Liria XII, se representa
una escena de combate y aparece la palabra GUDUR, se hace difícil
no aceptar la relación entre la escena, la inscripción y el vasco GUDU.

V-I9.-BITEROKETETINE
La consideramos compuesta por BITEROKE - TETINE.
BITEROKE lo volveremos a encontrar en el número 41, BITIRO-
KE, con la alternancia BITEDITI de la que hablamos en Villares VI-9
y 12; en Orleyl 1 tenemos BITER y ROKETAN.
-TETINE tiene su réplica en Orleyl VII-B-2, ITIKEREUTETI y en
Orleyl VII-B-7, BITEROKETINE, es decir, la misma palabra que esta-
mos estudiando pero con la desaparición de -TE-. En Azaila, BAS-
TARTINE; en Liria XL, 15... TATIN; en Serreta, 1, BIDUDEDIN y
SESDIRGADEDIN; en Obulco, ISKERATIN y DUIDUIBORTETIN; en
Pico de los Ajos 1-A-2, LADUNEITIN ; en 1-B-3,... RETINE ; en 1-A-7,
TORETIN; en 111-A-4, BITARS-TETI; en 11-A-31, ORTINE; en Santa
Perpétua, ORTIN, etc., etc., quedando suficientemente claro que TE-
TIN/TETINE/TINE/TIN realizan una función sufijal, ignorando si pu-
dieran tener alguna relación con TAUTINITEUTIN.
Terminamos este apartado sesalando las siguientes correlacio-
nes :
.
ORLEYL V 18 y 19 . . . . . . . GUDUR BITEROKETETINE
.
ORLEYL VII-B 6 y 7 . . . . . . GUDUBOIKE BITEROKETINE

(22) GOMEZ MORENO, op. cit. nota 17, pág. 25.


La consideramos constituida por dos segmentos: ERATI - ARE.
EL final del texto de este plomo es ERLATI, que parece pueda re-
lacionarse con este ERATI.
Los finales en -ATI están en Villares VI-6, TARATI; plomo de Li-
ria, BOIWTARATI, etc.
-ARE también es conocido. En Pico de los Ajos 11-A-28, ETARE,
etc.
En vasco ERATI = ((iracuendo.))ARE = ((terquedad)).

Ignoramos si el trazo vertical que aparece en el primero de los dos


GO tiene la misión de diferenciar el timbre de ambos (Lám. XVIII, 13).
En estos plomos no vuelve a aparecer este signo y, por otro lado, la di-
ficultad de aplicar en la práctica el valor de sorda o sonora a las va-
riantes de un mismo signo, nos impiden determinarnos por una u otra
valoración, lo que ya expusimos en Villares VI (23).
En el plomo de Liria leímos en su día (24)BOGO, pero a la vista de
este GOGOR que ahora estudiamos, queda la posibilidad de que allí
tuviéramos que leer GOGO, como el GIGOGOR de Pech Maho, aunque
en Enserune encontremos también ABOCO y en Ullastret GOBO.
En vasco GOGOR = ((cruel)),((duro)),((violento)).

V-22.- TAUEBARTIATE
Al hablar del TAUTIN de El Solaig (25)dábamos una relación de
los nombres comenzando por TAUITEU y suponíamos, con Albertos
Firmat, que se trataba de un radical indoeuropeo con significado de
«pueblo»,((gente)),relacionándolo con TAUTALOS y TAUTINNUS. Con
posterioridad, volvimos sobre el particular al estudiar el grafito de
Cala VII, donde ofrecíamos otra relación de vocablos con este comien-
zo (26)y, finalmente, hemos hablado del tema al estudiar el TAUTIN
y TAUTINCORS de Pico de los Ajos (27). Todos estos ejemplos nos se-
ñalan un TAU- para el comienzo de la palabra que estudiamos.

(23) FLETCHER. op. cit. nota 10, pág. 193.


(24) D. FLETCHER VALLS: ((Inscripcionesibéricas del Museo de Prehistoria de Valen-
cia.)) Estudios Ibéricos, 2. Valencia, 1953, pág. 44.
125) D. FLETCHER y MESADO, op. cit. nota 13, pág. 49.
(26) D. FLETCHER VALLS: ((CalaVII. Nueva inscripción ibérica de Benidorm.))Archivo
Español de Arqueología, 42, números 119-120. Madrid, 1969, pág. 39.
(27) FLETCHER, op. cit. nota 2, págs. 25 y 83.
78 D. FLETCHER

-EBAR- se paraleliza con el EBARER de El Cigarralejo.


-TIATE, que consideramos compuesto por TIA - TE. Acabamos
de ver un final -TIARE en la palabra número 20, acreditativo del po-
sible TIA-. Para el -TE recordamos los finales en -TIRTE, tales co-
mo el BASTESILTIRTE de Liria LVII y el LACUNWILTIRTE de Orleyl
VII-B-15, tan próximos a nuestro -TIATE. En Pico de los Ajos I-D-
2 1, aparece BALSTIBATE, que también pudiera relacionarse con
-TIATE, si aceptáramos la posibilidad de la pérdida de la oclusiva; co-
mo en Liria IX SALDUTIBAITE; en Enserune, TIBATECI. En Pico
los Ajos 11-B-8 y 111-B-16 aparece con diptongación, TIAITECU y
TIAITEDU, respectivamente. Finalmente, en Orleyl VII-A-4-0, encon-
tramos este segmento en KEITIATELU y Orleyl VII-A-37, nos ofrece
BATARATITE que parece una transposición de la última A.

Atendiendo al ARICAR de la palabra 7, donde dábamos paralelos,


la hemos desglosado del resto de la palabra, con la que pudo formar
un único vocablo, tal como vemos en Orleyl VII-A-2 1 y 22, ARICAR-
BINISAI.

V-24.-BINWLIGISE
Sigue a la palabra anterior sin separación, desglosándolas por las
razones que dimos en el número 7.
Puede segmentarse en BIN - WLI - GISE.
BIN- aparece al comienzo de palabra, como en el BINISAI de Or-
ley1 VII-A-22; el ISBINAIBIN y BINIKE de Serreta 1;BIN, de Ampu-
rias; BINEN de Azaila; BINUSARIGAN (lectura dudosa) de La Basti-
da; BINTISUSEI, de Botorrita, etc. Pero también aparece al final:
NANBIN, de La Bastida; BABIN, de Cigarralejo; ABULUSBIN, de Bo-
torrita, etc., y asimismo en medio de palabra, como en BARBINKE,de
Villares VI, etc.
Para la combinación -WLI- puede verse lo dicho en el número 4.
-GISE tiene sus paralelos en ANGISA de La Granjuela; BASTOGI-
SA, Ampurias, etc. En el número 4 vimos a -WLI- acompafiando a
-GI; ahora le acompaña, además -SE, sufijo que encontramos en
otras palabras de este plomo (núms. 37 y 4-l),en el VI1 (A-24 y 25), en
el plomo de Castellón, BANIECARSE y BERICARSENSE; en Liria
LXXIII, TEWBARESE;en Pech Maho, ARSE, LORSURASE,IEBASE,
etc., etc.
ORLEYL 79

Los dos primeros signos, IU, son el final de l a cuarta línea y el res-
to, -NSTIR, el comienzo d e l a quinta, con lo que queda probado que el
plomo está completo.
Forma u n todo con LACU, pero las estudiamos por separado, por
tener ambas personalidad propia.
En los tres plomos aparece IUNSTIR, con variantes, hasta 14-ve-
ces, ascendiendo el total d e los que tenemos anotados a 26, d e acuer-
do con l a siguiente relación:
SERRETA 1 . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
LIRIA IX . . . . . . . . . . . . . . . . . IUMSTIR
LIRIAXXVI . . . . . . . . . . . . . . UNS IR
LIRIA XXXV . . . . . . . . . . . . . . IUMS [TI&
VILLARES VI-2 . . . . . . . . . . . IU STIR
VILLARES VI- 19 . . . . . . . . . . IU STIR
SOLAIG 1 . . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
SOLAIG 8 . . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
SOLAIG 1 3 . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL V-25 . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL V-33 . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VI- 1 . . . . . . . . . . . . . IU STIR
ORLEYL VI-7 . . . . . . . . . . . . . IU STIR
ORLEYL VI-9 . . . . . . . . . . . . . IU STIR
ORLEYL VI- 10 . . . . . . . . . . . . [IU SITIR
ORLEYL VI- 1 3 . . . . . . . . . . . . IU STIR
ORLEYL VII-A- 1 . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-A-5 . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-A-33 . . . . . . . . . IUNS IR
ORLEYL VII-B-9 . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 1 1 . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 14 . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 1 9 . . . . . . . . . IUNSTIR
ALLOZA . . . . . . . . . . . . . . . . . IU S[TIlR
ULLASTRET . . . . . . . . . . . . . . IU[Nl STIR
RUSCINO . . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTI[RIl
A los 19 ejemplos que aportábamos e n anteriores ocasiones (28),
añadimos ahora los siete d e Orleyl VII, lo que nos d a u n total de 26

(28) FLETCHER, op. cit. nota 10,pág. 196.


80 D. FLETCHER

apariciones de IUNSTIR, unas veces escrito con M, otras con N y


otras sin nasal; que se emplea la S o la S, la R o la R, no pudiéndose
atribuir ello ni a diferencias locales ni cronológicas puesto que apare-
cen discrepancias y coincidencias en yacimientos diferentes o en el
mismo. Así, en Liria aparece con M y N; en Orleyl con N o sin ella; en
Liria sin 1ni TI y en Orleyl sin T; en Liria con R y R ; en Solaig con S y
R y en Villares con S y R; etc., variantes que no creemos puedan atri-
buirse a distintas procedencias o cronologías, tal como sugiriera Solá
Solé (29).
La frecuencia de cada variante es:

IUMSTIR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2 veces
IUNSTIR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 14 veces
IUSTIR .......................... 8 veces
IUNSIR . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 veces
UNSIR.. ......................... 1 veces

TOTAL ............................ 26 veces

Territorialmente, estos 26 ejemplos se distribuyen de la siguiente


manera :

Provincia de Alicante . . . . . . . 1
Provincia de Valencia ....... 5
Provincia de Castellón . . . . . . 17 . . . . . . . . . 23
Provincia de Teruel ...................... 1
Provincia de Gerona . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
Ruscino (Francia) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1

TOTAL ............................. 26

Esta distribución geográfica nos muestra que este vocablo se cen-


tra en territorio valenciano.
Al menos en cuatro ocasiones es la primera palabra del texto (Se-
rreta 1, Solaig, Orleyl V I y VII-A), no creyendo que ello sea una mera
coincidencia; tampoco creemos que lo sea el encontrar por cinco ve-
ces la combinación USKEIKE IUNSTIR y otras dos el IUNSTIR ADU-
NE.

(29) J. M. SOLA SOLE:((Assaigd'interpretació d'algunes inscripcions iberiques mitjan-


qant el fenici i punic.)) Oriens Antiquus, VII, 2. Roma, 1968, págs. 233-234.
Con respecto al significado atribuido a esta palabra, hemos dado
amplia referencia en otros estudios, por lo que no volveremos ahora a
repetir las diversas teorías entonces recogidas (30).

En dos ocasiones forma un todo con la palabra IUNSTIR, pero en


ambos casos las reseñamos independientemente por tener ambas su
propia personalidad.
En Orleyl VII-B-15 volvemos a encontrar LACUN. En El Solaig,
BALKELACU; en Liria LXII, IBECOALACU ( 31); en Ampurias, LA-
CUN; en El Cigarralejo, LACUTAS; en Azaila, LACUERCARWI; en San
Antonio de Bechi, LACUGIEKEN; en Alloza, LACUER; en Serreta 1,
LEGUSEGIK; Serreta VI, SACALACUCA; en Alcalá de Xivert, LACUS-
WI; en Pico de los Ajos 111-A- 16, SORLACU; en Pech Maho ...STILA-
CUN (leyendo la palabra 15 del plomo cuarto, a la vista de la foto-
grafía, en lugar de LAKE como hace el autor) (32).
Vemos, pues, que LACU se encuentra en cualquier posición en el
vocablo.
En vasco LAGUN = «acompañante», ((compañero)).

Sus componentes son, a nuestro juicio, BODO - DAS - EAI.


Sobre los dos primeros segmentos hemos hablado en el número 2,
donde citábamos seis BODO, cinco de los cuales llevan como sufijo
DASITAS.El que ahora reseñamos tiene su réplica en Orleyl VII-A-7.
Es de destacar que el sufijo -A1 que aparece ahora por primera vez en
este plomo, se repite a continuación otras cinco veces, no volviendo a
aparecer más en este texto, pero sí dos veces en Orleyl VI y otras 22
en Orleyl VII, lo que da un total de 30 veces. Según Caro Baroja, los fi-
nales en -KEAI -KEAIE, son frecuentes en la región central de España
(33 1, pero hemos de admitir que también lo son en la zona oriental pe-

(30) FLETCHER, op. cit. nota 10, pág. 197.


(31) En la obra citada en la nota 24, pág. 36, leíamos Zbecoalat, con dificultad de inter-
pretación del último signo; ante los ejemplos de El Solaig y de Orleyl, tal vez tuviéramos que
rectificar aquella lectura e interpretar el final como Lacu.
(32) Y SOLIER: (Decouverte d'inscriptions sur plomb en écriture iberique dans un en-
trepot de Pech Maho (Sigean1.a Revue Archeologique de Narbonnaise, XX, 1979, págs. 55-
123.
(33) J. CARO BAROJA: ((Sobreel vocabulario de las inscripciones ibéricas.)) Boletín de
la R. Academia Española, XXV. Madrid, 1946, pág. 199.
82 D. FLETCHER

ninsular, como lo prueba la siguiente relación en la que reseñamos al-


gunos vocablos terminados en -KEAI / -EA1 / -AI, circunscribiéndolos
exclusivamente al ámbito de la región valenciana:

ORLEYL V-27 . . . . . . . . . . . . . . . . . . ..
.
... BODODASEAI
ORLEYL V-28 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . SELKEAI
ORLEYL V-29 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . BARDUNEAI
ORLEYL V-30 ......................... UNIBEIKEAI
ORLEYL V-31 ......................... ANERAI
ORLEYL V-32 ......................... UNIBEIKEAI
ORLEYL VI-3 ......................... NISORBARAI
ORLEYL VI- 17 ........................ ORKEIABARAI
ORLEYL VII-A-3 ....................... BARBINKEAI
ORLEYL VII-A-7 ....................... BOIYODASEAI
ORLEYL VII-A-8.. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . SELKEAI
ORLEYL VII-A-9.. ..................... BARDONEAI
ORLEYL VII-A- 10 ..................... SANIKEAI
ORLEYL VII-A- 12 ..................... AURUN[IBEI]KEAI
ORLEYL VII-A- 13 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ANERAI
ORLEYL VII-A- 14- . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . SANIBEIRAI
ORLEYL VII-A- 15 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . LEITASEAI
ORLEYL VII-A-19 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ISAI
ORLEYL VII-A-SO . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ILDURSAIRSAI
ORLEYL VII-A-22 ..................... BINISAI
ORLEYL VII-A-34- ..................... BELESAGINEAI
ORLEYL VII-A-3 5 ..................... CARESTAREAI
ORLEYL VII-A-38 ..................... USKEIKEAI
ORLEYL VII-A-39 ..................... SIAI
ORLEYL VII-B- 10 ...................... SELGINIUSTAI
ORLEYL VII-B- 1 2 ............ .
... ... BARBIN[KEAII
ORLEYL VII-B- 13 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . USKEIKEAI
ORLEYL VII-B- 1 6 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ATABERAI
ORLEYL VII-B- 1 7 . . . . . . . . . . . .
.. ...... ANWBERAI
SERRETA 1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . TURABAI
SERRETA I . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ISBINAI
SERRETA I . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARNAI
SERRETA 1 ........................... ILDUNIRAENAI
CASTELLON.. .......................... AU~TJNIBEIKEAI
CASTELLON.. ......................... ASTEBEIKEAI
VILLARES v .......................... ETERAI
ORLEYL

LIRIA XL- 15 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . [---IRA1


LAPIDA (ROMANADE REQUENA) . . . . . . . . SOSINAI (34)
De la anterior relación destacamos:

ORLEYL V-27 : BODODASEAI ORLEYL VII-A-7: BODODASEAI


ORLEYL V-28: SELKEAI ORLEYL VII-A-8: SELKEAI
ORLEYL V-2 9 : BARDfTNEAI ORLEYL VII-A-9: BARDONEAI
ORLEYL V-30: UNIBEIKEAI ORLEYL VII-A- 12 : AURUN[IBEI]KEAI
ORLEYL V-31 : ANERAI ORLEYL VII-A- 13: ANERAI

es decir, que en ambos plomos se repite este conjunto de palabras me-


reciendo especial interés V-29 y VII-A-9, BARDUNEAI y BARDO-
NEAI, respectivamente, con la alternancia de U10 que bien pudo res-
ponder a la manera de pronunciar de los escribas., pues como ya indi-
camos en el número 2, estos tres plomos están escritos por distintas
manos.

ORLEYL VI-3 . . . . . . . . . . . . . . . . NISORBARAI


ORLEYL VI- 17 . . . . . . . . . . . . . . . ORKEIABARAI
ORLEYL VII-A-14 . . . . . . . . . . . . SANIBEIRAI
ORLEYL VII-B- 16 . . . . . . . . . . . . . ATABERAI
ORLEYL VII-B- 17 . . . . . . . . . . . . . ANWBERAI

que nos ofrecen la alternancia BARAI / BARAI / BERAI / BEIRAI.

En la relación que hemos dado, hay diez finales en -KEAI; no in-


cluyendo en este cómputo ni VII-A-38 ni VII-B-13, USKEIKEAI, pues
consideramos la primera parte del vocablo como USKEIKE, ya que en
Orleyl V-35, VI-6 y 12 y VII-A4 y 11 y VII-B-18, aparece solamente
USKEIKE. Tal vez pudiera estar compuesto de KE + AI, como vere-
mos en VII-A-3.

(34.) Nombre que, aparte de sus posibles relaciones con el Sosin del que hemos hablado
en otras ocasiones, nos recuerda la ((civitas Sosinestanas citada en el bronce de Contrebia (G.
Fatas: ((Noticia del nuevo bronce de Contrebia.)) Boletín de la R. Academia de la Historia,
CLXXVI, cuaderno 111. Madrid, 1979, págs. 4.21 y ss.
84 D. FLETCHER

Estos finales -KEAI sólo hemos sabido hallarlos en la provincia de


Castellón.

De la relación dada obtenemos los siguientes porcentajes:

Finales en -KEAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 10
Finales en -EA1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 7
Finales en -A1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 9
Finales en -BAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
Finales en -BARAI (y variantes) . . . . . . 5
Finales en -SAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3
Finales en -NAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 2
Finales en -TAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1
TOTAL ......................... 38

Como observación final, señalemos cómo Orleyl V-27 a 32 y Orleyl


VD-A-7 a 10; 12 a 15 y 19 a 2 1, constituyen conjuntos de vocablos con
finales en -AI, quedándonos la duda si ello se debe a que todas estas
palabras están en un mismo caso gramatical; si -A1 es una conjunción
copulativa enclítica, como sugiere el profesor Siles; o si se debe a una
aliteración, como opinaba el profesor Vallejo (35).

Forma con la palabra siguiente un solo vocablo, tanto en este


plomo como en VII-A-8, en que se repite, pero las tratamos separada-
mente en atención al -KEAI que consideramos como final de vocablo.
SEL / SELGI es comienzo bien conocido en ibérico; en Orleyl VII-
B-10, tenemos SELGINIUSTAI; en Pico de los Ajos 11-B-9, SELGI; en
Enserune, SELGITERAR;en Sinarcas, SELDARBAN; en Cabanes SEL-
DARWI, etc.
-KEAI ya se mencionó en el número 27.

(35) J. VALLEJO: ((Exploraciones ibéricas, IV.» Emérita, XXII. Madrid, 1954, pág. 232.
J. SILES, en carta del 23 marzo 1980.
Con la anterior palabra forma un todo delimitado por líneas verti-
cales de puntos, pero por lo ya expuesto, las desglosamos.
BAR- abunda tanto al comienzo como al fin de palabra. En Serre-
ta IV tenemos los dos segmentos, BAR- y DUN- pero unidos en sentido
inverso (ILIDUNBAR; en Liria XXXVIII, BALDUN, con posible cambio
de L a R, como en Liria XXI (36)y Liria LXXVI, BALDUSER,que tam-
bién encontramos en Pico de los Ajos 1-D-5, [BALIDUSER.
-DUN- es segmento bien conocido, apareciendo tanto al comienzo
como al final de palabra; en Villares V, DUNTIBAITE; en Pico de los
Ajos 1-C-6, DUNER; en Sagunto, NEREILDUN;Villares VI, ILDUN;
Orleyl VI-2, ADUNE, etc., etc.
Ya hemos indicado en el número 27 que esta palabra la encontra-
remos en VII-A-9, pero con cambio de U en O, BARDONEAI.

La volveremos a encontrar seguidamente. Sus elementos compo-


nentes podrían ser UN1 - BE1 - KEAI.
UNI- se encuentra en principio de palabra; UNIBELO, de Ullas-
tret; UNIBETIN, de Enserune (leído también USIBETIN);en medio de
vocablo en AIUNIBAISEAKE, de Sagunto; AURUNIBEIKEAI del plo-
mo de Castellón; al final en BALKEUNI de Liria XI, etc., etc.
-BEI- lo acabamos de ver en el plomo de Castellón, donde asimis-
mo encontramos ASTEBEIKEAI ( 37).

ANER lo tenemos en Orleyl VI-8 ; ANERAI en VII-A-13 ; en Serreta


1 encontramos ARNAI.

( 3 6 ) FLETCHER, op. cit. nota 24, pág. 25, leíamos Balcuser, debido a la tosquedad de
los signos; ante la lectura de Liria LXXVI y la de Pico de los Ajos 1-D-5, tal vez fuera más co-
rrecta la lectura BalduSer.
( 3 7 ) ,Teniendo en cuenta los finales en KEAI / KE-AI, que resexiábamos en Orleyl V-27 y
el no haber hallado ningún vocablo que termine en -KEAIE, suponemos que en Astebeikeaie
la E final es repetición de la E por la que comienza la palabra que sigue, Ecaiiu, y considera-
mos que la forma correcta fue Astebeikeai, con final como la otra palabra del mismo plomo
Aui-unibeikeai.
En cuanto a los elementos componentes serían ANER - AI, como
hemos comprobado por el citado ANER del plomo V I y el segundo seg-
mento, por la relación dada en el número 27, a la que ahora podemos
añadir el BACASKETAI de Pech Maho.
Este ANERAI aparece (temparedado))entre los dos UNIBEIKEAI,
números 30 y 32.

Ya reseñado.

Ya comentado en el número 25.

Referenciado en el número 26, donde, como aquí, va unido al an-


terior IUNSTIR.

La encontramos en Orleyl VII-A-38 y VII-B- 13, acompañada de -


AI.
Comienzos por USKE- los tenemos en el USKEAN (o USKEAI) del
número 4-2; con US- está el USTALAIBI, del plomo de Liria; el US-
TAIN, de Puig Castellar. Como paralelos tendríamos el URKESKER,
de Serreta IV; el URKEBAS, de Liria XL-13, etc.
-1KE es final que nos ofrecen Orleyl VII-B-3, BELAIKE; el plomo
de Liria, ABARTARIKE; Serreta 1,BINIKE; Vich, SORIKE; Enserune,
ANETILIKE; Binéfar, ORKEIKE,que nos sugiere una posible variante
de nuestro USKEIKE; Ullastret, COROIKE, etc. En Villares VI1 (inédi-
to) volveremos a encontrar USKE[IKE], que nos confirma la correcta
lectura que dimos al signo L (KE) en Villares V I (38).

(38) D. FLETCHER VALLS: «Cinco inscripciones ibéricas de Los Villares (Caudete de las
Fuentes) (Valencia))).Archivo de Prehistoria Levantina, XV. Valencia, 1978, pág. 199.
FLETCHER, op. cit. nota 10,pág. 192.
Para Urke,véase PALOMAR LAPESA, op. cit. nota 7, pág. 386 y CARO BAROJA, op. cit,
nota 33, pág. 190.
De los doce USKEIKE que tenemos registrados, ocho se encuen-
tran en estos tres plomos y cuatro en Villares VII. En cinco casos sigue
la palabra IUNSTIR, según vemos por la siguiente relación:
ORLEYL VI-6 y 7 . . . . . . . . . USKEIKE . . . . . . . . . . . . . . . . . IUSTIR
ORLEYL VI-1 2 y 13 . . . . . . USKEIKE . . . . . . . . . . . . . . . . . IUSTIR
ORLEYL VII-A-4 y 5 . . . . . . USKEIKE . . . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B-13 y 14- . . . USKEIKEAI . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B-18 . . . . . . . . . USKEIKE . . . . . . . . r. . . . . . . IUNSTIR
y en otro caso (Villares VII, B, 1 y 2, según nuestra lectura) es al con-
trario, IUSTIR USKEIKE.
Esta combinación, repetida seis veces, deberá tenerse en cuenta
al estudiarse el significado de ambos vocablos, en especial el IUNS-
TIR.

Sobre el primer segmento, BODO, hemos hablado en el número 2.


-DIGI 1-TIGI se encuentre en SOSINTIGI, OLONTIGI, ASTIGI,
etc., que nos hacen pensar, para nuestra palabra, en una sufijación
referente a pueblo, tribu, familia, casa, etc., y podría relacionarse con
el TEGI vasco = «lugar», ((casa)).Como comienzo está en TIGIRSA-
CAR, de Ampurias y TIGIRSENI, de Sagunto; TIGIENATIR, de Ense-
rune, etc.
-CI/-GI, como final es abundante; en este mismo plomo (núm. 4-)
BARENWLIGI;en Pico de los Ajos 1-D-22, ASARUNGI;en 11-B-8,SEL-
GI; en Villares V, ARABAGI; en VI-16; INEWUGI; en Enserune, AR-
GI; en Ullastret, A R ~ I N G I ;en San Antonio de Bechi (no de Calaceite
como erroneamente se ha escrito en una reciente publicación), ER-
TOIGI, donde dábamos más paralelos (39). En el interior de palabra
está en el BEDUGINETE de Villares VI- 18, etc.

V-3 7.-KEIETISIA TENSE

Leemos como TE el signo octavo, no obstante el apéndice que sale


del rectángulo, ignorando si se trata de un deslizamiento involuntario
o que el escriba deseó distinguir el timbre de este signo frente a los
otros seis TE en los que no sobresalen del cuadro los trazos internos
(Lám. XIX, A).

(39) FLETCHER y MESADO, op. cit. nota 1, pág. 25.


88 D. FLETCHER

El valor de este signo como TE vendría confirmado por la lectura


del mismo también como TE al final de la primera línea del Plomo de
Ullastret, TER, y por el BITIROKEBETENSE del número 41.
La palabra que ahora reseñamos estaría compuesta, a nuestro jui-
cio, de los siguientes segmentos KEI -ETISIA - TENSE, que a su vez
permiten otros fraccionamientos.
KEI- está en Orleyl VII-A-4-0,KEITIATELU; Ullastret, KEIBOS-
TE^; Enserune, KEILA; Iglesuela del Cid, KEIWI; en el plomo de Li-
ria, KEIRBA; en Pico de los Ajos 11-B-23, KEIBORS, etc.
-ETISIA-, tiene su paralelo más cercano en el próximo Solaig,
ETESILIR.
-TENSE solamente lo hemos identificado en el número 41 de este
plomo, no localizándolo en ningún otro texto ibérico del litoral; su
más próximo paralelo es el BERICARSENSE del plomo de Castellón.
Tal vez pudiera atribuirsele carácter gentilicio. Suponiendo que a este
segmento hubiera que agregársele la A final del segmento anterior, le-
yendo -ATENSE, nos recordaría el ATEN / ATIN, al que Caro Baroja
atribuye carácter étnico.

Forma un todo con la palabra que sigue, pero los consideramos


como elementos independientes teniendo en cuenta el USTALAIBI del
plomo de Liria, que podría considerarse como el mismo vocablo que
ahora reseñamos; el USTARIKE de Pico de los Ajos 11-B-20, y los que
hemos mencionado en el número 35.

V-39.- CAUNE
Comienzos por CAU- los hay en Sinarcas, CAUECAS; Pico de los
Ajos 1-A-5, CAURBAN ; 11-A-5, CAUNISTEAN, etc.
Como final, aparece en Liria XI,BALKEUNI ;Ullastret, BORACAU ;
Turma Salluitana, ELGAUN, etc.
-NE es un sufijo que totalizamos 12 veces en estos plomos. Ignora-
mos si puede atribuírsele el mismo significado que en vasco «casa de».

Es la última palabra de la línea cinco, habiendo desaparecido, por


rotura del plomo, el signo que debió enlazar con los dos primeros sig-
nos de la línea sexta, puesto que éstos no forman parte de la palabra
que sigue, de la que los separa una línea de puntos, y sobre todo por-
que preceden a un vocablo que ya hemos visto bajo el número 19.
Queda, pues, un vacío que parece corresponder a un solo signo, sin
que nos atrevamos a indicar cuál pueda ser.
Leemos, por tanto, BANWIRESU ...LU, con un final que no pode-
mos considerar como corriente, pero que volveremos a encontrar en
Orleyl VII-A-40, KEITIATELU, y que se encuentra en el ABULU, de
Botomita; en el URCAILU, de Obulco, etc. etc.
Al mencionar en el número 4 este vocablo junto con otros en los
que aparece la combinación WLIR, da la impresión de que en este ca-
so se omitió la L, puesto que en los demás ejemplos sí figura. De todos
modos, no olvidamos el BANWIBAE de Liria XL- 15, que podría abo-
gar por una correcta redacción del vocablo que estamos estudiando, a
no ser que también en Liria se hubiera omitido la L, y en Pech Maho,
WIRESTINIR, coincidente en su comienzo con el grupo -WIRES- de
nuestra palabra.
Los elementos componentes del vocablo que estamos comentando
podrían ser BAN - WIR - ESU ...-LU.
BAN- es frecuente; de WLIR / WIR ya hemos hablado en el núme-
ro 4; -EkJ..., lo vemos en Pico de las Ajos 1-D-35, ALATESU; en Gá-
dor, ETESU; Liria 111, SARESU;Ullastret, ERESU, etc. Sobre el final -
LU hemos hecho mención líneas anteriores.

En el número 19, hemos comentado BITEROKETETINE;Su pri-


mer segmento es como el que ahora estudiamos, pero con la alternan-
cia BITE / BITI, de la que allí hablábamos recordando lo dicho en Vi-
llares VI-12 y 15, donde aparecen BITERO y BITIREBOSIN (40).
En el número 37 hemos visto el segundo segmento -TENSE. La
combinación -BETE- la encontramos en Villares VI- 17, ETIBABIRBE-
TE, etc.

Con esta palabra termina el texto de Orleyl V.


Ante los varios USKE- y los finales en -A1 cabría suponer que el es-
criba olvidó el trazo diferenciativo de la 1,quedándole USKEAN en lu-
gar de USKEAI (Lám. XIX, B), error factible, sobre el que hemos insis-

(40) FLETCHER, op. cit. nota 10, págs. 199-201.


90 D. FLETCHER

tido en otras ocasiones (41).Pero, por otro lado, conocemos el final -


KEAN en Villares VI-8, SETALIKEAN. Leemos, pues, USKEANERLA-
TI, desglosándolo en USKE - ANER - LATI, o también USKEAN - ER-
LATI.
Para USKE ya hemos visto múltiples comienzos en estos mismos
plomos.
-ANER-podría relacionarse con Liria XXVI y XXXV, BENEBETA-
NER y con El Solaig, SANER.
-LATI tendría sus paralelos en los finales en -TI (OROTI, OSATI,
COTI; TARATI en Villares VI-6; plomo de Liria, BOIWTARATI, etc).
De ser el segundo elemento -ERLATI no hemos sabido hallarle pa-
ralelos.
Como observación final sobre esta palabra, diremos que el signo
sexto lo hemos considerado como E, incompleta, no siendo posible
identificarlo con Y puesto que éste tiene otra estructura. En cuanto al
punto que aparece entre la N y la E, corresponde a la línea de puntos
del renglón superior.
ORLEYL VI

Laminilla de plomo de 140 m.m. de longitud por 42 m.m. de an-


chura. Apareció arrollada en el fondo interior de la crátera, fraccio-
nándose al estirarla, pero sin que se extraviara ningún fragmento. Su
permanencia en el fondo de la vasija, acumulando humedad, justifica
el deficiente estado de conservación, que no es óbice para la lectura
de casi la totalidad del texto (fig. 23 y Lám. XX).
Se identifican con facilidad 76 signos y se reconstruyen y suplen
con seguridad otros 27, lo que nos da un total de 103 signos, aunque
el texto completo tuvo, obviamente, más letras; en la primera línea
aparte de los suplidos en la parte izquierda, debió faltar por lo menos
uno en la parte derecha; en la segunda, además de los suplidos al co-
mienzo de la línea, no parece que falte ninguno más, pues dos puntos
junto al borde derecho de la planchuela parecen confirmar que allí
acaba la línea; en la tercera se suplen y completan unos signos sin que
falten más; en la cuarta, suplimos uno al comienzo, otro mediada la
línea y cuatro al final, que ya entran en el cómputo antes hecho; es en
la quinta, donde solamente se vislumbran cuatro signos, en la que pu-
dieran faltar unos 20 signos más, de llegar el texto hasta el final de la
misma. Un cálculo hipotético nos daría, pues, un total de 1251130 sig-

(41) FLETCHER,op. cit. nota 2, pág. 82.


Fig. 23.-Orleyl VI
92 D. FLETCHER

nos (76 de fácil lectura; 27 suplidos y reconstruidos y unos 20125 que


puedan faltar) suponiendo que la línea quinta sea la última del plomo.
Las palabras están delimitadas por líneas verticales de puntos; no
podemos saber si hubo separación en el conjunto de los 13 signos cen-
trales de la primera línea, a causa de la rotura del plomo tras la E de
ADUNE; tampoco en la cuarta, por la misma causa, ignoramos si la
tercera palabra debe o no dividirse en dos.
Nuestra lectura, supliendo y reconstruyendo los signos que consi-
deramos como seguros o al menos los más probables, es:
. -

Línea l.".-[I- U]-S-TI-R : A-DU-N-E-N-1-S-O-R-BA-R-A-1-: O-R-


TI- TAR ...
Línea 2 . a . - [ ~ - ~ - ~ ~: U-S-KE-1-KE
- ~ ] - ~ - ~: ~
1-U-S-TI-R : A-N-E-R:
1-U-S-TI-R :
Línea 3.a.- [1-U-S]-TI-R : BO-DO-DA-9-E-1-KE : U-S-KE-1-KE : I-
u - [SI-TI-[RI-A-R-E-L-I
Línea 4 . a . - [ ~ ~ ] - ~ :-S-A-L-1-R
~ - ~ - ~ : O-R-KE-1-A-BA-R-A-[II-1-
[U-S-TI-R]
...
Línea 5.a.- ........[TI-R]........[W-11:

La distribución de los signos es la siguiente:

VI- 1.-[IUISTIR

Se suplen con toda certeza los dos primeros signos, no supliéndose


la N porque en este plomo aparece siempre sin ella. En Orleyl V-25 he-
mos hecho amplio comentario de este vocablo.
En este plomo leemos seis veces IUSTIR, precediéndole en dos
ocasiones la palabra USKEIKE, como señalábamos en Orleyl V-35.

Ya hemos hecho referencia a nuestra ignorancia de si los trece


signos que siguen a IUSTIR se han de leer como un solo vocablo o se
ha de considerar que son dos, a la vista del ADUNE de Orleyl VII-A-2.
Además de la réplica citada tiene sus paralelos en el ADUN de Vi-
llares VI-5 y 14; el ADUNIU, del plomo de Castellón; el AIDüLECUTE
de Liria LII y el AIDURTEN, de Abengibre, estos dos últimos con dip-
tongación. Consideramos, pues, que hay un elemento base ADU I AI-
DU, al que se le agregan diversos sufuos. Una variación pudieran ser
los varios ADINE de Pech Maho. Tal vez pudiera relacionarse con el
vasco ADU = «suerte» o AIDUN = «adulto».
Destacamos las siguientes correlaciones:

ORLEYL VI 1 . . . . . . . . . . . . . IUSTIR . . . . . . . . . .2 . . . . . . . . ADUNE


ORLEYL VII-A- 1 . . . . . . . . . . IUNSTIR . . . . . . . . .A-2 . . . . . . ADUNE
VILLARES VI-B- 19 . . . . . . . IUSTIR . . . . . . . . . .B-20 . . . . ADURTE

La N inicial bien pudiera ser el final de la palabra anterior, en cu-


yo caso se leería ADUNEN - ISORBARAI y no como lo hemos hecho
ADUNE - NISORBARAI, en atención al paralelo con VII-A-2.
Los comienzos por NIS- no son muy frecuentes; en Liria 11 tene-
mos, sin embargo, NISGINIBANITE.
-BARAI lo veremos de nuevo en el número 17 de este plomo, OR-
KEIABARA[I], supliendo la 1final por paralelismo con el que ahora re-
señamos; Liria LXXVI tiene BALKEBEREI ; Orleyl VII-A- 14, SANIBEI-
RAI; B- 16, ATABERAI y B- 17 ANWBERAI,de todos los cuales hemos
hecho mención en Orleyl V-27, destacando las alternancias BARAI / -
BARAI 1 BERAI / BEIRAI.
Los finales en -A1 los hemos reseñado, asimismo, en Orleyl V-27.

No obstante estar fragmentado el plomo en la zona en que se es-


cribió esta palabra, puede identificarse, aunque con cierta dificultad.
Podría componerse de ORTI- TAR o OR- TITAR.
OR / ORTI-tiene su réplica en el ORTI de Serreta 1; O ~ T I Nde
Santa Perpetua de la Moguda; ORTIN, de Alloza; ORTINE, de Pico de
los Ajos 11-A-31; ORTOR, de Pico de los Ajos 1-D-59, etc.
-TITAR nos recuerda el ULTITAR de Villares VI-7; el ...TITAR de
la llamada lápida de Valencia, etc.
En vasco ORTI = «Brioso», «ágil».
Reconstruimos U S T A ~ I K Ey no USKEIKE porque esta segunda
aparece a continuación y porque se ven restos de una R,lo que impo-
sibilita la otra lectura.
USTARIKE tendría su paralelo en el USTARIKE ,de Pico de los
Ajos 11-B-20.
El final -1KE aparece reiteradamente en estos plomos, encontrán-
dolo, además, en el ABARTARIKE del plomo de Liria, cuyos cuatro
primeros signos no párece que quepan en el espacio que falta del plo-
mo que aquí estudiamos, como tampoco por su reducido número de
signos a suplir, el IRIKE de Serreta 1;el TARIKEDEL de El Cigarrale-
jo; SORIKE de Vich, etc. El E B E ~ I K Ede Pico de los Ajos 11-A-11, ex-
cede en los signos a suplir en el trozo de plomo que falta; sólo el BE-
LAIKE de Orleyl VII-B-3 podría cumplir este requisito de espacio a
ocupar (BE-L-A),si a ello no se opusiera el resto que queda de la R que
precede al -1KE aquí ahora estudiado.

Por las razones expuestas en el número anterior no hemos suplido


allí esta palabra. De ella hemos hablado en Orleyl V-25 y 35.
VI- 7.-IUSTIR
Ya estudiado en Orleyl V-35 y en éste con el número 1.
VI-8.-ANER
Encuadrado entre dos IUSTIR. En Orleyl V-31, vimos un ANE-
RAI , que también hallaremos en Orleyl VII-A- 13.
VI- 9.-IUSTIR
Ya estudiado. Con él termina la segunda linea.
VI- 10.-[IUSI TIR
Reconstruimos IUSTIR porque el que procede es, como ya hemos
dicho, final de linea mientras que éste se encuentra al comienzo de la
tercera como iniciando otra frase, tal como vimos en El Solaig. Esta
suposición tiene visos de posibilidad, pero también pudiera ser otra la
reconstrucción, tal como ILTIR, BASIRTIR, etc.

Delimitada por líneas verticales de puntos. Sobre'BODOhablamos


en V-2, lo mismo que de -DAS.
El final -EIKE está en los reseñados USKEIKE de estos plomos; en
el EBEREIKE de Pico de los Ajos 11-A-11 y en el ABOEIKE de Pech
Maho.
VI- 12.- USKEIKE
Ya visto.
VI-13.-IU[S]TI [R]
Ya estudiado, así como la combinación USKEIKE IUSTIR de la que
hablamos en Orleyl V-35 y el número 1 de este plomo.

Es la palabra final de la tercera línea. Las deficientes condiciones


de conservación del plomo en esta parte impiden ver si hay puntos de
separación con la palabra anterior, pero las consideramos indepen-
dientes.
La 1final está deteriorada por rotura del plomo, pero se identifica,
sin que puedan seguir más letras, pues se ve claramente el borde de la
planchuela.
El paralelo más próximo sería AREILONA del plomo de Covalta,
en lectura de Gómez Moreno (42), donde nosotros (4-3)leíamos AEI-
LONA.
En Orleyl V-7, hablábamos de los comienzos en ARE / ARI.

La R y la A son de lectura segura; en cuanto a DU lo creemos más


factible que BAIDU, a la vista del espacio que ocuparían los signos
que faltan en este comienzo de línea.
Véanse los comentarios sobre DURANE en Orleyl V-6.

Su lectura no ofrece dudas, pero sorprende un tanto que una pala-


bra cuyo significado se quiere relacionar con actividades comerciales,
aparezca en un plomo que por sus circunstancias de hallazgo, en un
enterramiento, haría esperar un texto fúnebre o laudatorio, alejado
de toda finalidad comercial. Otro SALIR se encuentra en Orleyl 1-4,
cuyas circunstancias ambientales ignoramos por ser hallazgo casual.

(42) M. GOMEZ MORENO: «La escritura bástulo-turdetana (primitiva hispánica).))Ma-


drid, 1962, pág. 60.
(43) FLETCHER, op. cit. nota 24, pág. 49.
En Villares V hemos hecho mención a los diversos SALIR que conocía-
mos (4.4-),ampliando la relación hasta el número de 14, al estudiar Pi-
co de los Ajos II-A-18 (4.5).
Respecto al significado de la palabra SALIR, véase lo dicho por
Gómez Moreno y Tovar (4.6) y lo más recientemente expuesto por
Guadan, recogido por nosotros en Pico de los Ajos (47).

Aunque la rotura del plomo impide conocer el final de este voca-


blo, lo reconstruimos dado su paralelismo con el NISORBARAI del nú-
mero 3, donde hacíamos referencia a otros B A R A I ,sus
~ variantes.
Sus componentes podrían ser ORKEI - ABARAI o también OR-
KEIA - BARAI,teniendo en cuenta para esta segmentación los ya cita-
dos BARAI.
ORKEI- tiene sus paralelos en el ORKEIKE de Binéfar y en los US-
KEIKE de estos plomos.
En el supuesto que el segundo segmento fuera ABARAI nos recor-
daría el ABARARBAN de Puig Castellar; ABARTANBAN de Liria XI;
...RKEI ABARIEGITE,de Liria VI11 ; ABARKEBORSTE, de Ullastret,
etc. No obstante y dada la reiteración de los BARAI, y los conocidos
comienzos por ORKEI, cabría considerar que la A es un8 partícula in-
termedia entre los dos segmentos mencionados: ORKEI - A - BARAI.
En el citado Líria VI11 hemos visto que también se encuentra entre
...RKEI y BARIEGITE.
Podrían tener alguna relación con el vocablo que acabamos de re-
señar los ORKEI, ABAR, ABARA,A B A ~ Ivascos?

En realidad sólo se lee la 1 inicial, pero teniendo en cuenta los


otros cinco IUSTIR de este plomo y que la línea segunda termina con
uno de ellos, sería posible que aquí, final también de línea, tuviéramos
otro IUSTIR, aunque reconocemos que también pudiera ser otro voca-
blo comenzando por I-. Por las razones aportadas, creemos en la posi-
bilidad de nuestra reconstrucción.
En la quinta línea queda la parte superior de algunos signos que
hipotéticamente reconstruimos ....[TIR].......[WI].

(44) FLETCHER, op. cit. nota 38 (#Cinco inscripciones...))),pág. 206.


(45) FLETCHER, op. cit. nota, 2, pág. 54.
(46) GOMEZ MORENO, op. cit. nota 17, pág. 26.
A. TOVAR: «Léxico de las inscripciones ibéricas.)) Madrid, 1951, pág. 317.
(47) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 54.
ORLEYL 97

Leemos TIR ante los reiterados IUSTIR de este plomo; del segun-
do signo sólo se ve un vértice que igual puede ser de unaNque de una
a , prefiriendo esta segunda solución, con lo que tendríamos otro co-
mienzo de línea con un IUSTIR.
La combinación WI, pudiera significar que es el final del texto, lo
que no podemos asegurar dado el deterioro del plomo en esta parte.

ORLEYL VI1

Planchueia de plomo, de 233 mm. de 1ongitud.por 67 mm. de an-


chura. Apareció en el interior de la crátera, cerca de la boca.
Se encuentra deteriorada en uno de sus extremos, siendo de fácil
lectura en las zonas intactas. Conserva trazas de la tela que lo en-
volvía, como sucede en Orleyl V.
Está escrita por ambas caras, d o r a n d o algunos signos de la Cara
A en la Cara B, como veremos oportunamente.
Nuestra lectura de la CARA A (fig. S4 y Lám. XXI), con la recons-
trucción de algunas palabras, es como sigue (48):
Línea 1.a.-I-U-N-S-TI-R : A-DU-N-E : BA-R-BI-N-KE-A-1 : U-S-
KE-1-KE : 1-U-N-S-TI-R : BA.. .A-R...
Línea 2 . a . - ~ ~ - ~ ~ -: S-E-L-KE-A-1-BA-R-DO-NLE-A-1
~ ~ - ~ - ~ - ~ - ~ :
S-A-N-1-KE-A-I: U-S-KE-1-KE : A-U-R-U-N-[I-
Línea 3.a.-BE-I]-KE-A-I : A-N-E-R-A-1: S-A-N-1-BE-1-R-A-1 : L-
E-1-TA-S-E-A-I : BO-DO-DA-S-TE: BA-N-TA-GI-GI-A
Línea 4 , a . - [ ~ ~ - ~ ~ :]1-S-A-I.
- ~ - :~1-L-DU-R-S-A-1-R-S-A-1
- ~ ~ - ~ ~
: A-R-1-CA-R-BI-N-1-S-A-1 : BO-R-A-R-N-W-L-[1-RI
Línea 5.-A-R-E-BI-N-1-S-E : CA-L-A-I-S-E-BA-CA-R-A-DU-R-A-
N-E : 1-TA-R-A-R-TE-TA-R-A : A-S-TI...
Línea 6 . a . - [ ~ ~ - ~ - ~ - ~ - ~ ] -: I-U-N-S-I-R- ~ - ~ ~ - ~ ~ - ~ - ~ - ~ ~
W-I : BE-L-E-S-A-GI-N-E-A-I : CA-R-E-S-TA-R-E-A-I
Línea 7.a.-...TI-N : BA-TA-R-A-TI-TE: U-S-KE-1-KE-A-1 : S-1-A-1
: KE-1-TI-A-TE-L-U : A-GI-N-1-R-TE:
Línea 8.a.-...S-E : 1-A-GI-GI-N-U-R-E: BA-S-1-A-U-KE-CU : CU-
R-S-1-A-U-KE-cu

El total de palabras contando como tales los conjuntos delimita-


dos por líneas verticales de puntos, es de 39, entre enteras y fragmen-
tadas. En nuestro estudio desglosamos algunas de ellas, llegando a re-
gistrar 4-5.

(4-8) Una vez más y con verdadero agrado, testimoniamos al Profesor UNTERMANN
nuestro agradecimiento por su valiosa colaboración en la lectura de este plomo.
La distribución de signos es como sigue:

Como en anteriores plomos, hacemos ahora algunas consideracio-


nes sobre el léxico de este texto.

VII-A-1.-IUNSTIR

Ya estudiado. Como en otras ocasiones, es la primera palabra del


escrito.

En Orleyl VI-2 hemos comentado la coincidencia de los comienzos


del V I y VI1 con la secuencia IUNSTIR ADUNE.

Volveremos a encontrar esta palabra en Orleyl VII-B-12, donde se


reconstruye a la vista de la que ahora reseñamos y de las secuencias
siguientes :

ORLEYL VII-A-3-4-5 BARBINKEAI USKEIKE IUNSTIR


ORLEYL VII-B- 12-13-1 BARBINKEAI USKEIKEAI IUNSTIR

Sin embargo, sobre la reconstrucción de VII-B-12 volveremos a


hablar en su lugar.
En Villares VI-3 tenemos BARBINKE Y en Villares VI1 (inédito)lo
volveremos a encontrar, [ B A I ~ I N K E .El paralelo entre los B ~ I N -
KE de Orleyl y los de Villares, viene a confirmarnos el valor que dimos
al signo l= KE, al estudiar Villares IV y VI (49)según destacábamos en

(49) FLETCHER, op. cit. nota 10, pág. 197.


FLETCHER, op. cit. nota 38, pág. 199.
1 O0 D. FLETCHER

Orleyl V-35. En Pech Maho tenemos BASBIN,que pudiera ser una ai-
ternancia S/R, y ADINBIN.
BARBINKEAI está compuesto, pues, por un elemento base, BAR-
BIN, más los elementos sufijales KE-AI. En Orleyl V-27 hemos estu-
diado estos sufijos en su doble aspecto, como KEAI y como KE - AI.

VII-A-4.-USKEIKE
Ya estudiado.

VII-A-5.-IUNSTIR
Ya estudiado.

No sabemos reconstruir este vocablo, pues comienzos por BA- son


frecuentes, así como los finales en -AR. Toda reconstrucción nos pare-
ce aventurada.

VII-A- 7.-BODODASEAI
Reseñado en Orleyl V-27. Es de observar que en esta cara del plo-
mo aparecen 16 finales en -AI, de ellos cuatro seguidos en las pala-
bras 7 a 10 y 12 a 15, más agrupaciones de dos en las 19-20,34--35y
38-39; la 3 y 22 aparecen aisladas.

En Orleyl V-28 destacabamos las secuencias:


ORLEYL V-28 y 29 SELKEAI BARDUNEAI.
ORLEYL VII-A-8 y 9 SELKEAI BARDOMEAI.
Con la alternancia BARDUNEAI / BARDONEAI.

Relacionada en Orleyl V-29.


VII-A-1O. -SANIKEAI
El primer segmento, SANI- lo encontramos en el número 14, SA-
NIBEIRAI. En Tivissa, SANIGIRSTO;en El Solaig, SANER y SENW-
RUN; en Enserune, SANO y SANUKE;en Turma Salluitana, SANI-
BELSER;-enPico de los Ajos 11-A-17, SAN; en Pech Maho, SANI y SA-
NIBAR.
El final, KEAI, ya estudiado en Orleyl V-27.
VII-A-11.-USKEIKE
Ya estudiado.

Es el final de la segunda línea y comienzo de la tercera. Suplimos


[I / BE11 por suponer que la 1 es el último signo de la segunda línea,
viéndose con claridad la fractura del plomo por el trazo vertical de la
Y , no quedando espacio para más letras, pues el borde indica el fin
de la laminilla por este lado. El inicio de la tercera línea seria, pues,
BEI. Para la reconstrucción nos hemos basado en el UNIBEIKEAI de
Orleyl V-30, donde ya hablamos de esta cuestión; y en el AURUNI-
BEIKEAI del plomo de Castellón, idéntico al aquí estudiado.
Los segmentos de este vocablo serían AUR - UN1 - BE1 - KEAI.
Comienzos por AUR (que es independiente de LAUR como ya ex-
pusimos en Pico de los Ajos 1-B-1), son frecuentes: AURBIUR y AUR-
SO, de Ullastret; AURUNINGICA, de Santa Perpétua leído AURUNI:
IGIKA, por Prescott; AURTILEIS (leído también BIURTILEIS) de Pon-
tós; AURDULOGIN, de Pico Ajos 1-D-33;AURKERLECAN (leídoBIUR-
KERESKEN por la profesora Prescott), en Ampurias, etc.
-UNI- tendría sus paralelos en UNIBEIKEAI de Orleyl V-30 y 32;
en el ya citado AURUNIBEIKEAI, de Castellón; UNIBELO, de Ullas-
tret; AIUNIBAISEAKE, de Sagunto, etc.
-BEI- ya lo hemos mencionado con anterioridad; podemos, ahora,
añadir el ASTEBEIKEAI, del plomo de Castellón.
-KEAI ya reseñado reiteradamente.

VII-A- 1 3 . - A N E ~ I
Ya dimos paralelos en Orleyl V-3 1..

VII-A- 14. -SANIBEI~~I


Sus componentes podrían ser SANI - BEIRAI.
Del primero hemos señalado paralelos en el número 10. En cuanto
a -BEIRAI lo encontramos sin diptongación en Orleyl VII-B-16 y 17.
En Orleyl VI-3 y V-27, dábamos paralelos.

VII-A- 15.-LEITASEAI
SUS componentes, a nuestro juicio, son LEI - TAS - EAI.
Para LEI- tenemos en Pech Maho, LE1..., LEISIR y LEISTIKER;
como final está en el CULESTILEIS, de Cala 1.
-TAS- está en.Sinarcas, BAISETAS,ILDUTAS;Ullastret, BARTAS-
CO ; Cigarralejo, SUISEBARTAS,LACUTAS ; Pico de los Ajos 111-B-33,
BALCETAS y en los varios BODODAS de estos plomos, etc.
-EAI, referenciado en Orleyl V-27.
En vasco, LE1 = «afán»,((emulación)).

VII-A-16.-BODODASTE
De sus dos elementos componentes, BODODAS - TE, hemos habla-
do en anteriores ocasiones en el presente estudio.

VII-A-1 7.-BANTAGIGIA
Con esta palabra termina la línea tercera.
La presencia de dos GI diferentes ( \IC J' ) nos plantea de nuevo la
duda de si se trata de un simple alarde decorativo o corresponde a la
distinción del timbre de cada uno de ellos. En Orleyl V-2 1 ya nos plan-
teábamos esta cuestión con los dos GO ( $. X ) seguidos. En el núme-
ro 43 volvermos a encontrar juntos dos GI pero sin distinción alguna
entre ellos.
Los elementos componentes podrían ser BAN - TAGIGI - A.
BAN- es comienzo abundante en ibérico.
-TAGI- lo encontramos en el TAGISGAROK de Serreta 1. La dupli-
cación GIGI que, ya hemos señalado, existe más adelante en este plo-
mo, la encontramos también en el ATIRTIGIGI de Liria XXII, donde
el primer G I lleva también un apéndice lateral.
Señalemos que los signos BA, TA, GI, GI afloran en la parte iz-
quierda de la Cara B, pudiéndose identificar, claramente, en sentido
inverso.
En vasco BANDA = «valor».

El comienzo de la cuarta línea ha sufrido la pérdida de algunos


signos, pero podemos reconstruir la palabra porque la tenemos com-
pleta en el número 37.
Paralelos podrían serlo el TARATI de Villares VI-6; el BOIWTA-
RATI del plomo de Liria; el ...RETINE de Pico de los Ajos 1-B-3;BO-
NANTITE, de Liria XL, 1;BIURTITE,de Liria XVIII; ORTITAR, de Or-
ley1 VI-4, etc.
ORLEYL 103

Es palabra delimitada entre puntos, pero a la vista de los números


20, ILDURSAIRSAI, y 22, BINISAI, podría pensarse que, a pesar de
los puntos, pudiera ser el final de la palabra anterior; en páginas an-
teriores hemos hablado de esta cuestión, comprobando que no siem-
pre los puntos separan palabras.

Consideramos sus componentes ILDUR - SAIR - SAI.


ILDUR-, con su posible variante ILDUN, es bien conocido; en
Azaila, ILDURADIN; en Pico de los Ajos 11-A-1,LABEISILDUNIR;IL-
DUN,en Villares III; BIOSILDUN en Serreta 11; ILDUNBAR,en Serre-
ta IV; NEREILDUN, en Sagunto, etc. etc.
-SAIR- tiene su réplica en el BELESAIR, de El Solaig.
El -SAI está en relación con los finales de los números 19 y 22.

VII-A-21.-ARICAR
Los paralelos han sido señalados en Orleyl V-7 y 23.

Constituye un todo con la palabra que acabamos de reseñar, pero


a la vista de Orleyl V-7 en que ARICAR tiene existencia independien-
te, en esta ocasión también la hemos considerado así.
Sus elementos componentes son BIN - ISAI.
BIN- se paraleliza con Orleyl V-24 y vocablos allí aducidos; con
VII-A-24, ...AREBINISE ; con Pech Maho, ADIN-BIN ; ISBINAI, de Se-
rreta 1que contiene los mismos elementos que la aquí estudiada, pero
en otro orden.
-1SAI ya se puso en relación con el número 19.

Reconstruimos el final de la palabra (que a su vez es final de la 1í-


nea cuarta), a la vista de la ((combinación))NWLIR que hemos ido
viendo a lo largo del estudio de estos plomos y que hemos reseñado en
Orleyl V-4, a la que podría añadirse el BURANALIR de El Solaig, si su
lectura fuera la que hemos sugerido en la nota 13, en cuyo caso, sería
un muy próximo paralelo del vocablo que ahora comentamos.
LOS comienzos por BOR- son frecuentes: BORACAU, BORBELIOR-
CU, BORSTE, del plomo de Ullastret; BOROTEN, de Azaila; BORCUSI,
de Liria XXIX; BORTEBARA, de Liria XL,1 ; BORBERONIU, del plomo
de Castellón; BORARICU, de Pico de los Ajos 11-A-33; BORARTIU-
KERWI, de fusayola del Castell de Palamós.
De -NWLIR ya hemos hecho mención en líneas anteriores.

Es el coinienzo de la quinta línea. Desconocemos cuantos signos


hayan podido perderse. De lo que leemos, podemos establecer tres
segmentos, ARE - BIN - ISE.
ARE abunda como comienzo de palabra, pero aquí no creemos
que lo sea. Pudiera relacionarse con el ETARE de Pico de los Ajos II-
A-25.
-BIN- ya lo hemos citado en el número 22.
-1SE parece ser una variante del ya visto ISAI. Lo volveremos a
encontrar en la palabra siguiente, donde señalamos paralelos.

Con las palabras 26 y 27, forma un todo delimitado entre puntos,


CALAISEBACARADURANE, pero este conjunto lo desglosamos en tres
vocablos para su mejor estudio y por las razones que se expondrán.
Dos serían los elementos de la palabra que ahora reseñamos: CA-
LA - ISE. Para el primer segmento podríamos señalar un gráfito de
Pech Maho, KAL, y algún nombre de ciudad.
El final -ISE, ya lo vimos en la palabra anterior. Se encuentra asi-
mismo en Sagunto, BAISE.
Los finales en -SE se han referenciado en Orleyl V-24, 37 y 4.1,
añadiendo ahora ULTITEKERAICASE del plomo de Castellón; CALIS-
CASE de Pico de los Ajos 11-A- 10; LAIKEBERTASE, de Pico de los Ajos
11-A-9;Enserune, UCOSE;las monedas de ARSE, KELSE, KESSE, etc.,
siendo de observar que lo encontramos en grupos de dos vocablos, por
ejemplo, aquí en Orleyl VII-A 24 y 25; en plomo de Castellón, 16 y 1 7;
en Pico de los Ajos 11-A-9 y 1 0, etc.

Volveremos a encontrarlo más adelante, línea seis, en una se-


cuencia semejante a la ahora reseñada.
El segmento base sería BACAR, con un sufijo -A. BACAR / BACA-
RA lo encontramos en Serreta 1, BAGAROK; en Villares VI- 11, BACA-
RAWI, etc.
En vasco BAKAR = ((único)).
ORLEYL 105

Con los números 25 y 27, ya hemos dicho que constituye un todo,


pero DURANE lo encontramos formando parte de otros conjuntos en
los que no se encuentran los otros componentes, por lo que hemos de
considerarlos a los tres con personalidad propia.
En Orleyl V-6 dimos relación de los DURANE aparecidos en estos
plomos y las secuencias en que se hallan.

Sus segmentos podrían ser ITAR -ARTETAR - A, y sus más próxi-


mos paralelos serían ORTITAR,de Orleyl VI4; ULTITAR, de Villares
VI-7; TETAERIARBAN, de Liria LXXIV, etc.

Es la última palabra de la línea cinco. Se distinguen dos signos


con toda claridad y un tercero que, posiblemente, es TI. El final de la
laminilla está muy cercano por lo que no pueden faltar muchos signos
más, independientemente de los que pudieran seguir al comienzo de
la línea seis y correspondieran a esta palabra, lo que no parece facti-
ble pues aquí hay otra palabra ya conocida.
En el plomo de Castellón tenemos ASTEBEIKEAI, para el comien-
zo de la palabra; para el final están ILTI y IATI de Pech Maho.
En vasco AZTI = ((adivino)),((hechicero)).

VII-A-30.- [CALAIS]E
Es el comienzo de la línea seis. Unicamente se lee la E final, pero
teniendo en cuenta la secuencia constituida por las palabras 25, 26 y
27 hemos reconstruido la presente, según la siguiente relación:
ORLEYL VII-A-25, 26 y 27.. ..CALAISE BACARA DURANE
ORLEYL VII-A-30, 3 1 y 32 ...[CALAISIE BACARA DURANE
'

lo que ya expusimos en Orleyl V-6. y 13. En cuanto a CALAISE lo he-


mos reseñado ya en el número 25.

VII-A-31.- BACA^
Ya estudiado 'en el número 26.
106 D. FLETCHER

Se hace referencia a este vocablo en Orleyl V-6, 13 y 16; Orleyl


VI-15 y Orleyl VII-A-27. Aparece un total de seis veces en estos tres
plomos, lo que nos prueba la estrecha relación que guardan los tres
textos entre sí.

Sus componentes son bien conocidos, IUNSIR - WI.


IUNSIR lo hemos incluido en la familia de los IUNSTIR, como una
de sus variantes, como expusimos en Orleyl V-25.
-WI es característico de fin de palabra. Sobre su lectura y signifi-
cado se ha escrito mucho, sin que se haya llegado a un acuerdo gene-
ral (50).En la línea quinta de Orleyl V I dábamos la hipotética lectura
de un IUNSTIR .....WI, que vendría a paralelizarse con este que aca-
bamos de reseñar.

Sus componentes son BELES - AGIN - EAI.


BELES es bien conocido; en el plomo Orleyl 111 tenemos otro
BELES-KERETO.
-AGIN- lo encontramos también el Orleyl 111, CAESAGIM (o LESA-
GIM). En Orleyl VII-A-41, volvemos a encontrarlo pero como comien-
zo de vocablo, AGINIRTE. En la Turma Salluitana hay un ENASA-
GIN.
El final -EA1 lo hemos estudiado en Orleyl V-27.
Destacamos la semejanza de las secuencias de los números 33 y
34 de este plomo y el del Solaig:
ORLEYL VII-A-33 y 34 . . . . . IUNSIRWI . . . . BELESAGINEAI
. . . .
SOLAIG . . . . . . . . . . . . . . IUNSTIR . . . . . . BELESAIR
En vasco AGIN = ((ofrenda)).

Con esta palabra finaliza la línea seis. Está constituida por CARES
- TAR - EAI.
CAR / CARES presenta paralelos con ~1 Solaig, CARCOSCAR; Liria
XCII, CARCASAR; Liria IX, CARESBANITE;Liria XL, 1, CARESIRTE;
Liria XL, 9, CARESBOBIGIR,etc.
-TAR es bien conocido como final de palabra; ULTITAR, de Villa-
res VI-7; DUSGITAR, de Orleyl 111, 2, etc. En vasco -TAR . «oriundo»,
((partidario)).
-EAI, reseñado reiteradamente con anterioridad.

VII-A-36.-... TIN
Es el inicio de la línea siete. Faltan los primeros signos, pudiendo
especularse con un TEUTIN (Solaig), TETUTIN (Liria XV), BIDUDE-,
DIN (Serreta 1),TETIN (Orleyl V-19), NEITIN (Ullastret), etc., pero
por ser posible múltiples soluciones renunciamos a decidirnos por nin-
guna de ellas, ante la inseguridad de acertar.

En el número l. 8 nos hemos basado en ésta para reconstruir aque-


lla, donde dábamos paralelos.

VII-A-38.- USKEIKEAI
Estudiada en Orleyl V-35.

Sus elementos básicos son SI - AI, de acuerdo con los múltiples fi-
nales en -A1 que hemos visto en estos plomos.
SI- lo hallamos en SIBANTIN, de Sta. Perpétua; SIKENSTIS, de
Ampurias; SIBELTIRICAN, de la Bastida (según lectura de Beltrán Vi-
llagrasa); SINEBETIN, del plomo de Castellón, etc.

VII-A-40.-KEITIA TELU
De difícil identificación por el mal estado de conservación del plo-
mo en esta parte. Nuestra lectura sería KEITIETELU, frente a la dada
por el Profesor Untermann, que es la que encabeza este apartado.
KEITIATELU (o KEITIETELU) se paraleliza con Orleyl V-37, KEI-
TIATENSE, donde citamos otros paralelos, a los que añadimos KEI-
TESNAURA de Pico de los Ajos 1-C-13.
-TIATE- está en Orleyl V-2 2, TAUEBARTIATE ; Pico de los Ajos II-
B-8, TIATECU; Pico de los Ajos 11-B-16, TIATEDU, etc.
Este segmento podría, a su vez, desglosarse en TIA - TE; así, COR-
TIA, de Pico de los Ajos 11-B-6; DUSEATIA, de Liria XVI; BENTIA, en
monedas, etc. y en cuanto a -TE es bien conocido y frecuente en estos
plomos.
108 D. FLETCHER

-LU quedó ya reseñado en Orleyl V-40.


En vasco -LU = sufijo de valor peyorativo.

AGIN- lo hemos visto en el número 34, donde señalábamos para-


lelos.
-IRTE / -TE, está en Liria XL, 3, EBIRTE; Orley111, IRSTE; Villa-
res VI- 17, IRBETE ; Ullastret, BIGILTIRSTE ; Liria LVII, BASTESIL-
TIRTE ; Orleyl VII-B- 1.5, LACUNWILTIRTE,etc.

Los primeros signos que se leen de la séptima y última línea de la


Cara A. Faltan un número indeterminado de signos precediéndolos no
decidiéndonos por ninguna solución para reconstruir la palabra, pues
en estos plomos hay vocablos terminados en -SE, sin que a ninguno de
ellos sigue la palabra que va a continuación de este ...SE, lo que de ha-
ber sucedido, podía habernos ayudado en su reconstrucción, como
hemos hecho en otras ocasiones.

Delimitada por líneas verticales de puntos. Ya en el número 17 vi-


mos la duplicidad de GIGI, con diferenciación gráfica entre ambos,
tal vez con el propósito de distinguir su timbre (KIGI, GIKI ?); ahora
ambos signos son idénticos gráficamente. Otra duplicidad de GI la he-
mos citado en el ya mencionado número 17, el ATIRTIGIGI de Liria
XXII.
Sin la duplicidad de -GI- (que tal vez tenga valor intensivo) tene-
mos AGIN- en el número 41, con los paralelos allí mencionados.

BAS- es abundante como comienzo de vocablo.


-1AU- lo tenemos en el número que sigue.
-KE- es bien conocido por los USKEIKE de estos plomos y otros co-
mo COROIKE, de Ullastret; ABARTARIKE,del plomo de Liria; BASE-
ROKE, de Serreta 1; BECONTEKE, de Pico de los Ajos 111-B-5, etc.
-CU es abundante; se encuentra en estos plomos (Orleyl V-26 y
34); en Pico de los Ajos 13 veces; en El Solaig, BALKELACU; Liria,
VIII, ALEICU;Liria XXIV, EGIACU;Ullastret, BORBELIORCU y SAL-
DUGILERCU;en Pech Maho, BOSCU, etc.
ORLEYL 109

Con ella termina el texto de la Cara A. Su más próximo paralelo


está en la palabra anterior, de la que sólo se diferencia en el primer
segmento.
CURS / GURS lo tenemos en Liria BANGURS ; Serreta 1, GURS;Pi-
co de los Ajos 111-B-21, TAUTINCORS,etc.
De los demás segmentos ya hemos hecho mención en el número
anterior.
En vasco GURTZ = ((adoración)),«culto».

CARA B

Una zona de unos cuatro centímetros de ancha, de arriba a bajo,


en la parte izquierda de esta cara, aparece sin texto. Los signos que en
dicha zona se distinguen corresponden a los de la Cara A, como igual-
mente sucede en la parte baja, en la que a todo lo largo no hay texto,
pero afloran los signos de la última línea de la otra cara (fig. 25 y
Lám. XXII).
El extremo derecho de la laminilla ha desaparecido, lo que dificul-
ta, en parte, la lectura, como ya sucedió al estudiar la Cara A, pero en
la B no parece que los signos llegaran al mismo borde de la planchue-
la, al menos en las líneas segunda, cuarta y quinta, y tal vez sucediera
lo mismo en la tercera, en la que en todo caso podría faltar un -KEAI,
si nos atenemos al BARBINKEAI de la primera cara y las secuencias
allí reseñadas, aunque sobre ello volveremos en el número 12.
Creemos pues, que es poco el texto que pueda faltar, identificando
un total de 19 palabras claramente delimitadas por puntos.
Así, pues, leemos:

Línea i .a.-A-R-1-N-E : 1-TI-KE-R-E-U-TE-TI: BE-L-A-1-KE : BA-


S-E-R-N-W-L-BE [R-A-11
Línea 2 . a . - ~ - ~ - ~ : CU-DU-BO-1-KE
- ~ - ~ : BA-S-BI-TE-R-O-KE-
TI-N-E : 1-R-1-C-A :
Línea 3.a.-I-U-N-S-TI-R-I-CA : S-E-L-GI-N-1-U-S-TA-1: 1-U-N-S-
TI-R : BA-R-BI-N [-KE-A-I]?
Línea 4.a.-U-S-KE-I-KE-A-I : 1-U-N-S-TI-R : L-A-CU-N-W-1-L-TI-
R-TE :
Línea 5 . a . - ~ - ~ ~ -: A-N-W-BE-R-A-1
~ ~ - ~ - ~ - ~: U-S-KE-1-KE : 1-U-
N-S-TI-R
La frecuencia de utilización de signos es como sigue (no se conta-
bilizan los tres signos que hipotéticamente se suplen al final de la ter-
cera línea):

A = 1 0 BA= 3 CA= 2 DA= 2 L = 5 S = 1 0


E = 7 B E = 4 KE= 8 D E = 3 M = 0 S = 0
I = 2 0 B I = 2 GI= 1 D I = 8 N = l l Y = 3
O = 1 B O = 1 CO= O DO= 0 R = 6
U = 8 B U = O CU= 2 D U = 1 ~ = 1 0

Sobre el léxico de este texto hacemos las siguientes observacio-


nes :

ARI- como comienzo de palabra lo encontramos, por ejemplo, en:

ORLEYL V-7 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARI-CAR


ORLEYL V-23 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARI-CAR
ORLEYL VI-14 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARE-LI
ORLEYL VII-A-2 1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARI-CAR
,
ORLEYL VII-A-24 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARE-BIN-ISE
ORLEYL VII-B-1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .ARI-NE
ORLEYL VII-B-5 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . ARE-RE
VILLARES V . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .ARA-BAGI
VILLARES v . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .ARA-GARER
SAN ANTONIO DE BECHI . . . . . . . . . . . . . . . ARI-CALERCA
PICO DE LOS AJOS 11-B-14. . . . . . . . . . . . . . ARI-cu

Al estudiar en su día este último, aludíamos a la posible alternan-


cia ARA / ARE / ARI.
-NE es sufijo que aparece numerosas veces en estos plomos y en
otros textos, como el TATEIARIKANE de ~ e c h Maho, tan semejante a
la palabra que aquí estudiamos.

Para ITIKER podríamos aducir el paralelo, de BERTEKER,de Pico


de los Ajos 111-A-1, donde señalamos algunos TIKEWTEKER.
112 D. FLETCHER

-EU- se encuentra al comienzo de palabra : EUGIN, de Collbató;


EUGIAR, de Sinarcas, etc., pero no lo registramos en interior de voca-
blo.
-TETI lo hallamos en BITARSTETI de Pico de los Ajos 111-A-4;BI-
TEROKETETINE,de Orleyl V- 19, en donde señalábamos otros para-
lelos y hacíamos mención de las secuencias GUDUR BITEROKETETI-
NE, de Orleyl V18 y 19, y GUDUBOIKE BASBITEROKETINE, de Or-
leyl VII-B-6 y 7.
-TI, entre otros ejemplos, está en el BITOCAURTI de Pech Maho.

Sus componentes serían BELA - IKE.


Comienzos por BEL / BELA son abundantes en todo el territorio
ibérico desde Serreta a Enserune, y en cuanto a -1KE ya fue reseñado
en Orleyl V-35 y VI-5, aiíadiendo ahora los BAITESKIKE, KANBU-
LOIKE, ABARSCUBORAKITIKE, etc., de Pech Maho.
En vasco BELA = ((cuervo));BELAIKI = ((pala)).

La N, que no aparece en la fotografía, fue identificada por el Dr.


Untermann entre los fragmentos desprendidos al estirar el plomo. En
cuanto al final, la rotura de éste impide conocer cómo pudo terminar
la palabra, si bien pudiera ser -BE [RAI] , como veremos en los núme-
ros 16 y 17 y hemos visto en Orleyl V-27 y VI-3, pero sin atrevernos a
afirmarlo, pues los restos de signos que se vislumbran no parece que
puedan identificarse con R y A.
Hipotéticamente, pues, podríamos considerar los siguientes seg-
mentos: BASER - NWL - BE [RAI] .
BASER-tiene sus paralelos en Pico de los Ajos 1-D-9 y 34; Pico de
los Ajos 11-B-15; Pico de los Ajos 111-A-10. En el primero de ellos dá-
bamos amplia lista de los BASER / BASIR.
Sobre la combinación -NWL- y sobre el posible BE [RAII hemos
hecho referencia en Orleyl V-4 y VI-3.
En vasco BASERI = «Caserío», «aldea».

Comienzos por ARE / ARI son abundantes y los hemos visto en Or-
leyl V-7 y 23, VI-14, VII-A-2 1 y 24 y VII-B-1.
El final -RE lo tenemos, asimismo, en Pico de los Ajos 11-A-25,
ETARE;en Sagunto, BECUERE; en Liria IX, BASSUMIWTINIRE;Cas-
tellón, URKEKERERE; ARSKERE,de Enserune; ATINKERE,de Pech
Maho, etc.

GUDU- ha sido estudiado en Orleyl V- 18, donde citábamos parale-


los. Se da la paradoja de que, siendo la única palabra ibérica que tiene
junto a ella una representación de combate naval que encaja con el
significado que se le atribuye, ((combate)),se niegue toda posible rela-
ción con la misma voz vasca GUDU por considerarse ésta de origen
germánico. Desc'onocemos, puesto que no somos especialistas en filo-
logía, si el origen del GUDU vasco es o no germánico, pero lo que sí po-
demos afirmar rotundamente es que en ibérico hay varios textos con
la palabra GUDU y que en uno de ellos da la coincidencia de que está
representado un «combate».Por nuestra parte no estamos capacita-
dos para inmiscuirnos en el conflictivo problema del vasco-iberismo,
pero no podemos dejar de señalar dicha coincidencia, que no debe
echarse en olvido por los estudiosos.
-BO- recuerda el KEIBORS, de Pico de los Ajos 11-B-23;el LURBO,
de Enserune, etc.
-1KE ya se ha mencionado en anteriores ocasiones.

VII-B-7.-BASBITEROKETINE
El comienzo BAS- pudiera ser el final de la palabra anterior, aun-
que de ella la separe una línea vertical de puntos, puesto que en Orleyl
V-19 y 41 tenemos BITEROKE sin que le preceda BAS, que, tanto se
encuentra al comienzo de palabra, BASDUR, de Pico de Ajos 1-D-3;
BASIR,de Pico de los Ajos 111-A-10; como al final: aparte de los cinco
nombres de la Turma Salliutana, ADINGIBAS, BILUSTIBAS, ILLUR-
TIBAS, LUSPANGIBAS y UMARGIBAS, podemos colacionar el URKE-
BAS de Liria XL, 13; TASBARIGIBAS, de Azaila; BOUTINTIBAS,de
Tivissa, etc.
-BITEROKE lo hemos estudiado en Orleyl V-19 y 41. Otros co-
mienzos por BITE- los reseñamos en Orleyl V-3, donde hacíamos refe-
rencia a la alternancia BITAN / BITEN / BITIN.
-TINE, lo vimos en Orleyl V-19, -TETINE; aquí es, solamente -TI-
NE.
114 D. FLETCHER

En el plomo de Liria tenemos IRCA; en Serreta 1, IRIKE; en Pico


de los Ajos 1-A-15, IRITERCA en Orleyl I-A-3, IRANTA; en V-1 ; IRE,
donde dábamos otros vocablos en los que entra a formar parte el seg-
mento IRI / IRE / IRA.
El final -1CA está en AURUNINGICA y SEIGICA de Sta. Perpétua;
en el TATEIARICA, de Pech Maho, etc.
En vasco IRIJ(A = «anhelo».

Claramente constituido por IUNSTIR - ICA, ambos segmentos ya


estudiados, el primero en Orleyl V-25 y el segundo lo acabamos de
mencionar en la palabra anterior.
En vasco -1K / -1KAN se añade al nombre cuya calidad se expresa
en grado supremo de comparación ; ¿podría realizar aquí -1CA la mis-
m a función con respecto a IUNSTIR?

VII-B- 1O.- SELGINIUSTAI


El comienzo SEL- lo hallamos en Orleyl V-28, SELCEAI, donde ci-
tábamos otros paralelos; SELDARBAN en la lápida funeraria de Si-
narcas; SELDARWI, en la lápida funeraria de Cabanes, etc. etc.
SELGIN / SELGINI se paralelizan con SELGI de Pico de los Ajos
11-B-9; SELGITERAR, de Enserune; EUGIN, de Collbató; SOGIN, de
Tivissa; LAGINIGI, de Ampurias; NISGINIBANITE, de Liria 11; SEL-
GIBORA,SALGITEIKE y SALGITEITA, de Pech Maho, ENASAGIN, de
la Turma Salluitana, etc.
Aunque IUSTAI pueda ser de la familia de los IUNSTIR / IUSTIR,
preferimos considerar el último segmento como -USTAI, con réplica
en USTALARI, de Orleyl V-38; USTAIN, de Puig Castellar; USTALAI-
BI, del plomo de Liria; USTARIKE, de Pico de los Ajos 11-B-20, etc.

VII-B- 11.-IUNSTIR
Ya estudiado.

Por paralelismo con Orleyl VII-A-3 reconstruimos BARBIN


[KEAI] , pero creemos que es más apropiado BARBIN [KE] , como en
Villares VI-3. En esta ocasión, el sufijo -A1 se añadió al vocablo si-
ORLEYL 115

guiente, quedando la correlación de las secuencias de VII-A y ésta, de


la siguiente manera:
ORLEYL VII-A-3,4 y 5 . . . . . . . . . . BARBINKEAI . . .USKEIKE . . . IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 12,13y 14 . . . . . . . BARBIN [KE] . . USKEIKEAI . IUNSTIR

La rotura del plomo en ángulo nos autoriza a suponer la existen-


cia de este KE.

VII-B-13.-USKEIKEAI
Ya mencionado en Orleyl V-35.

Ya estudiado.

En Orleyl V-25 y 26 y V-33 y 34, hemos visto IUNSTIRLACU. Aquí


nos encontramos con IUNSTIR LACUWILTIRTE.
En cuanto a los componentes de esta palabra, nos ofrecen dudas.
Son bien conocidos LACUN, ILTIR y TE, pero queda el signo y ( = W)
que no sabemos cómo encajar; pensando en los múltiples finales en
y'p podríamos considerar que también aquí lo fuera, pero entonces
nos quedaría el segmento -LTIR; que no tiene razón de ser y sí -ILTIR;
por lo que la primera parte habría que admitir que es LACUNW, que
no encontramos en ninguna otra ocasión y sí LACUN. Suponiendo LA-
CUN - w - ILTIR - TE, nos encontramos con el signo w que tiene su
personalidad propia, que en modo alguno puede asimilai-se a M 1 N,
que no sabemos adjudicar a ninguno de los dos segmentos principales
de la palabra que ahora reseñamos.
Para LACU 1 LACUN dábamos paralelos en Orleyl V-26.
-ILTIR, con la posible alternancia ILTER, es bien conocido. En el
plomo de Liria, ILTIR; en Liria LXVII, ILTIR; en Serreta IV, ILTIR;
ILTIR, ILTIRTIKER, ILTIRSAR, en Pech ' ~ a h o I;L T I ~ ~ I G I S E Nen
,
Cabanes; ILTIRCES, ILTIRTA, I L ~ T ~ A L I R B A N , en monedas;
etc.,
como final está en BASTESILTIRTE, de Liria LVII; BIGILTIRSTE,de
Ullastret (en estos dos ejemplos seguido de -TE, como en la palabra
que estudiamos); CUCONILTIR,de Liria LXII etc. etc.
-TE, visto reiteradamente.
VII-B- 16.-A TA BE^I
Es el primer vocablo de la quinta y última línea del texto B.
A esta palabra nos hemos referido varias veces a lo largo del estu-
dio de estos plomos (Orleyl V-27, VI-3 y 17 y VII-A- 14).

VII- B- 17.-A N W B E I~
Nos hallamos en un caso semejante al de la palabra 15, es decir
que la y ha de suponerse que va con la primera parte del vocablo
AN, y no con la segunda, puesto que BERAI lo hemos estudiado con
anterioridad, según decíamos en el número anterior.
Cotejando estas dos palabras tenemos:
ORLEYL VII-B-16...... A - TA BE-R-A-1
ORLEYL VII-B-17...... A - N y - BE-R-A-1
y si nos atuvieramos a la ((teoría de las correlaciones))deduciríamos
que O=X(TA), pero aplicado este valor a otros vocablos no parece
alcanzar grandes logros.

VII-B-18.- USKEIKE
Ya visto;

VII-B-19.- IUNSTIR
Con esta palabra termina el texto de la Cara B. Destacábamos en
Orleyl V-35, la secuencia USKEIKE IUNSTIR, que tenemos registrada
seis veces.
NOTAS FINALES

En el estudio de cada una de las palabras de estos tres plomos he-


mos hecho aquellas observaciones que hemos considerado oportunas,
por lo que, en realidad, poco es lo que ahora podemos decir. No obs-
tante añadimos las siguientes notas finales:
A) En primer lugar, queremos dejar constancia de que nuestra
reiteración en señalar paralelos a las palabras de estos plomos, se jus-
tifica por el deseo de comprobar la unidad de la lengua en todo el te-
rritorio ibérico, desde el S.E., de Francia hasta el S.E., de España, con
los naturales matices regionales, como ya expusimos en anteriores
ocasiones (50).
B ) Consideramos que pueden ser del mayor interés para el des-
ciframiento de la lengua ibérica las secuencias que hemos destacado
en estos plomos, las que, por otro lado, nos confirman la íntima rela-
ción que guardan entre sí los tres textos ahora estudiados, cuyo conte-
nido, no obstante estar redactados por distintas manos, nos prueban
que tienen un propósito común (oración, ofrenda, alabanza, etc.?). En
tres ocasiones estas secuencias tielien su réplica en Los Villares y El
Solaig.
Las secuencias que hemos destacado son:
1. ORLEYL V-12 y 13 ............... BAI DURANE
ORLEYL V- 15 y 16 ............... BAI DURANE

2 . ORLEYL VII-A-25,26 y 2 7 ........ CALAISE BACARA DURANE


ORLEYL VII-A-30-3 1 y 3 2 ......... [CALAI]SE BACARA DURANE

3 . ORLEYL V- 18 y 19 ............... GUDUR BITEROKETETINE


ORLEYL VII-B-6 y 7 .............. GUDUBOIKE BITEROKETINE

4. ORLEYL V-25 y 2 6 ............... IUNSTIR LACU


ORLEYL V-33 y 3 4 ............... IUNSTIR LACU
ORLEYL VII-B- 1 4 y 1 5 ............ IUNSTIR LACUNWILTIRTE

5. ORLEYL V-27-28-29-30 y 3 1 ...... BODODASEAI SELKEAI BARDUNEAI


UNIBEIKEAI ANERAI
ORLEYL VII-A-7-8-9-12 y 13 ...... BODODASEAI SELKEAI • BARDONEAI
AURUN[IBEI]KEAI ANERAI

(50) D. FLETCHER VALLS: tproblemas de la Cultura Ibérica.))Trabajos Varios del


s.I.P., número 22. Valencia, 1960.
FLETCHER, op. cit. nota 2, págs. 88-89.
FLETCHER, op. cit. nota 10, pág. 203.
FLETCHER, op. cit. nota 38, pág. 208.
118 D. FLETCHER

6. ORLEYL VII-6 y 7 ................ USKEIKE IUSTIR


ORLEYL VI- 1 2 y 13 . . . . . . . . . . . . . . USKEIKE IUSTIR
ORLEYL VII-A-4 y 5 . . . . . . . . . . . . . . USKEIKE IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 13 y 1 4 ............ USKEIKEAI IUNSTIR
ORLEYL VII-B- 18 y 19 . . . . . . . . . . . . USKEIKE IUNSTIR
VILLARES VI1 (inédito) ........... USKE[IKE] IUNSTJ [R]

7. ORLEYL VI- 1 y 2 ................ IUSTIR ADUNE


ORLEYL VII-A-1-2 ............... IUNSTIR ADUNE
VILLARES VI-B- 19 y 2 0 .......... IUSTIR ADURTE

8. ORLEYL VII-A-3-4 y 5 .....:...... BARBINKEAI USKEIKE IUNSTIR


ORLEYL VII-B-12-13 y 14 ......... BARBIN[KE] USKEIKEAI IUNSTIR

9. ORLEYL VII-A-33 y 3 4 . . .......... IUNSIRWI BELE~AGINEAI


SOLAIG ......................... IUNSTIR BELESAIR

Como vemos, estas secuencias se dan unas veces en el mismo plo-


mo y otras en diversos textos de la serie; en tres ocasiones (núms. 6 , 7
y 9) se relacionan con textos de otros plomos, en un caso (num. 9) de
un yacimiento cercano a Orleyl, pero en los otros dos (núms. 6 y 7),de
un poblado bastante alejado.
Destacan, por su extensión la número 5 y por su reiteración la 6,
que podría interpretarse como una expresión laudatoria («¿granse-
ñor »,((excelsoseñor)),((altisirnoseñor?))),dicho sea como mera hipóte-
sis.
C) En relación con IUNSTIR ya hemos indicado, al estudiarlo,
que de los 2 6 que tenemos registrados, en la región valenciana se cen-
tran 23, con un claro predominio en la provincia de Castellón, donde
aparece 17 veces, lo que nos permite suponer que es palabra de am-
plia utilización en esta zona, siendo poco frecuente su empleo en otras
comarcas. Como es lógico esta conclusión puede variar con nuevos
hallazgos pero, de momento, así está la cuestión. Aiíadamos que
IUNSTIR es el comienzo de los textos Orleyl VI y VI.,Solaig y Serreta.
D) Otro vocablo que sólo hemos identificado en estos plomos es
BODODAS que, con variantes, lo hemos registrado 6 veces; tiene todo
el aspecto de un nombre personal, posiblemente relacionado con el in-
cinerado. Otras seis veces se encuentra DURANE.
E) La relación con vocablos de otros yacimientos, tanto del territo-
rio nacional como del sur de Francia, se patentiza a través de los pa-
ralelos que hemos ido mencionando a lo largo del presente estudio,
confirmándose lo ya expuesto al estudiar los plomos de Yátova. A la
lista que allí dábamos (51),podemos añadir ahora la relación de pala-
bras que aparecen en textos ibéricos de Pech Maho, recientemente
dadas a conocer por el Profesor Solier y su paralelo con otras proce-
dentes del territorio español, tales como ADIN, BAN, BILOS, BIN, IL-
TIR, etc. etc. (52).
F) Dado el posible carácter más o menos religioso que puede atri-
buirse a estos textos, teniendo en cuenta las circunstancias de su ha-
llazgo, no es de extrañar que no aparezcan cifras, pero sí la palabra
SALIR (en Orleyl VI- 16),la que se atribuye significado comercial, que
podría justificarse por la presencia de los ponderales y platillo de ba-
lanza en la sepultura.
G)El final -KEAI / KE - AI, s61o hemos podido localizarlo en la pro-
vincia de Castellón, por lo que junto con IUNSTIR podría considerarse
típico de las comarcas castellonenses.
H)También podría atribuirse carácter preferentemente local a la
combinación -NWLIR- sólo señalada en Orleyl, y posiblemente en So-
laig.
I) La palabra USKEIKE ha venido a confirmar, dado su paralelis-
mo con el USKE [IKE] de Villares VII, la lectura que dimos del signo
E = K E , aparecido por primera vez en Villares VI.
J ) En diversas ocasiones hemos hecho referencia a vocablos vas-
cos. También ahora y sin haber agotado las posibilidades de coinci-
dencia, mencionamos algunas palabras vascas parangonables con las
ibéricas; pero, volvemos a insistir que se aducen como dato indicativo
de coincidencia de lectura, puesto que ignoramos si el significado ac-
tual del vocablo vasco que se coteja puede aplicarse a la palabra ibéri-
ca con la que guarda semejanza.
K) Del máximo interés resulta el hallazgo cerrado de estos tres
plomos, tanto para especular sobre su contenido como para determi-
nar su cronología, ligada a la que se dé a la crátera en cuyo interior
aparecieron (53).

(51) FLETCHER, op. cit. nota 2, pág. 88.


(52) SOLER, op. cit. nota 32, pág. 88.
(53) En toda datación por mediación de la cerámica importada, se ha de tener presente
que, entre la fecha atribuida a su fabricación y el momento de su utilización para el enterra-
miento, ha de concederse un margen no menor a 25/30 aíios. Por ello, a la vista de la crono-
logía atribuida a la crátera en la que aparecieron los plomos, podríamos suponer que éstos
fueron enterrados hacia el final del S. I V a. C., o comienzos del 111 a. C. (v. el capítulo 11, dedi-
cado al estudio de las cerámicas importadas, número 2.12).
APENDICES

1 .-Léxico de los textos de Orleyl.

2.-Voces indígenas mencionadas en este estudio.

3.-Voces vascas citadas en este estudio.


ORLEYL

1.-LEXICO DE LOS TEXTOS DE ORLEYL

z zz zv VI1
. IOI\L
LEXZCO ZZZ V VI
A B A B A B A B

ADUNE . . . . . . . . . . . . . . . 2 2 2
AENTEN . . . . . . . . . . . . . . 3 1
AGINIRTE . . . . . . . . . . . . 41 1
ANER . . . . . . . . . . . . . . . . a 1
ANERAI . . . . . . . . . . . . . . 31 13 2
ANTINWLIR . . . . . . . . . . 5 1
ANWBERAI . . . . . . . . . . . 17 1
AREBINISE . . . . . . . . . . . 24 1
ARELI . . . . . . . . . . . . . . . . 14 1
ARERE . . . . . . . . . . . . . . . 5 1
ARICAR . . . . . . . . . . . . . . 712 3 21 3
ARINE . . . . . . . . . . . . . . . 1 1
ASTI . . . . . . . . . . . . . . . . . 29 1
ATABERAI . . . . . . . . . . . . 16 1
ATILEBEIU . . . . . . . . . . . 9 1
AURUN[IBEI]KEAI . . . . . 12 1
BA ...AR . . . . . . . . . . . . . . . 6 1
BABANS . . . . . . . . . . . . . . 4 1
BACARA . . . . . . . . . . . . . . 2 613 1 2
BACOTA . . . . . . . . . . . . . . 2 1
BAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . 3 12/15 3
BAITESIR . . . . . . . . . . . . . 6 1
BAN . . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 1
BANTAGIGIA . . . . . . . . . . 17 1
BANWIRESU ...LU . . . . . . 40 1
BANWLIR . . . . . . . . . . . . . 11 1
..BAR . . . . . . . . . . . . . . . . . 1 1
B A ~ I N. . . . . . . . . . . . . . 12 1
BARBINKEAI . . . . . . . . . . 3 1
BARDONEAI . . . . . . . . . . 9 1
BARDUNEAI . . . . . . . . . . 29 1
BARENWLIGI . . . . . . . . . 4 1
BASBITEROKETINE . . . . 7 1
BASERNWLBE . . . . . . . . . 4 1
BASIAUKECU . . . . . . . . . . 44 1
BATA~TITE ......... 1813 7 2
BECATE . . . . . . . . . . . . . . 7 1
BELAIKE . . . . . . . . . . . . . 3 1
BELESAGINEAI . . . . . . . . 34 1
BELESKERETO . . . . . . . . 4 1
BINISAI . . . . . . . . . . . . . . 22 1
BINWLIGISE . . . . . . . . . . 24 1
BITEBAGIRSBANE . . . . . 3 1
BITER . . . . . . . . . . . . . . . . 518 2
BITEROKETETINE . . . . . 19 1
124. D. FLETCHER

l LEXZCO

l
BITIROKEBETENSE . . . .
BIURTIGI . . . . . . . . . . . . .
BODODAS . . . . . . . . . . . . .
BODODASEAI . . . . . . . . .
BODODASEIKE . . . . . . . .
BODODASTE . . . . . . . . . .
BODODIGI . . . . . . . . . . . .
BORARNWL[IR] . . . . . . .
CAESAGIM . . . . . . . . . . . . .
CAISANWLIR . . . . . . . . . .
CALAISE . . . . . . . . . . . . . .
CARESTAREAI . . . . . . . .
CAUNE . . . . . . . . . . . . . . .
KEIETISIATENSE . . . . . .
KEITIATELU ............
CURSIAUKECU . . . . . . . .
DURANE . . . . . . . . . . . . . .
DURANEI . . . . . . . . . . . . .
DUSGITAR . . . . . . . . . . . .
ECA . . . . . . . . . . . . . . . . . .
ERATIARE . . . . . . . . . . . .
GOGOR . . . . . . . . . . . . . . .
GUDUBOIKE
GUDUR . . . . . . . . . . . . . . .
IAGIGINURE . . . . . . . . . .
ILDURSAIRSAI . . . . . . . .
IRANTA . . . . . . . . . . . . . .
IRE . . . . . . . . . . . . . . . . . .
IRICA . . . . . . . . . . . . . . . .
IRSTEBE . . . . . . . . . . . . .
ISAI . . . . . . . . . . . . . . . . . .
ITARARTETARA . . . . . . .
ITIKEREUTETI . . . . . . . .
IUNSIRWI . . . . . . . . . . . .
IUNSTIR . . . . . . . . . . . . . .
IUNSTIRICA . . . . . . . . . .
IUSTIR . . . . . . . . . . . . . . .
LACU . . . . . . . . . . . . . . . . .
L A C ~ W I L T I R T E. . . . . .
LAURISKERGATE . . . . . .
LEITASEAI . . . . . . . . . . . .
...NANA . . . . . . . . . . . . . .
NISORBARAI . . . . . . . . . .
OBA . . . . . . . . . . . . . . . . . .
ORKEIABARA [I]. . . . . . .
ORLEYL 125

1 11 1v VI1
LEXICO 111 V VI 101 \1 .
A B A B A B A B

ORTITAR . . . . . . . . . . . . . 4 1
...BARTALIRBI . . . . . . . . 1 1
...BERSABARI . . . . . . . . . 2 1
...BOKETAN. . . . . . . . . . . 10 6 2
ROSAIR . . . . . . . . . . . . . . 5 1
SALIR . . . . . . . . . . . . . . . . 4 16 2
SANIBEIRAI . . . . . . . . . . 14 1
SANIKEAI . . . . . . . . . . . . 10 1
SBEELANE . . . . . . . . . . . . 4 1
...SE . . . . . . . . . . . . . . . . . . 42 1
SEKENIUSU . . . . . . . . . . . 8 1
SELKEAI . . . . . . . . . . . . . . 28 8 2
SELGINIUSTAI . . . . . . . . 1O 1
SELUUE . . . . . . . . . . . . . . 2 1
SIAI . . . . . . . . . . . . . . . . . . 39 1
TAILINIRE . . . . . . . . . . . . 17 1
TANBALEUS . . . . . . . . . . . . 9 1
TAUEBARTIATE . . . . . . . . 22 1
...T E N . . . . . . . . . . . . . . . . 3 1
...T I N . . . . . . . . . . . . . . . . 36 1
UGIATENSGI . . . . . . . . . . 1 1
UNIBEIKEAI . . . . . . . . . . 3 013 2 2
URLEBO . . . . . . . . . . . . . . 1 1
USKEANERLATI . . . . . . . 42 1
USKEIKE . . . . . . . . . . . . . 35 611 2 411 1 18 6
USKEIKEAI . . . . . . . . . . . 38 13 2
USTALARI . . . . . . . . . . . . 38 1
[USTAR~IKE . . . . . . . . . . 5 1

NUMERALES
A 1 0 1111 S 1

1 0 6 4 3 7 1 1 42 18 45 19 156
ORLEYL

2.-VOCES INDIGENAS MENCIONADAS EN ESTE ESTUDIO

A AURKERLECAN VII-A- 1 2
VI- 1 7 AURDULOGIN VII-A- 1 2
ABARARBAN
VI- 17 AURSO VII-A- 1 2
ABARKEBORSTE
VI- 1 7 AURTILEIS VII-A- 1 2
ABARIEGITE
AURUNIBEIKEAI V-2 7/V- 3 ONII-A- 12
ABARSCUBORAGITIKE VII-B-3
VI-1 7 AURUNINGIGA VII-A-12IVII-B-8
ABARTANBAN
ABARTARIKE V-3 5IVI-5MI-A-44
ABOCO V-2 1
ABOEIKE VI-1 1
ABULUSBIN V-24
ABULU V-40 B
ADINBIN VII-A-3/VII-A-22 BABIN V-24
ADINE VI-2 BACARAWI VII-A-26
ADINGIBAS VII-B-7 BACASKETAI V-3 1
ADINKERE VII-B-5 BAGAROK VII-A-2 6
ADUN VI-2 BAI V-12
ADUNIU VI- 2 BAICAR V-12
ADURTE V-9NI-2 BAILA V-12
AEILONA VI-14 BAINWBAR v-1 1
AIDULE CUTE VI-2 BAISE VII-A-25
AIDURTEN V-9NI-2 BAISETAS V-2/VII-A- 1 5
A1TILERAB.E V-9 BAITESGIKE VII-B-3
AIUNESKER V-10 BALCARCAIS V-14
AIUNIBAISEAKE V-30/VII-A- 1 2 BALKEBEREI V- 1 6 N I - 3
ALATESU V-8~-40 BALKELACU V-2 6lVII-A-44
ALEICU VII-A-44 BALKETAS VII-A- 15
ANETILIKE V-35 BALKEUNI V-3ON-39
ANGISA V-24 BALDUN V-29
ANTINUE v-5 BALDUSER v-29
ARABAGI V-4/V-3 6/VII-B-1 BALSTIBATE V-22
ARACARER V-7/VII-B- 1 BANCUR~ VU-A-45
ARGI V-36 BANEBAR V-3/V- 1 1
ARECA v-7 BANEGIS v-3
ARECO~ATAS V-2 BANEN V-3
AREILONA VI- 1 4 BANIECARSE v-24
ARICALERCA V-7lVII-B- 1 BANIWBAR V-11
ARICU V-7/VII-B- 1 BANWIBAE V-40
ARNAI V-27/V-3 1 BARBINKE V-4/V-24.MI-A-3
ARSE VII-A-2 5 BARBORBA V-4
ARSE V-24 BARTAR V-4
ARSKERE VII-B-5 BARTAS V-2
ARTIDURACUNAN V-6 BARTASCO VII-A- 1 5
ARTINGI v-36 BARTIBANBEN V-4
ASARUNGI V-4/V-36 BASBANE V-3
ASTEBEIKEAI V - 2 7/V-30IVII-A-12/VII-A-29BASBIN VII-A-3
ASTIGI V-3 6 BASDUR VII-B-7
ATIL V-9 BASEROKE VII-A-44
ATINBELAUR V- 5 BAZIR VII-B-4/VII-B-7
ATINWR V- 5 BASSRTIR VI-10
ATIRTIGIGI VII-A- I 7/VII-A-43 BASSUMIWTINI~E V- 1/VII-B-5
AURBIUR VII-A- 1 2 BASTARTINE v-19
128 D. FLETCHER

BASTESILTIRTEV-22/VII-A-4 l/VII-B- 1 5 BUDARE V-2


BASTOGISA V-24 BURANALIR V-5JVII-A-23
BASTUGITAS V-2
BATEIRE v-1
BECONTEKE VII-A-44
BECUERE VII-B-5 C - (: -K
BEDUGINETE V-3 6/VII-B- 10
BELESAIR VII-A-20/VII-A-24 CAI?CAR V-14
BENEBETANER V-42 CAISCATA V-14
BENTIA VII-A-40 CAISESA V-14
BERICA~SENSE V-241~-37 CAISUR V-14
BERTEKER VII-B-2 CAL VII-A-25
BIDUDEDIN V- 1 9 M I - A - 3 6 CALISCASE VII-A-25
B1EIGAT.E V-10 CANBULOIKE VII-B-3
BIGILTIRSTE VII-A-4 1IVII-B- 1 5 CARBANISKER v-10
BILUSTIBAS VII-B-7 CARCASAR. VII-A-35
BIN V-24 CARCOSCAR VII-A-35
BINEN V-24 CARESBANITE VII-A-35
BINIKE V-24IV-25 CARESBOBIGIR VII-A-3 5
BINTISUSEI V-24 CARESIRTE VII-A-3 5
BINUSARIGAN V-24 CAUECAS v-39
BIOSILDUN VII-A-20 CAUNISTEAN v-39
BITAN V-3 CAURBAN v-39
BITARSTETI V- 19/VII-B-2 KEIBORS V-37lVII-B-6
BITEBAGIS V-3 KEIBOSTER v-37
BITEN V-3 KEILA v-37
BITERO V-4 1 KEIRBA v-37
BITIIBA V-3 KEITESNAURA VII-A-40
BITIN V-3 KEIWI v-37
BITIREBOSIN V-41 KELSE VII-A-25
BITOCAURTI VII-B-2 KELTEGIAR V-18
BIURKERESKEN VII-A- 12 KESSE VII-A-25
BIURTITE VII-A- 18 GIGQGOR v-2 1
BIURTILEIS VII-A- 1 2 GIRSTO v-3
BOGO V-2 1 GOBO v-2 1
BODDI V-2 GOGO v-2 1
BODILCOS V-2 COROIKE V-35/VII-A-44
BODO V-2 CORTIA VII-A-40
BODON V-2 COSOIU v-9
BODFI V-2 COTI V-42
BODUR V-2 CUCONILTIR VII-B- 1 5
BOIWTARATI V-20/V-42NII-A- 1 8 GUDUA v-18
BONANTITE VII-A- 18 GUDUI v-18
BORACAU V-39/VII-A-23 GUDUR V-18
BORARICU V-4MI-A-23 CULESIR v-5
BORARTIUKERWI VII-A-23 CULESTILEIS VII-A- 1 5
BO~BELIORCU VII-A-23NII-A-44 GURS V-3/VII-A-45
BORBERONIU V-9NII-A-23 CUTIDUCUSU V-8
BORCUSI VII-A-23
BOROTEN VII-A-23
BORSTE VII-A-23
BORTEBARA VII-A-23 D-T
BOSCU VII-A-44
BOUTIA V-2 TAGISGAROK VII-A- 1 7
BOUTINTIBAS VII-B-7 TADEIARICANE V-3/VII-B- 1
BOUTIUS V-2 TA~ATI V-20/V-4.2IVII-A- 1 8
TARIKEDEL VI- 5 IEBASE V-24
TASBARIGIBA~ V-2NII-B-7 ILDUN V 9NII-A-2
- 2 0
TATEIARICA VII-B-8 ILDUNBA~ V 9NII-A-2
- 2 0
...TATIN V-19 ILDUNIRAENAI V-27
TAUTALOS v-22 ILDURATIN VII-A-20
TAUTIN V-19N-22NII-A-36 ILDUTAS V-2NII-A- 1 5
TAUTINCORS V-22NII-A-% ILTI VII-A-29
TAUTINNUS v-22 ILTIR VI- 1ONII-B-
1 5
DETSDEA V-18 ILTIRBIGISEN VII-B- 1 5
TER v-37 ILTIRKES VII-B- 1 5
TETAERIARBAN VII-A-28 ILTIRSAR VII-B-15
TETUTIN VII-A-3 6 ILTIRTA VII-B- 1 5
TEUTIN V- 19NII-A-3 6 ILTIRTA~ALIRBAN VII-B-15
TEWBARESE V-Z4 ILTIRTIKER VII-B- 1 5
TIATECU V-22/VII-A-40 ILURTIBAS VII-B- 7
TIATEDU V- 2 2NII-A-40 INEWUGI V-4/V-36
TIBATEGI v-22 IRA v-1
TIGIENATIR V-3 6 IR AN v -1
TIGIRSACAR V-3IV-36 IRBETE VII-A-41
TIGIRSENI V-3N-36 IRCA VII-B-8
...TITAR VI-4- IRIKE VI-5/VII-B-8
TORETIN V-19 IRITERCA VII-B-8
DUIDUIBORTETIN V-19 ISBINAI V-24N-27/VII-A-22
DUNER V-2 9 ISCAR v-10
DUNTIBAITE V-29 ISKERATIN V-ION-19
TURABAI v-12/v-27 ISKERBELES v-10
DURABANU V-6 ISKERIABE v-10
DURANCAIE V-6 IUMSTIR V-25
DUSEATIA VII-A-40 IUNSTIR V-25N-35IVII-A-34
IUSTIR V-25IVI-2

EBARER v-22 L
EBEREIKE VI- 5lVI- 1 1
EBIRTE VII-A-4 1 LABEISILDUNIR VII-A-20
ECARIU v-9 LAKEISEI V-16
EGIACU VII-A-44 LAGINIGI VII-B- 1 0
ELCAUN v-39 LAGUGIEKEN V-26
ENASAGTN VII-A-34.NII-B-10 LACUER V-26
EREBAUSITIRTAS v-2 LACUERCARWI V-26
ERESU V-40 LACUN V-26
ERTOIGI V-4/V-3 6 LACUSWI V-26
ETARE V-20/VII-A-24h'lI-B-5 LACUTAS V-2IV-26IVII-A- 1 5
ETERAI V-2 7 LADUNEITIN V-19
ETESILIR v-5lV-37 LAIKEBERTASE VII-A-25
ETESU V-40 LECAR v-7
ETIBABIRBETE V-41 LEGUSEGIK V-26
EUGIAR VII-B-2 LE1 VII-A- 1 5
EUGIN VII-B-2NII-B- 1 0 LEISIR V-5NII-A- 1 5
LEISKER v-10
LEISTIKER VII-A- 1 5
LEREUTINIR v -5
IATI LORSURASE V-24
IBECOALACU LURBO VII-B-6
ICORTAS LUSPANGIBAS VII-B-7
SEIGICA VII-B-8
SELGI V-28/V-36/VII-B- 1 0
NANBIN SELGIBORA VII-B- 1 0
NEITEKERU SELGITERAR v-28/v11-~-io
NEITIN SELDARBAN V-2 8/VII-B- 10
NEREILDUN SELDARWI V-28/VII-B- 1 0
NISGINIBANITE SENWRUN VII-A- 1 0
SESKERSDURAN V-6
SESDIRGADEDIN V-19
SETALIKEAN V-42
OLONTIGI SIBANTIN VII-A-39
OLORTIGIRS SIBELTIRICAN VII-A-39
ORKEIKE SIKENSTIS VII-A-39
OROTI SINEBETIN VII-A-39
ORTI SIRIU v-9
ORTIN SOFIN V- 1Z/VII-B- 1 0
ORTINE SORIKE V-35/VI-5
ORTOR SORLACU V-26
OSATI SOSINAI V-27
SOSINTIGI V-36
STILACUN V-26
SUISEBARTAS V-ZNII-A- 1 5

...RAI V-2 7
...RETINE V- 19/VII-A- 1 8
u
...RKEI VI- 1 7
UARATAS v-2
S UCOSE VII-A-2 5
ULTITAR VI-4IVII-A-2 8/VII-A-3 5
SACALACUCA V-26 ULTITEKERAICASE VII-A-25
SACALISKER v-10 UMARGIBAS VII-B-7
~ACARBJSCAR v-10 UNIBELO V-30/VII-A-12
SACARISKER v-10 UNIBETIN V-30
SACARISKER v-10 UNSIR V-25
SALDUGILERCU VII-A-44
URCAILU V-40
SALDUTIBAITE v-22
VII-B- 1 0 URKEBAS V-35/VII-B-7
SALGITEIKE
SALGITEITA VII-B- 1 0 URKEKERERE VII-B-5
SALIR VI- 1 6 URKESKER V-35
SAN VII-A- 1 0 USKEIKE V-35
SANER V-42/VII-A- 1 0 USIBETIN V-30
SAN1 VII-A- 1 0 UsTAIN V-35/VII-B- 1 0
SANIBAR VII-A- 1 0 USTALAIBI V-35/V-38/VII-B- 1 0
SANIBELSER VII-A- 1 0 USTARIKE V-38/VI-5/VII-B- 1 0
SANIGIRSTO VII-A- 10
SANO VII-A- 1 0
SANUKE VII-A- 1 0
SA~ESU V-40
3.-VOCES VASCAS CITADAS EN ESTE ESTUDIO

A GUDU
GURTZ
ABAR
ABARA
ABARI
ADU
AGIN IK / IKAN
AIDUN IRE
ARE IRIKA
ARIGARI
ARIK A
ARIKARI
AZTI
LAGUN
1e1
LU
BAI v-12
BAITURA v-12
BAKAR VII-A-26
BANDA VII-A- 17
BASERI VII-B-4.
BELA VII-B-3
BELAIKI VII-B-3

ORKEI VI- 17
ORTI v1-4

GI-KI
GOGOR
INDICE GENERAL

CAPITULO I.-Los materiales d e la necrópolis de Orleyl e n el


Museo d e Burriana (Abilio Lázaro Mengod y Norberto
Mesado Oliver).

A..La Punta d e Orleyl y su entorno . . . . . . . . . . . . . . . .


La Necrópolis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Excavación de la necropolis . . . . . . . . . . . . . . . . . .

B.-Inventario del material arqueológico procedente d e


la Necrópolis . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Cerámica . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Metal . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Vidrio . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Piedra . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Hueso . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO II.-Consideraciones generales (Norberto Mesado


Oliver y Abilio Lázaro Mengod) . . . . . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO II1.-Cerámicas importadas de la Necrópolis de


Orleyl . (Carmen Aranegui Gascó) . . . . . . . . . . . . . . . . .

1..-Cerámicas de la Grecia del Este . . . . . . . . . . .


2.-Cerámica ática . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
3.-Cerámicas del taller de las ((PequeñasEstampi-
llas)) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
4.-Ungüentarios de pasta clara . . . . . . . . . . . . . .

CAPITULO IV.-Los plomos escritos (Orleyl V. V I y V I I ) (Do-


mingo Fletcher Valls) . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Orleyl V . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Orleyl VI . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Orleyl VI1 . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .
Notas finales . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . .

APENDICES:
1.-Léxico de los plomos de Orleyl . . . . . . . . . . . . . . . . . .
2.-Voces indígenas mencionadas en este estudio . . . . .
3.-Voces vascas citadas en este estudio . . . . . . . . . . . . .
LAMINAS
MATERIALES DE ORLEYL LAIVL. 1
MATERIALES DE ORLEYL LAM. 11

Cerámica procedente de la necrópolis


Cerámica procedente de la necrópolis
Fragmento de tinaja ovoide procedente de la necrópolis
MATERIALES DE ORLEYL LAM. V
Objetos procedentes de la necrópolis
LAM. VI1

Objetos de metal procedentes de la necrópolis


Cerámica procedente de la Sepultura 1
-- LAM. IX

Ponderales, platillo de balanza y cerámica de la Sepultura 11


MATERIALES DE ORLEYL

Crátera ática de figuras rojas, procedente de la Sepultura 11


MATERIALES DE ORLEYL

Otra perspectiva de la crátera ática de la Sepultura 11


MATERIALES DE ORLEYL LAM. XII

Detaile de la decoración de la crátera de la Sepultura 11


MATERIALES DE ORLEYL 1.AM. XITI

Detalle de la decoracibn de la crátera de la Sepultura 11


MATERIALES DE ORLEYL LAM. XIV

Capas jónicas de la necrópolis


Cerámica ática (núm.1 , 2, 4, 13 y 14) y cerámica de las Pequeñas Estampillas (16)
MATERIALES DE ORLEYL LAM. XVI

Estado en que aparecieron los plomos:


a ) Orleyl VI. b) Orleyl V i i . c ) Orleyl V
LAM. XVII
LAM. XVIII

Macrofotografias detalle de los signos 4 y x


LAM. XIX

Macrofotografía detaiie de los signos 9y M a PIV


MATERIALES DE ORLEYL LAM. XX
LAM. XXI
LAM. XXII

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