En la relación área/ perímetro encontramos el problema ligado a la conservación
entre superficie y perímetro. Los autores Vinh Bang y Lunzer diseñan un abanico de pruebas, que con técnicas diversas tratan de dilucidar en qué medida una representación sensible favorece una cierta geometrización, o si por el contrario ésta puede falsear el razonamiento operatorio. Las técnicas consisten básicamente en la transformación progresiva de figuras. En otros casos se trata de construir superficies geométricas a partir de un perímetro constante, o bien, la deformación de una superficie, con conservación del perímetro.
A partir de los 11 o 12 años hay una generalización del decrecimiento de las
superficies transformadas, y la aceptación de la continuidad en las transformaciones, con anticipación de los límites de la transformación. Hay una diferenciación de las relaciones entre superficie y perímetro. La idea del decrecimiento de la superficie, manteniendo constante el perímetro, permite diferenciar la superficie y el perímetro. Sin embargo, el niño no admite de forma inmediata el razonamiento inverso: con perímetro constante la superficie varía, luego si la superficie permanece constante, el perímetro variará a su vez, pensando sin embargo que se necesita el mismo perímetro.
El objetivo de esta actividad es que los alumnos puedan descubrir la independencia de
las variaciones del área y del perímetro. Los alumnos suelen confundir ambas nociones, o bien considerar que son magnitudes proporcionales entre sí o que el aumento de una de ellas se corresponde con un aumento en la otra.
La educación matemática es parte fundamental en la formación de cada sujeto, por
ello se considera necesario analizar y diseñar estrategias didácticas que motiven, despierten interés y permitan que los estudiantes desarrollen habilidades y destrezas.
Esta actividad surge de la necesidad de generar ambientes de enseñanza dinámico,
en donde cada uno de los alumnos trabajando juntos se hacen responsables de su proceso de aprendizaje, contribuyendo al fortalecimiento de los conceptos de área y perímetro y a la motivación por el uso de material concreto. Esta propuesta permite llegar al aula propiciando una interacción del estudiante con el juego y que esto lo conlleve a la construcción solo o con sus pares del conocimiento por medio de un aprendizaje significativo, en donde el docente deja de ser un emisor o transmisor de conocimientos y se convierte en una guía en donde se propicien espacios para la comprensión y la argumentación.
Para lograr que los alumnos desarrollen competencias comunicativas, conceptuales,
interpretativas y argumentativas, se deben de crear ambientes de aprendizaje dinámicos en donde los ellos asuman una posición crítica y reflexiva, para que ellos construyan su propio conocimiento. El material concreto le permite visualmente encontrar relaciones o representar modelos matemáticos que con la simple imaginación no basta, es decir construir o fortalecer un conocimiento ya existente que posteriormente debe ser relacionado con la parte formal de las matemáticas.
En el fortalecimiento de estos conceptos no se pretende dar a conocer formulas o
modelos matemáticas para calcular en determinadas figuras el área y perímetro, lo que se busca es que los estudiantes mediante la utilización de diferentes materiales físicos comprendan el significado como tal y encuentren relaciones y diferencias entre estos conceptos.
Bibliografía:
Horacio Itzcovich, El abcé de la Matemática escolar, Aique educación.
María del Carmen Chamorro (2006), Didáctica de las Matemáticas, Pearson Educación, Madrid