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Luego a principios del Cenozoico se habría producido la acreción de los terrenos Dagua y

Cañasgordas al occidente y San Jacinto y Santa Marta al norte. En cuanto a los terrenos Atrato -San
Juan y Baudó al W y Ruma, Cocinas y Baja Guajira al N se habrían acrecionado durante el Neogeno

La orogenia caledoniana permitió la acreción del Terreno Chibcha al continente de Gondwana


durante una colisión entre Norteamérica y Sudamérica. Sin embargo el Terreno Chibcha no se
ubicó inmediatamente al frente del Bloque Autóctono de Colombia sino que se emplazó allí luego ,
después de ser dispersado de su lugar original de acreción.

El Terreno Chibcha se unió al Bloqu e Autócton o d e Colombia a finales d el Paleozoico por medio
d e la paleofalla d e rumb o d e Gu aicáramo. EL nuevo conjunto formó el Oriente Colombian o.

EVOLUCIÓN GEOLÓGICA DE COLOMBIA DURANTE EL PALEOZOICO INFERIOR

En el Terreno Chibcha, los conjuntos metamórficos han recibido varios nombres regionales tales
como el Gp. Quetamé en el Macizo de Quetamé, la Fm. Silgará en el Macizo de Santander y en el
de La F loresta, la Fm. Perijá en la Serranía de Perijá y los metasedimentos de La Cristalina en el
flanco E de la parte septentrional de la Cordillera Central. La edad de algunos de estos conjuntos
está conocida por dataciones tanto radiométricas como paleontológicas.

EL METAMORFISMO CALEDONIANO EN EL TERRENO CHIBCHA E1 Paleozoico temprano del Terreno


Chibcha está representado por varios conjuntos que incluyen secuenci as principal mente metasedi
mentari as afectadas por un metamorfismo de gra do desde muy bajo hasta mediano. La edad de
los protolitos de estos conjuntos está reconocida en algunos casos por la presencia de algunos
fósiles ordovícicos relativamente bien conservados y la edad del evento tectometamórfico esta
detectada tanto por mét odos geocronológicos como por la posición estratigráfica de las
formaciones sedimentarias devónicas que suprayacen, frecuentemente en discordanc ia, a las
unidades metamórficas.

Tectogénesis caledoniana en la Serranía de Perijá En la Serranía de Perijá, Forero (1970) localizó


algunos pocos afloramientos de rocas metamórficas de bajo grado las cuales fueron agrupadas en
la denominada Fm. Perijá. Se trata esencialmente de filitas sericíticos con intercalaciones de meta -
areniscas, de cuarcitas y de meta -arcosas conglomeraticas. No se han encontrado fósiles en la Fm.
Perijá pero la edad caledoniana del metamorfismo es aceptada porque la Fm. Perijá está recubierta
en discordancia por sedimentos devónicos bien datados por paleontología. Tectogénesis
caledoniana en la Sierra Nevada de Santa Marta y en la Península de La Guajira. En la SNSM, las
rocas metamórficas han sido agrupadas en un complejo polimetamórfico con eventos precámbri
co, pal eozoi cos, cretácico tardío y paleoceno (Tschanz el al., 1974). Sin embargo, en la opinión de
Restrepo y Toussaint (1986) la SNSM no corresponde a un solo conjunto geológico sino que está
constituida por al menos tres terrenos distintos, cada uno con sus eventos tectometamórficos
específicos. Hasta la fecha, no se ha detectado edades caledonianas para las unidades
metamórficas en ninguno de los supuestos terrenos pero la presencia de un evento de esta edad
sigue siendo factible, principalmente para la región SE de la SNSM que corresponde al Terreno
Chibcha. También en la Península de La Guajira que, al igual que la SNSM, corresponde a un
conjunto de varios terrenos distintos, se documentaron rocas metamórficas tales como esquistos
cloríticos y sericíticos, esquistos cuarzosos, cuarcitas y mármoles los cuates fueron agrupados en el
Gp. Macuira (Lookwood, 1965). Sin embargo, si bien una parte de este grupo es claramente
anterior al Triásico por estar intruida en el granito de Siapaná datado en 195 m.a. K/Ar (McDonald
y Opdyke, 1972) otra parte es de edad cretácica por contener restos de fósiles de esta edad. De
todos modos, en la actualidad, ni en la SNSM ni en la Península de la Guajira se ha podido detectar
un evento tectometamórfico i ndudablemente caledoniano, aunque su existencia es bastante
factible debido a la presencia en esta región de otras unidades geol ógi cas característi cas del
Terreno Chibcha el cual ha sido afectado por este evento de tectogénesis.

CEDIEL 2003

El terreno compuesto Guajira-Falcón está compuesto por una colección de fragmentos de corteza
continental Proterozoica y Pa leozoica, secuencias sedimentarias del Jurásico y corteza oceánica del
Cretácico acumuladas durante el proceso de emplazamiento de la placa del Caribe. Nuestra GU-FA
contiene la vagamente definida '' Cinturón Deformada del Caribe Sur '' de Ladd et al.

El carácter compuesto del terreno Guajira-Falcón se produjo cuando,


después de la acreción del Cretácico medio del terreno de Romeral (ver
abajo), el paso de la GU-FA ensambló astillas de la corteza oceánica del
Pacífico y restos continentales del
separación de las placas Norte y Sudamérica. Basado en asociaciones de
facies y fósiles contenidos registro, las secuencias jurásicas de la GU-FA
parecen correlacionarse con depósitos contemporáneos actualmente
expuestos en la Península de Yucatán (Pindell, 1993)
además de los estudios de Maresch et al. (2000), demuestran una historia metamórfica creciente y
una ruta migratoria que comienza en el Albiano para esta asociación heterogénea de rocas desde
el Pacífico hasta su posición actual.

1) La cual es una denominación informal para el extremo norte de la península de La


Guajira; presenta una zona centro oriental de montañas bajas que apenas superan
los 600 msnm, rodeados de llanuras y planicies. INGEOMINAS.
2) Localizada el al suroeste del departamento de Santa marta, y corresponde a una
zona montañosa muy quebrada que alcanza alturas por sobre los 4.500 msnm en la
zona de estudio; su altura máxima es de 5.775 msnm fuera del área. Al este la limita
la cuenca de los ríos Ranchería - Cesar.

MARCO TECTÓNICO REGIONAL

La guajira se encuentra interactuada por las placas de cocos, caribe y Suramérica, lo cual
durante el Paleozoico, Mesozoico y Cenozoico más temprano, las condiciones tectónicas
fueron relativamente estables. Sobre un terreno relativamente plano expuesto a leves
subsidencias y solevantamientos, se produjeron sucesivas transgresiones y regresiones
marinas desde el Paleozoico tardío hasta el Eoceno. Durante este tiempo se depositaron
secuencias que sólo presentan leves discordancias entre sí, por lo que después en el
Eoceno, Oligoceno y con mayor intensidad desde el Mioceno, la zona se vio sometida a
esfuerzos compresivos por la convergencia de las placas del Caribe, Nazca y de
Suramérica, que se resolvieron mediante fallamientos inversos y transcurrentes para
acomodar el terreno al necesario acortamiento resultado de esa actividad tectónica.
(Mercado, 2003); esta interaccion y los eventos que han surgido a través del tiempo
geológico de Colombia han causado que las formaciones o grupos que afloran en esta
parte del territorio Colombiano presente diferentes estilos estructurales relacionados a
cada uno de dichos eventos, y la evolución estructural es compleja y ligada tanto a la del
noroccidente de Suramérica como a la del Caribe.
Por lo que la deformación dentro de la Cuenca de La Baja Guajira genera un marco
estructural complejo donde se observan tres estilos prevalecientes: (1) conjunto de fallas
inversas de alto ángulo, longitudinales, (2) un grupo de fallas rumbo deslizantes de
componente dextral, (3) un conjunto menor de fallas laterales izquierdas que indican una
combinación de esfuerzos tensionales y compresivos asociados. (Vargas, 2012)
El emplazamiento de las fallas de Oca, Ciuza y la posterior reactivación de la Falla
Bucaramanga-Santa Marta (con terminación abrupta en la Falla de Oca), no solamente
explican el origen posible de la Sierra Nevada de Santa Marta, sino la generación de una
tectónica muy compleja para la Baja Guajira, que durante mucho tiempo se comportó
como una plataforma relativamente estable afectada solamente por cambios eustáticos y
fenómenos de subsidencia (Vargas, 2012)
En La Guajira se pueden reconocer cuatro bloques tectónicos limitados por megafallas. La
Alta Guajira, cuyo límite sur es la Falla Cuisa. La Media Guajira, localizada entre la Falla
Cuisa y la Falla Oca. La Sierra Nevada de Santa Marta, en el triángulo formado por las
fallas Oca al norte, Santa Marta – Bucaramanga al occidente y Cerrejón al oriente. Y la
serranía de Perijá, desde la Falla Cerrejón al oriente hasta el Golfo de Maracaibo en
territorio venezolano, en donde la alta guajira ha sufrido un desplazamiento hacia el
oriente a lo largo de la Falla Cuisa, al sur de la cual aún hay una zona montañosa que
fisiográficamente hace parte de la Alta Guajira, pero geológicamente es parte de la Media
Guajira y La Sierra Nevada de Santa Marta, constituida por las raíces del continente,
elevada desde los niveles normales a los cuales se encuentra el basamento precámbrico,
hasta por sobre los 5.700 msnm(Mercado, 2003). (Memoria Explicatica Ge)
Las fallas que se encuentran en la península de la Guajira y en la sierra nevada de santa
marta se estipula que son de una edad post-eocena, por lo que afectan rocas hasta de
edad eocena, y estarían activas en el presente, siendo estas fallas las siguientes:
Falla Simarua: Esta estructura fue sugerida por Álvarez (1967), al tratar de correlacionar
las rocas de las serranías de Simarúa y Jarara. La Falla Simarúa tiene una dirección
N60°E y una extensión de 26 km en la serranía de Simarúa; fue trazada por Álvarez
(1967), al considerar las
características litológicas a lo largo de su traza, que coloca en contacto neises y filitas con
diferente grado de metamorfismo, La Falla Simarúa pone en contacto, en la serranía de
Simarúa, filitas de la Formación Jarara de edad cretácica con neises del Grupo Macuira
de edad premesozoica, a partir de una zona estrecha de cizalladura de 10 m, donde se
pasa del neis a la filita (Álvarez, 1967) Zuluaga. et al (2009(Memoria de las Planchas 2,
3, 5, y 6 (con parte de las Planchas 4, 10 y 10 BIS). ÁLVAREZ, W., 1967. Geology of the
Simarúa and Carpintero áreas. Guajira península, Colombia. Tesis Ph.D., Princeton Univ. 168 p. New
Jersey.
Falla Puralapo: El trazo de esta estructura puede ser identificada al noroeste de la zona
de estudio, donde geomorfológicamente contrasta un valle de topografía suave con rocas
del Neis de Macuira contra una zona escarpada con rocas de la Formación Palanz y
Moina. Su trazo tiene dirección N50°E y luego se trunca contra el trazo de la Falla Cuisa;
su movimiento se considera normal, activo hasta el Cretácico temprano (Quintero, 2017)
(LEERgeologia)
Falla cosinas: Se considera que el Sistema de Fallas Cosinas hace parte del tren
estructural
regional N-NE a N-E, que se trata de una falla de cabalgamiento, pero debido a la rotación
y la deformación del bloque Cosinas, limitado por las fallas de Puralapo y Cuisa, el tren
estructural regional ha adoptado una tendencia N85°E. (Londoño, 2002)
(GuajiraMemoria2)
Falla Kasipoch: Fue definida por Álvarez (1967) y se presenta en el suroccidente del
área de Simarúa. La falla tiene una dirección N60°E, con inclinación del plano de falla
hacia el noroeste y una extensión aproximada de 20 km, Según Álvarez (1967) la Falla de
Kasiposh, corresponde a una falla de tipo inverso, sin embargo evidencias de campo
muestran que además de movimientos en la vertical la falla presenta movimientos en la
horizontal con componente dextral, evidenciado por una foliación sobreimpuesta en
neises del Neis de Macuira. (Zuluaga, 2009) (Memoria de las Planchas 2, 3, 5, y 6 (con
parte de las Planchas 4, 10 y 10 BIS).

Falla Santa Ana: Esta estructura fue definida por Álvarez (1967) en la serranía de
Simarúa, y toma el nombre del cerro Santa Ana. Es una falla de cabalgamiento con
dirección aproximada N50°E, que buza alrededor de 15° hacia el noroeste (Álvarez,
1967), con una extensión aproximada de 20 km; cabalga rocas metamórficas de edad
premesozoica del Grupo Macuira sobre rocas sedimentarias de la Formación Poschachi
de edad cretácica temprana. (Londoño, 2002) (GuajiraMemoria2)
ANTECEDENTES
El término de terreno ha sido utilizado por varios autores, a partir de los años 85 y en
particular en dos ensayos sintéticos regionales que propusieron una visión global del
territorio colombiano (Etayo et al., 1986; Restrepo y Toussaint, 1987 y 1988); en otros
trabajos mas locales se hizo uso del mismo termino, en donde permitieron suponer que la
esquina NW de Sudamérica era compuesta por un mosaico de terrenos alóctonos que se
habían acrecionado al Cratón Amazónico durante diversos periodos geológicos.
Colombia está compuesto por una serie de terrenos según Cediel (2003), en el cual
dentro de este estudio el enfoque se hará a partir del terreno que corresponde a la parte
de la Guajira, por lo que se determina que le corresponde el terreno Guajira - Falcon, y
para la parte de la Sierra Nevada de Santa Marta el terreno corresponde al mismo
nombre.
Terreno Guajira: Este terreno está compuesto por una colección de fragmentos del
Proterozoico y Paleozoico corteza continental, con secuencias sedimentarias del
jurásico y corteza oceánica del cretácico acumuladas durante el proceso de
emplazamiento de la placa del Caribe. (Cediel, 2003)
Sierra Nevada de Santa Marta: La sierra Nevada de Santa Marta está limitada por
el norte y el occidente por las fallas Oca y Santa Marta-Bucaramanga, a lo largo
de las cuales no sólo se ha desplazado lateralmente, sino también verticalmente
varios miles de metros, se calcula más de 7000 m a lo largo de la falla de Oca, si
se tienen en cuenta los 2000m de sedimentos depositados al norte de la falla, más
mínimo a los 5700m de altura de la sierra. Complementariamente, una serie de
fallas NE-SW a ENE-WSW han contribuido al levantamiento de la sierra, han
elevado escamas de basamento hacia la altura por compresión. [ CITATION Mer99
\l 9226 ] (trabajo Jenny)

Aunque según Toussaint y restrepo (1988 a 1994), el terreno que hace parte de la
Guajira es terreno sospechoso Chibcha (Ch), con basamento continental
precámbrico, comprende la cordillera Oriental, el Macizo de Santander y la parte
sureste de la sierra Nevada de Santa Marta. Su último evento tectometamórfico es
caledoniano. Rocas sedimentarias marinas del Paleozoico superior recubren en
discordancia las unidades metamórficas paleozoicas inferiores. Después de unirse
al bloque autóctono, un importante cinturón magmático afectó su borde occidental
durante el Jurásico y una importante cobertura sedimentaria mesocenozoica se
depositó encima alcanzando el cretácico marino más de 10000 m en la zona de
Bogotá. (Toussaint et al, 1996) (trabajo Jenny).

EVOLUCIÓN GEOLÓGICA
La historia geológica de La Alta Guajira es tan compleja que registra casi completamente todos los
eventos geológicos que afectaron Colombia desde el Proterozoico Tardío. Así, se observan rocas
que registraron colisiones durante el Precámbrico (por ejemplo del episodio de la orogenia
Orinoco) y durante el Paleozoico (conocidas en Norteamérica como orogenias Alleghenian y
Taconica), especialmente el episodio que ocurrió del Ordovícico medio al Silúrico y que se conoce
en Colombia como la Orogenia Quetame. También hay rocas que registran la formación de rifts
continentales en el Jurasico y el desarrollo de un margen pasivo en el Cretácico. Por último, es
posible también observar la influencia de la Orogenia Andina que se inició a finales del Cretácico y
que continuo hasta el Eoceno tardío – Oligoceno temprano. (Zuluaga, 2009) (Memoria de las
Planchas 2, 3, 5, y 6 (con parte de las Planchas 4, 10 y 10 BIS).

Durante el Precambrico las rocas del actual nucleo de la Sierra Nevada de Santa Marta, y
de las serranías de la Alta Guajira, así como el basamento de la serranía de Perijá, hacían
parte del sector noroccidental del actual Escudo de Guayana. Las rocas corresponden a un
fragmento del Escudo de Guayana, del entonces Continente de Pangea, sometidas durante
una o más oportunidades con anterioridad al Paleozoico a metamorfismo de alto grado
que produjeron desde esquistos y neises hasta migmatitas; en donde se reportan al
menos tres eventos metamórficos regionales: El primer metamorfismo
ocurrió en el Precámbrico, y se considera correlacionable con el evento
Grenvilliano (Restrepo-Pace, 1995 en INGEOMINAS 2002), que origino
rocas en las facies granulita y anfibolita de almandino y está
representado por la Granulita de Los Mangos y posiblemente por el Neis
de Buritaca y el Neis de Los Muchachitos (Romero, 2006) (estudio
sedimentológico)
El segundo evento se dio al occidente del Arco de Sevilla, y no afectó las
rocas más
antiguas que se encuentran al oriente de éste; corresponde a un
metamorfismo con una edad
mínima de 110 Ma que afecto el área de esquistos de Santa Marta, bajo
condiciones de la
facies esquistos verdes alta y anfibolita (Doolan 1970 en INGEOMINAS
2002); se
correlaciona hacia el sur con un evento registrado en la Cordillera
Central de la misma
edad, reflejado en las rocas del Complejo Arquía. Hacia el norte, en la
península de La
Guajira no se tienen registros que indiquen este metamorfismo, pero
podría estar
representado en alguna de las unidades que conforman el Grupo
Macuira o la Formación
Jarara y que a la fecha no han sido estudiadas en detalle. (Romero,
2006) (estudio sedimentológico)
El tercer evento metamórfico en la Sierra Nevada de Santa Marta se
registra a finales del
Cretácico y principios del Paleógeno y es anterior a 48 Ma cuando ocurre
la intrusión del
Batolito de Santa Marta. El grado de metamorfismo aumenta de norte a
sur y corresponde a
un metamorfismo dinámico en facies esquistos verdes. (Romero, 2006)
(estudio sedimentológico)
En el Devónico temprano, el terreno sufrió sumersión de modo que permitió la deposición
de unos 1.000 m de sedimentos en ambientes marinos de aguas someras durante el
Devónico temprano a medio y el Carbonífero, para pasar a más profundos durante el
Pérmico, ahora durante el Triásico, y hasta el Jurásico temprano, se produce
sedimentación, primero en ambiente marino, que pasa a transicional, con aportes
volcánicos, como lo evidencia el corte B-B’, en donde se representa la Fm Guatapuri que la
compone calizas a limolitas. Durante el Jurásico inferior y medio el ambiente
pasa a marino de aguas someras y se depositan más de 3.000 m en una cuenca en
subsidencia, igualmente en el corte lo representa la Fm la Quinta y paralelamente, hay
actividad volcánica ácida desde fines del Jurásico hasta principios del Cretácico(Fm
Batolito Patilla). (Mercado, 2003). (Memoria Explicatica Ge)

La posición actual del basamento precámbrico, en la Sierra Nevada de Santa Marta,


elevado a más de 5.700 msnm, alzado más de 12.000 m según Tschanz et al. (1974), se debe
a la fase tectónica Andina, activa desde el Mioceno tardío al presente, a la cual se asocia, a
su vez, la consecuente actividad de fallamientos transcurrentes representados en las fallas
Santa Marta - Bucaramanga y Oca, y a las inversas de bajo ángulo (cabalgamientos)
responsables del alzamiento de la serranía de Perijá, entre ellas la Falla Cerrejón, todas
como respuesta al necesario acortamiento de la corteza continental debido a la
convergencia de las placas Caribe, Suramericana y de Nazca. Integrando los datos de la
Sierra Nevada de Santa Marta y la serranía de Perijá, se puede concluir que ambas
serranías comenzaron sus fases de alzamiento durante el Paleógeno como respuesta a la
convergencia de las placas. El tectonismo en la Alta Guajira, a lo largo de las fallas inversas
que alzaron´el basamento, involucró escamas de rocas fosilíferas cretácicas que sufrieron
metamorfismo dinámico por lo cual se ha supuesto que hubo un evento metamórfico a
fines del Cretácico o principios del Cenozoico. (Mercado, 2003). (Memoria Explicatica
Ge)

Durante el Cuaternario, principalmente en la Media Guajira, solevantada levemente en


tiempos recientes, se formaron terrazas y llanuras constituidas por material producto de la
erosión de los terrenos elevados, así como conos aluviales asociados, todos cortados por la
actividad fluvial actual de los cauces. (Mercado, 2003). (Memoria Explicatica Ge)

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