ESTUDIO PANORÁMICO DE LA BIBLIA O

OSEAS

Un estudio de los 39 libros del

Antiguo Testamento y 27 libros del
Nuevo Testamento en 66 semanas
 LOS LIBROS DE LA BIBLIA
Génesis 1 Reyes Eclesiastés
Éxodo 2 Reyes Cantares
Levítico 1 Crónicas Isaías
Números 2 Crónicas Jeremías
Deuteronomio Esdras Lamentacione
s
Josué Nehemías Ezequiel
Jueces Ester Daniel
Rut Job Oseas
1 Samuel Salmos
2 Samuel Proverbios
 EL A.T. SE DIVIDE EN:
1. El Pentateuco: 5 libros
2. Los Libros Históricos: 12 libros
3. Los Poéticos: 5 libros
4. Los Profetas Mayores: 5 libros
5. Los Profetas Menores: 12 libros
 LOS PROFETAS MENORES
1. Oseas 7. Nahúm
2. Joel 8. Habacuc
3. Amós 9. Sofonías
4. Abdías 10. Hageo
5. Jonás 11. Zacarías
6. Miqueas 12. Malaquías
 NOMBRE DEL LIBRO
Hebreo: ‫ע‬ ֵׁ
ַ ‫הֹוש‬ – “Hoshea” que
significa literalmente: “Salvación”.
Versión LXX: Osēe (Ὠσηέ) –
transliteración de la palabra
hebrea: “Hoshea”.
Es la misma raíz para los nombres
castellanos de: Oseas, Josué, Jesús y
significa “Salvación”.
 EL LIBRO DE OSEAS
AUTOR: El libro presenta al autor “La pala-
bra del Señor vino a Oseas hijo de Beeri en
los días… de Jeroboam hijo de Joás, rey de
Israel” (1:1). Vivió en el seno de una familia
acomodada en Israel. Su libro muestra que
era un persona que tenía educación.
FECHA: Oseas vivió desde el reinado de
Jeroboam II hasta el de Ezequías, incluso la
caída de Samaria. Desde el 770 hasta el 705
a.C. Aunque ministró en Israel en sus últimos
30 años (735-705 a.C.).
 EL LIBRO DE OSEAS
ESTILO: Escrito en prosa y narración históri-
ca. Oseas predicaba con todo su corazón
puesto que predicaba a su pueblo. Oseas ha
sido llamado el Jeremías de Israel y el após-
tol Juan del AT.
PROPÓSITO: Oseas fue la última voz de
Dios al reino del Norte. Debía convencer a
sus compatriotas israelitas a que se arre-
pientan y se vuelvan a Dios, sino el cautive-
rio asirio sería su destino final.
Eran tiempos oscuros de inmoralidad y
corrupción espiritual y política.
 EL LIBRO DE OSEAS
De ninguno de los otro profeta tenemos tanta
información sobre su vida íntima como de él.
Tanto su esposa como sus hijos fueron seña-
les y presagios para Israel.
Jeroboam II gozó de la prosperidad que Dios
le dio, mas el pueblo se encontraba en deca-
dencia moral y espiritual.
El pecado de Israel había roto el corazón de
Dios y la predicación de Oseas venía sellada
con la marca de la compasión divina.
 EL LIBRO DE OSEAS
La situación era frágil para Israel; amenaza-
do desde afuera por Asiria, sufría una inesta-
bilidad interna debido a las intrigas políticas y
asesinatos de sus últimos reyes.
“Ellos establecieron reyes, pero no escogi-
dos por mí; constituyeron príncipes, mas yo
no lo supe” (8:4a).
Oseas tuvo que vivir su mensaje antes de pre-
dicarlo. Tuvo que experimentar una profunda
agonía en su vida familiar, para estar listo para
dar el mensaje de Dios a su pueblo.
 Reyes de Judá e Israel
Reino del Norte: Israel Oseas
Jeroboam II
Manahem Peka Caída de
Zacarías
Samaria
Salum Pekaía 721 a.C.

Oseas
790 750 740 725 710

Jotam Acaz
Ezequías
Uzías Reino del Sur: Judá
 810 760 750 730 720 710 700

JOEL 820 a.C. – 750 a.C.

AMÓS 765 a.C. – 750 a.C.
JONÁS 760 a.C. – ? a.C.

745 a.C. – 700 a.C. MIQUEAS

740 a.C. – 700 a.C. ISAÍAS .
735 a.C. – 705 a.C. OSEAS

Miqueas e Isaías en Judá, y Oseas en Israel.

Profetas Contemporáneos a Oseas
DIVISIONES DE OSEAS
 CONTENIDO DE OSEAS
1 La Esposa y los Hijos de Oseas
2 El Adulterio de la Esposa de Oseas
3 Búsqueda de la Mujer Infiel
4 Corrupción Moral de Israel
5 Castigo a la Apostasía de Israel
6 La Disciplina Correctora de Dios
7-8 Corrupción Espiritual de Israel
9-10 Castigo a Israel
11-12 Dios Trata con Israel
13-14 Destrucción Seguida por Salvación
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
Hay personas difíciles de amar. Mienten, ha-
cen cosas a espaldas de uno, parecen más un
enemigo que un amigo. Pero, ¿qué si esta per-
sona es tu esposa(o)? Hay parejas que se han
divorciado por menos que esto, y en sí, esto ya
es una tragedia ante los ojos de Dios.
Pero respecto a Dios ¿puede divorciarse?
Este es el tema del libro de Oseas.
En el AT, Israel es la esposa de Dios, e iba a
disfrutar de esta relación especial con Él.
Dios prometió bendiciones a su amada si ella
le era fiel.
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
Israel iba a ser juzgada por sus muchos peca-
dos e idolatría, y si Judá no tenía cuidado,
seguiría el mismo destino.
Dios llamó a Oseas, a tener un matrimonio que
reflejara la relación que tenía con Israel: con
una esposa adúltera.
Israel le había sido infiel y ahora, Dios presen-
taba cargos de divorcio contra ella.
Dios le pide a Oseas que experimente en car-
ne propia, lo que Él estaba padeciendo en su
relación con Israel: ¡la infidelidad!
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
¿Le pidió Dios a Oseas que se case con una
prostituta? Pueda ser que no sepamos lo que
pasó entre Oseas y Gomer, pero probable-
mente ella era bastante ‘movida’.
Dios la puso de ejemplo; Israel estaba involu-
crada en prostitución espiritual, y Dios quiere
mostrarnos un cuadro: Oseas haría con Gomer
lo que Dios iba a hacer con Israel.
Esto va más allá de ellos, hasta sus hijos: un
niño llamado ‘Jezreel’ (1:4), una niña llamada
‘Lo-ruhama’ (1:6), y niño llamado ‘Lo-ammi’
(1:9), tenían nombres significativos.
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
‘Jezreel’ es el nombre de un lugar de juicio.
En Jezreel estaba el viñedo que Jezabel arre-
bató y asesinó a su dueño para dárselo a
Acab (1 Re 21). Elías profetizó la muerte de
Jezabel en ese lugar. (2 Re 9: 36-37) y Jehú
mató Acab y Jezabel en Jezreel.
Así como Dios había juzgado a Acab y Jeza-
bel, ahora Dios traía juicio sobre Israel.
El nombre Jezreel, literalmente significa. “Dios
siembra”. ¿Es tu corazón buena tierra para la
semilla de la palabra de Dios? (Mt 13:1-23).
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
‘Lo-ruhama’ significa "sin piedad, ni misericor-
dia". El juicio de Dios no podía evitarse. No les
mostrará ninguna compasión mientras permite
que Israel enfrenten todo el rigor de su juicio.
‘Lo-ammi’ significa "no es mi pueblo, no es mi
hijo". En el pacto que Dios hizo con Israel los
llamó su pueblo y Él sería su Dios (Ex 6:7).
Ahora, debido a su pecado, todo eso se
invertiría. Israel sería arrojada lejos de Dios, y
su relación cortada.
La buena noticia para los cristianos es: ¡que
no hemos sido desechados!
(1) LA ESPOSA Y LOS HIJOS DE OSEAS
“Antes, ustedes no eran un
pueblo; pero ahora son el
pueblo de Dios; antes no
habían sido compadecidos,
pero ahora ya han sido com-
padecidos” (1 Pd 2:10; RVC).
Esta es la gracia que experi-
mentamos en Jesús!
“Con todo, los hijos de Israel serán tan numerosos
como la arena del mar, que no es posible medirla ni
contarla. Y allí donde se les dijo: Ustedes no son mi
pueblo, se les dirá: Ustedes son hijos del Dios de la
vida” (1:10; RVC).
 (2) EL ADULTERIO DE GOMER
Debido a su prostitución,
Dios ya no la considera su
esposa (2:2). Incluso lla-
ma a sus hijos: “hijos de
prostitución” (2:4).
Los pecados de Israel eran demasiados, el
plan de Dios era lidiar con ellos.
Así como Oseas echó a su esposa a manos de
sus amantes, así Dios prometió hacer lo mismo
con Israel, humillarla hasta “descubrir su locura
delante de los ojos de sus amantes” (2:10).
Se olvidó del Señor, ahora pagaría el precio.
 (2) EL ADULTERIO DE GOMER
Dios promete llevarla a un sitio de bendición.
Tanto así, que su relación volvería a ser la de
marido y mujer (2:16).
Israel será su esposa para siempre y conoce-
rán su bendición: grano, vino y aceite (2:22).
“Para siempre te tomaré por esposa, y serás
mi esposa ante Dios y ante los hombres, con
toda misericordia y compasión. Yo te tomaré
por esposa, con votos de fidelidad, y tú cono-
cerás a tu Señor” (2:19-20; RVC).
¡Tú escoges el matrimonio que quieres
tener!
(3) BÚSQUEDA DE LA MUJER INFIEL
Oseas acusa a la nación de ser infiel a sus
votos, tal como su esposa adúltera había sido
desleal a los suyos.
Gomer abandona a su esposo e hijos y se fue
tras sus amantes, sin importarle los suyos.
Mal pago recibió de sus amantes; ahora se
encuentra peor que esclava, probablemente
siendo explotada en un burdel. Valía poco.
“Me dijo el Señor: Ve, ama a una mujer amada de
su compañero, aunque adúltera, como el amor de
Dios para con los hijos de Israel, los cuales miran
a dioses ajenos, y aman tortas de pasas” (3:1).
(3) BÚSQUEDA DE LA MUJER INFIEL
“La compré para mí, di
por ella quince mone-
das de plata…” (3:19).
¡Imaginen la escena!
Oseas rescatando a
Gomer y trayéndola de
vuelta a casa.
Como Gomer, Israel iría a la esclavitud (cauti-
verio) por sus pecados. Pero este no es el fin.
Así como Oseas buscó a su esposa y la com-
pró de nuevo; así Dios buscará a su pueblo y
lo restaurará a su amor y bendición.
(3) BÚSQUEDA DE LA MUJER INFIEL
¿Reconocemos en la adúltera Gomer una
imagen vil y voluble de nosotros mismos?
Es difícil reconocerlo, y difícil de admitir cuan-
do lo vemos, porque “engañoso es el corazón
más que todas las cosas, y perverso; ¿quién
lo conocerá?” (Jer 17:9).
Entre todas las comparaciones uno de los
cuadros más vívidos del amor de Dios por los
pecadores es el amor en la vida real del profe-
ta Oseas por su esposa, la indigna Gomer.
Oseas describe el inmerecido amor de Dios
por cada uno de nosotros.
El mundo describe al amor en términos de pa-
sión, devoción o sexo. Según este concepto, el
amor es poco más que una mera atracción y
deseo por otra persona. Este amor sólo busca
su satisfacción y termina si sus demandas se
ignoran o satisfacen. ¡Es Egoísta!
En contraste, Dios llamó a Oseas a un amor di-
ferente, comprometido, que no busca su bene-
ficio ni correspondencia. Así fue como Dios se
comprometió con Israel y así debemos compro-
meternos por nuestro ser amado.
El amor: “Todo lo sufre, todo lo cree, todo lo es-
pera, todo lo soporta. El amor jamás dejará de
existir” (1 Cor 13:7-8a; RVC).
 (4) CORRUPCIÓN MORAL
Dios trae nuevas acusaciones contra Israel:
idolatría, injusticia, violencia y discordia entre
el pueblo de Dios (4:1-10).
Tenían una “falta de conocimiento” de la pala-
bra de Dios, desde el sacerdote al pueblo, to-
dos habían “dejado de obedecer al Señor”.
El pecado tomó muchas formas: embriaguez,
perversión sexual, adoración de ídolos (4:12).
Todo lo que se interponga entre nosotros y
Dios es un ídolo, y cuando Dios es empujado
fuera de nuestra vida tenemos un problema
de idolatría (4:11-19).
 (5-6) CASTIGO Y DISCIPLINA
Dios habla a todos los niveles del pueblo, les
dice que serán juzgados por su pecado (no
podrán ocultarlo). Dios vendría contra ellos
como enemigo en la batalla (5:1-15).
“No piensan en convertirse a su Dios, porque
espíritu de fornicación está en medio de ellos,
y no conocen al Señor” (5:4).
Dios espera a que la gente vuelva arrepentida.
“Porque misericordia quiero y no sacrificio, co-
nocimiento de Dios más que holocaustos” (6:6).
Dios conoce nuestros corazones (Jn 2:25).
 (7-8) CORRUPCIÓN ESPIRITUAL
Dios ofreció sanarlos y fue ignorado. Ninguno
de los líderes clamó a Él, nadie lo buscó. Mas
bien se dirigieron a Egipto y Asiria por ayuda.
Por dejar a Dios fueron disciplinados (7:1-16).
Cuanta gente dice creer Dios, pero actúan co-
mo si no lo conocieran. Se llaman cristianos,
pero su vida demuestra que no lo son.
Dios los reprende severamente por haber
adorado al becerro de oro, haber ignorado su
Palabra y haberse olvidado de su Hacedor
(8:1-14).
 (9-10) CASTIGO A ISRAEL
Israel es culpable por haber fornicado. El cas-
tigo ha llegado. Dios los echará de la tierra y
hará que vaguen entre las naciones (9:1-17).
Dios permitió que el enemigo venga con toda
su furia. El becerro de oro en quien confiaban
será llevado a Asiria. Lo que Oseas describe
que está por pasar a Israel, es sólo una mues-
tra de lo que está por venir en los días de la
Gran Tribulación (10:1-15).
“Porque éste es el momento de buscarme. En-
tonces yo, el Señor, vendré y los instruiré en la
justicia” (10:12c; RVC).
 (11-12) DIOS TRATA CON ISRAEL
Dios los había sacado de Egipto, les dio opor-
tunidades para andar en comunión con Él. Ha-
bía sido un león contra ellos, ahora sería un
león a su favor. Los sacaría de la esclavitud “y
habitarán en sus casas” (11:1-11).
Dios también presenta cargos contra Judá. Lo
eliminará de la tierra, si no se arrepiente. Am-
bos reinos habían provocado la ira del Señor,
y ambos serían castigados (12:1-14).
“Vuélvete a tu Dios... y confía siempre en Él”
(12:6; RVC).
 (13-14) DESTRUCCIÓN Y SALVACIÓN
Los israelitas morirán cuando los asirios ven-
gan a la batalla, esta será horrenda. A pesar
de la tragedia que se les avecina, podrán ex-
perimentar libertad de la muerte si adorarán al
Señor en verdad (13:1-16).
“Te perdiste Israel, mas en mí está tu ayuda” (13:9).
Las palabras de Oseas terminan con una invi-
tación a volver. En ese día sólo en Dios esta-
rá su satisfacción (14:1-9).
“Porque los caminos del Señor son rectos, y los
justos los seguirán” (14:9b; RVC).
 CONCLUSIÓN
¿Encontramos satisfacción en Dios o con de-
masiada facilidad nos volvemos a los ídolos?
Oseas escribió para la apóstata Israel, pero
sus palabras son para la iglesia carnal de hoy.
Mucha gente dice ser cristiana, pero viven
alejadas de Dios. ¡Que Dios nos ayude a abrir
los ojos y ser conscientes que lo necesitamos
en nuestras vidas!
Tú escoges el matrimonio que quieres tener.
Opta por un matrimonio centrado en Dios, de-
ja que Él lo restaure, muriendo a ti misma(o).
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Gracia Calvary Chapel

© Lima, 30 agosto, 2015