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UNIVERSIDAD TÉCNICA DE AMBATO

FACULTAD DE INGENIERÍA CIVIL Y MECÁNICA


CARRERA DE INGENIERÍA CIVIL
INGENIERÍA EN VÍAS Y TRANSPORTE

Integrantes: Manosalvas Leonardo, Salinas Paúl, Villacrés Yessenia.


Fecha: 07 de Noviembre del 2018.

“Nuevos tipos de pavimentos que reducen la resistencia al rodamiento”


En los últimos años se ha buscado una solución al impacto ambiental que producen los
vehículos que circulan sobre la infraestructura vial, modificando la capa de rodadura
mediante el desarrollo de nuevos materiales de asfalto que son capaces de resistir la
influencia de desgaste mecánico, ambiental y proporcionar baja resistencia, pero a su vez
sin afectar el funcionamiento normal de la carretera, ni creando disgustos en el confort y
seguridad de los usuarios viales.
El enfoque del tema es la reducción de resistencia de la capa de rodadura para vehículos
ya sean estos livianos o pesados con la finalidad de disminuir la gran cantidad de gases
como el CO2 que son emitidos por éstos al haber una fricción por la superficie en la que
se movilizan y de la misma manera ahorrar combustible y por ende la energía aplicada.
Para crear pavimentos de este tipo primero se debe tener en cuenta parámetros como la
curva de graduación, la composición del mortero, el tipo de relleno, el material granular
a utilizarse, y el tipo y calidad del betún, para cumplir con el objetivo principal propuesto
que es bajar la resistencia a la rodadura, que haya suficiente adherencia entre los
neumáticos y la carretera y por último que haya una reducción de ruido.
Es importante estudiar el comportamiento de estos nuevos pavimentos en relación con el
desgaste y envejecimiento, ya que con el paso del tiempo las influencias mecánicas y
ambientales afectan directamente al estado firme de la carretera. Estos estudios se realizan
haciendo simulaciones de equilibrio térmico y envejecimiento en el ordenador y
modelándolo en varias escalas de longitud y tiempo, o a su vez de un banco de datos que
tenga relación con la textura, uniformidad y capacidad de carga de la vía, si es que se
encuentran disponibles en el ministerio encargado de las vías y transporte del país en el
que se realice el estudio.
Realizando una comparación se puede analizar la textura y la regularidad de la superficie
y su influencia en cada aspecto. Una mega textura e irregularidad superficial resultan
indeseables desde cualquier punto de vista, incidiendo directamente en la comodidad,
ruido y el deterioro del vehículo, aunque este tipo de superficie permite distancias de
frenado menores.
Según Jackson, Willis, Arnold & Palmer la macrotextura puede afectar el consumo de
combustible hasta en aproximadamente 5%. A baja velocidad, uniformidad y megatextura
son las escalas del perfil de mayor influencia sobre el consumo de combustible.
Sandberg también señala que, si bien la textura de superficie de la carretera contribuye a
las pérdidas de energía en los neumáticos y la suspensión, se necesita una buena
macrotextura para evitar el hidroplaneo.
Otro aspecto digno de destacar es la absorción que genera el pavimento y su incidencia
en la visión del conductor como punto principal en el momento de que hay lluvia, aunque
los pavimentos absorbentes generan mayor distancia de frenado.

Por lo tanto, un camino más suave puede disminuir el consumo de combustible por la
disminución de las vibraciones de la cubierta de neumático y la suspensión. Sin embargo,
debido a los efectos dinámicos de tal resonancia, las desviaciones y las pérdidas de
energía varían en función de la escala de la rugosidad, la velocidad del vehículo, y tipo
de vehículo.

Perriot también examinó la influencia del consumo de combustible del pavimento


mediante un modelo viscoelástico de pavimentos de asfalto y concluyó que las
deflexiones del pavimento solamente representarían 0,005 a 0,5% del consumo de
combustible en función del tipo de vehículo.
Según estudios realizados en Dinamarca se estima que el promedio de ahorro de
combustible para pavimentos con suavidad y textura controlada salvarían al país 3.3% en
costos de combustible. Más de 15 años, el país podría ahorrar casi $ 3.78 mil millones de
dólares, incluyendo los costos de rehabilitación.
La literatura sugiere que las mejoras en la rugosidad del pavimento podría mejorar
directamente la eficiencia del combustible en aproximadamente un 2-6%. Por supuesto,
la resistencia a la rodadura es también dependiente de factores tales como tipo de
neumático, la presión de inflado, la temperatura, las condiciones climáticas y la velocidad.
La eficiencia del combustible, por lo tanto estará influenciado por todos estos factores.
Debido a la gran cantidad de vehículos que existen en la actualidad, y por ende la
contaminación que generan, se debe buscar soluciones que permitan reducir el CO2 de la
infraestructura vial, siendo una opción la optimización de pavimentos que reduzcan la
resistencia a la rodadura. Debido a la poca información respecto al teman, se debería
realizar estudios que permitan analizar costo –beneficio, validar resultados, y Normalizar
dicha investigación, para ser empleado a futuro y contribuir con el medio ambiente y la
sociedad.

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