j 1 1 1 cematapsemnnonenens nite STS aan al grupo por cada paciente. Dicha aper (para un segundo momento) la intervencién de los terapeutas a mn de una consigna de tra~ ), que realzaré aquellas pro- de modo dialégico y esponté- os iniciales de cada encuentro. ‘Los terapeutas elaboran las consignas de trabajo alrededor cemerger en el discurso ivas que se reiteran, las probleméticas que convocan el interés o la preocupacién de los rismos, silencios, pausas, intervenciones, comentarios, interro- ‘gantes, puestas en escena, present igadas a la descarga, ‘que ~entre otras resultan (todas ellas) el material clinico signi- ficativo sobre el eual se trabaja. nar terior de una misma pro- duceién, la cual se concreta en el cuaderno de trabajo que cada integrante dispone en una caja compartida que permaneee en el servicio asistencial. Una vez que los pacientes finalizan sus producci intervenciones clinicas realzan ~como fercer momento~ el in- y la confrontacién con la produccién del semejante, ‘iones que potencien Ia actividad reflexiva de cada pacient De este modo, el encuadre clinieo se presenta como. alrededor del cual se generan condiciones resguardadas, dl y potenciales para la complejizacién simbélica de los nifios y j inico del tratamiento psicope- dagégico grupal abre a nuevos interrogantes que, en tanto rede- finen la praxis, plantean nuevos desafios te6ricos. 14 2. La psicopedagogia clinica 2.1. Propuestas para un modelo teérico e investigativo ‘iplina dedicada a la bn, teorizacion y asistencia de los proeésos psiquicos comprometidos én la produccién simbélicat (escrita, discursiva, -, lectora) de nifios y j6venes con dificultades en el api , y focalizada en el estudio de los aSgectos subj tivos del tipo de relacién de cada sujeto con los objetos sociales y (0, que eventualmente parei inhibiendo la circulacién de- wvedoso, y generan- mas fragment jorio y atraetivo del eo iento efinimos al aprendizaje como un proceso complejo de quica y el deseo de un sujeto por el conoci perspectiva, aprender involuera un movimiento deseante con Investimiento del trabajo de representacion, que se expresan en los mo: dos de simbolizar de cada sujeto,a 1638 01 ND 0},) auzed e] uo opo) [ap ¥[ pique outs ‘opo} [9 ua ayted B| ap O198 ou ‘ugisnauy v] ouans0s on ‘oorpuunBojoy o4diousd fa x (0 twoypisnf ap opour SoptuguoUts soquoMOUE to OU uM ap ~Buo|oUNY ap SosiaaIp Sopou! ap wIaLIAStXo0D vy “ooysoadsa ovo{qo ap ayrovar onsont a ‘reTEUrEpEny ayruLad Sou OM UU Ta “IS axqua SeonU EIU “(L4oLsd D 0) Zas &| -a[duios sauowou sepose ayusad 00260) nis ap soxdourd so] soutezqeas (0002) WLIO Hos opsanae act “(g002 ‘zansoig 4 mnueg) (ugzes/oyaye ‘anbisd emos ‘ouroyxo/ousayut “o72!qo Joyakns ‘oydurafo sod ‘onua ayuezejod 0 aquagnpoxa wIHO}0OIp ‘owos) votuoSejue uorsisodo n ourstuLIa}ep “Peou] pepyresnED ap (soisyduas) sauorepes ta sopriaysos weynsox anb ‘(ousopour owisyamisod jap ool¥ojouraysida anboyua) peprfear el ap saquez or ap ug De gs O86 [9 se Ao ead ‘oxqummps09 a pousoas ap ayn) oh oa na [pFesmbuo9w ogesop wa BUtoo ae eee inex) (ooo) soy soapy sonpartt sb D] ap duibippand jap oafoomaysido oqppour ye wade os‘ viBofepodonisd ef ap o12{qo ap opDdx fe soptraiduso9 weg “(or:go0e ‘zandgiq A myUED) ,-2IU a ‘nb wen -sod anb souoyseztyemdouco souneduico ‘oppo 2159 WH, +(hooz ‘uosuauta[tpg) saquayStx9 s sopeprunziodo & seanoaye sefouatradxe sns v opzanoe ap ojafns upeo senduis vorwupENp exns ue ‘oquonLUTDON sd ofeqen ap od un ouyop onb ow oUTEAIsNDXd ayoUTaIduto9 ou ‘saouoa ‘repusrdy (L661 ‘uosuawa|\jag) 1900u09 & sIMASUOD ¥ OpUNU UN op soyafqo soy ‘woo Dayoajas & xepNButs BULIOS tr PUOTDe|Ax as OJafns EpED anb [> nous vam moowastonssEnesta presentan a continuacién tres vitietas ccas# que permiten ilustrar la puesta en juego de los procesos dia- égicos, recursivos y holograméticos (Morin, 2000), como ees, _gpistemol6gicos centralesgn los que se fundamenta el modelo de An‘lisis cualitativo de nuestro recorte de objeto. El recorte de la siguiente vifieta corresponde a las sesiones registradas en uno de los grupos de tratamiento de piberes y adolescentes (de entre 11 y 13 afios) que funciona en el Servicio Asistencial de la Cétedra:* niega 0 asiente casi impercept suele permanecer con la mirada baja, o bien ~al hablar— su mano o la birome a la boea hi prensién de algunas de sus expresiones verbales), Al mismo tiempo, cuando es convocado a escribir en el cua- recapitulacién de aspectos factuales texternos sobre los que presenta una escasa 0 nula ligazén de dices subjetivos. argo, en uno de los encuentros, los terapeutas inter- vienen sefialando un dibujo que el joven venfa realizando ~ha- 5. Las vinetas forman parte de la Tesis Doctoral (2023) del Lic. Juin Gru- 6. Grupo a cargo del Lc, Gerardo Proly la Mag, Victoria Rego (ambos tera- peutas de la Catedra. 18 tal y esponténeamente~ en los margenes de su cuaderno de Claudio apunta, en su discurso asoci sobre “Un hombre chiquito que tiene nariz de grande. [..] Lo n, el terapeuta Te propone de trabajo) que eseriba “Este personaje se llama ‘M’ y es narigon pero muy alegre jnega todo el dia a (tachadura) la pelota estu: chadura) el esta en 3° sus mejores an dura) pero ellos son muy (tachadura) a ellos no les gusta estudiar ni siquiera jugar ala pel (tachadura) a "M” no le molesta porque a el le gusta que es-