Libro de consignas - Compañía Baquianos y Antorchas Libro de consignas - Compañía Baquianos y Antorchas

La Buena Acción
Proyecto de Servicio

Presentación
Con esta actividad se busca que los Baquianos / Antorchas reali-
cen un servicio concreto que surja de necesidades específicas de
Aclaración: la comunidad en la que viven (escuelas, comedores, barrios, hoga-
res, etc.), y consideren que uniendo esfuerzos y trabajando organi-
No alcanza con la buena intención de ayudar, es necesario formarse para poder llevar
zados pueden ayudar a mejorar.
adelante un servicio eficiente. Si no conocemos la actividad en la nos estamos involucran-
do es probable que malgastemos el esfuerzo y las ganas de nuestros Baquianos / Antor-
El objetivo de esta actividad es concretizar una acción de servicio.
chas; y por si fuera poco, no obtengamos los resultados que esperábamos.
Este accionar debe estar orientado a un objetivo practicable. De-
Por eso, para evitar posibles frustraciones y aprovechar el máximo el tiempo y la voluntad
bemos evitar caer en “súper proyectos” irrealizables.
de servicio de los Baquianos / Antorchas, resulta imprescindible asesorarse con personal
idóneo. Capacitarnos para servir mejor.
TEXTO para comenzar a pensar
Parábola del buen samaritano
Cuidado!:
Que las acciones de servicio Un maestro de la ley fue a hablar con Jesús, y para ponerle a prueba le preguntó:
no se conviertan en prácticas –Maestro, ¿qué debo hacer para alcanzar la vida eterna?
asistencialitas, sino que sean Jesús le contestó: –¿Qué está escrito en la ley? ¿Qué lees en ella?
acciones que El maestro de la ley respondió: –Ama al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma, con
promuevan a la persona. todas tus fuerzas y con toda tu mente y ama a tu prójimo como a ti mismo.
Jesús le dijo: –Bien contestado. Haz eso y tendrás la vida.
Pero el maestro de la ley, queriendo justificar su pregunta, dijo a Jesús: –¿Y quién es mi prójimo?
Jesús le respondió: –Un hombre que bajaba por el camino de Jerusalén a Jericó fue asaltado por
unos bandidos. Le quitaron hasta la ropa que llevaba puesta, le golpearon y se fueron dejándolo
medio muerto. Casualmente pasó un sacerdote por aquel mismo camino, pero al ver al herido dio un
rodeo y siguió adelante. Luego pasó por allí un levita, y que al verlo dio también un rodeo y siguió
adelante. Finalmente, un hombre de Samaria que viajaba por el mismo camino, le vio y sintió compa-
sión de él. Se le acercó, le curó las heridas con aceite y vino y se las vendó. Luego lo montó en su
propia cabalgadura, lo llevó a una posada y cuidó de él.
Al día siguiente, el samaritano sacó dos denarios, se los dio al posadero y le dijo:
“Cuida a este hombre. Si gastas más, te lo pagaré a mi regreso”.
Pues bien, ¿cuál de aquellos tres te parece que fue el prójimo del hombre asaltado por los bandi-
dos?
El maestro de la ley contestó: –El que tuvo compasión de él.
Jesús le dijo: –Ve, pues, y haz tú lo mismo.

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La parábola propone lo que podríamos llamar los “tres pasos” para vivenciar el amor mi-
sericordioso.
VER.- El samaritano no “dio un rodeo” como los profesionales de la religión que pasaron
antes de él. Para el samaritano fue decisivo el hecho de encontrar a un hombre que lo
necesitaba, a uno que había sido víctima de la maldad humana y sufría tirado por el cami-
no, más allá de diferencias de raza, religión o nacionalidad.
Lo vio, se acercó y se detuvo...
Salimos...
Les proponemos que, con los Baquianos / Antorchas, hagan una recorrida en
el barrio o zona donde se encuentra el Batallón (puede ser algún comedor,
hospital, hogar de niños, etc) y se animen a “VER” la realidad. Les proponemos
que lleven papel y lápiz para tomar nota de lo que van observando.
Compartimos...
Luego de hacer la recorrida regresen al batallón y compartan en patrulla lo que fueron ob-
servando, lo que anotaron, lo que les llamó la atención; pero en especial donde vieron al-
guna situación similar a la que vivió el samaritano en la parábola.
EXPERIENCIA DE MISERICORDIA.- La frase “tuvo compasión” indica la conmoción inter-
na. El samaritano interiorizó el sufrimiento ajeno, lo hizo parte de él y lo convirtió en
el principio primario de su actuación. Es la com-pasión auténtica, el padecer-con.
Antes que acción, la misericordia debe ser actitud interior, principio unificador e inspirador
de todo cuanto hacemos y decimos.
Nos conmovemos...
Te proponemos que prepares para esto varias imáge-
nes de situaciones de pobreza, desesperanza, de muer-
te que se puedan observar en el mundo, en nuestro
país y en la zona en la cual viven los Baquianos / Antor-
chas (desde lo macro a lo micro).
Luego los invitamos a compartir qué sentimientos les
despiertan las imágenes.
Qué fueron sintiendo frente a las situaciones que vieron
en el barrio, comedor, o el lugar donde hayan ido.
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ACCIÓN EFICAZ.- El samaritano de la parábola encarna lo que significa amar concreta-
mente y en forma eficaz hasta el fondo. Su amor no conoce límites, ni barreras. Es un
amor de misericordia semejante al que ha manifestado Dios en Cristo. Se compromete
en forma práctica en favor del hombre que está tirado en el camino. Su amor eficaz tradu-
ce en obras una actitud fundamental ante el sufrimiento ajeno. La experiencia de la miseri-
cordia realiza el compromiso fundamental por el Reino, pues actuando de ese modo,
nos comportamos como Dios y al estilo de Dios. Es el único camino para alcanzar la plena
comunión con él.
Actuamos con la Buena Acción...
Luego de haber compartido las sensaciones que despiertan
las imágenes, les proponemos a los Baquianos / Antorchas
hacer una Buena Acción que se pueda sostener en el año.
Les proponemos que elaboren un proyecto, el cual deberá
ser aprobado con el consejo, para llevar adelante una acción
específica de servicio.
Vemos importante que el consejo local de su aprobación,
porque deberá acompañarlos en el proceso facilitando su
realización.
Guía para la elaboración de un proyecto.

Nombre del proyecto

Tema (una línea) ¿cómo está orientada la acción? Trabajos de mantenimien-
to, reparaciones varias, ecología, higiene, valores, etc.

Presentación. (Quiénes somos)

Fundamentación. (Por qué)

Diagnóstico (Qué necesidades vimos)

Objetivos. Principales y secundarios.

Actividades. (Qué haremos, armar un listado)

Responsables.

Recursos. (Aportados y solicitados: materiales, etc.)

Tiempo. (Plazos)

Es aconsejable establecer criterios de evaluación o indicadores evaluadores
que nos permitan, durante el desarrollo del proyecto y una vez que este finali-
ce, evaluar nuestro accionar.
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