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FACULTAD DE CIENCIAS CONTABLES, FINANCIERAS Y ADMINISTRATIVAS

ESCUELA PROFESIONAL DE ADMINISTRACIÓN

ASIGNATURA:
CONTABILIDAD DE INSTITUCIONES FINANCIERAS

TEMA:
PRÁCTICAS LABORALES JUSTAS EN EL DESARROLLO HUMANO Y
FORMACIÓN EN LA ACTIVIDAD PÚBLICA

CICLO: “VIII”

DOCENTE TUTOR:
CPCC. AIICHIRA YELMA SINCHE ANAYA

ESTUDIANTES:
MAURICIO MELCHOR, ESTEVEN TONY

HUÁNUCO – PERÚ
2019
PRÁCTICAS LABORALES Y RESPONSABILIDAD SOCIAL

Las organizaciones a nivel mundial, y sus partes interesadas, van siendo cada vez más
conscientes de la necesidad y los beneficios de un comportamiento socialmente
responsable, así mismo, las organizaciones están sometidas a un seguimiento cada vez
mayor por parte de sus diversas partes interesadas, incluyendo clientes o consumidores,
trabajadores y sus sindicatos, miembros, la comunidad, organizaciones no
gubernamentales, estudiantes, financistas, donantes, inversionistas, empresas y otros.
Tanto la percepción que se tenga acerca del desempeño de una organización en materia de
responsabilidad social como su desempeño real pueden influir, entre otras cosas en:
● Ventaja competitiva.
● Reputación.
● Capacidad para atraer y retener a trabajadores o miembros, clientes o usuarios.
● Mantener la motivación, compromiso y productividad de los empleados.
● La visión de los inversionistas, donantes, patrocinadores y la comunidad financiera.
● Sus relaciones con empresas, gobiernos, medios, proveedores, pares,clientes y
comunidad donde opera.
En ese contexto, la Norma Internacional ISO 26OOO proporciona orientación sobre los
principios que subyacen en la responsabilidad social, las materias fundamentales y los
asuntos que constituyen la responsabilidad social y sobre las maneras de integrar un
comportamiento socialmente responsable en las estrategias, sistemas, prácticas y procesos
organizacionales existentes.

LA CARRERA ADMINISTRATIVA EN EL PERÚ

La carrera administrativa en el Perú es un conjunto de principios, normas y procesos que


regulan el ingreso, los derechos y los deberes de los servidores públicos que, con carácter
estable, prestan servicios de naturaleza permanente en la administración pública. Su
objetivo es la incorporación de personal idóneo, garantizando su permanencia y desarrollo,
sobre la base de méritos y calificaciones en el desempeño de sus funciones y dentro de una
estructura uniforme de grupos ocupacionales y de niveles1. La carrera administrativa está
regulada por la Ley de bases de la carrera administrativa y de remuneraciones del sector
público2 y su reglamento3. El régimen laboral público administrativo establecido en esa
Ley se caracteriza por ser un sistema cerrado, en el cual el ingreso a la carrera se realiza por
el nivel más bajo del grupo ocupacional y la promoción de los servidores públicos en los
diferentes niveles depende del cumplimiento de requisitos previamente determinados, que
incluyen antigüedad en el puesto, capacitación y evaluación. La carrera cuenta con tres
grupos ocupacionales con distintos niveles cada uno, en donde la homogeneidad
remuneratoria está establecida mediante un sistema único de remuneraciones. La
remuneración está constituida por un salario básico, además de bonificaciones y beneficios.

La carrera administrativa es permanente y se basa en los principios de:

Igualdad de oportunidades: las posibilidades de desarrollo y las condiciones son diseñadas


de forma general e impersonal.

 Estabilidad: el cese procede únicamente por causales expresadas en la Ley.

 Garantía del nivel adquirido: reconocimiento formal del nivel alcanzado por un servidor

Retribución justa y equitativa: regulada por un sistema único homologado que reconoce la
compensación adecuada bajo principios de equidad y justicia, según el nivel de carrera en
que se encuentra el servidor. La Ley reconoce como “servidor público”4 a todo ciudadano
que presta servicios en entidades de la administración pública con nombramiento o contrato
de trabajo85, con las formalidades de la ley, en jornada legal y sujeto a retribución en
periodos regulares. Del mismo modo, la Ley estipula que solo hace carrera administrativa
el servidor público nombrado que presta servicios de naturaleza permanente, quien a su vez
tiene derecho de estabilidad laboral indeterminada. La norma excluye de la carrera
administrativa a las Fuerzas Armadas, Fuerzas Policiales y los trabajadores de las empresas
del Estado o de sociedades de economía mixta, así como a los funcionarios que
desempeñan cargos políticos o de confianza.

LOS REGÍMENES LABORALES EN EL PERÚ

El servicio civil engloba a todas las personas que trabajan para el Estado. Para lograr una
administración pública profesional eficaz al servicio de la ciudadanía, debe contarse con
una carrera que permita atraer y retener el talento humano. En la actualidad, existen 15
regímenes laborales en las entidades del Estado, entre generales y especiales, lo cual
conlleva a un desorden en la administración pública en la medida que cada régimen implica
distintos derechos y deberes para los servidores públicos.

Regímenes Laborales para servidores Públicos en el Perú

En tanto se implemente de modo integral la nueva Ley del servicio civil, el sistema
administrativo de gestión de recursos humanos comprenderá a los regímenes de carrera y
formas de contratación de servicios de personal utilizados en la administración pública, con
excepción de algunos regímenes especiales. De esta manera, en el presente capítulo, se
explicará la organización y procesos de gestión de servidores de los tres regímenes
laborales generales (carrera administrativa y régimen laboral de la actividad privada y
contratación administrativa de servicios), así como también las cinco carreras especiales
bajo el ámbito de SERVIR.
PRINCIPIOS Y CONSIDERACIONES

Principios

Un principio fundamental de la Declaración de Filadelfia de la OIT de 1944 es que el


trabajo no es una mercancía. Esto quiere decir que los trabajadores no deberían ser tratados
como un factor de producción, ni estar sujetos a las mismas fuerzas del mercado que se
aplican a las mercancías. La vulnerabilidad inherente de los trabajadores y la necesidad de
proteger sus derechos básicos se refleja en la Declaración Universal de Derechos Humanos
y en el Pacto Internacional de Derechos Económicos, Sociales y Culturales.

Los principios involucrados incluyen el derecho de las personas a ganarse la vida con un
trabajo escogido libremente, y el derecho a condiciones laborales justas y favorables.
Consideraciones Los derechos humanos que la OIT reconoce como derechos fundamentales
en el trabajo incluyen: el derecho de todos los trabajadores y empleadores a crear o
agruparse en organizaciones propias para defender sus intereses. El derecho de los
trabajadores de negociar en forma colectiva con sus empleadores. El derecho a no ser
discriminado por su trabajo u ocupación, así como la prohibición del trabajo infantil y el
trabajo forzado.

Estos derechos se expresan en ocho convenciones que se denominan las Convenciones


fundamentales. Muchas otras convenciones y recomendaciones de la OIT complementan y
refuerzan varias disposiciones de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. La
principal responsabilidad a la hora de asegurar un tratamiento justo y equitativo de los
trabajadores corresponde a los gobiernos.

Esto se logra: Adoptando leyes coherentes con la Declaración Universal de Derechos


Humanos y con las normas de trabajo de la OIT pertinentes, respaldando esas leyes, y
asegurando que los trabajadores y las organizaciones tengan el acceso necesario a la
justicia.
La responsabilidad social empresarial aplicada a los empleados y su lugar de trabajo
incrementa la productividad de los mismos. Contar con horarios de trabajo flexibles tiene
efectos positivos en la productividad, en reducir las ausencias y en el estrés. Es así, que
varias compañías invierten en programas de trabajo – tiempo libre con el objetivo de
mejorar la satisfacción y productividad de los empleados. Por último, la responsabilidad
social en el ambiente de trabajo no hace otra cosa que vender una buena imagen de la
entidad y mejora su reputación. Claro que la existencia de un favorable ambiente de trabajo
beneficia también a los empleados:

 Los torna más creativos e innovadores.


 Asumen más responsabilidades.
 Son más flexibles, respondiendo rápidamente a los cambios.

El aumento de la competencia, tanto a nivel local como internacional, es una realidad a la


que se enfrentan cada día empresas de todos los tamaños, y que las obliga a mejorar
continuamente su productividad. Sin una mejora continua en la productividad, su viabilidad
a largo plazo se vuelve incierta, al igual que la cantidad y la calidad de los empleos que
ofrecen. En general, se reconoce que ninguna empresa puede permitirse ignorar la
necesidad de mejorar la productividad de su fuerza de trabajo. En el caso de las actividades
económicas de pequeña escala, especialmente aquellas que se desarrollan en la economía
informal, el desafío es aún mayor, ya que, por lo general, son menos productivas y brindan
condiciones de trabajo menos favorables para sus trabajadores o familiares, en comparación
con las actividades de las grandes empresas.

Las principales vías que tienen las empresas para incrementar su productividad son la
inversión en capital fijo, la inversión en el desarrollo de las competencias de sus
trabajadores, el alcance de una economía de escala, la inversión en la innovación y la
tecnología, y la adopción de mejores prácticas empresariales.

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